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ENFERMEDADES DEL SISTEMA NERVIOSO (III)
Presión subdural
DP
Medida tras la colocación en el espacio
subdural de cápsulas metálicas (Vries et
al, 1975), conectadas mediante un caté-
ter a un transductor de presión.
DP
Presión epidural
Obtenida a través de la colocación sobre
V
la duramadre de diveros transductores
(Dorsch et al 1975, Gobiet et al, 1974) o
DV DV sistemas similares a los descritos en el
Fig. 1. Curva presión/volu-
men. apartado anterior.
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HIPERTENSIÓN INTRACRANEAL
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vías de circulación del LCR dentro del es- El proceso diagnóstico es fácil, dado que tos que por su simplicidad tienen la ven-
pacio ventricular. la tomografía axial computarizada (TAC) taja de ser didácticos y la desventaja de
3. Arreabsortivas, cuando la dificultad de y, aún mejor, la resonancia magnética no ser totalmente exactos (García de Sola,
salida del LCR del cráneo está a nivel (RM) nos ofrecen imágenes de alta cali- 1989).
de los espacios subaracnoideos. dad de los diferentes tipos de hidrocefalia. Se pueden distinguir tres estadios:
Si se tiene en cuenta el período de la vida Sin embargo, la mal llamada hidrocefalia
en que aparecen, se distinguen dos tipos: normotensiva del adulto genera confusión Puesta en marcha
a) del niño, son obviamente más fre- ya desde su concepto y terminología, ade- El bloqueo parcial de los canales de reab-
cuentes las de causa congénita que ad- más de presentar una especial dificultad sorción del LCR tras una meningitis, he-
quirida, y b) del adulto, en el que sucede desde el punto de vista fisiopatológico y morragia subaracnoidea o cualquier otro
al contrario que en el grupo anterior. de manejo, por lo que a continuación nos proceso a este nivel, provoca un aumen-
Dandy en 1914, a través de experiencias vamos a extender en su exposición. to del LCR, transmitida por vía retrógrada
en animales y observaciones clínicas hace al espacio intra-ventricular, lo que produ-
una observación de paso de un colorante ce su aumento de tamaño.
desde los ventrículos al espacio subarac- Hidrocefalia comunicante
Esta fase probablemente precise una si-
noideo lumbar cuando existe comuni- arreabsortiva tuación de PIC elevada que fracasa en su
cación en todo el sistema ventricular-sub- intento de forzar los sistemas de reabsor-
aracnoideo. Les llama hidrocefalias
Introducción ción de LCR.
comunicantes. Sin embargo, cuando el co-
lorante no se podía recoger a nivel lum- Nos vamos a centrar en las hidrocefalias Mantenimiento
bar, por obstrucción en el sistema ventri- normotensivas del adulto (Ojeman et al,
cular, les denomina hidrocefalias no 1969) descritas por primera vez por Adams A nivel ventricular se producen varios fe-
comunicantes. y Hakim (1964, 1965). La causa de estas nómenos.
Si se midiera la PIC, las hidrocefalias se hidrocefalias está en un desajuste entre la El incremento de la PIC, por la ley de La-
podrían clasificar en hipertensivas, nor- formación y la reabsorción del LCR, por place (la tensión que soporta la pared de
motensivas o de baja presión. dificultad en esta última, que ocasiona un recipiente es proporcional a la presión
Hay una cierta correspondencia entre las una acumulación de LCR en el espacio ven- del líquido contenido y al radio), aumen-
diferentes clasificaciones expuestas. Así, tricular. ta la tensión a nivel de la pared ependi-
las hidrocefalias congénitas se suelen No siempre son de presión normal o baja, maria.
presentar en niños, son obstructivas, no ni sólo se presentan en el adulto (Carrillo Se producen microrroturas de ésta, favo-
comunicantes e hipertensivas. Las hidro- et al, 1982), ni todas las comunicantes reciéndose la reabsorción del LCR. Aun-
cefalias causadas por tumores, hemato- son arreabsortivas, dado que las hidroce- que el edema periependimario producido
mas o abscesos serían hidrocefalias ad- falias ex vacuo (cuyo componente princi- dificulta las funciones de las estructuras
quiridas, por lo general más frecuentes pal es una atrofia cerebral primaria) son involucradas en procesos intelectivos o au-
en el adulto, son no comunicantes e hi- también comunicantes, de acuerdo con el tomáticos, lo que explica la aparición de
pertensivas. Las hidrocefalias arreabsor- concepto dado por Dandy (1914). Inclu- la tríada clásica de síntomas.
tivas son de etiología no congénita, se so hay autores (Bradley et al, 1991) que Si se compensa en parte la reabsorción de
suelen presentar en el adulto, son comu- postulan una relación etiopatogénica en- LCR, la PIC desciende pero la tensión a ni-
nicantes y, por lo general, no hiperten- tre los infartos en sustancia blanca pro- vel de la pared ventricular se mantiene,
sivas. funda, como los observados en la encefa- dado que se ha producido un aumento del
Al tener en mente estos diferentes tipos lopatía arterioesclerótica subcortical y este radio.
de hidrocefalia se puede facilitar su com- tipo de hidrocefalias, que se pondrían en
Progreso
prensión y el manejo diagnóstico y tera- marcha al disminuir dichos infartos las
péutico. fuerzas tensiles de la pared ventricular. El proceso puede no ser reversible, dado
Desde el punto de vista clínico, las hidro- Por esta razón, sería mejor catalogarlas que dicho aumento del radio puede incre-
cefalias van a expresarse en el niño o en como hidrocefalias comunicantes arreab- mentar la tensión de la pared de igual o
la vida adulta de acuerdo con el nivel de sortivas (HICA), en contraposición con las mayor forma que el aumento de la PIC.
hipertensión intracraneal que provoquen hidrocefalias ex vacuo (HIEV), con las que Por otro lado, el edema transependimario
y concomitante a la causa que las produ- hay que hacer el diagnóstico diferencial, hace que ésta sea más débil.
ce. No es la finalidad de este trabajo ha- dado que las alteraciones clínicas produ- Aparece además otro factor: el acerca-
cer una revisión en este apartado. Sólo de- cidas por la primera son reversibles tras miento del manto cerebral a la convexi-
cir que si son hipertensivas, en el lactante la colocación de una derivación ventrícu- dad, dificultando la circulación de LCR.
van a producir un aumento del cráneo, al lo-peritoneal. El proceso se hace pues lentamente pro-
estar abiertas las suturas. En el niño y en gresivo e irreversible, con tendencia al in-
el adulto, sin embargo, las hidrocefalias cremento gradual del tamaño ventricular
Etiopatogenia
hipertensivas amenazan la vida del pa- y lesión concomitante de las estructuras
ciente y requieren en ocasiones actuacio- Los mecanismos de puesta en marcha y periventriculares por su estiramiento. La
nes urgentes que posteriormente se ex- mantenimiento están aún en discusión. A única solución, por tanto, es la derivación
pondrán. continuación se exponen algunos concep- del LCR.
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cartar en otras edades, incluso en niños Incluso muchos pacientes con resultados
(Carrillo et al, 1982). La diferencia fun- negativos han respondido bien al trata-
damental es que, por lo general, en eda- miento quirúrgico (Epstein et al, 1995),
des más tempranas la etiología del cuadro por lo que hoy día se pueden considerar
(meningitis, HSA o TCE) está siempre pre- obsoletas la cisternografía isotópica o prue-
sente. bas similares basadas en estudios de cir-
culación de LCR, como la TAC con metri-
zamida.
Diagnóstico
Las pruebas diagnósticas a nuestro alcance
Tras los avances en la neuroimagen, hoy han de realizarse con una secuencia lógi-
día sólo se plantea el diagnóstico diferen- ca, que en nuestro caso ha sido TAC y úl- Fig. 5. Imagen de hipertensión intracraneal en la reso-
cial con la HIEV, como ya hemos referido timamente RM, monitorización de la PIC nancia magnética. Obsérvese la mejor visualización
anteriormente. Pero aún es difícil recono- y/o prueba de infusión. del edema transependimario.
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Prueba de infusión
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