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Meret Oppenheim fue otra artista con periodo de actividad en los años treinta y
cuarenta, que se mantuvo introducida en el campo de la escultura, con la tendencia
del surrealismo que ya habían echado a andar artistas como Max Ernst, André
Bretón y Man Ray. Sus piezas más significativas fueron «Juego de desayuno de
piel», 1936; «Mi enfermera», 1936; «Mesa con patas de aves», 1939; «Miss
Gardenia» y «La ardilla», 1959.
Los mencionados artistas y algunos otros más se aprovechan del engaño que
genera la visibilidad de un objeto para con sus singularidades y les hacen un
movimiento inesperado. Entonces, ya con eso ¿Qué se puede esperar del sentido
de la vista? Si parte de su interpretación no va coherente a lo que uno creería que
se acopla. Sé que en el medio artístico es lo que se desea, deformar la realidad
tomando un fragmento de ésta; pero, qué hay de nuestro contexto, alguien nos
puede decir que esto o aquello es una cosa y que en verdad sea otra. Poniendo,
por ejemplo, alguna obra de Jeff Koons a un ciego, , pero, si el invidente a partir de
su experiencia sensorial y la familiaridad que tiene para clasificar la materia por su
índole, si toca la obra, sabrá que las esculturas de Koons no son lo que dicen ser
en el exterior.
Así que ¿El resto de los sentidos son los que nos permiten conocer la autenticidad
de los objetos? Si estamos de acuerdo en que la materia está en una constante de
sufrir cambios, entonces sí.
¿Qué sentido tiene hacer una obra de arte si además no se compagina con el
espectador? Estamos hablando de que, la mayoría de las obras de arte que se
realizan son para personas que ocupan cinco maneras de ordenar el espacio de lo
tangible ¿Qué pasa con los individuos que no son videntes, o que por azares del
destino se privaron de la audición y por consiguiente otra parte de ellos se quedaron
sin habla? Ellos también deben tener el consentimiento de una apreciación artística
y no privárseles de esta facultad como ciudadanos pertenecientes a una cultura.
¿Por qué no enardecer algún sentido por medio de la activación de una pieza? La
experiencia estética a veces ya no basta con lo que se va a visitar en los museos,
sentarte en un banco y esperar a que la estimulación aparezca, de repente; por eso
ya hay artistas multidisciplinarios que hacen de sus obras una interacción más afín
con otros sentidos además de la vista, que, como ya se dijo, si juega un papel
importante para el espectador, pero el que sea indispensable no le quita al arte el
cometido de acrecentar una vivencia distinta.
Bibliografía