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Apuntes de una Psicopedagoga

¡TEORÍA A LA ESPERA DE PRÁCTICA!

TÉCNICAS DIAGNÓSTICAS

Test. Requisitos, cualidades, estrategias.

26/03/201426/03/2014 · M.E.R
El Test es una técnica pedagógica o psicológica de carácter OBJETIVO que trata de cuantificar las
diferencias individuales que se establecen entre los sujetos. No obstante, el ambiente y las circunstancias
personales dadas en el momento de la aplicación, pueden influir en la prueba, haciendo que varíen las
puntuaciones tanto globales como parciales.

Por tanto, para que un test sea considerado objetivo debe cumplir una serie de requisitos:

1. Técnica sistémica. Manual con un sistema de interpretación.


2. Detectar muestras empíricas de conducta.
3. Proporcionar medidas objetivas.
4. Establecer comparaciones interindividuales.

Así, todo test debe cumplir unas CUALIDADES fundamentales, que tendríamos que poder encontrar en
los manuales de interpretación:

Validez. Un test es válido si mide lo que dice medir. Para ello, hay tres tipos de comprobaciones:

– Validez Predictiva: si el test es efectivo a la hora de predecir algún resultado futuro. Por ejemplo, el
rendimiento del alumno. El test, está relacionado con variables que estamos estudiando.

– Validez Concurrente: si establece alguna relación entre el resultado del test y otra fuente de
información externa al test. Por ejemplo, un test de competencia matemática y la nota obtenida en la asignatura
de Matemáticas. Hay correlación entre ambos.

– Validez de contenido: cuando comprenda una muestra lo suficientemente representativa de las


conductas que se pretende medir.

Fiabilidad. Un test es fiable si tiene consistencia en el tiempo. Para ello, ha de tener coherencia
interna: exactitud con la que un test mide una característica determinada. ¿Cómo se contrasta? Con
aplicaciones sucesivas de un mismo test. Esto depende de la longitud del test, de la homogeneidad
de la población y la objetividad del proceso de puntuación.
La validez y la fiabilidad son las dos características que un test tiene que tener como mínimo.

Normalización. (Tipificación estandarización) Es decir, hablamos de la uniformidad en las


condiciones del empleo del test y la normalización de las puntuaciones directas para poder
compararlas. Centiles, grado, CI… son puntuaciones normalizadas.

Sensibilidad. Capacidad del test de medir diferencias mínimas entre individuos o dentro de un
individuo en ocasiones diferentes. Ha de ser muy preciso.

¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir una prueba?

Las conductas que muestrea la prueba. Hay que mirar el contenido del test ítem por ítem para asegurar que
mide lo que se quiere medir.
Los sujetos a los que se les puede aplicar la prueba. Hay que examinar las edades y niveles educativos de
los estudiantes con los que se establecieron las normas del test. Es decir, la información de la representatividad
de la muestra.
Las puntuaciones disponibles en el manual. Hay que ver si aparecen los subtotales de los que se han
obtenido las puntuaciones totales; y también si aparece la interpretación de las puntuaciones obtenidas, aunque
no suele ser común.
Los datos existentes sobre la validez y fiabilidad de la prueba.

Bien, una vez hemos elegido una prueba, tenemos que establecer estrategias…

Estrategias de aplicación

Establecer el rapport. Hay que crear el clima adecuado para favorecer la necesaria colaboración del
sujeto. ¿Cómo? Con empatía y respeto.
Adecuar las condiciones físicas: iluminación, ruidos, distracciones…
Ajustarse a las instrucciones de aplicación, puesto que las desviaciones de las normas pueden
cambiar el significado de la prueba.
Utilizar refuerzos adecuadamente: hay que reforzar de forma positiva el esfuerzo, NO el éxito.
Tampoco hay que dar pistas sobre si el sujeto lo está haciendo bien o mal.
Atender las condiciones del evaluado y garantizar así su adecuada interpretación.
Entrenamiento previo: precisión en el registro de las respuestas, puesto que no se puede dudar en la
aplicación de la prueba.
Autocontrol del evaluador en cuanto a sus impresiones.
Observar detalladamente la conducta del alumno mientras realiza la prueba.
TIPOS DE PUNTUACIONES CON REFERENCIA A LA NORMA

Para facilitar la interpretación, las puntuaciones brutas directas obtenidas en las pruebas se transforman
en puntuaciones derivadas.
Puntuaciones Derivadas
Puntuaciones equivalentes de edad y grado académico. A cada sujeto evaluado se le asigna una edad
de rendimiento.
Puntuaciones CI con referencia a la norma.
Rasgos percentiles. Expresan el porcentaje de sujetos que obtienen puntuaciones inferiores a una
puntuación dada.
Puntuaciones típicas (Z) Expresa la distancia desde una puntuación directa a la media en términos de la
desviación típica de esa distribución.

Otras puntuaciones transformadas


Puntuaciones T = 10(z)+50
CI = 15(z)+100
CEEB = 100(z)+500
Zn (Puntuaciones típicas normalizadas) Sólo válidas en muestras con distribuciones próximas a la
normal. Para obtener Zn, primero se transforma la puntuación a rango percentil, y después se
obtiene la puntuación típica que corresponde a dicho percentil en la distribución normal.

CUALIDADES ESTRATEGIAS FIABILIDAD NORMA NORMALIZACIÓN


PRUEBA PUNTUACIONES PUNTUACIONES DERIVADAS PUNTUACIONES
TRANSFORMADAS REQUISITOS SENSIBILIDAD TEST VALIDEZ

3 comentarios sobre “Test. Requisitos,


cualidades, estrategias.”

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