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EL RETO DE UNA EVALUACIÓN POR COMPETENCIAS

La evaluación como la otra cara de la moneda en la formación por


competencias

Es domingo y los padres de José se encuentran preocupados porque a primera hora del
lunes la maestra tomará una prueba de Personal Social que debe aprobar. Mientras el
padre sigue atento un partido de fútbol por el campeonato descentralizado por la
televisión, la madre reitera a José, esta vez con un sonoro grito, que debe estudiar
para el examen del día siguiente, sino se quedará sin televisión durante una semana.

Esta escena se puede aún observar en la mayoría de hogares, sobre todo en días de
evaluaciones sumativas y revela que aún no se asume la evaluación como un proceso
integral y permanente. Por un lado, la presión de los docentes exigiendo a sus
estudiantes la aprobación de asignaturas y por otro la de los padres que esperan una
“nota” como recompensa a sus sacrificados esfuerzos por la educación de sus hijos.

La evaluación es desde hace mucho, la arista más débil del arquetipo educativo en
nuestro país. Este descuido ha ido desplazándola dejando de lado su planeamiento,
elaboración pertinente de instrumentos, y pérdida de eficacia en sus resultados que no
reflejan lo aprendido por parte de los estudiantes.

Como contexto podemos mencionar que se ha venido aplicando en la Educación Básica


Regular, técnico - productiva y universitaria, como lo afirma Tobón1, pruebas para
determinar el logro cognitivo, y esto deja de lado las inteligencias múltiples, la
actuación ante problemas reales y la ética.

El enfoque de formación por competencias nos presenta en una mirada más completa
con el reto de ascender a un proceso de formación integral y justa, tomando en cuenta
los aprendizajes de conocimientos, procedimientos y actitudes; sin embargo la
evaluación no ha tenido el suficiente impulso para seguirle el paso en los logros que se
han venido consiguiendo.
En una rápida mirada al SINEACE, los estándares que refieren a la evaluación de los
aprendizajes son apenas abordados, tanto para la Educación Básica Regular como para
la Técnico Productiva y Universitaria2. La modificada Ley Universitaria 23733, la nueva
ley 30220 y reglamento así como la nueva Ley de Institutos de Educación superior
30512 y su reglamento DS010-2017-MINEDU, no han previsto la importancia de la
asunción de un sistema de evaluación que respondan a un modelo exitoso acorde con
las necesidades de evidenciar los aprendizajes de manera justa, objetiva y reflexiva.

Para Sergio Tobón la evaluación es el “… proceso mediante el cual se recopilan


evidencias y se realiza un juicio o dictamen de esas evidencias teniendo en cuenta

1
Tobón, Sergio. Instituto CIFE. Formación Integral y Competencias pensamiento Complejo, currículo,
didáctica y evaluación. ECOE ediciones. Cuarta edición.
2
https://www.sineace.gob.pe/acreditacion
criterios preestablecidos, para dar finalmente una retroinformación que busque
mejorar la idoneidad…”3. Partiendo de esta definición, el sistema y organización de las
actividades educativas deberían poner especial énfasis en la calidad de aquellas
evidencias. Éste es el reto de maestros y maestras al reflexionar sobre la calidad de
instrumentos y técnicas que recojan las evidencias en un proceso de evaluación por
competencias que tomen en cuenta las características de los estudiantes, su contexto,
las habilidades diferenciadas como ritmos y estilos y otras características del currículo
absolutamente aplicables al proceso evaluativo.

Como antecedente mencionaremos que Popham y Backer esbozaron una precursora


matriz de redacción de objetivos instruccionales, que Tobón nos presenta ahora en
este nuevo enfoque de una manera más completa como interesante guía para la tarea
que aún nos queda.

Queda, por nuestra parte el compromiso entonces reflexionar sobre cómo mejorar
nuestra práctica docente en la búsqueda de una real evaluación por competencias.

CONCLUSIÓN
El artículo hace un rápido análisis acerca de la pertinencia y eficacia de la evaluación
de los aprendizajes. Parte de una escena cotidiana como reflejo de la falta de
compromiso por mejorar las evidencias de lo aprendido. Sintetiza los esfuerzos
incipientes dados desde la normativa y la necesidad de mejorar la calidad de la
evaluación como resultado de un proceso exitoso.

3
https://elealtec2.files.wordpress.com/2011/08/lec-_5_tobon.pdf

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