Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Presidentes: brokers de poder, lideres partidarios, modelos a imitar, el centro permanente de la O.P. Hablan en
nombre de la nación. No están exentos de fracasar y muchas veces no terminan sus mandatos.
Forma extrema de fracaso presidencial: juicio político al presidente transforma al político mas afortunado
de un país en un modelo de fracaso
Fin de los años 90´ en Am. Lat, seis presidentes se enfrentaron a procesos de juicio político y cuatro de ellos
fueron removidos de sus cargos. En Brasil, Collor de Mello, en 1992 y Perez en Venezuela en 1993 fueron
acusados de corrupción y destituidos. Samper, de Colombia fue acusado de haber financiado parte de su
campaña presidencial con fondos ilegales provenientes del cartel de Cali. El congreso absolvió a Samper, que
perdió un caudal significativo de influencia política a consecuencia del escándalo. Luego declararon a Abdala
Bucaram en Ecuador como mentalmente incapacitado. NUEVO PATRON DE INESTABILIDAD
PRESIDENCIAL
los juicios politicos recientes constituyen la punta del iceberg de una tendencia mucho mas amplia que esta
apareciendo en la politica latinoamericana. am. lat. se esta enfrentando a un patron caracteristico de
inestabilidad institucional que representa una ruptura con el pasado.
Los gobiernos elegidos democraticamente siguen cayendo, pero no se derrumban los regimenes democraticos.
Hay distintas razones que explican la paradoja de la estabilidad de un régimen democrático en medio de la
inestabilidad del gobierno. Por ejemplo, el fin de la Guerra Fria, cambios en la política exterior de EEUU, el
aprendizaje político ue resulto de las experiencias militares de los 60 y 70 y el nuevo papel de las instituciones
internacionales. las elites civiles no pudieron convocar a los militares a que intervengan, tuvieron que
buscar mecanismos constitucionales.
JUICIO POLITICO: instrumento poderoso para desplazar presidentes “indeseables” sin destruir el orden
constitucional.
Es posible cuando los medios masivos investigan y revelan escandalos politicos de manera sistematica y
cuando el presidente no puede mantener un control estricto del Congreso, porque el partido gobernante es muy
pequeño o porque esta controlado por una fraccion opositora. Otra causa es cuando el grado de movilizacion
popular contra el gobierno, una coalicion social toma las calles para exigir la renuncia.
Seis crisis de juicio politico en Brasil, Venezuela, Colombia, Ecuador y dos veces en Paraguay, entre 1992 y
2004. Definio el nuevo patron de inestabilidad politica que predomina actualmente en la region.
La intervencion militar no era una alternativa viable en ninguno de los seis casos y que la cobertura que
hicieron los medios de los escandalos presidenciales fue un factor de gran importancia. En los casos en que el
presidente no logró reunir el apoyo del Congreso, pudo ser sometido a juicio politico sin dificultades. Y
cuando las protestas populares lograron integrar a multiples sectores sociales, se pudo remover al presidente
de su cargo sin dificultades.
Pérez Liñán
Cap VI. Construir un escudo legislativo: determinantes institucionales del juicio político.
Los presidentes que cuentan con legisladores leales pueden evitar un juicio político aun sitiados por
acusaciones y protestas.
En condiciones ideales, los miembros del Congreso sólo iniciarian juicio político al presidente si
hubiera prueba suficiente de un delito grave y no lo harían si las acusaciones tuvieran motivos
partidarios o personales. En la realidad, los legisladores rara vez pueden desprenderse del contexto
social y político en el cual se produce una crisis presidencial.
¿Qué determina la decisión del Congreso de proteger al presidente o de iniciar él JP? Se trata del
resultado de cuatro factores: las normas constitucionales, él sistema de partidos políticos, la relación
del presidente con él congreso y él contexto político general.
En todos los sistemas presidenciales él Congreso tiene, por lo menos, él poder de bloquear él proceso
de enjuiciamiento. La composición partidaria del Congreso interactúa con normas constitucionales
clave para facilitar la formación de un “escudo legislativo” que proteja al presidente.
Los presidentes que se aíslan y, en menor medida, los que adoptan una postura de confrontación ante
el Congreso tienen mayores probabilidades de ser enjuiciados, mientras que los presidentes que
construyen coaliciones legislativas amplias en los primeros tiempos de sus mandatos tienen más
posibilidades de estar protegidos. Además, puede haber consideraciones electorales que pesen en las
decisiones de los legisladores.
Repensar él papel del Ejecutivo: cultivar la amistad de los jugadores con veto.
¿Qué papel desempeña él liderazgo presidencial en él proceso de JP?
La estrategia presidencial es considerada como una variable independiente que da forma al
desempeño del Ejecutivo en él cargo. La estrategia que adopta él Ejecutivo para manejarse con los
miembros del Congreso es fundamental para modelar la respuesta de los legisladores una vez que se
desata la crisis de JP. Los presidentes que producen él alejamiento de los miembros del Congreso en
los primeros tiempos de sus mandatos (ya sea por un enfrentamiento directo o por ignorar sus
necesidades) pueden encontrarse en una posición sumamente débil para hacer frente a una crisis de
JP. Enfrentado a un Congreso que le es hostil, él presidente puede adoptar una de tres estrategias
posibles: 1- Aislamiento: aplica la política deseada, pasando por encima del Congreso e ignorando a
los líderes parlamentarios en la medida de lo posible (imponer políticas por decreto). 2- Estrategia de
confrontación: el presidente decide hacer público el conflicto y desafiar abiertamente al Congreso con
la esperanza de que se movilice la OP y origine una polarización del legislativo que redunde en su
beneficio. 3- Negociación: negociar regularmente con los líderes parlamentarios, aunque esto
conlleve concesiones repetidas en términos de políticas o de clientelismo o ambos. Esta estrategia es
útil para los presidentes que son políticos profesionales con relaciones sólidas en él Congreso o para
aquellos que carecen de preferencias políticas muy marcadas. Pero es difícil de aplicar cuando los
presidentes afirman ser políticos antipartidarios o cuando tienen preferencias muy marcadas con
respecto a determinadas políticas.
CASOS:
BRASIL-COLLOR: Estrategia de asilamiento y partido chico. Gobernó por decreto y vetando
medidas legislativas. Al principio de su mandato obtuvo conseciones de sectores del congreso sin
otorgar nada a cambio. Se aisló y gobernó de manera uteritaria frente al Congreso. No negoció ni
buscó formar coalisiones. Una vez profundizada crisis económica y con índice muy bajo de
parobación de Collor, el juicio político fue inevitable y a pesar de que Collor intentó buscar apoyo de
legislatura, ya era tarde.