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Curso: Estrategias para la Testificación Inter-denominacional.

Lectura: El diálogo interreligioso como diálogo profetico (pág. 387-384)


Alumno: Midhuart Montesinos Zea

Diálogo interreligioso, incluida la proclamación, pero también la escucha y la

apertura al aprendizaje. El diálogo puede ser compartir la vida, la acción combinada, el

intercambio teológico y aprender de la experiencia religiosa y la espiritualidad de las

otras religiones. La gracia de Dios es esta presente en las iglesias cristianas y no

cristianas. El espíritu Santo se manifiesta de un modo que sobrepasa el entendimiento y

en lugares inesperados. Por esto el diálogo es una aprendizaje de doble vía, por medio de

la amistad y compañerismo. Ofreciendo la oportunidad valorar nuestra fe y la podamos

ofrecer con humildad.

Se plantean tres enfoques: (1) Exclusivista: Solo los cristianos tienen la verdad y

son el medio de salvación. (2) Inclusivismos: (Para David Bosch es el cumplimiento) La

salvación es para todos y por medio de todas las religiones, pero que llega solo a través

de Jesucristo. (3) Pluralista: (Relativista) Podemos resumirla de este modo, toda las

religiones son senderos hacia un mismo fin. Indicando que todas la religiones son validas.

El diálogo tiene que supera la idea de “superseccionismo”, que consiste en afirmar

que la iglesia cristiana reemplaza al Israel. Pero se aclara que el judaísmo sigue siendo

un canal de salvación.

El diálogo es una fuerte actividad profética. Consta de la misión de la iglesia, que

es parte de la misión de la Trinidad. Que propone cuatro enfoques: (1) Diálogo de la vida:

La vida es la base para todo tipo de diálogo. (2) Diálogo de las obras: Acciones conjuntas

en beneficio de la justicia, la paz y la creación. (3) Diálogo de los intercambios

teológicos. (4) Diálogo de la experiencia religiosa.

El diálogo interreligioso es en efecto el diálogo profético. Dialogo exige atención

para compartir como para aprender. Profético demanda sinceridad.

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