radu Mara Teese Lip Gar Rardoy SO Primers edi: octubre 1983 Segunda edie: novembre 1983, (20 ORAL AL COLAUna hermosa maiiana se encontraba la tortuga Tranquila Tragaleguas ante su pequefia y agradable madriguera tomando el sol y comien- do sosegadamente una hoja de Hantén, Por encima de ella, en las ramas de un ve- tusto olivo, estaba Ia paloma Sulaica Silvestre, que lustraba su brillante plumaje. En esto lleg6 volando el palomo Sebuldn Silvestre, hizo varias reverencias y exclamé: —iOh!, Sulaica, alegria de mi corazén, ite has enterado ya? El Gran Sultin de todos los animales, Leo Vigésimo-Octavo, va a celebrar su boda. Asi que vaydmonos juntos volando a su guarida, luz de mis ojosjOh!, mi duefio y sefior —zureé la palo- ma—, {es que estamos invitados? No te preocupes, estrella de mi vida —le contesté Sebulén Silvestre volviendo a hacer varias reverencias—, todos los animales, gran- des y pequefios, viejos y jovenes, gordos y del- gados, mojados y secos, estén invitados; asi que nosotros también. Va a ser la fiesta mas hermosa que jamas haya habido. Pero tenemos que darnos prisa, pues el camino hasta la gua- rida del leén es muy largo, y la fiesta es ya pronto. Sulaica asintio volando. Tranquila Tragaleguas, que lo habia oido todo, se sumié en una meditacion tan profun- da que incluso se le olvid6 terminar de des- ayunar. «Si todos los animales, grandes y pequefios, viejos y jovenes, gordos y delgados, mojados y secos, estan invitados a la boda», se dijo a si misma, «entonces yo también lo estaré. Asi que, {por qué no voy a ir yo también a la fiesta mas hermosa que jamais haya habido?» y las dos palomas se alejaron