Sunteți pe pagina 1din 4

Las voces del Alma: las heridas de la Religión: Miedo y Culpa.

El alma encuentra su habitat natural en la religión entendida en su acepción


originaria. La palabra Religión proviene etimológicamente de re-ligare, volver a
ligar o conectar. La religión pués sería el camino para volver a conectar con el
misterio, el Espiritu, lo trascendente, Dios o como cada tradición espiritual haya
denominado a este misterio.

Occidente se ha secularizado y la conciencia de sus habitantes ha perdido


conciencia y contacto con la realidad espiritual de la existencia. Como
consecuencia de esta ausencia la conciencia moderna ha dejado un hueco que
antes ocupaban las tradiciones sagradas con sus enseñanzas mistericas y sus
caminos espirituales.

Sobre este vacio en la conciencia de lo sagrado los falsos dioses se han


apoderado del alma del hombre moderno de modo análogo a los okupas con
las casas que no les pertenecen. Como consecuencia de este proceso
asistimos a un empobrecimiento de la vida y a un aumento del sufrimiento
encerrado en si mismo y que ahoga a quien lo sufre que corre el riesgo de
convertirse en pandemia en el occidente cristiano. La existencia del dolor en la
vida humana es tan cierta como la de la alegria, la vieja imagen de “este valle
de lágrimas” iba siempre acompañada del “hagamos una tienda y quedémonos
aquí” , frustración y plenitud son hermanos gemelos que conviven en nuestra
experiencia de por vida.

Pero el hambre del misterio se acrecienta cuanto mas fuerte se hace el Ego y
se comprueba que este siempre habita en la insatisfacción. Cuando el hombre
anula la conciencia de Dios inevitablemente ha de reemplazarlo por algo en su
conciencia y es entonces cuando el culto a los falsos dioses devoran a sus
practicantes. Toda clase de fundamentalismos incluidos los new age,
vegetarianos o del desarrollo de la conciencia pretenden ocupar un lugar que
no les pertenece, usurpan el espacio del misterio y de lo sagrado con sus
nuevos dogmas del pensamiento positivo, sus nuevos templos y centros de
reunion y sus nuevas liturgias grupales donde la nueva orden sacerdotal dicta
nuevas homilías sobre la nueva conciencia. El nuevo encuentro ya no es una
eucaristía gratuita y abierta a todos sino que es de pago y a menudo en
numeros reducidos pues en las convocatorias se anuncia que las plazas son
limitadas como si de un bien lujoso y exclusivo se tratara. La fraternidad
universal o los hermanos en la fe se convierten en el grupo especial, distinto,
cualificado y exclusivo al que se puede optar a partir de la pertenencia a la
clase media acomodada.

Hoy como ayer en la tradición cristiana que es en la que la vida me invitó a


nacer encuentro luz y discernimiento: “por sus frutos les conocereis”. No por
sus bellas palabras ni su vanguardismo, no por su exotismo oriental, no por sus
cuidadas editoriales, no por sus bellos santuarios new age. “Por sus frutos les
conocereis”

La sabiduría perenne y las tradiciones espirituales de todas las religiones


conocen y explican la realidad de lo negativo, el pecado, el ego, las
manifestaciones que bloquean la conciencia amorosa en cada uno de nosotros
que nos alejan de loa realidad última de nuestro ser y de la realidad sagrada de
nuestra alma. No hay camino hacia la luz sin atravesar la oscuridad. No hay
resurrección o nacimiento a la verdad de uno mismo que no pase por el
descenso a los infiernos como en la Divina Comedia de Dante. No es posible
que el brillo de nuestra alma alcance la superficie si previamente no hemos
confrontado nuestros demonios, temores, miedos, traumas, impotencias,
ansiedades, desgarros, humillaciones...

En algunas personas el Egocentrismo se convierte en el modo de vida que


legitima toda clase de sacrificios para la obtención de un supuesto bien que
pretendidamente traera la felicidad al individuo. Por desgracia la vida se
desgasta hasta extinguirse en un esfuerzo estéril que nunca acaba de dar el
fruto apetecido porque el alma humana nunca se ha sentido plena por ninguna
satisfacción material. Las satisfacciones materiales son como las digestivas.
Uno disfruta comiendo los manjares y uno se siente lleno hasta que se pasa la
digestión. El resultado de esta vida moderna es un estado de stress,
descentramiento e insatisfacción que alcanza magnitudes de epidemia del alma

La vieja religión

En nuestro pais la tradición espiritual en que nacimos es el cristianismo.


Camino de plenitud espiritual para los místicos cristianos. S.Juan de la Cruz y
Santa Teresa son del patio de nuestra casa. Ellos son frutos del mismo árbol
que ha producido innumerables personas en las que la presencia de Dios ha
producido obras de misericordia, entrega generosa y compasión sin limeites.

Pero algo le ha pasado a nuestro arbol que se ha secado y hemos perdido la


savia fluida que alimenta el alma. “El alma que anda en amor ni cansa ni se
cansa” que decia Santa Teresa.

No ha sido la fuente espiritual que emana de Jesús de Nazareth la que se ha


secado. La fuente de la que bebía Gandhi junto al Baghwad Vita de su
tradición... Se ha producido un problema en los buscadores de la verdad y del
espíritu... Hemos desarrollado una extraña anorexia espiritual según la cual a
pesar de la abundancia de alimento espiritual no tenemos hambre ni ganas de
comer. Y como en la anorexia nuestros cuerpos espirituales devienen
delgados y a menudo como espectros. Pero tampoco hay duda de que igual
que las personas que padecen la anorexia siguen teniendo aparato digestivo
nosotros seguimos teniendo alma y una conexión espiritual.

La civilización occidental que es la única en que se manifiesta la anorexia es la


única que se ha negado a aceptar el alimento espiritual. Al hablar de la
anorexia en l @s adolescedntes muchos especialistas han señalado la
importancia de la imagen física en la cultura actual (lo cual es aludir
indirectamente a la desvalorización de los valores espirituales) como fuente de
autoestima y sentido de la propia identidad. Y se señala a menudo como las
modelos serían responsables de este nuevo canon de belleza que en vez de
insuflarnos de vida, como tradicionalmente realizaban las diosas de la belleza
de la antigüedad clásica, nos la quitan. ¿Qué se ha perdido , que se ha
sacrificado en este altar de las nuevas pseudodiosas?. El alma, la conexión
con el corazón y los misterios profundos del amor con todas sus pruebas.

En el mundo espiritual tambien aparecen estos modelos que reflejan una


belleza cosmética sin esencia llena de palabras bonitas y de promesas de
felicidad aceleradas que prtenden ofrecer atajos mágicos para la gran travesia
del alma aquella de la que el poeta decia “ Cuando viajes a Itaca pide que el
viaje sea largo”. El si sabia que los procesos verdaderamente espirituales y
que comprometen la realidad global de toda la persona son procesos largos y
evolutivos. El alma requiere de sus tiempos de maduración para sazonar una
vida en abundancia como conocen todos cuantos han andado el camino del
espíritu. Se usurpa el valor sagrado de la belleza carnal de Afrodita en
occidente o de Shakty en oriente. La belleza que nos abre a los misterioos del
corazón a su pasión , compasión, rechazo, celos, envidia y vulnerabilidad y
nuestros cuerpos hablan en síntomas anoréxicos
Nos hemos desconectado de la presencia silenciosa y vivificante de la que
hablan los místicos de las grandes tradiciones espiritruales y nos asedian los
monitores, instructores y “maestros” que transmiten fragmentos de la verdad
sin haberlas interiorizado, sin haber hecho el viaje que permite que germine
dentro de ellos mismos la semilla de la verdad y del amor y descubrimos los
síntomas de esta anorexia espiritual,el precio a pagar por aceptar la usurpación
del poder espiritual por los nuevos referentes pseudo espirituales que a
menudo son el refugio de multitudes de soledades alejadas del misterio que
son convenientemente explotadas comercialimente por quien sabe vender un
poroducto de máxima necesidad aunque no cumpla las condiciones dezadas
que han usurpado el lugar legitimo de los referentes espirituales: las corrientes
new age y muchas prácticas orientales que circunscriben su ambito de acción
al Ego.

Recuerdo hace mas de 15 años cual fue mi sorpresa cuando al entrar en una
iglesia católoca en Londres me encontre rodeado de indios, japoneses y
orientales con una sorprendente ausencia de occidentales. Tal fue mi sorpresa
que no pude evitar difrigirme a una de estas personas y tras compartir mi
sorpresa preguntarla cómo es que estaban en un templo cristiano si ella
proveníade un pais en el que el Budismo zen habia dado muchos maestros de
los que han compartido su luz sobre toda la humanidad. Y ella me contesto
con toda la naturalidad del mundo que porque en la religión en la que fuee
educada de niña habia e anuncio de piscinas de sangre y de tormentos que le
aguardaban a uno al final de sus dias. ¡Que sorpresa! Venian huyendo del
infierno y afortunadamente para ella en su nueva fe nadie le habia hablado de
la noción del infierno del cristianismo que ha sido recientemente puesta en
cuarentena incluso por el papa. Lo que fue alñeccionador e instructivo de
aquel intercanbio fue que entonces comprendí el exodo de los occidentales
hacia oriente. El veneno del miedo habia penetrado las arterias de la tradición
religiosa dando como resultado un exodo espiritual que liberara de todo el
miedo causado por esas enseñanzas.

Asistimos pues a un hecho muy similar al de los adolescedntes que


confrontados con la falta de amor, la destructividad, la falsedad y toda la
inmadurez emocional de sus padres corre despavorido de su casa lanzando
tda clase de impoderables para descubriur mas tarde en su trayectoria vital al
formar una pareja y una familia .que la luz no existe sin la sombra el amor sin el
miedo y la generosidad sin la mezquindad y que todas ellas habitan el alma
individual década uno individualemten y de nuestras relaciones.

No hay otra religión u otra familia. El único camino es confrontar la propia


tradición y la propia familia para discernir la herencia positiva de la dañina el
trigo de la cizaña y saber que la vida es así en todo . “E

S-ar putea să vă placă și