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CONFLICTO

El conflicto es una situación en la que dos o más personas con intereses


contrapuestos entran en confrontación, oposición o emprenden acciones
mutuamente antagonistas, con el objetivo de neutralizar, dañar o eliminar a la
parte rival, incluso cuando tal confrontación sea verbal, para lograr así la
consecución de los objetivos que motivaron dicha confrontación. Un conflicto es
una “fase mayor” a un problema, ya que para que sea un conflicto ha de
involucrarse unos sentimientos y para que haya sido un conflicto hemos de tener
en cuenta que la comunicación entre ambos ha de haberse perdido o es muy
distante.

Aunque llegue a sonar algo extraño, así como el conflicto es negativo, éste llega a
tener sus partes positivas. Una de ellas es que cuando surge el conflicto, las
personas tienen la oportunidad de expresar lo que sienten, ya que si lo acumulan,
esto puede generar problemas futuros, aunque por otro lado, entrar en situaciones
de este tipo, incrementa el resentimiento y la baja autoestima

Existen demasiadas causas por las que dos o más personas entran en conflicto,
como las siguientes:

1. Percepción subjetiva de la realidad: cada quien ve las cosas desde su


punto de vista, que no necesariamente coincide con la forma de ver las
cosas por parte de los demás.
2. Información incompleta: conocer la realidad parcialmente. Al faltar
información no tenemos una idea exacta de la situación. Por ejemplo, en la
anécdota sobre “los ciegos y el elefante”, cada ciego definía al elefante
según la parte del animal que había tocado.
3. Deficiente comunicación interpersonal: no escuchar o ser escuchado en
profundidad, no haber logrado un adecuado grado de comunicación
objetiva, profunda y completa. Frecuentemente se juzga al otro por lo que
creemos que ha dicho y no por lo que en realidad ha dicho.
4. Incompatibilidad o diferencia de caracteres: choques entre personas por su
diferente e incompatible forma de ser y pensar: lo que a uno gusta a otro
desagrada, lo que uno desea el otro lo rechaza.
5. Ausencia de satisfacción de necesidades, reales o creadas: cada persona
siente unas necesidades que espera que los demás sean capaces de
satisfacer.
6. Uso de presiones que originan frustración: amenazas, trato injusto,
exigencia desproporcionada, abuso de autoridad o control son algunos de
los elementos presentes en la convivencia entre personas que se
interponen llegando a originar verdaderos conflictos personales.
7. Igualación de los demás: intentar que los demás sean, piensen, obren o se
comporten como nosotros, no permitiéndoles ser ellos mismos ni aceptando
su individual forma de ser.
8. La división y el sectarismo: rivalidad entre grupos incomunicados y
enfrentados entre sí, chicos contra chicas, blancos contra negros,
seguidores de diferentes equipos de fútbol, los de derecha contra los de
izquierda.
9. Intimidad y dependencia patológica entre personas: deseo de acaparar al
otro como si tuviéramos exclusividad sobre su persona, y sometiéndolo a
nuestra voluntad

A pesar de que cuando escuchemos la palabra conflicto, todo lo malo venga a


nuestra mente, cuando éste se presenta tenemos distintas oportunidades como
desarrollar el aprendizaje de habilidades de negociación, la percepción de control
y eficacia personal ante las dificultades, fomentar el reconocimiento de los
diferentes puntos de vista facilitando de este modo la disposición al trabajo
cooperativo, establecer y ampliar nuevos canales de comunicación, promover la
reflexión y el análisis etc., aunque por otro lado también existen las desventajas
como restringir los canales de comunicación y dificultar las interacciones, hacer
más probable la distorsión de la percepción de la realidad, fomenta actitudes y
comportamientos hostiles, dificultar el trabajo cooperativo, afectar la imagen y la
autoestima ya que puede reducir el sentido de eficacia y autosuficiencia, etc., en
conclusión, los conflictos, según sean, y sobre todo según el modo y la forma en
cómo se les enfrente, pueden ser algo positivo o negativo.

IMPORTANCIA DE LOS CONFLICTOS

Los conflictos, queramos o no, es algo que forma parte de nuestras vidas
cotidianas. Siempre existe algo que por cierta razón no nos llega a agradar o no le
agrada a alguna otra persona, y ésta diferencia de pensamientos es la que genera
un problema y posteriormente desencadena un conflicto. Muchas personas
suelen evadir estas situaciones y acceden fácilmente a lo que otras personas
indican, sin tener el conocimiento de que esa actitud les brindará más momentos
llenos de conflicto a futuro. Es por eso, que el conflicto se debe de enfrentar en su
debido momento, ya que a pesar de que tengamos la idea de que es algo
negativo, éste puede resultar positivo siempre y cuando lo resolvamos por medio
de una comunicación eficaz. Ambos lados pueden exponer sus inconformidades, y
llegar a acuerdos que logren satisfacer sus necesidades, además de que
promueve la reflexión, el análisis, la negociación, etc. 

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