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UNIVER SIDAD DE CONCEPCIÓN

DEPARTAMENTO DE CIENCIAS DE LA TIERRA


10° CONGRESO GEOLÓGICO CHILENO 2003

ANÁLISIS CUANTITATIVO DE PELIGROS VOLCÁNICOS: UNA


APLICACIÓN EN LAHARES DEL VOLCÁN LANÍN (39ºS), ANDES
DEL SUR
L. LARA 1
1
Servicio Nacional de Geología y Minería. Av. Santa María 0104. Santiago. lelara@sernageomin.cl

INTRODUCCIÓN
El análisis de los peligros geológicos en
Chile, en particular aquellos derivados
de la actividad volcánica, se ha
abordado, generalmente, desde
observaciones geológicas semicuali-
tativas de las características de los
depósitos y su extensión en superficie.
Tradicionalmente, se ha podido definir
escenarios máximos o mínimos en el
contexto de los eventos 'históricos'
(entendiendo éstos como los registrados
en los últimos ca.400 años) o bien
considerando todo el Holoceno
(Moreno, 1999a; 1999b; Moreno, 2000;
Naranjo et al., 1999; Naranjo et al.,
2000). Un análisis cuantitativo, de mayor aplicación en ingeniería y planificación territorial,
requiere observaciones detalladas y examen objetivo de las áreas inundables, topografía de
alta resolución y modelos físicos de base. Esta última metodología de análisis, aplicada
especialmente en lahares, tiene ya una larga historia en el mundo y su adaptación es posible,
incluso, en las condiciones de información disponibles para los volcanes chilenos.
Aproximaciones exclusivamente sedimentológicas u orientadas a establecer más bien
relaciones genéticas desde una óptica 'naturalista' y cualitativa han constituido, hasta ahora,
una prioridad frente al tratamiento cuantitativo de los datos geológicos. La experiencia
mundial, en cambio, muestra que fundamentos físicos elementales, unidos a una mínima
información de detalle, son suficientes para abordar objetivamente el problema de las áreas
expuestas al alcance de los flujos laháricos y determinar escenarios probables. Asimismo,
existen fórmulas simples para hacer análisis de riesgo estimando el costo económico de estos
eventos. Considerando que todas estas aplicaciones se apoyan en observaciones geológicas, el
análisis cuantitativo de peligros es un objetivo alcanzable, al menos a pequeña escala. En este
trabajo se experimenta con esa posibilidad intentando determinar las secciones inundables por
flujos laháricos sobre la ruta internacional CH-199, que cruza el flanco norte del volcán Lanín
(39ºS) y que constituye un corredor bioceánico entre la IX región y la provincia del Neuquén
(Fig.1).

Todas las contribuciones fueron proporcionados directamente por los autores y su contenido es de su exclusiva responsabilidad.
FUNDAMENTO FÍSICO
Las premisas físicas que rigen el flujo de lahares son simples si se considera a éstos como
ondas de masa y densidad total constante, que descienden gravitacionalmente por las
quebradas cuyas cabeceras están en el flanco de los edificios volcánicos (e.g., Scott et al.,
1995). La conservación de la masa sugiere una relación del tipo S=K1*V2/3 (Iverson et al.,
1998) donde S es la sección inundada; V el volumen total y K1 una constante adimensional.
Un valor empírico de 0,05 para K1 fue obtenido por estos autores en una regresión sobre datos
del Mount Rainier (EE.UU). Deriva de lo anterior que la sección inundada se conserva a lo
largo del flujo, modificando solo su forma según la topografía. A su vez, considerando la
pérdida de momento que afecta al flujo lahárico y la conservación del volumen, Iverson et al.
(1998) obtienen una relación del tipo A=K2*V/2/3 donde área A es el área inundada, V el
volumen y K2 otra constante. Para esta última, los mismos autores obtienen un valor de 200.
Estas relaciones, junto a la topografía, son suficientes para trazar secciones inundadas sobre
las líneas de máxima pendiente. Este procedimiento puede realizarse manualmente o
automatizarse mediante un algoritmo como el que opera el software LAHARZ (Schilling,
1998). La unión de los bordes de cada sección infinitesimal generaría los límites del área total
inundada en el escenario analizado.

DATOS ESENCIALES
Debido a la sensibilidad que muestran los flujos gravitacionales a la topografía subyacente,
ésta es un dato esencial. La cartografía nacional, disponible en el territorio a escala 1:50.000,
excepcionalmente a 1:25.000, no es suficiente para un análisis de este tipo, donde se busca
resolución del orden de ca.1m para aplicaciones de ingeniería. Técnicas de fotogrametría
digital permiten obtener modelos numéricos de terreno con resolución de 10-0,1 m,
dependiendo de la escala de los fotogramas y el software, pero no todas las áreas volcánicas
en Chile poseen adecuada cobertura. Sin embargo, para aplicaciones de pequeña escala, es
posible levantar directamente datos topográficos en el terreno utilizando GPS o instrumentos
tradicionales de topografía. En este trabajo, se ha optado por esta última solución
concentrando el examen en dos secciones cruzadas por la ruta internacional CH- 199 con el
objetivo de evaluar el impacto de los lahares sobre ella. Adicionalmente, tanto las constantes
involucradas en el cálculo de las secciones inundadas como el concepto de vida útil de una
solución de ingeniería, tendrán relación con la recurrencia de los eventos volcánicos. Sin
embargo, un historial de frecuencia versus volumen, área inundada y sección de lahares no
existe para los Andes del Sur. En consecuencia, se ha optado aquí por utilizar un registro
disponible para el mismo Mount Rainier, situado en la cordillera noroccidental de
Norteamérica donde las características orográficas y el régimen de precipitaciones (e.g.,
Western Regional Climate Center/www.wrcc.dri.edu) es similar al documentado en los
alrededores del volcán Lanín (e.g., CONAF/www.conaf.cl). En efecto, la región del Mount
Rainier presenta precipitaciones del orden de 2000 mm/año o superiores, 80% de ellas en
estado sólido; y pendiente de 2 a 8% en los drenajes principales. Aunque la analogía anterior
parecería satisfactoria, se ha comprobado preliminarmente con datos del lahar de 1957 en el
volcán Llaima (Quinteros, 1991) y los flujos detríticos estacionales del Lanín, ajustándose
ellos a la ecuación de Iverson et al. (1998), dentro de su margen de confiabilidad.
Adicionalmente, aunque con un rango mayor de incerteza, existe una relación empírica entre
frecuencia y volumen de los flujos laháricos para el mismo Mount Rainier (Iverson et al.,
1998) que adquiere la forma V= K* F (con V: volumen y F: intervalo de recurrencia con
K≈105±1) y que servirá para situar el problema dentro de un margen temporal razonable.
LAHARES Y FLUJOS DETRÍTICOS NO VOLCÁNICOS EN EL VOLCÁN LANÍN:
SECCIONES INUNDABLES
Las dos secciones analizadas
presentan características diferentes y
actualmente exhiben soluciones
ingenieriles también contrastantes. En
el arroyo Lanín (Chile) se observa un
canal fluvial de ca. 9 m de ancho,
labrado hasta la superficie de una
colada basáltica holocena, cubierta
esta última por un depósito de flujo
piroclástico datado en ca. 1650 años Fig. 2. Secciones analizadas de los arroyos Lanín y Turbio (Fig.1). Se
AP (Fig.2). El conjunto es cubierto indica14posible alcance de lahares según sección y recurrencia junto a la
edad C de los depósitos más jóvenes cortados en cada canal.
por un terraplén artificial conectado
por un puente de hormigón sobre el canal. No se observa depósitos laháricos en este sector
aunque aguas abajo la secuencia piroclástica es cubierta por depósitos detríticos macizos con
bloques en superficie. En el arroyo Turbio (Argentina) se observa un canal activo de ca. 36 m
de ancho, relleno por niveles centimétricos a métricos de gravas y arenas con estratificación
planar y gradación inverso-normal, asociados a flujos detríticos no volcánicos de ocurrencia
estacional. Estos depósitos forman una superficie inclinada suavemente al este que describe el
peralte en la depositación (Fig.2). Este canal está labrado sobre un abanico lahárico mayor,
cubierto por vegetación y sin actividad reciente, emplazado sobre un complejo fluvioglaciario
de abanicos aluviales coalescentes. El abanico lahárico mayor disecta una secuencia
piroclástica postglacial, interdigitada con los depósitos fluvioglaciarios, en cuyo techo se ha
obtenido una edad 14C de ca.2460 años A.P. (Lara et al., en prensa).

De acuerdo al procedimiento establecido, se ha trazado las secciones de inundación posibles


en los puntos descritos (Fig.2). En el Arroyo Lanín, un lahar de sección igual a 100 m2 (y que
estadísticamente correspondería a un flujo de volumen más bien reducido), alcanzaría ca.28 m
de ancho sobre el canal, superando la capacidad del puente actual e inhabilitando la ruta. A su
vez, en el arroyo Turbio, un lahar de igual volumen y sección alcanzaría un ancho de ca. 26 m
sobrepasando también el actual cauce. Si parte del material que actualmente rellena la
quebrada del arroyo Turbio es removido, el ancho de la sección inundada por el hipótético
lahar se reduciría a ca. 21 m.

ANÁLISIS DE RIESGO
Los avances en la comprensión de los peligros naturales han estimulado el desarrollo de
metodologías de evaluación de los costos primarios y secundarios asociados a esos eventos
(e.g., Rose y Lim, 2002). Una aproximación al análisis de pérdidas indirectas es a través del
costo de oportunidad. En este sector turístico, el flujo inmigratorio alcanza hasta ca. 6000
personas/mes (cifra de febrero de 2000) y el gasto promedio es ca. US$30 por persona (INE,
2001). El valor máximo del costo de oportunidad por interrupción del flujo sería, entonces,
cercano a US$6.000/día. Otro método es dimensionar parte del costo económico directo de la
interrupción del tránsito en una ruta, corregida parcialmente por un 'by-pass', a partir de la
formula C=T* (F0+F1)/2*(C1-C0) (Infrastructure Development Institute-Japan; www.idi.or.jp),
desarrollada para las vías japonesas afectadas por deslizamientos de roca. En esta fórmula T
es la duración de la falla; F0 y F1 son los flujos vehiculares antes y después de ella y C0 y C1
son los costos en cada caso. Asumiendo una solución provisoria que durará a lo menos 5 días
y un efecto sobre flujos y costos de acuerdo a leyes empíricas (>5%), el costo de cada
anomalía sería ca. US$ 10.000 por evento durante la temporada estival. Mientras en el arroyo
Lanín los flujos detríticos de pequeño volumen serían eficientemente soportados por el
puente, en el arroyo Turbio éstos causan efectivamente al menos un corte anual en la ruta. En
este último lugar, una solución de ingeniería capaz de soportar eventos de 100 m2 de sección
(Fig.2), con recurrencia máxima de 10 años costaría ca. US$25.000. De lo anterior se puede
desprender, muy aproximadamente, que una inversión útil en el horizonte de los 10 años
queda financiada con el ahorro en un intervalo menor. Aunque este análisis requiere de otras
competencias para asegurar su rigurosidad, no es difícil anticipar que cualquier aproximación
económica se beneficiará de datos objetivos respecto de la magnitud, distribución y
recurrencia de los procesos volcánicos que amenazan un territorio.

CONCLUSIONES
Como muchos estratovolcanes situados en latitudes intermedias o altas, la cobertura de hielo,
junto a otros factores morfológicos, hacen del volcán Lanín un posible generador de flujos
detríticos con o sin inducción por actividad volcánica. A partir de información geológica de
detalle, es posible delimitar cuantitativamente las probables áreas de inundación en escenarios
definidos por parámetros objetivos. Las aplicaciones de esto se abren ampliamente al campo
del ordenamiento territorial o el diseño de obras de ingeniería, particularmente importantes en
un sector definido como corredor bioceánico para la IX región.

AGRADECIMIENTOS
Discusiones con J.A. Naranjo han motivado la preparación de este este trabajo. A. Díaz
participó en algunas campañas de terreno. R. Cucci (SEGEMAR) facilitó fotografías aéreas
de excelente calidad. Esta es una contribución al Proyecto de Riesgo Volcánico de
SERNAGEOMIN y al Proyecto MAP-GAC (Geociencias para las Comunidades Andinas) de
Geological Survey of Canada-SERNAGEOMIN. Publicación autorizada y patrocindada por la
Subdirección Nacional de Geología del Servicio Nacional de Geología y Minería.

REFERENCIAS
INE. 2001. Anuario de Turismo 2001. Instituto Nacional de Estadísticas (www.ine.cl).
Iverson, R.M.; Schilling, S.P.; Vallance, J.W. 1998. Objective delineation of lahar-inundation hazard zones.
Geological Society of America Bulletin, V.110, No.8, p.972-984.
Lara, L.E.; Naranjo, J.A.; Moreno, H. (en prensa). Lanín volcano (39.5ºS), Southern Andes: Geology and
morphostructural evolution. Revista Geológica de Chile.
Moreno, H. 1999a. Mapa de peligros del volcán Osorno, Región de Los Lagos. Servicio Nacional de Geología y
Minería, Chile. Documentos de Trabajo No.11, 1 mapa escala 1.75.000. Santiago.
Moreno, H. 1999b. Mapa de peligros del volcán Calbuco, Región de Los Lagos. Servicio Nacional de Geología
y Minería, Chile. Documentos de Trabajo No.12, 1 mapa escala 1.75.000. Santiago.
Moreno, H. 2000. Mapa de peligros del volcán Villarrica, regiones de La Araucanía y de Los Lagos. Servicio
Nacional de Geología y Minería, Chile. Documentos de Trabajo No.17, 1 mapa escala 1.75.000. Santiago.
Naranjo, J.A.; Haller, M.; Ostera, H.A.; Pesce, A; Sruoga, P. 1999. Geologia y peligros del complejo volcánico
Planchon-Peteroa, Andes del Sur (35º15'S), Región del Maule, Chile - Provincia de Mendoza, Argentina.
Servicio Nacional de Geología y Minería, Chile. Boletin No.52, 55p. Santiago
Naranjo, J.A.; Moreno, H.; Polanco, E.; Young, S. 2000. Mapa de peligros de los volcanes del Alto BioBio,
regiones del Biobio y de la Araucanía. Servicio Nacional de Geología y Minería, Chile. Documentos de Trabajo
No.15, 1 mapa escala 1:100.000. Santiago.
Quinteros, C. 1991. Estudio de los lahares del volcán Llaima, IX región de la Araucanía. Universidad de Chile
(inédito).
Rose, A.; Lim, D. 2002. Business interruption losses from natural hazards: conceptual and methodological issues
in the case of the Northridge earthquake. Environmental Hazards No.4, p.1-14.
Scott, K.M.; Vallance, J.W.; Pringle, P.T. 1995. Sedimentology, behavior, and hazards of debris flows at Mount
Rainier, Washington. U.S. Geological Survey Professional Paper 1547. 56p.
Schilling, S.P. 1998. LAHARZ: GIS programs for automated delineation of lahar hazard zones. U.S. Geological
Survey Open-file Report.

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