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(UAPA)
Presentado por:
Matricula:
16-5790
Tema:
Tarea III
Asignatura:
Geografía General
Investigación en fuentes bibliográficas y/o electrónicas sobre las
galaxias del universo.
- Tamaño y Formas
Hay galaxias enormes como Andrómeda, o pequeñas como su vecina M32. Las
hay en forma de globo, de lente, plana, elíptica, espiral (como la nuestra) o formas
irregulares. Las galaxias se agrupan formando "cúmulos de galaxias".
- Clases
Galaxias elípticas
Galaxias espirales
Galaxias irregulares
- La Vía Láctea
La Vía Láctea es una galaxia grande, espiral y puede tener unos 100.000 millones
de estrellas, entre ellas, el Sol. En total mide unos 100.000 años luz de diámetro y
tiene una masa de más de dos billones de veces la del Sol.
Cada 225 millones de años el Sistema Solar completa un giro alrededor del centro
de la galaxia. Se mueve a unos 270 km. por segundo.
La Vía Láctea tiene forma de lente convexa. El núcleo tiene una zona central de
forma elíptica y unos 8.000 años luz de diámetro. Las estrellas del núcleo están
más agrupadas que las de los brazos. A su alrededor hay una nube de hidrógeno,
algunas estrellas y cúmulos estelares.
El Sol es el único cuerpo celeste que emite luz propia, la cual es producida por la
combustión de hidrógeno y su transformación en helio por la fusión nuclear. El
sistema solar se formó hace unos 4600 millones de años11 12 13 a partir del
colapso de una nube molecular. El material residual originó un disco circumestelar
protoplanetario en el que ocurrieron los procesos físicos que llevaron a la
formación de los planetas.9 El sistema solar se ubica en la actualidad en la Nube
Interestelar Local que se halla en la Burbuja Local del Brazo de Orión, de la
galaxia espiral Vía Láctea, a unos 28 000 años luz del centro de esta.
El Sol gira una vez cada 27 días cerca del ecuador, pero una vez cada 31 días
más cerca de los polos.
En el núcleo del Sol hay hidrógeno suficiente para durar otros 4.500 millones de
años. Cuando se gaste este combustible, el Sol cambiará: según se vayan
expandiendo las capas exteriores hasta el tamaño actual de la órbita de la Tierra,
el Sol se convertirá en una gigante roja, algo más fría que hoy pero 10.000 veces
más brillante a causa de su enorme tamaño. Sin embargo, la Tierra no se
consumirá porque se moverá en espiral hacia afuera, como consecuencia de la
pérdida de masa del Sol. El Sol seguirá siendo una gigante roja, con reacciones
nucleares de combustión de helio en el centro, durante sólo 500 millones de años.
No tiene suficiente masa para atravesar sucesivos ciclos de combustión nuclear o
un cataclismo en forma de explosión, como les ocurre a algunas estrellas.
Después de la etapa de gigante roja, se encogerá hasta ser una enana blanca,
aproximadamente del tamaño de la Tierra, y se enfriará poco a poco durante
varios millones de años.
El sol es una gran esfera de gases incandescentes, pero se cree que su porción
central o núcleo, se encuentra en estado líquido. La superficie aparente del sol es
denominada fotosfera (esfera de luz). Alrededor de la fotosfera se extiende una
capa de vapores incandescentes, de colores vivos, por lo cual se llama cromosfera
(espera del color). En torno a la fotosfera y a la cromosfera se encuentra la
corona, que es un gigantesco halo de gases que envuelve al sol; la corona sólo es
visible durante los eclipses. En la fotosfera se observan porciones más brillantes
denominadas fáculas y otras oscuras, a las que se les da el nombre de manchas.
En el sol se observan también enormes prominencias luminosas, formadas por
gases de hidrógeno y helio, que parten de la fotosfera como enormes lenguas de
fuego hasta alcanzar más allá de la cromosfera, como puede verse en la siguiente
figura:
Influencia del sol sobre la tierra: La energía solar es la fuente de la luz y el calor;
nuestros alimentos, habitaciones y vestidos nunca hubiesen existido sin los rayos
del sol. La desaparición de la energía solar representaría el final de toda
manifestación de vida sobre nuestro planeta.
El sol nos da calor además la luz. Si por alguna razón el sol dejara de brillar,
todos los seres vivos – animales y vegetales – se congelarían. En poco tiempo
todos los lagos, ríos y océanos quedarían cubiertos de hielo. Pocos días después
toda el agua de los océanos formaría una masa helada. El aire que rodea la tierra
se convertiría en líquido y cubriría la faz del planeta. Aun este aire líquido se
congelaría y solidificaría. La temperatura de la tierra descendería a un nivel que
apenas podemos imaginar.
El Sol se formó hace 4.650 millones de años y tiene combustible para 5.500
millones más. Después, comenzará a hacerse más y más grande, hasta
convertirse en una gigante roja. Finalmente, se hundirá por su propio peso y se
convertirá en una enana blanca, que puede tardar un billón de años en enfriarse.
Se formó a partir de nubes de gas y polvo que contenían residuos de
generaciones anteriores de estrellas. Gracias a la metalicidad de dicho gas, de su
disco circumestelar surgieron, más tarde, los planetas, asteroides y cometas del
Sistema Solar. En el interior del Sol se producen reacciones de fusión en las que
los átomos de hidrógeno se transforman en helio, produciéndose la energía que
irradia. Actualmente, el Sol se encuentra en plena secuencia principal, fase en la
que seguirá unos 5000 millones de años más quemando hidrógeno de manera
estable.
Llegará un día en que el Sol agote todo el hidrógeno en la región central al haberlo
transformado en helio. La presión será incapaz de sostener las capas superiores y
la región central tenderá a contraerse gravitacionalmente, calentando
progresivamente las capas adyacentes. El exceso de energía producida hará que
las capas exteriores del Sol tiendan a expandirse y enfriarse y el Sol se convertirá
en una estrella gigante roja. El diámetro puede llegar a alcanzar y sobrepasar al
de la órbita de la Tierra, con lo cual, cualquier forma de vida se habrá extinguido.
Varios años después Shapley demostró que los cúmulos están distribuidos con
estructura más o menos esférica alrededor del centro del disco, en lo que
denominó el halo galáctico. También mostró que éste no está centrado en el Sol,
sino en un punto distante del disco en la dirección de la constelación de Sagitario,
donde situó correctamente el centro de la galaxia.
Todas las estrellas que componen la Vía láctea están rotando alrededor del
núcleo, que se cree que puede contar en su interior con un agujero negro. Las
observaciones astronómicas referidas a galaxias distantes muestran que la
velocidad de rotación del Sol alrededor de la galaxia es de unos 250 km/s,
empleando aproximadamente 250 millones de años en realizar una revolución
completa. Las estrellas próximas al Sol realizan una órbita relativamente parecida,
pero las más cercanas al centro de la galaxia giran más rápido, hecho que se
conoce como rotación diferencial.
La edad de la Vía Láctea se estima en unos 13 mil millones de años, dato que se
desprende del estudio de los cúmulos globulares y que concuerda con el resultado
obtenido por los geólogos en su estudio de la desintegración radiactiva de ciertos
minerales terrestres.