ISSN 1988-8821

Vol. 7 nº 174
Editor Acuerdo Justo®
Director: Franco Conforti

REVISTA E-MEDIACION
GESTION ALTERNATIVA DE CONFLICTOS
Disponible en www.acuerdojusto.com - info@acuerdojusto.com, ☎ +34 608 968 769

En éste número
Les presentamos:

• Desayuno en el tiempo emocional del conflicto.

• Voluntad debidamente informada.

• Libro: Manual de Experto Universitario en Mediación y Resolución de Conflictos en

el Ámbito Educativo.

• Mediación policial, otra forma de ser y hacer policía.

• Agenda Próximos Eventos.

• Ethos: a propósito de la mediación.

• Teléfono de la esperanza: “ESPAMEDIA”

• Entre la delegación y el compromiso, la mediación.

nnn
 ÍNDICE

Desayuno en el tiempo emocional del conflicto por Lic. César Sánchez

Olivencia....................................................................................3

Voluntad debidamente informada” por Adolfo Dabat........................8

Libro: Manual de Experto Universitario en Mediación y Resolución de

Conflictos en el Ámbito Educativo................................................11

Mediación policial, otra forma de ser y hacer policía por Teresa del
Val ..........................................................................................12

Agenda de Próximos Eventos .....................................................20

Ethos: a propósito de la mediación por Alfonso Fabregat Rosas........21

Teléfono de la esperanza: “ESPAMEDIA” por Prof. Dr. Fco. Javier

Domínguez Alonso ....................................................................41

Entre la delegación y el compromiso, la mediación por Prof. Dr. Antoni

Vaquer i Chiva y Francisco L. Hidalgo.........................................45
Desayuno en el tiempo
emocional del conflicto
POR LIC. CÉSAR SÁNCHEZ OLIVENCIA

Los padres Cabrejos y Garatea son los facilitadores del diálogo en el conflicto social del proyecto
minero Conga en el Perú, que tiene la cerrada oposición de mucha gente de la región Cajamarca,
mientras el gobierno peruano defiende una minería responsable con respeto al medio ambiente.
Hace unas semanas, los facilitadotes se reunieron con el grupo de autoridades y dirigentes. El
presidente regional, Gregorio Santos -opositor al proyecto- dio la bienvenida a los religiosos, quienes
fueron invitados a saborear un delicioso desayuno: rosquitas y queso cajamarquino, panes, leche,
café cargado en medio de una amigable conversación. Una clase magistral de facilitación.

Como si se tratara de una reunión entre amigos, Santos explicó las acciones que realiza al frente
del Gobierno Regional, narró historias y geografía de su pueblo, y finalmente describió el itinerario
de la visita. Después los dos padres y Santos se reunieron en la sede del Gobierno Regional, con
dirigentes sociales y periodistas de medios locales, nacionales e internacionales. Al terminar, se
dirigieron a la zona de las lagunas. Los sacerdotes no intentaron en ningún momento resolver el
conflicto. Esto se llama facilitar.

Ninguno de los sacerdotes llevaba el acta lista bajo el brazo. Un conflicto social no se puede
resolver de la noche a la mañana. Primero tenemos que meternos en lo profundo del conflicto. No
debemos aparentar que el conflicto solo es para la otra parte. Ambas partes son cómplices en el
conflicto. Por tanto es aplicable el pensamiento de Lao Tse: "La sabiduría consiste en seguir dos
caminos opuestos al mismo tiempo" y dejar que el tiempo emocional permita encontrar las
distancias y aproximaciones. No se trata de venderle nada a nadie; se trata de hacer amigos.

Cada conflicto social tiene su propio tiempo emocional. Horizonte en el que las partes expresan
y reciben emociones mutuamente. Se debe dejar que transcurra el tiempo de cada conflicto y
evaluar la entrada y salida de cargas emocionales. Todo conflicto es el resultado de un proceso
complejo y la solución también es un proceso complejo. El conflicto es el resultado de la acción de
una parte y la reacción de la otra parte. Las premisas del conflicto determinan la conclusión del
conflicto. Un método apropiado para conocer el fondo del conflicto es realizar una reconstrucción
de los antecedentes.
 El conflicto social es sistémico, sinérgico y dialéctico con la realidad. Puede ser oculto o expreso.
Pero siempre existe el conflicto en la sociedad, porque los recursos son escasos y la brecha entre las
necesidades insatisfechas y la demanda de servicios es amplísima. La “felicidad” de las telenovelas
solo existiría para un 5% de la población mundial. La propia vida humana es producto de un
conflicto. Nacer o no nacer. A veces gana la vida; otras, gana la muerte.

En el conflicto social se necesita una doctrina. La filosofía china del Yin y Yang expone la
dualidad de todo lo existente en el universo. Son dos fuerzas fundamentales opuestas y
complementarias, que existen en todas las cosas. Cada ser, objeto o pensamiento posee un
complemento del que depende para su existencia y que a su vez existe dentro de él mismo. Son
opuestos, interdependientes, subdivisibles a su vez en Yin y Yang, se consumen y generan
mutuamente, pueden transformarse en sus opuestos y en el Yin hay Yang y en el Yang hay Yin.

Nada existe en estado puro ni en absoluta quietud, sino en una continua transformación.
Cualquier idea que aparezca en un conflicto social puede ser vista como su contraria si se la mira
desde otro punto de vista. Es un principio de unidad/conflicto. Ahora sabemos que es un concepto
relativista y dialéctico. Todo se encuentra en permanente cambio, movimiento y evolución. En
nuestro cuerpo existe una interacción holística. Y todo en el universo se desplaza a velocidad
fantástica. Nuestra galaxia corre hacia un punto situado en la constelación de Acuario.

Con esta perspectiva, el conflicto es la causa de todos los procesos de la existencia. Es parte de la
vida humana y social. El universo y la humanidad existen como resultado de la unidad/conflicto de
los elementos del átomo. El núcleo del átomo formado por neutrones (neutros) y protones (+) y los
electrones como una función de onda en orbitales (- o +) según la teoría cuántica de Schrödinger. El
conflicto del átomo se expresó en la energía infernal que EEUU aplicó en Hiroshima y Nagasaki.

Nuestra galaxia Vía Láctea está en conflicto con la galaxia Andrómeda (2,5 millones de años luz
de la tierra) Los científicos predicen que ambas chocarán dentro de 4,000 millones de años. Este
conflicto es casi imposible de resolver. Mi sentido pésame a la civilización. Es posible que
sobrevivan solamente las cucarachas. Son leyes que provienen de la naturaleza, en la cual el criterio
de relatividad es pertinente.

Lo decisivo del conflicto es la manera en que reaccionamos. Si aprendemos a convivir con ellos
en forma positiva, e intentar resolverlos, pueden ser un factor de crecimiento. Si el conflicto domina
la situación, podemos convertirnos en operadores de violencia. El conflicto es neutro, no es malo ni
bueno en sí mismo. Los seres humanos tenemos distintas formas de abordar conflictos. De acuerdo
a la circunstancia o tiempo, podemos tomar diversas actitudes.

Una de las formas ideales de abordar conflictos sociales es la Cooperación, en que ambas partes
deben ganar. Se trata de conseguir los objetivos propios sin dañar la relación con la otra parte. La
cooperación intenta que tanto el fin como los medios sean coherentes. Cooperar es incrementar las
posibilidades de obtener lo que deseamos y que la otra parte también lo obtenga. Alcanzar la
cooperación plena es muy difícil, pero se puede alcanzar lo más importante. Los tiempos del
conflicto son decisivos para esta clase de acuerdos.

La energía del conflicto tiene que quemarse para evitar que llegue a quemar a las partes del
conflicto. Por eso dejemos transcurrir el tiempo del conflicto con sus ataques y sus defensas. Que
constituya una autogeneración de la catarsis saludable para controlar la agresividad natural del
hombre. Todos los actores necesitan liberar energía para no perder el ritmo de vida normal. Un
conflicto social tratado de manera anormal puede generar una posición extrema. Evitemos que el
conflicto social se convierta en un conflicto político-militar.

El tiempo del conflicto se trata más bien de un tiempo emocional que de un tiempo cronológico.
Pocas veces coinciden estos tiempos La visión es que un conflicto nace, crece y se transforma en
forma no lineal. Su evolución a veces se prolonga durante muchos años. El conflicto de Chechenia
se generó en la época que se formó la URSS. Los conflictos sociales tienen una profunda raíz
humana. Cualquiera no se rebela contra lo que considera una injusticia, pero sí tiene una opinión
formada sobre sus “enemigos”. Hasta que llega el día que deciden apoyar a un líder o “mesías”.
Aquí nace una de las fuerzas del conflicto social. Un tiempo largo de gestación.

En un país como el Perú, aún proveedor de materias primas y con más de 10 millones de
personas en situación de pobreza, a pesar de su crecimiento económico, los conflictos sociales
provienen de las necesidades insatisfechas durante muchos años. Existen muchos pueblos por donde
nunca ha llegado el Estado. Las demandas a veces pasan de padres a hijos. Si hablamos con criterio
estructural, digamos que ha sido un abandono de casi 500 años, como ha sucedido históricamente
con los campesinos de las regiones andinas del Perú.

Millones de personas han perdido la confianza en los gobiernos y en los políticos. La sociedad
rural tiene heridas profundas sin cerrar. Por eso, cuando se instala una mesa de diálogo, los
fantasmas del pasado se hacen presentes. La pregunta es oportuna para un facilitador en un
conflicto social. ¿Es posible olvidar el abuso y la marginación en uno o dos meses? ¿Cuánto tiempo
debe utilizar el Estado para cerrar una vieja herida que viene desde la época de la Colonia?

Por eso el padre Garatea, uno de los facilitadores del conflicto Conga, expresó: “Estamos
mirando cómo hacer para que conversen. Esto no es fácil; es difícil, dificilísimo. Esto es un problema
de un año me imagino yo”, En Cajamarca “hubo mucha mentira en el pasado, por eso la gente no
está dispuesta a soportar más mentiras”, y explicó que “el rechazo al proyecto se debe al temor de
la población cajamarquina a la contaminación del agua”. Sin duda, los gobiernos pasan pero el
agua queda. Esta es una de las variables de la mesa de diálogo.

En el proceso del conflicto social los tiempos emocionales son como ondas orbitales que no tiene
un avance lineal sino en espiral dialéctica, que son el resultado de los ajustes y reajustes de
propuestas y contrapropuestas de los actores. En este proceso la táctica de los tiempos emocionales
determina que se apliquen los factores del consenso, cuando se presenten las condiciones subjetivas
que se ajusten a las condiciones objetivas de la situación estratégica. Los factores son de efecto
cualitativo, y se deben aplicar según la evolución emocional de los actores.

Los factores pueden ser: todos los actores deben ser respetados porque aportan valores diferentes
que construyen la visión común; cualquiera puede tener parte de la verdad; debemos escuchar a
muchas personas; la persona que parece ignorante puede aportar una parte de la solución; la
paradoja de un conflicto social es que los actores interactúan en función de contendores y
cooperantes, por eso tenemos que entrar en conflicto; los actores somos parte de la misma función;
el enfoque positivo del conflicto es que debe llevar a un acuerdo de cooperación.

El tiempo de la violencia comienza cuando se manifiesta la falta de reconocimiento de unos y

otros como personas competentes para comunicarnos. En este caso el facilitador en conflictos
sociales tiene que ser una persona buena e inteligente, que tenga un entrenamiento adecuado en las
diversas fases de la gestión: proceso, estudio y resolución. Que tenga el suficiente amor a la
humanidad para disfrutar de un desayuno campestre con la otra parte, sin odios ni rencores.

El facilitador debe tener obligaciones éticas para la resolución de conflictos. El propósito de

facilitación consiste no sólo en evitar la coacción expresa sino evitar la presión del poder y de la
mesa de diálogo. En efecto, el enfoque analítico busca minimizar la fuerza del poder en todas sus
formas, y formular la evaluación de los principios de una facilitación en que valores y necesidades,
no pueden ser negociados con intenciones inconfesables.

Los dialogantes no son necesariamente los líderes de cada posición, Se debe buscar el diálogo
sencillo de sus propias necesidades, deseos y aspiraciones desde su experiencia personal.  Las
conductas estereotipadas impiden el diálogo sincero. El trabajo de los facilitadores consiste en
proponer las reglas, obtener el consentimiento a estas reglas y motivar intercambios respetuosos
entre los actores del diálogo.

La agenda no debe aplicarse al pie de la letra. Se debe invitar a los otros a dialogar sobre temas
que interesen. El consenso debe ser para formular propuestas para incluir en la agenda. No se debe
forzar el consenso para adoptar acuerdos. Estos deben caer por su propio peso cuando haya
transcurrido el tiempo emocional apropiado.

Los dialogantes escuchan y hablan entre sí de la manera más sencilla y sincera e incluyen los
aportes que se traslucen en sus propias respuestas. Se trata de ajustar y reajustar no solo las ideas de
la otra parte, sino nuestras propias ideas. Es importante conocer la situación emocional de los
actores. Las personas tienen complejos, frustraciones y traumas.

Además tienen ideas, creencias y supersticiones, y responden a sus sentimientos, sensaciones y

pasiones. También pueden sufrir desajustes emocionales y desequilibrios psicológicos, al extremo de
tener un trastorno de la personalidad con rasgos psicopáticos. No se puede descartar el fanatismo
tanto de un lado como del otro. Por eso se debe hacer un autoexamen. Se debe escuchar con los
ojos bien abiertos y la mente reflexiva.

El lenguaje debe ser tranquilo para permitir que las emociones se confundan como en una
reunión fraternal. Los dialogantes deben ofrecer opciones que sirvan para redefinir el problema y
proponer soluciones Pueden expresar visiones opuestas porque lo hacen con otro enfoque, que
puede responder a sus necesidades, deseos y aspiraciones. Los dialogantes expresan sus propias
dudas con libertad, confiados en que no habrá ataques ni burlas.

Al respecto, el presidente regional, declaró que “ha sido una reunión muy fructífera, (…) para
los hermanos el campo, dirigentes, porque han sido escuchados”. Destacó la presencia de los
facilitadotes, que “comienzan a recuperar la confianza de nuestros campesinos, que desean ser
escuchados, que tienen sed de pan y de justicia”. Santos pidió que llevaran al presidente Humala las
opiniones de los ronderos, quechuahablantes, hermanos de todas las religiones, delegados, alcaldes
distritales y provinciales.

Parece que el diálogo inicia una nueva etapa para Cajamarca. En ese sentido, el presidente
Humala expresó su confianza en la labor de Garatea y Cabrejos como facilitadores del diálogo
sobre el proyecto Conga. “Yo creo que no hay que apresurarlos, estamos dejando las cosas a los
facilitadores, dejemos que hagan su trabajo”, dijo el jefe de Estado peruano.

De otro lado, enfatizó que “ya no hay confianza ni en el presidente, ni en el Estado, ni en las
autoridades regionales o provinciales. Hoy pido que retomemos un pacto de confianza”, Reclamó
una nueva oportunidad para hacerse “confiable”. “Quiero que me abran el corazón para poder
demostrar que somos diferentes”, dijo. El tiempo emocional hace que esta apelación refuerce las
gestiones de los facilitadores y del mediador del conflicto social de Conga. Un desayuno realmente
decisivo para ambas partes.

D. César Sánchez Olivencia

Licenciado en administración pública, Maestría en gerencia pública y Periodista
Egresado de derecho y ciencia política
Especialista en proyectos de inversión pública, contrataciones del Estado, Mype y conflictos sociales
Docente universitario, Autor de 7 libros
elcapitanpensando@hotmail.com
Artículo
VOLUNTAD
DEBIDAMENTE
INFORMADA.
POR DABAT  ADOLFO
Qué ocurriría si los abogados fueran pacificadores,
Solucionarán problemas y resolvieran conflictos?              
Marty Price
Abstract: En la audiencia de conciliación
no se medió por decisión de una de las partes.
La parte plural del requerimiento no estuvo
presente en la audiencia, y pide reapertura de
la mediación por no participar del
procedimiento ni estar debidamente informada
sobre las decisiones adoptadas por su
representante. En la nueva audiencia hallan
respuesta satisfactoria a su requerimiento.-
Presentación: El tema de esta mediación,
efectuada en algún lugar de la Pampa
Argentina,  fue la reparación de daños y
perjuicios derivados de un accidente de tránsito
en el cual falleció el padre de las reclamantes  citación  de todas las partes, incluyendo el
Silvia, Alejandra, Claudia y Graciela. El hecho
se produjo el día 1 de setiembre de 2004 , en la
zona rural de una localidad de la pampa
húmeda, cuando un transporte colectivo
embiste a la víctima que se  conducía en una
motocicleta, en un cruce de calles.
La mediación:  el centro designa a la
mediadora Mariana, y a la audiencia
concurren las cuatro hermanas con patrocinio
letrado, y el representante legal de la
aseguradora con instrucciones de no mediar, y
sin más se da por terminada la mediación.
La reapertura: tiempo después, las
hermanas concurren al estudio a la consulta,
refiriendo que no hubo acuerdo en el
procedimiento anterior, no obstante reiteran la
realización de una nueva mediación, en razón
de que no encontraron satisfacción en relación
al procedimiento y al contenido de la
mediación, no tuvieron ni se concretó ninguna
participación de ellas en la audiencia, ni en la
decisión final que se adoptó, y finalmente que
no habían tenido ninguna información sobre
todas las circunstancias de la mediación.
Venían con una carga emocional y sentida, en
relación a lo que significaba para ellas su padre,
que vivía en casa de una de ellas, que tenían
una relación paterno-filial desde chicas de gran
compañerismo y amor, todas tenían varios
hijos, una de ellas estaba embarazada. Todas se
encuentran muy afectadas, con la muerte de su
padre,  deseaban una reparación,  dando
mayor  importancia    a un desagravio moral,
querían honrar su memoria,  más que la
indemnización patrimonial.
Con estos fundamentos, considerando que la
mediación es un procedimiento esencialmente
fundado en la voluntad de las partes, en la
participación de las mismas en la toma de
decisiones conjuntas, y también, en esa
voluntad debidamente informada,  pedimos
chofer del micro-ómnibus.
En mediación, arribar o no, a una solución
acordada debe ser expresión de la voluntad
debidamente informada (STANDARS OF
PRACTICLE FOR FAMILY MEDIATION,
Academy of Family mediators, U.S.A., page
67).
La nueva audiencia: atento los motivos
expuestos,  con conformidad de la mediadora,
se dispone la reapertura del caso,  se fija nueva
audiencia , con citación de todas las partes. La
aseguradora mantiene su posición anterior de Mediación,Universidad de San Francisco, Ca,
no mediar.  Comparece el chofer. Le fue U.S.A). Debe explicarse así, este punto,   como
concedida la palabra a las requirentes que “ aquellas percepciones  que tienen y sienten las
enfrentadas”al chofer pedían explicaciones de requirentes. Sin perjuicio de aceptar una
lo sucedido, en un escenario cargado de realidad que las impactó fuertemente,  tuvieron 
emotividad las hermanas pudieron expresar contención y atención psicológica.  
como podían sus reclamos, tenían enfrente,
cara a cara, a quién conducía el vehículo que Si bien debe aceptarse la dimensión de la
embistiera a su padre, el chofer a su turno,  pérdida, que trae como resultado esa
manifestó que aún hoy sufría las consecuencias sobreestimación del daño, y  la búsqueda de
del hecho, para luego solicitar retirarse de la una reparación moral, deben ubicarse en
sala.  En el ínterin, había recaído t é r m i n o s r a c i o n a l e s . Ta r e a q u e
sobreseimiento en la causa penal. incumbe esencialmente al psicólogo.
En definitiva, los actores principales en el
Tampoco es tarea ajena al mediador, descubrir
caso, las hijas de la víctima fatal del accidente,
y contrarrestar estas distorsiones perceptivas 
y el chofer que conducía el vehículo, han
de los participantes en la mediación. Claro
cerrado de alguna manera –entendemos-,  el
está,  su tarea será más eficaz si las partes
conflicto en que se encontraban. La mediación
involucradas llegan a mediación con un
ha cumplido sus fines, la participación, la
informe ya producido, y conocido por el
comunicación,  el diálogo cara a cara, la
mediador. Elementos con los que puede valerse
oportunidad de las partes de expresar
de existir un equipo interdisciplinario en
directamente sus sentimientos, y destaca la
mediación, que se da cuando hay posibilidad
importancia de la debida información, la
de contar con una organización integral, que
pacificación de la comunidad y de las personas.
constituya un cuerpo interdisciplinario
plenamente estructurado en mediación.-
Los aspectos  psicológicos:  uno de los
aspectos de necesaria resolución en el caso, era
Del rol de las partes y el mediador:  
el relativo a las consecuencias sufridas por los
finalmente, y en orden, al caso tratado, del cual
actores en el hecho,  que se  produjeron en las
se derivan bastantes vertientes para la clínica,
hijas de la víctima fatal,  como también,  en el
nos referimos a los roles, a sus incumbencias, 
chofer del ómnibus embistente.  No obstante el
tanto de las partes como del
tiempo afectaron de manera diferenciada su
mediador.  También se lee en el trabajo  de la
personalidad. El impacto produjo un
Academia de Mediadores Familiares,  “el
comportamiento distinto frente a la magnitud
mediador y quienes participan de un proceso
de la pérdida en un caso, para unas, y haber
de mediación deben estar de acuerdo sobre los
sido el causante no querido de esa pérdida, en
deberes y responsabilidades que cada uno
el otro.                                                                   
acepta en el proceso”  (STANDARDS OF
PRACTICE FOR FAMILY MEDIATORS,
Para las hermanas, se produce una distorsión
page 68).
perceptiva, denominada “ley de la
perspectiva”,  que se traduce como hacer
Es conveniente, a este respecto se realice una
aparecer o parecer las cosas más cercanas a
reunión preliminar entre abogados de parte y
nosotros mismos como más grandes, y
el mediador, a fin de establecer las pautas sobre
moralmente superiores,  más importantes 
las que versará el proceso de mediación,  en la
desde cualquier punto de vista (ROSENBERG
que se formule la agenda de mediación, a fin
Jo s h u a D. , L a p s i c o l o g í a e n
de que todos conozcan los elementos con que
se cuenta para conducirse eficazmente en la
concreción de un acuerdo satisfactorio,  y
debidamente informado.
Aspecto este último [que motivara el pedido de
reapertura de la mediación, y en consecuencia,
la revisión del caso] la debida información.
Otra vez, recurrimos al interesante informe 
citado, donde se lee “la responsabilidad
primaria en la resolución de la disputa
permanece en las partes. La obligación del
mediador consiste en asistirlas para alcanzar un
acuerdo que sea expresión de su voluntad
debidamente informada”, pág. 67.
Se destaca reiteradamente la importancia de la
vo l u n t a d d e b i d a m e n t e i n fo r m a d a e n
mediación.
Tarea que, primariamente corresponde al
mediador, pero también al abogado de parte. 
Y cuando como en el caso, el letrado también
es mediador,  constituirá un aliado,  un
colaborador eficaz en esa tarea,  pero también
puede resultar un  “árbitro asistente”, en el
sentido de la nueva tarea del lineman en el
fútbol, que le “marcará” el terreno.-
de la mediación, con consulta sobre si hubo
información s u fi c i e n t e ,  
sobre puntualidad de la reunión, solución al
conflicto, desempeño del mediador, y demás
circunstancias de la mediación, como
conformidad con el servicio, forma de
atención, etc.,  es de gran eficacia en la
evaluación de resultados.-    
                                                                        
Podemos concluir en que, la tarea del
mediador debe ceñirse, aún dentro de la
informalidad del procedimiento, a la utilización
de las herramientas que brindan la mediación
y otras disciplinas para llevar la conducción del
proceso de modo que permita arribar a un
acuerdo que sea la expresión de la voluntad
debidamente informada de las partes, y que
todos encuentren satisfactorios sus resultados.
Con ello,  habrá cumplido adecuadamente los
fundamentos que la sustentan.-
D. Dabat Adolfo
Abogado- mediador
Tucumàn 645 2do. Piso
GENERAL ROCA (RN)
Argentina
estudiodabat@gmail.com

E l re s u l t a d o s a t i s f a c t o r i o e n
mediación: es un objetivo deseable.
Decíamos antes de ahora, el mediador
“procura que las partes directamente lleguen a
un acuerdo que, logrado por ellas mismas,
consensualmente, ha de ser a la postre
decididamente satisfactorio y cumplido”.

Debe ser un objetivo lograr un alto grado de

satisfacción en, y con el procedimiento ,  aún,
no concretado un acuerdo. En el caso, no se
había logrado en la primera etapa de la
mediación, que recién llegó en alguna medida, 
al cabo de la reapertura.

En relación al tema, la realización de una

encuesta de satisfacción relativa a los resultados
Mediación policial,
otra forma de ser y
hacer policía
P OR T ERESA M ARÍA DEL V AL (*) D ERECHOS
RESERVADOS NRO 5013982
Algunos de los principios policiales de gran
acierto, atribuidos a los discursos de Robert
Peel([1]), y que hacen a la razón de ser de la
mediación policial, serían éstos: a) la misión
principal por la que existe la policía es prevenir
el crimen y el desorden.- De esto se trata, de
prevenir, no actuar después de cometido el
hecho. Los ejemplos de mediación policial que
constan mas abajo, demuestran que los policías
mediadores actúan generalmente antes,
evitando resultados perjudiciales para las
personas y la comunidad.- b) la prueba de la
efectividad de la policía está en la ausencia de
crimen y desorden.- Para lo cual la mediación
policial, es un buen catalizador para lograr
estos objetivos.- c) El grado de colaboración del
público disminuye proporcionalmente la
necesidad del uso de la fuerza.- Enseñar a
mediar, es imponer una nueva cultura en la
comunidad para lograr una convivencia
pacífica, donde impere el diálogo y la razón.- d)
La policía, en todo momento, debe mantener
una relación con el público que haga realidad
la tradición de que la policía es la ciudadanía y
el ciudadano es el policía.- Se trata de crear
una policía proactiva, no reactiva, la que
mediante mediación policial lleve a cabo una
tarea altamente preventiva conjuntamente con
la colaboración de la ciudadanía.-
En España en algunas regiones están
implementando la mediación policial con muy
buenos resultados. Algunos ejemplos:
I - POLICIA DE VILA REAL - Castellón -
España Un ejemplo de policía inteligente, es
la técnica que utiliza la Policía local de Vila
Real, cuyo lema es: "más cerca de ti"( [2] )
Fueron los primeros en España en introducir el
concepto de mediación en el quehacer
policial.- La unidad de mediación que coordina
la inspectora Rosa Ana Gallardo Campos,
comenzó en el año 2004, como una iniciativa
progresista y pionera. Actualmente, el equipo a
su cargo está integrado por quince personas,
que se ocupan de las áreas de mediación:
comunitaria, problemas de barrio, conflictos
rurales y escolares.- ESTADISTICAS: Los
índices de mediaciones positivas con acuerdo y
cumplimiento del mismo superan el 90%.- El
SERVICIO DE MEDIACION POLICIAL
tiene un carácter preventivo, ya que trata de
ayudar a las personas a resolver de la mejor
manera posible y más rápida situaciones de
conflictos que pueden surgir en la convivencia
diaria, para evitar que éstos acaben en largos y
penosos procesos penales los que terminan
rompiendo las relaciones propias de una
normal convivencia.- Es una Policía moderna
que intenta dejar de ser una policía coercitiva,
para ser una policía participativa al servicio de
la ciudadanía, cuyo objetivo es la prevención
que se lleva a cabo mediante la mediación
policial, con lo que se reduce el índice de
violencia y baja la comisión delictiva.- El
servicio prestado es totalmente gratuito, para
que pueda estar al alcance de todos. Se lleva a
cabo a través de las Secciones de Barrio y
Rural, con un alto porcentaje de satisfacción de
los vecinos.- Llevan dos fichas protocolares, una
es la ficha operativa para el agente policial en
la cual consta de dónde surge el conocimiento
que tiene el policía del conflicto entre los
particulares, y la otra es la ficha del
procedimiento.- La mediación se inicia siempre
por pedido de parte "reclamante". La parte
interesada puede solicitarla en distintas
oportunidades, por ejemplo, puede haber una
intervención de una patrulla que constata que
hay un "conflicto detrás del conflicto" y
entonces les dan unas tarjetas para que evalúen
la concurrencia al servicio de mediación
policial. En otras oportunidades la parte
concurre al servicio policial de 24 hs., ahí se
detecta el problema y la parte es invitada para
optar, si lo desea, por la mediación, o bien, el
reclamante efectúa un llamado telefónico a la
Sala operativa- En la ficha operativa policial se
deja constancia si la reclamación planteada es
susceptible de mediación o no, si procede la
mediación o si la misma no es procedente. En
caso de no proceder se deja constancia del
motivo , por ejemplo, por ser un conflicto
judicializado o un conflicto ya mediado.- En
caso de que el reclamante acepte la mediación
se determina qué unidad lo atenderá (Unidad
de Barrio o Rural) Efectuado el pedido en el
Servicio de Mediación Policial,
cumplimentando la solicitud respectiva y
valorado por la inspectora a cargo la
p ro c e d e n c i a d e l m i s m o, s e i n i c i a e l
procedimiento de acuerdo al respectivo
protocolo.- En la ficha operativa consta los
datos del reclamante, se contacta al reclamado
mediante el envío de una carta informándole
acerca de la voluntad del reclamante de
recurrir al Servicio para que con colaboración
de la Policía local puedan intervenir como
mediadores con imparcialidad, neutralidad y
confidencialidad en toda la gestión que
constituye un procedimiento sencillo basado en
el respeto mutuo, cuyo objetivo es mejorar y
encontrar una solución dialogada y
voluntariamente aceptada por ambos. En caso
de aceptar la mediación policial, se informa al
reclamado los medios de comunicación para
hacer saber su voluntad.- De acuerdo al
protocolo de procedimiento, si se acepta la
mediación por ambas partes, comienzan las
respectivas sesiones de mediación, dejándose
constancia en acta si hubo acuerdo o si no se
arribó al mismo. Después de un mes de
efectuado el servicio de mediación, harán un
seguimiento para determinar el cumplimiento
del acuerdo, como el nivel de satisfacción del
servicio prestado.- La carta de servicios de la
Policía local de Vila Real, es un informe
público a los ciudadanos acerca de los servicios
que gestiona y de los compromisos de su
prestación. Es un instrumento idóneo para
actualizar el ejercicio de los derechos de la
ciudadanía.- Por ejemplo, en el caso del
Servicio de Mediación se comprometen a
cumplir las pautas que constan en la estadística
siguiente, bajo la palabra compromiso.- El
primer año de vida de la Carta de Servicios de
Mediación -año 2011- dio los siguientes
resultados:
COMPROMISO asumido por la Policía
RESULTADOS
•En 15 días estudio del Procedimiento de
iniciación 100%
•En un mes, resolución de expediente para su
trámite ejecutivo 100%
•En el supuesto de que el caso no sea causa de
mediación se remitirá a los estamentos que
legalmente estén establecidos para el caso
concreto 100 %
•Finalización de las fases de Mediación al mes
de la resolución del expediente de aceptación
del caso 82,14%
•Verificación de los acuerdos firmados por las
partes 100 %
•Formación continuada de los Agentes
integrantes del Grupo de Mediación Policial 30
horas por policía.
Los policías de las Secciones de Barrio y Rural
tienen un perfil de policía uniformado, que
recorre la calle y el territorio municipal, que da
información a los vecinos y agricultores, que
atiende a la comunidad, ayudando a transmitir
y tramitar las deficiencias y denuncias,
acercándose al ciudadano, asesorándoles sobre
sus inquietudes ciudadanas. Esta policía
conjuntamente con el Servicio de Mediación,
están trabajando con otra forma más eficaz y
pacifica de "hacer policía".-
Se intenta pasar de un régimen social basado
en sanciones y prohibiciones a un régimen de
convivencia, con respeto de la leyes, pero
utilizando el diálogo y la razón para facilitar la
vida social.-
CONCLUSIONES CONGRESO
MEDIACION POLICIAL: El 20 de marzo
del 2012, se llevó cabo en Vila Real, el II
Congreso Nacional de Mediación Policial, el
mismo en breve síntesis concluyó: 1- que la
mediación es una herramienta fundamental
para el trabajo policial. Pero por las mismas
características y especificidades de la función
policial, hay que ir hacia un modelo propio de
Mediación de la Policía , y llamarlo así:
Mediación Policial, como un concepto con
discurso propio.- 2- Por ello, la formación de
los policías locales tiene que ser repensada,
dado que la "caja de herramientas" de los
policías tiene que ser más grande en cuanto a
habilidades sociales, ya que la labor policial es
básicamente relacionarse de forma adecuada
con la ciudadanía.- 3- La función policial no
termina "haciendo cumplir la ley", lo más
importante hoy día es garantizar la seguridad.
Un programa policial de mediación policial es
altamente contributivo a tal fin.- 4- Hay
personas que por problemas culturales y / o
errores generan un conflicto que no saben
cómo manejarlo, a estas personas hay que
darles la oportunidad de informarles mediante
un programa de mediación para que puedan
vivir en armonía con sus vecinos.- 5- La
mediación policial tiene una función
fundamental que es la preventiva, lo que se
pretende es intervenir en conductas que, de
persistir, podrían derivar en ilícitos y en
auténticos problemas de seguridad.- 6- La gran
diversidad de conflictos requiere por su
complejidad algo más que la simple
intervención de un policía de patrulla, hay que
crear dentro de los Cuerpos de Policía Local
"Unidades de Mediación Policial"
II - POLICIA DE ALGORFA- Alicante-
España
Desde la policía local de Algorfa se puso en
marcha una "Unidad de Mediación ciudadana
ante conflictos", la que se suma a las unidades
de mediación existentes: Unidad de medio
ambiente, Unidad de Violencia doméstica y del
menor y la de Concientización en Seguridad
Vial.( [3] ) Esta nueva unidad responde a una
necesidad detectada en la ciudadanía, según
dichos del Jefe de Seguridad Vial Pedro Javier
Bertomeu Garcia( [4] ) , con objeto de que si
las situaciones conflictivas no se resuelven en la
primera intervención policial, puedan ser
resueltas en la dependencia policial. Para lo
cual se cita a las partes con objeto de que si es
su voluntad concurran a la Comisaría , donde
los miembros especializados les informarán
propuestas de soluciones posibles. Si se llega a
un acuerdo se asienta por escrito, el que debe
ser firmado por las partes y el policía
interviniente. En caso de no haber acuerdo, las
partes son asesoradas respecto de la vía legal o
administrativa que en su caso correspondiese.-
Es decir, que en esta oportunidad los
interesados no autocomponen el acuerdo
mediante la facilitación de un mediador. Ya
que en este caso el mediador-conciliador,
propone las fórmulas de acuerdo y las partes
pueden aceptarlas, o no, o bien modificarlas.
Pero no son ellas, las que proponen las
condiciones del acuerdo.( [5] ) En los meses de
julio y agosto 2010, fecha de iniciación de la
unidad, los seis casos llevados a mediación
tuvieron resultados positivos. Los casos fueron
por : 1) vallado de parcelas, 2) plantación de un
árbol cerca de la línea divisoria, 3) molestias
nocturnas ocasionadas por animales ,
4)hallazgo de un bien en la vía pública y 5) uso
de piscinas comunitarias en horas
intempestivas –dos casos-.- Si bien con este
procedimiento se trata de evitar la instancia
administrativa y judicial, prevalece la intención
de hacer todo lo posible para que prime
armonía en la convivencia. Se intenta que
todos los participantes se sientan ganadores.-
Esta es una policía proactiva puesto que,
además por ejemplo, prepara jornadas para
que los niños se interesen por la seguridad vial,
los que concurren en gran número con sus
padres, quienes también toman interés en el
tema y aprenden que algunos conflictos los
pueden solucionar mediante mediación.- Las
principales características de la mediación
policial que se lleva a cabo por la Unidad de
Policía de Algorfa son: a) la participación
voluntaria de las partes, b) el acuerdo debe
satisfacer las necesidades de ambas partes, c ) es
un procedimiento informal aunque cuenta con
reglas de procedimiento mínimas, d) es
imparcial, e) la decisión no es , impuesta por la
autoridad policial, quien solo se limita a
proponer soluciones, f) es una gestión rápida,
económica y efectiva, y g) lo más importante es
que no hay ganador, ni perdedor, todos los
participantes se sienten ganadores, ya que el
acuerdo es establecido y asumido en forma
conjunta.- De los 19 miembros de esta Policía
local, dos son mediadores especializados,
quienes tienen principalmente en cuenta
restablecer la buena convivencia vecinal.-
III – PROYECTO SAFELAND – Policía
local de Valencia- España ( [6] ) El
Departamento de Proyectos Europeos de la
Policía Local de Valencia inició un trabajo en el
2004 con los siguientes objetivos: Intercambiar,
aprender y, en su caso, integrar buenas
prácticas implementadas exitosamente en otros
países europeos, esto es: a) detectar e implantar
nuevos sistemas de gestión policial.- b) generar
políticas de largo alcance que integren las
políticas de seguridad desarrolladas por la
Unión Europea.- c) prospectar nuevas
metodologías policiales.- d) mejorar la imagen
corporativa y prestigiar el trabajo de la Policial
Local de Valencia en diversos foros europeos.-
e) obtener financiación europea para acometer
ambiciosos proyectos de mejora, innovación y
desarrollo en relación con la Gestión y el
Servicio Policial.- f) dar una dimensión europea
e internacional a la Policia Local de Valencia
Consecuentemente la Policía local de Valencia
presentó varios proyectos, siendo seleccionado
el Proyecto SAFELAND para el análisis y
mejora de la Seguridad en barrios y colegios,
por el Programa de Prevención y Lucha contra
el Crimen de la Comisión Europea.-
R E U N I O N L A N Z A M I E N TO D E L
PROYECTO: el 24 de setiembre de 2009 tuvo
lugar en Tesalónica (Grecia) la reunión de
lanzamiento del proyecto SAFELAND. El
encuentro congregó a los 7 miembros del
Consorcio, éstos son: 1- Ayuntamiento de
Sykies (Tesalónica, Grecia) 2- Policia local de
Valencia (Valencia, España) 3- Fundación
Crime Prevention Foundation – IGA
(Pazardjik, Bulgaria) 4- Provincia de Rovigo
(Rovigo, Italia) 5- Inspección de Educación
Secundaria de Brasov (Brasov, Rusia) 6-
Ayuntamiento de Niepolomice (Niepolomice,
Polonia) 7- ONG Catch 22 –Crime Concern
8Swidon, R. Unido
OBJETIVOS y RESULTADOS DE LAS
REUNIONES CELEBRADAS POR EL
CONSORCIO: en el marco del Programa de
Prevención y lucha contra el Crimen y bajo
financiación Comunitaria, el consorcio se
propuso estudiar, a lo largo de los 30 meses de
proyecto, las zonas y barrios conflictivos de sus
ciudades (hot spots), detectando la tipología
delincuencial predominante y analizando los
problemas asociados. Interviniendo en el barrio
el sistema de mediación policial.-
SEGUNDA REUNION: el Consorcio
Safeland se volvió a reunir en Valencia el día
27 de abril del 2010, con objetivo de crear
zonas seguras (SAFELANDS) para lo cual se
crearon espacios para educación del
c i u d a d a n o, i n t e r v i n i e n d o m e d i a d o re s
policiales. Su objetivo también fue crear
centros escolares seguros (SAFESCHOOLS)
educando sobre acoso escolar, determinando
que en la Policía de Barrio de Valencia,
expertos en mediación trabajen en alguno de
los centros escolares municipales ubicados en
una zona conflictiva.-
TERCERA REUNION se llevó a cabo en
Rovigo (Italia), el 5 de octubre del 2010.En esta
reunión se analizaron los resultados obtenidos
en las diferentes encuestas de victimización, así
cada socio pudo verificar los niveles de
seguridad percibido por los ciudadanos de cada
uno de los barrios estudiados .En el caso de la
Policía Local de Valencia, se estudió los
resultados del barrio Nazaret, los cuales fueron
esperanzadores.-
CUARTA REUNIÓN: se llevó a cabo en
Niepolomice (Polonia), el 12 de abril del 2011,
en esta reunión la Policía local de Valencia ,
pudo determinar que debido a las acciones
técnicas desarrolladas- vigilancia de itinerarios
conflictivos, limpiezas varias, acciones
formativas, análisis de crime maps, etc., el
número de delitos denunciados en Nazaret
había descendido un 10% , del mismo modo
que las quejas y peticiones vecinales ante la
autoridad policial.-
ULTIMA REUNIÓN: el 19 de octubre del
2011 se celebró en Rumania, la última reunión
de coordinación del Proyecto SAFELAND. En
esta reunión se han podido publicar los
resultados de las últimas encuestas de
victimización y su comparativo con los
resultados de la encuesta previa a la
implementación de las medidas. Los resultados
pusieron de manifiesto que la sensación de
seguridad en el barrio había mejorado y que la
cifra negra de delitos no denunciados había
disminuido. Estos resultados validan por una
parte las actividades implementadas y, de otra,
confirman la correlación existente entre cifras
objetivas de delincuencia y cifras subjetivas de
sensación de seguridad.-
CONFERENCIA FINAL: los días 14 y 15 de
febrero del 2012, se celebró en la ciudad de
Thesasaloniku (Grecia) la conferencia final, la
que arrojó resultados satisfactorios en todos lo
barrios trabajados correspondientes a los países
que integraban el consorcio .Este proyecto
demostró que la mediación policial en los
barrios alcanza resultados muy satisfactorios,
constituye un método por el cual los
ciudadanos pueden resolver sus conflictos
mediante el diálogo, con el apoyo del agente
policial de su barrio.-
IV - POLICIA de REUS – Tarragona –
España ( [7] ) La mediación en el trabajo
policial de esta localidad lo introdujo la guardia
urbana Elena Cobler Martinez, quien sostiene
que así como los agentes de policía llevan una
pistola, una porra, etc., en el cinturón
metafóricamente hablando podría llevar la
mediación para utilizarla en los casos que sea
necesario. La tarea tradicional de la policía es
represiva, actúa cuando se consumó el delito,
no es preventiva. La mediación en cambio
actúa preventivamente.-
Además , conforme a dichos de Cobler
Martinez una inoportuna intervención policial
puede acelerar o hacer escalar el conflicto e
incluso incrementar o generar un grado de
violencia mayor al que había en un principio
que ni siquiera lo hubieran previsto o
imaginado los actores del conflicto. Por ello, en
muchos casos la mediación policial puede ser la
mejor opción. Se trata de bajar la violencia,
creando un canal de comunicación entre las
partes para que autocompongan una solución a
sus diferencias. Aquí, el policía trabaja
gestionando como facilitador una solución para
ambas partes, especialmente cuando el delito
no se cometió, o hay un problema de
convivencia, o alteración del orden público.-
LEY 4/2003 de ORDENACIÓN del
SISTEMA de SEGURIDAD PÚBLICA de
CATALUÑA, establece que las funciones de las
policías locales son: - Las de policía
comunitaria en los ámbitos de convivencia
vecinal y de los servicios públicos locales- Son
funciones compartidas entre la Policía de la
Generalitat , Mossos d-Squadra y las policías
locales: a) las de policía de la proximidad, el
auxilio y la asistencia a los ciudadanos, b) la
intervención en la resolución amistosa de
conflictos privados si son requeridos.- Por
tanto, Colbert Marinez concluye que la
mediación policial está prevista en esta
ordenanza, a fin de lograr una policía de
proximidad, preventiva y proactiva, trabajando
las causas y orígenes de estos conflictos,
preparada para bajar la tensión de las partes.-
UMIRC (unidad de mediación y resolución de
conflictos de la guardia urbana) , se creo en el
año 2007, es un servicio que trabaja para la
prevención de los conflictos sociales y la
seguridad ciudadana mediante la gestión
positiva del conflicto, la promoción del civismo,
y de la convivencia en todos los aspectos.- Esta
unidad está integrada por cinco técnicos
profesionales: tres policías, un mediador
especializado en mediación intercultural y un
educador social.- Los ámbitos donde tienen
distribuido el trabajo son: 1- conflictos
comunitarios (entre vecinos, comunidades, la
vía pública, etc.) 2- grupo de jóvenes 3-
conflictos escolares (tanto si se producen en el
interior del centro escolar como si son
ocasionados en la calle, pero que los
protagonistas son alumnos o ex alumnos del
centro) 4- conflictos individuales 5- conflictos
f a m i l i a res ( p a d res e h i j o s, c o n fl i c to s
generacionales, etc.) Esta policía lleva a cabo
un sistema de atención personalizada y directa,
donde la administración se acerca al ciudadano
para ayudarlo a resolver sus propios conflictos,
ofreciendo un lugar fijo (oficina) y si es posible,
desplazamiento de los profesionales al lugar del
conflicto.- Actualmente están trabajando con
cursos sobre mediación con todos los agentes
de la plantilla, para que todos adquieran las
técnicas y habilidades de esta gestión de
conflictos, que los prepare para que en el
momento que deban de intervenir sepan si
pueden derivar el hecho a las unidades de
mediación.-
P ROY E C TO " D e s e n v o l u p a ´ t p e r l a
convivencia", desde el año 2006 trabajan en
este proyecto, haciendo talleres en las escuelas e
institutos de Reus. El proyecto tiene como
finalidad fomentar la convivencia, y la
prevención de conductas violentas de los
menores, de los adolescentes, de los jóvenes y
de sus familias.- En los talleres bajo el lema "La
seguridad empieza por ti mismo", explican a
los niños y niñas que ellos son los que eligen
por medio de sus decisiones sus vidas.- Entre
otras enseñanzas aprenden que la calle es de
todos los ciudadanos y que todos tienen que
contribuir a su limpieza, por ejemplo, no
tirando papeles , utilizando los cestos
habilitados para tal fin. Con todo esto obtienen
respeto mutuo comunitario contribuyendo a
bajar los niveles de violencia social Con
respecto al trabajo del agente de policía,
señalan que es el individuo que pone una multa
a un coche mal estacionado, en protección del
derecho que tienen las demás personas de
pasar por el lugar.- También en sus talleres
tratan especialmente el tema de la violencia,
como los alcances y fines de la mediación
vecinal.- La mediación policial es de suma
utilidad, porque es en la seccional policial
donde las personas realizan una queja o una
denuncia sobre sus vecinos, sobre compañeros
de sus hijos, etc.etc., por decirlo de alguna
manera es "la boca de entrada de la noticia de
un conflicto" y por ello, es que la autoridad
policial debe tener herramientas a su alcance
para dirimir el conflicto con paz y armonía, a
fin de restablecer los vínculos perjudicados.-
ESTADÍSTICAS. El análisis efectuado desde
el año 2007 al 2011, muestra un aumento
notable de los hechos comunitarios, también
hubo un aumento significativo de los hechos
familiares llevados a mediación. Todo ello de
acuerdo al siguiente gráfico:[8]
Tipo de hechos tratados 2007 2008 2009 2010
2011
Comunitarios 9 88 79 122 172
Conflictos escolares 9 22 7 14 14
Familiares 0 1 0 11 24
Casos individuales 0 0 15 9 5
Grupo de jóvenes 1 10 19 8 8
Otros 0 2 0 0 0
Totales 19 123 120 164 223
Esta estadística demuestra que al pasar los años
y al ir conociendo la comunidad en forma más
profunda la tarea llevada a cabo mediante
mediación policial , recurre a ésta con más
frecuencia, esencialmente en los hechos
comunitarios y de familia.-
V – Ciudad Autónoma de Buenos Aires.-
Sería imposible terminar esta reseña sin
mencionar el proyecto pionero denominado
Surco, cuya creadora fue la Dra. María
Evangelina Trebollé. Consiste en un conjunto
de mediadores civiles que median, en asuntos
enviados por las distintas comisarías( [9]) y/o
vecinos del barrio.- Estrictamente no sería
mediación policial, de acuerdo a la definición
dada en el II Congreso de Mediación Policial,
celebrado en marzo del corriente año en Vila
Real, ya que los mediadores no son policías y
los protocolos que usan son distintos a los de
Surco.- Lo que no quita valor al proyecto
Surco, como vínculo de solución armoniosa de
conflictos originados en la comunidad.-
CONCLUSION FINAL. En definitiva, la
mediación policial persigue y logra el siguiente
fin: "Se trata de ser auténticos policías de
convivencia y ser garantes de esta convivencia y
de la percepción de seguridad por parte del
ciudadano" (Inspectora Rosa Ana Gallardo
Campos, Policía de Vila Real, España.)
Por Teresa María del Val
Abogada y mediadora (matricula Ministerio de Justicia de
la Nación ). Ex funcionaria judicial en los juzgados de
sentencia y fiscalías del crimen. Licensed Master
Practitioner of NeuroLenguistic-Programming ™,
certificada por Richard Blander en NHR. Especialista en
Mediación en materia penal y en mediación familiar.
Posgrados en Resolución Alternativa de Conflictos; en
Derecho y realidad, Derechos Humanos, Familia,
Infancia, y Adolescencia, todos por la Universidad de
Buenos Aires. Ex profesora de la Escuela de
Capacitación del Ministerio Público Fiscal y de otras
instituciones. Actualmente es profesora invitada en
distintas universidades nacionales y extranjeras y
centros de capacitación. Escribió Mediación en Materia
Penal, Editorial Universidad, segunda edición, en
elaboración la tercera edición. Coautora y coordinadora
de Gestión del conflicto penal, Editorial Astrea, año 2012.
Autora de varios artículos publicados en distintos medios
especializados en temas de mediación, criminología y
victimología, publicados en Argentina y en España.
Invitada a Congresos Nacionales e internacionales como
ponente, Burgos, Sevilla, Barcelona, etc. Dirigió talleres
tanto en Argentina, como en España
vdel@fibertel.com.ar
Notas a pie de página
El presente artículo fue editado por elDial.com - DC186E y
publicado el 15/05/2012. Copyright 2012 - elDial.com -
editorial albrematica - Tucumán 1440 (1050) - Ciudad
Autónoma de Buenos Aires – Argentina
[1] New Westminster Police Service: Sir
Robert Peel¨sNine Principles(Http://
www.nwpolica.org./peel.html)
[2] La información ha sido aportada en forma
oral y escrita por la inspectora Rosa Ana
Gallardo Campos, Vila Real.
[3] Fuente: http // www.torrevieja.com
[4] Fuente idem cita precedente
[5] Para ampliar diferencia entre mediación y
conciliación ver "Gestión del Conflicto Penal",
coordinadora del Val, Teresa María, fs 139,
Editorial Astrea, año 2012.
[6] Informe brindado por la policial local..
[7] Información brindada por la guardia urbana
Elena Cobler Martinez, Reus, Tarragona.
 [8] Enviado por el ayuntamiento de Reus,
Guardia Urbana, atención de Cobler Martinez.
[9] Para mayor información ver "Mediación
Prevencional", María Evangelina Trebollé,
Edición de la República, año 2012.
 Agenda de Próximos Eventos
• VIII CONFERENCIA INTERNACIONAL FORO MUNDIAL DE MEDIACIÓN. VALENCIA,
18 AL 21 DE OCTUBRE DE 2012.

Información e inscripción: http://www.worldmediationforum.com

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Artículo
ETHOS
A P RO P Ó S I T O D E L A
MEDIACIÓN
POR ALFONSO FABREGAT ROSAS
En los cimientos del pensamiento
ético.
Existe un amplio abanico de teorías éticas
que tratan de describir y de explicar el
complejo fenómeno de la moralidad del ser
humano tomando muchas veces algunos
aspectos de esa complejidad y obviando otros:
éticas normativas y descriptivas, de móviles y
de fines, materiales y formales, deontológicas y
teleológicas, procedimentales y sustancialistas.
Como señala Adela Cortina1 la diversidad de
enfoques tienen su origen en la diversidad de
los métodos filosóficos empleados, siendo que
muchos de estos surgen como contraposición a
los anteriores, pero “al ser la guerra el padre de
todas las cosas, acaba por serlo también de la
paz, porque los antiguos contendientes
terminan por amistarse, al ver en sus rivales lo
que a ellos mismos les falta”2.
Este devenir histórico ha ido componiendo
el complejo mosaico del pensamiento ético, por
lo que para poder enriquecernos del mismo
tenemos que evitar el riesgo de olvidar las
posturas mantenidas por otros y, sobre todo, el
del unitelarismo dogmático de mantenernos
cerrados en una única postura. Cada
elaboración ética responde, en la mayor parte
de los casos, a situaciones históricas y culturales
concretas. Sin negar que podemos encontrar
diferencias notables entre las teorías éticas, el
éxito de unas sobre otras parece estar causado
más por la concordancia con los prejuicios
teóricos y los ideales de una época que por
razones directamente intelectuales. Esto
complica un poco más su adaptación al devenir
histórico, pero no por eso hay que anularlas o
despreciarlas, sino que la suma de ellas nos
ayuda a reconstruir y comprender la
complejidad moral. Ese camino nos permite
comprender mejor que la ética es el saber que
trata de orientarnos a realizar nuestra plenitud
de ser personas, lo que Etxebarría denomina el
“horizonte de plenitud”3, aunque esto conlleve una
seria oposición ya que ese horizonte contempla
al ser humano en su totalidad mientras que la
tendencia de nuestra sociedad es a fragmentar
la vida humana, rechazando su integridad (por
ejemplo no es difícil ver que la vida profesional
se tiende a reducir la actividad humana a mera
ganancia o producción, a los meros resultados).
Con la mirada puesta en ese “horizonte de
plenitud” sería deseable que la ética trate de
integrar su polo teleológico (que nos señala el
horizonte de la realización humana) y el
deontológico (que nos impone las normas que
debemos cumplir), aunque es cierto que
ambas posturas “han ido pasando de una
irreconciliable enemistad a una mutua adquisición de
caracteres valiosos”4. La diferencia entre ambas
posturas radica en el distinto modo de articular
los dos conceptos centrales de la moralidad: lo
bueno y lo correcto. La teleología comenzará
determinando en qué consiste el bien de los
seres humanos, para considerar después lo
correcto como la expresión máxima del bien.
La deontología, por su parte, se ocupará de
caracterizar lo correcto dejando el bien en un
segundo plano, considerándolo tan sólo como
aquello adecuado al deber. ¿Qué hacer ante tal
disyuntiva?
El debate y el planteamiento racional no es
nuevo y quizá la deseada integración es más
imperiosa que nunca, ya que las consecuencias
de una ciencia cada vez más universal nos pide
la reconstrucción de una ética intersubjetiva y
universal, lo que ha recibido el nombre de una
“ética global”. La aparición de las éticas
aplicadas apremia cada día más la necesidad
de encontrar esa ética global desde la que se
pueda dar respuesta a la magnitud de los
problemas que se plantean en los diversos
ámbitos de la vida humana, la bioética, la
economía, la política, las organizaciones, las
profesiones, etc. ¿Hablamos sólo de una ética
que sea capaz de orientar la búsqueda de
respuestas? ¿Nos limitamos a lo que Kant ya
afirmaba como la necesidad de encontrar una
brújula para orientarnos en el mundo moral?
Por fortuna el esfuerzo de encontrar ese
camino conjunto no está cerrado. Es
interesante la aportación que Juan Carlos
Siruana hace para encontrar los puntos de
encuentro entre las diferentes corrientes de
pensamiento ético. Centrándonos en la
vertiente de la ética aplicada, y siguiendo al
autor, podemos establecer los siguientes puntos
de contacto que después deben tener
importancia a la hora de desarrollar las líneas
éticas de cada profesión5:
• Desarrolla tus capacidades para ocupar el
lugar en la sociedad que te corresponde
(Platón): a través de la educación para servir a
tu sociedad del mejor modo posible, ocupando
el lugar que te corresponde. Si accedes a algún
cargo de gobierno, recuerda que tu principal
misión es educar a los ciudadanos en el
conocimiento de la verdad. La educación debe
ser trasmitida tanto a los hombres como a las
mujeres, empezando por los niños y las niñas.
Gobierna para el beneficio del pueblo, no para
el tuyo propio.
• Persigue el ideal de una sociedad justa
pero, mientras tanto, asegura el imperio de la
ley (Platón): colabora en la construcción de un
modelo ideal de sociedad, basada en la
verdadera justicia. Pero, mientras persigues el
ideal de una sociedad justa, no confíes en que
un líder carismático de tu tiempo sea capaz de
realizar por sí solo dicha sociedad, pues es rara
la existencia de dirigentes que se guíen por la
verdadera justicia; por eso, protégete frente a
los posibles abusos de tus gobernantes
exigiendo que las leyes reinen sobre todos,
también sobre ellos.
• Conviértete en una persona buena
realizando muchas veces actos buenos
(Aristóteles): desarrolla virtudes a lo largo de
toda tu vida, pues la bondad no se consigue en
un día, sino que es el fruto de una vida
virtuosa, de realizar muchas veces actos
buenos. Contribuye, mediante acciones
concretas, al bien de tu sociedad. Recuerda que
lo que es bueno para ella, también es bueno
para ti.
• Asume la responsabilidad de tus
decisiones, dejando que tu prudencia guíe a tu
valor y a tu templanza (Aristóteles): soporta las
contrariedades con templanza y afronta los
problemas con valor. Pero, para actuar de un
modo inteligente y sensato, trata de informarte
bien sobre los datos relevantes que envuelven
una decisión, y decide de modo prudente,
sabiendo que eres responsable de las decisiones
que tomas.
• Comparte la amistad de personas buenas
(Aristóteles). Si quieres conocer la verdadera
amistad, hazte amigo de personas buenas,
aprécialas por su bondad y devuélveles también
bondad en la misma medida. Recuerda que la
amistad necesita tiempo y trato para
desarrollarse, y que, por ello mismo, sólo se
pueden tener pocos buenos amigos.
• No temas a la muerte (Epicuro-Séneca):
no temas a la muerte, porque todo el bien y
todo el mal reside en las sensaciones, y
precisamente la muerte consiste en estar
privado de sensación. Además, estamos sujetos
a la obligación de soportar las condiciones de la
vida mortal y no perturbamos por lo que no
está en nuestro poder evitar.
• Vive con Fe, Esperanza y Caridad
(Agustín de Tagaste-Tomás de Aquino): es
decir, vive confiando en que hay un orden
universal que armoniza los acontecimientos
humanos y al que podemos aproximarnos con
nuestra razón. Ten esperanza en que los seres
humanos podremos construir un mundo futuro
donde reinará la verdadera felicidad -basada en
el amor-, y la verdadera paz, -basada en la
justicia-. Vive tu fe y tu esperanza amando a los
demás.
• Mantén el contrato social que fundó el
Estado (Hobbes): la paz y la seguridad, que
todos los seres humanos buscamos, se pueden
alcanzar solamente dentro de un Estado, con
las instituciones necesarias para dictar leyes y la
capacidad de hacerlas cumplir. Respeta, pues,
las instituciones del Estado, en la medida en
que puedas imaginar que tú habrías pactado su
existencia con el resto de ciudadanos, para el
bien de todos.
• Participa en la generación de las leyes de
tu Estado (Locke-Rousseau): pues tú formas
parte del soberano y tu voluntad no puede ser
sustituida por la de otros. Contribuye, con ello,
a generar un sistema legal que sea la expresión
de la voluntad general, orientado por la
libertad y la igualdad de los ciudadanos.
• Desarrolla el sentimiento de la simpatía
imparcial (Hume): desarrolla la capacidad de la
simpatía por el interés público -la simpatía
imparcial-, pues, de este modo, realizarás
acciones justas que obtendrán la aprobación
moral de los seres humanos a los que afecten
tus acciones.
• Obra guiándote por leyes universales,
tratando a la humanidad como fin y nunca sólo
como medio (Kant). Obra como si la máxima
de tu acción fuese a convertirse por tu voluntad
en una ley universal de la naturaleza. Obra de
tal modo que uses a la humanidad tanto en tu
persona como en la persona de cualquier otro
siempre a la vez como fin, nunca meramente
como medio. Actúa de tal modo que tu
voluntad pueda, por su máxima, considerarse a
sí misma a la vez como legisladora de un
universal reino de los fines.
• Contribuye a desarrollar un derecho
internacional justo (Kant). Contribuye, con tu
pensamiento y acciones, a desarrollar una
asociación completa de la especie humana bajo
leyes comunes y justas.
• Cumple el deber en conciencia, por la
intención y por sus consecuencias (Kant-
Hegel). Tienes que cumplir el deber moral, no
por presiones sociales para actuar en ese
sentido, sino por tu convicción, es decir, porque
consideres en conciencia que es lo correcto.
Pero, cuando actúes, ten en cuenta no sólo la
intención y la buena voluntad sino también el
resultado previsible. Tienes que optar por
aquella acción que te permita obtener las
mejores consecuencias.
• Trabaja para el bien de tu familia y de la
sociedad (Hegel). Apoya a los miembros de tu
familia percibiendo en ello una tendencia
natural basada en el amor. Luego, participa
también en la sociedad civil, donde al trabajar
para ti mismo y tu familia colaborarás con el
bien de toda la sociedad. En este proceso,
asegúrate de pertenecer a una corporación, es
decir, a un colectivo cuyos miembros se ganan
la vida realizando una actividad beneficiosa
para la sociedad; esto te dará reconocimiento
social y legitimidad.
• Desarrolla un Estado articulado para el
bien de todos sus miembros (Hegel).
Contribuye a desarrollar un Estado que persiga
el bien de todos sus miembros. Escucha las
opiniones de aquellos que realmente están más
formados en el uso de su razón, y forma
también tu razón para poder tomar parte en
las decisiones. Sométete en conciencia a las
leyes de dicho Estado en la medida en que sus
leyes sean cada vez más las leyes de la libertad,
es decir, sean expresión de la verdadera
voluntad de sus miembros.
• Aumenta la felicidad en el mundo de
manera desinteresada (Bentham-Mill).
Merecerás toda suerte de alabanzas si eres
capaz de sacrificar el goce personal de la vida,
cuando mediante tal renuncia contribuyas
meritoriamente al incremento de la suma de la
felicidad del mundo. Pero el sacrificio por sí
mismo no es un bien. Un sacrificio que no
incremente o tienda a incrementar la suma
total de la felicidad es inútil.
• No dañes a otros (Mill). Las reglas
morales que prohíben que unos causen daño a
otros son más vitales para el bienestar humano
que ninguna otra máxima. Es posible que una
persona no necesite jamás la ayuda de nadie,
pero siempre precisará que no le hagan daño.
El diálogo en su dimensión ética.
“Palabras y frases no son meros signos de cosas,
sino expresión de procesos, recuerdo y suscitación de los
mismos; hacen surgir algo que sólo con ellas y a través
de ellas existe. No en la elección arbitraria de signos,
sino en la expresión creadora de lenguaje está la cosa
misma presente. Esta cosa no es un objeto, un algo, sino
acto del espíritu, acción interior, experiencia
interiormente realizable, saber de lo envolvente y de la
trascendencia. Aquí se entrelaza el lenguaje y el
pensamiento, no se escinde la palabra (como signo) y la
cosa”.6
Antes de proseguir, haré el primer guiño a
la mediación deteniendo la reflexión sobre la
ética en el campo más cecano y vital para ella:
el diálogo. Cualquier procedimiento de
mediación, en el ámbito que éste se desarrolle,
tiene como marco fundamental e
irreemplazable el diálogo. Éste no es una
realidad sin más, o un simple método de
encuentro, de gestión o de resolución de
conflictos. Me atrevería a decir que es el pilar
fundamental sobre el que se asienta la
mediación y que sin el diálogo no hay
posibilidad de mediación. ¿Tiene el diálogo
alguna implicación ética?
El diálogo, y sus condiciones, han pasado a
adjetivar una de las teorías éticas más
importantes de nuestro tiempo: la ética
discursiva, o ética dialógica, o del diálogo o de
la argumentación, cuyos máximos
representantes son K. O. Apel y J. Habermas.
Para estos dos máximos representantes, sobre
todo para el primero, el lenguaje adquiere un
rango trascendental; así transforma lingüística
e intersubjetivamente la filosofía reflexiva
trascendental de K ant. El “nosotros
trascendental” posibilita el acuerdo
intersubjetivo por medio del diálogo, porque
toda argumentación racional o auténtico
diálogo presupone una comunidad de
comunicación. Los diálogos efectivos,
estratégicos, presuponen el diálogo más
fundamental: el encuentro. La posibilidad del
entendimiento queda asegurada desde que nos
confiamos al diálogo. En el diálogo, palabra
dirigida a otro (acto de habla), se manifiesta
una dimensión hermenéutica (entendimiento
mutuo) y ética (reconocimiento recíproco de los
interlocutores). “La palabra es lugar de encuentro de
tan diversas y tan altas instancias que el hombre no
puede dominarlas con el entendimiento, sino aceptarlas,
percibirlas (vernehmen) con la razón (Vernunft), en
actitud activo-receptiva. La palabra no es mera fórmula
manipulable por el entendimiento de modo arbitrario. Es
el vehículo viviente de un encuentro fundador de un
ámbito interaccional que supera el campo de acción
unilateral del sujeto que habla. Por ser lugar de
encuentro, la palabra dialógica desborda el campo
acotado de los sujetos dialogantes y se constituye en un
lugar abierto de trascendencia y, por ello, de
plenificación”7. Por tanto, el consenso al que
apunta el diálogo no es sólo fáctico, sino
consenso racional desde la perspectiva de la
situación ideal de habla (idea regulativa y
crítica frente a los diálogos sólo fácticos y
pragmáticos). De esta manera las éticas del
diálogo muestran, desde el reconocimiento del
diálogo, el carácter ético de la constitución
comunicativa del hombre, ser para el
encuentro.
Las características fundamentales de las
éticas dialógicas son las siguientes:
 • son éticas procedimentales (no tratan de los
contenidos de la moral, sino de la forma -
procedimientos- para establecer la validez
normativa);
• deontológicas, es decir, su pregunta central
recae sobre la corrección, la validez, esto es,
sobre lo justo más que sobre lo bueno -no
quiere decir que no se considere, pero no es lo
prioritario-;
• cognitivas, confían en la razón para
encontrar una justificación de la norma, más
allá de la simple aceptación emotiva; y, por
último,
• universalistas, en la más clara tradición
kantiana, pero el principio de universalidad
surge dialógicamente, no monológicamente. El
principio dialógico pasa, en definitiva, a
constituirse en principio moral.
Las críticas a la ética dialógica han sido
muchas: reducción de la moral al derecho, no
contemplar la posibilidad del disenso, limitar la
acción ética a la reciprocidad, falta de
aplicación a contextos concretos, unilateralidad
de lo coactivo, estrechez del concepto de razón
puesto en juego, etc... algunas de ellas ya
plenamente asumidas y superadas en la
actualidad.
En nuestro ámbito de la mediación sería
interesante rescatar desde el lenguaje el
programa de una fenomenología de la
intersubjetividad y de una dialógica yo-tú, y
ofrecer un fundamento trascendental a los
meros análisis lógico-lingüísticos propios de la
tradición analítica. De esta manera evitamos la
tendencia a la sociologización de lo
trascendental para intuir que la
comunicabilidad encuentra su propia base.
Pa r a s u b s a n a r e s t o n e c e s i t a m o s u n a
antropología dialógica (descriptiva), pues las
condiciones trascendentales son necesarias,
pero no suficientes. Este giro de la mentalidad
objetivista a la dialógica las podemos expresar
al sustituir los esquemas “sujeto-objeto”, “yo-
ello”, por el esquema “yo-tú”8.
De la ética fundamental a la ética
aplicada.
La ética general aborda los aspectos éticos
que son válidos para todos en todo momento.
Reflexiona sobre lo que es la ética y sobre lo
que se exige y recomienda siempre y en toda
circunstancia. Responde a la pregunta: ¿qué
debo hacer? ¿cómo debo de actuar para
alcanzar lo que se llama “una vida buena”?
Nos presenta una reflexión profunda sobre los
que pueden constituirse como valores
universales.
La ética aplicada trata de las actuaciones
puntuales que lleva a cabo cada persona en
situaciones concretas y constituye una de los
campos más prolíficos de la reflexión filosófica
contemporánea. Dado que aborda el actuar
humano, la ética aplicada trata de especificar
los criterios a los que hay que atenerse en el
ámbito particular de las actividades humanas.
De ahí su variedad y especialidad según ese
actuar: ética económica, ética política, ética de
la educación, ética sexual, ética de las
profesiones particulares. Si nos tomamos un
tiempo para consultar las páginas web que
existen sobre ética aplicada, veremos que la
podemos encontrar en cualquier carrera o
especialidad.
Es importante, por tanto, que intentemos
caracterizar el concepto de “ética aplicada”
que abarque los rasgos comunes a las diferentes
formas que adopta en función de sus múltiples
ámbitos de aplicación. Su actualidad y vigencia
radica en que surge como respuesta a la
novedad de los problemas morales que
presenta el nivel de desarrollo científico técnico
alcanzado, por la complejidad del proceso de
globalización en el que estamos inmersos y por
el dinamismo plural de la moralidad de la
sociedad que se desenvuelve en dicho
escenario. Es un método de racionalidad que
fundamenta la serie de condiciones
estructurales que se dan en los distintos
ámbitos del quehacer humano9 . Partiendo de
esa base, podemos caracterizarla por la
aportación que hace para regular las conductas
humanas que no ha considerado la “ética
tradicional”, entre otras la ecología, que regula
la relación del hombre con la naturaleza; la
convivencia social, que tiende a regular las
relaciones entre los distintos morales que
conviven en las actuales sociedades pluralistas y
multiculturales; o la bioética que entre otros
cuestionamientos plantea de forma abierta los
problemas que surgen sobre el origen y el fin de
la vida.
Dadas sus condiciones no es difícil concluir
que posee una clara vocación procedimental,
que más que fundamentos busca aportar
procedimientos para solucionar los conflictos
éticos y morales que surgen en el ámbito
particular. Sin embargo, toda ética aplicada (y
por lo tanto toda ética profesional) no puede
dejar de lado y obviar del nivel y de la
fundamentación de la ética general. Sobre
todo, porque el profesional no sólo está
poniendo en juego su conocimiento y su buen
quehacer como tal, sino que, sobre todo, está
poniendo en acto su ser ético, su desarrollo
íntimo y personal. Además para realizar el
juicio sobre la bondad o maldad de un trabajo
profesional, de lo que es obligatorio o de lo que
está prohibido en el desarrollo de una
actividad, tienen que existir unas razones
últimas que sólo nos las puede aportar la ética
general. De ahí que la ética profesional además
de ser procedimental debe ser abierta a la
fundamentación en la que se conjugue el
momento aristotélico de aspirar a la vida
buena, el momento kantiano del deber y la
pretensión de universalidad caracterizada por
la prudencia. Se trataría de una ética que se
plantea tanto la fundamentación de los
principios como la aplicación de los mismos,
integra teleología, deontología y
responsabilidad. Por lo tanto una ética aplicada
no implica la intención de remplazar la ética
construida a lo largo de los siglos, sino que
reconoce en ella sus fundamentos y tiende a
completarla en la solución de los problemas
inéditos de nuestro devenir.
El ETHOS profesional.
“La ethos de una profesión es, por tanto, un
entrelazado de sentimiento, valor, y pensamiento que
capta su carácter, expresa su genio, y manifiesta su
espíritu. Una ethos implica soportar creencias
fundamentales y sólidas, ambas resistentes a las
particularidades del cambio de paradigmas. Las
metáforas revelan sus funciones. Una ethos sirve como
piedra de toque contra la cual, las personas descubren
sus acciones para conocer su valor. Como voz interior, la
ethos, inspira a los individuos y los llama de nuevo,
cuando están extraviados demasiado lejos. Una ethos
establece el curso de una profesión en tiempos de
constante cambio. Es un argumento desnudo de huesos
en un cuento heroico. Norma atrevida, elevada en una
multitud demoledora, una ethos dirige a aquellos con
diversos roles y puntos de vista a decir: "!Eso es!". El
tirón de una ethos es ininterrumpido, a veces en las
corrientes de resaca menos ideal; su confluencia de
sentimiento, valor y pensamiento y los rendimientos
rectores de creencias, tanto vital como duradera. De esta
manera, la ethos de la profesión podría ser vista como
una guía para la identidad profesional”10.
Salta a la vista que del estudio del hecho
del ethos profesional históricamente se han
dedicado más los sociólogos que los filósofos11.
Además, podemos comprobar que en el campo
de las profesiones aplicadas la investigación del
ethos se ha encaminado más hacía el terreno
de los códigos deontológicos que hacía el
planteamiento del ethos como algo propio de
aquellos que obtienen la formación académica
y la titulación exigida para ejercer dichas
profesiones.
Nos puede servir de ayuda hacernos una
sencilla pregunta: el código deontológico ¿será
válido para el pleno desarrollo de la
“profesión”? La respuesta es sencillamente no.
Si la respuesta fuera afirmativa chocaría de
lleno con la búsqueda de la plenitud del ser. El
cumplimiento de la vocación del ser a ser “sí
mismo” hace necesaria una unidad entre el
querer, el saber y el hacer, tarea que el simple
código no logra. El mundo profesional en
general tiende a reducir la plenitud del ser a
conseguir el pleno desarrollo en una única de
sus dimensiones y plantea el sentido de ser
persona desde una única perspectiva. Es así
como el mundo profesional tiende a plantear la
eficacia productiva como la finalidad última
buscada, el referente teleológico del hacer
humano, y desde ahí se suscita el posterior
desarrollo de cualquier reflexión que le rodee
sea técnica, ética o de formación. Para evitar
caer en ese escollo, es necesario que nos
planteemos en profundidad una reflexión sobre
el significado del ethos profesional.
Podemos definir el ethos profesional como
el compromiso personal de cumplir con las
normas éticas mínimas que se exigen para que
un profesional sea considerado idóneo para
ejercer como tal. Por tanto una profesión no
solo puede definirse por sus conocimientos y
técnica, sino que también hay que definirla por
su ética y por los valores que conlleva. En la
medida que la ética ocupe un lugar esencial a
l a h o r a d e d e fi n i r l a p ro f e s i ó n , l o s
conocimientos y la tecnología propios de cada
profesión dejarán de ser fines en si mismos para
servir a los fines de la ética:
“Las cuestiones éticas impregnan la vida
profesional, del mismo modo que todos los aspectos del
desarrollo profesional implican a la ética. Ésta
interviene en el ingreso en una profesión (en general, por
medio de la admisión en una escuela profesional), al
menos implícitamente en la selección de los candidatos
que hayan demostrado una ética de trabajo con sus
logros universitarios, y quizás también explícitamente en
los intentos de seleccionar a candidatos de calidad que
reflejen los valores de la profesión. La ética puede formar
parte de la educación por su inclusión formal en un plan
de estudios y, más implícitamente, en el proceso de
asimilación por parte del candidato de las normas de la
profesión. Finalmente, la ética participa en la disciplina
profesional, pudiendo condicionar incluso la expulsión de
aquellos miembros de la profesión que hayan
transgredido el código de ética”.12
Podemos decir que el ethos profesional
resulta de la combinación de:
a) la estructura ontológica de la dimensión
moral del ser humano, es decir, aquello que es
el elemento sustancial del ethos de la persona;
b) los valores reflejados en códigos que, una
vez hechos propios, constituyen un elemento
definitorio de la profesión;
c) la autorregulación, que harán coherentes
el comportamiento individual con la moralidad
trasmitida y la reflexión ética;
d) y la autorrealización del ser al que se
tiende.
El primer y el último elemento mencionado
hacen referencia a la dimensión profunda de la
moralidad, para evitar la distancia que en
muchas ocasiones encontramos entre “papel e
individuo”. Como McIntyre apunta con la
toma de conciencia de su propio ethos el
profesional evita ser tal sólo por el hecho de
vivir el “papel de...” , el “rol de...” y simplemente
represente los requisitos propios de ese
personaje impuestos desde fuera por la
colectividad profesional o por la sociedad,
haciéndolo “desde la forma en que los demás
contemplan y usan esos personajes para entenderse y
valorarse a sí mismos”.13

Un rápido recorrido por el desarrollo
histórico de las profesiones nos ayudará a
valorar en su justa medida la importancia de la
toma de conciencia sobre el propio ethos. Salta
a la vista en un primer momento que la
cosmovisión de la sociedad premoderna hizo
que éstas fueran estructuradas de forma
jerárquica. El primer lugar lo ocupaba el orden
divino, donde el sacerdote se encargaba de
cuidar los asuntos divinos y el alma de los fieles.
En segundo término, y como manifestación de
ese orden divino, encontrábamos el orden
político, representado por los poderes y los
juristas. Finalmente, en tercer lugar,
encontrábamos el orden personal, cuyo
representante máximo era el médico
(recordemos, por ejemplo, el juramento
Hipocrático). En esos tres estamentos podemos
ver reflejadas las primeras profesiones. Aunque
socialmente estos tres estamentos tenían un
status especial, no será hasta la época moderna
que la valoración social las considere como
profesiones. El proceso de secularización de la
sociedad moderna se convierte en una era de
afirmación de la vida corriente, aceptando
nuevas profesiones “mundanas” desvinculadas
totalmente de la cosmovisión teocéntrica
anterior. La evolución de lo que hasta entonces
se habían considerado como oficios a las
actuales profesiones siguió una serie de pasos:
1. La transformación en una ocupación de
tiempo completo;
2. la aparición del primer centro de
formación, de la primera universidad en la que
se imparten los conocimientos de esa profesión;
3. la creación de una asociación profesional,
primero local y luego, nacional;
4. la creación de un sistema de titulación;
5. el desarrollo de un código formal de ética.
La profesión adquiere la dimensión de
actividad social, a la que se han atribuido desde
Max Weber un buen número de características,
de las que podemos destacar las siguientes:
• Es una actividad que presta un servicio
específico a la sociedad de una forma
institucionalizada. El servicio ha de ser
i n d i s p e n s a b l e p a r a l a p ro d u c c i ó n y
reproducción de la vida humana digna. Las
profesiones no sólo mantienen la vida o la
regulan, sino que buscan su pleno desarrollo.
• Se considera como una suerte de
vocación, lo cual no significa que alguien se
sienta llamado a ellas desde la infancia, sino
que cada profesión exreconoige contar con
unas aptitudes determinadas para su ejercicio y
con un peculiar interés por la meta que esa
actividad concreta persigue.
• El profesional, al ingresar en su profesión
se compromete a perseguir las metas de esa
actividad social, sean cuales fueren sus móviles
privados para incorporarse a ella14.
Como resultado de este proceso en el que el
ethos personal y profesional toma relevancia
para hacer de la profesión una actividad social,
es fundamental el peso que adquiere la
confiabilidad: “La confianza es la reciprocidad,
se establece entre uno mismo y el otro; es el
otro nombre de la libertad, y rechaza todo
poder sobre el otro, o del otro sobre uno
mismo”15, así pues una persona para ser digna
de confianza en el ámbito profesional debe ser
a la vez experto en el trabajo que desarrolla y
ético. Es decir, que para el conjunto de la
sociedad un profesional no muestra su valía
como tal tan solo en la adquisición y práctica
de unos conocimientos, sino que se le exige un
comportamiento concreto, en otras palabras
que tome conciencia de su ethos profesional
personal.
A la luz de esta realidad es momento de
reformular nuestra pregunta anterior: ¿serán
suficientes los códigos de ética par asegurar la
confiabilidad de la persona? La respuesta
vuelve a ser no. Que sea una respuesta negativa
no debe devaluar el peso y el papel de los
códigos. Al contrario pone más de manifiesto
que éstos nos dan unos necesarios patrones
éticos de comportamiento dentro de la
profesión. Sólo entonces es cuando los códigos
éticos profesionales dejan de ser meros
documentos administrativos o una simple
relación de reglas que nos permitan identificar
a un miembro de un grupo profesional y dejen
de lado a quienes realizan comportamientos
que los excluyan del mismo. El código servirá
además, para simbolizar los principios que
definen en sí mismo a un grupo profesional y
refleja los valores que éste representa. El papel
del profesional, es decir de la persona que
desempeña un trabajo concreto, es el de
personalizar la vivencia de esas normas y
valores. No quiere decir esto que reduzca a su
medida personal esas normas, sino que las viva
desde su ser persona.
En la visión tradicional de la profesión es
manifiesto que la ética, reflejada en los códigos,
juega un papel fundamental. Dichos códigos
ayudan al profesional a recordar las virtudes
que deben conducir sus acciones. Al hablar de
virtud nuestra mentalidad actual rechina y
ponemos bajo sospecha cualquier referencia a
ella, ya que nos habla de una ética basada en
las virtudes de corte aristotélico, muchas veces
confundidas con un planteamiento moralista
propio de las confesiones religiosas. Es posible
que sin percibirlo, tal y como indica Dyer16, en
la actualidad hemos sustituido la vivencia de la
“virtud”17 por el compromiso social de
“responsabilidad”. Definir responsabilidad es
abrir un abanico de posibilidades y de matices
ya que implica la relación de varios aspectos. Si
nos ceñimos a la definición dada en el
diccionario de la RAE, entendemos por
responsabilidad la obligación de reparar y
satisfacer, por sí o por otra persona, a
consecuencia de un delito, de una culpa o de
otra causa legal. En otra de sus acepciones
decimos que es el cargo u obligación moral que
resulta para alguien del posible yerro en cosa o
asunto determinado. Desde una perspectiva
moral podemos entender por responsabilidad
la virtud que nos lleva a asumir las
consecuencias de nuestros actos intencionados,
resultado de las decisiones que tomemos o
aceptemos; y también de nuestros actos no
intencionados, de tal modo que los demás
queden beneficiados lo más posible o, por lo
menos, no perjudicados; preocupándonos a la
vez de que las otras personas en quienes
pueden influir hagan lo mismo18. Desde una
visión profesional (que es la que nos interesa en
el presente artículo) los principios que rigen la
responsabilidad son: “reconocer y responder a las
propias inquietudes y las de los demás; mejorar sin
límites los rendimientos en el tiempo y los
recursos propios del cargo que se tiene;
informar oportunamente de las anomalías que
se generan de manera voluntaria o involuntaria
y planear en tiempo y forma las diferentes
acciones que conforman una actividad
general”19.
Desde esta dimensión de la
responsabilidad, la profesionalización del
trabajo conlleva un choque entre lo que se le
exige al profesional desde “la
administración”20: profesionales que cumplan
con lo estipulado y den los resultados
esperados, sean responsables (p.e. un mediador
debe atender a aquellos que pagan lo
estipulado, o un médico en un hospital debe
dar asistencia a un número de pacientes a la
hora para cubrir al mayor número posible); y lo
que la sociedad, en el caso de la mediación las
partes, esperan: que el profesional ponga en
práctica los más elevados ideales de la virtud
para alcanzar lo mejor para ellos. Como ya he
apuntado anteriormente la actual visión
reduccionista y tecnológica de la profesión nos
lleva a asumir el triunfo del concepto de la
«producción tecnológica» en todos los campos,
el imperio de lo útil y de los meros resultados.
Esta tendencia aporta peligros como la
fragmentación epistemológica, la
desorientación axiológica, la desintegración
social y la destrucción del sentido vital-
profesional21. Ante dicho planteamiento, que
empobrece la misma profesión, la reflexión
ética profesional busca conjugar
simultáneamente la vivencia de la virtud y la
responsabilidad como elementos constitutivos
del ser profesional. El final del siglo XX y la
entrada en el siglo XXI han puesto de
manifiesto esta necesidad propia de la época
pos-moderna, en el que los parámetros éticos
identificables ya no se dan por supuestos, pero
que sin embargo busca una vuelta a elementos
humanísticos en los que la persona deje de ser
un engranaje más dentro del sistema, para
lograr un encuentro interpersonal. Se trata de
reencontrar una dimensión humana en el
desarrollo de las profesiones, y más en concreto
en las asistenciales. Ceñirnos a un mero
planteamiento instrumental sería, a mi modo
de ver, volver a reducir al ser a su vertiente más
pobre. Centrando nuestra reflexión en la
necesidad de recuperar el ethos personal de la
profesión buscamos, sin lugar a dudas, un
modelo integral de intervención profesional,
reconociendo la realidad de una razón integral.
“Frente al "ethos burocrático" de quien se atiene al
mínimo legal pide el "ethos profesional" la excelencia,
porque su compromiso fundamental no es el que le liga a
la burocracia, sino a las personas concretas, a las
personas de carne y hueso, cuyo beneficio da sentido a
cualquier actividad e institución social. Es tiempo, pues,
no de despreciar la vida corriente, sino de introducir en
ella la aspiración a la excelencia”22. El profesional
deja de “trabajar de...” para “ser un...”.
El ETHOS de la mediación.
Cuando uno decide ser mediador puede
tener motivos muy diversos para hacerlo: desde
costearse una supervivencia digna, abrir su
abanico de posibilidades en la intervención
profesional diaria o ampliar su cartera de
clientes, desde cobrar una identidad social a
conseguir un cierto prestigio. Sin embargo lo
que debe tener claro es que al decidir ser
mediador debe asumir también la meta que le
da sentido. No puede justificar su elección
alegando que entró en esta aventura por ganar
dinero y no por hacer posible una convivencia
más justa entre las partes en conflicto.
“Los motivos -conviene recordarlo- sólo se convierten
en razones cuando concuerdan con las metas de la
profesión. Y no puede una comisión universitaria dar la
plaza a quien tiene menos méritos que otros alegando
que "es el de la casa", ni puede quien valora proyectos o
peticiones de beca poner notas bajas a quienes no son "de
los suyos". Los motivos individuales no son razones, no
se convierten en argumentos si no tienen por base las
exigencias de la meta profesional.
Cuando los motivos desplazan a las razones,
cuando la arbitrariedad impera sobre los argumentos
legítimos, se corrompe una profesión y deja de ofrecer los
bienes que sólo ella puede proporcionar y que son
indispensables para promover una vida humana digna.
Con lo cual pierde su auténtico sentido y su legitimidad
social.”23
Para que el mediador pueda concordar sus
motivos personales con la meta de la
mediación, para que encuentre el sentido de su
ethos profesional, lo primero que deberá
clarificar es de qué está hablando cuando se
refiere a ser mediador, ¿qué es mediar? ¿tiene
un ethos propio?. A lo largo de los últimos años
las aportaciones que se han dado para iluminar
la realidad de la mediación han sido muchas y
muy diversas. Sin lugar a dudas que el lenguaje
institucional de aquellos que han estado
focalizando la mediación ha ayudado a darle
matices y a enriquecerla. Lenguajes propios de
la terapia de familia, de la abogacía, del trabajo
o de la educación social han ido perfilando el
concepto de mediación que ha llegado hasta
nosotros en la actualidad. Como muchos
estudios han resaltado, en todas las definiciones
aportadas aparecen elementos comunes: las
partes, el conflicto, el especialista (mediador), la
voluntariedad, la confidencialidad, la
neutralidad, etc. Hablando de lo mismo,
algunas tienen matices propios que no sólo
enriquecen a la mediación, sino que sobre todo
la llevan a su plenitud o la reducen a una mera
herramienta más de trabajo, la convierten en
profesión o la reducen a técnica, son capaces
de enriquecer su ethos o simplemente obviarlo.
En el proceso de encontrar el ethos de la
profesión del mediador he considerado
oportuno hacer un análisis de una treintena de
definiciones de la mediación para ver si entre
todas ellas podemos encontrar los rasgos
definitorios comunes. Las definiciones
pertenecen a las principales aportaciones de
destacados estudiosos de la mediación, a las
definiciones que recoge la legislación europea y
española, y a las que forman el punto de
partida de los códigos deontológicos existentes
hasta la fecha en España. En un primer
momento me detuve en detectar las palabras
clave que las podría englobar; en un segundo
momento, extraje aquellos elementos que las
distingue a cada una de ellas y que aportan los
motivos y las metas propias de la mediación. El
resultado que he obtenido es el siguiente:
Palabras clave: procedimiento, proceso,
intervención, técnica, método, forma, contrato,
acto, herramienta, medio.
PROCEDIMIENTO
• “Procedimiento en virtud del cual un
tercero, el mediador, ayuda a los participes en
una situación conflictiva a su solución, que se
expresa en un acuerdo consistente,
mutuamente aceptado por las partes y
documentado de manera tal que permita, si
fuese necesario, la continuidad de las relaciones
entre las personas involucradas en el conflicto
dicho”.24 J.M. Haynes, 1995.
• “La mediación familiar es un
procedimiento voluntario que persigue la
solución extrajudicial de los conflictos
surgidos en su seno, en el cual uno o más
profesionales cualificados, imparciales, y sin
capacidad para tomar decisiones por las partes
asiste a los miembros de una familia en
conflicto con la finalidad de posibilitar vías
de diálogo y la búsqueda en común del
acuerdo.“25 Ley reguladora de la mediación
familiar, en la Comunidad Valenciana, 2001.
• “La mediación familiar es un
procedimiento extrajudicial y voluntario en el
cual un tercero, debidamente acreditado,
denominado mediador familiar, informa,
orienta y asiste, sin facultad decisoria
propia, a los familiares en conflicto, con el fin
de facilitar vías de diálogo y la búsqueda
por éstos de acuerdos justos, duraderos y
estables y al objeto de evitar el planteamiento
de procedimientos judiciales contenciosos, o
poner fin a los ya iniciados o bien reducir el
alcance de los mismos”26. Ley reguladora de la
mediación familiar en la Comunidad
Autónoma de Canarias, 2003.
• “La mediación familiar desarrollada en
esta Ley es un procedimiento voluntario de
gestión o resolución positiva de tensiones o
conflictos familiares en el que las partes
solicitan y aceptan la intervención de un
mediador, profesional imparcial, neutral y sin
capacidad para tomar decisiones por ellas, que
les asiste con la finalidad de favorecer vías
de comunicación y búsqueda de acuerdos
consensuados.”27 Ley de Mediación Familiar
de la Comunidad de Madrid, 2007.
• “Procedimiento estructurado, sea cual
sea su nombre o denominación, en el que dos o
más partes en un litigio intentan
voluntariamente alcanzar por sí mismas un
acuerdo sobre la resolución de un litigio con
ayuda de un mediador”28. Directiva del
Parlamento Europeo y del Consejo de Europa
sobre ciertos aspectos de la mediación en
asuntos civiles y mercantiles, 2008.
• “La mediación familiar es un
procedimiento voluntario en el que uno o más
profesionales con cualificación en mediación,
imparciales y sin poder decisorio, ayudan y
orientan a las partes en cuanto al
procedimiento dialogado necesario para
encontrar soluciones aceptables que
permitan concluir su conflicto familiar.”29 Ley
de Mediación Familiar del País Vasco, 2008.
• “La mediación familiar es un
procedimiento extrajudicial y voluntario creado
con la finalidad de solucionar los conflictos
que se puedan originar en el ámbito definido
en el artículo siguiente, en el que interviene un
tercero imparcial debidamente acreditado y sin
poder de decisión, denominado mediador
familiar, que informa, orienta y ayuda a las
partes en conflicto para facilitar el diálogo y
la búsqueda de un acuerdo duradero y
estable con el fin de evitar un procedimiento
judicial, poner fin al iniciado o reducirlo.”30
Ley de Mediación Familiar en el Principado de
Asturias, 2009.
• “Procedimiento no jurisdiccional de
carácter voluntario y confidencial que se dirige
a facilitar la comunicación entre las
personas, a fin de que gestionen, para ellas
mismas, una solución de los conflictos que los
afectan, con la asistencia de una persona
mediadora que actúa de forma imparcial y
neutral”31. Ley de mediación en el ámbito del
derecho privado en Cataluña, 2009
• “Procedimiento extrajudicial de gestión
de conflictos no violentos que puedan surgir
entre miembros de una familia o grupo
convivencial, mediante la intervención de
profesionales especializados que, sin capacidad
de decisión sobre el conflicto, les asistan
facilitando la comunicación, el diálogo y la
negociación entre ellos y ellas, al objeto de
promover la toma de decisiones consensuadas
en torno a dicho conflicto”32. Ley reguladora
de la Mediación Familiar en Andalucía, 2009.
• “A los efectos de este código, la mediación
es un procedimiento voluntario de gestión o
resolución de conflictos o toma de decisiones,
en el que las partes solicitan y aceptan la
i n t e r ve n c i ó n d e u n m e d i a d o r / a y / o
mediadores/as profesionales, imparciales,
neutrales y sin capacidad para tomar decisiones
por ellas ni imponer las mismas, que les asiste
con la finalidad de favorecer vías de
comunicación y búsqueda de acuerdos
consensuados.”33 Asociación Madrileña de
mediadores. Código Deontológico del
mediador, 2010
•“La mediación es el servicio social
consistente en un procedimiento extrajudicial y
voluntario para la prevención y resolución
de conflictos familiares en el ámbito del
Derecho privado, en el que la persona
mediadora, de una manera neutral, imparcial y
confidencial, informa, orienta y asiste a las
partes en conflicto para facilitar la
comunicación y el diálogo entre las mismas,
con el fin de promover la toma de
decisiones consensuadas.”34 Ley de
mediación familiar de Aragón, 2011.
• “Mediación aquel procedimiento
estructurado en el que dos o más partes en
un conflicto o litigio intentan voluntariamente
alcanzar por sí mismas un acuerdo sobre la
resolución de su controversia, con la asistencia
de un mediador profesional.”35 Ley de
Mediación de Cantabria, 2011.
• “La mediación se define como un
procedimiento voluntario de gestión de
conflictos en que las partes enfrentadas
acuerdan en que una tercera persona
cualificada, imparcial y neutral, les guie y
ayude a alcanzar por sí mismas un acuerdo
satisfactorio para ambas partes.”36 Código
deontológico de la persona mediadora,
Federación Estatal de Asociaciones de
Mediadores, 2011.
Al considerar la mediación como un
procedimiento, es decir como el conjunto de
acciones que tienen que realizarse de la misma
forma para obtener siempre el mismo resultado
(acuerdos) bajo las mismas circunstancias
(conflicto), los autores han considerado como
elementos clave:
• Ayuda, asiste, informa y orienta.
• Previene, resuelve y gestiona los conflictos.
• Favorece vías de comunicación y diálogo.
•Busca e intenta alcanzar acuerdos
consensuados.
• Promueve la toma de decisiones.
PROCESO
• “Proceso participatorio y consensual
en el que un tercero anima a los que están en
disputa a encontrar una base de acuerdo,
ayudándoles a identificar los temas,
reducir los malos entendidos, desahogar las
emociones, clarificar las prioridades,
encontrar puntos de acuerdo, explorar
nuevas áreas de compromiso y, por último,
negociar un acuerdo.”37 Pearson, J. y
Thoennes, N., 1984
• “Proceso mediante el cual los
participantes, junto con la asistencia de una
persona o personas neutrales, aíslan
sistemáticamente los problemas en disputa con
el objeto de encontrar opciones considerar
alternativas, y llegar a un acuerdo mutuo
que se ajuste a sus necesidades. La mediación
es un proceso que hace hincapié en la propia
responsabilidad de los participantes de
tomar decisiones que influyen en sus vidas. Por
lo tanto, constituye un proceso que confiere
autoridad sobre sí misma a cada una de las
partes”38. Folberg y Taylor, 1996.
• “Proceso que estructura la intervención
de las partes involucradas en modos que
favorecen su participación y legitimidad,
asumiendo responsabilidades para
diseñar la resolución de sus disputas”39.Sara
Cobb, 1997.
• “Proceso que con la dirección de un
tercero que no tiene autoridad decisional,
busca soluciones de recíproca satisfacción
subjetiva y de común ventaja objetiva de las
partes a partir del control del intercambio
de la infor mación, favoreciendo el
comportamiento colaborativo de los
mismas”40. Rubén Calcaterra. 2006.
• “Proceso de gestión de conflictos en el
cual las partes, mediante la intervención
aceptada voluntariamente de un tercero
i m p a rc i a l y c u a l i fi c a d o, a í s l a n l o s
problemas en disputa para encontrar
opciones, considerar alternativas y llegar a
un acuerdo que se ajuste a sus intereses
mediante la autodeterminación, la
comunicación y el crecimiento moral para
favorecer la continuidad de las relaciones entre
las personas involucradas.”41 Borrador de la
Ley de Mediación familiar de Murcia, 2010.
Por lo analizado vemos que la mediación
vista como proceso, es decir como un conjunto
de actividades (coordinadas por el mediador)
que se realizan bajo ciertas circunstancias de
conflicto buscando llegar a acuerdos, presenta
los siguientes elementos clave:
• Debe aislar los problemas.
• Ayuda a identificar, reducir, desahogar,
clarificar, explorar, encontrar y negociar
soluciones.
• Es participativo, colaborativo y se deben
asumir las propias responsalidades.
INTERVENCIÓN
• “La intervención en un asunto en disputa
o negociación, de una tercera persona
imparcial y neutral, que no tiene poder de
decisión en el asunto y cuyo objetivo es
ayudar a los interesados a llegar, de forma
voluntaria y mutuamente aceptable, a
acuerdos sobre los temas en litigio.”42
Moore, C.W. 1986.
• “Intervención de un equipo
multiprofesional, no vinculado a las partes, con
el objetivo de promover una for ma
alternativa de resolución” “en el cual la
solución es una solución humana compleja
en la que interviene y se tiene en cuenta el
sentir, pensar, hacer y decir de todas las partes
involucradas, desde una perspectiva que es
propia de cada persona en conflicto”43. Daniel
Bustelo.
• “Por mediación familiar se entenderá, a
los efectos de la presente ley, la intervención de
los profesionales especializados requeridos
voluntariamente y aceptados en todo caso por
las partes en condición de mediador. Éstos
serán expertos en actuaciones psico-
socio-familiares que actuarán en funciones
de cooperación y auxilio a aquellas
personas que tienen o han tenido una relación
familiar, para ofrecerles una solución
pactada a su problemática matrimonial o de
pareja.”44 Ley reguladora de la Mediación
Familiar en Gallicia, 2001.
La intervención no es más que la acción
realizada por un profesional sobre un
individuo, o individuos, con alguna dificultad
para mejorar su situación. Al considerar así la
intervención, cuando nos referimos a la
mediación, recalcamos la neutralidad e
imparcialidad del mismo. Los autores señalan
como elementos claves:
• Cooperación y auxilio en la búsqueda de
una solución.
• Esa solución tendrá la característica de ser
una solución humana compleja.
• Ayuda a llegar a acuerdos.
TÉCNICA
• “Es una técnica pacífica de resolver
conflictos donde el protagonismo lo tienen
las partes involucradas”45.Trinidad Bernal
Samper, 1998.
• “...entendemos como mediación familiar
aquella técnica utilizada como proceso
para la resolución de un conflicto en el seno de
la familia, en el que interviene un tercero,
mediador, imparcial y neutral, para ayudar a
las partes enfrentadas a alcanzar un
acuerdo propuesto por los mismos. El
mediador debe ser previamente solicitado y
aceptado por las partes que requieran sus
servicios, ya sea a instancia propia o derivado
de la autoridad judicial o administrativa.“46
AMEFA. La deontología de los mediadores.
Al hablar de técnica nos referimos al
procedimiento o conjunto de reglas, normas o
protocolos, que buscan obtener un resultado
determinado. Sería interesante profundizar en
esta palabra clave, para ver si los autores
deseaban reflejar la mediación como una
simple técnica o si pretendían exponer otra
realidad. Es más, en una de las definiciones el
autor habla de la mediación como “técnica de
un proceso” y lo más curioso es que lo hace en
el contexto de un código deontológico, lo que
anula en sí mismo el ethos de la mediación.
MÉTODO-FORMA
• “Método de resolución de conflictos que
se caracteriza por la intervención de una
tercera persona imparcial y experta, sea a
iniciativa propia de las partes, sea a indicación
de una autoridad judicial, que tiene como
objeto ayudar a las partes y facilitarles la
obtención por ellas mismas de un acuerdo
satisfactorio.”47 Ley de Mediación Familiar de
Cataluña, 2001.
• “Forma de resolución extrajudicial de
conflicto entre las personas, caracterizada por
la intervención de una tercera parte que los
auxilia en la búsqueda de una solución
satisfactoria para ambas”48. Ley del
Servicio Social Especializado de Mediación
Familiar de de Castilla la Mancha, 2005
Al igual que en el caso anterior, método o
forma hace referencia al modo ordenado y
sistemático de proceder para llegar a un fin
determinado, por lo que habría que cuestionar
a los autores si consideran la mediación como
una simple técnica de intervención. Lo único
que resaltaría es que en ambos casos los autores
hacen hincapié en la importancia de la
mediación como ayuda.
CONTRATO
• “Mediante el contrato de mediación, una
persona denominada mediador familiar se
obliga a prestar los servicios de información,
orientación y asistencia, sin facultad
decisoria propia, a cuenta y por encargo de los
sujetos que, perteneciendo a una misma familia
o grupo convivencial, están en conflicto y que
se obligan a retribuir sus servicios con la
finalidad de llegar a acuerdos.”49 Ley de
Mediación Familiar de les Illes Balears, 2006.
Es curioso, y la única ocasión en la que he
encontrado dicho término al hablar de la
mediación, que la vea como un contrato. Sin
embargo vuelve a resaltar la importancia de
informar, orientar y asistir.
ACTO
• "Acto de competencia y capacidad
f a m i l i a r , e n e l c u a l , a t r av é s d e l
compromiso familiar se reestructura el
orden jerárquico en su organización, con la
participación de un tercero imparcial"50.
Francisco Hidalgo, 2008.
Definición totalmente novedosa que añade
un elemento esencial: la familia en conflicto
tiene la clave (competencia y capacidad) de
resolver su propio conflicto. Anteriormente ya
habíamos hablado de que encontraríamos una
solución humana compleja. Esta definición
resalta esa realidad.
HERRAMIENTA
• “La mediación como herramienta de
autocomposición viene a ayudar a las
partes no solo para llegar a un acuerdo que
disuelva el vínculo jurídico, sino que además
aporta las bases para que las partes se
reconozcan con todo el protagonismo y
legitimación necesarios para construir una
relación o inter-relación futura sana y
armoniosa."51 Franco Conforti, 2009.
Esta definición viene a completar la
anterior y a matizarla más si cabe. Si bien
podíamos pensar que herramienta nos habla de
técnica, el autor enriquece su aportación al
situarla en un proceso de autocomposición de
la familia (habla de competencia y capacidad
de la propia familia) e incide en la importancia
de que las partes se reconozcan en ese proceso.
Un concepto clave vuelve a ser la ayuda.
MEDIO
• “Se entiende por mediación aquel medio
de solución de controversias, cualquiera que
sea su denominación, en que dos o más partes
intentan voluntariamente alcanzar por sí
mismas un acuerdo con la intervención de
un mediador.”52 Real Decreto-ley de
mediación en asuntos civiles y mercantiles,
2012.
Definitivamente el autor ha tratado de
englobar todas las definiciones y al ser un texto
legislativo amplia mucho su definición para
agradar a todos y permitir la posterior
matización. No habla de ayuda, tan solo de
intervención. Es interesante resaltar que
especifica la finalidad: el acuerdo consensuado.
“Hay pruebas suficientes de que al hombre se le
puede arrebatar todo salvo una cosa: la última de las
libertades humanas, la elección de la actitud personal
ante un conjunto de circunstancias para decidir su propio
camino”53.
Podríamos recordarle a la mediación la
necesidad de practicar aquella buena
recomendación, que se atribuye a Sócrates y al
oráculo de Delfos: «Conócete a tí mismo».
Sería muy conveniente realizar un ejercicio
hermenéutico de autocomprensión, tanto en el
orden epistemológico como en el práctico.”54.
Si la búsqueda del beneficio del “cliente” es el
objetivo propio de cualquier profesión, sin
lugar a dudas que lo es mucho más en el
terreno de la mediación. Desde esa perspectiva
es cuando nos podemos plantear la cuestión del
sentido de la mediación. Si la mediación no es
una profesión, ¿qué es?
Parcialmente podemos decir que es una
técnica pacificadora aplicada a los procesos de
conflicto, pero ¿es un oficio que se desarrolla
mirando de soslayo al terapeuta, abogado,
trabajador, educador social? Me atrevería a
decir que la mediación la entendemos como la
profesión que trata de aplicar herramientas
pacificadoras en el conflicto humano, pero que
se define mejor desde un contexto propiamente
humano que desde un mero fundamento
técnico. Trabaja desde un modelo de ayuda a
reencontrar lo que es bueno y deseable para los
seres humanos, de cómo deben comportarse
consigo mismos, con aquellos que les rodean y
con la sociedad de la que forman parte, en el
contexto de la propia competencia y capacidad
de cada ser humano para encontrar las
soluciones por más complejas que estas
parezcan o sean. Entiendo al mediador como
un subtipo del profesional, cuya profesión es
ayudar o servir a los demás, es una profesión
facilitadora de la vida de las personas. Se trata
de una profesión de servicio, prosocial, como la
de los médicos, terapeutas, trabajadores
sociales... muy distinta en sus objetivos (y en las
expectativas que los “clientes” tienen del
profesional que la ejerce) de los objetivos de
otras profesiones, como la de arquitectos,
mecánicos, infor máticos, abogados,
comerciantes... cuyo trabajo sirve a la sociedad,
pero no ayudando y "reparando" a las personas
sino facilitándoles la consecución de sus propios
objetivos.
Si el mediador está implicado en la
búsqueda del bien para el ser humano y lo
hace buscando el beneficio de la totalidad del
ser, está involucrado en la concepción
ontológica y ética del ser, además de tomar
conciencia de que él mismo es un ser
ontológicamente ético. La ruptura con la visión
reduccionista, del simple gestionar-aliviar el
conflicto o evitar el proceso judicial, lleva a la
postura ética necesaria de buscar el beneficio
de las partes, de creer además en su capacidad
y competencia frente a las dificultades. Hay
que huir de los planteamientos “pseudoéticos”
que conducen a posturas paternalistas y
moralistas. Para alcanzar el equilibrio habrá
que lograr que el mediador realice su profesión
desde la toma de conciencia de su propio ethos,
en un constante diálogo con la ética aplicada,
no reduciendo ésta al mero seguimiento de
algunas normas, a las directrices de un colegio
profesional o de un maestro. Ese diálogo debe
brotar de su apertura al propio ser en un
proceso de maduración personal.
Por último podemos concluir que ser
mediador no es sólo tener una titulación o un
reconocimiento académico de poseer
determinado tipo de información teórica, o
saber aplicar cierto número de técnicas que
ayuden a resolver conflictos. Sin lugar a dudas
que es de las pocas profesiones que no solo
esperan, sino que exigen, que sus profesionales
sean personas psicoafectivamente capaces de
interaccionar sanamente con las partes para
buscar el beneficio pleno de éstos. El ethos de
la profesión del mediador, como no podía ser
de otra forma, se extiende a lo largo de toda su
vida. El ethos se juega, en última instancia en
el modo como cada mediador delibera, decide
y actúa. Será cada uno quien realice o no el
ethos profesional. Reducir su ethos a una
simple asignatura en su proceso de formación
académica, o a un código de normas nos
hablará de una reflexión, más o menos
profunda y sistematizada, de los componentes
éticos de su profesión. Pero su ethos pide una
serena reflexión crítica y una responsabilidad
de los mediadores ante sí mismos al vivir su
vocación, de buscar el beneficio del otro por las
consecuencias que tiene para el bien común y
por ser un deber de justicia.
Por Alfonso Fabregat Rosas
Orientador y mediador familiar.
Coordinador del curso de experto universitario de
Mediación y resolución de conflictos en el ámbito
educativo de la UNED.
Profesor en los cursos de experto universitario de
Mediación familiar de la UNED y de la UNIA.
alfabregat@hotmail.com
Notas a pie de página:
1- Cortina, A., Martínez Navarro, Emilio.
Ética. Akal , D.L., Madrid, 1996, p. 105.
2- Cortina, A. “El deontologismo ético: en
favor de la libertad, la igualdad y la
solidaridad”. Anthropos, Argumento. Nº 96,
1989 pp. 22-27.
3- Etxebarria, X. Temas básicos de ética.
DDB, Bilbao 2002, p. 29.
4- Cortina, A.. Op. Cit., p. 22.
5- Siruana, Juan Carlos. Los consejos de los
filósofos. Una introducción a la historia de la
ética. Proteus, Valencia, 2011. pp. 333-337.
6- Jaspers, K. Philosophie II, Springer,
Berlín, 1932, p. 8.
7- López Quintás, Alfonso. “El
personalismo dialógico y su fecundidad”
PERSONA. Revista Iberoamericana de
Personalismo Comunitario. Publicación del
Instituto Emmanuel Mounier Córdoba-
Argentina. Nº 8, agosto 2008. pp. 10-26.
8- López Quintás, Alfonso. Op. Cit. p.24.
9- Suárez Villegas, Juan Carlos. Principios
de ética profesional. Ed. Tecnos. Madrid 2001.
p. 109.
10- Peloquin S. “La Ethos de la profesión
como una guía para la identidad profesional” .
Revista TOG (A Coruña) . 2008 Nº 2: 64-82.
Disponible en: http://www.revistatog.com/
mono/num2/peloquin.pdf.
11- Hortal, Augusto. Ética general de las
profesiones. DDB, Bilbao, 2002, p. 37.
12- Dyer, A. “La psiquiatría como
profesión”. En La Ética psiquiátrica.
Triacastela. Madrid 2001. p. 76.
13- McIntyre, A. Tras la Virtud. Biblioteca
de Bolsillo. Barcelona 2001. P. 47.
14- Cortina, A. “Ética de las Profesiones”.
El País. Opinión, 20-2-1998.
15- Cornu Laurence. “Responsabilidad,
experiencia, confianza”. En Frigerio Graciela
(comp.) Educar: rasgos filosóficos para una
identidad. Ed. Santillana. 2002.
16- Dyer, A. Op. cit. pp. 81-82.
17- Aristóteles entiende por virtud la
"disposición voluntaria adquirida (hábito)
dirigida por la razón y que consiste en el
término medio entre dos vicios". Ética a
Nicómaco II, VI.
18- Isaacs. La educación de las virtudes
humanas, EUNSA, Pamplona, 2003.
19- Larrañaga, Pablo. El concepto de
responsabilidad. Fontamara, México, D.F.,
2000.
 20- Al hablar de administración me estoy
refiriendo a aquellos estamentos establecidos y
socialmente consensuados que certifican la
validez de la formación académica y el
cumplimiento de los requisitos mínimos para
ejercer una deter minada profesión:
univer sidades, colegios profesionales,
administraciones públicas, etc.
21- Conill, Jesús. “Ética y deontología.
¿Tiene algo que decir la filosofía a la
psicología?” Informació psicològica, V Época,
nº 77, diciembre 2001, p. 40.
22- Cortina, A. “Ética de las Profesiones”.
El País. Opinión, 20-2-1998.
23- Ibíd.
24- Haynes, J.M. Fundamentos de la
Mediación Familiar. GAIA Ediciones: Madrid,
1995. pp. 12-13; 48-54.
25- Art. 1 Ley 7/2001, de 26 de noviembre,
reguladora de la mediación familiar, en el
ámbito de la Comunidad Valenciana. http://
www.boe.es/boe/dias/2001/12/19/pdfs/
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26- Art. 2 Ley 15/2003, de 8 de abril
reguladora de la mediación familiar en la
Comunidad Autónoma de Canarias. http://
www.boe.es/boe/dias/2003/06/05/pdfs/
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27- Art. 1. Ley 1/2007, de 21 de febrero,
de Mediación Familiar de la Comunidad de
Madrid. http://www.boe.es/boe/dias/
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28- Art. 3.a. Directiva 2008/52/CE del
Parlamento Europeo y del Consejo de Europa
de de 21 de mayo de 2008 sobre ciertos
aspectos de la mediación en asuntos civiles y
mercantiles. http://www.boe.es/doue/
2008/136/L00003-00008.pdf .
29- Art. 1.2. Ley 1/2008, de 8 de febrero,
de Mediación Familiar del País Vasco. http://
www.gizartelan.ejgv.euskadi.net/bopv2/datos/
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30- Art 2. Ley 3/2007, de 23 de marzo, de
Mediación Familiar en el Principado de
Asturias. http://www.editorialreus.es/
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31- Art. 1.1. Ley 15/2009, de 22 de julio,
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32- Artículo 2.1 Ley 1/2009, de 27 de
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33- Asociación Madrileña de mediadores.
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34- Art. 2 Ley 9/2011, de 24 de marzo, de
mediación familiar de Aragón. http://
www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-
A-2011-8402.
35- Art. 2 Ley 1/2011, de 28 de marzo, de
Mediación de la Comunidad Autónoma de
Cantabria. http://www.boe.es/boe/dias/
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36- Código deontológico de la persona
mediadora, Preámbulo. Federación Estatal de
Asociaciones de Mediadores, 2011. http://
w w w. u n i a . e s / i m a g e s / s t o r i e s /
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estatuto%20federaci%F3n.pdf.
37- Pearson, J. y Thoennes, N. A
preliminary portrait of client reactions to three
court mediation prog rams Mediation
Quarterly, 3, 21-40 1984.
38- Folberg, J. y Taylor, A. Resolución de
conflictos sin litigio. Limusa, Grupo Noriega
Ed. México, 1996.p. 27.
39- Sara Cobb.: “Una perspectiva narrativa
en mediación “, en Nuevas direcciones en
mediación , coord. Folger Joseph P. y Jones,
Tricia S. Paidós. Mediación nº 7. Buenos Aires.
1997. pp. 89 y 100.
40- Calcaterra, Rubén. Mediación
estratégica. Gedisa, Barcelona 2006. p. 32.
41- Art. 4.2 Borrador de la Ley de
Mediación familiar de la Comunidad
autónoma de la Región de Murcia. 2010.
http://www.centrodemediacionmurcia.es/
ley_en_murcia_6.html.
42- C. W. Moore El proceso de mediación.
Granica, Barcelona, 1986.
43- Bustelo, Daniel “Administración de
Justicia, Mediación y sistemas adecuados de
r e s o l u c i ó n d e c o n fl i c t o s ” http://
es.scribd.com/doc/50384442/Daniel-Bustelo.
44- Art. 2 Ley 4/2001, de 31 de mayo de la
Xunta de Galicia, reguladora de la Mediación
Familiar. http://www.boe.es/boe/dias/
2001/07/02/pdfs/A23425-23429.pdf.
4 5 - Tr i n i d a d B e r n a l S a m p e r. L a
Mediación. Una Solución a los Conflictos de
Ruptura de Pareja. Ed. Colex, 1998.
46- Asociación andaluza de mediación
AMEFA. La deontología de los mediadores.
Preámbulo. www.mediacionandalucia.es/
Amefa/24.doc.
47- Preámbulo Ley 1/2001, de 15 de
marzo de Mediación Familiar de Cataluña.
http://www.boe.es/boe/dias/2001/04/16/
pdfs/A13797-13802.pdf.
48- Art. 2. Ley 4/2005 de 24 de mayo del
Servicio Social Especializado de Mediación
Familiar de la Comunidad de Castilla la
Mancha. http://www.boe.es/boe/dias/
2005/08/25/pdfs/A29486-29493.pdf.
49- Art. 4 Ley 18/2006, de 22 de
noviembre, de Mediación Familiar de les Illes
Balears. http://www.imedia-ucm.es/Links/
Leyes/LeyBaleares182006.pdf.
50- Hidalgo, Francisco. Mediación y
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51- Conforti, Franco, 2009. “La mediación
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52- Art. 1 Real Decreto-ley 5/2012, de 5 de
marzo, de mediación en asuntos civiles y
mercantiles. http://www.boe.es/boe/dias/
2012/03/06/pdfs/BOE-A-2012-3152.pdf.
53- Conill, J. Op. Cit.. p. 41.
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TELÉFONO DE
LA
ESPERANZA:
“ESPAMEDIA”
¿Un Servicio de Mediación para qué?
P ROF . D R . F CO . J AVIER D OMINGUEZ
ALONSO
En el curso 2011-2012 iniciamos, dentro
del Teléfono de la Esperanza de Alicante, un
Estamos convencidos de que las
servicio de mediación con una propuesta
concreta: ofrecer un espacio de atención a las
personas que atraviesan por algunos de los
conflictos en los que la mediación pudiera ser
una alternativa válida a sus necesidades. Así
nació “Espamedia”, un espacio -dentro de la
oferta de servicios que se prestan en este
centro- para el encuentro entre las personas
que se encuentran inmersas en algún tipo de
conflicto interpersonal, y que desean iniciar un
diálogo constructivo y colaborativo para tratar
de solucionar sus desavenencias y dificultades a
través de la mediación.
Puede tratarse de situaciones por las que
atraviesan muchas personas en su vida
cotidiana y ante las cuáles no se sabe muy bien
qué hacer, dónde poder encontrar la mejor
solución a esos conflictos en los que nos
encontramos inmersos con familiares, vecinos,
instituciones, etc.; personas con las que
tenemos que convivir y mantener relaciones
cercanas y cotidianas, queramos o no
queramos, y para las cuáles la mediación se ha
demostrado un recurso muy útil y capaz de
resolver muchos de esos conflictos. A
continuación enumeramos algunos de los que
nos ocuparemos en este servicio:
• ¿Tienes conflictos con tu pareja y
estás pensando en separarte?
•¿La relación con los hijos es
conflictiva y no sabes qué hacer ni
dónde acudir?
•¿Tienes a uno o ambos padres en
soledad y/o dependencia y los
hermanos no se implican de igual
manera en su cuidado, lo que lleva a
discusiones, amenazas, etc., entre
vosotros?
•¿No te permiten tener contacto con
tus nietos?
•¿Tienes conflictos en tu comunidad
de vecinos? ¿Tus vecinos no te dejan
vivir en paz y armonía?
per s onas podemos lleg ar a acuerdos
beneficiosos para todos, sin necesidad de llegar
a la violencia, a las rupturas definitivas, ni los
tribunales, para encontrar caminos, estrategias
y soluciones, que den satisfacción a los intereses
y necesidades de las partes en conflicto. Y si
esto no fuera posible, o el punto de partida es
ya inicialmente de ruptura, el encuentro de
mediación mejoraría la relación, la
comunicación y el compromiso, permitiendo
acuerdos consensuados y beneficiosos con
terceras partes implicadas en el conflicto.
La mediación puede aportarte una
respuesta válida, autónoma y diferente:
Diferente: porque no busca la confrontación
judicial, se trata de una forma de abordar los
conflictos, sean del tipo que sean, mediante el
diálogo y la cooperación entre las partes, en un
proceso que pretende que nadie pierda ni salga
vencido, sino en el que todos ganen y lleguen a
acuerdos que satisfagan al conjunto…; y todo
ello con la ayuda de una persona mediadora,
neutral e independiente, que conducirá el
proceso con absoluta imparcialidad y
confidencialidad, neutral e independiente, que
conducirá el proceso con absoluta
imparcialidad y confidencialidad,
Autónoma: porque los principales actores son
las partes en conflicto, donde son escuchadas
todas las posiciones, los intereses y las
necesidades de cada cual; y donde el
protagonismo es de ellos, al igual que los
acuerdos a los que quieran llegar…, con total
libertad para acudir a la mediación y retirarse
de ella si así lo consideran oportuno,
Válida: porque los acuerdos a los que lleguen
las partes, en presencia de la persona
mediadora como garante del proceso, pueden
tener validez jurídica, una vez presentados en
el juzgado que corresponda. En otros casos los
acuerdos firmados en presencia de la persona
mediadora, tienen la validez del acuerdo entre
partes, con las cláusulas que hayan considerado
incluir y los periodos de revisión que estimen
oportunos establecer para el buen
cumplimiento de los mismos.
Por todo ello, la mediación es una alternativa al
sistema judicial, al enfrentamiento entre
personas que han de continuar relacionándose
y, en muchos casos, con intereses comunes:
afectivos, económicos, de propiedades, de
convivencia, etc. Se realiza en un contexto
seguro, que garantiza la persona mediadora,
libre y basado en el diálogo, la cooperación y el
respeto, buscando la mejor opción para todos y
todas las personas participantes, y en la que
nadie se queda sin decir y aportar aquello que
le intranquiliza o incumbe. También es más
económica y con mucha menor carga y
sufrimiento emocional que acudir a un
juzgado.
Por todo ello, si estás en alguna de las
situaciones descritas anteriormente, o en otras
similares, puedes acudir a nosotros donde te
ofreceremos un espacio y un tiempo de:
información, escucha y atención especializada
para que puedas tomar la mejor solución a tu
caso concreto, poniéndote en contacto -si lo
deseas y el caso lo requiere- con otros
profesionales. La mediación, no es terapia ni
asesoramiento jurídico (si se necesita se podrá
acudir a profesionales específicos), es un
espacio para la escucha, un espacio en el que el
diálogo toma la iniciativa como único valedor
para la consecución de acuerdos consensuados
entre las partes.
Entendemos la Mediación como: “Aquel
procedimiento estructurado, no jurisdiccional, de carácter
voluntario y confidencial, que se dirige a facilitar la
comunicación entre las personas, para que ellas mismas
gestionen la solución de un conflicto que les afecta e
intenten voluntariamente alcanzar por sí mismas un
acuerdo sobre la resolución del mismo, con la ayuda de
un mediador” (Anteproyecto Ley de Mediación
Comunidad Valenciana, art. 2).
¿En que te puede ayudar este Servicio de
Mediación?:
•Escucharte en tu situación, tu problema
relacional o conflicto concreto,
•Explicarte, asesorarte e informarte en qué
consiste la mediación y cómo puede ayudarte
en la solución del tipo de conflicto que estés
viviendo,
•Entrar en contacto (a través de la persona
mediadora) con la/s otra/a partes en conflicto
para facilitar un encuentro inicial,
•Mantener las sesiones necesarias, y
queridas por las partes en conflicto, para
encontrar soluciones a nuestras diferencias,
•Derivar, si es necesario, a o tro s
profesionales para la búsqueda de la mejor
solución a tu situación concreta,
•Apoyar y mantener un seguimiento de
cada caso tratado en el servicio de mediación
de forma libre, y con total garantía de
confidencialidad.
Transformar una dinámica de confrontación
en una dinámica de colaboración, lograr que
las partes trabajen juntas en la solución de un
problema, acercarlas para lograr un acuerdo,
eso es lo que pretende y consigue, en un alto
porcentaje de casos, la mediación. La breve
experiencia de los inicios de este servicio así lo
demuestra.
Veamos brevemente un caso de conflicto
madre e hija:
Se recibe una llamada de una madre
enormemente preocupada por la situación de
confrontación con su hija adolescente, con la
que la relación era prácticamente nula y
comenzaba a ser violenta: gritos, desapego,
desconocimiento de situaciones graves por
parte de la hija desconocidas hasta hace poco
para la madre, etc. En definitiva, un bloqueo
total en la relación entre ambas, situaciones
graves en las que su hija estaba inmersa, y no
saber que hacer ni por dónde tirar para
“recomponer” esa relación perdida y
conflictiva, además de otros problemas
presentes en la familia…
Acudió la madre sola a la primera cita. De
modo vivo, sincero y pormenorizado expresó la
situación que estaba viviendo y cómo se sentía
en relación con su hija. Después de una
escucha atenta y empática por parte de la
persona mediadora, éste le indicó la
conveniencia de que acudiera la hija al servicio,
ya que al tratarse de un espacio de mediación
ambas partes deben de estar presentes y querer
solucionar un tema que no es personal, sino
interpersonal. La madre lo entendió, aunque
dudaba seriamente de que su hija quisiera
acudir (se le indicó que, si lo consideraba
oportuno la persona mediadora podría hacer
las gestiones necesarias para facilitar el
próximo encuentro, la madre no lo creyó
oportuno por lo que sería ella quién se lo
comunicara a su hija).
A la próxima cita, una semana después,
acudieron la madre y la hija juntas al
encuentro. Lo primero que se hizo, después de
los saludos de bienvenida, fue narrar a la hija,
por parte de la persona mediadora, todos los
temas que se habían tratado en la primera
sesión. Al hacerlo así pretendíamos que se
implicara efectiva y afectivamente al proceso
de mediación y nos trasmitiera su visión de la
situación, así como escuchar su narrativa de la
historia que estaban viviendo en casa madre e
hija y el resto de la familia. De este modo
pudimos facilitar y hacer efectivo el
protagonismo de la hija en el proceso de
mediación, estableciéndose dos movimientos
pretendidos por el mediador: el fortalecimiento
(empowerment), por parte del mediador, tanto
a madre como a la hija; así como y el
reconocimiento empático y positivo, de
sentimientos entre ellas, valía personal de cada
una, etc. El encuentro resultó del todo
satisfactorio, como se pudo observar a lo largo
de la sesión, pasando de una situación de cierta
frialdad y distancia entre ambas, a una relación
más cercana, llegando a unos puntos de
acuerdo (temas concretos) que llegaron a
verbalizar y concretar para tratar de mejorar
en las próximas fechas.
A la tercera sesión acudieron ambas con una
sonrisa y de buen talante, notándose cierta
complicidad entre ambas. Narraron cómo les
había ido en el espacio de tiempo entre las
sesiones (15 días), y de cómo habían
consensuado distintos aspectos conflictivos
llegando a compromisos entre ellas que, con la
ayuda de la persona mediadora, fueron
explicitando y concretando para el futuro. Se
les ofreció la posibilidad de tener una última
sesión de seguimiento para cuando ellas lo
indicasen.
¡Es increíble como cuando dos personas, en el Si está interesada/do en este servicio,
espacio de un mes -como en este caso-, se póngase en contacto con nosotros y te
ponen a dialogar con ánimo de escucharse y de atenderemos gustosamente. Teléf.
entenderse es fácil revertir situaciones pasadas 965131122.
y recuperar la relación perdida! La vida Nuestro horario, en principio, será los
cotidiana nos tiende trampas que nos alejan de jueves de 10 a 12 hs.
los seres queridos, o de personas con las que
convivimos en nuestra cotidianidad. A veces, Responsable del espacio de mediación: Fco.
basta con que alguien sea capaz de facilitar un Javier Domínguez Alonso
encuentro entre las personas en conflicto para
que éstas inicien un proceso de diálogo
fructífero y positivo, desde el respeto y la Prof. Dr. Fco. Javier Dominguez Alonso.
Javier.dominguez@ua.es
exposición de sus puntos de vista en
profundidad. En otras ocasiones las resistencias
pueden estar más latentes dificultando el
entendimiento y la búsqueda de puntos
comunes y acuerdos satisfactorios para todos.
Pero, aunque no se llegue a acuerdos
consensuados, si las partes han podido
http://www.telefonodelaesperanza.org
encontrase y expresarse, sólo por el hecho de
abrirse al diálogo y escucharse en un espacio
seguro, como es el de mediación, puede
iniciarse un camino de reconocimiento entre
las partes, y una búsqueda de sentido a lo que
les está pasando que puede facilitarles mejores
perspectivas de relación, respeto y
colaboración.
La mediación no es una panacea, ni la única y
la mejor solución a todos los problemas
interpersonales con los que nos encontremos.
Habrá que considerar siempre la mejor opción,
pero apostar por implicarnos personalmente el
la solución de nuestros conflictos -con la ayuda
y la presencia de una tercera persona
mediadora, buscando los apoyos profesionales
que cada caso pueda requerir-, creemos que es
una buena solución, y esa es la finalidad de la
mediación y de este espacio que para el
desempeño voluntario de la misma se ofrece
desde el servicio del Teléfono de la Esperanza
de Alicante.
Entre la delegación
Este artículo pretende presentar
y el compromiso, la
mediación.
PROF. DR. ANTONI VAQUER I CHIVA Y D.
FRANCISCO L. HIDALGO
1. Introducción
La mediación como forma de como ser que tiende a su autorrealización
resolución de conflictos está adquiriendo un
gran eco en nuestro país. Aunque está todavía
en sus inicios, y con una desigual implantación
profesional, se depositan en ella diversas
esperanzas que van desde las más pragmáticas
de descongestión de los juzgados hasta las
relacionadas con su contribución a la
emergencia de una cultura de la paz basada en
la cooperación y la resolución pacífica de
Desde esta visión se apela a la
conflictos. No es de extrañar, pues, que nos
encontremos con un campo profesional que
está definiéndose, que después del sustantivo
mediación aparezcan distintos calificativos que
reivindican un campo específico y particular en
el que se puede desplegar la misma
(intercultural, escolar, civil, mercantil,
familiar...) y en el que convergen "modos de
hacer" diferentes derivados de las distintas
profesiones o formaciones de procedencia de
los mediadores y futuros mediadores. Por
encima de los diversos orígenes profesionales
Entendemos que las situaciones de
de los mediadores, la mediación ha ido
cristalizando unos procedimientos y principios
básicos que la dotan de unas características
sobre las que merece la pena detenerse a
reflexionar, por sus implicaciones en la
actuación profesional y en el incremento de la
comprensión de la significatividad para las
personas de la experiencia de la mediación.
una visión de la mediación a partir tanto de las
reflexiones y análisis del contexto de la
mediación familiar derivadas de la práctica
profesional durante los últimos 10 años como
de los trabajos de Carrero sobre la conciencia
de ser(1) y de Vaquer, Carrero y García-Bacete.
Trabajos en los que subyace la visión
humanista del encuentro(2) (Rogers, 1986 y
1987) y de desarrollo del ser como proceso
que tiende a la actualización del potencial
personal. Al hablar de proceso de desarrollo del
ser tomamos como referencia las ideas
humanistas, principalmente las de Maslow
(1990,1991), que conciben la persona humana
mediante un proceso continuo de crecimiento
hacia la plena humanidad que constituye la
principal fuerza motivadora de las acciones
humanas. Se trata de una visión de la persona
que pone el acento en la presencia de su
potencial de desarrollo y en los valores
intrínsecos del ser en vez de subrayar las
carencias.
responsabilidad individual en la toma de
conciencia y desarrollo del proceso de
autocomprensión(3) (Vaquer, 2012) y
“conciencia de ser” (Carrero, 2007), a los
factores contextuales -objeto de reflexión en el
presente artículo- y a los lazos afectivos con
personas significativas que vuelven posible el
esfuerzo hacia la actualización del potencial
desde el pilotaje(4) (Vaquer, Carrero y García-
Bacete, 2008).
conflicto que se presentan en mediación
familiar, o en cualquier mediación en la que las
personas están unidas por una vinculación
afectiva, son momentos de perturbación del
proceso de desarrollo del ser que pueden ser
superados o cronificados en función del modo
en que se resuelva el conflicto. Desde nuestra
experiencia, la mediación debe proporcionar
un contexto que favorezca un enfoque del
conflicto y permita la emergencia de una nueva
perspectiva que confronte a los participantes
con su proceso de desarrollo del ser a través de
una mayor comprensión de la situación, que
“exija” una nueva forma de actuar y de
encarar el conflicto. Para ello un aspecto
crucial es el contexto que se establece en la
mediación.
2. Objetivo
El objetivo general de este artículo
es presentar un análisis reflexivo que nace de la
práctica profesional sobre las implicaciones del
c o n t ex t o d e l a m e d i a c i ó n y ex t r a e r
consecuencias para la práctica de la mediación
y las personas implicadas en la misma.
3. Contextos de delegación versus
contextos de compromiso.
Para la pragmática de la
Las escuelas mas representativas
de mediación han desarrollado diferentes
metodologías con las que abordar la resolución
de conflictos. Aunque son más los aspectos
comunes que las identifican, cada una de ellas
se acerca a la mediación con una perspectiva
diferente, pero todas inciden de una forma u
otra en la comunicación como vehículo de
acuerdo entre los antagonistas, y que el
objetivo es llegar a satisfacer los intereses de
todos y concretar dicho acuerdo, si es posible.
Independientemente de las
diversas técnicas y formas de entender la
El contexto presupone una
mediación de cada escuela, un argumento
central que caracteriza el ser de la mediación
es la devolución al ámbito privado de la
resolución de un conflicto entre personas que
se relacionan por lo que únicamente es posible
mediar cuando los afectados se hacen cargo de
la situación que les embarga y son competentes
para abordar el conflicto con la finalidad de
resolverlo. Pero no sólo es posible mediar en ese
caso sino que el propio contexto de la
mediación promueve la competencia de las
personas implicadas para encargarse de su
propio conflicto al establecer un contexto que
promueve la responsabilidad y el compromiso
con las decisiones tomadas.
Según Graue y Walsh (2003) en Villagrasa C. y
Ravetllat (2009): Un contexto es un espacio y un
tiempo cultural e históricamente situado, un aquí y un
ahora específico. Es el eslabón de unión entre categorías
analíticas de los acontecimientos macro-sociales y micro-
sociales. El contexto es el mundo aprendido a través de
la interacción y el cuadro de referencia mas inmediata
para actores mutuamente envueltos. Estos autores
abren el concepto en primer término a
referencias socioculturales de amplio espectro,
para cerrarlo en la interacción mas corta.
Continúa el texto con Mubarach Sobrinho
R.S., también en Villagrasa C. y Ravetllat
(2009) quien define el contexto como el mundo
aprendido a través de la interacción y el cuadro de
referencia mas inmediata para actores mutuamente
envueltos.
comunicación humana el contexto es el marco
donde los mensajes cobran todo su sentido
(Stierlin, Simon y Wynne, 1993). El contexto
enmarca la comunicación modulando
significados que el sentido literal de la
comunicación nunca conseguiría por si misma.
Introduce marcos de referencia entre los
intercomunicantes, adecua el comportamiento
a partir de estándares convencionales, sitúa la
intencionalidad de la comunicación en el
ámbito que relaciona a los interlocutores, etc.
metacomunicación que informa sobre el poder
con el que acomodar la realidad en un mapa
cognitivo: por una parte, define el medio donde
se da la relación y, por otra, sitúa a los
interlocutores simétrica o
complementariamente, según el rango que
tengan éstos en la relación.

Podemos considerar, pues, que el Cuadro 1. Efectos de los contextos de delegación y de
contexto es el marco en el que las personas compromiso.
actualizan su potencial y se reconocen como
seres humanos a través de los significados
compartidos que despliegan el sentido y la
comprensión de los sucesos y conflictos en los
que están envueltos. De ese modo el contexto
desde el que se aborda una determinada
problemática posee implicaciones tanto para el
modo en que se intenta resolver el conflicto
como para el proceso de autocomprensión, de
toma de conciencia acerca de quién se es y del
conflicto en que la persona se halla inmersa.

Nos interesa aquí analizar algunas
implicaciones o efectos de dos tipos de contexto
q u e h em o s d en o m i n a d o c o n tex to d e
3.1.1. Competencia
compromiso y contexto de delegación
avanzando que la mediación, por sus Por competencia entenderemos: Un saber
características, se ubica dentro de los contextos actuar en un contexto particular, combinando y
de compromiso. movilizando un conjunto de recursos pertinentes, para
realizar actividades de acuerdo con ciertas exigencias, a
fin de producir resultados para los destinatarios que
3.1 Efectos o implicaciones contextuales satisfagan ciertos estándares de desempeño. (Le Boterf,
• En nuestro análisis identificamos cuatro 2000). El acento se pone en la pertinencia de la
implicaciones contextuales que afectan el acción y en su realización. Es así que la
modo en que la persona enfrenta su competencia se observa en los resultados, en los
problemática: elementos que se dinamizan en torno a un
proceder. El individuo, en el ámbito de su
• La competencia personal competencia, desarrolla "un conjunto de
• El significado atribuido a la relación capacidades integradas y de recursos disponibles para
que sus miembros (los que componen el grupo
• La legitimidad
relacional de referencia: familia, trabajo,
• Los recursos que se movilizan vecindario, etc.) puedan llevar a cabo los propósitos

Las características contextuales de la organización en el marco de las relaciones
afectan a todos los participantes en la relación prescritas por sus respectivos roles" Schvarstein
pero pueden ser moduladas, y hasta cierto (2003).
punto trascendidas, por los mismos en función
de su comprensión de la situación y de su
actuación. El cuadro 1 resume dichas
características tanto para el contexto de
delegación como para el de compromiso.

En los contextos de delegación, la
Este tipo de situaciones son las que
competencia se ubica en en el “exterior” de la
persona. El sujeto “desiste”, “pierde” o“cede”
capacidad de acción al colocarse en una
situación “down” con respecto a un experto.
Sobre el saber del experto se proyectan las
esperanzas y se delega la responsabilidad de las
propias decisiones y acciones. De ese modo, la
responsabilidad personal es transferida y la
persona aplaza el cambio personal al mantener
su homeóstasis por medio de trasladar la
problemática al experto. La vivencia del
conflicto, la tensión se desplaza también al
En los casos en que una
experto que ha de responder a la misma por
delegación.
La aceptación de esta delegación
de la competencia, en los casos en que se
requiere cambio personal, está abocada al
Por contra, en los contextos de
fracaso (dado que se crea una situación
paradójica en la que quién ha de realizar el
cambio personal es validado como
incompetente para ello) y puede acabar en la
“descalificación” del experto por no ser
bastante experto o no saber realizar bien su
trabajo.
Especialmente compleja para el
experto es la situación si actúa como técnico de
una institución (educación, justicia...) que
delega a su vez actuaciones que pueden entrar
en contradicción con la demanda formulada
por lo que podemos hablar de una situación de
doble delegación en la que ha de armonizar
demandas contradictorias. La delegación se
puede volver todavía más compleja en el caso
de ser aceptada por un técnico de una
institución (p.e. educación) cuando la función
social delegada está adscrita a otra (p.e.
justicia). En este caso, además de la paradoja
creada por la delegación ocurre una confusión
acerca del objeto de intervención.
dan lugar a recorridos de algunas familias por
diversas instituciones porque su demanda no
“encaja” en ninguna de ellas. También son
altamente costosas tanto por su falta de eficacia
y cronificación de los problemas como por la
desconfianza que generan en los participantes
en la relación. La tentación de
“descalificación” del otro es alta ya que es visto
como que tiene el problema porque no quiere
solucionarlo (demandante) o, en el caso del
experto, por incompetente.
determinada institución, en su función social,
asume la responsabilidad de forma jerárquica,
el contexto de delegación corre el riesgo de
devenir un contexto coercitivo.
compromiso, a los actores se les reconoce su
competencia y se fomenta la decisión
responsable. Los participantes en la relación
están en una situación en la que son agentes de
sus vidas por lo que no pueden negar su
responsabilidad en las decisiones que se toman.
Los otros participantes en dicho contexto están
en la misma situación pero en diferentes roles.
La competencia y la responsabilidad son
compartidas según las funciones de cada uno
de los participantes. La ubicación de las
personas en un contexto de compromiso
confronta a cada participante con su
responsabilidad provocando una necesidad de
cambio y movilización de recursos personales o
un cambio en la forma de presentar la
demanda.

Partiendo de la incertidumbre -se
Po r l o q u e r e s p e c t a a l o s
han perdido, o faltan fundamentos en las
verdades subjetivas-, de los actores ante el
resultado y sus efectos, los procedimientos de
mediación tienden a la construcción de un
contexto de compromiso a través de la
explicación del procedimiento de mediación y
en la elaboración de un acta de inicio de
mediación. También contribuye a ello la
actuación responsable del mediador que afirma
su competencia sin invadir la de los
participantes, es decir ejerce el pilotaje del
proceso de mediación. Así pues, el efecto de la
Los contextos de delegación se
relación, en el contexto de compromiso,
produce reconocimiento de la competencia
personal, validando la función de la
organización de referencia, así como su
competencia social. La toma de conciencia de
los miembros que confor man una
organización, respecto del desempeño de su
función social, actualizando su competencia,
reestructuran sus relaciones en torno al fin que
Los contextos de compromiso
se proponen. Los individuos son rescatados en
su relación.
3.1.2. Significado
El significado que damos a las
situaciones y a los acontecimientos de nuestra
vida están influidos por el contexto, la sociedad
y la cultura en la que nos hallamos inmersos,
de modo que la comprensión de la situación
puede estar totalmente distorsionada por
significados predeterminados que pueden no
corresponderse con la experiencia personal. La
contradicción entre la experiencia personal y el
significado predeterminado puede resolverse
tanto en forma de alienación (mediante la
desvalorización, negación o represión de la
propia experiencia) como resolverse en el
sentido de incremento de la autocomprensión y
desarrollo de la conciencia personal.
significados predeterminados, en las situaciones
que son atendidas por instituciones el
significado surge del consenso socio-político (de
polis). “...los sistemas simbólicos que los individuos
utilizaban al construir el significado eran sistemas que
estaban ya en su sitio, que estaban ya “allí”,
profundamente arraigados en el lenguaje y la cultura.
Constituían un tipo muy especial de juego de
herramientas comunal, cuyos utensilios, una vez
utilizados, hacían del usuario un reflejo de la
comunidad”. (Bruner ,1997 p.27).
caracterizan por un alto grado de comprensión
de las situaciones en función de significados
social o institucionalmente predeterminados
(macrosociales) que se alejarán más de la
experiencia y del interés personal, y singular, en
función de la rigidez de sus reglas y normas de
funcionamiento.
nacen de una comprensión de las situaciones
en función de una experiencia íntima que
afecta a las personas implicadas y que incide en
todo su ser (microsocial). Los significados
están relacionados con la comprensión
personal de la situación de la que puede
hacerse cargo o no en función de su
experiencia personal. Dice Barbara Rogoff
(1993). “Para actuar y comunicarse, los individuos se
implican constantemente en intercambios que mezclan lo
“interno” y lo “externo”; dichos intercambios se
caracterizan por el hecho de que los individuos
comparten el significado.... es imposible decir “de quien”
es el objeto de interés conjunto, o de “quien” es una idea
creada en colaboración. Un individuo que participa en
la resolución conjunta de un problema,.. está implicado
en un proceso que le lleva más allá del nivel individual...
beneficiarse del pensamiento compartido no implica coger
algo de modo externo”.

La experiencia personal
corresponde al ámbito de lo íntimo. En ella los
significados no coinciden necesariamente con
las definiciones sociales sino que son
autorreferentes y tienden a preservar la
integridad personal y al crecimiento. En dicho
ámbito, el significado de las situaciones a
El riesgo para el establecimiento
resolver están relacionadas con la comprensión
(conciencia) de la situación. En los contextos
de compromiso, los significados están, pues,
estrechanente relacionados con la toma de
conciencia de las realidades afectadas, lo que
supone una implicación personal en la
actuación. En un conflicto relacional, el/los
otro/s es/son un interlocutor/es alineado/s e
implicados en la situación, por lo que "el
problema ya no es el de hacer homogéneos y coherentes
diferentes puntos de vista; el problema es comprender
cómo puntos de vista diferentes se producen
Por contra, el contexto de
recíprocamente" (Ceruti, Mario), citado por
Musitu y Allat (1.994). Podríamos añadir que al
avanzar en esa comprensión conjunta de la
situación se facilita un proceso de toma de
conciencia de la misma de una forma más
amplia, de modo que la situación se redefine y,
por tanto, la experiencia, la vivencia de la
situación varía. Las expectativas en los
resultados pierden fuerza y rigidez en su
exigencia al ser reubicadas en una
comprensión diferente de la situación.
3.1.3. Legitimidad
En el contexto de delegación,
cuando se sitúa en el ámbito de las
En la resolución de conflictos un
intervenciones públicas, el saber y el actuar
f o r m a n p a r t e d e l p ro c e d i m i e n t o d e
intervención. La relación entre el operador
institucional y el usuario está protocolizado. El
poder de las intervenciones viene organizado
en cascada desde el Estado al individuo. Sus
actuaciones son de “oficio”. Comprenden un
territorio social en el que desarrollan funciones
específicas o complementándose con otras
instituciones. Son el fiel social de referencia en
las valoraciones de los efectos esperados. La
situación que preside la relación esta
determinada por la función social que
desempeña la institución por lo que la relación
es formal y se establece en torno a roles
predeterminados. Su legitimidad deriva, pues,
de la organización social y de la legitimidad de
su autoridad.
de una relación auténtica, está tanto en ceñirse
estrictamente al rol designado por la institución
como en atribuir a la institución, y por ende al
técnico que la representa, una capacidad para
la resolución de problemas y situaciones que no
se corresponde con la realidad. Se establece así
una posición de complementariedad rígida en
la que la responsabilidad personal se inhibe y
la relación se aleja de las personas concretas
que participan en la misma.
compromiso se caracteriza por las
interacciones informales o semiformales de los
actores. La relación no está rígidamente
protocolizada sino que existe una apertura a la
situación y a la persona concreta. La relación
tiende al encuentro y lo esencial de la misma
no se centra en el rol ni en el saber sino en
aspectos esenciales que cada persona vive en su
intimidad con la otra. En resumen, la
legitimidad deriva del encuentro entre personas
auténticas que se reconocen mutuamente que
conlleva implicación y compromiso.
3.1.4. Recursos
aspecto especialmente relevante son los
recursos que se movilizan o que se conciben
como susceptibles de movilización para la
resolución de los mismos.

Un efecto de los contextos de
delegación es el “estrechamiento” de la
percepción acerca de qué recursos pueden
contribuir a solucionar el problema. Las
instituciones codifican las situaciones que
abordan desde parámetros recurrentes, es decir,
aquellos que se han desarrollado desde el
marco de sus actuaciones. Son recursos sociales
predeterminados basados en redes sociales
Este proceso empieza en las
secundarias(5) en función de la concepción que
la institución posee de su misión. Estos recursos
se pueden ajustar o no a las necesidades de un
usuario concreto. Los recursos se conciben a
partir de una forma de leer la realidad y
estructuran jerárquicamente el proceder en el
ámbito de su función social. De ese modo, la
movilización de recursos dentro de un contexto
de delegación está limitada a los que están
disponibles en el ámbito en el que se intenta
resolver por lo que en deter minadas
circunstancias puede contribuir a agravar el
conflicto que se pretende resolver.
La apertura de los contextos de
compromiso (en los que se alienta la
competencia y se profundiza en los significados,
está relacionado con la responsabilidad
asumida) facilita que se puedan concebir
recursos para la solución del problema dentro
de un espectro más amplio y de forma más
creativa a partir de recursos personales,
familiares y/o redes sociales primarias(6).
Lo anterior sienta las bases para
4. Implicaciones para la mediación
De nuestra reflexión se desprende
que la mediación (especialmente en los casos en
que exista una vinculación entre los
participantes) requiere del establecimiento de
un contexto de compromiso. El establecimiento
de este contexto es uno de los objetivos
principales del trabajo del mediador y requiere
de continuidad y perseverancia. No se puede
definir de una vez por todas un contexto de
compromiso sino que se trata de todo un
proceso en el que el mediador ha de estar
atento al juego relacional, esforzándose por
facilitar un encuentro entre personas
auténticas, delimitando responsabilidades
(aceptando la suya y confrontando a los clientes
con las suyas), explorando, compartiendo
significados, ubicando el poder dentro de las
competencias legítimas de cada uno de los
participantes y no en una relación de
superioridad/inferioridad sino de cooperación.
primeras sesiones y se articula en torno al
primero de los acuerdos: la elaboración del
acta de inicio de la mediación. Para el
establecimiento del contexto de compromiso es
especialmente importante que dicha acta se
elabore con calma, asegurándonos que cada
participante comprenda las consecuencias de la
aceptación del acta y, por tanto, de su
responsabilidad en el proceso de mediación. La
elaboración y la firma del acta ha de ser un
proceso altamente ritualizado: escucha atenta
de las diversas definiciones de la situación
conflictiva, lectura de las bases de la mediación,
confirmación de la comprensión de lo leído,
acentuación de los aspectos de responsabilidad
y de libertad durante la mediación,
clarificación de las funciones del mediador, el
coste del servicio y la duración máxima de la
mediación. Especialmente importante es
recalcar la posibilidad de desistir del proceso de
mediación y la confidencialidad del mismo.
que se desarrolle el contexto de compromiso
pero donde verdaderamente descansa éste es
en la actuación del mediador, en su propuesta
auténtica que entiende la neutralidad como
una implicación en la mejora de la situación de
los participantes y no como un distanciamiento
y en su disposición al encuentro.
El encuentro es la base de
cualquier trabajo con personas y, especialmente
aquellos que tienden al cambio personal. Para
poder proponer el encuentro el mediador ha de
poseer un alto grado de autocomprensión y
per manecer abierto. La propuesta de
encuentro con cada uno de los clientes puede
no ser aceptada, pero si ocurre el encuentro, las
potenciando su valor como persona, su
integridad y legitimando su competencia.
Antonio V. Vaquer Chiva, Dr. en Psicología. Terapeuta y
mediador familiar. Profesor del Máster Universitario en
Intervención y Mediación Familiar de la Universitat
Jaume I. Profesor de los cursos de Experto Universitario
de Mediación Familiar de la UNED y de la UNIA.
avaquer@uij.es

actuaciones del mediador no pueden ser más
que neutrales e imparciales ya que nacen del
reconocimiento de cada uno como persona
humana valiosa. Por su parte, los clientes se
siente validados como personas -no
necesariamente en sus alegaciones- lo que les
permite iniciar un proceso de cambio.
Francisco L. Hidalgo Mena. Psicólogo, Terapeuta y
Mediador familiar. Coordinador y profesor del curso de
Experto U. en Mediación Familiar de la UNED.
Codirector y profesor del curso de Experto U. en
Mediación Familiar, Asuntos Civiles y Mercantiles de la
UNIA.
medfam12@gmail.com

E l e n c u e n t ro p e r m i t e u n a
“participación activa” del mediador (pilotaje)
que se orienta a favorecer la emergencia de
nuevos significados sobre la relación que
restablezcan o incrementen la competencia
para hacerse cargo de la situación devolviendo
la confianza en la propia competencia
derivadas de la situación de conflicto. Permite
aproximarse a la comprensión de los diferentes
significados del conflicto, no quedar atrapado
en “clichés” sociales o culturales e impulsar la
asunción de responsabilidades a partir del
desarrollo de la autocomprensión y de la
comprensión de la situación.

En resumen, el proceso de la
mediación ha de establecer un contexto que
impulse el proceso de autocomprensión
deshaciendo un camino en el que los
protagonistas se han quedado atrapados en un
conflicto y bloqueados (al menos parcialmente)
en su proceso de desarrollo del ser. La
tentación de depositar su conflicto en manos de
un tercero, perdiendo de ese modo parte de su
capacidad para hacerse cargo de sus propias
vida, ha de ser desalentada sistemáticamente
por el mediador que ha de conducir todo el
proceso desde la alienación hacia el
compromiso, la competencia y la
responsabilidad en un proceso que implica
rescatar al individuo a partir de su conflicto
Notas a pie de página
(1) Conciencia de ser: (Carrero,2007) El sentido
o focalización desde el que la persona se
reconoce.
(2) Encuentro: Momento a partir del cual se
produce la vinculación afectiva positiva, la
consiguiente relación significativa más o
menos profunda posibilita la posterior
realización de los esfuerzos necesarios para
el desarrollo personal. (Vaquer, Carrero y
García-Bacete, 2008).
(3) Autocomprensión: (Vaquer, 2012) Forma en
que la persona se reconoce, integra y
comprende. Proceso psicosocial básico que
se desarrolla desde las áreas de potencial,
interacción e identidad.
(4) Pilotaje: Relación significativa y auténtica
que requiere de aceptación mutua. Supone
un encuentro y reconocimiento personal.
Proporciona apoyo afectivo con lo que
sienta las bases de seguridad y confianza en
las propias posibilidades. Autoriza la
Kairós.
intervención en los procesos de cambio y
desarrollo de la persona a partir del ejercicio
de la función de guía, mediante la cual se
vehiculiza y potencia el proceso de
E. (1988) El Método: El
actualización de su potencial como persona
humana. (Vaquer, Carrero y García-Bacete,
2007).
(5) Red social secundaria: Relaciones que
nacen de la disponibilidad de recursos que
abastecen las instituciones públicas.
(6) Red social primaria: Relaciones alimentadas
en el ámbito de las interacciones con
personas próximas
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