Influencia de la Biblia en la vida del creyente

2 Timoteo 3:15-17
INTRODUCCIÓN:
Un oscuro sacerdote católico germano, encontró la Palabra de Dios, cuya lectura lo transformó, haciendo
una reingeniería mental en su vida, conoció que “el justo por la fe vivirá” y no por las obras que practicaba
como predicaba su religión, como la venta de las indulgencias para ganar la salvación, planteó sus 95 tesis
para refutar tal pretensión, iniciaba así la gran Reforma religiosa, este sacerdote se llamó Martín Lutero.
Así como ayer hoy sigue influyendo la Palabra de Dios en la vida de todos los que leen y practican.

PROPOSICIÓN: La Biblia influye positivamente en la vida del creyente.

PREGUNTA SERMONARIA: ¿Cómo influye la Biblia positivamente, en la vida del creyente?
ORACIÓN DE TRANSICIÓN: La Biblia influye positivamente en la vida del creyente, de la siguiente
manera:
CUERPO:
1. La Biblia influye positivamente en la vida del creyente: Dándole sabiduría para que sea salvo (2
Tm.3:15). Es la influencia más trascendental, hacerle conocer al hombre el plan de salvación que Dios ha
trazado para el hombre.
Desde la caída de Adan, la formación del pueblo de Dios con el llamamiento de Abraham, el nacimiento
de Jesús, como el camino para llegar al Padre, la Biblia ofrece la sabiduría (capacidad de elegir) para elegir
a Cristo y alcanzar en él nuestra salvación (Jn 3:16).

2. La Biblia influye positivamente en la vida del creyente: Enseñándole, corrigiéndole, redarguyéndole,

e instruyéndole (2Tm.3:16)
Enseña: Da información: Quiénes somos, de dónde venimos, hacia dónde vamos. El pasado, el presente el
futuro del hombre.

Corrige: Nuestra cosmovisión (manera de ver y interpretar al mundo).

Redarguye: Presenta argumentos para refutar nuestros malos conceptos. Cambia nuestra manera de pensar.

Instruye: Da dirección con sentido; la información es convertida en conocimiento cuando la enseñanza se

practica.

3. La Biblia influye positivamente en la vida del creyente: Haciéndolo perfecto, preparado para toda
buena obra (2 Tm.3:17).
Prepara y perfecciona al creyente para realizar grandes obras, en todo los campos, no solo para ir al cielo,
sino para trascender en nuestras obras, como la sal y luz del mundo para que el nombre de Dios sea
glorificado (Mt.5:13-16).

CONCLUSIÓN:
Todo fabricante adosa a su producto un manual de instrucciones, nos servirá para cuidarlo mejor y sacar
provecho de toda su capacidad. Del mismo modo la palabra de Dios es un verdadero manual de
instrucciones para el hombre, su lectura nos ayudará cómo conservarnos ser más útiles y llevarnos a su
presencia.