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Hilary Putnam

El ptagmatismo
Un dnbateabigrto
Editorial Gedisaofrece
EL PRAGMATISMO
los siguientestítulos sobre

FILOSOFIA

Un debate abíerto
Ilrnny Purnm¡ El pragmatismo: un debateabierto
Mnnurl Cnuz (corrlp.) Toleranciao barbarue
Jnrr-PnRnBDupuy El sacrificio y la envidia
MrcHmr D. Rrs¡,¡tx Elecciones
En¡¡srTucp¡,ruurr Leccionesde ética Hilary Putnam
Enxsr TucsNoHlr Ser-Verdad-Acción
Ensayos
filosóficos
Jrlxxo Htxrnx¡ El viajefilosófico móslargo
DeAristóteles a VirginiaWoolf
Hlns RunrFrscsen Elftnal de losgrandes
Y OTROS proyectos

D. C. DnNnnrr Contenidoy conciencía


BpnnnnnSrcHÉne Historias del mal
Jur-roCrnn¡n¡ Crítica de la moral afirmativa
Krrnno Ntsnn¡ Indagacióndel bien
GBunn Dn¡-no¡L¡,n Leer a Peirce hoy
D¡vrn Glursrcn La moralpor acuerdo
MrRrr¡.¡Herueccrn Introducción a la metafisica
Gt¡lrNrVlrnuo I-a secularizaciónde lafilosofia
Hermenéutica y posmodernidad

gedi$,*
Ro¡BnrNoz¡cr Meditacionessobrela vida
JoNEmren fuicios salomónicos
TÍtulo del origtnal en rtalrano: It pragmattsmo: un. questione
aperta
Eütorl Laterza, Roma-Barl
O 1992, Gtus. Laterza & Flgll Spa, Roma_Barl. Spanish
language
edtüon arranged through the meátatton of Eulam. fit"r^ry
ni.""y.
Thts book comes of the cooperaUon between laterza
euUtistring
House and sigma Tau Foundation in the "tezrone ltaliane,'
serles.

Tradtrcclón: Roberto Rosasptnt Reynolds


Correcctón e sttlístico.: Margartta N. Mizra¡t
Dtseno de cubíerta.. Sebastián putggrós
Reconocimientos

Prlmera edtción, enero 1999, Barcelona


Primerareimpresión:enerode 2006, Sevilla Deseoexpresarmi más sinceroagradecimiento,tanto
a Pino Donghi, Enrico Mistretta y Lorena preta, comoa la
Derechos reservados para todas ras edicrones en castellano Fundación Sigma-Tau, por haber propuesto,-enla serie
"Lezioni italiane" la idea de un ciclo de conferenciassobre
@ EditorialGedisa,S.A.
mis actualesinteresesfrlosóficos.Agradezcotambién a los
PaseoBonanova,g l"-1" profesores carlo cellucci, Emilio Garrone y Eugenio
08022 Barcelona(España) Lecaldano,de la universidad de los Estudiosdé Romá*La
Tel. 93 253 09 04
Fax 93 253 09 05
sapienza", así comotambién a los otros estudiososy estu-
Correoelectrónico: gedisa@gedisa.com diantes que han participado en los debatesposterilres, y
http://www.gedisa.com que me han dado la oportunidad de desarrollar algunos
argumentos en las notas al texto.
H. P.
ISBN: 84-7432-674-5
Depósitolegal:B-53283-2005E.U.
Cambridge, Massachusetts
Impresoen Publidisa Harvard University, Igg2

Impreso en España
Prtnted tn Spain

Queda prohiblda la renroducctón totar o parcral por cuarquter medfo


de lmprestón, en forma rdénttca, extractada o modihcada,
en castelrano
o cualquier otro idloma.
Indice

RnconocuvrrpNTos .......--.....
7

OespnvecroNns
TNTRoDUCToRTAS ...... 11

1. La vigencia de William James ............17


La verdad ..................22
E l h o l i s m o. . . . . . . . . . . . . ....27
El rea1ismo............. . . .3 5
Filosofíay vida ..........38

2. ¿Wittgenstein era un pragmático? ........ ............45


Kant....... ....48
Rorty y Wittgenstein ................
53
Algo más sobre Wittgenstein y Kant ..... 60
La primacíade laraz6n práctica .............64
El fin ético de la filosofía del último Wittgenstein . 68

3. El pragmatismo y el debate
contemporáneo ......85
Sí, pe r o,¿ hem osper di doel m undo?.........................
95
La respuestapragmáticaal escepticismo............... 99
El r elati v i s m or or ti ano........... 106
................

I
OBSERVACIONES
INTRODUCTORIAS
En la actualidad, tendemosa considerar plenamente
asumidas las ideas de tolerancia y pluralismo. Por otra
parte, si tomamosen cuenta el hechode que en la antigua
Atenas,o enel ImperioRomanotardío,existíauna enorme
pluralidad de puntos de vista y un vasto contraste de
opiniones diferentes, probablemente pensaremosque se
trata de un indicio de la vitalidad de aquellas sociedades.
Sin embargo, muy pocos comprenden que ésta no es la
forma en la cual ellos considerabanla cuestión.Los pensa-
dores clásicosveían la diversidad de opiniones como un
signode decadenciay de herejía; sóloa partir del Iluminis-
mo hemos podidojuzgarla un bien positivo. Un autorl ha
sostenidoque, únicamente cuando la sociedadha comen-
zado a cimentarse "mediante una alianza de intereses
personales esclarecidos,en lugar de propiciar creencias
religiosasymorales compartidas",entonces,y sóloenton-
ces,es posible que "el florecimiento de la diversidad y el
pluralismo, que en el pasadosóloexistía comosubproduc-
to y síntoma de la declinaciónpolítica, pueda ser aceptada
por vez primera comouna forma de prosperidad social".Si
bien este autor exagera (la fuerza que consolida los esta-
dosliberales modernosesla del sentimiento y la tradición,
en un grado no menor que la de los intereses personales,
13
esclarecidoso no), y si bien tampoconiega que la creencia cvitar un escepticismomoral corrosivo, sin recaer en el
en la tolerancia es, en sí misma, una "creencia moral irLrtoritarismomoral. Y son precisamente esascontrover-
compartida", así como también una creenciaimportantí- sias las que en los últimos años me han reconducido al
sima, no es menos cierto que las sociedadesmodernas no ¡rragmatismo:a los escritos de Peirce, James y Dewey e,
se han mantenido unidas por una única y compartida incluso, a los de Wittgenstein, cuya obra, comosostendré
concepciónglobal del mundo. No existe una religión que rrlo largo de todo este trabajo, tiene una marcada afinidad
asuma por sí sola esta tarea, y si bien todavía existen t:onel pragmatismo norteamericano, aunque dicho autor
creenciasmorales compartidas, no hay ninguna creencia rro estuüera dispuesto a dejarse clasificar como "ptag-
moral que seaincontrouertible.Es más;exceptodentro de mático".
una minoría reaccionaria,nadie parececreer que nuestra En el primer capítulo trato de explicarla importancia
sociedadvaya a encontrar un motivo propio para congre- del pensamiento de William James, concentrándomepar-
garse en torno a un sistema incuestionado de creencias ticularmente en la forma en que hechosy valores deben
morales y religiosas. Apreciamos la libertad cuando se ser consideradosinseparables, pero preparo asimismo el
trata de elegir nuestros "destinos" (para utilizar un térmi- terreno para la discusión relativa a la inseparabilidad
no sugeridoporAgnes Heller) ,'y casola libertad no entre "hecho y teotía", y entre "hecho e inteipretación",
"nese de elegir un ofrcio
seconcibesimplemente comola libertad que se trata en el capítulo siguiente. En el segundo
o una profesión,sino que involucra también la libertad de capítulo, intento situar la frlosofía del último Wittgen-
decidir por nosotrosmismos respectode nuestros valores, stein, no sólo respectodel pragmatismo, sino también en
nuestras metas, norrnas concretas e incluso, dentro de relación con Ia historia de la frlosofía; y en el tercero y
ciertos límites, nuestras costumbresy nuestros hábitos de último capítulo buscoconectarel legadode Peirce,James,
vida. Dewey y Wittgenstein con algunos debates frlosóficos
Lo que llamamos "Ilustración" ha sido, en gran medi- contemporáneos.Espero,especialmente,convencerlosdel
da, un movimiento intelectual destinado a proveer algún hecho de que el pragmatismo ofrece recursos mucho
tipo de fundamento estable para esta "sociedadabierta"; mejores que las degradadas alternativas que con dema-
no solamente un fundamento político e histórico, sino siada frecuencia aparecen hoy como las únicas posibi-
también epistemológico, un fundamento que incluyese lidades existentes, ya sea desde el punto de vista frlosó-
"argumentos acerca de la falta de certeza de nuestros fico como del político.
conocimientos morales y religiosos".s Y los problemas
generados por el Iluminismo son todavía los nuestros: Notas
apreciamosla tolerancia y eI pluralismo, pero nos preocu-
pa el escepticismoepistemológicoque los ha acompañado. 1. A. M. Melzer, "Tolerance l07",The New Republic, junio de 1991.
2. Cfr. A. Heller, A Philosophy of Morals , Oxford, Basil Blackwell,
Leshago presentetodoesto,porquelas cuestionesque 1990.
trataré aquí no son puramente teóricas. Es una polémica 3. A. M. Melzer, op. cit., pp. 11 ss.
abierta el debate sobre si una sociedad esclarecida puede
L4 15
1

I,AVIGENCIA
DE WILLIAM JAII'IESI
William James es una figura destinada a no desapa-
recerni opacarsejamás;no sóloporquenunca ha perdido
vigencia, sino porque las reaccionessuscitadas por sus
trabajos después de su muerte, ya sean favorables o
desfavorables,han sido sorprendentementeapasionadas.
F,'nsufftstoria de la filosofía occidental, Bertrand Russell
ridiculizó las concepcionesde James acercade la verdad.
Más aún, un prestigioso contemporáneo de Russell es-
cribió: "El punto de vista que me parece reconciliar las
tendenciasmaterialistas de la psicologíacon la tendencia
antimaterialista de la física es el de los nuevos realistas
norteamericanos.Esasideas[...],en gran medida,derivan
de William James, y antes de ir más allá, sería conve-
niente considerar la doctrina revolucionaria que éI sos-
tiene. Creo que esta doctrina contiene una nueva verdad
importante, y lo que diré a continuación estará, en una
parte considerable,inspirado en ella".2
Pero;¿quién era este contemporáneo?¡Puesno era ni
más ni menosque el mismo Russell!El deEl andlisis de la
mente.Sin embargo,por respeto hacia Russell, es preciso
decir que no existe contradicción alguna; él despreciaba
las ideas de James sobre la verdad, de las cuales no
presenta más que una caricatura, pero admiraba su "mo-
19
nismo neutral", que es el término russelliano para lo que rrido; creo que su modo de frlosofar propone posibilidades
James llamaba "empirismo radical". Y, en realidad, según hace ya mucho tiempo olvidadas, y que esta tendencia
me ha relatado recientementeI.B. Cohen,cuando Russell indica las vías de escapepara salir de algunos antiguos
enseñabaen Harvard, en 1936, "los protagonistas de sus "embrollos" filosóficosque continúan afligiéndonos.Creo
leccioneseran siempre dos: Platón y James". que pronto llegará el momento de consideraratentamente
Más cercade nuestra época,en 1983,Martin Gardner el pragmatismo, el movimiento del cual James ha sido,
-notable autorde un repertorio dejuegosmatemáticosen probablemente,el mayor exponente.
la publica ciónScientific Arnerican y desmitifrcador,tanto Quiero adelantar -y de esto estoy seguro- que este
de la telepatía como de cualquier cosa que él considere primer capítulo no tiene la pretensión de ser el estudio
ciencia deshonesta- ha dedicado un capítulo de un libro detallado y penetrante que ustedes quisieran; es, más
referido a sus conviccionesfrlosófrcaspersonales,sa criti- bien, un anticipo para un proyecto sobre el tema, la
car la concepciónde James acercade la verdad. Gardner, presentaciónde un argrrmentoque nos induzca a tenerlo
me atrevo a precisar,no consideraa Jamesun deshonesto; presente con miras a un proyecto digno de atención.
sin embargo,segúnel mismo Gardner, "...existíaen éI una Puedocomenzarindicando una de las razonespor las
suerte de ceguera[...] al enfrentarse con esasconfusiones cuales la frlosofíade James suscita reaccionescontradic-
que son inevitables cuando un frlósofo toma una palabra torias parecidas.Entre las características principales de
dotada de un significado universalmente compartido, y le esta filosofía se encuentra el holismo; James refuta de un
dauna acepciónnuevaeinsólita. Los pragmáticosestaban modo claro, aunque implícito, diversos dualismos típicos:
convencidos,naturalmente, de que al redefrnir la verdad hecho, valor y teoría están todos consideradoscompene-
comoel concursode tests por la verdad (sic),se derivarían trados e interdependientesentre sí.6(En el tercer capítulo
grandes ventajas, pero los resultados fueron, en definiti- defenderéla idea de que la interpretación -de significa-
va, decenasde desconcertantesdiscusionesen las cuales dos y formas de vida- y el conocimientode los hechosse
se perdió una increíble cantidad de tiempo".4En el mismo compenetrande modo similar, de acuerdocon una convic-
año, 1983, Jacques Barzun publicó el hermoso libro A ción que creoqueJamesaprobaría.)Otra de las caracterís-
s (Un p aseoconWilliam James),
S tr oll w ith William. J arr¿e ticas de la filosofía jamesiana -característica que deso-
en reconocimiento a la "originalidad y el vigor intelectual rientó al menos a uno de sus principales seguidores-7 es
con que James afrontó y venció a algunas de esas viejas una fuerte tendencia hacia lo que los frlósofos solían
Esfinges que desafian al viajero terrestre, como siempre llamar realisrnodirecto, es decir, la doctrina según la cual
bajo pena de muerte".5 la percepciónconsidera (normalmente) objetosy aconte-
Mi intención, al sumanne a esa nube de aprobación y cimientos "de afuera", en lugar de "datos sensoriales"pri-
crítica que revolotea alrededor de Ia figura de William vados o internos. El holismo y el realismo directo pueden
James, no es simplemente Ia de rendir homenaje a un parecer incompatibles; así fue como le pareció al filósofo
predecesor. Creo sinceramente que James ha sido un oxonienseF. C. S. Schiller, el seguidor al que me refería
pensador de gran fierza, como nadie en el siglo transcu- anteriormente, para quien el realismo representaba una
20 2L
suerte de retroceso por parte de James, Y €s así como le todos los órdenes y en general, por supuesto, pues todo lo que
responde satisfactoriamente a la experiencia en perspectiva
pareció también a Bertrand Russell, para quien ambas
no responderá de modo necesario a todas las ulteriores expe-
corrientes representaban dos momentos distintos en el riencias tan satisfactoriamente. La experiencia, como sabe-
pensamiento de James: el primero de ellos descarriado y mos, tiene modos de salirse y de hacernos corregir nuestras
el segundorico en agudeza.Tengo la plena convicción, así actuales fórmulas.lo
como también Ia tiene Ruth Anna Putnam, con quien
estamos llevando adelante un estudio sobre la frlosofía de No tengo intención de poner a prueba vuestra pacien-
James, que,lejos de ser incompatibles, estosdos aspectos cia con un análisis textual exacto-de ahora en adelante
del pensamiento jamesiano son interdependientes; cada solamente mencionaré, en forma dogmática, lo que creo
uno de ellos presupone al otro, y cada uno es necesario que es el pensamiento de James, sin presentar "prue-
para la correcta interpretación del otro. Sin embargo' no f¿s"- pero no puedo dejar de llamar vuestra atención
intentaré fundamentar en detalle esta propuesta inter- sobrecómola falta de comprensiónde las ideas de James
pretativa; en lugar de ello, trataré de darles solamente por parte de Russell se asemeja a una frecuente incom-
una idea de en qué consisten esosdos aspectos. prensión de un pasaje igualmente famoso de Wittgen-
stein, cuandoescribe:ll "Paratnagro,n cantidad de casos
La verdad -aunque no para todos los casos- en los que nos basa-
mos,la palabra'signifrcado'sepuededefinir así: el signifi-
El pasaje que con mayor frecuencia se extrae forzada- cadode una palabra no es más que su uso en el lenguaje".
mente del contexto, y se usa a modo de bastón para Aquí, muchos estudiosos suelen ignorar la salvedad
castigar a James es el siguiente: "Lo'verdadero'e¡ sólo "aunque no para todos los casos",y superponensu propia
aquello que conviene a nuestro modo de pensar [.u]-94-pl noción de "uso" a la expresadapor Wittgenstein, y termi-
largo plazo, y en lo inmediato, naturalmente". Esta es, nan por afirmar que Wittgenstein esbozó una "teoría"
literalmente,la forma en que Russell refiere el pasaje.Lo segúnla cual "el significadoes el uso" ¡cosaque desvanece
que James afirma, según sus críticos' es que si las con- toda posibilidad de comprender lo que Wittgenstein real-
secuenciasde creer quep sonbuenaspara la humanidad,s mente afrrma! De la misma manera, Russell no hace otra
entoncesp es verdadero. Es por eso que Russell escribe: cosaque ignorar las frases:"dicho brevemente"y "ett casi
"Encuentro grandes difrcultades intelectuales en esta todoslos órdeneg"-sig¡es evidentesde que estamosante
doctrina. Da por supuesto que una creencia es uerdadera una aseveración temática, y no ante una tentativa de
cuando sus efectosson buenos".9Sin embargo, esto no es formular una definición de "verdadero"- sustituyéndolas
lo que James quiere signifrcar, Y, €Drealidad, tampoco es por la propia noción de que la "conveniencia" es la de
lo que James afirma. Lo que él efectivamente escribió es: James, y terminando por decir que James formuló la
teoría según la cual "verdadero" significa "aquello que
"Lo uerdadero", dicho breuetnente, es sólo eI expediente de
nuestro modo de pensar, de igual forma en que lo justo es sóIo
tiene buenos efectos":¡lo que desvanecetoda posibilidad
el e*pediente del modo de conducirzos. Expediente en casi de comprenderlo que James afirma realmente!

22 23
El hechoes que, tanto la frlosofia de James comola de explicación de la confírmación, afrrman estos críticos, y
Wittgenstein no pueden ser expresadas en unas pocas creeerróneamenteque estáofreciendouna definición de la
frases.Por el contrario, lo que debeseguir a una proposición verdad. También afirman que el problema de formular
temática comola que acabamosde mencionarl2 en el texto una explicación satisfactoria acerca de la verdad ya ha
de James, y eD sus otros escritos, son discusionessobre sido resuelto en este siglo por la obra del eminente lógico
tipos más importantes de aseveracioneso enunciados, Alfred Tarski. En lo que mí se refiere, creo2oque, a pesar
como,por ejemplo, sobre el Memorial Hall u otros objetos del invalorable aporte técnico de Tarski, en su obra no se
perceptibles, sobre cosasmás abstractas, como la elasti- hacenada por explicar la noción de verdad, pero ésteno es
cidad de las cuerdasde reloj, sobreconceptosteóricosde la ahora mi tema de discusión.De cualquier modo,James no
fisica contemporánea, sobre conceptosmatemáticos y so- esculpabledeconfundir confirmaciónconverdad,2launque
bre posicioneséticas y religiosas. De allí se deriva que, a ciertamente crea que existe una estrecha conexión entre
tipos diferentes de proposición, correspondenflpos dife- ambas.
rentes de "conveniencia";no existe ningún indicio que nos La conexiónexiste por la siguiente razón:decir que la
induzca a pensar que una aserciónarbitraria esverdadera verdad es una "correspondenciacon la realidad,, no es
porque es convenienteen cualquier sentido (incluso "en el falso, sino más bienuacuo, ya que no aclara nada sobreel
largo plazo"). Por ejemplo, el punto de vista que con más signiñcado de la "correspondencia,,.Si se supone que la
frecuencia se le atribuye a James -que una afirmación es "correspondencia"es totalmente independiente de la for-
verdaderasi hace que la personase sienta subjetivamente ma en que confirmamos las aseveracionesque hacemos
satisfechade creerla-, en realidad, se refuta por sí mis- (del mismo modo que se cree posible que lo que es verda-
ma.l3 En el casode los enunciados"fácticos"paradigmáti- dero es totalmente diferente, no sólo algunas veces,sino
cos,en elcualestán comprendidoslas teoríasy enunciados siempre, de aquello que estamosjustificados a consid,erar
científicos, un tipo de conveniencia a la cual James se uerdadero),entonces la "correspondencia,,tiene algo de
refiere frecuentemente es la utilidad para la previsión,14 misteriosa, de oculta, e igualmente oculta se encuentra
mientras que otros desiderata (la conservaciónde la doc- nuestra presunta comprensión de ella. La verdad, según
trina pasada,15la simplicidadlo y la coherencialT)son James, debeser tal que estemoscapacitadospara decir de
válidos para enunciadosde todo tipo. Incluso las afirma- qué modo es posible captarla tal cual es. y al igual que
ciones de Quine,l8 según las cuales el hecho de que se Peirce, él identifica también a la verdad con la ,,opinión
logren satisfacer simultáneamente tales desiderata es final", aunque no con aquello que ya se encuentra confir-
una cuestión de compromiso,más que de reglas formales, mado, sino con aquello que está ,'destinado,'a ser con-
son también una idea jamesiana.le firmado, siempre y cuando la búsqueda sea suficiente-
Una segunda crítica a James -efectuada ya sea por mente prolongaday en un estadode ánimo responsabley
alguno de sus admiradores, comoMorton White, o por sus orientado hacia la falibilidad. "La verdad -escribe James
críticos, como Martin Gardner- es que él habla en reali- en uno de sus ensayos-22 es el destino del pensamiento,';
dad de confirmación,y no de verdad. James nos ofreceuna y en el mismo ensayoagrega:"El único criterio objetivo de
24 25
realidad es la constricciór¡ durante un período prolonga- noción trascendental: podemos saber por medio de la
do, a las confrontacionesdel pensamiento."2s investigación cuáles son las mejores y las peores condi-
Esta es,naturalmente, una posición muy problemáti- ciones para juzgar sobre la verdad), entonces el mejor
ca, aunque muchos de sus elementos continúan siendo modo de explicar la noción de verdad es explicar en qué
redescubiertosy discutidos apasionadamente,aún hoy, forma seresuelveque algo está confirmado (incluido cómo
por muchos frlósofos,algunos de los cuales no mencionan se determina que aquello que había sido previamente
jamás a James. En lo que a mí respecta,estoy de acuer- confirmado, ahora debe ser, a pesar de todo, descartado).
do con la primera parte de la posición de James, con la Así, para un pragmático, un debatesobrela verdad obten-
idea de que la verdad no debe ser considerada como drá todo su fundamento de la explicaciónparalela de cómo
una "correspondencia"misteriosa, sino más bien comouna llegar a esa verdad. Sin embargo, reitero que esto no
idealización de la afirmabilidad garantizada, pero no permite confusión alguna entre "verdadero" y "confirrna-
encuentro satisfactoria la idea de la "opinión final" que do".26Y es oportuna la afirmación de James: "Si te indico
James rescatade Peirce.2¿Sóloquisiera advertir que tales cómo llegar a la estación ferroviaria, ¿no te estoy pre-
cuestiones-la relación entre la verdad, la afirmabilidad sentandoimplícitamentelo quees,elsery la naturaleza de
garantizada, la credibilidad permanente y todo aquello, aquel edificio?"27
en definitiva, hacia lo cual debeconvergerla búsqueda si
está adecuadamenteconducida- puedenencontrarsehoy El holismo
en libros y ensayosde los dosPutnam, Michael Dummett,
Nelson Goodman, Richard Rorty y Bernard Williams, Hasta aquí, la posiciónde Jamespuede aparecercomo
quienes sostienen posicionesdiferentes, y a veces hasta una suerte de positivismo y, en realidad, el primer malen-
opuestas, sobre estos temas, pero todos toman muy en tendido sobre el pragmatismo que James debate en The
serio la idea expresada por James de que nuestra com- Pragmatist Account of Truth and its Misunderstanders
prensión de Ia noción de verdad no debe ser considerada (Informe pragmático sobre la verdad y los que no la
un acto mental misterioso mediante el cual nos conecta- comprendsn),z8 afirma que "el pragmatismo no esmás que
mos con algo totalmente independiente de las prácticas una reedición del positivismo".2eEn su respuesta,James
sobrela base de las cualesdecidimos lo que es verdad y lo se disocia de la inflexión fenoménicadel positivismo (ma-
que no lo es.25Ya no es posible sostenerque quien consi- chiano) de la época; el pragmatismo no afirma que el
dera seriamente la idea de tratar a la verdad, en cierto conocimientose encuentre restringido al devenir de nues-
sentido, como la afirmabilidad garantizada idealizada tras se¿saciones.Sin embargo,los neopositiüstas de hoy
esté simplemente "confundiendo la verdad con la confir- (esperoque Van Quine no objete si lo califico comotal) no
mación". son más fenomenistas que James, y ya he dicho que, al
Si lo que es verdad es lo que sería confirmado si las menos en el caso de las afrrmaciones científicas, tanto
condicionesfueran suficientemente buenas (donde la no- JamescomoQuine consideranque la afirmabilidad garan-
ción de "condiciones suficientemente buenas" no es una tízadaes una cuestión de "compromisos"entre desiderata
26 27
muy similares, como previsión, conser'\¡aciónde la doctri- décadadespuésde su muerte, algunos de los exponentes
na precedenüe,simplicidad y coherenciaglobal. Por esta del Círculo de Viena defendían la idea de los "enunciados
misma razón se hace necesario diferenciar la posición de protocolares", o registro de la experiencia directa, no
James del neopositivismo(de Quine), si queremosenten- contaminada por la teoría). Los principios 3) y 4), en
der su interés actual para nosotros. cambio, se discuten hoy tanto como se hacía entonces,y
Esta diferencia tiene rnucho que ver con la recusación por eso quiero ofrecer mis razones para aceptarlos.
de los habituales dualismos -hecho/valor, hecho/teoúa, Un desiderátum aceptado,tanto por los pragmáticos
hecho/interpretación-, mencionados al comienzo de este comopor los neopositivistas,es lacoherencia.sLPero, ¿qué
capítulo.3oDicho seade paso, esta refutación fue el primer esun conjunto"coherente"de creencias?Lamera coheren-
conceptopragmático con el que entré en contacto cuando cia deductiva es apenas suficiente, aunque no quede del
era estudiante universitario. Por aquel entoncesme en- todo claro por qué los positiüstas exigen incluso ésl¿ (si la
contraba en la Universidad de Pennsylvania, y uno de los meta fundamental de la ciencia es la preuisión, ¿no se
discípulosde James,A. E. Singer (h.) fue, durante muchos alcanzaria esa meta con mayor efrcacia admitiendo una
años uno de los profesoresmás famosos de ese departa- pluralidad de teorías, cada una de ellas coherente y de
mento. Si bien ya se encontrabajubilado cuando ingresé resonanciaen su propio dominio, aunque su conjunciónno
en la universidad, Singer aún vivía en Filadelfra, y algu- fuera coherente?Podríamossimplernenteprohibir la con-
nos de los miembros más antiguos del departamento so- junción de enunciados pertenecientes a conjuntos teóri-
lían visitarlo regularmente. Uno de ellos,C. West Church- cosdiferentes,exceptuandoautorizacionesespeciales(que
man, escribió un día en la pizarra los siguientes cuatro es, precisamente,lo que defiendeel frlósofode Princeton,
principios, atribuidos por él a Singer: Bas van Fraassen). El hecho es que la coherenciatiene
sentido comodesiderátum propio, porque nosotros jazga-
1) El conocimientode los hechospresuponeel conocimiento mos nuestra estructura de conocimientoscomo algo más
de las teorías. que una simple máquina predictiva: aspiramos a una
2) El conocimientode las teorías presuponeel conocimiento
Weltanschauung.ComoadvierteJames,32"una explicación
de los hechos.
3) El conocimientode los hechospresuponeel conocimiento outrée, que viole todas nuestras preconcepciones,nunca
de los valores. pasaría por verdadera concepciónde una novedad.Debe-
4) El conocimientode los valores presuponeel conocimiento mos ahondar hasta que hallemos algo menos excéntrico".
de los hechos. Sin embargo,todo aquello que sea explicativo, y que
seaoutréees, asimismo, materia de debate,incluso en las
¡Y estoy seguro de que el maestro de Singer, William ciencias más duras. La forma actual de la mecánica
James, habría estado de acuerdo! cuántica es el resultado de dosconferenciascelebradasen
Volüendo a los principios, el 1) y el 2) ya no se Solvegen los años treinta, iy en estas charlas, los ribetes
encuentran en discusión, si bien lo estuvieron y mucho, en filosóficosfueron al menos tan discutidos como las cues-
la época de James (como lo demuestra el hecho de que una tiones físicas!Es más: laWeltanschauungde la mecánica
28 29
cuántica surgida de la segundaconferenciade Solveg-la Pero, atención: con esto no estoy afirmando que las
"interpretación de Copenhagus"- es aún hoy tema de cuestionesmetodológicasy fi losóficasfundamentales,que
discusión. Una minoría integrada por cosmólogosla ha se debaten cuando encaramos los profundos cambios en
abandonado para abrazar la llamada "interpretación de nuestrosparadigmasdeexplicacionescientíficas,soncues-
mundos multiples" (rnany worlds interpretatíon): iuna tiones éticas.Antes bien, estoy afirmando que los proble-
interpretación que implica, entre otras cosas,la existencia mas involucrados sonde ualor, ya que la decisiónrelativa
de "mundos paralelos", incluso, muy probablemente, mun- a todo aquello queconsideran'Los como"coherente"y lo que
dos en los cuales EstadosUnidos es aún colonia británica, considerafTlos como "outrée" es, en todo caso,un juicio de
otros en que la Revolución francesa nunca se llevó a cabo, vaIor.
etcétera! Para mí, debo admitir, la interpretación de En física,al menos,a los filósofosde la cienciaempíri-
mundos múltiples es, simplemente, demasiado "outrée"; ca les agrada afirmar que podemosmantener estable el
sin embargo, ambas partes reconocen que aquello que se "vocabulariode observación",yaque cada fenómenofísico
encuentra cuestionadono es lapreuisión, sino, más bien, inuestigadodebe,si es demostrado,generar un cambio en
aquello que es explicativo y lo que no lo es, o lo que es el comportamiento de algunos objetos de mediana repre-
coherentey lo que no lo es. Y cuando los debatessobre el sentatividad como el cuadrante de un reloj o una placa
tema surgen en un nivel fundamental, éste excede siem- fotográfica (a pesar de que los historiadores y los filósofos
pre los límites: las cuestionesfilosófrcassemezclanconlas de la ciencia hayamos hecho presente la idea de que la
cuestiones"científicas", y desempeñanun papel impor- descripcióndel comportamientode esosobjetosse encuen-
tante los preconceptosculturales y, directamente, metafisi- tra siempre impregnada de teoría). Sin embargo, cuando
cos. James describe con exactitud esta situación cuando nos dedicamosde lleno al estudio del ser humano, esto no
afirma que: podemosasumirlo. Clasificamosa las personascomocrue-
les o piadosas, socialmente integradas o inadaptadas,
Una nueva verdad es siempreuna especiede guión, un capaceso inexpert&s, y tal vez lo hacemos mediante un
suavizadorde transiciones.La antigua opiniónconcordará notable acuerdo intersubjetivo; más aún, no existe, de
con el nuevo hecho a condición de mostrar un mínimo de
hecho,razónalguna para pensar que estasclasifrcaciones
conmoción,un máximo de continuidad. Consideramosque
unateoúa esverdaderaen proporcióna su éxito para resolver puedan reducirse a un vocabulario físico restringido.sa
este "problema de máxima y mínima". Pero el éxito en re- Algunas de estasclasificaciones,por otra parte, son clasi-
solver este problema es, ante todo, cuestiónde aproximación ficaciones de fenómenos cuya existencia está, en parte,
faquí es dondeseconfronta conel "compromiso"de Quine]. Y determinada y corroborada por las clasificacionesmis-
decimosque tal teoría lo resuelve,en conjunto, más satisfac- mas. En repetidas oportunidades,Daniel Bell ha califica-
toriamente que tal otra, pero éste hace referencia a nosotros
mismosy cada individuo subrayará diversamentesus prefe- do a este ordenamiento de los fenómenoscomoun "orden
rencias. Hasta cierto punto, por lo tanto, todo es aquí plás- construido". De acuerdo con su propio ejemplo, el sexoes
tico.33 un fenómeno biológico, pero el género @ender) es un
fenómeno"construido";la clasificaciónde las personasen
30 31
hombres o mujeres es una cuestión biológica, pero su los aspectos,creo que fue porque no se puede prever con
separaciónen "virginales" o "caballerescos"lmasculinos o anticipación cuóles consideracionespueden demostrarse
femeninos] es una cuestión cultural y, comosabemos,los adecuadas,a largo plazo, para una cuestión dada. Como
comportamientos que son adecuadamentecalificadoscomo sosteníaVivian Walsh, "...tomandoprestada y adaptando
"virginales" o "caballerescos"tienen pocasprobabilidades una vívida imagen quiniana, si una teoría puedeser negra
de fructifrcar, a menos que defrnamos previamente la deacuerdoconlos hechosyblanca segúnlas convenciones,
calificación en sí misma. Y en el casode que lo hagamos, también podría ser... roja desde la perspectiva de los
esto no es, ciertamente, independiente de la aceptacióno valores".36
el rechazode la evaluación presupuestaen esasclasifica- A los cuatro principios enunciados por Singer en los
ciones.De la misma forma, es probable que "ser desagra- añoscuarenta, James podría haberles agregadootros dos,
dable" para alguien bajo ciertas circunstancias sea una que son:
capacidadbiológica innata, pero que, en cambio,'ser un 5) El conocimiento de los hechos presupone el conocimiento
individuo piadoso" no sea ni más ni menos que una de las interpretaciones.
posibilidad, en ausencia de una cultura que clasifique el 6) El conocimiento de las interpretaciones presupone el cono-
comportamiento humano bajo tales términos y que com- cimiento de los hechos,
parta las valoraciones que esto supone. No existe ningún
"conjunto de hechosobservables"preestablecidosquepue- ya que, hablar de poner a prueba el sistema de teorías
da ser descrito;losquetomemoscomotales dependeránen científrcas "poniendo a prueba pronósticos" solamente
parte de la cultura en que creamos,y esodepende,a su vez, tiene sentido cuando ya existen un entorno y un lenguaje
del leng¡rajeque utilicemos. Como expresaJames: comunes. Para saber que tú has puesto a prueba las
mismas preüsiones que yo, debocomprenderprimero qué
...En lo que a mírespecta, no puedo escapara la consideración, es lo que dices;y esto signifrca que también las cuestiones
que se me impone a cada paso, de que eI sujeto cognoscente de interpretación y las cuestionesde hechose presuponen
no es "el expediente en casi todos los órdenes", es decir, un y se condicionanrecíprocamente.sT
simple espejo fluctuante, sin excusa ni tazón alguna de ser, Daniel Dennett ha afirmado recientemente3sque una
que refleja pasivamente un orden en el cual se inserta y que
simplemente encuentra ya establecido. El sujeto cognoscente
interpretación es correcta en la medida en que resulte
es un actor que, por un lado, codetermina la verdad y por el óptima para la preuisión: para la previsión de lo que el
otro registra esa verdad que ayuda a crear.35 interpretado dirá o hará. Sin embargo, no me parece del
todo plausible este punto de vista. Yo tengo, por ejemplo,
He sostenido que James tenía razón (así como tam- firmes conviccionessobre lo que quería decir Aristóteles
bién Singerla tenía) en pensar que las decisionesacercade con algunos de sus argumentos, pero no pretendo estar en
los "hechos" y los "juicios de valor" dependen una de la condicionesde prever las "disposiciones"de Aristóteles
otra, y se condicionan recíprocamente. Y si él afirmó que mejor que cualquier otra persona.No sirve de nada afrr-
lo verdadero puede ser aquello que convieneen casi todos mar que: "aquello que debes prever es que si Aristóteles

32 33
hablara eI inglés de hoy, si hubiese leído la literatura El realismo
filosófica actual, etc.,éIdiría que tu interpretación de su
argumento, en el lenguaje de nuestros días, es lQ,corcecta", Ya he mencionadoque, ademásde este ataque contra
porque la situación hipotética es demasiado artifrciosa el dualismo, la filosofía de James comporta una fuerte
para inducirme a pensar que un contrafáctico así pueda tendenciaal realismo "directo",estoes,a la doctrina según
tener sentido. ¡No creoque Aristóteles estuuiesedispuesto la cual la percepción se relaciona con objetos y aconte-
a decir esascosasen un lenguaje actual! Y hasta en el caso cimientos de "allá afuera", y no con "datos sensoriales"
de pensailores contemporáneos,existen ciertas diferen- privados.Ytambién he dicho que RuthAnna Putnam yyo
cias entre interpretar el discurso o los escritos de alguien, opinamosque,lejos de ser incoherentes,cada uno de estos
y prever cuál podría ser su reacción a la interpretación. dos aspectosde la filosofia de James presuponeal ótro, y
Las interpretaciones hostiles, por ejemplo -aquellas en cadauno de ellos es necesariopara la correctainterpreta-
las cuales el objetivo frnal es mostrar que eI discurso o ción del otro. Los Ensayossobreel empirísmo radical, en
argumento en cuestión es vano, pomposo,necio o hipócri- los cuales James precisa su teoría sobre la percepción,
ta- no son en la práctica aceptadaspor el interpretado constituyen la parte más técnica de la frlosofíajamesiana
cuando son corcecúos.El hecho es que, si bien la inter- (y no, precisamente,la parte que Russell haya admirado
pretación y la previsión dependen una de la otra, la in- más). Un pocopor estostecnicismos,y otro pocoporque no
terpretación no puede ser reducida simplemente a la pre- quiero extendermemás sobreel tema, no les proporciona-
visión.3e ré detalles sobre este aspecto (quienes tengan interés
Si las concesionesde James han despertadoaversión, pueden leer los ensayossobre James en la tercera parte
tanto durante su vida como después de su muerte, de la de Realísm.with a Human Face[o(El realismo con rostro
misma forma han atraído siempre a sus seguidores.Y si se humano). Sin embargo, deseo decir algo acerca de la
me permite arriesgar una conjetura, una de las fuentes de relación entre estos dos elementos del pensamiento de
tal atracción es, ni más ni menos, Que la faceta que he James.
mostrado de la concepcióndel mundo de James: la inter- Algunos deustedesrecordarán, sin duda, que el ataque
dependencia entre imagen del hecho, teoría, valor e in- contra las dualités es hoy una característica de las refle-
terpretación. Para algunos de nosotros, especialmente xiones de JacquesDerrida; no obstante, en las manos de
para los que poseemoslo que James llamaúa un "tempe- Derrida (o quizá debería decir "en la pluma de Derrida",
ramento" pragrnático, esta imagen parece más realista dada la inexorabletrascendenciaque el autor confería a la
que la ofrecidapor aquellosque tratan de convencernosde escritura) tal ataque se transforma en una sensaciónde
que los habituales dualismos deben ser justos. pérdida del mundo, una pérdida del "dehors texte". Para
Derrida, cada idea mediante la cual tenemos accesoa un
mundo externo común es un retorno a lo que él llama "rma
metafisica de la presencia",un retorno a las ideas, caídas
en descrédito,de incorregibilidad y de datos preconcep-
34 35
tuales. Sin embargo, al tomar distancia James de toda más bien una capacidad propia para formar conceptos
forma de escepticismo, el punto principal es que la aten- compartidos.
ción puesta en lo que él llama la "plasticidad" de la verdad, Quizás a algunos de ustedes les venga a la mente el
en nuestra función de "codeterminantes de la verdad, por vivaz debateen torno a la interpretación de la filosofía del
un lado", se equilibra al sostener que compartimos y último Wittgenstein. Al igual que James trata de "huma-
percibimos un mundo común, al afirmar que "registramos nizaf'el concepto de verdad, de concebirlo (del mismo
la verdad que ayudamos a crear". El pragmatismo, en modo en que concibetodos los conceptoso conocimientos)
realidad, desdelos primeros escritospragmáticos de Peirce, como un instrumento humano y no como una idea caída
se ha caracterizado -por una parte- por su antiescepti- del cielo, Wittgenstein sostiene que todos nuestros cono-
cismo:lospragmáticossostienenqueladudo requiere una cimientos (o nociones) dependen de nuestra "forma de
justificación, exactamente igual que la creencia (Peirce vida". Y en la filosofía de Wittgenstein existe incluso un
introdujo una famosa diferencia entre la duda "real" y la elemento realista. Recuerdoque en una ocasióndije (sin
duda "frlosófica");y -por otra parte- por sttfalibílismo: razón) que Wittgenstein no usaría jamás una expresión
los pragmáticos sostienen que no existen garantías me- como "correspondenciacon la realidad", y que fui inte-
tafísicas merced a las cuales por lo menosnuestras creen- rrumpido por Cora Diamond, quien destacóque en una
cias más inmutables no requieran jamás una reevalua- lecciónsobrefilosofía de las matemáticas,4lWittgenstein
ción. Que se pueda ser al mismo tiempo falibilista y observóque él afirmaría que "Esta silla es azrtl" cones-
antiescéptico es, tal vez, l¿ intuición fundamental del ponde a una realidad, aunque sólo podría decirse a qué
pragmatismo norteamericano. realidad, utilizando ese mismo enunciado."El'esto'y el
'aquello'que podamosindicar", nos hace presente, son
Quizás un equilibrio de este tipo pueda parecer frágil
(algunosdirán imposible),pero representa la situación en nuestros paradigmas de la realidad. Y existen algunos
que vivimos. Podríamos despejar la impresión de imposi- que juzgan que esta tendencia realista (admitido que
bilidad si logramos comprender -como Peirce, James y reconozcansu presencia) es una incoherencia del pen-
Dewey han intentado inducirnos a hacer- que el accesoa samiento de Wittgenstein. Puede parecer extraño com-
una realidad común no requiere la incorregibilidad, así parar a James con el último Wittgenstein, dada la hosti-
comotampocoel falibilismo exigedudar detodaslas cosos, lidad de este último hacia la metafísica y la innegable
sino solamenteestar dispuestoa dudar de cualquier cosa, inclinación metafísica de James, pero no se trata de
en caso de que surjan buenas razones para hacerlo; el una lucubración totalmente infundada: de hecho, en The
hechode que la percepciónseaquizós errónea no demues- Moral Philosopher and the Moral Life,az se puede apre-
tra que incluso la percepcíónnoerrónea sea,en realidad, ciar cómo James presenta lo que, claramente, es una
una percepción"aparente". Y también podúa ayudarnos anticipación del famoso razonamiento contra el lenguaje
el comprender -como, reitero, nos han invitado a hacer privado de Wittgenstein, y cómo argumenta a favor de la
Peirce, James y Dewey- que el accesoa una realidad proposiciónsegúnla cual "la verdad presuponeun están-
común no requiere un acceso a algo preconceptual, sino dar externo al sujeto pensante".
36 37
fl
f

Se trata de cuestiones verdaderamente muy comple- Notas


jas, y no quiero dar la impresión de que se puedan encon- 1. Los argumentos presentados en este capítulo han sido original-
trar las "respuestas' en la obra de James o en la de mente el tema de una conferencia que dicté en la American Academy of
Wittgenstein, o que existan "respuestas" definitivas. Sin Arts and Sciences (Academia Norteamericana de Artes y Ciencias), en
febrero de 1992.
embargo, vale la pena reflexionar al respecto,y creo que la
2. B. Russell, The Analysis of Mind, Londres, Allen and Unwin,
forma en que James se refiere a ellas (así comotambién el 192L,p.22.
modo en que Wittgenstein lo hace) resulta sumamente 3. M. Gardn er, The WHYS of a Philosophical Scriuener,NwevaYork,
estimulante. Morrow & Co., 1983.
4.Ibid,p.45.
Filosofía y vida 5. J. Barzun, A StroII with William James, Nueva York, Harper &
R o w , 1 9 8 3 ,p . 5 .
6. Respecto de la compenetración entre hecho y valor, véase, por
Para concluir, esperoque durante el transcurso de mi ejemplo, W. James, The Place of Affectíonal Facts in a World of Pure
defensa de James de la acusación de ser un pensador Experience, en Idern, E ssays in Radical E mpiricism, Cambridge, Harvard
incoherente no haya subrayado la complejidad y la profun- UP, 1976, en los cuales se ataca el dualismo de acontecimie¡rtos "internos"
y "externos". Analizaré la compenetración entre hechoy teoría en el tercer
didad de su pensamientohasta un punto tal que oscurezca capítulo; la afirmación según la cual nuestra concepción de un hecho
el hecho de que, para James, como para Sócrates, la cualquiera acarrea una concepción de consecuencias legaliformes (cómo
cuestiónfilosóficacentral escómouiuir. No obstante,para se espera que la cosa se comporte) constituía el núcleo mismo de la
"m¡íxima pragmática" de Peirce, que James cita en su libro Pragmatismo.
James, como para Sócrates y sus sucesores,la contra- I
I
James ataca incluso la idea de conocimiento introspectivo incorregible: [,
posición entre la filosofía interesada por el "cómo vivir" y
la que se ocupade cuestionestécnicas"duras" es una falsa
"Si fuera suficiente con tener sensaciones y pensamientos inmediatos, el
recién nacido en la cuna sería un psicólogo, y un psicólogo infalible. Sin
Ir
N]
I
contraposición.Todos sostenemosnuestros propios idea- embargo, los psicólogos no deben solamente tener estados mentales ll
absolutamente genuinos, sino que también deben relacionarlos y regis-
les y una visión del mundo, y además queremos que
trarlos, deben clasificarlos, confrontarlos y reconstruir su relación con
nuestros ideales y nuestra visión del mundo se respalden otras cosas[...] Y en el procesode denominar, clasificar, conocerlas cosas
recíprocamente.Una filosofia compuestaúnicamente por engeneral, nosotrossomosnotoriamente falibles;¿por qué no deberíamos
argumentaciones no puede satisfacer un hambre genuina, serlo en este casotambién?" (Idem, Principles of Psychology,Nueva York,
Dover, 1950,vol. I, pp. 189 ss.).
mientras que una filosofia que seatoda visión global, pero
7. En una carta a William James, Strong comenta que F. C. S.
carente de argumentos puede, quiz6, satisfacer un ham- Schiller "no alcanza a comprender". A Word More About Truth de James
bre genuina, pero sólo como podría hacerlo una papilla (reeditado como The Meaning of Tfuth, v. nota 10).
para bebés.Si existe una razóndecisiva para ocuparsede 8. Segrin la interpretación ofrecida por algunos críticos, James
James, es que fue un genio interesado en los casos de opina, sin rodeos -a pesar de ciertas afirmaciones implícitas y explícitas
en sentido contrario contenidas en varios de sus escritos- que si las
hambre genuina, y cuya filosofía, a pesar de sus defectos, consecuencias de creer quep son buenas para úr,entoncesp es "verdadero
proporciona un alimento sustancioso para el pensamien- para ti". Permítaseme decir de una vez por todas que James no ha
to. Y no sólo para el pensamiento, sino también para la utilizado jamás la noción de "verdadero para mí" o "verdadero para ti". La
vida. verdad, sostiene, es una noción que presupone una comunidad y, como

38 39
Peirce, opina gue la comunidad más amplia posible, la comunidad de (p. 106 de la paginación original). Naturalmente, este concepto tiene
todas las personas (y, de ser posible, de todos los seres sensibles) es, a largo mucho que ver con el realismo de James, que analizaremos más adelante.
plazo, la más adecuada. Nótese que hasta Russell, al hacer la caricatura [El significado dc la uerdad, Madrid, Aguilar de Grupo Sa¡rtillana, 19S8.]
de la posición jamesiana sobre la verdad, no comete ese error. 20. Para un análisis crítico de la presunta relevancia filosófica de
9. B. Russell,A History of Western Philosophy, Nueva York, Simon trabajo de Tarski, véase H. Putnam, Representation and Reality, Cam-
& Schuster, 1945, p. 817. [Historia dc la filosofta occidental, Madrid, bridge, MIT Press, 1988, pp. 6I-Tl.fRepresentación y realidad, Barcelo-
Espasa Calpe, 1971.) na, Gedisa, 1990.1
10. W. James, Pragmatismy The Meaning of Truth (edición en un 21. James es plenamente conscientede esta acusación,y la contesta
volumen), Cambridge, Harvard UP, 1978, p.1.06.fPragmatismo. Buenoe (W. James, The Meoning of Truth, cit. p.274; p. 108 en la paginación
Aires, Aguilar, 1973.1 La cursiva pertenece al original. original).
11. L. Wittgenstein, Páilo sophische Untersuchungen, compilado por 22.W.James, "Spencer'sDefrnition of Mind as Cor-respondence",en
G. E. M. Anscombe y R. Rhees, Oxford, Baeil Blackwell, 1953, $43. Id. Essaysin Philosophy, Cambridge, Harvard UP, 1978, p. 21.
IE studio s fi losóficos, Barcelona, Grij albo, 1988.] 23. Debo agregar que en este ensayo (del año 1878),James aclara la
12. Otra famoea aeeveración temática es: "Verdadero es cuanto forma en que todo lo que está "destinado" a ser pensado no está rigurosa-
demuestra ser bueno como creencia, a la vez que por razones evidentes y mente predeterminado; la doctrina jamesiana, según la cual nosotros
definidas". (W. James, Pragmatism, cit., p. 43). Nótese que James no ü- mismos contribuimos a determinar aquello que se tornará "coercitivo
ce "por una. taz6n cualquiera": la expresión "razones evidentes y defini- en las confrontaciones del pensamiento", está, sin duda alguna, presen-
das" determina cuáles son esas razones; no obstante, igualmente se lo te en el ensayo.Asimismo, en Pragmatism,la verdad, en este sentido se
interpreta como si hubiera escrito "¡por una razón cualquiera!". lPragma- transforma en una "noción reguladora", y no en algo que estamos seguros
tisnto. Buenos Aires, Emecé, 1945, p. 67.1 de obtener.
13. W. James, The Meaning of Truth, cit. p. 272 (p. 106 de la 24. Considero un en or del pragmatismo identificar a Ia verdad con
paginación original). [El signift.cado de la uerdad., Madrid, Aguilar de la opinión final, es decir, la opinión hacia la cual convergemos a largo
Grupo Santillana, 1958.1 plazo. Rechazo la "teoría de la verdad" del pragmatismo porque tiene
14. "IJna extraordinaria fertilidad en las consecuencias verifrcables consecuenciasirracionales: la verdad respecto del pasado, por ejemplo,
de los sentidos." W. James, Progmatism, cit., p. 9L. fPragmatismo. resulta dependiente de lo que acaecerá en el futuro (o de cómo será la
Buenos Aires, Aguilar, 1973.1 opinión en el futuro), y esto me parece inaceptable.
15. "(...) conservamos inalterados nuestros antiguos conocimientos 25. Creo que aquello a lo que el pragmatismo ha dedicado todos sus
y nuestros antiguos prejuicios y creencias todo lo que nos es posible." esfuerzos-y lo que podemosrescatar de estos esfuerzos- era la preocu-
pación por elaborar una concepción de la verdad que no convierta en un
fPragmatiwno. Buenos Aires, Emecé, lg45,p. 125.1
misterio (el) cómo los seres humanos están en condiciones de poseerla.
16. "Una nueva idea cuenta como'verdadera'en cuanto satisface el
Tales preocupaciones se resuelven con sólo tener una respuesta a la
deseoindividual de asimilar la nueva experiencia a su proüsión personal
pregunta: "¿Cómopodría lograrse que la noción de verdad sea humana-
de creencias." fPragmatis¡zo. Buenos Aires, Aguilar, 1973, p. 36.J
mente accesible?Y ésta es una preocupaciónque hlósofos perbenecientes
17. "Su único criterio de la verdad probable será el que mejor sirva
a escuelas diferentes pueden compartir perfectamente. James tenÍa
para orientarnos, el que mejor se adapte a la vida y mejor se combine con
razón cuando emitió su afirmación negativa, y tenía razón en sostener
el conjunto de las demandas de la experiencia, sin omitir na da." fPragma- que, si se supone que la verdad de una idea depende de una relación
tismo. Buenos Aires, Emecé, 1945, p. 70.J preexistente llamada'acuerdo", la misma idéntica relación cualquiera
18. W. V. O. Quine, Two Dogmas of Empiricism, en Id. From a sea la idea (o, como diríamos hoy, el "enunciado"), y si una idea o un
Logical Point of Vieru, Cambridge, Harvard UP, 1953. enunciado verdaderos son tales cuando tienen una similar relación fija,
19. Otro de los puntos sostenidos por James es que la "satisfacción" eterna, con la realidad exterior, entonces los seres humanos somos
sno se vea involucrada fortuita-
subjetiva es irrelevante, a menos que absolutamente incapaces de comprender de qué relaciones se trata, o en
mente también la realidad". W. James, The Meaning of Truth,cit.,p.272 qué forma podemos aprehenderlas.

40 4L
26. Como ya he dicho, la verdad debería consideraree como una tación" de las creencias a las instancias de la experiencia y a la vida, no
idealización de la afirmabilidad garantizada, en este sentido: aquello que sólo a otras creenciae.
ee verdadero equivale a aquello que es aseverable en forma garantizada 32. W. James, Pragmatism, cit., p. 35.
si las condiciones epistemológicas fueran suficientemente buenas. Si 33.Ibid.
alguien preguntara "¿Cuándo son suficientemente buenas las condi- 34. Véase H. Putnam, Reason, Truth and History, Cambridge,
ciones epistemológicas?", yo respondería que lo son cuando son suficiente- Cambridge UP, 1981, y J. McDowell, "Are Moral Requirements Hypo-
mente buenas para determinar si la afirmación en cuestión es verdadera thetical Imperatives?", Proceedings of the Aristotelian Society, vol. supl.
o falea. Considerada como una "definición de la verdad", esta fórmula es, 52 (1978), pp.13-29,e 1d. "Virtue and reason", Monist,62 (1979\, pp. 331-
por supuesto, un círculo vicioso, pero yo no la considero así: no creo que 50. [Rqzón, uerdad e historia, Madrid, Tecnos, 1988.]
la nocióndeverdad pueda serreducida a conceptos que nola presupongan 35. W. James, "Spencer'sDefinition ofMind as Correspondence",cit.
de una forma u otra. Mi idea es negativa: no concebimos la verdad (o, en p.21.
lo que aqul respecta, las %uenas conüciones de verdad") como algo que
36. V. Walsh, "Philosophy and Economics", enThe New Palgraue; a
sobrepase totalmente el ¿so. Considero que no hay ninguna necesidad de Dictionary of Economics, vol. 3, comp. por J. Eatwell, M. Milgate y P.
ceder a la tentación a la cual han cedido los pragmáticos: la tentación de Newman, Londres-Nueva York, Macmillan-Stockton, 1987.
presentar una concepción de la verdad que no haga uso de ninguna
37. Se podría pensar que los seis principios citados constituyen un
palabra de la miema familia; de presentar lo que podríamos llamar una
círculo vicioso. Sin embargo, si bien realrnente conforman un círculo, éste
teorfa "reduccionista" o "naturaüsta" de la verdad. No conviene enrolarse
no es enteramente vicioso y, para comprenderlo, puede ser ritil considerar
en las filas de los "naturalistas semánticos". Por el contrario, si se acepta
otro círculo conexo, un círculo quizás habitual en nuestros días, y del cual
mi sugerencia,tendremos una imagen delaverdad-nounareducción de
hablaré en el capítulo 3: la dependencia recíproca entre percelrciones y
laverdad a otras nociones-de acuerdo con la cual los pragmáticos tenían
conceptos. Si miro una silla, puedo percibir que lo que estoy viendo es una
razón en opinar que no existe una relación única entre todas las proposi-
silla y que es, por ejemplo, azul. Pero si yo no perteneciera a una cultura
ciones verdaderas y la realidad, y que las proposiciones verdaderas están
de la cual forman parte las sillas, no percibiría una silla (tal vez percibiría
conectadas a la realidad en una increíble multiplicidad de formas diferen-
solamente un "objeto"). Y si perteneciera a una cultura dotada de un
tes, ya que continuamente eetamos creando nuevos tipos de lenguaje.
conjunto de palabras distintp para los colores, no podría percibir que la
Este, como veremos en el segundo capltulo, era el punto de vista de
silla es "azul". La percepción está impregaada de conceptos, y el concepto
Wittgenstein, y constituye la expresión de un pragmático genuino pero,
es imposible sin la percepción, pero no existe un círculo vicioso, en el
al mismo tiempo, nos ayuda a evitar la trampa en la que los mismos
sentido de permanecer en el punto de parüida.
pragmáticos han caído.
Es diffcil comprender en qué forma se podría penetrar en'círculos"
27 . Eete es el comienzo de la respuesta de James al sexto de siete
umalentenüdos sobre el pragmatismo": "Sexto malentendido: el pragma- de este tipo, si se concibe al aprendizaje como la simple adquisición de
leyes, reglas y algoritmos. Pero, en realidad existe otro tipo de aprendiza-
tismo no explica qué es la verdad, sino sólo cómo se llega a ella". Véase W. je, más importante, que, por una parte, se asemeja a la adquisición de
James, The Meaning of Tfuth, cit., pp. 274 ae. (pp. 108 y ss. en la
reglas y algoritmos, pero que también depende de "saltos" intuitivos.
paginación original).
Tomemos por ejemplo a una persona que aprende música (creo que en el
28. Este es el título del octavo capítulo del libro de W. James, The curso de nuestras discusiones sobre el aprenüzaje deberíamos reflexio-
Meaning of Truth, ya mencionado.
nar un poco más sobre este tipo de situaciones, así como sobre la pregunta
29. Ibid., p. 266 (p. 100 de la paginación original). "¿De qué modo se puede aprender algo si no se reduce a leyes y algorit-
30. Por esarazón atribuyo estos dualismos a Quine. mos?"). Volviendo a nuestro estudiante, no se aprende música simple-
31. Sin embargo, nótese que la noción jamesiana de coherencia ("Su mente aprendiendo reglas y algoritmos, a menos que queramos per-
único criterio de la verdad probable será el que mejor sirva para orientar- manecer siempre en el nivel de "principiantes"; se aprende por imitación
nos, el que mejor se adapte a la üda y mejor se combine con el conjunto y aproximación consecutiva al principio, pero luego, si uno tiene real-
de las demandas de la experiencia, sin omitir nada") facilita la "adap- mente talento, en cierto momento sobreviene un salto que genera algo

42 43
que parece un "círculo vicioso": para interpretar correctamente la música
se debe estar en situación de comprenderla en toda su magnitud; pero
para comprenderla en toda su magnitud es preciso tocarla bien o, al
menos, escucharla bien. Y sabemos perfectamente que hay personas que
logran penetrar en el cfrculo.
A propósito de los principios que he mencionado, se podría pregun-
tar, incluso, quién estaría autorizado para establecerlos. La repuesta, en
deñnitiva, para cualquier ser humano, es que úú mismo estás autorizado;
eres tú quien, en última instancia, debe decidir, y nadie puede tomar esa
decisión por ti -éste es el motivo por el cual Kant hace suya la máxima
"atrévete a pensar". Creo que esto forma parte de lo que quería decir
Wittgenstein cuando afirmaba "Este ee el punto en el cual mi azada se
pliega". (L. Wittgenstein, Philosophische Untersuchungen, cit. $ 217;la
cursiva es mía). Pero hay más; cuando nos encontramos en desacuerdo,
cuando nuestras azadas se pliegan en puntos diferentes, existen formae 2
mejores y peores de resolver nuegtras controversias, y una de las cosas
que constituyen la simiente misma del pragmatismo es la idea de que, del
proceso de la investigación misma podemos aprender cuáles son las
mejores formas de resolver las controversias, y cuáles son las mejores ¿WITTGENSTEIN
formas de conducir la investigación. Me detendré en esta idea en el tercer
capítulo. Naturalmente, para terminar, si la pregunta "¿Quién debe decir
ERA UN PRAGMÁITCO?
cuáles son los principios correctos?" significa "Denme un método de
decisión", entonces el pragmático responderá: "Eso no te lo puedo dar.
Nadie puede darte un rnétodo de decisión; ésas son sienpre situaciones en
las cuales no podrás hacer otra cosa que tomar tus propias determina-
ciones".
38. D. C. Dennett, "Real Patterne", en el Journal of Philosophy, SS
(1991), pp.27-51.
39. Este es un razonamiento que Jürgen Habermas ha subrayado
durante toda su carrera ñlosófica.
40. H. Putnam, Jamns's Theory of Perception y (con Ruth Anna
Putnam) Williatn James's ldeas, en Id. Realistn with a Human Face,
Cambridge, Harvard UP, 1990, respect., pp. 232-5L y 217 -31.
41. Wittgenstein's Lectures on the Foundation of Mathematics,
compilado por C. Diamond, Ithaca, Cornell UP, 1976, lección )O(V.
fObseruaciones sobre los fundatnentos de la matemótica. Madrid, Alian-
za,1987.)
42.W. James, "The Moral Philosopher and the Moral Life", en Id.
The Will to Belieue and Other Essoys, Cambridge, Harvard UP, 1928.

44
''.Vl

Si bien los argumentos que expondrenlos en este


capítulo especulan con la existencia de una tendencia
pragmática en la filosofia del último Wittgenstein, el
título de este segundocapítulo es, en cierto modo,un poco
elusivo, ya que trata tanto (o más) de la relación entre la
filosofía de Wittgenstein y la de Kant, comode su relación
con la de, por ejemplo,William James. Este capítulo, por
lo tanto, podría también habersetitulado "¿Wittgenstein
era un kantiano?"
Con esta doble comparación pretendo expresar mi
disenso con la opinión, sumamente difundida, de que
Wittgenstein es un filósofo del "fin de la filosofia", el
concepto según el cual todo el "mensaje" de la última
frlosofía de Wittgenstein es que la frlosofía es similar a
una neurosis, y que la meta frnal de toda la obra de
Wittgenstein no es otra que la de advertirnos de "abste-
nerse de hacer filoso{ía".
¡
Una de las dificultades que acecha al encarar este
períodode la frlosofíadeWittgensteinreside en el hechode
que él serehúsa,muy prudentemente,a afirmar cualquier
tipo de tesis filosófica. Su objetivo, comoél mismo aclara,
es modificar nuestro punto de vista,l no formular tesis. Si
en fi.losofíaexistieran las tesis,sostiene,todosnosotroslas
47
!

consideraríamostriviales. Esta eslarazón por la cual yo tarlo. Kant observa que toda vez que los seres humanos
puedo explicar cualquier cosa que pienso que sea funda- describimos algo del mundo, nuestra descripción está
mentalmente correcta en la frlosofía de, digamos, Rudolf modeladapor nuestras eleccionesconceptuales.Pero decir
Carnap, diciendo que hay algo de correcto en la diferen- que nuestras descripcionesdel mundo están modeladas
ciacióncarnapiana entre cuestionesexternasy cuestiones por nuestras eleccionesconceptualesno significa simple-
internas, aun cuando el mismo Carnap establecetal dife- mente que revelan un trivial convencionalismosemánti-
renciación de una manera que depende de aquello que co, como se desprende claramente del hecho de que po-
Quine ha denominado"los dos dogmasdel empirismo";de de-mosdescribir algo diciendo que tiene más o menos un
la misma forma puedo explicar algunas cosasque consi- me-tro de largo o, como alternativa, que mide treinta y
dero firmemente correctasen la frlosofíade Hans Reichen- nueve coma cuatro pulgadas de longitud. Kant entiende
bach, diciendo que tenía razónal criticar losjuicios sintéti- que describimosel mundo desde perspectivasdiferentes,
cosa priori de Kant,2 y que la idea reichenbachianade las como,por ejemplodesdeel punto devista científicoy desde
descripcionesequivalentes tiene un valor perdurable; por el punto de üsta moral, y que ninguna de las dos descrip-
otra parte, no puedo, en cambio, afirmar que una úesis cionespuedereducirseo intercambiarse por la otra; si bien
wittgensteiniana seacorrecta de un modo permanente. No creía -y pienso que tenía razón- que tanto nuestras
obstante, creo que tomar conciencia de cómo, en cierto imágenes morales como nuestras imágenes científicas,
sentido, algunas de las reflexiones de Wittgenstein deri- pueden ser ambascorrectas.Sin embargo,el mismo Kant
van de algunas reflexiones kantianas y las complemen- estaba aún sujeto a una confusión: la de suponer que
tan, y cómoéstassecorrespondenconuna cierta tendencia una descripciónmoldeadapor nuestras eleccionesconcep- I
del pragmatismo, nos permite apreciar mejor laforma en
que Wittgenstein trata de hacernos cambiar de punto de
tuales, de alguna forma no es, por esta misma razón, una
descripción del objeto "como éste es en realidad". Tan
,1
vista, de modificar nuestro modo de considerarlas cosase, pronto comocometemosesteerror, abrimos las puertas al
incluso, de hacernosver por qué es tan dificil enunciar un problema: "Si nuestras descripcionesson sólo nuestras
cambio de género en forma de "tesis". descripciones,modeladaspor nuestrosinteresesy nuestra
nattnaleza, ¿cuáles entonces la descripción de las cosas
Kant comoellas sonen sí rnísrnos?"Este término "en sí mismas"
resulta así totalmente vacuo: preguntarse cómo son las
Comenzaré por Kant. Si tuviera que mencionar qué cosas"en sí" equivale, a estosefectos,a preguntarse cómo
hay de correcto de manera estable en la primera Crítica debedescribirseel mundo en el lenguaje propio del mun-
kantiana -y creo que hay algo de permanentemente do, cosa que no existe; solamente existe el lenguaje que
correcto en cada uno de los libros de Kant-, diría que, nosotros,los sereshablantes, hemosinventado para nues-
sean cuales fueren sus errores (la síntesis a priori, por tros diversificadospuntos de vista. (A decir verdad, creo
ejemplo), Kant ha sido, de hecho, el primero en advertir que en su primera Crítica el mismo Kant llega repetidas
que describir el mundo no quiere decir simplemente imi- vecesal punto de percibir que la noción de "la cosaen sí"
48 49
es vana, para luego retroceder hasta antes del recono- un pluralismo auténtico, quizá reprimido por el mismo
cimiento de este hecho; sin embargo, el reconocimiento Kant, pero que, aun así, aflora nítidamente en sus traba-
estó.) Pero incluso si el reconocimientokantiano de que jos. Para mayor precisión, en lugar de recurrir al simple
nuestra descripción del mundo está moldeada por nues- dualismo de una imagen científrcay una imagen moral del
tras eleccionesconceptuales,las cuales, a su vez, sehallan mundo, podemosconstatar diversas interacciones entre
moldeadas por nuestra naturaleza y nuestros intereses, estos dos y otros variados conceptos (conceptosresul-
está comprometido-comprometido, por una parte, conla tantes de la interdependenciaentre las imágenesmoral y
noción deDing an sích, y por otra con la idea según la cual científica del mundo, de las cuales hablaremos dentro de
nuestras eleccionesconceptualesson fijadas de una vez poco;conceptosresultantes de la interacción de larazón
por todas por un cierto tipo de sólida estructura trascen- pura práctica con la sensibilidad y las preferencias o
dental de la razón-, consideroque Kant, efectivamente, aptitudes, etc.).En realidad, Kant no comienzaa hablar
ha logrado un progreso decisivo con respecto a todos los solamente de una imagen moral y una científica del
frlósofosprecedentes,al abandonar el conceptosegún el mundo, sino (enZo religión dentro de los límites de la mera
cual cualquier descripcióndel mundo puede ser una sim- razór¿)tambiénde una imagen religiosa del mu_ndo,lacual
ple copia del mundo. dependede la imagen moral, pero que comienzaa revelar
Sabemos,por otro lado, que la idea de cambiar este una autonomía propia; y así comienza a hablar (en la
punto de vista de Kant descartando el conceptode una Crítíca del juicio) de las que se podrían llamar imágenes
estructura trascendental de la razón que da origen a un estéticasdel mundo, y despuésimágeneslegalesdel mun-
conjunto de categoríasa priori, aljuicio sintético a priori, do, y muchas otras. Kant, sin duda, al igual que Quine en
etc., se encontraba notablemente difundida en la filosofia nuestros días, ha sostenidoen todo momento que sólo la
alemana anterior a Wittgenstein. Comoejemplo podemos imagen científica del mundo contiene aquello que, en
mencionarla sustitución, por obra de Schopenhauer,de la sentido estricto, podemosllamar "conocimiento".Sin em-
Razón por la Voluntad, dentro del ámbito de su versión bargo, este aspecto del pensamiento kantiano debería
original del kantisrlo, y sabemos que el joven Wittgen- confrontarse,tanto con el de William James, como con el
stein fue profundamente influenciado por Schopenhauer. del último Wittgenstein.
Otro de los aspectos fascinantes del pensamiento En cierto sentido, por consiguiente,ya puedo estable-
kantiano eslo queyo llamaría su pluralismoincípíente.Ya cer una "tesis" (comopueden apreciar, yo he adoptado el
hice referencia a este conceptoal mencionar el hecho de conceptode "tesis", a diferencia de Wittgenstein): no se
que, para Kant no existe una sola imagen del mundo si- puede concebir el procedimiento de Wittgenstein como
no dos: una imagen científica y una imagen moral. Natu- una simple recusaciónde algo llamado "filosofía tradicio-
ralmente, esto podría ser definido comoun dualismo, más nal"; en realidad, lo que él hacees continuar una tradición
que como un pluralismo; pero creo que puede apreciar- de reflexión filosófica, en tanto rechaza ciertos tipos de
se claramente, especialmenteen su tercera Crítíca y en refl exionesfilosófrcas.
sus escritosposterioresa las críticas, una tendenciahacia Sin duda es cierto que el momento de la recusaciónen
50 51
l

Wittgenstein es evidente y, de alguna manera, desconcer- los usos lícitos o racionales y cuáles los usos ilícitos o
tante. Wittgenstein nos dice que los esfuerzostradiciona- irracionales,porque estono es algo que se pueda aseverar
les de la metafisica y la epistemología han sido inútiles; y de una vezparasiempre. Los sereshumanos son criaturas
no nos dice que han fracasado al final de la jornada, sino, que se sorprenden a sí mismos (self-surprising): de la
por así decirlo al comienzo mismo de ella; nos dice, direc- misma forma en que estamos constantemente creando
tamente, que han nacido muertos, y que los conceptosque nuevosjuegos de lenguaje, y continuaremos haciéndolo,
en un momento se pensó que habían dado origen a la así también estamos siempre extendiendo y modificando
metafisica y la epistemología no tienen, en los términos el signifrcado del término *conocer", y continuaremos
formulados tradicionalmente, ningún sentido.s Con fre- extendiendo y modificando el signifrcado del término
ttconocert'.
cuencia se piensa, por ejemplo,que la epistemologíatiene
su origen en la pregunta "¿Cuál es la naturaleza del
conocimiento?"; pero Wittgenstein, según mi lectura, nos Rorty y lVittgenstein
sugiere que hasta el hecho mismo de conjeturar que el
conocimientotieneuna naturaleza,es una presuncióna la Lo que he dicho hasta aquí puede talvez parecer muy
cual no llegamos a conferirle un sentido. Y no servirá de similar a la posiciónde Richard Rorty y, efectivamente,en
nada reformularla en un razonamiento formal como, por La filosofía despuésde Ia filosofía,a Rorty presenta sus
ejemplo,"¿Cuál es el análisis del conceptode conocimien- conviccionescomouna extensión de los pensamientosdel
to?" o "¿Cuál es el significado de la palabra'conocey'?"En último Wittgenstein. Ateniéndonosa las interpretaciones
realidad,lo que Wittgenstein nos quiere demostrar esque que Rorty ofrece de las ideas que acabo de describir, su
la idea (todavía hoy común ya sea dentro de las "teorías duda es la siguiente: hemos creadouna gran variedad de
causalesdel conocimiento"o de las teorías basadasen la juegos de lenguaje;lo que esverdadero y lo que es falso en
noción de "creencia verdadera y justificada") de que la unjuego de lenguaje está determinado por un conjunto de
palabra *conocer" tiene un signifrcado que la circunda, norrnas y criterios; se puede preguntar cuál es el modo
comoun *aura'que la acompañaen todoslos contextosen correcto de utilizar el término "conocer" en un juego de
que se la aplica, determinando el modo en que la utiliza- lenguaje concreto, y se puede examinar la propuesta
mos en esoscontextos,esuna ilusión. La palabra "conocer" utilizando la etnografía,la historia de las ideas o el aná-
es un término que empleamos para eximirnos de muchas lisis wittgensteininano del lenguaje. Sea cual fuere el
obligaciones diferentes. Se puede, sin duda, describir una procedimiento empleado, todo lo que se podrá obtener
serie de obligaciones o tareas distintas, desarrolladas comorespuestaserá una descripcióndel uso de la palabra
sobre la base de la palabra "conocer",pero eso no puede en un juego de lenguaje en particular. Por otra parte,
aplicarse a la epistemología tradicional y, ni siquiera, a la según Rorty, no existe ningún juego de lenguaje que se
epistemología moderna y no tradicional, al estilo de la de pueda considerar rnejor que otro, exceptoen el sentido de
Rudolf Carnap. Nadie puede afirmar cuáles son los crite- que sea "mejor en relación a ciertos intereses". Natural-
rios que permitirán determinar en el futuro cuáles serán mente, Rorty admitiría que continuaremos siempre cre-
52 53
ando nuevos juegos de lenguaje o, al menos, espera que humana no representa solamenteuna capacidadaislada,
esto suceda. sino un amplio espectro de aptitudes que nos permite,
La interpretación rortiana de la filosofía del último entre otras cosas,determinar cuáles juegos de lenguaje
Wittgenstein, hoy incontestablemente influyente, me son mejores o peores,entoncesla reacción de Rorty con-
parece tanto una falsificación de Wittgenstein como un siste en afirmarT que "de la nochea la mañana Putnam se
esclarecimiento de su signifrcado, si bien se encuentra ha transformado en un realista metafísico".Y, en realidad,
muy cerca de ciertas interpretaciones que fueron adelan- si la razón, en el sentido en que la acabo de utilizar, no
tadas haceya una treintena de años, por algunos epígonos fuera absolutamentenecesariapara hablar desdeel inte-
de Wittgenstein, comoNorman Malcolm. Por el contrario, rior de un juego de lenguaje, o si fuera algo que sentimos
debo confesar que cuando comenzaba a escribir sobre necesidadde invocar solamentecuandolos frlósofosinten-
filosofía, gran parte de mi trabajo lo dediqué a refutar la tamos explicar por qué algunas veces abandonamos un
versión del pensamiento wittgensteiniano ofrecida por juego de lenguaje para adoptar otro nuevo, entoncesésa
Malcolm, y mi colega Stanley Cavell ha pasado buena sería una noción sospechosa.La imagen presentada por
parte de sutiempotratando de demostrarque esepunto de Rorty del "discurso norrnal", en consecuencia,influye
vista, si bien puede ser el de Malcolm, no era enteramente profundamente sobre su imagen del discurso no normal,
el de Wittgenstein. El núcleo de la interpretación rortiana es decir, el discurso "hermenéutico".
es sucomparación de los criterios con "programas".Cuan- No obstante, lo primero que quiero decir es que una
do publica La filosofía y el espejode la naturalezo,b Rorty descripciónde estetipo del discursonormal es una carica-
consideraque lo que en eselibro llama discurso"normal', tura de nosotrosmismos,encuantousuarios de un lengua-
y que enLa filosofia despuésde Ia filosofía rebautiza con je. Tanto como para comerrzat, diré que, personas que
el término wittgensteiniano de "juego de lenguaje", consti- hablan aquello que, en todos los sentidos es un lenguaje,
tuye algo que es regulado por lo que, a su vez, llama y personasque no adoptan un "nuevo vocabulario" o algo
"algoritmos" o "programas".6 Cuando nos encontramos parecido,con mucha, pero mucha frecuencia,no están en
dentro del "discurso norrnal", cuandoestamos"utilizando condicionesde llegar a un acuerdo utilizando los "crite-
el mismo juego de lenguaje", nos guiamos por los progra- rios" que conocen.Rorty y yo, por ejemplo, coincidimosen
mas almacenados en nuestros cerebros, y marchamos la opinión -y creemos que lo mismo hacen todas las
todos de acuerdo;ésta es la imagen presentadapor Rorty. personasrazonables que se enteran de las noticias coti-
Tal descripción de los seres hablantes como autóma- dianas- que, hoy por hoy, ya no existe ningún prisionero
tas no es enteramente wittgensteiniana. Creo que Rorty de guerra norteamericano en Vietnam del Norte. Sin
considera cada una de las nocionesnormativas de la ra- embargo,algunos individuos extravagantes y de derecha
zón nada más que como un pomposolenguaje metafisico, (y, comprensiblemente, algunos parientes de soldados
porque adjudica a losjuegos de lenguaje un funcionamien- consideradosdesaparecidosen acción durante la guerra
to realmente automático. Si yo digo, por ejemplo, que de Vietnam) pueden creer que aún existen prisioneros de
existenjuegosde lenguaje mejoresy peores,y que larazón guerra norteamericanosen ese país. ¿Diría Rorty que la
54 oo
noción de "objetividad" no se aplica a un casode este tipo? números de seis años luz de longitud, ni números exis-
¿Diría que esospersonajes extravagantes están "utilizan- tentes en mundos lógicamenteposiblesni nada parecido).
do un juego de lenguaje diferente" y que no existe ningún En los casosque ocurren efectivamente en nuestra vida
hecho objetivo que respalde lateoría de la presencia actual real y cotidiana, entonces,estamosplenamente de acuer-
de prisioneros de guerra norteamericanos en Vietnam del do sobre qué operación es la de sumar la unidad a un
Norte? ¿O diría que el enunciado "No existe actualmente número dado,o sumar dos a un número dado (en este caso
ningún prisionero de guerra norteamericano en Vietnam resultaría necia la duda escépticarespecto de si la ope-
del Norte" es "verdadero en el juego de lenguaje que Rorty ración que todos nosotros llamamos "sumar dos" es real-
y yo jugamos" y falso en el juego de lenguaje que juegan mente sumar dos). Wittgenstein se ha preocupado de
esosextravagantesde derecha,y que no haynada más que ilustrar perfectamente estas ideas --que no son "tesis"
se pueda decir al respecto?Un punto de vista que toma en sino, comoél mismo dice, cosastotalmente obvias- para
serio la noción de programas y algoritrnos en eI cerebro, combatir un cierto tipo de mistificación mentalista, rela-
pero no toma en serio la noción de o hay o no hay todauía cionada con el hecho de comprender,pongamospor caso,
prisioneros de guema norteamericanos en Vietnam del la regla de "sumar dos". Sin embargo, suponer que, como
Norte no es, ciertamente digno de ponerse en el mismo él mismo lo destaca al comienzo de las Inuestigaciones,
plano que lo que Wittgenstein realmente sostenía. Wittgenstein opina que todo el lenguaje es así -que todo
El mismo Wittgenstein es muy claro al hacer notar el lenguaje está gobernadopor reglas similares a las del
que el lenguaje no se resuelve simplemente con seguir cálculo- sería realmente leer con negligencia.
ciertas reglas (comolas reglas del cálculo,por ejemplo);l Quiero citar aquí un párrafo en el cual Wittgenstein
no porque las reglas no sean el "fundamento" del lenguaje aclara perfectamenteque el lenguaje no es "tan así" como
(las reglas mismas, según Wittgenstein, se apoyan en lo dice Rorty. Ubiquémonos en un contexto en el cual pro-
que él llama nuestras "reaccionesnaturales"). Los puntos pone que las personasestán en desacuerdosobre la pre-
esencialesde las /nuestigaciones,que quiero recordar aquí misa previa de que alguno de ellos tiene un sentimiento
son los siguientes: por un lado, que existen, sin duda, que en realidad no tiene.
ciertas partes del lenguaje sobrelas cualestodos nosotros
estamostotalmente de acuerdo.Normalmente, todos no- "-¡Tú no entiendes nada de nada!" -le decimos a alguien
sotrosllamamos "rojas" a las mismas cosasy, por cierto, no que duda de algo que nosotros, en cambio, consideramos
obvio, pero no podemos probarlo.
surge entre nosotros un desacuerdo sobre cuál color es el
rojo (la duda escépticasobre si es verdaderamente rojo el ¿Existe un "juicio de experto" sobre la autenticidad de la
expresión de un sentimiento? Aunque también aquí hay
color que todos nosotrosllamamos "rojo" es incoherente). personas que juzgan "mejor' y personas que juzgan "peor'.
Del mismo modo, no surge entre nosotrosun desacuerdo Por lo general, del juicio de aquellos que comprenden
sobre qué operación es la de sumar la unidad a un número mejor a los hombres (des besserenMenschenkenners)surgen
(quiero aclarar que estoy aquí pensando en los números las predicciones y pronósticos más correctos.
que las personas escriben y suman habitualmente, no en ¿Se puede aprender a conocer a los hombres? Sí, cual-

56 DI
quiera puede hacerlo, pero no mediante un curso de apren- No sólo hay prestacionesmejores y prestaciones pe-
dizaje, sino a través de la "experiencia". ¿Puede una persona ores en el contenido de un juego de lenguaje, sino que
enseñárselo a otra? Seguramente, haciéndole llegar de tanto
también es claro que Wittgenstein piensa que los mismos
en tanto la sugerencio adecuada; éste es el sentido, en este
juegos de lenguaje pueden ser peoreso mejores.Sostiene,
caso, de los conceptos de "enseñar" y de "aprender". Lo que se
aprende no es una técnica; se aprenden losjuicios correctos. por ejemplo,que losjuegos de lenguaje de los frlósofosson
También aquí existen reglas, pero no forman un sistema y, a forzados,antinaturales; los filósofos se encuentran siem-
diferencia de las reglas del cálculo aritmético, sólo los exper- pre "a la caza de una imagen", dicen tonterías. Wittgen-
tos pueden aplicarlas correctamente.8 stein, en cambio,es mucho más generosocuandocompara
otros tipos de juegos de lenguaje, no frlosóficosy no cien-
También aquí puede verse cómo Wittgenstein re-
tíficos, especialmentecuando compara los juegos de len-
conoce,de forma muy explícita que, hasta en el contenido
guaje correspondientesa individuos "primitivos". (Aunque,
de unúnicojuego delenguaje,puedenexistirverdades que
si bien no comparte del todo la habitual concepciónpro-
no todos están en condicionesde ver, ya que no todos han
gresista occidental según la cual las personas iletradas
podido desarrollar la capacidadde reconocerla "evidencia
imponderable" (unwiigbare Euidenz) que ello implica.e sóloseencuentranen un estadodepreciencia,deseudocien-
Esto sólosignifrcaquealgunas personasllegan acompren- cia o de superstición, Wittgenstein da a entender que
der mejor lo que sucede.Nada podría estar más lejos de la existen ciertosjuegos de lenguaje primitivos que él "com-
descripciónde unjuego de lenguaje que definirlo comouna batiría" y otros que considera "absurdos".11Entre los
prestaciónautomática, comopodría serla ejecuciónde un ejemploscita la ordalía: la prueba del fuego.)
algoritmo. Resumiendo:de la interpretación rortiana de Witt-
Paso por alto aquí el problema relativo a la eventua- genstein se derivan tesis extremadamente radicales, por
lidad de que cualquier cos@que hagamos, incluso la ejemplo, la de que no existen juegos de lenguaje mejores
aplicación genérica de nuestra inteligencia, pueda resol- que otros y eu€, en consecuencia,sólo se puede decir que
verse "en última instancia" con la ejecuciónde algoritmos; algunossonmejoresen relación coneste,aquel o cualquier
ojalá pudiera resolverse,no en el nivel de lo que llama- otro interés inuolucrado y que (siempre según Rorty) no
mos "descripciónde la ejecución",sino de lo que llamamos podemos decir que la física newtoniana sea mejor que
"descripción de la competencia",porque opino que estos la aristotélica, o que existen temas sobre los que la física
problemasno están para nada relacionadoscon todo lo que aristotélica se ha equivocado,mientras que la newtonia-
sostuvo Rorty. El conceptorortiano de "programa" implica na, en cambio, ha tenido razón.r2Ninguna de estas tesis
una identidad de comportamiento entre todos los miem- deberían ser atribuidas a Wittgenstein. No obstante, a
bros de la comunidad lingüística, mientras que la in- pesar de todo esto, lo que quiero decir es que, si bien la
teligencia general no siempre determina un acuerdoentre interpretación de Rorty no es demasiadojusta, al menos
todos los miembros de una comunidad lingüística. Para logra recogerconclaridad una característicagenuina de la
mayor información al respecto, he tratado todo el tema posición de Wittgenstein. Este hereda y amplía lo que
íntegro del funcionalismo en Representacíóny realidad.Lo !
anteriormente he llamado el pluralismo de Kant: la idea
58 59
de que ningún juego de lenguaje amerita el derecho exclu- cionista. El mejor modo de definir o describir tales "natu-
sivo de ser considerado"verdadero', o "racional", o'nues- ralizaciones"es, talvez,tratar de comprenderlascomoun
tro sistema conceptual de primera categoría",l3 o el siste- redirnensionamiento.Resulta natural ilustrar la concepción
ma que "describe la naturaleza última de la realidad", o de Kant diciendoque no podemosdescribir el mundo como
cualquier otro término de ese tipo. Wittgenstein, por así es en sí mismo;y, €Drealidad, éste es también el modo en
decirlo, reúne en un solo compromiso a Rorty y a Quine: se que Rorty establecela mayoría de las veces(lo que él cree)
manifiesta de acuerdo con Rorty, contra Quine, sobre el algunos de los puntos de coincidencia con Wittgenstein.
hecho de que no se puede decir que los juegos de lenguaje Sin embargo,esteúltimo, fiel a su estrategia de no ofrecer
científicossonlos únicosenlosque seafirmano seescriben "tesis", trata de convencernosde que en este entorno no
premisas verdaderas o en los que se describela realidad; existe ninguna tesis interesante. Segrrné1,la negaciónde
pero,porotro lado, sedeclara de acuerdoconQuine,contra una pseudoproposiciónes una pseudoproposición,y la
Rorty, sobre el hecho de que los juegos de lenguaje pueden negaciónde una insensatezes una insensatez.Si estamos
ser criticados (o "combatidos")y de que existen juegos de convencidosde que resultaininteligible afirmar "Algunas
lenguaje mejores y peores.ra veceslogramos describir la realidad como realmente es",
entoncesdeberemoscomprender que resulta igualmente
Algo más sobre lVittgenstein y Kant ininteligible afirmar "Nunca llegaremos a describir la
realidad como realmente €s", y más ininteligible aún
Ahora quiero retornar al problema de la relación entre ("más" porque introduce el "no podemos" típico de la
la filosofia del último Wittgenstein y la de Kant. Para ello filosofía) manifestar "No podemos describir la realidad
me concentraré brevemente sobre un aspecto de esta comorealmente es".Esta brillante tesis rortiana no esotra
relación que no ha sido mencionado hasta ahora, pero cosa que Ia ilusión de una verdad; la quimera de un
antes deseo aclarar algunas cosas sobre las diferencias descubrimientocósmico.En realidad, se podría decir que
entre Wittgenstein y Kant, en el ámbito de lo que hemos es característico de Wittgenstein tratar de mostrarnos
comentado hasta el momento. Algunas de estas diferen- que, cuando los filósofos afirman que no podemos hacer
cias son evidentes: Wittgenstein, como ya he dicho, aban- algo,cuandoafrrman que algo es imposíble,por lo general
dona la noción de la cosa en sí, abandona la síntesis a la cosaque ellos aseguran imposible de hacer es una cosa
priori, abandona el cuadro de las categorías y algunas sin sentido, una cosa ininteligible. Lo que Wittgenstein
otras cosasmás. Se podría decir que Wittgenstein "natu- pretende es hacernostomar concienciadel hechode que el
taliza" la filosofía kantiana (esto se ha dicho también de filósofo,por así decirlo, parecehablarnos de una Impoten-
William James). Pero, ¿enqué consisteaquí esa "natura- cia -del mismo modo que un físico nos habla de una
I
lización"? "Naturalizar" es una palabra peligrosa, par- Impotencia cuando nos dice "No se puede construir una
I
ticularmente en nuestros días, en que el "naturalismo" se máquina de movimiento perpetuo"-; en el primer caso,el
conecta con mucha frecuencia con versiones reductoras I filósofo parece hablar de una barrera que no podemos
del frsicismo, mientras que Wittgenstein no es un reduc- superar, una barrera que, a pesar de todo, despuésde un
60 61
examen más cuidadosoresulta ser un espejismo,o menos duda "estoy diciendo una verdad" y, sin embargo, "Se ha
aún que un espejismo:una quimera. Podemosaprender detenido aproximadamente allí" no es ciertamente algo
lenguajes;podemoscambiarlos y podemosinventarlos y, que forme parte del "esquema conceptual de primera
con ellos, podemosformular verdades;esto es describir la categoría" del que habla Quine. Ahora bien: antes que
realidad. Si decimos"Sí, pero esto no es describir la reali- decir que tenemos "una imagen moral del mundo y una
dad en símisma", no estamosdiciendonada. Ciertamente, imagen científica del mundo", como podría decir un kan-
podría ser que el mismo Wittgenstein, en el famoso cierre tiano, Wittgenstein dice simplemente que, incluso las
de su Tractatus, haya caído presa de la tentación de decir palabras de la étíca, son términos que tienen sus propios
que no podemoshacer algo que no tenga sentido hacer.l5 usos en nuestro lenguaje.
Afirmar que aquello de lo que no se puede hablar se debe Este aspectode la práctica y los métodoswittgenstei-
callar, equivale exactamente a sostener que no se debe nianos se basa fundamentalmente en el hecho de que
intentar enunciar ¿qué cosa...?James Conant ha manifes- quiere hacer aparecer como familiar un punto de vista
tado recientementetuqo" ésta es una contradicción deli- filosófico aparentemente nuevo, sin querer presentarlo
berada; que el Tractatus se deja deslizar de esta forma como una cuestión de tesis filosóficas, sino de hechos
hacia el abismo, con el propósito de expresar con mayor evidentesy conocidosdesdesiempre. Algunas veces,este
exactitud el conceptoque estoy enunciando ahora. sistema de Wittgenstein me hace venir a la mente (como
En síntesis,existeuna enonne diferenciaentre eltono le ha hecho recordar a Stanley Cavell) un aspecto del
kantiano, asumido por Rorty cúando dice que no podemos trascendentalismonorteamericano, el mismo que descri-
describir la realidad tal cual es en sí , y el tono wittgen- bía Thoreau cuando afirmaba que "en todas partes puede
steiniano al tratar de hacer que el lector no se sienta encontrarse un fondo sólido"l7 (aunque, algunas veces,
impelido a afirrnar ni "Podemosdescribir la realidad tal esefondo se encuentre debajo de una espantosacantidad
cual es" ni "No podemosdescribir la realidad tal cual es en de fango). Wittgenstein, después de todo, describe sus
sf'. Algunos párrafos más arriba mencioné una obser- metas, en un párcafo digno de Thoreau, como "insertar
vación bastante profunda, según la cual existen verdades nuestras palabras en el lenguaje, donde tienen su verda-
que no pertenecen a Io que Quine llamaría nuestro "siste- derapatria".
ma conceptual de primera categoría" y que son, sin embar- A pesar de estas diferencias -que son profundas-
go, totalmente inteligibles y legítimas. Esa observación, entre Wittgenstein y Kant, quiero reiterar que, aunque
digo, está en cierto sentido redimensionada gracias a la haya una actitud crítica a los métodosde Wittgenstein en
lectura de Wittgenstein y redimensionada por el hecho de los enfrentamientos de la pró,ctica de los filósofos, pode-
que proporciona ejemplos sumamente comunes y trivia- mos investigar y verificar que un gran metafísico como
les. Por ejemplo, si doy a cualquiera la instrucción "De- Kant no es, sólo,una persona que haya cometido profun-
ténte aproximadamente aquí", y después describo Io que dos errores; incluso debemos reconocer que existían
ha sucedido diciendo: "Le he dicho que se detuviera apro- intuiciones genuinas en Kant, intuiciones que fueron
ximadamente allí, y luego le he tomado una fotografia", sin l trabajosamente elaboradas, y que tuvieron una fuerte
62 63
influencia sobre el mismo Wittgenstein, quien no podúa Naturaleza. Paraello, es necesariala imagen de la natu-
haber mirado tan lejos si no hubiese podido apoyarse en la raleza,perono sólogobernadapor leyesindividuales, sino
espalda de un gigante como Kant. por un sistema de leyes.Y esta imagen, nos dice Kant, no
proviene de las razones teóricas, sino de la razón pura
La primacía de la ra;zótt práctica prá.ctica.Porotra parte, Kant sostieneque las normas que
rigen la ciencia teórtcaen sus adquisicionesmás elevadas,
Huy, a pesar de todo, otra faceta del pensamiento de son leyes que emanan de una cierta noción, poseída por
Kant, un aspecto que se conecta inmediatamente con el nosotros,de aquello en lo que consistiría la perfecciónde
pragmatismo, y que podríamos llamar Ia primacía de la la investigacióny búsquedade la humanidad; son normas
razón prd,ctica. De los estudios de Kant, surge en forma que derivan de una cierta idea de la evolución humana
notoria que gran parte de su trabajo tiene una directa dentro del reino teórico.Enfuazón,uerdade historia puede
inspiración política e incluso una aplicación política. Has- leerseuna discusión sobreeste tema, en la que he afirma-
ta la noción central de la "autolegislación" descrita por do18que nuestros.ideales cognoscitivos tienen sentido
Kant en su segundaCríticay enlaFundarnentación de la únicamente si los consideramoscomo una parte de nues-
metafrsica de las costurnbres estaba, después de todo, tra idea de la evolución humana.
directamente inspirada en Rousseaui Y, €n la época de Para Kant, la idea de la primacía de Larazón práctica
Kant, Ia idea de que una sociedadserigiera por una unión se extiende incluso hasta Ia filosofía misma. Sostieneque
libre de ciudadanos"autolegislantes"era verdaderamente no sepuedeconstruir una imagen moral del mundo tratan-
revolucionaria. Quiero hablar también de un aspecto do de probar, a priori, que existen juicios de valor verda-
diferente de la primacía de la razónpráctica en Kant, y es deros. La célebre estrategia kantiana consiste, precisa-
la famosa afirmación kantiana (descrita en la "Doctrina mente, en hacer lo contrario (aunque algunos filósofos
del método" de la Crítíca de la razón pura) según la cual la actuales,comoBernard Williams, suelen olvidarse de ello
comprensiónteórica no habría llevado por sí sola a la idea cuando critican a Kant). Volviendo a la mencionada es-
de la ciencia como un sistema unificado de leyes (afir- trategia kantiana, ésta sostiene que: dado que todos los
mación con la cual, insisto, Kant quiere decir que no días se expresanjuicios de valor, sín duda debo presupo-
habríamos llegado ni siquiera a la física newboniara, Y ner la idea de que existen juicios de valor verdaderos;y si
mucho menos al ideal regulador de una futura ciencia que deben existirjuicíos de ualor uerdaderos,¿quécondiciones
englobela fi sica,la biología,etcétera).Tampoconoshabúa debendarse para que sean consideradoscomo tales? ¿En
llevado por sí misma más allá del conocimiento de las qué tipo de mundo pueden existir juicios de valor verda-
generalizacionesinductivas individuales. Para adquirir el deros?
tipo de conocimientorepresentado por el sistema newto- Considerada desdeeste punto de vista, la estrategia
niano del mundo (o,comopodríamosdecir hoy, del sistema kantiana sereitera en los escritosde John Dewey,aunque
einsteniano del mundo, o de la mecánica cuántica), es éste la priva del apriorismo.le Creo que la primacía de la
necesariolo que Kant ha llamado la ídea reguladora de la razón práctica (si bien no de laraz6n "pura" práctica) es
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7
¡

extremadamente importante en la actualidad pot el si- argumentos centrales de libros y ensayos.En los últimos
guiente motivo: en la época del Círculo de Viena parecía cincoaños se han publicado al menos dos libros dedicados
muy fácil ser antimetafisico; bastaba restringir el cono- a estetipo de lucubraciones,escritr¡spor destacadosfilóso-
cimiento a lo que pudiera preverse y controlarse respecto fos matemáticos.Sin embargo,aun así, es difícil imaginar
de la entidad observable.Y todo el mundo sabía lo que era en qué forma esta clase de filosofía pueda ser sometida a
una "entidad observable".En consecuencia,o se era un algún tipo de control, o, mejor dicho, es difícil comprender
"metafisicoo, o se era un "empirista". El problema fue que el sentido que puedan tener esas cuestiones.Mujeres y
muy pronto se hizo evidente -me sucedió a mí mismo, hombres maduros que discuten acerca de la "existencia
cuando emprendí mi camino- que Mach y sus seguidores real" del número tres ofrecenun espectáculogtotesco.En
del Círculo de Viena no habían hecho otra cosa que sus- un contexto de este tipo, suscrito por John Dewey, puede
tituir una metafísicapor otra. Sepercataron,con razón,de leerse que la'actividad primaria de la filosofía no debería
que la discusión sobre la "existencia real" de los electro- basarse en este tipo de metafísica, es decir, tratar de
nes era un pseudoproblema,pero aun así propusieron la construir una "teoría del todo", sino que debería,por sobre
tesis según la cual se afirmaba que, si los electronesexis- todas las cosas,ser la crítica de la cultura. A pesar de sus
tían, eso significa que las entidades observablesse com- excesosmetafísicos, la filosofía de Kant pretendía ser
portan de tal o cual forma, pero no se dieron cuenta de que una crítica de la cultura; un esbozoo esquemapara una
en realidad, en su afán por desacreditarla pseudotesisdel sociedadesclarecida,en condicionesde progresar hasta
realismo trascendente,no habían hechootra cosaque con- un estadoen el que reinaría la justicia social,basadaen la
firmar la pseudotesis del fenomenismo. Sostener que fórmula de que la recompensa es proporcional a la vir-
hablo de entidades observables cuando afirmo que los tud.20Ahora bien; quizá pueda parecer extraño afirmar
electronescirculan por un hilo metálico, equivale a ser un que la frlosofíade Wittgenstein tiene también una inten-
metafisico (ojalá sea un metafisico berkeleyiano) tanto ción moral, especialmentedesdeel momento en que, con
comosostenerque los electronessoncosasen sí. Compren- mucha frecuencia,no sela consideramás que una terapia
der el conceptode que el positivismo era en sí mismo una indiferente, generada por la aversión hacia la filosofía
metafisica -y, para decir la verdad, una metafísica poco teórica. Sin embargo,quiero concluir sosteniendoprecisa-
creíble (¿por qué tendríamos que creer, despuésde todo, mente que la filosofia de Wittgenstein tiene también una
que el mundo está compuesto únicamente por entidades intención moralizadora y que muestra, por un camino
observables?I- ha conducidoal enunciado de una verda- distinto, el mismo tema: la primacía de larazín práctica,
dera plétora de teorías metafísicas -incluidas las de enunciada por la filosofía de Kant, aunque desde una
Princeton, en Nueva Jersey- según las cuales los otros particular perspectiva de redimensionamiento.
mundos posiblesson tan reales comonuestro propio mun-
do actual. Cuestiones que hasta en el Medioevo fueron
consideradas poco serias, como, por ejemplo, ¿Exísten
realmente los núrneros?, se han convertido hoy en los
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t

El frn ético de la frlosofía del último cación difiere de la de Rorty sólo por el hecho de que los
\tittgenstein2l "criterios" que regulan nuestro uso de las palabras ofrecen
(en algunos casos)grados de afirmabilidad algo menores
Para explicar por qué creo que hay una "primacía de que la certeza.Incluso interlocutores que comprenden el
la razón práctica" encubierta en la filosofia del último lenguaje del mismo modo,y se encuentran en posesiónde
Wittgenstein (y, a estos efectos, no sólo en ella),22es idénticos datos probatorios, deberían ponersede acuerdo
preciso que agregue algunas palabras más respecto de mi sobre el grado de afirmabilidad de sus enunciados,tanto
propia forma de intepretar esta filosofia. Dado que debo en éste como en el modelo de Rorty.
ser breve, trataré de hacerlo enfrentando mi interpreta- La presunción subyacente en esta imagen es que el
ción particular con otra que sea lo más divergente posible: uso de la palabra puede ser descrito en términos de lo que
por ejemplo, la de Michael Williamszs o la de Paul Hor- los interlocutores están autorizados a decir y hacer en
wich,2ay, considerando que la de este último se encuentra circunstanciasobservables.El "uso" es una nociónteórica,
desarrollada con mayor amplitud, me concentraré en ella. y existe una forma estándar de describir el uso de expre-
Según Horwich, un juego de lenguaje consiste en una siones en un juego de lenguaje arbitrario. Es lo que
serie de enunciados para los cuales (si concentramos llamaré, de aquí en más, la interpretación positiuista de
nuestra atención en el lenguaje aseverativo)existen cier- Wittgensteín.
tas "condicionesde afirmabilidad". Estas condicioneses- Una interpretación muy diferente (sostenida,o cuasi
tablecen que un enunciado es verdadero o, al menos sostenida'u po. Peter Winch en El conceptode ciencia
"confirmado", en ciertas circunstancias observables. social) es la siguiente: el uso de las palabras en un juego
Además, se considera que tales condiciones establecen de lenguaje no puede ser descrito sin emplear conceptos
que, en las mencionadas circunstancias observables,po- conexosa los conceptosinvolucrados en esejuego. Winch
demos emitir sonidos,o escribir signos, e incluso esperar ha examinado el caso de los juegos de lenguaje de los
los hechoso las reaccionesde los demás. Es evidente que pueblos "primitivos", pero creo que la misma idea es
este modelo es muy similar a los modelos de Carnap o válida para losjuegos de lenguaje científicos. Considere-
Reichenbach de un hablante/oyente de un lenguaje natu- mos, por ejemplo, el juego de lenguaje de un buen elec-
ral.26Laidea fundamental(como enel positivismo) esque, tricista: él aprende a utilizar enunciados tales como "La
si se conocen las circunstancias en las cuales una corriente circula a lo largo del cable metálico", un obvio
aseveraciónes confrrmada,entoncesse la comprende.La ejemplo predilecto de los positivistas. Si nos atenemos a
'terdad" no es una propiedad, sino que debeser compren- la interpretación positivista de Wittgenstein, este último
dida como un mecanismo de "desencomillado";afirmar parecesostener(junto con Bridgman y el primer Carnap)
que una aseveración es verdadera equivale a hacer una que el electricista comprendeque el enunciado involucra
afirmación equivalente. Los bicondicionales de Tarski, el conocimientodel hecho de que, por ejemplo,el enuncia-
más precisamente, nos dicen todo lo que sea necesario do es afirmable si la aguja del voltímetro se deflecta, y
saber sobre la noción de verdad. Nótese que esta expli- reconoceque algo es un voltímetro cuando presenta cier-
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r
I

to aspecto (y, sobre todo, si lleva impresa la inscripción tos sonidos, en ciertas circunstancias observables, no
volrfiuprno). estará en condicionesde entender nada.
Discutiendo a Rorty, hemos visto ya qué hay de Consideremos desde otro ángulo la siguiente des-
erróneo en esta imagen. Un buen electricista, sin duda, cripción del uso de "A lo largo de este cable metálico está
afrrma en este sentido su "criterio", pero, cuando las cosas circulando una corriente eléctrica": "Para afirmar que por
andan mal (iy cualquiera que haya estado alguna vez el cable circula electricidad se ha utilizado un voltímetro,
dispuesto a arreglar sus propios electrodomésticoso a etc. Un voltímetro es un dispositivo construido de esta
reparar su automóvil sabe cuántas cosas pueden andar forma y de esta otra...(imagínenseaquí una explicación
mal cuando se trata con el mundo real!), nuestro electri- del 'funcionamiento' de un voltímetro, no en lenguaje de
cista puede, todavía, dudar de su criterio, y el conocimien- observación).Es importante asegurarse, al utilizar un
to relativo a cuándo necesita dudar de sus criterios, no es voltímetro, que no se encuentre dentro de ningún campo
por sí mismo algo que podamos aprender por medio de electromagnéticoque distorsione la precisión de sus lec-
reglas o leyes. Aquí podríamos, más bien, mencionar lo turas..."
dicho por Wittgenstein en el pasaje arriba citado, sobre Conocerelusode "Alo largo de estecablemetálicoestá
aprender a decir si otra persona está frngiendo un sen- circulando una corriente eléctrica" significa conocereste
timiento que no experimenta realmente: "¿Sepuede ad- tipo de temas. Naturalmente, esto también presupone
quirir este conocimiento?Sí, cualquiera puede hacerlo, muchas otras cosas,por ejemplo un desarrollo cultural en
pero no mediante un curso de aprendizaie, sino por medio una sociedad técnica, con todo lo que esto comporta.
de la experiencia.¿Puedeuna persona enseñarlo a otra? Comprender un juego de lenguaje sígnifica compartir una
Sí; dándole de tanto en tanto la sugerenciojusta. Este es formadeuida. Ylas formasdevidano puedenserdescritas
el aspectoque adoptan, en este caso,la'enseñanza'y el en un metalenguaje positivista establecido,ya sea cientí-
'aprendizaje'. Lo que se aprende no es una técnica; se fico, religioso o de un tipo que no poseemosen las so-
aprende a juzgar correctamente. Por supuesto que tam- ciedadesindustriales occidentales.
bién existen reglas, pero no confrguran un sistema, y, a Nótese que, atendiendo a esta interpretación de
diferencia de las leyes matemáticas, sólo un experto Wittgenstein, la célebre observación28según la cual, por
puede aplicarlas correctamente". una gran clasede casos,podríamos decir que el signifrca-
Quiero aplicar aquí una observación que Jürgen Ha- do de una palabray su uso en el lenguaje no es unateoría
bermas hace en diversos puntos de su libro Teoría de la del signifrcado, sino sólo una expresion de un punto de
acción cornunicatiua:zIEI que no atrapa el "mensaje" del vista, a partir del cual se puede plantear la cuestión de si
juego de lenguaje, y no logra ubicarse con la imaginación se sabe qué signifrca investigar una "teoría del significa-
en la posición de una persona involucrada en el juego, no do", en todos aquellos sentidos en que, a partir de una
puede evaluar si los "criterios" de esa persona están "teoría del significado" se podría deducir una información
aplicados racíonalmente o no. Quien describa el juego metafísica.
diciendo que los jugadores (los electricistas) emiten cier- Permítanseme todavía dos puntos más antes de vol-
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ver a la "primacía de la práctica". 1) Saber en cuáles como he hecho notar en Razón, uerdad e historia, no se
circunstancias una aseveración (no un "enunciado") es pueden explicar los objetivos de un juego de lenguaje sin
afirmable, significa saber en qué circunstancias esa utilizar el lenguaje de esemismo juego u otro conexo.)
aseveraciónes verdadera o susceptible de ser verdade- Si esto es verdad, incluso del lenguaje científrco,aquí
ra. La idea según la cual las condicionesde afirmabilidad es donde se retorna a las numerosas discusiones de
son condiciones para emitir el sonido constituye una Wittgenstein sobrelas formas del lenguajediferentesdela
tergiversación completa del significado wittgensteiniano. científrca;y aquí esdondeestasideassetornan particular-
"Afrrmabilidad" y "verdad" son dos nociones íntimamen- mente importantes para la comprensiónde su pensamien-
te conectadasentre sí; se llega a comprenderlasa ambas to; o cuando se vuelve a su análisis del lenguaje religioso,
desde el interior de un juego de lenguaje, atrapando su de los juegos de lenguaje "primitivos" y de las "formas de
"mensaje"ze y juzgando la afirmablidad y la verdad. vida" disímiles en Sobre la certeza. En sus Leccionesy
2) Michael Williams ha tratado de esquivar la crítica conuersacionessobre estética,psicología y creencia reli-
de que este tipo de "wittgensteinismo" es ingenuamente gíosa,soWittgenstein aclara que é1,perrnaneciendofuera
positivista, afirmando que él refuta la dicotomía hecho/ del lenguaje religioso (o prefiriendo estarlo), no puede
valor (comolo hago yo), y que esto le permite decir que las afirmar si el lenguaje religioso es cognoscitivoo no cog-
condícionesde afirmabilidad puedenser reformadaspor sí noscitivo; todo lo que puede decir es que, desde el punto
mismas. Sin embargo,este agregadoimplica la noción de de üsta'externo", el hombre religioso "utiliza una ima-
"reformar" un juego de lenguaje, como si se dispusieseen gen".31Sin embargo,agregaque afirmando esto no quiere
filosofía de una noción establecida. Para acceder a algo decir que el hombre religioso usa solamente una imagen
como una reforma al juego de lenguaje del electricista, se o "expresa solamente urta actitud". Personalmente, creo
debeconocerel núcleo de sujuego: conseguircomprender que aquí Wittgenstein quiere afirmar que: 1) la posibili-
el funcionamiento de los circuitos, cómo repararlos cuan- dad de comprensión "externa", de una forma de üda
do dejan de operar, cómoinstalarlos y cómodiseñarlos.Si profundamente diferente resulta extremadamente limi-
concebimosel juego de lenguaje nada más que como un tada, y 2) que las afirmaciones religiosas no son simple-
juego consistenteen emitir sonidosen ciertas circunstan- mente afirmaciones "empíricas" mal formuladas. No obs-
cias observables,conla esperanzade que esossonidosnos tante éstasno han sidorechazadaspor Wittgenstein desde
ayuden a encender la luz, entonces la única noción de sus raíces,comolo han sido las afirmaciones metafísicas.
"reforma" de las reglas que estaremos en condiciones de ¿Quées, entonces,lo que hay en juego?
aportar es una noción positivista en el más estricto senti- Sin embargo,en los escritosdeWittgenstein entreveo
do; retornaremos efectivamente a "la meta final de Ia un objetivo, yá sea moral o frlosófico.Aparentemente, él
ciencia es la previsión y el control". Si bien esto puede recomiendaun cierto tipo de comprensiónempática (como
parecer plausible en el casode la electricidad aplicada,no lo hace explícitamente en sus Oáseruacionesa, "La rarna
veremos en esto ningún tipo de ayuda para la compren- dorada" de Frazer).32Wittgenstein opina que los euro-
sión de buena parte del lenguaje humano. (En general, peoslaicosconsiderantodas las otras formas de vida como
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7

"precientíficas" o "acientíficas", y que esto no es más que de la experiencia naturalmente originadas. No está llamado
una burda forma de negarse a evaluar equitativamente Ia a crear un mundo de "realidad" de nouo, ni a cavar en los
secretosdel Ser escondidospara el sentido común y la ciencia.
diferencia . La razón por la cual creo que los intereses de No tiene unfondo de informaciones o cuerpo de conocimientos
Wittgenstein se dirigen al corazónmismo de su filosofía es privativamente suyo; si no resulta ridícula siempre que se
la siguiente: según mis observaciones hacia el final de erige en rival de la ciencia, es tan sólo porque acaece que
Sobre la certeza, cuando se refiere a nuestras relaciones determinado filósofo es alavez,como serhumano, un hombre
con otras formas de vida como, asimismo, en Leccionesy de ciencia profético. Su función es aceptar y utilizar para
cierto fin los mejores conocimientos asequibles de su propio
conuersacionessabre estética, psicología y creencia reli-
tiempo y lugar. Y este fin es la crítica de las creencias,
giosa, y en Obseruacionesa oLa ranxa dorada" de Frazer, instituciones, costumbres y usos bajo el punto de vista de su
hay una declaración respectode que un frlósofodel lengua- repercusión sobre el bien. Esto no significa su repercusión
je no puede decirnos cotrlofrlósofq si las aparentes "aseve- sobre el bien, como algo privativamente alcanzado y formu-
raciones" hechas en una forma de vida muy diferente de lado en la filosofía. Pues así como la filosoffa no tiene un
la científica son aseveraciones o no; yo puedo decir: 'Ya dominio propio de conocimientos o de métodos para alcanzar
la verdad, tampoco tiene un accesopropio al bien. Así como
no hablaré más así", o bien, por el contrario, adoptar como
acepta el conocimiento de los hechos y de los prinóipios de los
propia una forma de vida. Sin embargo, estono es algo que competentes en materia de investigación y descubrimiento,
la filosofia puede decidir por mí. Ateniéndonos a tales de igual modo acepta los bienes difundidos en la experiencia
interpretaciones, la recusaciónde la metafisica por parte humana. No tiene la autoridad, ni mosaica ni paulina, de una
de Wittgenstein es una recusación moral. Las imágenes revelación confiada a ella. Pero tiene la autoridad de la
inteligencia, de la crítica de estos bienes comunes y natu-
metafi sicas,según é1,sonp erj udiciale s para nosotros.33E I
rales.sa
problema, ese problema que debemosenfrentar repetida-
mente, es saber si una forma de vida tiene un valor
En el tercer capítulo me extenderé algo más sobre
práctico o espiritual. Pero el valor de una forma de vida no
Dewey y sobre el modo en que esta concepción de la
es,en general, algo que se pueda expresar en losjuegos de ñlosofíaha sidoelaboradapor é1.Hasta aquí he tratado de
Ienguaje de aquellos que no están en condiciones de
mostrar que, a pesar de que Wittgenstein no era, en sen-
compartir sus intereses evaluativos.
tido estricto, ni un "pragmático" ni un "kantiano", com-
Esta da, sin duda, la impresión de Ber una posición parte con el pragmatismo una cierta herencia kantiana
pragmática, pero no es ese pragmatismo imaginario (de- (que hasta William James fue extremadamente reacio a
testado por los verdaderos pragmáticos) que afrrma: "Es
reconocer), y también comparte con él un (quizás el)
verdadero (para ti) si es bueno para ti". En realidad se
conceptocentral: el conceptode la primacía de la práctica.
encuentra mucho más cercade la actitud de Dewey cuando
escribió:

Su primera incumbencialdel discursofilosófico]es clarificar,


emancipary extender los bienesinherentes a las operaciones

74 ID
V

Notas 11. L. Wittgenstein, On Certainty, Oxford, Basil Blackwell, 1969,


$ 605.
1. VéaseL. Wittgenstein, Philosophical Investigaúio¿s,$ 128,Basil 12. Supongamos que una piedra terrestre sea transportada a la
Blackwell, Odord, 1953. [/nuestigacionesfilo sóftcas,Barcelona,Grij albo Luna, y allí abandonada. La fisica aristotélica implica claramente que la
Mondadori, 1988.1 roca caería hacia la Tierra, mientras que la newtoniana proporciona el
pronóstico correcto (que la piedra permaneceúa en la Luna, o caería so-
2. VéaseH. Reichenbach,Relatiuitiitstheorie und Erkenntnis apri'
bre la superficie lunar, tantas veces como fuera levantada y vuelta a
ori, Berlín, Springer, 1920.
soltar). Existe cierta indiferencia extraordinaria ante el detalle de afir-
3. Reitero que carecende sentido "en los términos en que ellos han
mar con tono grandilocuente que la fisica de Aristóteles y la de Newton
sido tradicionalmente formulados", porque no deseo sogtener -y no
son "inconmensurables".
quiero dar una interpretación de Wittgenstein basándomeen lo que él
sostenga- queno reporta utilidad alguna reflexionar sobreestostemas. 13. Esta es la expresión utilizada por Quine para definir la ciencia
(oportunamente formali zada).
Sobreestepunto,véasela IntroduccióndeJamesConanta la recopilación
de mie eecritos,realizada por él mismo, Realís¡n with a Human Face, 14. Digo esto a pesar de que, a primera vista, parece que los
Cambridge,Harvard UP, 1990,pp. xv-lJo$v. siguientes párrafos de Soóre la certeza confirman la interpretación de
4. R. Rorty, Contingency,Irony and Solidarity, Cambridge, Cam- Rorty:
bridge UP, 1989.fContingencia,ironla y solidaridad' Barcelona, Paidós $ 608. ¿Es incorrecto que guíe mi conducta por las proposicionesdel
Ibérica, 1996.1 físico? ¿He de decir que no tengo ninguna buena razón para ello? ¿No es
5. R. Rorty, Philosophyand the Mirror of Nature, Princeton' Princ- precisamente eso lo que denominamos una "buena razón"?
eton tIP, L9?9.[LafiIosoflay el espejod.ela naturaleza.Madrid, Cátedra, $ 609. Supongamos que encontramos algunas personas que no lo
1989.1 consideran una razón excluyente. ¿Cómonos lo deberíamos imaginar? En
6. Por esta razón, Rorty escribe:"El mundo no habla. Sólonosotros lugar del fisico, consultan al oráculo. (Es por eso que los consideramos
hablamos.El mundo puede,solamentedespuésqueestemosya programa- primitivos.) ¿Es incorrecto que consulten al oráculo y se dejen guiar por
d.ospara usar un lenguaje dado, ser la causa de algunas de nuestras él? -Si decimos que es "incorrecto", ¿no partimos de nuestro juego de
creenciag".(R.Rorty, Contingenqt,Ironyand Solidarity,cit.,p. 6.) Nótese lenguaje para combatlr el suyo?
también la referencia alos críterios de una comunidad (en el discurso $ 610. Y, ¿tenemoeo no derecho a combatirlo? Por supuesto, apo-
"normal"), así comotambién a los "algoritmos', en su trabajo Páilosophy yaríamos nuestra manera de actuar en todo tipo de frases hechas.
and the Mirror of Nature, cit., p. 342. $ 611. Cuando lo que se enfrenta realmente son dos principios
?. VéaseR. Rorty, "solidarity or Objectivity?",en J. Rajchmany C. irreconciliables, sus partidiarios se declaran mutuamente locos y herejes.
West (compe.)Post-Analytic Philosopñy, Nueva York, Columbia UP, $ 612. ¿He dicho que "combatiría" al otro - pero, ¿no le daría ra-
1985,pp. 3-19. zones?Sin duda; ¿hasta dónde llegaríamos ? Más allá de las razones, es-
8. L. Wittgenstein, Philosophical Investigotions, cit.,Il xr, p. 227 tála persuasión. (Piensa en lo que sucedecuando los misioneros convier-
(trad. ingl. levementemodifrcadapor Putnam). llnu estígaeiones fi.losófi' ten a los indígenas.)
cos. Barcelona,Grljalbo Mondadori, f988.1 Sin embargo, en una lectura más atenta, la interpretación
9. "Baeándoseen la evidencia se puede llegar perfectamentea la rortiana se revela insostenible. Así y todo, si hemos leído solamente
conüccióndeque un individuo seencuentraen tal o cual estadode ánimo el $ 609, podríamos afirmar que Wittgenstein está tomando distancia
que, por ejemplo, no finge. Sin embargo,aquí la evidenciainvolucra la de todos aquellos que consideran que consultar un oráculo es una
evidencia'imponderable'."L. Wittgenstein, PhilosophicalInuestigations, solución "inco-rrecta". No queda del todo claro si al utilizar la primera
ft.losóficas.Barcelona,Grijalbo Monda-
cit., II xi, p. 228. llnuesti.gaciones persona del plural en la frase "...Si decimos que es 'incorrecto', ¿no
dori, 1988.1 partimos de nuestro juego de lenguaje para combatir el suyo?' se
10. H. Putnam, Representation and Reality, Cambridge,MIT Press, incluye en ella el propio Wittgenstein. Pero esa ambigüedad se
L988.[Representación y realidad. Barcelona,Gedisa,].990.1 refuerza más adelante, en el $ 612, cuando dice: "He dicho que

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7'

'combatiría'al otro". Por consiguiente, Wittgenstein no se asume aquí pantano que se extendía ante él tenía un fondo sólido, a lo cual eljoven
como un simple espectador, sino que él mismo combatirá contra un respondió que sí. Sin embargo, a los pocos pasos, el caballo del viajero se
juego de lenguaje diferente, al menos en algunas oportunidades. Pero '¿No me
hundió casi haeta la cincha, lo que hizo exclamar al viajero:
¿quién no lo haría? (¿Qué persona honesta no combatiría contra un habías dicho que el pantano tenía un fondo sólido?"Cierto, -respondió el
juego de lenguaje que incluyera, por ejemplo, la ordalía?). No podemos joven-, pero usted no ha llegado ni siquiera a mitad del camino'. Lo
creer que las cosas que Wittgenstein diúa criticando otro juego de mismo que sucede con este pantano acontece con la elusiva arena de la
lenguaje (por ejemplo, que es'absurdo" tratar de llegar a un veredicto sociedad,pero quienes lo eaben, ya se han hecho demasiado viejos". Para
sobre cualquier tema que involucre la ordalía) no sean creídas de el análisis de Cavell, véase S. Cavell, The sensesof Walden, Nueva York,
alguna forma por é1, o que les confiera alguna reinterpretación Viking Press, 1972.
metafísica especial, ya que todo el núcleo de Sobre la certeza reside en 18. H. Putna m, Reason, Truth and Hisúory, Cambridge, Cambridge
que no tenemos ningún otro lugar para estar, a excepción de nuestro UP, 1981. ÍRazón, uerdad e historia. Madrid, Tecnos, 1988.1
propio juego de lenguaje. Si sobre palabras como "conocer", por 19. Véase H. Putnam, Progmatisnt.anMoralObjectiuiúy, de próxima
ejemplo, no pueden recaer ciertas acentuaciones metafísicas, como aparición en una antología de ensayos recopilada por Martha Nussbaum
afirma Wittgenstein en uno de sus párrafos, ésta es una razón y Amartya Sen.
suficiente para usarla allí donde tiene su lugar más adecuado, y sin
2O.Para un debate sobre este tema, véase Y. Yovel, Kant and the
la mencionada acentuación metafísica. Wittgenstein considera Philosophy of History, Princeton, Princeton UP, 1986.
totalmente absurdo sistematizar una cuegtión referente a la ordalía.
2I.Ya he expuesto algunas ideas sobre este párrafg en "¿Does the
¿Y qué decir, entonces, de la última oración del $ 612, donde expre- Disquotational Theory of Truth Really Solve All Philosophical Pro-
sa: "...pero, ¿no le daría razones? Sin duda, pero, ¿hasta dónde llegaría-
blems?", Metaphilosopñy, febrero de 1992.
mos? Más allá de las razones estálapersuasión. (Piensa en lo que sucede
22. En una carta a Ludwig von Ficker, Wittgenstein describió la
cuando los misioneros convierten a los indígenas.)" Yo creo que Wittgen-
intención del Tractatus como delimitar "lo ético" uon Innen her.
stein está aquí simplemente indicando cuáles son los hechos: que cuando
tratamos de discutir, pongamos por caso, con un grupo de azandes,* hay 23. Me estoy refiriendo a su reseña sobre mi trabajo Seoson, Truth
ocasiones en las cuales no tratamos de encontrar razones que puedan ser and History (aparecida en el Journal of Philosophy, 81, 1984).
válidas para ellos; las concepciones del mundo gon tan diferentes, que 24. Yéase P. Horwich, Truth, Oxford, Basil Blackwell, 1990; y
algunas veces nos damos cuenta de que, en el transcurso de una discusión también su reseña sobre S. Kripke, Wittgenstein on Rules and Priuate
con un azande inteligente, no podemos recurrir a un argumento común, Languaje, Oxford, Basil Blackwell, 1982.
baeado en una premisa compartida con los azandes, sino que debemos 25. He examinado estos modelos en Dre arning and Depth Gramrnar,
recurrir a la persuasión. reimpreso como H. Putnam, Mind, Language andReality, Philosophical
15. L. Wittgenstein, TYactatus logico-philosophicus, Londres, Rut- Papers.I/, Cambridge, Cambridge UP, 1975, pp.32O-24.
ledge and Kegan Paul, 196 1, [L921122} lTractatus logico-philosophicus. 26. Digo "cuasi sostenida" porque Winch presenta una tendencia
Barcelona, Península, 1997.1 -una tendencia de la cual, sin duda, trata de liberarse- a considerar los
16. Véase J. Conant, "Must We Show What We Cannot Say?, enThe juegos de lenguaje de los pueblos primitivos como inconnrensurables con
Senses of Stanley Cauell, Lewisburgh, Bucknell UP, L989. los nuestros. Esto no coincide exactamente con lo que pensaba Wittgen-
17. H. D. Thoreau, Walden, or Life in the Woods, Boston, Ticknor stein. Sin embargo, se debe atribuir a Winch el haber visto mucho más
and Fields, 1854, cap. XWU, par. 14. fWald.en o Ia uida en los bosques. claramente que otros intérpretes de Wittgenstein lo que éste estaba
Barcelona, Juan José Fernández Ribera, 1976.1Thoreau escribe también, considerando. Desde este punto de vista, los ensayos recopilados en el
en el mismo párrafo: "He leído que un viajero pregunto a un joven si el volumen P. Winch, Ethics and Action, Londres, Routledge and Kegan
Paul, 1972, son, con mucho, superiores a P. Winch, The ldea of a Social
* Uno de los cuatro grupos étnicos originarios de las márgenes del río Science and lts Relation to Philosophy, Londres, Routledge and Kegan
Ubangi, en los actuales territorios de Sudán y la República Centroafrica- Paul, 1958.
na, en Africa Central. [T.] 27. J. Habermas, Theorie des kommunikatiuen Handelns, Frank-

78 79
r

furt am Main, Suhrkamp, 1981, por ejemplo en pp. 114 ss. fTeoría de la cuales los niños aprenden su lengua materrra", constituye una parte
acción comunicatiuo. Madrid, Taunus, 1979.1 riüuaüzada del lenguaje común: "también se podría llamar juego de
28. En L. Wittgenstnin,Philosophical Inuestigations, cit., g 43. [/n- lenguaje al proceso de nombrar distintos elementos, aeí como también a
uestigaciones fi lo sófi cas. Barcelona, Grij albo Mondadori, 1988.l la repetición, por parte del escolar, de las palabras sugeridas por el
29.Ibid, $$ 563-64. educador". Y luego, inesperadamente, üce: "además, llamaré también
'juego
30. En L. Wittgenstein, Lectures and Conuersations on Aesthetics, de lenguaje' a todo el conjunto conformado por el lenguaje y la
Psychology and Religious Belief, Oxford, Basil Blackwell, 1966. ltrec- actividad en la cual está comprendido". No hay en todo esto nada que
ciones y conuersacionessobre estética, psicología y creencia religiosa.Bar- induzca a pensar que las preguntas "¿Cuántos juegos de lenguaje he
celona, Paidós lbérica, 1996.1 jugado hoy?" o "¿Cuántos juegos de lenguaje hay en español?" sean,
aunque mínimamente, sensatas.
31. Tal vez aqul resulte útil introducir algunas precisiones. Se
podría, en realidad, pensar, a priori, que un lenguaje posee un número Ahora bien, cuando Wittgenstein habla de los juegos de lenguaje
preciso dejuegos de lenguaje, que estos últimos se pueden "contar". Sin religiosos, de los cuales alega encontrarse afuera, no se refiere al len-
embargo, el hecho eB que los juegos de lenguaje no tienen confrnes bien guaje, porque el punto esencial de la frlosofia de Wittgenstein sostiene que
definidos; no se puede preguntar: u¿Cuántosjuegos de lenguaje existen en no sepuede estar "fuera del lenguaje"; los juegos de lenguaje, en el sentido
español?", de la misma forma en que no es lícito preguntar "¿Cuántos del juego de lenguaje, no tienen ningún afuera. Con respecto a lo que se
esquemas conceptuales hay en español?" En algunae ocasiones es útil encuentra afuera, al menos temporalmente, es una comunidad humana
considerar doe formas de hablar como 'dos esquemas conceptuales auténtica. La relación que Wittgenstein mantenía con sue amigos religio-
diferentes", especialmente cuando se quiere poner en evidencia el hecho sos (y es sorprendente cuántos de sus estudiantes eran religiosos) es la de
de que, si bien podemos parecer en conflicto cuando nos atenemos es- una persona no religiosa; sin embargo, resulta evidente, por algunos de
trictamente a la letra, en realidad no estamos enunciando tesis incompa- sus escritos (véase L. Wittgenst ein, Vermischte Bemerkungen, Fran}firrt
tibles. Esto sucede en algunoe casos que involucran un contexto físico a. M, Suhrkamp, 1977), que Wittgenstein no sólo había sido religioso en
particular, en el cual, por ejemplo,algo que aparece como una descripción sujuventud, sino que la religión fue objeto de sus reflexiones durante toda
basada en la teoría ondulatoria, y otra que aparece como basada en las su vida; según su hermana Clara, su abuelo luterano había ejercido un
partículas, cuando se las estudia mejor, no están realmente en conflicto, gran ascendiente sobre é1.Por el contrario, se podría preguntar si estos
sino que eon diferentes formas de decir la misma cosa, entre las cuales antecedentes (y sensibilidad) protestante no restringieron excesivamen-
existen relaciones de traducción recíproca, ei bien una traducción de este te la concepción wittgensteiniana de la religión, especialmente si se
tipo no constituye un objeto de estudio para los lingüistas, sino más bien considera, por ejemplo, su hostilidad en los debates sobre las demostra-
para los filósofos, como debe serlo. ciones científicas en religión, su evidente admiración por Kierkegaard,
Retornando a los juegos de lenguaje, al negar que Wittgenstein nos etc. Existen muchas similitudes entre algunos pasajes delosVermischte
ofrece unateorla del lenguaje, quiero en parte negar que losjuegos de Bemerkungen y otros delaApostilla conclusiva no científico de Kierkeg-
lenguaje representen una especie de unidad en la que consiste el lengua- aard (véase S. Kierkegaard., Samlede Vaerker, Kobenhavn, 1901-1906).
je. En uno o dos párrafos, al comienzo mismo de sus Inuestigaciones Por lo que a mí respecta, la respuesta que daría es: "No necesaria-
fiIosóficas, Wittgenstein emplea eltérmino "juego de lenguaje" sin darnos mente", porque creo que eI papel de las "demostraciones" en religión es
explicación alguna, aunque aclara su uso sólo un poco despué6, ya que en muy diferente del papel que desempeñan, por ejemplo, en matemáticas
el parógrafo 7 (el cual rara vez recibe una atención adecuada) introduce (aunque en las escuelas que pretenden que se puede demostrar la
cuatro posibilidades para el uso del término. El primer significado, que es existencia de Dios -como la escuela neotomista o la que en el judaísmo
el signifrcado literal de "juego de lenguaje", y lB base de la metáfora encabezó Maimónides- nunca fue considerada una teología oficial del
wittgeinsteniana, es: "juegos meüante los cuales los niños aprenden su judaísmo). Santo Tomás de Aquino sostiene que las demostraciones
lengua materna". IJn segundo significado, insólito en el texto del autor, se tradicionales de la existencia de Dios son demostraciones, aunque es
especifica, en el mismo punto: "en algunas ocasiones me referi¡é a un preciso mirarlas con los ojos de la fe, cosa que no parece aplicarse a las
lenguaje primitivo como a un juego de lenguaje". La tercera acepción, demostraciones de la geometía. Y son demostraciones incluso para
obtenida mediante una metáfora bastante fácil de tuegos mediante los Maimónides, aun cuando, llegado a un cierto punto en el curso del propio

80 81
razonamiento filosófico desde dentro de la teología, se comprende
que idea es que alguna imagen nos libere o, al menos, nos provea de un punto
ninguna de los palabras que se refinren a Dios puede significar Io mismo de apoyo, cuando nos encontremos prisioneros. Y Wittgenstein estaba
"juego de
cuind.o se utiliza dentro de otro contexto; ni en ningrin otro oeristeo convencido del hecho de que las imágenes metafísicas nos aprisionan.
lenguaje", si prefieren, cuando se advierte que áa sta el término no Entre las imágenes metafisicas que nos aprisionan figura, sin duda,
puid," significar aguí Io que significa en cualquier otro conterto, lo que el relativismo. ¿De qué modo evita Wittgenstein el relativismo? La
demuestra la validez de una experiencia que Maimónides denomina respuesta es que, para é1,el problema del relativismo no resulta demasia-
,,deslumbramiento". Esto sig¡ifrca que la semejanza entre tales religiones do importante. Tales cuestiones surgen, en distintos siglos, de hipótesis
y las matemáticas, e incluso la metafisica es, en realidad superficial; metafisicas diferentes. En un libro dedicado en parte a la filosofía de
edstencia de Dios" Wittgenstein (Realisrn and Imagination in Ethics, Oxford, Basil Black-
luiere decirque Iatentativa humana de "demostrarla
Á sui generis, es decir que no es accesible a las demostraciones de la well, 1983), Sabina Lovibond sostiene --creyendo reconstruir el pen-
metafieica (al menos en la forma en que esta última se concebía cuando samiento del ñlósofo austríace.-que el materialismo esverdadero;y dado
aún ee pensaba que podrían ser posibles demostraciones metafísicas que el materialismo es verdadero, entonces el relativismo también lo es,
ya que, después de todo, ¿qué otra teoría de la verdad es sensata desde un
semejantes a lae de la fisica)'
'The Gold'en punto de vista materialista? Como interpretación de Wittgenstein, esto es
32. L. Wittgenstein, "Bemerkungen über Frazers
o, "Lo ratno simplemente absurdo, pero casi correcto como reconstrucción del camino
Bough' en Synthése,1? (1967), pp' 233-53' lObservocioneso
que Rorty abrió al relatiüsmo. Al raspar el posmodernismo de Rorty se
d.orad.a"de Frazer. Madrid, Tecnos, 1992'l
descubre, justo bajo la superfrcie, el materialismo (y no hace falta siquiera
33. Lo que wittgenstein nos hace ver, cuando analiza profunda-
raspar demasiado enérgicamente). Rorty, por ejemplo, dejá bien en claro
mente estas imágene8 metafisicas, es que no nos pasan inadvertidas. que no niega la existencia de un mundo exterior; no afirma, como Derrida,
Claro que cualquiera podúa rebatir: "De acuerdo' pero las imágenes "il n'y a pas dehors texte" ("no hay nada fuera del texto"). La imagen
religiosas, cuando se analizan profundamente,gon misteriosas, se contra- ofrecida por Rorty de nuestra situación es la siguiente: podemoscompren-
dicen a sí mismas o, por lo menos, contradicen la comprensión del común der de qué modo "los signos y los sonidos" que producimos tienen una
de la gente. Es más, wittgenstein no piensa que la religión esté privada causa física, pero lo que no podemoscomprender es el modo en que ellos
de signifrcado". Comoya he dicho, mi opinión es que Wittgenstein enuncia pueden tener una relación semántica con el mundo; de qué modo pueden
unjulcio de valor, cuando dice: "Tú pierdes lo esencial del uso religioso de describir, referirse, corresponder, concordar, ser verídicos, Este es el
las imágenes; una imagen religiosa debería Ber usada para obtener un verdadero problema.
rumbo y una orientación general para nuegtra propia vida". Emplea la
En ningún momento de su vida, Wittgenstein resultó enredado por
palabra,,peso", diciendo que ciertas imágenes tienen un "peso humano",
el materialismo de Rorty (o de la Lovibond). Si bien anteriormente he
y que "se encuentran en las raíces mismas de todos nuestros pensamien-
hecho uso de la palabra "naturalismo" al describir la posición de Wittgen-
lor". Opino que su intención, en este caio, es expresar de esa forma un
stein, lo he hechocon mucha cautela, exactamente como se debe hacer con
juicio, segúnel cual hay algo de equivocado en el tipo de emprendimien-
un filósofo de su nivel. La idea segrin la cual podemos dar un sentido a
to metafisico que éI mismo inició cuando elaboró el sistema sostenido o
nuestra existencia en el mundo comparándonoscon las máquinas ha sido
-según se interprete la obra- ya en vías de desmoronamiento en el
explícitamente criticada, tanto en las Inuestigaciones filosófi.cos, como en
Traltatus. Wittgenstein advertía el atractivo de un emprendimiento de
las Lectures on the Foundation of Mathemaúics. En el buen o en el mal
este tipo pero, así y todo, el resultado fue que el sistema cuya elaboración
sentido, la analogía con las máquinas es totalmente inútil.
lo tuvo absorbido por años, no era más que un castillo de naipes; un
que no Es evidente que Wittgenstein no duda (como no dudaron Husserl o
sistema que no explica nada en absoluto. wittgenstein nos üce
podido interpretar, el papel que la experiencia de Brentano) de que los hombres podemospensar de un modo genuino en las
interpretá, ni habría
y desarrollar en una perEona religiosa; cosasexternas. El famoso pasaje de las.I¿u¿súigaciones sobre "seguir una
una vida religioea puede estimular
peso regla", no tiene la finalidad de convencernosdel hecho de que no podemos
nos dice que 8u emprendimiento metafisico nunca tuvo este tipo de
de una imagen que pudiera seguir las reglas, sino, más bien, de decir: "No creemos misterios allí
humano, que no se trataba en realidad
donde no hay ninguno, ni inventemos objetos metafisicos especiales allí
razonablemente encontrarse en laraíz de todos nuestrog pensamientos'ucaza";la donde no existen (especialmente, relaciones metafísicas especiales con
En la expresión "a Ia caza de una imagen", la palabra clave es

82 83
tales objetos), para explicarcómo podemos seguirlas reglas", porque si lo
hacemos, nog encontramos con algo que no se explica ni se puede expricar
nunca.
Admito que a muchos todo esto puede parecerles un poco insatisfac-
torio. Todos sentimos, en alguna ocasión, el deseo de exclamar: uRe-
suniendo, Wittgenstein, ¿cuál es su explicación?" Pero el hecho es que él
se rehúsa a dar una explicación básica, medular: "Ei error reside en decir
que entender consiste en... cualquier cosa" (L. Wittge nstein, ZetteJ,O:dord,
Basil Blackwell, 1967, g 16). Es importante darse cuenta, como ya he
ücho antes, de que aquello que Wittgenstein está dispuesto a aceptar
como no problemático es lo que se encuentra en la raíz misma de nuestro
peneamiento: "una imagen que se encuentra en la parte más profunda de
nuestro pensamiento será digna de respeto, y no deberá tratarse como
una superstición" (L. Wittgenstei n, Ver rnischte B emerk ung en, cit.,p. gB).
wittgenstein pondría en duda la inteligibilidad misma de la afirmación
según la cual existe una "relación" úni caettre cada aseveración verdade-
3
ra y la "realidad", pero no dudaúa de la existencia de enunciados
verdaderos.
34. John Dewey, Experience and Nature, La Salle, Open Court,
EL PRAGIVIATISMOYEL
1926, pp. 407 ss. fLa experiencia y la naturaleza. México, FCE, lg48.l
DEBATE CONTEMPORANEO

84
Hemos visto que la interdependencia holística de
hecho entre valor y teoría constituye un tema central en
los escritos de William James. En estas leccioneshe
utilizado, en ocasiones,el término "compenetración"para
subrayar el hechode que la interdependenciade que hablo
no es una interdependenciade elementosque puedan ser
siempre distintos, aunque seapor obra de la imaginación.
Sin duda, si digo "Me he equivocado al castigar a los
niños",entoncessegúnun usoya establecido,he expresado
un "juicio de valor", mientras que, si digo "Mi paraguas
está en el armario" he afrrmado un "hecho". ¿Y si dijera
"Calígu-la era un emperador cruel"? Entonces habría
expresadoun juicio de valor que afirma un hechohistórico. r
Es más, si dijera "Durante los años cuarenta Walter
Gieseking ejecutaba las sonatas para piano de Bach y
Mozart con una sensibilidad sorprendente en cada matiz
y sin rastro alguno de ostentación", habría descrito el
modo de inter-pretar de Gieseking y habría expresado,
como se suele decir, mi apreciaciónsobre el tema.2
Los frlósofos de la ciencia han hecho a veces una
diferenciación entre "observaciones"y "generalizaciones
inductivas",s mientras que otrosahan defendido una tri-
ple oposiciónentre observación,generalizacióninductiva

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y "abducción",esto es, una teoría explicativa que va más La oposiciónpeirceiana entre datos e "hipótesis" ab-
allá de la mera generalización inductiva. La primera ductivas no es absoluta (comobien sabía el propio Peirce),
dicotomía, la que se presenta entre los datos de obser- porque en la ciencia teórica las teorías abductivas pueden
vación y la generalización inductiva, no puede ser absolu- desempeñarel papel de "proposicionesbisagra".
ta, porque la inteligibilidad de las aseveracionessobrelos Un ejemplo divertido, pero instructivo de las graves
datos presupone siempre un trasfondo de "Ieyes".Esto lo consecuenciasderivadas de olvidar la compenetración
hicieron notar incluso los fenomenistas. Recuerdo que entre hechoy teoría se encuentra al comienzodel libro de
Clarence Irving Lewis afirmaba, en sus conferencias en Ian Hacking.T Este autor sostiene que deberíamos ser
Harvard, sobre Teoría del conocimiento, en L948, que no realistas respectode las teorías (las cuales,según é1,no
cuando digo "Veo una silla", presupongo la validez de son más que instrumentos de cálculo)y realistas respecto
generalizacionestales como "Si muevo los ojos hacia la de lo que podamos"manipulaf',ya sealiteralmente, o con
derecha,la imagen visual se desplazaráhacia la izquier- la ayuda de algún mecanismo o alguna herramienta.
da". Y, prescindiendode las afirmacionessobre"imágenes Posteriormente, en un pasaje notorio por su actualidad,
visuales" ciertamente estoy presuponiendola validez de incluye los positronesentre las cosasque podemosmani-
"leyes" del tipo: "Si levanto una silla, perrnaneciendo pular.
invariable todo el resto,6ésta no catecerádepeso","Si me Hacking describeun experimento en el cual la carga
siento en una silla, permaneciendo invariable todo el inicialmente depositadasobreuna esfera de niobio super-
resto, éstame sostendrá",así comopresupongotambién la refrigerada es gradualmente cambiada:
validez de un gran número de afirmaciones tan "funda-
mentales", eü€ hasta plantearlas sería normalmente un ¿De qué modo se puede cambiar la carga sobre la esfera de
niobio? "Bueno, por fin hemos arribado al punto -dijo mi
acto lingüístico privado de sentido, como, por ejemplo,
amigo-, la rociamos con positrones para aumentar la carga,
decir: "Sile sonrío,no setransformará en un hipopótamo". o con electrones para disminuirla". Desde aquel día me he
Como afirma Wittgenstein en Sobre la certeza, estas transformadoen un realista científi co.EnIo que amí respecta,
afirmaciones son como los goznessobre los que gira una si puedes rociarlos, son reales.s
puerüa; el resto del juego de lenguaje no funcionaría sin
ellas, a menos, naturalmente, que no encontremosalgo Pero, ¿quésignifica creer que "ellos" son "reales"? Si
que sustituya estas "bisagras": pero, en tal caso, las quiere decir que se cree que existen cosasdístíntas llama-
nuevas "proposicionesbisagra" desempeñaránel mismo das "positrones", enüoncestendremos dificultades -y
papel. Hablar de "interdependencia" sugiere que laiusti- difrcultades serias- con la teoría. Porque la teoría cuán-
ficación de la aseveración"Veo una silla" dependede un tica de los campos¡nosdiceque los positronesno tienen, en
gran número de "leyes", pero no pone totalmente de relie- general, un número definido! En la particular situación
ve que el contenido mismo de la aseveraciónno se dis- experimental descrita por Hacking, probablemente los
tingue claramente de esasleyes.6Esto es lo que yo llamo positrones se presentan en un cierto número, pero sería
compenetración. muy plausible preparar un experimento en el cual se

88 89
"rociara" la esfera de niobio, no con tres positrones, ni esferas susceptibles de ser "rociadas", es una imagen
*alfa" de
tampoco con cuatro, sino con una superposición apropiada para algunos experimentos (la complementa-
tres y de cuatro positrones. Y la mecánica cuántica elemen- riedad tiene en cuenta precisamenteesto);sin embargo,es
tal nos dice que no podemospensar en que los positrones porque debemosutilizar imágenes diferentes en experi-
tengan una trayectoria o que puedan ser, en general, mentos diferentes,que no podemosdecirsimplentente"los
reidentificables. positronessonreales",comosi ésta fuera una aseveración
Si ser un "realista científico" cuando se trata de los que se interpreta por sí misma.
positrones,pero un no realista cuando se trata de "lo que Naturalmente, no quiero decir que los positrones no
es teórico" (que es exactamente lo que Hacking propone), sean reales; pero creer que los positrones son reales tiene
no significa creer que los positrones sean cosasdístíntas, un contenido conceptualúnicamente porque tenemos un
¿quécontenidotiene aquí la noción de "ser un realista"? Si, esquemaconceptual-un esquemasumamente singular,
por otra parte, significa realmente creer que los positrones un esquemaque no "comprendemosplenamente,pero aun
son "cosas"en el sentido de poseeridentidad perdurable, así un esquemaexitoso- que nos permite saber qué decir
una posiciónen el tiempo y en el espacio,un número, etc. acercadelos positrones,y cuándo los podemosconsiderar
-y, comoWittgenstein declara,snuestro paradigma de lo comoobjetosque pueden rociarse y cuándo no. El intento
"real" es lo que podemosindicar,y lo que podemosindicar de Hacking de estableceruna neta diferencia entre hecho
tiene, seguramente, una identidad duradera, posición, y teoría, y de decir que se debe ser realista en la confron-
numerabilidad, etc.-, entonces,ser un "realista científi- tación con los hechosy no realista en la confrontación con
co" frente a los positrones significa creer que la teoría las teorías, se derrumba precisamente por la compene-
cuántica de los camposes,en consecuencia,falsay, no sólo tración entre hechoy teoría. Como habría podido afirmar
interpretarla de modo "no realista" (sealo que fuere lo que James,la palabra "positrón" no es unacopia dela realidad,
este término quiera decir). Pero entonces perdemos por sino más bien un "símbolo", y €s Ia teoría la que nos
completo la capacidad de comprender aquellos fenóme- instruye acercadel uso del símbolo.De nuevo, la teoría y
nos cuánticos característicoscomo la interferencia, la no el hecho(el rociadode los positrones)no son separablesni
localización,etcétera. siquiera con la imaginación.
Sin embargo,me imagino que esto no es realmente lo Cuando en el primer capítulo hablé de "interpreta-
que Hacking desea.Tengo la impresión de que lo que él ciones",tenía en mente la interpretación de expresiones
quiere decir es que aquí, eneste experimento, los positro- lingüísticas. La idea de que "hecho"(en el sentido de dato
nes son "reales", pero sin decir qué cosa es lo que esto de observación)e "interpretación" (en este sentido) son
significa. En la prosa de Hacking,"teal" no es más que un interdependientesdeberíaquedar clara, aunque este con-
sonído reconfortante, despojadode todos sus nexos con- cepto haya sido negadopor Quine (iiustamente él!). Para
ceptualesconla reidentificabilidad, la enumerabilidad, la saber si algo preüsto severifica o no debo,antes que nada,
localizabilidad, etc. TampocoBohr negaría que una ima- estar en condicionesde cornprenderlo,es decir, de inter-
gen rcalista, de positrones entendidos como diminutas pretar la expresiónlingüística en cuestión.Todoel discur-
90 91
so sobre la "confirmación", en una actividad pública como las interpretaciones de, supongamos,tradiciones religio-
la ciencia (una actividad, por añadidura, que se maneja sasy de textos dentro de esastradiciones pertenecena la
utilizando un gran número de lenguajes y dialectos dife- "hermenéutica". Desde el punto de vista de Gadamer,
rentes), presuponela interpretación. interpretar "Ama a tu prójimo como a ti mismo" es una
Quinel0 recusa este argumento sosteniendo que los tarea que se divide en dos partes: decir cuál es el signifi-
enunciados observacionales poseen, presumiblemente, cado del enunciado (hecho) e interpretar esesignifrcado
un "significado estímulo intersubjetivo", y este "significa- (interpretación o hermenéutica). Por consiguiente,mien-
do estímulo" (según Quine, determinable por compor- tras que el objetivo de Quine es separar los hechos cien-
tamiento, sin ninguna preocupación hermenéutica) es tíficos (los datos de observación) de los más mínimos
suficiente, a los fines científi.cos, para determinar su nexos que tienen con las atribuciones de signifrcado lin-
signifrcado. Por ejemplo, el hecho de que, sin utilizar güístico,el objetivo de Gadamer es separar, en un sentido
"hipótesis analíticas" --es decir, una interpretación- no más elevado,lasatribucionesde significadolingúístico, de
podamos decir si la palabra gauagai en un hipotético las "interpretaciones". Como el mismo Gadamer afirma:
"lenguaje de la jungla" signifrcaconejoo parte integrante
Comprender una lengua no es por sí mismo todavía ningún
del conejo,es,segúnQuine, irrelevante, ya que éstos,como
comprender real, y no encierra todavía ningún procesointer-
informaciones de observación,son equivalentes. pretativo, sino que es una realización vital.12
Lo que no concuerda en esta afirmación, y que no he
mencionado,es que enunciados"provocados"por los mis- Algo que contribuye a darle plausibilidad al punto de
mos estímulos poseen el mismo valor de verdad. Si los vista de Gadamer es que, en el casode los lenguajes que
miembros de la tribu adondehemos llegado dicen'bosor- más le interesan -por ejemplo,los lenguajesen que se ha
kanyok'tan pronto comovenuna mujerfeayvieja conuna escrito la Biblia y muchos de los comentariosa la Biblia-
verruga sobre la nariz, ¿debemostraducir esa expresión la traducción de los términos y la forma de traducir la
como "mujer fea y vieja con una verruga sobre lanariz" o mayor parte de los enunciados están estabilizados en el
con el término "bruja"lllSi ellos esperanunabosorkanyok tiempo. Esojustifica llamar "hechos"a las verdadessobre
y ésta aparece (según ellos), ¿han hecho una previsión los significados (traducciones) de estos enunciados y es-
verdadera o una falsa acusación de brujería? Para res- tas palabras; y, en realidad, ésos so¿ hechos, porque
ponder es necesario, no sólo conocer su "significado es- cumplen con sus funciones específicas.Pero el caso de la
tímulo", sino también interpretar la expresión. traducción radical es completamente diferente. Para sa-
Una contraposición muy distinta, pero en defrnitiva ber si bosorkanyoftsignifica "bruja", debocomprenderuna
igualmente desafortunada, entre hecho e interpretación, cultura completa, y si bien esto no es efectivamente un
que ha sido defendida por Gadamer, afirma que: las Lebensvollzug("un acto vital inmediato"), por cuanto se
aseveraciones que se refieren al significado de las pala- han desarrolladoen esa cultura, por extraño que patezca
bras (por ejemplo,parlez-uousfranqals? signifrca ¿habla es, decididamenteun Interpretationsuorg&ng("un proce-
francés?) se deben clasificar como hechos,mientras que so de interpretación"). Como Quine, pero en un campo di-
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ferente, Gadamer no advierte que lo que él considera "he- posiciones").Hemos visto también que, si bien Richard
cho" está conceptualmente conexo con lo que considera Rorty se autodefine comoun "pragm ático" y un admirador
"interpretación"; en verdad, en este caso,el contenido del del último Wittgenstein, su costumbre de dicotomizar el
"hecho" -admito que lo es- de q:uebosorkanyok signifi- pensamiento humano en discursos en el interior de "los
que "bruja" está dado por la explicación del conceptode juegos de lenguaje gobernados por reglas" y discursos
"brujería" que impere en esacultura. La interpretación no "fuera" de los juegos de lenguaje, es más antipragmática
es separabledel hecho ni siquiera por la imaginación. que antiwittgensteiniana.
En el segundo capítulo hemos visto que existe un
elemento holístico en el pensamiento del último Wittgen- Sí, pero, ¿hemos perdido el mundo?
stein; para éI, comoesbien conocido,un lenguaje pertenece
a una "forma de vida" (en las Leccionesy conuersaciones Las característicasdel pragmatismo que hemos ana-
Wittgenstein detiene su atención sobre la distancia que lizado son,sin duda, atrayentes, pero hasta podrían pare-
separa Ia forma de evaluar el arte africano -por ejemplo, cer ominosas.Como he mencionadoen el primer capítulo,
la capacidadpara releuar característicaspertinentes- de se podría pensar que el holismo amenaza con l-apérdida
un nativo respectode un entendido, por su elevación).Sin del mundo: si hecho,valor, teoría e interpretación se com-
embargo, una forma de vida no puede ser descompuesta penetran del modo que he descrito, ¿no estamos siendo
en un conjunto de creenciassobre "hechos"y un conjunto obligadosa aceptaruna "teoría coherentistade la verdad"?
de "valores".l3Además, he tenido ocasiónde referirme a Los teóricos de la coherencia siempre han hecho
Sobre la certezaal ilustrar la interdependencia de hecho notar que el requisito que ponen sobre la verdad no es
y teoría. la mera coherencia de los enunciados sino, más bien la
Hace ya muchos años, Morton White, a propósito del coherenciade las creencias,y han afirmado que los hom-
pragmatismo, habló de una "revolución contra el forma- bres no somoslibres decreercualquier cosaque queramos.
lismo".l4 Esta revolución no es una negación, dentro de La creencia está supeditada a vínculos causales. Por
ciertos contextos,de la utilidad de los modelos formales, ejemplo, en A CoherenceTheory of Truth and Knowl-
pero se manifiesta como una intensa crítica a la idea de edge,l5Donald Davidson ha intentado convencernosde
que los modelos formales (en particular los sistemas que una teoría coherentista de la verdad no es, después
de lógica simbólica,los manuales de lógica inductiva,las de todo, tan mala, a condición de que no nos olvidemos de
formalizacionesde teorías científicas, etc.) describanuna que uno de los vínculos relacionados con las interpreta-
condición a la cual puede o debe aspirar el pensamiento cioneses que nuestras palabras deben ser interpretadas,
racional. Wittgenstein, como se sabe,inició su carrera en en la mayor parte de los casos,comoreferidas a esascosas
la línea de los formalistas y pasótoda la última parte de su con las cualeshemos tenido interaccionescausales(espe-
vida como antiformalista. De hecho, en Soóre la certeza cialmente perceptivas). Sin embargo, el argumento de
se pueden encontrar imágenes de gran plasticidad y flui Davidson no funciona, y por dos motivos. El primero es
dez ("Con el tiempo,la ribera y el río pueden cambiar sus que, si se supone que "la causa" no sea algo conceptual,
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sino algo simplemente "incorporado" al mundo extra- sería de ninguna ayuda porque, si nuestro único modelo
lingüístico, no se obtiene otra cosa que una concepción del lenguaje es el de un esquemacerrado respectode las
de la causaciónmonstruosamenteilusoria.lGNo se puede relacionesdejustificación, un esquemaen el cual literal-
decir, comohace por ejemplo Jerry Fodor, que, a la par que mente nada se extiende fuera del lenguaje (excepto la
la palabra gato se refiere a los gatos, está el hecho de existencia de fuerzas causales violentas, que actúan so-
que "los gatos generan la aparición de la palabra gato".La bre el lenguaje, talvez porque no tienen una descripción
pregunta "¿c:uáles la causo del uso de la palabra gato por "incorporada"), entonces no seríamos afectadoshasta el
parte de César?"no tiene significado alguno, si la retira- punto de concebftde qué rnodopodríamos ser hablantes
mos de un contexto. Dentro de un contexto, según los o intérpretes,y mucho ntenos estaríamos en condiciones
intereses de quien pregunta, la respuesta podría ser: "El de concebirla forma en que podríamosser intérpretes om-
hecho de que la palabra española seagato". "Los maulli- níscíentes.La hipótesis de que la noción de intérprete
dos que César ha oído", etc. Con este propósito, tampoco omnisciente es sensata no es más que una petición de
podríamos imaginar que la palabra pueda dividirse en principio.ls
"categorías" según un criterio determinado. Davidson John McDowell ha sugeridoleque la soluciónconsiste
evita estosproblemas,mencionandoqué interpretaciones en considerar la percepcióncomo un ejercicio,no sólo de
se podrían ofrecer desdeel punto de uista de un íntérprete nuestra capacidadconceptual, sino también de nuestros
omnisciente. El segundo motivo por el que su argumento órganossensoriales,de modo tal que (contrariamente a lo
no funciona, es que apelar a un intérprete, omnisciente o que ha afirmado de Davidson y de otros muchos) un
no, hace perder Ia efectiva profundidad del problema. acontecimiento no lingüístico, por ejemplo, escuchar el
Davidson razor.a como si el único problema estu- maullido continuo de un gato, puedajzstificar, y no sólo
viese constituido por el habitual escepticismo,esetipo de pror)ocar, un acontecimiento lingüístico ("Mitty quiere la
escepticismoque presuponeque nuestras expresionessor¿ papa"). Una sugerencia de este tipo sería aprobada sin
verdaderasofalsas, peroluego seaflige porelhecho deque más por William James, pero podría empeorar el proble-
no podamossober cuál de los dosvalores de verdad tienen ma en lugar de mejorarlo.
efectivamente.lT La preocupación genuina, sin embargo, Un ejemplo puede servirnos para ver hasta dónde es
es que los enunciados acerca de una realidad externa no posible que la percepción sea un ejercicio de nuestra
pueden ser uerdaderoso falsos, en ausencia de conexiones capacidadconceptual. Supongamosque yo tenga la per-
justificatiuas entre las cosas que decimos mediante el cepciónde un resistor que se encuentra sobre una mesa.
lenguaje y algún aspecto de esa realidad. Si la preocu- Yo sé qué es un resistor y qué aspecto tiene. No estoy
pación es ésta -y ésta es, ciertamente, la preocupación suponiendoque me vengan a la mente las palabras "esoes
profunda- decir "Sihubiera un intérprete omnisciente, él un resistor" (taravez, aunque admito que lo hago, pienso
interpretaría las expresiones de algunos como dotadas de en las palabras "ésa es una silla", cuando veo una silla),
condiciones de verdad que se refieren a cosasy aconteci- sino que estaría en condicionesde respondera la pregunta
mientos extralingüísticos" no ayudaría en absoluto. Y no "¿Qué es eso?".¿En qué forma mi experiencia visual se
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diferencia de laexperienciavisual que tengo cuandoveola todo el derechode ser consideradoun acto racional inme-
misma cosapero no sé qué es? diato- ya no existe razón alguna para aceptar la afir-
Ahora bien; consideremosla experienciaauditiva que mación de que una percepciónsólo puedeprouoca,r(y no
tengo actualmente, cuando escuchoun enunciado formu- justíficar) un pensamiento verbalizado. El motivo por el
lado en inglés. Cuando a la edad de ochoañosregreséa los cual haceunos instantes he dicho que estopuede agravar,
EstadosUnidos sin hablar una palabra de inglés,zohasta antes que mitigar, la amenazade una pérdida del mundo
un enunciado inglés elemental -como Weare going to eat es que, si la percepciónse encuentra siempre impregnada
in a few minutes (Dentro de poco nos sentaremos a la de contenido conceptual,tal contenido no puede ser con-
mesa)- me parecíaun simple rumor.Ahora, eseenuncia- siderado,de ninguna forma, como algo positivo. Nuestros
do me dice algo;no puedo percibirlo comoun rumor.zlAún conceptospuedencontaminar nuestras percepcionestan-
hoy puedo tener una experiencia similar: si aprendo el to como"impregnarlas". La percepciónaporta tanta desin-
signifrcado de un enunciado italiano que antes no com- formación como información, y aquí no me refiero a la
prendía, cambiará la forma en que oigo ese enunciado. posibilidad relativamente inocua (¡a pesar de que no
Obviamente,estoy conscientedel hechode que los sonidos siempre ha sido considerada inocua en la historia de la
no han "cambiado",pero lo que oigo no quedaría correcta- filosofía!) de esostipos tradicionales de ilusiones, como,
mente descrito si no dijese que se trata del sonido que por ejemplo, confundir una imagen reflejada con una
escuchabaantes mds wna interpretación. Como tampoco persona, o una sombra con un animal. Lo que intento es
estaría correctamente descrito lo que veo cuando miro un tomar a alguien por una bruja (como en las persecucio-
resistor, si dijera que se trata de la experiencia visual nes que asolaron a Europa y las colonias americanas
que tengo cuando el resistor no era más que una "cosa", durante el Renacimientotardío), o ver a una personacomo
mó,sunainterpretación. Para expresarlo con palabras de un representante de "una raza inferior". Si podemos
William James, la percepciónes "pensamiento y sensa- ver un resistor, también podemosver (o creer que vemos)
cionesfzsionados".Elconocimientode que lo que veoesun brujas. Esto deja bien en claro que McDowell no ha
resistor y la "sensación" no son dos cornponentesde Ia eliminado el peligro de perder el mundo, sino que, en lugar
experiencia, ya que ésta no puede descomponerse;al de eso,lo ha extendido a la percepciónmisma.
menos, no más de lo que la experiencia de oír a alguien que
dice "Dentro de poco nos sentaremos a la mesa" puede La respuesta pragmática al escepticismo
descomponerseen el sonido que oía cuando aún era inin-
teligible para mí, y el conocimiento de qué significa que en Parte de la respuestapragmática es la diferenciación
dos minutos estará lista la comida. que hace Peirce entre duda real y duda filosófica, que he
La sugerencia de John McDowell va más allá de la mencionadoen el primer capítulo. Sé que los males y las
observaciónfenomenológicade James, al destacar que, tragedias que veo en torno a mí no son provocadospor
tan pronto como concebimosel escuchary el ver comola las brujas; pero también sé que hace sólounos pocossiglos
adquísición de ínformación del ambiente-algo que tiene había muchas personas inteligentes que creían lo con-

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trario. El conocimiento puede -y según los pragmáticos taron de presentarnos) a un algoritmo, por una parte, y
debería-generaruna saludabletoma de concienciasobre que no podamos ni siquiera proporcionar una garantía
la falibilidad humana; pero no debeúa -y de hecho no metaffsica segúnla cual ninguna de nuestras creenciasni
puede- provocar el escepticismo universal. No se puede métodosnecesitaránunca ser correcto,por otra parte; este
apelar a la duda real en el momento que se nos ocurra hecho-decía-no implicaque no sepamosnadaacercade
("Dudar no es una cosatan sencilla como mentir" afirma cómo dirigir la búsqueda. Peirce y Dewey sostenían que
Peirce en uno de sus trabajos). Dejar absoluüamentede hemos aprendido un sinfín de cosasrespectode la forma
creer en algo no es una posibilidad humana real. El hecho en que debeencararsela búsqueda-las hemosaprendido
de que algunas veces nos equivoquemos incluso sobre de la experiencia pasada con la investigación misma- y
creenciasverdaderamente fundamentales no puede, por parte de lo que hemosaprehendidose aplica a la búsqueda
sí mismo, hacerme dudar sobrecada una de las creencias en general,no solamentea tipos particulares de investiga-
en particular.El hecho de que no exista alguna bruja no ción u otras cuestionesespecíficas.22
puede hacerme pensar que no exista algún resistor. Un punto de vista comoel de Peirce o Dewey no será
Aunque éste pueda parecer un "pobre consuelo".El comprensiblesi secomienzaconla que se podría llamar la
hecho de que algunas veces nos equivoquemos no consti- concepción"carnapiana" de la investigación. Por esta ra-
tuye motivo para dud ar -d tdar realme nte- de cualquier zón es importante recordar las diferencias entre el modo
creenciaen particulor; incluso la idea de Peirce,a primera en el que un frlósofo como John Dewey considera el méto-
vista, no constituye un motivo para creer en una creencia do científico y el modo en que lo hace otro filósofo como
en particular. Podría parecer que lo que en realidad Rudolf Carnap. Es digno de destacar que el imponente
queremos,es un métodopara decir cuálescreenciasestán trabajo carnapiano sobre la lógica inductiva2s -eltraba-
efectiuarnentejustificadas, ya sea por la percepción o por jo al cual Carnap dedicócasi toda su energíaen los últimos
otros medios, y cuáles, en cambio, no. Pero aspirar a un 20 años de su üda- no hace, en la práctica, ninguna
método de este tipo ¿no es un ferviente deseo de un referencia al experimento (iel término no aparece ni si-
imposible punto equidistante, un vestigio de lo que Dewey quiera en el índice analítico deThe Logical Foundations of
bautizí como "la búsqueda de la certeza"? Probability !). Lasteorías científicashan sido confirmadas
Sí y no. Un "método", en el sentido de un algoritmo que por los "datos probatorios", en el sistema carnapiano de
resuelva todos nuestros problemas epistemológicos,es lógica inductiva, pero es irrelevante (no existe forma al-
una fantasía filosófrca (recuerden lo que he dicho sobre la guna de representar la diferencia en eI ámbito del forma-
"revolución pragmática contra el formalismo"). Todavía, lismo) si estosdatos probatorios --cstos "enunciados ob-
como incluso Peirce ha hecho constar, -y ese aspecto del servacionales"- han sido obtenidos como resultado de
pragmatismo fue continuado por John Dewey durante una experimentación inteligentemente dirigida, o se en-
toda su larga vida frlosófrca- el hecho de que no podamos cuentran disponibles simplemente por casualidad. La
reducir la investigación científica (en el sentido liberal del observaciónpasiva y la intervención activa no marcan
término "científica" qte, tanto Peirce como Dewey tra- ninguna diferencia, y el problema emergente de si se ha

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tratado efectivamentedefolsorlas hipótesis que han sido de que reconocíael hechode que las observacionesfuturas
"altamente confirmadas", no es un problema que pueda podían invalidar una teoría perfectamente confirmada
ser planteado y resuelto en eI lenguaje construido por hasta el presente; pero para los pragmáticos esto no era
Carnap. Para nuestros fines, resulta aun más importante aún suficiente falibilismo. Aún antes del nacimiento de
el hecho de que el término utilizado por Carnap para Karl Popper,Peirce26subrayaba que, con mucha frecuen-
caracterizar su propia posición enelAufbeu,24 el término cia, las hipótesis no serán falsadas, a menos que busque-
"solipsismo metodológico" pueda ser aplicado también, mos intencionalmente falsar la experiencia. Las ideas
aunque seaen un sentido distinto, a este trabajo filosófico, deben ser colocadasbajo presión, se deben demostrar sus
es decir, al trabajo filosófico de los últimos tiempos de valores;y tanto Dewey comoJames siguieron a Peirce en
Carnap. Porque, de la misma forma en que no hace este sentido.
ninguna diferencia, desde el punto de vista de la lógica Para los positivistas -para Carnap y Reichenbach,
inductiva carnapiana, que nuestras observacionessean por ejemplo-, la forma más primitiva de investigación
activas o pasivas (es decir, que no hay ninguna diferencia científica, la que estudiaron por primera vez cuandocons-
entre que solamente observemoso que intervengamos), de truyeron sus teorías sobre la inducción (por otra parte,
la misma forma, no hace ninguna diferencia si la obser- muy distintas entre sí), era la inducción por ehumeración
vación es cooperatiuao no. Fundamentalmente, el punto simple. El modeloes siempre el de un único científico que
de vista es el de un espectadorúnico y aislado, que lleva a determina los colores de una serie de bolas de billar
cabo sus observacionesa través de un vidrio espejado,y extraídas en sucesiónde una urna, intentando estimar la
registra sus enunciados observacionales.En tal caso, frecuenciacon que se sucedenlos coloresde las bolas que
evaluar las teorías por sus virtudes cognitivas no es más aún quedan adentro. Para los pragmáticos, el modelo es
que una cuestión relativa al uso de un algoritmo para ungrupo de investigadoresque tratan de generar buenas
determinar si un enunciadoposeeuna relación matemáti- ideas, poniéndolas después a prueba para ver cuáles de
ca con otro (la conjunciónde los enunciadosobservaciona- ellas son buenas.
les que el observadorha registrado), ateniéndosea imá- Además de esto, comoya he mencionado,se refuta el
genes similares. EI método científrco es reconstruido como modelo deI algoritrno, como podría ser un programa de
un método de cálculo, comola famosa "c*" de Carnap.25 ordenador. Según los pragmáticos, tanto si se trata de
La imagen pragmática es completamente diferente. ciencia como de ética, lo que manejamos son reglas, y no
Para Dewey y Peirce, la investigación es una interacción algoritmos; y las reglas mismas requieren una interpreta-
humana y cooperativa con un ambiente, y, en ambos ción contextual. El problema de la subjetividad y de la
aspectos,la intervención activa, la manipulación dinámi- intersubjetividad quedaba bien claro para los pragmáti-
ca del ambiente y la cooperacióncon otros sereshumanos, cosya desdesuscomienzos,no respectode la preocupación
son vitales. El primer aspecto,el de la intervención, está metafisica relacionada con nuestra posibilidad de tener
directamente conectadocon la falibilidad pragmática. En algún accesoal mundo, sino como un problema estrecha-
realidad, Carnap era también un falibilista, en el sentido mente vinculado con la vida humana. Ellos sostenían2?
LO2 103
que, cuando un ser humano aislado procura interpretar jerarquía y dependencia,o cuandoesoscientífrcosadoctri-
hasta las mejoresnorrnas para sí mismo, y no perrnite que nan a otros, nuevamente la empresa científica se ve
otras personascritiquen su forma de interpretarlas, o bien severamente dañada.3oDewey no era ningún ingenuo;
el modo en que las aplica, entonces,el tipo de "certeza" estabaperfectamenteconscientedela existenciadejuegos
resultante está, en la pró.ctica, contaminado por la subje- de poder en la historia de la ciencia,comoen la historia de
tividad. Incluso la noción de "verdad" carecede sentido en cualquier institución humana. Quizá no nos sorprenda
tal "soledad moral', yB que "la verdad presupone un con los descubrimientos históricos y sociológicosde la
criterio externo al sujeto pensante".28Nocionescomola de ciencia,pero se diferencia de algunos de nuestros contem-
"simplicidad", por ejemplo, no tienen, en realidad, un poráneosal defenderla legitimidad de una nociónnornla-
significado claro, a menos que investigadores que han tiua de la ciencia.
demostradosu competenciaen la práctica de la investiga- No se trata solamente del hecho de que, según la
ción estén dispuestos a concordar, al menos dentro de concepcióndeDewey,la buena cienciareclama respetopor
ciertos límites, sobre cuáles teorías poseen y cuáles no la autonomía, la reciprocidad y la ética del discurso; esto
poseencondicionesde "simplicidad". La introducción de podría ser legítimo incluso si las teorías científrcasdebie-
nuevas ideas que serán sometidas a examen depende, ran, en última instancia, ser examinadas a través de la
asimismo,de la cooperación,ya que cualquier ser humano aplicación de un algoritmo, por ejemplo,la lógica inducti-
que rechacelos input (aportes) de otros seres humanos, va tan defendida por Carnap. Por el contrario, como ya
elimina esasideas tan pronto puede, y comienzaa consi- hemosnotado, de la interpretación misma de los criterios
derar únicamente ideas que, de un modo u otro, reflejan no algoritmicos, basándoseen los cuales se juzgan las
los prejuicios que ha adquirido previamente. La coope- teorías científicas, dependela cooperacióny la discusión
ración es imprescindible, tanto para la generación de estructurada de las mismas nonnas. Tanto para su pleno
ideas, comopara su examen racional. desarrollo,comopara su aplicaciónglobal a los problemas
Sin embargo, esa cooperacióndebe poseerciertas ca- humanos, la ciencia necesita Ia democratización de la
racterísticas para resultar verdaderamente eficaz; por inuestigación.3r
ejemplo, debe obedecer a los principios de la ética del Lo que he presentado aquí es, en parte, una justifi-
discurso.zeCuando no existe ninguna oportunidad de cacióninstrumental dela democratizaciónde la investiga-
poneren dudalas hipótesis aceptadas,criticando los datos ción. Pero Dewey siempre se mostró contrario a las habi-
probatorios sobre los cuales se basa su aceptación, o tuales dicotomizacionespropias de los filósofos.Se opone,
criticando la aplicación de las normas de la investigación en particular, tanto a la dicotomía "ciencia pura/ciencia
científrca a esos datos probatorios, ofreciendo hipótesis aplicada", como a la dicotomía "valor instrumentaVvalor
contrarias, y cuando las preguntas y propuestas son final". Según Dewey,la ciencia pura y la ciencia aplicada
sistemáticamenterechazadas,entoncesla empresacientí- constituyen actividades interdependientes y están com-
fica se ve invariablemente perjudicada. Cuando las rela- penetradas entre sí,32de la misma forma que los valores
ciones entre científicos se transforrnan en relaciones de instrumentales y los valoresfrnalesson,también, interde-
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pendientes y compenetrados. La ciencia nos ayuda a también estos consejosson expresiones de un deseo de
alcanzar muchos otros objetivos además de la obtención explotación:segúnestepensador"posmoderno",valorizar
del conocimiento en sí mismo, y cuando convertimos en la discusión democrática podría oprimir a quienes no se
democrática la investigación, simplemente porque esto sabenexpresar acabadamente.Sin embargo,rehusarse a
nos facilita la consecución de ciertos objetivos prácticos, discutir no ayuda realmente a nadie; el mismo Lyotard no
nos involucramos en una actividad orientada hacia una cree que aprovechemoslos beneficiosdel activismo irra-
meta determinada. Paralelamente, también cuando par' cional. Y la constante insistencia de Rorty sobre el hecho
ticipamos en u.na actiuidad oríentada hacia una tneta de que hablar de "verdad" es algo puramente emotivo (un
determinada, estamos guiados por norrnas de racionali- "homenaje"que rendimos a ciertas creencias),se basa en
dad creadasy modificadas por nuestros valores finales, y su particular conceptode que estamos conectadoscon el
que no pueden separarse de la concepciónmoderna de la mundo "causalmentepero no semánticamente".Rorty se
"racionalidad" misma. Por otra parte, no estamosintere- aferra a una imagen según la cual el "materialismo eli-
sados -ni nunca lo estuvimos- en el conocimiento sola' minativo" perteneceverdaderamenteal mundo nouméni-
mente por sus benefrciosprácticos: el deseode saber es co, aunque la lógica misma de su posición le impide for-
innato en nuestra especie,y el conocimientopuro y simple mular una proposiciónsemejante.Lo que los pensadores
es siempre, dentro de ciertos límites y de ciertos ámbitos, pragmáticos analizados por mí en estos capítulos tenían
un valor final, incluso para aquellos de nosotros menos en común, era la convicciónde que la soluciónal problema
interesados en el conocimiento. Para nosotros ya no se de la "pérdida del mundo" se debe buscar en la acción y
trata sólo de un hecho sociológico-descriptivoque, tanto no en la metafísica (y mucho menos en la antimetafísica
seleccionalas teorías por su poder predictivo y su simpli- "posmoderna").Peirce,James y Dewey habrían afirmado
cidad, como promueve la cooperación democrática y la que debemos confiar en la investigación conducida en
apertura a la crítica en la formulación y la valoración de forma democrática;no porque seainfalible, sino porque el
esas teorÍas. Todo ello representa una parte de la natu- camino a lo largo del cual descubriremosdónde y cómo
ralezamisma de la investigación científica: estas norrnas deberemosmodificar nuestros procedimientos,es el que
describen la forma en qluedeberíamo s comportarnos cuan- pasa a través de la investigación misma. (Ellos habrían
do el objetivo es la búsqueda del conocimiento. agregadoque lo que hemos aprendido acercade la inves-
tigación en general,seaplica perfectamentea la investiga-
El relativismo rortiano ción ética en particular). James y Wittgenstein, por su
parte, habrían solicitado tener presente que todo aquello
Rorty replicará que los que hemos visto hasta el que se verifica públicamente (e, incluso, lo que resulta
momento fueronexcelentesconsejos,pero que no debemos intersubjetivamente "afirmable con gatantia", no es, pre-
pretender que se basen en otra cosa que sus propios cisamente aquello de lo que puede viür un ser humano o
interesesy las preferenciasde nuestra "cultura occidental una cultura: James, en Le uarie forme della conoscenz&
y democrática". Lyotard se preocupará por el hecho de que religiosa, y Wittgenstein en Leccionesy conuersaciones

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sobreestética,psicología y creencia religiosa y en Sobre la imaginación, en una parte "descriptiva"y una parte "valorativa", y da un
certeza, analizan los problemas presentados por lo que ejemplo con la palabra "impertinente" (pert\, término un tanto negativo
entre los británicos. Una suegra opina que su nuera es "impertinente",
podríamos llamar "los límites de la intersubjetividad". La aunque se da cuenta, más tarde, de haberse equivocado:su nuera era, en
necesidad del conocimiento convalidado intersubjetiva- realidad, "agradablemente espontánea". Este es el tipo de descripciones
mente, la necesidadde tolerancia y la necesidadde formas utilizadas por los novelistas, e Iris Murdoch es, sin lugar a dudas, una
novelista sensible. La idea es que resulta simplista imaginar que primero
de vida basadas sobre la responsabilidad existencial que
se obtiene una descripción neutral del "hecho", y después se intenta
no todos pueden o debeúan sentir, son todas necesidades decidir si una persona se está comportando bien o mal. Aquella que se
reales. En el análisis de estas necesidadesno hay otra tome como descripción del hecho ----el hecho de ser "impertinente" o
cosa que una exigencia de la filosofia; sin embargo, no "agradablemente espontánea"- forzará, en cierüa forrna, el juicio de
puedo dejar de reiterarles que "no hay nada fuera del valor.
John McDowell ha expuesto esta misma idea en una serie de ensa-
texto",33o que todo nuestro pensamiento no es otra cosa yos muy importantes, sosteniendo que, con mucha frecuencia, darse
que "signosy sonidoscausados"por un mundo material y cuenta de que en ciertos casos se puede usar una "delimitación de
ciegoal que no podemosni siquierareferirnos,s4 no consti- valores", requiere la posesión de unaGestalt perceptiva o semiperceptiva.
tuye un anáIisis que necesitemos sino, más bien, una Es sencillo comprender por qué utilizamos la palabra "valeroso' con
referencia a una persona que arriesga la vida en batalla --a menos que
estéril oscilación entre un idealismo lingüístico que, en no se pueda aprender a distribuir proporcionalmente los intereses valora-
gran parte, es una'costumbre" de moda, y un cientificis- tivos que se encuentran en los fundamentos del uso de esapalabra-, pero
mo que se autorrefuta. Espero haber hecho plausible la no se llegará a comprender tan frícil por qué algunas veces llamamos
existencia de una alternativa mejor, y de haberlos persua- "valeroso" a un paciflrsta. Llegar a considerar, tanto a un hombre que
arriesga la vida en batalla, como al que se niega a ir a combatir, como
dido de analizar ulteriormente tal alternativa.
ejemplos de coraje, solamente es posible desdeel interior mismo del pun-
to de vista ético.
Notas Aquello a lo que McDowell se opone (antes de leer sus ensayos
presenté -en Razón, uerdad e historia, precisamente-- algunos argu-
1. Sobre la imposibilidad de descomponer un juicio de este tipo en un mentos similares, pero creo que McDowell escribió algunas notas antes
ucomponente de valor" y un "componente descriptivo", véase H. Putnam, que yo, así que no quiero afirmar una prioridad) es a la teoría de que debe
Reason, Truth and. Hisúory, Cambridge, Cambridge UP, 1981 (en particu- ser posible descomponerlos significados de las palabras como "imperti-
lar el capítulo 9) [Razón, uerdad e historin. Madrid, Tecnos, 1988], y J. nente",'valeroso",'cruel", etc., en dos componentes,unodescriptiuo y otto
McDowell, "Are Moral Requirements Hypothetical Imperativel?", Proc- eualuatiuo. Los sustentadores de esta teoría añrman que el componente
ceedings of the Aristotelian Society, vol. supl. 52 (1978), pp. L3-29, e Id., descriptivo detalla los hechos físicos que guían a las personas de una
"Virtue and Reason",Monist,62 (1979), pp. 331-50. comunidad en el proceso de decidir a quién llamar valeroso, a quién
Debo admitir que en este sentido he estado muy influenciado por impertinente, a quién cruel, etc., mientras que el componente valorativo
una frlósofa casi desconocida como tal, si bien goza de fama mundial como enuncia un punto de vista. Esta idea no funciona, no tanto en razón de que
escritora de novelas románticas; estoy hablando de Iris Murdoch. Hace ya la imposibilidad de proporcionar una descripción satisfactoria de tal
muchos años, ella recopiló tres ensayos en un pequeño volumen, bajo el "punto de üsta" ya ha sido subrayada con demasiada frecuencia, sino
título La soberanla de "Good", libro gue me causó una profunda impresión porque es igualmente imposible describir el así llamado "componente
(como ee la causó a John McDowell), y que me ayudó a reforzar mi punto descriptivo" en un lenguaje conceptualmente físico. La misma afirmación
de üsta. En el primer eneayo, subraya que el signifrcado de muchos de los de que debe existir un componente descriptivo especificable en un lengua-
términoe que utilizamos no puede ser distribuido, ni siquiera con la je conceptualmente fisicista (sin usar las palabras "impertinente",uvale-

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roso', "cruel" o similar) es un ejemplo de lo que Wittgenstein llama "la que cualquier cosa puede cumplir la función de bisagra sobre la cual gira
neceeidad filosófica" (the philosophicol must),y es sobre este punto sobre el juego de lenguaje, aunque "la ribera y el río puedan cambiar posi-
el cual McDowell hace un parangón verdaderamente genial entre la ciones"; en este caso no son necesarias implicaciones analíticas para
constricción descrita por Wittgenstein durante el debate eobre seguir una darse cuenta de que la inteligibilidad del "hecho"y la inteligibilidad delas
regla (en kie Investi.gaciones filosóft.cas), cuando nos exhorta a dejar de "generalizaciones" dependen una de otra en nuestrojuego de lenguaje,tal
afirmar qloedeben existir eetas misteriosas entidades mentales (y nues- como se lo entiende ahora.
tra relación con estas entidades mentales) si debemos seguir las reglas y 7. I. Hacking, Representing and Interuening, Cambriddge, Cam-
la constricción advertida por los materialistas, quienes sostienen que bridge UP, 1983.
debe enstir r¡n componente descriptivo en el caso de conceptos similares 8. Ibid., p.23.
"espesos y densos", especialmente ei la comunidad concuerda en su 9. En L. Wittgenstein, Lectures on the Philosophy of Mathematics,
aplicación (si la comunidad concuerda, debe existir "algo en común" en los comp. por Cora Diamond, Chicago, Chicago UP, 1990. fobseruaciones
casos en que se utiliza la palabra, y este "algo en común" debe poder sobre los fundamentos de la matemótica. Madrid, Alianza, 1988.1
describirse en un lenguaje conceptualmente físico). A la par de Wittgen- 10. En su respuesta a mi ensayo "Meaning Holism", ambos apare-
stein, McDowell también nos exhorta a resistir a estas "necesidades cidos en L. E. Hahn y P. A. Schilpp (comps.) The Philosophy of W. V.
frlosóficás". Lo que propongo, reconociendo que hecho y valor en ocasiones Quine, La Salle, Open Court, 1986, pp. 405-29.
se complementon ee, simplemente, renunciar a la teoría de los "dos 11. Nótese que en los lenguajes europeosde nuestro tiempo, "bruja'
componentes".
[strega en el original italiano] no tiene ningún "significado estímulo" pa-
2. Sobre este tipo de descripciones, véase el debate acerca de la ra la mayor parte de los hablantes y, por lo tanto, no es un "enunciado
apreciación estética, en L. Wittgenstein,Lecciones y conuersacionessobre observacional"en el sentido de Quine, mientras que "bosorkanyok" es, por
estética, psicologla y creencia religiosa, Oxford, Basil Blackwell, 1966. hipótesis, un enunciado observacional del lenguaje de la jungla. ¡No
Nótense, en partictrlar, las observaciones wittgensteinianas según las obstante, traducirlo como "bruja" y no como "mujer fea y vieja con una
cualee "los adetivos estéticos tienen muy escasa importancia". verruga sobre la nariz" -aunque este último término sea un enunciado
3. Por ejemplo, si bien en Relatiuitiitstheorie und.Erkenntnis apriori, observacional, y tenga el mismo significado que "bosorkanyok"- puede
Berlín, Springer, 1920, H. Reichenbach subrayó la forma en que las ser justo!
observaciones se encuentran cargadas de teorfa, su famosa "defensa de la 12. "Eine Sprache verstehen ist selbst noch gar kein wirkliches
inducción" (enunciada en Erperience ond Prediction, Chicago, Chicago Verstehen und schlieBt keinen Interpretationsvorgang ein, sondern ist
UP, 1938) no la tiene en cuenta para nada. Los escritos de Carnap pre- ein Lebensvollzugl'(H. G. Gadamer, Wahrheit und Methode, Tubinga,
sentan una oscilación análoga entre la interdependencia de observación Mohr, 1960, p. 388). [Verdad y método. Salamanca, Sígueme, 1984.]
y teoría (especialmente en R. Carnap, Logische Syntax dnr Sprache, 13. Para un brillante análisis sobre este aspecto del pensamiento de
Viena, Springer, 1934), y el hecho de tratar de (en sus últimos escritos) Wittgenstein, véase J. M. McDowell, "Noncognitivism and Rule Follow-
los enunciados observacionalee (que eegrin él son "completamente inter- ing", en S. H Holtzman y C. M. Leich (comps.), Wittgenstein: to Follow a
pretados") como radicalmente diferentes de los enunciados teóricos (que Rule, Londres-Nueva York, Routledge and Kegan Paul, 1981, pp.l4L-62.
son, en cambio, "parcialmente interpretados")' 14. Véase M. White, Social Thought in América: The Reuolt Against
4. El más notorio es Charles Sanders Peirce. Para una visión Formalism, Nueva York, Viking Press, 1949. El antiformalismo prag-
sinóptica de su filosofia, véase C. S. Peirce, Reasoning and the Logic of mático---es decir, la negación de que el método científico se pueda agotar
Thi ng s, comp.por K. Ketner y H. Putnam, Cambridge, Harvard UP, 1992. en un manual de reglas o en una lógica inductiva formalizad,a- es otra
5. Por ejemplo, si no me encuentro dentro de una nave espacial en forma de oponerse a la dicotomía hecho/valor -distinta del hecho de
órbita. rechazar uno a uno los argumentos a favor de esa dicotomía-, y se
6. Durante una conversación, Rogers Albritton ha hecho objeciones encuentra estrechamente en conexión con la tentativa de mostrar que los
'Veo una juicios de valor (no específicamentejuicios éticos, sino juicios de valor)
acerca de llamar co rgadas d.eteorío a las aseveraciones del tipo
silla", y sostiene que esas generalizaciones no sonparte del significado de están presupuestos en todos los procedimientos científicos de verifi-
la aseveración. Sin embargo, la expresión concreta de Wittgenstein era cación. No se puede reducir el trabajo de la ciencia a sólo seguir un

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cordunto de reglas mecánicas. Tan pronto como comprendamos que la segrin la cual, en filosofia, se hacen necesarias indagaciones sobre nues-
ciencia misma depende deloejuicios de valor-losjuicios de "coherencia", tras presuposiciones.Mi crítica hacia el relatiüsmo se basa en que un
por ejemplo, son típicos juicios de valor- muchoe advertirán que lo que atento examen indica que una posición de este tipo no existe en realidad.
hacemos no eB otra cosa que presuponer la objetividad de al menos La posición relativista, repito, es como un hada Morgana, como un
algunos juicios de valor, objetividad desde el punto de vista humano, milagro que parece real sólo desde cierta distancia: se vislumbra una
estén o no estos juicios al alcance de log estándares inhumanos impues- imagen que parece un oasis en el desierto, nos acercamos, increíblemente
tos por ciertos tipos de realismo metafísico. sedientos...y entonces todo se desvanece,dejando nada más que arena.
oAl contrario, este argumento no No pienso que la creencia "posmoderna", según la cual "no existe otra cosa
Naturalmente, algunos objetarán:
muestra que los valores son objetivos, sitto que también la ciencia es que el textoo, represente una opción real para los seres humanos; no
subjetiva". Si se razona de esa forma, sin embargo, se desembocajusto en podemos recluirnos todos en una cámara de descompresión, para luego
la puerta delhada MorgarcL del relativismo; no nos queda otra salida que hacernos salir de ella curados de la "ilusión" de que existe un mundo allá
dejar de hablar... algo ha andado mal. afuera. Hay algo de tremendamente irreal en una filosoffa de ese tipo.
Mi propio punto de vista, como he tratado de mostrar, es que la 15. D. Davidson, "ACoherenceTheoryof Truth andKnowledge", en
evaluación forma parte, tanto de nuestra actividad conceptual global, E. Le Pore (comp.), Truth and Interpretation: Perspectiues on the Philos-
como de nuestra actividad práctica o experiencia. Y es nuestra experien- ophy of Donald Dauidson, Oxford, Basil Blackwell, 1986, pp. 307-19.
cia, esa que todos consideramos, en Ia práctica, la mejor y la más 16. No quiero dar la impresión de que esto seo lo que piensa Donald
perspicaz, la que nos induce a presuponer ciertas direcciones mejores Davidson, sino, más bien, lo que piensa Jerr¡r Fodor (por ejemplo, en J.
respecto de otras. Y dado que nuestras presuposiciones (comrnitments) Fodor, Psychosemanúics,Cambridge, Mass., MIT Press, 1987). Sobre la
reales se ponen en evidencia a partir de lo que realmente hacemos, el razón por la cual ésta es una concesiónilusoria de la causación,véase [I.
hecho de que, en el curso de nuestra existencia, nos comportemos como si Putnam, "Is the Causal Structure or the Physical Itself Something
hubiera juicios de valor mejores y peores o juicios de valor verdaderos y Physical?",enld.,Realismwith o HumanFace, Cambúdge, Harvard UP,
falsos (incluso si no existen "verdades absolutas" que, gean cuales fueren 1990, pp. 80-95 e Id., Renewing Philosophy, Id.,1992.
los datos de hecho, no puedan ser puesüas en discusión), muestra que la 17. Debo esta observación a quienes siguen las John Locke Lectures
objetiüdad del valor en este sentido (no en el viejo sentido "absolutista") (recopilación inédita) de John Mc Dowell, si bien él no debe considerarse
es una de nuestras presuposiciones más fundamentales, a despecho de lo responsable de mi formulación.
que pueda decir cualquier relativista a la moda o cualquier filósofo 18. Por buenas razones, considero equivocadas dos cosas en la
nihilista. posición de Daüdson. La primera de ellas es que su planteo implica una
En Razón, uerdod e historia, he utilizado el término "argumento especiede regreso al infrnito; si se pregunta: "¿Cómo hace el lenguaje para
trascendental" exactamente en eete sentido, un sentido que no está, como conectarsecon el mundo?", la respuesta siempre se da en los términos en
ee podría pensar, en contraete con mi posición falibiligta y antifundacio- que alguien interpretaría la relación de mi lenguaje con el mundo, y esto
nalista. En ese libro me he servido de un argumento de ese tipo para conduce, a su vez, a una nueva pregunta: "Sí, pero ¿de qué modo el
afirmar la existencia de una noción no relativista de la verdad, pero con lenguaje de esúeintérprete se conecta con el mundo? La insatisfacción que
eso no intento desarrollar otra cosa que una investigación sobre nuestras se experimenta en estas condicioneses similar a la insatisfacción que se
presuposiciones. Ciertamente, Kant consideraba tales investigaciones advertía cuando Carnap utilizaba la noción de ser úrl,a consecuencia de
como una fuente de conocimientos a priori,'un tipo de conocimiento según una regla del lenguaje, en respuesta a la pregunta relativa al modo en que
el cual ciertas cosas (verdad sintética a priori en la primera Crítica, él explicaba la noción de verdad lógica: parecía que la diferencia entre
verdad a priori de la razón práctica en la segunda, hasta ideales a priori verdad lógica y verdad empírica estuüera explicada en términos de la
relativos al sentimiento en la tercera) son necesariamente verídicas. No misma diferencia idéntica al nivel superior del lenguaje.
obstante, creo que Kant estaba desorientado, aunque de manera incom- Un segundo problema, un problema muy serio que data de los
prensible, al sostener que la filosofia puede llegar a conclusiones a priori, primeros escritos de Davidson, tiene que ver con una tensión -en mi
a conclusiones inmutables e infalibles. Pero echaríamoe por la borda lo parecer, aún no resuelta en su pensamiento- entre el deseode decir que
que es cierto en Kant junto con lo que es erróneo si descartáramos la idea la noción de verdad es una noción primitiva y el deseode decir solamente

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que es creer avténticamente que es primitivo. No diré que este problema la percepción y -dado que ella comporta wa interacción completa entre
tiene alguna relación con el psicologismo, porque los vlnculos sobre la el organismo y el ambiente (¡estoy aplicando aquí los conceptos de John
interpretación en que cree Davidson -y, para decirlo mejor, los vínculos Dewey para explicar el punto de üsta de McDowell!)- la percepción no
sobre lae explicaciones racionales- parecen ser trascendentales, en debeúa considerarse como algo localizado en la cabeza, aunque allí se
lugar de empíricas. encuentren los mecanismos neurológicosde los cuales depende.La mente
L9. Este es el argumento de lasLectures, citadas en la nota 17. no está localizada en la cabeza. 3) Otra de las razones presentadas por
20. He nacido en Chicago, pero fui llevado a Francia por mis padres Fodor a favor de la no conceptualidad del reconocimiento verbal, sostiene
cuando tenía sólo unos pocos meses, y no aprendí el inglés hasta que que, sobre Ia base de la teoría fodoriana del significado (desarrollada en
retornamog a los Estados Unidos en 1934. Psicosemánlico [Madrid, Tecnos, 1954.) y La modularidad de lo mente,
21. Según Jerry Fodor (véase J. Fodor, The Modularity of Mind, cit.), el significado de las palabras no está determinado, ni siquiera
Cambridge, MIT Press, 1983. ILa modularidad de la mente. Madrid, parcialmente, por las relaciones conceptuales entre las diferentes no-
Eüciones Morata, 1986.1),la razón es que en mi cerebro se ha formado un ciones de las cuales me he adueñado -por ejemplo, entre "minuto" y mis
"módulo" -un procesador automático subpersonal- que "reconoce' un otros conceptosde tiempo- pero depende solarnente de las "relaciones
enunciado a través de un procedimiento heurístico bastante simple. nominales" entre las palabras (por ejemplo, "minuto") y sus correspon-
Fodor aprovecha estas hipótesis para negar qrre el reconocimiento del dientes uniuersales (que en este caso podríamos llamar "minutidad").
enunciado es una actividad conceptual. Sin embargo, ésta no es más que Tales uniuersales no son otra cosa que objetos modelados en torno a las
una confusión, y por más de una razón. 1) Si el módulo fuera removido de palabras que la metafísica fodoriana proyecta sobre el mundo, a fin de
mi cerebro, mantenido artificialmente con vida y estimulado eléctrica- que las palabras mismas se interrelacionen con las misieriosas "rela-
mente, el resultado no sería un "dato eensorial auditivo" radicado en un ciones nominales", y todo el asunto no es más que una versión "naturalis-
glrupo de neuronas, sino un suceso fisico puro y simple. Identificando los ta" del Mito del Museo del Significado.
output de sus módulos conel que sepuede obseruar, Fodor comete un elror 22. Enfie los principios aprendidos durante el transcurso de la
contra el cual James nos pone en guardia varias veces enlos Principles of investigación está, hoyya no cabeduda, el de lafalibilidad. Este principio
Psycology (véase H. Putnam, "Models and Module s", Cognition, 17, 1984, estableceque debemosestar preparados para corregir cualquier punto de
pp. 253-64): el hecho de que cierto mecanismo del cerebro es necesario üsta si se nos ofrecen buenas razones para hacerlo; o, dicho de forma más
para una función mental no significa que se pueda identificar estaúltima dura, que carezca de garantías metafísicas en condiciones de proponer
con la operación de ese mecanismo. Escuchar y comprender un enunciado cierta afrrmación al reparo de las correcciones.No existen garantías de
representa mucho m<Ís que la operación del módulo, si bien la operación este tipo, ya sea en matemáticas -la ciencia más a priori-, física,
del módulo forma parte (admitiendo que la teoría de Fodor sea cierta) de hlosofía o cualquier otra disciplina que se mencione. El principio de la
aquello que nos permite escuchar y comprender el enunciado. 2) Si el falibilidad es el principio más importante de los que hemos aprendido, y
conocimiento conceptual en cuestión fuera, de alguna forma, removido de está relacionado con toda la investigación. Al día de hoy podemos
mi cerebro sin perturbar el módulo, yo podría tener la impresión de constatar, a través de los distintos fundamentalismos y fanatismos
"reconocer'el enunciado, pero a esto eeguiría la desagradable sensación dispersos por el mundo, que aún existen personas que no lo han incorpo-
de no tener la menor idea de lo que signifrca; sin embargo, ésta no sería rado. Las indagaciones en la vida real, incluida la indagación ética,
la misma experiencia deescuchar a alquien que dice "Dentro de poco nos resulta efectivamente diferente, si se acepta la falibilidad como algo
sentaretnos a la mesau o algo parecido. Es solamente con el esquema adquirido a lo largo del proceso de prueba y error que ha atravesado la
conceptual listo y a disposición que la operación del mecanismo subper- especiehumana.
sonal me permite escuchar todo el conjunto. Como subraya James, las Otro principio aplicable a la investigación en general, o al menos
"huellas cerebrales" localizadas, etc., -que a los neurobiólogos les agra- a la investigación fuera de las matemáticas y la lógica pura es el
daba identificar con las funciones mentales incluso en su época- pueden experimentalismo, el cual, al establecer que debe buscarse, no tanto la
realizar tareas muy diferentes, según lo que esté sucediendo con el resto confrrmación de lo que creemos, sino la refutación, nos obliga a poner
del cerebro y del cuerpo. Se$in McDowell, escuchar un enunciado o ver nuestras teorías bajo tensión. En un sentido más amplio, este principio se
una silla significa adquirir información del ambiente;ésta eslafiinción de aplica también a las matemáticas y a la lógica: según ese sentido más

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amplio, se trata de poner las propias creencias, no sólo bajo una tensión York-Londres, Longmans, Green and Co., 1897) y J. Dewey, Expertence
experimental, sino también bajo una teneión discursiva, prestando aten- and Nature, Nueva York, Dover, 1958 (originariamente La Salle, Open
ción a los argumentos en contrario, a personas que esgrimen ideas Court, 1926), cap. V ("Nature, Communication and Meaning").
opuestas, etc. Lo que los filósofos alemanee denominan Diskursethik ee 28. W. James, The Moral Philosopher and the Moral Life, cit.
puede, según mi parecer, subsumir mejor bajo el principio del experimen- 29. Esta es la aproximación a la ética que hicieron famosa Habermas
talismo. y Apel. Véase J. Habermas, Theorie des hommunikatiuen Handelns,
Si bien los principios del experimentalismo y del falibilismo se Frankfurt am Main, Suhrkamp, 1981, 2 vol., y K. O. Apel, Diskurs und
aplican a cualquier tipo de investigación, cuestiones tales como "¿En qué Verantwortung: das Problem des Übergangs zur postkonuentionellen
medida debemos imitar los métodos de la fisica?" o "¿Debemos utilizar la Moral, Frankfurt am Main, Suhrkamp, 1985. Para una comparación
estadística, la simulación por ordenador, o algo similar?" deben estable- entre la ética del discurso y el pragmatismo, véase H. Putnam, "A
cerse en cada caso en particular. El man<ismo y el psicoanálisis constitu- Reconsideration or Deweyan Democracy", Southern California Law
yen ejemplos interesantes porque, si bien soy propenso a recusar a ambog Reuiew,1990, 63, pp. 1681-88,cuya versión, ligeramente modifrcada,
como sistemae cerrados de ideas (tanto en Mary como en Freud existía aparecerá como último capítulo de mi libro Renewing Philosophy, cit.
una tendencia a formular sus grandes descubrimientos dentro de un 30. En este enunciado he utilizado la terminología del libro de
eietema cerrado de ideas), diría que no podemos considerar los fenómenos Agnes Heller, A Philosophy of Morals, (Oxford, Basil Blackwell, 1990),
eociales y psicológicos como si jamás hubiéramos visto y leído los trabajos para poner en eüdencia el tono "ético" de las normas que gobiernan la
de Marx y Freud. Puede suceder que todo lo que Marx y Freud nos han investigación científi ca.
enseñado en realidad no eran "grandiosas teorías", sino nuevas técnicas 31. A la objeción de que no consideramos úodoslos puntos de üsta
de observación, es decir, gue nos han enseñado a ver lo que jamás cuando está en discusión una hipótesis científica -las opiniones de los
hablamos visto. expertos son las que cuentan-, la opinión de Dewey (en su Lógica) es que,
23. R. Carnap, The Logical Foundations of Probability, Chica- por más que esto sea verdad, e¡isúeuna etapa en la cual la opinión del
go, IJniversity of Chicago Press, 1950, y The Continuum of Inductiue profano debe contar. La aplicación de la ciencia es, también, una prueba
Methods,Id. L952. de las hipótesis aplicadas, y es necesario que esta prueba sea sometida a
24. Yéase R. Carnap, Der logische Aufbau der Welt, Berlín, Felix un control democrático.(¡Si lo dudan, piensen en lo que sucedecuando los
Meiner, 1928. medicamentos y el instrumental médico son controlados únicamente por
25. Yéase R. Carnap, The Logical Foundations of Probability, cit. las empresas que los fabrican!)
pp. 294 ss. 32.La discusión de este tema puede verse en R. A. Putnam y H.
26. "Es un error muy grave conferir demasiada importancia a la Putnam, "Epistemology as Hypothesis", trabajo aparecido en Transac'
verosimilitud que han adquirido las hipótesis, excepto en casosextremos; tions ofthe Charles S. Peirce Society,1990, 26, pp. 407-33.
porque las verosimilitudes son, en su mayor parte, meramente subjetivas 33. Este es un dicho famoso (y sentencioso)de Derrida.
y, como tales, tienen tan escasovalor real, que no resulta útil considerar 34. Esta es la forma en que Rorty presento su posición durante el
las oportunidades excepcionales que tales hipótesis nos ofrecen, a largo transcurso de una conferencia sobre la "verdad", dictada en París el 3 de
plazo, de no prestarles más atención. Toda hipótesis debería ser sometida mayo de 1990, y patrocinada por el Collége International de Philosophie.
a prueba, obligándola así a hacer previsiones verificables" (C. S. Peirce, En lo que a mí respecta,creo que ha quedado claro que, a mi modo de ver,
Collected Papers, vol. V, Pragmatism and Pragmaticism, C. Hartshorne la intencionalidad no constituye un problema. Si bien hasta hace un
y P. Weiss (comps.),Cambridge, Harvard UP, 1934. 5.599, p.419). tiempo afirmaba que la noción de intencionalidad es misteriosa, hoy ya
27.La omnipresencia de este motivo en la fi.losoffa de Peirce es el no la considero así, por la misma razón por la que James, en cierta etapa
tema del libro de K. O. Apel, Der Denkweg uon Charles S. Peirce: eine de su carrera, también ha dejado de considerarla como tal, y lo que ahora
Einführung in den amerikanischen Pragmatismus, Frankfurt, Suhr- tengo es una concepción más rica de la percepción. La respuesta más
kamp, 1975. Véanse también W. James,'"The Moral Philosopher and the simple a la pregunta "¿Cómopodemosreferirnos a un objeto externo, por
Moral Life", en Id., The WilI to Belieue and Others Essays in Popular ejemplo, una silla?" es: "¿Qué problema hay? Nosotros podemos uer la
Philosophy, Cambridge, Harvard UP, 1978 (originariamente Nueva cosa". Me parece que el escepticismo respecto de la intencionalidad es

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eólo una versión moderna del viejo escepticismo gobre la confrontación
con el "mundo externo", y que tienen orígenes similares; esto es parte de
lo que intentaba decir cuando afirmé que al interpretar una teoría como
la de James, no se deben descuidar aquellos elementos que tienen toda la
apariencia de estar relacionados con el realismo directo: el realismo
jamesiano relacionado con la percepción -su "realismo natural", como él
lo denomina- es una parte esencial de la tarea total.
Por otra parte, si la que se acepta es la vieja teoría segrín la cual
todo lo que observamos directamente eon nuegtros datos sensorialee
privados (donde los datos sensoriales mismos están conectados con las
cogas externas sólo causalmente, y no cognoscitivamente), o bien se
acepta la idea más reciente de la "ciencia cognoscitiva", según la cual la
mente tiene a su üsposición, para sus procesos cognoscitivos sólo las
propias "repreeentacionee" (donde las "representaciones" están conecta-
das con las cosas externas sólo causalmente, y no cognoscitivamente),
entonces la pregunta "¿Cómo se hace para alcanzar algo que está fuera de
nosotros mismos?" no puede tener respuesta. La idea misma de que
nuestra relación con el mundo Bea cognoscitiva ha sido descartada con
sarcasmo por la mayor parte de los psicólogos de tendencia "cognitivista".
("¿No saben que la percepción incontaminada no existe?"). Sé perfecta-
mente que la percepción incontaminada no existe -la percepción es un
ejercicio de nuestra capacidad conceptual, para decirlo con palabras de
McDowell- pero esto no significa que ésa no Eea una percepción de la
forma en que las cosas se encuentran verdaderamente.

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