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Existe un punto de vista que indica que la confianza es racional, ya que la gente

utiliza la información que dispone para efectuar pronósticos racionales y luego


tomar decisiones racionales basadas en estos. Mientras que la fe significa en
realidad que sobrepasa lo racional, de hecho estas personas con fe autentica
suelen rechazar o descartar la información que se les pueda dar y actuar de
manera irracional.
Durante buenas épocas la gente tiene confianza y toma decisiones sin
preocupación alguna, porque sabe que tendrán éxito, pero cuando esta no
existe las cosas cambiaran y sus decisiones se reprimirán.

Según Rees; en el mundo real, los factores que intervienen en la determinación


de sueldos y salarios son muy diferentes de los que especifica la teoría
neoclásica. El factor principal que parecía tener una importancia primordial en
todos estos casos era la equidad.

Los profesores que recomienda libros de economía desean impartir


conocimientos sobre su ámbito de competencia, sin duda alguna se centran
en la teoría, sin incluir la equidad, puesto que si mencionaran algún otro factor
que se aparta de la disciplina formal de la economía, no respetarían el
protocolo de los libros de texto. Sería como eructar durante una cena de gala;
sencillamente no se hace.

I) Marcos contractuales y de ejecución más sólidos


II) La eliminación de las excepciones ad hoc
III) La exclusión de las renegociaciones contractuales en el corto plazo
IV) dar seguimiento al gasto en contrataciones públicas
V) formular políticas para reducir a un mínimo las prácticas corruptas de
enriquecimiento en la tenencia y la zonificación de tierras.

Eliminar las reglas innecesarias

Las regulaciones excesivas generan oportunidades de corrupción al crear fuentes


artificiales de ingresos
I) el racionamiento de las licencias de importación
II) El fomento de la competencia
III) la reducción de los trámites burocráticos
1) Corrupción y Mala Fe

Algunas fluctuaciones económicas se pueden observar por cambios que se han


producido a lo largo del tiempo, su parte significativa es que predominado la
mala fe en actividades económicas que, aunque sean teóricamente legales, se
basan en motivos deplorables.

Aunque la necesidad de proteger al consumidor siempre es relevante, éste no


parecer ser el principal punto débil del capitalismo (sujeto a una abundante
legislación sobre la materia). La excepción es la protección del ahorro. La
mayoría de los trabajadores hoy no lo son por cuenta propia y los productos
de que dispone el ciudadano común para proteger sus ahorros son valores
financieros tales como acciones, obligaciones, planes de pensión y seguros de
vida.

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