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LA HISTORIA CLINICA
Es una breve historia clínica la que nos permite ver al hombre detrás del caso
clínico y comprende el caso clínico en función del hombre.
I. Anamnesis
II. Examen físico
III. Examen de laboratorio
IV. Procedimientos complementarios
V. Evolución
VI. Terminación
LA ANAMNESIS PSICOSOMÁTICA
Al raquitismo o ala guerra, si no que ha vivido y que sus vivencias no son tan
importantes para comprender su enfermedad actual como su exposición a
tóxicos o microbios. Recordemos siempre que el enfermo es un ser humano al
que debemos comprender y tratar como tal y adoptaremos con ellos la actitud
justa ante el interrogatorio.
Los temas básicos alrededor de los que giran nuestro interrogatorio serán:
1. Enfermedad actual
2. Historia familiar
3. Niñez
4. Educación
5. Trabajo
6. Cambios de residencia
7. Enfermedades y accidentes
8. Vida sexual
9. Hábitos e intereses
10. Actitud para con la familia
11. Actitud frente a la enfermedad
12. Sueños
Y ello nos lleva a una tercera consideración: ¿Cómo se obtiene que los
pacientes hablen de sus problemas más intimos? Creemos que ello es fácil si
se sabe manejar el interrogatorio.
Contribuye al buen éxito; una actitud benevolente y comprensiva aun frente a
las confesiones mas graves, una firme insistencia cuando e s necesario, una
explicación amistosa en el momento justo. Explicación necesaria frente a
enfermos que desde el primer momento se muestran desconfiados,
acostumbrados a aclarar la situación al comienzo:”voy a hacerle muchas
preguntas, algunas de las cuales le parecerán no tener relación con su
enfermedad. Todas ellas son necesarias y ud, debe contestarlas. ¿Estamos d
e acuerdo? “.De esa manera se eliminan muchas veces, de una ves por todas,
los obstáculos. Cuando notamos resistencias al hablar de ciertos temas,
insistimos: “discúlpeme que le haga estas preguntas pero son indispensables”.
A lo que sigue una somera explicación de cómo las “explicaciones” influyen
sobre la salud.
A veces notamos que el enfermo nos miente. Ello es fácil de advertir cuando se
ha interrogado a muchos. Generalmente hay algunos signos delatores: el
sujeto duda, mira la cara del interlocutor, se ruboriza. Entonces decimos
firmemente: “Debe ser Ud. franco conmigo. Me. Comprende que si le pregunto
todo esto es porque es necesario, si Ud., trata de engañarme, no hace mas que
engañarse a si mismo, porque al hacerme equivocar por miedo a una mentira,
yo pierdo nada pero Ud.; si, ya que no puedo darle el tratamiento justo”.
1. ENFERMEDAD ACTUAL
a) ¿Qué le pasa?
El paciente comienza entonces a enumerar sus síntomas. Precisemos:
Esta pregunta nos informará sobre la primera actitud del paciente frente a la
enfermedad. ¿No le dio importancia? ¿Le dio tanta que abandono el trabajo, se
puso en cama? Etc. ¿Cuál fue el primer tratamiento y sus resultados? Es
necesario obtener aquí detalles de la actitud, no solo del enfermo, sino de sus
familiares, jefe, medico, etc.
g) ¿Cómo siguió?
Debe tratar de obtenerse todos los datos posibles, con fechas, sobre
tratamiento, mejorías, tratando de precisar, en el caso de que estas últimas
hubieran ocurrido, las condiciones en las que cada una se presentó. Ello
permite muchas veces, establecer interesantes paralelismos entre factores
exteriores y enfermedad.
Aconsejamos tener presentes estas listas solo como referencia. Todos los
datos en ellas consignados pueden y deben obtenerse en un interrogatorio bien
conducido, sin necesidad de sugerirlos. El interrogar al paciente
afirmativamente a muchos de ellos, sin haberlos tenido, o que comience a
tenerlos a raíz del interrogatorio.
Que debe completarse siempre con uno o dos: ¿nada más? Ello es importante.
El paciente se queja de primera intención de los síntomas que más lo molestan,
lo que no quiere decir que sean los más importantes.
Al terminar esta parte del interrogatorio debemos tener una idea clara de todo
el desarrollo de la enfermedad, los tratamientos seguidos y la actitud del
enfermo durante ella.
2. HISTORIA FAMILIAR
b) ¿Vive su padre?
Si la respuesta es afirmativa, ¿Cuántos años tiene? ¿Es sano? ¿Qué
enfermedades ha tenido? ¿En qué trabajas? ¿Que carácter tiene?
c) ¿Vive su madre?
Iguales preguntas que a anterior
Igualmente averiguaciones
.
f) ¿Ha habido enfermos nerviosos en su familia?
¿Tíos, primos, et? ¿Suicidas?, ¿personas “raras”?
Hay una gran tendencia a negar esos antecedentes. Si existen, tratar de
conocer detalles.
Como resultado de este interrogatorio, el medico debe tener una idea que se
completara con las preguntas siguientes destinadas a estudiar esa familia
“dinámicamente”
¿Ha sido castigado? ¿Mucho? ¿Por quién? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Cómo
reaccionaba a los castigos?
3. NIÑEZ
b) Datos de la evolución
¿Embarazo y partos normales? ¿Alimentación al pecho? ¿Artificial? ¿Por qué?
Fecha del destete y reacción de él. En relaciona este debe suscitarse también
una conversación que nos informe sobre gustos y costumbre particulares,
especialmente en cuanto a la alimentación ¿Peculiaridades y preferencias?
¿Rechazo de alimentos? Reacción de la familia.
c) Datos del desarrollo psicosomático
¿A qué edad camino? ¿A qué edad hablo? ¿Enfermizo?
d) Síntomas neuróticos
Para averiguarlos debe utilizarse cierta técnica. Las preguntas corrientes
provocarían negativas o respuestas vagas e aquí lo que aconsejamos: ¿hasta
que edad se orino en la cama? Alrededor de este tema averiguar la manera
cómo el control de la eliminación fue obtenido.
4. EDUCACION
En esta forma hemos hecho, en realidad, una pequeña biografía del paciente.
Lo hemos seguido paso a paso desde su infancia hasta el momento en que lo
vemos por primera vez ya que la vida familiar, la educación y el trabajo son las
etapas fundamentales de la evolución individual. Hay algo sin embargo, que
debemos tener presente y que muchas veces de desliza entre los otros datos.
6. CAMBIOS DE RESIDENCIA
7. ACCIDENTES Y ENFERMEDADES
Esta es, por supuesto, la parte más difícil del interrogatorio. Y es difícil en
realidad, la experiencia de enseñar no los ha probado, más que por resistencia
consciente o inconsciente que el médico, mismo presenta. Si el médico tiene
frente a los problemas del sexo una actitud frente a sus propios problemas, el
interrogatorio no es difícil. Ante un benevolente interés que no se modifica
durante toda la entrevista; ante una anaturalidad dada, que permite tratar el
tema como cualquiera de los otros, no solo el enfermo o la enferma no se
resistan sino que cooperan interesantemente. En nuestra organización social el
tabú del sexo impide que tanto hombres como mujeres de hablar sueltamente
de este tema con alguien en la mayor de los casos sufran la angustia de la
ignorancia y un consejo sano y autorizado. Por otra parte, el solo hablar de sus
problemas o sus preocupaciones, brinda tranquilidad y desahogo. Es corriente
ver pacientes de ambos sexos, una vez, una vez roto el hielo, se explayen
ampliamente, “abren su corazón” y digan agradecidos al final “Nunca hable de
esas cosas, doctor con nadie y me ha hecho bien el decírselas”
k) ¿Otros amores?
Iguales preguntas, que nos dieron una idea clara de la manera como el
enfermo encara estos aspectos de su vida, así como los traumatismos
emocionales que pudieron haber ocurrido y la reacción a ellos.
l) Matrimonio
Si la enferma es soltera:
Terminamos con:
e) ¿Fuma mucho?
Numero de cigarros por día.
f) ¿Otras drogas?
Café, te, drogas heroicas (difícilmente confesadas).
h) ¿Concocciones filosóficas?
No se trata de buscar erudición, sino de saber los principios a los que el
paciente ajusta su conducta, sea o no consiente de qué ellos constituyen su
filosofía.
10. ACTITUD PARA CON LA FAMILIA
E aquí un tópico que el médico olvida casi siempre y que nos parece de
fundamental importancia.la actitud del paciente ante su dolencia es decisiva, no
solo `para el conocimiento de su personalidad y para el diagnostico, sino para
la conducción y el éxito del tratamiento. Preguntamos:
Preguntemos:
c) ¿Sueña Ud.?
Muchas veces la respuesta es negativa. Hay una resistencia inconsciente a
recordar sueños ante el médico. Insistamos: ¿nunca? generalmente, de una
manera obtenemos datos:
“algo que ocurre muy a menudo es que el paciente nos responda:
“¿no recuerda ningún sueño?” ¿Ninguno?”Cuénteme cualquiera”.
Es muy raro en el caso en el que no hemos podido obtener el relato y, cuanto
más trabajo nos ha costado, más interesante el sueño obtenido.
Con esto hemos, terminado el interrogatorio, que, si ha bien conducido nos
dará una idea clara de la personalidad en sus relaciones con el ambiente y nos
permitirá encarar, con las otras partes de la historia clínica, el diagnostico, el
pronóstico, y la terapéutica en funciones del hombre como tal.