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2009
Documento de sesión
FINAL
A6-0016/2007
29.1.2007
INFORME
sobre la reforma de la organización común del mercado vitivinícola
(2006/2109(INI))
RR\650351ES.doc PE 374.352v02-00
ES ES
PR_INI
ÍNDICE
Página
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS................................................................................................. 21
PROCEDIMIENTO ................................................................................................................. 38
ES
PROPUESTA DE RESOLUCIÓN DEL PARLAMENTO EUROPEO
El Parlamento Europeo,
– Visto el Reglamento (CE) nº 1493/1999 del Consejo, de 17 de mayo de 1999, por el que
se establece la organización común del mercado vitivinícola1,
– Vistas las conclusiones del seminario sobre los retos y las perspectivas de futuro para los
vinos europeos organizado por la Comisión el 16 de febrero de 20067,
– Vistos los estudios externos realizados por cuenta de la Comisión8 y del Parlamento
Europeo9,
1
DO L 179 de 14.7.1999, p. 1, modificado por última vez por el Reglamento (CE) nº 1791/2006 (DO L 363 de
20.12.2006, p. 1).
2
DO C 219 de 30.7.1999, p. 199.
3
DO C 150 de 28.5.1999, P. 289.
4
DO C 279 de 1.10.1999, p. 385.
5
DO C 177 E de 25.7.2002, p. 50.
6
DO C 280 E de 18.11.2006, p. 48.
7
http://ec.europa.eu/agriculture/capreform/wine/index_es.htm.
8
«Ex-post evaluation of the Common Market Organisation for Wine»
http://ec.europa.eu/agriculture/eval/reports/wine/index_en.htm.
9
«Reforma de la OCM del vino» (IPOL/B/AGRI/ST/2006-22).
ES
A. Considerando que el sector vitivinícola es un elemento clave del modelo agrícola
multifuncional europeo, que cuenta con más de 1 600 000 explotaciones, que cubren 3,4
millones de hectáreas y que asegura el 5,4 % del valor de la producción agrícola de la
Unión, mientras que sólo absorbe el 2,5 % de los gastos del Fondo Europeo de
Orientación y Garantía Agrícola (FEOGA); que, en principio, el cultivo del vino es una
actividad positiva para el medio ambiente, ante todo porque protege los suelos de la
erosión y por regla general hace un uso extensivo de los recursos naturales,
F. Considerando que la reforma del sector vitivinícola debe aportar certeza al futuro de la
OCM y estabilidad a los viticultores y que es necesario evitar que la reforma vuelva a ser
cuestionada con ocasión de las negociaciones de la Ronda de Doha, en particular, en lo
relativo al apoyo interno,
G. Considerando que el sector vitivinícola de la Unión Europea requiere una firme toma de
posición política por parte de la Unión para promover la posición de los vinos y del
sector vitivinícola en nuestra sociedad mediante la elaboración de una genuina política
vitivinícola europea a través de la OCM,
H. Considerando que la Comisión debe actuar para que la reforma del sector se centre en
elaborar una verdadera política comunitaria vitivinícola, que contribuya a mejorar las
estructuras de producción, de transformación y, sobre todo, de comercialización en la
Unión Europea, y a desarrollar los nuevos mercados en expansión, consolidando a la vez
los mercados tradicionales,
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cabe considerar que la opción de una reforma fundamental de la OCM del sector
vitivinícola con importantes modificaciones de las medidas propuestas podría alcanzar
los objetivos que se persiguen,
M. Considerando que la situación del sector vitícola exige una reforma justa y ambiciosa
que, mediante una profunda adaptación de la OCM, debe permitir garantizar un
verdadero futuro a la viticultura europea, sin romper su capacidad productiva,
N. Considerando que esta reforma ambiciosa debe prever medios suficientes que permitan
garantizar a la vez la financiación de las adaptaciones necesarias para la modernización
de la OCM del sector vitivinícola y de las consecuencias sociales que puedan derivarse
de ella,
O. Considerando que cabe criticar la hipótesis de una reforma radical de la OCM elegida por
la Comisión, por las siguientes razones:
iii) la liberalización total del potencial es peligrosa porque podría anular los esfuerzos
para restablecer el equilibrio entre la oferta y la demanda y conducir a una
deslocalización del viñedo; no se aborda el verdadero desafío, que es el de una mejor
circulación de los derechos de plantación en un Estado miembro,
iv) las propuestas de la Comisión tienden de hecho a una reducción progresiva de las
medidas de reglamentación del mercado y de apoyo a los viticultores, mediante la
transferencia de créditos del primer al segundo pilar de la PAC, es decir, el
desarrollo rural,
ES
v) los ciudadanos europeos se muestran muy críticos en relación con la evolución del
sector, la forma de gestión del régimen y las posibilidades comerciales de los vinos
europeos, a la vez que se refuerza ampliamente la posición de los vinos importados
del «nuevo mundo»,
viii) la Comisión prevé una reestructuración de la viticultura europea que conducirá a una
concentración de la producción en unas pocas grandes explotaciones vitivinícolas y
a una uniformización de los vinos producidos, lo que pondrá en peligro, por lo tanto,
la diversidad de los vinos europeos y la riqueza económica, social y cultural de
numerosas regiones europeas,
P. Considerando que, con respecto a la política comercial agresiva del «nuevo mundo», la
OCM ha de evolucionar para favorecer una mayor competitividad del sector vitivinícola
comunitario y su adaptación a la evolución del mercado mundial, sin que ello convierta al
sector europeo en la variable de ajuste del mercado mundial,
Q. Considerando que la reforma de esta OCM constituye una oportunidad única para
restablecer la competitividad del sector vitivinícola europeo en un contexto internacional
cada vez más competitivo,
T. Considerando que la competitividad del sector vitivinícola sólo se puede mejorar con
medidas sistemáticas de información y promoción, con el fin de recuperar cuotas de
mercado en el ámbito comunitario y conquistar nuevas cuotas en países emergentes;
considerando que las actividades de promoción deberán financiarse a través de un fondo
de promoción ad hoc administrado por las asociaciones profesionales e
interprofesionales, los consorcios de protección de los productos o las agencias públicas
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de desarrollo territorial,
d) compatibilidad del sector vitivinícola con las políticas de la PAC, para conseguir
una reforma viable de la OCM,
h) aplicación progresiva de la nueva OCM en dos fases, para poder evaluar los efectos
producidos tras la primera fase, así como posibles adaptaciones de las políticas
comunitarias seleccionadas por los Estados miembros e incluidas en los programas
nacionales de apoyo y desarrollo del sector vitivinícola, sin que ello afecte a la
distribución del presupuesto de la OCM entre los Estados miembros,
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2. Subraya que la reforma también debe tener en cuenta:
3. Cree que la reforma de la OCM debe fijar objetivos y reforzar el carácter coherente de las
políticas, las medidas de equilibrio del mercado, las intervenciones estructurales y las
normas de etiquetado y clasificación de los vinos, definiendo los objetivos de la OCM y
las políticas que pueden aplicarse para alcanzarlos; considera que esta coherencia global
debe apoyarse, sin embargo, en el principio de subsidiariedad para respetar las
particularidades a nivel nacional y regional y demostrar que la Unión Europea ganará los
mercados y la confianza de los consumidores a través de políticas coordinadas;
4. Opina que la transferencia de créditos del primer al segundo pilar de la PAC, que implica
la cofinanciación a través de programas de desarrollo regional, no tiene ninguna lógica y
debe rechazarse como forma de dotar con medios a los marcos financieros nacionales y
para asegurar el desarrollo sostenible del sector a través de las medidas del marco
financiero nacional indicadas por la Comisión;
5. Recuerda que la distribución de los recursos comunitarios de los demás sectores agrícolas
que han sido reformados en el contexto de la nueva PAC con la creación de «paquetes
nacionales» se realizó sobre la base de la lógica de la disociación total o parcial de las
subvenciones comunitarias; subraya que la nueva OCM del sector vitivinícola se debe
basar en la realización de medidas homogéneas, comunes a todos los Estados miembros,
y en medidas que contemplen la subsidiariedad, que permitan tener en cuenta las
necesidades específicas del sector en cada Estado miembro o región de producción;
añade que en cada Estado miembro el sector (producción, comercio, organizaciones
interprofesionales, regiones de producción, etc.) debe definir, en conexión con la
administración regional y nacional y por medio de una serie de programas, la manera de
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alcanzar el objetivo de adaptación de la producción al mercado, utilizando una o más
medidas de este grupo; considera que las medidas relativas a la subsidiariedad deben
definirse y enmarcarse a nivel europeo para evitar distorsiones de la competencia, y que
el presupuesto comunitario debe financiarlas en su totalidad;
6. Opina que, para conseguir sus objetivos, la reforma debe realizarse de forma progresiva
en dos fases; en la primera fase (2008-2011), el objetivo deberá ser equilibrar, sanear y
hacer transparente el mercado, apoyar a los productores y a las regiones vitícolas,
adoptando de forma progresiva medidas que tengan sobre todo carácter comunitario y
que preparen al sector vitivinícola europeo para una apertura más agresiva de los
mercados, trasladando progresivamente los recursos procedentes de la destilación a las
ayudas a la competitividad y al desarrollo;
8. Afirma que, puesto que la situación actual requiere la inmediata adopción de medidas
para solucionar los problemas del sector vitivinícola europeo, las políticas de apoyo a la
reforma - ya sea con el presupuesto comunitario actual, ya sea, en caso necesario, con un
aumento del mismo - deben aplicarse desde el principio y algunas de ellas con una
intensidad creciente, como, por ejemplo, el fomento de la comercialización y la mejora
de la calidad, mientras que otras medidas, como, por ejemplo, los mecanismos de
intervención en el mercado, deben aplicarse de forma decreciente;
Reforma radical de la OCM del sector vitivinícola - Compatibilidad con la nueva PAC
9. Subraya que, en principio, la viticultura ejerce una acción positiva sobre el medio
ambiente, sobre todo por la protección de los suelos contra la erosión, pero también
porque, por regla general, implica un uso extensivo de los recursos naturales; afirma que
por estas razones, y también con vistas a armonizar el régimen en el espíritu de la nueva
PAC, conviene promover a nivel comunitario las principales prácticas agrícolas que
tengan en cuenta y favorezcan el medio ambiente y puedan financiarse a cargo del
presupuesto de la OCM;
Control de la producción con fines de calidad, respeto del medio ambiente y equilibrio del
mercado
10. Señala que la fijación de un marco para la producción de los vinos de mesa contribuirá a
clarificar las condiciones de su comercialización y a diferenciarlos de los vinos con
indicación geográfica, cuyas condiciones de producción son mucho más estrictas y están
protegidos a nivel local y regional;
11. Considera indispensable que los viticultores se adapten a prácticas de cultivo y al respeto
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del medio ambiente en lo que se refiere al uso de plaguicidas y otros productos, con
vistas a que contribuyan a la protección del medio ambiente, al control de la producción
primaria, a la limitación del potencial de rendimiento, a la lucha contra los excedentes y a
la mejora de la calidad de los vinos, reduciendo de este modo las cantidades a destilar;
12. También considera oportuno fomentar mediante incentivos los usos alternativos del
alcohol y de los subproductos de la vinificación a través de políticas bioenergéticas, lo
que podría contribuir de forma importante a reducir los excedentes de producción;
Destilación - Mecanismo de gestión de crisis y equilibrio del mercado, protección del medio
ambiente y mejora de la calidad
14. Subraya que la destilación del vino se introdujo originalmente sólo como una medida de
urgencia, pero que se ha convertido en la parte más costosa y discutible de la OCM del
sector vitivinícola; considera, por consiguiente, que los sistemas de destilación deben
reducirse progresivamente durante un período de transición razonable que permita a los
negociantes transformarse o pasar a métodos de producción más viables y a la
producción de vinos de calidad; señala que, durante ese período de transición, se debería
ofrecer a los viticultores que se hayan beneficiado de la destilación la posibilidad de
penetrar en los mercados de calidad, utilizando programas de arranque, medidas
voluntarias de gestión de la oferta y de desarrollo rural para una mejor comercialización
de los vinos de calidad y diversificación;
15. Rechaza la inmediata abolición del instrumento de destilación y otras medidas de apoyo
al mercado que, aunque existen claras posibilidades de mejora en su planificación y su
uso, no parece oportuno suprimir sin un periodo transitorio para aprovechar plenamente
los beneficios de algunas de estas medidas; subraya que en este periodo transitorio
deberán reducirse de forma gradual las cantidades destinadas a mecanismos de
intervención en el mercado, reforzando al mismo tiempo las medidas de mejora de la
calidad y de promoción de la comercialización de los vinos europeos;
16. Considera que, durante la primera fase de la reforma, es necesario convertir las cuatro
destilaciones actuales en sólo dos:
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medioambientales y de calidad;
b) una destilación voluntaria de alcohol de origen vínico que permita la adaptación del
sector del alcohol de origen vínico con vistas a incorporarlo a determinados
productos vínicos (vino de licor, brandy) o para equilibrar vinos;
17. Considera conveniente preservar las ayudas a las prestaciones vínicas para seguir
garantizando la calidad de los vinos comunitarios y evitar daños medioambientales
derivados de la retirada de esos productos; debería mantenerse asimismo un apoyo a la
destilación de alcohol de uso de boca por ser la única que tiene una verdadera salida al
mercado;
18. Considera que debe revisarse la aplicación de la destilación de los subproductos, para que
sea menos costosa a nivel comunitario, en particular permitiendo la orientación de una
parte de los alcoholes, como el alcohol de boca, hacia otros mercados;
19. Considera necesario crear un nuevo mecanismo de gestión de crisis al que se podría
recurrir en caso de situaciones de emergencia específicas, graves y reales, identificadas
mediante rigurosos criterios objetivos previamente definidos a nivel comunitario;
21. Subraya la necesidad de mantener las ayudas a los mostos que se destinan a la
transformación en zumos de uva: se trata de mantener la utilización de un producto para
un fin alternativo a la producción de vino, que reviste una importancia para el sector y
contribuye al equilibrio del mercado;
23. Considera que la cuestión del abandono definitivo de las viñas no debe constituir el punto
central de la reforma de la OCM, sino que debe ser uno de los parámetros de las
intervenciones estructurales financiadas con cargo al presupuesto de la OCM en el
contexto de las dotaciones financieras nacionales, con vistas a renovar el potencial
vitícola y a conseguir el ajuste progresivo del sector del vino a las necesidades del
mercado;
24. Opina que la iniciativa de abandono definitivo de las viñas debe corresponder al
productor, con la condición de que los Estados miembros puedan aprobar o no el
abandono definitivo aplicando criterios nacionales o regionales de carácter
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medioambiental y social compatibles con los criterios previamente definidos a nivel
comunitario; considera importante prever que cada Estado miembro o región pueda fijar
un límite máximo de arranque por zonas flexible ,y tenga la posibilidad de elegir las
categorías de vinos prioritarios en los programas de arranque;
25. Opina que entre los criterios comunitarios objetivos para limitar la posibilidad de
abandono definitivo podrían encontrarse los siguientes: a) viñedos situados en zonas
montañosas, costeras o insulares que producen sobre todo vinos con indicación
geográfica; b) viñedos situados en zonas de ladera donde deben evitarse la erosión de los
suelos y la pérdida de biodiversidad, o situados en regiones de producción tradicionales y
con importancia histórica; c) viñedos que producen vinos con salida comercial; d)
viñedos cuya reducción excesiva suponga una amenaza para la existencia de toda una
región o de una denominación de origen controlado (DOC); e) viñedos que hayan
recibido ayudas estructurales en el marco de programas comunitarios; f) viñedos en los
que el abandono de la producción implique riesgos medioambientales;
26. Opina que los criterios comunitarios objetivos en relación con una reestructuración más
general del potencial productivo y humano en el medio rural y que podrían facilitar la
opción por el abandono definitivo se refieren, de forma indicativa, a los casos siguientes:
a) viñedos que ya tengan un bajo rendimiento, sin posibilidad de renovar su potencial; b)
los casos relacionados con la integración de los viticultores al programa de jubilaciones
anticipadas; c) viñedos no aptos para la producción de vinos de calidad o
comercializables;
27. Recomienda que, con independencia del régimen de abandono definitivo, se pueda
introducir el arranque temporal, cuya aplicación se llevaría a cabo según la conveniencia
de cada Estado miembro; está convencido de que el arranque temporal supondría una
ayuda económica para los viticultores, en la medida en que el derecho de replantación se
suspendería durante varios años, al cabo de los cuales el viticultor podría bien replantar
de nuevo, bien ceder sus derechos, bien solicitar la transformación en arranque definitivo
si está previsto dicho régimen en el Estado miembro afectado;
28. Afirma que las superficies arrancadas por las que se pagará una indemnización a tanto
alzado se deben poder añadir a las superficies elegibles para tener derecho a una ayuda
disociada única; propone que se tengan en cuenta exigencias mínimas en materia de
medio ambiente para fijar la prima por arranque y la ayuda específica de mantenimiento,
con el fin de evitar la degradación de las zonas rurales; opina que cada Estado miembro
debe tener la posibilidad de ofrecer a los viticultores incluidos en el programa de
arranque una ayuda adicional procedente de los recursos del programa de apoyo y
desarrollo del sector vitivinícola o de la aplicación del régimen de regresividad o de la
redistribución de la reserva nacional de derechos a la ayuda única, de forma que la ayuda
a los productores pueda llegar a la media regional de la ayuda directa disociada;
considera que no pueden concederse indemnizaciones por el arranque de viñedos
ilegales;
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potencial vitícola de la Unión, que tendría una influencia negativa en el mercado; los
Estados miembros deben presentar una programación en la que debe incluirse el nivel de
plantación deseado, la evolución de la reatribución progresiva de los derechos de
plantación, las variedades afectadas en cada región y el calendario de aplicación; subraya
que los nuevos derechos de plantación deberían destinarse principalmente a los jóvenes
agricultores, a los productores de vinos de calidad y a las explotaciones incluidas en
programas de mejora de la calidad y comercialización, y que deben figurar en el catastro
vitícola adaptado; opina que cada Estado miembro, en colaboración con las regiones, los
organismos del sector y las uniones de productores deberá, antes de proceder a la
atribución de nuevos derechos de plantación, evaluar el programa de arranque y su
evolución; considera que, antes de atribuir nuevos derechos de plantación, debe evaluarse
la situación de las plantaciones no legalizadas o ilegales;
30. Subraya que, por lo que se refiere a las zonas de producción con indicación geográfica,
podría ser necesario que las decisiones relativas a la liberalización sean tomadas por las
autoridades regionales competentes, dada la necesidad de salvaguardar el valor de las
inversiones efectuadas por los viticultores de la zona de indicación geográfica, de evitar
una pérdida de prestigio de la propia indicación y de mantener el control sobre la calidad
del producto;
31. Opina que las nuevas plantaciones no pueden asimilarse a las acciones elegibles para la
financiación, como las medidas de reestructuración, las prácticas de cultivo y la
condicionalidad y la gestión de crisis del mercado, pero que en cambio pueden incluirse
en las acciones colectivas de las organizaciones de productores o las organizaciones del
sector, que llevan a cabo políticas de promoción, información a los consumidores,
investigación del mercado, o en las indemnizaciones en caso de catástrofes naturales,
incluidas en los planes nacionales de apoyo y desarrollo del sector vitivinícola;
32. Recomienda que los Estados miembros mantengan un catastro vitícola en el que se
indicarán las variedades plantadas y el número de vides plantadas en cada unidad
(conforme al Reglamento (CEE) nº 2392/861);
33. Subraya que el catastro vitícola es el instrumento básico para el control del respeto de los
límites de producción;
Enriquecimiento
34. Es consciente de que el enriquecimiento tiene un impacto directo sobre los niveles de
producción, ya que puede provocar un aumento de la cantidad producida por hectárea;
subraya, no obstante, que la cuestión del mantenimiento o supresión de las ayudas a los
mostos concentrados y a los mostos concentrados rectificados está indisolublemente
ligada a la supresión o mantenimiento de la chaptalización con sacarosa, teniendo
asimismo en cuenta la disminución del precio del azúcar, consecuencia de la reforma de
1
Reglamento (CEE) nº 2392/86 del Consejo, de 24 de julio de 1986, relativo al establecimiento del registro
vitícola comunitario (DO L 208 de 31.7.1986, p. 1). Reglamento cuya última modificación la constituye el
Reglamento (CEE) nº 3577/90 (DO L 353 de 17.12.1990, p. 23).
ES
la OCM de este último, las diversas tradiciones enológicas de los Estados miembros, la
oportunidad y viabilidad técnica de limitar la utilización de dichas prácticas enológicas
dentro de unos límites máximos cuantitativos precisos, así como las posibles
utilizaciones alternativas del mosto, que repercutirían de manera positiva en la reducción
de los excedentes de vino;
35. Opina que la admisibilidad del enriquecimiento con azúcar por parte de los Estados
miembros se podría vincular a condiciones como el control de las medidas de mejora de
la calidad (por ejemplo, respeto de los niveles máximos de producción) y las condiciones
climáticas;
36. Considera que el enriquecimiento debe permitirse en todas las regiones vitivinícolas en
las que se ha utilizado tradicionalmente y no existen excedentes estructurales; considera
que no está justificada la propuesta de la Comisión de reducir el nivel máximo de
enriquecimiento y que deben permanecer en vigor las normas actuales;
37. Considera que no habría que prohibir la chaptalización, puesto que ello supondría una
discriminación para los países situados en regiones de la Unión Europea donde la
vitivinicultura es más difícil debido a sus condiciones climáticas menos favorables; opina
además que las decisiones en este ámbito corresponden a los productores y no deberían
regularse mediante disposiciones de la legislación comunitaria;
38. Considera que si se lleva a cabo enriquecimiento por añadido de mosto concentrado, éste
debe proceder de la misma zona de producción;
39. Señala que el estudio en el que se establece la relación entre el enriquecimiento con
azúcar y el exceso de producción de vino en la Unión Europea es del año 1991, por lo
que ya no refleja las actuales condiciones del mercado y, en cualquier caso, no facilita
información útil;
41. Subraya que las organizaciones interprofesionales pueden tomar iniciativas en los
ámbitos siguientes, si existe para ello un marco comunitario de autorización que, por
ejemplo, podría incluir: el mejor aprovechamiento del potencial de producción, la
información a los consumidores sobre el consumo de vino con moderación, la realización
de encuestas necesarias para la orientación de la producción hacia productos mejor
adaptados a las necesidades de los mercados interior y de exportación, las inversiones
comerciales indispensables, la búsqueda de nuevos métodos para limitar el uso de
productos fitosanitarios, la conversión hacia la agricultura biológica, etc.
ES
vitivinícola, sobre todo a través de una política comunitaria eficaz y concreta de
promoción del vino europeo mediante la previsión de los compromisos financieros
adecuados;
43. Considera que sería necesario crear un fondo especial destinado a la promoción de los
vinos europeos a través de las organizaciones y organismos profesionales e
interprofesionales del sector, los consorcios de protección o las agencias públicas de
desarrollo territorial;
44. Cree que la Comisión debe establecer unas líneas generales de actuación para la
promoción de los vinos europeos, basadas en el consumo moderado y responsable de
vino, acompañadas de la financiación necesaria;
45. Opina que los objetivos de la Unión Europea deben ser la estabilización, la identificación
y la protección en todo el mundo de los vinos de procedencia geográfica precisa; subraya
que el reconocimiento de estos vinos será más fácil con la simplificación del etiquetado;
46. Considera que producir un vino de calidad con métodos tradicionales y etiquetarlo de
forma específica, sin promocionar adecuadamente el producto en el mercado mundial, no
basta para garantizar el mantenimiento o incluso el aumento de la demanda; opina que es
indispensable adoptar medidas específicas, adecuadamente financiadas, para aumentar la
capacidad de dar a conocer en el mercado mundial la calidad del vino europeo;
47. Considera que, tras la modificación de las disposiciones relativas al etiquetado efectuada
con los Reglamentos (CE) n° 1991/20041 y (CE) n° 1427/20042 de la Comisión, es
necesario evaluar sus efectos antes de proceder a ulteriores modificaciones;
48. Subraya que las prácticas enológicas no permitidas en la UE deben figurar con claridad
en las etiquetas de las bebidas importadas que se sirvan de la imagen del vino;
49. Considera que el etiquetado de vinos de la Unión Europea, aun siendo imprescindible, no
debiera ser más complicado que el etiquetado de vinos procedentes de terceros países;
1
Reglamento (CE) n° 1991/2004 de la Comisión, de 19 de noviembre de 2004, por el que se modifica el
Reglamento (CE) n° 753/2002 que fija determinadas disposiciones de aplicación del Reglamento (CE) n°
1493/1999 del Consejo en lo que respecta a la designación, denominación, presentación y protección de
determinados productos vitivinícolas (DO L 344 de 20.11.2004, p. 9).
2
Reglamento (CE) n° 1427/2004 de la Comisión, de 9 de agosto de 2004, que modifica el Reglamento (CE) n°
1622/2000 que fija determinadas disposiciones de aplicación del Reglamento (CE) n° 1493/1999, por el que se
establece la organización común del mercado vitivinícola, e introduce un código comunitario de prácticas y
tratamientos enológicos (DO L 263 de 10.8.2004, p. 3).
ES
Una política dinámica y ambiciosa de comercialización de los vinos de la UE en el
extranjero como pilar de la organización común de mercados (OCM)
51. Señala que las dificultades a que se enfrenta el sector vitivinícola se deben
principalmente al aumento de las importaciones de vino procedente de terceros países y
del aumento de la cantidad de vino almacenado en exceso de la producción anual con
pocas perspectivas de salida, que ejercen una presión a la baja sobre los precios y las
rentas de los productores y deberían ser atajadas mediante el establecimiento de una serie
de prioridades básicas que no quedan reflejadas en la comunicación mencionada de la
Comisión, como, por ejemplo, el fomento de un consumo moderado y responsable, la
reasignación de recursos presupuestarios para llegar a nuevos consumidores y conquistar
nuevos mercados o incluso reconquistarlos, así como la promoción de la calidad y el
impulso de la investigación;
52. Pide a la Comisión que haga todo lo posible para fortalecer la protección de las
indicaciones geográficas, aumentando el nivel de exigencia y creando un marco europeo
común para las mismas, tanto a escala europea como a nivel birregional y multilateral,
particularmente en el contexto de la OMC y de los acuerdos sobre los aspectos de los
derechos a la propiedad intelectual relacionados con el comercio (ADPIC), con vistas a la
creación de un registro multilateral para los vinos y bebidas espirituosas y para combatir
la falsificación y todas las formas de uso abusivo de las indicaciones geográficas
europeas y de las denominaciones tradicionales en los terceros países;
53. Considera necesario obtener una mejor protección de las indicaciones geográficas
protegidas (IGP) y de las denominaciones de origen protegidas (DOP) en el marco de las
negociaciones de la OMC y de los acuerdos bilaterales, pues es un factor de principal
importancia para mantener una producción vitivinícola de calidad, ligada a las regiones y
a los usos locales;
54. Subraya que, para reforzar la competitividad de este sector en los mercados
internacionales, es necesario definir, en estrecha concertación con las organizaciones
representativas de los operadores europeos, una política comercial exterior para los vinos
europeos que sea proactiva y ambiciosa, acompañada de una redistribución de los
recursos presupuestarios y de medios adecuados;
55. Hace hincapié en la necesidad de celebrar, en el marco de esta política comercial exterior
para los vinos europeos, acuerdos bilaterales con terceros países en materia de comercio
de vinos, sobre la base del reconocimiento mutuo y de la protección de las indicaciones
geográficas;
56. Recuerda que la Unión Europea se ha comprometido a suprimir de manera progresiva las
subvenciones a la exportación para 2013; pide a la Comisión que mitigue las
consecuencias de la reducción de las subvenciones mejorando la disponibilidad de
recursos para la diversificación de los ingresos por parte de los productores de vino,
estableciendo un acceso calificado al mercado para los productos vitícolas, en tanto en
cuanto sea necesario para preservar el equilibrio en el mercado europeo;
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58. Considera que, debido a las particularidades existentes en el régimen de indicación
geográfica de los vinos, se podría examinar, con ocasión de la primera fase de la reforma
(2008-2011), la posibilidad de integrar las disposiciones del Reglamento (CE)
nº 510/2006 del Consejo, de 20 de marzo de 2006, sobre la protección de las indicaciones
geográficas y de las denominaciones de origen de los productos agrícolas y alimenticios1
en los ajustes necesarios para la nueva OCM del sector vitivinícola; señala que en la
segunda fase de la reforma (2012-2015), después de que la clasificación progresiva y el
registro único de los vinos a nivel comunitario y nacional se hayan realizado durante la
primera fase, habrá que estudiar la conveniencia de integrar las disposiciones del futuro
Reglamento sobre la nueva OCM del sector vitivinícola relativas a las indicaciones
geográficas en el Reglamento (CE) nº 510/2006;
60. Señala que uno de los mayores peligros de desnaturalización de la producción de vino,
distorsión del comercio y reducción de la producción comunitaria es el levantamiento de
la prohibición de vinificar mostos importados, medida que debe rechazar la Comisión en
el marco de la OMC;
62. Subraya que no existe la obligación de negociar en el seno de la OMC en relación con la
posibilidad de mezclar vinos importados de terceros países y mezclarlos con vinos
comunitarios, y se opone a esta modificación, pues crearía enormes problemas para
determinar la procedencia e identificar los productos y devaluaría el vino producido en
los países europeos;
63. Considera esencial, para preservar la calidad y el reconocimiento de los vinos europeos,
que sólo puedan ser utilizados en su elaboración vinos y mostos producidos en la Unión
Europea;
1
DO L 93, de 31.3.2006, p. 12.
ES
enológicas deben quedar inscritas en una lista positiva comunitaria, susceptible de
revisión en función de la evolución del consumo;
65. Pide a la Comisión que aplique todas las medidas posibles para la prevención del fraude
y las infracciones en materia de indicaciones geográficas de origen en terceros países;
66. Considera que no debe privarse a la OCM específica del sector vitivinícola comunitario
de todos los medios financieros a nivel europeo a través de transferencias al segundo
pilar de la PAC y de la devolución a la competencia nacional de medidas que abran el
camino a distorsiones de la competencia y a una discriminación entre las estructuras de
producción y de comercialización y entre los Estados miembros;
67. Subraya que las prácticas enológicas no deben crear confusión para los consumidores,
reducir la calidad ni propiciar una competencia desleal; opina que las prácticas
enológicas admitidas hasta la fecha no pueden autorizarse automáticamente y que no
debe permitirse su uso en la UE incluso en los casos en que los vinos se destinen a la
exportación a regiones en que dichas prácticas están autorizadas;
69. Señala que se ha registrado una caída sostenida en el consumo de vino en Europa, en
especial en los países que consumen tradicionalmente más vino, lo que constituye una de
las causas del excedente estructural de vino; indica que en los últimos años se han
estancado las exportaciones de vino, mientras que las importaciones han crecido de
forma dinámica, por lo que resulta imprescindible que el sector vitivinícola europeo
incremente su competitividad; pide a la Comisión que elabore sin demora un informe en
el que se expliquen las razones de la reducción que se ha constatado estos últimos años
en las exportaciones de vinos europeos, así como del aumento constante de las
importaciones de terceros países, y en el que se precise, en particular, en qué medida se
han respetado los acuerdos comerciales bilaterales con terceros países, en qué medida se
han tenido en cuenta los intereses comerciales legítimos de la Unión Europea y de los
productores europeos y, finalmente, en qué medida se han utilizado como se debe los
mecanismos previstos por la política comercial común para resolver estos problemas;
70. Señala que el desarrollo sostenible del sector vitivinícola europeo requiere la
redistribución de considerables recursos presupuestarios en el marco de la OCM para el
fomento de un consumo de vino moderado y responsable; opina que el refuerzo de la
tendencia hacia un aumento del consumo moderado y responsable de vino constituye una
contribución importante a la protección de la salud pública y de los consumidores
europeos; dichas medidas deberán desarrollarse mediante una asociación efectiva entre la
Unión Europea, los Estados miembros, las regiones y el propio sector vitivinícola, que ha
de desempeñar un papel de primer orden;
71. Pide a la Comisión que aplique una política comercial dinámica para promover la calidad
ES
de los vinos europeos y defender los procedimientos de vinificación europeos;
75. Señala que, para la reforma de la OCM del sector vitivinícola, es prioritario establecer
políticas que contribuyan a fomentar la competitividad y a mejorar la calidad de los vinos
europeos; subraya que la distribución de los fondos comunitarios entre los programas
nacionales de apoyo y de desarrollo del sector vitivinícola debe efectuarse sobre la base
de criterios comunes para así evitar las desigualdades entre Estados miembros y regiones;
77. Estima que, sobre la base de una relación porcentual de los datos estadísticos de la
producción y la superficie de la viticultura de cada Estado miembro durante un periodo
dado, por ejemplo, 2001-2005, se puede proceder a la distribución a priori del
presupuesto de los excedentes nacionales, lo que permitiría a cada Estado miembro
aplicar, dentro de los fondos presupuestarios asignados, las herramientas que estime
oportunas dentro de un marco normativo preestablecido a nivel comunitario, conforme a
criterios objetivos, en el que las medidas contempladas tengan la misma ayuda para todos
los Estados miembros;
ES
78. Considera, no obstante, que también se puede considerar una solución válida la que se
basa en los importes utilizados por cada Estado miembro durante la vigencia de la OCM
del sector vitivinícola actual, o bien la elaboración de una fórmula o criterio mixto que
tenga en cuenta el factor histórico, las dimensiones del viñedo, la cantidad producida y
comercializada por cada Estado miembro, con el fin de garantizar un sistema de primas
que persiga los objetivos de la reforma;
79. Considera indispensable, en caso de que un Estado miembro considere que necesita una
ayuda adicional para mejorar sus intervenciones estructurales en el sector vitivinícola,
que también se puedan cofinanciar a partir del segundo pilar de la PAC, siempre que se
trate de acciones elegibles; opina que estas acciones deben principalmente asociar las
intervenciones estructurales, por una parte y los programas de jubilación anticipada, así
como las políticas de ayuda a los jóvenes agricultores y agricultoras, por otra;
80. Opina que las nuevas plantaciones no pueden integrarse en las acciones elegibles para
recibir financiación;
81. Afirma que toda reforma de la OCM del sector vitivinícola debe proteger y reforzar la
competitividad de los productores europeos de vino; subraya que la capacidad de
innovación y el dinamismo resultan imprescindibles a tal efecto;
o o
ES
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
II. Aspectos básicos que deben tenerse en cuenta para asegurar el desarrollo sostenible y la
competitividad del sector vitivinícola: exposición de los principios básicos de la reforma
de la organización común del mercado (OCM), en comparación con las propuestas de la
Comisión; crítica, debates y propuestas finales para la elaboración de la nueva reforma de
la OCM. La propuesta de nueva reforma de la OMC del sector vitivinícola, comparada
con la Comunicación de la Comisión, está basada en las políticas que se presentan en los
puntos siguientes:
L. Etiquetado
ES
N. Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) – acuerdos comerciales
bilaterales
La situación actual del sector vitivinícola se caracteriza sobre todo por los siguientes
factores:
ES
f) La aparición de excedentes coyunturales que tienden a convertirse en estructurales y
se elevan ya a 15 millones de hectolitros, es decir el 8,4 % de la oferta, aparte del
volumen que se destina a la producción de alcohol de boca.
h) Las crisis de mercado, que resultan en una baja de los precios y de los ingresos de
las explotaciones vitícolas; a pesar de las grandes divergencias entre regiones y en
los vinos producidos, estos ingresos descendieron un 12 % de media desde 1999,
año que se caracterizó por unos precios especialmente altos para los productores,
hasta 2003, año con un alto rendimiento de producción. Esta reducción no puede ser
considerada estructural pero, a menos que las fluctuaciones de la producción y la
demanda sean atajadas para garantizar una estabilidad previsible, se producirán
graves problemas sociales y económicos en las regiones productoras de vino.
ES
B. Reforma en dos fases (2008-2011 y 2012-2015)
Es indispensable aplicar la nueva OCM en dos fases: la primera fase (2008-2011) debe
tener como objetivo sanear el mercado y, gradualmente, adaptar la OCM a un marco más
sencillo y competitivo, centrado en políticas y medidas unitarias; en la segunda fase
(2012-2015) se perseguirá la completa aplicación de los programas de apoyo y desarrollo
del sector vitivinícola (PADSV) a nivel nacional y regional, sobre la base de los criterios
del mantenimiento de mercados estables y el refuerzo de la competitividad de los vinos
europeos.
Habida cuenta de que ni la actual OCM del vino ni el método de aplicación a nivel
nacional y regional prevén una ayuda directa a los viticultores, debe elaborarse una
política de apoyo a los viticultores que sea compatible con la nueva PAC, de manera que
la OCM del vino se ajuste a sus principios fundamentales. La Comisión considera que el
aumento de los ingresos de los agricultores mediante la disociación total sólo se
producirá a medio plazo debido al descenso paulatino del volumen de producción y del
interés comercial; es una consecuencia que la Comisión no desea, a juzgar por sus
comentarios sobre la tercera hipótesis posible. En cambio, la Comisión se muestra
particularmente favorable a promover un programa de arranque con vistas a reducir la
producción, medida que no ha sido propuesta para ningún otro sector agrícola en el
marco de la PAC. Incluso en el caso del azúcar, la propuesta de reducir la producción de
remolacha fue acompañada de una reducción gradual del apoyo a los precios e iniciativas
de reestructuración, en forma de un fondo de reestructuración.
ES
Para que el sector pueda desarrollarse de manera sostenible, conviene en primer lugar
que parte de los créditos comunitarios que hasta ahora se destinaban principalmente a la
destilación se destinen en lo sucesivo a la financiación de acciones directas, como las
referentes a los métodos de producción, la condicionalidad, los controles de la oferta de
vinos y la mejora de la calidad de éstos. La financiación del arranque con el objetivo de
reducir definitivamente la oferta no puede ser una prioridad comunitaria, sobre todo
porque absorberá una parte significativa de los recursos comunitarios.
ES
absorbe cerca del 10 % de la producción de vino cada año; la destilación de vinos de
mesa alcanza hasta el 30 % por productor, a diferencia de los vinos de calidad, de los que
se destila una proporción muy pequeña. El presupuesto anual para destilación se eleva a
unos 500 millones de euros, mientras que el coste total del almacenamiento de alcohol
alcanza la cifra de 237 millones de euros; la gestión de la destilación absorbe, por tanto,
el 45 % del total de los recursos comunitarios de la OCM.
ES
por último, quién será responsable de la planificación y si será posible garantizar créditos
suficientes para cubrir las indemnizaciones en el caso de una demanda masiva de
arranque por los viticultores.
Las restricciones y los controles sobre la producción de vino, según propone la Comisión
en su Comunicación, no pueden estar subordinados a dos factores «estabilizadores» de la
producción como son el abandono definitivo y la prohibición de nuevas plantaciones
hasta 2013. Debido al continuo descenso de la producción, el sector vitivinícola europeo
se encontraría en desventaja respecto a los vinos importados del «nuevo mundo», en
particular habida cuenta de que son necesarios, como mínimo, cuatro años para que las
nuevas plantaciones sean rentables, lo que significa que la primera generación de las
nuevas plantaciones no será rentable hasta 2014-2017.
Las nuevas plantaciones deberían, por consiguiente, ser liberalizadas gradualmente desde
el comienzo del nuevo régimen, es decir desde 2008, con el fin de evitar una reducción
general de la producción de vino a escala europea debido a los programas de arranque y
reestructuración.
Los nuevos ajustes del catastro vitícola serán elaborados por los Estados miembros y
financiados por el Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA), y supervisados por la
Comisión.
La subvención del mosto utilizada para el aumento artificial del grado alcohólico natural
ha propiciado la ampliación artificial de esta medida y ha provocado una intensificación
del cultivo en algunos viñedos. La caída de los precios del azúcar conduce
inevitablemente a un incremento de las subvenciones del mosto para que se mantenga el
equilibrio entre las distintas técnicas para incrementar el contenido de alcohol. La
propuesta de la Comisión de suprimir simultáneamente el uso de sacarosa y las
subvenciones al mosto – que representan el 13 % del presupuesto para el vino – es un
paso en la dirección acertada. Prohibir la utilización de sacarosa contribuiría asimismo a
equilibrar el mercado y simplificar los controles.
ES
J. Intervención pública del alcohol de boca – almacenamiento privado de vinos y
mostos
La nueva OCM del sector vitivinícola necesita el control de la producción desde el nivel
primario y también sistemas eficaces de concentración de la producción y coordinación
de la comercialización del vino, con el fin de crear mecanismos comerciales de
dimensiones comparables a las redes comerciales del «nuevo mundo». Por tanto, hay que
reforzar la participación activa de las organizaciones de productores y sus empresas
comerciales, así como de las organizaciones interprofesionales del sector. Cabe señalar
que el éxito de una política de promoción depende sobre todo de cómo se controla la
producción y se coordina a nivel primario.
Por ello es especialmente deseable reorientar, al menos, una parte significativa de estos
fondos comunitarios hacia políticas y medidas que no puedan ser tachadas de
intervencionistas en el mercado por los interlocutores internacionales de la UE, pero que
contribuyan a la gestión racional del sector vitivinícola. Resulta particularmente
interesante investigar medidas indirectas de apoyo al mercado y a la renta en tiempos de
crisis del mercado, sobre el modelo del mecanismo de seguridad que ya se viene
aplicando en países del «nuevo mundo».
ES
los productos, incluido el vino.
Hay que subrayar que uno de los riesgos más importantes de adulteración de la
producción de vino, distorsión del comercio y reducción de la producción comunitaria
sería el levantamiento de la prohibición de vinificación de mostos importados, y que la
Comisión debe conseguir que se rechace un acuerdo en este sentido en la. Vale la pena
asimismo preguntarse por qué la Comisión plantea esta cuestión en su propuesta sin que
haya recibido ninguna solicitud sustantiva en este sentido por parte de terceros países.
Conviene señalar también que no existe ninguna obligación de negociar en la OMC sobre
la posibilidad de importar vinos de terceros países y mezclar estos vinos con vinos
comunitarios, y que no hay ninguna duda de que debe evitarse que esto ocurra, porque
crearía enormes problemas en lo que respecta al origen y la identificación de los vinos
que llegan hasta los consumidores.
M. Etiquetado
ES
27.11.2006
SUGERENCIAS
1. Considera que se debe reconocer que el vino no es únicamente un producto, sino una
parte de la cultura europea, y en especial de la cultura mediterránea, y que, por
consiguiente, el deber principal de las instituciones europeas es proteger y apoyar la
producción vinícola europea, y no desmantelarla;
5. Considera que el eje central de la reforma no debería ser el arranque de viñedos, puesto
que la pérdida de potencial productivo en la UE para regular la oferta y la demanda
entraña ceder a los competidores externos la cuota de mercado de la UE y no contribuye
a incrementar la competitividad de los vinos europeos en los mercados internacionales;
6. Pide a la Comisión que la reforma del sector se centre en configurar una verdadera
ES
política comunitaria vitivinícola, que contribuya a mejorar las estructuras de
producción, de transformación y sobre todo de comercialización en la UE, y a
desarrollar los nuevos mercados en expansión a la vez que a consolidar los mercados
tradicionales;
8. Pide a la Comisión que aplique una política comercial proactiva para promover la
calidad de los vinos europeos y defender los procedimientos de vinificación europeos;
9. Pide a la Comisión que haga todo lo posible para fortalecer la protección de las
indicaciones geográficas, aumentando el nivel de exigencia y creando un marco europeo
común para las mismas, tanto a escala europea como a nivel birregional y multilateral,
particularmente en el seno de la OMC y de los acuerdos sobre ADPIC para la creación
de un registro multilateral para los vinos y bebidas espirituosas y para combatir la
falsificación y todas las formas de uso abusivo de las indicaciones geográficas europeas
y de las denominaciones tradicionales en países terceros;
10. Considera necesario obtener una mejor protección de las indicaciones geográficas
protegidas (IGP) y de las denominaciones de origen protegidas (DOP) en el marco de
las negociaciones de la OMC y de los acuerdos bilaterales, pues es un factor de
principal importancia para mantener una producción vitivinícola de calidad, ligada a las
regiones y a los usos locales;
11. Subraya que, para reforzar la competitividad de este sector en los mercados
internacionales, es necesario definir, en estrecha concertación con las organizaciones
representativas de los operadores europeos, una política comercial exterior para los
vinos europeos que sea proactiva y ambiciosa, acompañada de una redistribución de los
recursos presupuestarios y de medios adecuados;
ES
consecuencias de la reducción de las subvenciones mejorando la disponibilidad de
recursos para la diversificación de los ingresos por parte de los productores de vino, en
tanto en cuanto sea necesario para preservar el equilibrio en el mercado europeo;
14. Pide a la Comisión que cree normas en materia de prácticas enológicas y de etiquetado
del vino que hagan más competitiva la producción vitivinícola europea; considera que
estas medidas deberían incluir la simplificación de las normas de etiquetado y la
promoción del vino; insiste en que dichas normas deberían ser aplicables tanto a la
producción nacional como a la de importación;
ES
PROCEDIMIENTO
ES
23.1.2007
SUGERENCIAS
1. Toma nota de que, en numerosas zonas, los viñedos y la producción de vino, además de su
valor económico directo, tienen una importancia cultural, turística y ecológica,
desempeñan un papel muy importante como motor del desarrollo rural, impiden la
desertificación de amplias regiones, forman parte del patrimonio cultural y del paisaje de
la Unión Europea, y están impregnados de tradiciones locales; opina que, a la hora de
adaptar la reglamentación que regula el sector vitivinícola, la UE ha de tener realmente en
cuenta, entre otros elementos, la despoblación creciente, que supone una amenaza con
repercusiones socioeconómicas y medioambientales para numerosas regiones europeas, en
particular las zonas naturalmente desfavorecidas y las islas de poca extensión;
2. Señala que las dificultades con que se enfrenta el sector vitivinícola como consecuencia
principalmente del aumento de las importaciones de vino procedente de terceros países y
del incremento del volumen de las existencias de vino, que superan la producción de un
año y tienen escasas probabilidades de ser vendidas, ejercen presiones a la baja sobre los
precios y las rentas de los viticultores, deben ser atajadas mediante el establecimiento de
una serie de prioridades básicas que no quedan reflejadas en la Comunicación de la
Comisión Europea de 22 de junio de 2006 titulada «Hacia un sector vitivinícola europeo
sostenible» (COM(2006)0319), como son, por ejemplo, el fomento de un consumo
moderado y responsable, la reasignación de recursos presupuestarios para llegar a nuevos
consumidores y conquistar nuevos mercados o incluso reconquistarlos, la promoción de la
calidad y el impulso de la investigación;
3. Toma nota de que estos crecientes desafíos y obstáculos que afectan al sector vitivinícola
ES
de la UE requieren cambios en la reglamentación, con el fin de mejorar su sostenibilidad y
su competitividad, pero manteniendo a la vez mecanismos específicos de la organización
común de mercado (OMC); considera que el sector vitivinícola de la UE requiere una
firme toma de posición política por parte de la UE para promover el lugar de los vinos y
del sector vitivinícola en nuestra sociedad mediante la formulación de una auténtica
política de promoción, comunicación y comercialización basada en la OMC;
4. Considera que toda reforma ha de tener debidamente en cuenta el hecho de que el sector
vitivinícola es la principal fuente de empleo y prosperidad en varias regiones de la UE y
de que la calidad de la producción de vino de la UE es superior a la del resto de la
producción mundial; opina que toda reforma ha de centrarse en la manera de mantener la
posición dominante de los productores vitivinícolas de la UE y que debería evitarse a toda
costa avanzar en la vía de la renacionalización de la PAC mediante dotaciones nacionales,
tal como se expone en la Comunicación de la Comisión de 22 de junio de 2006;
7. Pide a la Comisión que proponga medidas para modernizar las técnicas de producción de
vino, los métodos de comercialización y el etiquetado en Europa, así como para mejorar la
demanda de los consumidores; estima que, en un contexto de liberalización de las
prácticas enológicas propugnada por la Comisión respecto a las obligaciones
internacionales de la Unión Europea, prohibir a los productores comunitarios el
enriquecimiento con azúcar sería contrario a la búsqueda del objetivo de competitividad
para la vitivinicultura de la UE y supondría una discriminación negativa incomprensible
para los vitivinicultores europeos;
ES
OCM podría respaldar la explotación cultural y comercial de los viñedos mediante
acciones de desarrollo del turismo enológico;
9. Considera oportuno mantener, aunque con las modificaciones que sean necesarias, un
régimen de destilaciones de vino para hacer frente a situaciones de crisis graves y otro
régimen diferenciado de destilaciones orientadas al mercado para seguir garantizando el
abastecimiento de alcohol vínico a la industria de bebidas espirituosas; destaca el valioso
papel que las destilaciones de uso de boca desempeñan en el mantenimiento del tejido
productivo de determinadas regiones de la Unión Europea;
10. Propone que todas las reformas se apliquen progresivamente e incluyan periodos de
transición y una evaluación permanente de los efectos de la reforma en la situación
económica y social de las regiones de la Unión Europea;
11. Opina que, antes de tomar una decisión sobre la liberalización o no de los derechos de
plantación, sería necesario evaluar, tras un primer periodo transitorio, los efectos de la
reforma, muy en particular de las medidas de arranque voluntario, y, en consecuencia, los
riesgos de saturación del mercado a que podría dar lugar dicha liberalización; subraya que
en el caso de las zonas cubiertas por las indicaciones geográficas protegidas, la decisión
final debe ser en cualquier caso responsabilidad de las autoridades regionales o de los
organismos reguladores competentes;
12. Subraya que, en el reparto de los derechos de plantación, los Estados miembros y sus
regiones deberían conceder un trato prioritario a los nuevos agricultores, a los vinos de
calidad y a las explotaciones comprometidas en la mejora de la calidad y la
comercialización de sus caldos;
13. Pide a la Comisión que, en su propuesta de reforma de la OMC, tenga en cuenta el hecho
de que el sector del vino forma parte de la estrategia de desarrollo rural, dado que
contribuye al desarrollo sostenible de las regiones y que la mayoría de los puestos de
trabajo generados por dicho sector se encuentran en zonas rurales; pide, por consiguiente,
que se enumeren claramente las acciones financiadas por la OCM a título de desarrollo
rural para el sector vitivinícola, a fin de evitar el uso de estos fondos para otros fines,
siempre que no exista una doble financiación.
ES
PROCEDIMIENTO
ES
PROCEDIMIENTO
ES