no encontraba salida menos quien me ayudara //eran gruesas cadenas irrompibles cadenas las que el vicio me ataba// pero un día el buen Jesús buen Jesús paso por aquel lugar y al mirar mi condición mi condición el de mi tuvo piedad me dijo hijo no temas te he venido a rescatar //y al instante las cadenas se cayeron de mi vida y Sali de aquel lugar// Ahora sigo a Jesucristo que me dio la libertad