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En primer término, a fin de evitar confusiones resulta importante dejar establecido que
son cuestiones diferentes la libertad de información, la libertad de opinión y la libertad de
expresión aun cuando todas estas libertades se implican mutuamente y, a su vez,
constituyen pilares de trascendencia de un Estado social y democrático de Derecho como
el peruano.
La libertad de información se constituye como la facultad que tiene toda persona de dar
información respecto de hechos o noticias, así como el derecho que tiene de ser informada
verazmente; en tanto que la libertad de opinión es el derecho que tiene toda persona de
comentar u opinar sobre determinada información que se emite o recibe.
Sentencia del tribunal constitucional del 14 de agosto de 2002, exp N° 0905 - 2001 -
AA.
Pero dicha sentencia nos explica también que las expresiones vertidas por personas con
el objeto de informar públicamente sobre un hecho o acontecimiento, es decir que las
expresiones vertidas en un noticiero, periódico, revista, etc. si son materia de
comprobación, por lo tanto si las expresiones son falsas, posteriormente de ser emitidas,
deben de ser por lo menos rectificadas para no dañar la honra o el honor de un tercero o
en todo caso para no ir en contra del derecho a la información objetiva que tiene todo
ciudadano en nuestro estado de derecho.
Esta sentencia ayuda a los operadores del derecho, que se encuentran en un conflicto
sobre violación de la libertad de expresión, a llenar algunos vacíos existentes en el art.
169 del código penal peruano, por lo tanto pienso que fue un acierto del tribunal
constitucional hacer jurisprudencia sobre dicho tema, y sobre todo dar una idea más
sistematizada sobre lo que puede ser una expresión objetiva o subjetiva, lo cual ayuda
mucho a comprender como o en qué casos una autoridad pública con poder está violando
un derecho, al suspender o clausurar un medio de comunicación público.
CRÍTICA A LAS EJECUTORIAS SEÑALADAS COMO JURISPRUDENCIA
SOBRE:
Los delitos cometidos por medio del libro, la prensa y demás medios de comunicación
social se tipifican en el Código Penal y se juzgan en el fuero común.
Es delito toda acción que suspende o clausura algún órgano de expresión o le impide
circular libremente. Los derechos de informar y opinar comprenden los de fundar medios
de comunicación.”
Sin embargo, ello no significa que el ejercicio de estas libertades sea absoluto, por lo
contrario, está sujeto a ciertos condicionamientos que deben ser respetados dentro de un
estado democrático y social de derecho. Solo así, con los límites que se encuentran en la
propia constitución política estas libertades se convierten en la piedra angular de la
democracia.
Esta ejecutoria de la sala penal de apelaciones para procesos con reos libres de la corte
superior de justicia de lima del 10 de diciembre de 1997. Nos expresa lo anteriormente
señalado en este trabajo, que la libertad de expresión es un derecho fundamental del
estado social y democrático de derecho, reconocido en la constitución en el artículo dos,
inciso cuatro, pero también nos dice que dicho derecho fundamental no es absoluto y tiene
que seguir algunos pasos importantes para no ir en contra de derecho ajenos.
El derecho de la libertad de expresión para no ser reprimido y para ser netamente público,
vertido en cualquier medio de comunicación escrita o visual, debe de ser indudablemente
de interés netamente público, general, de interés nacional, no de particulares o
información personal de terceros.
Y las opiniones vertidas de diferentes maneras, ya sea escrito, pintado etc. deben de pasar
por un procesos sistematizado de veracidad, es decir antes de publicarlas o de expresarlas
publica mente deben de ser verificadas y acercarse a la realidad del contexto, la cual se
quería darse a informar.