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2.1.

MARCO TEÓRICO
2.1.1. DESARROLLO DE INSTITUCIONES JURÍDICAS
PROCESALES RELACIONADAS CON LAS SENTENCIAS EN
ESTUDIO

2.1.1.1. EL DERECHO PENAL Y EL EJERCICIO DEL IUS


PUNIENDI.
Muñoz(1985), La sentencia penal, es un acto que importa la materialización del derecho
penal a un caso específico y concreto, habilitando a través del mismo, el debido ejercicio
del Ius Puniendi del Estado; esto es, que sirve a la función del ordenamiento jurídico penal
estatal, que como mecanismo de control social, su lógica estriba en sancionar
determinadas acciones humanas (matar, lesionar, violar, etc.) con un pena (prisión, multa,
inhabilitación, etc.), o una medida de seguridad, cuando estas lesionan o ponen en peligro
un bien jurídico penalmente tutelado (vida, integridad física, libertad sexual, etc.)

Sánchez (2004), Sin embargo, su materialización sólo se puede hacer efectiva dentro de
un proceso penal, definido como el conjunto de actos y formas, mediante los cuales los
órganos jurisdiccionales fijados y preestablecidos en la ley, previa observancia de
determinados principios y garantías, aplican la ley penal en los casos singulares concretos.

2.1.1.2. PRINCIPIOS APLICABLES A LA FUNCIÓN


JURISDICCIONAL EN MATERIA PENAL
Dichos principios, se encuentran consagrados en el art. 139 de la Constitución Política
del Perú de 1993, así como han sido desarrollados por la doctrina y la jurisprudencia
nacional, siendo entre otros, los siguientes:

2.1.1.2.1. Principio de legalidad


Se entiende por este principio, la intervención punitiva estatal, tanto al configurar el delito
como al determinar, aplicar y ejecutar sus consecuencias, debe estar regida por el
“imperio de la ley”, entendida esta como expresión de la “voluntad general”, que tiene la
función de limitar el ejercicio arbitrario e ilimitado del poder punitivo estatal según
Muñoz (2003)
Así mismo en el principio de legalidad es una garantía reservada al proceso penal
exclusivamente y prohíbe la retroactividad de la ley penal. La Corte Suprema ha
interpretado que el principio de legalidad exige indisolublemente la doble Ya, Raúl
Peña(2000), distinguió en el principio de legalidad dos aspectos: a) el "tenor literal"
simbolizado por la zona de reserva de la ley y, que comprende la totalidad de la materia
prohibida: definición del delito, sanciones a imponerse conjuntamente con las
circunstancias agravatorias de las mismas; b) en tanto el "significado esencial" del
principio de legalidad abarca otras exigencias materiales, en relación al "quo modo" de la
ley penal. Se dice esencial por la prevalencia del contenido del principio "nullum crimen,
nulla poena sine lege".

2.1.1.2.2. Principio de presunción de inocencia


Este principio señala que se presume una persona inocente hasta que su culpabilidad
sea demostrada de modo fehaciente, es decir que se materialice en una sentencia
definitiva que haya adquirido la autoridad de la cosa irrevocablemente juzgada. Barboza
(2008).

2.1.1.2.3. Principio de debido proceso


Fix Zamudio(2013), Precisa que el estudio y definición del Debido Proceso Legal es
tarea compleja y aún ejercicio inacabado, pues abarca numerosos aspectos que han sido
desarrollados por la jurisprudencia de muy diversa manera en los distintos ordenamientos
que la consagran, pues comprende tanto aspectos sustantivos como numerosas facetas
procesales para cuyo efecto cita la obra VIGORITTI. Por ello, afirma de modo preliminar,
es cierto que el Debido Proceso o Tutela Judicial Efectiva comprenden en sus aspectos
procesales numerosas instituciones relacionadas tanto con las partes cuanto con la
jurisdicción, puesto que no puede existir una adecuada defensa en el proceso que se siga,
por ejemplo, ante tribunales de excepción, o cuando carezcan de independencia o
carezcan de imparcialidad. Pero también abarca aspectos sustantivos, puesto que como lo
han sostenido las Cortes Supremas de Estados Unidos y Argentina, la solución que se dice
en el proceso debe ser razonable, es decir, deben agotar el principio de razonabilidad, es
decir debe de cumplir de modo adecuado con la controversia planteada.
2.1.1.2.4. Principio de motivación
Este principio señala la exigencia que debe fundamentar y explicar toda resolución
judicial, la que debe estar amparada en una base construida de referentes de derecho y
razonamiento, que expliquen la solución que se da un caso concreto que se juzga, no
bastando una mera exposición, sino que consiste en realizar un razonamiento lógico,
Ingunza (2002).
Consiste en que el juzgador, en todas las providencias que impliquen pronunciamiento de
fondo, y en particular en la sentencia, exponga los motivos o argumentos sobre los cuales
basa su decisión.
La aplicación de este principio permite que las partes puedan conocer las razones que
tiene el juez para tomar la decisión y así ejercer el principio de la impugnación

2.1.1.2.5. Principio del derecho a la prueba


Alarcon (2001), Menciona que se trataría de un derecho complejo, en vista de que su
contenido se ubica dentro de los siguientes derechos:
i) derecho a ofrecer medios probatorios que acrediten la existencia o inexistencia de los
hechos que son objeto concreto de la prueba;
ii) derecho a que se admitan los medios probatorios así ofrecidos;
iii) el derecho a la adecuación de los medios probatorios admitidos y los que han sido
incorporados de oficio por el juzgador;
iv) el derecho a que se asegure la producción o conservación de la prueba a través de la
actuación anticipada y adecuada de los medios probatorios; y,
v) el derecho a la valoración en forma adecuada y motivada los medios de prueba que
han sido actuados y que han ingresado al proceso o procedimiento.
La presunción legal es una dispensa de prueba para la parte que la invoca. La presunción
consiste en deducir de un hecho conocido la existencia de un hecho desconocido que
intenta probar. También podemos decir que este género de prueba por vía de inducción se
funda en el hecho conocido del cual se deriva hechos desconocidas susceptibles de ser
ponderados por el juez con la finalidad de establecer determinadas situaciones. Pedro
Gálvez (1988).

2.1.1.2.6. Principio de lesividad


La expresión bien jurídico se utiliza en el contexto político-criminal de reclamar la
protección jurídico- penal, en contraposición al sentido dogmático, que alude a los objetos
que de hecho protege el Derecho penal vigente. El principio de lesividad o de dañosidad
lo vincula, por tanto, al de exclusiva protección de bienes jurídicos y que además, ha de
ser el punto de partida de la antijuridicidad penal. El postulado de exclusiva protección
de bienes jurídicos implica que no pueden ser amparados por el Derecho penal intereses
meramente morales, no es que los bienes protegidos no sean morales, sino que su
protección no sólo será por ese motivo, sino por algo aún con mayor trasfondo Santiago
Mir (2008)
2.1.1.2.7. Principio de culpabilidad penal
En Derecho Penal se asigna al concepto de culpabilidad una triple significación.
Ius puniendi6a) Por un lado, se ve la culpabilidad como fundamento de la pena referido
a si procede imponer pena al autor de un hecho típico y antijurídico, es decir, a un hecho
prohibido por la ley penal con la amenaza de una pena. Para ello se exige la existencia de
una serie de elementos como son la capacidad de culpabilidad, el conocimiento de la
antijuricidad y la exigibilidad de otra conducta distinta, y solo con la falta de alguno de
estos elementos de la culpabilidad no podrá imponerse una pena. b) Por otro lado, la
culpabilidad se ve como un elemento de determinación de la pena. En este caso ya no se
trata de determinar si existe o no pena, sino como ha de determinarse la pena, su gravedad
y su duración. En este caso la función de la culpabilidad es sobre todo limitadora, pues
impide que la pena pueda ser impuesta por debajo o por encima de unos límites
establecidos por la idea de culpabilidad.
c) Finalmente, el concepto de culpabilidad se utiliza como exclusión de la responsabilidad
por el resultado.
En definitiva, el principio de culpabilidad establece la exigencia de responsabilidad en el
sujeto para que este pueda ser sancionado con una pena. Así, en el título preliminar del
Código penal se recoge entre las garantías penales del principio de culpabilidad Santiago
Mir(2008)

2.1.1.2.8. Principio acusatorio


Este principio señala como la distribución de roles y las condiciones en que se debe
realizar el enjuiciamiento del objeto procesa penal, al respecto, apunta Bauman (2000),
que el principio acusatorio a que según el cual no ha de ser la misma persona quien realice
las averiguaciones y decida después al respecto. Tenemos una persecución de oficio del
delito, pero con división de roles, lo que es fruto del derecho procesal francés San Martin
(2006).

2.1.1.2.9. Principio de correlación entre acusación y sentencia


El principio de congruencia forma parte del contenido constitucionalmente protegido del
derecho a la motivación de las decisiones judiciales y garantiza que el juzgador resuelva
cada caso concreto sin omitir, alterar o exceder las pretensiones formuladas por las partes.

2.1.1.2.10. El Principio De Congruencia: informa que el órgano revisor está


vinculado con los agravios que expresen las partes procesales en sus recursos de
apelación, precisando la Casación N° 413-2014-Lambayeque, que “también cabe
recordar que el ejercicio de la competencia del órgano jurisdiccional se encuentra sujeto
a determinados límites, siendo uno de ellos, el principio dispositivo de los medios
impugnatorios: TANTUM DEVOLUTUM TAMTUM APELLATUM, es decir, sólo
pueden pronunciarse acerca de los hechos alegados por las partes, siempre que estos
hayan sido invocados (…) Para resolver una apelación, el tribunal de mérito no puede
fundamentar el fallo en temas que no han sido materia de contradicción oportuna ni
alegadas por los sujetos procesales, más aún si el Ministerio Público, en lo atinente a la
responsabilidad penal consistió tal extremo; pues caso contrario, se estaría violando el
deber de congruencia, con repercusiones en el derecho de defensa de las partes”
Maier (2014), Según el Principio de correlación entre la acusación y la sentencia, por el
cual se establece que esta última sólo debe expedirse sobre el hecho y las circunstancias
contenidas en aquella, que fueran intimadas al acusado, y por consiguiente sobre aquellos
elementos de la imputación respecto de los cuales el mismo ha tenido oportunidad de ser
oído.

Todo aquello que en el fallo signifique una sorpresa para el imputado y su defensa, en el
sentido de un dato con trascendencia en ella, sobre el cual no hayan tenido oportunidad
de cuestionarlo y enfrentarlo probatoriamente, importa la violación de la mentada
garantía; si bien en este aspecto la C.S.J.N. ha sostenido que no sólo debe indicarse en
forma puntual el elemento sorpresivo sino también las defensas concretas que se hubieran
opuesto de no mediar la sorpresa, en especial, los medios de prueba omitidos por esta
circunstancia

La regla consagrada no se extiende a la subsunción de los hechos bajo conceptos jurídicos,


por lo cual el sentenciante puede adjudicar al suceso atribuido una calificación jurídica
distinta a la expresada en la acusación (iura novit curia).

En síntesis, no sólo se pretende que el fallo no aprecie un hecho distinto al acusado, ni


valore circunstancias no introducidas por la acusación, sino que tampoco realice una
interpretación irrazonable en contra del acusado. Por lo que la regla también impone a la
acusación la necesidad de calificar jurídicamente el hecho imputado, a efectos de orientar
la actividad defensiva.

El expediente en estudio aplica el principio de Congruencia.

2.1.1.3. LA ACCIÓN PENAL


2.1.1.3.1. Concepto
La acción penal, en la mayoría de los casos, es de carácter público. Se ejerce
exclusivamente por el Ministerio Público en los delitos públicos. Pero también la ley
ordinaria permite que el agraviado o su representante la ejerza en los delitos privados.
En ambos casos expresa un poder jurídico, que tratándose del Ministerio Público se erige
en un deber cuando ésta es legalmente procedente: tipicidad del hecho y causa probable,
y, tratándose del ofendido importa el ejercicio de un derecho fundamental, que puede o
no ejercer. Un caso especial son las faltas. En ellas no interviene el Ministerio Público.
La acción penal puede iniciarse a instancia del ofendido o de oficio por el juez de Paz
Letrado o no Letrado, a instancia de la autoridad policial (arts. 440.6 del Código Penal y
387 del Código de 1991). Academia de la Magistratura(2012)

2.2.1.3.2. Clases de acción penal


Rosas (2015) expone la siguiente clasificación:

A). - Ejercicio público de la acción penal: Aún cuando se ejerza a instancia de parte,
pues satisface intereses de la colectividad en general. La responsabilidad por delitos es
solidaria, y la acción penal se dirige a todos los autores, por lo cual se dice que es
indivisible. Es además irrevocable, en los delitos de acción pública, iniciada la acción es
imposible la retractación, e indefectiblemente se dictará sentencia.
son entre otros, el homicidio, las lesiones múltiples, graves o reiteradas y el robo, que se
deducen aún sin acusación privada.
B).-Ejercicio privado de la acción penal; Los de instancia privada son los referidos a
delitos como violación o abusos deshonestos, donde, si bien se necesita que la acción la
promueva el agraviado o su representante legal, luego la investigación continúa de oficio.
Los privados son las injurias y calumnias, la violación de secretos y correspondencia, la
violación de los deberes de asistencia familiar y la competencia desleal. En los casos de
que la revelación de secretos la haga un funcionario público es de acción pública, al igual
de lo que ocurre cuando la violación de correspondencia la haga un empleo de correos,
en ejercicio abusivo de sus funciones. (p.313).

2.2.1.3.3. Características del derecho de acción


Cubas (2015) determina que las características del derecho de acción penal son:
A) Características de la acción penal pública:

1. Publicidad: La acción penal corresponde, además de a los particulares, al propio


Estado, el cual tiene la obligación de restablecer el orden social perturbado como
consecuencia de la comisión de un delito.
2. Oficialidad: Como consecuencia de su carácter público, el ejercicio de la acción
penal se halla monopolizado por el Ministerio Público, el cual puede actuar de
oficio o a instancia de parte.
3. Indivisibilidad: Se trata de una acción indivisible, es decir, con una sola
pretensión que es la sanción que será impuesta a los que hubieran cometido el
delito.
4. Obligatoriedad: Esta característica hace referencia al compromiso del Ministerio
Público de ejercitar la acción penal ante la presunta comisión de un delito.
5. Irrevocabilidad: Una vez instada la acción penal únicamente fue desembocar en
sentencia firme, la cual será condenatoria o absolutoria. No obstante, también
podrá concluir con un auto en el que se declare el sobreseimiento, que no hay
lugar al juicio oral o en el que se declare una excepción fundada. Sin embargo, no
existe posibilidad de desistimiento o de transacción tal y como ocurre en el
proceso civil o en los supuestos en que el proceso penal es iniciado de modo
privado.
6. Indisponibilidad: El derecho de la acción penal es intransferible, es decir, no se
puede delegar en otra persona. En el caso de la acción penal pública, esta facultad
está en manos del Ministerio Público y en caso de la acción penal privada,
corresponde al agraviado o a su sustituto legal.

B. Características de la acción penal privada:


B.1.Voluntaria. – En esta característica predomina la voluntad del titular con el fin de
promover la acción penal.
B.2.Renunciable. – Se dice renunciable porque no se puede renunciar al delito
que se le imputa.
B.3 Relativa. – Porque se encuentra a cargo del Estado, quien ejerce el ejercicio del Ius
Puniendi
Para Rosas (2015) las características de la acción penal son:
A) El publicismo: que es derivada de la potestad estatal para preservar el
ordenamiento jurídico, de manera que la acción se dirige hacia el órgano
jurisdiccional para que este administre justicia penal, para que realice función
pública.
B) Unidad: siendo la acción penal el derecho autónomo respecto del derecho
de fondo, no existen diversas acciones que correspondan a cada uno de los
tipos delictivos que conforman el código penal, sino que se trata de un
derecho unitario a reclamar la actividad jurisdiccional penal.
C) Irrenunciabilidad: una vez ejercida la acción penal el sujeto procesal no
puede sustraerse por el acto del proceso en cuanto se deán todos los
presupuestos procesales, por el contrario, va a recaer un pronunciamiento
de fondo, esto es la conclusión a través de una sentencia (condenatoria o
absolutoria) (pp.311-312).

2.2.1.3.4. Titularidad en el ejercicio de la acción penal


La evolución que ha seguido la percepción del delito ha tenido, precisamente en la
acción penal, su punto de referencia. Así se distingue momentos históricos que van
dese la venganza privada o autodefensa hasta llegar al control monopólico
del estado en el ejercicio y administración de la acción penal durante el proceso. La
acción penal ha sido tomada como potestad del estado de hacer justicia penal,
prohibiendo a los particulares hacerse justicia por sus propias manos. La acción,
entonces, importa dos contenidos básicos: por un lado, existe como poder del estado,
pero, respecto del ciudadano agraviado con la comisión de un delito, existe lo que
conocemos como derecho a la tutela jurisdiccional efectiva

Siendo el MP siendo el titular e la Acción Penal, siendo llamado el vigilante de la


legalidad durante el proceso.

Finalmente, Rosas (2015) menciona los 3 procesos :

A).- El Sistema de Oficialidad: Organo del Estado con atribución del derecho
de acción penal, se divide en :
1. Inferencia; esto es cuando no existe persona distinta al juez, a quien se le
encarga la función de promover el proceso, como es de verse, esta postura
solo tiene cabida es un sistema inquisitivo.
2. Diferenciada; Porqu a través de este existe un ente llamado ministerio
publico a través del Fiscal quien se encarga de encaminar la acción penal.
B).- El Sistema de Disponibilidad: tiene 2 formas:
1. Absoluta: Porque allí se concreta la acción penal.
2. Relativa: Concedido a algunas personas
C).- El Sistema mixto Se dan en dos sistemas distintos. (pp.312-313).

2.2.1.3.5. Regulación de la acción penal


El CPP del 2004 corrige el error del Código de Procedimientos Penales de 1940,
estableciendo con más acierto en el artículo 1° que: “la acción penal es pública. Su
ejercicio en los delitos de persecución publica, corresponde al Ministerio Público
(…). En los delitos de persecución privada corresponde ejercerla al directamente
ofendido por el delito ante el órgano jurisdiccional competente. Se necesita la
presentación de querella” (Cubas, 2015, p. 143).

Finalmente, Rosas (2015) expone que existen tres sistemas distintos:

A).- El Sistema de Oficialidad: consiste en la atribución del derecho de acción


penal, a un órgano perteneciente al Estado, Esta oficialidad se subdivide a su
vez en:

1. Inferencia; esto es cuando no existe persona distinta al juez, a quien se le


encarga la función de promover el proceso, como es de verse, esta postura
solo tiene cabida es un sistema inquisitivo.

2. Diferenciada; se materializa, cuando existe otra persona “oficial”, distinta a


la del juez, a quien se le encarga la misión de promover el proceso: así tenemos
en nuestro caso como la mayoría de los sistemas judiciales de los países, el
Ministerio Publico o Ministerio Fiscal.
B).- El Sistema de Disponibilidad: de acuerdo con este sistema se concede la
atribución del derecho de la acción penal a las particularidades, bajo esta
posición existen dos formas:
1. Absoluta: se concreta cuando se concede en forma ilimitada,
indeterminada la acción penal, a cualquier particular.
2. Relativa: se concede a determinadas personas particularidades, en razón a
una especial circunstancia o el ofendido por el ser, generalmente, cuando es
el agravio o el ofendido por el evento delictuoso presumiblemente cometido a
una persona.

C).- El Sistema mixto o ecléctico través de este sistema convienen los dos
sistemas anteriormente explicados en cuanto a la atribución indistinta de la
concesión del ejercicio de la acción penal (pp.312-313).

2.1.1.4. EL PROCESO PENAL

2.1.1.4.1. DEFINICIONES
Según su etimología El proceso Penal , deriva del vocablo latina “processus” y esta
deriva de la palabra pro, que significa“para adelante”, y cederé, “caer”, “caminar”.
Por lo tanto es la realización de acontecimientos que lleva a la declaración o ejecución
de algún derecho. (Rosas, 2015, p.103).
Para (MINJUS, 2017) Conjunto de actuaciones que realizan el Tribunal y las partes,
reguladas por el Derecho Procesal Penal, encaminadas a la realización, positiva o
negativa, del derecho a penar del Estado”. Doble objetivo del proceso penal: tanto el
castigo del efectivamente culpable, como la absolución del inocente (incluso contra su
voluntad).

El proceso penal persigue interés público dimanantes de la imposición de Sanciones


penales. Está sujeto a una titularidad estatal: solo el juez puede imponer sanciones, pero
a su vez el Ministerio Publico es titular de la potestad de persecución. Así el principio
acusatorio se impone porque coexisten dos derechos de relevancia constitucional en dicho
proceso penal: el derecho que tiene el juez de emitir la pena y el derecho del fiscal en
perseguir el delito (San Martin, 2015).

2.1.1.4.2. Clases de proceso penal

En vista del Código de Procedimientos Penales y el Decreto Legislativo N° 124 se


dan los siguientes procesos:
2.1.1.4.3. Principios aplicables al proceso penal
2.1.1.4.3.1. Principio de legalidad
Se entiende por este principio, la intervención punitiva estatal, tanto al
configurar el delito como al determinar, aplicar y ejecutar sus consecuencias,
debe estar regida por el “imperio de la ley”, entendida esta como expresión de
la “voluntad general”, que tiene la función de limitar el ejercicio arbitrario e
ilimitado del poder punitivo estatal según Muñoz (2003)
Así mismo en el principio de legalidad es una garantía reservada al proceso
penal exclusivamente y prohíbe la retroactividad de la ley penal. La Corte
Suprema ha interpretado que el principio de legalidad exige indisolublemente
la doble Ya, Raúl Peña(2000), distinguió en el principio de legalidad dos
aspectos: a) el "tenor literal" simbolizado por la zona de reserva de la ley y,
que comprende la totalidad de la materia prohibida: definición del delito,
sanciones a imponerse conjuntamente con las circunstancias agravatorias de
las mismas; b) en tanto el "significado esencial" del principio de legalidad
abarca otras exigencias materiales, en relación al "quo modo" de la ley penal.
Se dice esencial por la prevalencia del contenido del principio "nullum crimen,
nulla poena sine lege".
2.1.1.4.3.2. Principio de lesividad
La expresión bien jurídico se utiliza en el contexto político-criminal de
reclamar la protección jurídico- penal, en contraposición al sentido dogmático,
que alude a los objetos que de hecho protege el Derecho penal vigente. El
principio de lesividad o de dañosidad lo vincula, por tanto, al de exclusiva
protección de bienes jurídicos y que además, ha de ser el punto de partida de
la antijuridicidad penal. El postulado de exclusiva protección de bienes
jurídicos implica que no pueden ser amparados por el Derecho penal intereses
meramente morales, no es que los bienes protegidos no sean morales, sino que
su protección no sólo será por ese motivo, sino por algo aún con mayor
trasfondo Santiago Mir (2008)
2.1.1.4.3.3. Principio de culpabilidad penal
En Derecho Penal se asigna al concepto de culpabilidad una triple
significación.
Ius puniendi6a) Por un lado, se ve la culpabilidad como fundamento de la pena
referido a si procede imponer pena al autor de un hecho típico y antijurídico,
es decir, a un hecho prohibido por la ley penal con la amenaza de una pena.
Para ello se exige la existencia de una serie de elementos como son la
capacidad de culpabilidad, el conocimiento de la antijuricidad y la exigibilidad
de otra conducta distinta, y solo con la falta de alguno de estos elementos de
la culpabilidad no podrá imponerse una pena. b) Por otro lado, la culpabilidad
se ve como un elemento de determinación de la pena. En este caso ya no se
trata de determinar si existe o no pena, sino como ha de determinarse la pena,
su gravedad y su duración. En este caso la función de la culpabilidad es sobre
todo limitadora, pues impide que la pena pueda ser impuesta por debajo o por
encima de unos límites establecidos por la idea de culpabilidad.
c) Finalmente, el concepto de culpabilidad se utiliza como exclusión de la
responsabilidad por el resultado.
En definitiva, el principio de culpabilidad establece la exigencia de
responsabilidad en el sujeto para que este pueda ser sancionado con una pena.
Así, en el título preliminar del Código penal se recoge entre las garantías
penales del principio de culpabilidad Santiago Mir(2008)
2.1.1.4.3.4. Principio de proporcionalidad de la pena
Para Villa (2014) sostiene que este principio busca el equilibrio y prudencia
entre la magnitud del hecho y la pena que le debe corresponder al autor del
delito. La proporcionalidad debe fijar el punto en que la pena sea necesaria y
suficiente a la culpabilidad del autor, aunque con sujeción a La importancia
de la norma protectora, o mismo que a la magnitud del daño, no teniendo
cabida criterios de retribución talional o de venganza (p.144).
Por su parte Villavicencio (2013) afirma que el principio de proporcionalidad
de la pena consiste en la búsqueda de un equilibrio entre el poder penal del
Estado, la sociedad y el imputado. La pena debe ser proporcional de acuerdo
al delito cometido sin infringir la norma (p.115)

2.1.1.4.3.5. Principio de acusatorio


Para la (revista El Día) 2017,lprincipio acusatorio exige una correlación entre
la acusación y la sentencia, de forma que la defensa del imputado tenga
oportunidad de alegar, proponer prueba, participar en su práctica y en los
debates, habiendo conocido con antelación suficiente aquello de lo que se le
acusa. Del mismo modo que el Tribunal sentenciador no puede condenar por
un delito que no haya sido imputado por la acusación, tampoco puede imponer
una pena que no le haya sido solicitada por acusación alguna, pues ambos
mecanismos se basan en el respeto al principio acusatorio, y sus correlativas
derivaciones de congruencia y defensa.

2.1.1.4.3.6. Principio de correlación entre acusación y sentencia


San Martín (2006) considera que este principio surge de los
mandatos constitucionales establecidos en: a) el derecho fundamental de
defensa en juicio (art.139, inc. 14 de la Constitución Política del Perú), que
impide válidamente que el juez resuelva sobre algo que no ha sido objeto de
contradicción; b) el derecho a ser informado de la acusación (art. 139 inc. 15
de la Constitución), que es previo al anterior pues la contradicción efectiva
requiere el previo conocimiento de los cargos, sobre los cuales se ha de
estructurar la defensa; y, c) el derecho a un debido proceso (art. 139, inc. 3
de la Constitución Política).
conforme al principio acusatorio corresponde al Ministerio Público definir el
ámbito temático de la sentencia penal, a cuyo efecto debe describir la acción
u omisión punible y las circunstancias que determinen la responsabilidad del
imputado así como citar las normas jurídicas penales correspondientes,
requisito último que es determinante para el adecuado ejercicio del derecho de
defensa y, en lo especifico, para la vigencia del principio de contradicción
(Caballero,2015 )

2.1.1.4.4. Finalidad del proceso penal


Armenta (citado por Rosas , 2015) Su fin es la imposición de las penas
sostiene es decir ius puniendi estatal, que obedece o proviene esencialmente
de la atribución exclusiva obteniendo asi mismo busca castigar las conductas
delictivas de las que tenga conocimiento; ejercitados por los jueces y
tribunales a través del proceso penal. En última instancia, es la conservación
del orden público.
2.1.1.4.5. El proceso penal sumario

A. Concepto
Es aquel proceso donde el Juez Penal investido de la potestad que se la otorgado para
realizar doble función la de investigar y la de fallar en un caso concreto en un plazo
determinado para la investigación que establece la ley, recurriendo supletoriamente
a las reglas del proceso penal ordinario (Rosas, 2005, p. 543).

Para Peña (2013) l el plazo es de 60 días que pueden prorrogarse a 30 das más,
concluido los autos se remiten al fiscal provincial, y Solo se puee ampliar el plazo si
la instrucción se encuentra incompleta, a fin que se practiquen las diligencias que
faltan o subsanen los defectos. . (p. 205).
El término de la instrucción es más sencillo
(ESAN 2013) En el sumario, el juez determina los hechos relacionados con el delito
por el que la persona imputada vaya a ser juzgada, además del contexto en que ese
delito haya tenido lugar. Es decir, el sumario permite al brazo ejecutor de la ley
establecer las condiciones para la celebración del juicio.

Regulación
Señalado en el DL N° 124.
Artículo 1.- Los jueces Sentencian de acuerdo al DL. En los casos d e c o n c u r s o de
delitos, donde alguno de los cuales sea m á s grave que los comprendidos en la
presente Ley, el procedimiento será de acuerdo a los trámites del proceso ordinario
previstos en el Código de Procedimientos Penales.

2.1.1.4.6. El proceso penal ordinario

A. Concepto
Tiene las etapas, instrucción y enjuiciamiento con un plazo de 4 meses prorrogable a
dos meses. Culminada dicha etapa los autos son remitidos al fiscal y si estima que está
incompleta o defectuosa expide su dictamen solicitando que se realice una prorroga
al plazo, a fin que se practiquen las diligencias que faltan o se subsanen los defectos.
Una vez devuelta la instrucción al juzgado penal con el dictamen del fiscal, el juez
emite informe final pronunciando una opinión sobre si se encuentra acreditado el
delito y la responsabilidad del autor.
El plazo que se pone de manifiesto la instrucción es de 3 días después de emitido el
informe final. Luego los autos se elevan a la Sala Penal competente que, con previa
acusación del fiscal superior, dicta sentencia. Contra la sentencia expedida por la sala
penal en un proceso ordinario, sólo procede recurso de nulidad. Concedido el recurso,
se elevan los autos a la Corte Suprema. (Burgos, 2002).

B. Regulación
Este proceso se encuentra regulado en el C. de P.P. y se divide en dos etapas: la
instrucción o periodo investigatorio y juzgamiento, que se realiza en instancia única
(art. 1° del C. De P.P.) (Rosas, 2005, p. 458)

2.1.1.4.7. Características del proceso penal sumario - ordinario

Calderón y Águila (2011) El Ordinario Se encuentra fundamentado en el Dec. Leg.


N° 124; Tiene las etapas, instrucción y enjuiciamiento o juicio oral el plazo de
instrucción es de 4 meses prorrogable a dos meses. Culminada dicha etapa los autos
son remitidos al fiscal y si estima que está incompleta o defectuosa expide su
dictamen solicitando que se prorrogue el plazo, a fin que se practiquen las diligencias
que faltan o se subsanen los defectos. Una vez devuelta la instrucción al juzgado
penal con el dictamen del fiscal, el juez emite informe final pronunciando una
opinión sobre si se encuentra acreditado el delito y la responsabilidad del autor.
Mientras que el Sumario El término de la instrucción es más sencillo; el plazo es de
60 días que pueden prorrogarse a 30 das más, concluido los autos se remiten al fiscal
provincial, y si estima que la instrucción se encuentra incompleta o defectuosa,
expide su dictamen solicitando se prorrogue el plazo, a fin que se practiquen las
diligencias que faltan o subsanen los defectos. Si se devuelve la instrucción con la
acusación, el juez sentencia. Con la acusación del fiscal todos los autos deben ponerse
de manifiesto por el término de 10 días en la Secretaría del Juzgado (en este plazo
los abogados pueden presentar sus informes), posteriormente el juez debe pronunciar
sentencia dentro de los 15 días siguientes. Contra la sentencia del juez procede
recurso de apelación.

2.1.1.4.8. Los procesos penales en el Nuevo Código Procesal Penal

A. El proceso penal común


Regulado en el libro tercero del CPP del 2004 el mismo se encuentra dividido en tres
etapas: la investigación preparatoria, la etapa intermedia y la etapa de juicio oral.
Siendo estas etapas diferenciadas cumpliendo cada una de las etapas el rol que le
corresponde (Rosas, 2015).

B. El proceso penal especial


Este proceso se le conoce por ser inmediato y que busca la simplificación y celeridad
del procedimiento cuando exista flagrancia o cuando no se requiera de investigación.
El artículo 446 del NCPP establece los supuestos fácticos

Este proceso es aplicable cuando exista una conducta de flagrancia delictiva, dándose
la confesión del imputado o por ende la realización de diligencias de investigación
iníciales o preliminares con sus debidos elementos de convicción , el fiscal podrá
solicitar el inicio del proceso inmediato que permitirá la formulación de la acusación
ante el juez de la investigación preparatoria, no llegando a culminar con las etapas
de investigación preparatoria e intermedia. (Bramont,1998).

2.1.1.4.9. Identificación del proceso penal en el caso en estudio.

Las sentencias que fueron dadas en un proceso regido en el NCPP en el expediente


N°00518-2012-15-1708-JR-PE-01, DEL DISTRITO JUDICIAL DE
LAMBAEQUE-MOTUPE-2018, en estudio fueron dadas en un proceso que se
regía el nuevo código procesal Penal, por lo que el delito de Homicidio Culposo en
la vía de proceso penal sumario.

2.1.1.5. LA PRUEBA EN EL PROCESO PENAL

2.1.1.5.1. Concepto

Carneluti (citado por Devis, 2002) La prueba es aquello que confirma o desvirtúa
hipótesis o afirmación precedente. En el caso del proceso penal esta hipótesis es la
DISPOSICIÓN de formalización y continuación de la investigación preparatoria. • Si
el fin del proceso es descubrir la verdad f p material o real de los hechos materia de
investigación, prueba será todo lo que pueda servir para lograr este fin.
El finestá orientado a el hecho denunciado, previa comprobar o desvirtuar la actuaci
ón de pruebas. existencia de un delitosiempre que la acción penal no haya prescrito.
Así como, para determinar la responsabilidad y esclarecer los hechos del
delito penal del procesado, y determinar si es una sentencia
condenatoria o absolutoria de la acusación
Por lo tanto, se señala que el desarrollo de todo proceso judicial se estructura
conforme a un planteamiento lógico. En primer lugar, se presentan las peticiones de
las partes (alegaciones); después, se intenta demostrar la plena coincidencia entre los
hechos alegados y la realidad (periodo probatorio); por último, se concluye sobre la
cuestión planteada (lo que culmina con el pronunciamiento definitivo del juzgador).
De este modo, en el proceso penal. (Ostos, 2010)

2.1.1.5.2. El Objeto de la Prueba


Como dice Stein: citado por William Romero García, 2012 "El objeto de la
prueba procesal sólo lo pueden constituir los preceptos jurídicos y los hechos, puesto
que el juez tiene siempre la misión de subsumir supuestos de hechos, es decir, conjunto
de hechos, en los preceptos legales, con objeto de afirmar o negar la procedencia de
las consecuencias jurídicas de dichos supuestos fácticos.

2.1.1.5.3. La Valoración de la prueba

a prueba ha sido definido como la actividad procesal de las partes (de demostración)
y del juez (de verificación) por la que se pretende lograr el convencimiento
psicológico del juzgador acerca de la verdad de los datos allegados al proceso. Lo que
se prueba, por tanto, son datos, hechos, o siendo exactos, afirmaciones sobre hechos.
Como indicó CARNELUTTI2 el objeto de la prueba no son los hechos sino las
afirmaciones, las cuales no se conocen pero se comprueban, mientras que aquéllos no
se comprueban, sino que se conocen.
El artículo 173 CPP, tras afirmar que el juez valorará las pruebas en atención a la sana
crítica, señala que esta labor la realizará “justificando y fundamentando
adecuadamente las razones por las cuales les otorga un determinado valor, en base a
la apreciación conjunta y armónica de toda la prueba esencial producida”. Del
precepto se deduce claramente, por un lado, la necesidad de fundamentar la decisión,
es decir, la exigencia de motivación22, y por otro, se permite expresamente la
apreciación conjunta de la prueba.
La valoración probatoria realizada por el Juzgador haciendo uso de su capacidad
mental para que haciendo uso de las pruebas actuadas para que a través de ello se
llegue a la verdad juridad previa motivacion (Bustamante, 2001).

Su finalidad es lograr obtener el valor probatorio previa verificación y acreditación


logrando alcanzar la verdad jurídica argumentada. (Bustamante, 2001).

2.1.1.5.4. Las Pruebas actuadas en el proceso Judicial en estudio


Atestado policial
Definición

Es un documento elaborad por la policía como un documento administrativo, que


recoge evidencias de los hechos materia de investigación realizados por la policía
nacional ante la denuncia d e l d e l i t o c o m e t i d o .

Asimismo, para Colomer (citado por Frisancho 2013) es un documento que recoge
la investigación, realizada por la policía nacional, respecto a un hecho o
circunstancia evidenciando un hecho criminal, cualquiera que sea su naturaleza. La
define en conclusión como : conjunto y como unidad.

Regulación

De acuerdo al Código de Procedimiento Penales; artículo 62°: “La investigación


policial previa que se hubiera llevado a cabo con intervención del Ministerio Público,
constituye elemento probatorio que deberá ser apreciado en su oportunidad, por los
jueces y Tribunales, conforme a lo dispuesto en el artículo 283° del Código de
procedimientos penales el cual está referido al criterio de conciencia” (Jurista
Editores, 2015).

Marco de garantías mínimas para respetar en el atestado policial

Frisancho (2013)
1.- derecho de defensa, tanto material como técnica o formal.
El acusado debe ser asesorado por un abogado de su elección no debe ser objeto de
presiones psicológicas o maltratos físicos al dar su manifestación.
2.- respetarse el derecho fundamental e irrestricto a la legalidad en el desarrollo
de la investigación.
3.- Concluyendo para la elaboración del atestado policial (informe policial en el
nuevo Código procesal penal) se debe respetar la garantía de imparcialidad y
objetividad .

El fiscal orienta, conduce y vigila la elaboración del Informe Policial

Es el fiscal quien orienta conduce y vigila la elaboración del informe policial para
darle la validez jurídica del atestado policial. Actúando con imparcialidad y
objetividad.
Este informe, debe ser elaborado velando por los derechos del imputado, agraviado
u ofendido por tal hecho punible. Pues su correcta intervención del fiscal en la
elaboración del informe técnico-policial permite ahorrar tiempo y recursos.
Permitiendo economizar l o s recursos (tanto la economía procesal y logística) y
evitar futuros inconvenientes o cuestionamientos en la etapa intermedia o de
juzgamiento (Frisancho, 2013, pp. 650; 651)

El atestado policial en el Código de Procedimientos Penales

De acuerdo al artículo 60° del Código de procedimientos penales, regulaba el


contenido del atestado:

“Los miembros de la Policía Nacional que intervengan en la investigación de un delito


o de una falta, enviarán a los Jueces Instructores o de Paz un atestado con todos los
datos que hubiesen recogido, indicando especialmente las características físicas de
los involucrados presentes o ausentes, apodo, ocupación, domicilio real,
antecedentes y otros necesarios para la identificación, así como cuidarán de anexar
las pericias que hubieran practicado” (Jurista Editores; p. 329-330).

La norma del artículo 61°, se ocupaba de la autorización y suscripción del atestado


policial, en los términos siguientes:

“El atestado será autorizado por el funcionario que haya dirigido la investigación.
Las personas que hubieran intervenido en las diversas diligencias llevadas a cabo,
suscribirán las que les respectan. Si no supieran firmar, se les tomará la impresión digital.

Los partes y atestados policiales y los formulados por órganos oficiales especializados,
no requerirán de diligencia de ratificación” (Jurista Editores, 2015).

El Informe Policial en el Código Procesal Penal

el fiscal requerira la intervención de la policía en a etapa incial dl proceso dutante las


diligencias preliminares.

En la etapa inicial el fiscal debe direccionalizar a la policía con el obetivo de lograr


determinar la vialidad del inicio de la investigación preparatoria. Señalado en el art
332° del CPP
1. La Policía eleva el informe policial al fiscal.

2. El informe policial desscribe los antecedentes que motivaron la intervención, las


diligencias y el análisis de los hechos investigados, no correspondiéndole a la Policia
calificar y imputar responsabilidades.
3. P o r u l t i m o , El informe policial contendrá adjunto manifestaciones recibidas,
actas levantadas, las pericias realizadas y todo aquello que considere indispensable para
el debido esclarecimiento de la imputación, así como la comprobación el domicilio y los
datos personales de los imputados (Frisancho, 2013, p. 651)

El atestado policial el informe policial en el proceso judicial en estudio


En el proceso judicial en estudio, el informe técnico N° 240-2012-DEPIAT-PNP-CH
al examinar su contenido se observó lo siguiente:
El factor determinante del accidente de tránsito fue la acción impudente del conductor de
la mototaxi conducida por el imputado al desplazar su unidad móvil por una vía de transito
rápido como es el panamericano norte Antigua imprimiendo en aceleración e incompatible
para las circunstancias del momento y lugar no extremando sus medidas de seguridad
precaución al tratar de adelantar a la motocicleta por su lado derecho.
“C” y “D”. Investigados como testigos por el delito de Homicidio Culposo en
Agraviado: “A”. Hecho ocurrido en el distrito de Motupe- Lambayeque, y en la
cuales se llevaron a cabo las siguientes diligencias como son: la manifestación de “C”;
“B”, “D”, (Expediente N° 00518-2012-15-1708-JR-PE-01, DEL DISTRITO
JUDICIAL DE LAMBAEQUE-MOTUPE).

Declaración instructiva
Definición

Es una de las pruebas instructivas que se realiza a través de interrogatorios hecho por
un juez a quien se le esta imputando el hecho materia de investigación (Sánchez,
2009).
La instructiva es la declaración que presta el procesado inculpado en el despacho del
Juez Penal en el día y hora señalado respecto de los hechos materia de la instrucción
o investigación y si por enfermedad o impedimento físico no puede constituirse el
inculpado, el Juez puede constituirse al lugar donde se encuentra a fin de tomarle su
instructiva.
Asimismo de esta declaración el Juez hará constar que designe su abogado defensor,
de no hacerlo se le proporcionara un abogado de Oficio, de negarse se hará constar en
el Acta y de será analfabeto de todas maneras se le nombrara abogado de oficio.

A continuación el Juez hará conocer al procesado los cargos imputados a fin de que
pueda esclarecerlo. Después de producida la intimidación por parte del Juez que es en
forma clara y detallada hace de conocimiento del procesado los cargos imputados, así
como circunstancias y medios incriminatorios con fechas, etc., de igual forma el Juez
exhortara al inculpado para que se comporte con veracidad a fin de colaborar con la
administración de Justicia, de proceder con sinceridad, arrepentimiento, demostrando
colaboración de su parte se le hace conocer que conforme al articulo 136 del Código
de Procedimientos Penales, en caso de hallarse culpable se le beneficiara con una pena
por debajo del mínimo señalado por el delito imputado.

El Abogado Defensor prestara juramento de guardar reserva de la instructiva de su


defendido .(Rosas, 2015, p.164)

Regulación

Regulado en el 121 al 137 del Código de Procedimientos Penales, tiene por finalidad
ejercer el derecho de defensa, par lo cual se requerirá la presencia del
abogado defensor elegido por el procesado, salvo en casos excepcionales, se
podía obviar al defensor y recibir el examen del inculpado (Jurista Editores,
2015).

La instructiva en el proceso judicial en estudio

En el caso de estudio se observa que “B”; el procesado declaró ante el señor juez que
Refiere que lamenta el suceso por que fue un caso fortuito nadie tiene
derecho a quitarle l vida a otro, soy conductor y soy consciente de transitar
por una vía rápida como hice; nunca actué de manera fría y que los testigos
digan la verdad. (EXP. N°00518-2012-15-1708-JR-PE-01, DEL DISTRITO
JUDICIAL DE LAMBAEQUE-MOTUPE)

Documentos

Definición

Mixan (citado por Rosas, 2015) Dice que etimológicamente la palabra documento
deriva del termino latino docere, que equivale a “enseñar”.

Por su parte Parra, (Citado por Neyra 2010) señala que, , la prueba documental es
uno de los medios disponibles para demostrar la veracidad de un hecho alegado
o una manifestación del pensamiento, es decir, que para que un objeto pueda
llamarse documento debe representar un hecho caso contrario, no es documento
Siendo esta información valorada por un juez como muestra veraz de la
autenticidad de un hecho,. El documento es prueba privilegiada y puede
presentarse en cualquier etapa del proceso.

Clases de documentos

Según Sánchez, (citado por Rosas, 2015, p. 248) hay dos clases de documentos:

A) documento público, Los documentos son públicos o privados. Documento público


es el otorgado por el funcionario público en ejercicio de sus funciones o con su
intervención. Así mismo, es público el documento otorgado por un particular
en ejercicio de funciones públicas o con su intervención. Cuando consiste en un
escrito autorizado o suscrito por el respectivo funcionario, es instrumento
público; cuando es autorizado por un notario o quien haga sus veces y ha sido
incorporado en el respectivo protocolo, se denomina escritura pública.»
B) documento privado, Su valor será determinado por si solos hasta que se prueba
su autenticidad y su relación con el hecho que investiga o con la persona imputa
del delito que se le acusa.
.
Regulación
Se encuentra su regulación en CPP en sus artículos 184 al 188, en al cual se
expresa que se incorpora al proceso todo documento que puede servir
como medio de prueba (Jurista Editores, 2015).
Documentos valorados en el proceso judicial en estudio

Examen del acusado B. Refiere, que lamenta lo sucedido, es un acto un


imprevisto que a cualquiera le puede suceder. Ante el fiscal. Dijo, que es moto
taxista y percibe veinte nuevos soles diarios. A Occiso si lo conocía por el deporte
y tenía relación de amistad con D, es hija de un familiar. C no lo conoce. Respecto
a los hechos: es moto taxista, ese día del accidente estaba trabajando y a las dos
de la madrugada se dispuso a retirar y prefirió ir al centro de Motupe a comprar
alimentos; se retiró por la calle Túpac Amaru y al salir al grifo Repsol se percató
de una luz por el espejo retrovisor de su mototaxi, seguía avanzando de pronto
sintió un impacto por la parte posterior lado lateral, se sorprendió porque ya estaba
en el cerco de la chacra del frente La Victoria; a los cinco minutos, yo salgo con
golpes en el cuerpo y en la cabeza; llamó al celular de su mamá, estaba apagado
y al de su esposa y ella fue quien lo socorrió; al salir de debajo de la zanja a la
berma encuentra al chico, juntamente con D ella lo trataba de levantar, pero fue él
quien lo ayudó a levantarlo juntamente con ella, porque ella no lo podía levantar,
en ese entonces el señor C le vociferó cosas irreproducibles; él lo tenia cargado al
agraviado conjuntamente con D lo estaban trasladando para el otro lado, cuando
estaba sosteniendo al chico ayudando a D el señor C se acerca ahí; minutos
después llega el de carretera, cuando estaban sosteniéndolo lo hacen caer, en ese
momento lo cargan al herido al patrullero para que lo lleven a la posta.

 Prueba Testimonial.
C Ante el interrogatorio del fiscal. Dijo, que es agricultor. Con A el occiso., se
conocieron hace muchísimo tiempo, eran muy buenos amigos. Claudia Muro
Sosa, es su amiga y a B, no lo conoce, nunca lo había visto antes pero ahora sí
debido al accidente.
D. Ante el interrogatorio del fiscal. Dijo, que era su amigo y amigo de su primo.
B, lo conoce sólo de vista. Dijo, ese día estuvo en su casa y a esa hora llegó su
primo A occiso. a decirle para salir, que iba a venir su amigo c a llevarnos,
estuvieron un rato escuchando música en el parque, al rato la moto se había
bajado, entonces él se fue a echarle aire, se quedaron esperando al rato volvió, se
subieron a la moto A en medio y yo atrás, y en momentos que iban por la
panamericana manejando, yo iba conversando con A nos estábamos riendo y de
repente siente una luz, cuando ya se había golpeado la cabeza y no recuerda más
hasta que cuando despertó y lo primero que dijo que vea a su primo que él está
mal, es lo que recuerda. Dijo, cuando despertó, lo mueve para que reaccione y es
cuando le dice a C que está mal, estaba como borracho como ido, estaba
vomitando lo llevaron al hospital y allí falleció.

 Prueba Pericial.
X. Los certificados Medico Legales Nº 000889-LT, Nº 000896-V y Nº 00883-LT,
fueron elaborados por su persona, es su firma y no han sufrido modificatorias.
Z : Refiere, que es Sub oficial de la policía; laboró en el Departamento de
accidentes de tránsito del dos mil ocho al dos mil catorce. Si ha emitido el Informe
Técnico Nº 240-2012-DEPIAT-PNP-CH y la firma y contenido es el mismo. En
las conclusiones que se llegó se pudo determinar la acción imprudente del
conductor de la UT-01, es decir el señor B

 Prueba Documental.
a) Oficio Nº 831-2012-COMIS-PNP-MOTUPE. Con dicho documento se adjunta el
acta de accidente de tránsito, siendo de utilidad por ser la primera noticia del evento
criminal.
b) Certificado de defunción de A. Acreditar el deceso del agraviado.
c) Formato de inmatriculación de vehículo del acusado. Documento mediante el cual
se determina inicialmente el proceso de inscripción del vehículo a nombre del
acusado.
d) Certificado de dosaje etílico Nº C-001294, practicado al acusado. Determinar el
estado de ecuanimidad del conductor.
e) Informe Técnico de constatación de daños del vehículo menor marca WUYANG
conducido por el acusado. Acreditar los daños producidos por la colisión el día de
los hechos; asimismo, que la mayor parte de los daños es en el lado izquierdo.
f) Informe Técnico de constatación de daños del vehículo menor marca
ASIATICA de placa de rodaje M8-5932. Acreditar que la mayor parte de los daños
que ha sufrido el vehículo es en lado derecho.
g) Oficio Nº 2012-10565-RDC-CSJLA/PJ. Con fines de determinación de la pena.
h) Acta de Inspección Técnico Policial. En donde se recibió las versiones de los
participantes del accidente de tránsito en presencia del representante del Ministerio
Publico y perito de la DEPIAT.
i) Oficio Nº 3451-2012-RPNP-FIRTEPOL-LAMB/OFIRI-UIC. Con fines de
determinación de la pena.
j) Oficio Nº 1471-2012-SUNARP-ZRLL-DRS. Determinar el bien que posee el
acusado.
k) Oficio Nº 12992-2012-DEPIAT-PNP-CH. No registra antecedentes judiciales.
l) Informe Técnico Nº 240-2012-DEPIAT-PNP-CH. No oralizado por cuanto su
autor fue examinado en audiencia.

 Del Actor Civil.


Prueba Documental.
 Facturas, boletas y recibos. Acreditar con los comprobantes de pago que han
costeado el tratamiento desde el accidente de tránsito hasta el deceso; en tanto,
las constancias de estudios, para efectos de calificar el daño moral ocasionado
con la pérdida del agraviado.
 Del acusado.
 Informe Técnico Nº 240-2012-DEPIAT-PNP-CH. No oralizado por cuanto su
autor fue examinado en audiencia.

LA PERICIA

Concepto
(Hilda, 2010)Los peritos son una particular especie de testigos (…) se trata de
personas que cuentan con información relevante acerca del caso que se esta juzgando y
deben venir a dar cuenta de ella en forma oral y sujeta a la contrariedad del juicio”.

La pericia procede para explicar y comprender un hecho con conocimiento especializado


de naturaleza científica, técnica, artística o de experiencia calificada (Art. 172º NCPP);
es decir, la pericia aporta al Proceso, No Sólo Al Juez

Contenido Del Informe Pericial.

(Hilda, 2010) El Art. 178º disponen que el informe pericial contendrá:


 El nombre, apellido, domicilio y DNI del perito, así como el número de su registro
profesional en caso de colegiación obligatoria.
 La descripción de la situación o estado de hechos, sea persona o cosa, sobre los
que se hizo el peritaje.
 La exposición detallada de lo que se ha comprobado en relación al encargo.
 La motivación o fundamentación del examen técnico.
 La indicación de los criterios científicos o técnicos, médicos y reglas de los que
se sirvieron para hacer el examen.
 Las conclusiones.
 La fecha, sello y firma

El Informe pericial no puede contener juicios respecto a la responsabilidad o no


responsabilidad penal del imputado en relación con el hecho delictuoso materia del
proceso.

Regulación

En el Art. 174º.1 se establece que el Perito:

 Tiene la obligación de ejercer el cargo, salvo que esté incurso en alguna causal de
impedimento.
 Prestará juramento o promesa de honor de desempeñar el cargo con verdad y
diligencia, oportunidad en que expresará si le asiste algún impedimento.
o Será advertido de que incurre en responsabilidad penal, si falta a la verdad.

El perito deberá guardar reserva, bajo responsabilidad, de cuanto conozca con motivo de
su actuación (Art. 176.2).

 La pericia en el caso en estudio

 Los certificados Medico Legales Nº 000889-LT, Nº 000896-V y Nº 00883- LT fueron


elaborados por su persona, es su firma y no han sufrido modificatorias.
Z: Refiere, que es Sub oficial de la policía; laboró en el Departamento de accidentes de
tránsito del dos mil ocho al dos mil catorce. Si ha emitido el Informe Técnico Nº 240-
2012-DEPIAT-PNP-CH y la firma y contenido es el mismo. En las conclusiones que se
llegó se pudo determinar la acción imprudente del conductor de la UT-01, es decir el
señor B
 Peritos médicos
(judiciales, 2016) Los peritos médicos son requeridos en multitud de casos en los que,
evidentemente, sea necesaria la opinión fundamentada, científica e imparcial en materia
de salud. Por lo tanto, el perito médico es un elemento frecuente en los procesos judiciales
relacionados con la mala práctica médica y la negligencia médica. Como peritos médicos,
podemos hacer informes profesionales y sectoriales de los campos señalados en el
apartado anterior, tanto en solitario como en colaboración con otros equipos de peritos
médicos, lo que garantizaría, todavía más, la independencia y calidad final del informe.
En este sentido, cabe señalar que el objetivo del perito médico no es revelar culpabilidades
a posteriori. Es decir, su papel no es señalar una negligencia médica atendiendo a los
resultados finales. Por ejemplo, no es razonable que el perito de oncología señale
negligencia en un diagnóstico médico porque el paciente finalmente desarrolló cáncer. La
cuestión es determinar si en el momento del diagnóstico se utilizaron todos los medios
diagnósticos exigidos por el cuadro clínico del paciente. El perito médico debe analizar
si la praxis médica del caso en cuestión se adecuaba a las necesidades y la información
disponible en el momento, así como cerciorarse de que no hubo dejación de funciones o
mala práctica evidente y flagrante.

La inspección ocular
Concepto
(Podetti, 2010)La inspección ocular es un medio de prueba utilizado en el proceso penal,
llamado así pues fundamentalmente se utiliza el sentido de la vista, aunque no se descarta
el uso del resto de los sentidos.

Esta dirigida por el instructor policial, el juez o por peritos especialmente designados para
el delito, materia de la investigación, Con frecuencia es el instructor policial pues en
general se efectúa en las etapas preliminares del proceso, en la etapa sumarial, para que
no se pierdan elementos que puedan comprobar el hecho materia del proceso, haciendo
uso de auxiliares técnicos, fotógrafos, peritos en balística, médicos legistas, etc.

Regulación

ARTÍCULO 192º Objeto. - 1. Las diligencias de inspección judicial y reconstrucción


son ordenadas por el Juez, o por el Fiscal durante la investigación preparatoria. 2. La
inspección tiene por objeto comprobar las huellas y otros efectos materiales que el delito
haya dejado en los lugares y cosas o en las personas. 3. La reconstrucción del hecho
tiene por finalidad verificar si el delito se efectuó, o pudo acontecer, de acuerdo con las
declaraciones y demás pruebas actuadas. No se obligará al imputado a intervenir en el
acto, que deberá practicarse con la mayor reserva posible.
ARTÍCULO 193º Adecuación. - La inspección, en cuanto al tiempo, modo y forma, se
adecua a la naturaleza del hecho investigado y a las circunstancias en que ocurrió. La
inspección se realizará de manera minuciosa, comprendiendo la escena de los hechos y
todo lo que pueda constituir prueba material de delito.
ARTÍCULO 194º Participación de testigos y peritos.- 1. Ambas diligencias deben
realizarse, de preferencia, con la participación de testigos y peritos. 2. Asimismo, se
dispondrá que se levanten planos o croquis del lugar y se tome fotografías, grabaciones
o películas de las personas o cosas que interesen a la causa. 3. En los delitos contra la
libertad sexual no se exigirá la concurrencia de los agraviados menores de edad, o de
las víctimas que pueden ser afectadas psicológicamente con su participación.

La inspección ocular en el caso en estudio


 Acta de Inspección Técnico Policial. En donde se recibió las versiones de los
participantes del accidente de tránsito en presencia del representante del Ministerio
Publico y perito de la DEPIAT.
Respecto al certificado médico legal Nº 00883-LT, practicado al imputado y los
testigos

2.1.1.6. LA SENTENCIA
2.1.1.6.1. Definiciones
Decisión que toma una persona a la que se ha dado autoridad para resolver una
controversia
Estructura
Se encuentra dividid en 3 partes por una parte expositiva, considerativa y resolutiva; pero
además, teniendo en cuenta sus cambios en primera como en segunda instancia, así,
tenemos:

2.1.1.6.1.1. Contenido de la Sentencia de primera instancia

2.2.1.6.1.1.1.Etimología
En su sentido antiguo derivado de la etimología de la palabra sentencia, encontramos que
ésta proviene del latín "sententia" y ésta a su vez de "sentiens, sentientis", participio
activo de "sentire" que significa sentir, es decir, el criterio formado por el Juez que pudo
percibir de un hecho puesto a su conocimiento (Omeba, 2000).

2.2.1.10.2. Concepto

Según el Diccionario de la Real Academia Española, Sentencia es aquella que se le


conoce como “Declaración del juicio y resolución del Juez”.

Alsina (citado en Ossorio, 2006), la define como el “Modo normal de extinción de la


relación procesal”. (p. 878).

Por su parte, Ramírez Gronda, considera que la sentencia es la Decisión judicial que en
la instancia pone fin al pleito civil o causa criminal, resolviendo respectivamente los
derechos de cada litigante y la condena o absolución del procesado.

Finalmente, Cabanellas, señala que sentencia es la “Resolución judicial en una causa y


fallo en la cuestión principal de un proceso”.

.
Dentro de esta misma perspectiva (Couture,1958) explica que, la sentencia en el proceso
intelectual de sentenciar tiene muchos factores ajenos al simple silogismo, afirmando
que ni el Juez es una máquina de razonar ni la sentencia es una cadena de silogismos;
bajo esta premisa afirma también que debe observarse al Magistrado en su condición
de hombre, de la que no se desprende al sentenciar, y es con la misma condición, con la
que examina los hechos y determina el derecho aplicable.

Concluye diciendo: (Couture)2008 . Sentencia es el “Acto procesal emanado de los


órganos jurisdiccionales que deciden la causa o punto sometidos a su conocimiento”.

Esta también que se señala que tiene , pero en la cual la función más importante incumbe
al Juez como hombre y como sujeto de voliciones, tratándose por lo tanto, de una
sustitución de la antigua logicidad de carácter puramente deductivo, argumentativo,
conclusiones, por una logicidad de carácter positivo, determinativo y definitorio
(Rojina, 1993).

También, Binder (c i t a d o por Cubas, 2003) afirma que la sentencia, es el acto


judicial por excelencia, que determina o construye los hechos, a la vez que construye la
solución jurídica para esos hechos, solucionando, o mejor dicho, redefiniendo , el
conflicto social de base, que es reinstalado de un modo nuevo en el seno de la sociedad.

Para García, (citado en Cubas, 2003, p. 454) “la sentencia es el medio ordinario de dar
término a la pretensión punitiva. Su consecuencia legal es la cosa juzgada con relación
al delito que fue materia de la investigación y a la persona inculpada del mismo”.

2.2.1.10.3. La sentencia penal


La sentencia penal es el acto jurisdiccional que definitivamente pone la última piedra al
proceso en la instancia, en la apelación o en la casación, resolviendo así la cuestión
criminal sometida al juzgador, de acuerdo con el art. 14 LECrim. Salvo supuestos
excepcionales, sólo una sentencia absolutoria o condenatoria puede abarcar el proceso
penal. No hay, afortunadamente, absolución en la instancia. Por esta razón, las sentencias
que resuelven quebrantamiento de forma en contra del reo, en determinadas
circunstancias y permiten un nuevo enjuiciamiento, han de verse con ciertas y rigurosas
precauciones y muchas reservas y moverse de manera constante en un clima de especial
restricción para evitar que con ellas se pueda producir un cierto desconocimiento del
principio "non bis in ídem", referido a la materia procesal.(Ruiz Enrique, 1995)

La función jurisdiccional está destinada a la creación por parte del juez, de una norma
jurídica individual y concreta, necesaria para determinar el significado o trascendencia
jurídica de la conducta de los particulares, por lo tanto, la sentencia es esa norma jurídica
individual y concreta creada por el juez mediante el proceso para regular la conducta de
las partes en conflicto,
Además de ello, dado que la pretensión procesal es el objeto del proceso, es deber del
juez examinarla para declararla con o sin lugar, es decir procedente o improcedente, por
lo que podemos concluir que la sentencia también puede ser considerada como acto de
tutela jurídica, esto es, la resolución del juez que acoge o rechaza la pretensión que se
hace valer en la demanda.
Conjugando ambas ideas tenemos una definición más amplia de sentencia:
La sentencia se define entonces como el mandato jurídico individual y concreto, creado
por el juez mediante el proceso, en el cual se acoge o rechaza la pretensión que se hace
valer en la demanda.

2.2.1.10.4. La motivación en la sentencia


La Motivación de la decisiones judiciales está configurada por las causas
psicológicas que determinan la decisión así como por la razones de hecho y de
derecho en que se sustenta ella. Para algunos es equivalente a fundamentación, y en
virtud a ello se dice que la motivación es la fundamentación fáctica y jurídica de la
decisión judicial. De la noción formulada se desprende que la motivación puede ser
de dos tipos: psicológica y jurídica. Como luego veremos, la motivación psicológica
de desarrolla en el contexto de descubrimiento, en tanto que la jurídica, y
consiguiente argumentación, tiene lugar en el contexto de justificación. Víctor
Ticona(2015)

2.2.1.10.4.1. La motivación como justificación de la decisión

Es la motivación jurídica. En términos generales, como sostiene María Cristina Redondo,


el acto de justificar puede ser por escrito u oral y está configurado por ". ..un enunciado
que califica dicha acción como debida o permitida"~ "... justificar una acción consiste en
brindar fundamentos generales a un enunciado normativo particular"8 . La explicación
tiene un propósito descriptivo, en tanto que la justificación tiene un propósito evaluativo
o normativo9 . Como hemos visto, la motivación jurídica -equivalente a justificación-
tiene lugar en el contexto de justificación. En el ámbito de la teoría de la argumentación
jurídica la justificación consiste en las razones que el juez ha dado para mostrar que su
decisión es correcta o aceptable10. Para nosotros, la justificación tiene por finalidad que
el Juez muestre que la decisión tiene razones de hecho y de derecho que sustentan una
sentencia objetiva y materialmente justa. La justificación responde a la pregunta ¿por qué
se debió tomar tal decisión?, ¿por qué la decisión tomada es correcta?; o, para nosotros:
¿por qué la decisión tomada es objetiva y materialmente justa? Por eso pensamos que no
sólo se trata de exponer razones que muestren que la decisión es razonable o simplemente
correcta, sino que si consideramos que el derecho tiene como uno de sus fines realizar el
valor justicia, y el proceso tiene como fin abstracto promover la paz social en justicia,
entonces el Juez, a través de la motivación, tiene el deber de mostrar las razones de la
sentencia justa, acorde con aquel valor superior del ordenamiento jurídico, los fines del
proceso y el Estado Democrático y Social de Derecho. La justificación debe ser de
carácter jurídico, por ello debe descartarse razones filosóficas, económicas, sociales, etc.
La Constitución le impone al Juez decidir, utilizando el derecho objetivo, de manera justa
el conflicto de intereses, porque el fin último del proceso es la justa resolución de litigio
de allí que el juez tiene como contrapartida a su independencia, su vinculación a la
Constitución y a la Ley .Victor Ticona(2015)

2.2.1.10.4.2. La Motivación como actividad


Se le conoce así al razonamiento exuasivo en el que el Juez e x a m i n a la decisión
en términos de aceptabilidad jurídica, y a prevención del control posterior que sobre
la misma puedan realizar los litigantes y los órganos jurisdiccionales que
eventualmente hayan de conocer de algún medio impugnatorio con la resolución.
Por ahora diremos que los argumentos que expone el juez en la sentencia, al motivarla,
deben ser certeros, tal como lo sustentaremos más adelante cuando abordemos los
elementos de la sentencia objetiva o materialmente justa y, en particular, en la
motivación sobre los hechos y el derecho. Se admite en gran parte de la doctrina28
que es suficiente que los argumentos sean racionales o razonables para que la decisión
sea razonable y aceptable. No compartimos esta posición, pues pensamos que una
argumentación razonable nos conduce necesariamente a una decisión razonable en
cambio consideramos que solamente la argumentación certera debe conducir a una
decisión justa, o por lo menos existe una mayor probabilidad de que la sentencia
concrete el valor justicia (concurrentemente con otros valores y principios) en el caso
sub júdice. En conclusión se puede decir que la motivación como actividad viene
hacer la operación mental del Juez, con el objeto de determinar si todos los extremos
de una decisión son susceptibles de ser incluidos en la redacción de la resolución,
por gozar de una adecuada justificación jurídica (Colomer, 2003).

2.2.1.10.4.3. Motivación como producto o discurso


Para la justificación de la motivación es necesario que este conformado por un conjunto
de proposiciones de diversos contextos que sean identicados, perceptible subjetivamente
(encabezamiento) y objetivamente (mediante el fallo y el principio de congruencia);
la motivación, debido a su condición de discurso, dicho de otro modo, es un acto de
comunicación, que exige de los destinatarios la necesidad de emplear instrumentos de
interpretación (Colomer, 2003).

2.2.1.10.5 La función de la motivación en la sentencia


“Este derecho implica que cualquier decisión cuente con un razonamiento que no sea
aparente o defectuoso, sino que exponga de manera clara, lógica y jurídica los
fundamentos de hecho y de derecho que la justifican, de manera tal que los destinatarios,
a partir de conocer las razones por las cuales se decidió en un sentido o en otro, estén en
la aptitud de realizar los actos necesarios para la defensa de su derecho. El derecho a la
motivación es un presupuesto fundamental para el adecuado y constitucional ejercicio
del derecho a la tutela procesal efectiva.
Además de considerarla como principio y garantía de la administración de justicia, este
Colegiado ha desarrollado su contenido en la sentencia recaída en el Expediente Nº
1230-2002-HC/TC, donde se precisó que lo garantizado por el derecho es que la decisión
expresada en el fallo o resolución sea consecuencia de una deducción razonada de los
hechos del caso, las pruebas aportadas y su valoración jurídica. En la sentencia recaída
en los Expedientes No 0791-2002-HC/TC y N° 1091-2002-HC/TC, se afirmó, entre otras
cosas, que la motivación debe ser tanto suficiente (debe expresar por sí misma las
condiciones que sirven para dictarla y mantenerla) como razonada (debe observar la
ponderación judicial en torno a la concurrencia de todos los factores que justifiquen la
adopción de esta medida cautelar)”[5].
La doctrina jurisprudencial del TC es reiterada al señalar que el derecho a la motivación
de las resoluciones judiciales no garantiza una determinada extensión de la motivación,
por lo que su contenido constitucional se respeta, prima facie, siempre que exista:
a) fundamentación jurídica, que no implica la sola mención de las normas a aplicar al
caso, sino la explicación y justificación de por qué tal caso se encuentra o no dentro de
los supuestos que contemplan tales normas;
b) Congruencia entre lo pedido y lo resuelto, que implica la manifestación de los
argumentos que expresarán la conformidad entre los pronunciamientos del fallo y las
pretensiones formuladas por las partes; y,
c) que por sí misma exprese una suficiente justificación de la decisión adoptada, aun si
ésta es breve o concisa, o se presenta el supuesto de motivación por remisión.[6]
Asimismo el TC también establece que el derecho al debido proceso comprende una serie
de derechos fundamentales de orden procesal, cada uno de los cuales cuenta con un
contenido constitucionalmente protegido que le es propio. Uno de los derechos que
conforman el derecho al debido proceso es el derecho a la debida motivación de las
resoluciones fiscales. En efecto, este derecho se constituye en:
“una garantía del denunciante del ilícito penal frente a la arbitrariedad fiscal, que
garantiza que las resoluciones fiscales no se encuentren justificadas en el mero capricho
de los Magistrados Fiscales, sino en datos objetivos que proporciona el ordenamiento
jurídico o los que se deriven del caso”.
2.2.1.10.6. La motivación como justificación interna y externa de la decisión
El control de la motivación también puede autorizar la actuación del juez
constitucional cuando las premisas de las que parte el Juez no han sido confrontadas o
analizadas respecto de su validez fáctica o jurídica. Esto ocurre por lo general en los
casos difíciles, como los identifica Dworkin, es decir, en aquellos casos donde suele
presentarse problemas de pruebas o de interpretación de disposiciones normativas. La
motivación se presenta en este caso como una garantía para validar las premisas de las
que parte el Juez o Tribunal en sus decisiones. Si un Juez, al fundamentar su decisión:
1) ha establecido la existencia de un daño; 2) luego, ha llegado a la conclusión de que
el daño ha sido causado por “X”, pero no ha dado razones sobre la vinculación del
hecho con la participación de “X” en tal supuesto, entonces estaremos ante una
carencia de justificación de la premisa fáctica y, en consecuencia, la aparente
corrección formal del razonamiento y de la decisión podrán ser enjuiciadas por el juez
(constitucional) por una deficiencia en la justificación externa del razonamiento del
juez.Roger Zavaleta(2017)
Asimismo, La falta de motivación interna del razonamiento (defectos internos de la
motivación) se presenta en una doble dimensión: por un lado, cuando existe invalidez
de una inferencia a partir de las premisas que establece previamente el Juez en su
decisión; y, por otro lado, cuando existe incoherencia narrativa, que a la postre se
presenta como un discurso absolutamente confuso incapaz de transmitir, de modo
coherente, las razones en las que se apoya la decisión.. (Linares, 2001).

2.2.1.10.7. La construcción probatoria en la sentencia


Viene hacer el análisis claro y exhausivo, así como la relación de hechos que
estuvieren enlazados con las cuestiones que hayan de resolver en el fallo, sin perjuicio
de hacer declaración expresa y terminante, excluyente de toda contradicción, de los
que se estimen probados, consignando cada referencia fáctica, configuradora de todos
los elementos que integran el hecho penal, que debe estar acompañada de justificación
probatoria correspondiente (San Martín, 2006).
Siguiendo a Oliva (citado por San Martín ,2006) establece que la exigencia de una
motivación puntual se expresa en tres supuestos:

a) cuando la prueba es indiciaria, en que debe darse suficiente razón del enlace
apreciado.
b) cuando se debe emitir un pronunciamiento preciso acerca de la ilicitud o de la
irregularidad de determinadas pruebas, en cuyo caso ha de explicar por qué ha
atribuido o rechazado atribuir valor a unos determinados elementos probatorios; y,
c) cuando se debe atribuir o no valor a determinados elementos probatorios, en
aquellos casos en que la fuerza probatoria de unos medios de prueba se ven
contradichos por otros elementos probatorios. Sostiene que, en esta parte, tampoco
puede hacer uso de conceptos jurídicos que predetermine en fallo, puesto que tales
conceptos solo se lograrían con un análisis considerativo jurídico” (p. 727-728).
Talavera (2011) siguiendo el esquema de la construcción probatoria, sostiene que la
motivación debe abarcar, la motivación de la incorporación legal de los medios
probatorios; de su legitimidad, la exclusión probatoria, y la afectación de los
derechos fundamentales; así también, la motivación del juicio de fiabilidad
probatoria, debiendo dejar constancia del cumplimiento de las garantías procesales
en la obtención de la fuente de prueba.
Así también, cuando el Juez advierta la falta de algún requisito o criterio para la
práctica de diligencias o actuaciones procesales, este hecho deberá ser consignado,
seguidamente, la motivación de la interpretación del medio probatorio, debiendo
describir el contenido relevante del medio de prueba, no una transcripción, no se
debe transcribir y luego interpretar, se trata de un trabajo innecesario
(Talavera,2011).

Seguidamente, se debe motivar el juicio de verosimilitud, la que debe incluir una


expresa mención al resultado de dicho examen, así como una explícita indicación del
criterio de análisis empleado (máximas de la experiencia); y, finalmente, la
motivación de la comparación entre los hechos probados con respecto a los hechos
alegados; y, finalmente, la motivación de la valoración conjunta, por la cual, debe
consignarse el valor probatorio de cada prueba que tenga por objeto el mismo hecho,
y después prioridad, confrontación, combinación, exclusión, a considerar las diversas
posibles versiones sobre este mismo hecho, para terminar escogiendo aquella que
aparezca confirmada por un mayor grado de atendibilidad (Talavera, 2011).

2.2.1.10.8. La construcción jurídica en la sentencia


El juzgador debe motivar su resolución en los fundamentos de derecho, debiendo
incluir una explicación lógica acerca del razonamiento realizado a través del cual ha
llegado a la certeza de que, estos hechos que anteriormente ha declarado probados
son los que en realidad han ocurrido, exponiendo y valorando la prueba en la que se
apoya, haciendo constar esas circunstancias en un fundamento jurídico y en otro
fundamento lo relativo a la participación del acusado en el hecho punible. Por tanto,
haciendo un extracto de lo anterior:  Que solo la sentencia tiene la virtualidad de
declarar la culpabilidad.  Que la sentencia puede ser condenatoria o absolutoria. 
Que la culpabilidad tiene que quedar determinada y debe ser jurídicamente
construida.  Que esa construcción implica haber adquirido un grado de certeza
máximo (In dubio pro reo).  Que el imputado no tiene que construir su inocencia.
 Que el imputado no puede ser tratado como culpable. 6  Que no pueden existir
ficciones de culpabilidad, es decir, que no necesitan ser probadas(Ramirez Bejerano)
2009.
Esta motivación ha sido acogida por el art. 394, inciso 3 del Nuevo Código Procesal
Penal, el que establece: “La motivación clara, lógica y completa de cada uno de los
hechos y circunstancias que se dan por probadas o improbadas, y la valoración de la
prueba que la sustenta, con indicación del razonamiento que la justifique”
(Sánchez,2013).

2.2.1.10.9. Motivación del razonamiento judicial

razonamiento jurídico, por tanto, lo que intenta es encontrar una solución ante un
conflicto surgido, por medio de las aplicaciones de unas normas o leyes, que esté, por
supuesto, debidamente justificada y argumentada para así evitar desacuerdos.
A la hora de poder llevar a cabo el razonamiento jurídico, los expertos en la materia
coinciden en subrayar la importancia de prestarle atención y de hacer uso de ciertos
principios. En concreto, se refieren tanto a los principios de la base ideológica y valorativa
de lo que es el orden jurídico como a los que están recogidos de manera expresa en las
normas y leyes.
Además de todo eso, cuando se va a desarrollar el citado razonamiento y hacer empleo
de los principios y de las reglas, es importante tener en consideración los siguientes
aspectos:
-Las reglas jurídicas existentes son objeto de interpretación mientras que los principios
jurídicos lo son únicamente de ponderación.
-
ESTRUCTURA
Para llegar a una conclusión jurídica se debe haber realizado un juicio de valor, para
lo cual requiere de tres pasos: formulación del problema, análisis y conclusión.

En la lógica por ejemplo se requiere de la formulación del problema después el


análisis y luego la conclusión. En las ciencias, Se inicia con la formulación del
problema, el planteamiento de las hipótesis y finaliza con la verificación.

De la misma manera en las decisiones legales, Hay una estructura tripartita para la
elaboración de decisiones: su parte expositiva, considerativa y resolutiva. Siempre
,se le antepone una palabra a cada parte: VISTOS (parte expositiva en la que se
plantea el estado del proceso y cuál es el problema a resolver), CONSIDERANDO
(parte considerativa, en la que se trata el problema de forma exhaustiva) y SE
RESUELVE (Es la parte donde el juez haciendo uso de su razonamiento llega a una
conclusión ).

La parte expositiva, Se expone en detalle todo el planteamiento del problema


teniendo en cuenta los hechos ocurridos materia de investigación.

La parte considerativa, Abarca el “análisis”, “consideraciones sobre hechos y sobre


derecho aplicable”, de los hechos ocurridos, “razonamiento”, Lo importante es que
se valore los medios probatorios para un mejor juicio razonado de los hechos ocurridos
materia de imputación, para un sano juicio fundamentado se debe tener en cuenta
la norma jurídica.

El contenido mínimo de una resolución de control es el siguiente:


a. Materia: Aquí se plantea la imputación y en quién recae, Analizando el
problema en la cual el Juez va a decidir.

b. Antecedentes procesales: Aquí se determinan los antecedentes del supuesto


delito, se verifican los elementos probatorios se han presentado.

c. Motivación sobre hechos: Se analizan las razones que conllevan valorar los
elementos probatorios para establecer los hechos ocurridos.

d. Motivación sobre derecho: Se valen de las normas jurídicas para valorar y


determinar si es delito o falta.
e. Decisión. Es el veredicto final o pena tipificado de acuerdo a la norma jurídica,
esto se basará en los siguientes puntos:

• Se determina el problema del caso

• Se individualiza la participación de cada uno de los imputados o


intervinientes en el hecho ocurrido.

• Debemos comprobar que no existan vicios procesales.

• Se describen los hechos mas resaltantes materia de investigación.

• Se han acatado las pruebas relevantes.

• Se ha valorado la prueba relevante para el caso.

• Se describe correctamente la fundamentación jurídica de la pretensión.

• Se elabora un resumen de la argumentación base para la decisión final.


• La parte resolutoria, señala de manera precisa la decisión correspondiente.

• La resolución debe respeta el principio de congruencia.

Parte resolutiva
Chanamé (2009) expone: la sentencia debe contener requisitos esenciales:

1. Nombre del juzgado, lugar y fecha en la que se ha dictado, nombre de los jueces
y las partes, y los datos personales del acusado;
2. Descripción de los hechos y los detalles de la acusacion, las pretensiones
introducidas en el juicio y la pretensión de la defensa del acusado;
3. La m o t i v a c i ó n r a z o n a d a de hechos de manera clara, entendible, y
circunstancias que la sustenta.
4. Los fundamentos de derecho, con razones legales, , jurisprudenciales, y doctrinales
que fundamentan el hecho materia de investigación.
5. La parte resolutiva, donde se fundamenta la acusación dada o absolución emitida
por el Juez.
6. Firmas del Juez .
Asimismo, precisando su posición exponer:
La selección normativa; que consiste en la selección de la norma la que ha de
aplicarse al caso concreto.

Análisis de los hechos; que comprende los elementos fácticos, a los cuales se
aplicará la norma.

La subsunción de los hechos a la norma; que consiste en un acople espontáneo de


los hechos (facta) a la norma (in jure). Lo cual ha generado que algunos tratadistas
sostengan, conciban y apliquen a la elaboración de la sentencia, el símil del
silogismo; como aquel proceso lógico jurídico, donde la premisa mayor está
representada por la norma, mientras que la premisa menor por los hechos alegados y
vinculados al proceso.

La conclusión, que vendría a ser la subsunción, en donde el juez, con su autoridad,


se pronuncia, manifestando que tal o cual hecho se encuentran subsumido en la ley.

Conforme se expone, con este proceso, el juez no haría más que conjugar el precepto
legal con los hechos y las peticiones de las partes, armonizando la voluntad del
legislador con la voluntad del juez.

Para éste autor la formulación externa de la sentencia debe evidenciar, que el juez ha
tenido en cuenta no solo los hechos, sino también, el derecho, por consiguiente
deberá considerar:

a. Conocer los hechos afirmados y su soporte legal. Esto es cuando el juez da


curso al proceso en base a la petición del actor, en este preciso momento
él es todo un ignorante de los hechos, pues si los conociera estaría asumiendo
la función de testigo; pero en la medida en que vayan haciendo su ingreso las
pruebas al proceso, el juez se torna conocedor de los hechos, conocimiento que
es suministrado por los elementos probatorios.

b. Comprobar la realización de la ritualidad procesal. Esto es, si el proceso está


constituido por una serie de actos, puestos por las partes y por el Juez, estos
deben estar sometidos a las ritualidades procesales, cuya constatación
corresponde al juez, ello con el fin de que se respeten y se garanticen los
derechos de las partes en contienda.
c. Hacer el análisis crítico de las pruebas alegadas por las partes. Esto con el fin
de constatar la existencia de los hechos. No es suficiente, ni basta allegar al
proceso los elementos probatorios, sino que se hace necesario que el juez lleve
a cabo la función valorativa de los mismos, para lo cual debe realizar una
operación de percepción, de representación, ya directa, ya indirecta, y por
último, una operación de razonamiento de todo el caudal probatorio en base a
la llamada “sana crítica” con cuyo giro se requiere significar todo ese
cúmulo de conocimientos de diversa índole: antropológicos, sociológicos,
empíricos, susceptibles de engrosar el patrimonio cultural de una persona.

d. Interpretar la presunta normativa que subsume los hechos afirmados, y


probados (demostrados).

e. Proferir el fallo judicial (juicio) que supone la subsunción de los hechos en la


norma y decidir con autoridad de causa (p.11- 12).

Sin embargo, se deja expresamente, que el punto donde no se comparte, es que la


sentencia sea un silogismo, porque la sentencia es más que un silogismo, porque la
realidad de la administración de justicia es compleja, tan compleja como la realidad
de donde emergen los conflictos, donde el juzgador tiene que elucubrar
profundamente, hacer uso de un juicio lógico contextualizado.

Por lo expuesto, hay consenso respecto a la sentencia; sobre su estructura e inclusive


respecto a la denominación de sus partes; pero lo más importante es el contenido que
debe evidenciarse en cada uno de los componentes.

Cerrando, sobre la redacción de las resoluciones judiciales, entre ellas la sentencia;


para Cubas (2003), tiene que observarse las formalidades previstas en las normas del
artículo 119 y siguientes del Código Procesal Civil.

En este sentido no corresponde usar abreviaturas, las fechas y cantidades se escriben


con letras. También precisa, que mediante la sentencia el Juez pone fin a la instancia
al proceso, en definitiva, pronunciándose en decisión expresa, precisa y motivada
sobre la cuestión controvertida declarando el derecho de las partes. La sentencia
exigirá en su redacción la separación de sus partes expositiva, considerativa y
resolutiva y llevarán firma completa del Juez o Jueces si es órgano colegiado.

En cuanto a la denominación y contenido de los componentes de la estructura de la


sentencia, en este trabajo se va conservar fielmente lo que expone el autor citado:
1. PARTE EXPOSITIVA. Es el relato del hecho o hechos que hubieran
dado lugar a la formación de la causa y que son materia de la acusación,
además contiene los nombres y alías de los procesados y nombres de los
agraviados.

2. PARTE CONSIDERATIVA. Es el “análisis y síntesis sobre la


interpretación de las cuestiones de hecho hechas a la luz del discernimiento
jurídico y demás conocimientos técnicos aplicables al caso”. Es la parte de
la sentencia donde el Juez Penal o la Sala Penal desarrolla toda su
apreciación sobre lo actuado, sopesando los elementos probatorios y
aplicando los principios que garantizan la administración de justicia para
determinar si el acusado es culpable o inocente de los hechos que se le
imputan. El juicio del juzgador estará cimentado en las leyes penales.
En esta parte nos encontramos frente a la motivación de la sentencia,
la misma que debe guardar coherencia con un razonamiento claro, integral
y justo, lo cual constituye una garantía de rango constitucional.

3. PARTE RESOLUTIVA O FALLO. Es la decisión del Juez o Sala Penal


sobre el acusado. De ser condenatoria, el juzgador señalará una pena
dentro de los parámetros que se establece en el tipo penal y en los criterios
de aplicación de la pena establecidos en los artículos 21, 22, 45 y 46 del
Código penal, indicando además la suma de la reparación civil que deberá
pagar el sentenciado y/o el tercero civil responsable a la parte civil. De ser
el caso, se indicará la inhabilitación o interdicción aplicable.
En caso de absolución, la parte resolutiva se limita a declarar absuelto
al acusado, ordenándose la libertad, de encontrarse sufriendo
detención y la anulación de antecedentes penales y judiciales que
se hubieran generado
(Cubas, 2003, p. 457 - 458).
2.2.1.10.11. Parámetros de la sentencia de primera instancia

2.2.1.10.11.1. De la parte expositiva


Es la parte introductoria de la sentencia penal. Contiene el encabezamiento, el asunto,
el objeto procesal y la postura de la defensa (San Martin, 2006).

2.2.1.10.11.1.1. Encabezamiento
Es la parte introductoria de la sentencia que contiene los datos básicos formales de
ubicación del expediente y la resolución, así como del procesado, en la cual se
detalla: a) Lugar y fecha del fallo; b) el número de orden de la resolución; c)
Indicación del delito y del agraviado, así como las generales de ley del acusado, vale
decir, sus nombres y apellidos completos, apodo, sobrenombre y sus datos
personales, tales como su edad, estado civil, profesión, etc.; d) la mención del órgano
jurisdiccional que expide la sentencia; e) el nombre del magistrado
ponente o Director de Debates y de los demás jueces (Talavera, 2011).

2.2.1.10.11.1.2. Asunto
Es el planteamiento del problema a resolver que cuenta con varias aristas, aspectos,
componentes o imputaciones, se formularan tantos planteamientos como decisiones
vayan a formularse (León, 2008).

2.2.1.10.11.1.3. Objeto del proceso


Es el conjunto de presupuestos del cual decide el Juez, que, suponen la aplicación del
principio acusatorio como garantía la inmutabilidad de la acusación fiscal y su
titularidad de la acción y pretensión penal (San Martín, 2006).

Por lo que la acusación fiscal les el objeto del proceso, llevado a cabo por el
Ministerio Público, el cual tiene como efecto la apertura de la etapa del juzgamiento
y la actividad decisoria (San Martín, 2006).

2.2.1.10.11.1.3.1. Hechos acusados

Son los hechos acusatorios del Ministerio Público, determinado por el fiscal en la
acusación, los que son vinculantes para el Juzgador e impiden que este juzgue por
hechos no contenidos en la acusación (San Martín, 2006).

2.2.1.10.11.1.3.2 Calificación jurídica


Es la que determina el fiscal a través Ministerio Público teniendo en cuenta lo
tipificado en el código Penal del, Siendo el juez quien determinara la decisión previaa
comprobación del hecho en el supuesto jurídico calificado o de negar su subsunción,
no pudiendo efectuar una calificación alternativa, salvo en los casos previstos en el
Código Adjetivo, respetando el derecho de defensa del procesado (San Martín, 2006).

2.2.1.10.11.1.3.3 Pretensión punitiva


Es el pedido que realiza el Ministerio Público respecto de la aplicación de la pena
para el acusado, su ejercicio supone la petición del ejercicio del Ius Puniendi del
Estado (Vásquez, 2000).

2.2.1.10.11.1.3.4. Pretensión civil


Es el pedido que realiza el Ministerio Público o la parte civil debidamente constituida
sobre la aplicación de la reparación civil que deberá pagar el imputado, la cual no
forma parte del principio acusatorio, pero dada su naturaleza civil, su cumplimiento
implica el respeto del principio de congruencia civil, que es el equivalente al
principio de correlación, por cuanto el Juzgador está vinculado por el tope máximo
fijado por el Ministerio Público o el actor civil (Vásquez, 2000).

2.2.1.10.11.1.3.5. Postura de la defensa


Es la tesis o teoría del caso que tiene la defensa respecto de los hechos acusados, así
como su calificación jurídica y pretensión exculpante o atenuante (Cobo, 1999).

2.2.1.10.11.2. De la parte considerativa


Es la parte que contiene el análisis del asunto, importando la valoración de los
medios probatorios para el establecimiento de la ocurrencia o no de los hechos
materia de imputación y las razones jurídicas aplicables a dichos hechos establecidos
(León, 2008).

Esta parte de la decisión también puede adoptar nombres tales como “análisis”,
“consideraciones sobre hechos y sobre derecho aplicable”, “razonamiento”, entre
otros (León, 2008).
Para Cortez (citado por San Martín, 2006) la parte considerativa contiene la
construcción lógica de la sentencia, la que sirve para determinar si el acusado es o no
responsable penal, si su conducta merece pena o no, imponiendo al Juez un doble
juicio: histórico, tendente a establecer si un determinado hecho o conjunto de hechos
ha existido o no con anterioridad al proceso; y jurídico, que tienden a concluir si el
hecho que históricamente sucedió puede ser calificado como delito y merece pena

Según la teoría revisada, la parte considerativa debe contener:

2.2.1.10.11.2.1. Motivación de los hechos (Valoración probatoria)


Para San Martín (2006), la valoración probatoria consiste en la determinación que
debe hacer el órgano jurisdiccional de si los hechos objeto de la acusación fiscal se
dieron o no en el pasado, estando el Juzgador vinculado al hecho acusado, por tanto
su conclusión no puede ser distinta que afirmar o negar su producción o
acaecimiento.
La comprobación del juicio histórico determina la entrada al juicio jurídico, siendo
que si el juicio histórico es negativo deberá absolverse al imputado, ello en
aplicación del principio de correlación entre acusación y sentencia derivado del
principio acusatorio y del derecho de defensa; no pudiendo el Juzgador tampoco
calificar el delito no precisado en dicha acusación ni agravante superior a la
establecida, puesto que infringiría el principio de contradicción y vulneraría el
derecho de defensa (San Martín, 2006).
De acuerdo a las fuentes revisadas, una adecuada valoración probatoria debe
contener:

2.2.1.10.11.2.1.1. Valoración de acuerdo a la sana crítica


Apreciar de acuerdo a la sana crítica significa establecer “cuánto vale la prueba”, es
decir, qué grado de verosimilitud presenta la prueba en concordancia con los hechos
del proceso (San Martin, 2006).

A decir de Oberg (citado por Gonzales ,2006) expone la ‘sana crítica’, es aquella que
nos conduce al descubrimiento de la verdad por los medios que aconseja la razón y el
criterio racional, puesto en juicio. De acuerdo con su acepción gramatical puede
decirse que es el analizar sinceramente y sin malicia las opiniones expuestas acerca
de cualquier asunto.

Para Falcón (1990) la “sana crítica” es el resumen final de los sistemas de


apreciación probatoria (prueba arbitraria, prueba libre, prueba tasada, prueba
científica, prueba lógica) dentro de dicha concepción está incluida la prueba tasada y
cualquier decisión a que se llegue que requiera un razonamiento libre de vicios,
perfectamente argumentado y sostenido de modo coherente sobre medios de prueba
con los que se ha llegado por las mejores vías posibles conocidas a la fijación de los
hechos, pues este es el fin de la apreciación.

Por otro lado, (Couture,1958) expresa que la sana crítica está integrada por reglas del
correcto entendimiento humano, contingentes y variables, con relación a la
experiencia del tiempo y lugar, pero que son estables y permanentes en cuanto a los
principios lógicos en que debe apoyarse la sentencia.

Además, como afirma el autor, el sistema de la sana crítica está basado en la


aplicación de dos principios: a) El Juez debe actuar de acuerdo a las reglas de la
lógica. b) El Juez debe actuar aplicando las reglas de la experiencia, otras posiciones
admiten solo la lógica como integrante de las reglas de la sana crítica, precisándola
algunas veces como lógica crítica o es una consecuencia de un razonamiento integral
en el cual se conectan los hechos y las pruebas aportadas para llegar al derecho
aplicable, resultando de esta manera que la apreciación de la prueba conforme las
reglas de la sana crítica implica que es lo aconsejado por el buen sentido, aplicado
con recto criterio, extraídas de la lógica, basadas en la ciencia, la experiencia y en la
observación de todos los elementos aportados al proceso (Couture, 1958).

Así también, nos dice que el valor jurídico de toda prueba depende, en definitiva, del
grado de verdad proporcionado por la concordancia que (desde el doble punto de
vista de su posibilidad y de su existencia) debe mediar entre la fuente y el objeto
probatorio o, finalmente que consisten en la aplicación de la lógica y la experiencia
(Couture, 1958).

Al respecto, Falcón (1990) nos dice que en resumen, la sana crítica constituye un
método científico, compuesto por nueve reglas destinadas a la actividad operativa del
Juez que en síntesis dicen: a) Solamente se prueban los hechos alegados en tiempo y
forma; b) Los “hechos” por probar deben ser controvertidos; c) Corresponde aplicar
primero las reglas de la prueba tasada, sean tales o provengan de la prueba legal; d)
Es necesario ordenar los medios de prueba en una graduación estática que nos
presente los que son más fiables que otros y tiene que ser más certeros: documental,
informativa, confesional, pericial, testimonial; e) En función de los hechos de la
causa hay que buscar por medio de la faz dinámica de la prueba, los medios idóneos
correspondientes a cada hecho; f) Para poder tener la comprensión final del conflicto,
hay que examinar los medios en su conjunto y coordinarlos con los hechos a fin de
obtener una solución única; g) Cuando los restantes elementos no sean suficientes
hay que aplicar las presunciones; h) Como última vía para determinar los hechos,
resultarán útiles las reglas de la carga de la prueba; i) Finalmente habrá que narrar el
desarrollo de la investigación y de las conclusiones sobre el conflicto de modo tal
que el relato demuestre que se ha adquirido la certeza en virtud de un procedimiento
racional controlable, donde también se podrá utilizar como elemento corroborante la
conducta de las partes en el proceso.

2.2.1.10.11.2.1.2. Valoración de acuerdo a la lógica


La valoración lógica presupone un marco regulativo de la sana crítica al cual
corresponde proponerle las reglas de correspondencia adecuadas con la realidad, por
un lado, y por otro como articulación genérica en el desenvolvimiento de los juicios
(Falcón, 1990).

El juicio lógico se sustenta en la validez formal del juicio de valor contenido en la


resolución que emita el Juez, permitiendo evaluar si el razonamiento es formalmente
correcto, es decir, si no se ha transgredido alguna ley del pensar (Falcón, 1990).

Sus características son su validez universal y la legitimación formal que le otorga a la


valoración efectuada por el Juez , sobre el particular Monroy (1996) indica que se
clasifica la lógica en analítica y dialéctica, la primera plantea que, en un
razonamiento, partiendo de afirmaciones necesariamente verdaderas se llega a
conclusiones que también deben ser verdaderas, sobre la segunda precisa que estudia
aquellos métodos que conducen el razonamiento en las discusiones o controversias,
buscando persuadir, convencer o cuestionar la afirmación sostenida por el contrario.

Según el autor, las reglas y principios básicos del juicio lógico son:
2.2.1.10.11.2.1.2.1. El Principio de Contradicción
El cual nos dice que no se puede afirmar y negar una misma cosa respecto de algo al
mismo tiempo. Se trata entonces, que dos enunciados que se oponen
contradictoriamente no pueden ser ambos a la vez verdaderos. (Monroy, 1996).

2.2.1.10.11.2.1.2.2. El Principio del tercio excluido


El mismo establece que dos proposiciones que se oponen contradictoriamente no
pueden ser ambas falsas. Así tenemos que si es verdadero que X es A, es falso que X
sea no A. Entonces se sostiene la verdad de una proposición y la falsedad de la otra
proposición (Monroy, 1996).

2.2.1.10.11.2.1.2.3. Principio de identidad


Sobre este principio dice que en el proceso de raciocinio preciso todo concepto y
juicio debe ser idéntico a sí mismo...Es, pues, inadmisible cambiar arbitrariamente
una idea por otra, de hacerlo, se incurre en suplantación de concepto o de
suplantación de tesis (Monroy, 1996).

2.2.1.10.11.2.1.2.4. Principio de razón suficiente


El mismo es enunciado de la siguiente manera: "nada es sin que haya una razón para
que sea o sin que haya una razón que explique que sea". Esto es. "Ningún hecho
puede ser verdadero o existente y ninguna enunciación verdadera sin que haya una
razón suficiente para que sea así y no de otro modo", se considera a este principio
como un medio de control de la aplicación de la libre apreciación de la prueba pues
se exige una adecuada motivación del juicio de valor que justifique la decisión del
Juez (Monroy, 1996).

2.2.1.10.11.2.1.3. Valoración de acuerdo a los conocimientos científicos


Esta valoración es aplicable a la denominada “prueba científica”, la cual es por lo
general por vía pericial, aparece en virtud de la labor de profesionales (médicos,
contadores, psicólogos, matemáticos, especialistas en diversas ramas, como
mercados, estadísticas, etc.) (Monroy, 1996).

La ciencia suele utilizarse como instrumento para influenciar al Juez aprovechando el


mito de la certeza y de la verdad que está conectado con las concepciones
tradicionales, groseras y acríticas, de la ciencia (De Santo, 1992).
En consecuencia, se hace un uso epistémico, es decir que las pruebas científicas
están dirigidas a aportar al Juez elementos de conocimiento de los hechos que se
sustraen a la ciencia común de que dispone, por lo que se refiere a la valoración de
las pruebas, la adopción de la perspectiva racionalista que aquí se sigue no implica la
negación de la libertad y de la discrecionalidad en la valoración del Juez , que
representa el núcleo del principio de la libre convicción, pero implica que el Juez
efectúe sus valoraciones según una discrecionalidad guiada por las reglas de la
ciencia, de la lógica y de la argumentación racional. Por decirlo así, el principio de la
libre convicción ha liberado al Juez de las reglas de la prueba legal, pero no lo ha
desvinculado de las reglas de la razón (De Santo, 1992).

Es necesario distinguir cuidadosamente cuál es el tipo de ciencia del que se trata,


cuál es el estatuto epistemológico de los conocimientos que suministra, cuál es su
grado de atendibilidad, y cuál es el grado de confirmación que pueden aportar al
enunciado de hecho sobre el que se despliega la decisión del Juez , esta diversidad de
niveles de atendibilidad de los conocimientos científicos que se realizan, con fines
probatorios, durante el proceso implica una consecuencia importante: que solamente
en casos particulares la prueba científica es capaz, por sí sola, de atribuirle a un
enunciado de hecho un grado de probabilidad capaz de satisfacer el estándar de
prueba que tiene vigor en esa clase de proceso, en consecuencia, debemos admitir
que la prueba científica puede acompañarse o integrarse con otras pruebas, con
pruebas "ordinarias", que pueden contribuir a fundar conclusiones válidas sobre el
hecho que debe probarse (De Santo, 1992).

Así, por ejemplo, es muy posible que una prueba del ADN sea el único elemento de
prueba para decidir sobre la identificación de un sujeto, dado que esta prueba alcanza
valores de probabilidad del orden del 98 o 99%, sin embargo, también existen
pruebas científicas estadísticas muy bajas, del orden del 1 o 2%, ciertamente, por sí
solos, estos datos no son suficientes para demostrar un nexo de causalidad específica
entre un hecho ilícito y el daño provocado a un sujeto, y es bastante dudoso que
puedan dotar a la prueba de un nexo de causalidad general (en casos en los que un
nexo de esta naturaleza es objeto de prueba), de esta forma, resulta evidente que, si
se quiere alcanzar el estándar de prueba que debemos satisfacer para demostrar el
nexo causal entre el hecho ilícito y el daño causado, y para afirmar que el enunciado
correspondiente pueda considerarse como "verdadero", estos datos deben integrarse
con pruebas de otro género, en sustancia, las pruebas científicas son muy útiles, pero
raramente resultan decisivas y suficientes para determinar la decisión sobre los
hechos (De Santo, 1992).

En el Proceso Penal, en el que debemos satisfacer el estándar de la prueba más allá


de toda duda razonable, debemos resignarnos ante el hecho de que sólo en unos
pocos casos la prueba científica aporta informaciones con un grado de probabilidad
suficientemente alto como para lograr la certeza o la casi-certeza del hecho, por lo
general el estándar de la prueba más allá de toda duda razonable solamente puede
superarse cuando la conexión entre un hecho (causa) y otro hecho (efecto) está
"recubierta" por una ley de naturaleza deductiva o, al menos, casi-deductiva, cuya
aplicación permita otorgar un carácter de certeza o de casi-certeza al enunciado que
se refiere a dicha conexión (De Santo, 1992).

2.2.1.10.11.2.1.4. Valoración de acuerdo a las máximas de la experiencia


La valoración de acuerdo a las máximas de la experiencia supone el uso de la
experiencia para determinar la valides y existencia de los hechos, siendo que, esta
experiencia se refiere la apreciación como objetivación social de ciertos
conocimientos comunes dentro de un ámbito determinado, en un tiempo específico,
pero también, a la resultante de la tarea específica realizada, así el Juez puede
apreciar claramente la peligrosidad de un vehículo que se desplaza a una velocidad
incorrecta hacia el lugar donde está transitando; incluso puede usar al respecto reglas
jurídicas que la experiencia ha volcado en el Código de tránsito (Devis, 2002).

A decir de Oberg (citado por Gonzales ,2006) las máximas de la experiencia: 1° Son
juicios, esto es, valoraciones que no están referidas a los hechos que son materia del
proceso, sino que poseen un contenido general. Tienen un valor propio e
independiente, lo que permite darle a la valoración un carácter lógico; 2° Estos
juicios tienen vida propia, se generan de hechos particulares y reiterativos, se nutren
de la vida en sociedad, aflorando por el proceso inductivo del Juez que los aplica; 3°
No nacen ni fenecen con los hechos, sino que se prolongan más allá de los mismos, y
van a tener validez para otros nuevos; 4° Son razones inductivas acreditadas en la
regularidad o normalidad de la vida, y, por lo mismo, implican una regla, susceptible
de ser utilizada por el Juez para un hecho similar; 5° Las máximas carecen de
universalidad. Están restringidas al medio físico en que actúa el Juez, puesto que
ellas nacen de las relaciones de la vida y comprenden todo lo que el Juez tenga como
experiencia propia.

La experiencia también viene del modo común y normal del desarrollo de los
sucesos, como ellos acostumbran a ocurrir, de manera que si se sostuviera que hay
una variación en estos sucesos, habría que probarlo, por ejemplo, la experiencia
indica que la gente no “lee” la mente de otro; si ello fuese alegado en algún caso,
debería probarse, de esta manera el curso natural de las cosas que el Juez aprecia
está ayudado por las reglas de la carga de la prueba, tampoco el Juez necesita un
psicólogo permanente para advertir si un testigo manifiestamente miente, por lo que
la experiencia judicial le permite, a través del interrogatorio y en función de los
demás elementos colectados en el proceso, determinar la contradicción, la falta de
voluntad para declarar, el ocultamiento, etc. (Devis, 2002).

La experiencia según Paredes (citado por en Devis ,2002) el número de conclusiones


extraídas de una serie de percepciones singulares pertenecientes a los más variados
campos del conocimiento humano, tomadas por el Juez como suficientes para asignar
un cierto valor a los medios probatorios. Son reglas contingentes, variables en el
tiempo y en el espacio, y están encaminadas a argumentar el valor probatorio
asignado a cada medio probatorio en particular como, primordialmente, a su conjunto.

Asimismo, Devis (2002) informa un conjunto de reglas para orientar el criterio del
Juzgador directamente (cuando son de conocimiento general y no requieren, por lo
tanto, que se les explique, ni que se dictamine si tiene aplicación al caso concreto) o
indirectamente a través de las explicaciones que le den los expertos o peritos que
conceptúan sobre los hechos del proceso (cuando se requieren conocimientos
especiales), es decir, esas reglas o máximas, le sirven al Juez para rechazar las
afirmaciones del testigo, o la confesión de la parte, o lo relatado en un documento, o
las conclusiones que se pretende obtener de los indicios, cuando advierte que hay
contradicción con ellas, ya porque las conozca y sean comunes, o porque se las
suministre el perito técnico.

A manera de ejemplo de regla de experiencia tenemos al comportamiento de las


partes en el proceso, en tanto la falta a los deberes de veracidad, lealtad, buena fe y
probidad es razón o argumento en contra de la parte infractora y a favor de la otra
parte, pues se entiende que dicha transgresión se produce ante la necesidad de ocultar
la verdad de los hechos que son desfavorables al infractor. Esta regla de experiencia
ha sido legislada en el Artículo 282 del Código Procesal Civil, el cual prescribe: "El
Juez puede extraer conclusiones en contra de los intereses de las partes atendiendo
a la conducta que éstas asumen en el proceso, particularmente cuando se manifiesta
notoriamente en la falta de cooperación para lograr la finalidad de los Medios
probatorios, o con otras actitudes de obstrucción".

2.2.1.10.11.2.2. Motivación del derecho (Fundamentación jurídica)


La fundamentación jurídica o juicio jurídico es el análisis de las cuestiones jurídicas,
posterior al juicio histórico o la valoración probatoria sea positiva, consiste en la
subsunción del hecho en un tipo penal concreto, debiendo enfocarse la culpabilidad o
imputación personal y analizar si se presenta una causal de exclusión de culpabilidad
o de exculpación, determinar la existencia de atenuantes especiales y genéricas, así
como de agravantes genéricas, para luego ingresar al punto de la individualización de
la pena (San Martín, 2006).

Los fundamentos de derecho deberán contener con precisión las razones legales,
jurisprudenciales o doctrinales que sirvan para calificar jurídicamente los hechos
y sus circunstancias (interpretación legal, jurisprudencial y doctrinal), así como para
fundar su decisión (Talavera, 2011).

Un adecuado juicio jurídico penal debe contener la tipicidad de la tipicidad (sin


determinación de la autoría o grado de comisión), la antijuricidad, culpabilidad,
determinación de la pena, y la determinación de la reparación civil.

i) Aplicación de la tipicidad. Para establecer la tipicidad, debe establecerse:


. Determinación del tipo penal aplicable. Según Nieto García (2000), consiste es
encontrar la norma o bloque normativo determinado (específico) del caso concreto, sin
embargo, teniendo en cuenta el principio de correlación entre acusación y sentencia, el
órgano jurisdiccional podrá desvincularse de los términos de la acusación fiscal, en tanto
respete los hechos ciertos que son objeto de acusación fiscal, sin que cambie el bien
jurídico protegido por el delito acusado y siempre que respete el derecho de defensa y el
principio contradictorio (San Martin, 2006).

. Determinación de la tipicidad objetiva. Según la teoría revisada, para determinar la


tipicidad objetiva del tipo pena aplicable, se sugiere la comprobación de los siguientes
elementos, estos son: i) El verbo rector; ii) Los sujetos; iii) Bien jurídico; iv) Elementos
normativos; v) Elementos descriptivos (Plascencia, 2004).

. Determinación de la tipicidad subjetiva. Mir Puig (1990), considera que la tipicidad


subjetiva, la conforman los elementos subjetivos del tipo que se haya constituida siempre
por la voluntad, dirigida al resultado (en los delitos dolosos de resultado), o bien, a una
sola conducta (en los delitos imprudentes y en los de mera actividad), y a veces por
elementos subjetivos específicos (Plascencia, 2004).

. Determinación de la Imputación objetiva. Esta teoría implica que, para determinar la


vinculación entre la acción y el resultado; ii) Realización del riesgo en el resultado. Se
debe verificar si en efecto, este riesgo no permitido creado, se ha producido efectivamente
en el resultado, es decir, el resultado debe ser la proyección misma del riesgo no permitido
realizado; iii) Ámbito de protección de la norma, por la que una conducta imprudente no
es imputable objetivamente si el resultado de esta conducta no es el resultado que la norma
infringida (expresada en el deber objetivo de cuidado) busca proteger ; iv) El principio de
confianza, por la que la acción imprudente no puede imputarse a una persona cuando esta
imprudencia ha sido determinada por el actuar imprudente de un tercero; v) Imputación
a la víctima, por lo que, al igual que el principio de confianza niega la imputación de la
conducta si es que la víctima con su comportamiento, contribuye de manera decisiva a la
realización del riesgo no permitido, y este no se realiza en el resultado (Villavicencio,
2010).

ii) Determinación de la antijuricidad. Este juicio es el siguiente paso después de


comprobada la tipicidad con el juicio de tipicidad, y consiste en indagar si concurre alguna
norma permisiva, alguno causa de justificación, es decir, la comprobación de sus
elementos objetivos y además, la comprobación del conocimiento de los elementos
objetivos de la causa de justificación (Bacigalupo, 1999). Para determinarla, se requiere:

. Determinación de la lesividad. Al respecto, el Tribunal Constitucional ha señalado que,


si bien es cierto, la contradicción del comportamiento del agente con la norma preceptiva,
y cumpliendo la norma penal prohibitiva, presupone la antijuricidad formal, sin embargo,
es necesario establecerse la antijuricidad material (Perú. Corte Suprema, exp.15/22 –
2003).

. La legítima defensa. Es un caso especial de estado de necesidad, que tiene se


justificación en la protección del bien del agredido respecto del interés por la protección
del bien del agresor, fundamentándose en la injusticia de la agresión, lesionado por aquel
o por un tercero que lo defiende (Zaffaroni, 2002).

. Estado de necesidad. Es la causa de justificación que consiste en la preponderancia del


bien jurídicamente más valioso que, en el caso, representa el mal menor, determinando la
exclusión de la antijuricidad por la necesidad de la lesión, unida a la menor significación
del bien sacrificado respecto del salvado, dada la colisión de bienes jurídicos protegidos
(Zaffaroni, 2002).

. Ejercicio legítimo de un deber, cargo o autoridad. Implica el ejercicio del propio


poder de decisión o ejecución correspondiente a un cargo público, debiendo ser: a)
legítimo; b) dado por una autoridad designada legalmente, y; b) actuando dentro de la
esfera de sus atribuciones; e) sin excesos (Zaffaroni, 2002).

. Ejercicio legítimo de un derecho. Esta causa de justificación supone que quien cumple
la ley puede imponer a otro su derecho o exigirle su deber, cosa que no ocurrirá siempre
en el ejercicio de un derecho, pues el límite de los derechos propios está fijado por los
derechos de los demás (Zaffaroni, 2002).

. La obediencia debida. Consiste en el cumplimiento de una orden dada de acuerdo a


derecho dentro de una relación de servicio, significando ello que no habrá defensa
legítima contra el cumplimiento de una orden que no es antijurídica (Zaffaroni, 2002).
iii) Determinación de la culpabilidad. Zaffaroni (2002) considera que es el juicio que
permite vincular en forma personalizada el injusto a su autor, pudiendo establecerse esta
vinculación a decir de Plascencia Villanueva (2004), en la comprobación de los siguientes
elementos: a) la comprobación de la imputabilidad; b) la comprobación de la posibilidad
de conocimiento de la antijuridicidad (error de tipo); c) el miedo insuperable; d) la
imposibilidad de poder actuar de otra manera (exigibilidad).
a) La comprobación de la imputabilidad. La determinación de la imputabilidad se
realiza con un juicio de imputabilidad, la misma que se necesita evaluar si concurren: a)
Como facultad de percibir el carácter delictuoso de su acto, esta misma se relaciona a la
inteligencia (es decir un elemento intelectual) b) facultad de determinarse según esta
apreciación (elemento volitivo), ósea que el autor tiene control de su comportamiento
(Peña Cabrera, 1983).

b) La comprobación de la posibilidad de conocimiento de la antijuridicidad. Esta


idea definida se supone como que será culpable quien sabe o conoce la magnitud
antijurídica de su acción, sabiendo que este conocimiento se trata de personas con
coeficiente normal, en esta clasificación se puede negarse en virtud del “error”, dado
como hecho excluyente del dolo dado que eliminan su comprensión de la criminalidad
del acto, creando una situación de justificación o de inculpabilidad (Zaffaroni, 2002).

c) La comprobación de la ausencia de miedo insuperable. Para justificar el acto de la


inculpabilidad se induce también en la no exigibilidad, la falta de un terror en ausencia
de lucidez o de fuerza de voluntad del sujeto, bastando solo con el temor, que, para ser
importante ha de ser insuperable, o tal vez, el que no hubiera podido resistir el hombre
promedio, es decir, este hombre promedio se ubica en la posición del autor, con sus
conocimientos y facultades (Plascencia, 2004).

d) La comprobación de la no exigibilidad de otra conducta. La no exigibilidad no


significa ausencia de una prohibición; al contrario, la cuestión de la inexigibilidad sólo se
plantea en el ámbito de la culpabilidad y después, por tanto, de que se haya comprobado
la antijuridicidad del hecho (Plascencia, 2004).

iv) Determinación de la pena. La Corte Suprema ha establecido que la determinación e


individualización de la pena debe hacerse en coherencia con los principios de legalidad,
lesividad, culpabilidad y proporcionalidad –artículos II, IV, V, VII y VIII del Título
Preliminar del Código Penal– y bajo la estricta observancia del deber constitucional de
fundamentación de las resoluciones judiciales (Perú. Corte Suprema, Acuerdo Plenario
1-2008/CJ-116), así según:
. La naturaleza de la acción. La Corte Suprema, siguiendo a Peña (1980), señala que
esta circunstancia, puede atenuar o agravar la pena, permite dimensionar la magnitud del
injusto realizado. Para ello se debe apreciar “la potencialidad lesiva de la acción”, es decir,
será del caso apreciar varios aspectos como son el tipo de delito cometido o el modus
operandi empleado por el agente, esto es, la “forma cómo se ha manifestado el hecho”,
además, se tomará en cuenta el efecto psicosocial que aquél produce (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).

. Los medios empleados. La realización del delito se puede ver favorecida con el empleo
de medios idóneos, la naturaleza y efectividad dañosa de su uso pueden comprometer en
mayor o menor medida la seguridad de la víctima o provocar graves estragos. De allí que
Villavicencio (1992) estime que esta circunstancia se refiere igualmente a la magnitud del
injusto, sin embargo, para otros autores, que como Peña Cabrera (1980) señalan que ella
posibilitaba reconocer la peligrosidad del agente (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).

. La importancia de los deberes infringidos. Es una circunstancia relacionada con la


magnitud del injusto, pero que toma en cuenta también la condición personal y social del
agente, resultando coherente que la realización del delito con infracción de deberes
especiales propicie un efecto agravante, en la medida que el desvalor del injusto es mayor,
pues trasciende a la mera afectación o puesta en peligro del bien jurídico, esto es, el agente
compromete, también, obligaciones especiales de orden funcional, profesional o familiar
que tiene que observar (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).

. La extensión de daño o peligro causado. Esta circunstancia indica la cuantía del injusto
en su proyección material sobre el bien jurídico tutelado, así García Cavero (1992) precisa
que tal circunstancia toma como criterio de medición el resultado delictivo (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).

. Las circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión. Se refieren a condiciones


tempo–espaciales que reflejan, principalmente, una dimensión mayor en el injusto, ya que
el agente suele aprovecharlas para facilitar la ejecución del delito (Perú. Corte Suprema,
A.V. 19 – 2001).

. Los móviles y fines. Según este criterio, la motivación y los fines que determinan,
inducen o guían la acción delictiva del agente, influyen, de modo determinante, en la
mayor o menor intensidad de su culpabilidad, esto es, tales circunstancias coadyuvan a
medir el grado de reproche que cabe formular al autor del delito (Perú. Corte Suprema,
A.V. 19 – 2001).

. La unidad o pluralidad de agentes.- La pluralidad de agentes indica un mayor grado


de peligrosidad y de inseguridad para la víctima. La concurrencia de agentes expresa
necesariamente un acuerdo de voluntades que se integran para lo ilícito, siendo que, al
respecto advierte García Cavero (1992), que lo importante para la oportunidad de esta
agravante es que no se le haya considerado ya en la formulación del tipo penal (Perú.
Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).

. La edad, educación, costumbres, situación económica y medio social. Se trata de


circunstancias vinculadas a la capacidad penal del agente y a su mayor o menor
posibilidad para internalizar el mandato normativo, así como para motivarse en él y en
sus exigencias sociales, operando sobre el grado de culpabilidad del agente (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).

. La reparación espontánea que hubiera hecho del daño. Esta circunstancia toma en
cuenta la conducta posterior al delito que exteriorizó el agente, consistente en que el
delincuente repare en lo posible el daño ocasionado por su accionar ilícito, revela una
actitud positiva que debe valorarse favorablemente con un efecto atenuante (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).

. La confesión sincera antes de haber sido descubierto. Esta circunstancia valora un


acto de arrepentimiento posterior al delito, que expresa la voluntad del agente de hacerse
responsable por el ilícito cometido y de asumir plenamente las consecuencias jurídicas
que de ello derivan, lo que resulta en favor del agente, pues, con ella, se rechaza la
frecuente conducta posterior al hecho punible y que se suele orientar hacia el
aseguramiento y la impunidad del infractor (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).

. Los demás antecedentes, condiciones personales y circunstancias que conduzcan al


conocimiento de la personalidad del infractor. Bajo este criterio, el art. 46 considera
una opción innominada y abierta para interpretar y apreciar otras circunstancias, distintas
de las expresamente identificadas por cada inciso precedente de dicho artículo, sin
embargo, para evitar contradecir el principio de legalidad y riesgos de arbitrariedad, la
circunstancia que invoca debe ser equivalente con las reguladas legalmente (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).

v) Determinación de la reparación civil. Según jurisprudencia de la Corte Suprema, la


reparación civil se determina en atención al principio del daño causado (Perú: Corte
Suprema, 7/2004/Lima Norte, 3755–99/Lima), de lo que García Cavero (2009) señala, la
reparación civil debe ceñirse al daño, con independencia del agente o sujeto activo de
dicho daño.

. La proporcionalidad de la afectación al bien vulnerado. La Corte Suprema ha


afirmado que la reparación civil derivada del delito debe guardar proporción con los
bienes jurídicos que se afectan, por lo que su monto, debe guardar relación con el bien
jurídico abstractamente considerado, en una primera valoración, y en una segunda, con la
afectación concreta sobre dicho bien jurídico (Perú. Corte Suprema, R.N. 948-2005
Junín).

. La proporcionalidad con el daño causado. La determinación del monto de la


reparación civil debe corresponderse al daño producido, así, si el delito ha significado la
pérdida de un bien, entonces la reparación civil deberá apuntar a la restitución del bien y,
de no ser esto posible, al pago de su valor. En el caso de otro tipo de daños de carácter
patrimonial (daño emergente o lucro cesante) o no patrimonial (daño moral o daño a la
persona), la reparación civil se traducirá en una indemnización que se corresponda con la
entidad de los daños y perjuicios provocados (Perú. Corte Suprema, R.N. 948-2005
Junín).

. Proporcionalidad con situación del sentenciado. Respecto de este criterio, el juez, al


fijar la indemnización por daños podrá considerar la situación patrimonial del deudor,
atenuándola si fuera equitativo, siempre que el daño no sea imputable a título de dolo, se
trata, sin lugar a dudas, por un lado, de una desviación del principio de la reparación plena
pues la entidad pecuniaria del daño sufrido por la víctima, puede ceder ante la capacidad
patrimonial del deudor paja afrontar ese valor, por otro lado, implica, igualmente, un
apartamiento del principio de que la responsabilidad civil por los daños causados no varía
con arreglo a la culpabilidad del autor (Nuñez, 1981).

. Proporcionalidad con la imprudencia de la víctima (casos culposos). Bajo este


criterio se considera que si la imprudencia sólo hubiere concurrido en la producción del
daño, la indemnización será reducida por el juez, según las circunstancias, conforme lo
previsto en el art. 1973 del Código Civil, así también se determinar según la legislación
de transito prevista en el Decreto Supremo Nº 033-2001-MTC - Reglamento Nacional de
Tránsito, en su art. 276 establece que el peatón goza del beneficio de la duda y de
presunciones a su favor, en tanto no incurra en graves violaciones a las normas de tránsito,
como cruzar la calzada en lugar prohibido.

vi) Aplicación del principio de motivación. Una adecuada motivación de las sentencias
judiciales debe cumplir los siguientes criterios:
. Orden.- El orden racional supone: a) La presentación del problema, b) el análisis del
mismo, y c) el arribo a una conclusión o decisión adecuada (León, 2008).
. Fortaleza.- Consiste en que la decisiones debe estar basadas de acuerdo a los cánones
constitucionales y de la teoría estándar de la argumentación jurídica, en buenas razones
que las fundamenten jurídicamente (León, 2008).

. Razonabilidad. Requiere que tanto la justificación de la sentencia, los fundamentos de


derecho y los fundamentos de hecho de la decisión sean fruto de una aplicación racional
del sistema de fuentes del ordenamiento jurídico; es decir, que en lo jurídico, que la norma
seleccionada sea vigente, válida y adecuada a las circunstancias del caso (Colomer
Hernández, 2000).

. Coherencia. Es un presupuesto de la motivación que va de la mano y en conexión


inescindible con la racionalidad, es decir, se refiere a la necesaria coherencia en sentido
interno que debe existir en los fundamentos de la parte considerativa del fallo, y en un
sentido externo, la coherencia debe entenderse como la logicidad entre motivación y fallo,
y entre la motivación y otras resoluciones ajenas a la propia sentencia (Colomer, 2000).

. Motivación expresa. Consiste en que cuando se emite una sentencia, el juzgador debe
hacer expresas las razones que respaldan el fallo al que se ha llegado, siendo este requisito
indispensable para poder apelar, en el sentido de tener las razones del sentido del fallo y
poder controlar las decisiones del Juez (Colomer Hernández, 2000).

. Motivación clara. Consiste en que cuando se emite una sentencia, el juzgador no solo
debe expresas todas las razones que respaldan el fallo al que se ha llegado, sino que,
además, estas razones deben ser claras, en el sentido de poder entender el sentido del
fallo, así las partes puedan conozcan que es lo que se va a impugnar pues de otra forma
el derecho a la defensa (Colomer, 2000).

. Motivación lógica. Consiste en que la motivación desarrollada no debe contradecirse


entre sí, y con la realidad conocida, debiendo respetarse el principio de “no contradicción”
por el cual se encuentra prohibida la afirmación y negación, a la vez, de un hecho, de un
fundamento jurídico, etc. (Colomer, 2000).

C) Parte resolutiva. Esta parte contiene el pronunciamiento sobre el objeto del proceso
y sobre todos los puntos que hayan sido objeto de la acusación y de la defensa (principio
de exhaustividad de la sentencia), así como de los incidentes que quedaron pendientes en
el curso del juicio oral. La parte del fallo debe ser congruente con la parte considerativa
bajo sanción de nulidad (San Martin, 2006).

a) Aplicación del principio de correlación. Se cumple si la decisión judicial:

. Resuelve sobre la calificación jurídica propuesta en la acusación. Por el principio de


correlación, el juzgador está obligado a resolver sobre la calificación jurídica acusada
(San Martin, 2006).

. Resuelve en correlación con la parte considerativa. La segunda de las dimensiones


del principio de correlación especifica no sólo que el juzgador resuelva sobre la acusación
y los hechos propuestos por el fiscal, sino que, la correlación de la decisión debe serlo
también con la parte considerativa, a efectos de garantizar la correlación interna de la
decisión (San Martin, 2006).

. Resuelve sobre la pretensión punitiva. La pretensión punitiva constituye otro elemento


vinculante para al juzgador, no pudiendo resolver aplicando una pena por encima de la
pedida por el Ministerio Público (San Martin, 2006).
. Resolución sobre la pretensión civil. Si bien la pretensión civil no se encuentra avalada
por el principio de correlación, ni por el principio acusatorio, dado que la acción civil es
una acción acumulada a la acción penal, dada su naturaleza individual, la resolución sobre
este punto presupone el respeto del principio de congruencia civil (Barreto, 2006).

b) Presentación de la decisión. La decisión judicial, debe presentarse de la siguiente


manera:

. Principio de legalidad de la pena. Este aspecto implica que la decisión adoptada, tanto
la pena, o alternativas a estas, así como las reglas de conducta y demás consecuencias
jurídicas deben estar tipificadas en la ley, no pudiendo presentarse la pena de una forma
diferente a la legal (San Martin, 2006).

. Presentación individualizada de decisión. Este aspecto implica que el juzgador ha de


presentar las consecuencias de manera individualizada a su autor, tanto la pena principal,
las consecuencias accesorias, así como la reparación civil, indicando quien es el obligado
a cumplirla, y en caso de múltiples procesados, individualizar su cumplimiento y su
monto (Montero, 2001).

. Exhaustividad de la decisión. Según San Martin (2006), este criterio implica que la
pena debe estar perfectamente delimitada, debe indicarse la fecha en que debe iniciarse y
el día de su vencimiento, así como su modalidad si es del caso, si se trata de la imposición
de una pena privativa de libertad, indicarse el monto de la reparación civil, la persona que
debe percibirla y los obligados a satisfacerla.

. Claridad de la decisión. Significa que la decisión debe ser entendible, a efectos de que
pueda ser ejecutada en sus propios términos, ya su ejecución debe ser en sus propios
términos (Montero, 2001).

2.1.1.6.1.2. Contenido de la Sentencia de segunda instancia


Es aquella sentencia expedida por los órganos jurisdiccionales de segunda instancia.
La estructura lógica de la sentencia es como sigue:
A) Parte expositiva
a) Encabezamiento. Esta parte, al igual que en la sentencia de primera instancia, dado
que presupone la parte introductoria de la resolución.

b) Objeto de la apelación. Son los presupuestos sobre los cuales el juzgador resolverá;
importa los extremos impugnatorios, el fundamento de la apelación, la pretensión
impugnatoria y los agravios (Vescovi, 1988).

. Extremos impugnatorios. El extremo impugnatorio es una de las aristas de la sentencia


de primera instancia que son objeto de impugnación (Vescovi, 1988).

. Fundamentos de la apelación. Son las razones de hecho y de derecho que tiene en


consideración el impugnante que sustentan su cuestionamiento de los extremos
impugnatorios (Vescovi, 1988).

. Pretensión impugnatoria. La pretensión impugnatoria es el pedido de las


consecuencias jurídicas que se buscan alcanzar con la apelación, en materia penal, esta
puede ser la absolución, la condena, una condena mínima, un monto mayor de la
reparación civil, etc. (Vescovi, 1988).

. Agravios. Son la manifestación concreta de los motivos de inconformidad, es decir que


son los razonamientos que relacionados con los hechos debatidos demuestran una
violación legal al procedimiento o bien una inexacta interpretación de la ley o de los
propios hechos materia de la litis (Vescovi, 1988).

. Absolución de la apelación. La Absolución de la apelación es una manifestación del


principio de contradicción, que si bien es cierto, el recurso de apelación es una relación
entre el órgano jurisdiccional que expidió la sentencia agraviosa, y el apelante (Vescovi,
1988).

. Problemas jurídicos. Es la delimitación de las cuestiones a tratar en la parte


considerativa y en la decisión de la sentencia de segunda instancia, las que resultan de la
pretensión impugnatoria, los fundamentos de la apelación respecto de los extremos
planteados, y la sentencia de primera instancia, puesto que no todas los fundamentos ni
pretensiones de la apelación son atendibles, solo las que resultan relevantes (Vescovi,
1988).

B) Parte considerativa
a) Valoración probatoria. Respecto de esta parte, se evalúa la valoración probatoria
conforme a los mismos criterios de la valoración probatoria de la sentencia de primera
instancia, a los que me remito.

b) Juicio jurídico. Respecto de esta parte, se evalúa el juicio jurídico conforme a los
mismos criterios del juicio jurídico de la sentencia de primera instancia, a los que me
remito.

c) Motivación de la decisión. Se aplica los mismos criterios.

C) Parte resolutiva. Evalúa los puntos de las decisiones planteadas:


a) Decisión sobre la apelación. Para asegurar una adecuada decisión sobre el sustento
impugnatorio planteado, debe evaluarse:
. Resolución sobre el objeto de la apelación. La decisión del juez de segunda instancia
debe guardar relación con la decisión del juez de primera instancia (Vescovi, 1988).
. Prohibición de la reforma peyorativa. El juez de segunda instancia a pesar que evalua
la decisión del juez de sprimera instancia no puede reformularla, tendrá que volverla a
motivar. (Vescovi, 1988).
. Resolución correlativamente con la parte considerativa. Tiene en cuenta el principio
de Correlación en la que se motivo la sentencia de segunda instancia, por lo tanto, la
decisión de segunda instancia guardara correlación con la parte considerativa (Vescovi,
1988).
. Resolución sobre los problemas jurídicos. Aquí se toma en cuenta los puntos del
objeto de impugnación, no como lo haya motivado el juez, si no la parte jurídica de
acuerdo a los hechos ocurridos, sin embargo, el juzgador puede advertir errores de forma
causantes de nulidad, y declarar la nulidad del fallo de primera instancia (Vescovi, 1988).
b) Presentación de la decisión. La sentencia de segunda instancia se presenta con los
mismos criterios que la primera sentencia

2.2.4. La competencia
2.2.4.1. Definiciones
La competencia constituye la facultad que tienen los jueces para el e j e r c i c i o
d e l a j u r i s d i c c i ó n e n d e t e r m i n a d o s c a s o s . S e t r a t a d e u n “presupuesto
procesal” relativo al órgano jurisdiccional pues exige de éste la competencia
para conocer de un caso y dictar sentencia.
García Rada (2016), a f i r m a b a q u e " e s e l á m b i t o d e n t r o d e l c u a l e l J u e z
tiene y puede ejercer válidamente la Jurisdicción”.

Para CARNELUTTI, La competencia es un límite de poder; es más, lo señala


como el único límite de la jurisdicción.
Pues bien el Juez tiene el poder no sólo por el heho de ser
j u e z , s i n o a d e m á s e n cuanto la materia del juicio entra en su competencia.

De esta
manera jurisdicción y competencia se relacionan, y por ello se afirma que la jurisdicción
es el género y la competencia es la especie; es decir

2.2.1.4.2. La regulación de la competencia en materia penal


Sta regulación esta comprendida en el Art°19 del CPP, que finaliza que la competencia
es objetiva, funcional, territorial y por conexión. (Frisancho, 2013, p. 323).

2.2.4.2. Criterios para determinar la competencia en materia penal


Según Cubas (2006), a Competencia Funcional o por razón de Grado, tiene que ver con
la jerarquía de los órganos jurisdiccionales. Según la Ley Orgánica del Poder Judicial,
los órganos jurisdiccionales, de acuerdo con su jerarquía son:
La Corte Suprema de Justicia de la República
Las Cortes Superiores de Justicia, en los respectivos Distritos Judiciales;
Los Juzgados Especializados y Mixtos, en las Provincias respectivas;
Los Juzgados de Paz Letrados, en la ciudad o población de su sede; y,
Los Juzgados de Paz.
Por el territorio.
Esta distribución persigue la aproximación del tribunal a la persona, cosa o hecho que
debe considerarse como el centro del despliegue jurisdiccional en la correspondiente
causa. En razón del territorio, la competencia puede distribuirse por el lugar de la cosa,
el domicilio del demandado, el lugar de cumplimiento del contrato o el lugar del
contrato.
Funciones de los órganos jurisdiccionales:

Las funciones de los órganos jurisdiccionales que conforman el Sub Sistema se resumen
de la siguiente manera:

 El Juez de Investigación Preparatoria tramita y resuelve los pedidos formulados


por los sujetos procesales, a la vez que se constituye en un Juez garante de los
derechos del imputado a través de la audiencia de tutela. También garantiza los
derechos de la víctima durante las diligencias preliminares y la investigación
preparatoria, autorizando la constitución de las partes y controlando el
cumplimiento de los plazos de las diligencias preliminares y de la investigación
preparatoria. Asimismo, está a cargo de la etapa intermedia, que se caracteriza
fundamentalmente porque el Juez realiza un control del requerimiento de
acusación fiscal o de sobreseimiento de la causa.

 El Juez de Juzgamiento, juzga y sentencia en los procesos penales. La


competencia como Unipersonal o Colegiado se determina en función al extremo
mínimo de la pena a imponerse. Si esta es mayor a los 06 años el competente es
el Juzgado Colegiado integrado por los tres jueces unipersonales. Si dicha pena
es menor a los 06 años, el competente es el Juez Unipersonal.

 La Sala Penal de Apelaciones conoce el recurso de apelación contra las


resoluciones expedidas por los jueces de investigación preparatoria y los jueces
unipersonales y del juzgado colegiado.

Finalmente, debe destacarse que los Jueces, personal jurisdiccional y administrativo


que conforman este Subsistema se encuentran plenamente identificados con el nuevo
modelo procesal penal y están comprometidos en lograr una eficiente aplicación del
Nuevo Código Procesal Penal en este Distrito Judicial.

Por conexión
La competencia por conexión se basa en la necesidad de reunir, en una sola causa, varios
procesos que tengan relación con los delitos o con los inculpados; es se hace para tener
un conocimiento más amplio de los hechos y para evitar que se dicten sentencias El juez
que debe conocer de los procesos a acumular también resulta de interés para analizar la
competencia por razón de conexión. En todos estos casos orientan los principios de
economía procesal y unidad de criterio con la que deben resolverse los asuntos conexos.
contradictorias.
 Por el grado.
Juez de Paz Letrado. En los que el juez es un abogado y resuelve aplicando el derecho Nacional

El artículo 57 de la LOPJ, en concordancia del art. 12º del CPP, establece que los
Juzgados PL conocen de los procesos por faltas, tipificadas en los artículos 440 y ss.
Del C.P.
Juez Especializado en lo Penal. Es competente para instruir en todos los procesos
penales tanto sumarios como ordinarios; para fallar en los procesos de trámite sumario,
según lo establece el D. Leg. 124 modificado por la Ley 27507, que determina
expresamente los delitos que se tramitan en la via ordinaria, dejando todos los demás
para el tramite sumario.
Sala Penal de la Corte Superior. Es competente para realizar el juzgamiento oral y
público de los procesos de trámite ordinario, conocer los recursos de apelación de las
resoluciones emitidas por los Jueces Penales, las quejas de derecho y contiendas de
competencia y los procesos por delitos cometidos en el ejercicio de su función por los
Fiscales Provinciales y los Jueces de Primera Instancia, de Paz Letrado y de Paz.
Sala Penal de la Corte Suprema. Es competente para conocer el Recurso de Nulidad
contra las sentencias de procesos ordinarios dictadas por las Salas Penales Superiores,
las contiendas de competencia y transferencia de jurisdicción entre las Salas
Superiores y la investigación y juzgamiento de los delitos que se imputan a los
funcionarios comprendidos en el artículo 99º de la Constitución Política del Perú,
quienes gozan de la prerrogativa procesal del antejuicio.

Por el turno.
Esta competencia busca amenorar la carga procesal de los jueces a cargo de una misma
provincia, los cuales lo que se ha producido en el tiempo determinado ya sea una semana,
una quincena, un mes (p. 138- 142).

2.2.4.3. Determinación de la competencia en el caso en estudio


A. Según la materia. - el caso de estudio es por el delito de Homicidio Culposo, ubicado
en el proceso sumario.
B. Según el territorio. - Este caso determinado como delito Culposo se desarrollo en el
juzgado del DISTRITO JUDICIAL DE LAMBAEQUE- MOTUPE.
C. Según el grado. - este delito fue procesado en primera instancia por el Segundo
Juzgado Unipersonal transitorio de Motupe y en segunda instancia por la Segunda sala
penal de apelaciones.

2.2.5. El derecho de acción en materia penal


2.2.5.1. Definiciones
Según Cubas (2006), la acción penal es la manifestación de poder que se le otorga al
Ministerio Publico con la finalidad que lo ejerza solicitando una declaración judicial tras
la comisión de un delito y teniendo a la vista el autor material del mismo. (p. 125).

Por otra parte, Zavala (2004), señala que la acción es única para cualquier campo en que
se la quiera hacer valer. No existe una "acción" penal diversa a la acción civil. Ambas
tienen la misma finalidad y la misma estructura; lo que varía, es la materia con motivo de
la cual debe actuar, es decir la naturaleza del objeto que permite su ejercicio. Así la acción
penal es el poder jurídico concedido por el Estado a las personas o al Ministerio Público,
con el fin de estimular al órgano jurisdiccional penal para que éste inicie el proceso penal
cuando se ha violentado una norma jurídica penalmente protegida.

Pertenece a la clasificación de los derechos subjetivos, depende de forma directa de la


intervención de los órganos jurisdiccionales que tienen como función proteger los bienes
jurídicos tutelados, tiene su origen en la necesidad de prohibir la justicia por propia mano
y del poder que recae en el Estado dentro su función jurisdiccional. Es el derecho de los
individuos de tener acceso a los mecanismos jurídicos y tribunales solicitando que ejerzan
la potestad de juzgar y hacer ejecutar lo juzgado, el derecho acción cumple con su
naturaleza con la ejecución de una sentencia dictada por una autoridad competente.
(anonimo, s.f.)

es una potestad de todo ser humano de exigir al Estado su tutela jurisdiccional por
intermedio de su órgano judicial competente, este es un derecho procesal y viene a ser la
que da origen en si mismo al proceso, el derecho de acción es representado por la demanda
en materia civil (en materia penal con la denuncia) siendo este derecho presente en el
derecho procesal con exclusividad; vendría a ser la forma en como uno quiere hacer valer
sus derechos.
2.2.5.2. Características del derecho de acción
Para Cubas (2006), las características del derecho de acción son:
Pública.- porque el encargado de satisfacerlo es el Estado, es decir, que es el Estado el
receptor y obligado a prestar la tutela jurídica, la acción se dirige contra él; justamente
por la participación del Estado en la relación jurídica procesal tiene naturaleza pública..
Oficial.- Como consecuencia de su carácter público, el ejercicio de la acción penal se
halla monopolizado por el Ministerio Público, el cual puede actuar de oficio o a instancia
de parte.

Indivisible.- Se trata de una acción indivisible, es decir, con una sola pretensión que es
la sanción que será impuesta a los que hubieran cometido el delito..
Obligatoriedad.- Esta característica hace referencia al compromiso del Ministerio
Público de ejercitar la acción penal ante la presunta comisión de un delito..

Irrevocabilidad.- Una vez instada la acción penal únicamente fue desembocar en


sentencia firme, la cual será condenatoria o absolutoria. No obstante, también podrá
concluir con un auto en el que se declare el sobreseimiento, que no hay lugar al juicio
oral o en el que se declare una excepción fundada. Sin embargo, no existe posibilidad de
desistimiento o de transacción tal y como ocurre en el proceso civil o en los supuestos
en que el proceso penal es iniciado de modo privado.
Indisponibilidad.- El derecho de la acción penal es intransferible, es decir, no se puede
delegar en otra persona. En el caso de la acción penal pública, esta facultad está en manos
del Ministerio Público y en caso de la acción penal privada, corresponde al agraviado o
a su sustituto legal
2.2.5.3. El Ministerio Público como titular del derecho de acción (Art. IV del C. P.
P)
Para Cubas (2006), Es el MP quien se encarga de ejercitar la Acción Penal bajo la
premisa de que es un ente apartado, como un organismo del Poder Judicial y, porlo
consiguiente mantiene su independencia en el rol de la investigación, quien vigila que
todo sea legal durante el proceso. (p. 130).
Al Ministerio Público le corresponde ser:
1) Defensor de la legalidad.
2) Custodio de la independencia de los órganos jurisdiccionales y de la recta
administración de justicia.
3) Titular del ejercicio de la acción penal pública.
4) Asesor u órgano ilustrativo de los órganos jurisdiccionales.

Se trata de atribuciones múltiples, variadas y amplias que conllevan a que en puridad se


conforme una magistratura independiente. (p. 176)

2.2.6. La pretensión punitiva


2.2.6.1. Definiciones
Resuelve sobre la pretensión punitiva. La pretensión punitiva constituye otro elemento
vinculante para al Juzgador, no pudiendo resolver aplicando una pena por encima de la
pedida por el Ministerio Público (San Martin, 2006).Citado por
la pretensión penal consiste en que se pretende la imposición a alguien de una pena o de
una medida de seguridad como autor, coautor o cómplice de un hecho tipificado como
delito. Y esta pretensión penal se hace valer por el Ministerio Público en virtud de
afirmarse la existencia de un derecho público de exigir el castigo de alguien o la
prevención de un nuevo delito. Derecho público subjetivo que corresponde a los órganos
ejecutivos del Estado. (Rossi)Jorge Vásquez Rossi: Curso de Derecho Procesal
Penal; op. cit., pág. 218.
“Al igual que la acción y la demanda, La pretensión es importante en «varios planos, en
primer lugar porque es ‘la que identifica el porqué y el para qué del instar’, sosteniéndose
que es una condición del instar ya que sería ‘absurdo instar sin pretender –instar por
instar-, por el deseo de hacerlo, como si se dijera vengo a demandar a mi contraria porque
sí, o la acuso para que se la recluya en prisión un lapso cualquiera, sin expresar la conducta
típica cometida’.» La pretensión que se da en el plano de la realidad sino es acatada
voluntariamente o por medio de un medio autocompositivo, debe necesariamente
trasladarse al plano jurídico del proceso, y ese traspaso «se efectúa mediante el ejercicio
del derecho autónomo y abstracto de acción que, no obstante tales calificaciones, no
puede ser materialmente ejercido sin estar acompañado de modo ineludible por aquélla».
Como bien expone Alvarado Velloso, «tal ejercicio del derecho de acción se efectúa
exclusivamente mediante la presentación a la autoridad de un documento: la demanda».
Por lo que la pretensión «sería una parte, la consistente en el contenido objetivo, el
elemento sustancial de la demanda»” (Prunotto, y Rodrigo, s/f, p. 364).

Asimismo, Arlas (1994), señala que: “La acción procesal penal se dirige al juez y tiene
como contenido una pretensión penal. Como toda pretensión procesal, la pretensión penal
consiste en que se pretende la imposición a alguien de una pena o de una medida de
seguridad como autor, coautor o cómplice de un hecho tipificado como delito. Y esta
pretensión penal se hace valer por el Ministerio Público en virtud de afirmarse la
existencia de un derecho público de exigir el castigo de alguien o la prevención de un
nuevo delito. Derecho público subjetivo que corresponde a los órganos ejecutivos del
Estado” (p. 54).
Concluyendo la Pretensión Punitiva es una solicitud de pronunciamiento condenamiento
a un sujeto que se le reconoce como autor de un hecho delictivo.

2.2.6.2. Características de la pretensión punitiva.


Según Mixán (2006), las características son:
Publicidad: debido a que la acción penal es de carácter público, ya que es una
acción destinada a satisfacer intereses colectivos.
Oficialidad: otro principio general es que la acción es ejercida por los fiscales y
ante los jueces. Ambos funcionarios del Estado. Así lo estable el Art. 71
Nuestro derecho no establece un monopolio de la acción punitiva en poder del
Estado.
Indivisibilidad: la acción es indivisible porque alcanza a todos los que hayan
participado de delito
Legalidad: siempre que concurran los presupuestos de un hecho punible, el
fiscal a cargo del Ministerio Publico debe promover la acción penal. No puedo
dejar de hacerlo.
Irrevocabilidad: como consecuencia de la legalidad, la AP es irrevocable,
motivo por el cual una vez ejercida se agota en la sentencia. Esto no ocurre en
los casos de (acción penal privada).
Indisponibilidad: también consecuencia de la legalidad, el fiscal no puede
libremente resolver si ejerce o no la AP y su posterior sostenimiento, tampoco
puede transferirla. La AP solo puede ser ejercida por el funcionario que la ley
establece.

2.2.6.3. Normas relacionadas con la pretensión punitiva


Artículo 1° del Código Procesal Penal
1. Su ejercicio en los delitos de persecución pública, corresponde al MP. La ejercerá de
oficio, a instancia del agraviado por el delito o por cualquier persona, natural o jurídica,
mediante acción popular.
2. En los delitos de persecución privada corresponde ejercerla al directamente ofendido
por el delito ante el órgano jurisdiccional competente. Se necesita la presentación de
querella.
3. En los delitos que requieren la previa instancia del directamente ofendido por el delito,
el ejercicio de la acción penal por el Ministerio Público está condicionado a la denuncia
de la persona autorizada para hacerlo. No obstante ello, el Ministerio Público puede
solicitar al titular de la instancia la autorización correspondiente.
4. Cuando corresponde la previa autorización del Congreso o de otro órgano público para
el ejercicio de la acción penal, se observará el procedimiento previsto por la Ley para
dejar expedita la promoción de la acción penal. (Jurista Editores, 2010, p. 431).

2.2.6.4. La denuncia penal


a. Definiciones
Muller (2009), refiere que: “La denuncia es la manifestación de una persona ante la
Policía o ante el Fiscal, sobre la posible comisión de un delito. Dicha persona podrá ser
alguien que de algún modo se encuentre involucrada con el hecho delictuoso (víctima o
familiar de ella, testigo presencial, o por referencia, etc.). La denuncia es junto con la
querella, uno de los medios ordinarios para la iniciación del proceso penal. Si el Fiscal al
calificar la denuncia o después de realizado o dispuesto realizar diligencias preliminares,
considera que el hecho denunciado no constituye delito, no es justiciable penalmente, o
se presentan causas de extinción previstas en la ley, declarará que no procede formalizar
y continuar con la Investigación Preparatoria, así como ordenará el archivo de lo actuado.
Esta Disposición se notificará al denunciante y al denunciado. El denunciante que no
estuviese conforme con la Disposición de archivar las actuaciones o de reservar
provisionalmente la investigación, requerirá al Fiscal, en el plazo de cinco días, eleve las
actuaciones al Fiscal Superior, quien se pronunciara dentro del quinto día, ordenando se
formalice la investigación, se archiven las actuaciones o se proceda según corresponda.
Toda denuncia debe contener la identidad del denunciante, una narración detallada y veraz
de los hechos, y – de ser posible – la individualización del presunto responsable. La
denuncia podrá formularse por cualquier medio. Si es escrita, el denunciante firmará y
colocará su impresión digital. Si es verbal se sentará el acta respectiva. En ambos casos,
si el denunciante no puede firmar se limitará a colocar su impresión digital, dejándose
constancia en el acta del impedimento. El funcionario policial que recibe la denuncia,
deberá hacer uso de los formatos respectivos con la finalidad de recibir la información
del caso. Es importante destacar la intervención policial, sobre todo para la recepción de
la denuncia, debido a que la aprehensión de los autores o participes, el recojo de elementos
materiales probatorios o evidencias físicas, el recojo de las primeras testimoniales pueden
ser fundamentales para la adopción de medidas indagatorias subsiguientes” (s. p.)

b. Regulación de la denuncia penal


La denuncia penal se encuentra regulada en el libro tercero, sección I “La investigación
preparatoria”, del Código Procesal Penal, en los artículos:

326.- Facultad y obligación de denunciar.


1. Toda persona tiene la potestad de denunciar los hechos materia de delito ante la
autoridad respectiva, siempre y cuando el ejercicio de la acción penal para perseguirlos
sea público.
2. deberán formular denuncia:
a. Quienes estén obligados a hacerlo por expreso mandato de la ley. En especial
lo están los profesionales de la salud por los delitos que conozcan en el
desempeño de su actividad, así como los educadores por delitos por los delitos
que hubieren tenido lugar en el centro educativo.
b. Los funcionarios que en el ejercicio de sus atribuciones, o por razón del cargo,
tomen conocimiento de la realización de algún hecho punible.

Articulo 327.- No obligados a denunciar:


1. La pareja no está en la obligación de denunciar a su cónyuge y parientes
comprendidos dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad.
2. De ninguna manera se obliga a denunciar si existe el conocimiento de hecho
resguardado por el secreto profesional.

Artículo 328.- Contenido y forma de la denuncia:


1. Una denuncia debe contar con la identidad del denunciante, la narración de los hechos
detalladamente y veraz, así mismo la individualización del presunto responsable.
2. La formulación de la denuncia debe estar registrada por escrito, con la firma y huella
del denunciante y e el caso de verbal se sentara en un acta.
3. Para ambos casos el denunciante debe dar fe a través de su firma, si no pudiese firmar
se colocara su huella digital.. (Jurista Editores, 2010, p. 323-324).

2.2.1.7. Los Medios impugnatorios

2.2.1.7.1. Definición
Los medios impugnatorios son mecanismos que la ley concede a las partes y terceros
legitimados para solicitar al órgano jurisdiccional que se realice un nuevo examen, por el
mismo Juez o por otro de jerarquía superior, de un acto procesal con el que no se está
conforme o porque se presume que está afectado por vicio o error, a fin de que se anule o
revoque, total o parcialmente.
Los medios impugnatorios “son actos procesales de la parte que se estima agraviada por
un acto de resolución del juez o tribunal, por lo que acude al mismo o a otro superior,
pidiendo que revoque o anule el o los actos gravosos, siguiendo el procedimiento previsto
en las leyes”.
El fundamento de la impugnación se encuentra en la posibilidad de injusticia, por la
existencia de un error, que puede ser corregido o anulado por el mismo órgano
jurisdiccional o superior, brindando de esa forma la debida garantía al justiciable.

Asimismo, para San Martin, (2003), refiere que los medios impugnatorios No es otra cosa
que la falibilidad humana es decir el interés público puesto al servicio de las partes,
controlando las resoluciones jurisdiccionales para conseguir una mejor realización de la
justicia.

Por otra parte, Montero y Flores (2001), sostienen que los recursos son medios de
impugnación por los cuales el que es parte en el proceso pretende un nuevo examen de
las cuestiones fácticas o jurídicas resueltas en una resolución no firme que le resulta
perjudicial a fin de que sea modificada o sustituida por otra que le favorezca, o sea
anulada. La doctrina nacional también se ha ocupado del concepto de medios
impugnatorios.

2.2.1.7.2. Clases de recursos impugnatorios


Se puede clasificar en recursos en ordinarios y extraordinarios. Dentro del proceso los
primeros se realizan con carácter de normalidad, entre ellos tenemos . Ej.: El recurso de
apelación. Los extraordinarios son excepcionales, limitados, solo proceden contra
determinadas resoluciones y por motivos tasados en la ley. Por ejemplo, el recurso de
Casación. (p. 515).

 RECURSO DE REPOSICIÓN: Está regulado por el artículo 415 del CPP que
establece: “El recurso de reposición procede contra los decretos a fin de que el
juez que los dicto examine nuevamente la cuestión y dicte la resolución que
corresponda”. Se trata de resoluciones de menor importancia, aquellas que
impulsan el desarrollo del proceso. Este recurso puede interponerse ante
cualquier tribunal, que este a cargo del proceso conforme a su competencia
funcional, vale decir que procede tanto durante el curso de la investigación como
del juzgamiento. (p. 516).
Para Jerí, se llama recurso de “reposición” por la fórmula empleada antiguamente
para plantearlo: pidiéndole al juez que reponga por el contra imperio la resolución
de que se trata, es decir, no poniéndola en vigor o modificándose en lo justo en
virtud del principio del derecho ejus esttollere cujus est condere (CPP 2004)

 RECURSO DE APELACIÓN:
Etimológicamente, la palabra apelación deriva de la voz latina appellatio, que
quiere decir citación o llamamiento, y cuya raíz es apello y appellare, habiendo
conservado dicho origen en la mayoría de los idiomas. Así, en francés se dice
appel, en inglés appeal, en italiano apello, en alemán appellation, en portugués
appellacao, etc.
resoluciones interlocutorias, que realizan la dirección del proceso y contra la
sentencia final de una instancia del proceso. Este recurso cuando está radicado
en las sentencias es el mecanismo procesal para conseguir el doble grado de la
jurisdicción, que configura la segunda instancia a que hace referencia el artículo
139° inciso 6 de la Constitución y el artículo 11 de la LOPJ. (p. 516).
Para Rafael Gallinal, la apelación es un recurso ordinario que entabla el que se
cree perjudicado o agraviado por la resolución de un juez o tribunal, ante el
superior, con el fin de que la revoque o reforme

RECURSO DE CASACIÓN:
La casación es un medio de impugnación extraordinario con efecto devolutivo, del
que conoce la Corte Suprema (sin ser esta una tercera instancia), que se interpone
exclusivamente por los motivos tasados en la ley, contra las resoluciones judiciales
expresamente previstas por ella, y que en materia penal presenta un efecto no
suspensivo y extensivo.
En primer lugar, la casación es, como se señaló, un auténtico recurso, una fase más
del proceso, del que conoce un auténtico órgano jurisdiccional, precisamente el que
está en la cúspide de la organización judicial: la Corte Suprema de la República.
En segundo lugar, la casación, como expresa la doctrina y la legislación comparada,
en un sistema puro u ortodoxo, es un recurso impugnatorio de carácter
extraordinario, que tiene por finalidad el control de la aplicación correcta por los
jueces de mérito del Derecho positivo, tanto el sustantivo como el adjetivo

RECURSO DE QUEJA: Jerí acota que nuestro ordenamiento procesal ha


establecido un mecanismo por el cual se puede lograr la revisión de una resolución
por la instancia superior, pese a ser declarado inadmisible el recurso impugnatorio.
La queja se dirige contra los autos emitidos por los juzgados y salas superiores que
deniegan la apelación, la casación o el recurso de nulidad. La queja no solo se
resuelve por un órgano jurisdiccional de grado superior, sino que también se
interpone directamente ante ese órgano (Pablo, 1993) citado por Arsenio Guardia
 Medios impugnatorios en estudio

En el caso de estudio se evidencio el recurso de apelación emitido al segundo juzgado


de apelaciones de la corte superior de Justicia de Lambayeque. Siendo Objeto de
Apelación:
Es objeto de apelación la sentencia de fecha 16 de julio de 2015 que condena al acusado
A como autor del delito contra la vida el cuerpo y la salud en su figura de homicidio
culposo, tipificado en el último párrafo del artículo 111° del Código Penal, en agravio de
B y que le impone cuatro años de pena privativa de la libertad con el carácter de efectiva,
que computada desde el 16 de julio de 2015, vencerá el 15 de julio de 2019, así como la
pena de inhabilitación consistente en la suspensión de la autorización para conducir
cualquier tipo de vehículo por igual tiempo que la pena impuesta; fijándose en cincuenta
mil nuevos soles el monto por concepto de reparación civil a favor del actor civil.

2.2.1.7.3. Fines de los recursos impugnatorios


. Persigue fines que tiene como principal designio procurar obtener la revocación,
modificación, sustitución o eliminación del procedimiento impugnado, en cuya virtud la
pretensión puede ser en definitiva acogida o rechazada”. (Lecca, 2006, p. 200)

2.2.1.7.4. Regulación de los recursos impugnatorios


Se encuentra regulado en su Art. 413, del CPP, el cual prescribe: “Artículo 413 Clases.-
Recurso de reposición, Recurso de apelación, Recurso de casación, Recurso de queja.
(Jurista Editores, 2010, Pag. 431)

2.2.2.1.1. La teoría del delito


Es la más moderna construcción dogmática que nos permite establecer si el hecho
realizado por una persona es o no delito, al verificar si concurren o no en él sus elementos
constitutivos: tipicidad, antijuricidad y culpabilidad
2.2.2.1.2. Componentes de la Teoría del Delito
Sujetos activos y sujetos pasivos

Será sujeto activo aquella persona que pueda cometer un ilícito penal. Y será el
sujeto pasivo, aquella persona que pueda sufrir un delito. En cuanto al sujeto pasivo,
suelen distinguirse entre el sujeto pasivo impersonal y el sujeto pasivo personal. Será
sujeto pasivo impersonal la persona moral o jurídica víctima del delito, mientras que será
sujeto pasivo personal la persona física víctima del delito.

Acción u omisión

La conducta humana como fundamento de la estructura del delito, es la denominada


acción u omisión. El concepto de acción engloba también al de omisión en tanto en cuanto
puede existir una conducta en la que se evita con una omisión la circunstancia de una
acción concreta. La principal función del concepto de acción es servir como límite para
seleccionar las acciones que pueden ser relevantes para el Derecho penal.

Tipicidad

La tipicidad es el encuadramiento de la conducta humana en el tipo penal. Así, cuando la


ley dice en el artículo dedicado al homicidio que “el que matare a otro…”, se está
tipificando la conducta de dar muerte a otra persona.

En el tipo se incluirán todas las características de la acción prohibida, por lo que, podemos
decir que el tipo es la valoración de la conducta delictiva.

Antijuridicidad
La antijuridicidad es aquel desvalor que posee un hecho típico contrario al ordenamiento
jurídico. La antijuridicidad es lo contrario al Derecho.

No es suficiente que una conducta sea típica, sino que además tiene que ser contraria al
ordenamiento jurídico, esto es, no puede estar protegida por ninguna causa de
justificación. La antijuridicidad radica en incumplir lo establecido en la norma jurídica.
Para que la conducta sea delictiva tiene que ser además de antijurídica, típica y culpable,
por lo que la antijuridicidad es un elemento más del delito y de la teoría del delito.

La antijuridicidad es un elemento positivo del delito, en cuanto que la conducta que es


antijurídica será considerada como delito. La antijuridicidad compara lo establecido en el
ordenamiento con la conducta llevada a cabo por determinado sujeto.

Culpabilidad

La culpabilidad comprende una serie de circunstancias que se necesitan para imputar un


hecho antijurídica a un sujeto y que éste sea considerado culpable. La culpabilidad es la
característica del sujeto para que se le impute a título de culpable un determinado hecho
típicamente antijurídico. Lo anterior viene a significar, que para emitir un juicio que
declare culpable a un sujeto será necesario que la conducta haya sido típicamente
antijurídica.

Penalidad o punibilidad

La punibilidad o penalidad es una categoría harto criticada doctrinalmente, pues no todos


los autores aceptan en considerar la penalidad como un verdadero elemento del delito. Lo
anterior es consecuencia de que la penalidad no es tan trascendental en la práctica como
el resto de los elementos que conforman el delito según la teoría del delito.

La penalidad o punibilidad supone la imposición de una pena cuando estamos en


presencia de los demás elementos del delito (tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad).

2.2.2.1.3. Consecuencias jurídicas del delito


Las consecuencias jurídicas punitivas del delito: penas y medidas de seguridad,
Tradicionalmente cuando se abordan temas como las Penas y las Medidas de seguridad
se hace desJe un perspectiva netamente penológica (respecto de las penas y de las bases
de la punibilidad) a la vez que de criterios (PCPU, 2014)
2.2.2.2. Del delito investigado en el proceso penal en estudio
2.2.2.2.1. Identificación del delito investigado

2.2.2.2.3. EL DELITO DE HOMICIDIO CULPOSO


2.2.2.2.3.1. CONCEPTO
Según la (RALE) El término deriva de la voz latina homicidium y significa, la muerte
causada a una persona por otra, por lo común ejecutada ilegítimamente y con violencia.
Según Irrueta Goyena, (2010) -citado en Marañón "el homicidio es la muerte ocasionada
por otro hombre".
La palabra homicidio se emplea en el Código Penal en un sentido amplio equivalente a la
muerte de un hombre por otro, comprendiendo todas sus modalidades y variantes. Sirve
así para designar el Capítulo I, del Título I, del libro segundo, en el que se recogen los
delitos contra la vida humana independiente.
2.2.2.4.2.- DEFINICIÓN. - Según Bostos Ramírez (1989) Se le denomina también
"homicidio por negligencia", "por culpa", "no intencional", o "intencional", por "por
imprudencia" o "por impericia"
El homicidio culposo se puede definir como la muerte producida por el agente al no haber
previsto, este resultado típico, debido a la violación del deber de prudencia y cuidado
socialmente exigido.
Según (BRAMONT 1992) “Se puede definir al Homicidio Culposo como la muerte
producida por el agente al no haber previsto el posible resultado antijurídico, siempre que
debiera haberlo previsto y dicha previsión era posible (Homicidio por culpa inconsciente)
o habiéndolo previsto, confía sin fundamento en que no se producirá el resultado que se
representa (culpa consciente).
Para VIZCARDO (2012), “Las formas culposas requieren un resultado típico, no querido
por el agente, pero si posible de prever, derivado de una violación del deber de prudencia
y cuidado socialmente exigido a sus elementos componentes. Al obrar trasgrediendo el
deber de cuidado social, incrementa injustamente el peligro, sin haberse rodeado de las
precauciones mínimas impuestas por las circunstancias o por su condición personal.”
El Tratadista HURTADO POZO (2010), señala “Para la configuración del delito resulta
indispensable, primero, una acción seguida de un resultado (la muerte de la víctima);
segundo, la imputación objetiva de este resultado al autor de la acción (comprendida la
relación de causalidad); y, por último, la violación de un deber de prudencia o cuidado,
sin la cual el resultado no se hubiese producido.”
2.2.2.2.2. Ubicación del delito de homicidio culposo en el Código Penal
Ubicado en el Art 111.-La pena privativa de la libertad será no menor de un año ni mayor
de cuatro años si el delito resulta de la inobservancia de reglas de la profesión, de
ocupación o industria y no menor de un año ni mayor de seis años cuando sean varias las
víctimas del mismo hecho.

2.2.2.2.3. El delito de homicidio culposo


2.2.2.2.3.1. Regulación
Para el código Penal (2004), El delito de homicidio culposo u homicidio pre intencional
está regulado en nuestro código penal en el Art. 111. Nuestra doctrina de manera
mayoritaria se inclina por la utilización del término culpa en vez de imprudencia o
negligencia.
Así tenemos que nuestra legislación a través del tiempo ha evolucionado, el legislador
después de un de que el código penal del año 1863 no existió el tipo penal de homicidio
culposo, posteriormente ya en año 1924 y ante la falta de tipificación y los
continuos delitos que se cometían los legisladores vieron como conveniente tipificarlo
con el nombre de homicidio por negligencia.
Ya con nuestro código actual del año 1991 emplea la forma homicidio culposo y que
como una forma de perfeccionar nuestra legislación castiga a los que manejan
en estado de ebriedad y que por consiguiente ocasionan y matan por imprudencia o
negligencia.
Este tipo penal ha tomado debidamente importancia, antes los constantes actos que por
culpa realiza el agente, como tenemos hace poco el caso Utopía, que refleja
alarmantemente que se necesita perfeccionar este echo punible y que las penas deben ser
mas severas para que la sociedad tome conciencia de los actos que realiza y que
ocasionan la muerte a muchas victimas.
Si el delito resulta de la inobservancia de reglas de la profesión, de ocupación o industria
la pena privativa de la libertad será no menor de un año ni mayor de cuatro años y no
menor de un año ni mayor de seis años cuando sean varias las víctimas del mismo hecho.
La pena privativa de la libertad será no menor de cuatro años ni mayor de seis años e
inhabilitación, según corresponda conforme al artículo 36° - inciso 4, 6 y 7, si la muerte
se comete utilizando vehículo motorizado o arma de fuego, estando el agente bajo el
efecto de drogas tóxicas, estupefacientes, sustancias psicotrópicas o sintéticas, o con
presencia de alcohol en la sangre en proporción mayor de 0.5 gramos por litro, en el caso
de transporte particular, o mayor de 0.25 gramos por litro en el caso de transporte público
de pasajeros, Mercancías o carga en general, o cuando el delito resulte de la inobservancia
de reglas técnicas de tránsito.

2.2.2.4.4. Elementos del delito apropiación ilícita


2.2.2.2.3.2. Tipicidad
La conducta delictiva de Apropiación Ilícita se configura cuando el agente con la finalidad
de obtener un provecho patrimonial para sí mismo o para un tercero, se apropia, adueña
o adjudica o apodera de un bien mueble, dinero o un valor que ha recibido del sujeto
pasivo en calidad de depósito, comisión, administración u otro título semejante que
produzca obligación de entregar devolver o hacer uso determinado del bien (Salinas,
2013).
A. Bien jurídico protegido. Dentro del derecho penal lo que se trata de proteger es la
vida humana. (Peña Cabrera, 2002).
B. Sujeto activo. Puede ser cualquier persona, al carecer el tipo penal de una exigencia
adicional respecto a la calidad o características personal del autor. La referencial a "El
que ............" hace que el Art. 111 sea considerado como un delito común que pueda ser
cometido por cualquier ciudadano, siempre que infrinja un deber objetivo de cuidado y el
resultado le sea imputable.
C. Sujeto pasivo. - En cuanto al sujeto pasivo, la titularidad del bien jurídico protegido
puede corresponder al individuo o a las personas jurídicas, a la comunidad o al Estado, lo
que está
implícito o explícito en los respectivos tipos. En cuanto al número, el sujeto pasivo puede
ser singular o plural (arts. 186 bis, 190, 200). En lo que se refiere a la calidad, pueden ser
indeterminados o determinados. Los primeros constitu yen la regla, y el Código se refiere
a ellos como "a otro" (art. 79), "alguna persona" (art. 82), "una persona" (art. 104). Los
segundos resultan determinados por razones de edad (art. 146), de sexo (art. 130), de una
situación biológica (art. 87) o psíquica (art. 119, inc. 2?), o por una especial situación
jurídica (art. 80 bis, inc. 1?: "miembro de los Poderes Ejecutivo, Legislativo o Judicial";
inc. 2?: el que "desempeñare un acto del servicio propio de las Fuerzas Armadas o de
seguridad o policiales o penitenciarias"'; art. 143, inc. 1?: "detenido o preso"; art. 221,
inc. 1?: "jefede un Estado o representante de una potencia extranjera"). (Marco
A.Terrani 1998)
- D. Resultado típico (Muerte de una persona). Peña Cabrera (2002), considera que,
debido a los avances científicos realizados en el dominio de las ciencias médicas y, en
especial, respecto a la técnica de reanimación y trasplante de órganos, se ha hecho
necesario la revisión del concepto muerte clásica y la modificación de ésta, resultando
así, una nueva concepción de muerte, que es la llamada muerte clínica o muerte
cerebral, recogida en nuestro Reglamento de Injertos y Trasplantes de Órganos, Decreto
Supremo Nº 014-88-SA.
E. Acción típica es básicamente también antijurídica. La carencia de función indiciaría
de los tipos abiertos significa, por tanto, que la antijuricidad no es todavía necesaria
consecuencia de la realización del tipo.(Claus Roxin 1979)

F. El nexo de causalidad une dos elementos materiales (muerte y acción culposa), art.
111 CP ej. Si un sujeto comete un delito conduciendo su automóvil en estado alcohólico,
y sabemos que la embriaguez es la causa del delito, como criminólogos buscaremos la
cadena causal: ¿Por qué se emborracha el sujeto? Supongamos que lo hace por un
problema psicológico, causado a su vez por un trauma sufrido en la niñez por culpa de
sus padres. Esto es intrascendente para el derecho, no puede responsabilizarse a los
padres, pero es de gran interés para el criminólogo, que debe atacar la causa primaria.
(Luis Manzanero, 1981)

Determinación del nexo causal. Para establecer la causalidad, se aplica la teoría de la


“conditio sine qua non”, la que presupone que si se suprime mentalmente la acción
investigada y el resultado desaparece, la acción sería causa del resultado (Perú. Ministerio
de Justicia, 1998).

Imputación objetiva del resultado. Esta se puede dar por: i) Creación de riesgo no
permitido, cuando se da un riesgo que la norma tutela; ii) Realización del riesgo en el
resultado, cuando este riesgo es el que determino el resultado; iii) Ámbito de protección
de la norma, cuando tanto la acción como el resultado son los que la norma (ratio legis)
pretende proteger (Peña Cabrera, 2002).

G. La acción culposa objetiva (por culpa). Es objetiva cuando se prescinde del elemento
subjetivo (culpabilidad) y se concentra en el peligrosismo, es decir, en la eventualidad
que alguien pueda cometer algo por razones ajenas a su voluntad, Ejemplo de ello es la
frenología y las posiciones sostenidas por Lombrosso y Garofalo entre otros, que decian
que ciertas caracterísitcas fisicas predisponen al delito. (Peña Cabrera, 2002).

A. Criterios de determinación de la culpa


a. La exigencia de previsión del peligro (la culpa inconsciente). Se presenta cuando el
sujeto no se representó ni previo el proceso que afecto el bien jurídico que exigía un
cuidado especial y que, sin embargo, debió preverlo, aun teniendo los conocimientos que
le permitían representarse dicha posibilidad de producción del resultado, no los actualiza
y, por ende, no tiene conciencia de la creación del peligro (Villavicencio Terreros, 2010).
b. La exigencia de la consideración del peligro (la culpa consiente). Se presenta cuando
el sujeto se representó o previo el proceso que afecto el bien jurídico, el mismo que exigía
un cuidado determinado, es decir que tiene conciencia que el resultado típico puede
sobrevenir de la creación del peligro, aun así, actúa infringiendo el deber objetivo de
cuidado (Villavicencio Terreros, 2010).

2.2.2.2.4.2. Antijurídica
No será antijurídico el Homicidio Culposo cuando exista una causa de justificación que
constituye el aspecto negativo de la antijuridicidad, así, considera como causas de
justificación encontraremos a la legítima defensa aplicables a este delito: a) la legítima
defensa; b) el estado de necesidad; c) obrara por disposición de una ley, d) obrar por orden
obligatoria de autoridad competente (Universidad de Valencia, 2006).

2.2.2.2.4.3. Culpabilidad
Respecto del delito de homicidio culposo, el agente no tiene intención de dar muerte,
puesto que no actúa con el “animus necandi”, es decir que no quiere el resultado letal,
este se produce por la inobservancia de las reglas técnicas de la profesión, actividad o
industria (Peña Cabrera, 2002).

2.2.2.4.3.1. Grados de desarrollo del delito


El delito de homicidio culposo se asume a título de consumación. Siendo así, el delito en
mención no admite la tentativa

La pena en el homicidio culposo


Este delito se encuentra tipificado como se ha señalado líneas arriba Magna (2010)
Habiendo leído el expediente por mi persona se puede entender según la investigación
por parte del Representante del Ministerio Público del Distrito de Motupe, en la que los
hechos se desarrollaron de la siguiente manera día veinticinco de junio del dos mil doce,
siendo aproximadamente las dos y treinta horas de la madrugada en el sector La Victoria
de Motupe, se suscitó un accidente de tránsito – choque-, entre los vehículos menores, :
moto taxi color rojo, conducida por el acusado y, el otro vehículo unidad motocicleta
color negro, conducida por B quien llevaba como tripulantes a A. y D.; ambos vehículos
colisionaron cuando B. Pretendía adelantar con su vehículo a la motocicleta, donde el
pasajero A resultó herido, por lo que, auxiliado por la policía de carreteras, siendo
trasladado al centro de salud, pero dada la gravedad de las lesiones fue trasladado a
Chiclayo en compañía de su amigo C, siendo que con fecha veintiocho de junio del dos
mil doce no resistió más y falleció a causa del accidente. A partir de este hecho se da
inicio a las etapas de un proceso penal , iniciándose en esta etapa tomo parte la policía
quien presencio los resultados del accidente, el policía levanta el acta de los hechos
ocurridos, pero obvio realizar el dosaje etílico a ambas partes, así mismo, se da inicio a
la investigación preparatoria por parte del Ministerio Publico en la que, el Fiscal realiza
las investigaciones para esclarecer el delito, en la etapa de investigación preparatoria
quien solicita se notifique a las partes procesales con fecha 15 de abril, adjuntando los
medios de prueba para la audiencia, así mismo habiéndose constituido el actor civil, se
da el auto de control de acusación en agosto del 2014 donde declaran saneado el proceso
y valida la acusación del fiscal, y admitidos los medios de prueba, determinando el delito
en contra del señor B, Calificación jurídica: El delito de Homicidio culposo, prescrito en
el artículo 111º tercer párrafo del Código Penal, referido a la inobservancia de reglas de
tránsito., quien solicita se le impongan cuatro años de pena privativa de libertad con
carácter de efectiva, puesto que se ha perdido una vida humana; además la inhabilitación
que indica el artículo 36 inciso 7 del Código Penal, referida a la suspensión definitiva
para obtener autorización de conducir cualquier tipo de vehículo, presentando el MP la
acusación fiscal formalizando la investigación del proceso.
En donde se constituyen las partes, la parte agraviada se constituye en actor civil,
Se da inicio a la etapa intermedia donde el juez de investigación preparatoria dicta el auto
de enjuiciamiento donde ordena se emita los actuados al juzgado penal unipersonal
transitorio de Motupe para seguir las investigaciones.
en marzo dl 2015 se cita a juicio oral, reprogramado para julio se reprograma y se da
inicio a la audiencia 16 julio del 2015
en la etapa de juzgamiento quien toma parte del proceso el Juzgado penal unipersonal
transitorio de Motupe con el juez Edwin Ibáñez Farfán quien emite la resolución
NÚMERO: CINCO. en Motupe de fecha dieciséis de julio del dos mil quince:
CONDENANDO a B como autor del delito CONTRA LA VIDA EL CUERPO Y LA
SALUD en su modalidad de HOMICIDIO CULPOSO, previsto en el artículo 111 tercer
párrafo del Código Penal, en agravio de A; en consecuencia, se le impone CUATRO
AÑOS DE PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD CON EL CARÁCTER DE
EFECTIVA, que computada desde el dieciséis de julio del dos mil quince vencerá el
quince de julio del dos mil diecinueve. INHABILITACION, consistente en la suspensión
de la autorización para conducir cualquier tipo de vehículo por igual tiempo que la pena
impuesta; se dispone: cursar el oficio respectivo; FIJO en la suma de cincuenta mil nuevos
soles por concepto de reparación civil que deberá pagar a favor del actor civil.
No estando de acuerdo el acusado apelando dicha sentencia, El 6 de agosto el abogado
del condenado solicita la suspensión de la ejecución de la suspensión provisional de la
condena, así mismo solicita recurso de apelación de sentencia en cuanto a la pena y
reparación civil, aduciendo que en caso de duda sobre la responsabilidad penal debe
resolverse a favor del imputado.
Concediéndose la apelación con resolución N° 15, SENTENCIA N° 173-2015 , De fecha
treinta de septiembre de dos mil quince. Derivándose los actuados a la sala de apelaciones
donde confirmaron la sentencia con votos a favor y uno en contra la SEGUNDA SALA
DE APELACIONES DE LA CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE LAMBAYEQUE,
resolvió: CONFIRMAR por unanimidad la sentencia de fecha 16 de julio de 2015 que
condena al acusado B como autor del delito contra la vida el cuerpo y la salud en su
figura de homicidio culposo, tipificado en el último párrafo del artículo 111° del Código
Penal, en agravio de A, que le impone la pena de inhabilitación, consistente en la
suspensión de la autorización para conducir cualquier tipo de vehículo, por igual tiempo
que la pena privativa de libertad, y que fija en cincuenta mil nuevos soles el monto de la
reparación civil
CONFIRMAR por mayoría la pena cuatro años de privación de libertad con el carácter
de efectiva, que computada desde el 16 de julio de 2015, vencerá el 15 de julio de 2019.
Con pago de costas, si los hubiera, en ejecución de sentencia.
2.2.2.5.2 La pena fijada en la sentencia en estudio
De acuerdo al contenido de la sentencia la pena fijada fue: cuatro años de privación de
libertad con el carácter de efectiva, que computada desde el 16 de julio de 2015, vencerá
el 15 de julio de 2019. Según el N°00518-2012-15-1708-JR-PE-01, DEL DISTRITO
JUDICIAL DE LAMBAEQUE-MOTUPE-2017.

2.2.2.5.3. La reparación civil fijada en la sentencia en estudio


La reparación civil fijada fue de cincuenta mil nuevos soles el monto de la reparación
civil EXP.N°00518-2012-15-1708-JR-PE-01, DEL DISTRITO JUDICIAL DE
LAMBAEQUE-MOTUPE-2017.

2.3. MARCO CONCEPTUAL


Calidad: es aquella cualidad de las cosas que son de excelente creación, fabricación o
procedencia, Calidad describe lo que es bueno, por definición, todo lo que es de calidad
supone un buen desempeño. Todo lo que posee un cualitativo de calidad supone que ha
pasado por una serie de pruebas o referencias las cuales dan la garantía de que es óptimo.
Sin embargo esta es la definición directa, producto de la generalización de lo bueno y
bonito que la sociedad ha categorizado, la mirada indirecta nos arroja una definición más
general. La calidad es aquella condición del producto ya realizado la cual nos indica que
tan bueno o malo puede ser. (definista , 2014)

Corte Superior de Justicia: Cortes Superiores

Realizan el juzgamiento o juicio oral en los procesos ordinarios.Resuelven las apelaciones


realizadas sobre las sentencias de los juzgados especializados o mixtos. (Peru, s.f.)

Distrito Judicial:
Expediente. Es la carpeta material en la que se recopilan todos las actuaciones judiciales
y recaudos que se establecen en un proceso judicial de un caso concreto (Lex Jurídica,
2012).

Un distrito judicial es la subdivisión territorial del Perú para efectos de la


organización del Poder judicial.

Cada distrito judicial es encabezado por una Sala Superior de Justicia.


Este país cuenta con 34 distritos judiciales

Juzgado Penal: Es aquel órgano envestido de poder jurisdiccional con competencia


establecida para resolver casos penales (Lex Jurídica, 2012).

Medios probatorios. Son las actuaciones que, dentro de un proceso judicial, cualquiera
que sea su índole, se encaminan a confirmar la verdad o a demostrar la falsedad de los
hechos aducidos en el juicio (Lex Jurídica, 2012).

Primera instancia. Es la primera jerarquía competencial en que inicia un proceso judicial


(Lex Jurídica, 2012).
Procesal Penal: Son los competentes para celebrar juicios respecto de los
procedimientos que han sido instruidos (tramitados) por los Juzgados de Instrucción o de
Violencia contra la mujer.

A tenor del artículo 14.3 de la ley procesal penal es competente para el conocimiento y
fallo de las causas por delitos a los que la Ley señale pena privativa de libertad de duración
no superior a cinco años o pena de multa cualquiera que sea su cuantía, o cualesquiera
otras de distinta naturaleza, bien sean únicas, conjuntas o alternativas, siempre que la
duración de éstas no exceda de diez años, así como por faltas, sean o no incidentales,
imputables a los autores de estos delitos o a otras personas, cuando la comisión de la falta
o su prueba estuviesen relacionadas con aquellos

Sala Penal. La Sala Penal Nacional es un órgano jurisdiccional ordinario y especializado


con competencia a nivel nacional que ha sido creado para la tramitación y juzgamiento
de los delitos de Terrorismo, habiéndosele ampliado la competencia para conocer aquellos
otros cometidos contra la Humanidad y demás delitos comunes que constituyan casos de
violación a los derechos humanos, así como los delitos conexos a los mismo (Peru, s.f.)

Segunda instancia. Es la segunda jerarquía competencial en que inicia un proceso


judicial (Lex Jurídica, 2012).
Tercero civilmente responsable. El artículo 110 del Código Penal establece que la
responsabilidad civil por hechos delictivos comprende la restitución, la reparación del
daño y la indemnización de los perjuicios materiales y morales.
El perjudicado puede optar entre personarse o no en las actuaciones, como acusador
particular o actor civil, para reclamar la reparación del perjuicio (artículos 109 y 110 de
la Ley de Enjuiciamiento Criminal). (Padilla, s.f.)

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