Camino A La Salvación Estudios Sobre El Santuario PDF

El Camino
de la
Salvación
Guías de estudio (Revisadas en el año 2001)
Asociación Ministerial
de la
División Sudamericana
SGAS Avenida L-3, Q611, Mod. 75

Brasilia DF, Brasil
RECONOCIMIENTOS
Los autores quieren dar sus más sinceros agradecimientos a todos los que hicieron comentarios y
dieron sugerencias constructivos con respecto a este manuscrito. Les agradecemos especialmente a los
que dedicaron tiempo para revisar el material y para darnos ánimo. El Dr. Gerhard Pfandl, secretario
asociado y coordinador del Espíritu de Profecía en la División del Pacífico Sur, nos animó a someter este
material a la Comisión de Investigación Bíblica y nos dio muchas valiosas sugerencias con respecto a su
exactitud y su aceptabilidad. Sus críticas amables, pero totalmente constructivas, contribuyeron a que la
revisión del borrador fuera realmente agradable. El Dr. Ray Roennfeldt, catedrático y profesor de
Teología Sistemática e Histórica del Colegio de Avondale (Australia) nos ayudó en forma especial a
enfocar nuestra atención en algunas fuentes adventistas eruditas, con sus comentarios y la solidez de sus
argumentos, y sus exhortaciones con respecto a mantener el equilibrio en algunos de los aspectos de este
estudio. También leyó este manuscrito el Sr. Ray Givney, pastor de una de las iglesias de Townsville, e
hizo valiosas sugerencias en las primeras etapas del desarrollo de este proyecto. La Comisión de
Investigación Bíblica de la División del Pacífico Sur también evaluó este manuscrito. Les agradecemos el
tiempo que dedicaron a esta tarea y por su declaración convencida en el sentido de que es “un valioso
auxiliar adventista para el estudio de la doctrina del santuario”.
Los autores también agradecen la amable paciencia de los miembros de sus respectivas familias y
la de los que contribuyeron a hacer frente a los costos de impresión. Esta obra se escribió inicialmente en
respuesta a una solicitud de estudios por parte de una iglesia que no es de nuestra fe.
Los reconocimientos relativos a algunas fuentes de información aparecen en el texto;
mencionamos otras a continuación, y recomendamos su lectura:
Andreasen, M.L., 1969, The Sanctuary Service (El santuario y sus servicios), segunda edición
revisada, Washington, D.C.: Review and Herald Publishing Association.
Gane R., 1999, Altar Call (Llamado de altar). Berrien Springs, Michigan: Diadem.
Goldstein, C., 1992, False Balances (Equilibrios inestables), Boise, Idaho, Pacific Press
Publishing Association.
Goldstein, C., 1995, Between the Lamb and the Lion (Entre el Cordero y el León), Boise, Idaho,
Pacific Press Publishing Association,
Gordon, P.A,, 1983, The Sanctuary, 1844, and the Pioneers (El santuario, 1844 y los
pioneros), Washington, D.C.: Review and Herald Publishing Association.
Hardinge, L., 1991, With Jesus in His Sanctuary (Con Jesús en su santuario), Harrisburgh,
Pennsylvania, American Cassette Ministries Book Division.
Haskell, S.N., 1914, (copia fotostática, 1970), The Cross and Its Shadow (La cruz y su
sombra), Hagerstown, Washington, D.C.: Review and Herald Publishing Association.
Holbrook, F.B., 1989, The Seventy Weeks, Leviticus, and the Nature of Prophecy (Las setenta
semanas, el Levítico y la naturaleza de la profecía), Washington, D.C.: Biblical Researc
Institute (Instituto de Investigación Bíblica).
Holbrook, F.B., 1989, Issues in the Book of Hebrews (Temas referidos al libro de
Hebreos), Silver Springs, Maryland: Biblical Research Institute.
Peck, S.E., sin fecha, The Path to the Throne of God: The Sanctuary or the Gospel
According to Moses (La senda hacia el trono de Dios: el santuario o el evangelio según
Moisés), Angwin, California: Educational Felt Aids, Inc. (Compañía manufacturera de
materiales en paño lenci).
Seventh-day Adventists Believe . . . (Los adventistas creen), 1988, Hagerstown, Washington,
D.C.: Review and Herald Publishing Association.
El Comentario Bíblico Adventista, 1953-1957, Asociación Casa Editora Sudamericana,
Florida, Buenos Aires.
Watson C.H., 1934, The Atoning Work of Christ, His Sacrifice and Priestly Ministry (La
obra expiatoria de Cristo, su sacrificio y su ministerio sacerdotal), Takoma Park, Washington
D.C.: Review and Herald Publishing Association.
White, E.G. de, 1969, Christ in His Sanctuary (Cristo en su santuario), Mountain View,
California, Pacific Press Publishing Association.
Warren A. Shipton y George D. Jackson, edición revisada, 2001

...ooo0ooo...
EL CAMINO DE LA SALVACIÓN - GUÍAS DE ESTUDIO
INTRODUCCIÓN
El santuario que construyó Moisés durante la peregrinación de los hijos de Israel por el desierto,
fue señalado por Dios para enseñar importantes lecciones con respecto al plan de salvación. Este plan no
terminó en el Calvario; por el contrario, se extiende en el tiempo, y concluirá cuando Satanás y todo
vestigio de pecado hayan desaparecido para siempre, y cuando esta tierra devastada por el pecado sea
totalmente renovada.
Mediante el santuario el Señor simbolizó la obra redentora de Cristo de una manera que la gente
podía entender. Las ceremonias llevadas a cabo en el santuario representaban a la vez la enormidad del
pecado y la magnanimidad de Dios. La presencia de Dios, evidente por medio de la nube de gloria, les
aseguraba a todos su deseo de ser el Pastor de su pueblo. Hoy se nos pide que consideremos el santuario
del cielo donde Cristo ministra en favor del pecador en la última etapa de su ministerio. En el día
antitípico de la expiación, se nos insta especialmente a procurar ”hacer firme” nuestra “vocación y
elección” (2 Ped. 1:10). “La creencia de que Jesús es nuestro Sumo Sacerdote en el santuario celestial. . .
ilumina todas las demás doctrinas; pone a Dios y su salvación ‘cerca’ de nosotros de una manera que nos
brinda ‘pena certidumbre’ (Heb. 10:22); nos muestra que Dios está a nuestro lado” (Comisión Revisora
del Santuario, 1980. 1989. Cristo en el santuario celestial [documento concensuado], p. 227. En F.B.
Holbrook, editor, Doctrine of the Sanctuaryy: A Historical Survey [La doctrina del santuario: una revisión
histórica] 1845-1863). Esperamos con gran anhelo el momento cuando Dios será “el templo” en el mundo
renovado. Entonces se restablecerá la gloriosa comunión con Dios que experimentó la santa pareja en el
Edén.
El propósito de esta serie de lecciones es explorar los principales temas que presenta el santuario.
Queremos descubrir las raíces de nuestras creencias en algunas de las doctrinas bíblicas más importantes.
Hay otras doctrinas, además, que encuentran un firme apoyo en las enseñanzas del santuario. Esta serie no
tiene la intención de entrar en los detalles de los muebles y las ceremonias, aunque algún conocimiento es
necesario para poder desarrollar varios temas. Esta serie se desarrolló con la intención de que sirviera para
estudiar las Escrituras en el hogar, o para un estudio privado de la Biblia. Nuestra intención ha sido
explicar más claramente algunas doctrinas adventistas, y desarrollar la idea de que las Escrituras nos
presentan una hermosa unidad.
Las citas bíblicas en esta versión castellana son de la Versión Reina-Valera revisada en 1995,
salvo indicación en contrario.
TEMAS DE LAS GUÍAS DE ESTUDIO
1. Y habitaré en medio de ellos
2. De acuerdo con el modelo
3. Cómo se llevaba a cabo el servicio a Dios
4. Tu camino está en el santuario
5. Todo aquel que quiera
6. El evangelio
7. La Ley y el evangelio
8. La misericordia y la justicia
9. La purificación del santuario
10. Hasta 2.300 días
11. El santuario y el juicio
12. El templo se llenó de humo
13. La vida está en la sangre
14. El Señor vendrá de repente a su templo
15. Afligid vuestras almas
16. Profeta, Sacerdote y Rey
17. Tuyos son el poder y la gloria
18. Dios, el Creador, está en su templo
19. Mide el templo
20. El edificará su templo
21. Adoración
22. Purificados mediante sangre y agua
23. El templo del Dios viviente
24. El Señor Dios todopoderoso es el templo
1. Y HABITARÉ EN MEDIO DE ELLOS
La entrada del pecado en el mundo --cuando Adán y Eva cambiaron su inocencia por el conocimiento del
mal-- significó que Satanás se convirtió en el príncipe de esta tierra. La comunión cara a cara entre la
pareja humana y su Hacedor ya no era posible. Esta separación no formaba parte del plan de Dios. Él
procuró identificarse con la raza caída y poner delante de ellos constantes recordativos de su plan de
salvación. Inmediatamente después de la caída se introdujeron los sacrificios de animales para
impresionar a los pecadores tanto acerca de la enormidad del pecado como de su costo, pero además para
anunciar al prometido Salvador (Gén. 3:15; 3:21; 4:3, 4). Este plan se reveló en forma más amplia a las
sucesivas generaciones. Sus aspectos más fundamentales fueron claramente enseñados por medio del
santuario en las épocas que precedieron a la presencia de Jesús en esta tierra.
En nuestro mundo actual, el deseo de los monarcas exiliados de ir a vivir de nuevo entre los suyos lo
motiva a veces el afán de poder, riqueza y adulación. Dios, por otra parte, no tiene nada que ganar en este
sentido. Ofreció y sigue ofreciendo un sacrificio de amor para lograr el amor de sus súbitos. El propósito
de Dios consiste en morar entre sus súbditos leales en un universo por siempre libre de pecado, y que
funcione de acuerdo con los principios de su gobierno.
En presencia del Señor

En esta sección vamos a:
• Destacar la íntima comunión que existía entre la humanidad y Dios antes de que el pecado entrara en
este mundo.
• Poner en evidencia que el pecado rompió ese íntimo vínculo entre Dios y la humanidad.
1. Después de crear a Adán y Eva, ¿cómo se comunicaba Dios con ellos?

Respuessta: El Señor se manifestó en el Edén, y se ___________ en el huerto (Gén. 3:8).
Este versículo, junto con el 9, sugiere que Dios acostumbraba a pasear en la tarde por el huerto, para
comunicarse y relacionarse con los nuevos seres que acababa de crear.
2. ¿Cuán íntima era la cooperación entre Adán y Dios en el huerto?

Respuesta: Dios trajo animales para que Adán les pusiera ________ (Gén. 2:19, 20).
Se había desarrollado un vínculo especial entre Adán y su Hacedor. Esto se ve por la confianza que Dios
depositó en el buen juicio de Adán al llevarle animales para que les pusiera nombres. Todas las
inteligencias creadas por Dios tienen la facultad de razonar y decidir. Adán y Eva decidieron desobedecer
a Dios, quebrantar su relación con él. Por lo tanto, “hay en su naturaleza una inclinación al mal, un fuerza
que no puede resistir sin ayuda” (E. G. de White, La educación, p. 29). Todas las sucesivas generaciones
de hombres y mujeres han enfrentado la tentación, y alguna vez han dejado de reclamar la promesa de
victoria por medio de su poder (Rom. 6:14; 1 Cor. 10:13; Sant. 1:14). Hoy Dios desea que colaboremos
con él. Nos llega este desafío: “Escogeos hoy a quien sirváis” (Jos. 24:15). Los que se pierdan
eternamente no podrán culpar a Adán por su fracaso; la muerte eterna es consecuencia de una decisión
personal.
3. Como resultado de la desobediencia, ¿cómo reaccionaron Adán y Eva a la presencia de Dios?

Respuesta: Tuvieron miedo y se ____________ (Gén. 3:10).
Al obedecer a Satanás, al sucumbir a su hipnótica influencia, Eva se convirtió en sierva suya (Juan 8:34;
Rom. 6:16). Eva ejerció influencia sobre su esposo para que se le uniera en el descubrimiento del nuevo
conocimiento. Sentían temor porque los principios que habían elegido para que los guiaran en su conducta
eran diametralmente opuestos a los principios del cielo. No puede haber una comunicación eficaz entre
individuos que adoptan diferentes principios para actuar (2 Cor. 6:15). Por eso se escondieron.
Satanás usa hoy, para controlar las mentes, los mismos métodos que usó en el Edén. “Engatusó”,
“encantó” o “embaucó” a Eva mediante los movimientos hipnóticos y la fascinación de la serpiente. Y
cuando ella ya estaba con la mente alterada, le hizo atractivas sugerencias (Gén. 3:13; El comentario
bíblico adventista, t. 5, p. 1081, Comentarios de Elena de White). Hoy el mundo está en el puño de
poderosos medios de control mental, como el ritmo hipnótico de la música rock, diversos sistemas de
meditación, y los agradables métodos de la programación neurolingüística, que produce una alteración de
la conciencia y que permite que la persona ponga a un lado su sistema de creencias. Los fundadores de
este sistema declaran: “El atributo más importante y más positivo de un estado alterado de la conciencia,
es que ya no es necesario luchar contra el sistema de creencias de la persona. La mente inconsciente está
dispuesta a probarlo todo” (J. Grinder, y R. Bandler, Trance-formations: Neuro-linguistic Programming
and the Structure of Hypnosis [Trance-formaciones: la programación neurolingüística y la estructura de la
hipnosis], 1981, p. 99; J.C. Clarke y J.A. Jackson, Hypnosis and Behaviour Therapy [La hipnosis y la
terapia de la conducta], 1983, pp. 116-141). En algunos ambientes educacionales la programación
neurolingüística se considera como la “técnica más emocionante que se haya desarrollado en décadas”,
permitiéndole al instructor “alcanzar nuevas alturas en la comunicación de su conocimiento, y para
‘encender’ en las mentes de sus pupilos un ‘arco iris’ de pensamiento creativo” (D.J. Helm. Education,
1989, 110, p. 254). Hoy es el momento cuando debemos buscar a nuestro Dios en lugar de buscar nuevos
conocimientos provenientes del árbol del conocimiento del bien y del mal (Isa. 8:19).
4. ¿Cuánto tiempo después de su desobediencia se les permitió a Adán y Eva permanecer en el Edén y
escuchar los mensajes de Dios?
Respuesta: Su salida del Edén y de la presencia de Dios aparentemente fue inmediata (Gén. 3:22,
23).
El relato bíblico parece indicar que tan pronto como terminó el diálogo con la asustada pareja, fueron
despedidos del huerto por el ángel de la espada flamígera. Ciertamente el profeta Isaías nos informa que
“vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios y vuestros pecados han hecho que
oculte de vosotros su rostro” (Isa. 59:2). Pero la salida del Edén no ocurrió antes de que el Señor les
presentara su plan de salvación (Gén, 3:15). ¡Cuán misericordioso es nuestro Dios!
Yaveh en el Antiguo Testamento

• Investigar el profundo interés de Dios en los asuntos humanos después de la caída.
• Establecer que Cristo fue el miembro de la Divinidad elegido para comunicarse con los seres
humanos.
En realidad el único verdadero nombre de Dios es Yaveh, transliterado erróneamente por Jehová. Este
nombre presenta a Dios como una persona, y de allí la idea de que está interesado en relacionarse con
otras personas. En efecto, “pone a Dios cerca del hombre, y él habla con los patriarcas como un amigo”
(J.D. Douglas, The New Bible Dictionary [El Nuevo Diccionario Bíblico], 1962, p. 478). Este nombre,
que significa “el que existe por sí mismo”, es el nombre personal de Dios en contraste con Elohim que es
su nombre genérico. Cuando examinamos el registro bíblico descubrimos su constante deseo de
comunicarse con la humanidad.
5. ¿Qué incidente de la vida de Abrahán ilustra el intenso interés de Dios por los asuntos humanos?
Respuesta: El Señor (Yaveh) le reveló a Abrahán el destino de ______ y _______ (Gén. 18:20-
23, 33).
Dios le habló al patriarca de diferentes maneras, pero en esta oportunidad descendió para comunicarse
directamente con Abrahán. Es evidente, por el relato bíblico, que tres visitantes celestiales en realidad
hablaron y caminaron con Abrahán y que, inmediatamente después de la partida de los dos ángeles,
Abrahán habló con el Señor (Gén. 18:2, 4, 9,13, 16, 22-33). Dios estaba al tanto de la iniquidad de las
ciudades de la llanura, pero vino a hablar con el fiel Abrahán de manera que no hubiera malentendidos en
cuanto a la justicia divina. Jesucristo está revelado aquí, porque en Juan 1:18, la Biblia declara que nadie
ha visto nunca al Padre. Abrahán vio al Señor y habló con él en esa oportunidad. Por lo tanto, no pudo
haber sido el Padre el que apareció allí.
6. ¿Hubo algunos otros grandes personajes del Antiguo Testamento que se hayan comunicado con Dios
cara a cara o que hayan andado con él?
Respuesta:
a) Jacob _____ con un Hombre, de quien después supo que era el Hijo de Dios (Gén. 32:24, 28-
30; Os. 12:3-5).
b) Moisés se encontró con Dios en la zarza ________ y recibió instrucciones por parte de él (Exo.
3:2-4).
c) Aarón, Nadab, Abihú y los 70 ancianos ______ al Dios de Israel (Exo. 24:9-11).
d) Los tres jóvenes arrojados al horno ardiente fueron acompañados por el ____ de ____ (Dan.
3:25).
Estos ejemplos sirven para demostrar que Dios tiene un profundo interés en el bienestar de l raza caída.
Hemos descubierto por medio de una cantidad de textos que el Yaveh del Antiguo Testamento recibió
diversidad de nombres: un hombre (Gén. 32:24), el Angel (Exo. 3:2); 14:19: Os. 12:4), YO SOY EL QUE
SOY (Exo. 3:14).
7. ¿Indica la Biblia en forma inequívoca la identidad de la persona de la Divinidad que se relacionó tan
íntimamente con la humanidad caída desde el comienzo del registro bíblico?
Respuesta:
a) La presencia divina que acompañó a la israelitas era _____o Yaveh (Exo. 13:21).
b) El Señor que seguía a los israelitas era la Roca y nadie fuera de _____ lo es (1 Cor. 10:4).
El Señor Yaveh del Antiguo Testamento ciertamente era el Señor Jesucristo del Nuevo. En efecto, Jesús
afirmó esto directamente en Juan 5:58. Dijo: “De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuera, YO
SOY”. Los judíos tomaron piedras para lapidarlo porque había pretendido ser Dios, o el YO SOY del
Antiguo Testamento (v. 59).
Cristo en su santuario
• Destacar el hecho de que el santuario que construyó Moisés en el desierto era un símbolo de la
presencia de Dios entre su pueblo.
• Recordar que el permanente interés de Dios por la especia humana se manifestó por el hecho de que
vino a esta tierra y santificó el templo terrenal con su presencia física.
8. ¿Cuál fue el propósito primordial de Dios al instruir a Moisés para que le edificara un santuario?
Respuesta: Para que pudiera _______ entre ellos (Exo. 25:8).
El sistema de culto cuyo centro era el santuario terrenal, anunciaba al sacrificio de Cristo en la tierra y su
subsiguiente ministerio en el santuario celestial. Más importante: les indicaba continuamente a los
israelitas que Dios estaba buscando al pecador y le estaba proporcionando todas las oportunidades
posibles para que la raza caída tuviera una correcta relación con él. Desea transformar la vida de cada
creyente con el fin de conformarla a su voluntad. Es interesante notar que la palabra hebrea que nosotros
traducimos por “habitar” (morar), tiene el sentido de “llegar a ser un residente permanente de la
comunidad”. El tabernáculo estaba ubicado en el medio de la congregación (Núm. 2:2, 3, 10, 18, 25). Esto
claramente transmite la idea de que Dios quería morar entre la gente, para llegar a ser amigo de los
pecadores (véase Juan 1:14). De este modo, el carácter y la vida de Dios estaban delante del pueblo, y
entendían que Cristo los quería santificar.
9. ¿Es realmente posible confinar la presencia de Dios a un edificio hecho por manos humanas?
Respuesta: El cielo y la tierra __ lo ______ ________ (1 Rey. 8:27; 2 Crón. 2:6; Isa. 66:1).
Aquí se nos presenta un pensamiento imponderable, ¿cómo puede habitar Dios, siendo eterno,
omnisapiente y omnipotente, en una morada de hechura humana? Pero Dios prometió que él siempre
estaría cerca para comunicarse con cada creyente, para ayudarlo y animarlo, y que desea morar en cada
creyente por medio del Espíritu Santo (1 Cor. 6:16). Esto será una fuente de alabanza y admiración por
toda la eternidad.
10. Después de la peregrinación por el desierto, ¿dónde se construyó el templo de Salomón?

Respuesta: El templo se levantó en _________ o Sión (2 Crón. 3:1).
El rey David trazó los planos del templo de Jerusalén (2 Sam. 7:1-3). Se lo levantó en el lugar de la era de
Ornán o Arauna (2 Sam. 24:16; 2 Crón. 21:8-22:1; 2 Crón. 3:1). Esa era se encontraba en el Monte Moria,
el lugar donde Abrahán ofreció a su hijo Isaac (Gén. 22:1-14). Este lugar está ubicado ahora en la colina
noroccidental de Jerusalén, y es un lugar santo musulmán. Al erigir el santuario en el Monte Moria, los
israelitas se acordaban del sacrificio de Abrahán, y su atención se concentraba en la cualidad esencial de
los adoradores, a saber, la fe.
11. ¿Honró Dios el templo de Salomón mediante su presencia?

Respuesta: La ____ de la gloria de Dios llenó el templo (2 Crón. 5:13, 14; 6:1, 2).
Cada vez que el Señor se le apareció a su pueblo escogido, su gloria estuvo velada; si así no hubiera sido,
habrían sido consumidos por su resplandor. La magnificencia de la gloria velada de Dios se describe en
Éxo. 20:18-21, y en Deut. 4:11, 12. La gente se llenó de temor frente a ese espectáculo, y le rogaron a
Moisés que hablara él en lugar de que Dios lo hiciera. Tan grande y abrumadora era esa escena que
Moisés declaró: “Estoy espantado y temblando” (Heb. 12:21).
NOTA: El ejército de Nabucodonosor destruyó el templo de Salomón. Después que los judíos regresaron
de su exilio en Babilonia, Zorobabel, el gobernador, con el permiso de Ciro, reconstruyó el templo de
Jerusalén. Este templo no tenía ni de lejos el esplendor del anterior. Herodes lo remodeló y lo adornó no
muchos años antes del nacimiento de Jesús.
12. ¿Santificó la gloria de Dios el templo construido por Zorobabel?

Respuesta: ¡No!
Las Escrituras no dicen en ninguna parte que el templo construido por Zorobabel haya estado lleno de la
gloria de Dios. El templo de Salomón era un edificio magnífico. Durante su dedicación, cuando se colocó
en el lugar santísimo el arca del pacto (que contenía las tablas de la Ley), la gloria de Dios llenó el templo
(1 Rey. 8:6, 9-11). El ejército de Nabucodonosor destruyó este templo en el año 586 a.C. La razón por la
cual la gloria de Dios no se manifestó en el templo erigido después del exilio, es que el arca del pacto, que
ocupaba un lugar central en los servicios del santuario, ya no estaba. Hay algunos indicios de que
Jeremías habría escondido el arca en una cueva, en la montaña a la que ascendió Moisés antes de morir.
Después de hacerlo habría sellado la entrada. Algunos de sus compañeros habrían intentado encontrar el
lugar y señalarlo, pero no lo habrían conseguido. Este lugar no ha sido descubierto hasta hoy (2 Macabeos
[libro apócrifo] 2:4-6). Josefo, el historiador, en el año 63 a.C., confirma la idea de que el arca no estaba
en el segundo templo (W. Whiston, The Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio
Josefo], c. 1936, pp. 367, 618). Este templo fue finalmente destruido en el año 70 d.C. Los tesoros de este
templo aparecen en sobrerrelieve en el arco del triunfo de Tito, en Roma. Es notable que el arca no
aparezca entre ellos (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 15, col. 1167).
13. A pesar de que el segundo templo no estuvo lleno de la gloria de Dios, ¿qué otro propósito mejor tenía
el Señor para él?
Respuesta: El Señor ______ santificó ese templo con su presencia (Mat. 12:1, 6; Mar. 11:9-11).
El miembro de la Divinidad que le dio los planos del santuario terrenal a Moisés, y proclamó los Diez
Mandamientos en medio de una gloria sobrecogedora, santificó entonces, con su presencia, el santuario
terrenal. ¿Qué manera más elocuente podría haber elegido Dios para transmitirle a la humanidad el
concepto de su gran amor y su permanente interés en la salvación de la especie humana? El profeta Hageo
declaró que “la gloria de esta segunda Casa será mayor que la de la primera” (Hag. 2:9). Se refería a la
presencia de Cristo en el último templo.
Emanuel
• Resaltar el hecho de que Cristo tomó sobre sí la semejanza de la raza humana, vivió en un mundo
pecaminoso, y venció allí donde Adán había sido derrotado.
• Recordar que cuando Cristo volvió victorioso al Cielo, envió al Espíritu Santo para que estuviera
especialmente activo, morara con su pueblo y se comunicara con él.
14. ¿Qué significa el nombre Emanuel?

Respuesta: “Dios con ________” (Mat. 1:23).
Las Escrituras no nos presentan un pensamiento más sublime que el hecho de que para librar a la
humanidad del pecado, Dios no sólo haya querido morar entre los hombres, sino que haya asumido sus
debilidades con el fin de salvarnos. La Biblia proclama enfáticamente: “Y el Verbo se hizo carne y habitó
entre nosotros” (Juan 1:14).
15. Al identificarse con la humanidad, ¿qué sacrificio hizo Jesús?

Respuesta: “Sino que se ________ a sí mismo” (Fil. 2:7).
En este versículo se nos dice que Jesús decidió no ejercer los atributos de la Divinidad (omnipotencia -
Juan 5:30; omnisapiencia - Mar. 13:22; Luc. 5:22; y omnipresencia - Juan 11:3, 17-23) en su lucha contra
Satanás aquí en la tierra. Su gloria estuvo velada de manera que no se notara nada extraño en él (Isa. 53:2;
Juan 17:5).
16. Al venir a la tierra, ¿tomó Jesús la semejanza de la especie humana que había venido a salvar?
Respuesta:
a) Sí, no había nada especialmente notable en el aspecto físico de Jesús que lo hiciera
__________ para nosotros (Isa. 53:2).
b) Era descendiente de ______, en semejanza de carne de pecado (Rom. 1:3; 8:3).
La madre de Jesús, María, era humana. No hay evidencias en las Escrituras de que María haya tenido una
concepción inmaculada. En realidad, las Escrituras afirman lo contrario (Rom. 3:23; Gál. 3:22). Jesús se
identificó con la raza humana (Hech. 3:22). Desempeñó el papel del siervo (Fil. 2:7). “Revistió su
divinidad de humanidad, fue hecho en la ‘semejanza de carne de pecado’ o de la ‘naturaleza humana
caída’(Rom. 8:3).–Seventh-day Adventist Believe. . . (Los adventistas creemos. . .), 1988, p. 46. “Por lo
cual debía ser en todo semejante a sus hermanos”. No vino a socorrer ángeles sino a la sufriente
humanidad (Heb. 2:16, 17). Si Jesús no nos hubiera encontrado donde estamos, estaríamos perdidos (Gén.
28:12; Heb. 2:14, 15). “Pero Cristo nos alcanza donde estamos. Tomó nuestra naturaleza y venció, a fin
de que nosotros, tomando su naturaleza, pudiésemos vencer” (2 Cor. 5:21: E. G. de White, 1975, El
Deseado de todas las gentes, p. 278). Al mismo tiempo Jesús seguía siendo verdaderamente Dios (Juan
1:14; Heb. 2:14, 16, 17).
17. Como Hijo del hombre, ¿fue impecable la vida de Jesús en la tierra?
Respuesta: ¡Sí, él ______ una vida sin pecado! (2 Cor. 5:21; Heb. 4:15; 1 Ped. 2:22).
Jesús nació por virtud del Espíritu Santo (Luc. 1:35), y constantemente dependía del poder de su Padre
(Juan 5:30). Su vida aquí en la tierra fue impecable. De esta manera Dios demostró que los principios de
su gobierno son justos y razonables, y que las acusaciones de Satanás al respecto son falsas (Juan 8:44).
También demostró por medio de su vida que él puede capacitar a todos para vivir los principios de su
reino. El fue “tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado” (Heb. 4:15, 16; 1 Cor. 10:13).
Esta gran verdad, que Dios ofrece salvación por medio de una relación de fe con él, es tema de las
lecciones de los servicios del santuario. Dios quiere que muramos al yo y al pecado, y que vivamos una
vida nueva de fe, durante la cual podemos permanecer constantemente en su presencia (Eze. 36:26, 27).
18. Cuando Cristo regresó al Cielo, victorioso después de su resurrección, ¿a quién envió para que viviera
con su pueblo?
Respuesta: El Espíritu de _______ , o sea, el Espíritu Santo (Juan 14:16, 17, 26).
El Espíritu Santo, la tercera persona de la Deidad, se manifestó extraordinariamente activamente después

de Pentecostés. El Espíritu siempre ha luchado con la humanidad, y la voz de la conciencia ha dado
palabras de advertencia, consejo, reprensión e invitación, y para impartir la verdad a oyentes y lectores
(Hech. 1:8; Rom. 12:2). Hoy podemos ponernos en contacto con el Infinito por medio del estudio de su
Palabra y mediante sincera oración.
Rey de reyes
• Presentar el propósito de Dios de restablecer penamente en la tierra nueva la relación que el pecado
interrumpió.
• Demostrar que la dádiva de sí mismo a la raza humana, por parte de Jesús, es para toda la eternidad.
19. ¿Dónde ha decidido Dios establecer su morada para siempre?

Respuesta: Sión “es _____ _______ el lugar de mi reposo” (Sal. 132:13, 14).
20. ¿Cuando se cumplirá esta promesa?

Respuesta: El Señor afirmará sus pies sobre ___ ______ ___ ___ _______ cuando regrese a esta
tierra con la Nueva Jerusalén y todos los santos después del milenio (Zac. 14:4; Apoc. 21:2, 3).
El significado de la frase “en aquel día” que aparece en Zac. 14:4, se amplía en el versículo 9. Se refiere
al momento cuando “Jehová será rey sobre toda la tierra”. Este momento está todavía en el futuro. En la
Nueva Jerusalén no habrá templo, “porque el Señor Dios Todopoderoso es su templo, y el Cordero”
(Apoc. 21:22). Dios de nuevo morará con su pueblo y se comunicará con él cara a cara. El gran propósito
de Dios, revelado en la creación, se cumplirá entonces en los redimidos (los regenerados: creados de
nuevo) en la tierra nueva. La Escritura declara con acentos triunfales: “El tabernáculo de Dios está ahora
con los hombres. El morará con ellos, ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos como su Dios”
(Apoc. 21:3).
21. ¿Quién será el centro de la alabanza y la adoración el la Tierra Nueva?
Respuesta: “EL REY DE______ Y Señor de _______” (Apoc. 19:16).
Esta frase es el título del Jesús triunfante (Apoc. 19:13; Juan 1:14). Cristo vendrá a la tierra por segunda
vez para buscar a los suyos como Hijo del hombre (Apoc. 14:14). Esto realza el pensamiento de que el
Salvador se ha dado a sí mismo por la eternidad a la raza humana. Siempre lleva en su cuerpo las marcas
de su sufrimiento en favor de nosotros (Juan 20:27). ¡Qué admirable Salvador tenemos! Hagamos planes
para encontrarnos entre los felices en la Tierra Nueva. Tenemos que estar allí para participar de la
gloriosa alabanza a nuestro Redentor registrada en Apocalipsis 19:6 y 7:
¡Aleluya!, porque el Señor, nuestro Dios todopoderoso, reina.
Gocémonos, alegrémonos, y démosle gloria,
porque han llegado las bodas del Cordero
y su esposa se ha preparado.
RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

1. paseab
2. nombres
3. se escondieron
4. ---
5. Sodoma, Gomorra
6. a) luchó b) ardiente c) vio d) Hijo, Dios
7. a) Señor, b) Cristo
8. morar
9. pueden contener
10. Jerusalén
11. nube
12. ---
13. Jesús
14. nosotros
15. despojó
16. a) atractivo b) David c) vio d) Hijo, Dios
17. vivió
18. verdad
19. para siempre
20. El Monte de los Olivos
21. REYES, SEÑORES
2. DE ACUERDO CON EL MODELO
Cuando hablamos de un modelo o plan, nuestras mentes se van de inmediato a la confección de un traje o
un vestido nuevos, o maquinaria, o edificios, o sistemas de transportes y demás. Casi todo lo que hacemos
requiere una etapa de meticulosa planificación. Los planes –o planos– se escriben o se dibujan con
muchos detalles, de manera que los encargados de la ejecución lo hagan todo de acuerdo con los detalles
que tenía en mente el encargado de la planificación. La historia del tabernáculo construido en el desierto
por los hijos de Israel es sumamente interesante. Dios le dio a Moisés exactamente hasta los detalles más
mínimos tanto del edificio como de los servicios relacionados con él. El mobiliario, las cubiertas, el plano
del tabernáculo, y la naturaleza y el orden de los servicios, todo tenía un profundo significado espiritual.
La mente humana es organizada, lógica y sigue fácilmente instrucciones detalladas. Descubrimos que
Dios, al bosquejarle más plenamente el plan de salvación a la raza humana, decidió revelarle su voluntad
y sus métodos por medio de un sistema de sacrificios de animales y ceremonias relacionadas primero con
un tabernáculo portátil, y después con un templo permanente. Aunque los sacrificios de animales se
introdujeron en ocasión de la caída, para representar la necesidad de la muerte del Salvador, recién
cuando los hijos de Israel quedaron libres de la esclavitud egipcia (símbolo del pecado) gracias a la
intervención de Dios, se introdujo un sistema de culto más completo (los servicios del tabernáculo y las
ceremonias correspondientes) a fin de preparar a los israelitas y al mundo para la venida del Señor
Jesucristo como un bebé en un pesebre. Los símbolos implícitos en estas ceremonias tienen un profundo
significado y ciertamente son dignos de estudio, ya que presentan lecciones a instrucciones de
importancia para la vida cristiana en esta etapa final de la historia de este mundo.
El modelo
• Recordar que el santuario del desierto se erigió de acuerdo con el modelo del santuario celestial.
• Pondremos énfasis en el hecho de que Jesucristo es la figura central del santuario celestial.
• Demostraremos que los servicios y los símbolos del santuario terrenal señalan a Cristo.
Un plan –o plano– implica un planificador, y así como el diseño y los complicados mecanismos
manifestados en la gran creación de Dios nos dan abundante evidencia de que existe un Planificador
maestro, del mismo modo cuando examinamos el plan de salvación presentado en toda la Biblia, vemos
no solamente un gran Planificador sino un Dios de amor infinito.
1. ¿De acuerdo con qué modelo construyó Moisés el tabernáculo del desierto?
Respuesta: Se lo erigió de acuerdo con el modelo del _______ que se encuentra en el ______.
(Exo. 25:8, 9, 40; Heb. 8:1, 2, 5).
El plan de Dios para la construcción del santuario se le dio a Moisés durante un período especial de
cuarenta días que él pasó en el Monte Sinaí cuando Yaveh (Cristo) escribió con su propio dedo los Diez
Mandamientos en tablas de piedra (Exo. 25:8, 9,; 31:18). El autor de Hebreos confirma que los
“elementos básicos” del santuario celestial (el “verdadero” o “real”) se reflejaron en el terrenal, pero no se
trataba de una copia exacta (R.M. Davidson, Typology in the Book of Hebrews [La tipología en el libro de
Hebreos], 1989, pp. 121-186. En F.B. Holbrook, editor, Issues in the Book of Hebrews [Temas del libro
de Hebreos]; A.P. Salom, Sanctuary Theology [La teología del santuario]), 1989.
2. ¿Cuál es el aspecto central del templo del cielo?

Respuesta: El ______ de Dios (Apoc. 4:6; 8:3).
Se presenta al ángel mientras sirve delante de Dios en el templo. Los muebles que se usan para ilustrar
este ministerio son los mismos que hizo Moisés para su uso en el santuario del desierto.
3. ¿Cómo describe la Biblia el templo del cielo?

Respuesta:
a) El trono era como ______ ___ ______, alto y elevado, y la presencia de Dios llenaba el templo
(Dan. 7:9; Isa. 6:1).
b) Las dimensiones del templo aparentemente son grandes ya que Cristo aparece como viniendo
en las ______ del cielo para encontrarse con Dios el Padre (Dan. 7:13).
c) Los seres celestiales daban voces para alabar a Dios, y _____ de ______ de ángeles servían allí
(Isa. 6:2, 3; Dan. 7:10).
A Isaías se le dio una vislumbre del templo del cielo y una gloriosa visión acerca del trono de Dios. La
gloria de Dios, que representa la magnificencia de su carácter, llenaba el templo. Los ángeles velaban sus
rostros en la presencia del Señor, y con notas de profunda y sincera adoración cantaban alabanzas a Dios.
Los quicios de las puertas se estremecían a la voz de Dios (Isa. 6:4). Como consecuencia de esta visión
acerca de la grandeza de Dios y la pureza de su templo, Isaías tuvo una sorprendente revelación de la
atrocidad del pecado y de su propia indignidad (v. 5). El profeta Daniel en su visión vio el templo en
ocasión del juicio previo a la segunda venida de Cristo. A partir de estas descripciones del templo del
Cielo es evidente que el tabernáculo de la tierra era sólo una pálida representación del vasto y glorioso
tabernáculo del Cielo (E.G. de White, Patriarcas y profetas, 1985, p. 361).
4. ¿A quién señalaban las ofrendas y los sacrificios que se ofrecían en el santuario terrenal en el desierto?
Respuesta: Las ofrendas y los sacrificios eran como sombras que señalaban a ______ y su
ministerio (Heb. 8:4, 5; 9:2).
La figura central del santuario del Cielo es Cristo. La esperanza de la vida eterna se basa en su vida, su
muerte y su resurrección. Por eso, los servicios y símbolos del santuario terrenal apuntaban a Cristo, a la
belleza de su carácter y a su amor por la justicia.
5. ¿Qué dramáticos acontecimientos señalaron la terminación de los servicios del santuario terrenal?
Respuesta: La muerte de Cristo en la cruz; Jesús “entregó el _________” en la cruz (Mat. 27:50,
51; Mar. 15:37, 38).
Los discípulos Mateo y Marcos nos cuentan que cuando Jesús dio su último suspiro, el velo del templo se
rasgó de alto a abajo. El hecho de que el velo se haya rasgado de esa manera significa que ningún ser
humano fue responsable de ese acto. El velo representaba el cuerpo (la carne) de Cristo (Heb. 10:20). La
exposición del lugar santísimo a la vista de los sacerdotes comunes estaba en contra de las más estrictas
instrucciones del Señor. De esta manera Dios puso de manifiesto que había cesado la trascendencia de los
servicios del templo terrenal, ya que Cristo, como el Cordero de Dios, había sido muerto en favor de la
raza caída. La rasgadura del velo significaba también que Cristo, como Sumo Sacerdote, estaba por
convertirse en nuestro Abogado en el Cielo. Por medio de Cristo nosotros tenemos libre acceso a Dios.
Los judíos repararon los daños y los servicios del templo continuaron hasta el año 70 d.C. cuando todo el
ejército romano destruyó todo el edificio. Nunca se lo reconstruyó por una cantidad de razones. Los
judíos no pudieron determinar la exacta ubicación ni del templo ni del altar de los sacrificios como
consecuencia de la tan completa destrucción llevada a cabo por los romanos. Tampoco tenían más restos
de las cenizas de la cabra roja, elemento que consideraban esencial para la consagración del pueblo. El
debate acerca de la posible reconstrucción del templo prosigue hasta el día de hoy. En la actualidad
algunos problemas adicionales, como ser quiénes están en condiciones de servir como sacerdotes y los
detalles exactos de la vestimenta de los sacerdotes, les impide a los judíos la reanudación del sistema de
sacrificios (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 15, cols. 990-994).
6. ¿Qué dramáticos acontecimientos señalarán el fin de las actividades del templo del Cielo?
Respuesta: El fin de la mediación de Cristo en favor de la familia humana, y el derramamiento
de las siete últimas _______ (Apoc. 11:19; 16:1, 17-21).
Cuando los servicios del templo llegaron a su fin aquí en esta tierra, Jesús exclamó: “¡Consumado es!”
(Juan 19:30). Del mismo modo, poco después que se abra el templo del cielo y quede a la vista de todos,
Cristo vuelve a decir: “¡Consumado es!” (Apoc. 16:17). El plan de salvación habrá llegado a su fin, ya no
habrá más salvación para el hombre culpable, el misterio de la iniquidad habrá sido completamente
expuesto. La escena del juicio descrita en Daniel 7: 9, 10, 13, donde se nos presenta al Padre y el Hijo
sentados en tronos, cesa justo antes de que Cristo haga la declaración mencionada más arriba. Para
transmitir esta idea, Daniel el profeta presentó a Miguel (Cristo) de pie, lo que indica que la puerta de la
misericordia se cerró para siempre. Entonces habrá en la tierra un tiempo de angustia, destrucción y
contienda como nunca se vio antes (Dan. 12:1). Jesús aparecerá entonces en las nubes de gloria para librar
a los suyos (vs. 2, 3).
7. ¿Habrá en la Tierra Nueva un templo para facilitarle el culto aa los redimidos?

Respuesta: ¡No! El Señor Dios todopoderoso y el Cordero son el ________ en ese paraíso
(Apoc. 21:22).
Cuando el pecado entró en nuestro mundo como consecuencia de la desobediencia de nuestros primeros
padres, ya no pudieron comunicarse directamente con Dios o conversar con él cada día. La Biblia enseña
con toda claridad que nuestros pecados han producido separación entre nosotros y Dios (Isa. 59:2).
Cuando por fin el pecado haya sido eliminado del universo, Dios estará de nuevo en presencia de su
pueblo. Entonces no habrá necesidad de templo o tabernáculo.
El tabernáculo hecho de manos

• Describir brevemente el santuario terrenal.
Los israelitas habían sido librados de la esclavitud egipcia y estaban acampados al pie del Monte Sinaí
cuando Dios le pidió a Moisés que subiera al monte. Allí le mostró detalles del santuario celestial y se le
dieron instrucciones minuciosas acerca del edificio del santuario en torno del cual estaría organizada toda
la vida del campamento. Una vez construido, el santuario debía estar en una especie de amplia plaza
(Núm. 2:2, 3, 10, 18, 25). Se cree que las tiendas de las doce tribus se levantaban a la misma distancia del
santuario que la mantenida por ellos (del arca del pacto) cuando se trasladaban de lugar en lugar (Jos. 3:3,
4). Querría decir que el santuario estaba a unos 500 metros de la tienda más cercana. Sin duda esto era un
anticipo del momento cuando las doce tribus de los redimidos estarán sobre el mar de vidrio enarbolando
ramas de palmeras y entonando alabanzas al que está sentado en el trono en medio de ellos (Apoc. 7:5-
10).
8. ¿Cómo describe la Biblia el plano del santuario?

Respuesta: La complejidad del edificio no permite una respuesta sencilla. Los detalles
concernientes a todos los aspectos del tabernáculo no aparecen en las Escrituras. Los que faltan
nos llegan por medio de registros históricos y otras fuentes. Las exactas dimensiones del
tabernáculo no aparecen en la Biblia tampoco, pero se pueden calcular si se compara el templo de
Salomón (1 Rey. 6) con otras dimensiones que se dan. Se cree que medía 30 codos de largo (el
codo egipcio era aproximadamente de unos 52 centímetros) por 10 codos de ancho (Exo. 26:16,
18). La tienda estaba dividida en dos compartimentos. En el lugar santísimo (Exo. 26:34) estaba
el arca del pacto como solo mobiliario. Este compartimento era un cubo perfecto. El lugar santo
estaba separado por un velo del lugar santísimo (Exo. 26:33). El lugar santo era el doble de
grande comparado con el santísimo y tenía tres muebles: el candelero ubicado hacia el sur y la
mesa de los panes de la proposición al norte (Exo. 26:35). El altar del incienso estaba delante del
arca del pacto o, en otras palabras, en el lado opuesto a la puerta del tabernáculo (Exo. 40:5). Un
velo o cortina colgaba a la puerta del tabernáculo: había otra entre el lugar santo y el santísimo
(Exo. 26:33, 36; Lev. 21:21-23).
El tabernáculo estaba rodeado por un patio rectangular que medía 100 codos de largo, 50 de ancho y 5 de
alto (Exo. 27:18), al cual se entraba por una puerta ubicada hacia el este. En este patio –o atrio– estaba el
altar de los sacrificios cerca de la puerta (Exo. 27:1, 2; 40:6). La puerta se encontraba en la parte central
del lado oriental del atrio (Exo. 27:12, 16). Estaba cubierta por una cortina (Exo. 40:33); por lo tanto, es
evidente que había tres velos (o cortinas) en el edificio. En el atrio también se hallaba, entre el altar de los
sacrificios y el tabernáculo, el lavacro o lavatorio (también llamado “fuente”) (Exo. 40:7). La víctima
ofrecida en sacrificios se inmolaba en el lado norte del altar (Lev. 1:11), lo que parecería indicar que la
fuente se hallaba un poco hacia el sur.
Es interesante notar que el plano básico del lugar santísimo era un cuadrado; el lugar santo comprendía
dos de esos cuadrados. Cada lado del cuadrado medía 10 codos (Exo. 26:16, 18).
9. ¿Qué estructura del santuario celestial tiene un largo, un ancho y una altura equivalentes?
Respuesta: La Nueva Jerusalén. De la santa ciudad se dice que su largo, su ancho y su altura son
_______ (Apoc. 21:16).
Es difícil imaginar esa estructura. Algunos creen que la palabra griega hypsos, que generalmente se
traduce por “altura”, se podría traducir también por “la parte superior” o “la cima”. En este caso sólo el
largo y el ancho del muro serían iguales. Se han presentado otras interpretaciones, como que la altura
sería proporcional a las otras medidas (el v. 17 no da la altura del muro; la medida que se da podría ser la
del espesor del muro). No importa cuál sea el significado preciso, al plano de esa magnífica ciudad es un
cuadrado. Se ha sugerido que el lugar santísimo del santuario terrenal era un símbolo de la Nueva
Jerusalén (L. Hardinge, Shadows of His Sacrifice [Sombras de su sacrificio], 1956, p. 13).
El derramamiento de sangre
• Señalar el hecho de que los sacrificios relacionados con el santuario terrenal anunciaban la muerte de
Cristo.
• Determinar que la primera fase del ministerio en el santuario celestial era un servicio diario que
representaba el permanente ministerio de Cristo en el santuario celestial.
• Recalcar el hecho de que la segunda fase del ministerio en el santuario terrenal implicaba un juicio, y
que por lo tanto estaba relacionado con actividades similares del santuario celestial.
Tan pronto como el pecado entró en el mundo, Dios estableció un sistema de sacrificios de animales para
indicar simbólicamente que la pena por los pecados sería pagada por un sustituto perfecto, es decir, el
Salvador (Gén. 3:21; 4:3, 4). La muerte de la víctima inocente le recordaba al penitente que “la paga del
pecado es muerte” (Rom. 6:23). Hasta el Sinaí el jefe de la familia era el sacerdote, pero a partir de
entonces se instituyó un sacerdocio especial (Exo. 29:9).
10. ¿A qué apuntaba la sangre de los sacrificios?

Respuesta: El sacrificio del ________ de Dios (Juan 1:29; Isa. 53:5-7).
La sangre de los sacrificios sólo le podía señalar al penitente que ejercía fe, el sacrificio que un día haría
Jesús en favor de los pecadores (Heb. 9:9, 12). Pablo también nos recuerda en el libro de Hebreos que los
sacrificios “nunca pueden quitar los pecados” (Heb. 10:11). Pero procede a añadir que “somos
santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre” (v. 10). Por medio
de la ofrenda del cuerpo de Cristo, el sacrificio perfecto, está asegurado para todos el camino de la
salvación. Ahora nosotros contemplamos por la fe el sacrificio de Cristo, y reclamamos las promesas de
Dios.
11. Además de los sacrificios de los sábados y los días de fiesta, ¿qué sacrificios se ofrecían
continuamente?
Respuesta: Todos los días se ofrecía un _________ a la mañana, y otro a la tarde (Núm. 28:3, 4).
Esta ceremonia simbolizaba la ofrenda de Cristo por la humanidad perdida, e invitaba a cada miembro de
la congregación a consagrar de nuevo su vida a Dios. La palabra “diario”, o “regular” (traducida a veces
por “continuo”) se usa a menudo con referencia a este servicio del santuario terrenal. Nos llama la
atención que el pan siempre estuviera sobre la mesa de la proposición (Núm. 4:7), que las lámparas del
candelabro estuvieran continuamente encendidas (Exo. 27:20), el fuego debía seguir ardiendo en el altar
(Lev. 6:13), y que los holocaustos y el incienso debían ofrecerse cada tarde y cada mañana (Núm. 28:3, 6;
Exo. 30:7, 8). La palabra “continuo” (hebreo: tamid) se refiere al continuo o permanente ministerio
sacerdotal de Cristo. Su ministerio proseguirá sin interrupción hasta el fin del tiempo de prueba de los
humanos (Dan. 12:1). Siempre está disponible para suplicar en nuestro favor; no necesitamos
intermediarios humanos. ¡Qué seguridad nos da esto!
12. ¿Dónde se desarrolla ahora el continuo ministerio de Cristo?

Respuesta: En el santuario __________ (Heb. 7:23-25; 8:1, 2; 1 Juan 2:1).
La ofrenda continua (permanente) de las tardes y las mañanas manifestaba fe y gratitud por las
provisiones de Dios para la salvación de la especie humana. La ofrenda también representaba la creencia
de que Cristo era la Cabeza invisible de la congregación del desierto, siempre dispuesto a representar al
pecador arrepentido. El apóstol Pablo nos asegura que Cristo “·siempre vive para interceder” por nosotros
hoy en el santuario celestial (Heb. 7:25).
13. Cuando alguien pecada sin intención de hacerlo, y se ofrecía una víctima por ese pecado, ¿se
asperjaba siempre la sangre en el santuario?
Respuesta:
a) A veces la sangre del sacrificio se asperjaba frente al velo, otras veces se ponía sobre los
cuernos del _____ ____ _________, y el resto se derramaba al pie del altar en el atrio (Lev. 4:2-7,
13-18).
El acto de asperjar o derramar la sangre señalaba hacia adelante al momento cuando Cristo derramaría su
sangre por el pecador arrepentido, para depositarla después en el santuario celestial. Había una cantidad
de ofrendas por el pecado establecidas para ser ofrecidas en diversas circunstancias. El pecador
arrepentido ponía sus manos sobre la cabeza de la víctima y él mismo le daba muerte al animal. El acto de
poner las manos significaba que la culpa había sido transferida simbólicamente al animal, que era el
sustituto del pecador. En todos los casos el sacerdote oficiante recogía la sangre y proseguía con la
ceremonia. De esta manera el pecador arrepentido reconocía que el perdón no provenía de él y que
dependía plenamente de la misericordia de Dios. Había que aplicar la sangre derramada. En los casos
cuando la sangre se asperjaba en el santuario, esto ocurría en el lugar santo durante el año. Por medio de
este acto los pecados del pecador arrepentido, “confesados y perdonados”, se transferían simbólicamente
al lugar santo.
b) En algunas de las ofrendas la sangre no se llevaba al lugar santo. El sacerdote comía en el lugar
santo parte de la carne de la ofrenda por el pecado a fin de dar a entender que llevaba la ______
del pecador arrepentido (Lev. 10:17; 6:25, 26; 4:22, 27).
El hecho de comer en el lugar santo una parte de la carne del sacrificio, indicaba que el sacerdote se
identificaba plenamente con el pecador, y que llevaba al santuario la culpa del pecador. En todo caso la
ceremonia señalaba a Cristo, “quien llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero” (1 Ped. 2:24), y
después siguió ministrando por nosotros en el santuario celestial. (Nota.–No importa si nuestros pecados
son intencionales o no, los beneficios del sacrificio de Cristo están a disposición de todos los que
sinceramente se arrepienten y los confiesan [véase 2 Sam. 12:12-14; Lucas 23:39-45]).
14. En el día de la expiación, ¿a qué compartimento del santuario entraba el sumo sacerdote?
Respuesta: Al lugar santísimo, “dentro del _____” (Lev. 16:12-16).
Durante la ronda anual de servicios, los pecados se transferían simbólicamente al santuario por el
ministerio de los sacerdotes. En el día de la expiación cada cual debía afligir su alma (hacer un examen de
conciencia); en caso contrario sería eliminado de la congregación de Israel (Lev. 23: 27-29). A menos que
el pecador siguiera teniendo una relación correcta con Dios, los pecados que previamente habían sido
confesados se cargarían de nuevo a la cuenta del pecador (Mat. 18:23-35; Eze. 18:24; 33:13). Para los
israelitas el día de la expiación era un día de juicio, y un día de “purificación del pueblo”, un énfasis que
los escritos judíos reconocen muy bien (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 5, cols. 1384-1386). Es
importante tomar nota que al día de la expiación le seguían cinco días después la fiesta de las cabañas o
de las cosechas (Exo. 23:16; Lev. 23;34-43), que era un día de regocijo y alegría, y que representaba, en
su aplicación final, la cosecha del fin del mundo. El tabernáculo de la tierra servía de “figura y sombra de
las cosas celestiales” (Heb. 8:5). Por lo que podemos esperar que antes del regreso de Cristo en gloria
comenzará la escena del juicio de Daniel 7 (vea el Apéndice). Por supuesto, ésto es tema de otra lección.

1. verdadero, cielo
2. trono
3. a) llama b) nubes c) miles de miles
4. Cristo
5. espíritu
6. plagas
7. templo
8. ---
9. igual
10. Cordero
11. cordero
12. celestial
13. a) altar del incienso b) culpa
14. velo
APÉNDICE
EL MINISTERIO DE CRISTO EN EL CIELO
Cristo es ahora nuestro Sumo Sacerdote en el santuario celestial (Heb. 8:1, 2, 6; 9:11-15). El autor de la
epístola a los Hebreos nos insta a considerar las ceremonias del santuario terrenal como “figuras” (Heb.
9:23) y “sombras” (Heb. 8:5) del santuario celestial, para estudiar las lecciones que nos enseña el
santuario terrenal acerca del plan de salvación (Heb. 4:1, 2; 9:1-15). No es el propósito especial del libro
de Hebreos entrar en los detalles de los dos tipos de ministerio (intercesor y judicial) que se destacan en el
santuario terrenal. Más bien su principal propósito consiste en ayudar al lector a mirar a Cristo, su
sacrificio plenamente suficiente, su permanente ministerio de servicio y la incapacidad de salvar de los
servicios del templo. Su fin era ayudar a los cristianos de origen judío que estaban teniendo dificultades
para poner a un lado los ritos de Moisés a fin de que aceptaran el ministerio de Cristo (F.B. Holbrook,
Ministry, abril de 1985, p. 13).
El mensaje del libro que se refiere al ministerio de Cristo está oscurecido en algunas versiones por la
forma cómo se traduce la palabra que se usa comúnmente para aludir al santuario (ta hagia). Con esto se
ha intentado consolidar el argumento de que el primer compartimento del santuario terrenal representaba
la era mosaica, y que el segundo se aplica al cielo mismo y a la era cristiana (F.B. Holbrook, Ministry,
abril de 1985, p. 14; G.E. Rice, 1989, Hebreos 6:19; Análisis de algunas de las suposiciones con respecto
a la palabra katapetasma (velo, cortina). P. 229; F.B. Holbrook, editor, Issues in the Book of Hebrews
[Asuntos en el libro de Hebreos]). La confusión que puede surgir se ilustra citando sólo dos traducciones
referidas a Hebreos 9:12, como ejemplo (el énfasis ha sido añadido): “Y no por sangre de machos cabríos
ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el lugar santísimo, habiendo
obtenido eterna redención” (Reina-Valera revisada, 1995). “Y Cristo entro en ese Santuario una vez para
siempre, no con sangre de machos cabríos ni de becerros, sino con su propia sangre, y consiguió la eterna
redención” (Nueva Reina-Valera. Sociedad Bíblica Emanuel). Ahora bien, la expresión griega traducida
por “lugar santísimo” y “santuario” en las citas que acabamos de hacer, es ta hagia. Otras formas de este
substantivo (la forma básica es ta hagion que significa “el santo” o “lo santo” que se usan en Hebreos
aparecen a continuación:
Formas del griego Traducción literal* Referencias en Hebreos

hagia santos, santo, 9:2, 14.
lugares santos
hagia hagion el santo de los santos 9:3.
ta hagia los santos, los lugares
Santos 9:12, 25; 13:11.
To (te) hagion el (y) lugar santo
(y) el santuario 9:1.
ton hagion de los santos,
de las cosas santas,
de los lugares santos,
los lugares santos,
los santos 8:2; 9:8; 10:19.
* A. Berry, 1984, Interlinear Greek-English New Testament with a Greek-English Lexicon and New Testament
Synonyms (Nuevo Testamento interlinear griego-inglés, con un diccionario griego-inglés y sinónimos del Nuevo
testamento); A. Marshall, 1978, The R.S.V. Interlinear Greek-English New Testament (Nuevo Testamento R.S.V.
interlinear griego-inglés); R. Young, 1898, Young’s Literal Translation of the Holy Bible (La traducción literal de la
Santa Biblia, por Young), edición revisada.
El plural de este sustantivo se usa constantemente en el libro de Hebreros (excepción: Hebreos 9:1).
Cuando se estudia la versión griega de las Escrituras llama Septuaginta (o Versión de los Setenta), se
descubre que “ta hagia se refiere principalmente al santuario en su conjunto”. Además, otra autoridad lo
recalca, “se lo entiende mejor como un término genérico con respecto a todo el santuario y no tanto al
lugar santísimo solo, a menos que la referencia sea directa como es el caso de Hebreos 9:2-5". Esto
también se aplica a Hebres 9:12, puesto que el sacerdote tenía que pasar por el primer compartimento para
llegar al segundo (A. Salom, Andrews University Studies [Estudios de la Universidad Andrews], 1967, t.
5 (1), pp. 59-70; F.B. Holbrook, Ministry, abril de 1985, pp.14, 15; Kiesler, H., Una exégesis de pasajes
selectos, 1989, p. 77. En F.B. Holbrook, editor, Issues in the Book of Hebrews [Temas en el libro de
Hebreos]).
La principal de las traducciones literales señaladas más arriba, cuando se la aplica constantemente, y
cuando se le da al contexto la atención que corresponde, presenta un plan de actividades en el santuario
celestial por parte del Sumo Sacerdote que están plenamente de acuerdo con el modelo establecido con
respecto al orden de los servicios sacerdotales que se llevaban a cabo en el santuario terrenal. Este
sacerdocio terrenal participaba una vez al año de una obra de juicio (el ministerio en el lugar santísimo).
Estos dos aspectos del ministerio son evidentes en el libro de Hebreos (ejemplos: Heb. 4:14-16; 7:25; 8:6;
9:24, 25, 27, 28; comparar con 2 Cor. 5:10).
Cristo murió en la cruz por causa de nuestros pecados. Se nos justifica o declara justos cuando lo
aceptamos por la fe como nuestro perfecto Sustituto. Ahora Jesús aplica los méritos de su sangre a nuestra
vida (santificación). Desea capacitarnos para vivir una vida victoriosa. El apóstol Pablo lo dijo de esta
manera: “Estando reconciliados, seremos salvos por su vida” (Rom. 5:10). Los dos aspectos del
ministerio de Cristo son esenciales.
3. CÓMO SE LLEVABA A CABO EL SERVICIO A DIOS
Los sacerdotes que oficiaban en el santuario terrenal recibían instrucción por parte de Moisés acerca de
cada detalle referente a la voluntad de Dios. Comprendían claramente que los ritos del santuario no tenían
méritos en sí mismos, sino que señalaban hacia adelante a la vida, la muerte y la victoria final del Señor
Jesucristo sobre Satanás. Su meticulosa atención al cumplimiento de “los oficios del culto” (Heb. 9:6) de
acuerdo con los detalles revelados en el monte, era sumamente significativa ya que cada parte del servicio
contenía un profundo significado con respecto al carácter de Dios y al gran plan de redención.
Se invita a cada persona que nace en este mundo a que responda al ofrecimiento de la salvación provisto
por Dios y que del mismo modo entre a su servicio. Relativamente pocos responden de todo corazón a
este desafío. Muchos tienen una relación muy especial con Dios por causa de que quieren servirlo a su
manera y no de acuerdo con su voluntad revelada. A los tales Jesús les dijo cuando estuvo en la tierra:
“En vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres” (Mar. 7:7). A todos se
incita a aceptar de todo corazón la salvación que Cristo ofrece gratuitamente hoy.
En esta lección examinaremos brevemente los servicios que se llevaban a cabo en el primer
compartimento del santuario terrenal, y el profundo significado de esos servicios. Después nos
concentraremos en el ministerio que Jesús lleva a cabo hoy en el santuario celestial a la luz del “modelo”
que se nos reveló.
El primer compartimento
• Resumir las principales actividades de los sacerdotes en el primer compartimento del santuario
terrenal.
Los servicios diarios del santuario estaban relacionados de manera indisoluble con el lugar santo. En el
segundo compartimento (lugar santísimo) se entraba sólo una vez en el año. El sumo sacerdote era el
único que podía entrar en el lugar santísimo; en cambio, los sacerdotes servían todos los días en el lugar
santo. Examinemos brevemente las principales circunstancias de acuerdo con las cuales los sacerdotes
entraban al lugar santo del santuario.
1. Cuando los creyentes inconscientemente no cumplían la voluntad de Dios, y después se daban cuenta
de eso, traían como sacrificio un animal sin tacha. ¿Qué nombre se le daba a esta ofrenda?
Respuesta: Cuando la congregación pecaba sin intención de hacerlo (sin premeditación), se traía
y se sacrificaba una ofrenda por el _______. El sacerdote entraba al lugar santo para ofrecer la
sangre o para comer una porción de la carne (Lev. 10:17; 4:2-7, 13-18; 6:25, 26).
La ceremonia relacionada con la ofrenda por el pecado implicaba que el pecador confesara su pecado
sobre la cabeza del animal que después sacrificaba (era un sacrificio expiatorio, porque el animal
representaba a Jesús). El sacerdote recibía la sangre; a veces se la llevaba al lugar santo, y se la asperjaba
siete veces delante del velo del santuario (es decir, el velo que separaba al lugar santo del santísimo), y
parte se ponía sobre los cuernos del altar del incienso (Lev. 4:6, 7, 17, 16; cc. Lev. 4:27-30).
En otras ocasiones parte de la carne del sacrificio se comía en el lugar santo (Lev. 10:17, 18). Este acto
simbolizaba la transferencia al santuario, por medio de la sangre, del pecado confesado. Moisés se sintió
una vez muy molesto con los hijos de Aarón porque no habían seguido las instrucciones del Señor de
comer en el lugar santo la carne de la ofrenda por el pecado. No habían hecho una expiación intercesora
del pecado. Al obrar así, los hijos de Aarón no habían llevado sobre sí los pecados del pueblo (Lev. 10:16,
17); dejaron de enseñarles a los pecadores un aspecto esencial del ministerio de Cristo en el plan de
salvación.
Mediante esta ceremonia el pecado se transfería del pecador a la víctima, y a continuación al santuario
(los pecados confesados estaban a cargo de Dios; por lo tanto, el pecador podía estar seguro de su
salvación). También notamos que los pecados confesados y abandonados recibían perdón
inmediatamente; se justificaba al pecador en el acto.
2. ¿Ofrecían los sacerdotes en otras ofrendas, además de la ofrenda por el pecado que acabamos de
mencionar?
Respuesta: Sí. Se especifican varias ofrendas: holocaustos (ofrendas quemadas), por el pecado,
por las trasgresiones y de paz. Los ___________ matutino y vespertino se mencionan
especialmente (Exo. 29:38-42; Núm. 28:3-8).
Los sacrificios mencionados en el párrafo anterior se llevaban a cabo en el atrio y en el altar de los
holocaustos. La sangre derramada del animal representaba al Cordero de Dios cuya muerte en el Calvario
–algo que estaba en el futuro entonces– sería un sacrificio de eficacia eterna (Heb. 10:12, 14). Sus
beneficios serían eficaces “continuamente”, es decir, permanentemente. Para transmitir la idea de la
permanente eficacia del ofrecimiento de la salvación por parte de Dios, y la facilidad del acceso del
pecador a él, se ofrecía un holocausto cada mañana y cada tarde. No se lo ofrecía por alguien en
particular, sino por todos. Cuando alguien pecaba y solicitaba que se lo purificara de ese pecado, se
requería otro sacrificio. En otras palabras, el pecador arrepentido tenía que tomar la decisión de acudir a
Dios, permitir que le fuera quitada su culpa, y que se quebrantara en él el poder del pecado. Por medio de
estos actos voluntarios el pecador aceptaba por fe la salvación ofrecida por Dios.
3. ¿Qué deberes cumplía cada día el sacerdote en el lugar santo?

Respuesta:
a) Las luces del candelabro se debían conservar siempre encendidas por medio de la provisión de
_____ ___ _______ (Exo. 27:20, 21).
b) Se debía ofrecer _________ cada mañana y cada tarde mientras se aderezaban las luces del
candelabro (Exo. 30:7, 8).
Los sacerdotes entraban al primer compartimento cada mañana y cada tarde para aderezar las luces del
candelabro y para ofrecer incienso en el altar que se encontraba delante del velo. Las luces estaban
continuamente encendidas en el santuario (Lev. 24:2), no sólo para permitir que los sacerdotes vieran con
claridad en ese aposento que carecía de ventanas, sino para recordar que Cristo es “la luz del mundo”
(Juan 8:12). El incienso se ofrecía en el momento de los sacrificios matutino y vespertino, y representaba
adecuadamente los méritos de Cristo que ascienden junto a las oraciones de su pueblo (Sal. 141:2; Apoc.
8:3). El Espíritu Santo le presenta a Dios nuestras oraciones (Rom. 8:26).
4. ¿En qué otras ocasiones entraban regularmente los sacerdotes al lugar santo?
Respuesta: Los panes de la proposición se cambiaban cada ________ (Lev. 24:5-8).
Las Escrituras nos recuerdan que los panes de la proposición debían estar continuamente delante del
Señor. Los sacerdotes comían los panes añejos, que se habían retirado de la mesa en el lugar santo (v. 9).
Los símbolos del santuario

• Identificar los muebles que se encontraban en el primer compartimento del santuario terrenal.
• Resaltar los aspectos de la salvación representados por estos muebles.
Los muebles del lugar santo –como todos los demás que se encontraban en el santuario– son símbolos que
comunican importantes verdades. Examinaremos los muebles del lugar santo.
5. Al entrar al lugar santo, ¿qué mueble se encontraba a la derecha?

Respuesta: La mesa de los panes de la proposición en la cual había ______ panes sin leudar
(Lev. 24:5-9).
La expresión “la mesa de los panes de la proposición” significa literalmente “los panes de la Presencia”.
No estaban hechos con harina leudada, ya que en la Biblia la levadura es símbolo del pecado (Mat. 16:6;
1 Cor. 5:6, 7). El pan sin levadura representaba la vida de Cristo que no tuvo mancha de pecado (Heb.
4:15; 1 Ped. 2:22; 1 Juan 3:5). A Cristo se lo llama ”el Pan de vida” (Juan 6:35, 48). En el santuario había
doce panes, uno por tribu, para transmitir la idea de que Dios había hecho amplia provisión para la
salvación de todos. El pan también representaba el hecho de que las tribus dependían de Cristo no sólo
para recibir el pan espiritual, sino el material. Se esparcía incienso sobre los panes como recordativo (Lev.
24:7). Se ha sugerido que el incienso representaba los méritos de Cristo conferidos amplia y gratuitamente
(L. Hardinge, Shadows of His Sacrifice [Sombras de su sacrificio], 1957, p. 43; Encyclopaedia Judaica,
1971, t. 14, col. 1394).
6. En las horas finales de la vida de Jesús aquí en la tierra, ¿qué ceremonia instituyó con algunos de los
símbolos del santuario, para enseñar profundas lecciones espirituales?
Respuesta: Jesús ______ pan y ______ la copa; instituyó la Santa Cena (Mat. 26:26-29; 1 Cor.
11: 23-26).
Los símbolos de la pascua y del santuario pasaron a la iglesia cristiana gracias al ejemplo dado por Cristo.
La santa cena, en primer lugar, reemplazó a la pascua, pero encontramos semejanzas de ella en el
santuario también. En la cena se usó pan y jugo de uva. El pan representa el cuerpo quebrantado de Jesús,
y representa también su “continua” participación en los asuntos de la especie humana. Las Escrituras se
refieren a Cristo como “el Pan de vida” dado “por la vida del mundo” (Juan 6:51). El “vive siempre para
interceder” por nosotros (Heb. 7:25). Su sacrificio es plenamente suficiente y señala el único camino que
conduce a la vida eterna (Hech. 4:12).
Al considerar “los panes de la proposición”, notamos que se lo hacía con flor de harina (Lev. 24:5, 6).
Para producir ese tipo de harina se debe llevar el grano al molino. Para poder ser la eterna Fuente de
sostén, la Biblia presenta a Jesús como “quebrantado” y “herido” por nosotros (Isa. 53:5, 10), tal como el
trigo debe ser aplastado y molido para producir harina.
La copa de la pascua, como asimismo las ofrendas de vino, representaban en la recién instituida aanta
cena “la sangre del nuevo pacto” (1 Cor. 11:24, 25). El vino que se usó era jugo de uva puro, por la
misma razón que el pan era sin levadura. (Posiblemente se lo conservaba deshidratándolo en el momento
de la cosecha, para añadirle agua cuando se lo necesitara). El jugo de uva representaba la sangre de Cristo
derramada para ratificar (o confirmar) el pacto eterno (vea el APÉNDICE). La palabra “libación”
(ofrenda de bebidas) proviene de una palabra hebrea qie significa “derramar”, para significar el hecho de
que Jesús derramó su vida por la salvación de los pecadores. Jesús se refirió a sí mismo como “la vid
verdadera” (Juan 15:1), La verdadera fuente de vino puro.
En los servicios del santuario se ofrecía flor de harina y vino en relación a los holocaustos (ofrendas
quemadas) y las ofrendas de paz. El pan y el vino se ofrecían juntos (Núm. 15:4-10). Mediante estas
ofrendas el suplicante reconocía su dependencia de Dios tanto para las bendiciones temporales como para
las espirituales. El pan y el vino eran adecuados símbolos de la vida y la muerte de Jesús en nuestro favor.
7. ¿Qué había en el lado izquierdo del lugar santo, y qué significaba?

Respuesta: El ____________ de siete brazos (Exo. 25:31-39).
El candelabro esta formado por una columna central con tres brazos a cada lado. Cada brazo terminaba en
un depósito (Zac, 4:2), todos ellos a la misma altura. Estaba hecho de oro macizo y estaba adornado con
flores de almendro. Josefo recuerda que había setenta decoraciones en el candelabro (W. Whiston, The
Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio Josefo], c. 1936, pp. 98, 99).
8. ¿Está representado Jesús en el simbolismo del candelabro?

Respuesta: Sí. La luz del candelabro señalaba a Cristo. Jesús es “la ____ del mundo” (Juan
8:12).
La luz se usa constantemente en las Escrituras como símbolo de pureza y justicia. A Cristo se lo llama “la
luz del mundo” (Juan 8:12). A las buenas nuevas de la salvación que resultan de conocer a Jesús, se las
llama “la luz de evangelio” (2 Cor. 4:4). La Palabra de Dios es, en sí misma, luz (Sal. 119:105; Prov.
6:23), e instruye en cuanto a la vida eterna a todo aquel que quiere. Por lo tanto, es evidente que la luz en
primer lugar señala a Cristo, en segundo lugar a la Palabra de Dios, la Biblia, que nos conduce a Cristo.
Un estudio detenido de otros detalles concernientes al candelabro nos revelan otros puntos fascinantes.
Los pabilos que se usaban se hacían con la ropa usada de los sacerdotes. Estas ropas estaban hechas de
lino fino blanco (L. Hardinge, Op. Cit., p. 39). El lino fino representaba la justicia de Cristo. Esa es la
túnica que ofrece el Señor a todos los que quieran estar calificados para entrar en el Cielo (Mat. 22:11-
13). En Zav, 3 Josué, el sumo sacerdote, está de pie en la presencia del Señor. Su propia justicia son sólo
andrajos. Pero Jesús cambió esos trapos por otro atuendo que era glorioso (Zac. 3:1-5). Todos los que
estén listos para el Cielo aparecen ante el profeta Juan revestidos de la túnica de la justicia de Cristo, que
llega a ser nuestra sólo por la fe (Apoc. 6:11; 7:9, 14).
9. ¿Qué representa en las Escrituras el símbolo de las lámparas encendidas?

Respuesta: Una lámpara encendida se usa en las Escrituras ara representar al _________ Santo
(Apoc. 4:5).
La frase “los siete espíritus de Dios” que aparece en este versículo se entiende como símbolo de la
perfección y la plenitud del Espíritu Santo. Se considera que el siete es el número perfecto de Dios, y se lo
usa con frecuencia en las Escrituras. En otros pasajes del Apocalipsis se presenta al Espíritu bajo el
símbolo de los “siete ojos” del Cordero (Apoc. 5:6). En una visión registrada por Zacarías, el profeta vio
un candelabro de oro alimentado con aceite por medio de tubos que provenían de dos olivos. En respuesta
a la pregunta del profeta: “¿Qué es esto, señor mío?” se le dijo: “No con ejército, ni con fuerza, sino con
mi Espíritu” (Zac. 5:1-6). La lámpara alimentada con aceite representa al Espíritu Santo (es evidente que
el ingrediente esencial aquí es el aceite; por lo tanto representa al Espíritu Santo, tanto como la lámpara
encendida). Por eso, cuando se derramó el Espíritu Santo con el poder del pentecostés, apareció como
lenguas de fuego (Hech. 2:3, 4). Los dos olivos representan la Palabra de Dios (Los Testamentos Antiguo
y Nuevo) (Apoc. 11:4).
El ministerio del Espíritu Santo en la vida sólo es posible si estudiamos su Palabra y respondemos a ella
mediante el poder que nos da el Espíritu (Hech. 5:32; Juan 16:13; 17:17). Jesús enseñó en la parábola de
las diez vírgenes que una vida cristiana superficial deja al participante totalmente desprovisto de
preparación para las pruebas en esta vida, y completamente descalificado para el cielo (Mat. 25:1-13). La
vital propuesta que presenta la visión del candelabro es que sin una fe práctica, que realmente produzca
una reforma, la vida cristiana es sólo una pretensión y por lo mismo carece de luz.
10. Al entrar al lugar santo, ¿qué mueble estaba directamente el frente del sacerdote?
Respuesta: El altar del ________ (Exo. 30:1-10).
El altar de oro estaba bien cerca del arca del pacto. En un incensario de oro se ponían carbones
encendidos extraídos del altar de los sacrificios, y se los ponía sobre el altar del incienso; entonces se
esparcía incienso sobre los carbones encendidos. Esto se hacia cada mañana. El altar del incienso y el de
los sacrificios presentaban semejanzas. Ambos tenían cuernos en las esquinas (Exo. 27:2; 30:3). Los
cuernos en las Escrituras representan poderes (Zac. 1:18, 19). Por eso se puede considerar que el altar de
los sacrificios representa el lugar donde se puede conseguir permanente expiación (Neh. 10:33), mientras
que el altar del incienso representa el lugar donde permanentemente hay auxilio disponible por medio de
la oración intercesora (Sal. 141:2; Apoc. 5:8). Simbólicamente Dios indicaba que la liberación de la
condenación y el poder del pecado están al alcance del pecador que se acerca a él por fe.
11. ¿Qué representa el velo que separaba el lugar santo del santísimo?
Respuesta: La _________ de Cristo (Heb. 10:20).
El altar del incienso estaba ubicado directamente delante del arca del pacto, el lugar donde se manifestaba
la presencia de Dios. Cuando Cristo murió en el Calvario, el velo del santuario terrenal se rasgó, para dar
a entender que ahora hay “un camino nuevo y viviente” para que el pecador se pueda acercar a Dios. Ya
no había necesidad de esperar a un sacerdote terrenal a fin de que representara al pecador ante Dios. El
pecador tenía acceso directo al Altísimo por medio de Jesús, para recibir misericordia, perdón y el poder
capaz de transformar su vida.
Cristo en el Santuario Celestial

• Destacar las dos clases de actividad que lleva a cabo Cristo en el santuario celestial.
• Demostrar que esas actividades implican intercesión y juicio.
El santuario terrenal y sus servicios se basaban en el santuario celestial. De este modo Dios nos dio
valiosas vislumbres acerca del plan de salvación hasta el fin del tiempo, cuando Cristo se levante para
terminar su ministerio en favor de la humanidad (Dan. 12:1).
12. Cuando Jesús ascendió el Cielo llegó a ser sacerdote. ¿Qué clase de sacerdote llegó a ser?
Respuesta: Después de su muerte y su resurrección Cristo llego a ser ______ sacerdote según el
oren de ____________ (Heb. 2:17; 5:8-10; Heb. 9:12).
Para ser sumo sacerdote, la persona debía ser elegida “de entre los hombres” (Heb. 5:1). Por eso fue
necesario que Jesús participara de la naturaleza humana. Necesitaba la experiencia que dan el sufrimiento
y las tentaciones comunes a la especie humana para poder ser el autor de nuestra salvación (Heb. 2:9, 10).
Por eso puede ayudar a la débil y sufriente humanidad en la hora de la tentación. Tal como el sumo
sacerdote era llamado por Dios (Heb. 5:4), a Cristo se la ha dado un mandato divino (v. 5).
13. ¿Es verdad que Jesús tomó parte en un servicio de ungimiento cuando regresó al Cielo después de su
crucifixión?
Respuesta: Sí (Dan 9:24; Heb. 9:12).
Durante el tiempo asignado a la nación judía, Daniel indicó que Cristo moriría, resucitaría triunfante, y
que el santuario sería ungido. El profeta se refiere a la unción del santuario celestial antes del comienzo
de su ministerio sacerdotal. Cristo debía llevar a cabo en el santuario celestial la misma clase de servicio
que realizaba el sumo sacerdote en el santuario terrenal, porque esos servicios eran una réplica de los del
Cielo (Exo. 25:40; Heb. 8:5). El santuario del Antiguo Testamento (los lugares santo y santísimo) fue
ungido o dedicado antes de que se instituyeran sus servicios (Exo. 30:26-30; 40:9-11; Lev. 8:10, 11;
Núm. 7:1). Una vez que ese servicio estuvo concluido en el santuario terrenal, los sacerdotes oficiaron en
el lugar santo o primer compartimento del santuario (Lev. 8:33; 9:1, 23). De manera similar, el ministerio
de Cristo en el Cielo siguió el mismo plan. (Podemos notar también que la inauguración y la exaltación de
Cristo en el Cielo estuvo relacionada con el derramamiento del Espíritu Santo en la tierra en pentecostés -
Hech. 2:33; compare con Lev. 9:23, 24).
14.¿Cuáles son algunas de las funciones de Cristo como Sumo Sacerdote en el santuario celestial?
Respuesta:
a) Los beneficios del sacrificio de Cristo están a disposición de todos los creyentes. Cristo
“______ . . . en el cielo mismo, para presentarse ahora por _________ ante Dios” (Heb. 9:24).
Cristo es el _________, el nexo entre el Padre y el creyente (1 Tim. 2:5).
b) Cristo esta en la etapa final de su ___________ en el Cielo (Lev. 16:18, 19, 20; Heb. 9:7, 13,
14).
En el santuario celestial Cristo asumió las tareas correspondientes el lugar santo. En esta etapa de su
ministerio lleva a cabo su expiación mediadora en favor de nosotros en virtud de su sacrificio por el
pecado que es totalmente suficiente (expiación por el sacrificio) (Heb. 4:14-16; Apoc. 1:12, 13). Las
Escrituras lo presentan mientas dirige su iglesia (Apoc. 1:12-20), envía al Espíritu Santo (Juan 16:7),
comanda las fuerzas de la justicia en su conflicto con Satanás (Apoc. 19:11-16) y sustenta el universo
(Heb. 1:3; Apoc. 3:21). Este no es un ministerio pasivo y sin importancia (Comisión para la revisión del
tema del santuario. Christ in the Heavenly Sanctuary [Cristo en el Santuario Celestial] - Documento
aprobado por consenso -, 1980, 1989, p. 229. En F.B. Holbrook, editor, Doctrine of the Sactuary: A
Historical Survey [La doctrina del Santuario: un análisis histórico] 1845-1863).
Hoy Jesús da arrepentimiento y perdón de pecados (Hech. 5:31), de modo que se restaura al creyente a
una comunión sin cortapisas con Dios. El Señor quiere que aceptemos el poder que desea darnos a fin de
capacitarnos para vivir una vida victoriosa (Heb. 6:1; Rom. 8:11). Tanto la muerte como el ministerio de
Cristo son importantes para el plan de salvación. El incienso a que se refiere Apocalipsis 8:3, 4,
representan los méritos de Cristo que ascienden en favor del creyente. Es importante notar que los
sacrificios matutino y vespertino se ofrecían continuamente, y el incienso ascendía en la misma forma,
incluso en el día de la expiación. El creyente es acepto sólo sobre la base de esos méritos. Cristo nos
asegura que seguirá ofreciéndonos dirección, y a su iglesia también, por medio del Espíritu Santo, acerca
del cual dijo: “A quien yo os enviaré del Padre” (Juan 15:26).
En el ministerio del segundo compartimento, Cristo lleva a cabo la etapa final de la expiación (una obra
de juicio). Esta etapa del ministerio de Cristo implica la presentación ante el Padre de los méritos de su
sangre derramada en favor de “todos aquellos por quienes la misericordia todavía espera, y por los que
por ignorancia han quebrantado la Ley de Dios. Esta expiación también se hace tanto por los justos
muertos como por los vivos” (E.G. de White, Spiritual Gifts [Dones espirituales], t. 1, p. 163). La
misericordia debe satisfacer las justas demandas de la Ley. Todo el plan de salvación y la estabilidad del
gobierno de Dios están vinculados con este acontecimiento final (Sal. 85:9, 10).
15. ¿Qué clase de ministerio inició Cristo en el Santuario Celestial después de su ascensión?
Respuesta: Sobre la base de las actividades que se llevaban a cabo en el santuario terrenal, sería
de esperar que el ministerio inicial de Cristo implicara intercesión (Lev. 6:2; 4:2-6). En realidad,
se muestra a Jesús después de su resurrección sirviendo a las iglesias. La visión simbólica lo
presenta caminando “en medio de los siete _____________ de oro” (Apoc. 1:12, 20; 2:1).
Es significativo que Juan el revelador, al escribir en la última década del primer siglo, muestra a Cristo
cuidando a los verdaderos creyentes mediante imágenes extraídas del lugar santo. Se ve a Cristo aquí
“asperjando” su “sangre” en favor de los creyentes (1 Ped. 1:2). Otra vez en Apocalipsis 8:3 y 4 se ve a
un ángel provisto de un incensario de oro y que ofrece incienso junto con las oraciones de los santos.
Estos son notables ejemplos del ministerio mediador (intercesor) (1 Rey. 7:50; 2 Crón. 26:28-30). Por
medio del ministerio intercesor de Cristo “su obra de justificación y santificación está constantemente
disponible para todos los que han aceptado su muerte por la fe” (C. Goldstein, Between the Lion and the
Lamb [Entre el león y el Cordero], 1995, p. 65).
En el libro de Hebreos se establece en muchas oportunidades que Cristo entró “en los cielos” (Heb. 4:14;
8:1, 2; 9:24) sin intentar determinar la ubicación exacta. Estos versículos indican la realidad del ministerio
en el Cielo en favor de nosotros, y su necesidad. En otros pasajes de Hebreos Pablo usa la expresión
“lugar santo” (traducción de la expresión griega ta hagia) para comunicar la misma idea. Aunque algunas
versiones traducen esta expresión por “lugar santísimo”, la palabra griega no comunica esa idea (R.
Young, Analitical Concordance to the Holy Bible [Concordancia analítica de la Santa Biblia], 1975, p.
487). Si recordamos esto Hebreos 9:12 dice: “Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por
su propia sangre, entró una vez para siempre en el lugar santo, habiendo obtenido eterna redención” (J.P.
Green, A Literal Translation of the Bible [Una traducción literal de la Biblia], 1987, p. 975). Cuando el
apóstol Pablo quería referirse definidamente al lugar santísimo usó la expresión griega hagia hagion, que
precisamente significa eso. (Heb. 9:3).
Si tomamos el santuario terrenal como modelo, en el que el ciclo anual de actividades comenzaba con la
intercesión y terminaba con el juicio, podemos esperar semejanzas en el santuario celestial. En efecto, la
palabra profética nos asegura que el “continuo”, es decir, el ministerio llevado a cabo en el lugar santo en
el Cielo, es precisamente el concepto que quiso eliminar el poder representado por el “cuerno pequeño”
(que reinó desde el 538 d.C hasta 1798 - Dan. 8:9-11). No nos unamos a los enemigos de Dios para negar
esta gran y significativa verdad.
16. A veces las Sagradas Escrituras nos presentan a Jesús después de su resurrección sentado a la diestra
del trono de Dios (Heb. 1:3; 8:1; 12:1, 2). Siendo que algunos sostienen que el trono de Dios siempre
debe estar en el lugar santísimo, ¿no querría decir entonces que Jesús, en el año 31 de nuestra era,
comenzó su ministerio en el lugar santísimo?
Respuesta: No, no es necesario llegar a esa conclusión. Las evidencias en apoyo de esta
declaración se mencionan brevemente a continuación:
a) El verbo “sentarse” significa “un acto solemne y formal; la asunción de alguna dignidad y
autoridad” (M.R. Vincent, Word Studies in the New Testament [Estudio acerca de las palabras del
Nuevo Testamento], 1900, t. 4, pp. 384, 385). Este verbo también se puede traducir por
“establecer”, “nombrar”, “designar”; H.G. Liddell y R. Scott, A Greek-English Lexicon [Un
diccionario griego-inglés], 1961, p. 854, y Mat. 4:16; Luc. 14:28; 2 Tes. 2:4). La palabra “diestra”
(a la derecha, a la mano derecha) se usa como “símbolo de dominio y poder” (J.D. Douglas, The
New Bible Dictionary [El nuevo diccionario de la Biblia], 1967, p. 503). L palabra ·”diestra”
también se puede usar metafóricamente para significar “listo” (Liddell y Scott, Op. Cit., p. 379).
Por lo tanto la sentencia “se sentó a la diestra”, puede ser en primer lugar una expresión de
prontitud y derecho por parte de Cristo, por causa de su sacrificio por el pecado, para asumir el
puesto de Mediador ante Dios y en favor de la humanidad (Mat. 26:64; Heb. 9:15; H. Kiesler,
“An Exegesis of Selected Passages” [Una exégesis acerca de pasajes selectos], pp. 56, 57, en F.B.
Holbrook, editor, Issues in the Book of Hebrews [Temas del libro de Hebreos]). El principal
propósito de la expresión es definir una relación, no una ubicación. La expresión “a la diestra”
aparece en Mat. 20:20-22, para transmitir precisamente ese concepto. La madre de Juan y
Santiago quería que Cristo pusiera a uno de sus hijos a su derecha y el otro a la izquierda, de
manera que nadie pudiera interferir en esa estrecha relación. Cristo, después de su resurrección,
fue exaltado a un elevado puesto junto al Padre, “a la diestra de Dios” (Hech. 2:33; 5:31). El
propósito de la invitación a Cristo a entrar en consejo con el Padre aparece claramente en las
Escrituras: debía servir como sacerdote según el orden de Melquisedec (Sal. 110:1, 4; Zac. 6:13).
Cuando Cristo regresa a la tierra para buscar a los suyos en ocasión de su segunda venida, se lo
presenta “sentado a la diestra del poder de Dios” (Mat. 26:64; Mar. 14:62; Luc. 22:69). Se
deduce, entonces, que él puede servir a la diestra del Padre no importa dónde esté en el Santuario
Celestial.
b) Las Escrituras nos dicen que hubo una “ininterrumpida intimidad” entre el Padre y el Hijo
mientras él estuvo aquí en la tierra (Juan 8:29; 10:30, 38; 14:11, 20; 17:11, 21). Esto se expresa
de muchas maneras de las cuales la siguiente es posiblemente la mas sucinta: “El Padre y yo uno
somos” (Juan 10:30). Esta “unidad” prosigue en el Cielo al aceptar plenamente el Padre el
sacrificio de Cristo como plenamente suficiente y completo (Heb. 7:25, 27). Por medio de su
cuerpo herido y quebrantado, representado por el velo que separaba al lugar santo del santísimo
del santuario, Cristo ha provisto un acceso a Dios eficaz y sin obstáculos (Heb. 10:20). La
“ininterrumpida intimidad” entre el Padre y el Hijo aparece en el libro de Hebreos mediante la
figura de su ubicación a la diestra de Dios.
c) La gloria de Dios no siempre se reveló relacionada con el lugar santísimo (Eze. 1:26-28; 10:4,
18, 19; 11:22, 23). Esto deja en claro que la Biblia no limita a Dios a un solo lugar. Conviene
recordar otra vez que las Escrituras tampoco presentan siempre a Cristo sentado en el trono del
Santuario Celestial (Hech. 7:55, 56). En este último texto, en realidad, se presenta a Cristo “de pie
a la diestra de Dios”. Las Escrituras incluso registran una entrevista de Cristo con el apóstol Pablo
en el camino a Damasco (Hech. 9:3-5; 22:6-8; 26:15, 16). Durante el transcurso del ministerio de
Cristo en el santuario celestial, se está asegurando de que se dispongan mansiones para los
redimidos (Juan 14:2, 3), lo que nos da a entender que también está dedicado a otras actividades.
Con esta información ante nosotros, no es posible asegurar que cuando Cristo ascendió a los cielos en el
año 31 d.C, entró directamente al lugar santísimo y que se quedó allí hasta ahora.
17. ¿Qué otras evidencias adicionales nos dan las Escrituras en el sentido de que el ministerio de
Jesucristo en el Santuario Celestial tiene dos aspectos bien definidos?
Respuesta: Se presenta a Cristo como el “ministro del ___________ y de aquel verdadero
_____________ que levantó el Señor y no el hombre” (Heb. 8:2).
Las palabras “santuario” t “tabernáculo” incluyen los lugares santo y santísimo. Difícilmente Cristo puede
ser ministro del verdadero santuario, el celestial, y desarrollar sus actividades, simbolizadas por las del
santuario terrenal, en uno sólo de esos compartimentos. El apóstol Pablo nos asegura que el santuario
terrenal era una copia del celestial (Heb. 9:24). Por lo tanto, se puede deducir con seguridad que el
ministerio de Cristo en el Cielo fue representado por las actividades llevadas a cabo en el santuario
terrenal (Heb. 9:18-23). Estas actividades comenzaron con la unción (ungimiento) del santuario, a lo que
seguían las diversas actividades desarrolladas en el lugar santo y que implicaban intercesión. Una vez al
año el sumo sacerdote oficiaba en el lugar santísimo en el día de la expiación (juicio). En Apocalipsis
14:7 el profeta presenta a Cristo desarrollando sus actividades en el segundo compartimento del santuario.
En efecto, notamos que “cuando Cristo entró en el lugar santísimo para consumar la obra final de la
expiación, cesó su ministerio en el primer departamento. Pero cuando terminó el servicio que se realizaba
en el primer departamento, se inició el ministerio en el segundo departamento. Cuando en el servicio
típico el sumo sacerdote salía del lugar santo en el día de la expiación, se presentaba ante Dios para
ofrecer la sangre de la víctima ofrecida por el pecado de todos los israelitas que se arrepentían
verdaderamente. Así también Cristo sólo había terminado una parte de su obra como intercesor nuestro
para empezar otra, y sigue aún ofreciendo su sangre ante el Padre en favor de los pecadores” (E. G. de
White, El conflicto de los siglos, 1975, pp. 481, 482).
18. ¿Qué otra evidencia hay, deducida del orden de las fiestas hebreas, definidas en el calendario de los
israelitas y llevadas a cabo en estrecha relación con el santuario terrenal, de que la segunda etapa del
ministerio de Cristo en el santuario celestial(la que tiene que ver con el juicio), comenzó cerca del tiempo
determinado para su segunda venida?
Respuesta: Las fiestas estaban organizadas en dos grupos, uno cerca del comienzo del año
religioso, y el otro más distante. El primer grupo anunciaba la crucifixión y los acontecimientos
relacionados con ella (incluso los que tenían que ver son su primera venida). El segundo grupo
tenía que ver con sucesos que ocurrirían inmediatamente antes de la segunda venida, incluso el
juicio previo al advenimiento y la segunda venida misma.
Las fiestas anuales (siete en total), en el antiguo calendario israelita, habían sido especificadas por el
Señor. Todo el sistema de adoración, incluso las fiestas, tenían que ver con el plan de salvación. Las tres
primeras fiestas (la pascua, la fiesta de los panes sin levadura, la de las primicias o cosechas - Lev. 23:1-
12) anunciaban la muerte de Cristo (Juan 18:28; 19:14; 1 Cor. 5:7), su sepultura y su resurrección (1 Cor.
15:20; Rom. 8:29; Mat. 27:52, 53). La fiesta de las semanas o de las cosechas, 50 días más tarde (Exo.
23:14-16; Lev. 23:15-21; Deut. 16:9, 10) anunciaban el derramamiento del Espíritu Santo en pentecostés
(Hech. 2:1). El resto de las fiestas estaba muy separada de las cuatro primeras. Si recordamos que en cada
nuevo año el ciclo comenzaba otra vez, el segundo grupo de fiestas comenzaba con el séptimo mes (Lev.
23:24). Implicaba la fiesta de las trompetas, el día de la expiación y el día de las cabañas o de las cosechas
(Lev. 23:24-36). Las últimas fiestas anunciaban el reavivamiento preparatorio del día anti típico de la
expiación, el día de la expiación propiamente dicho (que comenzó en 1844; Dan. 7:9, 10; Joel 2:1; Apoc.
14:6, 7) y a la venida del Señor en gloria (1 Tes. 4:15-18; Mar. 14:25). La última fiesta, la fiesta de las
cabañas, conmemoraba la liberación de Egipto. Abarcaba un período de gran regocijo, y venía sólo unos
pocos días después del día de la expiación (Lev. 23:39-43). Hoy vivimos en el día antitípico de la
expiación. ¡La liberación de la esclavitud del pecado en este mundo está a las puertas! Cristo vendrá
inmediatamente después de que termine el día del juicio (el día antitípico de la expiación - Dan 12:1;
Apoc. 22:11, 12). El cronograma del mensaje del santuario relativo a los acontecimientos del fin: el día de
la expiación, será el tema de otra lección.

1. pecado
2. holocausto
3. a) aceite de oliva b) incienso
4. sábado
5. doce
6. quebrantó, tomó
7. candelabro
8. luz
9. Espíritu
10. incienso
11. carne
12. sumo, Melquisedec
13. ---
14. a) entró, nosotros; Mediador b) expiación
15. candelabros
16. ---
17. santuario, tabernáculo
18. ---
APÉNDICE
LOS PACTOS
El primer significado de la palabra “pacto”, tal como aparece en las Escrituras, tiene que ver con el
convenio establecido entre Dios y el creyente con respecto al pecado y la salvación (el plan de salvación).
Las Escrituras hablan del pacto eterno (también conocido como el nuevo pacto - Gen. 17:7; Heb. 8:8, 13;
13:20) y el primer pacto (Heb. 9:1). La expresión “pacto eterno” establece firmemente en la mente del
lector que Dios ha tenido y siempre tendrá sólo un pacto de salvación.
El pacto eterno o de gracia (planificado por Dios antes de que el pecado entrara en el mundo - 1 Ped.
1:19,20) tiene que ver definidamente con los detalles del plan de redención y la reacción del creyente.
Este pacto se dio a conocer inicialmente a Adán y Eva en el Edén (Gén. 3:15) y fue renovado con otros
incluso Noé y Abrahán (Gén. 12:1-3; 15:6; 26:4, 5). Se lo conoce también como nuevo pacto por el hecho
de que fue ratificado por la sangre de Cristo (Luc. 22:20; Juan 19:30) mucho después de la ratificación del
antiguo pacto en el Sinaí (Exo. 19:5; 24:7, 8). El pacto eterno está en vigencia hoy y se aplica a todos los
verdaderos creyentes los hijos e hijas espirituales de Abrahán (Gál. 3:29; Heb. 13:20). Jesús es el
Mediador del pacto –o testamento– nuevo y eterno (Heb. 9:15; 12:24). Los principios de justicia que
tienen que ver con el Reino de Dios, y que constituyen el fundamento del pacto eterno, están resumidos
en los Diez Mandamientos (vea la lección 7). Ahora bien, el salmista dijo: “Hace mucho que he entendido
tus testimonios (tus mandamientos), que para siempre los has establecido” (Sal. 119:152). En efecto, el
apóstol Juan reafirmó este concepto en Patmos, cuando registró el hecho de que el arca del pacto estaba
en el Cielo (Apoc. 11:19: Deut. 10:8, 9; 9:9). Los principios del gobierno de Dios son inmutables de
eternidad a eternidad (Mal. 4¡3:6).
La relación de pacto establecida con los israelitas en el Sinaí (primero o antiguo pacto - Heb. 8:13; 9:1) no
reemplazó al pacto eterno. El propósito de Dios era conducir gradualmente a los esclavos israelitas, recién
salidos de Egipto (y muy ignorantes de Dios y sus métodos) a una plena comprensión de su naturaleza,
los principios de su gobierno, la importancia de la fe en la experiencia religiosa, y su deber de compartir
con otros su conocimiento de la salvación. El antiguo pacto intentaba conducir al creyente a un pleno
conocimiento de la salvación, por medio de los ritos y las ceremonias que anunciaban a Cristo. Pero la
mayor parte de los israelitas no desarrolló una relación salvadora con Cristo (Gál. 4:22-31; Heb. 4:2). La
gente trató de cumplir la voluntad de Dios por sí misma y fracasó. No le permitieron a Cristo que obrara
en sus vidas por medio de su Espíritu. Al antiguo pacto se lo calificó de defectuoso (Heb. 8:6, 7) por el
hecho de que la gente no lo entendió ni comprendió tampoco su papel en el plan de salvación. Trataron de
vivir por sus propias fuerzas de acuerdo con los requerimientos de Dios (por sus obras), y no por la fe
(Exo. 24:3; Heb. 4:2). El libro del pacto (Exo. 24:7; 1 Rey. 23:3) contenía los detalles concernientes al
estilo de vida, de especial importancia para su situación, que surgía de una comprensión de la Ley de los
Diez Mandamientos (Exo. 34:28) que, a su vez, eran un resumen de los principios de la justicia.
4. TU CAMINO ESTÁ EN EL SANTUARIO
Pocos de los que han tenido la experiencia de estar perdidos podrán negar que encontrar por fin el camino
que conduce al destino deseado es ciertamente algo agradable y que brinda alivio. Sólo vagamente nos
podemos imaginar la profunda sensación de pérdida y desesperanza que invadió a Adán y Eva una vez
que se dieron cuenta de que habían hecho una decisión equivocada al seguir las sugerencias de Satanás.
En medio de su temor, se escondieron de Dios, pero él los buscó. Durante la conversación que siguió
recibieron información acerca de los resultados de su elección, pero la esperanza que vislumbraron
cuando Dios les dijo que el tenía un plan para rescatarlos aceleró los latidos de sus corazones. Resultó
evidente poco después de la entrada del pecado, que el plan de rescate de Dios se le reveló más
plenamente a la pareja pecadora, puesto que notamos que instruyeron a sus hijos acerca de la necesidad de
ofrecer sacrificios de animales, y el significado de ellos, ya que prefiguraban la venida del Redentor. A
medida que las sucesivas generaciones entraban en el escenario, y las voces de Adán y Eva ya no se oían,
surgió la necesidad de bosquejar más detalladamente el camino de la vida.
Dios decidió bosquejar con más claridad su plan de salvación por medio de los servicios del santuario. El
santuario constantemente orientaba la atención del suplicante hacia el Dios de amor, y destacaba la
necesidad de una fe profunda y constante en los méritos del Salvador que un día aparecería en la tierra.
Cristo, durante su permanencia en este mundo, le dio un profundo significado a los símbolos del
santuario, porque se cumplieron en él. Aunque el sistema de culto del santuario llegó a su fin con la
muerte de Cristo, hay en la iglesia cristiana de la actualidad vestigios del santuario. Los servicios del
santuario y los ritos que implicaban siguen enseñándonos importantes lecciones acerca del plan maestro
de Dios para erradicar el pecado y para llevarnos a una tierra nueva en la cual morará para siempre la
justicia (este es tema de otras lecciones).
El Camino
• Establecer que el santuario terrenal enseñaba el camino de la salvación.
• Recordar que es posible sólo por Jesucristo.
1. ¿Dónde dice Dios que se puede aprender más plenamente el camino de la vida?
Respuesta: “Tu camino, oh Dios, está en el santuario” (Sal. 77:13, versión inglesa del Rey
Jaime [King James Version]. Las versiones castellanas a las que tenemos acceso traducen este
texto de esta manera; “Dios, santo es tu camino”. La versión portuguesa de Joao Ferreira de
Almeida lo rinde así: “O teo caminho, ó Deus, está no santuario”; es decir, coincide con la
versión inglesa citada. El Comentario bíblico adventista, en inglés, dice lo siguiente acerca de
este texto: “En el santuario. O, “en santidad”. El camino de Dios, aunque los seres humanos no
lo entiendan, siempre es santo, justo y recto [véase Gén. 18:25]. Si se acepta la traducción de la
versión del rey Jaime, “en el santuario”, se puede interpretar el texto como que el camino de Dios
se entiende mejor en el lugar dónde se lo adora, y por medio de los principios que se manifiestan
allí (véase Profetas y reyes, p. 35.–Nota del traductor).
La palabra hebrea traducida como “camino”, significa un sendero muy transitado, y se refiere al sendero
que tendría que recorrer Jesús en favor de nosotros. El suplicante podía allegarse al recinto del santuario,
ofrecer sus sacrificios de acuerdo con la costumbre, y mediante la contemplación y la oración recibir
consuelo, seguridad e instrucción.
2. ¿A qué persona presenta la Escritura como “el camino”?

Respuesta: Se presenta a ___________ como “el camino, la verdad y la vida” (Juan 14:6).
La frase “el camino” en este texto sin duda traía a la memoria del lector los celebres caminos del imperio
Romano; la vía Apia, por ejemplo. Era el camino principal entre Grecia y Roma y tenía más 560
kilómetros de largo. Del mismo modo Jesús es el camino que nos conduce a la ciudad celestial. La
historia registra el hecho de que a los primitivos cristianos se los conocía como los seguidores del
“Camino”, y la Biblia confirma esa situación (Hech. 19:23; 24:22). Cristo es la Persona en quien
concentran su atención todos los escritores bíblicos. Es la Fuente de vida eterna.
3. ¿En qué momento de la Historia de este mundo surgió la idea de que Cristo es el Camino de la vida?
Respuesta: Cuando Adán y Eva salieron del jardín del Edén, un querubín se ubicó en la puerta
para “guardar el camino del árbol de la ______” (Gén. 3:24).
No se discute el hecho de que Dios vedó el acceso al árbol de la vida después de la entrada del pecado en
el mundo, para evitar que surgiera una raza de pecadores inmortales. Pero este texto, tal como se lo
traduce generalmente, no comunica la plenitud de la idea que encierra. Una traducción de la Biblia a
partir de la versión griega conocida como Septuaginta, dice que el querubín fue puesto allí “para guardar
el camino al árbol de la vida”. Dios usó originalmente la palabra “guardar” cuando instruyó a los seres
humanos con respecto a sus deberes en el jardín del Edén (Gén. 2:15). Se instruyó a los seres humanos
para que “labraran y guardaran” el jardín. En este contexto la palabra significaba preservar o conservar el
jardín. Se podría entender que la misión del querubín consistía en ayudar a los seres humanos a concentrar
su atención en la salvación gratuitamente ofrecida por Dios.
Notaremos en futuras lecciones que los querubines estaban relacionados con la gloria de Dios en el
santuario terrenal. Podríamos sugerir que los sacrificios de animales hechos por los primeros creyentes en
las promesas de Dios se hicieron cerca de los querubínes relacionados con la “luz viva y radiante” a la
que se refiere la expresión “espada encendida” (véase E.G. de White, Maranatha, p. 354, en inglés). Si
entendemos la frase de esta manera, llegaremos a la conclusión de que nuestro Dios es muy
misericordioso. A menudo las expresiones que se usan para traducir Gén. 3:24 causan la impresión de que
el Señor es un ser casi vengativo al echar a la pareja humana del jardín del Edén.
4. ¿Qué símbolo se usa en el Antiguo Testamento para expresar la idea de que hay un solo camino que
nos lleva al Cielo?
Respuesta: En el sueño de Jacob, Jesús aparece como una __________ que va desde la tierra y
llega hasta el Cielo (Gén. 28:12; Juan 1:51).
Se identifica la escalera con el Hijo del hombre (Cristo) sobre quien los ángeles de Dios ascienden y
desciendan. Esta descripción recalca la importancia del ministerio de los ángeles en el plan de salvación
de Dios (Heb. 1:14). Se los envía para colaborar en el proceso de la salvación que sólo es posible si se
mantiene una correcta relación con el Señor. Por lo tanto, es evidente que todas las inteligencias del Cielo
están dedicadas a la misión de rescatar este planeta del pecado.
5. ¿Qué otros símbolos usó Jesús en sus parábolas para expresar la idea de que él es el Camino de la
salvación?
Respuesta:
a) Jesús dijo: “Yo soy la ________ de las ovejas” (Juan 10:7).
b) También dijo: “Yo soy el ______ pastor” (Juan 10:11).
En la parábola del buen pastor (Mat. 18:11-13), se presenta al pastor como quien busca y salva a la oveja
perdida. En otras palabras, trae al camino seguro a los que andan por sendas extraviadas. Estas parábolas
y otros textos de las Escrituras enseñan claramente que hay un solo camino hacia la salvación (Hech.
4:12; 1 Tim. 2:5). En el universo hay sólo una Persona que ha ganado el derecho a salvarnos, nuestro
Señor Jesucristo (Heb. 2:9, 10).
6. En el plan de Dios para salvar a los pecadores, ¿qué hizo la muerte y la resurrección de Jesús que los
sacrificios de animales no podían hacer?
Respuesta: Jesús trazó “un camino nuevo y ______”, que conduce a la presencia de Dios (Heb.
10:20).
Pablo contrasta aquí el sistema de sacrificios de animales, que no podían eliminar el pecado, con el
sacrificio de Cristo, que es plenamente eficaz para conseguir este fin. El camino era “nuevo” en el
sentido de que no existía antes; los que vivían antes de la cruz contemplaban por fe la victoria de Cristo.
Ahora miramos hacia atrás a la cruz y nos allegamos directamente al Salvador que vive siempre para
interceder por nosotros (Heb. 4:16; 7:25).
He aquí es el Cordero de Dios

• Probar que el plan de salvación se trazó antes que el pecado entrara en el universo.
• Señalar que desde la entrada del pecado en el Edén hasta la muerte de nuestro Salvador, el
derramamiento de la sangre de animales anunciaba el prometido sacrificio de Jesús en nuestro favor.
Los sacrificios de animales se instituyeron para impresionar al pecador con la atrocidad del pecado, y la
necesidad de un Salvador como el único camino a la salvación. Los corderos, y especialmente si eran
machos, se usaban comúnmente para los sacrificios regulares (Núm. 28). El símbolo del cordero se usa
casi uniformemente en las Escrituras para referirse a Cristo, y el cordero inmolado anunciaba el sacrificio
que ofrecería un día Jesús para rescatar a la raza humana de su eterna destrucción (Apoc. 13:8).
7. ¿Cuándo trazó Dios su plan de salvación?

Respuesta: “Antes de la ___________ del mundo” (1 Ped. 1:1.20; Efe. 1:14).
Cristo ha existido desde la eternidad. La entrada del pecado en los atrios celestiales y en el mundo no
tomó a Dios de sorpresa. Como consecuencia de haber creado tanto a los ángeles como a los seres
humanos como individuos dotados de la facultad de decidir, era posible que esos seres eligieran, o los
caminos del Señor o los propios. Dios sólo puede tener por siervos a los que lo sirven por propia decisión
y por amor. Antes de la creación de este mundo y de sus habitantes, Dios ya había trazado un plan de
rescate para el caso de que el pecado se manifestara. Cuando Adán y Eva pecaron, se puso en marcha este
plan.
8. ¿Cuándo se anunció el plan de Dios para la redención de la raza caída?

Respuesta: Tan pronto como Adán y Eva pecaron, Dios demostró su gran amor por ellos al
comunicarles ________________ su plan de salvación (Gén. 3:8, 15).
Las Escrituras parecen indicar que en la tarde del mismo día cuando pecaron nuestros primeros padres,
Dios les dio esperanza al anunciarles el plan trazado para rescatarlos de la eterna destrucción. Al estudiar
el versículo 15, entendemos, a partir del contexto, que Dios se está dirigiendo a Satanás. “Pondré
enemistas entre ti (Satanás) y la mujer (la iglesia - 2 Cor. 11:2), y entre tu simiente (los impíos - Juan
8:44; 1 Juan 3:10) y la simiente suya (Cristo - Gál. 3:16); ésta (Cristo) te herirá en la cabeza (Satanás será
destruido para siempre - Apoc. 20:10) y tú (Satanás) le herirás en el talón (Cristo fue molido por nuestros
pecados - Isa. 53:5)”. Adán y Eva entendieron esta promesa, según lo deducimos de Génesis 4:1. Cuando
nació su primer hijo, Eva dijo (traducción literal del hebreo): “He adquirido varón, el Señor”.
Aparentemente ella creyó que ese niño era el hijo de la promesa. ¡Qué desilusión le aguardaba! En lugar
de ser un redentor, Caín llegó a ser el primer homicida del mundo (Gén. 4:8).
9. Después de la entrada del pecado, ¿qué ceremonia instituyó el Señor para impresionar a todos en
cuanto al carácter atroz del pecado y su necesidad de un Salvador?
Respuesta: Los ______________ de las ovejas se ofrecían a Dios (Gén. 4:4).
Sin duda Adán estaba familiarizado con el sistema de los sacrificios, porque señalaba por la fe al futuro
sacrificio de Cristo en la cruz. El sacrificio de Abel era similar al que ofreció Moisés muchos años
después (Núm. 18:17). Abel manifestó su fe en Dios y en su sacrificio expiatorio (Heb. 11:4). Su hermano
Caín manifestó su desprecio por el camino de la salvación establecido por Dios, y trató de obtenerla por
medios que le resultaban satisfactorios a él mismo. Dios no quiso aceptar su intento de obtener la
salvación por medio de sus obras de desobediencia (Gén. 4:5-7). Es significativo el hecho de que se
ofrecieran los primogénitos de las ovejas.
10. ¿Emplea la Escritura la palabra “primogénito” para referirse a Cristo?

Respuesta: Sí, Cristo es “el primogénito de toda la creación” (Col. 1:15).
No se debe entender este término en el sentido de que Cristo es un ser creado; esta palabra, en este caso,
se refiere a rango y no a nacimiento. La Biblia afirma que es eterno (Miq. 5:2; Sal. 90;2; Isa. 40:28). El
término se usa aquí metafóricamente, y lo mismo ocurre en el resto de las Escrituras. Nótese que en Jer.
31:9 se dice que Efraín es el “primogénito”. Esto no es cierto si pensamos en el orden de los nacimientos
de los hijos de Israel (Gén. 41:52). En este caso tenemos que entender esta palabra en el sentido de que
Efraín era la más importante de las tribus del norte de Israel (Eze. 37:19). La misma terminología se usa
para expresar el cuidado y la actitud de Dios hacia Israel (Exo. 4:22). En Sal. 89:27 el significado del
término es perfectamente claro. Observe: “Yo también lo pondré por primogénito (a David), el más
excelso de los reyes de la tierra”. Pero David era el último hijo de Isaí. Por lo tanto, Cristo es el
preeminente, Aquel en quien reside nuestra esperanza de salvación. El apóstol Pablo ciertamente expresa
este mismo pensamiento en Col. 1:18: “El es también (Cristo) la cabeza del cuerpo que es la iglesia, y es
el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia”. Cristo es
preeminente porque es el más importante entre los que resucitaron de los muertos; es el Único que nos
puede dar vida eterna.
11. ¿Qué episodio sumamente interesante relata la Escritura que señala en forma dramática el significado
de la palabra “cordero”?
Respuesta: Cuando Abrahán e Isaac fueron a ofrecer un sacrificio en el Monte Moria, el patriarca
le dijo a su hijo: “Dios __________ el cordero para el holocausto, hijo mío” (Gén. 22:8).
El Señor le proporcionó un carnero a Abrahán para que lo sacrificara en lugar de Isaac, pero el episodio
anunciaba el momento cuando el Cordero de Dios se ofrecería a sí mismo por los pecados del mundo. La
respuesta definitiva a la pregunta de Isaac: “¿Dónde está el cordero para el holocausto?” (v. 7) se dio
siglos más tarde cuando Juan el Bautista declaró con plena seguridad: “¡Este es el Cordero de Dios, que
quita el pecado del mundo!” en ocasión del bautismo de Jesús (Juan 1:29).
12. ¿Qué anunciaba el sacrificio de la pascua?

Respuesta: ________ “nuestra Pascua” ha sido sacrificado por nosotros (1 Cor. 5:7).
(El servicio de la pascua se instituyó justo antes que los esclavos israelitas dejaran Egipto en su famoso
éxodo. Demostró en forma dramática que la liberación de la esclavitud, tanto física como espiritual,
proviene sólo de Dios. En este servicio se ofrecía un cordero sin defecto - Exo. 12:3-27). Jesús fue
crucificado un viernes, el día cuando se sacrificaba el cordero pascual (Luc. 23:54-24:1; 1 Juan 19:14).
Tinieblas envolvieron la cruz desde las 12:00 hasta las 03:00 de la tarde (Luc. 23:44). La hora nona
(novena, o 3 de la tarde) “era más o menos el momento cuando se sacrificaba el cordero pascual” (A.
Clarke, 1854, The Holy Bible, Conteining the Old and New Testaments, with a Commentary and Critical
Notes [La Santa Biblia, con los Testamentos Antiguo y Nuevo, un comentario y notas críticas], acerca de
Mar. 13:25). El día judío de la preparación se volvía especialmente importante alrededor de las 3:00 de la
tarde. Por eso, puesto que los judíos no querían que se profanara el sábado, querían que se retiraran los
cuerpos (Clarke, Op. Cit., Juan 19:31). Jesús ya estaba muerto en ese momento (Juan 19:33), más o
menos cuando se sacrificaba el cordero pascual. Jesús estuvo en la tumba durante el sábado, que era un
gran sábado, el primer día de la fiesta de los panes sin levadura. Resucitó el domingo de mañana, cuando
se ofrecía la gavilla mecida, símbolo de la resurrección (Lev. 23;5, 6, 11, 20; 1 Cor. 15:20, 23).
La fiesta de los panes sin levadura anunciaba la victoria sobre el pecado y Satanás que lograría Cristo aquí
en la tierra, y es la seguridad de que el Señor puede rehacer nuestras vidas (1 Cor. 5:7, 8). Jesús descanso
en la tumba durante el sábado haciendo de él un monumento recordativo tanto de la creación como de la
redención. Cuando surgió de la tumba el domingo de mañana, llegó a ser “las primicias de los que
murieron” (1 Cor. 15:20). La resurrección de Cristo de la tumba era la promesa de que le seguiría una rica
cosecha. Incluso cuando Jesús resucitó, muchos santos resucitaron con él (Mat. 27:52, 53).
13. En todos estos sacrificios se derramaba sangre. ¿Qué significaba esto?

Respuesta:
a) Cristo fue llevado como cordero al __________ (Isa. 53;7).
b) Al derramar su propia sangre, Cristo obtuvo eterna ____________ para nosotros (Heb. 9:12).
La sangre de los sacrificios de animales representaba vida (Lev. 17:11); de la misma manera, la sangre
que Cristo derramó representa su vida que él ofreció por los pecados de todo el mundo. Sólo por medio
de la fe en el sacrificio de Cristo puede el pecador obtener el perdón que se le ofrece (Rom. 3:25).
14. ¿Aprobó Jesús el sistema de los sacrificios de animales mientras estuvo en la tierra?
Respuesta: ¡Sí! (Mat. 5:23, 24; 8:4; Lev. 14:2, 12, 13).
Jesús instó a que se cumplieran los detalles de la ley mosaica (Lev. 14). Instó al leproso curado que
cumpliera los requerimientos relativos a la ofrenda de un animal sacrificado. De esta manera manifestó
respeto por los profetas de Dios, y fortaleció la fe en las Escrituras. Por su ejemplo, demostró obediencia
en todas las cosas. Deberíamos ser cuidadosos en seguir su ejemplo por la fe.
15. ¿Cuándo perdió su significado el sistema de los sacrificios?

Respuesta: Cuando Jesús murió, el velo del templo se ________ de alto a abajo (Mat. 27:50, 51).
Cuando el velo se rasgó de alto a abajo en ocasión de la muerte de Jesús, el lugar santísimo quedó a la
vista de todos, y no sólo del sumo sacerdote que entraba en ese lugar santísimo sólo una vez en el año. El
velo representaba el cuerpo de Cristo (Heb. 10:20). Así como su cuerpo fue rasgado en beneficio de los
pecadores, el velo del templo se rasgó también. El hecho de que el velo se rasgó significaba que la
presencia del Señor ya no santificaba el santuario, y que sus servicios habían llegado a su fin. Estos
servicios no serán restablecidos por Dios en el futuro de la historia de la tierra. Si lo hiciera estaría
negando la realidad y la eficacia del sacrificio de Cristo en favor de la humanidad (Heb. 9:12).
El Camino de la fe
• Dar seguridad, a partir de las Escrituras, de que cuando lo pedimos con fe, recibimos el perdón de los
pecados.
• Destacar el hecho de que los servicios del santuario subrayaban el acceso constante al perdón y a la
ayuda divina.
• Animar a los creyentes a creer que Dios ofrece constante ayuda para vivir sin pecado, en respuesta a
nuestra oración de fe.
Las religiones paganas se diferencian del cristianismo porque enseñan la salvación por las obras. La
salvación por la fe sola es la doctrina que caracteriza al verdadero cristianismo.
16. ¿Qué patriarca nos da un excelente ejemplo del camino de la fe?

Respuesta: Abrahán fue el _______ de los fieles. Sus hijos con todos los que manifiestan fe en el
sacrificio de Cristo como su Salvador (Rom. 4:13, 16; Gál. 3:29).
Abrahán dio un ejemplo de fe inconmovible cuando a la orden de Dios estuvo dispuesto a ofrecer en
sacrificio a su único hijo. El Señor nos pide a todos que manifestemos una fe tan firme como ésa.
17. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento nos enseñan que la humanidad pecadora se puede salvar
de una sola manera. ¿Cómo se expresa esta verdad?
Respuesta: “El justo por la ___ vivirá” (Hab. 2:4; Rom. 1:17).
Alabemos al Señor porque el evangelio ha sido el mismo en todas las edades (Heb. 4:2). En efecto, al
evangelio se lo califica de “eterno” (Apoc. 14:6).
18. ¿Son totalmente perdonados los pecados, y olvidados además?

Respuesta: Sí, por supuesto que sí. Cristo nos limpia “de ______ iniquidad” por medio de su
sangre (1 Juan 1:7-9; Col. 1:14; Efe. 1:7).
La conciencia del perdón de nuestros pecados, o nuestra justificación delante de Dios por los méritos de
Jesucristo, proporciona mucha paz, y brinda esperanza y seguridad (Rom. 5:1, 2; 8:1). El holocausto
continuo del santuario terrenal “le daba seguridad al israelita penitente de que el perdón siempre estaba
accesible. Si estaba enfermo, lejos de Jerusalén, o por alguna razón no podía ir al santuario, podía
aferrarse por la fe a la promesa simbolizada por esos sacrificios, que ardían sobre el altar las 24 hora del
día, todos los días, incluso en el de la expiación” (C. Goldstein, Ministry, febrero de 1992, pp. 6-9). Hoy
tenemos esta misma seguridad de acceso constante al perdón gracias al ministerio de Cristo en el
santuario celestial (Heb. 7:25).
19. Si Cristo mora en nosotros por la fe, ¿cambiará nuestro estilo de vida?
Respuesta: Sí; es la consecuencia de la experiencia del nuevo nacimiento. “Todas (las cosas) son
hechas ________” (2 Cor. 5:17).
El secreto de la vida cristiana es que a cada momento el creyente se aferra de Cristo por la fe, por lo que
se puede decir que Cristo vive en nosotros (Gal. 2:20). Mantener una relación de constante dependencia
de Cristo es el secreto de la victoria (1 Juan 3:6). La misma fe por la cual somos justificados también nos
santifica (! Cor. 6:11). El Espíritu Santo lleva a cabo en el creyente esta obra de transformación, de
manera que el converso comienza a desarrollar un carácter semejante al de Jesús (Rom. 12:2). El creyente
tiene la seguridad de la salvación mientras sigue caminando con Cristo por fe por medio de su Espíritu
(Juan 5:24; 6:40; 1 Juan 5:11-13; Rom. 8:1).
20. ¿Cuál es la victoria que vence al mundo?

Respuesta: “Esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra ___” (1 Juan 5:4).
La idea contenida en este versículo es que la victoria sobre el pecado puede ser permanente mientras nos
apoyemos en las provisiones hechas por el Cielo. Santiago bosqueja el secreto del éxito en 4:7. Si todos
los días nos sometemos a Dios, y decidimos pedir ayuda cada vez que somos tentados, la victoria está
asegurada. En el santuario terrenal se ofrecía “rito perpetuo” (incienso) cada mañana y cada tarde en el
altar de oro que se encontraba delante del Señor (Exo. 30:7, 8). Representaba el acceso permanente al
auxilio divino por parte del creyente por medio de la oración intercesora (2 Crón. 30:27). Esa misma
seguridad de ayuda divina se nos da hoy en respuesta a la oración de fe (Juan 6:23; Apoc. 8:3, 4). Se nos
fortalece en nuestro camino cristiano si confiamos en los medios que Dios ha provisto. La oración es parte
vital de la vida cristiana de éxito. Tal como nuestro Señor, necesitamos dedicar tiempo a la oración (Mar.
1:35). La instrucción de Jesús a sus discípulos se aplica igualmente a nosotros hoy. “Velad y orad para
que no entréis en tentación” (Mat. 26:41). Jesús también nos da ejemplo en cuanto al estudio de la Palabra
de Dios. Se apoyó en ella en la hora de la tentación (Luc. 4:8, 10-12). Las promesas de la Biblia se
aplican sólo al vencedor (Apoc. 3:21). Decidamos, por la gracia de Dios, que lo invocaremos
continuamente, de manera que nos regocijemos en su venida.

1. santuario
2. Jesucristo
3. vida
4. escalera
5. a) puerta b) buen
6. viviente
7. fundación
8. personalmente
9. primogénitos
10. creación
11. proveerá
12. Cristo
13. a) matadero b) redención
14. ---
15. rasgó
16. padre
17. fe
18. todos
19. nuevo
20. fe
5. TODO AQUEL QUE QUIERA
Pocas cosas, de las que encontramos en la vida diaria, están disponibles para todos. En los deportes hay
un número limitado de participantes y sólo un equipo ganador. En lo exámenes por lo general uno solo se
pone al frente de la clase. Sólo algunos aprueban y hay quienes fracasan. Pocos de nosotros podemos
aspirar a ser matemáticos, músicos, escritores y pensadores famosos. Mucho de nuestra sociedad se basa
en la competencia para ocupar unos pocos lugares, recursos u oportunidades. Poco nos puede sorprender,
entonces, que muchos tengan una opinión tan pobre de su propio valor, y algunos incluso necesitan ayuda
profesional a fin de poder hacer frente a las presiones de la sociedad. Otros, al tratar de alcanzar el nivel
de un héroe, lo sacrifican todo, hasta la vida misma, para lograr el premio deseado.
El mensaje que Dios nos da contrasta rotundamente con el que nos llega del mundo que nos rodea. Dios
afirma que creó a todos iguales, que todos somos candidatos potenciales al Cielo. El mensaje del
evangelio es: “¡El que quiera, venga!” En efecto, esta idea está presente a través de todas las Escrituras y
se la encuentra en manera especial en los símbolos del santuario. Examinemos esta sublime verdad que le
revela a todos los que la quieran considerar el valor que Dios le ha asignado a cada persona que llega a
este mundo. La Biblia presenta a Jesús como el héroe, y todos los que creen en él y logren la victoria por
medio de él serán los vencedores en el gran juego de la vida.
Salvación ilimitada
• Poner énfasis en el hecho de que Dios invita a toda persona nacida en este mundo a aceptar su plan de
salvación.
El gran don de Dios a la humanidad al ofrecer a su Hijo para que muriera en lugar de la raza caída,
ciertamente es una buena noticia para todos. No obstante, y al margen de la generosidad del don, el éxito
del plan depende de la reacción del pecador al ofrecimiento que se le ha hecho.
1. ¿A cuántos les ofrece salvación Dios en este mundo?

Respuesta: El ofrecimiento de la salvación se extiende a todos. El Señor no quiere “que
__________ perezca” (Juan 3:16; 2 Ped. 3:9).
Esta verdad se hizo evidente cuando el pecado entró en el mundo. La oferta divina de la salvación fue
hecha inicialmente a Adán y Eva y fue prometida a todos sus descendientes (Gén. 3:15). Por medio del
profeta Ezequiel posiblemente se nos haga la afirmación más clara del Antiguo Testamento acerca del
anhelo de Dios de ver que todos acepten el ofrecimiento de su salvación (Eze. 18:23, 32).
2. ¿Se nos salva en grupos de creyentes, por familias o como individuos?

Respuesta: Se nos salva individualmente. “La justicia del justo recaerá _____ ___” (Eze. 18:20;
Mat. 22:11, 12).
Si bien es cierto que cada cual es responsable en última instancia de su propia respuesta a la generosa
invitación de Dios, también somos conscientes de que cada cual influye para bien o para mal sobre sus
compañeros y relaciones (1 Cor. 7:14).
3. ¿Están limitadas las oportunidades de la salvación a un período en especial?

Respuesta: La salvación siempre está disponible, y en abundancia, para todos los que quieran
acudir a Jesús, pues él esta “_________ siempre para interceder por ellos” (Heb. 7:25).
Esta declaración se debe comparar con la otra que nos dice que llegará el día cuando se cerrará la puerta
de la misericordia para el mundo pecador (Apoc. 22:11, 12). También es verdad que ciertos individuos,
hasta el fin del tiempo de prueba, cometerán pecados que Dios no puede perdonar (Mat. 12:31, 32; Hech.
5:4, 5).
4. ¿De qué naturaleza es el pecado que Dios no puede perdonar?

Respuesta: La ___________contra el Espíritu Santo no será perdonada (Mat.12:31).
La blasfemia contra el Espíritu Santo es un gradual y deliberado rechazo de la luz que Dios ha permitido
que ilumine nuestro camino precisamente por medio del Espíritu. La persona que comete el pecado
imperdonable ya está fuera del alcance de Dios. No reacciona más ante los ruegos de su conciencia (Núm.
15:29-31). En la historia que mencionamos en el texto previo, los fariseos habían llegado a esa condición.
Por medio de sus sistema de educación habían llegado a tener un amplio conocimiento acerca de la venida
del Redentor. Habían sido testigos de los poderosos llamamientos de Juan el Bautista, y habían visto los
milagros de Jesús mismo. Y a pesar de esa enorme cantidad de evidencia esos fariseos acusaban a Jesús
de estar en connivencia con Satanás (Mat. 12:24). Otros notables ejemplos de pecado imperdonable son el
del rey Saúl, el primer rey de Israel, Judas, uno de los discípulos de Jesús, Caifás, el sumo sacerdote, y
Ananías y Safira, miembros de la iglesia primitiva (1 Crón. 10:13; Mat. 26:3, 4; 27:3-5; Hech. 1:16-19;
5:1-10).
5. ¿Qué esperanza ofrecen las Escrituras a gente que le ha hecho mucho daño a la sociedad y que ha sido
rebelde a Dios?
Respuesta: El Señor es paciente y “no _______ que ninguno perezca” (2 Ped. 3:9).
Vemos la actitud desafiante de Nabucodonosor, rey de Babilonia; no obstante, se convirtió en forma

notable (Dan. 4:1-3, 37). Notamos la infidelidad de David a los elevados ideales de su reino y los
principios de su fe; se arrepintió sinceramente y Dios lo aceptó (2 Sam. 11:7-9, 15; Sal. 51). Recordamos
las negaciones del apóstol Pedro; volvió a seguir a Jesús y sufrió una cruel muerte por su Señor (Mat.
26:73-75; Juan 21:15-19). No hay pecado tan grande que Dios no pueda perdonar. Si decidimos escuchar
y responder al llamado del Espíritu Santo, seremos salvos.
Los holocaustos continuos

• Destacar el hecho de que los servicios del santuario terrenal proclamaban que la salvación siempre
estaba al alcance de los pecadores.
• Analizar algunos aspectos de los holocaustos continuos para verificar que señalaban al ministerio de
Cristo y a su prometido sacrificio.
Las Escrituras del Nuevo Testamento indican claramente que el evangelio se predicó desde el mismo
principio. Notemos Heb. 4:2: “También a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva (el evangelio)
como a ellos (los israelitas)”. Examinemos algunos de los aspectos más importantes tal como los presenta
el santuario.
6. ¿Por medio de qué comunicó Dios la idea de la accesibilidad de su gracia perdonadora?

Respuesta: Mediante los sacrificios matutino y vespertino ofrecidos en el altar de los
holocaustos. Estos sacrificios se debían ofrecer “________________” (Exo. 29:38, 42).
Este pasaje pone énfasis en la naturaleza “perpetua” (continua, permanente) de esos holocaustos. La
palabra hebrea que aparece aquí es tamid, y se la usa una y otra vez para referirse a los diversos aspectos
de los servicios del santuario. La palabra apunta al ministerio de Cristo en favor del pecador que prosigue
siempre sin interrupción. Cristo siempre está listo para ayudar, y no hay necesidad de intermediarios.
7. ¿De qué naturaleza eran los sacrificios matutino y vespertino y qué significaban?
Respuesta: En cada una de esas ocasiones se ofrecía un _________ (Exo. 29:39-41).
El sacrificio se hacía en favor de toda la congregación a fin de dar a entender que “el Cordero de Dios”
iba a dar su vida por todo el mundo (Juan 1:29, 36). El cordero ofrecido dos veces al día anunciaba la
muerte de Cristo y al mismo tiempo indicaba la necesidad de un diario caminar con Dios, y más
precisamente, de cada momento. El sacrificio representaba el don de Dios para todos, para proveer
justificación para todos (Juan 3:16; Rom. 5:18). También enseñaba que por medio de Cristo todos
podemos allegarnos confiadamente para pedir perdón, misericordia y ayuda a fin de vivir todos los días.
Del santuario nos llega la idea de nuestros cultos matutinos y vespertinos. Todas las mañanas podemos
consagrar de nuevo nuestras vidas a Dios. Cada tarde debe haber otro acto de consagración, se deben
revisar las actividades del día, y se deben enmendar las malas acciones (2 Crón. 13:11; Sal, 55:17; 141:2;
Dan. 9:21; 6:10; Efe. 4:26).
Los holocaustos continuos no obviaban la necesidad de ofrecer sacrificios por ciertos pecados en
particular. Los dones de Dios para todos se deben aceptar por fe. El suplicante necesitaba demostrar, por
le obediencia, su fe en las provisiones de Dios. Sólo creer no alcanzaba. Si se cometían pecados, el
pecador debía presentar personalmente en el santuario el sacrificio apropiado (Lev. 17:4-6). Si por causa
de la enfermedad o la distancia del santuario el pecador no podía ofrecer ese sacrificio, entonces se podía
aprovechar los sacrificios ofrecidos durante la luna nueva o en cada fiesta (A.R. Treiyer. El día de la
expiación se relaciona con la contaminación y la purificación del santuario, 1986, p. 246; en F.C.
Holbrook, editor, The Seventy Weeks, Leviticus, and the Nature of Prophecy [Las setenta semanas, el
Levítico y la naturaleza de la profecía]).
8. Los corderos que se ofrecían cada mañana y cada tarde representaban a Jesucristo. ¿Con cuánto
cuidado se elegía al animal?
Respuesta: Los corderos eran sin ______ (Núm. 28:3, 4).
Los corderos que simbolizaban a Cristo eran sin tacha porque Cristo, nuestro substituto, “no conoció
pecado”, aunque fue “tentado en todo” como nosotros (Heb. 4:15; 2 Cor. 5:21). Los enormes esfuerzos de
Satanás para lograr que Jesús cayera ante la tentación resultaron infructuosos (Juan 14:30). En momentos
críticos de la vida de Cristo, el Padre manifestó que estaba complacido con su ejemplo. Estas
declaraciones las formuló después de su bautismo (Mat. 3:16, 17), en el monte de la trasfiguración (Mat.
17:15), cuando enfrentó la muerte (Juan 12:27, 28), en ocasión de la resurrección (Mat. 28:2) y cuando
regresó al Cielo (Juan 14:26; Hech. 2:1-4).
La sangre derramada por el cordero perfecto representaba la muerte de Cristo. El derramó su sangre por
nosotros. Las Escrituras declaran que “la sangre de Jesucristo, su Hijo, nos limpia de todo pecado” (1
Juan 1:7). Somos redimidos por su sangre (Apoc. 5:9). En otras palabras, somos redimidos no sólo porque
Cristo perdona nuestros pecados cuando los confesamos y los abandonamos, sino que por la fortaleza que
recibimos de él cada día también somos liberados del poder del pecado. La victoria sobre el pecado está
asegurada en Cristo.
9. ¿Qué otros elementos se ofrecían junto con los sacrificios matutinos y vespertinos?
Respuesta: Ofrendas de _______, sal, aceite y vino acompañaban al sacrificio (Exo. 29:39, 40).
En el versículo citado no figura la sal, pero notamos que en todas las otras referencias se instruye a
Moisés en el sentido de añadir sal a todas las ofrendas (Lev. 2:13).
10. ¿Qué verdades se enseñaban mediante el aceite y la sal añadidos a las ofrendas vegetales?
Respuesta: Las ofrendas vegetales, de las cuales había de varias clases, se consideraban muy
santas (Lev. 6:17). Estas ofrendas simbolizaban una total consagración a Dios.
Esta consagración completa resulta evidente cuando analizamos los siguientes detalles: la ofrenda vegetal
era hecha de harina. La harina resulta cuando el grano entero se somete al proceso de la molienda. La
entrega total de Jesús a la voluntad de Dios le permitió vencer y llegar a ser la Fuente de vida para toda la
humanidad (Juan 5:30). En el Padrenuestro (una oración proveniente de la experiencia de Jesús), él
presentó la idea de solicitar instrucción e iluminación divina cada día cuando dijo: “El pan nuestro de
cada día, dánoslo hoy” (Mat. 6:11). Se registra el hecho de que los panes que se ofrecían en los sacrificios
diarios debían ser sin levadura (Lev. 2:4). La levadura es un símbolo del pecado (1 Cor. 5:6, 7).De esto
aprendemos que Jesucristo, “el pan de vida”, viviría una vida sin pecado (Juan 6:35, 48). Es evidente,
entonces, que Cristo sometió plenamente su vida a Dios, y por fe reclamó la victoria.
El aceite representaba a la tercera persona de la Divinidad (Mat. 25:3-6; Zac. 4:2-7, 12). Por medio de la
diaria comunión con Jesucristo, a través de la obra del Espíritu Santo, seremos inducidos a entregar
totalmente nuestro yo. El aceite no sólo simboliza el Espíritu Santo sino también la alegría (Mat. 6:17;
Dan. 10:3). En otras palabras, en una dedicación completa y diaria al Señor hay abundancia de gozo y
felicidad.
El pan y el vino era todo lo que se consideraba necesario para el sostén de la vida (Jue. 19:19). El vino
que se ofrecía era sin fermentar; de nuevo anunciaba a Cristo, tema que consideraremos al desarrollar la
siguiente pregunta.
La sal asociada con el sacrificio representaba la salvación de que disfruta el cristiano que se conecta con
Cristo cada día. En esos cristianos el amor y la justicia de Cristo impregnan todo su ser. No pueden menos
que ejercer una beneficiosa influencia sobre todos aquellos con quienes se relacionan (E.G. de White, El
discurso maestro de Jesucristo, p. 36). Dios instruyó a todos sus seguidores a que se mantuvieran en
sazón (con sal). Si así no fuera, el reino eterno se le entregaría a otros (Mat. 5:13).
11. ¿Qué lecciones aprendemos de las libaciones (ofrendas de bebidas) que se vertían sobre los sacrificios
continuos?
Respuesta:
a) Cristo derramó su vida hasta la _______ (Isa. 53:12).
b) El creyente que se consagra por completo a Dios, derrama su vida mediante actos de
_________ desinteresado (Fil. 2:16, 17).
Las Escrituras usan el símbolo del jugo de uva puro, recién exprimido, para representar la sangre (Deut.
32:14). De allí que el vino representara la sangre de Jesús que se habría de derramar por todos. No tenía
fermento. Se recuerda que las libaciones se derramaban sobre el holocausto y se consumían como un
sacrificio agradable a Dios (Núm. 15:10). Esto representa adecuadamente el derramamiento de la vida de
Cristo para la salvación de todos (Mat. 26:27, 28). Pablo aplica también este simbolismo a la vida
cristiana. Una vida inspirada en la fe y el amor, dedicada a la difusión del evangelio era, según Pablo,
agradable a Dios. La palabra griega spéndomai que encontramos en Fil. 2:17, a veces se traduce como
“ofrecido”, pero su verdadero y más exacto sentido es “derramado”.
También se debe tomar en cuenta que las libaciones siempre se derramaban en el atrio (patio) exterior,
para dar a entender que los acontecimientos de referencia ocurrirían en la tierra (S.N. Haskell, The Cross
and Its Shadow [La cruz y su sombra], 1914, pp. 136-138). En cambio, ninguna libación se ofrecía en el
altar del incienso (Exo. 30:9).
Entrega continua (permanente) a Cristo

• Desafiar al lector a que, en vista del sacrificio de Cristo y su continuo (permanente) ministerio en
nuestro favor, se consagre a él día tras día y momento tras momento.
La vida victoriosa por medio de Cristo es un tema grandioso que impregna las páginas de las Escrituras.
Es verdad que nosotros, como seres humanos, podemos caer en pecado inclusive después de haber
aceptado a Cristo como Salvador. Pero también es verdad que las Escrituras presentan al cristiano como
alguien que está en posesión de los medios necesarios para vencer cada día. Esta victoria se logra por
medio de Jesús.
12. ¿Cómo describe la Biblia la estrecha relación que existía entre Enoc y Dios?
Respuesta: Se dice que Enoc ________ con Dios (Gén. 5:24).
Las Escrituras dicen que “caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque lo llevó Dios”. En esta
breve sentencia se encuentra el secreto de la vida cristiana. Notemos que Noé también estaba
familiarizado con la experiencia de “caminar con Dios” (Gén. 6:9). Vemos que cuando el pecado entró en
este mundo, los seres humanos ya no podían caminar literalmente con Dios. Pero el acceso a Dios está
asegurado por medio del Espíritu Santo (Gál. 5:16). Podemos elevar a Dios nuestras oraciones silenciosas
como si fuera dulce incienso, para fortalecer así la vida interior (Neh. 1:3-5). Al contemplar a Dios, o
caminar con él, experimentamos un cambio (1 Juan 2:6). Esta transformación se lleva a cabo por la fe. El
apóstol Pablo declara: “Porque por fe andamos, no por vista” (2 Cor. 5:7). La fe, el amor y la obediencia
son características prominentes de esa relación (Efe. 5;2; 2 Juan 6).
13. ¿A qué grupo de gente se le hacen las hermosas promesas del Apocalipsis?
Respuesta: A los ____________ (Apoc. 2:7, 11, 17, 26; 3:5, 12, 21).
Juan el Revelador, cuando su vita recorrió las diferentes etapas de la historia de la iglesia cristiana,
observó que siempre las promesas de Dios eran para los vencedores. La pérdida del paraíso por parte de
nuestros primeros padres fue consecuencia de la desobediencia. La entrada en el mundo nuevo sólo se les
garantiza a los que ejercen fe en Jesús y lo obedecen (Apoc. 14:12).
14. ¿Cómo se puede vencer?

Respuesta: ____ _____ Jesús venció (Apoc. 3:21).
15. ¿Cuál era el secreto de la vida victoriosa de Jesús?

Respuesta:
a) Dedicó mucho tiempo a la ________ (Mar. 1:35; 14:38).
b) Comprendió y atesoró la _________ de Dios (Mat. 4;4, 7, 10).
Estos dos principios nos explican el secreto de la vida victoriosa de Jesús. Los discípulos tenían la
impresión de que su poder provenía de su vida de oración, y por eso le pidieron que les enseñara a orar
(Luc. 11:1). Desde los comienzos de su vida ya era notorio que su autoridad se fundaba en su
conocimiento de la Palabra de Dios y su obediencia a ella (Luc. 2:47; Juan 7:15-18).
16. ¿Qué nos pide la Escritura que hagamos hoy?

Respuesta: Nos ha dado _________ para que lo sigamos (1 Ped. 2:21-23).
Se nos dice con toda claridad que toda tentación que aparece delante de nosotros se la puede resistir por
medio del poder que Dios siempre nos puede dar y que está dispuesto a darnos (1 Cor. 10:13). Jesús
amonesta a sus discípulos a “velar y orar”, y a estar siempre en actitud de orar (Mar. 14:38; 1 Tes. 5:17).
También instruyó a sus seguidores a que “escudriñaran las Escrituras” para que su carácter –el de Jesús–
se les pudiera revelar (Juan 5:39). Las Escrituras nos presentan a los bereanos como ejemplos dignos de
emulación. Ellos “escudriñaban las Escrituras cada día” (Hech. 17:11).
Al depositar nuestra confianza en Cristo, nuestra experiencia será la que describe Pablo. Cristo es capaz
de salvar “hasta lo sumo (o hasta la perfección - J.P. Green, A Literal Translation of the Bible [Una
traducción literal de la Biblia], 1987) a los que acuden a Dios por medio de él (Jesucristo)” Heb. 7:25) Al
avanzar por la fe, al relacionarnos con Cristo cada día, recibimos fuerzas para vencer (1 Juan 3:6; Apoc.
14:12). La promesa de Juan 15:7 es: “Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid
todo lo que queráis y os será hecho”.
17. ¿Debemos poner a un lado todo pecado en esta vida?

Respuesta: Sí. “Estas cosas os escribo para que no __________” (Tito 2:14; 1 Cor. 10:13; 1 Juan
2:1; Jud. 24).
Un solo pecado acariciado nos separa de Dios (Gén. 3:22-24; Núm. 20:11, 12; Sant. 2:10). Si nos
perdemos eternamente será por nuestra propia decisión (Jos. 24:15; Heb. 11:25; Sant. 1:13-15). Cristo
murió por los pecados de toda la especie humana, pero los beneficios de su sacrificio son eficaces sólo
cuando cada cual, por decisión personal, confiesa individualmente sus pecados. En los servicios del
santuario el pecador arrepentido confesaba pecados definidos sobre la cabeza de la víctima (podemos
ilustrar este punto al referirnos a las ofrendas por el pecado - Lev. 4:28-35)), para reconocer
simbólicamente ese a perfecto Sustituto que lleva ahora la culpa. El pecador degollaba la víctima por
propia mano, con lo que reconocía que su pecado personal había causado la muerte de esa víctima
inocente, y que finalmente todo eso significaba que su pecado personal causaría la muerte de Jesús.
A los santos también se les promete que Dios los puede librar del poder del pecado en esta vida. Dios le
concede abundantemente su poder a todo aquel que esté dispuesto a recibirlo (1 Cor. 10:13; Rom. 12:2).
Hoy es el día de la preparación, el momento de desarrollar una relación de confianza con Cristo (Heb. 3:7,
8). No habrá cambios de carácter cuando Cristo venga (Mat. 25:41-43; Luc. 13:24-28; Apoc. 22:11).
Mientras más nos acerquemos a Cristo, más defectuosos y más dependientes nos veremos a nosotros
mismos (Isa. 6:5; Luc. 5:8). Nunca llegará el momento cuando el cristiano declare que ya ha alcanzado la
perfección. Job es un buen ejemplo de esta experiencia. La Escritura afirma que era recto y perfecto (Job
1;, 8; 2:3). Pero Job mismo dijo: “Si yo me justificara, mi propia boca me condenaría; si yo dijera: soy
perfecto, eso mismo probaría mi perversidad” (Job 9:20, versión inglesa del rey Jaime). La vida cristiana
es de constante desarrollo. Así como el botón se abre para convertirse en hermosa flor, el cristiano puede
ser completo en Cristo a cada paso. Así como la flor debe conservar su conexión vital con la planta, el
cristiano debe estar completamente dedicado a Cristo (Juan 15:4-6). El sendero de la fe es un camino de
total dependencia de Dios. El creyente no invoca méritos humanos (Gél. 5:16; Efe. 5:27). En respuesta a
la pregunta: “¿Es capaz nuestro Dios?” la respuesta es rotunda: ¡Sí! “A aquel que es poderoso para
guardaros sin caída y presentaros sin mancha delante de él con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro
Salvador, sea gloria y majestad, imperio y poder, ahora y por todos los siglos. Amén” (Jud. 24, 25). ¡Qué
seguridad de salvación tenemos día tras día!

1. ninguno
2. sobre él
3. viviendo
4. blasfemia
5. quiere
6. perpetuamente
7. cordero
8. tacha
9. harina
10. ---
11. a) muerte b) servicio
12. caminó
13. vencedores
14. Así como
15. a) oración b) Palabra
16. ejemplo
17. pequéis
6. EL EVANGELIO
La palabra “evangelio” significa sencillamente “buenas nuevas”, “buenas noticias”. En nuestro mundo
actual prevalecen varias ideas acerca de la naturaleza exacta de las buenas nuevas. ¿No es acaso la buena
noticia de que Jesús regresará pronto para darle una segunda oportunidad a los que no respondieron
positivamente a su primera oferta de salvación? O, ¿no se trata, acaso, que somos dioses, que Dios antes
era como uno de nosotros, y que nosotros llegaremos a ser como él es ahora, capaces de crear nuestros
propios mundos? ¿Proclamaremos, como algunos lo hacen, que el evangelio desapareció de la tierra
siglos después de la muerte de Cristo, y que fue restaurado sólo hace poco? ¿Es verdad que la salvación
depende de nuestros propios esfuerzos? Estas y otras preguntas más resuenan en el mundo religioso de la
actualidad. Ciertamente el apóstol Pablo advirtió acerca del hecho de que en sus propios días se estaba
predicando un evangelio diferente y pervertido (Gál. 1:6, 7).
Tal vez una de las ideas más ampliamente aceptadas en el mundo cristiano de nuestros días es que todo lo
que se necesita para alcanzar la salvación es creer y nada más. ¿Está fundado este concepto en la Palabra
de Dios, o es parte de ese evangelio perverso al cual se refería Pablo? Responderemos éstas y otras
preguntas en el transcurso de esta lección. En ella vamos a establecer un contraste entre las principales
características del evangelio, tal como aparecen en el Antiguo Testamento, y tal como fueron entendidas y
enseñadas por nuestro Señor Jesucristo, y reveladas por las Escritura para ser difundidas en los días
actuales.
El evangelio en el santuario
• Destacar el hecho de que el evangelio se le comunicó a la raza humana en ocasión de la caída, y que
está ilustrado enfáticamente mediante los servicios del santuario terrenal.
• Poner énfasis en el hecho de que Dios es capaz de amar a los que no merecen amor; ningún pecador
ha hecho algo para merecer el amor de Dios.
• Subrayar que nuestra respuesta de amor a Dios implica obediencia por fe.
El evangelio tiene como centro a Jesucristo, quien ciertamente es la figura central tanto del Testamento
Antiguo como del Nuevo. Las Escrituras presentan un solo evangelio: Dios le ofrece vida eterna a los
pecadores. Examinemos brevemente las ideas acerca de ls salvación tal como las presenta el Antiguo
Testamento, y en especial el santuario.
1. ¿Cuándo se reveló el evangelio a la especie humana?

Respuesta: Tan ________ como el pecado entró en el mundo, Dios reveló su plan de salvación
(Gén. 3:11, 15).
En el jardín del Edén, antes de que Dios informara a la pareja culpable acerca de la exacta naturaleza de
su condición de seres caídos, les dio esperanza. Examinemos brevemente los puntos principales de esta
promesa. Primero, el dominio de Satanás quedó en tela de juicio. El texto dice que pondría “enemistad”
entre Satanás y los creyentes. En otras palabras, el Espíritu de Dios estaría activo en el mundo a fin de
ejercer una benéfica influencia sobre las acciones de todos (Rom. 2:14, 15). El versículo de Génesis 3
también promete la venida del Redentor (Gál. 3:16). Finalmente, se promete que el diablo será juzgado,
ya que su cabeza será aplastada. En otra parte, la Escritura entra en detalles al respecto al afirmar que
Satanás será destruido en el lago de fuego (Apoc. 20:10). Estos textos presentan el evangelio como un
mensaje de restauración total.
2. ¿Se les dio conocimiento a los israelitas, durante su peregrinación por el desierto, acerca del plan de
salvación?
Respuesta: Sí; el evangelio les fue ___________. El Señor les dio directamente lecciones de fe y
dependencia en los alrededores del santuario (Heb. 4:2; Núm. 14:10, 11).
Una breve historia de las infidelidades de Israel bajo la conducción de Moisés aparece en Hebreos 3. La
invitación divina a entrar en el “descanso” o salvación recibió el rechazo de la gran mayoría de la multitud
que salio de Egipto. El evangelio, tal como se lo predicaba en el Antiguo Testamento, no era sólo para los
judíos, sino para los gentiles también (Rom. 15:8-12).
3. ¿Cuáles eran los principales aspectos del evangelio tal como se los enseñaba en el santuario?
Respuesta:
a) La salvación es un don de Dios puesto a disposición de todos. Mediante los servicios del
santuario, la vida de cada pecador arrepentido estaba asegurada mediante el sacrificio de un animal
que servía de substituto (becerro, cordero, macho cabrío - Lev. 17:3). Su muerte satisfacía
simbólicamente la penalidad del pecado. La sangre derramada del animal hacía “expiación por el
alma” (Lev. 17:11) a cuenta del prometido sacrificio de Cristo por medio de quien somos
·justificados por su ________” (Rom. 5:9).
Las provisiones de la salvación estaban a disposición de todos los pecadores. Esto queda bien en claro
mediante expresiones como “si alguien peca” o “si alguien comete una falta” (Lec. 4:2; 5:15). Esas
declaraciones enseñan la importante lección de que Dios ama a los seres humanos pecadores que no
pueden hacer nada para merecer la salvación, pues es un don (Isa. 53:5,6; Rom. 5:8).
b) Con el fin de poner énfasis sobre el hecho de que este don de Dios siempre estaba disponible, se
ofrecía un cordero sin defecto cada tarde y cada mañana. Anunciaba la venida del _________ de
Dios (Exo. 29:39; Isa. 53:7).
La idea de que los corderos que se ofrecían en diferentes ceremonias anunciaban un acto redentor es
perfectamente clara en el Antiguo Testamento. Dos ejemplos nos servirán para ilustrarlo. El primero --y
notable por cierto--, es la orden que se le dio a Abrahán de que ofreciera en sacrificio a su hijo Isaac. El
muchacho se libro de la sentencia de muerte porque un carnero, provisto milagrosamente, fue sacrificado
en su lugar (Gén. 22:8, 13). El segundo es la pascua. El cordero que se inmolaba estaba relacionado con la
inminente liberación de los hijos de la promesa de la esclavitud egipcia (Exo. 12:3, 11-14).
Los corderos ofrecidos en los sacrificios matutino y vespertino eran para toda la congregación. Se ofrecía
el sacrificio y debía arder permanentemente. Estos símbolos apuntaban al hecho de que la salvación se le
ofrece gratuitamente a todos, y destacaban la permanente eficacia de la salvación ofrecida por medio de
Cristo.
c) Al margen del prometido sacrificio de Cristo (representado por los corderos de los holocaustos
diarios), el pecador debía no sólo reconocer personalmente su propio pecado, sino confesarlo
también. La confesión se hacía _________ las manos sobre la cabeza de la víctima (Lev. 24:29-31).
La lección se enseñaba gráficamente mediante la necesidad de que cada pecador trajera una ofrenda por el
pecado (nuestro texto se refiere específicamente a pecados de ignorancia), confesara definidamente su o
sus pecados, y a continuación degollara la víctima con sus propias manos. De este modo la atrocidad del
pecado quedaba profundamente impresa en la conciencia del pecador. El creyente volvía a aprender que se
había sacrificado una vida inocente como consecuencia de su transgresión personal de la Ley. La
necesidad de la confesión y el abandono de los pecados se reconoce en el Antiguo Testamento mediante
pasajes como los de Prov. 28:13: “El que oculta sus pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se
aparta de ellos alcanzará misericordia”. Al traer un sacrificio y degollar la víctima inocente, el pecador
reconocía el lugar de la voluntad humana en el divino plan de salvación (Jos. 24:15, 22).
d) El pecador recibía el perdón de sus pecados (justificación, o liberación de la culpa del pecado)
por ___ más bien que por obras (Lev. 4:20; 1 Sam. 15;22; Heb. 11:6).
A fin de “andar en todos sus caminos” (Deut. 10:12), era necesario que los hijos de Israel ejercieran fe. El
testimonio de Dios por medio de Moisés en contra de Israel era que se trataba de gente “sin fe” (Deut.
32:20; Rom. 9:31, 32). No temían a Dios (Deut. 32:17). Temer a Dios es tener una correcta relación con él.
Esa relación es imposible sin fe (Heb. 11:6). Los israelitas reconocían la necesidad de una relación de fe y
comenzaron a desarrollar esa cualidad, pero el desarrollo de la fe fue mínimo en la mayor parte de ellos
(Heb. 11:29; 4:2).
Hasta la venida de Cristo, los creyentes no sólo necesitaban creer en la venida del Redentor, sino que
también sería capaz de vencer a Satanás. Al mirar hacia adelante, hacia la cruz, se le pedía al creyente que
ejerciera gran fe en las evidencias de la presencia de Dios en el universo. Para los israelitas las evidencias
eran bastante claras. No sólo recibieron maná durante cuarenta años, sino que la presencia visible de Dios
era evidente en el santuario. Además de estos milagros diarios, se le dieron a la multitud otras notables
revelaciones de Dios. La importancia de la fe se ilustra especialmente mediante dos ejemplos de la
experiencia de los israelitas. La primera tiene que ver con la serpiente de bronce que Moisés puso sobre un
asta. Cuando los que habían sido mordidos (picados) por las serpientes venenosas miraban por fe el
símbolo de la promesa divina de vida, la curación se producía al instante (Núm. 21:8, 9). La serpiente
levantada anunciaba a Cristo que habría de venir a convertirse pecado por todo el mundo (Juan 3:14; 2
Cor. 5:21). El segundo ejemplo tiene que ver con la experiencia de los diez espías enviados a Canaán. Sólo
entraron en la tierra prometida los que manifestaron fe en las promesas de Dios (Núm. 13:30, 31; 14:29,
30). El apóstol Pablo reconoció la importancia de la fe en el Antiguo Testamento cuando dijo: “El justo
por la fe vivirá” (Rom. 1:17; cita de Hab. 2:4).
e) El Señor no sólo quería que su pueblo se acercara para recibir el perdón de los pecados, sino para
que fuera santificado, es decir, que fuera libre del poder del pecado. Las Escrituras expresan la idea
de la santificación con estas palabras: “___________ de vuestra naturaleza pecaminosa” (Deut.
10:16; Lev. 19:2; Col. 2:11).
Estas ideas de perdón y vida santa por medio de la fe, están muy bien expresadas por David en el Sal. 51:9
y 10: “¡Crea en mí, Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mi!”. Reconocía que la
ayuda de Dios era indispensable. Note su comentario en el versículo 11: “Y (tu) espíritu noble me
sustente”. El acceso a una constante ayuda en la vida diaria se le enseñaba al pueblo por medio de los
símbolos del altar del incienso, como lo vimos en una lección anterior.
f) El Señor prometió cumplir su pacto (incluso su plan de salvación), y “apartar” de ellos “toda
____________” que solía atacar a los paganos (Deut. 7:12, 15).
La aceptación del ofrecimiento de Dios produce beneficios en esta vida y en la venidera. La libertad de la
culpa y la conciencia de lo que valemos para el Señor produce paz mental. Al practicar los principios
relativos a la salud, el bienestar físico mejora. Es evidente que el evangelio promete una restauración que
no sólo es espiritual, sino física también.
g) Se aceptaba la respuesta del pecador a la invitación de Dios, cuando estaba motivada por el
______. La obediencia es el resultado d esa relación (Deut. 10:12).
La actitud casi increíble de Dios hacia los seres humanos pecadores, fue la de amarlos a pesar de su
rebelión, al punto de estar dispuesto a morir en lugar de ellos. La única reacción adecuada ante este gran
amor, es amar y servir a Dios y al prójimo (Deut. 10:15, 19, 20).
h) El plan de salvación termina con el juicio pronunciado contra Satanás (Lev. 6:8, 21, 22). Los
redimidos experimentarán una gozosa victoria, mientras que los que rechazaron la gracia divina
__________ para siempre (Lev. 23:27-30, 39-41).
El servicio del día de la expiación está lleno de significado y lo estudiaremos en profundidad en una futura
lección. Se lo consideraba un día de juicio (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 5, col. 1383). Los que no se
humillaban delante del Señor en ese día eran separados de la congregación, perdían su condición de
hebreos, y en algunos casos inclusive se les aplicaba la pena de muerte (Gén. 7:14; Exo. 12:15; 31:14). Los
que compartían plenamente la ceremonia tenían derecho a participar de la fiesta de las cabañas cinco días
después, una fiesta de victoria y liberación (Lev. 23:40, 43). Esta fiesta representaba la liberación de la
presencia del pecado.
En el día de la expiación, en la última parte de la liturgia, el sumo sacerdote ponía ceremonialmente los
pecados confesados de la congregación sobre la cabeza del macho cabrío vivo, que representaba a Azazel.
Este macho cabrío vivo (símbolo de Satanás) no expiaba los pecados del pueblo, puesto que no se
derramaba su sangre- Se lo presenta como el responsable de la entrada del pecado en el mundo. Esta
ceremonia también simbolizaba el último acto del drama de la salvación: la destrucción de Satanás.
El evangelio que predicó el Señor

• Poner énfasis en el hecho de que el don de la salvación es gratuito e inmerecido, pero que puede llegar
a ser nuestro por medio de la fe.
• Destacar el hecho de que todos los actos de Dios se basan en el amor; por eso al pecador arrepentido se
le pide amor.
Anque el evangelio se predicó desde el principio del mundo, después de la venida de Cristo llegó a ser
sumamente claro gracias a su vida y sus enseñanzas, y las de los apóstoles.
4. ¿Excluye a alguien la invitación del evangelio?

Respuesta: Jesús declaró que su invitación a la vida eterna sería extendida a “______ las
naciones”. Esta invitación es un “____ de Dios” (Mat. 28:19; Juan 4:10, 14).
La oferta de la salvación, hecha por Jesús, es nuestra si la aceptamos. Podemos decidir aceptar esta
increíble oferta, y también decidir seguir a Jesús cada día. La entrega de nuestra voluntad a Dios implica
una gran lucha, pero es el secreto de la vida cristiana (Mat. 10:37, 38; 16:24; Luc. 9:23).
5. En su primer sermón, Jesús resumió los principales aspectos del evangelio (Luc. 4:16-21). ¿Cuáles son
esos aspectos?
Respuesta:
a) Jesús declaró que “había sido ungido” para predicar “buenas nuevas” (Isa. 61;1). Las buenas
nuevas eran, y lo siguen siendo, que Dios acepta a los pecadores perdonados (Luc. 5:32).
En estos textos se expresa la idea de que “él nos ama aunque no lo merezcamos. Nos ama a pesar de no
hemos nada para obtener ese amor; no lo merecemos. Nos ama aunque nosotros no lo amemos” (R.H.
Woolsey, What Manner of Love [Mirad cuál amor], 1995, p. 12. - Rom. 5:8, 10; 2 Cor. 5:21).
b) Jesús ________ a los cautivos del pecado (Isa, 61:1).
El sermón de Jesús se basaba en Isa. 61:1. La expresión “apertura de la cárcel” significa literalmente
“restauración de la vista”. Se refiere no sólo a la vista física sino a la espiritual. Se debían abrir las puertas
de la comprensión moral. Jesús vino no sólo a librar a los pecadores de la culpa del pecado, sino de su
poder también (Luc. 18:13, 14; Juan 8:11). Jesús dijo: “La verdad os hará libres” (Juan 8:32). Y siguió
explicándole a sus oyentes de esta manera: “Así que, si el Hijo os liberta, seréis verdaderamente libres” (v.
36). Pablo se refiere a esta libertad en Rom. 6: “Así también vosotros consideraos muertos el pecado, pero
vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro. No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de
modo que lo obedezcáis en sus apetitos” (vs. 11, 12). La libertad del pecado implica no sólo el perdón,
sino la victoria sobre el pecado por medio del Espíritu Santo (1 Cor. 6:11). La purificación de la vida
interior de modo que ya no haya pecado en ella, es de importancia suprema a la vista de Dios (Mat. 23:25,
16). La forma cómo Jesús trató a la mujer sorprendida en adulterio revela que el perdón del pecado
(justificación) y la liberación de su poder (santificación) son de igual importancia(Juan 8:10, 11). Jesús nos
dio una gran seguridad con respecto a la vida eterna a los que entran en una relación de fe con él (Juan
6:40; 11:25, 26).
c) la salvación es nuestra si ejercemos ___ (Mar. 11:22, 24,-26).
En el contexto de este discurso acerca de la fe, Jesús puso énfasis en la necesidad de creer que Dios
perdona nuestros pecados cuando se lo pedimos. En Mat. 23:23 Jesús le señaló a los judíos que ellos
estaban omitiendo los aspectos más importantes de la religión: la justicia, la misericordia y la fe. Los
discípulos entendieron algo de la gran importancia de la fe en la vida cristiana, y le pidieron que les
aumentara la fe (Luc. 17:5).
d) Nuestra fe en las promesas de Dios sólo se acepta si está motivada por el ______. Este nos lleva
a obedecer voluntariamente (Mat.5:43, 48; Juan 14:15, 23, 24).
La clara enseñanza de Jesús es que el amor imparcial es la base de la vida cristiana, así como es la base del
amor de Dios por un mundo pecador. Pablo resume esta enseñanza en estas palabras: ”Porque en Cristo
Jesús ni la circuncisión vale algo ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor” (Gál 5:6). Ese amor
impulsó a los discípulos de Cristo a obedecerle, y a compartir las buenas nuevas con los demás.
e) El evangelio, cuando se lo entiende bien, promete alivio del dolor que produce el pecado (Mat.
4:23).
El evangelio trae sanidad espiritual y física, cuando vivimos de acuerdo con lo que sabemos de la Palabra
de Dios. La entrada del pecado en este mundo trajo sufrimiento y muerte (Gén. 4:8). El evangelio nos
promete alivio del dolor del pecado ahora y en el mundo venidero (Apoc. 21:4).
f) La era del evangelio no es ilimitada. Dios logrará que su plan de sus frutos, y le pondrá fin el
reino del pecado. Habrá un “día de __________” o juicio (Isa. 61:2).
Las buenas nuevas del evangelio incluyen el mensaje de que el pecado y su autor, Satanás, serán
destruidos (Apoc. 20:10). Dios está obrando de acuerdo con un cronograma bien planificado. La promesa
es que el pecado no se levantará dos veces (Nah. 1:9). Llegará el día cuando se distribuirán los galardones,
pero será precedido por una investigación de las vidas de hombres y mujeres (Mat. 12:36). De esto
estamos seguros, porque el profeta Juan afirma que cuando Jesús venga por segunda vez traerá las
recompensas (Apoc. 22:12).
g) El evangelio incluye las buenas nuevas del “_______”, que implican la noticia de que los santos
serán librados de la presencia del pecado al llegar el cumplimiento del tiempo (Mat. 4:23; 26:29).
Las enseñanzas de Jesús se referían tanto a su reino de gracia como al de gloria. La misión de Cristo
terminará cuando todas las cosas se reconcilien con él, cuando el carácter de Dios quede vindicado en todo
el universo (Col. 1:20). El plan de salvación de Dios llegará a su fin cuando todos reconozcan que Cristo
es “REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”, cuando el causante del pecado sea destruido y
desaparezca todo vestigio de pecado (Apoc. 19:16; 20:10; 21:1).
6. Además de proporcionar salvación a la especie humana, ¿qué otros propósitos cumplió la venida de
Jesús a esta tierra?
Respuesta: Cuando Cristo vino a este mundo y vivió una vida perfecta, el carácter de Dios quedó
vindicado. También su nombre será “_____________” en Israel, es decir, en sus santos (Isa. 61:2).
Jesús dijo que la profecía de Isaías se había cumplido en su persona y en su ministerio (Luc. 4:21). En
efecto, él declaró que Dios es fiel. La venida de Jesús para cumplir las promesas del evangelio era una
vindicación del carácter de Dios. La permanente acusación de Satanás era que en el carácter de Dios había
una falla (Gén. 3:2-5). La Ley es una manifestación del carácter de Dios. Jesús la obedeció perfectamente;
vivió sin pecado. Al vivir, morir y resucitar, demostró que eran razonables las condiciones a las que se
debía someter la especie humana en el principio. A Satanás se le dieron todas las oportunidades de
demostrar sus hipótesis, y fracasó aún en las circunstancias más ventajosas.
El evangelio eterno
• Realzar el hecho de que el evangelio se concentra en la bondad de Dios.
• Poner énfasis en el hecho de que los que aceptan el evangelio por la fe, son instrumentos de Dios para
demostrar su carácter ante el mundo.
• Demostrar que el evangelio declara que Satanás es un enemigo vencido, y que sus días están contados.
En el Apocalipsis el profeta Juan se refiere al evangelio eterno. Como ya lo hemos visto, el evangelio que
enseña el Antiguo Testamento no difiere del que enseñó Cristo. En ninguna parte de la Biblia encontramos
un resumen más completo del evangelio que en Apocalipsis 14. Es el evangelio que debemos predicar hoy,
en la hora del juicio de Dios, que se desarrolla justo antes de la segunda venida de Jesús.
El evangelio pone énfasis en el hecho de que somos justificados por la fe (Gál. 2:16; Efe. 2:8). Se eliminan
nuestros pecados, se nos declara justos cuando acudimos mediante la confesión de ellos y aceptamos por la
fe a Jesús y su sacrificio plenamente suficiente. El pecador arrepentido, mediante este acto de fe, indica su
intención de comenzar una vida nueva en Jesucristo. El Señor capacita a la persona para que viva esta
vida, para que ande de acuerdo con su voluntad (santificación - Col. 2:6, 7).
Notemos lo siguiente: “Si te entregas a él y lo aceptas como tu Salvador, por pecaminosa que haya sido tu
vida, serás contado entre los justos por consideración a él. El carácter de Cristo toma el lugar del tuyo, y
eres aceptado por Dios como si no hubieras pecado.”
“Más aún, Cristo cambia tu corazón. Habita en tu corazón por la fe. Debes mantener esta comunión con
Cristo por la fe y la sumisión continua de tu voluntad a él. El carácter de Cristo toma el lugar del tuyo, y
eres aceptado por Dios como si no hubieras pecado” (E.G. de White, El camino a Cristo, ACES, Buenos
Aires, edición de bolsillo, 1991, p. 62).
7. ¿Sobre qué puntos pone énfasis Juan el revelador en su resumen del evangelio?
Respuesta:
a) Hay una evidente alusión al “Cordero” (de Dios - Apoc. 14:1, 4). El evangelio eterno,
proclamado bajo la dirección de Dios en la etapa final de la historia del mundo (v. 6), extiende una
definida invitación: “¡Ven! El que oye, diga: _____. Y el que tenga sed, venga. El que quiera, tome
gratuitamente del agua de la vida” (Apoc. 22:17).
La carta de amor de Dios a la especie humana termina con la idea de que está buscando activamente al
pecador (Jer. 3:13; Juan 12:31). Por más pecadores que seamos, por más indignos, Dios nos invita a ir a él.
Su gracia alcanza a todos.
b) El centro del evangelio es Jesucristo y el anhelo de Dios es que el pecador responda con amor.
Las Escrituras instan al oyente a temer a Dios y darle gloria, a adorar al Creador, a vivir una vida de
____ y de obediencia a Dios en la hora de su juicio (Apoc. 14:7, 12).
Estos versículos, que contienen el primero de tres importantes mensajes que Dios le da al mundo, están tan
llenos de significado que desearíamos dedicar algún tiempo a analizar cada una de las declaraciones del
revelador. Pero antes debemos notar que la invitación contenida en el capítulo 14 del Apocalipsis es el
último ofrecimiento de la misericordia divina al mundo. Esta invitación se extiende gratuitamente a todos
(Apoc. 14:6; 22:17).
8. ¿Qué significa temer a Dios?

Respuesta: Mantener una correcta relación con Dios y obedecerle (Ecl. 12:13, 14).
Los que mantienen una correcta relación con Dios manifiestan fe (Gén. 22:12; Gál. 3:7, 8). La fe es la
victoria que vence al mundo (1 Juan 5:4). Los que temen a Dios también lo aman y guardan sus
mandamientos (Deut. 10:12; Juan 14:15). Se ha dicho con propiedad que “este mismo amor ferviente es lo
que hace del pueblo de Dios la luz del mundo” (E.G. de White, Advent Review and Sabbath Herald [La
Revista adventista en inglés], 1889, t. 66, No. 30, p. 466). El temor del Señor conduce a la obediencia
(Deut. 10:12, 13; 13:4; Ecl. 12:13, 14; Sant. 2:26). Temer también significa reverenciar a Dios. Todas
nuestras ofrendas y nuestro servicio a Dios se deben dar como consecuencia de nuestro exaltado concepto
de él (Mal. 1:6, 8).
9. ¿Cómo le podemos dar gloria a Dios?

Respuesta:
a) Si somos instrumentos para comunicar al mundo la belleza del carácter de Cristo. El apóstol
Pablo nos hace notar que al contemplar a Cristo “somos _______________ de gloria en gloria en su
misma imagen” (2 Tes. 2:13, 14; 2 Cor. 3:18).
Los cristianos tenemos el privilegio de revelar al mundo, en nuestras personas, el carácter de Cristo, por el
poder del Espíritu Santo. La transformación del carácter que se produce es el triunfo de la fe (Rom. 12:2;
Gál. 2:20). Tal demostración de vidas victoriosas es una evidencia que acalla las acusaciones lanzadas por
Satanás contra Dios. El carácter del Señor es vindicado, porque resulta claro que dispone de poder para
librar al creyente no solo de la culpa del pecado, sino de su poder también (Apoc. 14:5). Los creyentes que
cultivan este tipo de relación con Cristo tienen una gran seguridad (Apoc. 22:14).
b) Al vivir de acuerdo con los principios de salud bosquejados en las Sagradas Escrituras, le damos
________ a Dios (1 Cor. 6:19, 20; 10:31).
Las leyes de la vida (relativas a la salud) se originan en el Dios de la vida. Si las descartamos, nos
ponemos por encima de las instrucciones del Señor. En otras palabras, preferimos otros dioses en lugar del
Dios creador. Vemos que los principios de salud están inseparablemente unidos a la proclamación del
evangelio eterno (E.G. de White, Medical Ministry [El ministerio médico], 1963, pp. 27, 159). Los
principios de salud, tal como aparecen bosquejados en la Biblia, ayudarán a restaurar la salud física y
prepararán al individuo para experimentar plenamente la salud espiritual. Jesús enseñó con poder esta
verdad cuando insinuó que la salud mental no se puede separar de la del cuerpo (Mat. 4:23; 9:6). En Apoc.
14:7 el Señor nos lleva de nuevo al Edén y a los principios de salud revelados entonces.
c) Al compartir con otros el conocimiento de Cristo, o al dejar que brille nuestra ____, damos
gloria a Dios (Mat. 5:16; 2 Cor. 4:15).
Cuando compartimos el conocimiento de Dios y cuando damos testimonio ante los demás por medio de
buenas obras practicadas por amor, le damos gloria a Dios.
10. ¿Qué aspecto especial del evangelio dijo Dios que se debía enfatizar cerca del fin de la historia del
mundo?
Respuesta: Dios es el _________ del universo, y va a restaurar todas las cosas (Apoc. 14:7, 1-4).
Nuestro mundo de hoy está saturado de ideales humanistas que enseñan que la gente de este mundo está a
cargo de su propio destino. Se nos recuerda que el Señor es el Creador, el Redentor y el Restaurador de
todas las cosas. Los fieles serán librados de la presencia del pecado. La restauración precede al juicio y a la
venida del Señor. Estas verdades están inseparablemente vinculadas. ¡Qué gloriosa revelación es ésta!
11. ¿Qué significado tiene vincular el anuncio de la inminencia de la hora del juicio con la proclamación
del evangelio eterno?
Respuesta: Sólo podremos prevalecer en el juicio si estamos cubiertos con la justicia de Cristo.
Esto le da un sentido de urgencia a la proclamación del evangelio (Apoc. 14:6, 7, 14-16; 18:2-4).
Desde una perspectiva histórica, los teólogos bíblicos no entendieron el tema del juicio previo al
advenimiento hasta comienzos del siglo XIX. Entonces surgió un gran movimiento mundial que proclamó
con claridad el comienzo del ministerio judicial de Cristo en 1844. En ningún otro momento de la historia
de la iglesia cristiana se había hecho tal anuncio. El anuncio del juicio es una seguridad de que la venida
del Señor es inminente, que el reino del pecado está por concluir. Las buenas nuevas de la salvación,
cuando se las entiende bien, proclama la liberación de la culpa, del poder y finalmente de la presencia del
pecado (Isa. 61:1, 2; E.G. de White, El conflicto de los siglos, 1975, pp. 404, 405). También afirma que
serán destruidos el originador del pecado y los que persiguieron a los santos (Gén. 3:15; Eze. 28:18; Dan.
7:26; Apoc. 20:9, 10).
El concepto del juicio tiene un significado más profundo para el creyente. Una vez al año en el sistema
litúrgico hebreo, instituido por el Señor, había un día de expiación o juicio. En ese día del juicio típico, al
cual se refería el Antiguo Testamento (Lev. 16), Dios quería que una obra de purificación de los motivos y
de reforma de la vida (por medio de la fe en el poder que sólo Dios es capaz dar), se convirtiera en el foco
de atención en el período que precedía a este evento (Isa. 58:6, 7). Por eso en los días que precedieron el
juicio investigador, previo al segundo advenimiento, que se está desarrollando en el Cielo, es el propósito
de Dios que los habitantes de este mundo concentren su atención en la preparación para salir al encuentro
de su Dios. Por lo tanto, ¡se necesita mucho más que sólo creer! (1 Juan 5:1-5).
El desafío: vivir por fe

• Enseñar que Dios nos desafía a humillarnos delante de él y aceptar su plan para nuestras vidas.
• Recordar que Dios promete cambiar hasta nuestra manera de pensar cuando lo aceptamos.
Para poder entender el desafío que Dios nos extiende en la hora de su juicio, necesitamos saber de qué
naturaleza es el problema que enfrentamos. El plan de Satanás, en este caso, es confundir los temas (Dan.
8:12, 13).
12. Jesús vino a este mundo para darnos ejemplo. ¿Espera él que venzamos por fe todo pecado conocido?
Respuesta: Sí; el galardón de la vida eterna es para los ____________ (Apoc. 3:21).
Jesús vino a este mundo a morir en lugar de nosotros y a darnos ejemplo (2 Ped. 2:21, 22). Jesús jamás
cedió a la tentación. Cumplió por la fe la voluntad de su Padre (Juan 4:35; 5:30). Por eso Cristo entiende
nuestras tentaciones y nos proporciona ayuda en abundancia cuando nos acercamos a él por fe (Heb. 2:18;
1 Cor. 10:13). Cuando enfrentamos la tentación, inmediatamente deberíamos someternos a Dios y pedirle
que nos dé la victoria (Sant. 4:7, 8). Se nos da la seguridad que no seremos tentados más allá de lo que
podamos soportar (1 Cor. 10:13). Recordemos que Cristo nos ha elegido para que seamos joyas preciosas
en su reino (Hag. 2:23).
13. ¿Vino Jesús a este mundo con los atributos de la raza que quería salvar?
Respuesta: El vino “en ___________ de carne de pecado” (Rom. 8:3; Fil. 2:7).
Jesús vino a este mundo como un ser humano real (1 Juan 4:2). “Cristo vino a la tierra tomando la
humanidad y presentándose como representante del hombre para mostrar que, en el conflicto con Satanás,
el hombre tal como Dios lo creó, unido con el Padre y el Hijo, podía obedecer todos los requerimientos
divinos” (E.G. de White, Mensajes selectos, 1966, t. 1, p. 297).
14. ¿Qué diferencia establece la Biblia entre tentación y pecado?

Respuesta: Cada uno es _________, cuando de su propia pasión es atraído y seducido”, y cuando
ésta “ha concebido” (Sant. 1:14, 15).
Estas declaraciones resultan más claras aún si las leemos en la versión Dios Habla Hoy, en castellano
moderno: “Al contrario, uno es tentado por sus propios malos deseos, que lo atraen y lo seducen. De estos
malos deseos nace el pecado; y el pecado, cuando llega a su completo desarrollo, nace la muerte”. Jesús
fue tentado pero no pecó (Mat. 4:1; 1 Ped. 2:22). Siempre cumplió la voluntad de su Padre. Era santo y sin
mancha (Juan 6:38; 15:10; 1 Ped. 1:15). Por lo tanto, es perfectamente claro que la tentación no es pecado.
15. Como seres humanos, ¿heredamos algo de la culpa de Adán?

Respuesta: “El hijo ___ _________ el pecado del padre” (Eze. 18:20).
Este texto nos enseña con toda claridad que a ninguno de nosotros se nos imputa el pecado de Adán.
Heredamos deseos y la disposición de pecar como consecuencia del pecado de Adán, y sin ayuda divina no
podemos vencer ni ser salvos (Rom. 5:12; 8:7, 8). Si decidimos pecar, decidimos obra independientemente
de Dios, y si seguimos así, sin arrepentirnos, nos perderemos para siempre. Las ideas de decisión y destino
son perfectamente claras en las Escrituras (Sant. 4:17; Rom. 6:12, 13). José decidió no aceptar las
insinuaciones seductoras de la mujer de Potifar (Gén. 39:9). Moisés decidió padecer aflicciones con el
pueblo de Dios antes que “gozar de los deleites temporales del pecado” (Heb. 11:25). Daniel decidió, o
“propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey” (Dan. 1:8). Jesús decidió
conservar su relación de fe con su Padre, y resistió “hasta la sangre” (Heb. 12:2-4). ¡Qué ejemplo de fe nos
da el Señor! (1 Ped. 2:21-25). Nos llega la promesa de que seremos “participantes de la naturaleza divina,
habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de las pasiones” (2 Ped. 1:4).
16. ¿Promete Cristo transformar nuestras vidas por medio de la fe?

Respuesta: El evangelio proclama que Dios no sólo perdona nuestros pecados (nos justifica), sino
que también ____________ nuestras vidas (nos santifica) por la fe (Rom. 5:1, 2; 12:2).
Tanto la justificación como la santificación se basan sólo en la fe, no en las obras (Hech. 26:18). Las obras
son el resultado inevitable de una vida de fe (Sant. 2:14-17). La relación que existe entre la fe, la
justificación, la santificación y las obras la expresa una escritora de la siguiente manera: “Dios requiere
que haya una total entrega del corazón antes que la justificación pueda ocurrir; y para que el hombre
conserve la justificación, debe haber una obediencia permanente, mediante una fe viva y activa que obra
por el amor y purifica el alma” (E.G. de White, Faith and Works [Fe y obras], 1979, p. 100).
Dios declara enfáticamente que los salvados habrán experimentado tanto la justificación como la
santificación por medio de la fe; en otras palabras, su relación con Cristo se ha mantenido (están
permanentemente conscientes de lo que Cristo ha hecho por ellos). Notemos este comentario divino: “El
que es injusto, siga siendo injusto; y el sucio, siga siendo sucio; y el que es justo, que se lo siga declarando
justo; y el que está santificado, que se lo siga santificando” (R. Young, Young’s Literal Translation of the
Holy Bible [Traducción literal de la Santa Biblia, de Young], 1898, edición revisada, sobre Apoc. 22:11;
con referencia a Apoc. 14:12).
17. ¿Qué ideas revolucionarias proclama el evangelio?

Respuesta: Dios nos invita a vencer el pecado por medio de la fe, y a llevar “cautivo todo
_____________ a la obediencia de Cristo” (Gál. 5:16; 2 Cor. 10:5).
Cristo nos asegura que su gracia nos capacita. “El poder convertir de Cristo cambia el corazón, refina y
purifica los pensamientos” (E.G. de White, In Heavenly Places [En lugares celestiales], 1967, p. 164).
También se nos recuerda que “Dios no dejará que ninguno de sus fieles obreros quede solo para luchar
contra las adversidades y vencer. Preserva como joya preciosa a todos aquellos cuya vida está escondida
con Cristo en Dios” (E.g. de White, Our High Calling [Nuestra elevada vocación], 1961, p. 322). Los
principios de su reino siempre controlan nuestros actos (Sant. 4:7; 1 Juan 3:9; 5:4). Nuestra entrega a
Cristo en el instante de la conversión prosigue cada momento al darnos cuenta de lo que Cristo ha hecho
por nosotros; nuestra lealtad es completa y seremos guardados de la caída (Fil. 4:13). En esta condición
Dios nos considera “sin mancha” (Jud. 24; Apoc. 14:5). El evangelio nos desafía a darle gloria a Dios
demostrándole al mundo que la fe lleva a cabo una maravillosa transformación de la vida (Apoc. 14:6).

1. pronto
2. predicado
3. a) sangre b) Cordero c) poniendo d) fe e) despojados f) enfermedad g) amor, h) perecerá
4. glorificado
5. a) — b) libera c) fe d) amor e) — f) venganza g) reino
6. glorificado
7. a) ven b) fe
8. —
9. a) transformados b) gloria c) luz
10. Creador
11. —
12. vencedores
13. semejanza
14. tentado
15. no llevará
16. transforma
17. pensamiento
7. LA LEY Y EL EVANGELIO
En la lección anterior examinamos el evangelio tal como lo enseñan los Testamentos Antiguo y Nuevo.
En esta lección, usando ese conocimiento como base, queremos examinar la relación que existe entre la
Ley y el evangelio. Sabemos que hay varias versiones del evangelio en el mundo actual. Como
consecuencia de nuestro estudio de las Escrituras muchas de esas incertidumbres han desaparecido.
Incertidumbres semejantes tienen que ver con la Ley.
En muchas sociedades la trama moral está entretejida con los Diez Mandamientos. Algunos preguntan si
esos principios morales tienen su origen en Dios, o si son meramente humanos; muchos creen que los
principios morales que se aplican en el mundo de hoy son el resultado de la evolución. Se afirma que la
especie humana es producto de la evolución, y que ha llegado al punto de poder controlar el proceso
evolutivo. También se sostiene comúnmente que en la era cristiana el cuarto mandamiento ha sufrido
modificaciones. Se alega que el tiempo mencionado en el mandamiento es litúrgico (ceremonial) y que
fue desechado en la cruz. Hay todavía quienes sostienen que el cuarto mandamiento no tiene
verdaderamente un lugar en la ley moral, ya que carece de contenido moral. Por cierto, Dios no es el autor
de esta confusión. Las Escrituras mismas nos recuerdan que “Dios no es Dios de confusión, sino de paz”
(1 Cor. 14:33). Ciertamente hay una gloriosa unidad en las Escrituras que elimina las incertidumbres. En
esta lección veremos la unidad que existe entre la Ley y el evangelio.
La ley y el pecado
En esa sección vamos a:
• Examinar el origen y la naturaleza del pecado.
• Destacar los principios del gobierno de Dios.
• Señalar la naturaleza eterna de la Ley de Dios.
1. ¿Dónde se originó el pecado?

Respuesta: En el cielo, es decir, “en el santo ______ de Dios” (Eze. 28:14, 15).
Todos los seres superiores creados por Dios estaban dotados de libre albedrío: la facultad de decidir
libremente. En el Cielo el notable “querubín grande, protector”, era precisamente Lucifer (Isa. 14:12). Era
un ángel poderoso que había sido honrado más que todos los otros seres creados (Eze. 28:13, 14). El
orgullo surgió en la mente de Lucifer, y decidió desafiar los principios del gobierno de Dios con la idea de
obtener más responsabilidad y poder (Isa. 1:13, 14). En Apoc. 12:9 se nos recuerda que Lucifer, o Satanás
(como llegó a llamarse después de su caída) fue expulsado del Cielo junto con sus ángeles, como
consecuencia de su deslealtad.
2. ¿Qué definición bíblica del pecado tiene que ver con la Ley?
Respuesta: “El pecado es ____________ de la Ley” (1 Juan 3:4).
Pecar es obrar como si nu hubiera Ley (Sal. 119:172; 1 Juan 5:17; El Diccionario Enciclopédico Océano
Color [Barcelona, 1996] dedfne así la palabra “pecado”: “Violación del orden moral de origen divino”).
Puesto que el pecado se originó en el Cielo (Isa. 13:12-14; Apoc. 12:7-9), se desprende que los grandes
principios enunciados en la Ley de Dios también existían allí. Otros luminosos textos que definen el
pecado nos indican que dejar de hacer el bien, la falta de fe, o no tomar en cuenta la voluntad revelada de
Dios, todo eso es pecado (cc. Mat. 12:30; Juan 16:9; Rom. 14:23; Sant. 4:17). El pecado implica el
quebrantamiento de una relación (1 Juan 3:6, 9).
3. ¿Qué aspecto de la ley violó Lucifer en el Cielo?

Respuesta: Lucifer codició el lugar de Dios, y quiso ser “___________ al Altísimo” (Isa. 14:13,
14).
El capítulo 14 de Isaías es una concisa declaración formulada por Dios en contra del rey de Babilonia que
estaba controlado por Satanás. Aquí se presenta a Satanás como un ser glorioso. Codició el poder, la
gloria y el honor de Dios, y quiso apoderarse de ellos. (Nota: Satanás usa seres humanos para alcanzar sus
fines). Para ilustrarlo recordaremos que en una ocasión Satanás usó a Pedro para tentar al Señor Jesús. El
discípulo sugirió que el Maestro no debía cultivar ideas de sufrimiento y muerte en favor de la pecadora
humanidad. “Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! Me eres tropiezo,
porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres” - Mat. 16:21-23).
4. ¿Qué dicen los escritores bíblicos acerca de las funciones de la Ley?

Repuesta: La función de la Ley consiste en presentarnos una norma de conducta que Dios puede
aceptar o, en otras palabras, darnos “el ______________ del pecado” (Rom. 3:20; 7:7).
La Ley condena al pecador impenitente y atrae al pecador arrepentido a los pies de la cruz para recibir
perdón y poder a fin de hacer lo que la Ley demanda. Las Escrituras nos aseguran que Dios es como un
padre terrenal anhelante de recibir a sus hijos extraviados (Luc. 15:20-24).
5. ¿Cuáles es el principio básico de la Ley?

Respuesta: ______ a Dios y al prójimo (Mat. 22:36-40; Juan 15:10-14).
Los cuatro primeros mandamientos se refieren a nuestro amor a Dios. El amor a Dios es un principio que
el Antiguo Testamento subraya constantemente (Deut. 6:5; 10:12; 30:6). Los seis últimos se refieren a
nuestro deber de amar a nuestro prójimo (Lev. 19:17, 18). Ciertamente el principio del amor se encuentra
en el corazón de la Ley (Exo. 20:6). El apóstol Pablo resume esta gran verdad en Rom. 13:10 cuando
dice: “El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la Ley es el amor”. Resulta evidente
que si Dios es amor (1 Juan 4:8), el principio que le sirve de fundamento a la Ley es tan eterno como Dios
mismo.
6. ¿Se entendían estos principios relativos a los Diez Mandamientos antes de su proclamación formal?
Respuesta: ¡Sí!
Es importante notar que de acuerdo con la lista que sigue, todos los principios implícitos en los Diez
Mandamientos eran conocidos por los seres humanos desde el mismo principio. Expresaban la voluntad
de Dios para la humanidad. No eran sólo para los judíos, sino para toda la especie humana. Tomemos
nota de ellos:
1. Dios es el único Dios verdadero (Gén. 15:7; 35:1-4; Exo. 3:6, 14, 15; 5:3; 12:12).
2. No se deben hacer imágenes para adorarlas (Gén. 25:1-4).
3. El nombre de Dios debe ser honrado, no profanado (Gén. 25:2, 33; Heb. 12:16; Exo. 5:2;
14:18, 27).
4. El sábado, el séptimo día de la semana, es santo (Gén. 2:1-3; Exo. 16:22-28).
5. Se debe honrar a los padres (Gén. 9:21-25; 28:6-9).
6. El acto de matar no representa el amor de Dios (Gén. 4:8-11; 9:5, 6).
7. El adulterio y las relaciones extra matrimoniales no son los caminos del amor (Gén. 16:3-5;
34:2, 27, 31; 39:7-9; 49:4).
8. El robo es un acto totalmente desprovisto de amor (Gen. 31:30, 31).
9. La mentira representa negativamente los caminos del Señor (Gén. 12:12-20; 20:5-7, 9; 27:29,
32, 33).
10. La codicia es la raíz de muchos males (Gén. 3:5, 6; 6:1-3, 5, 6; 27:4, 27-29, 32, 33).
7. ¿Cuándo se le dio formalmente la Ley de los Diez Mandamientos a la humanidad?

Respuesta: Los Diez Mandamientos, escritos en tablas de piedra por el dedo de Dios, se dieron
formalmente al hombre mientras el pueblo de Israel se encontraba al pie del Monte _______
(Exo. 31:18).
Los Diez Mandamientos se dieron formalmente en el Monte Sinaí, pero sus principios fundamenteles
habían sido entendidos por los habitantes de la tierra antes de eso. Los Diez Mandamientos de Dios eran
de tanta importancia que él los escribió con su propio dedo. Moisés rompió el primer juego de tablas para
dar a entender el desagrado de Dios frente al descarado desprecio de su presencia en el Monte por parte
de los israelitas (Exo. 32:19). Pero Dios prometió renovar su pacto con Israel. Se le ordenó a Moisés que
hiciera un nuevo juego de tablas, a diferencia del primero que fue hecho por Dios mismo, pero de todos
modos Dios escribió los Diez Mandamientos con su propio dedo en el segundo juego de tablas (Exo.
34:1, 28). Es importante tomar nota que quien dio la Ley fue Jesucristo mismo (Mal. 3:1; Hech. 7:38; 1
Cor. 10:4). De modo que cualquier modificación que se le quiera introducir a la Ley debe provenir de
Cristo mismo.
8. ¿Qué declaración hizo Jesús acerca de la perpetuidad de la Ley?

Respuesta: Nada se cambiará en la Ley de Dios mientras ________ el cielo y la tierra (Mat.
5:18).
Es evidente que la Ley de Dios es tan inmutable como Dios mismo. Las Escrituras declaran: “Porque yo,
Jehová, no cambio” (Mal. 3:6). La Ley de Dios es el fundamento de su “pacto” o “testamento” (Exo.
25:16; Heb. 9:4, 15; Apoc. 11:19). Un testamento no se puede modificar después de la muerte del
testador. Por medio de su muerte Criso refrendó su testamento con la iglesia cristiana, tal como su
testamento quedaba refrendado en los tiempos del Antiguo Testamento mediante los sacrificios de
animales. Su pacto con la iglesia cristiana a veces recibe el calificativo de “nuevo”, pero también se lo
llama “eterno”. En este pacto está implícita la promesa de que por medio de la fe el creyente recibirá
fuerzas para guardar la Ley de Dios y, en consecuencia, recibir la herencia eterna (Heb. 9:16-22).
La Ley y el carácter de Dios

• Poner énfasis en el hecho de que la Ley de Dios nos dice cómo es él.
Ya vimos que la esencia de la Ley es el amor, que es también la característica central de Dios y del
evangelio. Se ha dicho que la Ley de Dios es un “trasunto” o una transcripción del carácter de Dios. La
Ley de Dios tiene dos aspectos inseparables: amor a Dios y amor al hombre.
9. ¿Cuales son algunas de las características de Dios que también se manifiestan en su Ley?
Respuesta:
a. Es la verdad (Juan 14:6; Sal. 119:142).
b. Es justicia (1 Cor. 1:30; Sal. 119:172).
c. Es santa (Isa.6:3; Rom. 7:12).
d. Es amor (1 Juan 4:8; Mat. 22:37-40).
e. Es perfecta (Mat. 5:48; Sal. 19:7).
f. Es buena (Luc. 18:19; Rom. 7:12).
g. Es justa (Deut. 32:4; Rom. 7:12).
h. Es pura (1 Juan 3:3; Sal. 19:8).
i. Es inmutable (Sant. 1:17; Mat. 5:18).
10. ¿Qué otro aspecto del carácter de Dios encontramos también en la Ley?
Respuesta: Dios y la Ley permanecen _____ ________ (Dan. 7:14; Sal. 111:7, 8).
Es evidente que la Ley de Dios es la norma por medio de la cual se mide toda vida, porque expresa la
perfección y la plenitud de Dios mismo. La Ley le revela a los seres humanos los defectos de sus
caracteres, y le muestra al pecador la salvación de Dios. Esta salvación sólo se puede aceptar por fe. El
cristiano puede vivir victorioso todos los días sólo por fe.
La Ley y el santuario
• Destacar el hecho de que los Diez Mandamientos son la base del pacto de Dios con la humanidad.
• Poner énfasis en que la justicia (representada por la Ley) no se puede separar de la misericordia.
11. ¿Dónde se guardaba la Ley?

Respuesta: En el arca del ____________ (Exo. 25:16; 40:20; Heb. 9:4).
En contraste con la Ley de Dios que se conservaba en el arca, la ley de Moisés (la ley ceremonial) se
ponía “al lado del arca” (Deut. 31:24-26). El arca del testimonio o pacto (testamento) también se conocía
como el arca de Dios o arca del pacto. También se la llamaba arca del testimonio por el hecho de que los
Diez Mandamientos, o la expresión de la voluntad de Dios, estaban adentro (Exo. 25:16; 31:18; 40:20;
Deut. 10:2, 5). Los Diez Mandamientos constituían la base del pacto de Dios con los israelitas (1 Rey.
8:9). Es importante tomar nota de que Juan el revelador vio en visión en el Cielo el arca del testamento,
que contiene las tablas del testimonio (los Diez Mandamientos) en la última década del siglo I (Apoc.
11:19). No importa qué digan los hombres, los grandes principios de Dios permanecen intactos en el
Cielo.
12. ¿Qué evalúa la Ley de Dios?

Respuesta: Dios evalúa, por medio de su Ley, el carácter de cada persona; _______ a toda la
gente (Sant. 2:10-12).
La base sobre la cual se evaluará la vida de hombres y mujeres en el juicio que ya está sesionando, es el
carácter de Dios, o sea, su Ley. En otras palabras, ¿qué has hecho tú con Cristo? Cuando nos demos
cuenta de cuánto ha hecho Cristo por nosotros, nuestra lealtad será cabal y completa.
13. ¿Qué importante elemento se ponía en el santuario sobre las tablas con los Diez Mandamientos?
Respuesta: El _______________ (Exo.25:21).
La Ley de Dios representaba la justicia, y el propiciatorio, sobre el cual se manifestaba la presencia de

Dios, representaba la misericordia. (Propiciatorio, en inglés es mercy seat, y en alemán Gnadenstuhl.
Ambas palabras, traducidas al castellano son: “el trono de la gracia” o de la misericordia.–Nota del
traductor). La Ley que fue quebrantada por primera vez en esta tierra en el Jardín del Edén cuando Adán y
Eva pecaron, demandaba la vida del pecador (Gén. 3:3). Cuando se asperjaba sore el propiciatorio la
sangre del macho cabrío del Señor en el día de la expiación, significaba que las justas demandas de la Ley
habían sido satisfechas por la muerte del substituto (Lev. 16:15, 16). Este hecho apuntaba sl momento
cuando el Señor, nuestro Redentor y Sustituto, hará la expiación final, o presentará su sangre ante el Padre
por los pecados de los penitentes, o por los que han pecado sin saberlo, sin haber entendido plenamente
los requerimientos de los mandamientos de Dios. La justicia y la misericordia están satisfechas, y se
demuestra que los principios del gobierno de Dios son sin reproche.
La gracia y la Ley
• Demostrar que la función de la Ley es señalar a Cristo.
• Demostrar también, y firmemente, el carácter inmutable de la Ley.
El asunto más importante para nosotros hoy es si la Ley fue eliminada por la cruz al “llegar la gracia”.
14. ¿Qué relación ven los autores del Nuevo Testamento entre la gracia (la misericordia) y la Ley?
Respuesta: La fe __________ la Ley, es decir, la pone en su correcta perspectiva (Rom. 3:31).
Es por demás evidente que por hacer lo que la Ley requiere, nadie será justificado. El objeto de la Ley es
señalar el pecado (Rom. 3:20). El conocimiento del pecado nos conduce a los pies de la cruz para buscar a
nuestro Salvador (Rom. 5:20). Allí, por fe, somos justificados y se nos capacita para “andar en novedad
de vida”. Ya no somos más esclavos del pecado, sino siervos de la justicia (Rom. 6:1-6, 18). El propósito
de Dios es que lleguemos a obedecer más perfectamente la Ley divina como consecuencia de una diaria
relación con él por la fe. La obediencia surge de una diaria y salvadora relación con Cristo (1 Juan 3:6).
Vale la pena notar, en el cotexto de este tema, que el pacto de gracia se hizo por primera vez en el Edén
(Gén. 3:15), se le renovó a Abrahán (Gén. 22:18). En cuanto a Abrahán es notable que “Abrahán (oyo) mi
voz y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes” (Gén. 26:5). El pacto de la
gracia fue “ratificado” por la sangre de Cristo.
15. ¿Qué expresión emplea Santiago para referirse a la relación que existe entre el evangelio y la Ley?
Respuesta: La Ley de Dios es una Ley de __________ (Sant. 1:25).
La Ley de Dios es una Ley de libertad porque conduce al pecador a Jesucristo quien puede remediar los
defectos del carácter. Por medio de la fe Cristo también nos puede dar la victoria sobre el pecado y
también nos puede librar de él (Tito 3:5,7). En esta relación con Dios, tenemos gran seguridad de
salvación.
El evangelio nos lleva a obedecer por fe la Ley de Dios. Estas mismas verdades fueron expresadas en
términos majestuosos por el rey David después que el profeta Natán le mostró su quebrantamiento de la
Ley (Sal. 51:7-14). Una escritora lo expresó de esta manera: “La Ley de Jehová es el árbol; el evangelio
es la flor y el fruto fragantes que produce” (E.G. de White, Review and Herald, 1898, t. 75, No. 14, p.
557).
16. ¿Qué debemos entender cuando se nos dice que el creyente será salvo?
Respuesta: Siendo que el diablo cree y tiembla, la fe genuina implica sincera confesión del
pecado (“_________ las manos) y una total dependencia de Dios para lograr la victoria
(“___________ vuestros corazones”) (Sant. 2:14-19, 26; 4:7-10).
La fe a la que se refiere la Biblia lleva a la obediencia de todos los mandamientos de Dios (Sant. 1:22). La
armonía con la Ley es lo que Dios requiere ahora, tal como en el Paraíso. La obediencia se verá en la vida
como una respuesta de amor al gran don de Dios (1 Juan 5:1-5).
17. ¿Qué fue entonces lo que se eliminó en la cruz?

Respuesta: El sacrificio de Cristo eliminó la condenación del pecado (Col. 2:14; Efe. 2:15).
Aunque este texto se ha entendido comúnmente como una referencia al hecho de clavar la ley ceremonial
a la cruz (entendemos que la ley ceremonial quedó abolida en la cruz, porque esas ceremonias anunciaban
a Cristo que había de morir en la cruz en nuestro lugar), el contexto del versículo indica que la
interpretación que acabamos de adelantar reposa sobre argumentos más sólidos. Estos argumentos no
anulan la idea de que la ley ceremonial perdió su vigencia después de la cruz.
La clave para entender los textos mencionados más arriba se encuentra en Col. 1:20. Cristo hizo la “paz
mediante la sangre de su cruz”. Mediante este acto eliminó la condenación de la Ley moral en general.
Notemos cómo presenta Col. 2:14 la versión Dios Habla Hoy: “Dios canceló la deuda que había contra
nosotros y que nos obligaba con sus requisitos legales. Puso fin a esa deuda clavándola en la cruz”. El
apóstol Pablo estaba tratando de instruir a los colosenses para que entendieran el significado de la Ley
moral de Dios, incluso el sábado, a la luz de la cruz. No se debía estorbar a la iglesia cristiana con los
ritos del sistema judaico. El descanso sabático, entendido a la luz de la cruz, es algo a lo cual Pablo invita
a entrar a los creyentes (Heb. 4:9; W.E. Richardson, Ministry, mayo de 1997, pp. 13, 15, 29). No estaba
proponiendo descartar el sábado, puesto que insiste, entre otras coas, en que él era irreprochable en cuanto
a la observancia del sábado (Hech. 28:17).
18. ¿Con cuánto énfasis ha declarado Dios que los preceptos contenidos en los Diez Mandamientos son
inmutables?
Respuesta: Dios declara que la preparación para el reino de los cielos se logra por medio de la fe,
que lleva a la obediencia, es decir, la observancia de ______los mandamientos (Apoc. 14:12).
Los mandamientos de referencia están claramente identificados en Apoc. 14:7 con las siguientes palabras:
“Adorad a aquel que hecho el cielo, la tierra, el mar y las fuentes de las aguas”. Es evidente que estas
palabras han sido extraídas de Exo. 20:11. Es sumamente interesante que estas palabras constituyen el
corazón del cuarto mandamiento, que de los diez es el más controvertido. El cuarto mandamiento es un
baluarte contra la teoría de la evolución, que ha sumido al mundo en la incredulidad respecto de la
credibilidad del registro bíblico. Dios nos lleva de vuelta aquí al Edén, a nuestro Creador y Redentor
Jesucristo. Un Redentor que no fuera a la vez el Creador, sería incapaz de producir el nuevo nacimiento, o
la nueva experiencia de vida acerca de la cual habla la Biblia. Como un recordativo de la capacidad de
Dios no sólo de crear sino de regenerar (recrear, volver a crear), Dios ha apartado el séptimo día como un
memorial (Exo. 20:10, 11; 31:13). Este mandamiento también establece la igualdad de todos los seres
humanos, en el sentido de que todos, sin distinción alguna, estén invitados a adorar a Dios en su santo día.
De esta manera se establece la naturaleza moral del mandamiento, y se percibe que constituye un puente
entre los mandamientos que prescriben nuestros deberes hacia Dios y los que determinan nuestra
conducta con respecto a nuestros semejantes.
19. ¿Qué otra evidencia tenemos acerca de la perpetuidad de los Diez Mandamientos?
Respuesta: El templo de Dios en el Cielo contiene el arca del testamento a _______ (Apoc.
11:19).
Se dice que el arca contiene el pacto está en el Cielo. Es interesante que se revele el arca en el momento
cuando se estén por entregar los galardones tanto de los santos como de los impíos (v. 18). Dios en su
misericordia está dirigiendo nuestra atención al santuario celestial, su santa Ley y la senda de la salvación.
La gran Ley original de Dios procede del Cielo, de donde también viene nuestra salvación.
Estudiemos la Ley de Dios y cantemos con el salmista:

Dame entendimiento, guardaré tu Ley
y la cumpliré de todo corazón.
Guíame por la senda de tus mandamientos,
porque e ella tengo mi voluntad.
Inclina mi corazón a tus testimonios
y no a la avaricia (Sal. 119:34-36).
Mucha paz tienen los que aman tu Ley,
y no hay para ellos tropiezo.
Tu salvación he esperado, Jehová,
y tus mandamientos he puesto por obra.
Mi alma ha guardado tus testimonios
y los he amado en gran manera.
He guardado tus mandamientos y tus testimonios,
porque todos mis caminos están delante de ti
(Sal. 119:165-168).

1. monte
2. infracción
3. semejante
4. conocimiento
5. amor
6. ---
7. Sinaí
8. existan
9. ---
10. para siempre
11. testimonio
13. juzga
14. confirma
15. libertad
16. limpia, purifica
17. ---
18.todos
19. pacto
8. LA MISERICORDIA Y LA JUSTICIA
Misericordia es sinónimo de bondad, gentileza, ternura, piedad y tolerancia. Esta cualidad es muy
apreciada por los seres humanos de casi todas partes. De todas las historias de este mundo, la de la
salvación no tiene igual puesto que muestra la misericordia de Dios. Si hombres y mujeres nos diéramos
cuenta del hecho de que Dios arriesgó la eternidad para la salvación de este mundo rebelde, habría una
manifestación abundante de amor hacia los demás así como a Dios.
La misericordia es una de las cualidades más notables de Dios, pero no es la única (Exo. 34:6, 7). La
misericordia sin justicia le abriría las puertas del Cielo a todos, pero esto no puede ser. La justicia requiere
que todos los que llegan allí sean santos. La norma de la santidad está resumida en los Diez
Mandamientos, que son en realidad una expresión del carácter de Dios. En el Cielo Lucifer (que llegó a
ser Satanás) desafió los principios del gobierno de Dios y por eso mismo desafió su carácter. El plan de
salvación revela que la misericordia y la justicia son características eternas de Dios (Exo. 34:6, 7; Sal.
89:14; 97:2). Estas características, junto con una clara exposición del plan de salvación, resultan evidentes
cuando estudiamos el santuario, sus símbolos y su mensaje. El propósito de esta lección es analizar estos
temas.
El arca del testimonio

• Revisar algunos detalles concernientes a la ubicación, la estructura y el contenido del arca.
• Resaltar las lecciones espirituales que nos llegan de los elementos que había en el arca.
El arca del Señor recibía también los nombres de “arca del testimonio” (Exo. 15:16, 21), “arca del
testamento (del pacto)” Apoc. 11:19; Deut. 31:24-26; Núm. 10:33), por el hecho de contener los
mandamientos. Estos principios estaban grabados en piedra y se los conocía como el “testimonio” o la
voluntad de Dios (Exo. 16:34); también se los conocía, como ya lo hemos dicho, como “las tablas del
pacto” (Heb. 9:4).
1. ¿Cómo era el arca del pacto y dónde estaba?

Respuesta: El arca estaba ubicada en el _______ __________ y era una caja de madera revestida
de ______ (Exo. 25:10-12; 26:33, 34).
El arca era de madera de acacia, una madera muy durable que abundaba en el Sinaí, y estaba revestida de
oro. Tenía una tapa a la que se le daba el nombre de propiciatorio (trono de la gracia), de oro puro; sus
goznes también eran de oro (W. Whiston, The Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de
Flavio Josefo], c. 1936, p. 98). En los extremos del propiciatorio había querubines labrados en oro. Esta
arca sagrada se transportaba por medio de varas introducidas en anillos que se encontraban en las
esquinas del arca.
2. ¿Qué aparecía sobre el propiciatorio y entre los querubines

Respuesta: La ________ de Dios se manifestaba sobre el propiciatorio (Exo. 25:22; 1 Sam. 4:21,
22).
El símbolo de la presencia de Dios, o Shekina (“del hebreo shakan que significa ‘morar en una tienda’ -
L. Hardinge, With Jesus in His Sanctuary [Con Jesús en su santuario], 1991, p. 257) se manifestaba sobre
el propiciatorio. Tomando en cuenta este despliegue de gloria, a los querubines se los conocía también
como los “querubines de gloria” (Heb. 9:5). Estos querubines nos llevan a la descripción de Ezequiel. El
profeta nos recuerda que Lucifer era un querubín y que “cubría”, lo que da a entender que ocupaba un
puesto muy exaltado entre los seres creados (Eze. 28:14). Su misión consistía en revelar la “gloria” o sea
el carácter de Dios. En lugar de eso, difamó al Señor ante las huestes celestiales. Así también hoy los
ángeles fieles desempeñan un papel importante en el plan de salvación. Inducen a los humanos a
considerar correctamente la Ley de Dios, su misericordia y su carácter, y a adorarlo con reverencia.
3. ¿Qué había dentro del arca?

Respuesta: Las tablas del _______ una urna con ______, y la ______ de Aarón que reverdeció
(Heb. 9:4).
El arca contenía símbolos del carácter inmutable de Dios, y de su poder redentor (las tablas de piedra). Su
poder creador, salvador y sustentador (el maná), y su poder creador, transformador y conductor (la vara
de Aarón).
4. ¿Para qué dio Dios su Ley?

Respuesta:
a) Para dar a _________ el pecado (Rom. 3:20).
b) Para indicar cuál sería la norma del juicio. Somos “__________ por la ley” (Rom. 2:12).
Si bien es cierto que los Diez Mandamientos se dieron mediante un magnífico despliegue de gloria en el
Sinaí (Exo. 19:16-19), también es cierto que los principios enunciados por la Ley eran conocidos por la
humanidad desde el Edén. Una cuidadosa comparación de los diversos aspectos de la Ley con el carácter
de Dios, nos indica que esta Ley es una transcripción del carácter divino. Esto se puede ilustrar si citamos
una serie de textos (uno se refiere a la Ley, el otro al carácter de Dios). Estos son:
Dios y la ley son amor (1 Juan 4:8; Mat. 22:37-40).
Son buenos (Luc. 18:19; Rom. 7:12).
Son justos (1 Cor. 1:30; Sal. 119:172),
Son santos (Isa. 6:3; Rom. 7:12).
Son perfectos (Mat. 5:48; Sal. 19:7).
Son buenos (Luc. 18:19; Rom. 7:12).
Son puros (1 Juan 3:3; Sal. 19:8).
Son inmutables (Sant. 1:17; Mat. 5:18).
Por o tanto, la Ley de Dios refleja su carácter e invita al creyente a procurar una relación más estrecha con
el Dador de la Ley, Jesucristo (Sant. 4:12).
5. ¿Qué definición del pecado, dada por la Biblia, lo relaciona con la Ley de Dios?
Respuesta: “El pecado es ___________ de la Ley” (1 Juan 3:4).
Cuando transgredimos la Ley, u obramos como si no hubiera Ley, pecamos. Como consecuencia de la
entrada del pecado en este mundo, aparecieron la enfermedades, las deformidades y otras deficiencias,
pero el hecho de sufrir estas consecuencias no implica una culpa personal. Esto queda bien en claro si
examinamos la conversación de Jesús con sus discípulos tal como aparece en Juan 9:1-3. Una de las
consecuencias de la caída de Adán es que la naturaleza humana cayó o está predispuesta a pecar (Rom.
5:12, 14; E.G. de White, El Conflicto de los siglos, p. 33 en inglés; Patriarcas y profetas, p. 61 también
en inglés). Sin la ayuda divina no podemos resistir esas tendencias; necesitamos un Salvador. Nuestro
destino final depende de nuestras propias decisiones: ¿Tendremos diariamente una relación salvadora con
Jesucristo? Esto resulta clarísimo si leemos Eze. 18:20: “El alma que peque, ésa morirá. El hijo ne llevará
el pecado del padre ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo recaerá sobre él y la
impiedad del impío recaerá sobre él”.
6. ¿Qué simbolizaba el maná que estaba en el arca?

Respuesta: Señalaba a Jesús, quien da tanto el alimento espiritual como el temporal. Jesús dijo
que él era “el _____ de vida” (Exo. 16:23-34; Mat. 6:11; Juan 6:31-35).
El relato acerca de la caída del maná, que encontramos en Exo. 16, es informativo. Los hijos de Israel se
quejaron de la escasez de alimento en el desierto, especialmente del que les gustaba tanto en Egipto (v. 3).
Dios les proporcionó la clase de alimento más adecuada para asegurar su salud física. Pero además,
mediante el don del maná, les quería enseñar valiosas lecciones espirituales. Durante el sábado no caía
maná; es ese día Dios les proporcionaba especialmente alimento espiritual. El sábado tiene como fin
recordarnos el “descanso” de la salvación, o del alimento espiritual que podemos encontrar en Jesucristo
(Heb. 4:4-10). Algunos de los hijos de Israel violaron el sábado cuando salieron a buscar maná en ese día.
Dios se sintió desilusionado por su actitud rebelde. Por una parte manifestaron falta de fe en las
instrucciones de Dios, y por la otra dejaron de entrar en el “reposo” de la salvación. Pero Dios manifestó
abundancia de misericordia al perdonarlos, y al tratar de grabar en sus mentes esta importante verdad al
ordenar que se pusiera el maná en el arca: Dios no sólo puede proporcionar alimento físico, sino espiritual
también. Para ayudarles a recordar permanentemente estas lecciones, la vasija que contenía el maná se
colocaba delante de las tablas de la Ley. Las declaraciones de Jesús acerca del maná registradas en Juan 6
tenían por objeto reafirmar estas lecciones, poniendo énfasis en el aspecto espiritual del simbolismo del
maná. Algunos antiguos manuscritos judíos declaran lo siguiente acerca del Mesías: “Así como el primer
redentor (Moisés) hizo caer el maná, . . el redentor postrero (el Mesías) hará caer maná también”
(Soncino, editor, Midrash Rabbah, p. 33, citado en el Comentario bíblico adventista [en inglés], 1956, t.
5, p. 966). Jesús dijo que él era el pan --o maná– del cielo, y po medio de su ejemplo realzó el sábado,
símbolo de su poder creador y redentor.
7. ¿Qué simbolizaba la vara de Aarón, que también se encontraba en el arca?

Respuesta: La vara simbolizaba el poder de ______ (Exo. 17:9).
Moisés y Aarón, ambos, tenían varas (tal vez como las que usaban los pastores de aquel tiempo, con el
extremo superior curvo), y se nos informa además que después hubo una vara para cada tribu (Núm.
17:2). Cuando Moisés comenzó a encargarse de las tareas que Dios le dio como libertador de los hijos de
Israel, tomó su vara, que con tiempo pasó a llamarse “la vara de Dios” (Exo. 4:20). Esta misma vara se
usó para golpear la roca (un símbolo de Cristo) a fin de que diera agua (Núm. 20:11). En el relato de
Núm. 17 Dios vindicó el sacerdocio dándole vida a la vara de Aarón, que era de madera de almendro,
prefiriéndola a las otras varas que se le presentaron (v. 18). La vara dio hojas, flores y frutos. Estos
símbolos también se encontraban en los brazos del candelabro (Exo. 25:32-34). La lección que transmiten
estos símbolos es que se refieren al poder creador de Dios que se posesiona de la vida de una persona y la
transforma para que de´frutos de justicia (tal como la vara de Aarón revivió y dio frutos), y que Dios
controla los asuntos de los hombres. La vara es una indicación de la presencia del Pastor (Sal. 23:4). Sus
seguidores son sus instrumentos que hacen su voluntad. Gracias al poder del Espíritu Santo se nos
capacita a fin de que llevemos fruto para gloria de Dios.
Misericordia
• Prestar atención especial a la misericordia de Dios, simbolizada por el propiciatorio (trono de la
misericordia) que era la tapa del arca.
• Poner énfasis en el hecho de que la misericordia es un rasgo fundamental del carácter de Dios y del
plan de salvación.
8. ¿Qué simbolizaba el propiciatorio (o trono de la gracia, o la misericordia)?

Respuesta: El _______ ___ ___ ________ (Heb. 4:16).
“El propiciatorio, bañado en sangre, era el trono central de la Shekina o presencia del Dios misericordioso
y lleno de gracia, y el foco de su actividad salvadora. Era el asiento de la presidencia de Jehová” (L.
Hardinge, With Jesus in His Sanctuary [Con Jesús en su santuario], 1991, p. 190). La palabra
“propiciatorio” proviene de un término hebreo cuya raíz es expiación. Por eso se podía considerar que el
propiciatorio era la manera de acercar lo más posible a Dios la sangre de la víctima en el día de la
expiación (Encyclopaedia of Religion and Ethics [Enciclopedia de religión y ética], 1971, t. 5, p. 656). El
significado del propiciatorio es que “aunque la muerte fuera la sanción de la transgresión de la Ley, por
medio de Jesucristo vino la misericordia para perdonar a los pecadores arrepentidos y creyentes” (E.G. de
White, Sons and Daughters of God [Hijos e hijas de Dios], 1955, p. 66). Se nos dice que el trono de Dios
en el Cielo está rodeado de un arco iris (Apoc. 4:3). El arco iris es un símbolo de la “justicia de Cristo”.
¡Qué reconfortante es saber que el símbolo de la fidelidad divina rodea su trono!
9. ¿Cómo y por qué medios llegamos al trono de Dios?

Respuesta: Podemos acercarnos _______________ a Dios en oración (Heb. 4:16; Efe. 6:18).
Cada mañana y cada tarde, en el momento de ofrecer los respectivos sacrificios, símbolos de la
permanente expiación de Cristo, se renovaba el incienso en el altar correspondiente (Exo. 30:7, 8). El
permanente ascenso del humo del incienso representaba la constante intercesión de Cristo en favor de los
pecadores. El pueblo acostumbraba a orar fuera del templo en ese momento del día (Luc. 1:10). Las
oraciones de los santos están representadas en el santuario celestial como si estuvieran acompañadas por
el humo fragante del incienso (Apoc. 8:3, 4). Debemos elevar a Dios todas nuestras oraciones en el
precioso nombre de nuestro Redentor (Juan 16:23). El incienso extraño, símbolo de la justicia humana, no
se toleraba en el santuario terrenal (Exo. 30:9). En ese santuario, por medio de símbolos, se enseñaba que
para que el sumo sacerdote pudiera entrar con seguridad al lugar santísimo, sólo lo podía hacer si el
propiciatorio estaba cubierto por el humo fragante del incienso (Lev. 16:13). Las fervientes oraciones
abrirán las puertas de la misericordia divina en el santuario celestial, porque se las acepta mediante la
fragancia de la justicia de Cristo. “Cuando elevas la mirada a ese trono, para ofrecer penitencia, alabanza
y gratitud a fin de poder perfeccionar el carácter cristiano, y representar a Cristo ante el mundo, moras en
Cristo y Cristo vive en ti; gozas de una paz que sobrepuja todo entendimiento” (E.G. de White, Advent
Review and Sabbath Herald [Revista adventista y heraldo del sábado], 1892, t. 69, No. 49, p. 621).
10. ¿Cuándo entró en actividad la misericordia de Dios en el mundo?

Respuesta: Tan pronto como el pecado entró en el mundo (Gén. 3:15).
El plan de salvación comenzó a funcionar tan pronto como la humanidad cayó en pecado. Jesús vino “a
buscar y salvar lo que se había perdido” (Luc. 19:10). En realidad, Dios buscó a Adán y Eva en el jardín
del Edén y les ofreció salvación (Gén.3:8, 9, 15). Además de bosquejar el plan de salvación, Dio
estableció con Adán el sistema de sacrificio de animales, y le proporcionó vestiduras a la pareja pecadora
(Gén. 3:11, 21). De esta manera y en forma gráfica les enseñó que desde ese momento y en adelante
debían depender de él para cubrirse con la justicia divina, de manera que no se viera la vergüenza de su
desnudez (Apoc. 3:18).
11. ¿Llegará el momento cuando la misericordia de Dios, tal como se revela en su oferta de salvación, ya
no estará disponible?
Respuesta: Sí; la puerta de la misericordia (el tiempo de prueba) se cierra justo antes de la venida
de Jesús. Entonces se pronuncian estas palabras: “El que es _________, sea injusto todavía”
(Apoc. 22:11, 12).
Cuando termine el juicio de Jesús, previo a su advenimiento, se levantará (Dan. 12:1), y declarará que el
destino de todos está fijado para siempre. El texto afirma que vendrá para darle a cada uno su justo
galardón. Nuestro Dios es misericordioso. Para él cerrar la puerta de la misericordia y permitir que
mueran todos los que la rechazaron, se dice en la Biblia es la “extraña obra” de Dios (Isa. 28:21). Pero
aun al destruir a los impíos, Dios ejerce misericordia. Éstos no serían felices en la presencia de los santos
en el Cielo.
12. ¿Cuán fundamental es la misericordia para Dios?
Respuesta: La misericordia satura todos sus actos. Dios es “________ en misericordia” (Sal.
145:8, 9; Efe. 2:4).
Se dice que la misericordia de Dios es “desde la eternidad y hasta la eternidad” (Sal. 103:17); en otras
palabras, es algo básico para el carácter de Dios. Y aunque esto sea cierto, no significa que les va a
ofrecer una segunda oportunidad de salvación después de la muerte a los que rechazaron su gracia. Esta
doctrina no aparece en la Biblia. Es sumamente peligroso pretender jugar con la misericordia de Dios. La
Biblia declara enfáticamente: “Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones” (Heb. 4:7).
13. ¿Hay condiciones para recibir la misericordia de Dios?

Respuesta: ¡Sí! La misericordia se ofrece a todo aquel que __________ su pecado y se ________
de él (Prov. 28:13).
Las Escrituras se refieren aquí a la confesión sincera y sentida de nuestros pecados ante Dios. Este acto de
humillarse ante el Altísimo, de confesar sincera y cabalmente nuestras faltas, es la primera condición para
que seamos aceptos (Sal. 34:18). En este caso no debe haber intento alguno de minimizar ni de excusar
nuestras pecados ante Dios. Sólo él puede aceptar esta clase de confesión: como lo ilustran los casos de
faraón y Judas. La confesión siempre debe ser definida: debe referirse a pecados específicos (Lev. 5:5;
Hech. 26:9-11). Después de un arrepentimiento sincero viene una reforma sincera también. De otro modo
negaríamos la sinceridad de nuestra confesión (Heb. 12:3, 4). Esta reforma se logra por medio de la
recepción diaria y por fe de la fuerza que Dios proporciona abundantemente (1 Cor. 10:13).
Justicia
• Concentrarnos en la justicia de Dios, representada por las tablas de los Diez Mandamientos que se
encontraban dentro del arca.
• Poner énfasis en el hecho de que la justicia es una característica básica de Dios y de su plan de
salvación.
El propiciatorio (trono de la misericordia) estaba puesto sobre la Ley de Dios para indicar que tanto la
misericordia como la justicia son componentes indispensables de la salvación. La justicia de Dios está
suavizada por la misericordia. El santuario nos enseña que Dios no es vengativo, sino misericordioso y
paciente. En esta sección vamos a investigar algunos de los aspectos más notables de la justicia de Dios.
14. ¿Es la justicia una característica fundamental de Dios?

Respuesta; ¡Sí! (Sal. 89:14).
El salmista afirma que la misericordia y la justicia no se pueden separar cuando se estudia el carácter de
Dios. Jeremías declara que Dios es la morada de la justicia (Jer. 50:7). Tanto la misericordia como la
justicia están entretejidas con el amor.
15. ¿Cuándo se desafió por primera vez la justicia de Dios?

Respuesta: Lucifer desafió la justa manifestación del ____________ en el Edén, y previamente
había desafiado la delegación de autoridad por parte de Dios en el Cielo (Gén. 3:5; Isa. 14:12-14).
Lucifer aseguraba que el carácter de Dios adolecía de algún defecto; que había una falla en su justicia.
Después de la caída de Lucifer, sostuvo que la misericordia y la justicia no pueden coexistir, porque
afirmaba que era imposible que Dios perdonara a alguien que había quebrantado un conjunto de normas
de carácter absoluto (la Ley).
16. ¿Qué declaración final harán todos los habitantes del mundo?
Respuesta:
a) Los justos dirán: “________ y verdaderos son tus caminos” (Apoc. 15:3).
b) Los impíos junto con Satanás doblarán sus __________ para reconocer la justicia de Dios
(Rom. 14:11; Fil. 2:10, 11; Isa. 45:22-25).
El reconocimiento de la justicia y la misericordia de Dios por parte de todos asegura que el pecado no se
volverá a levantar (Nah. 1:9). Al reconocer la justicia de Dios todos aceptan que los requerimientos de le
Ley de Dios son justos, y que Dios proporciona los medios para cumplirlos (es misericordioso). Las
acusaciones de Satanás contra Dios en el Cielo y en la tierra quedarán desmentidas para siempre. La
combinación de la justicia con la misericordia la da eterna “estabilidad al gobierno de Dios. La
combinación de la justicia con la misericordia hace que la salvación sea completa. La amalgama de las
dos es lo que nos conduce a exclamar, mientras contemplamos al Redentor del mundo y la Ley de Jehová:
‘Tu bondad me ha engrandecido’” (E.G. de White, Advent Review and Sabbath Herald [Revista
adventista y heraldo del sábado], 1895, t. 69, No. 49, p. 621).
17. ¿Cómo se manifestó la justicia de Dios en nuestro mundo?

Respuesta:
a) La justicia de Dios se manifestó al venir Jesús a este mundo con el fin de demostrar que los
requerimientos de Dios se pueden cumplir. Cristo “tentado ___ ______ según nuestra semejanza”
(Heb. 4:15).
Jesús enseñó claramente en Mat. 5:17 que no había “venido a abolir (la Ley y los profetas), sino a
cumplir” (J.P. Green, 1987, A Literal Translation of the Bible [Una traducción literal de la Biblia]). En
otras palabras, Cristo hizo que la Ley y los profetas resultaran perfectamente claros (véase Mat. 5:21, 22,
27, 28, 31, 48; 19:16-21; 22:35-40; 24:14-20). Vino a descartar los significados tradicionales que se les
habían adjudicado (Mat. 15:3, 6). De esta manera expuso el mensaje de las Escrituras con sencillez y
belleza. Pablo amplía notablemente este significado en su carta a los Romanos, en la cual incluye esta
declaración: “Luego, ¿por la fe invalidamos la ley? ¡De ninguna manera! Más bien, confirmamos la Ley”
(Rom. 3:31). “Confirmar” en este caso significa “poner la Ley en su correcta perspectiva”. Jesús vino en
“semejanza de carne de pecado” y vivió una vida sin pecado en este mundo, con lo que cumplió
perfectamente las demandas de la Ley (Seventh-day Adventists Believe. . . [Lo que creen los adventistas],
1988, pp. 46, 47). Por este medio puede ofrecernos salvación; a todos los que confiesan sus pecados y se
apartan de ellos por Jesucristo, se les ofrecerá vida eterna en ocasión de su segunda venida. De este modo
demostró que las acusaciones de Satanás eran falsas; demostró que la misericordia y la justicia pueden
coexistir como elementos compatibles del carácter y el gobierno de Dios. El Señor fue vindicado
mediante la resurrección de nuestro Señor.
b) La justicia de Dios se demuestra por el hecho de que ha provisto los medios para que sean
justificados todos los que ejercen fe (Rom. 3:28) y para ganar la victoria sobre el poder del
pecado así como él venció. El siempre provee una ________ (1 Cor. 10:13).
La centenaria mentira de que podemos ser salvos en el pecado en lugar de ser salvos del pecado está
avalada por muchas iglesias de la actualidad. Satanás profirió esta mentira en el Edén cuando sugirió que
una pequeña desobediencia no podría acarrear la pena de la perdición eterna (Gén. 3:3-5). Una de las
afirmaciones más claras de las Escrituras la dijo el ángel que anunció el nacimiento de Jesús. Dijo que
“salvará a su pueblo de sus pecados” (Mat. 1:21). Jesús no hará el milagro de transformar nuestro carácter
en ocasión de su venida; la obra transformadora se hará en esta vida o no se hará nunca. Las promesas de
la Biblia son para los que, por la fe, vencen gracias al poder del Espíritu Santo (Apoc. 3:21).
Las Escrituras hablan de una vida victoriosa en Cristo (1 Cor. 15:57). Esta victoria se consigue por la fe, y
la misma fe que justifica también santifica. Una escritora lo expresa de este modo: “Dios requiere la
entrega completa del corazón antes de que pueda efectuarse la justificación. Y a fin de que el hombre
retenga la justificación, debe haber una obediencia continua mediante una fe activa y viviente que obre
por el amor y purifique el alma. . . La bendición de la justificación se retiene (se conserva) mediante la
entrega continua (constante) de la voluntad, y la obediencia continua” (E.G. de White, Mensajes selectos,
1966, t. 1, pp. 429, 465). Este viaje de la fe lo comienza el cristiano en el momento de su conversión (1
Juan 5:4). Los que perseveran en esta relación de fe serán salvos (Apoc. 14:12). “Si nuestros caracteres
fueran defectuosos no podríamos pasar por las puertas que la misericordia le abre a los obedientes; porque
la justicia está de pie a la entrada, y requiere santidad de todos aquellos que quieren ver a Dios” (E.G. de
White, Advent Review and Sabbath Herald [La revista adventista y heraldo del sábado], 1892, t. 69, No.
49, p. 622). La demostración de que la Ley de Dios se puede obedecer por fe prueba definitivamente que
no ha sido abolida, tal como lo afirma Satanás y sus representantes de la actualidad.
c) La justicia de Dios se demuestra por el hecho de que él ha dado una clara indicación acerca de
la _______ que usará en el juicio (1 Juan 3:4; Rom. 2:12; Dan. 8:14).
En el santuario que se erigió en el desierto, la Ley era central para que pudiera funcionar el plan de
salvación bosquejado allí. Era la norma inmutable que describía con exactitud la naturaleza del pecado.
Durante el servicio anual, el cruento registro de los pecados confesados de los creyentes, que se habían
acumulado en el santuario, era eliminado ceremonialmente (la purificación del santuario). Cada cual
debía examinar con cuidado su vida a la luz de esa norma. Por eso el arca que contenía la Ley recibía el
nombre de arca del testimonio. En el santuario celestial también se nos revela la inmutable norma de Dios
que se usa en el día antitípico de la expiación (Apoc. 11:19). El cronograma de Dios para la purificación
del santuario celestial aparece en los capítulos 8 y 9 de Daniel, y será tema de otra lección.
18. En los servicios del santuario terrenal, ¿por medio de qué rito se se demostraba que habían sido
satisfechas las justas demandas de la Ley?
Respuesta: Las justas demandas de la Ley recibían satisfacción en el dúa de la expiación cuando
se rociaba la sangre del macho cabrío del Señor en y sobre el _______________, y se eliminaba
del santuario el registro de los pecados confesados (Lev. 16:15, 20, 21).
Cuando alguien iba al santuario para confesar sinceramente su pecado, se eliminaba la culpa de esa
persona (justificación). Los pecados perdonados se transferían al santuario (Lev. 4:1-7, 20, 26; (por
ejemplo los pecados de ignorancia; en ese caso, para expiarlos, se asperjaba sangre en el lugar santo). La
persona tenía la seguridad de su salvación, porque los pecados confesados estaban a cargo de Dios, lejos
del acusador de los hermanos. Vemos que este registro también contenía una lista de los perdones
otorgados por Dios. Desde el punto de vista del plan de salvación, el individuo estaba salvo y no tenía
nada que temer, mientras conservara la relación de salvación con Dios. En el día de la expiación, se hacía
una expiación final por los pecados de la congregación (Lev. 16:16, 20). Esto destacaba el hecho de que
hay un día cuando terminará el tiempo de prueba para el creyente, y que Dios quiere que la persona viva
de tal manera que ese día no lo tome por sorpresa. Ese día representaba también el último acto del drama
del plan de salvación, cuando las justas demandas de la Ley de Dios, que implicaban la muerte del
pecador, sean plenamente satisfechas por medio de la misericordia de Dios manifestada en la muerte de
Cristo (Sal. 85:9, 10). Sólo en el día de la expiación podía ocurrir esta transacción, porque sólo entonces
se podían revisar las vidas de los muertos y los vivos. Retomaremos este tema en futuras lecciones.

1. Lugar santísimo, oro
2. gloria
3. pacto, maná, vara
4. a) conocer b) juzgados
5. infracción
6. pan
7. Dios
8. trono de la gracia
9. confiadamente
10. ---
11. injusto
12. grande
13. confiesa, aparta
14. ---
15. conocimiento
16. a) justos b) rodillas
17. a) en todo b) salida c) norma
18. propiciatorio
9. LA PURIFICACIÓN DEL SANTUARIO
La palabra “purificación” en lenguaje moderno da la idea de que algo ha quedado libre de contaminación
o se lo ha limpiado. En la Biblia la palabra traducida como “purificar” puede provenir de una cantidad de
palabras hebreas. Por lo tanto la palabra “purificar” puede ser también eliminar pecados o defectos,
declarar limpio, libre o inocente, considerar justo. El tema de la purificación del santuario se trata a fondo
en el capítulo 16 del Levítico, y transmite la idea de que se declaraba puro al santuario. El día en que
ocurría esa purificación se conocía como el día de la expiación, y hasta hoy es una de las grandes fechas
del calendario judío. Ellos lo denominan “Yom Kippur”; esto, en hebreo es, precisamente, “día de la
expiación”.
Pero los tipos y las ceremonias del Antiguo Testamento tenían un profundo significado no sólo para los
judíos; también tienen significado para todos los cristianos. Algunos tipos anunciaban la venida del
prometido Redentor, otros señalaban la venida del Rey de gloria para proclamar el fin del reino del
pecado. Es importante, entonces, que analicemos con cierto detalle las ceremonias que se desarrollaban en
el día de la expiación. Para que podamos entender sus aplicaciones a nuestra propia vida, y para que
entendamos mejor su relación con el plan de salvación que llega hasta el fin de los tiempos. Intentamos
examinar detalladamente estos aspectos en las siguientes tres lecciones. Ésta se refiere a los aspectos
históricos de este día, y le pone un fundamento a las lecciones que vendrán.
Los días penitenciales

• Hacer un resumen de los acontecimientos que precedían las ceremonias del día de la expiación
(juicio).
• Destacar el hecho de que esos sucesos tienen una importancia histórica para el período que precede
inmediatamente al momento del juicio investigador y de la venida de nuestro Señor en gloria.
El año nuevo judío, que ocurría en el séptimo mes del año litúrgico, comenzaba con la observancia de los
diez días penitenciales. El día de la expiación era la culminación de este período especial. Esas
ceremonias ocurrían en lo que hoy es fines de septiembre y principios de octubre. En 1884 cayó el 22 de
ese mes.
1. ¿Qué ceremonias especiales se llevaban a cabo en el año nuevo?

Respuesta: Era el día en que se ___________las trompetas de plata, y se ofrecían holocaustos
especiales (Lev. 23:24; Núm 29:1, 2).
Moisés hizo dos trompetas de plata (Núm. 10:2). Se debían tocar en momentos especiales de solemnidad
o de gozo, de acuerdo con las especificaciones de Dios. Debían recordarles a los israelitas el poder del
Señor su Dios (Núm. 10:10). Hay varios relatos bíblicos que se refieren al toque de estas trompetas para
celebrar victorias (en Jericó y cuando Gedeón derrotó a los madianitas). Los que avanzaron por fe,
haciendo la voluntad de Dios mientras sonaban las trompetas, vieron la liberación llevada a cabo por el
Señor (Jos. 6:4, 5; Jue. 7:19-23).
2. ¿Qué acontecimiento seguía al toque de las trompetas?

Respuesta: El día de la ___________ ocurría en el décimo día del séptimo mes (Lev. 23:27).
El resonar de las trompetas les avisaba a todos los israelitas que se estaba acercando el día de la
expiación. Era un día sumamente solemne, y se lo consideraba un día de juicio. Los días precedentes
debían ser de preparación. El Talmud indica que en la semana que precedía a ese día, el sumo sacerdote
se retiraba a una habitación especial y se dedicaba a orar, a examinar su vida y a considerar el significado
de ese gran acontecimiento en el cual estaba por participar.
3. ¿Indica la Biblia que un fuerte sonido habría de anunciar la llegada el día atitípico de la expiación, o día
del juicio?
Respuesta: Sí, el mensaje del primer ángel, que aparece en Apocalipsis 14, lo anuncia a “______
voz” (Apoc. 14:6, 7).
Hoy estamos viviendo en los días del día antitípico de la expiación. El anuncio de que este período estaba
por comenzar se hizo fervientemente a comienzos del siglo XIX. Se produjo entonces un reavivamiento
de alcance mundial. Fundó su mensaje en Apoc. 14_6-12. Ese reavivamiento implicó a miembros de una
gran cantidad de iglesias y denominaciones.
4. ¿Qué señales especiales dicen las Escrituras que anunciarán la cercanía del día antitípico de la
expiación o juicio?
Respuesta:
a) Vendría un período de gran tribulación durante los años que siguieron a la destrucción de
Jerusalén, pero sería __________ (Mat. 24:21, 22).
Por cerca de tres siglos la iglesia sufrió persecuciones intermitentes a manos de la Roma pagana. En el
año 538 d.C. comenzaron los 1.260 años de supremacía papal con sus terribles persecuciones (Dan. 7:24-
26; Apoc. 11, 12). La intensidad de las persecuciones declinó hacia el fin de este lapso (1798).
b) El sol se oscureció, la luna no dio su resplandor y las estrellas _________ del cielo en los días
siguientes al fin de la gran tribulación (Mat. 24:29).
Resumamos el cumplimiento de estas señales:

Terremoto: “Probablemente el más famoso de todos los terremotos es el que destruyó a Lisboa el 1 de
noviembre de 1755. . . El temblor principal duró entre seis y siete minutos, una duración
extraordinariamente larga. . . Alexander von Humboldt declaró que la zona afectada era cuatro veces más
grande que Europa. . . El terremoto de Lisboa fue notable por su efecto sobre el agua. . . El maremoto de
Lisboa consistió en tres grandes olas de 5 a 13 metros de altura. En Cádiz, España, las olas alcanzaron 20
metros de alto. La ola tomó 10 horas para llegar a Martinica, a casi 6.000 kilómetros de distancia (eso da
600 kilómetros por hora), y cuando llegó allí, todavía tenía una altura de 4 metros” (Encyclopaedia
Britannica, 1961, t 7, p. 848). Este acontecimiento indujo a los hombres a pensar en el gran día de Dios.
Se nos dice que Voltaire, el filósofo francés, se sintió “profundamente conmovido” por él. “Ha sido el
juicio final de esa región --escribió--. No faltaba nada, sino la última trompeta”. Otro escritor, al referirse
a la actitud general, dijo: “El terremoto dejó pensativos a todos los hombres. Se olvidaron del teatro y en
cambio llenaron las iglesias” (W.A. Spicer, Our Day in the Light of Prophecy and Providence [Nuestros
días a la luz de las profecías y la providencia], 1921, pp. 88, 89).
El sol y la luna: El oscurecimiento del sol y el extraño comportamiento de la luna ocurrieron el 19 de

mayo de 1780 (hora inicial: alrededor de las 10 de la mañana) a lo largo de la costa oriental de América
del Norte. Un informe publicado en Memoirs of the American Academy of Arts and Sciences [Memorias
de la Academia Norteamericana de Artes y Ciencias], 1875, t. 1, pp. 234-246) decía: “La extensión de la
oscuridad fue muy notable. . . De acuerdo con los informes que hemos recibido, parece haber abarcado
todos los estados de Nueva Inglaterra. . . En cuanto a su duración, persistió en este lugar (Boston) a lo
menos 14 horas. . . El aspecto y sus efectos fueron de tal naturaleza que todo pronóstico resultaba
sumamente complejo y sombrío. Se encendieron velas en las casas; las aves, habiendo entonado sus
cantos vespertinos, desaparecieron y guardaron silencio; las aves de corral se retiraron a sus gallineros;
los gallos cantaban como si fuera el amanecer; los objetos, a menos que se los colocara muy cerca, no se
podían ver; y todo tenía el aspecto de las sombras de la noche”. Muchos creían que “el día del juicio
estaba cerca” (W.A. Spicer, Op. Cit., pp. 98, 99).
Las estrellas: El 13 de noviembre de 1833 se produjo una de las caídas de meteoritos más espectaculares
(compáresela con la de noviembre de 1966). Casi toda América del Norte, las Indias Occidentales y
Méjico pudieron contemplar este espectáculo. El cielo se veía “espeso con cascadas de fuego rodante;
prácticamente no había espacio del firmamento que no estuviera lleno (de meteoritos) a cada instante”.
Había “una cantidad casi infinita de meteoritos; caían como copos de nieve” (Encyclopaedia Britannica,
1883, t. 16, p. 110). “Se calcula que esta lluvia tiene que haber producido 200.000 meteoritos por hora,
entre la medianoche y el amanecer, muchos de los cuales eran sumamente brillantes y dejaban una estela
tras sí”. Lo notable de este espectáculo es que muchos dijeron que “podemos decir con convicción que la
astronomía meteórica nació el 13 de noviembre de 1833, cuando apareció sobre Estados Unidos la gran
lluvia Leónida” (Encyclopedia Americana, 1961, t. 18, p. 713). Esta Enciclopedia sigue describiendo el
terror de la gente que esperaba convencida que “había llegado el fin del mundo”. Un escritor británico
registró de esta manera la impresión que este fenómeno causó en la gente: “En muchos lugares las masas
estaban aterrorizadas, y los más ilustrados sentían temor al contemplar un cuadro tan vívido de imágenes
apocalípticas: la de las estrellas que caían a tierra como caen los higos de la higuera cuando la sacude un
fuerte viento”. Otro escritor dijo: “Todos sentían que se trataba del día del juicio, y que había llegado el
fin del mundo”. Un despliegue similar a éste, pero menos espectacular, ocurrió en Europa en 1866, y
contribuyó a llamar la atención otra vez a la palabra profética (W.A. Spicer, Op. Cit., pp. 109-111).
Las señales se manifestaron en el momento especificado (nótese que Jesús declaró que los días de
persecución serían acortados, Mat. 22:44), aparecieron en el orden predicho y la atención de la gente se
dirigió a la Palabra de Dios y al fin del mundo. Junto con esas señales en el mundo natural, un
movimiento religioso mundial comenzó entre estudiantes de las Escrituras provenientes de muchas
iglesias, con el insistente mensaje de que la venida del Señor estaba cerca. El mundo religioso fue
sacudido por la predicación hecha por gente educada, no tan educada e inclusive niños. La predicación se
enfocó finalmente en las grandes profecías bíblicas relativas al tiempo, y a su cumplimiento en 1844
(C.M. Maxwell, God Cares [Dios se preocupa], 1985, t. 2, pp. 353-364).
Estas señales eran aparentemente “fenómenos naturales”. Pero las tenemos que considerar en el trasfondo
del cumplimiento de las profecías en torno del año 1844, y tomando en cuenta la impresión que causaron
en la gente de ese tiempo (sin considerar la ocurrencia de fenómenos similares antes o después). Fue
notable la impresión que causaron en la gente de ese tiempo, puesto que la indujeron a pensar en el Dios
del Cielo, la salvación que ofrece y la seguridad de sus promesas. En el futuro las señales en el cielo y en
la tierra anunciarán la liberación del pueblo de Dios y la aparición del Hijo del hombre en los cielos
(Apoc. 16:17-21; E.G. de White, El Conflicto de los Siglos, 1975, pp. 693-710).
El día de la expiación
• Revisar las principales actividades del sumo sacerdote durante el día de la expiación.
• Comentar el significado de esas actividades.
• Poner énfasis en el hecho de que las actividades del sumo sacerdote terrenal en el día de la expiación
nos ayudan a entender los acontecimientos que están sucediendo en el santuario celestial y que tienen
que ver con nuestro Sumo Sacerdote: Jesucristo.
Se consideraba que el día de la expiación era sumamente sagrado, y que no tenía parangón en el
calendario religioso judío.
5. ¿Qué aspectos especiales, que tenían que ver con el reposo y el ayuno, estaban relacionados con el día
de la expiación?
Respuesta: Ese día era un sábado ceremonial, un reposo _________ , y el único día de ayuno del
calendario religioso judío (Lev. 23:32; Hech. 27:9).
Cada año había siete sábados ceremoniales en el calendario religioso judío, y podían caer en cualquier día
de la semana. Eran días en los cuales se dejaba de trabajar porque se trataba de acontecimientos religiosos
importantes. Esos días se apartaban para la renovación espiritual. El único día de ayuno del calendario
religioso judío era el día de la expiación, y se lo denominaba “el ayuno”. En ese día se acostumbraba a
ayunar hasta la tarde (W. Whiston, The Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio
Josefo], 1936, p. 107; W.O.E. Oesterley y G.H. Box, The Religion and Worship of the Synagogue [La
religión y el culto de la sinagoga], 2ª. edición revisada, 1911, p. 433). A menudo se ayunaba en momentos
de intercesión con Dios. En los tiempos de Jesús, los judíos “piadosos” ayunaban dos veces cada semana
(Luc. 8:12), los lunes y los jueves, y tenían además 29 ayunos adicionales. Estos ayunos no aparecen
especificados en las Escrituras.
6. ¿Qué sacerdote oficiaba en el día de la expiación?

Respuesta: El _____ ___________ (Lev. 16:2-5).
En ese día el sumo sacerdote oficiaba en todas las ceremonias, e inicialmente usaba la santa túnica de lino
blanco especialmente preparada para ese día (v. 23). Antes de revestirse con esa ropa, tenía que bañarse
(v. 4). Al prepararse de esa manera, y al revestirse con esa túnica especial, pasaba a ser un tipo de Cristo.
La blanca túnica inmaculada que estaba usando, representaba la perfección del carácter de Cristo. El
hecho de que el sumo sacerdote oficiara ese día con la túnica de un sacerdote común, representaba el
hecho de que un día Cristo tomaría “forma de siervo”.
7. En qué compartimento del santuario se concentraban las ceremonias del día de la expiación?
Respuesta: En el lugar santísimo, es decir, el compartimento que estaba “________ del velo”
(Lev. 16:14, 15).
Al lugar santísimo se entraba una sola vez en el año, en el día de la expiación (o del juicio). El ministerio
de Cristo en el santuario celestial sin duda también debe abarcar un ministerio en el primer
compartimento (mediación), y otro en el segundo (de juicio), puesto que el santuario terrenal sólo era una
sombra del celestial.
8. ¿Cuál era el servicio más importante del día de la expiación?

Respuesta: Se elegían dos ______ _______. A uno se lo sacrificaba; al otro se lo abandonaba en
el desierto (Lev. 16:7, 8).
Ese día se ofrecían varios sacrificios. En primer lugar el sumo sacerdote ofrecía por sí mismo y por su
casa un sacrificio (un becerro): una ofrenda por el pecado (Lev. 16:6). Aarón y su familia debían estar
libres de pecado para poder ser aceptados en el servicio de Dios. Eso era así porque Aarón representaba a
Cristo, que es sin pecado. El principal servicio del día tenía que ver con dos machos cabríos. Después que
Aarón y su familia se habían preparado, se traía a los dos machos cabríos a la puerta del santuario y se
echaban suertes. De esa manera se determinaba qué macho cabrío era del Señor (representaba a Cristo) y
cuál no. El macho cabrío del Señor se presentaba como una ofrenda por el pecado (v. 9). Debemos notar
con mucho cuidado que un solo macho cabrío se presentaba como ofrenda por el pecado (en el texto está
en singular --“macho cabrío”– y no en plural). Este sacrificio se hacía en favor de todo el pueblo, aunque
en realidad no se confesaban los pecados sobre su cabeza (v. 15). Con la sangre de este macho cabrío, el
sacerdote entraba en el lugar santísimo. Al otro macho cabrío se lo trataba de manera completamente
diferente.
Al segundo macho cabrío se le daba un adjetivo: “vivo”. Cuando el sumo sacerdote terminaba la
expiación por el pueblo y el santuario, simbólicamente él llevaba sobre sí todos los pecados de la
congregación. Entonces, simbólicamente también, depositaba todos estos pecados sobre la cabeza del
segundo macho cabrío. Se llevaba este macho cabrío al desierto (vs. 20-22). No se sacrificaba este animal
ni se derramaba su sangre, ni siquiera se menciona la muerte de este macho cabrío en el desierto (sin duda
moría, pero no se da aquí oportunidad alguna para relacionar su muerte con el perdón de los pecados).
Este macho cabrío no tenía relación alguna con la expiación del pecado (Lev. 17:11; Heb. 9:22). Si se
usara la palabra expiación con respecto a este macho cabrío, sería en el sentido de “reparar un daño o una
ofensa” (Lev. 16:10; G.W. Turner, The Australian Concise Oxford Dictionary [El diccionario australiano
Oxford compendiado], edición de 1987, p. 58). El registro de los pecados se eliminaba al enviar al
desierto el macho cabrío.
9. ¿A quién representaba este macho cabrío?

Respuesta: Este macho cabrío representaba a Satanás, el responsable final de todos los pecados
cometidos por la congregación (pero que habían sido confesados).
La palabra hebrea “Azazel” ha sido traducida de diferentes maneras en otros idiomas: “chivo emisario”,
“ángel rebelde”, etc. (En las versiones castellanas que conocemos, esta palabra no se traduce; se conserva
el “Azazel” original.–Nota del traductor). El sentido de esta palabra, que sólo se usa en Lev. 16:8, 10 y
26, ha sido considerado por diversos eruditos. “El paralelismo que hay entre ‘para Jehová’ y ‘para Azazel’
indica que Azazel es un nombre propio, probablemente el de un demonio. Así lo interpreta la versión siria
de Lev. 16, el Targum y así aparace también en 1 de Enoc, que identifica a Azazel con el príncipe de los
demonios, expulsado al desierto” (R.E. Brown, J.A. Fitzmyer, R.E. Murphy, editores, The New Jerome
Biblical Commentary [El nuevo comentario bíblico de Jerónimo], 1990, p. 1282). El macho cabrío del
Señor se sacrificaba por los pecados del pueblo. El de Azazel no se sacrificaba. El macho cabrío de
Azazel daba testimonio de que se había hecho un sacrificio aceptable, y se lo enviaba al desierto: el lugar
donde se suponía moraban los malos espíritus. De sta manera se daba a entender que Satanás, el
originador del pecado, el padre de mentira (Juan 8:44), debe cargar con la responsabilidad de los pecados
por los cuales se había hecho expiación.
Otro erudito (presbiteriano esta vez), al comentar acerca de la palabra Azazel, dice que podría significar
“el apóstata”, un nombre que aparentemente los judíos le daban a Satanás. La ceremonia del día de la
expiación ponía de manifiesto que se sacrificaba el macho cabrío del Señor para satisfacer los
requerimientos de la Ley. Pero el pecado, aunque haya sido perdonado, no puede permanecer en la
presencia de Dios. Era necesario, entonces, eliminar el registro de los pecados perdonados y ponerlo sobre
Satanás, el autor del pecado. Se cancelaba la sanción por el pecado que debería haber recaído sobre el
creyente gracias a la sangre de Cristo, representada por la sangre del macho cabrío del Señor. Pero la
sanción en sí no estaba cancelada, porque Satanás instigó al creyente para que pecara. Satanás finalmente
tendrá que cargar con la sanción que merecen los pecados que le hizo cometer a los creyentes (J. Eadie,
Eadie’s Biblical Cyclopedia [Enciclopedia bíblica de Eadie], 1901, p. 577).
Por cierto, en Apocalipsis 20 se nos asegura que Satanás será arrojado al lago de fuego (v. 10) con todos
los que no confesaron sus pecados ni se apartaron de ellos (v. 12). La destrucción de Satanás se lleva a
cabo después de su confinamiento por mil años en esta tierra desolada y vacía (v. 2).
10. ¿Cuál era el principal propósito de esta ceremonia?

Respuesta: Para “hacer ___________ por el altar, el santuario, los sacerdotes y toda la
congregación (Lev. 16:30, 33).
Durante el año el registro de los pecados del pueblo, confesados, se había transferido simbólicamente al
santuario por medio de la sangre asperjada o por el hecho de que los sacerdotes comían parte de los
sacrificios. Cada vez que se presentaban ofrendas, y los pecadores habían confesado sus pecados, y éstos
habían sido perdonados, se había hecho una expiación (véase Lev. 4:20, 26, 31, 35; 10:17). Pero el
creyente que no seguía siendo fiel no podía participar de la experiencia de los benditos. Esta verdad se
enseñaba con toda claridad cuando dejaba de formar parte del pueblo todo aquel que no participaba
espiritualmente de las actividades del día de la expiación (Lev. 23:27-30; T. Gane, Altar Call [Llamado
de altar], 1999, pp. 144, 145). En muchos lugares las Escrituras nos enseñan con toda claridad que los
pecados perdonados recaerán sobre nosotros si no conservamos hasta el fin nuestra relación con el Señor
(Mat. 18:32-34).
Una de las principales ideas que transmite la ceremonia del día de la expiación es que Dios perdona el
pecado en cuento lo confesamos. Pero el registro de los pecados confesados permanece (esto también se
debe entender con respecto al registro de los pecados que Cristo nos ha perdonado). Este registro se
atendía finalmente una vez al año, cuando la sangre del macho cabrío del Señor (no se confesaban
pecados sobre este macho cabrío) se asperjaba frente y sobre el propiciatorio (Lev. 16:15). Esto
significaba que la misericordia había satisfecho las justas demandas de la Ley. No existía registro de
pecados cuando se completaban las ceremonias de ese día (véase el APÉNDICE)
Por medio de esta ceremonia (que era el tipo), Cristo nos está enseñando también importantes verdades
acerca del santuario celestial (el antitipo). La purificación del santuario terrenal nos proporciona valiosas
vislumbres acerca del ministerio de Cristo en el santuario celestial (Heb. 9:23). La purificación del
santuario celestial ocurre una sola vez (Dan. 8:14). Por lo tanto, resulta aparente que el registro de los
pecados confesados por los creyentes será atendido justo antes del cierre de la historia de la tierra (fin del
tiempo de prueba). “Así como el sacerdote entraba en el lugar santísimo una vez al año para purificar el
santuario terrenal, Jesús entró em el lugar santísimo del santuario celestial al fin de los 2.300 días de
Daniel 8, en 1844, para efectuar la expiación final en favor de los que se pueden beneficiar de su
mediación, y entonces purificar el santuario” (E.G. de White, Early Writings [Primeros escritos], 1945, p.
253). Todo este tiempo Jesús hará la expiación final por su pueblo, la intercesión final delante de su Padre
(Dan. 7:9, 10; Apoc. 3:5). En 1 Tim. 5:24 se nos asegura que los pecados confesados de los creyentes
arrepentidos serán eliminados antes de la ejecución del juicio (cuando aparezca el Señor para dar a cada
uno su galardón).
11. ¿Qué ceremonia se llevaba a cabo al final del día de la expiación, que tenía que ver con la
transferencia definitiva a Satanás de la responsabilidad por los pecados que indujo a cometer a los santos?
Respuesta: El sumo sacerdote transfería simbólicamente los pecados confesados, acumulados en
el santuario, sobre la cabeza del macho cabrío ______ (que representaba a Satanás - Lev. 16:21).
Los pecados que Satanás indujo a cometer a los salvados (pecados por los cuales se había hecho
expiación) se transferían a la cuenta del tentador. Satanás es el originador del pecado y el que nos tienta a
pecar (Juan 8:44; Rom. 6:16; 1 Juan 3:8); por eso tiene una responsabilidad que llevar por la parte que le
toca en la comisión del pecado (Sal. 7:16). Si rechazamos a Cristo, el portador del pecado, no sólo
rechazamos su Persona sino que rechazamos su ofrecimiento de convertirse en nuestro Salvador,
perdonador del pecado. Entonces somos totalmente responsables de todos nuestros pecados, porque
negamos la base sobre la cual se podía llevar a cabo la transacción, esto es, la fe. (Eze. 18:20, 24; Mat.
18:32-34).
12. ¿Estaba relacionado el día de la expiación con la idea del juicio?

Respuesta: Sí; la siguiente información nos indica que era así:
a) Las actividades del día de la expiación le proporcionaban la última oportunidad a la nación de
Israel, en el año religioso, de entrar en una correcta relación con Dios. A todos se instruía para
que “afligieran sus almas”, para que fueran “_________ de _______ vuestros pecados delante de
Jehová” (Lev. 16:30, 31).
El día de la expiación era el más solemne del año religioso, porque representaba la última oportunidad
que tenían colectivamente los israelitas de reconciliarse con Dios por medio de la eliminación del
santuario de los pecados confesados. No había otra oportunidad para que el pueblo se reconciliara con
Dios. Después de esta ceremonia no quedaba registro en el santuario de los pecados confesados. La túnica
especial de lino blanco que usaba el sumo sacerdote durante los ceremonias más importantes del día (Lev.
16:4; 2 Crón. 5:12) representaba la pureza de carácter y la perfección que se requería de todos (Dan.
12:10; Apoc. 3:4, 5; 7:14; 19:8). Cristo, mientras estuvo en la tierra, enseñó una verdad similar mediante
la parábola de la fiesta de bodas. A todos los huéspedes se los invitaba a usar un vestido de boda (la
justicia de Cristo); se los examinaba antes de que la fiesta comenzara (el juicio investigador), y a todos los
que no aceptaban esta invitación se los consideraba indignos y se los echaba afuera (Mat. 22:11.13).
Cuando venga el Señor, se considerará indignos a todos los que no se hayan apartado del pecado (Apoc.
22:11).
b) La ceremonia más importante del día de la expiación se llevaba a cabo en el lugar santísimo y
tenía que ver con el arca del pacto dentro de la cual se encontraba la Ley de Dios (Lev. 16:13-15).
“Por la Ley” seremos “__________” (Rom. 2:12).
En el santuario terrenal el lugar santo estaba relacionado con la mediación, mientras el lugar santísimo lo
estaba con la justicia y la misericordia. El sumo sacerdote, que representaba a Cristo, rociaba la sangre
delante del propiciatorio y sobre él, invocando sus méritos para purificar el santuario de todos los pecados
que había confesado el pueblo (Lev. 16:15, 16; Hech. 3:19). Este acto ponía de manifiesto que las justas
demandas de la Ley sólo podían ser satisfechas por los méritos de la sangre de Jesús. Las Escrituras
también hablan de un juicio investigador que se lleva a cabo en el santuario celestial antes de la segunda
venida de Cristo, y que tiene como norma la eterna Ley de Dios (Dan. 7:10; Heb. 9:27; Apoc. 11:19; 14:7,
12; 22:14). Este evento es de capital importancia en el plan de salvación y para la estabilidad del gobierno
de Dios. Cuando el pecado entró en este mundo como consecuencia de que Adán y Eva desobedecieron el
mandamiento de Dios, se declaró que la muerte era la paga de la desobediencia (Gén. 3:3). Pero Dios
intervino y ofreció su misericordia. Las grandes preguntas son: La misericordia de Dios, ¿ha satisfecho
plenamente las justas demandas de su Ley? ¿Puede estar seguro el universo de que el pecado no se
levantará otra vez?
c) Los que no participaban del examen de conciencia implícito en las actividades del día de la
expiación, eran “____________ de su pueblo” (Lev. 23:28-30).
El tiempo de prueba para los pecadores impenitentes llegaba a su fin ese día. Se separaba de sus hermanos
a las personas “eliminadas”, y se las juzgaba indignas de llevar el nombre de israelitas (Gén. 17:4; Exo.
12:15). Puesto que ya no eran los hijos elegidos de Dios, no tenían derecho a las promesas del pacto que
implicaban una herencia eterna (Rom. 8:17; Gál. 3:29). La idea de condenación eterna aparece claramente
en estos textos, y en su aplicación extrema los “eliminados” eran condenados a muerte (Exo. 31:14).
Con respecto a esta gente, es importante tomar nota de que ellos ya habían declarado que no formaban
parte de la congregación antes que comenzara el día de la expiación. Ya se había pronunciado la
sentencia, por su propia decisión, antes de hacer la expiación (Prov. 23:7; Mat. 5:28; Juan 3:17, 18). De
manera que sus pecados no podían ser expiados, porque no tenían fe en las provisiones divinas para su
salvación. Todos sus pecados recaían entonces sobre sus cabezas (Eze. 18:20, 24).
El día de la expiación (Yom Kippur) está consistentemente mencionado en la literatura judía como un
“día de juicio” (L. Baeck The Essence of Judaism [La esencia del judaísmo], 1948, p. 167). Se lo
consideraba un día de “juicio y justicia” y como la hora de “pronunciar el veredicto” (Encyclopaedia
Judaica, 1971, t. 5, col. 1383); los participantes tenían la sensación de encontrarse cara a cara con el
Hacedor en juicio, de que el tiempo se estaba agotando y que la vida se estaba terminando” (H. Wouk,
This is My God [Este es mi Dios], 1960, p. 84). Este mismo pensamiento aparece expresado en esta
referencia totalmente secular: “El Yom Kippur es solemne. Y se lo considera un día de juicio” (Collier’s
Encyclopedia [Enciclopedia de Collier], 1965, t. 23, p. 702).
13. ¿Cuál era el último acto de la serie de servicios del día especial de la expiación?
Respuesta: El sumo sacerdote se sacaba las prendas especiales ___ ______ que había usado
mientras oficiaba en el lugar santísimo (Lev. 16:23).
Las prendas del sumo sacerdote se usaban sólo en el día de la expiación (vs. 2-4). El sumo sacerdote se
sacaba las prendas de lino, se lavaba (había estado en contacto con el pecado), y se ponía sus ropas de
sumo sacerdote (v. 24). Entonces, con el sacrificio vespertino, comenzaba de nuevo la serie anual de
sacrificios (v. 24). La contrapartida de estas actividades en el santuario celestial es el hecho de que Jesús
depone sus atuendos sacerdotales antes de venir a la tierra como Rey de reyes y Señor de señores (Apoc.
19:11-16).
La fiesta del regocijo

• Mostrar que al día de la expiación le seguía el regocijo (la fiesta de las cabañas o los tabernáculos).
• Poner énfasis en el hecho de que la fiesta de los tabernáculos anunciaba el regocijo de los santos en el
cielo.
El día de la expiación era un día solemne en el que los creyentes afligían sus almas. Cinco días después
comenzaba una semana de festividades religiosas.
14. ¿Que fiesta comenzaba cinco días después del día de la expiación?
Respuesta: La fiesta de los ______________ o de las cosechas (Lev. 23:34; Exo. 23:16).
Ésta era la última fiesta del año religioso judío. Ocurría después de que la cosecha de otoño había
terminado. Todos los hombres debían asistir, aunque los demás también participaban (Exo. 23:16, 17;
Deut. 16:13, 14).
15. ¿Cuál era el aspecto más importante de la fiesta?

Respuesta: Era un momento de __________, y recordaba también la liberación de la opresión
egipcia.
Cada siete años, durante esta fiesta, a los deudores se les perdonaban sus deudas, y a todos se les leía la
ley levítica (Deut. 15:1-4; 31:10-13). La fiesta recordaba la época cuando los israelitas habían vivido en
tiendas en el desierto después de su liberación de Egipto (Deut. 16:12-15). El propósito de Dios era
recordarles cómo los había conducido en el pasado; nosotros también ahora deberíamos tener nuestra fe
bien fundada en las experiencias, a través de los siglos, de los grandes campeones de las verdades de
Dios. También deberíamos refrescar nuestra memoria considerando los puntos culminantes de nuestra
propia experiencia.
Conviene recordar que la fiesta de los tabernáculos seguía casi inmediatamente al día de la expiación o
juicio. Al mirar hacia el fin de los tiempos, podríamos esperar que poco después del decreto divino que
anuncia el fin del juicio, viene el momento de la gran cosecha que llevará a cabo Cristo con sus ángeles
(Apoc. 22:11, 12).
16. ¿Qué significaban las ramas de palmeras y otros árboles que se usaban en la fiesta de los
tabernáculos?
Respuesta: Las palmas eran un símbolo de __________ y victoria (Lev. 23:40-42; Mat. 21:8, 9).
Las ramas se usaban para hacer tiendas (o tabernáculos) que se usaban mientras duraba la fiesta. Las
palmas se usaban para conmemorar victorias o triunfos (1 Macabeos 13:51 [libro apócrifo]), y en esta
ocasión eran un reconocimiento simbólico de la conducción del Señor durante el año que había
terminado.
17. ¿En qué cosecha del futuro también se usarán palmas?

Respuesta: Los que hayan salido victoriosos de la gran tribulación al final de la historia de este
mundo, le darán ls gloria a Dios. Dicen que la “___________ pertenece a nuestro Dios” (Apoc.
7:9, 10).
Es plenamente evidente, cuando estudiamos el significado de ls ceremonias instituidas en el Antiguo

Testamento, que éstas nos dan valiosas vislumbres en cuanto a cómo obra Dios hoy. En miniatura, y
mediante una repetición anual, Dios estaba enseñando en su misericordia diversos aspectos de su gran
plan de salvación y restauración.
Todas las huestes celestiales, en ocasión de esta cosecha final, inclinarán sus rostros y adorarán a Dios
diciendo:
“¡Amén!
La bendición, la gloria,
la sabiduría, la acción de gracias,
la honra, el poder y la fortaleza
sean a nuestro Dios
por los siglos de los siglos.
¡Amén!” (Apoc. 7:12).

1. tocaban
2. expiación
3. gran
4. a) acortado b) cayeron
5. solemne
6. sumo sacerdote
7. detrás
8. machos cabríos
9. ---
10. expiación
11. vivo
12. a) limpios, todos b) juzgados c) eliminados
13. de lino
14. tabernáculos
15. regocijo
16. regocijo
17. salvación
APÉNDICE
La palabra “expiación”, según el diccionario, significa “reparar un crimen o culpa por medio de un
castigo o sacrificio”. El pecado –la transgresión de la Ley– produjo separación entre Dios y la humanidad.
Las justas demandas de la Ley, a saber, la muerte del pecador, no se podían satisfacer a menos que se
encontrara un perfecto sustituto para que muriera en lugar del hombre. Jesús vino y cargó con nuestros
pecados, y así se convirtió en el Expiador de nuestras culpas.
La expiación del pecado no se puede hacer sin derramamiento de sangre (Lev. 17:11; Heb. 9:22). Los
siguiente aspectos están relacionados con la expiación:
1. Sacrificio expiatorio. Cuando se sacrificaba un animal (que representaba a Cristo) por el
pecado, se consideraba que la sangra derramada hacía expiación (Exo. 29:36). Cuando
comenzaron los servicios del santuario, la ofrenda se presentaba en el atrio (patio) para dar a
entender que Cristo sufriría y moriría en esta tierra (Isa. 53:4, 5). El sacrificio de Jesús fue
plenamente suficiente (Heb. 10:12). “Las palabras que pronunció Cristo en la ladera de la
montaña eran el anuncio de que su sacrificio en favor del hombre era definitivo y completo. Las
condiciones de la expiación habían sido cumplidas; la obra par la cual había venido a este mundo
se había realizado” (E.G. de White, El Deseado de todas las gentes, 1955, p. 758). Cuando vamos
a él por fe, se nos libra de la culpa del pecado, y se nos considera como si nunca hubiéramos
pecado; se nos justifica (Rom. 5:1; 1 Juan 1:9).
2. Expiación mediadora. Después que el creyente arrepentido terminó de sacrificar al animal, el

sacerdote iniciaba una obra de mediación en favor del creyente. Las Escrituras declaran
enfáticamente que el sacerdote (que representaba a Cristo) “hacía expiación” (Lev. 4:20, 26, 31,
35; 5:6, 10, 13, 18; 6:7; 7:7). Puesto que el sacerdote no había participado en la muerte de la
víctima, podemos concluir que la obra del sacerdote se añadía al sacrificio expiatorio. Este
aspecto de la expiación era esencial, y se llevaba a cabo en el primer compartimento del santuario
terrenal. Consistía en asperjar la sangre (Lev. 4:5-7, 16, 17). (A veces la sangre no se asperjaba en
el lugar santo; en cambio, el sacerdote comía una parte de la carne de la víctima para obrar la
expiación - Lev. 6:26; 10:17). Esto significaba que el sacerdote estaba mediando en favor del
pecador. El sacerdote llegaba a ser un portador del pecado y un tipo de Cristo.
Estos servicios representaban la obra de Cristo en el santuario celestial, que pudo comenzar como
consecuencia de su muerte. Por lo tanto aquí se representa a Cristo durante su obra mediadora en
el primer compartimento del santuario celestial inmediatamente después de su muerte en la cruz
(Hech. 2:33; 1 Juan 2:1). El apóstol Pablo en su epístola a los Hebreos también nos informa
acerca de que Cristo tiene una obra que hacer en favor de nosotros en el santuario celestial (Heb.
9:24). En efecto, tomamos nota de que “Jesús es nuestro Sumo Sacerdote en el Cielo y, ¿qué está
haciendo? Una obra de intercesión y de expiación por su pueblo que cree en él. Mediante su
justicia imputada son aceptos por Dios como los que manifiestan ante el mundo que reconocen su
lealtad a Dios y guardan todos sus mandamientos” (E.G. de White, Testimonios para ministros,
en inglés, 1962, p. 37). Ha prometido ayudarnos en momentos de necesidad si acudimos a él
(Heb. 4:14-16). La influencia santificadora del Espíritu de Dios en la vida nos transformará y hará
que seamos semejantes a Cristo en carácter (Hech. 26:18; Rom. 12:2; 2 Cor. 4:6). Se nos imparte
la justicia de Cristo.
3. Expiación judicial. La obra del día de expiación lógicamente era expiatoria (Lev. 16:16, 30).
Esta obra se llevaba a cabo en el segundo compartimento del santuario terrenal. Levítico 16
enseña con toda claridad que la obra que se llevaba a cabo en ese día era una obra de juicio (vs.
29, 30). El destino de la gente se decidía ese día (Lev. 23:28-30). Representaba la etapa final de la
expiación. Era el momento cuando el sumo sacerdote intercedía por última vez en favor de todos
los que por sus acciones y actitudes daban a entender que querían identificarse con el pueblo de
Dios. La gente podía haber pecado sin saberlo; esos pecados también se presentaban ante el Señor
ese día. La obra que se realizaba implicaba rociar la sangre del chivo del Señor delante del
propiciatorio (Lev. 16:15). De esta manera se daba a entender que se habían satisfecho las justas
demandas de la Ley mediante el derramamiento de la sangre del chivo del Señor que representaba
a Cristo.
En el santuario celestial Cristo entró en 1844 en la etapa final de su ministerio (el día antitípico de
la expiación, o sea, el juicio) para hacer una expiación final en favor de todos los que quieran
beneficiarse con su ministerio, y por los pecados de ignorancia de los creyentes (Dan. 8:14; Heb.
9:7; E.G. de White, El conflicto de los siglos, p. 533; Early Writings [Primeros escritos},1945, p.
253). Pero su intercesión en favor de la humanidad no cesa durante esta etapa (Heb. 7:25). La
intercesión de Jesús en favor de los pecadores (Apoc. 3:5) asegura que la misericordia divina
satisface la justicia requerida por la Ley. De este modo se asegura la salvación de la humanidad,
como asimismo la seguridad del universo de que el pecado no se levantará por segunda vez. (Sal.
85;9, 10; Nah. 1:9).
Los aspectos de mediación y judicial de la expiación de Cristo representan su ministerio intercesor en el

Cielo. El santuario terrenal era una copia del celestial, y nos da importantes vislumbres acerca de su
funcionamiento (Heb. 9:23, 14; Sal. 77:13).
El acto final de la eliminación del pecado (descrita por algunos como “expiación erradicatoria”) es poner
en la cuenta de Satanás el registro de los pecados que él indujo a cometer al pueblo de Dios. El llevará ese
registro al lago de fuego (Sal. 7:16; Apoc. 20:10, 14; R. Gane, Altar Call [Llamado de altar] 1999, pp.
249-254). El universo alcanzará un estado de perfecta armonía y unidad. En los servicios del santuario del
Antiguo Testamento el sumo sacerdote ponía simbólicamente el registro de los pecados confesados sobre
el macho cabrío que representaba a Satanás, a quien se enviaba entonces a tierras lejanas separado de la
congregación (Lev. 16:10; E.G. de White, El conflicto de los siglos, 475, 538, 539, 716; Early Writings
[Primeros escritos], 1945, p. 178.
10. HASTA 2.300 DÍAS
Uno de los aspectos más fascinantes de la Biblia es, a lo menos en parte, las numerosas profecías que
contiene. La pregunta que se debe hacer acerca de todas las profecías es: ¿son dignas de confianza? La
Biblia misma nos desafía a que sometamos a prueba las profecías y su veracidad haciendo precisamente
eso. Notemos que en Deut. 18:22 se nos da la siguiente advertencia: “Si el profeta habla en nombre de
Jehová, y no se cumple ni acontece lo que dijo, esa palabra no es de Jehová. Por presunción habló el tal
profeta; no tengas temor de él (no le hagas caso)”. Jesús mismo citó las palabras de los profetas para
demostrar que lo que le acababa de ocurrir en su crucifixión y resurrección había sido predicho muchos
años antes (Luc. 24:13-27). De este modo respaldó la credibilidad de la Biblia. El apóstol Pedro
consideraba que el espectro de las profecías cumplidas proporcionaba una evidencia tan notable de la
veracidad de la Biblia que incluso superaba a su experiencia personal con Jesucristo aquí en la tierra (2
Ped. 1:19).
En esta lección nos proponemos estudiar la más larga profecía de tiempo de la Biblia, que se relaciona
con la purificación del santuario celestial. Por fortuna esta profecía tiene la misma fecha de comienzo
(457 a.C) que la que se refiere a la venida de Jesús como Mesías y su muerte consiguiente. La profecía
relativa a la venida del Mesías está tan bien respaldada por la historia que podemos estar completamente
seguros de que es correcta la fecha del cumplimiento de la profecía más larga de la Biblia. Vamos a
comenzar con algunas informaciones históricas que sirven de trasfondo de estas profecías y del profeta
Daniel, a quien Dios eligió para darlas.
Trasfondo histórico
• Repasar algunos datos históricos que nos ayudarán a comprender mejor las visiones de los capítulos 8
y 9 de Daniel.
• Determinar en qué consistió el malentendido de Daniel con respecto a la profecía más larga de la
Biblia (que tiene que ver con la purificación del santuario).
Nabucodonosor II, rey de Babilonia (605-562 a.C), envió sus ejércitos a Palestina en el año 605 a.C., y
regresó a Babilonia con prisioneros. La intranquilidad continuó y las deportaciones de prisioneros se
hicieron en tres etapas desde el 605 hasta 586 a.C, y culminaron más o menos en el tiempo de la
destrucción del templo. A los prisioneros que sobresalían por su capacidad intelectual y por su aspecto, se
los envió para recibir entrenamiento en las escuelas especiales de sus días, a fin de que ocuparan
importantes puestos de gobierno en los países conquistados. Daniel fue uno de esos prisioneros y, después
de su entrenamiento, ocupó cargos importantes. Justo antes de que el Imperio Babilónico cayera antes los
embates de los medopersas, se lo hizo el funcionario de tercer rango en el reino (Dan. 5:29, 30).
Ciro le puso fin al Imperio Babilónico en el año 539 a.C., y fundó el Imperio Medopersa como potencia
dominante tal como lo predijo Dios por medio de Daniel (Dan. 1:21; 8:20). El comandante del ejército de
Ciro era Darío, y a él se lo nombró rey de Babilonia después de la conquista de esa ciudad. Darío nombró
a Daniel uno de sus tres presidentes, e incluso tenía planes de hacer de él el principal administrador (Dan.
6:1-3).
Antes de la toma de Babilonia, y durante el reinado de Nabucodonosor, Daniel tuvo una visión registrada
en el capítulo 7 de su libro, en la cual él vio el surgimiento de cuatro grandes imperios sucesivos. El
cuarto atrajo especialmente su atención (Dan. 7:19), porque de él surgió un “cuerno pequeño” que se
opuso a los santos y a Dios mismo (vs. 7, 8, 20, 21, 25). La información que le dio el ángel a Daniel con
respecto al cuarto imperio mundial y al poder político religioso que surgiría de él, lo “perturbó” (v. 28).
Dos años más tarde (551 a.C), Daniel tuvo otra visión en la cual vio otras bestias y de nuevo el misterioso
“cuerno pequeño” (Dan. 8:1, 9, 10). En el contexto de un gran conflicto, y de la oposición a las
instituciones de Dios, Daniel oyó que un ángel le decía a otro: “¿Hasta cuándo durará la visión?” (vs. 11-
13). En otras palabras, ¿hasta cuándo durará este lamentable estado de cosas? La respuesta aparece en el
versículo 14: “Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; luego el santuario será purificado”. Daniel
quedó sumamente perplejo y perturbado con esta visión acerca del “cuerno pequeño”, al punto de
enfermarse (v. 27).
En el capítulo 9 nos encontramos en el primer año del rey Darío (538 a.C.) Y Daniel todavía estaba
preocupado con la potencia simbolizada por el “cuerno pequeño”. Trataba de determinar si las profecías
de Jeremías (25:11, 12) respecto del tiempo de la desolación de Jerusalén y el templo, podrían ayudarle a
dilucidar el problema. Sabía perfectamente bien que los 70 años de desolación de Jerusalén, causada por
poderes extranjeros y anunciada por Jeremías (un profeta contemporáneo) casi habían terminado (ese
período había comenzado con la invasión de Nabucodonosor en el 605 a.C., de modo que en el 538,
cuando él sacaba cuentas, ¡ya habían pasado 68 años!) ¿Estaba equivocada la profecía de Jeremías? ¿O
había cambiado de planes Dios en vista de la reacción del pueblo? Daniel entonces elevó una sentida
oración de confesión, suplicando misericordia y dirección (Dan. 9:4-19).
Mientras Daniel oraba, se envió al ángel Gabriel para que contestara a lo menos algunas de sus preguntas
(v. 21). Le informó que Jerusalén sería restaurada (el decreto respecto de este evento todavía estaba en el
futuro: 457 a.C.), porque la venida del Mesías a esta tierra estaba relacionada con ese evento (v. 25). En
cuanto al “cuerno pequeño”, se le permitió llegar a la conclusión de que sus actividades todavía estaban
en el futuro. Y debe de haber llegado a esa conclusión puesto que el ángel ya le había informado que los
acontecimientos relacionados con él se hallaban en el futuro distante (Dan. 8:26). Además, se le dijo que
las 70 semanas proféticas o 490 años concernientes a la venida del Mesías habían sido “determinadas” o
“cortadas” de un período más largo (los 2.300 días proféticos, es decir, años) que terminarían antes de que
comenzara el juicio del “cuerno pequeño”. En vita de que estas incertidumbres habían sido eliminadas, el
profeta quedó conforme con la misericordia de Dios y el cronograma divino.
La reconstrucción del templo comenzó con el permiso otorgado por Ciro (537 a.C.). Los objetos sagrados
regresaron a Jerusalén, los costos de traslado corrieron por cuenta del estado, y los exiliados y sus
descendientes también pudieron regresar a Jerusalén. Daniel no regresó, puesto que ya debe de haber
tenido 87 años. El templo por fin se reconstruyó y se lo dedicó en el 515 a.C. bajo el reinado de Darío
(522-486 a.C.).
Con este trasfondo, y habiendo establecido una conexión vital entre las visiones de los capítulos 8 y 9,
analicemos la profecía relativa a la venida del Mesías, que nos da la fecha del comienzo del período de
2.300 años.
La promesa del Mesías

• Destacar el hecho de que el centro de las declaraciones proféticas de las Escrituras es Jesucristo y el
plan de salvación.
• Tratar de entender como se llega a un tiempo literal a partir del tiempo simbólico de las profecías
bíblicas.
• Establecer que la comprensión de la profecía relativa a la purificación del santuario está relacionada
con la venida del Mesías.
Al estudiar las profecías de la Biblia descubrimos que cuando un período se menciona en un contexto
profético, la aplicación de ese período se puede calcular en el contexto histórico mediante reglas que
establece la misma Biblia.
1. En el simbolismo de la profecía bíblica, ¿qué significa un día, una semana y un año?
Respuesta:
a)En una profecía simbólica un día equivale a un _____ (Núm. 14:34; Eze. 4:4-6).
b) El calendario litúrgico hebreo era de 30 días, y el año de 360 días (Gén. 7:11; 8:3, 4). Por lo
tanto un mes profético equivalía a 30 años y un año a 360 años literales.
Aunque los judíos calculaban el tiempo sobre una base de 360 días anuales, eran perfectamente
conscientes de que el año natural era algo más largo (Encyclopaedia Judaica, 1971, t.5, cols. 48-50; t. 16,
col. 725).
2. ¿En qué circunstancias se proclamó Mesías a Jesús?

Respuesta: A Jesús se lo proclamó Mesías cuando Juan el Bautista lo _________ en el Jordán
(Luc. 3:21, 22; Juan 1:32, 33, 35-37, 40, 41).
La palabra hebrea “Mesías” significa “Ungido”, y “Cristo” es su equivalente griego. Cristo fue ungido
con el Espíritu Santo en ocasión de su bautismo, y así llegó a ser el Mesías, es decir, el Cristo.
3. ¿Se puede establecer la fecha del bautismo de Cristo?

Respuesta: Sí. Juan comenzó a bautizar en el año ___ del reino de Tiberio César (Luc. 3:1-3).
Lucas menciona una lista de importantes personajes que vivían cuando Jesús fue bautizado. Si partimos
del año 457 a.C., cuando tuvo efecto el decreto para la reconstrucción de Jerusalén, las 69 semanas
proféticas, o sea 483 años, nos llevan al año 27 d.C. De acuerdo con el método de cómputo que no toma
en cuenta el año de acceso al trono de un monarca, el año 15 de Tiberio estaría comenzando el 1 de
octubre del año 27 d.C. Por lo tanto, siendo que los registros bíblicos y los históricos armonizan, podemos
llegar a la conclusión de que el bautismo de Jesús ocurrió el año 27 d.C. En ese momento Jesús tenía unos
treinta años (Luc. 3:23). Este texto no tiene la intención de establecer su edad exacta; se limita a decir que
Jesús tenía la edad cuando los judíos consideraban que un hombre había llegado a la plena madurez, y
estaba entonces en condiciones de aceptar deberes concernientes a la vida pública.
4. ¿Cuántos años decía la profecía de Daniel que debían transcurrir desde el decreto para reconstruir
Jerusalén hasta el Mesías príncipe?
Respuesta: Sesenta y nueve semanas (___ semanas más ____ semanas), o sea 483 años (69 x 7 -
Dan. 9:25).
Las Escrituras registran varios decretos relativos el regreso de los judíos y a la restauración de Jerusalén.
El primero se promulgó en el primer año de Ciro (en torno del año 537 a.C., Esd. 1:1-4), el segundo
durante el reinado de Darío (cerca del 520 a.C., Esd. 6:1-12), y el tercero en el séptimo año de Artajerjes
(458/457 a.C., Esd. 7:1-26). (Este mismo rey detuvo la reconstrucción de los muros unos diez años
después [Esd. 4:7-24], pero repitió su autorización del año 457 en 444 a.C., lo que permitió que los
muros de la ciudad se terminaran ese mismo año [Neh. 2:9]. El decreto de Artajerjes del año 457 a.C. fue
el primero que le dio a los judíos “notables privilegios espirituales, civiles y judiciales, casi equivalentes a
la autonomía bajo el paraguas más amplio del Imperio Persa” (A.J. Ferch, La fecha inicial de la profecía
de las setenta semanas, p. 74, en E.B. Holbrook, editor, The Seventy Weeks, Leviticus, and the Nature of
Prophecy [Las setenta semanas, el Levítico y la naturaleza de la profecía], 1986). El séptimo año de
Artajerjes comenzó en el otoño del año 458 a.C.. Si consideramos que este decreto no entró en vigencia
hasta que Esdras hubo llegado a Jerusalén (el viaje de Babilonia a Jerusalén tomaba varias semanas), se
puede aceptar con confianza la fecha de 457 a.C. (Collier’s Encyclopedia, 1974, t. 2, p. 705; G.F. Hasel,
Interpretaciones de la cronología de las setenta semanas, pp. 49, 50, en Holbrook, Op. Cit., Esd. 7:7-9).
Ahora bien, los 483 años se extienden desde el año 457 a.C. hasta el 27 d.C. Al calcular, tenemos que
recordar que cuando pasamos de la era precristiana a la cristiana, no hay año 0. Por eso la cuenta debe ser
así: 483 - 457 = 26 + 1 (hay que añadir 1, puesto que no hay año 0) = 27. Por cierto esta notable profecía
prueba que el método de interpretación profética que bosquejamos en la pregunta 1 es correcto, pero aún
más importante es el hecho de que el bebé que nació en el pesebre de Belén era el Hijo de Dios. Juan el
Bautista reconoció este hecho cuando afirmó lo que se registra en Mar. 1:3: “Preparad el camino del
Señor”. Jesús mismo reafirmó esta profecía cuando dijo: “El tiempo se ha cumplido” (Mar. 1:15).
5. ¿Qué detalles adicionales nos da la profecía?

Respuesta: Jesús debía ser eliminado a la _______ de la semana (Dan. 9:26, 27).
La última semana, es decir, los últimos siete años de la profecía, están divididos en dos partes iguales.
Está demostrado indubitablemente que el ministerio de nuestro Señor Jesucristo duró tres años y medio.
Lo deducimos por el hecho de que asistió a tres pascuas y una fiesta más, no determinada (Juan 2:13; 5:1;
6:4; 12:1), que posiblemente también fue una pascua. Jesús murió durante una pascua (año 31 - Mat.
26:17-32). Las setenta semanas habían sido destinadas al pueblo judío (Dan. 9:24). Cuando apedrearon a
Esteban, el evangelio se comenzó a predicar a los gentiles. Se cree que eso ocurrió en el año 34 d.C.,
cuando posiblemente Pablo se convirtió (E.G. de White, El conflicto de los siglos, pp. 375, 376; W.H.
Shea, La profecía de Daniel 9:24-27, citado por F.B. Holbrook, editor, The Seventy Weeks, Leviticus, and
the Nature of Prophecy [Las setenta semanas, el Levítico y la naturaleza de la profecía}, 1986, pp. 103,
104).
El comienzo de la profecía de los 2.300 años

• Determinar el punto de partida de la profecía bíblica más larga (la que tiene que ver con la
purificación del santuario).
Como lo dijimos en el preámbulo, el ángel Gabriel, al esforzarse por aclararle a Daniel el significado de la
cronología relacionada co la purificación del santuario, también dio detalles concernientes a la venida del
Mesías.
6. ¿Qué significa la palabra “determinadas” que aparece en Dan. 9:24?

Respuesta: Esta palabra significa “cortadas”, “separadas”, “destinadas a”.
La mayor parte de los diccionarios hebreos da como significados de la palabra aramea chatak, que
aparece en este versículo, como “cortadas”, “seccionadas”, “separadas” o “divididas”. Este es el único
lugar de las Escrituras en que aparece esta palabra. Los registros históricos de la época cuando se escribió
el libro de Daniel (siglo VI a.C.), indican que el significado de la palabra es “cortar”. El profeta usa la
palabra hebrea karath para comunicar la idea de que el Mesías sería crucificado (Dan. 9:26); la palabra,
en este caso, significa “abatir”, o “aserrar”. Se usa otra palabra hebrea para describir la destrucción de
Jerusalén y el templo (Dan. 9:26, 27, traducida por “destruirá” en la versión Reina-Valera, revisión de
1995). Daniel estaba intentando dejar bien en claro para el lector que era extraordinario el significado de
la palabra que eligió para realzar el período profético más largo. La idea que quiso transmitir es que el
período más corto: el de las 70 semanas o 490 años, había sido extraído del período más largo, el de los
2.300 años (M. Jastrow, A Dictionary of the Targumim, the Talmud Babli, and Yerushalami, and the
Midrashic Literature [Un diccionario de la literatura targúmica, talmúdica, jerosolimitana y midrásica],
1967, t. 1, p. 513; P.R. Newell, Daniel: the Man Greatly Beloved and His Prophecies [Daniel: el hombre
muy amado y sus profecías], 1962, p. 139; A. Tolhurst; Australasian Record [Informe de la División
Australasiana], 1983, 22 de octubre, pp. 6, 7, 14).
7. ¿Cuándo comenzó la profecía de los 2.300 años?

Respuesta: El punto de partida de esta profecía es el mismo de la que se refiere a la venida del
Mesías, a saber, el año 457 a.C. (Dan. 9:24).
Si el cálculo de este período de 2.300 años se hace de manera que termine en el Calvario, la fecha de
comienzo tendría que ser el año 2272 a.C. Ese año no tiene significado histórico alguno. Otros cálculos
que se han hecho y que se fundan en puntos notables referentes a la identificación del Mesías, también
nos llevan a fechas sin valor histórico.
8. ¿Estamos seguros de que el período profético mencionado aquí abarca 2.300 días proféticos?
Respuesta: Sí.
Como explicación podemos observar que las palabras que se usan en Daniel en 8:14 con respecto a la
profecía de los 2.300 años, han sido correctamente traducidas “tardes y mañanas”. Esto ha inducido a
algunos a llegar a la conclusión de que aquí se trataría de 1.150 días. En las versiones castellanas no
tenemos este problema. Sí aparece en la versión en inglés moderno conocida como Good News Bible (la
Biblia de las buenas nuevas). Entre los que se adhieren a esta interpretación se encuentran los que están
impresionados por las actividades del “cuerno pequeño” que trata de negar el mensaje del santuario (Dan.
8:9-13). Una sencilla solución de este problema se encuentra en el hecho de que los eruditos judíos que
tradujeron las Escrituras al griego (la Septuaginta o Versión de los Setenta) varios siglos antes de Cristo,
entendieron claramente que la expresión “tardes y mañanas” se refería a días completos. Otras
autoridades están de acuerdo con esto (véase C.M. Maxwell, God Cares [Dios se preeocupa], 1981, t. 1,
p. 174). Esta expresión también se puede comparar con la descripción de los días de la creación donde se
dice: “Y fue la tarde y la mañana del primer día”, y así sucesivamente (Gén. 1:5, 8, 13, 19, 23, 31).
Conviene tomar nota también que ningún hecho importante ocurrió durante esos 1150 días (e incluso
años) después del 457 a.C., lo que por cierto no se puede decir acerca de los 2.300 años.
Algunos intérpretes han hecho un gran esfuerzo para aplicar la profecía de Daniel 8:14 a Antíoco
Epífanes, uno de los reyes seléucidas (reinó entre los años 175 y 164 a.C.) cuyos dominios incluían Siria
y parte de Asia. Era un rey relativamente débil y hasta trágico, y ocupó uno de los últimos lugares de su
dinastía. Profanó el santuario de los judíos e interrumpió sus servicios por tres años y diez días, es decir,
1.090 días (1 Mac. 1:54-59; 4:52-54 [libro apócrifo]). Durante ese tiempo erigió en el templo un altar al
dios griego Zeus, y sacrificó animales inmundos sobre él (J. Bright, A History of Israel [Una historia de
Israel], 1960, pp. 401-412). Se ve inmediatamente que el período que se requiere para esta profecía no se
cumple en el caso de este rey, aun si aceptáramos que se trata de 1.150 días literales y no de 2.300 días
proféticos. Los eruditos imparciales uniformemente rechazan la aplicación de esta profecía a Antíoco
(G.F. Hasel, El cumplimiento de la profecía, citado por F.B. Holbrook, Op. Cit., pp. 319-321).
Se puede aducir que el santuario celestial no puede ser “pisoteado” (Dan. 8:13). El santuario celestial
puede ser pisoteado, por supuesto, tal como los pecadores impenitentes “pisotean” al Hijo de Dios (Heb.
10:29). Esos pecadores consideran con liviandad el mensaje de salvación y al Salvador. De la misma
manera, los que voluntariamente rechazan los grandes temas que nos revela el estudio del santuario
celestial también rechazan a su Sumo Sacerdote, Jesucristo.
La purificación del santuario

• Revisar los principales aspectos de las ceremonias que se llevaban a cabo en el día de la expiación (la
purificación del santuario terrenal).
• Referir a la naturaleza de las actividades del santuario celestial, simbolizadas por las ceremonias del
día de la expiación.
La purificación del santuario a la que se refiere Daniel 8:14, tiene como trasfondo las actividades del
“cuerno pequeño” que oscurece las verdades relativas al santuario, pisoteándolas y persiguiendo a los
santos (vs. 9-13). El ángel le dijo a Daniel que Dios permitiría que estas cosas siguieran así durante un
determinado período, y entonces se “purificaría” el santuario. Aparte de lo que los traductores modernos
consideran que significa el texto, es muy instructivo verificar cómo consideraban los antiguos judíos este
versículo. La Septuaginta, una antigua traducción de la Biblia al griego, y que estaba en uso en los días de
Jesús, traducen por “purificado” la palabra que describe la obra que se debe hacer en el santuario al fin de
los 2.300 días. Es interesante notar que la versión de Teodocio (la traducción el griego hecha por un judío
que se llamaba así), también traduce esa palabra por “purificado”, lo que ocurre en cantidad de
traducciones antiguas y modernas, incluso la versión inglesa de Knox y la Vulgata latina (C.M. Maxwell,
Op. Cit., t 1, pp. 175, 187; C. Goldstein, 1844 Made Simple [La fecha de 1844 explicada con sencillez],
1988, pp. 65, 66) y la reciente (1988) traducción al inglés (Tanakh, Las Santas Escrituras).
La palabra hebrea que aparece en Daniel 8:14 y que ha sido traducida por “purificado” en los ejemplos
anteriores, es nisdaq, que deriva del verbo sadaq. El primer significado de este verbo es “ser justo”, e
indica conformidad con una norma moral (R.L. Harris, G.L. Archer y B.K. Waltke, editores, Theologial
Wordbook of the Old Testament [Diccionario teológico del Antiguo Testamento], 1980, t. 2, p. 752). Los
traductores (al inglés) comúnmente usan las siguientes expresiones cuando se encuentran con esta
palabra: “enderezar”, “poner en condición correcta”, “corregir”, “declarar justo”, “justificar”, “vindicar” y
“purifica”. (En las versiones castellanas encontramos el siguiente panorama: Reina-Valera (RVR) en
1960 dice: “purificado”. La misma palabra se usa en la RVR 77, RVR 95, Dios Habla Hoy y Emmanuel.
La única discrepancia la encontramos en la Biblia de Jerusalén (BJ); allí la palabra en cuestión ha sido
traducida por “reivindicado”.– Nota del traductor). Ahora bien, el santuario terrenal estaba impuro por
causa de que los pecados confesados del pueblo se había transferido simbólicamente a él (Lev. 16:16, 30).
En el servicio diario del santuario la transferencia del registro de los pecados confesados se llevaba cabo
simbólicamente por medio de la aspersión de parte de la sangre de los sacrificios al lugar santo; se
necesitaba esta aplicación para que el sacerdote pudiera considerar que estaba completa la etapa inicial de
la expiación (Lev. 4:5-7, 20, 26, 21, 35; 10:17). En el día de la expiación el santuario se debía purificar de
los pecados y las injusticias o maldades, puesto que la injusticia es impureza (Isa. 64:6; 1 Juan 1:9; 5:17).
Notamos además que todo lo que carezca de iniquidad o pecado se considera justo y recto en la Biblia
(Deut. 32:4; Rom. 3:23-26; 1 Ped. 3:18). Se deduce entonces que cuando el Juez justo elimina el registro
del cúmulo de los pecados confesados por los penitentes, se declaraba justo y recto (limpio(al santuario).
La norma moral, la Ley, había sido satisfecha. Se ve que Dios ha sido justo al librar a su pueblo.
Con respecto a estas conclusiones y debido al hecho de que el concepto de justicia aparece poéticamente
en forma de paralelismo (la misma idea expresada con diferentes palabras a veces en el mismo verso)
junto con pureza y limpieza (ejemplos: Job. 4:17; 15:14; 17:9; Ecl. 9:2), la mente judía podía pasar con
toda naturalidad de Levítico 16 a Daniel 8:14. Para confirmar la idea de que el juicio es el asunto al que se
refiere este texto, podemos mencionar también los paralelismos con respecto al juicio que aparecen en los
capítulos 7 y 8 de Daniel. (Véase el APËNDICE).
9. En el día de la expiación de la antigüedad, ¿qué aspectos de esta ceremonia ponían énfasis en el tema
del juicio?
Respuesta:
a) La primera etapa del servicio tenía que ver con el pueblo. Era el servicio matutino regular, que
se ofrecía _______________ (Exo. 29:38-42; Núm. 28:3-10).
Los servicios matutino y vespertino simbolizaban la reconsagración de la congregación a Dios y su

constante dependencia de él. Los hijos de Israel, aunque habían confesado sus pecados, debían “afligir”
sus almas en el día de la expiación; si así no lo hacían sus pecados recaerían sobre ellos (Lev. 23:27-29).
En otras palabras, se les había enseñado que la vida eterna era de ellos por la fe, si seguían siendo
obedientes hasta el fin (Eze. 18:24; 33:13).
b) La segunda etapa del servicio tenía que ver con el sumo sacerdote, que ofrecía un sacrificio por
____ y por su ______ (Lev. 16:6).
Antes que la sangre del animal sacrificado se llevara al lugar santo, el sumo sacerdote llevaba incienso y
lo quemaba delante del arca del pacto (vs. 12, 13). Entonces se llevaba la sangre del becerro y se la
asperjaba de acuerdo con el mandamiento. De este modo el sumo sacerdote hacia expiación por sí mismo
y por su casa (v. 11). El sumo sacerdote quedaba libre de pecado, y pasaba a ser un verdadero
representante de Cristo, y podía entonces mediar en favor de los demás.
c) La tercera etapa del servicio consistía en que el sumo sacerdote ofrecía un macho cabrío por el
________ y el santuario (Lev. 16:15, 16). Entonces simbólicamente transfería los pecados
confesados que se habían “acumulado” en el santuario al macho cabrío ______ que representaba
a Satanás (Lev. 16:21).
La sangre del macho cabrío del Señor satisfacía las demandas de la Ley con respecto a los pecados
confesados del pueblo que se habían acumulado en el santuario en el curso del año. De esta manera se
hacia expiación por el santuario o, en otras palabras, se lo declaraba libre de pecado. Aunque cada
persona había confesado sus pecados durante el año y habían sido perdonados, el registro de los pecados
seguía presente en el santuario. Cuando se eliminaba el registro, la expiación o reconciliación estaba
completa (Lev. 16:20). Esta ceremonia se llevaba a cabo en el lugar santísimo frente al arca del pacto y
era el aspecto culminante de los servicios de ese día.
El sumo sacerdote (que representaba a Cristo, nuestro Mediador), salía del lugar santísimo del
tabernáculo, llevando sobre sí los pecados confesados y perdonados, y los ponía sobre la cabeza del
macho cabrío vivo que representaba a Satanás (Lev. 16:21). Esto era lo último que hacía en el santuario.
De esta manera simbólica se presentaba a Satanás como quien recibirá el castigo final por los pecados
confesados de los justos. Notamos que el macho cabrío recibía los pecados acumulados de manos del
sumo sacerdote (que representaba a Cristo), quien lo enviaba lejos. Notamos que el macho cabrío vivo
representa a alguien que no es Cristo. Notamos también que no se derramaba la sangre de este macho
cabrío, lo que apoya la conclusión de que no representaba a Cristo (Lev. 17:11).
10. Qué sucede en el día antitípico de la expiación que empezó en 1844?

Respuesta: Cristo, nuestro Sumo Sacerdote, comenzó la etapa correspondiente al segundo
compartimento de su ministerio en el santuario celestial, y empezó la obra de purificarlo.
El apóstol Pablo aclara muchísimo en Hebreos que el santuario terrenal y sus servicios tenían su
contrapartida en el Cielo (Heb. 9:21, 23, 24). El sumo sacerdote servía durante el año en el lugar santo
(obra de mediación) y su obra final (de juicio) se llevaba a cabo en el lugar santísimo. Las actividades que
se desarrollaban en los dos compartimentos, y su secuencia, también representa la obra que lleva a cabo
Cristo en el Cielo. El ministerio de Cristo abarca dos aspectos. El profeta Daniel describe en términos
majestuosos la venida de Cristo para comenzar la etapa final –la de juicio– de su obra (Dan. 7:9, 10, 13,
14).
11. ¿Hablan con claridad las Escrituras acerca de la purificación del santuario del Cielo?
Respuesta: Sí, era necesario que el santuario del Cielo fuera “____________” con la sangre de
Cristo (Heb. 9:23).
Así como en el santuario terrenal los pecados confesados del pueblo se transferían a él, los pecados
confesados de los fieles de Dios se transfieren a los libros de registro del santuario celestial. Los registros
de las vidas de todos los hombres y mujeres se conservan en el Cielo (Dan. 7:10; Apoc. 20:12). Si alguien
alegara que el santo Cielo de Dios no puede ser contaminado por el pecado, recordemos que Cristo se
hizo pecado por nosotros sin anular por ello su santidad (2 Cor. 5:21; Heb. 9:28), y que el Cielo ya estaba
contaminado como consecuencia de la rebelión de Lucifer y sus seguidores (Apoc. 12:7-9).
12. ¿Qué mueble del tabernáculo estaba especialmente asociado con la obra del día de la expiación?
Respuesta: El arca del pacto que contenía la Ley de Dios, o sea, el ____________ (Lev. 16:13-
15).
Los servicios del día de la expiación giraban en torno del arca del pacto, puesto que era un símbolo de la
misericordia y la justicia. El arca del pacto no existía en el segundo templo (construido unos 500 años
antes de Cristo) de acuerdo con los registros históricos (2 Mac. 2:4-6; W. Whiston, The Life and Works of
Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio Josefo], c. 1936, pp. 316, 618; Encyclopaedia Judaica, 1971, t.
15, col. 1167). Este templo fue destruido el año 70 d.C. Por lo tanto nuestra atención en este caso se dirige
al santuario celestial, donde se nos dice que está el arca del pacto (Apoc. 11:18, 19). Es el único santuario
que realmente importa, porque es el “verdadero” (Heb. 8:1, 2, 5). Es importante notar que el ministerio de
Cristo en el lugar santísimo termina antes de la ejecución del juicio, la entrega de los galardones y la
destrucción de los impíos (Dan. 12:1-3; 1 Tes. 4:14-17; Apoc. 20:7-9).
13. La profecía de los 2.300 años apunta hacia el día antitípico de la expiación que comenzó en 1844.
¿Estaba relacionada esta fecha con algún acontecimiento en especial o serie de acontecimientos?
Respuesta: ¡Sí!
Un notable reavivamiento religioso se produjo durante la primera parte del siglo XIX. Miembros y
ministros de numerosas denominaciones religiosas comenzaron a creer, a partir de su estudios, que un
gran acontecimiento estaba por suceder. Recordemos que el extraordinario fenómeno de la caída de las
estrellas en 1833, que indujo a muchos a pensar en Dios, ayudó a concentrar la atención en la Palabra de
Dios. La purificación del santuario era el centro de la predicación, y se creía generalmente que el año
1844 señalaba el regreso de Cristo a esta tierra (también se creía que el santuario era la tierra). El mensaje
del pronto regreso de Cristo se extendió de un país a otro en este mundo, con la participación de
predicadores de las denominaciones más importantes. En los países escandinavos niños predicadores,
cuyas edades oscilaban entre los seis y los 16 años, participaron de este notable fenómeno en
cumplimiento de la profecía de Joel 2. Cuando se los interrogaba acerca de las razones de una actividad
tan singular, estos niños citaban Joel 2:28 y 29, y Apoc. 14:7. El mensaje de que la hora del juicio había
comenzado se le presentó a la gente ¡porque la hora había llegado! Cuando pasó el tiempo y Cristo no
vino, mucha gente abandonó su fe y se sumió en la tibieza espiritual. Otros, convencidos de que todos
esos notables acontecimientos sólo podían haber sido dirigidos por Dios, volvieron a estudiar el tema del
santuario y se dieron cuenta de que se trataba de la purificación del santuario del Cielo y no de la
purificación de la tierra por medio del fuego. Cristo estaba entrando en la etapa final de su ministerio (el
juicio investigador previo a su venida) antes dee regresar a esta tierra (C.M. Maxwell, Op. Cit., t. 2, pp.
353-371).
14. Cuando Cristo, nuestro Sumo Sacerdote, termine la obra de expiación o reconciliación, ¿qué
sucederá?
Respuesta: La puerta de la misericordia se cerrará para siempre. Se promulgará esta sentencia:
“El qu es injusto, sea ________ todavía; el que es impuro, sea impuro todavía; el que es justo,
practique la __________ todavía, y el que santo, santifíquese más todavía” (Dan. 12:1; Apoc.
22:11).
Así como en el día de la expiación del santuario terrenal el sumo sacerdote terminaba reconciliando o
haciendo expiación (Lev. 16:20), en el santuario celestial nuestro Intercesor se levantará un día para
declarar que el tiempo ha concluido (Dan. 12:1). Entonces el tiempo de prueba habrá terminado para
siempre. Los destinos de todos estarán decididos. La única obra que quedará por hacer es poner los
pecados confesados sobre la cabeza de Satanás (porque debe aceptar la responsabilidad de haber puesto
tentaciones en el camino de los creyentes) y enviarlo a la “tierra de la separación”, que no es otra cosa
sino el olvido eterno (Apoc. 20:10).
Notamos que el problema del pecado será resuelto para siempre antes que Cristo termine su ministerio en
el lugar santísimo del santuario celestial. Los justos serán declarados justos para toda la eternidad, y los
que rechazaron la misericordia y la justicia de Dios se perderán para siempre (Apoc. 22:11). Para
nosotros, que vivimos en los umbrales de la eternidad, es importante que aflijamos nuestras almas (Isa.
58), y que vivamos permanentemente por fe. Dios será santificado por su pueblo en este mundo (Apoc.
14:7; Eze. 20:41; 28:25; 36:23; 39:27, 28). Permitamos todos que Dios haga en nosotros su maravillosa
obra.

1. a) año b) ---
2. bautizó
3. 15
4. 7, 62
5. mitad
6. ---
7. ---
8. ---
9. a) continuamente b) él, su casa c) pueblo, vivo
10. ---
11. purificado
12. testimonio
13. ---
14. injusto, justicia
APÉNDICE: Paralelos entre Daniel 7 y 8 . El último capítulo amplía el mensaje del anterior
__________________________________________________________________________________________
SUCESO Daniel 7 Daniel 8
__________________________________________________________________________________________
La secuencia de los * león, primer reino (Babilonia) * ---
imperios * oso, segundo reino (Medopersia) * Carnero (Medopersia) vs. 3, 4, 20
Vs. 5, 17
* leopardo, tercer reino (Grecia) * Macho cabrío (Grecia) vs. 5-8, 21
* Bestia indescriptible, cuarto * Rey altivo (Roma pagana y papal)
reino (Roma pagana) vs. 7, 19, vs. 9, 23.
23; el cuerno pequeño (Roma
papal, sale de la cuarta bestia
vs. 8, 24.
___________________________________________________________________________________________
Condición de los Opresión, vs. 21, 25 Opresión vs. 10, 24, 25
santos en el
cuarto reino
___________________________________________________________________________________________
Período de supremacía 3 ½ tiempos, o 1.260 años, vs. No especificado. Comparar con
del cuerno pequeño 25-28 (comp. Apoc. 11:2, 3; Dan. 8:24, 25; Apoc. 13:5-7 (42
12:6-14) meses o 1.260 años); concluye
en el tiempo señalado, v. 19
___________________________________________________________________________________________
El conflicto del cuerno * Habla palabras contra “el * Se engrandece ante el “ejército,” v. 10
pequeño con el Cielo Altísimo, v. 25 * Se engrandece ante el “Príncipe,” v. 11
* Persigue a los santos del
Altísimo, v. 25
___________________________________________________________________________________________
Actitud del cuerno * Insolencia, v. 8, 20, 25 * Se exalta contra Cristo, vs. 11-25
pequeño hacia Cristo * Trata de cambiar los tiempos * La salvación, el ministerio “diario”
y la Ley divina, v. 25 de Cristo queda oscurecido, vs. 11, 12
(cc Heb. 8:9)
* Echa por tierra la verdad, v. 12
___________________________________________________________________________________________
Los temas del santuario * La respuesta de Dios a las * Hay alusiones al santuario en todo el
son el foco de las palabras insolentes y los métodos capítulo: los animales del santuario,
actividades del cuerno destructivos del cuerno pequeño (carnero, macho cabrío), vs. 3-5;
pequeño se encuentra en el juicio “los santos” del v. 13 nos recuerdan
investigador; Dios viene con los querubines; los 4 cuernos del v. 8
fuego y en una nube, vs. 9-14. también nos recuerdan el altar (Exo. 27:2;
Esto nos recuerda el fuego y la 30:2)
Nube del santuario terrenal
(Núm 9: 15, 16). * El santuario y las verdades relacionadas
con él son atacados, vs. 11, 12
___________________________________________________________________________________________
Las actividades de * Se destacan las actividades * Purificación y vindicación del santuario
Cristo en el Cielo relacionadas con el juicio; vs. 13, 14
(Primera etapa del primera etapa, vs. 9-14 * ¿Hasta cuándo? Esta pregunta a menudo
juicio en el santuario) * Aparece para vindicar a los se refiere al juicio y la vindicación de los
santos, vs. 18, 22 santos (Sal. 6; 13:1, 2; 35; 89; 94:3; Hab.
1:2-4; Zac. 1:12; Apoc. 6:9-11
* La verdad, que había sido echada por
tierra, será restaurada, v. 14 (cc Apoc. 14:6-12;
18:1
__________________________________________________________________________________________
El momento de las * En ocasión del juicio * “Hasta 2.300 días” (tardes y mañanas)
recompensas investigador, vs.. v. 14; son “días del santuario” (cc Exo. 27:
25-27 20, 21, aquí también se habla de tardes
y mañanas)
* “Tiempo del fin”, v. 17
* “Para muchos días”, v. 26
___________________________________________________________________________________________
naturaleza de las * El cuerno pequeño será * El rey arrogante será quebrantado, vs. 23, 25
recompensas destruido, vs. 11, 26
(Segunda etapa del * Se le quita su dominio, v. 12
juicio) * Los santos poseen el reino,
vs. 18, 22
___________________________________________________________________________________________
La naturaleza del reino Eterno vs. 14, 27 No depende del poder humano, v. 25
___________________________________________________________________________________________
Fuentes: D. Ford, Ministry, enero de 1960, pp. 18-21; Idem, diciembre de 1965, pp. 34-36; C.M. Maxwell, God
Cares [Dios se preocupa], 1981, t. 1, p. 285; W.H. Shea, La unidad de Daniel, citado por F.B. Holbrook, Symposium
on Daniel [Simpisio acerca de Daniel], 1986, pp. 165-255; E.R. Thiele, Outline Studies on Daniel [Bosquejos de
estudios acerca de Daniel], 1947, pp. 59-97.
11. EL SANTUARIO Y EL JUICIO
Aunque muy pocos de nosotros hemos tenido que ver alguna vez con el sistema legal, la idea de un juicio
evoca inmediatamente una cantidad de conceptos: la ley o la norma por la cual se juzga, el juez, y las
opciones que tienen los que deberán dictar la sentencia. Del mismo modo como en los tribunales de este
mundo se debe exaltar la norma aceptada por la sociedad, en el tribunal del Cielo se debe exaltar la norma
de la justicia de Dios. En el drama que se está desarrollando en esta tierra, nosotros somos los actores y
algún día tendremos que dar cuenta acerca de cómo hemos manejado los privilegios que se nos han
ofrecido de conocer a Dios y compartir esta información con los demás.
Como lo dijimos en la última lección, el pueblo judío consideraba el día de la expiación como un día de
juicio, un día cuando todos debían prestar cuidadosa atención a su relación con Dios. La Biblia dice
mucho acerca del juicio, y éste es el tema que vamos a estudiar en especial en esta lección. Casi
inmediatamente después del solemne día de la expiación, se celebraba la fiesta de los tabernáculos como
la última del año litúrgico. Era una fiesta de regocijo porque la cosecha ya estaba terminada, el trabajo del
año se había completado, y Dios los había aceptado. La fiesta anunciaba la venida del Señor del Cielo
quien vendrá a reunir la cosecha de la tierra. Apuntaba hacia la consumación de toda las cosas. De ahí que
sea evidente que el comienzo del día antitípico de la expiación en 1844 llame nuestra atención hacia el
evento más portentoso de todos los siglos: la venida en gloria del Rey, Jesucristo. Este acontecimiento
debe ocurrir pronto.
La purificación
• Recordar que el propósito central de las ceremonias del día de la expiación del santuario terrenal (día
de juicio) eran darle la seguridad de su salvación al pecador arrepentido y anunciar el triunfo del bien
sobre el mal.
• Impresionar al lector con la idea de que “hoy” es el día de la oportunidad y la decisión.
La palabra hebrea nisdaq ha sido traducida de varias maneras, aunque en castellano casi unánimemente se
la ha traducido por “purificar” o sus derivados. En inglés, en cambio, se han usado las siguientes palabras
o expresiones: “purificado”, “restaurado” y “vindicado”. Todas ellas, en última instancia, reflejan el
sentido del término. No importa qué palabra nos venga a la mente cuando leemos Dan. 8:14, nuestra
atención se enfoca en el santuario celestial y en la obra de nuestro Sumo Sacerdote: Jesucristo.
La palabra “purificado” conduce la mente del lector a Levítico 16, e indica que el santuario celestial debe
ser purificado (tares que comenzó en 1844), y con la cual Cristo, nuestro Sumo Sacerdote está
cumpliendo su tarea final (la expiación judicial) en el santuario celestial como preparación para su
segunda venida). La palabra “restaurado” también lleva la mente del lector a la restauración de la pureza
del santuario en el día de la expiación. Ahora, en este día de la expiación, que es el cumplimiento del tipo
que era el otro (lo que está ocurriendo desde 1844), se ha restaurado la verdad acerca de los servicios del
santuario con su centro, que es el ministerio de nuestro Señor Jesucristo en el santuario celestial. La
palabra “vindicado” también nos lleva a las actividades que comenzaron en 1844 en el santuario celestial.
Por medio de lo que sucede en él, Dios aparece ante los mundos no caídos como un Ser justo y ecuánime.
Es interesante notar que los eruditos judíos que tradujeron antes del nacimiento de Cristo el Antiguo
Testamento del hebreo al griego (la Septuaginta), usaron la palabra “purificado” cuando llegaron al
nisdaq de Dan. 8:14. La raíz de nisdaq, a saber, sadaq y sus derivados, a menudo se relaciona en los
pasajes bíblicos con conocimiento de la Ley, con juicio y justicia (cc 2 Sam. 15:4; 1 Rey. 8:32; Deut.
25:1). En la literatura hebrea antigua a menudo se usaba esta palabra para referirse a temas judiciales (M.
Jastrow, A Dictionary of the Targumim, the Talmudic Babli and Yerushalmi, and the Midrashic Literature
[Un diccionario de la literatura del Targum, el Talmud Babli y de Jerusalén, y la Midrash], 1967, t. 2, p.
1.263). La palabra “purificado” da la idea de la obra de restauración final que lleva a cabo Cristo, nuestro
Sumo Sacerdote, en el santuario celestial.
1. ¿Cuál era el propósito central de los servicios del día de la expiación?

Respuesta:
a) Limpiar o purificar del pecado todo el campamento de Israel.
b) ________ al pueblo del pecado (Lev. 16:30).
c) Eliminar la __________ del santuario producida por los pecados del pueblo de Israel que
simbólicamente se transferían a él en el curso del año (Lev. 16:16).
El propósito central de las ceremonias era asegurar a los creyentes que la sangre de Cristo cubre por
completo los pecados confesados de los que habían aprovechado previamente los medios de perdón
disponibles. A los adoradoras se les decía: “Seréis limpios de todos vuestros pecados delante de Jehová”
(Lev. 16:30, 34). Para los judíos el día de la expiación era un día cuando “se le concedía perdón a todos
los que se arrepentían plenamente”. Se caracterizaba por las oraciones de confesión que se elevaban ese
día, una costumbre de origen muy antiguo (Encyclopaeddia Judaica, 1971, t. 5, cols. 1379, 1382).
Dios, por medio de estas ceremonias, declaraba que el pecador arrepentido estaba, en su amor, seguro de
que las acusaciones de Satanás no lo alcanzaban.
2. Se consideraba al día de la expiación con profunda solemnidad, ¿por qué?

Respuesta: Se lo consideraba un día de juicio. El tema del juicio se puede observar en varios
niveles.
a) Los que rechazaban los beneficios ofrecidos eran “____________” de la congregación (Lev.
23:29, 30).
b) Se enviaba al macho cabrío de Azazel a “tierra inhabitada”, es decir, al __________ (Lev.
16:21, 22).
Los judíos consideraban que el día de la expiación era “un día de juico y justicia” (Encyclopaedia
Judaica, 1971, t. 5, col. 1383). El sumo sacerdote usaba una túnica especial, incluido el “pectoral del
juicio” durante el servicio preliminar de ese día especial (Exo. 28:15). El Antiguo Testamento enseña con
toda claridad que el santuario es el lugar donde se origina el juicio. Los veredictos, tanto favorables como
desfavorables, se dictaban en las cercanías del tabernáculo (Núm. 11:16-30; 27:1-11; 16:50).
Cuando el sumo sacerdote salía del santuario terrenal en el día de la expiación, ya no había más
posibilidades de reconciliación (Lev.16:20; 23:29, 30). Esto impresionaba en las mentes de los israelitas
la idea de que “hoy” es el día de la salvación (Heb. 3:13; 4:7) y que Dios no contenderá para siempre con
los injustos. Destruirá totalmente el pecado y a los pecadores impenitentes (Nah. 1:8, 9; Apoc. 22:11).
La reconciliación
• Identificar los elementos básicos del ministerio divino para la reconciliación del mundo (vg. las
actividades de Jesucristo relativas al sacrificio, la mediación y el juicio).
• Indicar de qué manera cada uno de los elementos de la reconciliación aparece en las ceremonias del
santuario terrenal y especialmente en las del día de la expiación.
La palabra “reconciliación” –que en estos estudios la usamos como sinónimo de “expiación”– significa
“volver a la amistad o hacer que vuelvan a ser amigos dos o más personas que habían dejado de serlo
(Diccionario Océano, 1996, p. 1364). Aquí usamos esta palabra en el más amplio de sus sentidos.
Notamos que Dios no necesita cambiar. Es el pecador quien debe reconciliarse con él. En ocasión de la
segunda venida de Cristo los justos entrarán en una relación con el Señor similar a la que tenían Adán y
Eva en el principio; se los librará de la presencia del pecado, y podrán comunicarse otra vez cara a cara
con el Altísimo (1 Cor. 13:12; Apoc. 19:7). Cuando el pecado y los pecadores sea finalmente destruidos,
“la misma pulsación de armonía y de gozo (laterá) en toda la creación” (E.G. de White, El conflicto de los
siglos, 1975, p. 737).
3. ¿Fue el sacrificio de Cristo en el Calvario una ofrenda expiatoria plenamente suficiente?

Respuesta: Sí, por supuesto. Ese sacrificio fue suficiente “para ______ el mundo” (Rom. 5:18; 1
Juan 2:2).
Jesús murió en el Calvario por toda la humanidad. No se necesita otro sacrificio ya que no solamente fue
completo, sino que el Padre lo aceptó. Por eso al pecador arrepentido, por más vil que sea, se lo justifica
si acude al Redentor con fe genuina (Rom. 3:26). Este es el aspecto de la expiación que cumple Cristo por
nosotros como víctima ofrecida en sacrificio (expiación mediante un sacrificio). Este aspecto de la
expiación aparece en Lev. 17:11, de donde resulta sumamente claro que “la misma sangre es la que hace
expiación por la persona”. Sin derramamiento de sangre no hay expiación posible. Cristo se ofrece para
librarnos de las consecuencias del pecado. ¡Ojalá esta gloriosa verdad estuviera siempre delante de
nosotros!
4. ¿De qué manera la reconciliación efectuada por Cristo puede ser efectiva para nosotros?
Respuesta:
a) Si aceptamos el ofrecimiento de Cristo: “El que quiera, ______ gratuitamente del agua de la
vida” (Apoc. 22:17).
b) Por _______ en la luz (1 Juan 1:7).
Mientras el Señor no termine su ministerio en el santuario celestial, él sigue salvando hombres y mujeres.
Cristo murió en la cruz y proporcionó los medios para lograr nuestra salvación. Pero para salvarnos
tenemos que arrepentirnos, convertirnos a Dios y caminar diariamente por fe en el poder que él nos puede
dar (la justificación y la santificación necesarias). De esta manera se santifica el cristiano por medio de la
fe. Los beneficios del sacrificio expiatorio pasan así a ser propiedad de cada persona. Pablo nos informa
en Rom. 5:10 que “fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando
reconciliados, seremos salvos por su vida”. De esa manera Cristo aplica al creyente los beneficios de su
sacrificio (su sangre). Estos beneficios no se aplican a todos, sino sólo a los que aceptan su salvación
(Juan 5:40). Este es el aspecto de la expiación que se nos aplica por medio del ministerio de Cristo como
Sumo Sacerdote en el Cielo. La obra de reconciliación o expiación de Cristo prosigue en los tribunales del
Cielo. “Presenta su sangre (ante el Padre) en favor de los pecadores” (expiación intercesora con
elementos de mediación y de juicio - Heb. 4:16; Apoc. 3:5). Los pecados confesados por los santos
finalmente serán eliminados de los registros. “Así como los sacerdotes del santuario terrenal entraban una
vez en el año en el lugar santísimo para purificarlo, Jesús entró en el lugar santísimo del santuario
celestial al final de los 2.300 días de Dan. 8 en 1844, para llevar a cabo la expiación final en favor de
todos los que se pueden beneficiar por su mediación, y para purificar el santuario” (E.G. de White,
Spiritual Gifts [Dones espirituales], 1858, t. 1, p. 162).
“La expiación describe la obra que lleva a cabo Jesucristo, primero como sacrificio aquí en la tierra, y
después como Sumo Sacerdote en el Cielo, con el fin de poner al pecador en total armonía y unidad con
Dios. Abarca un período que comienza con la muerte de Cristo en la cruz donde se derramó la sangre
expiatoria, que continúa con su mediación como sacerdote en el santuario del Cielo, y que termina con su
obra mediadora final como Abogado nuestro en el lugar santísimo del santuario del Cielo, en el día
antitípico de la expiación, cuando por fin se eliminará el pecado. Después de eso completa su obra de unir
al hombre con Dios, regresa a la tierra ‘sin pecado para salvación’ a fin de recompensar ‘a cada cual de
acuerdo con sus obras’” (A.F.J. Kranz, Christ’s Complete Atonement [La completa expiación de Cristo],
pp. 22, 23).
5. ¿Cuándo serán completente purificados de los efectos del pecado los justos que habitan este mundo
caído?
Respuesta: En ocasión de la segunda venida del Señor nuestros cuerpos serán glorificados, es
decir, se revestirán “de ______________” (1 Cor. 15:51.54).
Cuando venga Cristo por segunda vez, se liberará a los justos de la presencia del pecado. Entonces la
muerte, que es la paga del pecado, desaparecerá.
6. ¿Cómo se enseñaban en el santuario terrenal estos aspectos más amplios de la reconciliación?

Respuesta:
a) Cada mañana y cada tarde se ofrecía un cordero en el atrio del santuario. Esos sacrificios se
hacían en favor de todos los hijos de ________ (Exo. 29:38-42). “La misma sangre (derramada)
hace ___________ por la persona” (Lev. 17:11).
b) En el ofrecimiento de un sacrificio por parte del penitente, vemos que la persona se apropia de
los beneficios de la reconciliación. El sacerdote que oficiaba (mediaba)en el primer
compartimento, “hará ___________ por el, y será ___________” (Lev. 4:31).
c) La eliminación final y completa de la presencia del pecado en el santuario (o de las
“___________” de los hijos de Israel), ocurría en el día de la expiación. El servicio se llevaba a
cabo en el lugar santísimo. Tipificaba la eliminación de los pecados de los justos de los registros
del Cielo en el juicio, y el traspaso a Satanás de la responsabilidad de todos los pecados
cometidos (Lev. 16:16-22).
Es interesante notar que el holocausto continuo se ofrecía incluso en el día de la expiación (Núm. 29:7-
11). Eso quería decir que incluso en el día del juicio Dios había hecho provisión para que el pecador
contrito pudiera recibir perdón. La sangre derramada de todos los sacrificios anunciaba el sacrificio de
Cristo (su sacrificio expiatorio). El sacerdote aplicaba la sangre en el santuario terrenal para dar a
entender que él estaba llevando el pecado del suplicante; esto volvía a ocurrir en el día de la expiación
(Lev. 4:26; 16:6). La ministración de la sangre anunciaba la obra mediadora de Cristo en el santuario
celestial (Heb. 8:6). Su relación con el juicio era el centro principal de las ceremonias del día de la
expiación. Analizaremos estos aspectos en la siguiente sección.
La eliminación del pecado y el juicio

• Concentrar nuestra atención en los aspectos judiciales (relacionados con el juicio) de las actividades
del día de la expiación en el santuario terrenal.
• Destacar el hecho de que hay una relación entre la eliminación de los pecados perdonados en el
santuario celestial, y el juicio que se lleva a cabo antes de la segunda venida de Cristo.
• Poner énfasis en el hecho de que mientras estemos en Cristo, no habrá condenación para nosotros.
En el día de la expiación se determinaba el destino del pueblo (Lev. 23:28-30). Ese era el momento
cuando el sumo sacerdote hacía una intercesión final en favor de los que se habían arrepentido de sus
pecados y se habían identificado con el pueblo de Dios (mediante un servicio especial se eliminaba del
santuario el registro de los pecados confesados); se juzgaba como indignos a los que no apreciaban su
salvación, o consideraban con menosprecio los planes del Señor. Estas actividades terrenales tenían su
contrapartida en el santuario celestial. El destino de los justos y los impíos quedará irreversiblemente
decidido antes de la resurrección y la segunda venida del Señor. Esto corresponde también con lo que
ocurre en los tribunales de esta tierra, donde una investigación (juicio de instrucción) precede al veredicto
final, que se hace público. Cristo afirma con toda claridad que cuando venga traerá sus galardones
(recompensas - Apoc. 22:12).
7. ¿Qué enseñan los servicios del día de la expiación en cuanto a la seguridad de la salvación?
Respuesta: El sentimiento de culpa provocado por el pecado desaparecía de la persona en cuanto
ésta lo confesaba (justificación individual). El registro de los pecados confesados lo transfería el
sacerdote simbólicamente al santuario, y allí permanecía hasta que el registro acumulado de los
pecados perdonados se eliminaba del santuario en ocasión del juicio. El sumo sacerdote
confesaba todos los pecados del pueblo, y los “________ sobre la cabeza del macho cabrío vivo”
(Lev. 16:21, 34).
En ocasiones específicas se transfería simbólicamente al santuario el registro de los pecados perdonados

(por ejemplo: los pecados cometidos sin intención). El sacerdote hacía una de dos cosas: tomaba la sangre
de la víctima y hacía expiación rociándola delante del Señor, o comía una porción de la carne para dar a
entender que él llevaba los pecaos en lugar del pecador (Lev. 4:6, 7, 17, 18; 6:30; 7:1-6; 10:17, 18). Sin
embargo, el registro de esos pecados perdonados permanecía en el santuario hasta el día de la expiación o
reconciliación (Lev. 16:21). Este registro en realidad era un recuento de las veces en que el creyente había
ejercido fe en el perdón de Cristo, y la aceptación de esa fe por parte del Señor, aceptación que cancelaba
esos pecados (Rom. 3:24; 1 Juan 1:9). El juicio es el momento cuando los registros de los pecados
perdonados de los justos deja de existir, lo que está simbolizado por su eliminación del santuario. De esa
manera se le aseguraba al creyente que Dios es fiel (Exo. 34:6, 7; A.R. Treiyer, El día de la expiación con
respecto a la contaminación y la purificación del santuario, citado por F.B. Holbrook, editor, The Seventy
Weeks, Leviticus and the Nature of Prophecy [Las setenta semanas, Levítico y la naturaleza de la
profecía], 1986, pp. 228, 229).
8. ¿Dicen algo las Escrituras acerca de la eliminación de los pecados perdonados en el juicio investigador
previo al advenimiento?
Respuesta:
a) La Biblia habla acerca de los nombres que serán eliminados del libro de la ______ (Exo. 32:33;
Apoc. 3:5; 22:19). El santuario terrenal nos enseña que los pecados perdonados se eliminan en el
juicio (Lev. 16:16, 21).
b) El Dr. Lucas escribió acerca de la conversión, el acto de borrar los pecados, los tiempos del
refrigerio y la venida del Señor. Ubica el acto de borrar los pecados en las proximidades de la
lluvia tardía y de la venida del Señor (Hech. 3:19, 20).
Las Escrituras se refieren a menudo a los libros de registro. Contienen el registro de los hechos y las
actitudes de hombres y mujeres. Los ángeles abren los libros para analizarlos en ocasión del juicio
investigador (Dan 7:9, 10). Por lo tanto, representan algo más que la memoria de Dios. La eliminación de
los nombres del libro de la vida se basa en los registros contenidos en ellos. Implican estas preguntas:
“¿Qué cree usted acerca de Cristo? ¿Ha buscado comprensión y perdón, y ha obtenido la victoria sobre
cada pecado? (Véase Eze. 18:24; Apoc. 21:27). Si la respuesta es positiva, el nombre queda en los
registros del libro; si es negativa, con seguridad el nombre será eliminado (Apoc. 21:27). Cristo, nuestro
Sumo Sacerdote, presenta su sangre en favor de los pecadores arrepentidos. Nuestros nombres o nuestros
pecados perdonados, uno de los dos, serán eliminados en el juicio investigador (1 Tim. 5:24; véase el
APÉNDICE). En “la final expiación, los pecados de los verdaderamente arrepentidos serán eliminados de
los registros del Cielo (E.G. de White, Early Writings [Primeros escritos], 1945, p.253).
El apóstol Pablo discutió con Félix acerca de un juicio venidero, es decir, que debía ocurrir en el futuro
(Hech. 4:25). Indicó que vendría después de una terrible apostasía (2 Tes. 2:3). El tiempo sugerido estaba
en el futuro distante. El apóstol Pedro ubicó el tiempo de la eliminación de los pecados en un momento
previo a la venida de Cristo en gloria (Hech. 3:19-21).
9. ¿Quiénes tendrán que comparecer en el juicio previo al advenimiento?

Respuesta: Los que han hecho profesión de fe en Cristo, y tienen sus nombres escritos en el libro
de la vida. Notamos que el juicio comienza con la ______ de Dios, es decir, la iglesia (1 Ped.
4:17; 1 Tim. 3:15).
10. ¿Contradice la doctrina de la justificación la obra del juicio investigador?

Respuesta: ¡No!
La idea de vivir una vida de fe sin las obras correspondientes es una proposición que carece de base. El
apóstol Santiago declara enfáticamente que la fe sin obras es realmente una evidencia de que ésta no
existe (Sant. 2:14-17; I.T. Blazen, La justificación y el juicio, citado por F.B. Holbrook, Op. Cit., pp. 339-
368). Por lo tanto, no debería sorprender a nadie que la fe de alguien sea juzgada por los hechos que se
observan en la vida de esa persona (Gál. 6:7).
11. ¿Están sujetos a examen en el juicio investigador los pecados que ya han sido perdonados?
Respuesta:
a) La Biblia indica que los pecados perdonados de los justos se encuentran todavía en los
registros, pero con el perdón de Dios estampado sobre ellos (1 Juan 1:9; Sal. 32:1, 2; Mat. 10:26).
Las Escrituras nos informan claramente que toda obra y todo pensamiento serán examinados en el
juicio, “sea ______ o sea ______” (Ecl. 12:14).
b) El justo que pierde su confianza en Dios tendrá que enfrentar el registro completo de su vida, y
“ninguna de las justicias que hizo le serán ________ ___ _______” (Mat. 18:32-34; Eze. 18:24-
26).
Nuestro texto del Eclesiastés declara enfáticamente que todo acto, bueno o malo, se tomará en
consideración. De esto se deduce de que debe haber un registro bien completo, una conclusión avalada
ampliamente por las Escrituras (Mat. 16:32, 37; Rom. 2:16; 1 Cor. 4:5). Cuando la Biblia dice que los
pecados perdonados no se recordarán más, que serán arrojados a las profundidades del mar o colocados
tan lejos como está el oriente del occidente (Jer. 31:34; Miq. 7:19; Sal. 103:2), no necesariamente quiere
decir que no se llevan registros de los pecados perdonados. Estas declaraciones son más bien afirmaciones
que destacan la abundancia del perdón ofrecido. Se dice que nuestros pecados han sido echados tras las
espaldas de Dios (Isa 38:17). No podemos sostener con lógica que los pecados estén ubicados
simultáneamente tras las espaldas de Dios, o tan lejos como está el Oriente del Occidente. Son
expresiones que nos aseguran que mientras estemos en Cristo no estamos bajo condenación.
Cuando confesamos nuestros pecados, el perdón de Dios es completo y éstos han sido eliminados (Rom.
3:19, 20; Heb. 10:22; 1 Juan 1:9). Nuestros pecados han sido perdonados o “cubiertos” (Sal. 32:1). Uno
de los significados básicos de la palabra hebrea que se usa aquí, y que se ha traducido por “cubiertos”, es
“ocultar”. El pecado perdonado es un pecado cubierto, oculto (Sal. 85:2; Rom. 4:7). En otras palabras,
nuestros pecados perdonados están escondidos por los méritos de la sangre de Cristo (Col. 3:3). “La
palabra perdón ha sido anotada en los libros del Cielo junto a los nombres de todos los que realmente se
han arrepentido de sus pecados, y por fe han invocado la sangre de Cristo como su sacrificio expiatorio,
ya que han llegado a ser participantes de la justicia de Cristo, y se ha verificado que sus caracteres están
en armonía con la Ley de Dios; en este caso sus pecados serán borrados, y ellos mismos serán
considerados dignos de la vida eterna” (E.G. de White, The Faith I Live By [La fe por la cual vivo], 1958,
p. 212). Si después rechazamos al Salvador, nos responsabilizamos por nuestros propios pecados (Mat.
18:32-34). Se nos informa que toda cosa secreta, los pensamientos y toda palabra ociosa, pasará en revista
delante de Dios (Ecl. 12:14; Mat. 12:36; Rom. 2:16; 1 Cor. 4:5).
La escena del juicio en el Cielo y la norma que se usa

• Dar algunos detalles acerca del juicio previo al advenimiento tal como los revelan las Escrituras.
• Señalar el hecho de que la norma que se usa en el juicio es la Ley de Dios (una transcripción de su
carácter). La pregunta que implica es: “¿Qué has hecho tú con Cristo?”
12. ¿A quién se ve aproximándose al Padre para mediar ante él en el juicio previo al advenimiento?
Respuesta: A Jesucristo, el Hijo del ________ (Dan.7:9, 10,13; Apoc. 3:5).
En su papel de Sumo Sacerdote, Cristo es nuestro Mediador ante el Padre (1 Tim. 2:5; Heb. 7:25; 1 Juan
2:1; Mat. 10:32, 33). En otras palabras, Cristo defiende el caso de los que verdaderamente creen en él o,
lo que es lo mismo, los representa y hace una expiación definitiva en favor de ellos ante el Padre (Gén.
18:25; Mat. 10:32; Hech. 10:42). “El divino Intercesor aboga porque a todos los que han vencido por la fe
en su sangre se les perdonen sus transgresiones, a fin de que sean restablecidos en su morada edénica y
coronados con él coherederos del ‘señorío primero’” (Miq. 4:8) (E.G. de White, El conflicto de los siglos,
1975, pp. 537, 538; Apoc. 3:5).
El papel de nuestro divino Intercesor aparece con caracteres muy definidos en la historia de Josué y el
Ángel (Zac. 3:1-5; E.G. de White, Testimonies, 1948, t. 5, pp. 472-474). En este caso Cristo obra como
“el juez” que pronuncia sentencia (Juan 5:22; L. Hardinge, With Jesus in His Sanctuary [Con Jesús en su
santuario], 1991, pp. 472-474), como el que defiende a los verdaderos creyentes de las acusaciones de
Satanás frente a las huestes del Cielo. El “Ángel” es Jesucristo (Gén. 32:24, 30; Jos. 5:13, 15; Os. 12:4, 5;
cc Juan 1:18; Apoc. 19:10). Presenta su sangre en favor de nosotros ante el Padre, el “Juez presidente”
(Dan. 7:9, 10). Esta obra de intercesión continúa hasta el momento cuando se despoja de sus atuendos
sacerdotales.
Entonces se lo corona Rey y también da a conocer las decisiones del juicio en ocasión de su venida (Dan.
7:14; Mat. 16:27). La ejecución del juicio sobre los impíos por parte de Cristo ocurre al final del milenio
(Juan 5:22, 27; Apoc. 20:6-10). En ese momento rige a las naciones con “vara de hierro” (Apoc. 19:15).
13. ¿Qué papel desempeña el Padre en el juicio previo a la segunda venida?

Respuesta: El Padre es el presidente del juicio. La Escritura dice que “se _______” (Dan. 7:9,
10).
Las palabras “fueron puestos”, referidas a los tronos, indican que lo que se está describiendo es el
comienzo de un juicio solemne y sobrecogedor, del cual participan todas las huestes celestiales. Cristo ha
prometido confesar ante el Padre y los santos ángeles los nombres de todos los que han vivido en
comunión con él (Apoc. 3:5). Ha prometido ser nuestro Mediador. Cuán importante es, por lo tanto, para
los seres humanos, estar al tanto de los acontecimientos que en este mismo momento se están
desarrollando en el tribunal celestial. El Espíritu Santo también participa del juicio en el sentido de que
expresa la profundidad de lo que los creyentes sienten por Cristo (Rom. 8:26). ¡Todo el Cielo está
implicado en nuestra salvación!
14. ¿Cuál es la norma del juicio previo al advenimiento?

Respuesta: La Ley de _________ (Sant. 2:12; Ecl. 12:13, 14).
La Ley de Dios nos muestra la senda de la libertad, porque señala al Salvador que dio la Ley. Es un
trasunto del carácter de Dios y muestra con claridad las imperfecciones de nuestro carácter así como un
espejo muestra la verdadera condición de la persona que se mira en él (Sant. 1:22-24). La Ley no tiene
poder en sí misma para cambiarnos, pero Cristo nos proporciona a la vez libertad del sentimiento de culpa
y del poder del pecado. En consecuencia, el creyente está libre del acoso del pecado y logra una libertad
muy excelsa. Jesús dijo: “El que me ama, mi palabra guardará” (Juan 14:23).
15. ¿Qué lecciones nos enseña el santuario terrenal acerca del juicio investigador previo al advenimiento
y la norma que se usará en ese juicio?
Respuesta:
a)El sumo sacerdote o mediador entre Dios y los hombres también representaba a ________
(Heb. 9:6, 7, 11, 12).
Cristo, nuestro Sumo Sacerdote, también es Mediador así como lo era el sumo sacerdote terrenal (Heb.
8:6). En el santuario terrenal el sumo sacerdote actuaba como mediador de los que participaban
plenamente de las actividades del día de la expiación (Lev. 16:16, 17). En el santuario celestial Cristo
asume la tarea de “confesar” o representar delante del Padre celestial a los cristianos que viven en
comunión con él. A los que lo niegan, los considera indignos de representación ante el tribunal (Mat.
19:32, 33).
b) Los aspectos más importantes de los servicios del día de la expiación (día del juicio) se
llevaban a cabo en el lugar santísimo, delante del arca del pacto que contenía las ________ de la
Ley ((Lev. 16:12-14; Exo. 25:16; 31:18).
La obediencia a la voluntad revelada de Dios (resumida en su Ley) es la norma que se usa en ese juicio
(Juan 14:15; Heb. 5:9). Dios le ha proporcionado fuerzas a la humanidad, en todas las épocas, para que
gane la victoria sobre el pecado. Los principios de su reino son justos, porque el proporciona los medios
por los cuales esos principios se pueden obedecer (Heb. 2:4; Rom. 4:13; 1 Cor. 10:13).
El propósito del juicio

• Destacar el hecho de que el juicio que se lleva a cabo en el Cielo antes del advenimiento, coincide
con la gran invitación de Dios a todos los pueblos de la tierra para que acepten la salvación.
• Resumir las funciones del juicio previo al advenimiento para todos los habitantes del universo.
16. Necesita Dios de un juicio especial a fin de determinar quién es justo y quién no lo es?
Respuesta: Las Escrituras dicen: “________ el Señor a los que son suyos” (2 Tim. 2:19).
Dios conoce los secretos de la mente, y sabe qué curso va a tomar la vida de cada persona (Sal. 42:21;
94:11). Como ejemplo de esto podemos citar el caso de Ciro. Siglo y medio antes de su nacimiento, la
Biblia anunció lo que iba a hacer (Isa. 44:28; 45:1-3). Al disponer de la capacidad de conocer el futuro, es
evidente que Dios no necesita de un juicio para decidir quiénes son sus siervos (1 Ped. 1:2). Sin embrago,
la Biblia nos habla de un juicio investigador previo al advenimiento que se llevaría a cabo cerca del fin de
la historia de esta tierra. Es más, descubrimos que las Escrituras nos dicen que Dios investiga antes de
dictar sentencia, aunque cada detalle del caso sea totalmente conocido para él (cc Gén. 11:5; 18:21). Este
principio se estableció por primera vez en el Edén y está ilustrado por una cantidad de casos en las
Escrituras (Gén. 3:8-19). Por ejemplo, el Señor estaba perfectamente al tanto de la maldad de Sodoma y
Gomorra, y sin embargo él personalmente investigó (juicio investigador) y conversó con Abrahán acerca
de lo que quería hacer con esas ciudades. Abrahán entendió entonces que los tratos de Dios son claros y
justos. Este incidente está registrado para nuestro beneficio, de manera que podamos apreciar más
ampliamente la naturaleza del juicio investigador que se está llevando a cabo hoy.
17. ¿Qué obra especial se lleva a cabo en la tierra con respeto al juicio del Cielo?
Respuesta: El juicio está relacionado con la predicación en todo el mundo del __________
eterno en su totalidad (Apoc. 14:6, 7).
Si comprendemos el mensaje del primer ángel, también comprenderemos la doctrina del santuario (Dan.
8:11-14). El “cuerno pequeño” (la Iglesia Católica) y su cómplice (el protestantismo apóstata) han
oscurecido las verdades de la Palabra de Dios, en especial las que tienen que ver con el santuario. Se nos
asegura que “se sentará el Juez (habrá un juicio), y le quitarán su dominio” (Dan. 7:26). El “dominio” o
control de esos poderes será quebrantado durante el juicio, por las claras y seguras verdades de la Palabra
de Dios. La gran invitación, cada vez más potente, que resonará por todo el planeta, se basa en las seguras
enseñanzas de la Biblia. El clamor es: “¡Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus
pecados ni recibáis parte de sus plagas!” (Apoc. 18:4). Dios no quiere que nadie perezca en sus pecados.
¡Ésta es la última invitación de Dios a un mundo destinado a la destrucción!
18. ¿Cuáles son las funciones del juicio investigador previo al advenimiento?
Respuesta:
a) El conocimiento de las funciones del juicio investigador fomenta una relación más íntima y
significativa entre Cristo y sus discípulos como preparación para su venida. La oración de Jesús
era que sus discípulos fueran “_____ con nosotros” (Juan 17:11, 21, 22; Joel 2:27-29).
El anuncio del comienzo del juicio implica que Cristo está por volver. Y que los que lo recibirán en paz
tienen una obra que hacer en la viña del Señor (Apoc. 14:7, 14-16). La parábola de las diez vírgenes nos
enseña que el desarrollo de una íntima relación con Cristo es la preparación que cada cual debe llevar a
cabo antes de que venga el novio (Mat. 25:1-10). En la parábola de la cena de bodas se examina
previamente a los invitaos para determinar si merecen estar allí, es decir, si tienen el vestido de boda (la
justicia de Cristo - Mat. 22:1-13). En la preparación que se describe aquí participaron los discípulos antes
del pentecostés. El “juicio unirá al pueblo, esa unidad a la cual se refirió Cristo entes de ir a la cruz”
(C.M. Maxwell, God Cares [Dios se preocupa], 1985, t. 2, p. 352; Juan 17:20-22). La necesidad de esta
unidad resulta evidente cuando consideramos la experiencia por la que tendrán que pasar los que vivan en
el tiempo del juicio (Apoc. 7:13-15; 13:14-17). El santuario terrenal enseñaba esta obra de purificación de
la vida (Lev. 16:30). Una obra similar se necesita hoy en el día antitípico de la expiación.
b) El juicio también funciona para que el mundo y el universo entero dispongan de la más clara
demostración de que la Ley, es decir, los ______________ no fueron abolidos en la cruz, y que
por la fe se los puede guardar.
Al fracasar en sus acusaciones contra Dios, Satanás fue derrotado y el Señor fue vindicado en la cruz
gracias al maravilloso despliegue de la naturaleza insuperable de la misericordia y la justicia (la Ley) de
Dios (Juan 12: 31-33; E.G. de White, Faith and Works [Fe y obras], 1979, pp. 118, 119). Ahora está
tentando a todo el mundo para que crea que la Ley de Dios fue abolida en la cruz. La pregunta que se hizo
antaño todavía resuena con todo su poder: “¿Qué pensáis de Cristo?” (Mat. 22:42). Frente al decreto de
muerte que pende sobre los que creen plenamente en los méritos de Cristo y el llamado a la obediencia,
Jesús le presenta un pueblo fiel tanto al mundo como al universo (Apoc. 13:15-17; 14:4, 5, 12; E.G. de
White, That I May Know Him [A fin de conocerle], 1964, p. 292). “Dios tendrá un pueblo puro en la tierra
el cual, porque le ha permitido a Dios que lo purifique de todo pecado, le da gloria y honor. Al mismo
tiempo Dios será glorificado en el Cielo cuando el santuario sea purificado durante el juicio” (C.
Goldstein, False Balances [Equilibrios inestables}, 1992, p. 125).
También Dios queda vindicado por medio de su pueblo hoy de la misma manera como lo fue en la
antigüedad (ej. Elías - 1 Rey. 18). Ezequiel registra lo siguiente: “Por tanto, di a la casa de Israel: Así ha
dicho Jehová, el Señor: No lo hago por vosotros, casa de Israel, sino por causa de mi santo nombre, el
cual profanasteis vosotros entre las naciones adonde habéis llegado. Santificaré mi gran nombre,
profanado entre las naciones, el cual profanasteis vosotros en medio de ellas, dice Jehová, el Señor,
cuando sea santificado en vosotros delante de sus ojos” (Eze. 36:23, 24, el énfasis ha sido añadido). Y
el profeta explica como se producirá esa vindicación: “Esparciré sobre vosotros agua limpia y seréis
purificados de todas vuestras impurezas, y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré un corazón nuevo
y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros. Quitaré de vosotros el corazón de piedra y os daré un
corazón de carne. Pondré dentro de vosotros mi espíritu, y haré que andéis en mis estatutos y que guardéis
mis preceptos y los pongáis por obra” (Eze. 36:25-27).
c) El juicio investigador del santuario celestial es la etapa final de la obra expiatoria de Cristo
como Sumo Sacerdote. El santuario sera “____________” (Dan. 8:14; Lev. 16:17, 20-22). ¡Cristo
está a punto de regresar triunfante!
El tiempo dedicado al juicio investigados es un momento de escrutinio, un momento para acercarse a

Dios, un momento para desechar todo pecado que nos asedie, y un momento para compartir con fervor el
evangelio. Cuando Dios termine la obra de santificar a su pueblo, la purificación puede terminar en el
santuario celestial. Se repasa la vida de todos los que profesan ser seguidores de Cristo, y se conservan en
el libro de la vida los nombres de los justos, o sea, los que andan continuamente por fe. Se elimina de los
libros y del santuario el registro de los pecados confesados y perdonados. Jesús presenta su sangre en
favor de los que pecaron inconscientemente (Heb. 9:7-11). Las justas demandas de la Ley quedan
completamente satisfechas por la misericordia de Dios. El tipo y en antitipo se encuentran. El gran
acontecimiento que sigue es la recepción del reino por parte de Cristo en ocasión de su venida a esta tierra
en triunfo para reunir a sus santos.
d) El juicio demuestra ante todas las huestes del Cielo que Dios es justo. La pregunta implícita es:
“El ______ de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es ______?” (Gén. 18:21, 23-33).
El juicio tiene repercusiones cósmicas porque lo que sucede en la tierra está relacionado con lo que
sucede en el Cielo. La restauración o purificación del santuario celestial anula los ataques del “cuerno
pequeño” tal como aparecen en Daniel 8, porque demuestra ante todos que Dios tiene en la tierra un
pueblo que guarda “los mandamientos de Dios y la fe de Jesús” (Apoc. 14:12).
Las inteligencias de los otros mundos están observando en conjunto y con profundo interés los asuntos de
la humanidad (1 Cor. 4:9). Dios le está mostrando al universo entero el carácter veraz de sus caminos
(Rom. 3:4; Fil. 2:10, 11; Apoc. 19:2, 11). La eterna seguridad del cosmos depende de que sus habitantes
crean que Dios es lo que dice ser. El juicio, además, vindica el carácter y el gobierno del Señor. Cuando el
plan de salvación esté completo, y el pecado y la rebelión hayan desaparecido, Dios quedará plenamente
vindicado ante el universo (Apoc. 15:3-5; E.G. de White, Testimonies to Ministers [Testimonios para
ministros], 1962, p. 433, en inglés). “Él (el juicio) restaura el ejercicio de la justicia en el universo”
(Comisión Revisora del Tema del Santuario, 1980, 1989. Cristo en el Santuario Celestial (documento
aprobado por consenso), p. 233, citado por F.B. Holbrook, editor, en Doctrine of the Sanctuary: a
Historical Survey [La doctrina del santuario: un repaso histórico], 1845-1863). El clamor resuena por
doquier: “¡Señor Dios Todopoderoso, tus juicios son verdaderos y justos!” (Apoc. 16:7).
e) El veredicto del juicio es una declaración “en ______ de los santos del Altísimo” (Dan. 7:22;
12:1).
El juicio se proclama en favor de los que lo sacrificaron todo por el Maestro y se opusieron el “cuerno
pequeño” y a los que lo apoyaron (Dan. 7:26). El anuncio de que el juicio ya está en marcha (Apoc. 14:7)
es una declaración en el sentido de que el triunfo de los santos está por cumplirse. El juicio es buenas
nuevas para todos los creyentes que están en Cristo (Sal. 7:8-11; 26:1-5; 43:1, 2).
El destino de todos, justos o injustos, se fija antes de la venida del Señor (Apoc. 22:12). La resurrección
de los justos y la transformación de los justos vivos son recompensas que dependen de juicios previos.
Las Escrituras dicen con mucha claridad que no todos los muertos resucitarán en ocasión de la segunda
venida de Cristo (Apoc. 20:5). Los que no resuciten entonces sufrirán de eterna perdición (v. 6). Hagamos
planes de encontrarnos entre los que cantarán: “¡Aleluya! Salvación, honra, gloria y poder son del Señor
Dios nuestro” (Apoc. 19:1).
1. a) limpiar b) impureza
2. a) eliminados b) desierto
3. todo
4. a) tome b) andar
5. incorrupción
6. a) Israel; expiación b) expiación; perdonado c) impurezas
7. pondrá
8. vida
9. casa
10. ---
11. a) buena; mala b) tenidas en cuenta
12. hombre
13. sentó
14. libertad
15. a) Cristo b) tablas
16. Conoce
17. evangelio
18. a) uno b) mandamiento c) purificado d) Juez; justo e) favor.
APÉNDICE
CÓMO OBRA DIOS FRENTE AL PECADO
El santuario terrenal nos da una comprensión muy clara respecto de cómo obra Dios frente al pecado. La
entrada del pecado en el universo produjo la culpa (Gén. 3:8; Rom. 3:19, 20). Dios proveyó los medios
necesarios para que los hombres y mujeres pudieran librarse de la condenación y salvarse. No sólo se le
ofreció la salvación a los seres humanos, sino que todo el universo sería protegido del problema del
pecado, ya que no se levantará otra vez (Nah. 1:9). Es importante notar desde el mismo principio que en
las Escrituras el perdón del pecado no es lo mismo que la eliminación del pecado (Neh. 4:5; Jer. 18:23).
Sigamos las etapas del plan de Dios:
1. Se elimina la condenación del pecador (el sentimiento de culpa) cuando éste confiesa sus
pecados. Cuando el pecador ponía las manos sobre la cabeza de la víctima durante la antigua
dispensación, quería decir que el peso del pecado se transfería al portador del pecado (quiere
decir que el pecador depende totalmente de Cristo; Lev. 4; Isa. 53:4, 5). El pecador, gracias a la
confesión, estaba cubierto, lavado, purificado, es decir, justificado. Lo mismo ocurre hoy. El
creyente arrepentido está libre de una mala conciencia (Heb. 10:22). La seguridad de la salvación
ocupa el lugar del sentimiento de culpa; no hay más condenación (Mat. 11:28; Rom. 8:1).
2. La transferencia al santuario del registro de los pecados perdonados. La expiación del

pecado en el santuario terrenal implicaba el ministerio del sacerdote que tomaba la sangre de la
víctima y la asperjaba en el lugar santo (a veces comía parte de la carne en ese lugar). De este
modo el registro de los pecados confesados del arrepentido (transacción por fe), junto con el
registro de los perdones concedidos por Cristo, quedaban registrados en los cuernos del altar del
incienso delante del velo (Lev. 4:20, 26, 31, 35; 6:25, 26, 29; 10:17). En el resto de las Escrituras
se nos habla acerca de que los hechos, pensamientos y palabras de todos los hombres estarán a
disposición de Dios en ocasión del juicio (Ecl. 12:13, 14; Mat. 12:36, 37; Rom. 2:6; 1 Cor. 4:5).
Se nos dice que los pecados confesados de los juntos van de antemano al juicio (1 Tim. 5:24). En
efecto, nada se puede ocultar (Luc. 12:2); esto incluye también nuestros pecados cubiertos por los
méritos de Cristo (Sal. 32:1, 2; Mat. 10:26). Los que no siguen a Cristo hasta el fin tendrán que
soportar el castigo que merecen todos sus pecados, porque negaron el principio sobre el cual se
funda el perdón de los pecados, a saber, fe en Jesucristo (Mat. 18:32-34).
3. Se elimina del santuario el registro de los pecados. En el día de la expiación se purificada el

santuario y se borraban los pecados confesados. En ese día no se confesaban pecados sobre la
cabeza del macho cabrío del Señor, su sangre se asperjaba sobre el arca del pacto y delante de ella
(en el lugar santísimo), con lo que se daba a entender que los méritos de la sangre de Cristo
satisfacían plenamente las demandas de la Ley de Dios: las tablas que se encontraban dentro del
arca (Lev.16:15). Mediante esta ceremonia se llevaba a cabo una expiación definitiva por los
pecados que el pueblo había cometido sin saberlo (Lev. 16:16, 20, 33); Heb. 9:7). El registro de
los pecados perdonados dejaba de existir porque la misericordia y la justicia estaban satisfechas
(Sal. 85:9, 10). En Daniel 8:14 se habla de la purificación del Santuario. Los acontecimientos
finales de ese día antitípico de la expiación que incluyen la eliminación de los pecados
confesados, según el Dr. Lucas están relacionados con los acontecimientos de los últimos días
(Hech. 3:19, 20).
4. Se deposita sobre Satanás la responsabilidad del pecado. En la dispensación del antiguo

pacto, el último acto del drama de la salvación en el día de la expiación era poner los pecados
confesados por el pueblo sobre la cabeza del macho cabrío de Azazel, que representaba a Satanás.
No se derramaba la sangre de este macho cabrío (se lo llevaba al desierto para que pereciera; Lev.
17:11), por lo tanto no era salvador. Por medio de los símbolos de los servicios del santuario se
daba a entender que los pecados cometidos por el pueblo, pero que Satanás había inducido a
cometer, ahora se cargaban a su cuenta, y de este modo se restablecía la armonía y se lograba la
reconciliación (Lev. 16:7-10). En Satanás se originó el pecado y él es quien nos tienta a pecar
(Juan 8:44; Rom. 6:16; 1 Juan 3:8), por lo tanto, él tiene responsabilidad por su parte en la
comisión de pecados (Sal. 7:16; Zac. 3:1-4). La Escritura nos dice que Satanás será arrojado a un
lago de fuego cuando llegue el fin del reino del pecado (Eze. 28:18; Apoc. 20:10). En ningún
momento derramó su sangre Satanás; por lo tanto, no puede expiar nada ni salvar a nadie (Lev.
17:11; Heb. 9:22; 1 Juan 1:7).
No todos los detalles de la forma como ha tratado Dios el pecado se podían simbolizar mediante los
servicios del santuario. Notamos que no existe símbolo alguno en el santuario terrenal para representar el
hecho de que los pecados confesados de los ex creyentes recaen sobre sus cabezas. Tampoco hay nada
para representar la manera como Dios trata los pecados que, aunque hayan sido confesados, no han sido
abandonados. Pero hay muchos textos de la Escritura que nos dicen cómo trata Dios esos casos. Le
aconsejamos al lector examinar los siguientes textos: Mat. 18:32-34; los pecados confesados recaen sobre
las cabezas de los que se apartan de Dios; Isa. 1:11-15; Jer. 6:20; Miq. 6:6-8; 1 Sam. 15:22; Mat. 5:24;
Luc. 18:11-14. Los sacrificios de los que no se arrepentían de verdad no iban acompañados de perdón;
Gén. 27:38-41; Os. 8:13; Mat. 24:4, 5; Hech. 12:16, 17. El pecado confesado pero no abandonado no
recibe perdón.
12. EL TEMPLO SE LLENÓ DE HUMO
Los caminos del Señor ciertamente se revelan en el santuario. Cuando se perdió el carácter sagrado del
santuario terrenal, el foco de la atención se dirigió al santuario celestial. Juan el Revelador, que escribió
entre los años 95 y 96 d.C., registra una cantidad de asuntos relacionados con el santuario celestial. Tal
vez una de las más significativas aparece en Apoc. 15:6 y 8 donde se nos dice que los ángeles de Dios,
hacia fines de la historia de este mundo, salen del templo celestial para derramar las siete plagas. En ese
momento el templo se llena de humo y nadie más puede entrar allí. El día de oportunidad para la
salvación del hombre ya habrá pasado. Intentaremos concentrarnos en esos eventos en esta lección.
En la anterior estudiamos el servicio del día de la expiación, en especial lo que se relaciona con la
eliminación del santuario de los registros de los pecados confesados por los justos. Dijimos que el día
antitípico de la expiación comenzó en 1844 y sigue sesionando. Terminará pronto, en algún momento que
desconocemos. Las Escrituras describen más o menos detalladamente este juicio previo al advenimiento.
También nos dan información vital acerca del fin del tiempo de gracia de los humanos aquí en esta tierra.
Cuando Jesús venga traerá sus recompensas. En esta lección también vamos a examinar algunos aspectos
del juicio previo al advenimiento, en especial en lo que respecta a los que profesan ser siervos de Cristo.
Vamos a estudiar asimismo el tema del fin del tiempo de prueba, y los acontecimientos que se producirán
aquí en la tierra y en el Cielo durante los mil años que le seguirán al fin del tiempo de gracia.
Todos los cristianos serán juzgados antes de la venida de Cristo

• Poner énfasis en el hecho de que Jesús viene por segunda vez con sus recompensas. A todos los
habitantes de la tierra se los tomará en cuenta en el juicio.
• Recordar que en ocasión de la segunda venida de Cristo habrá sólo dos clases de personas: los justos
y los impíos.
El tema del juicio en general aparece con frecuencia en la Biblia. En cierto sentido los que no han
aceptado a Cristo como su Salvador personal ya han decidido su destino. Las Escrituras se refieren
definidamente al juicio de los que pretenden ser cristianos.
1. Cuando Cristo venga por segunda vez a esta tierra, ¿cuántas clases de personas habrá?
Respuesta: Sólo _____ (Apoc. 14:11, 12).
Desde el Génesis hasta el Apocalipsis el Señor reconoce sólo dos clases de personas: los justos y los
impíos, el trigo y la cizaña, el trigo y la paja, los salvados y los perdidos, las ovejas y los cabritos, los que
estarán a la derecha de Cristo, y lo que estarán a su izquierda.
2. ¿Cuántas clases de cosechas se mencionan en la Biblia?

Respuesta: Las siguientes dos cosechas:
a) La cosecha de la ______ representa a los justos (Apoc. 14:15, 16).
b) La cosecha de las ______ representa a los impíos (Apoc. 14:18, 19).
Los contemporáneos de Juan entendían muy bien los símbolos que se usan en Apoc. 14 acerca de las dos
cosechas. En Palestina había dos grandes cosechas: la del trigo (mies) entre abril y mayo, y la de las uvas
hacia fines del verano. Los versículos 15 y 16 se refieren sin duda a la cosecha del trigo, puesto que la
expresión traducida como “está madura” proviene de una palabra griega que significa “está seca”, y que
se usaba para referirse a la cosecha de cereales. La cosecha de las uvas se refiere a los impíos. Son los que
recibirán la ira de Dios. Un concepto similar a éste se enseña en la parábola del trigo y la cizaña. Los
siervos de Dios atan la cizaña para arrojarla al fuego y en cambio juntan el trigo (Mat. 13:30).
3. ¿Qué representa una mujer en la profecía bíblica?
Respuesta:
a) Una mujer virtuosa (una ________) o una mujer vestida de blanco simboliza a una iglesia pura
(2 Cor. 11:2; Sal. 51:7; Isa. 1:18; Apoc. 12:1, 2).
b) Una mujer vestida de púrpura y escarlata (una prostituta, o una mujer que comete __________)
representa a una iglesia apóstata o a una religión falsa.
La mujer, o iglesia, de Apoc. 17 está vestida de púrpura y escarlata y se la describe como llena de
atributos objetables (v. 4). Se la llama “Babilonia la grande” y tiene muchas hijas (v. 5). Este mismo
poder religioso aparece en Apoc. 14:8 y 10, y se lo considera caído y más allá de toda recuperación. Tal
como en la Babilonia de la antigüedad, las cosas sagradas están mezcladas con elementos paganos, con lo
que atrae los juicios de Dios (Dan. 5:1-4, 25-28, 30). Los que, frente a las claras evidencias, perseveran en
los caminos de invención humana en lugar de aceptar las gloriosas verdades de la Palabra de Dios, serán
juzgados dignos de muerte (Apoc. 18:4). Jesús mismo tuvo que lidiar con similares perversiones de la
verdad durante su permanencia en la tierra, y advirtió que Dios juzgaría como indignos a los aue
mezclaban las tradiciones de los hombres con el verdadero culto, anulando de esa manera la Palabra de
Dios (Mat. 15:3, 6).
4. El juicio investigador previo al advenimiento, ¿tiene que ver con todos los que pretenden ser cristianos?
Respuesta: Sí. “Dios traerá ______ obra a juicio, juntamente con toda cosa oculta, sea buena o
sea mala” (Ecl. 12:4; Mat. 12: 36, 37).
Wn la pregunta anterior vimos que los que siguen las tradiciones de los hombres en lugar de las puras
verdades encargadas a los santos de Cristo, se los hallará culpables de traición y pasibles de la pena de
muerte. Las Escrituras nos aseguran que ·”toda obra”, sea buena o mala, será analizada en el juicio previo
al advenimiento. Esto incluye las obras de todos los cristianos. Serán juzgados todos los que conocieron
las puras verdades de la Palabra de Dios pero se apartaron de ellas, como también los que cambiaron sus
caminos perversos por los del Señor (Eze. 18:21-24, 30).
5. ¿Con qué grupo de gente comienza el juicio previo al advenimiento?

Respuesta: Con el de los que hacen la más elevada profesión de fe. Con “la ______ de ______”
(1 Ped. 4:17).
Las imágenes que evoca Pedro son parecidas a las del profeta Ezequiel cuando vio a un hombre vestido
con una túnica de lino que caminaba por las calles de Jerusalén (simbólicamente la iglesia de Dios) con
un sello para ponerlo en la frente de los que eran fieles al Señor (Eze. 9:3-6). La investigación comenzó
por los ancianos, los líderes religiosos (v. 6). Las oportunidades que tuvieron de conocer la verdad y
resistir el error los pusieron en el puesto de mayor responsabilidad.
Hoy es el día de la salvación

• Invitar al lector a aceptar hoy a Cristo como su Salvador personal.
Se ha diseminado ampliamente por el mundo hoy la idea de que Dios es tan amante y bondadoso que no
destruirá a los impíos sin darles una segunda oportunidad de arrepentirse. El propósito de esta sección de
la lección consiste en estudiar las enseñanzas de las Escrituras acerca de este tema.
6. ¿Es seguro postergar para más adelante la decisión de aceptar y seguir las enseñanzas de Dios?
Respuesta: ¡No! _____ es el día de decidirnos por Dios y la eternidad (Heb. 3:7, 8, 12, 13, 15;
Sal. 95:7, 8).
Dios trató de enseñar esta verdad por medio de los servicios del santuario. En el día de la expiación
(juicio), que señalaba el fin del año religioso, los que decidían no participar en un examen de conciencia
ni apartarse de sus pecados, eran “eliminados” (Lev. 23:27-30). En otras palabras, el día de oportunidad y
de prueba había pasado.
7. En la parábola de las diez vírgenes, ¿cuál fue el destino de las que no se prepararon mientras el novio
se demoraba?
Respuesta: El Señor dijo que no las _________ (Mat. 25:12).
La parábola de las diez vírgenes ha sido tratada innumerables veces en la literatura cristiana. Es
importante estar al tanto del trasfondo de esta parábola. En el capítulo 24 de Mateo el Señor dio su gran
sermón acerca de las señales de su venida y del fin del mundo. A continuación presentó varias parábolas
con el fin de destacar los puntos que quería desarrollar. La mayor parte de esas parábolas indican que
debemos aprovechar las oportunidades de prepararnos que se nos dan; podemos postergar demasiado
nuestra preparación. Notemos unos pocos puntos relativos a esto que aparecen en otras parábolas y en
otros relatos bíblicos:
1. Se vuelve a contar la historia de Noé y de su entrada en la seguridad del arca. La lección que
debemos aprender aparece en Mat. 24:38, 39. Los perdidos estaban tan embargados por los problemas de
la vida que “no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del
Hijo del hombre”.
2. Se vuelve a presentar la parábola del ladrón y del dueño de casa. La lección que extraemos es
que si el dueño de casa hubiera sabido a qué hora vendría el ladrón, no habría montado guardia. De
manera similar, “el Hijo del hombre vendrá a la hora que no pensáis” (Mat. 24:44). En otras palabras, si
no nos preparamos ahora, no habrá para nosotros un futuro con el Señor.
3. Se presenta la parábola del siervo fiel y del siervo malo. La lección que se nos da aquí es que
será recompensado el siervo a quien se encuentre haciendo la voluntad de su amo; en cambio, el siervo
infiel será destruido (Mat. 24:46-51).
4. Se presenta la parábola de los talentos. En este caso, el amo de los siervos se va a un país
distante. Cuando regresa, pregunta que han hecho los siervos con los talentos que les dejó. Al que no
aprovechó la oportunidad que se le dio fue arrojado a “las tinieblas de afuera” (Mat. 25:30).
Inmediatamente después de presentar estas parábolas, el Señor les dijo a sus discípulos que cuando venga,
traerá sus recompensas con él.
8. ¿Cómo describió Jesús su venida, y cuándo se le dará su recompensa a los que se encuentran aquí, en la
tierra?
Respuesta:
a) Jesús vendrá en _________ con sus ángeles (Mat. 25:31).
b) Serán reunidas todas las naciones para recibir su ___________
c) Se darán dos clases de recompensas: un grupo heredará el _______ preparado por Cristo (Mat.
25:34); el otro grupo compartirá el destino de Satanás y sus ángeles (v. 41).
9. Los que resisten los llamados de su conciencia están en peligro de pecar contra el Espíritu Santo. ¿Qué
nombre se la da a este pecado en las Escrituras?
Respuesta: El pecado imperdonable. El que peca “contra el Espíritu Santo, no será ___________,
ni en este siglo ni en el venidero” (Mat. 12:32).
El rechazo deliberado de la verdad por parte de alguien lo confirma en la conducta que ha decidido seguir
(Núm. 15:29-31). La persistente resistencia a las impresiones causadas por el Espíritu Santo con el tiempo
inducen al individuo a tomar deliberadamente ciertas decisiones que contradicen abiertamente la conducta
revelada por Dios en su Palabra. Mediante esas decisiones la persona “corta la vía de comunicación con el
Cielo”. La conciencia se cauteriza; la persona se ubica fuera de todo alcance. La invitación de Dios es que
respondamos pronto s sus llamados a la obediencia.
El fin del tiempo de prueba (o gracia)

• Destacar el hecho de que llegará el momento cuando Dios ya no le ofrecerá salvación a nadie (fin del
tiempo de prueba).
• Bosquejar los acontecimientos que ocurrirán en la tierra inmediatamente después del fin del tiempo
de gracia.
Pronto terminará el tiempo de prueba: el momento de tomar decisiones en favor de Cristo.
10. ¿Cómo describe la Escritura el fin del tiempo de prueba?

Respuesta:
a) “Se ___________ Miguel” (Dan. 12:1).
Miguel es precisamente Cristo. Nadie ha guardado a su pueblo con tanto celo. En Dan. 7:9, 10 y 13
vemos la descripción de un juicio solemne. Vemos que todos en ese tribunal toman asiento. Cristo mismo
participa de este juicio investigador previo al advenimiento (1 Juan 2:1). Cuando concluye la obra
mediadora de Cristo en favor de la humanidad, empieza a sesionar el gran tribunal del juicio.
b) “El templo se ________ de humo” (Apoc. 15:8).
La gloria del Señor –a la que se refiere este texto– llena el templo y ya no hay posibilidad alguna de
intercesión en favor del hombre. Las imágenes usadas en Apocalipsis son similares a las que aparecen en
Eze. 3:1 y 4. En el antiguo templo terrenal, la presencia de Dios salió del lugar santísimo y se detuvo un
momento sobre el atrio del templo antes de alejarse definitivamente (Eze. 11:22, 23). Ya no había más
intercesión posible para el pueblo de Israel en el santuario. En el Apocalipsis se describen
acontecimientos similares, pero esta vez ocurren en el Cielo.
11. ¿Qué acontecimiento sigue inmediatamente al fin del tiempo de prueba?

Respuesta: Se derraman las siete ________ postreras (Apoc. 15:1, 6-8,; 16:1).
Cuando la intercesión de Cristo termina en el santuario, comienza en la tierra un gran tiempo de angustia
(Dan. 12:1). Hay muchos conflictos y gran destrucción. Las plagas empiezan a caer (Apoc. 6:14-16; 16).
Dios no contenderá para siempre con la rebelde humanidad. Llegará un día, como en los tiempos de Noé,
cuando la paciencia de Dios llegará a su límite. Entonces Dios llevará a cabo su extraña obra (Isa. 28:21;
Eze. 18:30-32).
12. Después del derramamiento de las plagas, ¿qué sucede?

Respuesta: Dios declara: “Ya está ______” (Apoc. 16:17).
Este anuncio le pone fin a las acciones engañosas y manipuladoras de los poderes religiosos conocidos
con la “gran Babilonia”, ya que se revela ante los habitantes del mundo la verdadera naturaleza de la
lealtad manifestada hacia ese poder. Esa combinación político religiosa ha tratado de reunir “a los reyes
de la tierra y de todo el mundo” contra el pueblo de Dios (Apoc. 16:13, 14, 18, 19).
Se juzga a los impíos y se destierra a Azazel

• Determinar la naturaleza de las recompensas que Cristo da a los habitantes de este mundo en ocasión
de su segunda venida.
• Determinar también la naturaleza de la recompensa que recibirá Satanás cuando Jesús venga por
segunda vez, y relacionaremos todo ello con la información que nos da al respecto el servicio del día
de la expiación del santuario terrenal.
13. Cuando Jesús aparezca en las nubes de los cielos, ¿qué le sucede a los vivos y a los muertos?
Respuesta:
a) Los justos muertos _____________ (1 Tes. 4:16).
b) Los justos vivos serán _____________ junto con los resucitados para encontrarse con el Señor
en el aire (1 Tes. 4:17).
c) Los impíos morirán cuando Jesús venga. “Fuego ___________ delante de él” (Sa. 50:3-5; 2
Tes. 1:7, 8; 2:8).
Los justos pasan a ser inmortales, los ángeles los reúnen (Mat. 24:32; 1 Cor. 15:51-53), y van al Cielo
(Hech. 1:11; Juan 14:3). Juan el Revelador nos describe las escenas de regocijo que habrá en el Cielo
(Apoc. 7:9-17). Describe con detalles majestuosos la adoración que se tributa a Dios por lo maravilloso de
sus caminos, su amor y su paciencia, y su liberación.
14. ¿Qué tarea definida llevan a cabo los redimidos en el Cielo durante el milenio?
Respuesta: Los santos juzgan a los impíos, inclusive a los _________ caídos (1 Cor. 6:23).
Hay que recordar que Dios ya determinó el destino de los habitantes de esta tierra antes de la segunda
venida de Cristo. Bien se puede preguntar qué objeto tiene la tarea que llevarán a cbo los santos. Ellos ya
viven con Cristo y reinan con él durante ese tiempo (Apoc. 20:4-6). Aparentemente colaborarán con
Cristo en determinar el grado de castigo que recibirán los perdidos (recordemos que sólo se eliminó del
santuario el registro de los pecados de los justos durante el juicio previo al advenimiento). Los santos, por
medio de esta investigación, quedarán convencidos para siempre de la misericordia y la justicia de Dios.
Quedará demostrado que él es totalmente digno de confianza.
15. ¿Qué le pasa a Satanás después de la venida de Cristo?

Respuesta: Satanás quedará atado por mil años en esta tierra por un a cadena de circunstancias, y
será arrojado al “________” (Apoc. 20:1-3).
Las Escrituras sugieren que Satanás estará acompañado por los ángeles caídos durante este tiempo (2 Ped.
2:4; Apoc. 12:9). Satanás estará atado por una cadena de circunstancias ya que en esta tierra ya no habrá
gente a quien tentar. La palabra griega abusson, traducida al castellano por “abismo”, significa un lugar
desolado, “sin forma y vacío”, y también un lugar escabroso y despoblado (Jer. 4:23). Esta misma palabra
griega se usa en la Septuaginta para referirse a la condición de la tierra en ocasión de la creación (Gén.
1:1, 2).
16. En el servicio del día de la expiación en el santuario terrenal, ¿qué parte de la ceremonia se refería a la
expulsión de Satanás?
Respuesta: Cuando los pecados de los arrepentidos salían simbólicamente del santuario,se los
depositaba sobre la cabeza del ______ ________ destinado a Azazel. Después se lo llevaba a un
lugar desierto (Lev. 16:10, 20-22).
La palabra Azazel sólo aparece en Levítico 16. Se aplica a alguien que, por el contexto de lo que se está
presentando, se opone a Dios (Lev. 16:8). Se han adelantado muchas ideas acerca del significado de este
nombre. “El paralelismo entre ‘para Jehová’ y ‘para Azazel’ indica que se trata de un nombre propio,
probablemente el de un demonio. Así lo interpretan la versión siria del Levítico, el Targum y 1 de Enoch,
que identifica a Azazel como el príncipe de los demonios que fue expulsado al desierto” (R.E. Brown,
J.A. Fitzmyer y R.E. Murphy, editores, The New Jerome Bible Commentary [El nuevo comentario bíblico
Jerónimo], 1990, p. 1282). Ciertamente se enviaba a Azazel a un lugar desolado e inhabitado. Este macho
cabrío no era salvador de nadie, porque no se derramaba su sangre. La responsabilidad final de todos los
pecados confesados se depositaba simbólicamente sobre este macho cabrío, así como se la depositará
sobre Satanás cuando reciba de parte de Dios su justa retribución.
El pecado no existirá más

• Descubrir que Satanás y los pecadores no recibirán un castigo eterno, sino que serán destruidos para
siempre por Dios.
• Regocijar en la seguridad de que el plan de salvación de Dios terminará, y que no habrá posibilidad
alguna de que el pecado vuelva a aparecer.
17. ¿Qué evento importante ocurre al fin del milenio?

Respuesta:
a) ___________ los impíos muertos (Apoc. 20:5).
Este texto ha sido motivo de confusión para algunos. Pero, tal como lo presenta la Nueva Versión
Internacional (NVI) de la Biblia (en inglés), la incertidumbre desaparece. Veamos: “Ellos (los justos, por
supuesto; esto se deduce del contexto) resucitaron y reinaron con Cristo durante mil años. (El resto de los
muertos resucitó recién al final de los mil años). Esta es la primera resurrección” (vs. 4, 5). Si lo
entendemos de esta manera, resulta claro que la información acerca de los impíos muertos es algo extra,
ubicada en este lugar del discurso, y que los que participan de la primera resurrección son los justos.
b) Satanás queda libre de las desoladoras circunstancias que lo rodeaban; en otras palabras, “será
________ de su prisión” (Apoc. 20:7).
Por supuesto, ya que los impíos están otra vez sobre la tierra, su activa mente tiene algo que hacer.
Inmediatamente traza un plan malvado, reúne a las multitudes de los impíos en el intento de desalojar a
los santos de la Nueva Jerusalén (Apoc. 20: 8, 9). En el siguiente capítulo del Apocalipsis se nos dan
detalles acerca del descenso de la Nueva Jerusalén desde el Cielo a la tierra antes de que se desarrollen las
actividades de los impíos que acabamos de describir (Apoc. 21:1, 2).
18. ¿Nos asegura la Biblia que el pecado y los pecadores dejarán de existir un día?
Respuesta: Por supuesto. Los impíos serán destruidos con ______ (Apoc. 20:9, 10, 14).
No hay liberación alguna de la segunda muerte. Implica una finalidad y una totalidad que están
respaldadas por otras expresiones de la Biblia. Se nos dice, por ejemplo, que los impíos serán reducidos a
paja, que serán ceniza debajo de los pies, y que se disiparán como humo (Sal. 37:10, 20; Mal. 4:1, 3). En
cuanto al diablo, también se nos asegura que será reducido a cenizas y que nunca más se lo volverá a ver
(Eze. 28:17-19).
19. En el reino que Cristo establecerá aquí en la tierra, ¿hay alguna posibilidad de que el pecado se vuelva
a levantar?
Respuesta: ¡Gracias a Dios, no! “La tribulación (el pecado) ___ ___ ___________ dos veces”
(Nah. 1:9, versión Emanuel).
En Zac. 14:1, 4, 9 el profeta describe “el día de Jehová”, cuando Cristo se levante en triunfo sobre el
Monte de los Olivos. El monte se partirá en dos, y se formará una gran llanura para que en ella repose la
Nueva Jerusalén. La tierra será purificada con fuego, y el pecado y sus efectos desaparecerán al mismo
tiempo que se produce la destrucción de los impíos y de Satanás (2 Ped. 3:7, 10,11). El Señor ese día
“será Rey sobre toda la tierra”. Esta será la tercera venida de Cristo a este mundo y será a la vez la
culminación todas las esperanzas cristianas. Oremos fervientemente para que nosotros, y aquellos por
quienes trabajamos, estemos allí en ese día grandioso y glorioso.

1. dos
2. a) mies b) uvas
3. a) virgen b) adulterio
4. Toda
5. casa, Dios
6. Hoy
7. Conocía
8. a) gloria b) sentencia c) reino
9. perdonado
10. a) levantará b) llenó
11. plagas
12. hecho
13. a) resucitarán b) arrebatados c) consumirá
14. ángeles
15. abismo
16. macho cabrío
17. a) resucitarán b) suelto
18. fuego
19. no se levantará
13. LA VIDA ESTÁ EN LA SANGRE
El don más precioso en este mundo es la vida. Leemos acerca de las luchas heroicas para conservar la
vida por parte de los que están en peligro de perderla, y de los que se atreven a poner en peligro su vida
para salvar a otros. La pregunta que al final todos hacen ésta: “¿Qué hay después de la muerte?” Esta es
una pregunta que ha intrigado a todas las civilizaciones desde el principio de la historia. En efecto,
descubrimos que ya en el jardín del Edén Satanás, el ángel caído, confundió la mente de Eva, la primera
mujer, haciéndole creer que la existencia tenía otra dimensión diferente de la que ella estaba
experimentando. Este conocimiento --esta experiencia--, le pertenecerían si se decidía a aplicar los
principios del gobierno de Satanás. Le prometió que si seguía sus enseñanzas ¡no moriría! En otras
palabras, obedecer a Dios y tener acceso al árbol de la vida no eran esenciales para tener inmortalidad.
En esta lección estudiaremos la idea de la vida después de la muerte, el concepto de la reencarnación y

temas relacionados. Por encima de todo deseamos descubrir qué nos enseña la Biblia desde el principio
acerca de la inmortalidad del alma y la posibilidad de tener comunión con los están “al otro lado”.
También tenemos el plan de descubrir las instrucciones de Dios a su pueblo acerca de esto por medio de
los servicios del santuario.
La muerte, la paga del pecado

• Poner énfasis en el hecho de que la muerte entró en este mundo como consecuencia del pecado.
• Recordar que los sacrificios de animales fueron instituidos por Dios no sólo para enseñarnos cuáles
son las consecuencias del pecado, sino para anunciarnos también la venida del Salvador.
1. ¿Cuál dijo Dios que sería la consecuencia final de la desobediencia, es decir, del pecado?
Respuesta: La ________ es el resultado de la desobediencia (Gén. 2:17; Rom. 6:23).
Puesto que Adán y Eva no habían pasado por la muerte, es evidente que debían aceptar por fe la
declaración de Dios registrada en el Génesis. La obediencia personal sólo podía surgir de la confianza y el
amor a su Hacedor. Sin duda Dios les explicó la naturaleza de la muerte, y que acarrearía separación de
los seres santos que los acompañaban.
2. Para enseñar la verdad de que el pecado produce muerte y que la salvación demanda la vida de un
sustituto perfecto, ¿qué ceremonia instituyó Dios?
Respuesta: _____________ de animales (Heb. 9:22, 12; 1 Juan 1:7; Apoc. 5:9).
Al exigir la vida de un sustituto perfecto por el pecado cometido por el pueblo, Dios estaba ilustrando el
hecho de que el pecado produciría el derramamiento de la sangre del Hijo de Dios en algún momento del
futuro. Los primeros animales que se sacrificaron les proporcionaron ropa a la pareja pecadora (Gén.
3:21). Pero recién nos damos cuenta de la institución de sacrificios de animales cuando nos enteramos de
la muerte de Abel a manos de Caín (Gén 4:4). Abel le ofreció el Señor un cordero perfecto en obediencia
a la instrucción que había recibido (sin duda de sus padres: Adán y Eva); Caín era rebelde y ofreció
frutos. Dios aceptó la ofrenda de Abel pero no la de Caín. Éste, enojado, discutió con su hermano y le dio
muerte. Debemos notar que antes que Adán y Eva fueran expulsados del jardín del Edén, Dios les
prometió que vendría Cristo a sufrir en favor de ellos (Gén. 3:15). Resulta evidente que los sacrificios de
animales se introdujeron ya en ese momento, y que ellos les enseñaron a sus hijos el significado de esas
ceremonias.
3. En los sacrificios de animales, ¿qué significaba la sangre?

Respuesta: La sangre representaba la ______ (Gén. 9:4; Lev. 17:11).
Cuando la sangre brotaba del animal como consecuencia de haber sido degollado, moría. Por eso la
sangre representaba la vida. La sangre derramada anunciaba el hecho de que la vida del Hijo de Dios sería
derramada un día, en el futuro. Las Escrituras declaran enfáticamente: “Sin derramamiento de sangre no
hay remisión” (Heb. 9:22). Esto nos indica la consistencia de los requerimientos de Dios. El pecado
inevitablemente produce la muerte.
4. Fuera de la pequeña cantidad de sangre que se usaba en las ceremonias del santuario, ¿qué se hacía con
la sangre de los animales sacrificados?
Respuesta: La sangre se ___________ al pie del altar en el atrio; al llegar a la tierra volvía a ser
polvo (Gén. 3:19; Lev. 4:7, 18, 25, 30, 34).
La muerte de la víctima le enseñaba al suplicante cuáles eran las terribles consecuencias del pecado. El
derramamiento de la sangre, que representaba la vida, comunicaba la idea de que el pecado conduce a la
destrucción eterna.
5. ¿Qué nos dicen las Escrituras que les ocurre tanto a los humanos como a los animales cuando mueren?
Respuesta: Vuelven al _______ (Gén. 3:19; Ecl. 3:20).
Las Escrituras afirman sin lugar a dudas que los seres humanos volvemos al polvo de donde provenimos.
Salomón dice que tanto los humanos como los animales vamos al mismo lugar: al polvo de la tierra.
6. ¿Tienen los seres humanos alguna ventaja sobre los animales en el momento de la muerte?
Respuesta: ¡Ninguna! Ambos tienen el mismo _________ y van al mismo lugar (Ecl. 3:19).
Los seres humanos no tienen ni “preeminencia” ni “ventaja” sobre los animales en este aspecto. Salomón
incluso afirma que tanto los hombres como los animales poseemos la misma energía vital, el mismo
“aliento de vida”. Si el “aliento” de los seres humanos asciende cuando mueren, y el de las bestias
desciende, es una pregunta que formuló Salomón pero que dejó sin contestar (Ecl. 3:21). Sin duda esta
pregunta era consecuencia de las creencias paganas de la época. Los egipcio, por ejemplo, creían que en
el Cielo había una morada de delicias. El alma y el cuerpo eran, para ellos, entidades separadas, y alma se
podía mover independentemente del cuerpo (Encyclopaedia of Religion and Ethics [Enciclopedia de
religión y ética], 1967, t. 12, p. 517). Salomón contestó a la pregunta acerca del destino del aliento de vida
en Ecl. 12:7. El espíritu o aliento de vida (ruaj), da la idea de un ente consciente que sale volando rumbo
a las alturas.
El ocultismo es abominación
• Destacar el hecho de que desde la creación del hombre Satanás ha tratado de contradecir la
declaración divina de que la desobediencia a los mandamientos de Dios acarrea la muerte.
• Revisar brevemente cómo se fomenta la idea de la vida después de la muerte.
7. ¿Cómo trató Satanás de apartar la atención de Eva de la clara afirmación de Dios concerniente al
pecado y sus consecuencias?
Respuesta: Introdujo la doctrina de la inmortalidad del alma. Dijo: “___ __________” (Gén.
3:4).
Dios había dicho que en cuanto el hombre pecara, moriría (Gén. 2:17). El enemigo de las almas trató de
contradecir esto al declarar que al pecar la persona ascendía a un nivel superior de conocimiento (Gén.
3:5). Sin duda la serpiente comió una parte del fruto prohibido para demostrar que la muerte no se
produciría inmediatamente. Al parecer ésta fue una prueba concluyente para Eva. Pero la sentencia de
Dios era segura; la muerte no se produjo cuando ella comió del fruto, pero en ese momento se pronunció
la sentencia. En hebreo, en Gén. 2:17, dice literalmente: “muriendo, moriréis”. En lugar de disponer de
inmortalidad condicionada a la obediencia, ahora se le ofrecía a la humanidad “inmortalidad
incondicional”.
La expresión “inmortalidad del alma”, tal como se la usa hoy, está explicada mediante la siguiente cita:
“Por mente humana –o alma– se entiende que es el principio divino que obra dentro de mí: por medio del
cual siento, pienso y quiero, y por medio del cual mi cuerpo es animado” (The Catholic Encyclopedia [La
enciclopedia católica], 1913, t. 7, pp. 687, 689).
8. ¿Por medio de qué instrumentos se ha fomentado la idea del estado consciente del alma después de la
muerte?
Respuesta: Por medio de _________, mediums espiritistas, necromantes, etc. (Deut. 18:9-13; 2
Rey. 21:6; 2 Crón. 33:6).
Los necromantes eran gente que consultaba a los muertos, como lo eran también los que consultaban a los
espíritus familiares (¿de los antepasados?). Las brujas y los brujos eran gente que practicaba la magia.
Para los judíos se dedicaba a actividades malignas. Una característica de todos los magos era que para
poder obrar necesitaba entrar en contacto con poderes malignos sobrenaturales (demonios, dioses,
fantasmas). Los magos, además, podían requerir la ayuda de esos poderes a fin de llevar a cabo sus actos
extraordinarios (Encyclopaedia of Religion and Ethics, 1967, t. 8, p. 301).
Hoy al ocultismo se la hace propaganda por medio de películas, videos, programas de televisión y la
música. Los “psíquicos” (como se los suele llamar en algunos lugares) y los clarividentes anuncian
abiertamente sus actividades. El ocultismo “promete poder y estímulo”, lo que le resulta atractivo ahora
cada vez a más gente, que busca sensaciones y experiencias nuevas. Estas experiencias pueden llevar a
muchos a asumir conductas extrañas, a padecer quebrantos mentales y a probar incluso el crimen (G.
Kent, Signs of the Times [Señales de los tiempos], 1997, t. 112, No. 6, pp. 32-36).
9. ¿Son capaces los así llamados “mediums” de invocar verdaderamente a los muertos y de predecir el
futuro?
Respuesta:
a) Parecería que los _________han regresado para comunicarse con los vivos (1 Sam. 28:11, 12,
14).
b) Sí, Satanás, el señor de las tinieblas, puede __________ hasta cierto punto el futuro (1 Sam.
28:15, 19; 31:2, 4, 5).
En el ejemplo que citamos aquí, no fue en realidad una gran cosa que Satanás predijera la caída de Saúl.
El Señor se había apartado de él y estaba en ese mismo momento desobedeciendo a Dios al intentar
comunicarse con un muerto (1 Sam. 28:16; Lev. 20:27). En nuestro tiempo podríamos mencionar las
predicciones del así llamado profeta Aladino Félix, que predijo con exactitud la muerte de un astronauta
ruso en 1966, el asesinato de Martin Luther King y del senador Robert Kennedy. También predijo que
habría violencia en su patria, Brasil, lo que ciertamente ocurrió. Al tratar de averiguar si Félix estaba
dirigido por Dios, descubrimos que había estado dirigiendo una banda de ladrones de bancos en Sao
Paulo, y que estaba planificando el asesinato de varios importantes funcionarios del gobierno (G.E.
Vandeman, Psychic Roulette [La ruleta espiritista], 1973, p. 114). Es claro que no Dios, sino Satanás,
estaba detrás de estas actividades.
10. ¿Qué actitud ha asumido Dios hacia la intención de comunicarse con los muertos?
Respuesta: Considera que esas prácticas son abominables, y que los que persisten en ellas “no
___________ el reino de Dios” o, en otras palabras, perecerán para siempre (Lev. 20:27; Deut.
18:9-13; Gál. 5:19-21).
El Señor siempre está dispuesto a aceptar un verdadero arrepentimiento de esas personas, y considerarlos
ciudadanos de su reino. Por ejemplo, Simón el mago fue bautizado por Felipe (Hech. 8:9-13). Su
conducta ulterior no fue ejemplar, por cierto (vs. 14-24), y la historia no guarda un buen recuerdo de él.
Pero fue aceptado como un candidato potencial al reino de Dios.
11. ¿Qué instrumentos estuvieron implicados en la crucifixión de nuestro Señor?

Respuesta:
a) La Sodoma y la _______ espirituales tuvieron responsabilidad (Apoc. 11:8).
b) Egipto era notable por su obsesión con los __________ y los adivinos (Isa. 19:3).
Es evidente que las actividades de los que están controlados por Satanás fueron responsables de las
escenas relacionadas con el arresto, el juicio y la crucifixión de nuestro Señor. Estos mismos instrumentos
estarán implicados en los eventos culminantes del gran conflicto en esta tierra (Apoc. 16:13, 14).
Instrumentos invisibles obran en nuestro mundo

• Establecer el hecho de que los ángeles buenos y los malos tratan de ejercer influencia sobre las
acciones de los seres humanos.
La Biblia nos cuenta la historia de un conflicto entre las fuerzas del bien y del mal. Esta controversia
empezó en el Cielo y se trasladó a esta tierra según lo cuenta Apoc. 12:7-9. El conflicto gira en torno de
los principios del amor, que rigen todas las actividades de Dios. Satanás pretende que sus propios
principios son mejores que los de Dios, y ha tratado de convencer a todos acerca de la corrección de sus
asertos. Las Escrituras nos dan vislumbres del futuro, y nos muestra que el conflicto termina con el
triunfo de los principios del amor que tienen a Dios como origen (Apoc. 20:10; 21:1-5).
12. ¿Tiene Dios en el mundo instrumentos invisibles para ayudar a los que sinceramente quieren
complacerlo?
Respuesta: Sí, por supuesto. “El ángel de Jehová ________ ___________ de los que lo temen”
(Sal. 34:7; 2 Rey. 6:15-17; Mat. 18:10; Luc. 2:8-13).
El santuario terrenal enseñaba definidamente la participación de los ángeles en el ministerio de la

salvación. Dos ángeles de oro inclinaban reverentemente la frente sobre el propiciatorio en el lugar
santísimo (Exo. 25:18).
13. ¿Obran los ángeles malos para encadenar en la duda a ciertas personas e inducirlos a cometer malas
acciones?
Respuesta: ¡Sí! (2 Cor. 11:14; Efe. 6:12; Col. 2:15).
14. Son los ángeles espíritus desencarnados?

Respuesta:
a) Los ángeles malos son seres creados, ya que el hombre fue creado “un poco ________ que los
ángeles” (Sal. 8:5; Eze. 28:13-15; Apoc. 12:9, 3, 4).
Los ángeles malos se originaron en el Cielo, pero fueron arrojados a la tierra junto con Satanás, el
querubín cubridor que ocupaba un lugar de privilegio junto a Cristo. A estos ángeles se los creó puros
pero, al creer las mentiras de Satanás, fueron expulsados para siempre y perecerán con su jefe en el lago
de fuego que purificará esta tierra cuando descienda la Nueva Jerusalén (1 Cor. 6:3; 2 Ped. 2:4; Apoc.
20:10, 15).
b) Los ángeles de Dios también son seres creados. Son “colaboradores” de los fieles testigos
humanos, y por eso no se los debe ________ (Col. 1:16; Apoc. 22:8, 9).
Los ángeles santos tienen su base en el Cielo. Su aspecto puede ser como el de los seres humanos (Mar.
16:5-8). Actúan como instrumentos de Dios para proteger a sus hijos y conducir al conocimiento de Dios
a los de puro corazón (Gén. 28:12; Sal. 34:7; Juan 1:51).
El estado inconsciente de los muertos

• Establecer claramente, basándonos en las Escrituras, que no hay conciencia en la muerte.
15. ¿Apoyan los escritores bíblicos la idea de que la gente está conciente cuando está muerta?
Respuesta:
a) Los muertos ______ saben (Ecl. 9:5, 6, 10).
b) En el mismo día en que alguien muere, sus pensamientos __________ (Sal. 146:4).
c) Lo que le sucede a los seres amados de la familia aquí en la tierra le es absolutamente
_____________ el que falleció (Job 14:12, 21).
Ya hemos notado que en la sociedad cristiana contemporánea prevalece la idea de que el alma es un ente
que siente, que piensa, que tiene voluntad y que anima al cuerpo. Los textos que acabamos de citar
declaran sin duda alguna que en la muerte la persona es incapaz de pensar, sentir o participar en algo. Las
Escrituras tampoco le prestan el menor asidero a la doctrina de la transmigración de los espíritus
(metempsicosis, reencarnación) (Heb. 9:27).
16. ¿Dice algo la Biblia acerca de las almas?

Respuesta: Sí.
a) Adán llegó a ser alma (o ser) _________ cuando Dios alentó soplo de vida en el modelo de
barro que había hecho (Gén. 2:7).
El texto dice claramente que un cuerpo más el alieno de vida son los componentes d un alma o ser
viviente. La palabra hebrea que corresponde a “alma” (en las versiones antiguas; “ser” en las modernas)
es nephesh, que también se puede traducir por “aliento”, “vida”, “ser viviente”, y “el corazón como el
asiento de los afectos”.
b) Cuando el hombre muere, el ______ también muere (Eze. 18:4, 20).
La palabra hebrea que se usa en este texto también es nephesh, es decir, “ser viviente”. Resulta
sumamente claro, entonces, que cuando alguien muere, el proceso que ocurre es exactamente el contrario
al referido en la pregunta anterior; cuando el aliento de vida ya no existe en el cuerpo, la persona está
muerta y ya no hay nada que se podría considerar como alma. En el Eclesiastés se nos informa que el
principio vital o espíritu vuelve a Dios, y el cuerpo vuelve al polvo (Ecl. 12:7; Job 27:3). En apoyo de
esto notamos que la palara hebrea ruaj que corresponde a “espíritu” en Eclesiastés, también significa
“viento”, “aire”, “soplo” (R. Young, Analytical Concordance of the Holy Bible [Concordancia analítica
de la Santa Biblia], 1975, pp. 924, 925). En conclusión, si el alma puede morir, no puede ser inmortal. La
Biblia, sistemáticamente, dice que el hombre es mortal (Job 4:17; Rom. 6:12).
17. ¿Cuál fue la actitud de Cristo hacia la idea del estado consciente de los muertos?
Respuesta: No la apoyó.
a) Dijo, refiriéndose a la muerte de Lázaro, que éste se había _________ (Juan 11:11).
b) Reprendió a los fariseos por sus tradiciones (Mat. 15:1, 6, 9).
Los fariseos le daban a lo que llamaban “ley oral” (sus tradiciones) un lugar equivalente en sus creencias
al de la Torah (la Ley de Moisés, los cinco primeros libros de la Biblia). Los fariseos creían en la
inmortalidad del alma. La Torah no enseña esa doctrina. Los saduceos, al contrario, creían en la muerte
del alma (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 14, col. 621). En los textos registrados en Mateo, Jesús
reprendió a los fariseos por sus tradiciones que carecían de fundamento bíblico. No incluyó a los saduceos
en esta reprensión.
c) Le prometió al ladrón en la cruz que estaría con él en el __________, pero no en el momento

de su muerte (Luc. 23:43; Juan 20:11, 16-18).
Cristo no se encontró con su Padre hasta el domingo de mañana: quiere decir que no estuvo en el paraíso
en el día cuando le habló al ladrón, es decir, ese viernes de tarde. Recordemos que los manuscritos
griegos se escribían sin puntuación (scriptio continua era la norma, de modo que la puntuación era asunto
de interpretación; J.C. Poirier, New Testament Studies [Estudios acerca del Nuevo Testamento], 1996, t.
42, p. 288). Por lo tanto, la ubicación de la coma en Luc. 23:42 hace un mundo de diferencia en el sentido
del versículo. Notemos esta diferencia: El texto que tenemos dice: “De cierto te digo que hoy estrás
conmigo en el paraíso”. El griego, sin puntuación, dice: “De cierto te digo hoy estarás conmigo en el
paraíso”. Los traductores, devotos de la inmoralidad del alma, han traducido: “·De cierto te digo: hoy
estarás conmigo en el paraíso”. Pero él, como ya lo hemos visto, no estuvo ese día en el paraíso. De modo
que este texto se debe traducir así (y notemos la ubicación de la coma): “De cierto te digo hoy, estarás
conmigo en el paraíso”. En este caso no hay inmortalidad del alma.
d) Jesús dijo que él __________ y recibiría a los creyentes junto a sí (Juan 14:2, 3; Sal. 50:3, 4).
La venida de Jesús en las nubes de gloria (visible), con gran fragor y en la compañía de las huestes del
Cielo, es el gran acontecimiento que se relaciona con la resurrección de los muertos y la recepción de la
inmortalidad (1 Cor. 15:20, 23, 5-55; 1 Tes. 4:15-17).
18. ¿Le da fundamento a la idea del estado consciente de los muertos la parábola del rico y Lázaro?
Respuesta: Esta es una historia llena de elementos paganos, usada por Jesús con motivos
didácticos, pero sus mismas enseñanzas no la apoyan (Luc.16:19-31); Mat. 25:30-33).
El historiador Josefo relató esta historia en un discurso ante un grupo de griegos. El relato afirmaba que
cuando las almas descienden al Hades (la morada de los muertos) después de la muerte, se conducía a los
justos a la mano derecha (el seno de Abrahán) y a los injustos se los llevaba a las cercanías del infierno
(W. Whiston, The Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio Josefo], c. 1936, pp. 901,
902). Esta historia tiene su origen en los relatos populares egipcios relativos al viaje de Si-Osiris al
mundo subterráneo (J. Jeremias, The Parables of Jesus [Las parábolas de Jesús], 1972, pp. 183-186).
Cuando estudiamos las Escrituras descubrimos que Jesús enseñó que la separación de los justos de los
injustos ocurrirá en ocasión de su segunda venida (Mat. 25:31-33). Jesús usó esta historia popular
principalmente para demostrar que nuestro destino se determina antes de la muerte, y que los juicios de
Dios son irrevocables. Ciertamente Abrahán todavía está en su tumba, así como el apóstol Pablo nos lo
dice puntualmente (Heb. 11:8-16). La palabra hebrea que corresponde a “tumba” o “sepulcro” es sheol, y
la griega correspondientes es hades. No representa un lugar de fuego ardiente, sino un lugar de tinieblas y
silencio (Job 7:9; 17:13; Sal. 16:10; 31:17).
Mientras la segunda venida de Cristo se consideró como un hecho inminente, no importaba si los
creyentes estaban dormidos (muertos) o despiertos (vivos) esperando la resurrección (esta opinión
prevaleció hasta el siglo V). Cuando este evento se postergó hasta un futuro distante, la gente no quiso
postergar indefinidamente su recompensa o la de los impíos. Así se inventó “la doctrina del juicio
inmediato de cada alma al morir” (D.P. Walker, The Decline of Hell [La decadencia del infierno], 1964,
pp. 34, 35). Clemente de Alejandría, (m. 245 d.C) y Orígenes (m. 253/254 d.C.) Inventaron la idea del
purgatorio, una idea que en parte proviene de tradiciones religiosas griegas. El verdadero padre de eta
idea fue Agustín, gran teólogo de la iglesia de la Edad Media. Esta doctrina se proclamó en 1439. Se la
usó como arma para inducir a la gente a obedecer a la Iglesia Latina (J. Le Goff, The Birth of Purgatory
[El nacimiento del purgatorio], 1984, pp. 52, 60, 61). Se debe reconocer, sin embargo, que “los filósofos
católicos. . . por lo general han pretendido establecer la validez de esta creencia (la inmortalidad del alma)
aparte de la revelación”. Las evidencias se aplican también al espiritismo (The Catholic Encyclopedia [La
Enciclopedia católica], 1913, t. 7, pp. 688-690).
La inmortalidad es un don
• Determinar en qué momento se le da la inmortalidad a los justos.
19. ¿Han ido los seres humanos al cielo o al infierno a lo largo de los siglos, o las recompensas se dan en
ocasión de la segunda venida de Cristo?
Respuesta:
a) El juicio que se desarrolla mientras Cristo es nuestro Mediador, determina la naturaleza de las
recompensas. Se nos dice que “el _______ se sentó y los ________ fueron abiertos” (Dan. 23-27,
9, 10, 13, 14; Mat. 22:11-13).
b) Las recompensas no se darán hasta que Cristo asuma su reino. En ese momento los justos serán
“arrebatados” para “recibir al Señor ___ el ______” (Mat. 13:34-37; 1 Tes. 4:16, 17).
La Biblia nos dice que los santos aguardarán en sus tumbas hasta que Cristo los llame y los saque de ellas
cuando venga por segunda vez. Cristo traerá sus recompensas con él cuando venga (Mat. 16:27; Apoc.
22:12). El juicio que comenzó en 1844 proclama que los santos pronto recibirán su recompensa.
20. ¿Hay en las Escrituras alguna declaración definida acerca de la inmortalidad, y cuándo se la dio?
Respuesta: ¡Sí!
a) Sólo Dios ______ inmortalidad (1 Tim. 6:15, 16).
b) Se dará la inmortalidad a los justos cuando Cristo venga por segunda vez, cuando suene “la
________ trompeta” (1 Cor. 15:51-54; 1 Juan 3:2).
Entre los grandes y culminantes acontecimientos que ocurrirán en la tierra antes de la venida de Jesús, las
Escrituras nos dicen que el mundo será engañado por señales y milagros llevados a cabo por instrumentos
malignos que obrarán por medio de organizaciones religiosas que no serán fieles a la Palabra de Dios
(Apoc. 16:13, 14). Esos engaños serán aceptados ávidamente por los que creen en las comunicaciones con
el “más allá”. Guardemos todos nuestras vestiduras; no sea que andemos desnudos y se vea la vergüenza
de nuestra desnudez (Apoc. 16:15). Debemos fortalecer las vestiduras de nuestra mente con las verdades
de la Palabra de Dios, o no estaremos en condiciones de resistir en ese terrible momento.

1. muerte
2. sacrificios
3. vida
4. derramaba
5. polvo
6. aliento
7. no moriréis
8. brujas
9. a) muertos b) predecir
10. heredarán
11. a) Egipto b) hechiceros
12. acampa alrededor
13. ---
14. a) menor b) adorar
15. a) nada b) perecen c) desconocido
16. a) viviente b) alma
17. a) dormido b) — c) paraíso d) volvería
18. ---
19. a) Juez, libros b) en, aire
20. a) tiene b) última
14. EL SEÑOR VENDRÁ DE REPENTE A SU TEMPLO
Cuando Jesús vino a este mundo a vivir como hombre, le presentó con sencillez a la gente la verdad
acerca del carácter de Dios y los principios de su gobierno. El evangelio se predicó de nuevo en su
pureza. La “era evangélica” comenzó con el derramamiento del Espíritu Santo en Pentecostés. Terminará
con el gran derramamiento del Espíritu Santo justo antes del regreso de Cristo en gloria. ¡Cuán
fervientemente deberíamos rogar para que ese derramamiento se produzca en nuestras vidas, de manera
que podamos cumplir el plan que Dios tiene para nosotros!
Las Escrituras se refieren muchas veces a la esperanza del regreso de Cristo en gloria. En efecto, en
Malaquías 3 el profeta nos dice que Cristo “vendrá súbitamente” al templo celestial para completar la
última etapa de su ministerio antes de regresar a la tierra. Dios tiene un cronograma que anhela cumplir.
Las Escrituras nos dicen que hay ciertos eventos que deben ocurrir y ciertas condiciones que deben
cumplirse en el mundo y en la iglesia antes que ese acontecimiento se lleve a cabo. En el cronograma de
Dios está tomada en cuenta cierta demora causada por la falta de preparación y la carencia de entusiasmo
manifestadas entre sus discípulos para cumplir la misión de la iglesia. En esta lección deseamos examinar
la idea de la inminencia de la venida de Cristo, y la experiencia por la que deben pasar los creyentes antes
del regreso del Señor. ¿Podemos apresurar este evento?
El Mensajero llega a su templo

• Presentar al lector la descripción bíblica de la escena que se desarrolla en el Cielo y que presenta a
Cristo en el comienzo de su obra final en el santuario celestial.
• Señalar algunos aspectos del reavivamiento religioso que se producirá en la tierra en el momento en
que Cristo desarrolla su obra final en el santuario del Cielo.
El profeta Malaquías indica, en el pasaje de las Escrituras que estamos comentando (Mal.3:1-3), que a fin
de preparar a la gente para la venida del Señor a esta tierra como nuestro Redentor, los instrumentos del
Señor llevarán a cabo una obra especial. Jesús afirmó que Juan el Bautista había desempeñado el papel de
preparar a la gente para que lo recibiera de manera especial (Mat. 11:10).
1. ¿Quién es el Mensajero o Ángel del pacto a que se refiere el profeta Malaquías?

Respuesta: A Jesús, en las Escrituras, se lo llama el _______ de Dios (Exo. 14:19, 24-26; 13:21;
1 Cor. 10:4).
La palabra hebrea traducida como “mensajero”, mal’ak, también se puede traducir por “ángel”. Por lo
tanto, del Mensajero del pacto (Mal. 3:1) también se podría decir “el Ángel del pacto” (véase E.G. de
White, Conflict and Courage [Conflicto y valor], 1979, p. 67). Jesús, a quien también se llama Yahveh en
el Antiguo Testamento (Isa. 40:3), está identificado con el Ángel (cc. Os. 12:4-5; Zac. 3:1-5). En los
versículos que citamos más arriba también se nos revela que Jesús es el Legislador que apareció en el
Monte Sinaí en medio de un impresionante esplendor (Sant. 4:12).
2. ¿Cuándo entro Jesús repentinamente en su templo?

Respuesta:
a) Al final de su entrada triunfal a la Jerusalén terrestre, Jesús _________ a los que lo estaban
profanando (Mat. 21:12).
b) Cuando comenzó en 1844 la obra del juicio investigador previo al advenimiento, Jesús
compareció ante el _________ de días, es decir, el Padre (Dan. 7:9, 10, 13).
Algunas de las profecías de las Sagradas Escrituras tienen doble aplicación. Una ilustración de este hecho
lo encontramos en Mal. 4:5 y 6. Aquí se nos habla de Elías el profeta que vendrá en “el día de Jehová,
grande y terrible” con el fin de preparar a un pueblo para ese acontecimiento. Evidentemente esta profecía
se aplica en primer lugar a nuestros días (Sof. 1:14-18). Pero Jesús la aplicó a la obra de Juan Bautista
(Mat. 17:10-13). La profecía de Mal. 3:1 también tiene una doble aplicación. Cristo vino a la tierra para
demostrar los verdaderos principios de su reino, y para juzgar a la nación judía. En su papel de Sumo
Sacerdote en el tribunal celestial, los principios de su reino (resumidos en los mensajes de los tres
ángeles) les serán presentados al mundo de manera notable antes del fin del tiempo de prueba concedido a
la humanidad, antes de pronunciar sentencia sobre los injustos (Apoc. 14:6-12). Hay que tener cuidado,
sin embrago, al darle una doble aplicación a las profecías; la Escritura misma debe dar lugar a esa
aplicación.
3. ¿Qué hizo Jesús cuando llegó a su templo?

Respuesta: Durante las etapas finales de la experiencia de su primer advenimiento, Cristo
cumplió las siguientes funciones:
a) Puso las verdades y la __________ de la Palabra de Dios en su correcto lugar (Mat. 21:4, 23).
b) Se lo declaró _____ ; de esta manera llamó la atención de sus oyentes a ciertos detalles
concernientes a la doctrina de los reinos de la gracia y de la gloria (Mat. 21:5).
c) __________ a los profesos creyentes que despreciaban su Palabra (Mat. 21:12, 13, 31, 32, 41,
45).
La profecía de Mal. 3:1 encuentra un segundo cumplimiento en la venida de Cristo para comenzar el
juicio tal como se la describe en Dan. 7. El “cuerno pequeño” y sus asociados pervirtieron las enseñanzas
de la Palabra de Dios al respecto. Apoc. 14 nos dice que se iluminará gloriosamente la tierra con las
verdades de la Palabra de Dios justo antes del regreso de Cristo en gloria. En especial se revelarían
plenamente al mundo las verdades referentes al santuario. Los tres mensajes angélicos de Apoc. 14
también declaran que el reino de la gracia de Dios pronto será reemplazado por el reino de la gloria. El
tiempo de prueba pronto terminará. Como preparación para este acontecimiento, un juicio investigador
debe sesionar en el Cielo.
He aquí viene
• Destacar las condiciones que prevalecerán en la tierra antes de la venida de Cristo en gloria (Mal.
3:1).
• Demostrar que Cristo mismo dijo que el tiempo de prueba se prolongaría.
A la venida de Cristo al santuario celestial le seguirá su venida a la tierra en gloria (Mal. 3:1).
4. ¿A qué época de la antigüedad podemos comparar el momento cuando Jesús esté por volver a la tierra?
Respuesta: A los días de _____ y Lot (Mat. 24:37-39; Luc. 17:26-28).
5. ¿Qué condiciones que prevalecían en los días de Noé encontraran su paralelo en nuestros días?
Respuesta:
a) Se hace de la Palabra de Dios y de sus enseñanzas objeto de _______ (2 Ped. 3:2, 3).
b) La alta crítica pretende que la idea de una interpretación literal de las Escrituras es increíble, en
otras palabras, hay un olvido __________ de la Palabra de Dios (2 Ped. 3:4-6).
c) Se ataca la doctrina de la ________ venida de Cristo (2 Ped. 3:4).
d) Los __________ mundanales embargarán la mente (Mat. 24:38).
e) Todos los pensamientos estarán orientados hacia el _____ (Gén 6:5).
f) La tierra estará llena de ___________ ((Gén. 6:11).
h) La sociedad estará dominada por la ____________ (Gén. 6:2; 2 Ped. 3:3).
La tendencia de la sociedad en los días que corren consiste en satisfacer los sentidos del oído, la vista y el
tacto, y en darle rienda suelta al instinto sexual. El individuo determina por sí mismo qué es bueno y qué
es malo. Todo es relativo; no hay valores absolutos. Muchos consideran que su opinión y la mía son de
igual valor al decidir qué conducta seguir con respecto a asuntos morales y hasta religiosos. Las
Escrituras nos dicen que todo debe ser probado de acuerdo con la norma infalible de Dios. “¡A la ley y al
testimonio! Si no dicen conforme a esto, es porque no les ha amanecido” (Isa. 8:20).
6. ¿Dijo algo Jesús acerca de la probabilidad de prolongar el tiempo de prueba antes de su segunda
venida?
Respuesta: ¡Sí! Jesús vendrá a la hora que no __________ (Mat. 24:42-44, 48; 25:5, 14-19).
La Biblia se refiere al comienzo del tiempo del fin y lo fija en 1798 (Dan. 12:4). Pero no hay profecías
que definan con exactitud cuándo terminará el tiempo del fin. Jesús dijo que su venida estaba
condicionada a la predicación del evangelio en todo el mundo (Mat. 24:14).
7. ¿Se puede tener confianza en que Jesús cumplirá su promesa de venir a esta tierra por segunda vez?
Respuesta: ¡Sí! “El Señor no ________ su promesa (2 Ped. 3:8, 9; Sant. 1:17; Apoc. 10:7).
8. ¿Por qué prolonga Dios el tiempo de gracia?

Respuesta: No quiere que “_________ perezca” (2 Ped. 3:9).
Dios, en su misericordia, prolonga el tiempo de gracia, de manera que haya oportunidad para todos de oír
el evangelio y responder positivamente al último mensaje de la gracia. También es misericordioso con sus
siervos a quienes les ha encargado dar el mensaje. Como los israelitas de la antigüedad, se ha enturbiado
el concepto de la misión de la iglesia y el sentido de urgencia para concluirla. Los miembros de la iglesia
de Laodicea (la última) no son plenamente conscientes de sus deficiencias; no tienen una correcta relación
con Dios (Apoc. 3:18; J. Gallagher, Ministry [El ministerio], junio de 1981, pp. 4-6).
La inminencia del regreso de Cristo

• Concentranos en el concepto de la inminencia del regreso de Cristo en gloria.
• Identificar algunas de las señales que anuncian este evento.
9. ¿Creían los primeros discípulos en la inminencia del regreso de Cristo?

Respuesta: Aparentemente sí (1 Tes. 4:17; 2 Ped. 3:11-13).
Estos y otros textos indican que los apóstoles esperaban que Cristo viniera en sus días; “la expectativa de
la venida del Señor era notable en la iglesia primitiva” (W.B. Quigley, Ministry, agosto de 1980, p. 18).
Muchos cristianos siguieron cultivando esta esperanza hasta el siglo III, pero a medida que el cristianismo
aumentaba su popularidad, la idea del pronto regreso de Cristo comenzó a disiparse. La esperanza de la
segunda venida de Cristo revivieron hacia fines del primer milenio, y en diversos momentos hasta llegar a
nuestros días (Encyclopaedia of Religion and Ethics [Enciclopedia de religión y ética], 1967, t. 11, pp.
284, 285; B.W. Ball, The English Connection [La conexión inglesa], 1981, pp. 181, 182). Hoy este
concepto de la “urgente expectativa” sigue firme y aumenta en firmeza mientras la gente, sea religiosa o
no, aguarda un cataclismo (W.B. Quigley, Ministry, junio de 1980, pp. 11, 12).
10. ¿Estaba bien fundada para los primeros discípulos la creencia en el inminente regreso de Cristo?
Respuesta: ¡No!
El mero hecho de que algunos de los seguidores de Dios tenían cierto punto de vista en algún momento de
su experiencia, no constituye evidencia de que su opinión reflejara el ideal de Dios (Mat. 19:7, 8).
11. ¿Registra la Escritura algunos ejemplos de que los creyentes hayan interpretado mal el mensaje que
recibieron?
Respuesta: ¡Sí! He aquí algunos ejemplos:
a) Los discípulos de Cristo no entendieron cuál era su ________ (Luc. 24:21, 25-27).
b) Eva creyó que la promesa del Redentor se había cumplido cuando nació su primer hijo. Dijo:
“Por _________ de Jehová he _________ este varón”. La versión inglesa de Spuriel dice así: “He
adquirido el varón Jehová” (Gén. 3:15; 4:1).
c) El profeta Daniel no __________ plenamente el significado de sus visiones (Dan. 8:27; 9:21-
23; 12:8, 9).
d) Los creyentes del período inmediatamente anterior a 1844 entendieron mal la aplicación de la
palabra “purificado”, relativa al santuario, y a la cual se refería el “librito” de Daniel (Apoc. 10:8-
11).
A comienzos del siglo XIX los discípulos creyeron que Jesús regresaría a la tierra en 1844. Pero con el
transcurso del tiempo, y al no haber señales visibles del regreso del Señor, se sumieron en una gran
desilusión. Entonces entendieron que la profecía de Apoc. 10 anunciaba esa desilusión, y que debían
renovar sus esfuerzos para diseminar el mensaje evangélico. Comprendieron que en 1844 Jesús había
iniciado la última etapa de su ministerio en el Cielo. Repentinamente había entrado en el segundo
compartimento del santuario para comenzar su obra final allí.
12. ¿Qué acontecimientos sucederán en el mundo y en la iglesia antes de la segunda venida de Cristo?
Respuesta:
a) Se manifestaría en el mundo un poder religioso enemigo de Dios, que continuaría hasta el fin
del tiempo y sería destruido por “el ____________ de su venida” (2 Tes. 2;3, 4, 8).
b) El poder religioso a que nos hemos referido en el inciso anterior ejerció gran poder durante
1260 años; durante ese lapso los santos experimentaron intensa _____________ (Dan. 12:7; 7:25;
Mat. 24:29; Apoc. 12:6).
Esta profecía comenzó en el año 538 d.C. cuando el emperador Justiniano quebrantó el poder de los
arrianos en Italia (aunque la guerra continuó hasta el año 555) y le hizo importantes concesiones a la
iglesia papal. Esto aumentó en gran manera su poder temporal. Varios años después de esto Gregorio el
Grande pudo escribir pomposamente: “Me gustaría saber si el papa, en este mundo, es un dirigente
espiritual o un rey temporal”. La profecía termino en 1798 cuando el papa Pío VI fue detenido por el
general Berthier, del ejército revolucionario francés. “El papado se sumió en las más hondas
profundidades de los tiempos modernos”, como consecuencia de este portentoso acontecimiento.
(Encyclopaedia Britannica, 1879, t. 10, pp. 796, 797; 1886, t. 20, p. 783; 1961, t. 17, p. 201; 1969, t. 17,
p. 266; Funck & Wagnall’s New Encyclopedia [Nueva enciclopedia de Funck y Wagnall], 1975, t. 19, p.
163). Las Escrituras predicen un resurgimiento del poder papal que persistirá hasta la venida del Señor
(Apoc. 13:3-8).
c) La ciencia debía __________ notablemente (Dan. 12;4).
En primera instancia el aumento de la ciencia –es decir, del conocimiento– se aplica al aumento de la
comprensión de las profecías del libro de Daniel. El aumento de esta conocimiento ha coincido en buena
medida con la revolución científica y tecnológica. Este período de desarrollo tecnológico comenzó en
Gran Bretaña alrededor del año 1760, y se diseminó por otros países en el curso del siglo siguiente. La
prosperidad que resultó del reemplazo de las técnicas manuales por las máquinas condujo al surgimiento
de “prósperas nuevas empresas que a su vez generaron más investigación científica y más progreso
tecnológico” (Funck & Wagnall’s New Encyclopedia, 1971, t. 13, pp. 286, 287). Este notable aumento de
la ciencia prosigue hasta el día de hoy.
d) Grandes señales celestes, anunciadas por las Escrituras, deben preceder a la segunda venida de
Cristo. La Biblia indica que esas señales se darían mientras la puerta de la misericordia estuviera
aún abierta, porque se nos asegura que “todo aquel que _________ el nombre del Señor, será
_______” (Mat. 24:29; Joel 2:30-32).
Mencionamos estas señales en las lecciones 9 y 10. En esos estudios determinamos que la gran profecía
de tiempo mencionada en la Biblia terminó en 1844. Esas señales concitaron la atención del mundo.
¡Estamos viviendo en el tiempo del fin!
e) La profecía de tiempo más larga de la Biblia, la de los 2.300 años, tenía que cumplirse. La
última tarea de Cristo, en preparación de su venida, comenzó en 1844. Esta ______________ del
santuario celestial sigue aún (Dan. 7:26, 27; 8:14).
Estudiamos esta profecía en la lección 10. En la lección 11 analizamos el propósito del juicio. Una
importante función del juicio previo al advenimiento es llamar la atención de los habitantes del mundo a
los asuntos de naturaleza moral que están en juego en el conflicto entre Cristo y Satanás, e invitarlos a
aceptar la salvación que ofrece Dios.
f) Se predicará el ___________ en todo el mundo (Mat. 24:14).
Esta es la única tarea que queda por cumplirse; cuando eso ocurra, Cristo volverá triunfante. Los
modernos medios de comunicación permiten que el cumplimiento de la comisión evangélica de predicar
el mensaje de salvación a todos los habitantes del mundo se lleve a cabo en un lapso relativamente corto.
Como contrapartida de la predicación de la Palabra de Dios, venos el resurgimiento de otros movimientos
religiosos y en espacial del islam.
g) Algunos factores que se oponen a la aceptación de la invitación de Dios son el hecho de que la
fe en la Biblia ha declinado últimamente, a lo que se une el deterioro de las normas morales. Esta
situación fue anunciada con las siguientes palabras: “No vendrá sin que antes venga la
___________” (2 Tes. 2:3).
h) Los problemas se incrementarán por el hecho de que muchos perderán su fervor cristiano. Su
amor se “_________” (Mat. 24:12).
i) Al mismo tiempo se deteriorará la calidad de la vida en la tierra, ya que sus habitantes se han
dedicado en gran medida a “__________ la tierra” (Apoc. 11:18).
El planeta experimenta una presión sin precedentes como consecuencia de la explotación de sus recursos,
del aumento incontrolable de su población y del aumento de los niveles de contaminación.
13. ¿Qué obra tiene que terminar Cristo en el Cielo antes de venir en gloria?
Respuesta: La obra de Cristo como ______ ___________ consiste en completar la santificación
de su pueblo, y terminar de borrar de los libros de registro los pecados confesados por los santos
(Heb. 5:5, 6; Dan. 8:14; Lev. 16:20, 21).
Justo cuándo se terminará la obra de Cristo en el tribunal celestial, las Escrituras no lo revelan. Esta obra
hasta cierto punto está vinculada con la reacción de la gente a la urgente tarea que es necesario llevar a
cabo. El ángel con el sello de Dios aparece en las Escrituras diciéndoles en voz alta a los ángeles
encargados de restringir los poderes de las tinieblas, que lo sigan haciendo hasta que la tarea de Dios esté
completa en la tierra (Apoc. 7:1-3). No es Dios quien posterga voluntariamente esa tarea, sino que es
longánime y toma en cuenta las debilidades y las indecisiones tan características de la naturaleza humana
cuando se trata de asuntos de valor eterno (2 Ped. 3:9, 10). Como el apóstol Pablo, seguimos creyendo
firmemente en la venida del Señor (2 Tim. 4:6-8).
El sellamiento
• Destacar el hecho de que antes de la venida de Cristo se debe llevar a cabo una obra especial en la
vida de los miembros del pueblo de Dios.
14. ¿Qué obra se debe terminar en favor del pueblo de Dios antes que termine el tiempo de prueba?
Respuesta: Los siervos de Dios deben ser __________ (Eze. 9:2-5; Apoc. 7:2, 3).
El tiempo de prueba termina cuando Cristo completa su obra en el santuario celestial. En la profecía de
Ezequiel se muestra al Señor demorándose junto al umbral del templo mientras espera que se termine la
obra de sellar (Eze. 9:3). Este sellamiento ocurre cuando los siervos de Dios han aceptado “la verdad,
tanto intelectual como espiritualmente, de manera que ya no se los puede mover” (E.G. de White,
Maranata, 1976, p. 200). Los principios de la Ley de Dios están escritos en sus mentes, y su voluntad está
plenamente dedicada a Dios. La oposición y la persecución anunciadas por las Escrituras, que ha de
sobrevenir a este mundo, son incapaces de debilitar la resolución que han hecho de obedecer por fe todos
los mandamientos de Dios (Apoc. 7:14, 15; 13:15-17). Ahora nuestras mentes se deben concentrar en las
verdades de la Palabra de Dios y en las verdades especiales para este tiempo. Se nos dice que “la verdad y
la gloria de Dios son inseparables, y nos es imposible honrar al Señor con opiniones erróneas cuado
tenemos la Biblia a nuestro alcance” (E.G. de White, El conflicto de los siglos, 1975, p. 655).
15. ¿En qué consiste realmente el sello que se estampa en la frente de los hijos de Dios?
Respuesta: Es una _______ de redención o santificación (Eze. 9:4; Apoc. 14:1, 5, 12).
El sello de Dios no es una marca visible. Se estampa en la frente, que es un símbolo del asiento de la
razón y la voluntad. El sello especial al que se refiere el Apocalipsis se aplica a los que han decidido
obedecer a Dios en un momento de la historia humana cuando se les pide a todos que obedezcan las leyes
de los hombres y no las de Dios (Apoc. 13:15-17). El sábado llega a ser el motivo de la discordia.
Siempre ha sido la señal y el sello de lealtad (Exo. 31:12, 13), pero en las etapas finales de la historia de
esta tierra la Ley de Dios y su mandamiento más significativo, el cuarto, llegará a ser un tema de intensa
contención. Dios pone su marca de aprobación sobre los que, frente a un decreto de muerte, lo obedecen
en todo y guardan el sábado porque lo aman y conocen por experiencia el gozo de vivir una vida
victoriosa por medio de Cristo (Apoc. 13:15-17; 14:12). Los que reciben esta marca han formado el
hábito de ponerse de parte de la verdad en lugar de seguir a las multitudes. Tienen independencia de
criterio y de espíritu, y someten todo a la prueba de la Palabra de Dios (Isa. 8:20).
16. ¿Quiénes participan en la colocación del sello de Dios en la frente de sus hijos?
Respuesta: Los santos _________ y el Espíritu de Dios (Apoc. 7:2, 3; Efe. 1:13).
Todo el cielo está implicado en nuestra salvación.
17. ¿Qué cualidades adornan a los candidatos al Cielo?

Respuesta:
a) Anhelan poseer la justicia de Cristo, y se lamentan “por todas las _____________ “ que se
hacen en nombre de la religión (Eze. 9:4).
b) Están cubiertos por la justicia de Cristo y viven por fe; en otras palabras, están revestidos de
mantos “emblanquecidos en la ________ del Cordero” (Apoc. 7:13, 14).
c) Han luchado contra las falsas doctrinas y las han rechazado. Son espiritualmente __________
(Apoc. 14:4). (Una mujer pura, o “virgen”, es un símbolo de la verdadera iglesia [Apoc. 12:1-5],
y una mujer inmoral simboliza a una iglesia apóstata [Apoc. 17:1-6]).
d) Son sin ________ delante del trono de Dios (Apoc. 14:5).
e) Por la fe, guardan los ______________ de Dios (Apoc. 14:12).
f) Tienen ____________ ante la aparente demora del regreso de Cristo, y una actitud de oración
frente a la apostasía que se manifiesta entre sus hermanos (Apoc. 14:12; Eze. 9:4).
Los que deseen formar parte de este grupo, estarán “afligiendo sus almas, confesando sus pecados y
suplicando con fervor el perdón por medio de Jesucristo su Abogado” (E.G. de White, Testimonies, 1948,
t. 5, p. 472). “Los que venzan al mundo, la carne y al diablo, serán los favorecidos que recibirán el sello
de Dios. . . Sólo los que, en su actitud ante Dios, se encuentren entre los que se arrepienten y confiesas sus
pecados en el gran día antitípico de la expiación, serán reconocidos y considerados dignos de la
protección de Dios” (E.G. de White, Testimonies to Ministers [Testimonios para pastores], 1962, p. 445).
En Mal. 3:3 se presenta a Dios como un “orfebre” que refina y purifica la plata, de manera que sus
seguidores puedan presentar ofrendas “en justicia”. Dios permite que nos sobrevengan pruebas para que
nuestros caracteres se desarrollen.
18. ¿Qué experiencia es necesaria a fin de que los cristianos sean en verdad candidatos para el Cielo?
Respuesta: Los santos deben experimentar el derramamiento del Espíritu Santo a fin de que
puedan _____ ___________ hasta los confines de la tierra (Os. 6:3; Hech. 1:8).
La lluvia tardía
• Determinar que la tarea especial que llevará a cabo el pueblo de Dios antes del regreso de Cristo sólo
será posible gracias al poder del Espíritu Santo.
• Estudiar la obra del Espíritu Santo en la vida de los cristianos.
19. ¿Qué figura de lenguaje se emplea en las Escrituras para referirse al derramamiento del Espíritu
Santo?
Respuesta: La caída de las lluvias temprana y ________ (Joel 2:23, 28-31; Os. 6:3).
En Palestina las primeras lluvias, que ocurren entre octubre y noviembre, caen después de las siembras,
mientras que la lluvia tardía (marzo-abril) contribuye a que el grano madure. Ambas eran esenciales para
las cosechas. Mediante e empleo de estas expresiones relacionadas con las actividades agrícolas, los
profetas de Dios describieron la obra del Espíritu Santo. En el contexto del pasaje de Joel, el
derramamiento de la lluvia tardía sobre los discípulos ocurre inmediatamente antes del regreso del Señor
en gloria. El derramamiento del Espíritu Santo en pentecostés se puede considerar entonces como la lluvia
temprana (Hech. 2:1-3). Juan el Revelador describió el derramamiento del Espíritu Santo con poder
extraordinario en el período que precede a la venida de Cristo (Apoc. 14:6-9; 18:2). Los ángeles de
Apocalipsis 14 y 18 proclaman su mensaje en “alta voz” a un mundo que se encuentra en los límites de la
destrucción. El último llamado a este mundo lo proclama un ángel “con voz potente” (Apoc. 18:2). El
apóstol Pedro se refiere de este modo a este derramamiento del Espíritu sobre los siervos de Dios: “Y
vengan los tiempos del refrigerio de la presencia del Señor” (Hech. 3:19, Emanuel).
20. ¿Qué objetivos definidos alcanzará la lluvia tardía con respecto al pueblo de Dios?
Respuesta:
a) Capacita a los verdaderos creyentes para que proclamen el evangelio eterno, con su llamado a
la obediencia por fe, con gran poder o “con voz _________” (Apoc. 18:2).
En todos los tiempos los creyentes en Dios han dependido del ministerio del Espíritu Santo para disponer
de eficacia y poder en la proclamación de su mensaje. Los primeros discípulos recibieron poder para
testificar cuando vino esta bendición (Hech. 1:8).
b) Fortalece a los creyentes para pasar por la gran prueba de la __________ de Jacob (Dan. 12:1;
Gén. 32:6-8; 33:1-4).
Las Escrituras nos informan que un increíble tiempo de angustia le sobrevendrá a los habitantes de este
mundo inmediatamente antes de la venida de Cristo. Los creyentes entonces “necesitaremos tener una
experiencia que hoy por hoy no poseemos” (Apoc. 3:18; E.G. de White, El conflicto de los siglos, 1975,
p. 680). La necesidad del derramamiento del Espíritu Santo en la vida del creyente en preparación para
este evento se presenta vívidamente en la parábola de las diez vírgenes (Mat. 25:7-9). El aceite que las
vírgenes insensatas tanto necesitaban, representa al Espíritu Santo (Zac. 4:12, 6).
El derramamiento de la lluvia tardía no obra a fin de preparar súbitamente al creyente para la venida de
Jesús. Sólo recibirán esta gran bendición los que hayan buscado a Dios todos los días, los que cada día se
hayan consagrado a él, y por medio de la oración y el poderoso brazo de la fe hayan ganado la victoria
sobre todo pecado conocido. Habrán desarrollado el hábito de responder afirmativamente a las
invitaciones del Espíritu Santo y habrán sido obedientes a su llamado (Hech. 5:32). La misma obra que
llevaron a cabo los discípulos antes del pentecostés, es la que se debe hacer hoy.

1. Ángel
2. a) expulsó b) Anciano
3. a) autoridad b) Rey c) condenó
4. Noé
5. a) burla b) voluntario c) segunda d) cuidados e) mal f) violencia g) concupiscencia
6. pensáis
7. retarda
8. ninguno
9. ---
10. ---
11. a) misión b) voluntad, adquirido c) entendió d) ---
12. a) resplandor b) persecución c) aumentar d) invoque, salvo e) purificación f) evangelio g)
apostasía h) enfriará i) destruir
13. Sumo Sacerdote
14. sellados
15. marca
16. ángeles
17. a) abominaciones b) sangre c) vírgenes d) mancha e) mandamientos f) paciencia
18. dar testimonio
19. tardía
20. a) potente b) angustia
15. AFLIGID VUESTRAS ALMAS
En preparación para el día de la expiación, o juicio, que ocurría una vez al año en el calendario judío,
Dios invitaba a la gente a afligir sus almas. Recordemos que esa jornada era un día de descanso especial --
un sábado ceremonial--, y que era un día de espiritualidad tan intensa, que nada debía interferir con él.
Cada cual debía entrar en un momento de ayuno y reflexión, y debía buscar una bendición especial de
Dios. Estas ideas aparecen expresadas de esta manera en una declaración de nuestros días: “El día se
observaba con ayuno y oración, y una nueva dedicación a la vida religiosa. El Yom Kippur marca la
culminación de los diez días de penitencia que comienzan con el Rosh Hshanah, el día de año nuevo.
Aunque el Yom Kippur es solemne, y se lo considera un día de juicio, no es de carácter lúgubre, puesto
que es un momento de gracia y da la oportunidad de buscar el perdón por los pecados cometidos contra
Dios; en el caso de los pecados cometidos contra otros seres humanos, primero se debe procurar el perdón
del que ha sido perjudicado” (Collier’s Encyclopedia [La enciclopedia de Collier], 1965, p. 702).
En las lecciones anteriores descubrimos que el conjunto de ceremonias que los judíos llevaban a cabo año
tras año, no sólo impartían importantes lecciones en cuanto a la dinámica de la salvación, sino que
también ofrecían vislumbres acerca del cronograma de la salvación y de los grandes acontecimientos que
ocurrirían antes de su venida en gloria.
La pregunta que se nos hace hoy, así como le fue hecha al pueblo de Dios de la antigüedad, es si estamos
listos para salir al encuentro del Señor. ¿Qué clase de gente quiere Dios que seamos en estos días finales
de la historia de esta tierra? Es la pregunta que trataremos de contestar en la presente lección.
Afligid vuestras almas

• Enfocar nuestra atención en las actitudes y la conducta de los verdaderos adoradores en el día de la
expiación de la antigüedad.
• Determinar la naturaleza de la genuina experiencia cristiana que Dios espera de su pueblo hoy,
durante el día antitípico de la expiación.
En la literatura hebrea se conoce el día de la expiación como un día de “aflicción del alma” (H. Wouk,
This is My God [Este es mi Dios], 1960, p. 84). Hoy, en el día antitípico de la expiación, es bueno que nos
preguntemos cuál es nuestro deber hacia Dios.
1. ¿Qué se le pedía al pueblo de Dios que hiciera en el día de la expiación?

Respuesta: El pueblo debía _________ sus almas (Lev. 16:31).
La palabra que se usa aquí trasunta una gran solemnidad. El imperativo “afligiréis” también se puede
traducir por “humillaréis” o “mortificaréis”. La idea que se da es que se trata de un día para examinar la
vida, los motivos, un día en el que se debía practicar la abnegación, y en el que el foco de la atención
debería estar en las cosas de Dios. Las grandes preguntas que se debían contestar eran: “¿Estoy sirviendo
el Dios viviente? ¿Estoy plenamente dedicado a él? Hoy, de la misma manera, se nos invita a
consagrarnos humildemente a Dios, a examinar nuestra vida y a confesar y abandonar nuestros pecados.
2. ¿Qué otras reacciones se esperaban en el día de la expiación?

Respuesta:
a) El pueblo debía reunirse en el santuario para tener una “santa _____________” (Lev. 23:27).
b) Se debía presentar a Dios una ofrenda consumida por el _______ (holocausto), llamada
ofrenda por el ________ (Lev. 23:27; 16:15, 24, 25).
c) Los sacerdotes debían llevar a cabo una obra de purificación, a fin de “___________” al
pueblo (Lev. 16:30).
d) Ese día debía ser “un ________, un solemne descanso” (Lev. 16:31).
Hoy, en el día antitípico de la expiación, debemos encontrarnos por fe con Cristo en el santuario celestial.
Debemos seguir su ministerio, la obra de intercesión que lleva a cabo allí. Debemos considerar su vida
aquí en la tierra y su ideal para sus hijos. En este momento tenemos que concentrarnos en Cristo, nuestro
Sustituto, que ciertamente fue ofrecido por los pecados del mundo (1 Juan 1:29; Gál. 1:4; 2 Cor. 5:21).
Como nuestros Sustituto, nos justifica y nos da seguridad. Además, Dios desea librarnos del abrumador
poder del pecado en nuestra vida diaria. Desea santificarnos (Eze. 36:26, 27). ¡Qué seguridad nos da con
su promesa de que ninguna tentación puede vencer a los que son fuertes en la fe! (1 Cor. 10:13).
Ciertamente se nos invita a participar del descanso de la salvación simbolizado por el sábado (Heb. 4:7, 3,
4).
3. ¿Qué aspectos llegaron a caracterizar con el tiempo la conducta inapropiada de los hijos de Israel en
ese día de ayuno y aflicción?
Respuesta:
a) Celebración. El día de ayuno se convirtió en un día de regocijo, un día en el que los judíos
buscaban “su propio _________” (Isa. 58:3).
b) Oprimían a sus “____________” (v. 3).
c) Se dedicaban a ____________ y debates (v. 4).
d) Se reunían para “herir con el ______ inicuamente” (v. 4).
e) Se exaltaban a sí mismos; eran egoístas (v. 4).
El único ayuno obligatorio del calendario judío era el día de la expiación (Hech. 27:9; Encyclopaedia
Judaica, 1971, t. 6, vol. 1195). Los versículos de Isaías que acabamos de citar sugieren que el profeta se
refiere a las acciones perversas llevadas a cabo en ese día especial. Pero también se pudo referir a los
numerosos días de ayuno que se habían introducido en la vida religiosa de los judíos. Se practicaba el
ayuno como una manera de conseguir el favor de Dios. Esas formas de piedad se ven incluso hoy.
Debemos tener cuidado, no sea que las formas de piedad ocupen el lugar de la verdadera experiencia
espiritual (2 Tim. 3:5).
4. En contraste con la conducta de Israel, ¿qué manera de vivir acepta Dios especialmente en este período
de la historia del mundo, justo antes de la venida de Cristo?
Respuesta:
a) _________ todo lo que nos ligue al pecado y la impiedad (Isa. 58:6).
b) Desarrollar tal tipo de relación con Cristo que ya no tengamos una actitud ni de crítica ni de
arrogancia o “hablar _________” (v. 9).
c) Manifestar ______ por los necesitados en nuestra esfera de influencia (vs. 7, 10; Juan 13:34,
35).
d) Restaurar las verdades de la Palabra de Dios hasta que alcancen su plena belleza, y así
podamos ser llamados “___________ de portillos” (v. 12).
e) Trabajar para la salvación de los demás; “dejar ir libres a los ______________” (v. 6).
El dramático y urgente llamado que se extiende a los habitantes de este mundo justo antes del regreso de
Cristo consiste en invitarlos a regresar a Dios, a cortar las amarras que los atan a las falsas formas de culto
y al tipo de experiencia religiosa que se encuentra comúnmente en este mundo (Apoc. 18:1-4). Siempre
debemos estar listos para trabajar por la salvación de los demás. La comisión de Jesús de Mat. 28:19
contiene la expresión “por tanto, id”, que implica una obligación. Al compartir con los demás nuestra
preocupación por su salvación, y al manifestarles nuestro amor en forma práctica, habrá mentes que se
sentirán impulsadas a considerar las cosas eternas. Dios está llamando en todas partes a hombres y
mujeres a volver a los principios de la Biblia. El tema de Isa. 58:12 es que se va a llevar a cabo una gran
obra de restauración, reforma y reavivamiento mientras recurrimos a la Palabra de Dios y rogamos por el
derramamiento del Espíritu Santo. Se restaurarán verdades que por mucho tiempo estuvieron ocultas bajo
el manto de las tradiciones humanas (por ejemplo, se destaca el sábado en los vs. 13 y 14; la reforma pro
salud aparece en la misma idea del ayuno del día de la expiación; además, puesto que vivimos en el día
antitípico del juicio, se nos amonesta a usar un atuendo humilde y no adornos decorativos - Exo. 33:5; 1
Ped. 3:3, 4). Esta es la obra que Dios quiere que se lleve a cabo en la tierra entre los que oyen su llamado
durante el día antitípico de la expiación en que estamos viviendo.
También notamos que en el día de la expiación los israelitas se reunían alrededor del santuario y “muy
solemnemente humillaban sus almas delante de Dios, para poder recibir el perdón de sus pecados y no ser
separados de la congregación. Cuánto más esencial es en este día antitípico de la expiación que nosotros
comprendamos la obra de nuestro Sumo Sacerdote y saber qué deberes se requieren de nosotros” (E.G.
White, Christ in His Sanctuary [Cristo en su santuario], 1969, pp. 108, 109). Antes de poder dar un
testimonio eficaz ante los demás, y de hacer la obra en la que Dios quiere que participemos, hay una gran
tarea que hacer en la vida individual. Es la misma que emprendieron los primeros discípulos antes del
pentecostés. La pregunta más importante que nos podemos hacer es: “¿Estamos realmente ‘escondidos
con Cristo en Dios’?” (Col. 3:3). No nos debemos dejar desviar por asuntos sin importancia. “El carácter
que cultivamos, la actitud que asumimos hoy, está fijando nuestro destino” (E.G. de White, Maranata,
1976, p. 200).
Santidad a Jehová
• Poner énfasis sobre el hecho de que el secreto de una vida cristiana de éxito es una íntima relación
con Cristo.
La Biblia habla mucho acerca de la santidad. Nuestra intención en esta sección consiste en averiguar cuál
es su significado y su importancia en los días que corren, que bien podrían ser los de “la última
generación”. ¿Qué tal si estamos viviendo en el momento cuando se proclaman las palabras: “El que es
injusto, sea injusto todavía; el que es impuro, sea impuro todavía; el que es justo, practique la justicia
todavía, y el que es santo, santífiquese más todavía” (Apoc. 22:11)? Se requiere una solemne preparación
para enfrentas los acontecimientos más trascendentales de todos los tiempos: el fin del tiempo de prueba y
el regreso de Cristo en gloria.
5. ¿Cómo describe Pablo a los cristianos que serán hallados dignos de heredar la vida eterna?
Respuesta: “Que el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser. . . sea
guardado _______________” (1 Tes. 5:23).
Se ha dicho que: “El ideal que Dios tiene para sus hijos está por encima del alcance del más elevado
pensamiento humano. El blanco a alcanzarse es la piedad (la santidad),la semejanza a Dios” (E.G: de
White, La educación, 1964, p. 16). El versículo de la Escritura que destacamos en nuestra respuesta
expresa este mismo pensamiento. Dios quiere que seamos completos en todo sentido por medio del poder
que él proporciona en respuesta a la fe. Todos los aspectos de la vida se deben poner en contacto con la
influencia modeladora de Dios, ya sea el estilo de vida (salud física), el lenguaje, los pensamientos y
nuestras actividades. Si depositamos nuestra confianza en el Señor por medio de la fe, él nos puede
guardar sin caída (Jud. 14). La persona que mantiene este tipo de relación estará a salvo en las manos de
Dios (1 Juan 3:9, 10,14).
6. Para salir en paz el encuentro del Señor, ¿qué consejo nos da él mismo?
Respuesta: “Seguid la ____ con todos y la santidad” (Heb. 12:14).
Dios desea que todos los cristianos estén separados y que se santifiquen (1 Tes. 4:3). La bendición de la
justificación por la fe sólo se puede retener “mediante la entrega continua de la voluntad y la obediencia
continua” E.G. de White, Mensajes selectos, 1966, t. 1, p. 465).
7. ¿Usó Cristo, cuando estuvo en la tierra, algún poder al que nosotros no tengamos acceso por la fe?
Respuesta: ¡No! Jesús dijo: “Yo. . . ______ hago por mí mismo” (Juan 6.38; 8:28; 1 Cor. 10:13).
Cristo no recurrió a su poder divino para defenderse. Su oración fue: “No se haga mi voluntad, sino la
tuya” (Mat. 26:39). Podría haber convocado una legión de ángeles para que le ayudaran, pero no lo hizo.
La tentación en la cruz fue: “Salvó a otros; el mismo no se puede salvar” (Mat. 27:42). Satanás no pudo
tentar a Cristo para que perdiera la fe o pecara contra Dios. Por eso él (Cristo) murió vencedor. Se nos
promete acceso a la misma fuente de poder y, por la fe, se nos promete la victoria sobre el poder del
pecado (Apoc. 3:21). Jesús proclamó: “Yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para
que el mundo conozca que tú me enviaste” (Juan 17:23). Al decir esto dio a entender que la relación que
nosotros debemos mantener con él es similar a la que él mantenía con su Padre (nuestra lealtad debe ser
total), entonces la victoria sobre el pecado será nuestra.
8. La derrota de Satanás frente a Jesús, ¿lo indujo a disminuir sus ataques al pueblo de Dios?
Respuesta: ¡No! El es el “acusador” de los seguidores de Cristo, y le hace la ________ incluso a
los que quedan de ellos, el remanente (Apoc. 12:17).
9. ¿Cuáles son las principales razones por las que Satanás ataca al remanente?
Respuesta: Porque guardan los ______________ de Dios y tienen la ____ de Jesús (Apoc. 14:12;
1 Juan 5:4).
La Ley de Dios es un trasunto de su carácter. Éste es un grupo de gente que conserva las verdades
enseñadas por Jesús y que guarda los Diez Mandamientos. Son vencedores gracias a la fe, y así reflejan el
carácter de Cristo. Mantienen la Ley y el evangelio en perfecta unidad. Tal demostración de obediencia a
Dios destruye efectivamente el argumento esgrimido permanentemente por Satanás, a saber: los seres
humanos no pueden guardar la Ley de Dios. También descarta la pretensión de que a partir de la cruz
caducó la Ley (o ciertos aspectos de ella).
La marca de aprobación
Χ Analizar la naturaleza de la marca de aprobación que se estampará en la frente de los amigos de
Dios.
10. Se dice que los miembros de la última generación de habitantes de la tierra tiene algo en la frente.
¿Qué es?
Respuesta: Tienen el ________ del Padre (o su sello) escrito en la frente (Apoc. 7:3, 4; 14:1).
Tomemos nota que este nombre no esta escrito sobre la frente sino en (dentro de) ella). Esto contrasta
con la marca de Satanás que se coloca sobre la mano y sobre (en griego epi) la frente (Apoc. 13:16). La
frente representa el asiento de la inteligencia. En consecuencia, los que tienen la marca en la frente dan un
asentimiento consciente al Dador, y su dedicación a él también es consciente (Rom. 7:25). La mano, en
cambio, simboliza el trabajo (Ecl. 9:10). La marca en la mano significa que la persona que la recibe
trabajará bajo la dirección de ese poder al margen de un definido asentimiento intelectual.
La palabra griega traducida como “sello” (sfragis) también se puede traducir por “acreditado”,
“certificado”, “autenticado” o “sellado para demostrar que existe un convenio”. De ahí que el sello de
Dios sea una declaración de que los que están sellados han sido declarados aptos por Dios para entrar al
Cielo, sobre la base de la vida de fe que vivieron. En cambio la palabra “marca” (járagma) se puede
traducir por “inscripción”. “endoso”, “tipo” (de letra) (H.G. Lidell y R. Scott, A Greek-English Lexicon
[Diccionario griego-inglés], 1961, pp. 1742, 1976). Los que tienen la marca de la bestia cuentan con la
aprobación o el endoso de Satanás, o manifiestan algunas de sus características. Los que rechacen la
marca de la bestia serán los que manifiesten independencia de criterio; rehúsan la popularidad y el
conformismo, y en cambio “luchan por la dignidad y la integridad de la verdad” (L.K. Tobiassen, Journal
of True Education [Periódico dedicado a la verdadera educación], 1955, 17, No. 3, p. 13).
11. Los que tienen el sello de Dios despliegan ciertas características, ¿cuáles son?
Respuesta:
a) Están cubiertos con la justicia de Cristo y “han lavado sus ropas y las han _____________ en
la sangre del Cordero” (Apoc. 7:14).
b) Son __________, es decir, son puros delante de Dios (Apoc. 14:4).
c) No hay engaño en ellos ni ________ (Apoc. 14:5).
d) Guardan los ______________ de Dios )Apoc. 14:12).
e) Ganan la victoria y guardan los mandamientos por la ___ (1 Juan 5:4; Apoc. 3:21).
Es de sumo interés notar que el gran asunto en esta lucha final es si tenemos el sello de Dios o la marca de
Satanás (Apoc. 7:3; 13:16). Éste, desde su caída en el Cielo, ha estado usando su poder para oponerse a
Dios. En Ezequiel 28 el Señor hace algunas observaciones por medio del profeta en el sentido de que el
rey de Tiro y el poder maligno que lo estaba animando (a saber, Satanás, un ángel que había estado muy
cerca de Cristo, un querubín cubridor, v. 12). En estos versículos se nos permite tener algunas vislumbres
acerca detalles de los pensamientos y las actividades de Satanás antes de su expulsión del Cielo. Veamos
uno de estos detalles en el v. 12. La frase traducida “Tú eras el sello de la perfección” también se puede
traducir legítimamente por “Tú le pusiste el sello a la ordenanza”. Se puede considerar, entonces, que
Satanás era el ángel que, en el Cielo, le ponía el sello de aprobación a las ordenanzas o transacciones del
gobierno del Cielo. Su conflicto con el gobierno de Dios significó que perdió su puesto en el Cielo. Como
represalia Satanás obra en el mundo de hoy por medio de varias organizaciones religiosas apóstatas para
ponerle su sello a sus ideologías y sus actividades. Es capaz de actuar con mucha eficiencia por medio de
diversos instrumentos, pero la obra suya que ha tenido más éxito es la del “cuerno pequeño” revelado por
Daniel (Dan. 7, 8) o, como lo dice la Biblia en otros pasajes: “aquel impío” (2 Tes. 2:7-9). Los que hayan
sido aceptados por Dios como candidatos para el Cielo se mantienen firmes de parte de los principios del
Cielo, incluso toda la Ley de Dios, Porque tienen una actitud y una relación correctas con Dios.
12. ¿Qué doctrinas cristianas ataca en especial el “cuerno pequeño”, es decir, la Roma papal?
Respuesta:
a) La plena suficiencia de Cristo (el Príncipe de los príncipes o Príncipe de la fortaleza) como
fuente de la ________. La verdad proclamada por el Señor es que “el justo por la ____ vivirá”
(Dan. 8:11, 12, 15; Hab. 2:4).
b) Este poder intentaría ________ la perpetuidad de los tiempos y la Ley contenidos en las
Sagradas Escrituras.
En estos pasajes la Biblia revela que los temas de controversia tienen que ver con la Ley y la fe. La plena
suficiencia de Cristo como nuestro Salvador y Mediador ha sido negada por el paganismo y oscurecida
por el papado. El “cuerno pequeño” ha echado por tierra las verdades con respecto a Cristo reveladas en
las Escrituras: su ministerio, su sacerdocio y el santuario celestial (Dan. 8:12, 25; 2 Tes. 2:3-5). La faceta
papal de este poder ha reemplazado al Sumo Sacerdote divino y sin pecado en el Cielo, por un sacerdocio
humano y pecador aquí en la tierra. En lugar de que el centro de atención sea Dios y su santo templo en el
Cielo, la atención de la gente se concentra en servicios religiosos y formas de culto aquí en la tierra. Por
eso es exacta la declaración que afirma: “Se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por
Dios” (2 Tes. 2:4).
También observamos (véase el APÉNDICE) que el segundo mandamiento ha desaparecido totalmente de
los catecismos de la iglesia papal, al cuarto se lo ha abreviado muchísimo, y al décimo se la ha dividido
en dos para compensar la eliminación del segundo. Es interesante notar que en Apoc. 14:12 (también en
Apoc. 3:21), los que serán considerados dignos de heredar el mundo renovado se distinguirán por su
victoria por la fe sobre todo pecado, y por su gozosa obediencia a todos los mandamientos de Dios.
13. ¿Puede producir graves consecuencias el hecho de no prestar atención a un solo mandamiento?
Respuesta: Sí. Si a sabiendas desobedecemos un solo mandamiento, se nos considera infieles, y
“culpables” de desobedecerlos “______” (Sant. 2:10).
Santiago, en su tratado acerca de la Ley y la fe, aclara perfectamente que la verdadera fe se revela
mediante una amante obediencia a todos los mandamientos de Dios (Sant. 1:22-25). En otras palabras, la
verdadera fe se manifiesta en obras de obediencia a Dios y en amor hacia los demás. Con frecuencia se
afirma en el mundo cristiano de hoy que sólo es necesario tener en cuenta nueve de los Diez
Mandamientos dados a Moisés en el Sinaí. Se alega que sólo esos nueve forman parte de la Ley moral. El
cuarto mandamiento, ostensiblemente descartado por esta razón, tiene sim embargo un profundo
contenido moral, puesto que proclama “la igualdad de todos los seres humanos” (ver Isa. 56:1-8).
También promueve “la creencia en la creación” y la “subordinación de la naturaleza a Dios”
(Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 5, col. 1447). Se ve entonces que el cuarto mandamiento complementa
los tres primeros y tiene un notable contenido moral.
Se alega también de que siendo que Cristo salió victorioso de sus embates con Satanás, los seres humanos
no necesitan preocuparse tanto de vivir vidas victoriosas. Es verdad que Cristo triunfó gloriosamente en la
cruz, pero es igualmente cierto que él quiere que cada creyente triunfe gloriosamente por fe en él (Rom.
13:11-14; Apoc. 3:21; 1 Juan 5:4). En efecto, las glorias del Cielo sólo se le prometen a los vencedores
(Apoc. 3:12). “La misma imagen de Dios se ha de reproducir en la humanidad. El honor de Dios, el honor
de Cristo, están comprometidos en la perfección del carácter de su pueblo” (E.G. de White, El Deseado
de todas las gentes, 1955, p. 625).
14. ¿Cuáles son los secretos de una relación salvadora con Jesucristo?
Respuesta:
a) Compra _____ afinado en fuego (Apoc. 3:18).
b) Compra vestiduras _________ (v. 18).
c) Unge tus ojos con _________ (v. 18).
El oro refinado en fuego es “la fe que obra por el amor” (E.G. de White, Lecciones prácticas del gran
Maestro, 1941, p. 158; Gál 5;6; Sant. 2:5). El amor es la base de toda actividad cristiana, puesto que Dios
es amor (1 Juan 4:12, 16). Las vestiduras blancas, que deben usar todos los que sean invitados a la fiesta
de bodas del Cordero, es la justicia de Cristo (Mat. 22:11; Gál. 3:27). Nuestra propia justicia es como
trapos inmundos. Cristo nos cubre con su justicia cuando acudimos a él y le pedimos perdón por nuestros
pecados, y cuando le rogamos que nos dé fuerzas para resistir el pecado. El colirio es el “·discernimiento
espiritual” que Dios nos da por medio del Espíritu Santo (E.G. de White, Testimonies, 1948, t. 5, p. 233;
Juan 16:8-11). El Espíritu nos convence de pecado y nos guía a la verdad (Juan 16:13).
Con nuestra atención fija en Cristo

• Indicar cómo podemos los cristianos concentrar cada día en forma práctica nuestra atención en Cristo.
La historia de la Biblia es un glorioso relato acerca de cómo Dios vence el mal con el bien. Dios quiere
que nosotros ganemos por la fe la victoria que Cristo obtuvo sobre Satanás.
15. ¿Es posible en este mundo la victoria sobre todo pecado conocido? Si así fuera, ¿cómo se la puede
lograr?
Respuesta: Sí. La victoria sobre todo pecado conocido está asegurada por medio de Cristo,
porque “todo aquel que _________ en él, no peca” (1 Juan 3: 2-9; 1 Cor. 10:13).
La fe en los méritos de Cristo y la consiguiente recepción de poder, que él proporciona ampliamente, son
las avenidas del éxito para el cristiano (1 Juan 5:4). Notemos: “La prueba de nuestra fe no debería
producir desesperación ni desánimo. No deberíamos darnos por derrotados diciendo: ‘Soy pecador, y
cuando sea lo suficientemente bueno iré a Cristo; entonces podré creer y orar’. Usted nuca será por sí
mismo lo suficientemente bueno como para merecer el favor y la ayuda de Dios. Usted debe acudir a
Cristo tal como está. Él sale a su encuentro cuando usted se le acerca. Ponga su mano en la de Jesús, y él
lo conducirá. Crea que lo guarda, y entonces descubrirá que cuando su fe sea sometida a prueba, usted
saldrá más que vencedor por medio de Aquel que lo amó. Ganamos la victoria por fe en el poder que
Cristo tiene para salvarnos. Entonces la prueba de nuestra fe será para alabanza, honra y gloria cuando
Cristo aparezca. Usted alabará a Dios porque en Cristo encontró una ayuda siempre presente en
momentos de necesidad” (E.G. de White, Advent Review and Sabbath Herald [Revista adventista y
heraldo del sábado], 1892, t. 69, No. 10, p. 145).
16. ¿Qué pasos dice la Biblia que debemos dar a fin de asegurarnos una relación victoriosa con Cristo?
Respuesta:
a) Debemos _______ que podemos vencer por la fe (Heb. 11:6),
b) La Palabra de Dios será nuestro objeto de estudio. Las Escrituras nos dicen que las debemos
___________ en nuestros corazones y mentes (Sal. 119:11).
Jesús, cuando fue tentado, recurrió a las Escrituras.
c) La _________ es un arma poderosa en el arsenal del cristiano (Luc. 18:1; 1 Tes. 5:17).
Jesús dedicó mucho tiempo a la oración. Era habitual en él estar en comunión con Dios. La oración era el
secreto de su vida victoriosa, y también de su poderoso ministerio. David entendió el tema del poder de la
oración. Dijo: “Jehová, de mañana oirás mi voz; de mañana me presentaré delante de ti y esperaré” (Sal.
5:3). Dios responde la oración de fe. Concentrémonos en Cristo mientras estudiamos la Palabra y
mientras oramos.
d) Cuando somos tentados, debemos ejercer la facultad de _________ hacer lo recto (Heb. 11:24,
25).
La victoria implica más que creer. La historia de la tentación de José, mientras era esclavo, y su victoria
frente a la tentación que le tendió la esposa de su amo, es un poderoso ejemplo del poder de la voluntad
en la vida cristiana (Gen. 39:7-12). Jesús decidió hacer la voluntad de su Padre (conservó una relación de
fe con él), y resistió “hasta la sangre” (Heb. 12:2-4). Tenemos que decidir entre obedecer a Dios o a
Satanás; si decidimos obedecer a Dios, y pedimos con fe que nos dé su poder, se nos asegura el éxito
(Sant. 1:14, 15; 1 Juan 5:4).
e) Debemos regocijarnos cuando nos sobrevienen pruebas, y dar _________ a Dios, porque sin
duda él ve algo de valor en nuestros caracteres que conviene purificar (1 Tes. 5:16-18).
f) Decidirnos a cumplir, por la fe, ______ la voluntad revelada de Dios (Sal. 32:1, 2; Sant. 4:17).
17. ¿Qué gloriosas promesas hay para los vencedores?

a) Tendremos el privilegio de comer del fruto del _______ de la vida (Apoc. 2:7).
b) Seremos libres de la muerte _________ (v. 11).
c) Se nos dará el maná escondido, una piedrecita blanca, y un _______ nombre (v. 17).
d) Tendremos ___________ sobre las naciones (v. 26).
e) Estaremos cubiertos de vestiduras _________, y nuestro nombre permanecerá en el libro de la
vida (Apoc. 3:5).
f) Seremos __________ en el templo de Dios, y se nos dará un nuevo nombre (v. 12).
g) Se nos concederá que nos __________ con Jesús (v. 21).
La palabra traducida “venciere” significa “seguir venciendo”. Se sugiere una victoria permanente por fe
en Cristo. Las recompensas de una vida cristiana vigilante no tienen comparación, y hacen del Cielo algo
que, a pesar de todo lo que pueda costar, todavía es barato. El apóstol Pablo lo dice enérgicamente en
Rom. 8:35 al 39, y adelanta su convicción personal de que nada nos puede separar del amor de Dios.
Dice: “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte ni la vida, ni ángeles ni principados ni potestades, ni
lo presente ni lo por venir, ni lo alto ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del
amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro”. ¡Que esta sea nuestra experiencia!

1. afligir
2. a) convocación b) fuego, pecado c) purificar d) sábado
3. a) interés b) trabajadores c) contiendas d) puños e) ---
4. a) desatar b) vanidad c) amor d) reparador e) quebrantados
5. irreprochable
6. paz
7. nada
8. guerra
9. mandamientos, fe
10. nombre
11. a) blanqueado b) vírgenes c) mancha d) mandamientos e) fe
12. a) verdad, fe b) cambiar
13. todos
14. a) oro b) blanca c) colirio
15. permanece
16. a) creer b) esconder c) oración d) decidir e) gracias f) toda
17. a) árbol b) segunda c) nuevo d) autoridad e) blancas f) columnas g) sentemos
APÉNDICE
COMPARACIÓN DE LOS DIEZ MANDAMIENTOS PROVENIENTES DE DOS FUENTES
LOS DIEZ MANDAMIENTOS LOS DIEZ MANDAMIENTOS
“Tratará de cambiar los tiempos y la ley” Exo. 20:3-17

(Dan. 7:25, Biblia de Jerusalén)
1. No tendrás otro dios que a mí. 1. No tendrás dioses ajenos delante de mí.
2. No tomarás en falso el nombre de Dios. 2. No te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que

esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra. No te
inclinarás a ellas ni las honrarás, porque yo soy
Jehová, tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad
de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta
generación de los que me aborrecen, y hago
misericordia en millares a los que me aman y guardan
mis mandamientos.
3. Santificarás las fiestas. 3. No tomarás en vano el nombre de Jehovah tu Dios,

porque Jehovah no dará por inocente al que tome su
nombre en vano.
4. Honra a tu padre y a tu madre. 4. Acuérdate del sábado para santificarlo. Seis días
trabajarás y harás toda tu obra, pero el séptimo día es
de reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra
alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu
criada, ni tu bestia, ni el extranjero que está dentro de
tus puertas, porque en seis días hizo Jehová los cielos
y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay,
y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo
el sábado y lo santificó.
5. No matarás, 5. Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se

alarguen en la tierra que Jehová, tu Dios, te da.
6. No adulterarás. 6. No matarás.
7. No robarás. 7. No cometerás adulterio.
8. No testificarás contra tru prójimo falso testimonio. 8. No hurtarás.
9. No codiciarás la mujer de tu prójimo. 9. No dirás contra tu prójimo falso testimonio.
10. No codiciarás los bienes de tu prójimo. 10. No codiciarás la casa de tu prójimo: no codiciarás
la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su
buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo.
Fuentes: Catecismo Romano (La Editorial Católica, S.A. AP. 466, Madrid, 1956). La Santa Biblia, Reina-Valera
revisada, 1995, Sociedades Bíblicas Unidas..
Los católicos han afirmado que “el segundo mandamiento protestante no tiene razón de ser, y surgió de la
controversia provocada por la Reforma, y como motivo para justificarla” (B.L. Conway, The Question-Box Answers.
Replies to Questions Receives on Misions to Non-Catholics [El buzón de preguntas. Respuestas a preguntas acerca
de las misiones a los no católicos], 1909, p. 551).
16. PROFETA, SACERDOTE Y REY
A menudo, cuando pensamos en Jesús, nos decimos que es el Rey que viene. La Biblia describe
gráficamente las majestuosas escenas de su venida. La esperanza de todos los cristianos desde la primera
venida de Cristo se ha concentrado en el regreso en gloria del Hijo del hombre para ponerle fin al reino
del pecado. Pero la Biblia nos dice que Cristo desempeña tres papeles. Primero vino aquí a la tierra como
profeta. Esto lo capacitó para desempeñarse como nuestro Sumo Sacerdote en el Cielo. Cuando termine
su ministerio sacerdotal en el santuario del Cielo, dispondrá de los súbditos de su reino, y entonces podrá
venir en gloria como Rey.
En esta lección queremos examinar más o menos detalladamente algunos aspectos de la vida de Cristo
aquí en la tierra, para poder determinar cuán plenamente se identificó él con la especie humana caída. La
queja de Satanás contra Dios, que le presentó a Eva en el jardín del Edén, es que sus principios de
gobierno son deficientes. Afirmó que Dios le estaba ocultando a los humanos ideas, habilidades y
posibilidades de desarrollo personal que, si se las liberara, conducirían a un universo poblado por seres
superiores, más completos (Gén. 3:2-5). Para rescatar a la humanidad de los engaños de Satanás, para
capacitar a los seres humanos caídos a fin de que puedan gozar otra vez de la compañía de los ángeles,
Dios se decidió a demostrar en forma concluyente que los principios de su gobierno se basan en el amor.
Esta demostración de amor sigue hasta el día de hoy ya que Cristo aboga en nuestro favor en el Cielo
como nuestro Sumo Sacerdote. El quiere que respondamos positivamente a su amor, de modo que cuando
venga en gloria podamos estar con él.
Jesús, el Profeta
• Presentar a Jesús como Profeta, con lo que se identificó con otra gente humilde que desempeñó el
mismo papel.
• Resumir la tarea de un profeta.
Un profeta es alguien “que habla en nombre de otro, por lo general en nombre de Dios”. Los profetas
bíblicos no se limitaban a anunciar al futuro, sino que predicaban como mensajeros del Señor. Tenían “el
don de explicar las Escrituras” y “de hablar y predicar bajo la influencia del Espíritu Santo” (A. Cruden,
Cruden’s Complete Concordance to the Old and New Testaments [Completa concordancia de Cruden de
los Testamentos Antiguo y Nuevo], 1958, p. 517; H.G. Liddel & R. Scott, A Greek-English Lexicon [Un
diccionario griego-inglés], 1961, pp. 1539, 1940).
1. ¿Cuál fue el primer papel que desempeñó Cristo cuando vino a esta tierra a morir por la humanidad?
Respuesta: Cristo era _________, como Moisés (Deut. 18:18. 19; Juan 1:45).
La tarea de un verdadero profeta consiste en revelar la voluntad de Dios. Jesús hizo eso constantemente
(Juan 8:28). Declaró: “Yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre, que me envió, él me dio
mandamiento de lo que he de decir y de lo que he de hablar” (Juan 12:49). Tal como Moisés condujo a los
hijos de Israel desde la tierra de Egipto -una tierra de servidumbre y sufrimiento– a la tierra prometida de
Canaán, Cristo vino a esta tierra para mostrarnos cómo vivir, para poder salir del Egipto espiritual y ser
candidatos preparados para la Canaán celestial.
2. ¿Reconocieron los discípulos y el común del pueblo que Jesús era profeta?
Respuesta: ¡Sí!
a) La gente decía: “Este es Jesús, el profeta, el de __________ de Galilea” (Mat. 21:11). Otros
hicieron declaraciones similares (Juan 4:19; 7:40; 9:17).
b) El discípulo Cleopas y su compañero declararon que Jesús era “varón profeta, poderoso en
______ y en _________ delante de Dios y de todo el pueblo” (Luc. 24:19).
Los sacerdotes y los dirigentes en general no estaban dispuestos a reconocer que Jesús era profeta, e
incluso aseveraron que obraba bajo la influencia de Beelzebú (Mat. 12:24-28).
3. ¿Dijo Jesús que era profeta?

Respuesta: ¡Sí! Jesús dijo acerca de sí mismo: “No hay profeta _____ ________ sino en su
propia tierra” (Mar. 6:3, 4).
4. ¿A cuántos de los profetas del Antiguo Testamento apoyó Jesús?

Respuesta: A todos los profetas que profetizaron acerca de él. Apoyó a “todos los profetas, (y)
les declaraba en todas las ____________ lo que de él decían” (Luc. 18:31; 24:27, 44).
Jesús manifestó una fe absoluta en la certidumbre de la Palabra de Dios tal como había sido dada por los
profetas. Afirmó que las profecías concernientes al Mesías se debían cumplir hasta en los más mínimos
detalles. Después de su crucifixión y su resurrección, puso énfasis sobre la seguridad de las profecías y
reconvino a los discípulos por poner en tela de juicio las declaraciones de los profetas (Luc. 24:25, 26).
Lucas afirma que todos los profetas, en efecto, dieron testimonio acerca de Jesús (Hech. 10:43). El
apóstol Pedro, uno de los más íntimos colaboradores de Cristo, dijo lo siguiente acerca de la profecía:
“Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una
antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día amanezca y el lucero de la mañana salga en
vuestros corazones” (2 Ped. 1:19). Jesús llamó la atención en especial a los escritos de Daniel (Mar.
13:14). Señaló que las palabras del profeta, si se las estudiaba y se las obedecía cuidadosamente, le
permitirían al creyente escapar de la muerte durante la destrucción de Jerusalén. El mismo autor nos
advierte acerca de los engaños de los últimos días que habrían de aparecer en el mundo. La fe en las
palabras de Dios dichas por este profeta, conducirían a la liberación del mal en el día de la gran angustia
que se habría de producir justo antes de la venida de Cristo. El Señor mismo declaró por medio de Juan el
revelador, que un estudio fiel y la obediencia a las palabras de esta profecía produciría grandes
bendiciones y la vida eterna (Apoc. 1:3; 3:21, 22).
5. ¿Qué conjunto de tareas debía llevar a cabo un profeta bíblico?

Respuesta:
a) Reprender el ________ )1 Sam. 7:3; 12:17-19; Dan. 4:27).
b) Exhortar y enseñar los caminos de Dios, y de esta manera ____________ a los hermanos
(Hech. 15:32).
c) Juzgar (1 Sam. 7:15-17).
d) Anunciar el ________ (1 Sam. 3:11-14, 17; 4:11, 16-18).
La información que nos da la Escritura acerca de Samuel nos indica claramente la gama de tareas en las
que estaba implicado un profeta. Una de las notables contribuciones de Samuel a la gente de su tiempo
fue la fundación de las escuelas de los profetas (1 Sam. 19:20). Estas escuelas se levantaron como un
baluarte contra las malas influencias que prevalecían en la sociedad de los días de Samuel. En esas
escuelas se ponía énfasis en el estudio de las Escrituras, en el poder de la oración y en el valor del trabajo
manual (E.G. de White, La educación, 1964, pp. 42-47). Además de su notable contribución a la
educación, Samuel reprendió intrépidamente el pecado, actuó como juez para ayudarle a la gente a
solucionar sus diferencias, y también se desempeñó como mensajero de Dios y bosquejó el futuro.
6. En su desempeño como profeta, ¿llevó a cabo Jesús tareas similares a las de los profetas del Antiguo
Testamento?
Respuesta: Sí, lo hizo. Lo ilustran los hechos siguientes:
a) Reprendió el pecado (Mat. 15:7-9; 16:3; 23:13).
b) Enseñó (Mat. 4:23; 26:55; Mar. 6:34; 8:31; Luc. 23:5; Juan 3:2).
c) Juzgó (Mar. 9:34, 35; Luc. 10:38-42; Juan 8:3-11).
d) Profetizó (Mat. 24:3-37; 26:64; Hech. 1:4-8).
Al venir como profeta, Cristo se identificó con los humildes instrumentos que le habían traído a los
hombres sus palabras de ánimo, exhortación y advertencia. Tal como su Maestro, muchos de ellos habían
sufrido la humillación y la muerte. Al venir cono un dirigente espiritual, Jesús tuvo que soportar las
tentaciones propias de los líderes. Al venir como profeta, asumió el papel espiritual más difícil que se
puede concebir. En su papel de profeta, Cristo, nuestro dirigente, nos aseguró que no hay senda alguna a
la que seamos llamados a recorrer, que él no la haya recorrido ya. Se identificó plenamente con nosotros.
Nicodemo observó con justeza que Jesús era “un Maestro enviado por Dios” (Juan 3:2). El era el
“Maestro” cuyas palabras revisten importancia para toda la humanidad, de todas las épocas, de todas las
circunstancias de la vida. Le dio un nuevo significado y un nuevo propósito a la existencia, y les trajo
esperanza a los desesperados.
Cristo, nuestro Sumo Sacerdote

• Determinar hasta qué punto se identificó Jesús con la especie humana.
• Determinar también que al llegar a formar parte de la familia humana, Cristo pudo convertirse en
nuestro Sumo Sacerdote.
• Resumir la tarea de Jesús como Sumo Sacerdote.
Se ha dicho que Jesús “vino de parte de Dios como representante de Dios” y “regresó al Padre como
representante del hombre” (C.H. Watson, The Atoning Work of Christ, His Sacrifice and Priestly Ministry
[La obra expiatoria de Cristo, su sacrificio y su ministerio sacerdotal], 1934, p. 101). Jesús se calificó para
ser nuestro Sumo Sacerdote al vivir en esta tierra como un hombre.
7. ¿Hasta qué punto se identificó Cristo con la especie humana?

Respuesta: “Y el Verbo de hizo _______ y habitó entre nosotros” (Juan 1:14; Heb. 2:14, 16, 17).
Al venir a la tierra Jesús era ciertamente Dios y sin embrago se identificó plenamente con la humanidad
(Juan 1:1, 14; Mar. 1:1; Fil. 2:6, 7; 1 Juan 4:2, 3). Notamos que “a pesar de que los pecados de un mundo
culpable pesaban sobre Cristo, a pesar de la humillación que implicaba el tomar sobre sí nuestra
naturaleza caída, la voz del cielo lo declaró Hijo del Eterno” (E.G. de White, El Deseado de todas las
gentes, 1955, p. 87).
La identificación de Cristo con la humanidad no era una apariencia sino una realidad (Rom. 5:15; 1 Tim.
2:5). Nació de María que no era en nada diferente del resto de los seres humanos (Gál. 4:4). Por eso se
nos dice que él no se avergüenza de llamarse hermano nuestro (Heb. 2:11). Como consecuencia de
haberse identificado con nosotros, la posibilidad de ceder a la tentación era una realidad siempre presente.
En efecto, fue tentado “en todo según nuestra semejanza” (Heb. 4:15), pero no cedió a la tentación (2 Cor.
5:21; 1 Ped. 2:22).
8. ¿Cómo se enseñó en el Antiguo Testamento el tema de la íntima relación que existe entre la humanidad
de Cristo y la de la humanidad caída?
Respuesta: La redención de los que habían caído en la esclavitud estaba reservada para su
pariente más cercano. “Uno de sus __________ lo puede redimir, o alguien que sea su pariente
más cercano” (Lev. 25:24-28, 47-49).
La humanidad entera cayó en la trampa de la esclavitud del pecado. El pariente más cercano es Cristo,
que es digno de redimirnos de esa esclavitud. Por eso se identificó tan plenamente con la humanidad
caída.
9. ¿Qué otras expresiones se usan para dar la idea de que Cristo se identificó plenamente con la
humanidad?
Respuesta:
a) “Ciertamente _______ él nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores” (Isa. 53:4).
b) “El mismo tomo nuestras enfermedades y llevó nuestras ___________” (Mat. 8:17).
Pasó por todo lo que nosotros sufrimos (y más) cuando fue tentado. Venció la tentación por la fe en su
Padre (Juan 5:30). Por eso nos puede ayudar (Heb. 2:18). A Jesús se lo tentó insistentemente a pecar, pero
no cedió ni un solo instante a la tentación (Rom. 8:3). Triunfó gloriosamente sobre Satanás y puede
ayudar hasta lo sumo a todos los que son tentados.
10. ¿Cómo adquirió Jesús las cualidades necesarias para desempeñarse como nuestro representante en el
Cielo?
Respuesta: “A través del sufrimiento aprendió lo que es la obediencia; y habiendo sido
perfeccionado, vino a ser _______ de eterna salvación para todos los que lo obedecen” (Heb. 5:8,
9).
Este texto nos informa que por medio del sufrimiento Cristo se “perfeccionó” o “completó”, es decir,
cumplió el propósito de su misión en favor de la humanidad. Aprendió por experiencia personal lo que es
luchar contra la tentación y obtener la victoria por medio de la fe. Sólo al formar parte en todo sentido de
la familia humana pudo calificarse para llegar a ser nuestro Sumo Sacerdote (Heb. 5:1-5). Satanás había
insistido en que los seres creados por Dios no pueden guardar su Ley. Por eso, para enfrentar las
acusaciones de Satanás, Cristo se humilló, se revistió de humanidad y se identificó plenamente con los
hijos y las hijas de Adán (Fil 2:6-8). Demostró mediante su vida de obediencia que los seres humanos
que viven en este mundo pecaminoso pueden, por la fe, vivir una vida de plena armonía con su Ley
(Apoc. 14:3-5, 12). Creemos que “Cristo mira el espíritu, y cuando nos ve llevando nuestra carga con fe,
su perfecta santidad expía nuestras deficiencias. Cuando hacemos lo mejor que podemos, él llega a ser
nuestra justicia” (E.G. de White, Mensajes selectos, 1966, t. 1, pp. 431, 432).
11. Como consecuencia de que Jesús está calificado para ser nuestro Sumo Sacerdote, ¿qué puede hacer
por nosotros?
Respuesta: Darnos “gracia para el oportuno _________” Heb. 4:15, 16).
Como consecuencia de haber asumido plenamente nuestra naturaleza humana, Jesús puede simpatizar
totalmente con las debilidades y tentaciones comunes a la especie. Jesús estuvo expuesto a todas las
tentaciones que tiene que enfrentar la humanidad, pero no cedió en nada (Juan 14:30). Por fe en su Padre,
venció la tentación a pecar. Vivió sin pecado (2 Cor. 5:21). Demostró así que las acusaciones de Satanás
son falsas, y echó por tierra las pretensiones del enemigo (Juan 12:31, 33). Por lo tanto, podemos ser “más
que vencedores por medio de Aquel que nos amó” (Rom. 8:37). Se nos invita a seguir por la fe el ejemplo
de Jesús (1 Ped. 2:21, 22). Más aún, se nos asegura que jamás aparecerá una tentación en nuestro camino
de la cual Dios no sea capaz de librarnos. Les proporcionará una vía de escape a todos los que dependan
de él por la fe (1 Cor. 10:13).
12. Gracias a la victoria de Jesús, ¿qué confianza podemos tener?

Respuesta: Podemos acudir _______________ a Dios, sabiendo que dispondremos de
misericordia y ayuda en momentos de necesidad (Heb. 4:14-16).
13. ¿Cuándo comenzó Cristo su ministerio sumo sacerdotal en el santuario celestial?

Respuesta: Cristo comenzó su ministerio sumo sacerdotal después de ascender al Cielo. “Si
estuviera sobre la tierra ni __________ sería ___________” (Heb. 8:4). Con su sangre derramada,
Cristo debía “aparecer en la ___________ de Dios por nosotros” (Heb. 9:22-24).
El sumo sacerdote terrenal primeramente era ungido para ese cargo y recién después podía ministrar la
sangre de las ofrendas por el pecado (Lev. 8:30, 33; 9:1, 2, 7). Jesús llegó a ser pecado por nosotros, y
entonces ministró su sangre derramada, en el santuario celestial, delante de Dios (2 Cor. 5:21; Heb. 9:22-
24). En la tierra Jesús no era sacerdote. Un aspecto especial del sacerdocio celestial es que una vez
conferido sigue sin interrupción (Heb. 7:16, 23, 24). La muerte no interviene en este caso. Por lo tanto,
este sacerdocio no podría haber comenzado antes de la resurrección de Cristo.
En la tierra, los pecadores primero degollaban la víctima (Lev. 4:1-4, 13-15), y entonces el sacerdote
tomaba la sangra y ministraba con ella (Lev. 4:5-12, 16-21). En el antitipo, Cristo se ofreció primero
poniéndose en manos de los pecadores, y después ministró los beneficios de su propia sangre en el
santuario celestial (Heb. 7:27). Cuando Cristo murió en el Calvario, Dios le puso fin al sacerdocio
levítico; una “mano invisible” rasgó el velo del templo (Mat. 27:50, 51). Dios, de esta manera notable, les
comunicó a todos que estaba por comenzar el sacerdocio de Cristo en el Cielo (Heb. 7:11).
Jesús llegó a ser nuestro Sumo Sacerdote después de haber regresado al Cielo y después de la unción del
lugar santísimo (Dan. 9:24; cc Lev. 8:8-12). Se ungió a Cristo para predicar el evangelio en ocasión de su
bautismo (Luc. 4:18); al recibir autoridad en el Cielo, se lo ungió con “oleo de alegría” (Heb. 1:23, 9; Sal.
4:6-8; 110:1-4; cc Lev. 8:30; 1 Sam. 16:13; 2 Sam. 2:4). Los sucesos ocurridos en el santuario terrenal
nos aseguran que después de ungir y apartar a Aarón y a sus hijos, Dios reconoció esos hechos
manifestándose por medio del fuego (Lev. 9:23, 24). De la misma manera, la inauguración de Cristo en el
Cielo, después de la dedicación del santuario celestial, repercutió aquí en la tierra con las lenguas de
fuego del día de pentecostés (Hech. 2:3; E.G. de White, Lecciones prácticas del gran Maestro, 1941, p.
120). Notamos, entonces, que cualquier argumento en el sentido de que la primera etapa del ministerio
sacerdotal de Cristo comenzó aquí en la tierra, carece de base bíblica (véase también Los adventistas
creemos, 1988, pp. 319, 320).
14. ¿A qué clase de sumo sacerdocio pertenece Jesús?

Respuesta: Al orden de _____________ (Heb. 6:20).
El sacerdocio al que pertenece Jesús no está sujeto a la muerte, como era el caso del sacerdocio levítico
(Heb. 7:3). La superioridad del orden sacerdotal de Melquisedec también era evidente por el hecho de que
este sacerdote y rey bendijo a Abrahán, el padre de Leví quien, a su vez, era el progenitor de los levitas.
Abrahán le dio los diezmos a Melquisedec (Heb. 7:5-10). La superioridad del sacerdocio de Cristo es uno
de los puntos importantes de la epístola a los Hebreos (Heb. 7:20-28; W.G. Johnsson, Hebrews [Hebreos],
1980, pp. 49, 50, 52-54).
Ahora bien, Melquisedec, rey de Salem o Jerusalén, y sacerdote de Dios, es un personaje acerca del cual
sabemos poco (Gén. 14:18-20). No se nos dice nada ni de su padre ni de su madre, ni tampoco acerca de
su nacimiento y de su muerte, y su genealogía desconocida. (Para ser sacerdote según el orden levítico, la
genealogía debía ser perfectamente conocida - Esd. 2:61-63). Tampoco sabemos nada en cuanto a cómo
terminó su sumo sacerdocio. Por lo tanto, prefiguraba a Cristo. Los mismos títulos que se le dieron a él se
aplican a Cristo o se los usó como características de él (Isa. 9:6).
15. ¿Qué obra está haciendo Cristo, nuestro Sumo Sacerdote, en favor de nosotros en el santuario
celestial?
Respuesta:
a) El representa a los creyentes en el Cielo y _________ nuestros pecados. Nos libra de la culpa
del pecado (1 Juan 1:9).
b) Está listo para ayudar a los que son __________ y los libra del poder del pecado (Heb. 2:18;
Col. 1:22).
Los pecados que han sido confesados con sinceridad reciben inmediatamente el perdón requerido (el
pecador está justificado). El registro de los pecados confesados queda registrado en los libros de Dios
(Ecl. 12:4). La desaparición del dominio del pecado en la vida, de modo que éste yo no tiene poder sobre
el creyente, es la gran obra que Cristo desea hacer sobre éste (santificación). Ahora mismo está borrando
el registro de los pecados (Hech. 3:19). El santuario del cielo quedará libre y limpio para siempre de los
pecados confesados por los fieles antes de que Jesús termine su ministerio en el lugar santísimo. Cuando
termine esta etapa del ministerio de Cristo, pronto vendrá y el misterio de Dios estará consumado (Hech.
3:20). La obra final que se lleva a cabo en el santuario celestial se entiende gracias a los servicios que se
llevaban a cabo en el santuario terrenal en el día de la expiación (Heb. 8:3-5).
c) El pone una señal sobre los que aman la justicia “los que _______ y ________ a causa de todas
las abominaciones que se hacen en medio de ella” (Eze. 9:4-6; Apoc. 7:2, 3).
Cristo está investigando a su pueblo. Nota quiénes son los que se lamentan por la condición espiritual del
mundo, que gimen por los pecados de los que profesan ser creyentes, y por la falta de celo manifestada
por aquellos a quienes se ha dado una luz especial para compartir con los demás. Son también los que
reprueban el pecado, porque aman profundamente la verdad, y se preocupan de darle gloria y honor a
Dios. Su experiencia gira en torno de Cristo (Mal. 3:16). Pronto se promulgará el decreto: “Matad. . .
hasta que no quede ninguno” (Eze. 9:6). Los que se afligen son los que han experimentado el “socorro”·
de Jehová, la purificación de su vida. Son los que han atendido este llamado: “Yo te aconsejo que
compres de mí oro refinado en el fuego para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, para que no
se descubra la vergüenza de tu desnudez. Y unge tus ojos con colirio para que veas” (Apoc. 3:18).
Cristo, el Rey
• Presentar el concepto de los dos reinos: el de la gracia y el de la gloria.
• Indicar cuándo se establecerá el reino de gloria.
16. ¿Dijo Cristo alguna vez que era Rey cuando estuvo aquí en la tierra?
Respuesta: ¡Sí! Pilato le preguntó si era “el _____ de los judíos”. Jesús contestó: “Tú lo has
dicho” (Luc. 23:2, 3; Juan 18:37).
Cristo nació como Hijo de David, pero no asumirá su reino hasta haber concluido su ministerio como
Sacerdote. Mientras estuvo en la tierra la gente lo quería coronar rey, pero él no les permitió que lo
hicieran (Juan 6:15).
17. ¿Qué clase de reino estableció Jesús mientras estuvo en la tierra?

Respuesta: El reino de la gracias, es decir, el reino mesiánico (Juan 18:36, 37).
Jesús estableció primero el reino de la gracia aquí en la tierra (Mat. 3:2). Su deseo es reinar como Rey en
nuestras mentes y nuestras vidas. En el futuro establecerá su reino de gloria (Mat. 25:31). Jesús dijo que
el reino que había venido a establecer no dependía de la fuerza de las armas. Jesús enseñó con toda
claridad que no había venido a establecer su reino de gloria en ocasión de su primera venida (Mat. 25:31).
Los judíos no entendían qué clase de reino había venido a establecer Jesús. Creían que cuando apareciera
el Mesías vendría a echar a los odiados romanos, a sentarse sobre el trono de Israel como un gobernante
temporal. Bajo su reino todas las demás naciones serían tributarias de los judíos. En otras palabras, no
entendieron la verdad de que el reino de la gracia de Jesús debía preceder a su reino de gloria. Su
confusión de los reinos resulta evidente cuando leemos Luc. 17:20. Jesús, al responderles en el v. 21, dijo
con toda claridad que el reino de Dios que él había venido a establecer se encontraba en la mente de las
personas. Vino a establecer una “nación” de creyentes que obedecieran los mandamientos de Dios
impulsados por un amor que provendría de lo más profundo de la mente (Rom. 12:2; Efe. 6:6).
18. ¿Con qué propósito entró triunfalmente Jesús en Jerusalén, como si fuera un rey?
Respuesta: Para cumplir la __________ y llamar la atención de la gente a su aserto de que él era
el Mesías (Zac. 9:9; Isa. 12:6).
La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén a sólo cinco días de su crucifixión, aseguraba que la atención de
todos se concentraría en lo que él decía ser. Después de su juicio y su sepultura, muchos se sentirían
estimulados a estudiar las Escrituras y se darían cuenta de que en efecto era el Mesías que pretendía ser
(Mat. 12:16-21).
19. ¿Cuándo recibirá Cristo su reino de gloria?

Respuesta: Al terminar su ministerio sacerdotal en el santuario celestial, cuando el __________
celestial termine de examinar los libros del cielo (Dan. 7:9, 10, 13, 14).
Daniel el profeta nos da una vislumbre del juicio investigador previo al advenimiento que en este mismo
momento está sesionando en el Cielo. Cuando el ministerio de Cristo en el santuario haya terminado, irá a
su Padre para recibir su reino (Dan. 12:1, 2). Cristo no puede recibir su reino hasta que se haya
determinado quiénes son sus súbditos (una de las funciones del juicio). Su papel sacerdotal termina antes
de que sea coronado Rey. Por ese tiempo se levantarán las restricciones que limitaban a los habitantes de
este mundo y a Satanás, y entonces caerá sobre este mundo impenitente un gran tiempo de angustia y
destrucción (Dan. 12:1; Apoc. 15:8; 16:1).
20. ?Cómo describe la Biblia a Jesús después de su coronación como Rey de reyes y Señor de señores?
Respuesta: Cristo descenderá con gran majestad y gloria acompañado de los ___________ del
Cielo para recibir a los ciudadanos de su reino (Apoc. 19:11-16).
Se presenta a Jesús cabalgando sobre un caballo blanco para recibir su reino. El blanco simboliza la
pureza de su carácter. La recepción de su reino se equipara a una boda (Apoc. 19:7). Su reino durará para
siempre jamás; todos los poderes terrenales dejarán de existir (Apoc. 11:15).
21. ¿A qué se compara el reino de Cristo, y qué figuras de lenguaje se usan para referirse a sus súbditos?
Respuesta:
a) El reino de Cristo se compara a una _______ (Apoc. 19:7; 21:2).
b) Los invitados a las bodas son “los llamados” o “los que son “__________” (Mat. 25:1; Apoc.
14:4; 19:9).
La novia de Cristo –o su reino– es la Nueva Jerusalén. Los invitados son los que siempre tuvieron fe en su
Maestro (Apoc. 14:4, 5). El Espíritu Santo ha obrado activamente en sus vidas para convencerlos de
pecado y llevarlos a toda justicia mientras estudiaban la Palabra de Dios (Mat. 25:4, 7, 8; Sal. 119:105;
Zac. 4:6, 11-14). Cristo recibirá su reino cuando su ministerio sacerdotal haya terminado, y antes del
derramamiento de las plagas. Es esencial que usted y nosotros seamos ciudadanos del reino de Cristo.
Aceptemos hoy a Cristo como nuestro Sumo Sacerdote, para que seamos limpios de pecado y estemos
libres de su poder dominante. Si mantenemos esta relación seremos súbditos preparados para participar de
la cena de bodas del Cordero (Apoc. 19:9). Quiera Dios que seamos dignos de cantar el himno de Moisés
y del Cordero, y que podamos decir:
“Grandes y maravillosas son tus obras,
Señor Dios Todopoderoso;
justos y verdaderos son tus caminos,
Rey de los santos.
¿Quién no te temerá, Señor,
y glorificará tu nombre?
Pues sólo tú eres santo;
por lo cual todas las naciones
vendrán y te adorarán,
porque tus juicios se han manifestado”
(Apoc. 15:3, 4).

1. profeta
2. a) Nazaret b) obras, palabra
3. sin honra
4. Escrituras
5. a) pecado b) fortalecer c) — d) futuro
6. ---
7. carne
8. hermanos
9. a) llevó b) dolencias
10. autor
11. socorro
12. confiadamente
13. siquiera, sacerdote, presente
14. Melquisedec
15. a) perdona b) sentados c) gimen, claman
16. Rey
17. ---
18. profecía
19. tribunal
20. ejércitos
21. a) novia b) vírgenes
17. TUYOS SON EL PODER Y LA GLORIA
En nuestro mundo actual se habla mucho acerca del poder. Se dice que los que ocupan puestos de
autoridad disponen de poder. Manejan y controlan los acontecimientos y hasta la vida de la gente. Se dice
que un médico tiene poder para sanar a un enfermo. Es cierto que todos los días vemos milagros
modernos en la medida en que los adelantos científicos se difunden para ayudar a la humanidad. El
conocimiento, correctamente usado, es un poder para el bien en el mundo actual. La palabra “poder”
también se puede usar en el sentido de habilidad. Alguien puede ser un poderoso orador, capaz de
estimular las emociones y ejercer influencia sobre las acciones de las personas. También se usa esa
palabra para referirse al grado de fuerza de una persona, de una máquina o de un instrumento. No es
sorprendente, entonces, que la palabra “poder”, que tiene todos estos significados, se use para referirse a
una de las notables características de Dios. Deseamos examinar algunos de los aspectos de la palabra
“poder” en esta lección.
Con algo menos de frecuencia usamos la palabra “gloria”. Se la usa comúnmente para transmitir la idea
del esplendor de una escena o para describir una sublime experiencia. Se la usa menos para referirse al
renombre y a la fama. Podríamos preguntarnos: “¿Cuál es el aspecto más glorioso del carácter de Dios tal
como lo presenta la Biblia?” Jesús espera que todos sus discípulos entiendan esto porque el Padrenuestro
termina con estas palabras: “Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por todos los siglos. Amén”
(Mat. 6:13). En esta lección trataremos de examinar algunos de los profundos significados de estas
palabras tal como se las usa en la Biblia.
La gloria de Dios
• Determinar que la expresión “gloria de Dios” se puede referir al carácter del Altísimo.
• Demostrar que los Diez Mandamientos son un documento que revela el carácter de Dios.
• Poner énfasis en el hecho de que Cristo vino a este mundo a revelar el carácter de Dios.
Desde el principio Dios ha proporcionado bastantes evidencias de su presencia en el universo y de los

principios de su reino. David trató de comprender más a Dios al contemplar su poder y su gloria en el
santuario (Sal. 63:2). Emprendamos un viaje exploratorio para descubrir qué dice la Biblia acerca de estos
grandes temas, y en particular para determinar el profundo significado de la gloria de Dios al contemplar
a Cristo, por la fe, en el santuario celestial.
1. Cuando Moisés le pidió a Dios que le mostrara su gloria, ¿qué le reveló el Señor?
Respuesta: Dios hizo pasar toda la ________ de su carácter delante de Moisés (Exo. 33:18, 19).
La palabra “carácter” no aparece el las antiguas versiones de la Biblia. Indudablemente Dios aquí nos
indica cuál es el fundamento de su grandeza: es su carácter. Al continuar en el siguiente capítulo la
conversación que se entabló entre Dios y Moisés, notamos que Dios le proclamó su Nombre (Exo. 34:5) e
inmediatamente le reveló los rasgos característicos que expresan su Nombre (v. 6).
2. ¿En qué documento se expone en términos sencillos el carácter de Dios, de modo que los humanos lo
podamos entender?
Respuesta: En los Diez Mandamientos escritos por el ______ de Dios (Exo. 31:18; 34:1).
Notamos que Dios le ordenó a Moisés que labrara dos tablas de piedra (el segundo juego) para que el
escribiera en ellas con su propio dedo las palabras de la Ley de amor (Deut. 10:1, 2, 5). Entonces el Señor
pasó delante de Moisés y proclamó su Nombre, y al hacerlo anunció en claros términos cuáles eran sus
características más notables (Exo. 34:6, 7). La Ley proclamada se basa en el amor (Exo. 20:6), un hecho
que Jesús mismo resumió espléndidamente en Mat. 22.
3. ¿Cómo describe la Escritura tanto la Ley de Dios como a Dios mismo?

Respuesta:
a) La Ley se basa en el amor a ______ y al ________ (Mat. 22:36-40).
b) Dios es ______ (1 Juan 4:8).
Las Escrituras fortalecen nuestra comprensión de que la Ley de Dios es, en esencia, un trasunto de su
carácter, puesto que Dios es amor. Si menospreciamos la Ley, nuestro concepto del carácter de Dios pasa
a ser deficiente.
4. ¿Cómo define la Biblia el pecado en relación con la Ley?

Respuesta: “El pecado es ____________ de la Ley” (1 Juan 3:4).
La Ley es un trasunto del carácter de Dios. Por lo tanto, el que peca despliega características que no
concuerdan con el carácter perfecto de Dios, manifestado en su Ley. Pablo lo dice con mucha claridad en
Rom. 3:23: “Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios”. La especie humana fue
creada al principio a imagen de Dios, lo que incluía un carácter cristiano (Gén 1:27). De ello podemos
concluir que el amor era lo que motivaba todo acto de los seres humanos hasta que el pecado entró.
Satanás tentó a Eva a desear sabiduría por motivos egoístas (Gén. 3:5). Desconfió de Dios, decidió
desobedecerlo, y tomó ansiosamente la fruta que se le ofrecía para satisfacer su propio interés. Después
todos los descendientes de Adán y Eva nacieron débiles, y les resultó fácil ceder a los deseos egoístas
(Jer. 17:9). Cuando decidimos desobedecer a Dios, cuando decidimos satisfacer nuestros deseos egoístas,
pecamos, cometemos transgresiones.
5. De manera especial, ¿qué le vino a revelar Jesús a la humanidad?

Respuesta: Vino a revelar su ________, es decir, su carácter (Juan 1:14).
Por medio de sus palabras llenas de gracia, por medio de sus hechos y milagros, Cristo vino a mostrarles a
los hombres caídos quién es realmente Dios. Vino a revelar la plenitud de “la gracia y la verdad”. Vino a
disipar las falacias acerca del carácter de Dios que Satanás había tratado de difundir desde el principio
(Gén. 3:1-6). El texto dice que Jesús vino “a morar entre nosotros” o, más exactamente, vino a “levantar
su tienda junto a las nuestras”. Con estas palabras Juan vinculó la presencia de Dios entre los hombres
con el arca del pacto del Antiguo Testamento y con la manifestación de Cristo en carne humana (Exo.
25:22; Núm 7:89; A.Clarke, The Holy Bible, Containing the Old and New Teestaments: with a
Commentary and Critical Notes [La Santa Biblia, con el Antiguo y el Nuevo Testamentos, más un
comentario y notas críticas], 1854, t. 5, pp. 532, 533). Jesús vino a desplegar, en la forma más
espectacular, la gloria o el carácter de Dios, de manera que nadie pudiera presentar excusas (2 Cor. 4:6).
Por medio de su vida, “Cristo redimió la desgraciada caída de Adán, y desarrolló un carácter de perfecta
obediencia, y le dejó un ejemplo a la familia humana para que lo pudieran imitar” (E.G. de White, Advent
Review and Sabbath Herald, 1869, t. 67, No. 23, p. 401).
6. ¿Cuán perfectamente reveló Cristo el carácter de Dios mientras estuvo en la tierra?

Respuesta: Cristo vino como “la ________ misma”, es decir, el mismo carácter de Dios (Heb.
1:3).
Pablo afirma aquí que Cristo representaba perfecta y exactamente el carácter de Dios. La palabra griega
que ha sido traducida por le expresión “la imagen misma” es jaraktèr, de la cual deriva directamente la
palabra castellana carácter. Cuando Felipe le pidió a Jesús: “Señor, muéstranos al Padre –Jesús le pudo
contestar confiadamente–: El que me ha visto a mí ha visto al Padre” (Juan 14:8, 9). Podemos decir con
verdad que Cristo representaba plenamente el carácter de Dios el Padre.
7. ¿Qué gran mensaje de amor envía Dios al mundo justo antes del regreso de Cristo?
Respuesta: Envía al mundo por medio de sus mensajeros un notable recordativo de la naturaleza
de su gloria o carácter, e intima a todos a que “teman a Dios y le _____ gloria” (Apoc. 14:7).
Ciertamente Dios no quiere “que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Ped.
3:9). Justo antes de que venga con sus galardones, invita a sus siervos a revelar a los que están en la tierra
cómo es él. Se ha dicho que “el honor de Cristo debe estar completo en la perfección del carácter de su
pueblo elegido. Desea que representen su carácter ante el mundo” (E.G. de White, Signs of the Times
[Señales de los tiempos], 1897, t. 23, No. 46, p. 434). Dios desafía a todos a que lo busquen mientras
puede ser hallado, de manera que el Espíritu Santo pueda efectuar en sus vidas la necesaria
transformación del carácter que los capacitará para salir a su encuentro en paz (Isa. 59:19; Rom. 12:2).
Mientras experimentamos esta transformación, se nos pide que compartamos con el mundo el poder
transformados de Cristo.
De gloria en gloria
• Recordar el hecho de que mientras los creyentes contemplan el carácter de Dios, sus vidas se van
transformando.
8. Mientras el creyente contempla la belleza del carácter de Cristo, ¿qué ocurre en su vida gracias al poder
del Espíritu Santo?
Respuesta: La vida se ____________ como consecuencia de contemplar el carácter de Cristo (2
Cor. 3:17, 18).
La transformación que experimenta el cristiano es progresiva tal como lo indican las palabras “de gloria
en gloria”. El creyente no puede llevar a cabo esa transformación, sino que ocurre gracias a la obra del
Espíritu Santo. Jesús les dijo a sus discípulos que el Espíritu, o Consolador, los guiaría a “toda verdad”
(Juan 16:13). “Bajo la influencia del Espíritu de Dios el carácter del creyente se transforma, se refina su
gusto, se santifica su juicio y llega a ser completo en Cristo” (E.G. de White, Youth’s Instructor [El
instructor de la juventud], 1894, t. 42, No. 48, p. 381). Esta promesa se le da hasta al más débil de los
santos.
9. Este cambio llevado a cabo por el Espíritu Santo, ¿se refiere sólo a la conducta exterior o implica
también un cambio en la manera de pensar?
Respuesta: La manera de pensar también debe experimentar una transformación. Todo
pensamiento debe ser llevado “_________ a la obediencia de Cristo” (Rom. 12:2; 1 Cor. 10:5).
Pablo reconoció que nuestras mentes deben estar permanentemente bajo la influencia controladora del
Espíritu de Dios. La mera conformidad exterior a los requerimientos de la Ley de Dios no produce
salvación (Fil. 3:6, 7, 9). La Ley debe estar escrita en la mente. Los pensamientos se deben purificar como
resultado de la comunión con Dios (Heb. 10:6). “La vida del cristiano no es una modificación o una
mejora de la vida antigua, sino una transformación de la naturaleza. Hay una muerte al pecado y al yo, y
una vida completamente nueva” (E.G. de White, Signs of the Times [Señales de los tiempos], 1910, t. 37,
No. 10, p. 503). Si solicitamos su ayuda, nos promete poder que capacita (1 Cor. 10:13).
10. Al juzgar la condición de un persona, ¿qué aspectos de su carácter examina Dios?

Respuesta: El Señor examina los pensamientos de la persona, que son los que determinan el
carácter y no “a su _________, ni a lo ________ de su estatura” (1 Sam. 16:7).
El sabio Salomón llegó a la conclusión de que “cuales son sus pensamientos íntimos, tal es él” (Prov.
23:7). Para que Dios acepte nuestros pensamientos, estos se tienen que renovar primero (Isa. 55:7; Mat.
5:21, 22, 27, 28). Los pensamientos relacionados con la ira y la impureza nos llevan al pecado. Dios
quiere que la misma fuente de nuestros sentimientos (es decir, nuestros, pensamientos), deben estar de
acuerdo con su voluntad. Los que sean aceptados en el reino de Dios serán irreprochables por los méritos
de Jesucristo (Apoc. 14:5, 12). Podemos ser vencedores por medio del poder que Cristo da a través del
Espíritu a todos los que se lo piden (Apoc. 3:21; 1 Juan 5:4, 5). La conformidad externa a los ideales
cristianos no salva (salvación por las obras), sólo cuando los actos correctos proceden de una mente pura
que está bajo el control del Espíritu Santo, podemos ser candidatos idóneos para el cielo (justificación por
la fe). El salmista, al considerar a Dios en su santuario, entendió esta gran verdad. Sus palabras están
inmortalizadas en las Escrituras: “¡Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto
dentro de mi!” (Sal. 51:10).
El poder de Dios
• Repasar las evidencias del poder de Dios en el universo.
La especie humana ha tenido desde el mismo principio amplias evidencias del poder de Dios. Muchos han
decidido hoy hacer caso omiso de esas evidencias. Repasemos brevemente algunos aspectos del poder de
Dios.
11. ¿Mediante qué actos se le manifestó el poder de Dios a Adán?

Respuesta:
a) Al desplegar una maravillosa gama de seres __________ delante de Adán (Gén. 2:15-19).
b) Mediante la creación de Eva, la primera ________ (Gén. 2:22).
La capacidad creadora de Dios resulta evidente cuando observamos las cosas de la naturaleza. Es un
constante recuerdo del poder de Dios, como nos lo dicen los escritores bíblicos (1 Crón. 29:11; Sal. 66:5-
7; Isa. 40:26). Hoy, y en la antigüedad también, algunos deciden ignorar esta evidencia (2 Ped. 3:5). Dios
le dio a la especie humana la capacidad de procreación a fin de recordarles su propia capacidad creadora.
Dios insiste en que su capacidad de crear es algo que lo diferencia de todos los otros dioses (Jer. 10:10-
12; Sal. 96:4, 5).
12. ¿De qué da evidencia la regularidad de los movimientos de los cuerpos celestes?
Respuesta: La capacidad de Dios para sostener su __________ (Isa. 40:26).
Dios no sólo creó los cielos y la tierra, sino que los mantiene de acuerdo con leyes que él mismo
promulgó (2 Ped. 3:4-7). De este modo manifiesta su amor por lo que creó; Dios no es un Ser caprichoso.
Pero no es prisionero de esas leyes naturales tampoco. Ya vimos que el viento y las olas obedecieron la
voz de Cristo aquí en la tierra (Mar. 4:41). Otros acontecimientos extraordinarios relacionados con los
fenómenos naturales, como ser el gran diluvio (Gén. 7) y el día largo del tiempo de Josué (Jos. 10:12-14),
son evidencias de que Dios controla las leyes que él mismo promulgó. Ciertamente nuestro Dios domina
todo el universo.
13. ¿Son los milagros una evidencia del poder de Dios?

Respuesta: Sí y no (Deut. 8:15-18; Sal. 78:26, 27; Mat. 7:22, 23; Apoc. 13:14; 16:14).
Los milagros son una evidencia del poder creador de Dios, pero Satanás y sus instrumentos tienen la
capacidad de engañar y descontrolar los fenómenos naturales en la medida en que Dios lo permite (Exo.
7:9-12; Job 1:9-12; Apoc. 16:14). Todo espíritu debe ser probado por la norma que es la Palabra de Dios.
“A la ley y al testimonio” (Isa. 8:20).
14. ¿Por qué razón realizó Jesús, cierta vez, un milagro de sanidad?
Respuesta: Para que los presentes pudieran entender que el Hijo del hombre tenía _______ para
__________ pecados (Mat. 9:4-7).
En otra oportunidad los discípulos dijeron que había salido poder de Jesús (Mar. 5:30). El mayor milagro
del poder de Dios que se observa en la actualidad es el del evangelio (Rom. 1:16). Dios pone a
disposición este poder para la transformación de las vidas. El mismo poder que se manifestó en la
creación está disponible para volver a crear la imagen de Dios en la humanidad. “Ellos lo han vencido (a
la serpiente antigua, el diablo y Satanás) por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio
de ellos, que menospreciaron sus vidas hasta la muerte” (Apoc. 12:11, 9; Eze. 20:12).
15. ¿Al alcance de quiénes está el milagro de la redención?

Respuesta: Para todos los que aceptan a Cristo, se “les dio potestad de ser hechos _______ de
Dios” (Juan 1:12).
La capacidad de Dios para transformar la manera de pensar y el estilo de vida de una persona es otra gran
evidencia de su superioridad sobre toda otro ser (Hech. 4:12). Algunos dirán que esos cambios son sólo
ilusorios. A los tales les decimos: “Un bebedor redimido, con vívidos recuerdos de sus desesperadas
luchas del pasado y su nueva sensación de poder en Cristo, es un mentís para la idea de que ‘su religión es
sólo algo ilusorio’ . El dijo: ‘Gracias a Dios por esta ilusión; ha vestido y ha calzado a mis hijos, y ha
puesto pan en sus bocas, ha hecho de mí un ser humano, y ha traído gozo y paz a mi hogar, que antes era
un infierno. Si es un engaño, quiera Dios mandarlo a los esclavos de la bebida en todas partes, porque su
esclavitud es una horrible realidad’” (J. McDowell, Evidence that Demands a Verdict [Una evidencia que
requiere un veredicto], 1979, p. 328).
16. ¿Qué otra gran capacidad reclama Dios como prueba de su divinidad?
Respuesta: La capacidad de __________ el futuro y controlarlo (Isa. 46:9, 10).
La capacidad de Dios de predecir con exactitud matemática los acontecimientos futuros es una
característica notable de la Palabra de Dios. Con sólo mencionar la profecía de Dan. 2 en este instante
alcanza para ilustrar este punto. Pero además hay una cantidad de otros acontecimientos predichos por la
Biblia y que la historia indica se han cumplido hasta en los más mínimos detalles. La arqueología afirma
que las palabras de las Escrituras fueron redactadas en ciertos casos mucho antes de que ocurrieran los
acontecimientos a los que se refieren
Pero recibiréis poder

• Recordar las promesas de darnos poder para vivir vidas cristianas.
• Determinar las avenidas por medio de las cuales por lo común Dios llama a los creyentes.
17. ¿Por medio de qué instrumentos celestiales recibimos poder para ser hijos de Dios y para seguir
siéndolo?
Respuesta:
a) El ___________________ (Hech. 1:8).
b) A los santos ángeles se les “encarga” cuidar a los fieles de Dios a fin de que “te _________ en
todos tus caminos” (Sal. 91:11).
La palabra griega traducida como “poder” en Hech. 1:8 es dunamis. De esta palabra provienen las
palabras castellanas “dínamo”, “dinámico” y “dinamita”. El libro de los Hechos está lleno de historias
relativas a las asombrosas hazañas llevadas a cabo por gente sencilla pero llena del Espíritu Santo. El
Señor le promete este poder a todos los que son obedientes (Hech. 5:32). Dios no discrimina a nadie; sus
bendiciones no dependen de nuestro nivel académico o socio económico. En la historia de la escalera de
Jacob se nos presenta a los ángeles como quienes comunican el poder de Cristo a la humanidad (Gén.
28:11, 12; Juan 1:51). Este mismo simbolismo se usa en Apoc. 14 donde se presenta a los tres ángeles
colaborando con los siervos de Dios para anunciar la pronta segunda venida de Cristo; les imparten poder
para testificar.
18. ¿Qué experimentaron en sus vidas los primeros discípulos antes del derramamiento del Espíritu Santo
con poder pentecostal?
Respuesta:
a) Reconocieron su ceguera espiritual y su gran necesidad de unidad. Las Escrituras nos dicen que
“Todos estos ______________ __________ en oración y ruego” (Luc. 22:24, 32, 32; Hech.
1:14).
b) Se volvieron ávidos estudiantes de las ____________ del Antiguo Testamento para descubrir
la voluntad de Dios (Hech. 1:16-23).
Jesús dijo: “Las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida” (Juan 6:63). La Palabra de Dios,
cuando se la lee, se la atesora y se la obedece, se vuelve una fuente de gran poder, y una defensa contra
los ataques de Satanás. Esto resulta claramente evidente cuando se estudia la vida del Salvador. En los
primeros años de su vida los sabios estaban “asombrados por su entendimiento y por sus respuestas”.
Después le hizo frente a las tentaciones de Satanás por medio de las Escrituras. La gente tomó nota de que
“él enseñaba como alguien que tiene autoridad y bo como los escribas” (Mat. 2:47; 3:4, 7, 10; 7:29). Esta
misma experiencia tuvieron los discípulos. Estudiaron la Palabra de Dios, oraron para tener
entendimiento, y para tener fuerza a fin de obedecer por fe. Cuando daban testimonio las multitudes
estaban “atónitas y perplejas” (Hech. 2:12). Mediante la lectura de la Palabra de Dios nos ponemos en
contacto con su Autor y la vida cambia. La santificación no se produce sin el estudio de la Palabra; por
eso Jesús dijo: “Santíficalos en tu verdad: tu Palabra es verdad” (Juan 17:17). “La Palabra de Dios –la
verdad– es el medio por el cual Dios manifiesta su Espíritu y su poder” (E.G. de White, Los hechos de los
apóstoles, 1977, p. 428).
c) Descubrieron el poder de la _________ y la súplica (Hech. 1:14).
La oración es la llave que abre el poder de Dios. La Biblia nos cuenta las historias de algunos de los
grandes hombres y mujeres que oraron (Samuel, Elías, David, Ester, Daniel). Las Escrituras nos aseguran
que el poder para vencer al enemigo sólo viene en respuesta a la oración (Mat. 17:21; Efe. 6:18; 1 Ped.
4:7). Esta fue la experiencia de Cristo (Mat. 26:36, 40-42, 44). El altar del incienso en el santuario
terrenal simbolizaba esta gran verdad que Cristo enseñó mediante su vida. El humo del incienso ascendía
permanentemente del altar. Las oraciones de los creyentes subían hasta Cristo, con el incienso, de quien
dependían para recibir gracia a fin de vivir sus vidas.
d) Decidieron __________ por la fe la voluntad revelada de Dios (Hech. 1:24-26).
Se les promete poder pentecostal a los que le prestan a Dios, por la fe, una obediencia amante (Hech.
5:32; Heb. 5:9; Juan 14:15). El Espíritu de Dios se derrama en plenitud sobre los que habitualmente
responden a sus impresiones al leer la Palabra y al orar por entendimiento.
Gloria y poder al Cordero

• Determinar cuándo adoran a Jesucristo los redimidos, reconociendo su superioridad en todo.
El relato de las diez vírgenes que encontramos en las Escrituras nos asegura que sólo los que
experimentan continuamente la obra del Espíritu Santo en sus vidas recibirán la bienvenida a la cena de
bodas (Mat. 25:8-13).
19. ¿Cuándo se le darán al Cordero la gloria, el poder, el honor y las gracias?

Respuesta: Cuando el plan de salvación esté terminado, entonces alabará a Cristo “toda criatura
en el _______ y en la _______” y en todo lugar (Apoc. 5:10-13; 15:2-4).
Estos textos describen una escena en la cual se le tributa a Dios séptuple alabanza. En ese momento el
gozo del Cielo será total y completo porque el pecado y los pecadores ya no tienen lugar en el universo de
Dios. Todos adorarán con gozo a Jesucristo. Los redimidos y los santos ángeles proclamarán la grandeza
y la perfección del carácter de Dios, y reconocerán que han sido falsas todas las acusaciones que Satanás
lanzó contra Dios y su carácter. El Cielo estará seguro para siempre de que el pecado no se levantará otra
vez.
20. ¿Quiénes estarán sobre el mar de vidrio para entonar himnos de gratitud al Cordero?
Respuesta: Todos los que venzan por la gracia que Dios está dispuesto a dar en abundancia
“___________ todas las cosas” en la tierra nueva (Apoc. 7:14; 21:7).
Este mundo terminará cuando el Señor Jesucristo venga en gloria (Mat. 16:27). Algo de la majestad de
este acontecimiento se vio en tiempos del Antiguo Testamento cuando la nube de la gloria de Dios llenó
el templo, y en el Nuevo Testamento cuando Jesús se transfiguró en el monte (Exo. 40:34; Mat. 17:2;
Mar. 9:3). Los que son obedientes y reflejan aquí la gloria del carácter de Dios, se encontrarán entre los
que serán considerados dignos de estar de pie sobre el mar de vidrio, a fin de ser para siempre ciudadanos
del glorioso reino de Dios.
“Satanás ha asegurado que los hombres no pueden guardar los mandamientos de Dios. Para probar que
pueden, Cristo se hizo hombre y vivió una vida de perfecta obediencia, una evidencia para los seres
humanos pecadores, para los mundos no caídos y para los ángeles del Cielo, que el hombre puede guardar
la Ley de Dios por medio del poder divino que se proporciona en abundancia para todo aquel que cree. A
fin de revelar a Dios al mundo, para demostrar la verdad de lo que Satanás había negado, Cristo se ofreció
a tomar la humanidad, y con su poder la humanidad puede obedecer a Dios. ‘A todos los que lo
recibieron, a quines creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios’. Todo el Cielo es de
Cristo para entregarlo al mundo” (Juan 1:12; E.G. de White, Signs of the Times [Señales de los tiempos],
1899, t. 25, No. 19, p. 34). Oremos para recibir y experimentar su poder en nuestras vidas hoy mismo, de
manera que le podamos dar gloria a Dios.

1. bondad
2. dedo
3. a) Dios, hombre b) amor
4. infracción
5. gloria
6. imagen
7. den
8. transforma
9. cautivo
10. parecer, grande
11. a) vivientes b) mujer
12. creación
13. ---
14. poder, perdonar
15. hijos
16. predecir
17. a) Espíritu Santo b) guarden
18. a) perseveraban, unánimes b) Escrituras c) oración d) obedecer
19. cielo, tierra
20. heredarán
,
18. DIOS, EL CREADOR, ESTÁ EN SU TEMPLO
La Biblia presenta a Dios como el Creador de todas las cosas. El sencillo relato registrado en las
Escrituras nos cuenta que la obra creadora de Dios, con nuestro sistema solar incluido, se llevó a cabo en
siete días de 24 horas. La secuencia del relato de la creación es lógico y perfecto. Notamos, por ejemplo,
que en el tercer día se crearon las plantas provistas de clorofila, y al día siguiente se creó al sol. Cualquier
día que vaya más allá del límite de 24 horas, en cualquiera de esos días, crea serios problemas científicos.
La historia de la creación y la de los acontecimientos que le siguieron inmediatamente, nos dan

información acerca del origen del ciclo semanal, del hombre y la mujer, del pecado y el sufrimiento, y del
originador del mal. Más importante aún, se nos presenta a Jesucristo, el Salvador. La comunidad
científica tiene dificultades para explicar fenómenos tales como el ciclo semanal y el dimorfismo sexual
evidente en muchos organismos. Los que creen que Dios comenzó el proceso evolutivo, tienen problemas
para explicar el origen del pecado. Sin un claro concepto acerca del origen del mundo y el pecado, la
necesidad de un Salvador es cada vez más difícil de aceptar. La realidad del poder transformador del
Espíritu Santo (una acción regeneradora) y la adquisición de la inmortalidad (la creación de un nuevo
orden de seres) en ocasión de la venida de Cristo, se vuelven difíciles de creer.
Dios está por encima de todos los otros dioses

• Repasar algunos detalles del santuario terrenal que nos recuerdan que Cristo es el Creador.
• Poner énfasis sobre la extensión y el carácter especial de las actividades creadoras de Cristo.
1. Al compararlo con las imágenes esculpidas, ¿qué aspectos del carácter de Dios infiere Habacuc por
implicación?
Respuesta:
a) La imagen o ídolo enseña __________ (Hab. 2:18). En contraste, Dios es el camino, la verdad
y la vida (Juan 14:6).
b) El ídolo es mudo (Hab. 2:18), y no tiene ________ (v. 19). Dios es el dador de la vida, porque
él sopló aliento de vida en Adán (Gén. 2:7).
El profeta Habacuc consideraba que la presencia del Señor en su santo templo le mostraba efectivamente
a todo el mundo la futilidad de todo otro sistema de creencias. Dijo: “Mas Jehová está en su santo templo:
calle delante de él toda la tierra” (Hab. 2:20). Se cree que Habacuc escribió estas palabras en torno del
año 630 a.C., y por lo tanto se refería al magnífico templo de Salomón que todavía estaba en pie cuando
él escribió su libro.
2. ¿Qué aspectos importantes del tabernáculo del desierto y el templo de Salomón pueden haber ejercido
influencia sobre la declaración de Habacuc?
Respuesta: Una nube de ________ apareció y llenó el tabernáculo del desierto cuando lo
dedicaron, y en otras ocasiones también, y fue por demás evidente cuando se dedicó el templo de
Salomón (Exo. 40:34, 35; 1 Rey. 8:6, 9-11).
La “shekina” (la gloria de la presencia de Dios) era visible sobre el propiciatorio en el lugar santísimo y
su luz llenaba todo el santuario (Isa. 6:1). Mientras un sacerdote ofrecía incienso, la nuble de “la gloria
divina descendió sobre el propiciatorio y llenó el lugar santísimo, y a menudo llenaba de tal manera
ambos compartimentos que el sacerdote se veía obligado a retroceder hasta la puerta del tabernáculo” (1
Rey. 8:10,11; E.G. de White, Patriarcas y profetas, 1958, p. 353 (versión en inglés). La gloria de la
presencia divina envuelta por la nuble representaba, en efecto, la gloria de Dios revelada por medio de
Jesucristo (Exo. 16:10; 2 Cor. 5:19). Todas las comunicaciones entre el Cielo y la humanidad se hacen
por medio de Cristo. Jesús habló a través de todos los profetas (Apoc. 19:10). Cuando los hijos de Israel
iban rumbo a la tierra prometida, Cristo era quien los conducía, se comunicaba con ellos y atendía todas
sus necesidades (1 Cor. 10:4). Las Escrituras declaran: “En él estaba la vida, y la vida era la luz de los
hombres” (Juan 1:4). El símbolo de la presencia de Cristo en este mundo es la luz. Ésta resplandeció en
medio de las tinieblas en el día de la creación, y estaba relacionada con su presencia en el santuario. Tanto
el apóstol Juan como el profeta Habacuc comprendieron que la luz y la presencia de Cristo son símbolos
de su poder creador (Juan 8:12).
3. ¿Qué otros aspectos del santuario deben de haber sido familiares para Habacuc y señalan la grandeza
del Dios que adoramos?
Respuesta:
a) El Señor le dio a Moisés palabras de perdón, ______________, y salvación (de volver a crear)
desde la nube de gloria (Núm. 14:10, 17-19).
b) El Señor le dio a Moisés desde la nube de gloria palabras de ________ (Núm. 16:27-30).
c) El Señor instruyó a Moisés desde la nube de gloria e hizo __________ por medio de él (actos
de creación) (Núm. 20:6-8).
d) El Señor profetizó acerca del triunfo final de los principios de su reino sobre los de los
hombres, con las siguientes palabras: “Toda la tierra estará _______ de la ________ del Dios”.
La creación de la tierra nueva está incluida en esta promesa (Núm. 14:20, 21).
4. ¿Con qué gran acontecimiento, que ocurrió mientras los hijos de Israel peregrinaban por el desierto del
Sinaí, estuvo relacionada la gloria de Dios?
Respuesta: La entrega de los Diez Mandamientos “en dos _______ de piedra” (Deut. 5:22).
Dios escribió con su propio dedo los Diez Mandamientos (Exo. 31:18; Deut. 9:10). Con esto Dios quería
dar a entender que cualquier cambio que se le quisiera hacer a esa Ley, podría ser hecha sólo por él
mismo. Ese cambio no está registrado en las Escrituras. Los principios de la Ley expresan amor,
misericordia y juicio (Dan. 5:9, 10). Nos dicen cómo podemos manifestar nosotros nuestro amor a Dios y
al prójimo por medio de nuestras actitudes y nuestros actos (Mat. 22:36-40). En el corazón de estos
principios se encuentra el monumento recordativo de la creación de Dios, a saber, el sábado (Exo.
20:10,11). Por lo tanto, es evidente que los Diez Mandamientos nos señalan a Cristo, su Dador, y el
Creador de éste y los otros mundos (Juan 1:1-3, 14; Sant. 4:12).
5. ¿Qué habilidad reclama Dios como prueba de que es único?

Respuesta: “Jehová ______ los cielos” (1 Crón. 16:25, 26; Sal. 96:5).
La insensatez de que la criatura adore objetos hechos con sus manos es una situación claramente
establecida en la Biblia (Isa. 42:5-8). Sólo a Dios le debemos lealtad. En nuestros días los hombres adoran
el intelecto, a tal punto que una gran mayoría cree en la teoría de la evolución. Esta teoría se basa en los
principios del humanismo, que le niega a Dios un lugar en el pensamiento humano. El futuro de la
humanidad, se afirma, depende de que asumamos plenamente nuestra responsabilidad, sin depositarla
sobre “los hombros de dioses míticos y (de conceptos) metafísicos absolutos” (J. Huxley, Evolution: the
Modern Synthesis [La teoría de la evolución: la síntesis moderna], 1974, 3ª. Ed., p. 578). Muchos
hombres y mujeres han llegado a creerse iguales a Dios, y han aceptado la mentira satánica: “Seréis como
Dios” (Gén. 3:5), puesto que los humanistas afirman lo siguiente: “Por lo demás, es claro que el hombre
está sólo en el comienzo de la evolución de su dominio, y que vastas e insospechadas posibilidades de
progreso se extienden delante de él”. “El deber más sagrado del hombre. . . incluye la plena comprensión
de sus propias posibilidades inherentes” (J. Huxley, Religion without Revelation [Una religión sin
revelación], 1967, pp. 165, 166). Se alega que cuando entendemos la causa del bien y el mal alcanzamos
la libertad. “La humanidad ha estado siempre ‘temiendo a Dios’; ahora le podemos hacer frente. El
verdadero papel de la ciencia ha sido liberar a la humanidad de la ignorancia. El verdadero papel de la
religión ha sido consolar al hombre mientras la investigación (científica) seguía su curso” (J. Griffith,
Beyond the Human Condition [Más allá de la condición humana], 1991, p. 47). El humanista proclama
que no hay un nivel intelectual más elevado que el que posee la humanidad, y está tratando de explorar y
desarrollar esas otras “facultades mentales” que son la telepatía y las actividades extra sensoriales.
El Manifiesto Humanista declara que las ideas de salvación y condenación son ilusorias y dañinas, y que
no hay garantía sobrenatural para los valores humanos. La ciencia moderna proclama ideales humanistas
al aceptar una cantidad de sus principios. Se sostiene que el conocimiento es tentativo y progresivo; no
habría valores absolutos. Aunque esto parezca ser cierto si se lo aplica al desarrollo cotidiano de la ciencia
(no disponemos de verdades absolutas en cuanto al mundo natural), descubrimos que niega las
certidumbres de la Palabra de Dios. El ateo niega la idea de Dios, y no acepta una explicación
sobrenatural ni siquiera referida a los orígenes. Otros recorren un sendero un poco diferente en el cual a
Dios se lo concibe de una manera algo distinta. Notemos el punto de vista de un físico moderno en cuanto
al origen del universo: “Resulta redundante la idea de un Dios Creador, pero no se puede descartar una
mente universal que existe como parte del universo físico único, opuesto a un Dios sobrenatural” (P.
Davis, God and the New Physics [Dios y la nueva física], 1983, p. 223).
En contraste con esto, algunos deístas (creyentes en un Dios sobrenatural) creen que “nada en la
naturaleza de la evolución descarta la posibilidad de una dirección divina” (J.P. Zetterberg, Evolution
versus Creationism: The Public Education Controversy [Evolución vs. Creacionismo: el conflicto
suscitado en la educación pública], 1983, p. 470). De allí que observemos un creciente acomodo entre los
evolucionistas ateos y los deístas, que han compartido recursos intelectuales para desacreditar a los que
creen en una Creación especial.
6. ¿Con qué otros aspectos de la experiencia cristiana relaciona Dios su capacidad creadora?
Respuesta:
a) Su capacidad para _____________ seguros bajo su cuidado (Isa. 45:5, 6).
b) Su capacidad para _______ milagros (Isa. 42:7).
c) Su capacidad para ___________ del pecado (Isa. 42:7; 1 Ped. 4:18, 19).
d) Su capacidad para regenerarnos espiritualmente, lo que resulta evidente cuando en la vida se
manifiestan las ________ obras (Efe. 2:10).
Resulta claro, al estudiar esta lista, que el cristiano que tiene un conocimiento cabal de la Biblia también
será un firme creyente en el Dios creador. Un Dios incapaz de crear con seguridad no será capaz de dirigir
la mente por canales correctos, y tampoco podrá salvar al fin al creyente en la tierra nueva. Una noción
popular, sostenida por muchos cristianos, es que Dios comenzó el proceso evolutivo (evolución deísta).
Esto plantea una cantidad de problemas. El más importante tiene que ver con el origen del mal (pecado).
Si no podemos determinar el origen del pecado, surge el tema de la necesidad de un Salvador. Sin una
creación especial, el concepto de la santidad del matrimonio y el hogar (recordativos constantes del don
divino de la procreación), descrito con tanta claridad en el relato del Génesis, también carece de base. Por
lo tanto, resulta evidente que las dos grandes instituciones que recibimos del Edén: el sábado y el
matrimonio, quedan en tela de juicio.
Cristo, el Creador
• Destacar el hecho de que nuestro Creador también es nuestro Redentor.
• Recordar que nuestra existencia inmortal en los cielos nuevos y la tierra nueva, depende de las futuras
actividades creadoras de Cristo.
Todas las personas de la Deidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) participaron de la obra de la creación
según lo entendemos al estudiar Gén. 1:26. Las palabras ”hagamos” y “nuestra” del versículo 26 indican
que por lo menos dos personas estaban implicadas. . En Heb. 1:2 se nos explica con toda claridad que
tanto el Padre como el Hijo participaron en la obra de la creación, y en Gén. 1:2 se indica que el Espíritu
Santo también desempeñó un papel en esa oportunidad.
7. ¿Cuál fue el principal instrumento en la obra de la creación?

Respuesta: Todas las cosas fueron hechas por la _________ y la Palabra era Cristo (Juan 1:1-3,
14).
Es solemne la idea de que el Creador de este mundo nos atrajo a sí por medio de sus sufrimientos (1 Cor.
6:20; Heb. 1:2). Por eso él está constantemente calificado para volver a crear en nosotros una nueva vida.
8. ¿Cómo se crea esta nueva vida en nosotros?

Respuesta: Por la ____________ de nuestro entendimiento (Rom. 12:2).
El aserto de que “mediante la contemplación nos transformamos” es el principio en que se basa la

renovación de nuestra mente. Por medio de la oración (Mat. 26:41) y el estudio de la Palabra de Dios (2
Ped. 3:18), cambian las actitudes, las acciones y los motivos. David y el profeta Daniel oraban tres veces
al día. El secreto de su grandeza era su constante dependencia de Dios. El santuario del Antiguo
Testamento, con sus sacrificios matutino y vespertino, nos enseña una importante lección con respecto a
la regularidad que debería caracterizar nuestro genuino culto a Dios y la contemplación de las cosas
espirituales. (Los cristianos de hoy harían bien en seguir este ejemplo mediante la institución del culto de
familia matutino y vespertino). Cristo vino para darnos un ejemplo que deberíamos seguir. El secreto del
éxito de Jesús era su íntimo conocimiento de la Palabra de Dios y su vida de oración. Pasó noches enteras
en oración, y de ellas salía fortalecido para contender con el enemigo de las almas.
9. ¿Con qué gran acontecimiento está relacionada la investidura de la inmortalidad?

Respuesta: En ocasión de la segunda venida de Cristo los muertos “resucitarán
________________”; serán transformados (1 Cor. 15:52, 53).
La segunda venida de Cristo es el acontecimiento que ha ansiado y esperado la gente de todos los siglos.
La resurrección de los justos muertos y su consiguiente recepción de cuerpos incorruptibles (creados de
nuevo) les devolverá a los redimidos los cuerpos de que disfrutaban Adán y Eva antes de la caída (1 Tes.
4:16). Algunos creen que la inmortalidad se recibe en el momento de morir. Pero las Escrituras no
presentan en ninguna parte un estado consciente durante la muerte. La Palabra de Dios declara
enfáticamente que “los muertos nada saben” (Ecl. 9:5, 10). Se cree que la popular historia del hombre rico
y Lázaro, que encontramos en las Escrituras, es en realidad de origen pagano (Luc. 16:19-31). (W.
Whiston, The Life and Works of Flavius Josephus [Vida y obras de Flavio Josefo], c. 1936, pp. 901, 903;
J. Jeremias, The Parables of Jesus [Las parábolas de Jesús], 1972, p. 183). Jesús usó esta historia pagana
para ilustrar la necesidad de asegurarnos de nuestra vocación y elección ahora, y no después, porque el
juicio de Dios es irrevocable.
10. ¿Quién transformará nuestros cuerpos corruptibles en gloriosos, libres de enfermedad?

Respuesta: El Señor Jesucristo cambiará nuestros cuerpos viles en cuerpos semejantes al suyo,
__________ (Fil. 3:20, 21).
Algo de la gloria del cuerpo glorioso de Cristo se les reveló a Pedro, Santiago y Juan en el Monte de la
Transfiguración. Allí vieron a Jesús revestido de gloria y acompañado por Moisés y Elías (Luc. 9:28-31).
A los creyentes (a los vencedores) se les han prometido cuerpos gloriosos y libres de enfermedad (Apoc.
21:4, 5, 7). Es consolador el pensamiento de que el mismo poder que se manifestó en la creación del
mundo estará a disposición de nosotros, por fe en Cristo el Creador, para que podamos vencer (1 Cor.
10:31). Se ha dicho que “la felicidad de los redimidos en el Cielo será consecuencia del carácter que
hayan desarrollado en esta vida de acuerdo con la imagen de Cristo. Los santos del Cielo habrán
comenzado a ser santos aquí en la tierra” (E.G. de White, Advent Review and Sabbath Herald [Revista
adventista y heraldo del sábado], 1892, t. 69, No. 49, p. 622; 1 Juan 3:2).
11. ¿Quién es el Constructor de los nuevos cielos y la nueva tierra?

Respuesta: Jesús prometió que haría ________ todas las cosas (Apoc. 21:5).
La Biblia revela que Jesús se ha identificado por completo con la especie humana (Apoc. 1:17, 18; 21:36).
Su capacidad de crear es una pieza central de nuestra creencia en su capacidad para librarnos del
sentimiento de culpa, del poder del pecado y finalmente de su presencia. Sólo los que creen en un Dios
creador pueden captar la realidad de la promesa de que habrá cielos nuevos y tierra nueva.
El monumento recordativo de la creación

• Destacar el hecho de que se apartó el sábado para que fuera un monumento recordativo de la
creación.
• Poner énfasis sobre la circunstancia de que Jesús, la luz del mundo, sólo puede ser nuestro Redentor
porque es nuestro Creador.
• Ampliar nuestra comprensión del significado del sábado como un permanente recordativo de la
capacidad creadora de Cristo.
En vista de que nuestro concepto de la creación se basa en nuestro conocimiento de Dios, no debería
sorprenderos que el Señor haya establecido una institución en el Edén para recordar a sus hijos el porqué
de sus requerimientos de amor y devoción.
12. ¿Con qué acto culminó la obra de la semana de la creación?

Respuesta: Dios ________ el séptimo día, lo _________ y o santificó (le dio el carácter de santo)
(Gén. 2:2, 3).
Pablo también menciona en Heb. 4:4-11 la triple prominencia que se le dio al séptimo día en el Edén. Nos
insta a recordar el significado de la institución del sábado, ya que es a la vez un símbolo de la creación y
de la salvación. Es un día de gozoso descanso y comunión con nuestro Hacedor (o un santuario en el
tiempo). Juan el Revelador también encara este tema ya que identifica un movimiento religioso que
surgiría justo antes de la venida de Cristo y que sacaría a relucir este monumento recordativo (Apoc. 14:6,
7). Seamos parte de este movimiento que cumple la profecía.
13. ¿Qué aspectos de la obra creadora de Dios destaca el sábado?

Respuesta:
a) La creación del mundo en ______ días (Exo. 20:10, 11).
b) La experiencia del nuevo nacimiento y la constante experiencia de fe que le da al creyente el
reposo espiritual. Jesús prometió: “Yo os daré __________” (Exo. 31:13; Eze. 20:12; Mat. 11:28-
30; Heb. 4:4, 8-10).
c) La creación de nuevos ________ y nueva ________ (Isa. 66:22,23).
Se ha dicho que si se hubiera conservado este monumento recordativo de la capacidad creadora de Dios,
“nunca habría habido un idólatra, un ateo o un incrédulo” (E.G. de White, El conflicto de los siglos, 1975,
p. 491).
14. ¿Qué recuerdos de la capacidad creadora de Dios estaban relacionados con el santuario del desierto?
Respuesta:
a) La vara de Aarón ____________, echó flores, produjo renuevos y dio almendras (Núm. 17:6-
10).
b) La urna de oro llena de ______ que estaba en el arca del pacto (Heb. 9:4).
El milagro del maná (con doble porción el viernes y nada el sábado) fue una experiencia semanal durante
cuarenta años. Dios proporcionó este alimento mediante el ministerio de los ángeles poco antes de dar
formalmente los Diez Mandamientos en el Sinaí (Sal. 78:24, 25; Exo. 16:1, 4, 5). Esta experiencia indica
que los israelitas, antes del Sinaí, ya sabían cuál era el monumento recordativo de la creación. En efecto,
los Diez Mandamientos, todos ellos, ya eran conocidos antes de que se los diera formalmente en el Sinaí.
La semana de la creación
• Determinar que los días de la creación eran de 24 horas.
• Examinar el hecho de que el ciclo semanal (de siete días) comenzó en la creación.
• Destacar el hecho de que presentar a Cristo como Creador y Redentor fortalece la predicación del
evangelio.
El ciclo semanal de siete días es un constante recordativo de que Dios creó este mundo. Ciertos gobiernos
han hecho algunos intentos de modificar este ciclo, pero sin mucho éxito. El más notable de ellos ocurrió
durante la Revolución Francesa, cuando se instituyó una semana de diez días. Es interesante notar que el
propósito de este plan era destruir los últimos vestigios del cristianismo. Tomemos nota de lo siguiente:
“Los objetivos que los abogados del nuevo calendario tenían en vista eran asestarle un golpe al clero y
eliminar toda base de cálculo del año cristiano; los entusiastas ya hablaban del ‘año de la libertad’”
(Encyclopaedia Britannica, 1961, t. 9, p. 803). Algunos intentos modernos de establecer un año de 364
días, con el día 365 como un día en blanco que no se computa (Encyclopedia Americana, 1991, t. 5, p.
190; vaya a la página web de las Naciones Unidas referida a la reforma del calendario). Tal reforma, si se
llegara a instituir, eliminaría efectivamente el antiguo ciclo semanal y el séptimo día de reposo (el
sábado), que han existido desde la creación.
15. ¿Cuándo comienza el día según el Antiguo Testamento?

Respuesta: El día de 24 horas comenzaba “a la ________ _____ _____” (Lev. 23:32; Deut. 16:6-
8).
La palabra hebrea correspondiente a “día”, yom, a veces se usaba para referirse a períodos de más de 24
horas (Gén. 2:4), e incluso de la usaba para referirse a un acontecimiento de duración indefinida (Job
21:30; 38:23). Pero cuando la palabra “día” va asociada con un número o cantidad, siempre significa días
de 24 horas (ej: Gén. 7:17; 22:4; 31:22; 42:18).
16. ¿Indica el informe de la creación que se trataba de días de 24 horas?

Respuesta: Ea evidente que se trataba de días de 24 horas (Exo. 31:17).
Si se usa la regla mencionada arriba, la conclusión es ineludible. Ademas, cabe recordar que Adán vivió
930 años (Gén. 5:5). Si un día equivaliera a mil años o más, la vida de Adán habría transcurrido en un
solo día. Los informes bíblicos no son absurdos.
17. ¿Cuál es la importancia de que el ciclo diario comience a la puesta del sol?
Respuesta: Los días de la creación, que comenzaban con la parte oscura y terminaban con la
__________ se ha repetido permanentemente desde entonces (Gén. 1:2, 3, 14).
Los hebreos dicen que “cada mañana, cuando la oscuridad desaparece al irrumpir la luz, se renueva el
acto inicial de la creación (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 5, col. 1374).
18. ¿Qué significa la declaración de Jesús “Yo soy la luz del mundo”?
Respuesta: Jesús es “la _____ de los hombres” y la Fuente de la salvación (Juan 1:3-5).
En esta declaración está implícita la idea de que Jesús es a la vez el Creador y el Redentor, y el gran
Héroe de todos los mundos creados del universo. Rescató este mundo que estaba perdido en medio de una
nube de tinieblas. Creará una gloriosa tierra nueva, y así le asegurará para siempre al cosmos que el mal
no se volverá a levantar. En la tierra renovada el Señor Dios Todopoderoso y el Cordero (Cristo) serán la
luz de la ciudad (Apoc. 21:22, 23).
La “luz” o el conocimiento de Dios (la verdad) de la cual se nos habla en las Escrituras, nos llega cuando
leemos diligentemente y estudiamos con oración la Palabra para tratar de conocer la voluntad del Señor
(Juan 14:6; 17:17). Por medio de los grandes principios que se nos revelan entonces, se nos “santifica”
cuando nos sometemos al poder modelador de Dios (Juan 17:17). Una escritora lo dice así: “La energía
creadora que llamó a los mundos a la existencia se encuentra en la Palabra de Dios. Esta Palabra imparte
poder; engendra vida. Cada orden es una promesa; aceptada por la voluntad, recibida en el alma, trae con
ella la vida del Infinito. Transforma la naturaleza y vuelve a crear el alma a la imagen de Dios” (E.G. de
White, La educación, 1952, p. 126, versión inglesa).
19. En nuestro intento de ganar a otros para Cristo, ¿qué consejo nos da el apóstol?
Respuesta: Predicad a Cristo el _________, el Redentor, el Legislador, el Juez, el Sustentador y
Restaurador de todas las cosas (Hech. 14:15; 17:24, 28, 31; Apoc. 14:6, 7).
Para entender plenamente la obra redentora de Dios tenemos que entender que Cristo es nuestro Hacedor,
el Legislador y el Sustentador de todas las cosas. Cristo, nuestro Redentor, se dio a sí mismo como un don
eterno para sus redimidos, porque él siempre lleva en su cuerpo las marcas de su humillación (Juan 20:27,
28). Vino como el Hijo del hombre, y siempre estará relacionado con sus redimidos (Mat. 25:31). El amor
de Dios expresado en este acto se revela en toda su profundidad cando consideramos que nuestro
Redentor también es nuestro Creador. ¡Qué Redentor! ¡Qué Amigo!
El hecho de que Cristo es el Creador es la base de su pedido de que se lo adore y se lo reverencie. El

salmista lo expresó así: “Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová, nuestro
Hacedor” (Sal. 95:6). Para que este gran principio estuviera siempre delante de los hijos de los hombres,
Dios instituyó el sábado en el Edén. En el corazón del mensaje evangélico, que se proclama en la última
porción de tiempo antes de que Jesús venga como Rey glorioso, hay una invitación adorar y a reverenciar
al Creador mediante el monumento recordativo de su creación, el sábado (Apoc. 14:6, 7). Respondamos
positivamente a esta invitación de Cristo, tan llena de gracia.

1. a) mentiras b) espíritu
2. gloria
3. a) misericordia b) juicio c) milagros d) llena, gloria
4. tablas
5. hizo
6. a) mantenernos b) hacer c) salvarnos d) buenas
7. Palabra
8. renovación
9. Incorruptibles
10. glorioso
11. nuevas
12. reposó, bendijo
13. a) seis b) descanso c) cielos, tierra
14. a) reverdeció b) maná
15. puesta del sol
16. ---
17. luminosa
18. luz
19. Creador
19. MIDE EL TEMPLO
El santuario que se levantó en el desierto bajo la dirección de Moisés, el templo de Salomón y el segundo
templo, todos ellos eran magníficos por derecho propio. Cada uno de ellos era diferente de los otros, pero
se los había construido sobre la base del mismo plano. Se los hizo de acuerdo con el modelo que se le
mostró a Moisés en el Monte Sinaí, que era el templo del Cielo. En los templos terrenales, cada mueble,
lo que contenían, sus detalles y las ceremonias que se llevaban a cabo, enseñaban profundas lecciones con
respecto al plan de redención de Dios.
En el Apocalipsis se le da la orden a Juan, el profeta, de medir el templo (Apoc. 11:1). Este templo es el
celestial, porque en ese momento no había templo en la tierra, y hasta el día de hoy no lo hay. El templo
de Jerusalén fue destruido en el año 70 d.C., antes de que Juan escribiera el Apocalipsis. Al instruir al
profeta y a sus seguidores para que midieran el templo, el ángel trató de dirigir la atención del estudioso
hacia los detalles de los servicios del santuario y su simbolismo, a fin de que su profundo significado se
comprendiera mejor. Cuando se mide algo es necesario prestar cuidadosa atención a los asuntos que se
están estudiando. En esta lección queremos investigar algunos de los importantes principios que se
descubrieron cuando estudiaron el santuario los que vivieron justo después de terminar los 1260 años (42
meses) de persecución de Apoc. 11, y que concluyeron en 1798.
El templo del Cielo

• Resumir algunos de los aspectos del santuario celestial con el fin de preparar el escenario.
• Revisar brevemente algunos de los ministerios llevados a cabo por Jesús en el santuario celestial.
1. ¿Cuál fue el modelo del santuario terrenal?

Respuesta: El santuario ____________ (Exo. 25:8, 9; Heb. 8:1-5).
En su misericordia y su sabiduría Dios trató de enseñar a la humanidad importantes lecciones acerca de la

salvación, su carácter inmutable, e importantes acontecimientos de la tierra y del Cielo relacionados con
el gran plan de salvación. Trató de hacer esto, en parte a lo menos, por medio de los servicios del
santuario.
2. ¿Qué descripciones encontramos en las Escrituras que nos permiten entender mejor el templo del
Cielo?
Respuesta:
a) Isaías vio a Dios sentado en su _______ en el santuario celestial, y vio que su gloria lo llenaba.
A la _____ se estremecieron los mismos quicios de las puertas. El profeta vio también el altar de
oro del incienso (Isa. 6:1-7). En comparación con el santuario terrenal, el celestial tiene una
magnificencia indescriptiblemente superior.
b) El profeta Micaías describió la vastedad del santuario celestial (1 Rey. 22:19). Todo el
__________ de los ________ estaba reunido alrededor del trono.
c) Daniel en su visión del templo celestial también pudo apreciar su vastedad. Vio las huestes
angélicas reunidas durante la ceremonia de inauguración del gran juicio investigador. La gloria de
ese lugar era indescriptible, porque el _________ de días (el Padre) y el Hijo del ________
honraban el templo con su presencia (Dan. 7:9, 10 13).
d) Juan el revelador vio el trono de Dios en el cielo y todo su esplendor. Delante del trono había
un mar de vidrio como si fuera de cristal, y 24 ancianos sentados en tronos, vestidos de ropas
blancas y con coronas en sus cabezas. Vio siete ___________ encendidas delante del trono
(Apoc. 4:1-6). Después vio también el altar del incienso, un incensario de oro, y el ______ del
pacto (Apoc. 8:3; 11:19).
Estas escenas descritas por los profetas bíblicos nos indican que existe una exacta correlación entre el
santuario de la tierra y el del Cielo. Pero éste es más vasto y magnífico de lo que puede imaginar la mente
humana. Los santuarios construidos en esta tierra eran “figuras de las cosas celestiales” o “figuras del
verdadero” (Heb. 9:23, 24).
3. ¿Quién es el Sumo Sacerdote en el santuario celestial?

Respuesta: ________, el Legislador (Heb. 5:5, 6; 9:11; Sant. 4:12).
Cristo es nuestro Sumo Sacerdote en el Cielo (Heb. 5:4-6). Esto quiere decir que a semejanza de Aarón y
de todos los que le siguieron, podía ministrar tanto en el lugar santo como en el santísimo. Los sacerdotes
comunes sólo podían servir en el lugar santo. En el encargo que se les dio a los sacerdotes, Aarón estaba
incluido, de lo que se deduce que podía servir en los dos compartimentos sin limitación alguna (Núm.
18:7).
4. ¿Qué tarea llevó a cabo Jesucristo como nuestro Sumo Sacerdote en el primer compartimento del
santuario celestial?
Respuesta: Jesús es “el __________ del nuevo pacto” en el primer compartimento del santuario
celestial (Hech. 5:29-31; Heb. 12:24).
Cristo sólo pudo ser sacerdote después de su consagración. Esto se llevaba a cabo mediante un sacrificio
(Lev. 8:22-24, 30; Heb. 8:3). En ese caso tanto el sacerdote como el sacrificio representaban a Cristo. Por
lo tanto, Jesús recién pudo comenzar sus tareas sacerdotales después de la cruz. Ahora el presenta ante el
Padre los méritos de su sangre (justifica al pecador) y los méritos de su vida perfecta (santifica al pecador)
en favor de los que ejercen fe en él. En otras palabras, al justificado le “le imparte poder para vivir una
vida nueva, y en el nombre del justificado consigue que Dios acepte esa nueva vida” (C.H. Watson, The
Atoning Work of Christ, His Sacrifice and Priestly Ministry [La obra expiatoria de Cristo, su sacrificio y
su ministerio sacerdotal], 1934, p. 95). En el santuario terrenal la sangre derramada del sacrificio por el
pecado (por los pecados cometidos inconscientemente o sin intención) la ofrecía el sacerdote en el lugar
santo (Lev. 4:3, 7, 13, 18). A veces el sacerdote oficiante comía una porción del sacrificio (Lev. 10:18)
para indicar que él llevaba los pecados del arrepentido. Los que se arrepentían de pecados cometidos
conscientemente, los confesaban a Dios y confiaban en la abundancia de su misericordia (ej. 2 Sam.
12:12-14; Luc. 23:39-43). Cristo hoy les ofrece gracia a todos los pecadores, por los méritos de su sangre
derramada (1 Ped. 2:24).
5. ¿Cuándo comenzó Cristo sus labores en el segundo compartimento del santuario celestial?
Respuesta: En 1844, cuando comenzó el día antitípico de la expiación.
El sumo sacerdote entraba en el segundo compartimento del santuario terrenal una vez al año en el día de
la expiación. Durante ese día se eliminaban los pecados del pueblo, que habían sido confesados
previamente y que se habían transferido al santuario. Se deduce entonces que la obra de los sacerdotes y
el sumo sacerdote era un requisito previo necesario de las actividades que se desarrollaban en el día de la
expiación. Por eso era necesario que Jesús desarrollara primero su ministerio en el lugar santo. Como ya
lo hemos notado, el sumo sacerdote podía llevar a cabo todas las tareas asignadas a los sacerdotes
comunes. Pero sólo él podía quemar incienso en el altar que se hallaba delante del velo y aderezar las
lámparas. El sumo sacerdote oficiaba todos los días del año en el primer compartimento del santuario
(Exo. 30:7, 8). La fiesta de los tabernáculos seguía casi inmediatamente al día de la expiación, y era
ocasión de gran regocijo (Lev. 23:34-36). Esta fiesta anunciaba el regocijo de los santos en el Cielo. Si
tenemos presentes estos hechos, no es posible insistir, como lo hacen algunos, en que Jesús comenzó sus
tareas en el lugar santísimo inmediatamente después de su ascensión el Cielo en el año 31 d.C.
Mide el santuario
• Examinar las instrucciones que se les da a la gente de estos últimos días en el sentido de medir (o
entender) el santuario celestial.
• Destacar el hecho de que si entendemos bien el santuario celestial, apreciaremos mejor los Diez
Mandamientos que se dieron en el Sinaí como una expresión de la voluntad de Dios para nosotros
hoy.
Siendo que Cristo ascendió al Cielo, es de vital importancia que tratemos de entender la naturaleza de la
obra que lleva a cabo allí, y determinar cuándo se cumplirá la promesa de regresar que hizo en el
momento de partir.
6. ¿Qué orden le dio a Juan el ángel de Apocalipsis 11?

Respuesta: Que _________ o entendiera el templo (Apoc. 11:1).
Los capítulos 10 y 11 del Apocalipsis están relacionados en el sentido de que ambos se refieren a la
experiencia del pueblo de Dios previa a la segunda venida de Cristo. Esto resulta evidente si comparamos
Apoc. 10:6 con 11:15 ya que los dos hablan del tiempo que queda después de 1844. El templo a que se
refiere Juan es el del Cielo, ya que cuando él escribió el templo de la tierra había sido destruido. El ángel
instruye a los moradores de la tierra a que estudien cuidadosamente el santuario en las Escrituras, sus
muebles, sus servicios y sus símbolos, a fin de comprender claramente el ministerio de Cristo en el Cielo.
7. ¿Qué se vio cuando se midió el santuario?

Respuesta: El ______ de su testamento o _______ (Apoc. 11:19).
“Arca del testamento” es otro nombre que se da al arca del pacto (Núm. 10:33).
8. ¿Qué contenía el arca?

Respuesta: El arca contenía las _______ del _______ (Deut. 9:9, 11; 10:1, 2).
El arca del pacto contenía las tablas de piedra sobre las cuales Dios mismo, con su propio dedo, escribió
los mandamientos (Deut. 9:10). Los Diez Mandamientos (y el propiciatorio que estaba sobre ellos) se
destacan aquí como puntos centrales después de medir el templo. Los Diez Mandamientos están
preservados en el Cielo. Por consiguiente, no podemos alegar de que fueron abolidos aquí en la tierra. Los
principios contenidos en los Diez Mandamientos son tan importantes para el bienestar de la humanidad,
que Dios los escribió con su propio dedo.
9. ¿Qué tarea especial del santuario de la tierra tenía como centro el arca del pacto?
Respuesta: La purificación del santuario, que se llevaba a cabo _____ _____ en el año en el día
de la ___________ (Lev. 16:13, 15, 34).
El foco de la atención en el día de la expiación se concentraba en el juicio y en la norma que le servía de

fundamento, en la misericordia de Dios y en los méritos de Cristo. Al llegar a la parte central de esta
ceremonia, el sumo sacerdote ofrecía incienso en el altar correspondiente. Ese incienso, ofrecido por
Aarón el sumo sacerdote, representaba los méritos de Cristo ofrecidos junto con las oraciones de los
santos penitentes (Apoc. 8:3, 4). El humo de este incienso debía cubrir el propiciatorio que estaba sobre el
testimonio, es decir, los Diez Mandamientos.
10. ¿Qué preparación especial debía hacer el pueblo al meditar en las ceremonias del día de la expiación y
en la Ley de Dios?
Respuesta: El día de la expiación era un sábado especial, un día dedicado a un examen de
conciencia o, como se decía entonces, a _________ el alma (Lev. 23:27-32).
Para hacer este examen de conciencia, la persona tenía que abrir los canales de la mente a la influencia del
Espíritu Santo y permitir que su poder de convicción probara (juzgara) los motivos y las acciones de la
vida. La obra preparatoria del juicio comenzaba diez días antes con la fiesta de las trompetas (Lev. 23:24,
25). Acercarse a Dios en ese día de juicio resultaba facilitado por el hecho de dejar a un lado el trabajo y
por el ayuno. El profeta Isaías nos informa acerca de la naturaleza de la obra que el Señor quería hacer en
su pueblo escogido antes del día del juicio. Su intención era cambiar su manera de pensar y actuar, de
manera que sus pensamientos y sus actos procedieran de una mente motivada por el amor (Isa. 58:6-12;
Eze. 36:26-28).
11. En el día de ayuno (expiación) a que se refiere el profeta Isaías, ¿qué actitud tenían los adoradores
sinceros hacia la voluntad de Dios, es decir, sus mandamientos?
Respuesta:
a) Los creyentes no sólo cumplían la voluntad de Dios, sino que se los conocía como
“_____________ de portillos” como reconocimiento de su fidelidad en la preservación de los
principios (Isa. 58:12).
b) Estos adoradores eran cuidadosos al honrar el monumento recordativo de la creación y la
redención, a saber, el sábado (Isa 58:13).
Los creyentes sinceros están ansiosos de exaltar la Palabra revelada de Dios, de librarse de la tradición, de
repudiar los malentendidos, de consagrarse de todo corazón a Dios y de convertirse en sus embajadores.
En el día antitípico de la expiación (1844), cuando se estudió el tema del santuario del Cielo, se descubrió
el significado de toda la Ley de Dios y el juicio final de Cristo en el Cielo. Se descubrió también que la
Ley de Dios es inmutable, y que hasta el fin de todas las cosas nada va a cambiar en ella (Mat. 5:18; E.G.
de White, Christ in His Sanctuary [Cristo en su santuario], 1969, pp. 111, 112).
El significado del sábado

• Observar que el sábado es el centro de los Diez Mandamientos
• Descubrir que el sábado asume un significado especial para la vida cristiana justo antes de la segunda
venida de Cristo.
12. ¿Qué mandamiento destaca a Dios como Creador?

Respuesta: El cuarto, el que ordena la observancia del ________ (Exo. 20:8-11).
Loa versículos que acabamos de citar ilustran el hecho de que “el sábado fue puesto aparte para guardar el
honor del nombre de Dios” (E.G. de White, Early Writings [Primeros escritos], 1945, p. 33). Al oscurecer
la verdad del sábado, Satanás ha abierto las puertas para la aceptación de las ideas humanistas, incluso la
teoría de la evolución, en la cual no hay lugar para el Creador.
13. ¿Qué eligió Dios como señal de santificación?

Respuesta: El ________ (Exo. 31:12-17).
Dios santificó el sábado en ocasión de la creación (lo consagró, lo puso aparte) (Gén. 2:1-3). Cuando el
creyente entiende esto, también puede entender que Dios tiene poder para transformar la vida, es decir,
para crearla de nuevo. Esto es la santificación, un proceso que dura toda la vida. La observancia del
sábado en sí no santifica, pero nos recuerda que Dios tiene poder para santificar.
El proceso bíblico de la santificación comienza con el nuevo nacimiento. Por medio del Espíritu Santo,
cuando la persona que está dispuesta pide ayuda, “los nuevos motivos, los nuevos gustos y las nuevas
tendencias” son evidentes (E.G. de White, Maranata, 1976, p. 237). Esta experiencia conduce a un
refinamiento de la vida, de modo que resulta evidente para todos que la persona mantiene una relación
viviente con Cristo. Entonces la experiencia de David también será la nuestra: “El hacer tu voluntad, Dios
mío, me ha agradado, y tu Ley está en medio de mi corazón” (Sal. 40:8). El apóstol Juan amplía esta idea
acerca de la experiencia del cristiano: “Todo aquel que es nacido de Dios no practica el pecado, porque la
simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios” (1 Juan 3:9). Una
comunión tan íntima, implícita en esta relación, todo cristiano tiene el privilegio de gozar (Rom. 12:2).
14. ¿Todavía usa Dios el sábado como señal de santificación?

Respuesta: Se menciona el sábado como señal de santificación en los días del Nuevo
Testamento. Al hablar del descanso de Dios en el séptimo día de la creación, el apóstol Pablo
declara: “Pero los que hemos ________ entramos en el reposo”. Todo cristiano tiene el privilegio
de aceptar hoy esta señal (Heb. 4:2-7).
El apóstol Pablo nos informa en estos textos que Dios terminó su obra creadora y descansó el sábado.
Este día no es solo un monumento recordativo de la creación, sino una promesa de Dios en el sentido de
que él quiere que los fieles entren en su salvación, es decir, en su reposo. El sábado es una señal para
todos de que, por fe en su poder, podemos ser transformados en personas dignas de entrar en ese reposo
eterno. Dios nos invita a que acepemos hoy su señal y su poder (Heb. 4:7, 9).
15. ¿Qué promesa adicional está comprendida en el sábado?

Respuesta: El sábado implica una promesa de Dios de que seremos victoriosos sobre las fuerzas
del mal en este mundo, y que los santos __________ delante del Señor en el “_______ nuevo y la
________ nueva” (Isa. 66:22, 23; Apoc. 21:1-3).
En el sábado está implícita la idea de un culto triunfante en los cielos nuevos y la tierra nueva. El profeta
Isaías lo expresa con firme confianza. El sábado debe recordarnos que Cristo triunfó gloriosamente en la
cruz, y de ahí que estén aseguradas la erradicación y la destrucción final de Satanás. En la tierra nueva se
cumplirá el propósito que tenía el sábado en el Edén. Dios de nuevo se comunicará cara a cara con su
pueblo.
16. ¿Qué importante concepto respecto del pecado se presenta en las Escrituras?
Respuesta: La Ley nos da ______________ acerca de la naturaleza de nuestros pecados (Rom.
3:20; 7:7; 1 Juan 3:4).
La Ley de Dios nos muestra en qué aspectos estamos dejando de cumplir la voluntad de Dios para
nosotros. Se ha dicho que la Ley es un trasunto del carácter de Dios. Esta es, en efecto, la idea central
trasmitida por Jesús a la persona que le preguntó acerca de cuál es el mandamiento más importante de la
Ley. Le dijo que ésta se resume en amor a Dios y amor al prójimo (Mat. 22:35-40). Al indicar que el
principio del amor está implícito en el Decálogo, Jesús no puso a un lado los detalles de la Ley. En efecto,
afirmó que “antes que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la Ley, hasta que todo se
haya cumplido” (Mat. 5:18). La ley de Dios, cuando se la entiende bien, resume todas las instrucciones
del Señor a la humanidad (Ecl. 12:13). Cuán importante es entender bien todos los mandamientos,
inclusive el cuarto. Todos sus mandamientos son seguros. Y lo son desde ahora y para siempre (Sal.
111:7, 8; 119:89).
Conflicto en torno de la Ley

• Resumir el conflicto acerca de la Ley de Dios, especialmente con respecto al sábado, que se ha
extendido a lo largo de los siglos.
17. ¿Dan las Escrituras algún indicio de que se atentaría contra los mandamientos de Dios?
Respuesta: ¡Sí! El “cuerno pequeño” intentaría “_________ los tiempos y la _____” (Dan. 7:25).
En Daniel vemos aparecer un poder político religioso que “tratará de cambiar los tiempos y la Ley”
(Biblia de Jerusalén). En Daniel vemos con toda claridad que este poder surgiría de los restos del Imperio
Romano (Dan. 7:3-7; 8:20-23; Juan 11:48). El poder que surgió de las ruinas del Imperio Romano de
Occidente no fue otro sino el papado, un punto perfectamente atestiguado por la historia. El colapso de
ese Imperio le dio la oportunidad al papado, ya que se produjo un vacío de poder. El papado se adelantó a
llenar ese vacío. La historia nos dice que de allí en adelante se produjo “una creciente influencia moral y
política”. El acceso al trono pontificio de Gregorio I el Grande (590-604 d.C.) “Marcó el comienzo de una
nueva era” (Encyclopaedia Britannica, 1886, t. 20, p. 783).
18. ¿Qué aspectos especiales de “los tiempos y la ley” trató de cambiar este poder?
Respuesta: El segundo mandamiento –que se refiere a la adoración de imágenes– ha sido
eliminado del Decálogo oficial de esta organización. El cuarto mandamiento pasó a ser el tercero,
sin la más mínima mención al sábado, y atribuido al domingo.
Un breve examen del Catecismo Católico Romano basta para comprobar lo que estamos diciendo (véase
el APÉNDICE de la lección 15). Este poder ha declarado que “La Iglesia (Católica) ha cambiado la
observancia del sábado al domingo por la autoridad divina e infalible otorgado a ella por su fundador,
Jesucristo. Los protestantes, que pretenden que la Biblia es su única regla de fe, no tienen base alguna en
ella para guardar el domingo. En este sentido los adventistas del séptimo día son los únicos protestantes
consistentes” (Catholic Universal Bulletin [Boletín católico universal], 14 de agosto de 1942, p. 14). Los
mandamientos --y el cuarto en especial--, están siendo atacados desde otros frentes también, como lo
pone en evidencia la siguiente cita: “Mientras la historia de la creación de Gén. 1 y 2, y el informe acerca
de la data de la Ley en el Monte Sinaí se consideraban como hechos históricos, había que hacer frente a la
siguiente pregunta: ¿Cómo se puede abrogar un mandamiento dado directamente por Dios a los hombres?
La respuesta para nosotros es sencilla: Esos mandamientos jamás fueron dados, y las historias que nos
han llegado acerca de ellos son leyendas. El sábado fue hecho para el hombre; y bajo la conducción de la
Providencia fue hecho por el hombre. El domingo, a su vez, fue hecho por el hombre y para el hombre. El
hombre, por lo tanto, es señor tanto del sábado como del domingo” (Encyclopaedia of Religuon and
Ethics [Enciclopedia de religión y ética], 1967, t. 12, p. 110). Reclamar esta prerrogativa para la
humanidad es equivalente a usurpar la autoridad de Dios. El hombre pretende ser Dios, y lo desacredita
ante los paganos con semejantes declaraciones. La Escritura dice que todos los que persistan en
semejantes blasfemias serán contado junto con los impíos (Apoc. 13:5-8).
19. ¿Cuán serio es este poder político religioso en su pretensión de ejercer esta supuesta infalible
autoridad?
Respuesta: “A los santos del Altísimo _____________” (Dan. 7:25).
Las Escrituras nos dicen claramente que no es Dios quien está detrás de esos movimientos que intentan
modificar su Palabra revelada. Daniel nos dice que el juicio comenzará a sesionar y se declarará en favor
de los santos quebrantados o perseguidos. Más aún, el poder responsable de perseguir a los santos será
destruido por Dios, quien levantará su propio reino basado en los eternos principios de la Ley, y que será
poblado por los que la obedecen (Dan. 7:26, 27).
El último llamado de Dios

• Concentrarnos en el gran tema que tienen que enfrentar ahora los habitantes del mundo, a saber,
comprender la voluntad de Dios y reaccionar positivamente a ese conocimiento.
• Repetir el concepto de que Dios está llamando a todos a regocijarse en los grandes principios morales
revelados por su Ley.
20. ¿Qué grandes temas dominarán la escena en estos días finales de la historia del mundo?
Respuesta: La obediencia y la ___________ (Apoc. 13:3-8, 15-17; 14:7, 9, 10, 12).
Las Escrituras nos advierten que uno de los grandes temas religiosos que enfrentaremos justo antes de la
terminación del tiempo de prueba, es si obedeceremos a la Palabra de Dios o a la palabra de los hombres.
La bestia de Apoc. 13:3 al 8, es la misma que vio Daniel, puesto que ambas reinan con gran poder durante
1260 años o 42 meses (Dan. 7:8, 20, 21, 25; Apoc. 11:2, 3; 12:6, 14).
21. ¿Qué notables características poseerán los que pasen por las escenas finales de la historia de este
mundo?
Respuesta: Paciencia, _____, y obediencia (por la fe) a todos los mandamientos de Dios (Apoc.
14:12).
Los identificados por el versículo 12 son los que han respondido afirmativamente a los conmovedores
mensajes registrados en Apoc. 14:6 al 12. Estos mensajes son tan importantes que aparecen entregados al
mundo por tres poderosos ángeles.
22. ¿Qué énfasis especial le da Dios al sábado, su recordativo de la creación, tan descuidado por la
humanidad, en el mensaje del primer ángel?
Respuesta: “Adorad a aquel que ______ el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas”
(Apoc. 14:7; Exo. 20:11).
Parte de la fraseología del mensaje del primer ángel ha sido tomada del cuarto mandamiento. Es evidente
que Dios quiere llamar la atención a este aspecto tan descuidado de su Ley moral. El Señor está
preparando un pueblo para el Cielo. Quiere santificarlos, de manera que ellos le presenten al mundo el
gran símbolo de la santificación (el sábado). Está llamando a todos para que vuelvan a la pureza de su
Palabra, que es un reflejo de su carácter. ¿Responderá usted hoy a la gran invitación de Dios al mundo?
¿Será su respuesta: “Yo y mi casa serviremos a Jehová” (Jos. 24:15)? Si así lo hace, usted será candidato
a recibir el sello de Dios que se le dará gratuitamente a los que lo sirven con todo el corazón, la mente y el
alma (Apoc. 14:1-5, 12). Será honrado como “reparador de portillos”, como “restaurador de viviendas en
ruinas” (Isa. 58:12).

1. celestial
2. a) trono, voz b) ejército, cielos c) Anciano, hombre d) lámpara, arca
3. Cristo
4. Mediador
5. ---
6. midiera
7. arca, pacto
8. tablas, pacto
9. una vez, expiación
10. afligir
11. a) reparadores, b) sábado
12. sábado
13. sábado
14. creído
15. adorarán, cielo, tierra
16. conocimiento
17. cambiar, Ley
18. ---
19. quebrantará
20. adoración
21. fe
22. Hizo
20. ÉL EDIFICARÁ SU TEMPLO
Desde la entrada del pecado, Cristo ha tratado de reunir a los honestos de corazón para que lo adoren.
También ha tratado de usarlos para que compartan las buenas nuevas de la salvación con los demás. Los
que escucharon y aceptaron su misericordiosa invitación llegaron a ser miembros de su iglesia aquí en la
tierra. Al principio los patriarcas dirigían el culto de adoración para sus familias; actuaban como
sacerdotes y levantaron altares para sacrificar animales. De ese modo manifestaban su fe en el Redentor
prometido (Gén. 3:15). La primera iglesia organizada fue la hebrea (Hech. 7:38). En esta lección nos
vamos a referir a ella como la congregación del pueblo.
También vamos a rastrear brevemente la historia de la iglesia de Dios a través del tiempo, la del Dios en
quien “no hay mudanza ni sombra de variación” (Sant. 1:17). De esta iglesia la Escritura dice que Cristo
mismo es “la principal piedra del ángulo” (Efe. 2:20). El profeta Zacarías dice que Cristo (el Renuevo)
está edificando la iglesia o el templo de Dios (Zac. 6:12, 13). Su iglesia está compuesta por gente de todas
las naciones. Puesto que está edificada sobre Cristo, manifiesta unidad en creencia y en misión, de lo que
son testigos todos los apóstoles y los profetas (Efe. 2:19-22). Nuestra intención es examinar los principios
fundamentales de la iglesia de Dios.
La congregación del pueblo

• Determinar que Jesús fundo su iglesia relacionada con el santuario terrenal e íntimamente identificada
con él.
• Bosquejar los principios básicos del plan de salvación que aprendemos en el santuario.
• Introducir el concepto de que Satanás permanentemente ha luchado para desvirtuar las verdades que
Dios le ha querido transmitir a la especie humana.
1. ¿Quién dirigió a la congregación del pueblo que salió de Egipto y lo proclamó pueblo suyo?
Respuesta: Cristo, el gran “___ _____” del Antiguo Testamento (Exo. 3:14; Juan 8:58, 59).
Se instruyó a Moisés para que dijera que “”YO SOY” lo había enviado. Jesús dijo que él era el “YO
SOY” del Antiguo Testamento. Los judíos reconocieron la seriedad de su pretensión, la consideraron
blasfemia y quisieron apedrearlo. La congregación del pueblo nació en medio de un sobrecogedor
despliegue de poder en el Sinaí, cincuenta días después que los israelitas salieron libres de Egipto (Lev.
23:15, 16), lo que también estaba relacionado con la celebración de la primera pascua (Exo. 12:3-18). El
poder pentecostal de la iglesia apostólica fue prenunciado de esta manera, ya que el Espíritu Sato
descendió cincuenta días después del sacrificio de nuestro Señor (nuestra pascua) (Hech. 2:1; 1 Cor. 5:7).
2. ¿Cuán íntimamente se identificó Cristo con su pueblo elegido?

Respuesta: El santuario estaba ubicado en el ________ de la congregación, y la ________ de
Dios se manifestaba en el santuario (Núm. 2:17; Exo. 29:43).
Cristo, el Creador, caminó con la santa pareja en el Edén. El pecado trajo separación entre Dios y el
hombre, pero el Señor quería seguir teniendo una relación íntima y constante con la especie humana. No
estaba dispuesto a abandonarlos a las consecuencias del pecado. En el desarrollo del plan de salvación
revelado en las actividades del santuario, Cristo se propuso identificarse íntimamente con su pueblo
elegido a fin de transmitirles la importante lección de que sólo mediante una constante e íntima relación
con él, por la fe, la salvación sería posible.
3. ¿Qué principio fundamental vinculaba todas las ceremonias de culto que Dios instituyó?
Respuesta:
a) Si el pecado no se confiesa, el nombre del pecador será eliminado del _______ de la vida (Exo.
32:30-33; Apoc. 3:5).
b) Evitar la muerte eterna sólo es posible gracias a la muerte de un sustituto perfecto. Los
animales que lo representaban debían ser _____ _________ (Lev. 1:3, 10; 4:3; 9:3; 17:11).
c) Por la _____ en el sustituto perfecto, que representaba al Cristo que había de venir, se podía
reclamar la vida eterna (Heb. 2:4; Rom. 5:10,11; 9:8, 9; Sal. 51:16, 17; Lev. 1:4; 9:7; Heb. 4:2).
Jesús nos reconcilió con Dios por medio de su muerte; antes de la muerte de Cristo en la cruz, los
creyentes esperaban por fe la venida del Redentor prometido como la única vía de escape del sentimiento
de culpa, del poder del pecado y finalmente, en ocasión de la resurrección, de su presencia. Los creyentes
de antes y después de la cruz han ejercido la misma fe. Los primeros esperaban por la fe acontecimientos
que habrían de suceder, y nosotros consideramos, también por la fe, los acontecimientos que ya
sucedieron.
4. Al requerir la muerte de un sustituto perfecto por los pecados del pueblo, se estaban declarando ciertos
inalterables principios del gobierno de Dios. ¿De qué naturaleza eran esos principios?
Respuesta:
a) El reino –o gobierno– de Dios se basa en el principio del ______; su misericordia es evidente
(Gén. 3:15; Juan 3:16).
b) El principio del amor se amplía y se expresa en términos perfectamente comprensibles
mediante los ______ ______________. La norma de la justicia divina se revela en estos
mandamientos (Exo. 20:6; Deut. 7:11-13; Mat. 22:36-40).
El principio del amor a Dios y al hombre implícito en los mandamientos, es “el todo del hombre” (Ecl.
12:13). El amor es la única reacción razonable de parte de la humanidad a la misericordia y la justicia de
Dios. A los mandamientos también Pablo los llama “los oráculos de Dios” (Rom. 3:2, BJ). Un oráculo es
“una revelación divina”, “una guía infalible aunque misteriosa”. Deducimos de esto que estos principios
son inmutables y expresan las eternas características de Dios. Estos oráculos se escribieron en piedra, el
material más duradero existente, y se los puso debajo del propiciatorio, sobre el cual se manifestaba la
presencia divina. ¿Qué más podría haber hecho Dios para indicar cuán fundamentales y eternos son sus
mandamientos?
5. ¿Qué instrumentos puso Dios en la iglesia para fomentar la fe, la obediencia, la predicación del
evangelio y para advertir acerca del peligro?
Respuesta: Pastores y __________ (Eze. 33:7; 34:10).
Dios puso en su antigua iglesia profetas y profetisas, jueces, sacerdotes y pastores para la conducción
espiritual del pueblo. Esta gente no siempre fue fiel, lo que dio como resultado una rápida decadencia en
la práctica de la religión verdadera. En otros momentos el pueblo no escuchó las palabras de advertencia
que se dieron, y persiguieron y aun le dieron muerte a los verdaderos mensajeros de Dios. A pesar de
estas lamentables circunstancias, Dios siguió enviando mensajeros (Mat. 21:33-39; Hech. 7:52).
6. ¿En qué as aspectos de la vida y la conducta manifestó fallas la mayor parte del pueblo en cuanto a
seguir los caminos del Señor?
Respuesta:
a) Las obras ocuparon el lugar de la ____ (1 Sam. 15:22; Os. 6:6; Gen. 3:17, 18; 4:2).
b) La obediencia a la Ley de Dios, especialmente la observancia del ________, llegó a un nivel
muy bajo (Jer. 17:24, 25, 27; 2 Crón 3:4; Mar. 7:9).
c) Se resistieron las insinuaciones del __________ _______ (Hech. 7:51).
d) Era evidente la tendencia a amoldarse a las costumbres de las __________ circundantes (1
Sam. 8:5-7, 19, 20).
e) También se vieron manifestaciones de exclusivismo y el ______________ de la misión (Eze.
34:2, 4).
Dios hizo planes para que la salvación de los seres humanos se llevara a cabo por medio de Cristo, que
nació en el seno de la cultura judía. Los judíos debieron haber sido los mensajeros especiales de la
salvación a todas las naciones (Isa. 42:1; 43:10; 56:6, 7). En este sentido fueron un fracaso total;
envolvieron el evangelio en sus tradiciones (Mat. 23:13-16). Esto no quiere decir que todos dejaron de ver
con claridad el propósito de Dios para ellos y su raza. Podemos citar el ejemplo de Daniel, quien dio
testimonio ante Nabucodonosor de manera eficaz y convincente (Dan. 4:27, 28, 37). La ramera Rahab y
Rut la moabita son otros ejemplos de que en ocasiones se alimentó el “alma hambrienta” (Sal. 107:9).
Estas dos mujeres se encuentran en la lista de los antepasados de Jesús (Mat. 1:5). Dios salvó a un
remanente de Israel que le fue fiel (Joel 2:32).
La iglesia apostólica
• Recordar que Jesús fundó la iglesia apostólica.
• Repasar los fundamentos de la salvación tal como los enseñó esa iglesia.
• Señalar que la profecía anunciaba grandes desvíos de la fe.
7. ¿Quién fundó la iglesia apostólica?

Respuesta: ________ (Mar. 3:14).
Jesús escogió a los doce apóstoles para que constituyeran el núcleo de la iglesia cristiana. Estos hombres
estuvieron relacionados con Jesús por más de tres años. La iglesia fue extraordinariamente fortalecida por
Cristo cincuenta días después de la pascua, en pentecostés (Hech. 2:1). En ese momento el lugar de Judas
estaba ocupado por Matías (Hech. 1:25, 26). El Redentor había prometido el derramamiento del Espíritu
Santo. La recepción del Espíritu era una señal para todos que la obra de Cristo había comenzado en el
santuario del Cielo. Por lo tanto, la atención de la iglesia, de ahí en adelante, estuvo enfocada en el
ministerio de Cristo en los lugares celestiales.
8. ¿En qué principios se basaba la iglesia cristiana?

Respuesta:
a) “La ______ del pecado es muerte” (Rom. 6:23).
b) La fe en Cristo, nuestro perfecto Sustituto y Ejemplo, nos libra tanto de las consecuencias del
pecado (justificación) como de su poder (santificación). Por fe debemos “andar en _________ de
vida” (santificación) (Rom. 5:1; 6:1-5; 1 Juan 3:5, 6; 5:4, 5; 1 Ped. 2:21, 22).
c) El amor se expresa por medio de la ___________ (1 Juan 2:4, 5; 5:3).
d) La obediencia a los Diez Mandamientos de Dios es fundamental para la vida cristiana (Mat.
5:17, 18; Rom. 3:31; Sant. 2:8-12).
e) La fe y la obediencia dan acceso al poder para testificar por medio del ________ _______
(Hech. 1:8; 5:32; Juan 14:15, 16).
9. ¿Qué cometido le dio Cristo a la iglesia apostólica?

Respuesta: “Id, y haced ____________ a todas las naciones” (Mat. 28:19; Mar. 16:15; Luc.
24:47).
Dios no quiere que a nadie se le niegue la oportunidad de oír el evangelio. El carácter internacional de la
invitación divina contrasta con el regionalismo generalmente asociado con las religiones paganas. Dios no
reconoce barreas sociales, ni nacionales ni raciales. Muy bien lo dijo el apóstol Pablo: “Ya no hay judío ni
griego; no hay esclavo ni libre; no hay hombre ni mujer, porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús”
(Gál. 3:28). La nación judía no entendió el tema de la fraternidad de todas las naciones. Dios le envió a
Pedro una visión especial para enseñarle este concepto. “En verdad comprendo que Dios no hace
acepción de personas, sino que en toda nación se agrada del que lo teme y hace justicia” (Hech. 10:34,
35). Los judíos habían desarrollado un exclusivismo que los inducía a negar los beneficios de la salvación
a los que no eran de su raza. Esa jamás fue la intención de Dios, porque el cuarto mandamiento del
Decálogo declara que las bendiciones del sábado –un símbolo del poder regenerador de la vida– son para
todos, al margen de su condición social o racial (Exo. 20:10).
10. ¿Predijo Dios que algunos se apartarían de la fe en la iglesia apostólica?

Respuesta: Sí, por cierto. Se levantarían hombres para “___________ discípulos ______ ____
(Hech. 20:30; 2 Ped. 2:1).
Los apóstoles ya en sus días tuvieron problemas con las enseñanzas perversas de ex seguidores de Cristo,
algunos de los cuales arrastraron discípulos tras sí. El apóstol Juan, por ejemplo, tuvo que discutir con un
tal Cerinto, que enseñaba que Jesús era un hombre como cualquier otro, y que había recibido su divinidad
(la de Cristo) en ocasión de su bautismo (en forma de paloma), y que la había perdido antes de su
crucifixión. De nuevo, en 1 Juan 1:1 al 3 argumenta en contra del docetismo que enseñaba que Jesús era
totalmente divino y que sólo tenía aspecto de hombre. Juan subrayó la realidad de la naturaleza divino
humana de Cristo. Afirmó que vino en carne (1 Juan 4:2), y que esto es la verdadera ciencia (1 Juan 5:20).
También afirmó que los que enseñaban las doctrinas de Cerinto eran, en efecto, el “anticristo” (1 Juan
2:18, 22). (B.J. Kidd, A History of the Church to AD 461 [Una historia de la iglesia hasta el año 461 c.C],
1922, p. 60).
11. ¿Qué dirigentes se pusieron en la iglesia para promover la fidelidad?

Respuesta: Apóstoles, __________, pastores, ______________ y maestros (Efe. 4:10-13).
La tarea de los que recibieron estos dones consistía en equipar a los santos para que cumplieran la misión
que Dios les había dado, fortalecerlos espiritualmente, señalarles los principios unificadores del
evangelio, y por sobre todo mostrarles a Cristo como el centro permanente de su fe.
La iglesia del desierto

• Destacar la naturaleza de las apostasías experimentadas en los años que siguieron a la fundación de la
iglesia apostólica.
• Demostrar que Dios siempre dispuso de un pueblo fiel.
12. ¿Desapareció la verdad de la tierra durante los largos siglos de la Edad Media?
Respuesta: No. “La mujer (la iglesia) ______ al desierto” bajo la dirección de Dios (Apoc. 12:6,
14, 16).
En el Apocalipsis Juan usa el bien conocido símbolo de una mujer pura a fin de representar la verdadera
iglesia de Dios. Vemos que la mujer huye al desierto por 1260 años (desde el 538 al 1798 d.C), donde
Dios la protege y la alimenta. Cuando estudiamos más detalladamente los siete períodos de la historia de
la iglesia tal como aparecen en los capítulos 2 y 3 del Apocalipsis, descubrimos con interés que en cada
uno de ellos Dios tuvo sus fieles representantes (Apoc. 2:2, 9, 23, 19, 20; 3:4, 8).
13. ¿Qué aspectos de la fe dice la Palabra profética de Dios que se pervertirían durante ese triste período
de la historia del mundo?
Respuesta:
a) La preeminencia de Cristo sería usurpada y su nombre blasfemado. El “cuerno pequeño” se
sentaría “en el templo de Dios como si fuera ______” (2 Tes. 2:4; Dan. 7:25; 8:25).
b) Se intentaría eliminar el ministerio diario de Cristo en el ___________ celestial y su
suficiencia como Mediador en favor de los pecadores.
c) También se eliminaría el concepto del santuario celestial o, en otras palabras, sería
___________ (Dan. 8:11, 13).
d) El hombre trataría de modificar los tiempos y la _____ que Dios dice son inmutables (Dan.
7:25).
e) Las __________ de la Biblia serían reemplazadas por la tradición (Dan. 8:12).
Los mismos principios sobre los cuales la iglesia de Cristo se había basado en todas las edades anteriores,
fueron objeto de intensos ataques durante este período de la historia. Se persiguió implacablemente a los
santos por su fe inconmovible en la Palabra de Dios (Apoc. 12:13-15). Al oponerse a este poder y al
declarar que sería juzgado indigno y que se le arrebataría su dominio (Dan 7:26, 27), Dios le dijo a todos
que los principios en los que se basa su iglesia son eternos.
La iglesia remanente
• Poner énfasis sobre el hecho de que la iglesia de los últimos días --o iglesia remanente– surgió de
acuerdo con el cronograma de Dios, para recuperar las verdades perdidas a fin de compartirlas con el
resto del mundo. Estas verdades servirán para poner a prueba a los habitantes de la tierra.
• Identificar el don especial otorgado a la iglesia remanente para confirmar la conducción divina.
No hay duda de que nos encontramos en el período final de la historia del mundo. Los verdaderos
seguidores de Dios (los que aceptan con gozo la verdad presente) son miembros de la iglesia remanente
(C. Goldstein, The Remnant [El remanente], 1994, p. 107). La misión especial de Satanás consiste en
atacar la credibilidad de Dios mediante la destrucción de su iglesia (Apoc. 12:17).
14. ¿Cómo surgió la iglesia y para qué?

Respuesta: Como cumplimiento de la profecía bíblica surgió esta iglesia para proclamar el
último mensaje del ________ y la misericordia de Dios a un mundo a punto de perecer (Apoc.
14:6-12).
El mensaje de los tres ángeles de Apocalipsis ha sido proclamado a tiempo por la iglesia que surgió en
cumplimiento de la profecía bíblica.
15. ¿Qué características poseen los verdaderos creyentes que forman parte de la iglesia remanente?
Respuesta:
a) Cristo, el centro del evangelio ________, es preeminente en la vida de los creyentes y en el
mensaje que dan (Apoc. 14:6, 7).
Cristo es el centro del evangelio y es el centro del mensaje que proclama el primer ángel. En todos estos
versículos el énfasis está puesto en Cristo. No hay vestigios del yo ni en el mensaje que proclaman ni en
el culto que le rinden a Dios los miembros de la iglesia remanente.
b) La ____ es un factor primordial en toda experiencia cristiana (Apoc. 3:21; 1 Juan 5:4).
La naturaleza esencial de la fe en la experiencia cristiana aparece en los tres mensajes angélicos de Apoc.
14. Los santos –los que aceptan estos mensajes– aparecen como “vírgenes” y “sin mancha” (Apoc. 14:4,
5). Estas características sólo se logran por medio de la fe en la sangre derramada por Cristo (Heb. 11:6).
c) La obediencia a los Diez _____________ de Dios y a las enseñanzas de su Palabra son

cometidos sagrados para ellos (Apoc. 14:12; Isa. 58:12, 13).
La fe que justifica es también la fe que santifica. Conservamos nuestra justificación sólo si vivimos cada
día por fe en los méritos de Jesús (Eze. 18:24; 1 Juan 3:4-6). Cristo quiere que venzamos así somo él
venció, por la fe (Apoc. 3:21). Nuestro amor a Dios y nuestra fe en él nos lleva a una obediencia
voluntaria y permanente a todas las enseñanzas de su Palabra, incluso los Diez Mandamientos (1 Juan
5:1-5).
d) El amor a Dios y al prójimo es una característica que se observa en los creyentes (Apoc. 14:6,
7).
Uno de los significados ocultos en la palabra traducida como “temor”, en sentido religioso (temor de
Dios), es amor (Deut. 10:12). El amor a Dios se echa ver en la obediencia de sus seguidores frente a un
boicot económico y aún frente a amenazas de muerte, lo que las Escrituras nos dicen ocurrirá justo antes
del regreso del Salvador (Apoc. 13:15, 17). El verdadero amor a Dios también es evidente por la
obediencia de sus santos, por la fe, a todos los Diez Mandamientos, inclusive el cuarto (Apoc. 22:14; Juan
14:15; Sant. 2:10).
e) El santuario celestial es el foco de su atención, “porque la hora de su ________ ha venido”

(Apoc. 14:7).
El poderoso ángel de Apoc. 14:7 declara que “la hora de su juicio ha llegado”. Cristo, nuestro Mediador,
está ahora en el santuario celestial, llevando a cabo una tarea especial de investigación de los registros de
la vida de todos sus seguidores frente a las acusaciones de Satanás (Dan. 7:9, 10; Heb. 9:11-15). Por eso
es de suma importancia que todos prestemos ferviente atención al ministerio que Cristo lleva a cabo en
nuestro favor. Cristo desea limpiar de pecado las vidas de los creyentes. Esto se puede conseguir sólo si se
entregan sin reservas al Señor (su Mediador) de manera que su amor los pueda transformar. Esta
experiencia transformadora se pone de manifiesto por el desinteresado amor al prójimo de los creyentes.
Esta es la más poderosa evidencia frente al mundo que Dios es amor y que las acusaciones de Satanás
carecen de base (Juan 13:35). Es la demostración definitiva del carácter de Dios al mundo, que coincide
con su invitación final al arrepentimiento. Cuando Cristo le ponga fin a su ministerio en el santuario,
entonces regresará.
f) Los santos manifestarán una gran paciencia (perseverancia, persistencia) tal como su Maestro
que “________ tal _______________ de pecadores contra sí mismo” (Heb. 12:2, 3; Apoc. 14:12).
La persistencia o perseverancia es un peldaño importante en la escalera del progreso cristiano (2 Ped. 1:5-
7). Es una cualidad esencial para completar con éxito el viaje de fe del cristiano (Mat. 24:13). Los que
perseveran hasta el fin han desarrollado ciertas cualidades en el curso de su vida de fe, semejantes a las de
Cristo (Rom. 15:5). La fe de los santos no fallará. En otras palabras, están sellados por Dios.
En esta sección notamos con interés que todas las apostasías provocadas por el “cuerno pequeño” en el
período de la “iglesia del desierto”, quedan restauradas ante el mundo por la proclamación del mensaje de
los tres ángeles de Apoc. 14. Esto, cabe notar, ocurrió en 1844. Alabemos a Dios porque su Palabra
profética es segura y porque se acerca el fin de todas las cosas.
16. ¿Qué don se le da a la última iglesia para promover su fidelidad?

Respuesta:
a) El __________ o don de profecía (Efe. 4:11-13; 1 Cor. 1;7, 8; Apoc. 12:17; 19:10).
A la iglesia se le prometió el don de profecía, y las Escrituras afirman que este don estará presente en la
última iglesia de Dios, el remanente, antes de la venida de Cristo. Es por demás lógico que Dios trate de
dar ánimo a los que tendrán que hacer frente a la ira final del dragón. Creemos que el don de profecía se
manifestó en la vida y el ministerio de Elena G. de White.
b) Los que predican el mensaje de _______ (Mal. 4:5, 6; Joel 2:28-31).
Estos versículos nos informan que antes de la venida de Cristo en gloria se extenderá una invitación final,
por parte de hombres y mujeres llenos del Espíritu Santo, a todos los que los rodean. Será una invitación a
aceptar el último ofrecimiento de salvación de parte de Dios. El mensaje de Elías y Juan el Bautista, que
vino “con el Espíritu y con el poder de Elías”, eran mensajes de reprensión y de advertencia acerca del
juicio (ejecutivo) venidero. Los que aceptan esta reprensión constituyen el “remanente” fiel. Por eso
nosotros también podemos esperar que el último mensaje de Dios sea de reprensión, juicio y esperanza.
El mensaje de Elías
• Establecer un contraste entre los mensajes de reprensión que Dios dio por medio del profeta Elías a su
pueblo de la antigüedad, con los que la da a la iglesia remanente.
• Presentar el remedio divino para vencer la tibieza en nuestra experiencia espiritual.
17. ¿De qué clase era el mensaje de Elías en los tiempos del Antiguo Testamento?
Respuesta: Era un mensaje de reprensión para una iglesia que había perdido de vista el ideal de
Dios para ella. Los diferentes elementos de ese mensaje son los siguientes:
a) El mensaje de Elías tenía un llamado al arrepentimiento y la obediencia dentro de la relación
de pacto. El desafío de Elías era: “Si Jehová es Dios, __________” (1 Rey. 18:21, 37; 19:10).
El pueblo se apartó de Dios porque había sido seducido por las costumbres de las otras naciones, sus
dioses y sus cultos; a la vez que se avergonzaban por ser diferentes. Elías desafió al pueblo a elegir, a usar
su voluntad, a seguir las indicaciones del Espíritu Santo y a arrepentirse. Al hablar de su quebrantada
relación de pacto, el profeta estaba dirigiendo las mentes del pueblo de vuelta a los Diez Mandamientos,
porque el pacto se subscribió sobre la base de esos principios.
b) El mensaje de Elías invitaba a los oyentes a ejercer fe en Dios. El profeta quería que el pueblo
supiera “que tú eres Dios”, de manera que permitieran que sus corazones ___________ a Dios (1
Rey. 18:36-39).
Los israelitas no se habrían apartado de Dios si hubieran tenido una fe firme. Elías los invitó a restablecer
una relación de fe con Dios, de manera que la obediencia pasara a ser un elemento constante en sus vidas.
Habían tratado de tener éxito confiando en sus propias fuerzas, sin ejercer fe. De modo que el evangelio
no les aprovechó (Heb. 4:2).
c) El mensaje de Elías a perseverar con la paciencia de _______, Isaac e Israel (1 Rey. 18:36).
El dirigir la mente de sus oyentes a Abrahán, Isaac e Israel, Elías alabó ante su audiencia la fe
perseverante de sus antepasados. Ellos tuvieron esa fe gracias a la oración, reclamando el cumplimiento
de las promesas de Dios, mediante una obediencia cabal a sus instrucciones, superando sus frustraciones e
implorando cada día la ayuda de Dios.
d) El mensaje de Elías era una invitación a tributarle a Dios un culto aceptable. Se los invitó a
adorar junto al _______ de Jehová (1 Rey. 18:30, 36, 37).
El culto de los israelitas se basaba en ideas paganas, era egocéntrico. “¡Respóndenos!” clamaban. Los
sentidos del oído, la vita y el tacto sufrieron un verdadero asalto: de ese modo Satanás podría trabajar
mejor (1 Rey. 18:26, 28). En contraste con esto, el culto de Dios es cristocéntrico. Elías le pidió al pueblo
que se identificara con él como representante de Dios. Entonces, al reconstruir el altar, les recordó las
instrucciones divinas. Su atención finalmente se enfocó en el sacrificio, que anunciaba a Cristo (1 Rey.
18:36, 37).
18. ¿Cuál es la naturaleza del mensaje de Elías a la iglesia de Laodicea?

Respuesta:
a) El mensaje de Elías a Laodicea contiene un llamado al _________________, vinculado con
una invitación a responder a las insinuaciones del Espíritu Santo (colirio) (Apoc. 3:19).
Como cristianos de los últimos días, tenemos un profundo conocimiento tanto de los procedimientos de
Dios como de las Escrituras. ¡Nunca antes el mundo había gozado de semejante conocimiento! Pero las
actitudes de la sociedad que nos rodea ha invadido la iglesia. Los conceptos dominantes en el mundo
actual, que han inducido a mucha gente a apartarse de Dios, es que no hay normas absolutas acerca de lo
bueno o lo malo, y que el principio guiador básico es que si con lo que estoy haciendo me estoy
divirtiendo o me siento bien, todo debe de andar bien (G. Christian, Record, 2001, t. 106, No. 11, pp. 8,
9). Notamos, desgraciadamente, que esta actitud ha tomado posesión de los miembros de la iglesia, puesto
que dicen: “Yo soy rico, me he enriquecido y de nada tengo necesidad” (Apoc. 3:17). En otras palabras,
me siento bien, estoy cómodo con mi experiencia. Dios invita a su pueblo a escuchar al que reprende el
pecado, el Espíritu Santo (Juan 16:7-11).
b) El mensaje de Elías contiene una invitación a manifestar la fe que obra por el amor, que es el
_____ que será probado con fuego (Apoc. 3:18; 14:12; Gál. 5:6; Sant. 2:5).
El amor conduce a la vez a la obediencia de toda la voluntad revelada de Dios, incluso los Diez
Mandamientos (amor a Dios), y el testimonio de las buenas obras (amor al prójimo). Los que aceptan la
invitación de Dios se encuentran entre los redimidos. El profeta dice que los redimidos son obedientes
(Isa. 1:18, 19).
c) El mensaje de Elías contiene una invitación a revestirse por la fe de la justicia de Cristo, la

___________ blanca (Apoc. 3:18; Gál. 3:27; Mat. 22:11, 12).
Es por demás evidente que hay una deficiencia en la comprensión de lo que es la fe en el período de la
historia del mundo en que vivimos. El mensaje para la última iglesia, la de Laodicea, indica una
deficiencia tan grave en este aspecto (falta la vestidura blanca de la justicia de Cristo) que el
arrepentimiento y la reforma son el único remedio (Apoc. 3:18, 19). El Señor llama especialmente la
atención de todos al significado del sábado. Es un símbolo de santificación, un estado que sólo se logra
por la fe (Apoc. 14:7; Exo. 31:13). Esta invitación implica que no hay seguridad acerca de lo que Cristo
quiere hacer por nosotros. Él quiere librarnos de la culpa del pecado (justificación), pero también nos
quiere dar poder para vencerlo (santificación). En el día antitípico de la expiación nuestra responsabilidad
consiste en “afligir” o examinar nuestras vidas. El remanente acepta esta invitación, porque se los
describe como “vírgenes” y “sin mancha” (Apoc. 14:4, 5). Lo han logrado gracias a la fortaleza que
Cristo les ha dado en respuesta a su fe.
d) El mensaje de Elías contiene una invitación a la perseverancia y la paciencia, porque la

recompensa de la vida eterna es para los que ________ o soportan (Apoc. 3:21).
Jesús mismo dijo: “El que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mat. 24:13). En Apoc. 3:21 aparece
otra vez este pensamiento. La recompensa es sólo para los vencedores o los que resisten hasta el fin. Los
que están mejor preparados para soportar con paciencia son los que tienen idea de los tiempos en que
vivimos; creen en la inminencia del regreso de Cristo, y viven con las llamas del amor, la fe y la
esperanza permanentemente encendidas.
e) El mensaje de Elías contiene una invitación a tributarle a Dios un culto aceptable. La atención
del creyente se desvía del culto egocéntrico (“___ soy rico”) a un culto que tiene a Dios por
centro (Apoc. 3:17, 20).
El culto inspirado por Dios es cristocéntrico. En la invitación que el primer ángel le extiende al mundo, el
énfasis está puesto totalmente en Cristo (Apoc. 14:6, 7). La gente que ha aceptado el mensaje de Elías a
Laodicea, está capacitada para dar este mensaje. Su culto (adoración) surge del principio del “temor”, que
en este contexto significa profundo respeto, reverencia. Tal culto es fruto de la fe. Dios da gozo y
bendiciones en respuesta a esta fe. Esto contrasta con el culto que se ofrece de acuerdo con los rudimentos
del mundo que se han filtrado en las iglesias apóstatas o Babilonia (Apoc. 14:8, 9). Dios instruye al
remanente para que evite seguir incluso lo mejor de la manera de adorar de ellos, porque se basa en el
aplauso y en la alabanza de los hombres, en la satisfacción propia, en el entretenimiento, en la excitación,
en actividades de origen pagano. Ese tipo de culto fomenta los sentimientos y no la fe. Los sentidos del
oído, la vista y el tacto sufren un verdadero asalto en esos cultos, y “los espíritus de demonios” pueden
trabajar eficazmente allí. Todos hablan a la vez. Se hacen “milagros” (Apoc. 16:13, 14).
19. Cuando venga Cristo, ¿en qué se convertirán los verdaderos miembros de la iglesia del Señor?
Respuesta: Llegarán a ser miembros de la iglesia de los ___________ en el Cielo (Heb. 12:22,
23; Apoc. 7:4; 14:1-5).
El apóstol Pablo presenta rodeando el trono de Dios a los verdaderos creyentes de todos los tiempos. Son
la iglesia de Cristo, los primogénitos (Col. 1:15). Cristo es la Roca sobre la cual se ha edificado su iglesia
en cada etapa de su historia (Sal. 28:1; 1 Cor. 10:4). Él es la piedra angular (Hech. 4:10,11; 1 Ped. 2:7).
Hagamos aquí de Cristo el Centro de todo nuestro culto y nuestra devoción, de manera que podamos
formar parte de la gozosa muchedumbre que se reunirá para adorarlo sobre el mar de vidrio.

1. YO SOY
2. medio, gloria
3. a) libro b) sin defecto c) fe
4. a) amor b) Diez Mandamientos
5. centinelas
6. a) fe b) sábado c) Espíritu Santo d) naciones e) incumplimiento
7. Cristo
8. a) paga b) novedad c) obediencia d) — e) Espíritu Santo
9. discípulos
10. arrastrar, tras sí
11. profetas, evangelistas
12. huyó
13. a) Dios b) santuario c) derribado d) Ley e) verdades
14. juicio
15. a) eterno b) fe c) mandamientos d) — e) juicio f) sufrió, contradicción
16. a) espíritu b) Elías
17. a) seguidle b) volvieran c) Abrahán d) altar
18. a) arrepentimiento b) oro c) vestiduras d) vencen e) Yo
19. primogénitos
21. ADORACIÓN
El tema de la adoración es fundamental para todas las religiones. La adoración implica tributarle respeto a
Dios o a lo que el adorador considera que es su dios supremo. La Biblia abunda en orientaciones no sólo
con respecto a la naturaleza del único y verdadero Dios que deberíamos adorar, sino que nos aconseja
también acerca de las formas y actitudes aceptables en el culto. La música se usaba comúnmente en la
vida social de los pueblos a los que se refiere la Escritura. Se estableció una clara diferencia, no obstante,
entre la música folclórica que se usaba en las festividades seculares, y la música sacra del culto en el
templo. Si entendemos los principios relacionados con este culto, podremos apreciar el carácter de Dios y
sabremos cómo darle gloria. La Biblia nos dice que el culto que comenzamos aquí se extenderá a la tierra
nueva. Allí las huestes de los redimidos y los ángeles que no cayeron adoran voluntariamente a su Dios y
Salvador, a quien verán cara a cara. Qué glorioso privilegio será estar de pie sobre el mar de vidrio en la
Nueva Jerusalén, y cantar de corazón alabanzas a Dios por su bondad y su misericordia.
Un cuidadoso examen del texto de las Escrituras nos muestra que los padres de nuestra raza cayeron
cuando le dieron a Satanás una lealtad parcial. En el concepto de la adoración es fundamental la lealtad.
No podemos adorar verdaderamente a nadie a quien no podamos ser plenamente leales. A los hijos de
Adán y Eva también se los probó en con respecto a la adoración. Caín no tuvo cuidado en seguir la forma
prescrita de adoración pública (liturgia) dada por Dios. El Señor manifestó su desagrado por esta
desobediencia (lealtad desviada), como asimismo por los actos que le siguieron. En los servicios del
santuario registrados en las Escrituras también aprendemos valiosas lecciones relacionadas con el
importante tema de la adoración. Cuando llegamos a las escenas finales descritas en el Apocalipsis,
descubrimos que los últimos grandes temas que encarará el mundo antes de la venida en gloria del Señor,
están relacionados con la adoración. El tema que deseamos explorar en esta lección es sin duda
sumamente importante.
Dios concentra la atención en la adoración

• Introducir los elementos esenciales pero sorprendentes del llamado de Dios al mundo a adorarlo antes
del regreso de Jesús.
• Poner énfasis sobre el hecho de que los seres humanos serán estrictamente probados para determinar
si son leales a Dios, o en cambio a ideas e instituciones humanas.
Uno de los mensajes más asombrosos y sublimes de toda la Biblia está registrado en Apoc. 14. Tres
ángeles dan los tres mensajes de este capítulo. Examinemoslos brevemente para ver en qué consisten.
1. ¿Qué mensaje relacionado con la adoración da el primer ángel?

Respuesta:
a) “Temes a Dios y _____ ______” (Apoc. 14:7).
Los que temen a Dios, es decir, los que tienen actitudes correctas hacia a él demuestran fe, amor y
obediencia (Deut. 10:12, 13; 13:4; Gén. 22:12; Ecl. 12:13, 14). Aquellos cuyos pensamientos giran en
torno del Señor lo reverencian y lo respetan. Lo adoran humildemente en la forma apropiada. Todos los
aspectos de nuestra adoración: la música, el comportamiento, la ropa que usamos, los pensamientos y las
ofrendas son para el Señor de los ejércitos. Dios le presentó una pauta al profeta Malaquías para aceptar
su adoración, en el contexto de la sociedad israelita. Les aconsejó a los adoradores que imaginaran que le
estaban ofreciendo ese culto al gobernante del momento, y que después vieran si ese personaje se
complacía con ellos (Mal. 1:6-8). Dios está muy por encima de cualquier gobernante, y por eso mismo
merece dones, servicios y normas más elevadas respecto de la adoración.
b) “Adorad a aquel que ______ el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas” (Apoc. 14:7).
La verdadera adoración a Dios surge de la mente de alguien que lo hace “en espíritu y en verdad” (Juan
4:23). La verdadera adoración es consecuencia de la comprensión personal y práctica de la verdad
concerniente a la grandeza de Dios tal como la revela el Espíritu Santo. El ángel de Apoc. 14:7, al apuntar
al mismo corazón de los Diez Mandamientos (Exo. 20:11), llama nuestra atención al sábado. La
verdadera adoración sólo es posible cuando participamos, por fe en Jesucristo, de la experiencia de una
vida santa, de la cual el sábado es una señal (Exo. 31:12-17). Los que el Señor considera verdaderamente
santificados serán obedientes, por fe, a toda la voluntad de Dios claramente revelada.
2. ¿Qué dice el segundo ángel?

Respuesta: “Ha caído, ha _______ Babilonia” (Apoc. 14:8).
No es nuestra intención aclarar plenamente qué significa Babilonia en el mundo moderno. Este nombre
deriva de Babel (confusión). Se refiere a la ciudad que se construyó en la llanura de Sinar como desafío a
la expresa promesa de Dios, de que la tierra nunca más sería destruida por agua. Dios confundió las
lenguas de los constructores de la ciudad, y de ese modo impidió que cumplieran sus propósitos (Gén.
9:14, 15; 11:1-9). La Babilonia espiritual representa movimientos religiosos y dirigentes que se
caracterizan por sus conceptos confusos acerca de la Palabra de Dios y los requisitos divinos. Decidieron
reemplazar la sabiduría de Dios por la humana. Prefieren sus propias instituciones, planes y maneras de
adorar a los revelados en las Escrituras.
3. ¿Qué instrucción sigue al mensaje acerca de la caída de Babilonia?

Respuesta: “_______ de ella” (Babilonia) porque Dios la destruirá (Apoc. 18:2-4).
Mucha gente honesta de corazón, que Dios quiere salvar, está en Babilonia. Todavía tienen que aprender
a obedecer la verdad de la Escritura, libre de tradiciones humanas. El llamado a salir implica un llamado a
estudiar diligentemente las Escrituras, porque a menos que se lo haga, no habrá convencimiento para salir.
La prueba que tendrá que enfrentar cada habitante de este mundo es: “¿Obedecer a Dios antes que a los
hombres?” (Hech. 5:29).
El llamado del ángel de Apoc. 18 es también un llamado a seguir la luz que ya se ha recibido. La verdad
establecida bajo la dirección y la conducción de Dios, tal como aparece en las Escrituras y tal como se la
experimentó en los grandes movimientos de reforma, como cumplimiento directo de la profecía, no
desaparecerá. Cristo mismo dio la advertencia: “Así que, si la luz que hay en ti es tinieblas, ¿cuántas no
serán las mismas tinievlas?” (Mat. 6:23). Los primeros creyentes cristianos, tal como se ve en los Hechos,
escudriñaban las Escrituras y obraban de acuerdo con la información revelada. Rechazaron las formas de
adoración que carecían de poder (que pueden incluir las formas de culto inspiradas por el hombre), y Dios
los premió con el don del Espíritu Santo (Hech. 2:4).
4. ¿Qué advertencia le da al mundo el tercer ángel?

Respuesta: El tercer ángel advierte acerca de un sistema de adoración que le presta apoyo a
movimientos religiosos apóstatas, y en cuanto a la recepción de la ________ de aprobación de
dichos movimientos (Apoc. 14:9).
Repetimos que no es nuestra intención, en este momento, identificar al poder representado por la bestia en
este caso. Nos limitaremos a decir que este poder se opone a la verdad de Dios y sus métodos, e intima a
todos a recibir su marca de aprobación que contrasta con el sello de Dios (Apoc. 13:15, 16; 14:1, 12). La
palabra “marca” también podría ser “carácter” o “endoso”. Se dice también que los que tienen el nombre
de Dios escrito en la frente también tienen el “sello” de Dios (Apoc. 7:2-4). La palabra “sello” se puede
definir como “una señal de certificación, de autenticidad, de aprobación”. Esto no quiere decir que se le
pone una señal visible a los creyentes. Tal como en la antigua Babilonia se levantó una imagen y se
intimó a todos para que la adoraran so pena de muerte, la Babilonia espiritual obliga a todos que le rindan
obediencia a sus instituciones espirituales, también so pena de muerte (Dan. 3:3-6; Apoc. 13:14-17).
5. ¿Qué características se manifiestan en los que reciben el sello de Dios?

Respuesta: Paciencia, ____ y obediencia (1 Juan 5:4; Apoc. 14:12).
Este concepto: “Mas el justo por la fe vivirá” (Rom. 1:17) es el tema central de estos pasajes. La fe es la
victoria que vence al mundo (1 Juan 5:4). La fe es la característica que, si se la posee, librará al creyente
no sólo del sentimiento de culpa que produce el pecado (justificación), sino del dominio del pecado
(santificación). El contraste se ve entre los que deciden seguir el camino fácil, y los que eligen la senda
estrecha de la fe, que conduce al Cielo.
6. Siendo que la fe es el factor decisivo para recibir el sello de Dios o la marca de la bestia, ¿qué lugar
ocupa el sensacionalismo en la adoración?
Respuesta: ¡Ninguno! (1 Rey. 18:26-30).
La batalla de Armagedón
• Repasar algunas contiendas espirituales del pasado reveladas por las Escrituras, relacionadas con la
adoración.
• Demostrar que con la batalla de Armagedón culmina la contienda del tiempo del fin acerca de la
adoración. Dios queda vindicado y su pueblo sale libre.
La palabra “Armagedón” (Apoc. 16:16) significa “colina o montaña de Meguido” (R. Young, Analytical
Concordance of the Holy Bible [Concordancia analítica de la Santa Biblia], 1975, p. 50). Este nombre nos
recuerda dos notables eventos registrados en las Escrituras.
Meguido es el lugar donde el antiguo Israel, bajo la conducción de Barac y Débora la profetisa, a su vez
dirigidos por Dios, lograron una notable victoria sobre fuerzas militares muy superiores (Jue. 4, 5). El
Señor instruyó a su pueblo para que se reuniera en el Mote Tabor (la colina o monte del valle de
Meguido) con el fin de atraer hacia sí el ejército de Sísara. Esta estrategia les dio la victoria, por tener fe
en la dirección de Dios y obedecerle (Jue. 4:6, 7, 14, 15).
El Monte Carmelo también estaba en las cercanías de Meguido. En ese monte se libró una gran batalla, en
la cual la adoración era el tema en discusión. Es impresionante el relato del desafío que le lanzó el
solitario profeta Elías al malvado Acab, sus sacerdotes y sus súbditos, en cuanto a quién se debía adorar.
Los grandes temas de esta contienda eran la honra de Dios y su adoración. El Señor fue notablemente
vindicado en ese monte (1 Rey. 18).
En la crisis final que abarcará todo el mundo, el fiel pueblo de Dios estará de nuevo aparentemente a
merced de los impíos y sin esperanzas de liberación (Apoc. 13). El Señor librará a su pueblo mientras
ellos se mantienen fieles a los principios enunciados en su Palabra. En esencia ellos tomarán su decisión
en la colina “de la fe y la esperanza”, tal como lo hizo el antiguo Israel en el Monte Tabor y Elías en el
monte Carmelo. La batalla de Armagedón se desarrollará en el tiempo del fin, cuando los fieles de Dios
estarán rodeados por los siervos de Satanás, listos para proceder a su destrucción. Esta batalla será un
acontecimiento mundial, en el que las fuerzas de Satanás serán completamente destruidas por seguir
desafiando al Creador.
7. ¿Qué desafío nos lanza hoy el incidente de Meguido?

Respuesta:
a) El himno de Débora y Barac nos dice que Dios es honrado por “los que se ofrecieron
_________________” para servirlo; El honró a los que manifestaron mediante su obediencia que
lo amaban (Jue. 5:2, 31).
La victoria de Israel sobre Sísara sólo se le puede atribuir a Dios. De este relato deducimos que todas las
órdenes del Señor nos capacitan para cumplirlas (véase E.G. de White, Lecciones prácticas el gran
Maestro, 1941, p. 333, versión en inglés). En el conflicto del tiempo del fin se vindicarán los caminos de
Dios, y su pueblo será librado triunfalmente de los poderes del mal.
b) En la contienda entre Elías y los sacerdotes paganos, el desafío consistía en elegir entre la
Palabra de Dios y los métodos humanos relacionados con la adoración. El desafío que Elías le
lanzó el pueblo fue: “¿Hasta ________ ____________ vosotros entre dos pensamientos?” (1 Rey.
18:21).
El Señor había sido deshonrado por los ritos paganos que se llevaban a cabo en el Monte Carmelo y en
todo Israel. Estaba a punto de desplegar su gran poder y vindicar su nombre. Fuego descendió del cielo en
respuesta a la oración de fe de Elías. Los falsos profetas recibieron la muerte y una gran tormenta se
extendió por toda la tierra (1 Rey. 18:38, 40, 45).
8. ¿Ocurrió un conflicto similar, también relacionado con la adoración, en tiempos del rey
Nabucodonosor, de la antigua Babilonia?
Respuesta: ¡Sí! Un heraldo anunció que todos debían ___________ y ________ la estatua de oro
que el rey había levantado(Dan. 3:3-6).
Este conflicto también tenía que ver con la decisión de obedecer a Dios o a los hombres. El Señor vindicó
a sus siervos al librarlos de la ira de sus enemigos (Dan. 3:23-27).
9. Cuando se reúnan las naciones en Armagedón, ¿qué sucederá?

Respuesta: Habrá un gran despliegue del poder de Dios durante el cual las obras de los hombres
serán destruidas por un gran ___________. Dios entonces regirá. Será vindicado ((Apoc. 16:16-
21).
Como en los días de Elías, habrá sólo dos poderes contendiendo. Dios dirigirá los ejércitos de los santos y
Satanás conducirá a todos los que no estén de parte del Señor. Los que no estén francamente de parte del
Señor, estarán de parte de Satanás (Mat. 12:30). Tal como en el ejemplo de Elías, hombres y mujeres de
todas partes se pondrán en contra de los que los engañaron. Durante la batalla del Armagedón podemos
esperar que haya mucho conflicto y conmoción cuando la pasión y la furia de las masas halle en todas
partes plena expresión. Entonces será demasiado tarde para arrepentirse, porque Dios ya habrá dicho :
”¡Ya está hecho!” (Apoc. 16:17). Los enemigos de Dios fracasarán en su rebelión y serán destruidos; los
satos recibirán protección y recibirán la recompensa eterna (Apoc. 6:15-17; 15:1-4; 19:1-8).
10. ¿Qué le pide Dios a su pueblo fiel que haga mientras se acerca esta gran contienda espiritual?
Respuesta: Que guarde sus ____________ para que no se vea su desnudez (Apoc. 16:15).
La exhortación que encontramos aquí consiste en seguir muy de cerca a Jesús con fe creciente, porque
sólo él nos puede cubrir con su justicia (Isa. 61:10). Nos ha prometido salvación (Joel 2:32; Hech. 2:21).
La naturaleza de la adoración
• Identificar los elementos esenciales de la adoración.
Para poder apreciar la naturaleza de la contienda que se desarrollará en los últimos días acerca de la
adoración a Dios, necesitamos considerar aunque sea brevemente su naturaleza. Es, para empezar, una
experiencia que fluye de una actitud mental (Juan 4:23). Mediante la adoración le expresamos gratitud a
Dios por todas sus bondades. A menudo se practica en la iglesia, pero el lugar donde se desarrolla no es
importante. La adoración puede ser privada o corporativa.
11. ¿En quién se debería concentrar nuestra adoración?

Respuesta: En el Señor, en el Creador de los ________, y Fuente de nuestra salvación (1 Crón.
16:23, 26, 29).
David, en el salmo de acción de gracias registrado en 1 Crón. 16, presenta varias razones por las cuales
deberíamos adorar a Dios. Explica la naturaleza de nuestra adoración.
12. ¿Cuáles son los componentes del culto, tal como los identifican las Escrituras?
Respuesta:
a) El culto implica adoración (reverencia, respeto y afecto). Dios es cada día la ________ de
nuestra salvación (1 Crón. 16:23-26; Sal. 103:1-6).
El Señor debe ser alabado por su bondad hacia la humanidad en general y por cada uno de nosotros en
particular. Nuestra adoración surge de su perdón y de su liberación del poder del pecado. También tiene
sus raíces en nuestra sensación de reverencia y el asombro que nos causan las maravillas de su creación.
El Señor es nuestra única Fuente de esperanza duradera.
b) La adoración implica acción de gracias. Debemos alabar a Dios todos los días con himnos de
______ ____ _______ (Sal. 96:1-9;100:1-5).
Nuestra gratitud se puede expresar con himnos y/o con música. La música y el canto siempre se han
relacionado con la alegría y el regocijo. Las ofrendas voluntarias también son expresiones apropiadas de
gratitud. Por ese medio reconocemos que Dios nos ha dado poder para conseguir riquezas (2 Cor. 9:7;
Deut. 8:18).
c) El culto implica devoción (lealtad y amor) y renovación. Durante el culto el Señor nos da la
seguridad del ________ de nuestros pecados. El suplicante responde por medio de la entrega y la
consagración (Jer. 19:12, 13; Isa. 6:6-8).
Cuando buscamos a Dios de todo corazón, él nos oye, nos perdona y nos restaura. La reacción ante esta
experiencia es la consagración a su servicio para glorificar su Nombre.
Un culto aceptable
• Indicar qué actitudes mentales están relacionadas con la adoración.
• Definir qué significa en términos prácticos una total consagración en el momento de la adoración.
Aprendimos en una sección anterior que justo antes de la venida de Cristo, el llamado de Dios invita a
todo el mundo a concentrarse en el tema de la adoración. También vimos que la última gran contienda
espiritual que se librará entre el bien y el mal tendrá que ver con aspectos de la adoración y del honor de
Dios. En esta última sección nos referiremos a la naturaleza de la adoración. Queremos examinar también
la importancia de toda esta información para el culto que rendimos hoy. ¿Qué es un culto aceptable para
Dios?
13. ¿Qué actitudes y conductas caracterizan a los verdaderos adoradores?

Respuesta: El culto que Dios acepta debe ser en __________ y en ________ (Juan 4:23).
La palabra “espíritu”, tal como se la usa aquí, significa “con todo el ser” (Mat. 22:37). Tenemos que
concentrarnos en Jesús y en nuestra relación con él. Las meras apariencias y una actitud crítica hacia los
demás convierten en inaceptable nuestro culto (Amos 5:21-26; Luc. 18:10-14).
Los que mantienen una correcta relación con Jesús también reaccionan positivamente hacia las verdades
de la Palabra de Dios y éstas los santifican (Juan 17:17). No podemos honrar al Señor ni rendirle un culto
aceptable si seguimos las tradiciones de los hombres (Mar. 7:9, 13).
14. ¿Cómo podemos lograr el estado mental necesario para ofrecerle al Señor un culto aceptable?
Respuesta: Dios _______ una nueva actitud mental y un __________ nuevo en el pecador
arrepentido (Sal. 51:10).
La paz que sigue al conocimiento de que Dios ha perdonado nuestros pecados conduce al gozo (Sal.
40:16; Rom. 5;11; 15:9-13). Gracias a la obra del Espíritu Santo desarrollamos nuevos motivos y nuevas
actitudes (Rom. 12:2).
15. ¿Cuál debería ser nuestra reacción cuando nos enteramos de la verdad tal cual está revelada en la
Palabra de Dios?
Respuesta: La ____________ es la única reacción aceptable (Mat. 7:21-27).
La clave espiritual de la historia del hombre que construyó su casa sobre la roca es que los conocen qué es
lo recto deben encaminar sus pies, con temor y oración, por la senda de la obediencia. Jesús nos enseñó
con toda claridad que adoramos en vano cuando los dichos y las tradiciones de los hombres reemplazan
las claras y luminosas verdades de la Palabra de Dios (Mar. 7:6-9). Hacemos lo mismo cuando nuestros
pies están encaminados hacia el pecado habitual (Juan 9:31).
16. En la última gran contienda entre el bien y el mal en este mundo, ¿cuáles son las características de
aquellos a quienes Dios aprueba?
Respuesta: Son ___________, tienen fe y obedecen su Palabra (1 Juan 5:4; Apoc. 14:12).
17. ¿Qué otros aspectos de la adoración destacan las Escrituras para nuestra especial consideración?
Respuesta:
a) Evita ofrecer “el sacrificio de los ______” (Ecl. 5:1-4).
Este texto nos sugiere que seamos sinceros y honestos (devotos) en nuestras reacciones a los toques
divinos. Las decisiones apresuradas, sin el verdadero deseo de servir a Dios, son inaceptables como base
del culto.
b) La frivolidad mezclada con el culto y su desvalorización, no tienen lugar en la vida de

un verdadero cristiano. Si lo hacemos, Dios nos juzgará merecedores de la muerte eterna, tal como
ocurrió con _______ y _______ (Lev. 10:1, 2).
El Señor es un Rey santo y grande (Zac. 14:17). Por eso merece reverencia y un piadoso temor (Heb.
12:28). Se descorre el velo y podemos ver a los serafines en el Cielo mientras adoran a Dios. Los vemos
con los rostros cubiertos en reverencia mientras claman: “¡Santo, santo, santo!”. La reacción personal de
Isaías fue: “¡Ay de mí que soy muerto!” (Isa. 6:1-5). Nuestra adoración debería corresponder a la
grandeza de Dios.
c) Una actuación pretensiosa, destinada a provocar la alabanza de los demás, siempre es

inaceptable para Dios. Ciertamente él ______________ debidamente a tales adoradores (Mat. 6:5,
6).
La motivación en la adoración es muy importante tal como lo vemos en la historia que relató Jesús acerca
de la adoración ofrecida por un fariseo y un publicano (Luc. 18:10-14). Se aceptó al hombre que se sentía
humilde ante sus propios ojos, y que esperaba con fe el perdón de Dios. El fariseo, especialista en
compararse con los demás, se fue condenado. En el culto la música no debería ser un concierto, nuestras
oraciones no deberían ser frías y formales, nuestras palabras deberían ser el reflejo de nuestra experiencia.
Estamos adorando a Dios; no estamos tratando de llamar la atención de los demás sobre nosotros mismos.
Nuestra adoración y nuestra devoción deberían ser genuinas.
18. ¿Nos invitan las Escrituras a alabar a Dios por su bondad y su salvación?
Respuesta: ¡Sí! “____________ en el Señor siempre” (Fil. 4:4; Sal. 138:1, 2).
Cuando Jesús nació en el pesebre de Belén, el coro de ángeles alabó a Dios (Luc. 2:13, 14). Los
redimidos y las huestes angélicas alabarán a Dios cuando termine el gran conflicto con Satanás (Apoc.
15:3, 4; 19:6, 7). ¡Ciertamente Dios mismo se regocijará! (Isa. 65:19; Sof. 3:17). Por eso el apóstol Pablo
acertadamente nos insta a ser agradecidos en este mundo por la abundante salvación que se nos ofrece y
por el constante auxilio de Jesús (2 Tes. 2:13; Heb. 4:15, 16).
En el primer templo se ofreció una alabanza como ésta (1 Crón. 23:5; 25:7). El salmista instó al pueblo a
ofrecer alabanzas en vez de animales (Sal. 69:30, 31). En el segundo templo la música desempeñó un
papel más importante todavía; había un grupo grande de músicos dedicados al templo. Los instrumentos
de dos cuerdas: el salterio y el arpa, se usaban generalmente, y constituían el cuerpo principal de la
orquesta del templo. La música instrumental se usaba mayormente para acompañar el canto; en efecto, los
hebreos sabían poco de música aparte del canto (Encyclopaedia of Religion and Ethics [Enciclopedia de
religión y ética], 1961, t. 9, pp. 39-43; Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 12, cls. 560, 566, 1262-1264;
Encyclopaedia of Religion [Enciclopedia de religión], 1987, t. 10, p. 183).
Satanás ha tratado de pervertir estas expresiones de gratitud instando a los no consagrados a dirigirlas o a
participar en ellas (Amós. 5:21-26; Luc. 18:11, 12, 14). Satanás era el director del coro celestial antes de
ser expulsado del Cielo. (Esto aparece sugerido en el Eze. 28:13 donde encontraos las palabras
“tamboriles y flautas”. La palabra hebrea toph usada aquí significa “tamborcito”; de allí “tamboril”. Por
eso podemos esperar que la música sea uno de los recursos especiales de Satanás para pervertir la
alabanza de los elegidos de Dios.
19. ¿Tienen los sentimientos algún lugar en la adoración?

Respuesta: ¡Por supuesto! Ciertamente podemos “__________” nuestra alma delante del Señor
(1 Sam. 1:12-17).
La historia de la emocionante oración de Ana es conmovedora y nos impresiona su fervor al rogarle a

Dios su bendición. Las emociones humanas tienen su lugar en el verdadero culto y Dios no las condena
(Luc. 18:13, 14).
Pero el Señor rechaza esa exacerbación de las emociones que conduce a una especie de éxtasis. El estilo
de culto de los sacerdotes del Monte Carmelo estaba bajo el control de Satanás. En contraste con la
excitación que caracterizaba esa forma de culto, el profeta Elías manifestó fervor, calma y una serena
dignidad (1 Rey. 18:26-30, 36, 37). Dios habló con Elías poco después mediante “un silbo apacible y
delicado” (1 Rey. 19:12). Nuestro Dios, que no cambia, sigue hablándonos hoy de la misma manera
(Sant. 1:17). (Véase el APËNDICE correspondiente a esta lección).
En muchas culturas paganas y “cristianas” de hoy, se altera la mente mediante el ritmo y la música, los
movimientos corporales, la repetición de frases hechas y otras actividades similares. Muchas de las
iglesias que constituyen la Babilonia espiritual le dan mucha importancia a esas actividades, con gran
énfasis en los sentimientos y las emociones. Nuestra experiencia religiosa no se debería basar en los
sentimientos, pero sí debería conducirnos a la alegría y al gozo (que podemos expresar). Nuestra relación
con Jesús es lo importante (2 Cor. 5:7). “A nosotros nos corresponde ejercer fe, pero el gozo y las
bendiciones los da Dios” (E.G. de White, Early Writings [Primeros escritos], 1945, p. 72). Los asuntos
implícitos en el conflicto del Monte Carmelo de la antigüedad, son los mismos que enfrentarán los
seguidores de Cristo durante las escenas finales de la historia de esta tierra. Estudiemos la Palabra de Dios
para que nuestra adoración sea aceptable. Por sobre todo, nuestro culto debe tener a Cristo como centro,
debe ser fruto de una genuina relación con muestro Redentor, y debe darle “gloria a Dios”.

1. a) dadle gloria b) hizo
2. caído
3. Salid
4. marca
5. fe
6. ---
7. a) voluntariamente b) cuando, vacilaréis
8. postrarse, adorar
9. terremoto
10. vestiduras
11. cielos
12. a) Fuente b) acción de gracias c) perdón
13. espíritu, verdad
14. crea, espíritu
15. obediencia
16. pacientes
17. a) necios b) Nadab, Abihú c) recompensará
18. Regocijaos
19. derramar
APÉNDICE
EL MENSAJE DE ELÍAS
Comparación de los mensajes de Elías, Juan el Bautista y la iglesia remanente, relacionados con la adoración, tal
como los presentan las Escrituras
Elías (1 Rey. 18) Juan el Bautista (Mat. 17:9-13) Iglesia remanente (Mal. 4:5, 6)
El culto inaceptable en los El culto inaceptable en los El culto inaceptable en los

días de Elías días de Juan el Bautista días de Juan el Revelador
Egoísta: “¡Respóndenos!” Egoísta: Basado en el origen Egoísta: “Yo soy rico” (Apoc. 3:17)
(1 Rey. 18:26). racial (Mat. 3:9). Adoran a la bestia para preservar
la vida (Apoc. 13:15).
Se apela a lo dramático, a las Se apela a los sentidos Se apela a las emociones

emociones (1 Rey. 18:26-28). (Mat. 23:5; Mar. 12:38-44). (Apoc. 13:13, 26-28).
Rechazo de Dios como el Ser Una generación de “víboras” Grandes pretensiones y blasfemias
Supremo. Manifestaciones: (Mat. 3:7). Medios: (Apoc. 13:5). Naturaleza:
* Se ignora la Palabra de * Amor a la alabanza (Luc. 18: * Asume el Nombre de Dios;
Dios (1 Rey. 16:31; 10-14) duda de su Palabra (Apoc. 13:6, 16).
Jos. 23:11-13). * Ostentosos títulos religiosos * El ministerio del tabernáculo de Dios
* Reinterpretación de la historia (Mat. 23:5-7). descartado (Apoc. 13:6; Dan. 8:11).
para negar la providencia * No se seguía la Palabra de Dios * Los seres celestiales tergiversados;
divina (1 Rey. 13:28). (Mar. 7:9). se enseña la inmortalidad del alma;
* Se persigue a los profetas de * Se destruye la fe en los mediadores humanos (Apoc. 13:6;
de Dios (1 Rey. 18:4). mensajeros de Dios (Luc. 11: 16:13).
*Adoraban y servían a otros 47, 48).
dioses (1 Rey. 12:26.33; * Prácticas discriminatorias
16:32, 33). (Luc. 18:10-14; Juan 7:14-16).
El culto aceptable en los días El culto aceptable en los días El culto aceptable en los días
de Elías de Juan el Bautista de Juan el Revelador
Centrado en Dios; énfasis en Cristo “debe crecer” (Juan 3:30). El centro es Cristo; “dadle gloria”
su voluntad revelada (Apoc. 14:7).
(Nótense las palabras claves):
“El altar de Jehová”, “Dios de”
“Por mandato tuyo”, “Tú eres
Dios en Israel”, “Seguidle”
(1 Rey. 18:21, 30, 26).
La gente sirve (1 Rey. 18:30). La gente sirve (Mat. 3:5; La gente sirve (Mal. 4:6;
Mar. 1:5). Apoc. 14:6).
Llamados razonables: Experiencia religiosa razonable Un culto razonable: “La hora

“¡Acercaos!” (1 Rey. 18:30). (Mat. 3:7-12; Luc. 3:7-15). de su juicio ha llegado”
“Cuente el número de la bestia”
(Apoc. 13:18; 14:7).
Calma: “Respóndeme, Jehová Calma: “Preparad el camino del Calma: la misión cumplida con
respóndeme” (1 Rey. 18:37). Señor” ( Isa. 40:3). “Paciencia”, “predica”, “si alguien
Dios habla por medio de un oye mi voz” (Apoc. 3:20; 14:6, 12).
silbo apacible (1 Rey. 19:12).
El sentido de la vista implicado El sentido de la vista implicado: Fenómenos visibles prometidos:
para despertar la conciencia Juan “bautizaba”, “los cielos “visiones” (Joel 2:28).
(1 Rey. 18:31-33). fueron abiertos”, “el Espíritu
descendió (Mar. 1:9; Luc. 3:
21, 22).
Las emociones implicadas: Las emociones implicadas: Las emociones implicadas:

la calma y la reverencia el arrepentimiento se llama a la reverencia: “Temed
predominan. “Se postraron” (Mar. 1:4). a Dios”, arrepentimiento
“Escúchame, oh Dios” (Apoc. 3:19: 14:7).
1 Rey. 18:37, 39).
Lecciones Lecciones Lecciones
La fe es central en el llamado; Se anuncia la venida del Mesías La fe es central en los llamados

se recuerda a Abrahán, Isaac (Mat. 11:10; Luc. 1:17). (Apoc. 3:18; 14:12; 1 Ped. 1:7).
y Jacob (1 Rey. 18:36).
Se invita a la obediencia a la Restaura “todas las cosas”, La obediencia a los mandamientos

a la Palabra de Dios foco en el pacto, en el Legislador es el centro del mensaje
(1 Rey. 18:18). (Mat. 7:11-13; Mal. 3:1). Apoc. 14:7, 9, 12).
Un ministerio de arrepentimiento Un ministerio de arrepentimiento Un ministerio de arrepentimiento

(1 Rey. 18:21-37). (Mat. 3:2; Mar. 1:4; Juan 1:29). (Apoc. 3:19, 20).
Llamado a la perseverancia Llamado a la perseverancia Llamado a la perseverancia

por medio del ejemplo por medio del ejemplo (de Juan y la santificación (Apoc. 3:21;
(1 Rey. 18:1). el Bautista); Cristo lo aprobó 2 Ped. 1:5-11 - La escalera del
(Mat. 11:2-9). crecimiento cristiano).
22. PURIFICADO MEDIANTE SANGRE Y AGUA
Dios con frecuencia enseña en las Escrituras importantes conceptos por medio de símbolos. Cuando el
pecado invadió este mundo, la muerte pasó a todos. Casi inmediatamente después de este evento, Dios
presentó su plan para salvar a hombres y mujeres de la destrucción eterna. Este plan se basaba en una
impresionante manifestación de amor, es decir, en el hecho de que el Hijo, la segunda persona de la
Divinidad, vendría a la tierra a sufrir las consecuencias del pecado, que es la muerte, en lugar de toda la
especie humana. Como resultado de este plan, se le aseguró la salvación a todo aquel que lo aceptara y
desarrollara una relación de fe con Dios. Con el fin de grabar profundamente en la mente de los creyentes
el significado de este plan, Dios instituyó los sacrificios de animales. Estos sacrificios, por sí mismos, no
podían limpiar de pecado a nadie. El Señor declaraba justo al creyente que ejercía fe en las provisiones
divinas. Los sacrificios permitían recordar cuán horrendo es el pecado, que finalmente le costaría la vida
al Salvador. En esta lección estudiaremos algo del simbolismo de la sangre derramada.
También es importante en la Biblia el significado del agua purificadora. Esta es un solvente universal, y
se la usado para conseguir limpieza física desde tiempos inmemoriales. En las Escrituras se le da un
profundo sentido espiritual a la purificación con agua. Queremos estudiar este simbolismo y descubrir qué
aplicaciones tiene hoy para nuestra vida.
El derramamiento de sangre
• Recordar que Dios en el principio sacrificó animales para proporcionarles vestimentas a los seres
humanos pecadores.
• Determinar que el derramamiento de la sangre de animales anunciaba al Sustituto (Cristo) que daría
su vida por los pecadores.
1. ¿Qué sucedió poco después de la entrada del pecado en este mundo?

Respuesta: Se sacrificó la vida de algunos animales para proporcionarles ____________ a la
pareja pecadora (Gén. 3:21).
No hay duda de que el derramamiento de la sangre de animales inocentes para proporcionarles vestiduras
a la desnuda pareja, llamaba poderosamente su atención a la promesa del Redentor venidero y a su
sufrimiento por sus pecados. Poco antes se le había presentado este plan a la pareja pecadora (Gén. 3:15).
Dios, al vestir a la pareja con ropa provista por su propia mano, les mostró que dependían de él para
librarse d la culpa del pecado (representada por su desnudez). Este acto demostraba también la futilidad
del esfuerzo humano (por ejemplo, las hojas de higuera) para contrarrestar los efectos del pecado. Por eso
las Escrituras a veces nos dicen que estamos vestidos con la justicia de Cristo, como si ésta fuera una
túnica o un manto (Isa. 61:10; Zac. 3:4).
2. ¿Qué ceremonia instituyó Dios para recordar a los pecadores la salvación que traería Jesús?
Respuesta: Se instituyó el plan de sacrificar __________ (Gén. 4:4).
Abel ofreció por fe un sacrificio en obediencia a las instrucciones de Dios (Heb. 11:4). El animal
sacrificado anunciaba la venida del Mesías (Heb. 9:12).
3. Cuando se sacrificaban animales, se derramaba sangre. ¿Qué significaba esto?

Respuesta: La sangre derramada representaba la ______ (Gén. 9:4; Lev. 17:11).
La entrada del pecado en este mundo por medio de la desobediencia, produjo muerte (Gén. 2:17). El
derramamiento de sangre representaba la sustitución de la sangre --la vida de otro-- en favor del pecador.
Caín, al no querer sacrificar animales, declaró, en efecto, que no tenía necesidad de un Salvador.
4. ¿A quién le anunciaba por último al pecador la sangre derramada?

Respuesta: Cristo sacrificó su vida y derramó su sangre por nosotros en la cruz. “Cristo fue
_________ _____ ______ ______ para llevar los pecados de muchos” (Heb. 9:22, 28).
Juan el Bautista dijo que Jesús era “el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29).
Algunos escritores del Antiguo Testamento también se refirieron al Salvador como un Cordero (Isa. 3:5,
7). Por lo tanto, los sacrificios de animales llamaban constantemente la atención de la gente a la
enormidad del pecado (un animal perdía la vida cada vez que ellos pecaban) y al hecho de que Dios había
trazado un camino de salvación. La sangre de la víctima (el tipo) le señalaba al pecador, por la fe, la
sangre de Cristo (el antitipo) que sería derramada en el Calvario para expiación (Lev. 17:11; Rom. 5:10).
Expiar significa “cubrir”, “perdonar”, y por eso mismo “reconciliar”. La sangre de Jesús nos limpia de
pecado; estamos justificados, se nos considera como si nunca hubiéramos pecado cuando aceptamos por
fe el perdón de Jesús (Rom. 5:9; 1 Juan 1:7, 9). También se nos santifica, se nos perfecciona y se nos hace
aptos para toda buena obra por medio de su sangre (Fil. 1:9-11; Heb. 13;12, 20, 21). La expiación
participa, entonces, del sacrificio y la intercesión.
5. ¿Tenían algún mérito en sí mismos los sacrificios de animales?

Respuesta: ¡No! “Los sacrificios de Dios son el __________ _____________” (Sal. 40:6;
51:16,17).
El plan de salvación, tal como aparece en el Antiguo Testamento, anunciaba la venida del Mesías. Sólo al
ejercer fe en este don prometido podía el pecador reclamar el cumplimiento de las promesas. El Señor
quería obediencia y justicia y no tanto sacrificios (1 Sam. 15:22).
Liberación por medio de la sangre

• Repasar brevemente la fiesta de la pascua, que le recordaba a los creyentes la promesa de Dios de
librarlos de la esclavitud física y espiritual.
• Establecer firmemente que el cordero que se sacrificaba en la pascua anunciaba a Cristo, el Salvador.
• Llamar la atención del lector al hecho de que toda la sangre de todos los sacrificios que se ofrecían en
el santuario terrenal, también anunciaban el sacrificio que Cristo haría en nuestro favor.
La pascua era la primera fiesta anual del calendario judío que anunciaba el ministerio de Cristo. No
vamos a entrar en todos los detalles de la fiesta ahora; nos limitaremos el simbolismo de la sangre.
6. ¿Cuál era el objeto de supremo interés en la fiesta de la pascua?

Respuesta: El _________ pascual (Exo. 12:3, 5, 6).
El rito de la pascua giraba en torno de un cordero sin tacha que anunciaba al Cordero de Dios sin pecado.
En el décimo día del mes de Abib o Nisán se seleccionaba un cordero, y cuatro días después se lo
degollaba a la hora novena (las 3 de la tarde). El Sanedrín condenó a Jesús varios días antes de su
crucifixión. La muerte de Jesús ocurrió en el 14 de Abib a la hora novena (Mat. 27:45-50).
7. ¿Qué se hacía con la sangre del cordero?

Respuesta: La sangre se aplicaba con hisopo a los ________ y al ________ de las puertas de la
casa (Exo. 12:7, 22).
La aplicación de la sangre a las puertas de las casas significaba que se ofrecía liberación a todos los que se
encontraban dentro de ellas. Notamos que la sangre se aplicaba con hisopo a las puertas. El hisopo
aparece en las Escrituras relacionado con actos de purificación. Por lo tanto, esto significaba que los
habitantes de la casa estaban buscando a Dios para conseguir purificación (Sal. 51:7). En la medida que el
pueblo aceptaba por fe la sangre derramada de Jesús, quedaba libre del sentimiento de culpa y del poder
del pecado (Rom. 5:9; Heb. 13:12).
8. ¿Qué otra importante provisión se hacía en esta fiesta?

Respuesta: Se preparaba pan _____ __________ y se lo comía junto con el cordero asado (Exo.
12:8).
El pan sin levadura no sólo estaba relacionado con esta fiesta, sino que no debía haber en la casa ni
vestigios de levadura una semana entera después de la ceremonia. A cualquiera que desoyera esta
instrucción se lo consideraba indigno y se lo expulsaba de la congregación (Exo. 12:15). La levadura se
usa en la Biblia como símbolo del pecado y corrupción. Siendo que el pan representaba a Cristo, debía ser
sin corrupción (1 Cor. 5:7, 8). Este símbolo, en este caso, significa que una vida plenamente entregada a
Cristo es una vida de victoria sobre el pecado.
9. ¿Qué protección les ofrecía la sangre a los que por la fe la habían aplicado a las puertas de sus casas?
Respuesta: “________ de largo ante vosotros” era la promesa de Dios (Exo. 12:12, 13).
La aplicación de la sangre aseguraba la liberación de los primogénitos de Israel cuando fueron destruidos
por el ángel exterminador en la tierra de Egipto todos los primogénitos de los que habían decidido no
seguir las instrucciones de Dios. Los que aplicaron la sangre demostraron con eso que tenían una fe
inconmovible en el Señor, y que habían decidido hacer del Salvador su constante Fuente de fortaleza. Hoy
podemos ser limpios de pecado (la levadura del pecado debe ser eliminada de nuestras vidas). Dios nos
llama a vivir vidas victoriosas por fe en él. Su vida debe ser la nuestra por la fe. Sólo por la aplicación de
la sangre pudieron ser libres los hijos de Israel. Dios quiere librarnos de la muerte segunda que
sobrevendrá a todos los que no han sido librados del poder del pecado por los méritos de Cristo (Apoc.
3:21; 20:14, 15). Se nos invita a ejercer fuerza de voluntad y reclamar los méritos de Cristo cuando somos
tentados. Entonces seremos librados (1 Cor. 10:13; Sant. 1:14, 15). Tenemos acceso a su poder para librar
por medio de la sangre de Cristo (Efe. 2:12; Heb. 10:19).
10. En la agonía de Cristo, mientras luchaba en el jardín de Getsemaní, ¿qué derramó?

Respuesta: Grandes gotas de ________ (Luc. 22:44).
El fenómeno de la transpiración de sangre se puede dar en personas sumamente tensas (A. Clarke, 1854,
The Holy Biblie Containing the Old and New Testaments: with a Commentary and Cricitcal Notes [La
Santa Biblia que contiene los Testamentos Antiguo y Nuevo: con un comentario y notas críticas], acerca
de Luc. 22:44). Cristo estaba sufriendo el horror de verse separado de Dios al llevar la carga de los
pecados del mundo. Continuó esa lucha contra los poderes de las tinieblas y sacrificó su vida en la cruz.
Pablo, en Heb. 12:4, nos exhorta a resistir el pecado con la misma firmeza, resolución y fe de Cristo
(resistir “hasta la sangre, combatiendo contra el pecado”). El estudio de la vida de Cristo con oración nos
llevará a dedicar tanto tiempo a esas actividades espirituales como el que él empleó. De esta manera se
nos fortalecerá para luchar contra el mal y se nos capacitará para vencer al diablo “por . . . la sangre del
Cordero” (Apoc. 12:11).
El Antiguo Testamento está lleno de ricos símbolos que llaman nuestra atención a Cristo, “el Cordero”.
Todos los cruentos sacrificios del santuario terrenal atraen nuestra atención al amor y la compasión de
nuestro Dios que es rico en misericordia. Al sudar sangre en nuestro lugar en el jardín, y al dar su vida,
nuestro Salvador ilustró gráficamente el verdadero significado de la sangre de los sacrificios.
Purificados por agua

• Descubrir que consistentemente Dios ha usado el concepto de lavar con agua como un símbolo de la
purificación del pecado.
El hecho de lavar con agua se usa ampliamente en las Escrituras como un símbolo de purificación. En
esta sección nos vamos a referir a algunos de esos casos.
11. ¿Qué mueble, por así llamarlo, que se encontraba en el atrio del santuario terrenal, se usaba para
purificar?
Respuesta: La ________ (Exo. 30:18-21).
12. ¿Qué lavaban los sacerdotes en el agua de la fuente?

Respuesta: Las _______ y los pies (Exo. 30:19).
El agua de la fuente original bien pudo provenir de la corriente que fluyó de “la roca” en el Monte Sinaí.
La “Roca” representaba a Cristo Exo. 17:3, 6; 1 Cor. 10:4). Los sacerdotes debían lavarse antes de ofrecer
un sacrificio en el altar de los holocaustos, o antes de entrar al santuario. Esta purificación ceremonial de
la impureza física tenía un profundo significado espiritual, puesto que señalaba la purificación del pecado
por fe en Cristo (1 Cor. 6:11; Efe. 5:26).
13. Al apartar a los levitas para el servicio del santuario, ¿qué se le dijo a Moisés que hiciera?
Respuesta: Se los rociaba con agua como un signo exterior de una “______________” interior
(Núm. 8:7).
Notamos que en esta ceremonia los levitas no se lavaban ellos mismos. Moisés, como tipo de Cristo,
llevaba a cabo el rociamiento; no podían hacerlo ellos mismos. Por medio de esta ceremonia el Señor les
estaba enseñando la necesidad de la regeneración, es decir, del nuevo nacimiento, gracias a la obra del
Espíritu Santo (Tito 3:5). Para poder ser verdaderos ministros del santuario, sus vidas debían ser
modeladas y transformadas de manera que pudieran representar adecuadamente los caminos de Dios ante
los que se encontraban en su esfera de influencia.
14. Cuando Dios entró en una relación de pacto con los hijos de Israel en el Sinaí, ¿qué dijo que había
hecho por ellos?
Respuesta: Los _______ con agua y los _______ con aceite (Eze. 16:9).
El lavado con agua y la unción con aceite formaba parte de los preparativos de una boda (Rut. 3:3). En la
relación de pacto establecida entre el pueblo y Dios en el Sinaí, ellos se comprometieron a amarlo y
obedecerle (Exo. 19:5-8; 24:7). Dios no sólo los quería lavar con el agua de la regeneración
(justificación), sino derramar sin medida su Espíritu sobre ellos (simbolizado por el aceite, el poder
santificador). También los quería vestir con el hermoso atuendo y los ornamentos de su justicia (Eze.
9:10-13). En los días de David y Salomón la nación prosperó. Las naciones paganas vinieron a inquirir
acerca del Dios de Israel. Hoy el pacto de Jehová no es con una nación determinada, sino con todos los
que aceptan a Jesús por la fe. La misma purificación del pecado y el manto de la justicia de Cristo que
Dios quería para Israel, trata de dárnoslas hoy a nosotros, sus seguidores.
15. ¿Qué lenguaje usa el salmista para explicar cómo nos limpia Dios de la culpa del pecado?
Respuesta: “Lávame, y seré _____ _________ que la nieve” (Sal. 51:7).
El símbolo del levamiento se usa comúnmente en la Escritura para referirse a la purificación del pecado
(Isa. 1:16; Jer. 4:14; Sant. 4:8). Cuando le pedimos a Dios por fe que nos perdone determinados pecados,
nos perdona y nos declara limpios, y nos considera como si nunca hubiéramos pecado. Cristo nos
justifica. (1 Juan 1:9).
16. ¿Desea Dios hacer algo más por nosotros que meramente eliminar el sentimiento de culpa que nos
produce el pecado?
Respuesta: Sí, desea “santificarla (la iglesia), habiéndola ____________ en el lavamiento del
agua por la Palabra”. Desea que su iglesia sea “_______ y sin mancha” (Efe. 5:25-27).
Dios desea hacer más que librarnos de la culpa del pecado (Juan 3:5). Ha prometido escribir en la mente
los principios de su Ley (Jer. 31:33; Rom. 12:2). Nada que pueda contaminar entrará en el reino de Dios
(Apoc. 21:27). El Señor quiere que todos los creyentes, por la fe en los méritos de Cristo, sean gente
santa, es decir, nos quiere santificar. Los redimidos estarán si mancha delante de Dios (Apoc. 14:5).
Los símbolos en la iglesia cristiana

En este sección vamos a:
• Demostrar que los símbolos de la sangre derramada y la purificación con agua siguen teniendo
importancia en la iglesia cristiana.
• Determinar que la cena del Señor, instituida por Cristo, ocupó el lugar de la pascua, y nos recuerda
permanentemente el gran sacrificio de Dios.
Muchas de las ceremonias llevadas a cabo en los tiempos del Antiguo Testamento hallaron su
cumplimiento en la cruz. Los símbolos de la purificación con agua y sangre han pasado a la dispensación
cristiana, y el significado de esos símbolos nos ha sido aclarado hoy por medio de las palabras de Cristo y
los apóstoles.
17. ¿Qué símbolo aceptó Cristo para la iglesia cristiana como una adecuada representación de su muerte y
su resurrección?
Respuesta: El bautismo con ______ (Mat. 3:13-16; 20:22; Rom. 6:3-5).
El bautismo por inmersión ya era conocido por los esenios antes de Juan. Nos cabe muy poca duda de que
las ideas relacionadas con el bautismo se consideraron consistentes con los principios relativos a la
purificación ceremonial con agua del sistema del santuario. Cuando Juan el Bautista apareció osadamente
proclamando el bautismo para arrepentimiento, no nos han llegado noticias de que los dirigentes
religiosos hayan tenido objeciones al respecto. En efecto, esperaban que fuera un notable profeta o
Moisés mismo, ya que ellos creían que éste volvería (Juan 1:21, 25). El apóstol Pablo nos recuerda que
Moisés bautizó simbólicamente a los hijos de Israel en las aguas del Mar Rojo (1 Cor. 10:2). Mientras
cruzaban el mar, por detrás los protegía una nube. Su liberación de Egipto quedó asegurada por su acto de
avanzar por fe hacia mar abierto; al hacerlo, exhibieron su lealtad a Dios.
La palabra “bautismo” proviene del término griego baptízo que significa “lavar” o “sumergir”. Juan el
Bautista y los apóstoles practicaron el bautismo por inmersión (Mar. 1:9, 10; Juan 3:23; Hech. 8: 38, 39).
Fue la práctica común de la Iglesia Católica hasta el siglo XII. En algunos lugares prevaleció hasta el
siglo XVI. Todavía se lo permite en la Iglesia Latina. La inmersión se dice que “corresponde mejor con el
simbolismo de la persona que participa de la muerte y la resurrección de Cristo” que la aspersión (The
Catholic Encyclopedia [La enciclopedia católica], 1913, t. 11, pp. 259, 262; J.P. Lang, Dictionary of
Lithurgy [Diccionario de la liturgia], 1989, p. 52).
El bautismo pierde su significado cuando no es por inmersión, ya que es un símbolo de la sepultura de la

vida vieja (Col. 2:12). La sepultura sigue a la crucifixión de las viejas costumbres (Rom. 6:4-6). Para
crucificar esas costumbres antiguas, la persona se debe arrepentir y pedir perdón por la fe en los méritos
de Cristo (Hech. 2:38). Después de la inmersión la persona sale del agua para “andar en novedad de vida”
por fe en Cristo (Rom. 6:4, 11). El bautismo, por lo tanto, es una “señal de nuestro discipulado”, y un
reconocimiento público de nuestra relación con Cristo. El bautismo es en la Era Cristiana lo que era la
circuncisión en los tiempos de Abrahán (Rom. 2:28, 29; Gál. 5:6). Es un símbolo de nuestra relación de
pacto por el cual llegamos a ser herederos de las promesas (Gál 3:27-29).
18. ¿Qué otra ceremonia instituyó Cristo en la iglesia cristiana para simbolizar su muerte?
Respuesta: La santa cena proclama “la ________ del Señor hasta que venga” (Mat. 26:26-28; 1
Cor. 11:24-29).
La cena del Señor tomó el lugar de la pascua. Ésta señalaba a Cristo; la santa cena mira hacia atrás, a su
muerte, y hacia adelante a su segunda venida. La cena conmemora la liberación del pecado, la liberación
de la sentencia de muerte (Juan 6:54). Jesús instruyó a sus discípulos a recordar su sangre derramada y su
cuerpo quebrantado hasta se segunda venida (1 Cor. 11:26). El jugo de uva sin fermentar se usa en las
Escrituras como un símbolo apropiado de la sangre (Gén. 49:11; Deut. 32:14). El pan sin levadura señala
a Cristo, el “pan de vida” (Juan 6:48, 51, 58). En otras palabras, debemos concentrar nuestra atención no
sólo en el Cristo crucificado sino en el Cristo viviente y que está por venir. Al celebrar la cena,
reconocemos que las palabras de Cristo son nuestro alimento y nuestra bebida espirituales, que son la
fuente y el sostén sustentador que se obtiene por la fe (Juan 6:63).
19. ¿Qué rito se instituyó en relación con la santa cena?

Respuesta: El rito de humildad, o de lavamiento de los _______ (Juan 13:4-8).
El lavamiento con agua de los pies de los discípulos ocurrió precisamente antes de la santa cena; esta
ceremonia proporciona una excelente oportunidad para cultivar relaciones armoniosas entre los creyentes,
ya que es la ocasión para poner a un lado toda diferencia. Representa lo que Jesús hace por nosotros para
purificarnos (Juan 13:10). Tal como las ceremonias del santuario en las cuales los sacerdotes se lavaban
las manos y los pies, ese acto no purificaba la vida. En cambio, Cristo nos purifica cuando confesamos
nuestros pecados y avanzamos con él en una relación de fe. La purificación mencionada representa la
eliminación del sentimiento de culpa causado por el pecado, y el quebrantamiento del poder del pecado.
El Espíritu Santo fortalece y santifica a la persona que tiene fe en Cristo (1 Cor. 6.9-11; Efe. 5:26; Tito
3:3-5). La participación en la ceremonia del lavado de los pies es una expresión pública de que aceptamos
a Cristo como nuestro Salvador personal. El desea que todos participemos ampliamente del “agua de la
vida” que sólo él puede dar (Juan 4:10; Apoc. 22:17).
La ceremonia del lavamiento de los pies representa también una dedicación al servicio. Cristo demostró
mediante este acto de amor altruista la verdad de la declaración: “Servíos por amor los unos a los otros”
(Gál. 5:13). Este rito significa también que los que participan han renunciado a ocupar el puesto más
elevado. Si se la entiende bien, esta ceremonia implica un compromiso para buscar la unidad en doctrina,
espíritu y de acuerdo con la invitación del Señor que aparece en Juan 17:20 al 23, y que fue pronunciada
después de la santa cena.
20. Cuando los nuevos creyentes entran en una relación de pacto con Jesús en ocasión del bautismo, ¿con
qué promete Cristo bautizarlos también?
Respuesta: Con el Espíritu _______ (Luc. 3:16; Hech. 1:5; 11:16).
El Antiguo Testamento nos dice que cuando los hijos de Israel entraban en una relación de pacto con
Dios, él los rociaba con agua y los ungía con aceite (Eze. 16:8, 9). El aceite es un símbolo del Espíritu
Santo (Zac. 4:2-6, 11, 12). En la dispensación cristiana también se promete el derramamiento del Espíritu
Santo. Pero el Espíritu no viene en su plenitud sobre nadie a menos que la persona haga un profundo
examen de conciencia, que humille su alma delante de Dios, que confiese sus pecados, y que anhele
fervientemente la presencia de Dios por la fe; esa fue la experiencia de los discípulos en los días previos
al pentecostés (Hech. 1). Gracias a la recepción del Espíritu Santo los discípulos recibieron poder para dar
eficaz testimonio en favor de Cristo (Hech. 1:14, 20). Pusieron a un lado todas sus diferencias y sus
deseos de supremacía. Se cumplió la oración de Cristo elevada justo antes de la traición, que sus
discípulos fueran uno así como él y el Padre eran uno (Juan 17:18). Eran uno en afectos, deseos y anhelos
(Hech. 1:14; 2:46; 4:24; 5:12; 8:6; 15:25); el Espíritu Santo los estaba guiando a la unidad que produce la
comprensión de la verdad (Juan 16:13). Las diferencias no duraban mucho mientras procuraban con
oración hacer diligentemente la voluntad del Maestro. Notamos que los primeros discípulos “fueron
reunidos, con sus diferentes defectos, todos con tendencias al mal, heredadas y cultivadas; pero en Cristo
y por su medio habían de habitar en la familia de Dios, aprendiendo a ser uno en fe, doctrina y espíritu.
Iban a tener sus pruebas, sus agravios, sus diferencias de opinión; pero mientras Cristo habitase en el
corazón de ellos, no habría disensión. Su amor los induciría a amarse unos a otros, las lecciones del
Maestro harían armonizar todas las diferencias, poniendo a los discípulos en unidad hasta hacerlos de una
mente y un mismo criterio. Cristo es el gran centro, y ellos se acercarían el uno al otro en la proporción en
que se acercasen al centro” (E.G. de White, El Deseado de todas las gentes, 1955, p. 263). Hoy podemos
tomar nota de las condiciones previas al derramamiento del Espíritu Santo (Hech. 5:32). Busquemos esa
experiencia y oremos fervientemente por ella, de manera que la venida del Señor se apresure (Mal. 4:5,
6).

1. vestiduras
2. animales
3. vida
4. ofrecido una sola vez
5. espíritu quebrantado
6. cordero
7. postes, dintel
8. sin levadura
9. Pasaré
10. sangre
11. fuente
12. manos
13. purificación
14. lavó, ungió
15. más blanco
16. purificado, santa
17. agua
18. muerte
19. pies
20. Santo
23. EL TEMPLO DEL DIOS VIVIENTE
En el jardín del Edén, Dios manifestó su deseo de relacionarse regular e íntimamente con la humanidad.
Por consiguiente, caminó en el jardín con los antepasados de la raza humana al aire del día. El pecado,
lamentablemente, separó de Dios a los antepasados de la especie, pero el Señor no quiso que esta
separación se prolongara por la eternidad. Le anunció en el Edén su propósito a la pareja pecadora, un
plan ideado antes de la creación, que consistía en enviar a Cristo para salvar a la humanidad. Para
comunicarles con claridad este plan, Dios introdujo primero los sacrificios de animales, y después los
servicios del santuario terrenal en el Sinaí. Finalmente, por medio de sus profetas, anunció que el Señor
depondría su gloria, su poder y su eterna seguridad, y vendría como el Hombre-Dios para honrar con su
presencia el templo terrenal.
Cuando Cristo regresó al Cielo para asumir su papel de Sumo Sacerdote en el santuario celestial, todavía
deseaba morar entre los hombres. Jesús prometió enviar el Consolador o Espíritu Santo para que viviera
en cada creyente. Cuando los seguidores de Dios están moldeados y refinados por la presencia del
Espíritu, llegan a ser el templo o morada del Dios viviente. Es este aspecto de la experiencia cristiana lo
que queremos examinar en esta lección.
Cristo, el Templo
• Destacar el hecho de que Jesús era ciertamente Dios cuando vivió entre los hombres.
La palabra “templo” se usa para designar el lugar donde mora Dios. En las Escrituras esta palabra con
frecuencia se aplica a un edificio, pero en esta lección vamos a ver que puede tener otras aplicaciones.
1. ¿Qué dijo Jesús que era su cuerpo?

Respuesta: El ________ en el cual habitaba la plenitud de la Divinidad (Juan 2:19.21; Col. 2:9).
Pablo en Col. 2:9 nos dice claramente: “Porque en él (Cristo) habita corporalmente toda la plenitud de la
divinidad”. El apóstol aquí esta discutiendo con los gnósticos que enseñaban que algunas de las
habilidades de Cristo también se manifestaban en seres creados como los ángeles. Pablo rechazó
categóricamente tales argumentos.
Jesús dijo que él era Dios (Juan 2:19-21). Dijo que el primer propósito del templo era llamar la atención
de la gente hacia Dios; era un recordativo de que el Señor siempre quería morar con los hombres,
comunicarse con ellos y ayudarlos. ¡Pero entonces estaba entre ellos Aquel a quien señalaban el templo y
sus servicios! Descubrimos aquí que Jesús profetizó que se levantaría de entre los muertos al tercer día de
su crucifixión. Notemos cuidadosamente que él dijo que la parte humana de su ser moriría; no la divina.
Dijo: “Yo lo levantaré (este templo, su cuerpo)”. Jesús resucitó por el poder creador inherente en él al
llamado del Padre, y por la vivificación del Espíritu (Juan 10:18; Rom. 6:4; Gál. 1:1; 1 Ped. 3:18). Es
evidente que Dios vivió entre los humanos. Caminó, habló, se relacionó con ellos. Ciertamente Jesús era
Emanuel: “Dios con nosotros” (Mat. 1:23).
En el trato de Dios con los hombres, a Cristo se la ha dado el principal papel, la preeminencia (Col. 1:18).
Las Escrituras nos informan que nuestras vidas están escondidas “con Cristo en Dios” (Col. 3:3). Qué
significa esto y cómo se lleva a cabo lo descubriremos en las siguientes secciones.
El templo del cuerpo

• Introducir el concepto de que nuestros cuerpos son el templo del Espíritu Santo. En otras palabras,
Dios todavía desea morar con la humanidad.
• Indicar cómo debemos tratar nuestros cuerpos de modo que sean una morada adecuada del Espíritu
Santo y así le demos gloria a Dios.
Cuando Jesús murió en el Calvario, el velo del templo se rasgó de alto a abajo , para indicar el fin del
sistema de sacrificios de animales (Mat. 27:51). Cristo es ahora el Sumo Sacerdote en el santuario
celestial. Sin duda con estos pensamientos en mente, el apóstol Pablo introdujo la idea de que Dios
todavía desea morar entre los hombres.
2. ¿De qué manera asombrosa nos desafía hoy el apóstol Pablo?

Respuesta: “¿O ignoráis que vuestro ________ es ________ del Espíritu Santo” (1 Cor. 6:19).
Antes de su partida, Jesús les prometió a sus discípulos que les enviaría el Consolador, es decir, el
Espíritu Santo, el cual “estará en vosotros” (Juan 14:16, 17). Es evidente, por las declaraciones de Pablo,
que los creyentes de Corinto no entendían plenamente el significado de esto, y cómo tratar sus cuerpos
para que fueran morada adecuada del Espíritu Santo.
3. ¿Qué consecuencias tiene para nosotros esta profunda revelación, a saber, que nuestros cuerpos son el
templo de Dios?
Respuesta: ____________ a Dios en vuestro espíritu y vuestro cuerpo (1 Cor. 6:20).
De la mente surgen las decisiones que afectan todos los aspectos de la vida (Prov. 4:23). En vista de esto,
Dios tomará en cuenta hasta los pensamientos cuando haga el balance final de la vida de cada hombre y
cada mujer (Jer. 17:10). Jesús mismo enseñó esta profunda verdad (Mat. 5:28; 15:19), y de esta manera se
refirió a la naturaleza revolucionaria de la conversión. El apóstol Pablo presenta estas mismas ideas en
Rom. 12:2, y consideró que la palabra metamorfousthe, es decir, “transformaos”, correspondía al
concepto adecuado del profundo cambio que necesariamente se debe producir en nuestras vidas. Notemos
estas palabras: “No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento”. Las personas cuya mente ha sido renovada, siempre desearán glorificar a Dios por la
manera como obran.
4. ¿Qué nos dicen las Escrituras acerca del cuidado de la salud mental?
Respuesta: Debemos llenar la mente de cosas que sean puras, ________, justas, _________, de
buen nombre (Fil. 4:8).
Aquí tenemos una lista de los principios que deben guiar todas las actividades relacionadas con la cultura
de la mente. Es necesario meditar en la Palabra de Dios; fortalecerá la mente y avivará la conciencia. Las
avenidas del alma deben ser guardadas con “toda diligencia” porque lo que pensamos regula nuestras
acciones y finalmente nuestro destino (Prov. 4:20-27). Cuán cuidadosos deberíamos ser entonces al
escoger lo que vemos, oímos y leemos. Por cierto el mundo que nos rodea está lleno de violencia, y
muchos se sienten inclinados a alimentarse de lo sensacional, sensual o extraño. En muchas películas y
programas de televisión se exhiben las violaciones a los Diez Mandamientos: se popularizan las mentiras,
los adulterios, los crímenes y la codicia. Los que alimentan su mente de tales cosas ni vivirán eternamente
con Dios (Isa. 33:15, 16).
5. ¿Cómo describe la Biblia a los que no guardan las avenidas del alma?
Respuesta: Dice que están espiritualmente muertos, que están condenados para siempre y que
son “hijos de _____” (Efe. 2:2, 3; 1 Tim. 6:5).
Las Escrituras usan palabras fuertes para describir a los que no consideran que la salud mental sea el
aspecto más importante de la vida. Sólo por la transformación de nuestra mente podemos tener esperanza
de eterna salvación. El apóstol Pablo nos ruega que reconozcamos que Dios quiere que presentemos
nuestros cuerpos “como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios” (Rom. 12:1, 2). Antiguamente, en los
servicios del santuario, los sacrificios que se ofrecían eran “sin defecto”. Hoy Dios espera que nos
entreguemos sin reservas a nosotros mismos para servirlo. Una mente vacía de pensamientos mundanos
debe, sin embrago, estar llena de las cosas de Dios (Luc. 11:24-26).
6. ¿A qué dos aspectos de la conducta se refieren las Escrituras cuando nos dicen que debemos darle
gloria a Dios?
Respuesta:
a) Total abstención de relaciones íntimas fuera del matrimonio y de perversiones sexuales de todo
tipo. Las Escrituras nos intiman: “Huid de la _____________” (1 Cor. 6:18, 19; Rom. 1:26, 29).
b) Elegir cuidadosamente, y de acuerdo con los principios bíblicos, la ________ y la bebida que
ingerimos (1 Cor. 10:31).
Es muy significativo que estos dos ejemplos estén sacados de los Diez Mandamientos, a saber, el sexto y
el séptimo (Exo. 20:13, 14). Le damos gloria a Dios cuando vivimos de acuerdo con los principios de su
Palabra, incluso los Diez Mandamientos. Los que traten de hacerlo por la fe, serán ampliamente
recompensados con la vida eterna (Apoc. 22:14).
7. ¿Qué principios referentes a comer y beber correctamente recomiendan las Escrituras?

Respuesta: Dios honrará a los que eligen o __________ aceptar un régimen alimentario sencillo,
similar al del Edén.
Daniel y sus amigos podrían haber comido las carnes limpias que se les ofrecían, pero no lo hicieron, pues
reconocieron que era su deber preservar sus cuerpos y mentes en el mejor estado de salud posible. Se
dieron cuenta de que hay relación vital entre la salud física y la espiritual. Resistieron la tentación de
satisfacer (adorar, rendirle culto) a las instancias del apetito (Exo. 20:3). Es notable que Dios haya
honrado a Daniel y sus compañeros por su obediencia a los principios de salud entregados a nuestros
primeros padres en el Edén, y elaborados a lo largo de las sucesivas generaciones. En el ejemplo que nos
presenta el libro de Daniel, sólo los que pasaron victoriosamente la prueba del régimen de alimentación
pudieron pasar las pruebas mayores que sobrevinieron. La alimentación original estaba compuesta por
nueces, frutas, granos y verduras (Gén, 1:29; 2:16), La muerte no existía en el universo, de modo que la
carne de animales no era un elemento constitutivo del régimen original. Después del diluvio Dios
permitió el consumo de carne de animales, pero ésta, por instrucción divina, no debía contener sangre, de
modo que los animales se sacrificaban y su carne era sometida a un tratamiento especial para cumplir con
este requisito. Este consejo se repitió en la Era Cristiana (Gén. 9:3, 4; Hech. 15:28, 19). La diferencia
entre animales limpios y no limpios ya se conocía antes del diluvio (Gén. 7:1, 2). Esta diferencia se le
repitió a la nación judía (Lev. 11). Dios ha hecho algunas declaraciones bien incisivas con respecto a los
que hacen caso omiso de esta distinción entre animales limpios e inmundos, y esto hasta el fin del tiempo
(Isa. 65:3-5; 66:15-17). La Biblia registra la longitud de la vida de los patriarcas, y los que vivieron
después del diluvio establecen en este sentido un marcado contraste con los que vivieron antes de esa
calamidad (compare Gén 5 con 11). Esta declinación de la longevidad humana se puede vincular con la
tendencia a comer carne en lugar de adherirse al gran plan original de Dios.
8. ¿Qué clase de conducta nos intima a evitar el Nuevo Testamento?

Respuesta: Las actividades sociales inconvenientes,
relacionadas con la comida y la ________ (1 Cor. 10:5-11).
Los israelitas codiciaron la carne y las sabrosas comidas de Egipto; despreciaron la comida que Dios les
había provisto teniendo en vista su buena salud (Núm. 11:4-6; 21:5). Su comida y su bebida también
estimuló su conducta en otra ocasión, y eso los llevó a la inmoralidad (Exo. 32:6). La Biblia da claros
consejos relativos a la abstinencia de bebidas alcohólicas (Prov. 20:1; 31:4). Sabemos por experiencia que
inducen a adoptar conductas antisociales y anticristianas. El alcohol, y otras drogas también, dañan el
cerebro y otros órganos del cuerpo (S. Bacchiocchi, Wine in the Bible [El vino en la Biblia}, 1989, pp.
286-302; H. Stanton, Record [una revista], 17 de mayo de 1997, pp. 8, 9). Las Escrituras nos aconsejan
que no participemos de ninguna actividad que tienda a acortar nuestras expectativas de vida (Exo. 20:13).
Se debe evitar toda actividad relacionada con la comida, la bebida o de cualquier otra naturaleza, que
interfiera con nuestra claridad mental y disminuyan la influencia del mensaje de la Palabra de Dios (Fil.
4:8). No debemos darle la menor ventaja al adversario de nuestras almas.
9. ¿Forma parte del evangelio eterno la idea de la vida sana?

Respuesta: ¡Claro que sí! Se nos pide que demos ________ a Dios (Apoc. 14:7; 1 Cor. 10:31).
Estos textos nos indican que podemos darle gloria a Dios al seguir los principios de salud recomendados
por la Biblia. Notamos que durante la experiencia de Jesús mientras estuvo en la tierra, estableció un
íntima conexión entre la salud física y la espiritual ( Juan 5:8, 9, 14). Nuestros hábitos relativos a la
comida y le bebida y otras actividades, incluso las terapias que aplicamos cuando nos enfermamos (las de
la Nueva Era están relacionadas con prácticas ocultistas y paganas - M. Vásquez, The Mainstreaming of
the New Age [Las derivaciones de la Nueva Era], 1998, pp. 183-188) se deben aplicar con pleno
conocimiento de que nuestros cuerpos son templos del Espíritu Santo. En Apoc. 14:7 nuestra atención va
de la creación a los Diez Mandamientos. En estos días finales de la historia del mundo Dios desea que
recordemos los principios de su reino (tal como aparecen en el relato de la creación), mientras nos
preparamos para encontrarnos con el Rey en su gloria. Desea bendecirnos de manera que nosotros seamos
una bendición para el mundo (Exo. 15:29). También quiere que seamos súbditos de su reino en la tierra
nueva. Al obedecer sus principios, por la fe, quiere prepararnos para que seamos herederos del mundo que
está planificando.
Unidos al Señor
• Introducir la idea de que el Espíritu Santo ejerce influencia sobre nosotros para que hagamos
decisiones moralmente correctas.
• Ampliar la idea de la experiencia del nuevo nacimiento o conversión que se produce cuando la
persona responde positiva y constantemente a los llamados del Espíritu Santo.
10. ¿Qué medio ha puesto Dios a nuestra disposición a fin de que seamos transformados en moradas
adecuadas para que él viva en ellas?
Respuesta: El Espíritu _______ (1 Cor. 6:17, 19).
El Espíritu Santo invita a cada ser humano para que acepte a Cristo (Juan 1:9). Si respondemos
positivamente a la influencia del Espíritu Santo que nos insta a hacer lo recto y a aceptar el amor de Dios
revelado en la muerte de Cristo en la cruz, nuestra fe aumentará. Se nos da el Espíritu Santo a fin de que
nos guíe al arrepentimiento, y a un conocimiento más profundo y completo de la voluntad de Dios. Si no
resistimos, seremos llevados al punto de confesar nuestros pecados y a procurar por fe la ayuda de Cristo.
11. Si en respuesta a las instancias del Espíritu de Dios nos entregamos a Dios sin reservas, ¿cuál será
nuestra experiencia?
Respuesta: El nuevo nacimiento; nuestra vida estará “___________ con Cristo en Dios” (Juan
3:3; Col. 3:3).
Las Escrituras usan muchos términos para referirse a la experiencia de la conversión. El apóstol Pablo usa
una cantidad de palabras expresivas para describir la experiencia del nuevo nacimiento. Veamos algunas
de ellas: “Nacido según el Espíritu” (Gál. 4:29), “revestido del nuevo (hombre)” (Col. 3:10; Efe. 4:24),
“vuestra vida está escondida con Cristo en Dios” (Col. 3:3), una “nueva creación” (2 Cor. 5:17; Gál.
6:15). Estas expresiones no sólo dan la idea de un cambio completo en la vida, sino de una experiencia
permanente. Nuestra vida tiene que estar escondida en Cristo. El Antiguo Testamento se refiere a esta
experiencia permanente cuando dice “andar con Dios” (Gén. 5:22, 24). Para la gente que vivió antes de
Cristo, Dios le ofreció darle “un corazón de carne” en lugar del de “piedra” que tenían (Eze. 11:19;
36:26). Dios prometió “escribir” sus leyes en sus “corazones” (Jer. 31:33); nos promete lo mismo a
nosotros hoy (Heb. 8:10; 10:16). Se ve, entonces, que el evangelio se ha predicado en su plenitud desde la
entrada del pecado.
12. ¿Qué pasos dice la Escritura que se deben dar en la conversión?

Respuesta:
a) Arrepentimiento (Hech. 3:19; Mat. 6:12, 14).
El arrepentimiento implica dolor por el pecado y apartarse de él. Cuando cedemos a la influencia del
Espíritu Santo y le pedimos a Dios que nos dé arrepentimiento, nuestra conciencia se sensibiliza. La
convicción le da al pecador una creciente comprensión de la justicia y el amor de Dios, y al compararlos
con su pobre y miserable condición aborrece sus malos caminos. El pecador anhela verse limpio, acepta el
amor ofrecido y está de nuevo en armonía con Dios. Debemos ir a Cristo tales como estamos (Jer. 13:23).
b) Confesión (Sal. 32:5).
La conciencia de nuestra condición pecaminosa y de nuestra necesidad de perdón, no lleva a buscarlo en

Dios. El verdadero arrepentimiento siempre precede a la confesión (Sal. 34:18). Esa confesión siempre es
específica, reconoce exactamente los pecados cometidos y, además, el pecador no trata de buscar excusas
(Lev. 5:5; 1 Sam. 12:19; 1 Tim. 1:15; Mat. 6:14). Si se ha perjudicado a alguien, primero se repara eso, en
la medida de lo posible, antes de que el pecador venga a Dios en procura de perdón (Eze. 33:15; Luc.
19:8, 9). Si confesamos nuestros pecados en esas condiciones, Jesús es “fiel y justo para perdonar
nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” (1 Juan 1:9).
c) Entrega (Luc. 14:33).
Cuando acudimos a Dios, desearemos abandonar todo lo que nos separa de él. Desearemos consagrarnos
plena y diariamente al Señor, pidiéndole que nos guíe siempre. También pondremos toda la fuerza de
nuestra voluntad del lado de Cristo. Con alegría le dedicaremos nuestra voluntad todos los días (Rom.
2:13).
d) Creer, ejercer fe (Mar. 11:24).
Dios nos invita a que ejerzamos fe en que él ha aceptado nuestra sincera confesión, nos ayudará a andar
en sus caminos y nos fortalecerá para que podamos vencer (1 Cor. 10:13; Heb. 11:6). Al mantener esta
relación día tras día, nuestra fe crecerá y nuestra relación se fortalecerá (Col. 2:6; Efe. 4:15). Los frutos de
esta relación de fe se verán en la vida. Se verá al amor en acción y la obediencia surgirá de este principio
(Sal. 40:8; 1 Juan 4:11; 5:3). Anhelaremos ser obedientes a las leyes de Dios referentes a la salud, como
así también a otros aspectos de su voluntad revelada. Sólo si estamos unidos al Señor, lo podemos
glorificar.
13. ¿Qué experiencia se le pide a los creyentes que pidan cada día?
Respuesta: Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, nos amonesta a morir ______ _____ (1 Cor.
15:31).
El apóstol está hablando aquí de la muerte al yo, de ganar victorias cada día por la fe, de tener nuevas
experiencias cada día. La Hna. White lo ha dicho de esta manera: “La santificación genuina. . . no es nada
menos que una muerte diaria al yo y una conformidad diaria con la voluntad de Dios. La santificación de
Pablo era un conflicto diario con el yo. . . Su voluntad y sus deseos entraban cada día en conflicto con el
deber y la voluntad de Dios. En el plan de no seguir la inclinación, hizo la voluntad de Dios, por más que
fuera de naturaleza desagradable e implicara una crucifixión” (E. G. de White, This Day with God [Este
día con Dios], 1979, p. 251). Al responder de esta manera a las instancias del Espíritu Santo, podemos
decir que experimentamos cada día una conversión. (Véase E.G. de White, El camino a Cristo, para un
tratamiento completo del tema).
El pacto eterno de Dios

• Confirmar el hecho de que siempre ha habido y siempre habrá un solo plan de salvación.
14. Si nos unimos al Señor y andamos con él, ¿qué promete hacer por nosotros?
Respuesta: Salvarnos eternamente: de ese modo no _____________ (Juan 3:16).
El plan de Dios para rescatar a la humanidad se enunció en el Edén. Este plan implicaba arrepentimiento,
confesión, consagración y fe en respuesta al amor de Dios. A su vez Dios le ofrece al creyente perdón y
poder divino, un hecho que se ve en el desarrollo de una vida llena de los justos rasgos de Jesucristo. Esas
personas obedecen los Diez Mandamientos como consecuencia de esta relación de fe (Rom. 3:31).
Cuando el Salvador venga en gloria, los que hayan entrado en esta relación de pacto, por la fe, serán
salvos.
15. ¿Cuándo fue confirmado este nuevo pacto eterno?

Respuesta: Este pacto fue confirmado en la cruz con la _______ del Señor (Heb. 13:20, 21; 9:16,
17).
Dios hizo un pacto con los hijos de Israel en el Monte Sinaí, que fue confirmado con la sangre de
animales (que anunciaban el sacrificio de Cristo; Heb. 9:18:22). El pueblo prometio cumplir ese pacto
(Exo. 24:3). Desgraciadamente, como nación, los israelitas no alcanzaron a comprender los beneficios del
plan de salvación, porque por lo general no ejercieron fe (Heb. 4:2; Gál. 3:11). Esta promesa del pueblo
de cumplir la voluntad de Dios, de obedecer sus mandamientos con su propia fuerza, recibió en las
Escrituras el nombre de “antiguo pacto” (Gál. 4:21-23). Ciertamente es posible que hoy haya creyentes
que estén tratando de relacionarse con el plan de salvación de Dios de esta misma manera.
16. ¿Cuáles dicen las Escrituras que son las tablas del pacto?
Respuesta: Los ______ Mandamientos (Deut. 4:13).
Las tablas del testamento estaban en el arca del pacto (Deut. 9:9, 10; Núm. 13:33; Apoc. 11:19). Después
que el pacto fue ratificado y confirmado por la sangre de Cristo (un viernes), nada se podía cambiar (Gál.
3:15). (Esto significa que la observancia del domingo no forma parte del nuevo pacto; todos los
observadores del domingo creen que están celebrando la resurrección como parte del nuevo pacto).
Ciertamente en el Nuevo Testamento se certifica que la Ley de Dios es perfecta (Rom. 7:12). Y por lo
tanto no necesita cambio alguno. Por cierto no hay noticias en el sentido de que Jesús haya cambiado su
Ley antes de su muerte; por el contrario, la declaró inmutable (Mat.5:17-19). Nuestra relación con esa
Ley es vital. Por medio de la fe “confirmamos la Ley” (Rom. 3:31). Gracias a Dios que las condiciones de
la salvación son lo que siempre fueron: justicia por la fe, evidente gracias a la obediencia por fe (Apoc.
12:17; 14:12; 1 Juan 5:4).
Para que seamos uno

• Poner énfasis sobre el hecho de que nuestra diaria aceptación de Cristo produce un espíritu de unidad
en la comunidad cristiana.
17. Jesús oró por sus discípulos, por los que habían entrado en una relación de pacto con Dios. ¿En qué
consistía su pedido?
Respueta: Que sus discípulos se mantuvieran unidos, que fueran _____ (Juan 17:11, 21).
Cuando llegó el día de pentecostés, leemos que los discípulos estaban juntos (Hech. 2:1; la palabra griega
es homou). Esta idea de “juntos”, tal como está expresada aquí, tiene un sentido más amplio que el que
normalmente le atribuiríamos a esta palabra. Las “mentes, los afectos, los deseos, estaban concentrados en
un solo objeto, cada cual tenía el mismo objetivo en vista; y al tener un solo deseo, tenían una sola
oración, y cada corazón la elevaba a Dios. Allí no había nadie sin interés (en lo que estaba sucediendo),
no había nadie sin preocupación, nadie era tibio; todos eran fervientes; y el Espíritu de Dios descendió
para salir al encuentro de su fe y su oración unidas” (A. Clarke, Op. Cit., t. 5, la cursiva está en el
original, acerca de Hech. 2:1; comentario acerca de la palabra homothumadon). Esta palabra aparece en
unos pocos manuscritos antiguos en Hech. 2:1; pero aparece en otros lugares del libros de los Hechos (p.
ej.: 1:14; 2:36; 4:24; 5:12; 8:6; 15:25) lo que da lugar a este significado más amplio de “juntos” que
estamos sugiriendo aquí. Los pioneros de la Iglesia Adventista estaban preocupados de crear una
condición similar entre los creyentes, de modo que se pudiera responder positivamente la oración de
Cristo de que fueran “uno así como él y el Padre eran uno”. Este era su testimonio: “Nos reuníamos
(estábamos juntos) con el alma abrumada, orando para ser uno en fe y doctrina; porque sabíamos que
Cristo no está dividido” (E.G. de White, Advent Review and Sabbath Herald, 1892, t. 69, No. 30, p. 585;
ref. Juan 17:21; 1 Cor. 1:3). Esta misma experiencia puede ser nuestra hoy si nos acercamos
fervientemente a Dios en oración y en el estudio de la Biblia, como lo hicieron los primeros discípulos.
18. ¿Qué se necesita en la vida de cada discípulo antes de lograr la unidad?

Respuesta: La santificación debe comenzar, y cada cual debe ________ continuamente en su
experiencia con Cristo (Juan 17:17, 19; Efe. 4:15).
Dios desea santificarnos, es decir, que seamos santos. Promete hacerlo si dependemos de él diariamente
por la fe (2 Ped. 1:3, 4). Cuando vamos al Señor con fe para pedirle el perdón de nuestros pecados, nos
perdona, nos justifica inmediatamente (nos considera como si nunca hubiéramos pecado: se cancela el
sentimiento de culpa que produce el pecado). Al continuar esta experiencia de fe, al pedir poder para
vencer el pecado, se nos santifica. Nuestra justificación permanece sólo si entramos en esta permanente
experiencia de santificación, porque la misma fe que justifica también santifica. Una fe que no cumpla
estos dos aspectos de la salvación, librando a la vez de la pena y del poder del pecado, no es genuina. El
Señor nos exhorta a leer la Palabra inspirada, porque ésta es la avenida que él ha escogido para revelarnos
la verdad, y para desarrollar nuestra fe y nuestra confianza (Rom. 10:17). Cuando escudriñamos las
Escrituras, nos revelan a Jesucristo y vemos la belleza de su carácter y el amor de Dios revelado en él
(Juan 5:39; 14:6). El Espíritu Santo aprovecha estas oportunidades para impresionar la verdad en
nosotros, para convencernos de pecado, para llevarnos por sendas rectas de pensamiento (Juan 16:8, 13).
La verdad tal cual es en Jesús es el medio que Dios emplea para santificarnos. “No hay santificación
aparte de la verdad: la Palabra” (E.G. de White, Fundamentals of Christian Education [Los fundamentos
de la educación cristiana], 1923, p. 432). Sólo podremos estar unidos si somos uno con Dios, si
caminamos cada día con él, si pasamos por la experiencia de la diaria conversión.
Jesús nos asegura en las Escrituras que “el que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es
de Dios o si yo hablo por mi propia cuenta” (Juan 7:17). Junto a esta promesa está la declaración que
dice: “Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de
vuestra vocación; un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre de todos, el cual es
sobre todos y por todos y en todos” (Efe. 4:4-6). Por lo tanto, evidentemente es imposible estar unidos al
Señor y no estar unidos con nuestros hermanos por creencias comunes en las doctrinas bíblicas más
importantes. La división y la confusión doctrinal son señales de la actividad del diablo. Las Escrituras no
hablan de unidad en la diversidad de creencias; habla de una unidad fundada sobre verdades
inconmovibles (Mat. 12:25; 1 Cor. 1:13; Efe. 4:13; 6:14). La unidad en la diversidad es el grito de guerra
del movimiento de la Nueva Era. Un escritor lo dijo así: “El ideal de la Nueva Era parecía un concepto
hermoso: tener unidad en la diversidad a fin de revelar la plenitud de Dios y producir una sociedad de
amante comprensión y mutua interdependencia. Sería la Nueva Era del amor, de la luz, de la alegría: el
reino de los cielos en la tierra” (W. Baron, Deceived by the New Age [Engañado por la Nueva Era], 1990,
p. 105).
19. ¿Qué hermosos resultados se producen cuando avanzamos como “prisioneros del Señor”?
Respuesta: Humildad, paciencia, amor, paz, fe, esperanza y _______ de creencias (Efe. 4:1-6;
13, 14).
Todas estas cualidades y todos los dones concedidos al cristiano vienen como consecuencia del hecho de
que el Espíritu toma posesión de la vida. Cuando nos entreguemos de este modo a Dios, nuestra mente se
transformará (Rom. 6:16; 12:2). Seremos obedientes, por fe, a los principios del gobierno de Dios y a las
leyes de la salud del cuerpo y la mente. ¡Así podremos darle gloria a Dios!

1. templo
2. cuerpo, templo
3. Glorificad
4. nobles, amables
5. ira
6. fornicación, comida
7. intentan
8. bebida
9. gloria
10. Santo
11. escondida
12. ---
13. cada día
14. pereceremos
15. sangre
16. Diez
17. uno
18. crecer
19. unidad
24. EL SEÑOR DIOS TODOPODEROSO ES EL TEMPLO
La historia de la redención que nos cuenta la Biblia es la historia del amor de Dios por hombres y mujeres
caídos. Sus planes para relacionarse y comunicarse con sus criaturas, creadas a su imagen, se malograron
como consecuencia de los engaños de Satanás. Pero Dios en su gran amor se decidió a salvar a los
pecadores (un plan diseñado en el cielo antes de la entrada del pecado). Para transmitirle más eficazmente
a la humanidad caída la naturaleza de su plan, Dios inició el sistema de culto del santuario. Por medio de
sus símbolos y sus ceremonias se enseñaban importantes lecciones acerca del plan de salvación de Dios.
El Señor también enseñó, por medio del santuario terrenal, importantes lecciones acerca del ministerio de
Cristo en el santuario celestial, que culminará en el rescate de la humanidad de la presencia del pecado, y
con la destrucción de Satanás.
En el santuario de la tierra la presencia de Dios era manifiesta. De esa manera comunicaba a los
adoradores el concepto de que él quería estar siempre junto a ellos, y transformar sus vidas por su
presencia. En realidad, quería morar en ellos por medio del Espíritu Santo. Esto sólo se podría lograr si
mantenían comunión con él por la fe. En esta lección estudiaremos lo que las Escrituras nos dicen acerca
de la relación de Cristo con los redimidos en el Cielo. Descubriremos como resultado de nuestra
investigación que hay muchos recordativos del santuario del Cielo. Esto nos lleva a la gran importancia
que tienen para nosotros hoy las verdades que enseña.
La Nueva Jerusalén
• Recordar que en la tierra nueva la actividad se concentrará en la Nueva Jerusalén.
1. ¿Qué ciudad será la capital de la tierra nueva?

Respuesta: La _______ Jerusalén (Apoc. 3:12; 21:1, 2).
En la tierra nueva la capital será la Nueva Jerusalén que desciende del Cielo. Es una magnífica ciudad
amurallada que ocupa una superficie de 365.000 kilómetros cuadrados (Apoc. 21:10-27).
2. ¿Dónde se asentará esta ciudad?

Respuesta: En el lugar del _______ de los ________, el mismo lugar desde donde nuestro Señor
ascendió a los cielos (Zac. 14:4, 5, 9; Hech. 1:9-12).
El día cuando el “Señor sea Rey sobre toda la tierra” no es otro que el momento cuando desciende la
Nueva Jerusalén. En ese momento el Monte de los Olivos, el lugar de los sufrimientos del Señor en favor
de la humanidad, será la escena de su triunfo eterno (Luc. 22:39-48). El Señor descenderá con la Santa
Ciudad y junto con sus santos. Esta es la tercera vez que vendrá a la tierra. Poco después los impíos
muertos resucitarán y lanzarán su asalto final a la ciudad. Sus esfuerzos quedarán anulados y Dios
pronunciará sentencia contra ellos. Toda rodilla se doblará entonces reconociendo la justicia de Dios. Los
impíos, con su jefe Satanás, serán destruidos para siempre, y todo vestigio de pecado desaparecerá de la
tierra consumido por el fuego. (Apoc. 20:7-10; Fil. 2:9-11; 2 Ped. 3:10).
3. ¿Qué otro nombre se le da a la Nueva Jerusalén en las Escrituras?

Respuesta: La ________ del Cordero (Apoc. 19:7; 21:2, 9,10).
El Cordero recibirá su reino (la Nueva Jerusalén) después que termine su ministerio sumo sacerdotal. Se
lo corona Rey justo antes de que las plagas caigan sobre los impíos habitantes de esta tierra. Eso ocurrirá
justo antes de la terminación del tiempo de prueba (Apoc. 15:8; 16:1; 17:14). Los santos serán los
invitados a la fiesta de bodas. (Apoc. 19:9).
El templo eterno
• Descubrir que en la Nueva Jerusalén no habrá templo porque Dios morará en ella.
4. ¿Habrá templo o santuario en la Nueva Jerusalén?

Respuesta: Juan nos dice: “En ella ____ vi templo” (Apoc. 21:22).
Cuando juan vio la Nueva Jerusalén en toda su gloria, no había “templo” en ella. Ocurre que en ese
momento de la historia del universo no hay necesidad de santuario, ni celestial ni terrenal, porque ya
nadie pecará más (Neh. 1:9; Heb. 9:28). El plan de salvación habrá terminado. La utilidad del santuario
terrenal terminó cuando Cristo completó su sacrificio. El tipo se había encontrado con el antitipo.
Entonces Cristo comenzó su ministerio en el santuario celestial. El escrutinio de los registros de las vidas
de los justos es la última etapa del ministerio sumo sacerdotal en el santuario celestial. Esa obra se
terminará antes del regreso de Cristo; los santos harán una obra similar durante los mil años que pasarán
en el Cielo.
5. ¿Quién ocupará el lugar del templo en la Nueva Jerusalén?

Respuesta: “El Señor Dios ______________ y el _________” (Apoc. 21:22).
El Padre y el Hijo del hombre serán el templo de la Nueva Jerusalén. El pecado ya no separará al hombre
de Dios. Todo vestigio de pecado habrá sido eliminado del universo. Estará restaurada la comunión con
Dios planificada en el principio (Exo. 25:8). Ciertamente Dios morará con los hombres en el sentido más
amplio de la expresión. Este deseo de morar con su pueblo es uno de los pensamientos centrales
enseñados por la doctrina del santuario. Las Escrituras nos dicen: “Él morará con ellos (la humaidad),
ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos como su Dios” (Apoc. 21:3).
Recuerdos del santuario

• Determinar qué vínculos existen entre el santuario terrenal y algunas de las principales actividades,
relaciones y aspectos planificados para la Nueva Jerusalén.
6. El atrio rodeaba el santuario terrenal. Ahí se ofrecían los sacrificios por el pecado. ¿Qué recuerdo habrá
en la tierra nueva del infinito sacrificio hecho por Cristo en favor de la humanidad?
Respuesta: El Cordero de Dios llevará en la tierra nueva las ________ de la crucifixión (Apoc.
21:23; Juan 20:27-29).
Es maravilloso pensar que Cristo asumió la humanidad para siempre. Se lo seguirá llamando “el
Cordero”. Su cuerpo glorificado llevará por toda la eternidad las marcas del cruel sufrimiento de la
crucifixión, como un recuerdo vivo del sacrificio que Dios hizo en favor de los seres humanos. ¡Qué amor
se manifiesta en este acto! Juan el revelador describe a Cristo de pie en medio de lo siete candeleros (lo
que es un símbolo de su conducción de la iglesia cristiana a través de los diversos períodos de la historia
hasta el fin del tiempo) como el “Hijo del hombre” (Apoc. 1:13). También regresará como el “Hijo del
hombre” en las nubes de gloria para recompensar a los justos (Apoc. 14:14).
7. ¿Qué recuerdos habrá del ministerio de Cristo en el lugar santo?

Respuesta:
a) La ciudad santa no tendrá necesidad de _____ porque Dios estará allí y la llenará con su
________ (Apoc. 21:23; 22:5).
En el santuario terrenal el candelabro de oro estaba continuamente dando su luz. Esa luz representaba a
Cristo, la luz del mundo (Juan 8:12). Entonces Cristo morará con su pueblo y será una constante fuente de
luz.
b) Todas las naciones caminarán a la luz del _________; estarán en su presencia (Apoc. 21:23,
14).
En el santuario terrenal el incienso ardía continuamente en el lugar santo, y representaba la dulce

presencia de Jesús. En el Cielo Jesús se relacionará personalmente con su pueblo. Los que salgan
victoriosos en el gran tiempo de angustia, que será la culminación de la experiencia de los fieles (Dan.
12:1), constituirán los 144.000 que seguirán al Cordero. Gozarán de una relación especial con él porque
siempre estarán en su presencia para servirlo (Apoc. 14:4; 7:14, 15). La palabra “templo” que aparece en
Apoc. 7:15, se refiere al lugar que visitarán los 144.000, y puede ser una referencia a “un templo
glorioso” fuera de la Nueva Jerusalén, ubicado en el Monte de Sión. En este lugar sólo los 144.000
podrán entrar (E.G. de White, Early Writings [Primeros escritos], 1945, p. 19). Este templo posiblemente
contendrá numerosos recordativos tanto del santuario terrenal como del celestial.
c) El Cordero de Dios seguirá actuando como la Fuente de la vida expresada en términos como el
“pan de vida” y el “Sol de __________” (Mat. 4:1, 2; Juan 6:47, 48).
En el santuario terrenal, Cristo era la Fuente de la vida (lev. 24:5-9; Juan 6:48), la sabiduría y la
instrucción (Lev. 24:4; Juan 8:14). El texto citado del evangelio de Juan nos informa que la vida eterna en
Cristo y el “pan de vida”, están inseparablemente unidos. Malaquías, en el Antiguo Testamento, asemeja
a Cristo con el “Sol de justicia” y les asegura a los redimidos que “saldréis y saltaréis como becerros de la
manada”. Estos textos nos indican que la educación de los justos proseguirá durante toda la eternidad.
Dios es la Fuente de la sabiduría y el conocimiento (Job 36:5). Los salvados aprenderán de la Fuente de la
sabiduría: Jesucristo. Esa educación empieza ahora al experimentar la salvación del Señor. Como lo dijo
el salmista: “Tú amas la verdad en lo íntimo y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría” (Sal.
51:6).
8. ¿ué recordativos habrá en el Cielo de la fase final del ministerio de Cristo en el santuario celestial?
Respuesta: Una multitud de santos proclamará en el Cielo “La ___________ pertenece a nuestro
Dios” (Apoc. 7:9, 10).
El ministerio final de Cristo en el santuario celestial representa la última etapa (la judicial) de la
expiación, en la cual las justas demandas de la Ley aparecen plenamente satisfechas con la muerte (la
misericordia) de Cristo (Sal. 85:9, 10). Jesús ha hecho una expiación final por todos los que se pueden
beneficiar con su ministerio por los pecados de ignorancia que pueden haber cometido (Heb. 9:7). La
maldición (el pecado) y su originador han sido eliminados definitivamente (Apoc. 20:10; 22:3). Los que
se han escondido en Cristo por la fe serán considerados para siempre hijos de Dios (Apoc. 22:11, 14). Los
trofeos de la gracia en el Cielo constituyen un poderoso recordativo del ministerio de Cristo en el lugar
santísimo.
9. ¿Qué símbolo del poder creador y sustentador de Dios se encuentra en la Nueva Jerusalén, que nos
recuerda el santuario terrenal?
Respuesta: El _______ de la vida (Apoc. 22:2).
En el santuario terrenal el arca del pacto contenía una vasija con maná y la vara de Aarón que reverdeció
(Heb. 9:4). Fueron símbolos en su momento del poder creador y sustentador de Dios. La Palabra de Dios,
la Biblia, también es el “árbol de la vida” para nosotros en este mundo (Comentario bíblico adventista,
1957, t. 7, p. 989, comentarios de E.G. de White). Jesús nos recuerda que al estudiar la Palabra nos
ponemos en contacto con él, la Fuente de la vida (Juan 5:39; 6:63). En la tierra nueva el árbol de la vida
estará de nuevo. Estaba en el jardín del Edén (Gén. 2:9). En las Escrituras se menciona un solo árbol de la
vida. Todas las referencias a dicho árbol aparecen con el artículo “el”, lo que indica que es el mismo que
se encontraba en el Edén. Sus hojas son “para la sanidad (servicio, alimento, cuidado) de las naciones”
(Apoc. 22:2). El árbol de la vida señala a Cristo, la Fuente de la vida eterna; sólo Dios tiene inmortalidad
y la concede como un don a los obedientes en ocasión de su venida (1 Cor. 15:51-54).
10. ¿Qué recordativo tenderemos en la Nueva Jerusalén de la naturaleza sempiterna de los Diez
Mandamientos dados en el Sinaí y que se guardaban en el santuario terrenal?
Respuesta: El amor en acción es el gran principio por medio del cual será gobernada la tierra
nueva. El más controvertido de los Diez Mandamientos, el cuarto, referente al ________, será
honrado en la tierra nueva (Isa. 65:25; 66:22, 23; Apoc. 22:14).
El gran conflicto entre Cristo y Satanás, que comenzó en el Cielo, gira en torno de la Ley de Dios;
contiene los principios básicos del reino de los cielos. Dios es amor (1 Juan 4:8) y, siendo que Dios
morará con su pueblo en la tierra nueva, todos los que se encuentren allí acatarán esos principios. En esa
hermosa tierra el pecado no se volverá a levantar (Nah. 1:9). Se deduce que los principios de la Ley,
implícitos en el concepto del amor de Dios a la humanidad, se observarán en el Cielo, porque Dios no
cambia (Mal. 3:6). El sábado, que en esta tierra es el más controvertido de los Diez Mandamientos, será
observado por toda la hueste de los redimidos.
Los que tengan el privilegio de entrar por las puertas de perla de la ciudad, habrán sido obedientes
voluntarios de los mandamientos de Dios aquí en esta tierra. Los que se encuentren fuera de los muros se
habrán deleitado en sus propios caminos (Apoc. 22:14, 15). Los muros, en cierto sentido, representan la
Ley de Dios, porque la obediencia asegurará la libertad dentro de los muros de la ciudad (Sant. 1:25;
2:10-12). Se entra en la ciudad por la fe en la Perla de gran precio, Jesucristo (Mat. 13:45, 46; Juan 10:7,
9).
11. Al considerar las medidas de la Nueva Jerusalén, ¿qué recuerdo del santuario terrenal encontramos en
ellas?
Respuesta: La ciudad esta hecha de tal manera que su largo, su ancho y su alto son _________
(Apoc. 22:16).
El lugar santísimo del santuario terrenal también era un cubo perfecto: el largo, el ancho y el alto eran
iguales (1 Rey. 6:20). En el lugar santísimo la presencia de Dios se manifestaba sobre el arca del pacto.
En la Nueva Jerusalén también está presente Dios; no habrá muro de separación entre él y los redimidos.
Había ángeles bordados en las cortinas y los velos que colgaban de los muros del santuario terrenal. Los
redimidos andarán por las calles de oro de la santa ciudad en compañía de los ángeles.
12. ¿Qué otros recuerdos habrá en el Cielo de la eterna naturaleza de las verdades reveladas en el
santuario terrenal?
Respuesta: Junto al trono de Dios hay cuatro seres vivientes y ______________ ancianos (Apoc.
4:4, 6).
La presencia de Dios se asoció con frecuencia con el antiguo santuario construido por Moisés en el
desierto. Alrededor del santuario estaba el campamento de los israelitas organizado bajo cuatro
estandartes erguidos sobre los cuatro puntos cardinales (Judá, Rubén, Efraín y Dan - Núm. 2:2, 3, 10, 18,
25). Esos cuatro estandartes tenían la cabeza de un león, de un hombre, de un buey y de un águila (Eze.
1:10). Los seres vivientes del Cielo parece que son querubines (Eze. 10: 14, 15, 20).
Los 24 ancianos nos recuerdan las órdenes de los sacerdotes apartados en tiempos del Antiguo
Testamento para servir en el santuario (1 Crón. 24:4, 5; 2 Crón. 31:2). Los ancianos del cielo son
aparentemente “redimidos” de la tierra, a quienes se ha confiado funciones especiales allí (Apoc. 5:8, 9,
10). Esta gente especial puede ser parte de los trofeos liberados de sus tumbas cuando Jesús resucitó de
los muertos. Ellos después dieron testimonio de su resurrección y fueron llevados al Cielo (Mat. 27:51-
53; Efe. 4:8). Moisés, Elías y Enoc pueden encontrarse entre ellos (Mat. 17:4). Éstos y otros recuerdos del
santuario terrenal que se encontrarán en el Cielo impresionan nuestras mentes finitas con la inmensa
importancia de las verdades del santuario en esta vida presente.
Un servicio conmemorativo en la tierra nueva

• Recordar que algunos de los servicios instituidos antiguamente por Cristo con respecto al santuario
terrenal y más tarde en la iglesia cristiana, continuarán, tal vez modificados, en la tierra nueva.
13. ¿Qué servicio conmemorativo tendrá lugar en el cielo para recordar el sacrificio de Cristo en la tierra?
Respuesta: Con respecto a la comunión Jesús dijo: “Os digo que desde ahora no beberé más de
este fruto de la vid _______ aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el _______ de mi
Padre” (Mat. 26:29; Luc. 22:16, 18).
El servicio de comunión instituido por Cristo, y que ha seguido practicándose en la iglesia cristiana hasta
ahora, mira hacia atrás al sacrificio de Cristo. También mira hacia adelante al triunfo final de Dios. Jesús
les dijo a sus discípulos: “No beberé más del fruto de la vid hasta que lo beba nuevo con vosotros en el
reino de mi Padre”. Este servicio nos recuerda el sacrificio que hizo Cristo por cada uno de nosotros
personalmente. Por lo tanto, es un momento cuando nos podemos regocijar en su salvación.
14. ¿Qué servicio se llevará a cabo una vez por mes en la tierra nueva?
Respuesta: Todos los salvados “vendrán a ________” (Isa. 66:23).
Las Escrituras nos aseguran que todos los redimidos se reunirán una vez al mes para adorar de manera
especial. Podríamos averiguar si hubo en la antigüedad un servicio mensual que nos dé alguna vislumbre
acerca de la naturaleza de este servicio en el cual esperamos participar. En los tiempos del Antiguo
Testamento los israelitas celebraban festividades especiales el primer día de cada mes. Era un “día de
alegría” anunciado por el sonido de dos trompetas de plata (Núm. 10:2, 10). Era un día de comidas
festivas, para visitar a los profetas (1 Sam. 20:5; 2 Rey. 4:23), un día para dejar a un lado los trabajos
comunes (Amós 8:5), un momento de cultos especiales (Núm. 28:11-14). Las ofrendas que se le
presentaban al Señor ese día eran de grato olor. Es instructivo investigar el significado espiritual de estas
ofrendas.
a) El holocausto que se ofrecía representaba la consagración a Dios sin reservas del adorador.
Esta gran verdad se enseñaba mediante la práctica de quemar por completo en el altar al animal,
cuidadosamente lavado y después de extraerle todas las vísceras. Esta modalidad también se
aplicó cuando se consagró a Aarón y sus hijos y cuando alguien tomaba el voto de nazareo (Exo.
29:17, 18; Núm. 6:14). En primer lugar esta ofrenda representaba el sacrificio perfecto ofrecido
por Cristo; mientras el pueblo ofrecía el holocausto y participaba de esta fiesta, manifestaba su
aceptación completa y sin reservas, por la fe, de los méritos de Cristo que habría de morir en el
Calvario.
b) La ofrenda de paz “era una ofrenda comunitaria de la cual participaban Dios, el sacerdote y el
pueblo. Era una comida comunitaria que tenía lugar en el recinto del templo, en la que
prevalecían la alegría y la felicidad, y el sacerdote y el pueblo podían alternar. No era
necesariamente una oportunidad de implementar la paz; era más bien una fiesta para expresar
regocijo porque se gozaba de paz” (M.L. Andreasen, The Sanctuary Service [El santuario y sus
servicios], 1969, p. 123; Lev. 7:11-17). Encontramos esta misma idea en la literatura judía. “Toda
ofrenda de paz culminaba con una comida comunitaria”. La “comida comunitaria (era) para él
mismo, su familia, y también para el levita de la comunidad (Deut. 12:12, 18, 19). Esto se debía
hacer en el santuario designado por Dios” (Encyclopaedia Judaica, 1971, t. 14, col. 604).
15. ¿Qué mandamiento se guardará como un recordativo de la creación del universo y de la purificación
del pecado?
Respuesta: El ________ (Isa. 66:23; Apoc. 22:14).
Este versículo de Isaías expresa el ideal de Dios; se cumplirá en el Cielo cuando todos los redimidos
honren todos los mandamientos de Dios. El sábado que se guardará en la tierra nueva es la continuación
del memorial que se dio en ocasión de la creación. Tal como en el jardín del Edén original, ocurrirá lo
mismo en el Edén restaurado: Dios hablará cara a cara con su pueblo. Todos se regocijarán en la perfecta
creación de Dios y en el hecho de que, al recibir los creyentes el Espíritu Santo aquí en la tierra (Rom.
12:2), los defectos de carácter que poseían han sido eliminados, con lo que se los capacitó para recibir la
recompensa de los vencedores al venir Jesús por segunda vez. Quiere decir que el sábado será por la
eternidad un símbolo de la capacidad creadora de Dios y de su poder regenerador en las vidas de hombres
y mujeres. El sábado en la tierra nueva tendrá un significado pleno y profundo para cada redimido.
La Nueva Jerusalén: un lugar de alegría eterna

• Regocijarnos porque la Nueva Jerusalén estará habitada por gente de verdad, redimida en esta tierra.
• Alegrarnos porque los redimidos siempre se van a relacionar con Jesucristo, su Redentor.
16. ¿Qué promesa personal le ha hecho Jesús a cada verdadero discípulo en cuanto a alguna posesión en
la Nueva Jerusalén?
Respuesta: Una morada o _________ construida por el Señor en persona (Juan 14:2, 3).
Los discípulos de Dios, a menudo calumniados, despreciados y arrojados de sus hogares, recibirán una
recompensa incomparable en la tierra nueva. El apóstol Pablo consideraba que los actuales sufrimientos
“no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse” (Rom. 8:18).
17. Estará la tierra nueva habitada por espíritus o por gente de verdad?
Respuesta: Estará habitada por gente de verdad, que tendrá cuerpos ___________, tal como los
habitantes del jardín del Edén era gente de verdad (Fil. 3:20, 21; Luc. 24:36-43).
Las Escrituras nos informan que los cuerpos de los redimidos serán como el cuerpo glorioso de su Señor.
Cristo tenía carne y huesos, y podía comer y actuar como un ser humano. Por cierto, en la tierra nueva los
frutos del árbol de la vida son para que los justos una vez por mes (Apoc. 22:2). Algunos han
argumentado, citando 1 Cor. 15:20, que los herederos de la tierra hermosa tendrán cuerpos espirituales.
Pero debemos recordar que este texto se escribió para contestar la pregunta que aparece en el versículo
35. En los versículos 42 al 45 se pone énfasis en el hecho de que los cuerpos de los resucitados son
diferentes de los cuerpos mortales que ahora poseemos. La “carne y la sangre”, es decir, los cuerpos
mortales que tenemos ahora, no pueden existir en el Cielo. Allí tendremos cuerpos incorruptibles e
inmortales (1 Cor. 15:52, 52).
18. ¿Podemos concebir las glorias y las actividades que Dios ha preparado para los que lo aman?
Respuesta: La mente que no ha sido moldeada por el espíritu Santo no puede concebir las
_______ que Dios ha ___________ para los que lo aman (1 Cor. 2:9, 10).
Las glorias del Cielo están por lejos más allá de los sueños y la imaginación del hombre mortal. El
apóstol Pablo en este pasaje está llamando nuestra atención a Isa. 64:4, y se une a los escritores del
Antiguo Testamento al proclamar que las recompensas de los justos están más allá de la capacidad de
comprensión de los mortales. Ciertamente el Señor dará buenas dádivas a sus hijos tanto en este mundo
como en el venidero (Mat. 7:11).
19. ¿Qué aspectos de nuestra experiencia aquí serán para siempre cosa del pasado?
Respuesta: El dolor, la enfermedad el _______, el llanto y la muerte (Apoc. 21:4).
Esta descripción se basa en Isa. 35 que describe la gloria futura de Sión cuando “caminen” por ella “los
redimidos” (v. 9). Los salvados vendrán “con alegría; y habrá gozo perpetuo sobre sus cabezas. Tendrán
gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido” (v. 10).
20. ¿Qué privilegios especiales tendrán los que hayan pasado por el tiempo de prueba con que culminará
la historia de este mundo?
Respuesta: Los redimidos de ese período serán los compañeros constantes de Jesús, y tendrán “el
________ del Padre _________ en la frente” (Apoc. 14:1, 4).
El Cielo es un lugar donde todos serán felices. Los redimidos mencionados aquí serán los que hayan
soportado el despliegue final de la ira de Satanás. Son los 144.000 mencionados en Apoc. 7. Tendrán
privilegios especiales que se les concederán por haber soportado esa tremenda prueba de su fe, que
ningún otro grupo ha tenido que soportar a lo largo de la historia. Hagamos planes para estar entre los
redimidos; los que estarán vestidos con las túnicas blancas de la justicia de Cristo. Ya sea que seamos
llamados a estar entre los que tendrán que pasar por el gran tiempo de angustia, o entre los irán al
descanso antes de ese momento, habrá una bendita unidad y contentamiento entre los redimidos. El mayor
privilegio de todos será salir al encuentro de nuestro Señor y Salvador. Todas las huestes del Cielo y de
los redimidos cantarán un gran himno de alabanza y adoración que llenará de gozo el Cielo (Apoc. 5:9-
14; 15:3, 4).
Grandes y maravillosas son tus obras,
Señor Dios Todopoderoso;
justos y verdaderos son tus caminos,
Rey de los santos.
¿Quién no te temerá, Señor,
y glorificará tu nombre?
pues sólo tú eres santo;
por lo cual todas las naciones
vendrán y te adorarán,
porque tus juicios se han manifestado
(Apoc. 15:3, 4).

1. Nueva
2. Monte, Olivos
3. esposa
4. no
5. todopoderoso, Cordero
6. marcas
7. a) luz, gloria b) Cordero c) justicia
8. salvación
9. árbol
10. sábado
11. iguales
12. veinticuatro
13. hasta, reino
14. adorar
15. sábado
16. mansión
17. gloriosos
18. cosas, preparado
19. pesar
20. nombre, escrito

Camino A La Salvación Estudios Sobre El Santuario PDF

Încărcat de

Informații document

Titlu original

Drepturi de autor

Formate disponibile

Partajați acest document

Partajați sau inserați document

Opțiuni de partajare

Vi se pare util acest document?

Este necorespunzător acest conținut?

Drepturi de autor:

Formate disponibile

Camino A La Salvación Estudios Sobre El Santuario PDF

Încărcat de

Drepturi de autor:

Formate disponibile

El Camino

SGAS Avenida L-3, Q611, Mod. 75

Warren A. Shipton y George D. Jackson, edición revisada, 2001

En presencia del Señor

1. Después de crear a Adán y Eva, ¿cómo se comunicaba Dios con ellos?

2. ¿Cuán íntima era la cooperación entre Adán y Dios en el huerto?

3. Como resultado de la desobediencia, ¿cómo reaccionaron Adán y Eva a la presencia de Dios?

Yaveh en el Antiguo Testamento

10. Después de la peregrinación por el desierto, ¿dónde se construyó el templo de Salomón?

11. ¿Honró Dios el templo de Salomón mediante su presencia?

12. ¿Santificó la gloria de Dios el templo construido por Zorobabel?

14. ¿Qué significa el nombre Emanuel?

15. Al identificarse con la humanidad, ¿qué sacrificio hizo Jesús?

El Espíritu Santo, la tercera persona de la Deidad, se manifestó extraordinariamente activamente después

19. ¿Dónde ha decidido Dios establecer su morada para siempre?

20. ¿Cuando se cumplirá esta promesa?

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

2. ¿Cuál es el aspecto central del templo del cielo?

3. ¿Cómo describe la Biblia el templo del cielo?

7. ¿Habrá en la Tierra Nueva un templo para facilitarle el culto aa los redimidos?

El tabernáculo hecho de manos

8. ¿Cómo describe la Biblia el plano del santuario?

10. ¿A qué apuntaba la sangre de los sacrificios?

12. ¿Dónde se desarrolla ahora el continuo ministerio de Cristo?

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

Formas del griego Traducción literal* Referencias en Hebreos

3. ¿Qué deberes cumplía cada día el sacerdote en el lugar santo?

Los símbolos del santuario

5. Al entrar al lugar santo, ¿qué mueble se encontraba a la derecha?

7. ¿Qué había en el lado izquierdo del lugar santo, y qué significaba?

8. ¿Está representado Jesús en el simbolismo del candelabro?

9. ¿Qué representa en las Escrituras el símbolo de las lámparas encendidas?

Cristo en el Santuario Celestial

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

2. ¿A qué persona presenta la Escritura como “el camino”?

He aquí es el Cordero de Dios

7. ¿Cuándo trazó Dios su plan de salvación?

8. ¿Cuándo se anunció el plan de Dios para la redención de la raza caída?

10. ¿Emplea la Escritura la palabra “primogénito” para referirse a Cristo?

12. ¿Qué anunciaba el sacrificio de la pascua?

13. En todos estos sacrificios se derramaba sangre. ¿Qué significaba esto?

15. ¿Cuándo perdió su significado el sistema de los sacrificios?

16. ¿Qué patriarca nos da un excelente ejemplo del camino de la fe?

18. ¿Son totalmente perdonados los pecados, y olvidados además?

20. ¿Cuál es la victoria que vence al mundo?

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

1. ¿A cuántos les ofrece salvación Dios en este mundo?

2. ¿Se nos salva en grupos de creyentes, por familias o como individuos?

3. ¿Están limitadas las oportunidades de la salvación a un período en especial?

4. ¿De qué naturaleza es el pecado que Dios no puede perdonar?

Vemos la actitud desafiante de Nabucodonosor, rey de Babilonia; no obstante, se convirtió en forma

Los holocaustos continuos

6. ¿Por medio de qué comunicó Dios la idea de la accesibilidad de su gracia perdonadora?

Entrega continua (permanente) a Cristo

14. ¿Cómo se puede vencer?

15. ¿Cuál era el secreto de la vida victoriosa de Jesús?

16. ¿Qué nos pide la Escritura que hagamos hoy?

17. ¿Debemos poner a un lado todo pecado en esta vida?

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS

1. ¿Cuándo se reveló el evangelio a la especie humana?

El evangelio que predicó el Señor

4. ¿Excluye a alguien la invitación del evangelio?

b) Jesús ________ a los cautivos del pecado (Isa, 61:1).