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Revista Mexicana de Patología Clínica

Volumen Número Abril-Junio


Volume 50 Number 2 April-June 2003

Artículo:

El diagnóstico de laboratorio de la
sífilis

Derechos reservados, Copyright © 2003:


Federación Mexicana de Patología Clínica, AC

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IMÁGENES DE PATOLOGÍA CLÍNICA

El diagnóstico de laboratorio
de la sífilis
Palabras clave: Treponema pallidum, Teodoro Carrada Bravo*
sífilis, diagnóstico, serología, SIDA.
* Hospital General de Zona y Medicina Familiar 2. Instituto Mexicano del
Seguro Social.
Key words: Treponema pallidum, syphilis,
diagnosis, serology, AIDS.
Correspondencia:
Teodoro Carrada Bravo
Av. Reforma No. 702, Fraccionamiento Gámez
Recibido: 23/11/02 C.P. 36670, Irapuato, Guanajuato, México.
Aceptado: 19/12/02 E-mail: teocamx@yahoo.es
teocamx@hotmail.com

82 Resumen Summary
La sífilis es una enfermedad sistémica causada por Treponema Syphilis is a systemic disease caused by Treponema pallidum.
pallidum. En las fases tempranas de la infección los métodos In the infection earliest stages the darkfield examination or
de laboratorio de elección son la microscopia de campo oscu- immunofluorescent direct staining of spirochetes are the
ro y la tinción directa con inmunofluorescencia de las quickest laboratory methods. Two different types of seric
espiroquetas. Hay dos métodos de titulación sérica de los antibodies can be measured: the nontreponemal Venereal
anticuerpos: los no-treponémicos como la prueba de Disease Research Laboratory (VDRL) test and the specific
floculación del Venereal Diseases Research Laboratory (VDRL) treponemal tests such as the fluorescent treponemal anti-
y los métodos treponémicos más específicos como el de ab- body absortion (FTA-ABS), the former is rapid, inexpen-
sorción de anticuerpos fluorescentes (FTA-ABS); los prime- sive and convenient for screening large number of sera and
ros son rápidos, baratos y convenientes para examinar un gran as indicator of clinical disease activity. The principal use of
número de sueros, o como indicadores de la actividad clínica the treponemal test is to verify a positive nontreponemal
de la sífilis. El uso principal de las pruebas treponémicas es (reaginic) test result. Because T. pallidum cannot be culti-
confirmar los resultados de una prueba no-treponémica vated on artificial media, inoculation in rabbits in the only
(reagina) positiva. T. pallidum no ha podido ser cultivado in mean available to isolate the organism. There is strong epi-
vitro y la inoculación del conejo es el único medio disponible demiologic association between HIV infection and genital
para aislar este microorganismo. Epidemiológicamente, se ha syphilic ulcer. Syphilis in HIV-infected patients often mani-
demostrado una fuerte asociación entre la infección por VIH fest with a more protacted and malignant course, greater
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y las úlceras sifilíticas genitoanales. La sífilis en los pacientes organs involvement, and a significant predisposition to de-
coinfectados con VIH suele manifestarse por lesiones cutá- velop neurosyphilis and uveitis. As many as 11% of HIV-
neas malignas de evolución tórpida, mayor grado de ataque infected syphilitic patients have a biological false-positive
multiorgánico y predisposición significativa a desarrollar serology.
neurolúes y uveítis; aproximadamente 11% de los enfermos
sifilíticos puede tener reacciones serológicas falsas-positivas.

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Carrada BT. El diagnóstico de laboratorio de la sífilis

D efinición. La sífilis o lúes es una infección


sistémica crónica producida por Treponema
pallidum subespecie pallidum, se transmite gene-
tidoglucanos que proporciona una cierta rigidez es-
tructural. Esta capa está revestida por una membra-
na externa rica en lípidos y contiene una cantidad
ralmente por contacto sexual y se caracteriza por relativamente escasa de proteínas integrales de
episodios de enfermedad activa interrumpidos por membrana, aunque recientemente se ha descrito
periodos de latencia. Tras un periodo de incuba- una molécula de superficie del tipo porina. En el es-
ción promedio de tres semanas, aparece una le- pacio que queda entre la pared celular interna y la
sión primaria o chancro duro que con frecuencia membrana externa hay seis endoflagelos que rodean
se acompaña de adenopatía linfática regional. En la al cuerpo celular y pueden ser los elementos res-
fase bacteriémica secundaria, aparecen las lesio- ponsables de la motilidad (figura 3). Ninguno de los
nes mucocutáneas simétricas y adenopatía linfáti- treponemas patógenos ha podido ser cultivado in
ca generalizada, se continúa con un periodo de la- vitro en cantidades suficientes, y tampoco se han
tencia de infección subclínica que dura muchos observado entre ellos diferencias convincentes des-
años. En aproximadamente la tercera parte de los de el punto de vista genético, morfológico, seroló-
casos no tratados, se desarrolla la fase terciaria que gico o metabólico. Se diferencian principalmente por
se ha caracterizado por lesiones mucocutáneas, el síndrome clínico que causan. El único huésped
musculoesqueléticas o parenquimatosas de carác- natural conocido de T. pallidum es el ser humano y
ter destructivo, aortis o afección sintomática del puede infectar a muchos mamíferos, pero sólo pre-
sistema nervioso central (SNC) (figura 1).1-4 sentan lesiones sifílicas las personas, los primates
El agente causal. El género Treponema com- superiores y algunos otros animales de laboratorio.
prende ciertas bacterias frágiles y móviles: T. palli- Las cepas virulentas de T. pallidum crecen y se pue-
dum subespecie pallidum —en adelante T. palli- den mantener en el conejo (figura 4).7 83
dum— causa la sífilis venérea; el T. pallidum subes- Aunque se ha logrado mantener treponemas no
pecie endemicum produce la sífilis endémica o be- patógenos, como la cepa Reiter en medios artifi-
jel, y Treponema carateum que origina el mal del ciales, el T. pallidum no ha podido ser cultivado in
pinto. Otras especies de Treponema se encuentran vitro. Tradicionalmente se le considera anaerobio,
en la cavidad bucal, la mucosa genital y el aparato y para su supervivencia necesita humedad suficiente
gastrointestinal del ser humano y no se ha demos- y la presencia de tejidos. Se ha demostrado que el
trado que tengan capacidad patógena, pero estas T. pallidum virulento consume oxígeno a un ritmo
espiroquetas pueden confundirse con T. pallidum similar al de las espiroquetas aerobias conocidas;
en el examen de campo oscuro. Riviere y colabo- es posible que para su crecimiento y reproducción
radores han descrito un nuevo treponema antigé- sea necesaria la presencia de oxígeno.8
nicamente muy relacionado con T. pallidum, que se La especie T. pallidum es destruida fácilmente
asocia de manera significativa con periodontitis y por diversos agentes físicos y químicos, como el
gingivitis ulcerativa necrotizante aguda, aunque su calor, la desecación y desinfectantes suaves, por
papel etiológico en estas enfermedades de las en- ejemplo, el simple lavado con agua y jabón. El bis-
cías es todavía incierto.5,6 muto, los arsenicales trivalentes y los compuestos
T. pallidum es un microorganismo fino y delicado, mercuriales inmovilizan dicho organismo con rapi-
presenta entre 6 y 14 espirales con los extremos
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dez. La penicilina tiene un efecto espiroqueticida,
afilados, y tiene entre 6 y 15 µm de longitud con 0.2 por esta razón se ha usado exitosamente en el tra-
µm de anchura (figura 2). El citoplasma está rodea- tamiento de los enfermos sifilíticos.9,10
do por una membrana citoplásmica trilaminar, a su Patogenia de la sífilis. T. pallidum atraviesa rá-
vez, está circundada por otra delgada capa de pep- pidamente las mucosas intactas y las raspaduras

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microscópicas de la piel y, al cabo de unas pocas células plasmáticas y macrófagos, con proliferación
horas, alcanza los vasos linfáticos y la sangre, cau- de las células endoteliales capilares y obliteración
sando infección sistémica y focos metastásicos, mu- posterior de las luces de los vasos sanguíneos más
cho antes de que aparezca la lesión primaria. La pequeños. Las células CD4+ muestran un perfil
sangre de un paciente con sífilis inicial o en fase de de citocinas de tipo TH1 congruente con la activa-
incubación tiene capacidad infecciosa. Se ha calcu- ción de macrófagos, en este momento, se ha podi-
lado que el tiempo de generación de T. pallidum do demostrar la presencia histológica de T. palli-
durante la fase inicial activa de la enfermedad es de dum en el interior del chancro, en los espacios que
30 a 33 horas in vivo. El periodo de incubación de quedan entre las células epiteliales, en las invagina-
la sífilis es inversamente proporcional al número ciones o fagosomas de las células epiteliales, fibro-
de microorganismos inoculados. La concentración blastos, células plasmáticas y células endoteliales
de treponemas alcanza una cifra mínima de 107 por de los capilares, en el interior de vasos linfáticos,
gramo de tejidos antes de la aparición de una le- en los ganglios linfáticos regionales (figura 9). En
sión clínica. La infección experimental de conejos última instancia, la fagocitosis de microorganismos
o personas con unos pocos treponemas provoca por parte de macrófagos activados induce la reso-
la aparición de una lesión cutánea ulcerosa (figuras lución espontánea del chancro.13,14
5 y 6), discernible al cabo de varias semanas, aun- Las manifestaciones generalizadas parenquima-
que las alteraciones histopatológicas son evidentes tosas, constitucionales y mucocútaneas de la sífilis
:rop odarobale
antes. Por el contrario, la inyección FDP
intradérmica sustraídode-m.e.d.i.g.r.a.p.h.i.c
secundaria aparecen a las seis u ocho semanas de
de 106 microorganismo determina habitualmente la curación del chancro (figuras 10 y 11), aunque
la aparición deVCuna
ed lesión
AS, cidemihparG
al cabo de 72 horas. Me- 15% de los pacientes con sífilis secundaria mues-
84 diante la inyección intradérmica de dosis gradual- tra un chancro persistente o en fase de curación.
mente mayores de T. pallidum en un arap
grupo de ocho En otros enfermos, las lesiones secundarias pue-
voluntarios, se calculó que 50% de la dosis infec- den aparecer varios meses después de que el chan-
ciosaacidémoiB arutaretiL :cihpargi-
eran 57 microorganismos. La mediana del cro se ha curado (figuras 12 y 13), y algunos otros
periodo de incubación en el ser humano,deM de aproxi- pueden alcanzar la fase de latencia sin haber pre-
madamente 21 días, indica que la enfermedad ad- sentado previamente lesiones de la fase secunda-
quirida de forma natural se produce con un inócu- ria. Las características histopatológicas de las le-
lo promedio de 500 a 1,000 microorganismos in- siones cutáneas maculopapulosas secundarias son
fecciosos. El periodo de incubación, desde la ino- hiperqueratosis de la epidermis, proliferación ca-
culación hasta que la lesión primaria es manifiesta, pilar con tumefacción endotelial en la dermis papi-
no suele ser mayor de seis semanas. El tratamien- lar y presencia de polimorfonucleares en la dermis
to subcurativo durante el periodo de incubación superficial y de infiltración perivascular por mono-
puede retrasar la aparición de la lesión primaria, litos, células plasmáticas y linfocitos en la dermis
pero no se sabe si este tipo de tratamiento reduce más profunda. Los treponemas pueden demostrar-
la probabilidad de que aparezca la enfermedad sin- se en muchos tejidos, como el humor acuoso del
tomática.4,11,12 ojo y el líquido cefalorraquídeo (LCR). La invasión
El chancro duro aparece en el punto de inocula- del SCN por T. pallidum se produce durante las
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ción, persiste generalmente durante dos a seis se- primeras semanas o meses de la infección, las alte-
manas y después se cura de manera espontánea. raciones en el LCR se demuestran hasta en 40%
En el estudio anatomopatológico de las lesiones de los pacientes durante la fase secundaria. La he-
primarias se ha observado infiltración perivascular patitis clínica y la glomerulonefritis membranosa
por linfocitos, incluyendo células CD8+ y CD4+, con deposito de inmunocomplejos son manifesta-

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ciones relativamente infrecuentes, pero bien esta- cientes con sífilis primaria y secundaria diagnosti-
blecidas de la sífilis precoz. Ochenta y cinco por cada clínicamente, en el famoso estudio de Oslo,
ciento de los pacientes con sífilis secundaria pre- 1891 a 1951;21,23 prospectivamente también en 431
senta linfadenopatía generalizada no dolorosa. La hombres de raza negra con sífilis latente seropo-
paradójica aparición de manifestaciones secunda- sitiva de tres o más años de duración, en el estu-
rias a pesar de la presencia de títulos elevados de dio de Tuskegee, 1932 a 1972,24-27 y retrospecti-
anticuerpos, incluidos los anticuerpos de inmovili- vamente en la revisión de 198 autopsias de pa-
zación frente a T. pallidum, no ha sido explicada. cientes con sífilis no tratada en la investigación Ro-
Las lesiones secundarias remiten al cabo de dos a sahn, 1917 a 1942.28,29
seis semanas y la infección entra en la fase de laten- En el estudio de Oslo, 24% de los pacientes
cia, que sólo se puede diagnosticar mediante prue- presentó lesiones secundarias recidivantes al cabo
bas serológicas. de cuatro años y 28% tuvo una o más manifesta-
En la era anterior a los antibióticos, hasta 25% ciones de sífilis terciaria. La sífilis cardiovascular,
de los pacientes no tratados presentaba una o más incluida la aortitis, se diagnosticó en 10% de los
recidivas mucocutáneas generalizadas o localizadas enfermos, ninguno de los cuales se había infectado
durante los primeros dos a cuatro años tras la infec- antes de los 15 años de edad; 7% de los pacientes
ción. Debido a que 50% de estas recidivas infeccio- presentó neurosífilis sintomática y 16% experimen-
sas se producen durante el primer año, es trascen- tó sífilis terciaria con gomas en la piel, las mucosas
dental lograr la identificación y el estudio epidemio- o el sistema esquelético. La sífilis fue la causa prin-
lógico de los contactos sexuales del paciente sifilíti- cipal de muerte en 15% de los varones y en 8%
co que tengan menos de un año de haber ocurrido. de las mujeres. Se comprobó la existencia de sífilis
En la actualidad, es rara la erupción cutánea recu- cardiovascular en 35% de los hombres y en 22% 85
rrente generalizada.13,14 de las mujeres en quienes se realizó la autopsia (fi-
De igual forma, la tercera parte de los pacientes gura 15). En general, las complicaciones tardías gra-
con sífilis latente no tratada padecían clínicamente ves fueron casi dos veces más frecuentes en los
la sífilis terciaria: hoy día, los tratamientos específi- hombres que en las mujeres.23
cos y coincidentes de la sífilis precoz y latente han En el estudio Tuskegee se confirmó que la tasa
eliminado casi todos los casos de sífilis terciaria, de mortalidad en los hombres de raza negra con
excepto los casos esporádicos de neurosífilis en per- sífilis, de 25 a 50 años de edad, era 17% mayor
sonas infectadas por el virus de la inmunodeficien- que en las personas no infectadas; 30% de todas
cia humana (VIH). En el pasado, el tipo más fre- las muertes fue debido a sífilis cardiovascular o del
cuente de sífilis terciaria era el goma sifilítico, y re- SNC. Los problemas éticos que planteó este estu-
presentaba una lesión granulomatosa benigna (fi- dio, iniciado en la era preantibiótica y continuado
gura 14); actualmente, los gomas no son frecuen- durante los primeros años del decenio de los se-
tes. Las lesiones terciarias están producidas por tenta, ejercieron influencia en el establecimiento
endarteritis obliterativa de los vasos de pequeño de las normas actuales para la experimentación mé-
calibre, con afectación habitual de los vasa vasorum dica con seres humanos, y la historia de este estu-
de la aorta ascendente y, con menos frecuencia, dio podría explicar el rechazo de los afroamerica-
de la vasculatura del SNC. La afectación asintomá-
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nos a participar en la investigación clínica. Con
tica del SNC es demostrable hasta en 25% de los mucho, el factor más importante en el incremento
pacientes con sífilis terciaria.15-20 de la mortalidad fueron las lesiones cardiovascula-
La evolución de la sífilis no tratada se estudió res, se observaron signos anatómicos de aortitis
retrospectivamente en un grupo de casi 2,000 pa- en 40 a 60% de los pacientes sifilíticos autopsia-

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dos, y sólo 15% en los sujetos de control; mien- na de manera inmediata para observar la presencia
tras que la sífilis del SNC sólo se observó en 4% de T. pallidum con técnica de campo oscuro o de
(figura 16). La frecuencia de hipertensión también contraste de fase, por parte de un bacteriólogo ex-
fue mayor en las personas infectadas.30,31 En ambos perto. La identificación de un único microorganis-
estudios se demostró que la tercera parte de los mo móvil característico, efectuada por un observa-
pacientes no tratados presentaron alteraciones clí- dor experimentado, es suficiente para el diagnósti-
nicas o anatomopatológicas de sífilis terciaria, 25% co. No se recomienda el estudio de las lesiones bu-
fallecieron como resultado directo de la sífilis tar-
día, y hubo un exceso de mortalidad no atribuible Manifestaciones principales de la sífilis no tratada
directamente a la sífilis terciaria.32 Estadio Patología
La característica histológica más notable de la
reacción que el hospedador humano produce ante Primaria Chancro duro
Adenopatía satélite
la presencia de T. pallidum consiste en alteraciones
vasculares, de endarteritis y periarteritis. La pri- Secundaria Exantema maculopapular simétrico
mera se manifiesta como dilatación capilar con hin- Lesiones palmo-plantares
chazón y proliferación de las células endoteliales, y Condilomas planos
Placas mucosas
disminución del calibre de la luz del vaso. La proli- Adenopatías no supurativas
feración de la adventicia y la formación de mangui- Alopecia areata
tos inflamatorios perivasculares de monocitos, cé-
Latente No sintomática/Serología positiva
lulas plasmáticas y linfocitos. Al curar el proceso,
se genera la proliferación fibroblástica que a su vez Neurosífilis
86 provoca fibrosis y cicatrización. La sífilis puede tam- Meningovascular
bién originar infiltrado granulomatoso y tubercu- Parálisis general
Tabes dorsal
loide con necrosis caseosa. La especie humana no Terciaria Aortitis
posee inmunidad natural frente a la sífilis; sin em- Aneurisma sacular
bargo, después de una infección por T. pallidum, se Insuficiencia aórtica
Estenosis de las coronarias
produce una respuesta inmunitaria humoral y ce-
Gomas destructoras
lular, pero no se conocen con exactitud los meca- Piel, huesos, hígado y otros órganos
nismos inmunológicos que influyen sobre el curso
natural de la enfermedad.33-38 Congénita Abortos tardíos o mortinatos
Lactantes
Pruebas de laboratorio. El examen microscó- Osteocondritis
pico en campo oscuro es esencial para evaluar las Exantema vesicular
lesiones cutáneas húmedas como el chancro de la Periostitis
Fibrosis hepática y pulmonar
sífilis primaria o los condilomas planos de la sífilis
Escolares
secundaria. La superficie de la lesión ulcerada debe Queratitis intersticial
limpiarse con suero salino y se raspa suavemente Dientes de Hutchinson
con una gasa seca, con cuidado para no inducir he- Sordera del octavo par
morragia. Se exprime la lesión para que expulse un
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trasudado seroso y se coloca una gota del mismo en
Fuente: Carrada-Bravo T. Modificado de citas 1, 14 y 22.

la superficie de un portaobjetos. Si fuera necesario, Figura 1. La sífilis temprana no tratada, primaria y secunda-
ria, es por definición contagiosa, pero la fase terciaria o tardía
puede mezclarse una gota de suero salino, sin aditi- no es transmisible, aunque con técnicas de investigación
vos de tipo bacteriostático, con el trasudado; la pre- molecular puede demostrarse T. pallidum dentro de los go-
paración se cubre con un cubreobjetos y se exami- mas del encéfalo y de la piel.

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Figura 2. Endoflagelos característicos de Figura 3. Corte ultrafino de T. pallidum


la bacteria. Microscopia de barrido (x var pallidum. En la porción inferior y cor-
10,000). Observación del autor. tado longitudinalmente, se demuestra la
pared celular interna y la membrana li-
poídica externa. En el corte transversal
(arriba derecha) se ven tres de los seis
endoflagelos típicos del género Trepone-
ma. Observación del autor.

87

Figura 4. Esta microfotografía mues- Figura 5. Chancro duro, indoloro, de base Figura 6. La sexoservidora, quien con-
tra a T. pallidum adherido sobre una cé- limpia, borde levantado y acartonado del tagió al paciente de la figura 5, tenía una
lula testicular de conejo, por uno de pene (flechas), observado en un varón de lesión sifilítica ulcerosa cervicouterina de
sus extremos. Microscopia de barrido 33 años. Seis semanas antes tuvo contacto 3.5 cm de diámetro y era también positi-
(x 10,000). Cortesía del Dr. D. M. sexual con una sexoservidora. Observación va al virus de la inmunodeficiencia huma-
Musher, Universidad de Texas, EUA. del autor. na. Observación del autor.

Figura 7. Corte histológico de la micro-


biopsia obtenida del caso de la figura 5.
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Figura 8. Biopsia de un chancro duro te-
ñida con sales de plata. Se demuestra la
Figura 9. Corte histológico de un chan-
cro duro. Esta foto, a mayor aumento,
Se observa pérdida de la epidermis, y en presencia de las espiroquetas teñidas de demuestra la intensidad de la respuesta
la dermis hay endarteritis y periarteritis color negro (flechas) que midieron de 6 a inflamatoria, el endotelio edematoso y la
(flechas) y un exudado inflamatorio de 15 µm de longitud por 0.1 a 0.2 de espe- presencia de finas bandas eosinofílicas de
linfocitos, plasmocitos y macrófagos. Tin- sor, y espirales espaciadas regularmente. tejido fibroso. Tinción HE (x 1,000). Ob-
ción HE (x 400). Observación del autor. Tinción de Levaditi modificada (x 1,000). servación del autor.

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Figura 10. La ro- Figura 11. Las lesiones


séola sifilítica cursa papuloescamosas pal-
sin comezón y es in- moplantares son carac-
dicio de la sífilis se- terísticas de la sífilis se-
cundaria observada cundaria. Mismo pacien-
en un cantinero pro- te de la figura 10. Obser-
miscuo de 26 años vación del autor.
de edad. La prueba
VDRL resultó positi-
va a título de 1:64 y
la hemaglutinación
también positiva a Figura 12. Condilomas
título de 1:64. Ob- planos, lesión papulosa
servación del autor. de color blanco grisá-
ceo, ancha y aplanada,
de la región genitoanal
húmeda y con mal olor.
Esta sexoservidora tuvo
VDRL de 1:64 y la prue-
ba de campo oscuro fue
repetidamente positiva.
Observación del autor.

88
Figura 13. Placas mucosas gingivolabiales
de la sífilis secundaria. Esta mujer de 30 años
tuvo VDRL de 1:32 y la prueba de in-
munofluorescencia (FTA-ABS) fue de 1:64.
Estas lesiones bucales húmedas son tam- Figura 14. Goma cutáneo sifilítico ulce-
bién contagiosas. Observación del autor. rado (lesión terciaria) de la mano, obser-
vado en un paciente de 58 años. La prue-
ba de inmunofluorescencia absorbida
(FTA-ABS) fue positiva a título de 1:128.

Figura 15. Estudio post mortem


de aortitis sifilítica con insuficien-
cia aórtica y estenosis del ostium
coronario. Observación del
Maestro Isaac Costero y del Dr.
Raúl Contreras, del Instituto Na-
cional de Cardiología de México.

Figura 16. La tabes dorsal produce degene-


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ración y desmielinización selectiva de los cor- Figura 17. Microscopia del exudado obtenido del chancro duro (figura 5), observación
dones posteriores de la médula espinal, la le- en campo oscuro. Las espiroquetas en forma de sacacorchos presentaban movimiento
sión se tiñó de color más pálido. Estudio post de traslación anteroposterior, y de rotación lenta-rápida. El treponema situado abajo a
mortem, Hospital Juárez de México DF. Tin- la derecha estaba flexionado en el segmento medio corporal. Compárese con el diá-
ción de mielina (x 400). Foto por el autor. metro de los eritrocitos apelotonados (arriba derecha). Observación del autor.

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Figura 18. Frotis del exudado obtenido en


un chancro duro (figura 5). Tinción directa
con anticuerpos monoclonales fluorescentes
específicos para Treponema. Observación del
autor. Compárese con las imágenes de las
figuras 8 y 17 del mismo paciente. Figura 19. Caso de sífilis congé- Figura 20. Caso de sífilis pa-
nita. Obsérvese la fascies carac- pular maligna secundaria de
terística de esta enfermedad. La distribución facial extendida,
madre era VDRL positiva 1:64 y observada en un varón de 30
la prueba FTA-ABS+ a título de años, VIH positivo. Observa-
1:128. Este padecimiento no es ción del autor. VDRL 1:64.
infrecuente en México. Fotogra-
fía por el autor, Hospital de Pe-
diatría de Inguarán, México DF.

89
Figura 22. En el paciente homosexual
de la figura 21 se aisló una cepa del VIH-
1. El retrovirus observado en un corte
ultrafino tiene un nucléolo viral cónico
característico, recubierto por un peplo
externo con abundantes peplómeros
de glicoproteína sobre la superficie
Figura 21. Las úlceras anales si- externa de las partículas virales. Micros-
filíticas son la puerta de entrada copia electrónica de transmisión. La
rápida para el virus de la inmu- barra equivale a 100 nm.
nodeficiencia humana. Paciente
homosexual de 21 años VIH po-
sitivo, la prueba FTA-ABS positi-
va a título de 1:64.

Figura 23. Caso de sífilis


maligna con lesiones plan-
tares necróticas y signos

edigraphic.com de vasculitis. La prueba de


VDRL 1:64 y la FTA-ABS
de 1:128. Este paciente
de 28 años resultó ser
VIH positivo con menos
de 200 linfocitos CD4+/
dL.

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Cuadro I. Sensibilidad comparada de las pruebas T. pallidum en tejido, cuando las características clí-
serológicas en los pacientes sifilíticos no tratados. nicas o anatomopatológicas sugieren el diagnósti-
co de sífilis. Aunque el microorganismo se puede
Porcentaje medio de positividad (intervalo) en las dis- observar en el tejido con las tinciones de plata apro-
tintas fases de la enfermedad† piadas, este resultado debe ser interpretado con
precaución debido a que es frecuente la presencia
Prueba* Primaria Secundaria Latente Terciaria
de factores que simulan T. pallidum. Los trepone-
VDRL 78 (74-87) 100 95 (88-100) 71 (37-94) mas pueden diagnosticarse con mayor fiabilidad
FTA-ABS 84 (70-100) 100 100 96
mediante métodos de inmunofluorescencia o in-
MHA-TP 76 (69-90) 100 100 96
munohistoquímica con anticuerpos específicos
* La especificidad de cada una de estas pruebas es de 97 a 99 %. mono o policlonales frente a T. pallidum.41
† En estudios del CDC de Atlanta, Georgia, EUA.
Fuente: Modificado de Larsen y cols. (citas 10, 44). Pruebas serológicas para la sífilis. La profu-
sión de pruebas serológicas para la sífilis ha causa-
cales y las úlceras anales con este método porque do confusión innecesaria. La infección sifilítica pro-
es difícil diferenciar T. pallidum de otras espiroque- voca la aparición de dos tipos de anticuerpos —
tas que puedan estar presentes. Una prueba negati- anticuerpo antilípido “reagínico” y anticuerpo anti-
va no excluye la posibilidad de sífilis, para lograr la treponémico específico— que puede cuantificar-
visualización es necesario que en el exudado haya al se mediante las pruebas no treponémicas y trepo-
menos 104 treponemas; el uso previo de antisépti- némicas, respectivamente. Ambas son positivas en
cos tópicos o del lavado realizado por el paciente las personas que presentan cualquier tipo de infec-
pueden alterar los resultados. Idealmente, el exa- ción treponémica, incluidos el pian, la pinta y la sí-
90 men en campo oscuro debe repetirse a los tres días filis endémica.42,43
antes de considerarlo negativo (figura 17).39,40 Los anticuerpos no treponémicos contienen IgG
Inmunoflourescencia directa. La mayor par- e IgM dirigidas frente a un complejo antigénico car-
te de los casos de sífilis se diagnostican en las con- diolipina-lecitina-colesterol. El término reagina es
sultas de médicos privados en las que no se dispo- poco afortunado porque los anticuerpos IgE impli-
ne de los medios necesarios para la microscopia cados en fenómenos alérgicos también se denomi-
de campo oscuro; son necesarios métodos opcio- nan reaginas. Las pruebas no treponémicas para la
nales para la identificación de T. pallidum en el exu- sífilis son la RPR, que puede automatizarse (ART),
dado. La prueba de anticuerpos fluorescentes di- la prueba del Venereal Disease Research Laboratory
rectos a T. pallidum (DFA-TP), puede llevarse a cabo (VDRL), y la prueba sérica con azul de toluidina sin
en laboratorios de referencia que utilizan un anti- calentar (TRUST), otras pruebas que se utilizan con
cuerpo policlonal antitreponémico conjugado con menos frecuencia son la prueba sérica reagínica sin
fluoresceína para la detección de T. pallidum en fro- calentamiento (USR) y la prueba de detección de
tis desecados, obtenidos de lesiones sospechosas. reaginas (RST), en todas ellas, los anticuerpos se
Un avance de esta técnica es el uso de un anticuer- detectan mediante la floculación microscópica
po monoclonal específico para treponemas pató- (VDRL y USR), o macroscópica (RPR, TRUST y
genos (figura 18). En la actualidad, está en evalua- RST) de la suspensión antigénica. En la actualidad,
ción la reacción en cadena de la polimerasa para la
edigraphic.com se están evaluando métodos basados en la técnica
detección de T. pallidum y de otros patógenos ge- ELISA (inmunoabsorción ligado a enzimas).17,44
nitales que causan úlceras.2,4 La prueba RPR es más cara que la VDRL, pero
Demostración del T. pallidum en tejido. Con es más fácil de realizar y utiliza una cantidad me-
frecuencia es necesario demostrar la presencia de nor de suero no calentado. Es el método de elec-

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Cuadro II. Causas de falsos positivos en las pruebas


Existen otras pruebas treponémicas: la de ab-
serológicas no treponémicas para la sífilis. sorción del anticuerpo treponémico fluorescente
(FTA-ABS), y la determinación de microhema-
Causa Incidencia de glutinación para anticuerpos frente a T. pallidum
reacciones falsamente
(MHA-TP). Las pruebas de hemaglutinación y FTA-
positivas, %*
ABS son específicas y, cuando se les utiliza para la
Reacción falsamente positiva aguda (< 6 meses) confirmación de positividad de las pruebas de anti-
cuerpos reagínicos, tienen un valor predictivo po-
Infección viral o vacunación reciente 1-2
Herpes genital 4-4
sitivo para el diagnóstico de sífilis elevado, aunque
Infección por el virus de incluso estas pruebas dan falsos positivos, hasta en
la inmunodeficiencia humana 1-4 1 a 2% de los casos, cuando se utilizan como mé-
Infección por Mycoplasma pneumoniae 1-2
todos de detección en la población general. La
Paludismo 11
Consumo de drogas por vía parenteral 20-25 prueba de la inmovilización de T. pallidum (TPI), en
la que los microorganismos vivos de T. pallidum
Reacción falsamente positiva crónica (≥ 6 meses)
quedan inmovilizados por suero inmune más com-
Envejecimiento 9-11 plemento, es el estándar de oro muy específico,
Trastornos autoinmunitarios 1-20 pero más laborioso de realizar y sólo se efectúa en
Lupus eritematoso sistémico 11-20 pocos laboratorios de investigación.46
Artritis reumatoide 5
Consumo de drogas por vía parenteral 20-25 En el cuadro I se registra la sensibilidad relativa
de las pruebas VDRL, FTA-ABS y MHA-TP en las
* Datos tomados de diversas publicaciones (citas 1, 3, 10). diferentes fases de la sífilis. Adviértase que las prue-
bas no treponémicas no muestran reactividad en 91
ción para el diagnóstico serológico rápido en el 25% de los pacientes con sífilis primaria o tardía.
contexto de la consulta médica, pero el VDRL si- En la sífilis primaria, la detección de anticuerpos
gue siendo la técnica de referencia cuando se apli- puede incrementarse mediante la realización de la
ca sobre líquido cefalorraquídeo (LCR). prueba FTA-ABS o simplemente mediante la repe-
Las pruebas RPR y VDRL tienen una sensibili- tición de la prueba VDRL al cabo de una a dos se-
dad similar y pueden utilizarse para la detección manas, si la prueba inicial fue negativa; pero una
inicial o la cuantificación de los anticuerpos séri- prueba de anticuerpos reagínicos no es suficiente
cos. El título sérico refleja el grado de actividad de por sí misma para la detección de la sífilis tardía
la enfermedad. En la evolución de la sífilis inicial sintomática. En los casos probables de sífilis tardía
puede observarse un incremento al cuádruple o se debe realizar de manera sistemática la prueba
mayor del título. En la sífilis activa de la prueba FTA-ABS que es más sensible. Las pruebas de he-
VDRL alcanza niveles de 1:32 o más en la sífilis se- maglutinación suelen ser menos sensibles que las
cundaria. Una disminución persiste de dos dilucio- pruebas reagínicas en la sífilis primaria, pero en
nes al cuádruple, o más, tras el tratamiento de la otras fases son tan sensibles como la prueba FTA-
sífilis inicial representa un indicio de respuesta ade- ABS. Todas las pruebas treponémicas y no trepo-
cuada al tratamiento. Los títulos en las pruebas némicas son siempre reactivas durante la sífilis se-
VDRL no se corresponden con los observados en
edigraphic.com
cundaria, y un resultado negativo excluye virtual-
la prueba RPR, y las pruebas cuantitativas secuen- mente la posibilidad de sífilis en un paciente que
ciales, como las aplicadas para conocer la respues- presente lesiones mucocutáneas compatibles. Me-
ta terapéutica, deben estar basadas en el uso de un nos de 1% de los pacientes con sífilis secundaria
solo método de medición.45 presenta negatividad o positividad débil en la prueba

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VDRL con suero no diluido, con positividad para pra, mononucleosis infecciosa y otras infecciones
diluciones séricas mayores, lo que se conoce como se debían principalmente a la utilización de los pri-
fenómeno de prozona. Aunque las pruebas no tre- meros reactivos lipoídicos. Las pruebas VDRL y RPR
ponémicas se negativizan o muestran positividad modernas tienen una especificidad de 97 a 99% y
con títulos bajos tras el tratamiento de la sífilis ini- los falsos positivos se limitan, en el momento ac-
cial, las pruebas treponémicas suelen presentar tual, a los procesos que se mencionan en el cuadro
positividad después del tratamiento y, por tanto, II. Las pruebas reagínicas arrojan resultados falsa-
no son útiles para determinar la actividad de la in- mente positivos hasta en 25% de drogadictos por
fección en las personas con antecedentes de sífi- vía intravenosa. Es frecuente también la positivi-
lis.47 dad falsa en personas con enfermedades autoin-
Se ha propuesto que la presencia de anticuer- munitarias. La prevalencia de falsos positivos en las
pos IgM específicos pudiera ser un marcador de pruebas no-treponémicas es mayor a medida que
sífilis activa debido a que estos anticuerpos des- los pacientes tienen más edad; 10% de las perso-
aparecen tras el tratamiento adecuado; sin embar- nas mayores de 70 años presenta reacciones falsa-
go, dado que la velocidad de desaparición de los mente positivas. En el paciente con prueba reagí-
anticuerpos IgM es variable en cada paciente, no nica falsamente positiva, la sífilis se excluye por la
se recomienda la aplicación de este criterio de cu- negatividad en una prueba treponémica.49
ración. Para la evaluación de los lactantes con sífilis En la práctica, los médicos y laboratoristas clíni-
congénita (figura 19), los Centers for Disease Con- cos deben estar familiarizados con los tres usos de
trol and Prevention han aprobado una nueva prue- las pruebas serológicas en la sífilis: 1) estudio de un
ba FTA-ABS 19S IgM.48 gran número de muestras de suero para detección
92 Resultados serológicos falsamente positivos o diagnóstico, mediante las pruebas RPR o VDRL,
para la sífilis. Puesto que el antígeno utilizado en 2) medición cuantitativa del título de anticuerpos
las pruebas no treponémicas también se encuen- reagínicos para evaluar la actividad clínica de la sífi-
tra en los tejidos, estas pruebas pueden resultar lis o para vigilar la respuesta al tratamiento, verbi-
positivas en personas que no presentan infección gracia, la prueba VDRL y 3) confirmación del diag-
treponémica, aunque rara vez los títulos superan nóstico de sífilis en un paciente con positividad en
1:8. En una población seleccionada para la aplica- una prueba de anticuerpos reagínicos o con pre-
ción de pruebas de detección debido a sospecha sunto diagnóstico clínico de sífilis, por ejemplo, las
clínica, con antecedentes de exposición o incre- pruebas FTA-ABS o MHA-TP.50
mento en el riesgo de infecciones de transmisión Evaluación de la neurosífilis asintomática.
sexual, menos de 1% de los resultados positivos La afectación asintomática del SNC se detecta
han demostrado ser falsos. Los falsos positivos en mediante el estudio del LCR en busca de pleocito-
pruebas reagínicas se clasifican como agudos, si se sis, aumento de la concentración de proteínas y
negativizan a los seis meses, y crónicos cuando actividad del VDRL. Las alteraciones del LCR se
persisten seis meses o más. El embarazo suele han encontrado hasta en 40% de casos de sífilis
mencionarse como causa de falsos positivos, pero primaria o secundaria, y en 25% de los casos de
en diversos estudios se ha demostrado una frecuen- sífilis latente. Se ha podido recuperar T. pallidum
edigraphic.com
cia muy baja de falsos positivos en las embaraza- mediante inoculación al conejo en un tercio de los
das, por lo que la positividad en las pruebas VDRL pacientes con sífilis primaria o secundaria, pero casi
o RPR en estas pacientes se debe considerar real. nunca en aquéllos con sífilis latente. La demostra-
La frecuencia elevada de falsos positivos que se ción de T. pallidum en el LCR suele acompañarse
obtenía hace varios decenios en pacientes con le- de otras alteraciones en el LCR; no obstante, los

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microorganismos también se pueden demostrar en que viven en barrios hacinados, varones homo-
pacientes con LCR, por lo demás, normal. Antes sexuales activos y/o los trabajadores migrantes, tie-
de la introducción de la penicilina, el riesgo de pre- nen riesgo mayor de infección por el VIH, la co-
sentar neurosífilis clínica era casi proporcional a la existencia de ambas infecciones se ha observado
intensidad de las alteraciones del LCR en la sífilis con frecuencia en el mismo paciente. Existen prue-
inicial. El estudio del LCR es esencial en la evalua- bas de que la sífilis y otras infecciones de transmi-
ción en cualquier paciente seropositivo con signos sión sexual (ITS) que cursan con úlceras genitales
y síntomas neurológicos, y se ha recomendado en pueden representar un factor de riesgo importan-
todos los pacientes con sífilis no tratada de dura- te para la adquisición y transmisión de la infección
ción desconocida o mayor de un año. El tratamiento por VIH (figuras 20, 21 y 22).54
con bencilpenicilina (penicilina G benzatina) de la Las manifestaciones de la sífilis suelen estar al-
sífilis inicial no alcanza niveles treponemicidas en el teradas en los pacientes con infección simultánea
LCR; por ello, algunos expertos aconsejan la pun- por el VIH con menos de 200 linfocitos CD4+, y
ción lumbar en la sífilis secundaria y latente inicial, en ellos se ha observado múltiples casos de recidi-
con estudios de seguimiento en quienes presenten va neurológica tras el tratamiento convencional. El
alteraciones significativas a juicio del clínico tratan- T. pallidum se ha aislado del LCR de varios pacien-
te.49-51 tes tras el tratamiento de la sífilis inicial con bencil-
La prueba del VDRL en el LCR que no está con- penicilina benzatina. En un estudio multicéntrico
taminado por sangre, tiene una gran especificidad; efectuado con enfermos de sífilis temprana se ob-
pero este método es relativamente insensible y servó una respuesta terapéutica similar en los pa-
puede ser negativo incluso en caso de neurosífilis cientes con y sin infección simultánea por el VIH,
sintomática progresiva. El grado de sensibilidad es aunque el poder estadístico del estudio no era su- 93
mayor en la sífilis meningovascular y en la paresia ficiente para excluir un posible efecto inducido por
general, y menor en la neurosífilis asintomática y la el VIH; además, no fue posible realizar el segui-
tabes dorsal. Las mediciones de anticuerpo IgM o miento en 41% de los pacientes. Este estudio con-
IgG intratecales no han demostrado tener sensibi- firmó la elevada incidencia de invasión del SNC en
lidad suficiente. La prueba FTA no absorbida en el la sífilis inicial, así como la persistencia de T. palli-
LCR es reactiva con más frecuencia que la prueba dum tras el tratamiento convencional: 11 (25.6%)
VDRL en el LCR y en todos los estadios de la sífilis, de 43 pacientes infectados por el VIH y 21 ( 23.8%)
pero la positividad en la FTA suele reflejar la trans- de 88 no infectados por el virus presentaron T. pa-
ferencia pasiva de anticuerpos séricos hacia el LCR; llidum detectable en el LCR antes del tratamiento;
la negatividad de la FTA en el LCR puede utilizarse siete de los 35 pacientes en los que se realizó pun-
para descartar la neurosífilis. Incluso en ausencia ción lumbar tras el tratamiento (algunos infecta-
de un estudio confirmatorio de LCR, estará indica- dos por el VIH y otros no infectados) todavía pre-
do dar tratamiento con penicilina, a dosis adecua- sentaban T. pallidum detectable en el LCR.55
da, en cualquier paciente con positividad en la prue- Se desconoce la frecuencia de manifestaciones
ba de anticuerpos séricos frente a treponemas y clínicas y de laboratorio infrecuentes de la sífilis en
que también padezcan alteraciones neurológicas los pacientes con coinfección por el VIH. Es posi-
compatibles con neurosífilis.52,53
edigraphic.com
ble que tales cambios dependan de la fase de in-
Evaluación de la sífilis en los pacientes in- fección por el VIH y del grado de inmunodepre-
fectados por el virus de la inmunodeficiencia sión. No existen pruebas de que la mayoría de los
humana (VIH). Debido a que las personas con pacientes infectados por el VIH y con sífilis inicial
mayor riesgo de padecer sífilis son sujetos pobres tengan sensibilidad diferente de las pruebas sero-

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lógicas para la sífilis, o de la respuesta serológica clínicos, los médicos generales y el personal de sa-
frente al tratamiento, en comparación con los pa- lud pública es deseable y necesaria.
cientes que no presentan infección por este virus. En los países en desarrollo, la sífilis se diagnosti-
La interpretación de los resultados serológicos debe ca poco y se ha dado la falsa impresión de que la
ser la misma en ambos grupos.56,57 enfermedad “está en retirada”. En México se han
La evaluación de todos los pacientes con sífilis realizado diversas investigaciones conducidas por
debe incluir la caracterización serológica del VIH, el Instituto Nacional de Salud Pública en las que se
siempre con el consentimiento del paciente. En ha demostrado una prevalencia variable de 6.4 a
el mismo sentido, es necesario descartar la pre- 15.1% en los grupos de riesgo alto, y en las usua-
sencia de sífilis en todas las personas en las que se rias de los servicios de planificación familiar la pre-
diagnostica infección por VIH. En la actualidad, al- valencia varió de 1.1% a 2.5%. Estos datos, son
gunos expertos, teniendo en cuenta los casos de prueba de que existe un subregistro enorme de
persistencia de T. pallidum en el LCR de los pa- los casos infectados, y que los laboratoristas clíni-
cientes infectados por el VIH tras el tratamiento cos deberán contribuir al mejor conocimiento y
convencional de la sífilis inicial con penicilina ben- manejo adecuado no sólo de la sífilis, sino de todas
zatina, recomiendan el estudio del LCR para des- las enfermedades de transmisión sexual.60,61 Es ne-
cartar signos de neurosífilis en todos los pacien- cesario promover la investigación epidemiológica
tes que presentan coinfección, con independen- en lo referente a la calidad y oportunidad del diag-
cia de la fase clínica de la sífilis; además, se reco- nóstico, y el seguimiento cabal de los contactos
mienda el tratamiento de la neurosífilis cuando se sexuales del paciente; por ello, será necesario am-
detectan alteraciones en el LCR y en los casos en pliar las encuestas de prevalencia en grupos de ries-
94 los que no se lleva a cabo el estudio del LCR. Otros go alto, usando los métodos más fiables. Los pató-
autores no aconsejan el estudio sistemático del LCR logos clínicos inteligentes y bien preparados que
en los pacientes con sífilis inicial y coinfección por hay en México pueden contribuir eficazmente a
el VIH, y piensan que el tratamiento habitual es subsanar las deficiencias y reforzar, de este modo,
suficiente. En todos los pacientes sifilíticos es im- la lucha más efectiva contra las enfermedades ve-
portante realizar pruebas serológicas postratamien- néreas y la lúes en particular, que se ha mantenido
to, especialmente en quienes también presenta- oculta y/o mal diagnosticada. Este trabajo prelimi-
ban infección por VIH58,59 y de manera muy parti- nar, espero suscite una discusión crítica vigorosa, y
cular en los afectados de sífilis maligna, rápidamen- sólo pretende servir como fuente de estímulo y
te progresiva (figura 23). conocimiento para los investigadores y científicos
Discusión y comentarios. La dificultad para cul- inquietos, amantes de conocer la verdad. Éste es
tivar los treponemas patógenos in vitro ha impedi- el mayor reto del futuro próximo.
do la producción “en masa” y el análisis de los an-
tígenos treponémicos, y los intentos de inducir la Referencias
inmunidad protectora frente a la sífilis han dado
resultados limitados.1,4 Sin embargo, el uso racio- 1. Holmes KK, Mardh PA, Sparling PF, Wiesner PJ, Cates W, Lemon
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