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revista de toxicomanías

Extasis
Chelsea A. Baylen , Harold Rosenberg
Bowling Green State University, Department of Psychology,
Bowling Green, OH, USA

Resumen. Aunque algunas revisiones relativamente recientes han resumido los efectos neuropsiquiátricos asocia-
dos con el uso crónico de éxtasis, no se ha publicado una revisión extensa sobre los efectos subjetivos agudos
(ESA) producidos por MDMA/éxtasis

Diseño (insomnio) y un ESA relacionado con el apetito (pérdi-


da de apetito).

Este estudio revisa la prevalencia, la intensidad y Se han asociado tres factores – número de horas
la duración de los ESA recogidos de 24 estudios que entre la ingesta y la valoración, la cantidad de dosis y el
proporcionaban datos auto reportados de frecuencia género – con la experimentación de efectos subjetivos
acerca de la prevalencia de los efectos del éxtasis y/o agudos con el MDMA/éxtasis.
proporcionaban datos sobre la intensidad de los efec-
tos del éxtasis.
Conclusión

Hallazgos
Esta revisión provee de información relevante a los
clínicos y los investigadores que desean entender los
Aunque se han reportado cientos de ESA tras el ESA deseables y no deseables que pueden motivar y
consumo de MDMA, nosotros detectamos un subgrupo reducir el consumo de éxtasis, a los defensores de la
de efectos reportados repetidamente en porcentajes sig- salud que buscan reducir los daños biomédicos (por
nificativos y por un gran número de participantes en ejemplo, desvanecimientos, deshidratación, acorta-
múltiples investigaciones, muchos de los cuales eran o miento de la respiración, bruxismo) relacionados con el
bien emocionales (por ejemplo, ansiedad, depresión, consumo de MDMA/éxtasis con fines recreativos y a
intimidad, temor, euforia, intranquilidad) o bien somá- educadores que deseen diseñar mensajes preventivos
ticos (nausea/vómitos, bruxismo, dolores creíbles que ni subestimen ni exageren las experiencias
musculares/cefalea, sudoración, entumecimiento, cam- de los consumidores de esta droga.
bios de temperatura corporal, fatiga, mareo, boca seca,
aumento de energía)
Palabras clave:
En 5 ó más investigaciones solo se reportó un ESA
efectos subjetivos agudos;
sexual (excitación sexual/ incremento de la conciencia
éxtasis; MDMA.
sexual), un ESA cognitivo (pensamiento confuso), un
ESA sensorio perceptual (efectos visuales, cambios en
la percepción visual), un ESA relacionado con el sueño

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Introducción revisiones relativamente frecuentes han resumido los


efectos psicológicos, cognitivos y psiquiátricos asocia-
dos al consumo crónico de éxtasis (e.g. Burgess y col.
Los informes publicados en la última década reve- 2000; Morgan 2000; Montoya y col. 2002), no nos
lan que el estimulante alucinógeno MDMA, también consta que haya una revisión extensa de estudios acerca
conocido como éxtasis, está ganando popularidad entre de los efectos subjetivos agudos (ESA) ocasionados por
la juventud en países tan diversos como los Estados el MDMA/éxtasis. La consolidación de los resultados de
Unidos (Strote y col. 2002; Boyd y col. 2003), el estas investigaciones mejorarían nuestro conocimiento
Reino Unido (Bellis y col. 2003), Turquía sobre la variedad y la prevalencia de efectos emociona-
(Çorpçiouglu & Ögel), Estonia (Allaste & Lagerspetz les, cognitivos, sexuales, sensoriales y somáticos, dese-
2002), Escocia (Riley y col. 2001), Noruega (Pedersen ados y no deseados, experimentados tras el consumo. A
& Skrondal 1999), Taiwan (Lua y col. 2003), Canada tal efecto, llevamos a cabo una revisión de 24 investiga-
(Gross y col. 2002) y Australia (Lenton y col. 1997). ciones que se centraban en la prevalencia, la intensidad
y la duración de los ESA atribuidos al consumo de éxta-
La popularidad del éxtasis puede explicarse en sis con fines recreativos por los consumidores.
parte por los efectos deseables (por ejemplo, euforia,
incremento de energía, excitación sexual) que los con-
sumidores con fines recreativos atribuyen a su consu-
Método
mo. Sin embargo, las investigaciones han demostrado
que el consumo de éxtasis no es uniformemente benig-
no. La droga se ha asociado a efectos psicológicos inde- Usando dos bases de datos de investigación
seables (por ejemplo, confusión, indefensión, fatiga (PSYCINFO y Medline) y los términos claves
mental, ansiedad, depresión; (Gold, Tabrah & Frost- “MDMA” y “éxtasis”, revisamos títulos y resúmenes
Pineda 2001) y a consecuencias médicas patológicas de artículos publicados en inglés para identificar estu-
(por ejemplo, hipertermia, arritmia cardiaca, hiperten- dios que proporcionaran datos acerca de los efectos
sión, Montoya y col. 2002). De especial preocupación auto reportados asociados con esta droga. Examinamos
son las muertes relacionadas con el éxtasis que repor- también la sección de referencias de estos artículos para
taron Schifano y col (2003) las cuales se produjeron en identificar estudios adicionales relevantes potencial-
Inglaterra y Gales entre 1996 y 2002, siendo el éxtasis mente interesantes. Los estudios se incluyeron en nues-
la única droga relacionada con estas muertes en el 17% tra revisión (véase Tabla 1) solo si el artículo informaba
de los casos. También se ha asociado el éxtasis con el explícitamente de efectos tanto agudos (experimenta-
aumento del riesgo de habituarse a comportamientos dos durante el consumo de éxtasis o menos de 24 horas
poco saludables incluidos el consumo de múltiples dro- después del mismo) y subjetivos (eran reportados por
gas y el sexo sin protección (Akram & Galt 1999; Topp los consumidores de éxtasis versus los reportados por
y col. 1999a; 1999b). Además el uso crónico de éxtasis un observador o medidos empleando instrumentos neu-
puede ocasionar efectos neuropsiquiátricos persistentes ropsicológicos o psicofisiológicos). Identificamos 24
incluyendo fallos de la memoria, concentración reduci- artículos que cumplían nuestros criterios de inclusión.
da, limitación de la función motora, depresión, ansie-
dad, psicosis, impulsividad, hostilidad y trastornos del De los estudios que proporcionaban datos de fre-
sueño (Montoya y col. 2002). cuencia acerca de la prevalencia de ESA autos reporta-
dos, revisamos textos y tablas para identificar efectos
La prevalencia, los efectos potencialmente debili- específicos y registrar su prevalencia. Posteriormente,
tantes y las conductas insanas asociadas con el consumo asignamos los ESA a una de las siguientes categorías de
de éxtasis son preocupantes para investigadores, clíni- efectos: emocional, somático, sexual, cognitivo, senso-
cos y defensores de la salud pública Aunque algunas rio perceptual, sueño o apetito. Los efectos listados que

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reflejaban dos o más de las categorías mencionadas de 2001); otros participantes reportaron consumo de éxta-
efectos (por ejemplo, efectos cognitivos y emocionales) sis por lo menos en 200 ocasiones previas. Trece estu-
o los efectos listados que no encajaban en ninguna de dios no reportaban el rango de consumo de experiencias
las categorías mencionadas se clasificaron como “efec- previas o reportaron solo el número mínimo o máximo
tos misceláneos y combinados”. Tras la asignación de de consumiciones previos. Solo cinco estudios propor-
categoría nos dedicamos a colocar en un único ESA cionaban el número medio de experiencias previas con
aquellos efectos que posiblemente se solapaban (por éxtasis reportadas por los participantes (Liester y col.
ejemplo “tranquilo” y “sentimiento de calma/sereni- 1992; Camí y col. 2000; Tancer & Johanson 2001,
dad” o los efectos que era obvio se solapaban. 2003; Hernández -López y col. 2002).

El otro tipo de investigación que revisamos con- Los investigadores emplearon diversas medidas
trastó las experiencias subjetivas agudas tras consu- para valorar los efectos subjetivos agudos del éxtasis,
mo de MDMA/éxtasis con otra condición. Incluimos combinando a menudo más de un tipo de valoración en
en nuestra revisión solo aquellos estudios “compara- el mismo estudio (Tabla 1, columna 7). Por ejemplo,
tivos” en los que la experiencia con MDMA/éxtasis algunos emplearon instrumentos publicados previa-
se contrastó con las experiencias de sujetos que mente; otros emplearon un listado (checklist) de efectos
tomaron placebo, con las experiencias de los sujetos subjetivos ideados para esa investigación (a menudo en
previas al consumo de MDMA/éxtasis o a las expe- forma de escalas analógicas visuales); y aún otros
riencias de un grupo control de no consumidores de emplearon entrevistas semi estructurados o de pregun-
éxtasis. De los estudios de comparación, examina- tas abiertas.
mos textos, tablas y figuras para registrar tipos,
intensidad, duración y lo experimentado en el Los tamaños de las muestras tenían un rango com-
momento máximo (pico) de los ESA. prendido entre un mínimo de 8 y un máximo de 876
participantes (media = 128 participantes; mediana =
32). En general, los estudios de laboratorio reclutaron
pequeños números de participantes a los que se les dio
Resultados
MDMA antes de la valoración de los efectos psicológi-
cos y fisiológicos. Ocho de los 24 estudios listados en
Características de los estudios revisados la Tabla 1 valoraron los ESA poco después del consu-
mo y aparentemente mientras los participantes estaban
Las características de los 24 estudios revisados que intoxicados, ya fuera en el laboratorio de los investiga-
valoraban los ESA del MDMA/éxtasis se listan en la dores o in situ (esto es, fiesta/club). Nos referimos a
tabla 1. Se estudiaron un total de 3074 consumidores de esta metodología como de valoración concurrente.
éxtasis de diversas localizaciones geográficas. Aunque Catorce de los 24 estudios valoraron los ESA retrospec-
entre los 24 estudios las mujeres están bien representa- tivamente; esto es, algunas horas, días o semanas des-
das, se han reclutado más varones que mujeres para pués del consumo y a menudo cuando la intoxicación
reportar sobre los efectos del éxtasis. La edad de los había disminuido. Finalmente, 2 estudios listados en la
participantes estaba comprendida entre los 14 y los 74 Tabla 1 parecían combinar las valoraciones concurren-
años (tres estudios no informaban de los rangos de te y retrospectiva de los ESA; específicamente en estas
edad), pero el mayor porcentaje era la de los adultos investigaciones los participantes consumieron MDMA
jóvenes entre 21 y 36 años (nueve estudios no informa- (proporcionado por los investigadores) en sus casas o
ban de la edad media). Los participantes informaron de en una casa de la playa de un investigador y describie-
una gran variedad de historias de consumo de éxtasis. ron sus experiencias mientras estaban intoxicados y
Algunos participantes no habían consumido éxtasis “después” (Downing 1986, p.336) o “pronto tras la
antes de que se la diera el investigador (Liechti y col. sesión” (Creer & Tolbert 1986, p. 320).

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Para los seis estudios de laboratorio (Camí y col. Sin embargo, es importante destacar que la signifi-
2000; Liechti y col. 2001; Tancer & Johanson 2001, cancia de estos porcentajes aparentemente tan grandes
2003; Harris y col. 2002; Hernández-López y col. está mitigada por el relativamente pequeño número de
2002) y dos estudios in situ (Downing 1986; Greer & participantes en algunas de las investigaciones en las
Tolbert 1986) en los que se dio MDMA a los participan- que se observaban tales efectos. Con dos excepciones
tes, los niveles de dosis se listan en la columna final de (pupilas dilatadas e incremento de energía) los efectos
la Tabla 1. La dosis y la pureza de la MDMA consumi- reportados por más del 80% de los participantes se
da por los participantes en los 16 estudios retrospectivos registraron en investigaciones que incluían como máxi-
restantes o bien no se conocía o bien no fue reportada mo a 21 participantes. Además, aunque las prevalencias
por los investigadores. Aunque la diversidad de las eda- de otros efectos somáticos parecían relativamente bajas
des, las historias de consumo, las localizaciones geográ- o eran reportados en menos de tres investigaciones, un
ficas y metodológicas permite la generalización de los número significativo de participantes reportaron tales
resultados, esta diversidad también impide la compara- efectos (esto es, dolor estomacal y/o intestinal, incapa-
ción directa entre los dos tipos de investigaciones. Por cidad de orinar, acortamiento de la respiración, tics
tanto, resumiremos los resultados de los estudios que motores/temblores, nausea y/o vómito, cefalea, mareo
informaron de la prevalencia de ESA específicas y y/o vértigo y dolores o estiramientos musculares).
luego resumiremos aquellos estudios que comparaban Aunque no se listan en la Tabla 2, registramos también
los efectos de MDMA con la experiencia con placebo, 14 ESA somáticos principalmente negativos y relativa-
el funcionamiento pre ingesta o la experiencia de un mente raros reportados solo en una investigación (hay
grupo comparador que no consumía éxtasis. disponible a petición una lista completa de todos los
tipos de efectos somáticos y otros tipos de efectos).

Efectos reportados en los estudios


de prevalencia
Emoción

Somáticos La Tabla 3 lista los ocho tipos de ESA emocionales


reportados en 3 ó más investigaciones (k>3). Dado el
La tabla 2 lista los 16 tipos de ESA somáticos amplio rango de frecuencia con que se reportó este tipo
reportados por tres o más investigaciones (k ? 3). Los de efectos emocionales, algunos de los cuales eran
participantes en los estudios revisados experimentaron notablemente bajo en uno o más estudios, pusimos
aparentemente una mayor variedad de efectos somáti- especial atención en aquellos efectos emocionales
cos tras el consumo de éxtasis que cualquier otro tipo experimentados al menos por un 80% de los participan-
de efecto (por ejemplo, emocional, sexual, cognitivo, tes en una o más investigaciones: ternura/afección,
etc.). Dada la amplia variedad y los bajos porcentajes tranquilidad/calma; euforia o mejora del estado de
de efectos registrados en muchos de estos estudios pusi- ánimo, disminución de la indefensión, y cambios del
mos especial atención en aquellos efectos somáticos estado de ánimo/buen humor (este último ESA no se
experimentados por al menos el 80% de los participan- lista en la tabla 3 por que k <3). Aunque la experiencia
tes en uno o más de los estudios: bruxismo/problemas de uno de de estos ESA - euforia o mejora del estado
dentales, cambios de temperatura corporal, fatiga o fati- de ánimo – fue reportado por el 98% de los participan-
ga mental, ritmo cardiaco acelerado, sudoración, pal- tes en una muestra de 876 (van de Wijngaar y col.
mas sudorosas, boca seca/sed, incremento de energía y 1998), reflejando un notablemente alto número de per-
pupilas dilatadas (este último ESA no se lista en la tabla sonas, el valor de otros grandes porcentajes reportando
2 porque k < 3). otros efectos emocionales está atemperado por el
mucho menor número de participantes incluidos en

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estas investigaciones. Por ejemplo, aunque los partici- una investigación – dificultad de concentración (Harris
pantes experimentaron o cambios del estado de y col. 2002) y los pensamientos parecen ser más
ánimo/buen humor o decremento de la indefensión con claro/más sentido común (Harris y col. 2002) aunque
notable frecuencia (85 y 80% respectivamente) ningún estos porcentajes no representan a más de 10 partici-
estudio mostrando estas tasas de prevalencia incluía pantes cada uno. Sin embargo, 44 participantes (59%)
más de 20 pacientes (Leister y col. 1992; Davison & de una muestra de Liechti y col. (2001) reportaron difi-
Parrot 1997). Por tanto, aunque algunos de estos efec- cultad de concentración. Registramos también ocho
tos eran aparentemente prevalentes en al menos un ESA cognitivos aparentemente raros reportados por
estudio, estos porcentajes no representan un número solo una investigación, todos ellos experimentados por
absoluto grande de participantes. 26 o menos participantes. Merece destacarse que, aun-
que los pensamientos suicidas tras el consumo de éxta-
Además, para otros ESA, los porcentajes reporta- sis fueron reportados solo por el 8% de los participantes
dos de un efecto particular puede parecer bajo, pero de de solo un estudio (Topp y col. 1998), este porcentaje
hecho representa un número significativo de participan- relativamente pequeño representaba a 26 personas
tes (esto es, ansiedad o nerviosismo, miedo/paranoia, experimentando este potencialmente peligroso efecto.
omnipotencia, mayor auto confianza o auto aceptación
e inseguridad). Tampoco se listan en la tabla 3, 16 ESA
emocionales relativamente raros que se reportaron solo
en una investigación y se experimentaron por menos de Sexo
20 participantes (con excepción de inseguridad, la cual
fue reportada por 280 participantes en el estudio de van Registramos 13 tipos diferentes de efectos reporta-
de Wijngaart y col. 1998). Aproximadamente la mitad dos por los estudio revisados que consideramos ESA
de estos ESA raros reflejaban emociones presumible- sexuales. Solo dos de tales efectos – excitación sexual /
mente deseables (por ejemplo, esperanza, satisfacción, incremento de la conciencia sexual (k=8; prevalencia 7-
sentimiento de menor culpabilidad). 100%) y descenso del deseo sexual (k=4; prevalencia =
3-45%) – se listaron en más de dos estudios. Aunque la
excitación sexual/ incremento de la conciencia sexual
(Downing 1986; Zemishlany y col. 2001) un mejor
Cognitivo sexo (Zemishlany y col. 2001) y una mejor lubricación
en las mujeres (Zemishlany y col. 2001) fueron repor-
Registramos 13 tipos diferentes de efectos que tados por al menos el 80% de los participantes en uno o
consideramos ESA cognitivos. Tres de estos efectos se más estudios, estos porcentajes representaban relativa-
registraron en tres o menos investigaciones: pensamien- mente a pocos participantes (esto es, un máximo de 35
to confuso (k=5; prevalencia = 3-50%), pérdida de participantes). La experimentación de otro efecto
memoria/olvidos (k=4; prevalencia 3-28%) e incremen- sexual, inhibición de la excitación y/o clímax (Topp y
to de la alerta/atención centrada en el aquí – ahora (k= col. 1999a) fue reportada por menos de la mitad (45%)
3, prevalencia = 7-100%). Las tasas máximas de preva- de una muestra de Topp y col. (1999a) pero 96 de sus
lencia de los dos últimos efectos parecen considerable- participantes reportaron experimentar este efecto. Hubo
mente bajas comparadas con la tasa máxima de 9 ESA sexuales raros registrados por no más de un
prevalencia del incremento de alerta; sin embargo, un investigador y salvo dos excepciones (inhibiciones dis-
número notablemente alto de participantes reportaron minuidas e excitación inhibida/clímax) reportados por
confusión (Topp y col. 1998; Verheyden y col. 2003). menos de dos docenas de participantes.
Aproximadamente la mitad de estos efectos aparente-
Dos efectos cognitivos adicionales fueron experi- mente infrecuentes eran deseables (por ejemplo, efecto
mentados por al menos un 80% de los participantes en positivo sobre la erección, orgasmos más intensos) y

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aproximadamente la mitad eran indeseables (por ejem- cama al día siguiente (Verheyden y col. 2003), tres de
plo, efecto negativo sobre la erección, peor práctica estos ESA se experimentaron por tres o menos partici-
sexual). pantes.

Percepción sensorial Apetito

Registramos 11 tipos diferentes de ESA sensorio Hubo solo dos, aparentemente contradictorios,
perceptuales asociados con el éxtasis. Cuatro de los 11 ESA relacionados con el apetito – disminución y
efectos sensorio perceptuales fueron registrados por aumento del apetito. El primero fue reportado por
tres o más investigaciones: efectos visuales/cambios en nueve investigaciones (prevalencia 14-100%) compara-
la percepción visual (k = 6; prevalencia 14-85%) aluci- do con solo dos registros de aumento de apetito tras el
naciones sonoras/percepción alterada de los sonidos (k consumo de éxtasis (prevalencia 3-4%).
= 3; prevalencia = 13-100%) mejora del sentido del
tacto/ilusión táctil (k = 3; prevalencia 3-95%) y aluci-
naciones sin más especificación (k = 3; prevalencia = 2-
60%). Efectos misceláneos y combinados

Hubo dos efectos sensoriales perceptuales que Registramos 17 efectos diferentes que, dado que
aunque se reportaron por menos de tres investigacio- combinaban dos de las categorías mencionadas de efec-
nes y por menos de 50 personas en cada estudio, se tos (por ejemplo, somático y emoción) o porque no
experimentaron al menos por el 80% de los participan- encajaban en ninguna de las categorías mencionadas, se
tes en cada una de las investigaciones contempladas: listan separadas en la Tabla 4. La locuacidad fue el
percepción alterada del tiempo (Liester y col. 1992) y único efecto en esta categoría registrado por más de una
sentirse más alerta/percepciones mejoradas investigación (Davison & Parrot 1997; Zervogiannis y
(Zervogiannis y col. 2003). Este último efecto tam- col. 2003). Hubo otros efectos misceláneos o combina-
bién fue reportado por más de 100 participantes de la dos que decidimos no registrar en la Tabla 4 a causa del
investigación de Verheyden y col. (2003), aunque este bajo porcentaje y/o el pequeño número de participantes
número representa un poco más de una cuarta parte de (n>10) que experimentaron estos efectos a menudo
la muestra. Finalmente, registramos cinco efectos sen- idiosincrásicos.
sorio perceptuales raros registrados solo en una inves-
tigación, todos ellos experimentados por 30 o menos
de los participantes.
Factores que afectan
la experiencia con éxtasis

Sueño Algunos de los estudios que reportan tasas de pre-


valencia examinaron la relación entre los ESA y facto-
Registramos cinco tipos diferentes de efectos sobre res como la edad, el género, la dosis y la historia de
el sueño asociados a éxtasis. La somnolencia fue el consumo de éxtasis. Por ejemplo, aunque no reportaron
único efecto registrado por más de una investigación (k la prevalencia de ESA por géneros, Topp y col. (1999a)
= 7; prevalencia = 9-85%). Los cuatro efectos restantes reportaron que las mujeres experimentaban un mayor
sobre el sueño se registraron solo en una investigación número de efectos negativos físicos y psicológicos que
cada uno y excepto la dificultad de levantarse de la los hombres y van de Wijngaart y col. (1999) reporta-

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ron que las mujeres estaban enfermas con más frecuen- experimentaron problemas de salud con menor fre-
cia que los hombres durante o poco después de una fies- cuencia, estaban menos enfermos en las fiestas y acu-
ta en la que habían consumido éxtasis. En relación con dieron con menos frecuencia a primeros auxilios tras
la edad del consumidor Topp y col. (1999b) reportaron las fiestas que los participantes que habían consumido
que los consumidores más jóvenes experimentaron más éxtasis durante menos tiempo. Solowij y col. (1992)
efectos físicos negativos, pero Verhyeden y col. (2003) reportaron que “consumidores de múltiples tiempos”
reportaron que la edad no parecía estar relacionada con experimentaron más frecuentemente activación y
los ESA. perspicacia que aquellos que habían consumido menos
de tres veces. No hubo diferencias significativas entre
Participantes en la investigación de Zervogiannis y consumidores novatos y experimentados en las subes-
col. (2003) reportaron que dosis altas se asociaban con calas que medían los estados de ánimo positivos, los
algunos de los efectos producidos por las dosis “usua- estados de ánimo negativos y la intimidad. Aunque los
les” (por ejemplo, cierre de la mandíbula, nausea, para- dos grupos tampoco difirieron significativamente en
noia, ataques de pánico y vómitos) pero también las subescalas que medían los efectos físicos y menta-
ocasionaban un efectos únicos (por ejemplo, nistagmus, les, la severidad de estos efectos se correlacionaba
pensamiento confuso, pérdida de control, ataques de positivamente con el número total de dosis consumi-
pánico estados de ánimo impredecibles, sentimiento de das y la frecuencia de uso.
inquietud, comportamiento errático y pérdida de
memoria). Además, Solowij, Hall & Lee (1992) infor-
maron de que en comparación con las experiencias
Efectos reportados
reportadas tras consumo de éxtasis a dosis bajas, las
de estudios comparativos
dosis altas se asociaban con más efectos alucinatorios,
desorientación, pérdida de control y aumento de los
efectos adversos. Los efectos tras el consumo de pasti- Diez estudios reportaron la fuerza relativa de los
llas adicionales después de que la dosis inicial hubiera ESA. Dividimos estos estudio en tres categorías: (a)
reducido su intensidad fueron típicamente menos inten- estudios de laboratorio (k = 6), en los que las medidas
sos y de menor duración de acción que aquellos produ- de valoración se realizaban tras el consumo de MDMA
cidos por la primera pastilla; las dosis sucesivas se en el laboratorio; (b) estudios de club (k = 2) en los que
asociaban también con reducción de los efectos placen- las medidas de valoración se administraban tras el con-
teros y con un aumento de los efectos indeseables sumo de éxtasis en un club nocturno, y (c) estudios
(Slowji y col. 1992). Topp y col. (1999b) reportaron retrospectivos (k = 2) en los que los individuos descri-
que los participantes que consumieron éxtasis de forma bían sus experiencias pasadas asociadas al éxtasis.
continuada durante 48 horas o más sin dormir experi- Estos estudios incluían medidas objetivas de función
mentaron un mayor número de efectos negativos físicos psicomotora (Camí y col. 2000; Hernández-López y
y psicológicos comparados con los no adictos pero no col. 2002; de función cognitiva (Curran & Travill
listaron estos efectos negativos. 1997); Parrot & Lasky 1998) y efectos psicológicos
(Liechti y col. 2001; Tancer & Johanson 2001, 2003;
Aunque Siliquini y col. (2001) Liester y col. Harris y col., 2002; Hernández-López y col. 2002) así
(1992) y Verheyden y col. (2003) no encontraron una como medidas de experiencias emocionales, somáticas,
relación significativa entre la historia de consumo de sensorial perceptuales y cognitivas asociadas con
éxtasis y los ESA, otras investigaciones han reportado MDMA/éxtasis. Ocho de estos estudios comparaban
una asociación entre tales efectos y la historia de con- los efectos del MDMA/éxtasis con placebo o con los
sumo. Por ejemplo, según van de Wijngaart y col. efectos de otras sustancias (por ejemplo alcohol, anfe-
(1999), los participantes que reportaron más duración taminas, mCPP) y dos reportaron la intensidad de los
en el consumo de éxtasis (5 años versus 3 meses) efectos seleccionados del MDMA/éxtasis solo. Dado

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que algunas sustancias (tales como las anfetaminas) tie- y la sociabilidad. En una de la pocas investigaciones
nen efectos similares a los del MDMA/éxtasis (por que valoraban las diferencias de género, Liechti y col.
ejemplo, euforia, aumento de energía) si solo registrá- (2001) encontraron que las mujeres parecían experi-
bamos los efectos que difieren significativamente de mentar efectos presumiblemente indeseables (por ejem-
sustancias comparables podíamos dejar de capturar el plo, trastornos de pensamiento, ansiedad, estado de
amplio espectro de efectos asociados con el éxtasis. Por ánimo deprimido y cambios perceptuales) con mayor
tanto, para los propósitos de esta revisión, identifica- intensidad que los varones quienes, por otra parte,
mos ESA (experimentados menos de 24 horas tras el reportaron ser más activos y sentirse más energéticos
consumo de MDMA/éxtasis) que diferían significativa- tras recibir MDMA. Los ESA empezaron 30-60 minu-
mente de aquellos efectos experimentados tras la admi- tos tras el consumo y alcanzaron el máximo a los 75-
nistración de placebo (o previos al consumo de 120 minutos (Lierchti y col (2001). La duración media
MDMA/éxtasis). de estos efectos fue de 3,5 horas.

Harris y col. (2002) evaluaron los ESA usando una


muestra de 8 participantes caucasianos, cinco de los
Estudios de laboratorio concurrentes cuales eran varones. Usando un diseño intra sujetos, los
participantes recibieron placebo, 0,5 mg/kg de MDMA
Usando un diseño doble ciego, inter-sujetos, y 1,5 mg/kg de MDMA y posteriormente se les pidió
Hernández-López y col. (2002) estudiaron los efectos que describieran sus experiencias, tanto la anterior a la
de MDMA (100 mg con y sin etanol) en nueve volun- ingesta como diversas veces tras el consumo. La dosis
tarios varones que habían consumido éxtasis al menos menor se asoció con euforia, relajación y tensión pero
en cinco ocasiones. Los participantes reportaron expe- no produjo cambios significativos en ninguna de las
rimentar una diferencia significativa respecto al place- escalas analógicas visuales que valoran los cambios del
bo en las escalas que medían la euforia, la disforia, los estado de ánimo y cognitivos. Solo tres de los ocho
síntomas somáticos y los efectos relacionados con la voluntarios pensaban que valía la pena pagar por la
anfetamina. El consumo de droga también ocasionó dosis de 0,5 mg/kg. La dosis más alta ocasionó infor-
gusto (droga) placer (sentimiento) estimulación (senti- mes de gusto por la droga, intoxicación, discernimien-
miento) subidón, alegría, sentimientos corporales dife- to, confianza, euforia, relajación, mejora cognitiva y
rentes/cambiados/irreales. La ingestión de MDMA se excitación autonómica. También reportaron experien-
asoció principalmente con efectos deseables que se cias indeseables incluyendo pérdida cognitiva, tensión,
experimentaban con más intensidad de lo que se expe- malos efectos de la droga, y “efectos asociados a LSD”
rimentaban los indeseables. Normalmente, los ESA (es decir emociones y percepciones lábiles y contradic-
alcanzaban su máximo entre los 45 y los 90 minutos torias). Este estudio no solo confirmó una relación
tras el consumo de MDMA y duraban entre 4,5 y 9 dosis respuesta y la experimentación tanto de efectos
horas (la duración se definió midiendo el tiempo trans- deseables como de efectos indeseables, si no que tam-
currido entre el efecto máximo (pico) de la droga y el bién reveló que los efectos indeseables se experimenta-
retorno a los valores basales). ban con menor intensidad que los efectos positivos. Los
ESA alcanzaron su máximo 2 horas después de la
Liechti y col. (2001) analizaron datos de tres estu- ingestión de MDMA (rango medio 1,5 – 4 horas); aun-
dios doble ciego controlados con placebo en los que a que no se especificaba la duración de cada efecto sub-
un total de 74 sujetos (54 varones) se les administraron jetivo, algunas experimentaciones duraron
70-150 mg de MDMA. Tras la ingesta MDMA se repor- aproximadamente 8 horas.
taron ansiedad, mejoría del estado de ánimo, depresión,
fatiga física/emocional, cambios cognitivos positivos, Camí y col. (2000) evaluaron ESA usando una
trastornos del pensamiento, y cambios en la percepción muestra de ocho varones jóvenes a los que se les

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administraron 75 mg y 125 mg de MDMA. Los Estudios concurrentes en clubes


pocos efectos que se experimentaron tras la dosis
menor de MDMA reflejaron efectos relacionados con Parrot & Lasky (1998) llevaron a cabo un estudio
la anfetamina, disforia y síntomas somáticos y dife- longitudinal en el que examinaron los ESA reportados
rentes sentimientos corporales cambiados o irreales. por 15 consumidores principiantes (entre una y nueve
A la dosis más alta los participantes experimentaron ocasiones previas) y 15 consumidores habituales (10 ó
no solo la mayoría de los efectos reportados para la más ocasiones previas) antes, durante y después de
dosis menor, si no que también reportaron sentimien- asistir a un club nocturno. Quince individuos adiciona-
to de bienestar, de estar bebido, de gustarles la droga, les quienes también asistían regularmente a clubes noc-
euforia, estimulación, confusión y cambios en las turnos pero que informaron que nunca habían
formas, luces y sonidos. Los efectos subjetivos consumido éxtasis (pero habían consumido otras varias
alcanzaron su máximo entre los 90 minutos y las 2 sustancias), sirvieron de grupo comparador. Algunos de
horas tras la ingesta y duraron entre 2,5 y 8,5 horas los consumidores de éxtasis también reportaron haber
(duración definida por la medida del tiempo transcu- consumido cannabis, cocaína, anfetaminas y/o alcohol
rrido desde el efecto máximo de la droga y el retorno en el club. Aunque Parrot & Lasky (1998) no llevaron
a los valores basales). Tancer & Johanson (2001) a cabo un análisis estadístico para evaluar el impacto de
evaluaron ESA en una muestra de 15 adultos jóvenes la historia del consumo sobre la experiencia con éxta-
que recibieron placebo y una dosis única de MDMA sis, nuestra inspección de sus resultados indica que las
(75 mg, 110 mg ó 145 mg/70 kg). La inspección experiencias con éxtasis de los principiantes y de los
visual de los datos indica que no había una relación consumidores habituales eran similares. Todos los efec-
clara entre la magnitud de la respuesta subjetiva y la tos reportados por los consumidores de éxtasis se des-
dosis de MDMA. La droga produjo presumiblemen- criben más adelante, independientemente de si la
te efectos positivos, incluyendo euforia significativa, potencia de estos efectos difería significativamente de
alegría, estimulación, intoxicación (“subidón”) los del grupo comparador, porque además de éxtasis
sociabilidad (amigabilidad) y efectos de tipo anfeta- habían consumido otras varias sustancias ilegales. Los
mínico. El MDMA también produjo presumiblemen- consumidores regulares de éxtasis reportaron encon-
te efectos negativos incluyendo disforia y síntomas trarse de buen humor, interesados, anormales, calma-
somáticos, ansiedad y confusión. Finalmente, el dos, equilibrados, bien coordinados, serenos, y
MDMA produjo lo que los autores llamaron “efectos energéticos con mucha intensidad; informaron sentirse
alucinógenos” incluyendo cambios en la percepción, ingeniosos, con la cabeza clara y somnolientos con
cambios en la emoción, alteraciones del proceso de intensidad moderada; y reportaron sentirse deprimidos,
razonamiento o su contenido y efectos interocepti- enfermos, insociables, desagradables y tristes con rela-
vos, viscerales y cutáneo/táctiles. La mayoría de los tivamente baja intensidad.
efectos subjetivos descritos por los participantes en
este estudio alcanzaron su máximo dos horas después Currant & Travill (1997) también reclutaron parti-
de la ingesta y volvieron a los niveles basales 4 horas cipantes en un club y compararon la experiencia subje-
más tarde. En un estudio de seguimiento de su inves- tiva de 12 individuos que habían reportado consumo de
tigación del 2001, Tancer & Johanson (2003), vieron éxtasis con la de 12 sujetos que habían reportado haber
de nuevo muchos de los mismos efectos positivos y bebido una media de 10,8 unidades de alcohol pero no
negativos en el mismo periodo de tiempo cuando haber consumido éxtasis (o cualquier otra droga psico-
compararon una dosis de 2 mg/kg de MDMA con activa más allá de cafeína y/o nicotina). Revisamos los
placebo. Además, en una medida diseñada para valo- efectos reportados por los 12 consumidores de éxtasis
rar el valor de refuerzo de la droga, lo participantes tanto el día de la toma como el día siguiente ya que
vieron la dosis de 2 mg/kg de MDMA como más cumplían nuestra definición de efectos agudos de
deseable que el placebo. haberse experimentado dentro de las 24 horas posterio-

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res a la ingesta. Los participantes reportaron sentirse Discusión


energéticos, amigables, tranquilos, relajados, sociables,
con la cabeza clara, excitados, competentes, ingeniosos
con mayor intensidad la noche en que se consumió Durante la década de los 90, el éxtasis ha aumenta-
éxtasis en comparación con la tarde del día siguiente. do globalmente, a pesar de haber sido asociado con un
Los participantes también reportaron efectos probable- aumento de la probabilidad de engancharse a compor-
mente indeseados incluyendo sudoración, boca seca, tamientos insanos además de intoxicación e incremento
visión borrosa, dificultad respiratoria y nausea con de la probabilidad de complicaciones neuropsicológi-
mayor intensidad la noche de la ingesta. Los efectos cas o psiquiátricas. Múltiples factores han motivado el
que se experimentaron más intensamente el día siguien- consumo de esta droga incluyendo, entre otros, los
te incluyeron principalmente efectos indeseables inclu- efectos deseables de la intoxicación aguda que los con-
yendo inquietud, falta de concentración, falta de sumidores con fines recreativos atribuyen al éxtasis.
energía, cansancio físico, debilidad, cefalea, irritabili- Por tanto, llevamos a cabo una revisión de 24 investiga-
dad, agitación, depresión, ansiedad, sensación de som- ciones que reportaban datos de la frecuencia y/o la
nolencia y sensación de torpeza. Los efectos intensidad de los efectos subjetivos agudos experimen-
presuntamente positivos experimentados con mayor tados bien durante la intoxicación o durante las prime-
intensidad el día siguiente a la ingesta fueron la de sen- ras 24 horas tras la ingesta.
tirse satisfecho, soñador, contento e interesado.
Tras el consumo de éxtasis se han reportado cien-
tos de efectos, en algunos casos idiosincrásicos, pero
solo se ha reportado un subgrupo de ESA repetidos a lo
Estudios retrospectivos largo de múltiples estudios. Doce de los ESA más fre-
cuentes en las 18 investigaciones de prevalencia fueron
Parrot & Stuart (1997) reclutaron a 21 jóvenes con- somáticos, cada uno registrado en cinco o más investi-
sumidores politoxicómanos con fines recreativos para gaciones: nausea y/o vómito, bruxismo/problemas den-
que describieran sus experiencias pasadas con el éxta- tales, cefalea, cambios de temperatura corporal, ritmo
sis. No se reportaron efectos negativos tras el consumo cardiaco acelerado, dolores musculares o estiramientos,
de éxtasis, ni ningún participante reportó que el éxtasis fatiga o fatiga mental, mareo y/o vértigo, boca seca/sed,
tuviera un impacto significativo sobre los ítems de incremento de energía, sudoración/palmas sudorosas y
medida de la claridad mental/confusión si no que repor- entumecimiento/hormigueo. Otros seis efectos comu-
taron sentirse energéticos, eufóricos, agradables y segu- nes fueron emocionales: ansiedad o nerviosismo,
ros de si mismos. Los autores no especifican el tiempo depresión, ternura/intimidad, temor y/o paranoia, eufo-
en que estos efectos alcanzaron su máximo o la dura- ria o mejora del estado de ánimo y sentimiento de
ción de los mismos. paz/tranquilidad.

Davison & Parrot (1997) también realizaron un Solo se reportó en cinco o más estudios un ESA
estudio retrospectivo en el que se pidió a 20 adultos sexual (excitación sexual /aumento de la conciencia
jóvenes (11 varones) que describieran sus experiencias sexual), un ESA cognitivo (pensamiento confuso), un
pasadas con el éxtasis. Los participantes reportaron ESA sensorio perceptual (efectos visuales/cambios en
sentirse significativamente más energéticos, eufóricos, la percepción visual), un ESA relacionado con el sueño
agradables y confusos tras el consumo de MDMA. De (insomnio) y un ESA relacionado con el apetito (dismi-
forma similar a Parrot & Stuart (1997) los autores no nución del apetito).
especificaron el tiempo en el que los efectos alcanzaron
su máximo o la duración de los mismos. De forma similar a los estudios que reportan tasas
de prevalencia de ESA específicos, los participantes

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tanto en estudios en laboratorio como en estudios in situ del MDMA/éxtasis también pueden influir otros diver-
reportaron muchos de los mismos ESA emocionales, sos factores. Por ejemplo, en los estudios retrospectivos
sensorio perceptuales, y cognitivos tras el consumo de los déficit de memoria y atención asociados al consumo
MDMA. Además, las investigaciones comparativas crónico de éxtasis (Montoya y col. 2002) pueden
demostraron que los ESA deseables parecían experi- impactar en el informe de ESA. Los participantes con
mentarse más a menudo y con más intensidad en com- historias de consumo de éxtasis durante largo tiempo
paración con los ESA indeseables. Un mayor número pueden tener dificultades para rellenar cuestionarios
de efectos presumiblemente negativos fueron experi- más largos y detallados, pueden completarlos menos
mentados con mayor intensidad el día siguiente a la cuidadosamente y pueden tener dificultades en recordar
ingesta de MDMA. Los ESA empezaban típicamente los efectos asociados a sus experiencias con éxtasis.
en los 30-60 minutos posteriores al consumo alcanzan- Además la evaluación de las experiencias con éxtasis
do su máximo entre los 75 y los 120 minutos tras el pueden estar sesgadas por las expectativas de los resul-
consumo/inicio y duraban 2-12 horas. tados (Engels & ter Bogt 2004) o como resultado de
participantes que tienen alterados sus actitudes respec-
En aquellos pocos estudios que examinaron los to al éxtasis para justificar el gasto o la experiencia de
efectos de las dosis, los participantes asociaron las consumir éxtasis.
dosis más altas con una experiencia con MDMA/éxta-
sis más intensa y de más duración y las dosis menores También es importante considerar el contenido y el
con menos efectos negativos. Aunque las mujeres formato del método de evaluación en el rango de los
reportaron más ESA indeseables (por ejemplo enferme- efectos registrados en los estudios revisados. Si las pre-
dad física, estado de ánimo depresivo, ansiedad, trastor- guntas relacionadas con MDMA/éxtasis se limitan a los
nos del pensamiento y cambios perceptuales) con efectos somáticos, cognitivos y emocionales algunos
mayor intensidad en comparación con los hombres, los efectos sensorio perceptuales, relacionados con el
efectos relacionados con el género solo se estudiaron en sueño y relacionados con el apetito experimentados por
tres investigaciones. Desde el momento en que el géne- algunos participantes no se capturarán con los métodos
ro se asocia tanto con la reacción a MDMA/éxtasis de evaluación de los investigadores. También, si uno
como al informe de las experiencias propias de cada obtiene descripciones acerca de las experiencias con
uno, la prevalencia de algunos efectos específicos MDMA/éxtasis usando preguntas abiertas versus el lis-
puede reflejar el reclutamiento como participantes de tado de efectos, los participantes pueden fracasar al
más hombres que mujeres. Dos estudios examinaron la recordar o reportar algunos de sus experiencias asocia-
asociación de la edad y los ESA y solo uno encontró das con el consumo. Consecuentemente, los investiga-
relación (ser más joven se asociaba con experimentar dores pueden capturar solo aquellos efectos más
más efectos físicos, todos ellos clasificados por nos- destacados para los participantes (es decir, efectos posi-
otros como indeseables). Aunque seis de los 24 estudios tivos o negativos intensos versus efectos positivos o
revisados evaluaron la asociación entre historia de con- negativos moderados). Por otra parte, en relación con
sumo de éxtasis y la prevalencia de experiencias espe- los listados de efectos, las cuestiones abiertas tienen
cíficas, los resultados no revelaron una relación más probabilidad de capturar experiencias únicas atri-
consistente entre estas variables. Nosotros no pudimos buidas al consumo de MDMA/éxtasis (por ejemplo,
calcular la prevalencia de los efectos según el género y habilidades telepáticas). Por tanto, no es sorprendente
la historia de consumo de éxtasis porque casi todos los que algunos de los efectos obtenidos por medio de pre-
estudios reportaron resultados combinados entre géne- guntas abiertas fueran registrados con menos frecuencia
ro e historias de consumo de éxtasis y muchos no infor- que los obtenidos por medio de listados de efectos.
maban de esto último. Además, un listado de efectos puede inflar artificial-
mente el significado aparente de una experiencia parti-
En el reporte de prevalencia, intensidad y duración cular si un efecto que se experimenta solo leve o

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transitoriamente se registra como experimentada con la atribuirse más acertadamente a las actividades (por
misma frecuencia que un efecto que se experimenta con ejemplo el baile, el estar despierto toda la noche) aso-
mayor intensidad o con mayor duración. ciadas con el éxtasis más que al propio éxtasis. Sin
embargo, la experiencia global de los consumidores de
La estrategia de reclutamiento y los criterios de MDMA/éxtasis en los estudios retrospectivos y en los
inclusión también tienen el potencial de impactar sobre estudios concurrentes en clubes parecía similar a los
la prevalencia de ESA. Por ejemplo, individuos que demostrados en los estudios controlados en laboratorio.
experimentan principalmente efectos negativos tras el No obstante, estas limitaciones, dada las dos docenas de
consumo de éxtasis o de múltiples drogas pueden tener estudios que examinamos – que incluían a miles de
menor probabilidad de acudir a clubes y fiestas en las consumidores de éxtasis de diversos países y culturas,
que a menudo se han reclutados sujetos. Además, los empleando diversas metodologías y herramientas de
lugares en los que uno consume éxtasis pueden influen- valoración - esta revisión provee a los clínicos y los
ciar en los efectos atribuidos a la droga. Además si los investigadores de un completo resumen de los ESA
individuos que experimentan principalmente efectos deseables y no deseables que pueden motivar y reducir
negativos reducen o cesan en el consumo de éxtasis, el consumo de éxtasis. Este resumen también puede
entonces habrá menos probabilidades de cumplir los ayudar a los esfuerzos de la salud pública a reducir los
criterios de inclusión para participar en estudios que daños biomédicos (por ejemplo desvanecimiento, des-
requieren para su inclusión múltiples experiencias pre- hidratación, acortamiento de la respiración, bruxismo)
vias con éxtasis y/o consumo reciente de éxtasis. asociados con el consumo de éxtasis con fines recreati-
vos. Además los educadores deberían conocer los efec-
Otra consideración importante es el potencial de tos positivos que los consumidores atribuyen al éxtasis
mala atribución de varias experiencias con ya que si no estos pueden sabotear o desacreditar los
MDMA/éxtasis. Con la excepción de los seis estudios esfuerzos preventivos especialmente cuando los mensa-
de laboratorio (Camí y col.. 2000; Liechti y col.. 2001; jes preventivos son inconsistentes con las experiencias
Tancer & Johanson 2001, 2003; Harris y col.. 2002; de los propios consumidores o las experiencias de sus
Hernández-López y col. 2002) y los dos estudios adi- iguales (Zervogiannis y col. 2003). En adición a estas
cionales in situ (Downing 1986; Greer & Tolbert 1986) recomendaciones, animamos a los investigadores a ir
en los que a los participantes se les dio el MDM, se des- más allá del registro de la prevalencia de los efectos
conocen los contenidos de las pastillas de éxtasis inge- subjetivos agudos para identificar la intensidad y la
ridas por los participantes. Por tanto, es posible que los duración de tales efectos en función del género, la edad,
efectos asociados aparentemente al éxtasis sean de el consumo de múltiples drogas y la historia de consu-
hecho el resultado de consumir otra sustancia (por mo de éxtasis. Si lo hacen así, los investigadores deben
ejemplo, cafeína, anfetamina, LSD, ketamina) o la continuar cumpliendo con los aspectos éticos al llevar a
combinación de MDMA y otra sustancia en la misma cabo investigaciones en la que los participantes consu-
pastilla. Además, los consumidores de éxtasis a menu- men MDMA/éxtasis.
do reportan el consumo de sustancias adicionales (por
Artículo publicado en la revista
ejemplo, cannabis, cocaína, alcohol, anfetaminas) ya
La Bibliografía y las tablas de los artículos se la pueden pedir
sea durante el tiempo de valoración o cuando ellos típi- a:lydiazuloaga@ya.com

camente consumen éxtasis (Curran 2000). Esto también


dificulta determinar si los efectos reportados eran resul-
tado del MDMA, de una sustancia no relacionada, o de
una combinación de sustancias (que pueden incluir o no
el MDMA). También es posible que alguno de los efec-
tos atribuidos al consumo de éxtasis, tales como la difi-
cultad de levantarse de la cama el día siguiente puede

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