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Hipocondría una enfermedad

real
¿Cáncer? ¿Tumor cerebral? ¿Esclerosis múltiple? Las personas con miedo a la
enfermedad creen estar graves, pese a que están completamente sanas. Hasta que
el miedo mismo se transforma en enfermedad.

https://www.dw.com/es/hipocondr%C3%ADa-una-enfermedad-real/a-45298282

"Tenía un enorme miedo a morir pronto”, cuenta Lisa Midtun. El torturante temor a estar
gravemente enferma no la abandonaba jamás. Apenas podía dormir. Sus pensamientos
giraban continuamente en torno a sus síntomas. "Todo comenzó cuando mi hijo tenía un
año”, recuerda. Lisa, noruega, tenía en ese entonces 20.
Sus temores eran para ella una certidumbre. Acudió a su médica de cabecera, que la
examinó de pies a cabeza y le aseguró que gozaba de excelente salud. Pero dudó del
diagnóstico y el miedo siguió asediándola.
Unos meses después, la médica tuvo claro qué mal aquejaba a Lisa: hipocondría. Necesitaba
con urgencia ayuda. Y la obtuvo en su propia ciudad: Bergen. Allí se encuentra la única
clínica de Europa especializada en esa enfermedad.
Ayuda especializada

Lisa Midtun.
En 2003 comenzó su tratamiento con el psiquiatra Ingvar Wilhelmsen, fundador de la
clínica. "Al inicio de la terapia, les pregunto a los pacientes por las experiencias que los han
marcado”, dice el especialista. Lisa Midtun se había visto tempranamente confrontada con
la enfermedad y la pérdida. Su madre murió cuando ella tenía seis años de edad. "Una
semana después de que le diagnosticaran cáncer, ya estaba muerta”, relata.
Su miedo a las enfermedades se manifestó mucho después, cuando nació su primer hijo.
Primero temía que él pudiera morir pronto. Luego percibió los primeros signos de temor a
su propia muerte.
"Me compré incluso un libro de medicina”, relata. Hoy considera que fue un error. Leer
sobre síntomas le provocaba siempre la certeza de estar gravemente enferma. "No estaba
obsesionada con una enfermedad determinada, pero siempre encontraba alguna que
coincidía con mis síntomas”, explica. Su propio diagnóstico: leucemia, cáncer linfático, un
tumor cerebral o, más tarde, esclerosis múltiple.
Un círculo vicioso
Lisa Midtun se sintió desde un principio bien con el Dr. Wilhelmsen. "Me escuchó y tomó en
serio mis temores”, afirma. El especialista explica que las personas hipocondríacas con
frecuencia son consideradas histéricas, o se les acusa de querer llamar la atención. Pero eso
es un cliché. Los afectados sufren un miedo real.
Algunos incluso evitan ir al médico, por temor a que les confirme que están enfermos. Estos
pacientes están especialmente desvalidos. Estas personas perciben síntomas corporales con
especial intensidad, explica el psiquiatra. Y eso provoca un círculo vicioso, "porque entonces
se eleva la producción de adrenalina, el corazón late más rápido y se transpira de puro
miedo”. Esos síntomas, a su vez, aumentan el miedo.
Lisa Midtun, maestra de inglés e historia, nunca le tuvo miedo a las bacterias o a las
infecciones. Temía a las enfermedades realmente graves.

El psiquiatra Ingvard Wilhelmsen.


Aceptar la muerte
No se sabe con exactitud qué provoca estas alteraciones. "La mayoría de los pacientes son
personas muy creativas”, dice Wilhelmsen, y agrega que a menudo intentan controlar lo
incontrolable.
Particularmente importante es, a su juicio, que "los pacientes deben aceptar que son
mortales”. En eso trabajó también con Lisa. "Ingvard Wilhelmsen me dijo que cada persona
tenía un proyecto. El mío consistía en sobrevivir. Pero nadie vive para siempre. En
consecuencia, mi proyecto estaba desde un comienzo condenado al fracaso. Y lo
comprendí”, afirma.
A veces, el psiquiatra les cuenta a sus pacientes, en voz alta, su historia. "Algunos comienzan
a reírse" y comprenden rápidamente que muchos de sus pensamientos son irracionales. No
se puede buscar respuesta a un hipotético acontecimiento del futuro. "Deben despojarse de
esas dudas permanentes. Y solo pueden hacerlo si ellos mismo deciden no seguir fiándose
del miedo", señala.
La nueva cibercondría
Resulta difícil estimar cuánta gente padece de hipocondría, ya que muchos no acuden a un
médico. Se calcula que en Alemania este problema aqueja a un diez por ciento de la
población. Y la tendencia va en aumento, porque cada vez más personas buscan en internet
información sobre cuadros patológicos. De este modo se refuerza en algunos el miedo a
las enfermedades. El fenómeno ha sido bautizado como "cibercondría”.
Ingvard Wilhelmsen trata a unos 100 pacientes por año en su clínica de la localidad noruega
de Bergen. En la mayoría de los casos basta con cinco sesiones ambulatorias. Lisa Midtun
recibió una sexta en 2007, tras el nacimiento de su segundo hijo. Desde entonces, ha
aprendido a no conferir tanta importancia a sus síntomas. Y se deshizo de su libro de
medicina. Tampoco recurre a internet para buscar información al respecto. "Busqué un
nuevo proyecto para mi vida. Me concentro en este momento, en mi familia y mis amigos”,
dice con una sonrisa, acotando: "Y acepto que en la vida hay cosas inseguras”.
Diana Hodali (ERS/CP)


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Entrenar la resistencia
Entrenar la resistencia física de manera ligera contrarresta los efectos del estrés. Hacer jogging y
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