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Consideraciones en el cálculo

estructural de los silos de hormigón


armado y metálicos
Por JUAN RAVENET, Dr. Ingeniero Industrial por la Universidad Politécnica
de Barcelona (España) y CARLOS CALIL, Dr. Ingeniero Civil,
Profesor Universidad de Sao Carlos, Sao Paulo (Brasil)

1. INTRODUCCION

Para la determinación de presiones en un silo debe prestarse especial


atención a las consideraciones estructurales de cálculo y de modo asocia-
do a la rotura de la estructura del silo.

Debe hacerse una distinción entre silos metálicos y silos de hormigón


armado, con relación a la respuesta estructural.

Los silos de hormigón armado son normalmente de gran altura o de


grandes dimensiones, con capacidades hasta las 10.000 t , y su proyecto se
realiza siguiendo las consideraciones relativamente simples, aunque los
silos muticelulares y el almacenamiento de productos pulverulentos han
complicado su cálculo debido a la aparición de cargas no uniformes a lo
largo de la sección recta con momentos de ovalización y de empotramiento.

Los silos metálicos, de cualquier geometría, son más variables, ya que


el proyectista tiene la posibilidad de alterar la forma estructural mediante
la colocación de anillos rigidizantes, columnas verticales, uniones en techo
y tolva, así como placas curvas, paneles corrugados y detalles de soporte.

El incremento de presiones puntuales ha sido tratado como si las pre-


siones se extendiesen a todo el silo, dando origen a hipótesis equivocadas
que pueden conducir a estados de tensiones erróneas en las estructuras.
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2. SILOS DE HORMIGON ARMADO

Los silos de hormigón armado se construyen con paredes de espesor


suficiente (tengamos en cuenta que la relación radio/espe,sor es igual a
25/60).

Las paredes de estos silos están solicitadas por grandes momentos


originados por la falta de apoyos y variaciones locales de cargas. Una se-
gunda consecuencia del espesor en la pared es que las paredes responden
al material almacenado de una manera rígida (salvo que el silo tenga un
gran diámetro, en cuyo caso se producen deformaciones elasto-plásticas) .
El hormigón tiene poca resistencia a la tracción y por tanto las accio-
nes que se producen en silos cilíndricos originan presiones radiales que
precisan la colocación de armaduras. Las fisuras con espesor superior a
0,3 m m son peligrosas y nos indican que las armaduras han entrado en pe-
riodo plástico, lo cual nos conduce a una interacción solicitaciones-defor-
maciones-fisuras, con serio peligro para la estabilidad de la instalación.
Las fisuras también se producen por asientos diferenciales en la ci-
mentación, cambios bruscos de temperatura a lo largo del año y retraccio-
nes en los procesos de construcción. Las fisuras permiten la entrada de
agua que corroe las armaduras; el agua puede alcanzar el interior del silo,
originando graves problemas en el producto almacenado.

En el año 1980 se realizó en Suecia un estudio de todos los silos de


hormigón armado del país. El 60 Yo presentaban importantes fisuras y el
10 O/O tenían problemas de entrada de agua.

El tipo de rotura de las paredes de los silos de hormigón armado se


realiza por deformación dúctil de las armaduras o bien por pérdida de re-
sistencia en la conexión de las armaduras por falta de adherencia arma-
dura-hormigón o bien por descascarillado de la armadura.
Estos casos dan origen a roturas catastróficas (Figs. 1 y 21, debido a
que las fisuras cambian la rigidez relativa de las diferentes cargas en la
estructura de hormigón, respondiendo generalmente a las hipótesis de
cá Icu I o.

El cálculo tradicional corresponde a una armadura circunferencia1 para


resistir a tracción las tensiones de membrana o anulares, calculando cada
sección del silo en altura como un anillo. Las tensiones de compresión de-
bidas a las fuerzas de rozamiento son fácilmente resistidas por el hormi-
gón de la pared a compresión, aunque en silos de altura superior a los 60 m
empiezan a alcanzar valores que rozan los límites admisibles.
Recientes investigaciones en la obtención de cargas y ensayos reali-
zados en la determinación no uniforme de las presiones laterales, debidas
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CEMENTO HORMlGON

Figura 1

a vaciados excéntricos, nos indican que las armaduras anulares deben ser
dobles (una en cada cara de la pared) para poder absorber los momentos
flectores circunferenciales unidos a efectos de tracción.
Los tipos de rotura y procedimientos de cálculo han conducido a reglas
para el cálculo de presiones en las paredes, haciendo especial énfasis en:

a) La máxima presión uniforme normal, y la envolvente de presiones.


b) Las presiones en silos altos, como son los de hormigón armado,
deben calcularse en sus valores máximos-maximorum.
c) Momentos flectores circunferenciales producidos por presiones
no uniformes a lo largo de la circunferencia y que se agravan en
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el caso de productos pulverulentos cohesivos, cuando se produce


un flujo de conducto junto a la pared del silo y de diámetro Di
[Fig. 3 ) .

El silo tiene a lo largo de la circunferencia una presión Pz mayor que


la presión P, en el interior del conducto de vaciado.
El valor de la presión P, con un valor del coeficiente de sobrepresión
igual a 2, ya que la masa está en movimiento, vale:
1138 -
CEMENTO HORMIGON

I-. 0.25 o.50


%D

-P

1. Figura 3

El valor de la presión del resto de la masa que s e encuentra en repo-


so, tiene como valor:

Siendo:

P, = Presión dinámica en el conducto de diámetro Di en kg/m2.


Pz = Presión estática en el silo de diámetro D en kg/m*.
y = Densidad en kg/m3.
A2 = Angulo de rozamiento producto almacenado-pared.

Si profundizamos en el tema, el ángulo de rozamiento A2 en la fórmu-


la ( 1 ) debería ser dinámico y, por tanto, diferente al valor de la fórmula (2)
estático.
La diferencia de presión vale:
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El valor de la fuerza F es:


y . D2 2 DZi Di
F = (Pi-Pr) 'Di=
4 ' t g (A21 D
Di
F es máxima para -= 0,25
D

Di
F = O para - = 0,5
D
y . D2
Fmex = - 0,125 '

4 ' t g (A2)

Si suponemos que el valor de la fuerza F se concentra en un punto,


el momento vale:

El momento máximo valdrá:


y . D3
M = -0,125
8 . t g (A2)

En general, el momento máximo vale:

M,á, = - 0,125 F . D

El momento mínimo:

Mmin = + 0,090 F D '

Se han de colocar armaduras complementarias que nos permitan resis-


tir estos momentos y que se añadirán a las armaduras previstas para sopor-
t a r los esfuerzos de tracción pura.

En las figuras 4, 5 y 6 podemos ver diversas instalaciones en hormigón


armado unicelular y multicelular.

3. SILOS METALICOS

Las recomendaciones y normas sobre silos metálicos cilíndricos son


muy reducidas de acuerdo con la bibliografía existente, ya que el reducido
espesor de las paredes, los problema de pandeo y falta de rigidez transver-
sal hacen que el cálculo sea complejo (Rotter, 1985).
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CEMENTO HORMIGON

Figura 4

Figura 5
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Figura 6

Los silos metálicos cilíndricos pueden considerarse como finas estruc-


turas de cáscara con una relación radio-espesor de la pared comprendida
entre 250 y 2.000.

Estas estructuras responden de forma flexible a las solicitaciones de


cargas producidas por los productos almacenados.

La condición indispensable de cálculo de estos silos en forma de


membrana y que se realiza aplicando la teoría de elementos finitos apoya-
dos por ordenadores, es que las presiones sean uniformes a lo largo de la
circunferencia de una sección recta. Estas estructuras también admiten
coeficientes de sobrepresión. siempre que sean uniformes.

Como se comprende, cualquier producto almacenado no se comporta


como un producto uniforme debido a la presencia de elementos extraños
y variaciones de la humedad, que producen en mayor o menor escala una
distribución no uniforme de presiones sobre las paredes del silo, y que ori-
ginan momentos que la fina pared en forma de cáscara no puede absorber,
debido a su reducida rigidez transversal.

Cualquier silo metálico cilíndrico. de pared lisa, al cabo de pocos años


presenta importantes deformaciones, tal como puede verse en las figu-
ras 7 y 8.
7

1142 -
CEMENTO HORMIGON

Figura 7

Figura 8
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Figura 9

Paralelamente a este fenómeno, tenemos el efecto de las fuerzas de


rozamiento, que produce importantes cargas verticales de compresión so-
bre las paredes, que debido a su reducido espesor producen el pandeo de la
pared, con deformaciones que pueden llegar a ser tan importantes, que el
silo entra en periodo de colapso (Fig. 9 ) .

La forma más sencilla de resolver el problema de la rigidez transver-


sal es construir silos corrugados, que hasta un cierto diámetro nos per-
miten absorber los momentos de ovalización, aunque para grandes diáme-
tros, fuerzas externas como puede ser el viento, deforman la instalación
(Fig. 10).

Por tanto, para grandes diámetros, tanto en silos de paredes lisas como
corrugadas, necesitamos colocar anillos que nos aumenten la rigidez trans-
versal y nos permitan absorber los momentos de ovalización.
,
Existe una fórmula obtenida por Jenike, que nos permite determinar
el radio crítico de un silo metálico de chapa lisa en función del espesor
de la pared y en el supuesto de que esté sometido a vaciados excéntricos
similares a los contemplados en la figura 3.

R.. -
-
CTltlCO
32,4
1-p2
'-.(
0-

w
+)'.tg (A2)
1144 -
CEMENTO HORMIGON

Siendo:

Rcritico = Radio crítico del silo.


0- = Coeficiente de trabajo del acero en la pared del silo.

w = Densidad del producto almacenado.


t = Espesor de la pared del silo

p = Módulo de Poisson.
A2 = Angulo de rozamiento producto almacenado-pared.

Referente a las fuerzas de rozamiento, se ha podido verificar que los


silos cilíndricos de chapas corrugadas no absorben fuerzas de rozamiento,
por lo que es necesario colocar refuerzos verticales en toda su altura.
Los silos cilíndricos de chapa lisa, se construyen en la mayoría de ca-
sos sin refuerzos verticales, aunque muchos de ellos se ven afectados por
el pandeo local de la pared y no precisamente en la parte baja del silo, sino
en muchas ocasiones en partes altas (Fig. 11).
Se están estudiando, mediante la aplicación de la teoría de elementos
finitos, sistemas de cálculo para determinar las fuerzas máximas que so-

Figura 10
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Figura 11

porta una pared del silo de espesor definido en función del diámetro y de
la altura.
De todas formas, el problema es complejo y en muchos casos se acude
a la experimentación (Fig. 12) aunque no siempre se consigue reproducir
fielmente lo acontecido en un silo real.
De lo que verdaderamente sí se puede hacer un estudio serio y real es
del resultado de los estudios realizados en silos que han tenido problemas
de deformaciones permanentes e incluso colapso. En los últimos años son
muchas las instalaciones que han presentado problemas (Fig. 13) y nos
han permitido, apoyados en la experiencia y en la amplia bibliografía exis-
tente, emitir nuevas teorías.
Debido al valor pulsante de las presiones laterales y de las deforma-
ciones en las paredes por pandeo debido a fuerzas de rozamiento, se ha
podido determinar la formación de arcos o bóvedas que, en el caso de pro-
ductos granulares, son inestables y que actúan sobre la pared tiempos infi-
nitesimales pero suficientes como para producir su deformación. Es nece-
sario por tanto aplicar en el límite como fuerzas de rozamiento el peso total
de la masa almacenada, con un coeficiente de seguridad de 1 , l O .
Un silo cilíndrico se comporta como una cáscara cilíndrica cuya resis-
tencia depende del pandeo y compresión axial, y aumentada sustancialmen-
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CEMENTO HORMIGON

Figura 12

Figura 13
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t e cuando la cáscara se presuriza internamente: cuanto mayor es la pre-


sión, mayor e5 la resistencia. El calculista debe calcular la máxima presión
que puede utilizar' para que la cáscara cilíndrica resista el pandeo y la com-
presión axial de la pared (Norma alemana DIN 1055).
La segunda causa de la compresión axial conduce a la rotura por pan-
deo, debido a que la presión puede variar a lo largo de la circunferencia
(Jenike, 1967) y [DIN 1055).
Debido a que la industria se encuentra en muchas ocasiones necesita-
da de silos para almacenar cualquier producto, generalizando el cálculo, y
de acuerdo con la figura 14, el silo cilíndrico debe contemplarse como una
cáscara con refuerzos verticales para absorber las fuerzas de rozamiento
y reducir el pandeo y anillos horizontales para resolver los problemas de
ovalización por fuerzas horizontales repartidas no uniformemente.
Los silos metálicos, por regla general, tienen una relación altura-diá-
metro que oscila entre 0,56 y 2.
x<

Para estas estructuras el valor de K, relación entre presiones horizon-


tales y verticales, e s d e 0,4. Tengamos en cuenta que Calil (1982) en los
ensayos realizados para la obtención de su tesis doctoral obtuvo valores
de K que oscilan entre 0,22 y 0,80 y en función de la relación altura-lado
(0,5 a 7) y del tipo de material almacenado [productos granulares y pul-
verulentos cohesivosl .

Figura 14
1148 -
CEMENTO HORMlGON

Para el cálculo de un silo cilíndrico debe tenerse en cuenta:

a) Cálculo de presiones laterales de llenado, de acuerdo con la teo-


ría de Janssen.

b) Coeficientes de sobrepresión en el cálculo de presiones laterales


durante el vaciado, variables en función de la relación altura-lado.

c) Valores máximos-maximorum de las fuerzas de rozamiento.

d) Especial atención a la posibilidad de vaciados excéntricos.

e] Comprobación en silos de gran diámetro de los efectos de vien-


t o a silo vacío y en la zona próxima a dos silos por canalización
del aire.

4. SILOS METALICOS CUADRADOS

Los silos metálicos cuadrados son normalmente del tipo multicelular,


de tal manera que existe una interacción entre las celdas y todo el conjun-
to; incluyendo la cimentación, debe estudiarse como un elemento, que lo-
calmente se ve sometido a cargas locales, que producen desplazamientos
elásticos que afectan al resto de la estructura.

En cimentaciones se producen asientos diferenciales que afectan al


resto de la estructura mediante tracciones y momentos en los nudos de
t
empotramiento.

El silo metálico cuadrado se construye con paredes relativamente del-


gadas en cuanto a espesor y corrugadas para aumentar su resistencia y
nudos de atado rígidos y que absorben los momentos de empotramiento.
I Las presiones laterales de llenado y sobrepresiones de vaciado, ya
I sean uniformes o excéntricas, son absorbidas por las paredes a flexión,
produciéndose momentos en los empotramientos que serán variables en
~

función de la variación de las presiones y que producirán desplatamientos


infinitésimos que la inercia de la estructura absorberá.
l
Estas instalaciones se construirán inicialmente con tubos de vaciado
estático para evitar sobrepresiones de vaciado. En la figura 15 puede verse
una celda averiada en fase de reparación con un tubo de vaciado estático
perforado y situado junto a l a pared.

La colocación de tirantes interiores para reducir la luz de la pared es


válida para el almacenamiento de productos granulares, pero puede ser
muy peligroso si almacenamos productos pulverulentos cohesivos, t a l como
puede verse en la figura 16.
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Figura 15

Figura 16
1150 CEMENTO - HORMIGON

Figura 17

Silos construidos con espesores de pared insuficiente y destinados al


almacenamiento de productos granulares pueden presentar deformaciones
a lo largo de la pared (Fig. 17). Si se almacenan productos pulverulentos
cohesivos, la deformación de la pared es puntual y debida a la caída de bó-
vedas (Fig. 18).

Las caídas de bóvedas en silos con altura superior a los 15 m pueden


originar deformaciones por sobrepresiones en la parte baja del silo hacia
afuera y deformaciones por depresiones en la parte alta del silo y hacia
dentro de l a pared (Fig. 19).
Figura
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CEMENTO HORMIGON

BlBLlOGRAFlA

ACI COMMITTEE 313: Bin wall design and construction. ACI Journal Proceeding. Vol. 65.
N." 7, julio 1968. Págs. 507-512.

CALIL, C.: Sobrepresiones en las paredes de los silos para almacenamiento de productos
pulverulentos cohesivos. Tesis Doctoral, octubre 1982. Universidad Politécnica de
Barcelona.

JANSSEN, H. A,: Experiments on grain pressures in Silos. Verein Deutscher Ingenieure,


Zeitschrift. Vol. 39, agosto 31, año 1895. Págs 1.045-1.049.

JENIKE, A. W.: Denting of circular bins with excentric drawpoints. Proceedings. ASCE.
Vol. 93. ST1, febrero, ario 1967. Págs. 27-35.

NORMAS ALEMANAS DIN 1.055: Hoja 6. Años 1964 y posteriores hasta 1987

RAVENET, J. Silos, teoria, investigación, construcción. Editores Técnicos Asociados. 1977.


Barcelona.

RAVENET, J. Silos, Deformaciones, fallas, explosiones. Prevención de accidentes. Editores


Técnicos Asociados. 1978. Barcelona.

RAVENET. J. Silos. Flujo de vaciado de sólidos. Formación. de bóvedas, efectos. Editores


Técnicos Asociados. 1983. Barcelona.

.,
~~~ ~

La colección completa de CEMENTO-HORMIGON puede consultarse en

BARCELONA:
Biblioteca del Archivo Histórico de la Ciudad.
Plaza de la Catedral y calle de Santa Lucía, 1 (Casa del Arcediano).
Biblioteca de la Asociación Nacional de Ingenieros Industriales.
Agrupación de Cataluña, Vía Layetana, 39.

MADRID:
Biblioteca Nacional (Sección de Revistas).
Biblioteca del Instituto Eduardo Torroja de la Construcción
y del Cemento, Serrano Galvache, s/n.

BUENOS AIRES:
Biblioteca del Instituto del Cemento Portland Argentino.
Calle San Martín, 1137.

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