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Libro 4

@
LAS TEORIAS PSICOSOCIALES
DE LA PERSONALIDAD

ADLER, FROMM, HORNEY y SULLIVAN


INTRODUCCION
Las teorías psicoanalíticas de la personalidad for- personalidad, se apartaron del psicoanálisis clásico
muladas por Freud y Jung se nutrieron del mismo y comenzaron a rehacer la teoría psicoanalítica se-
clima positivista que caracterizó el avance de la fí- gún las nuevas tendencias dictadas por el desarrollo
sien y la biologia del siglo xrx. Fundamentalmente, de las ciencias sociales: entre quienes dieron a la
el hombre era considerado un complejo sistema teoría psicoanalítica la orientación, pr0pia del siglo
energético que se mantiene a sí mismo por medio xx, de la psicología social, se cuentan Alfred Adler,
de transacciones con el mundo exterior, cuyos fines Karen Homey, Erich Fromm y Harry Stack Sulli-
últimos son la supervivencia individual, la prepa- van, cuyas ideas trataremos en este volumen. Cabe
gación de la especie, y un continuo desarrollo evo- considerar al primero de los mencionados como la
lutivo.e Los diversos procesos psicológicos que cons- figura patriarcal de la “nueva tendencia psicológico-
tituyen la personalidad sirven a tales fines y puesto social”, puesto que ya en 1911 rompió con Freud a
que, según la doctrina evolucionista, algunas per- raíz de su desacuerdo sobre el tema de la sexuali-
sonalidades están mejor adaptadas que otras para dad y procedió a desarrollar una teoría en la que
realirarlo, el concepto de diversidad y la distinción los conceptos de interés social y esfuerzo por la su-
entre adaptación e inadaptación condicionó el pen- peración constituyen los pilares más firmes. Más
samiento de los primeros psicoanalistas. También la tarde, Homey y Fromm tomaron parte en la disputa
psicología académica, atraída hacia la órbita del contra la definida orientación instintivista del psi-
darvinismo, se interesó en la medición de las dife- coanálisis e insistieron en la importancia de las va-
rencias individuales reSpecto de las aptitudes y en riables psicológico-sociales para la teoria de la
el valor adaptativo o funcional de los procesos psi- personalidad. Finalmente, Harry Stack Sullivan, con
cológiccs su teoría de las relaciones interpersonales, consoli-
dó la posición de una teoría de la personalidad
Al mismo tiempo, comenzaron a tomar cuerpo basada sobre los procesos sociales. Aun cuando cada
otras tendencias intelectuales que discrepaban con
una de las teorías posee sus pr0pios postulados y
la concepción puramente biofísica del hombreadu-
rante los últim0s años del siglo pasado, 13 3090.10 sus pr0pios conceptos, existen entre ellas muchos
paralelos que han sido señalados por diversos auto-
gía y la antrOpología hicieron su primera aaCIÓn James, 1947; Ruth Munroe, 1955; H. L. Ans-
como disciplinas independientes; la rapidez. de su resáfer y R. R. Ansbacher, 1956).
ba
desarrollo en el curso del presente siglo ha srdo ex-
traordinaria. En tanto los sociólogos estudiaban al Nuestra elección de la figura de Harry Stack Su-
ombre de una civilización avanzada y mmPÏOba‘ llivan como la principal de este volumen se funda,
ban que es el producto de su clase Y su casta, de
ante todo, en la creencia de que él llevó sus ideas
al más elevado nivel de conceptualización y en que
a3 ÍnStituciones y costumbres, los antropólogos se
ave¡Ituraban hacia remotas áreas del mundo donde su influencia fue, por consiguiente, muy grande.
° tlieron la evidencia de que el ser humano es rsm duda, Sullivan ha sido el teórico más indepen-
mi infinitamente maleable. De acuerdo con estas diente respecto de las doctrinas psicoanalíticas pre-
nllevas ciencias sociales, el hombre es, fundamen- valecientes; si bien al comienzo utilizó el marco de
ta mente, el producto della sociedad en que, vlve: referencia freudiano, en su trabajo posterior, parti-
s“ Personalidad cularmente influido por la antr0pología y la psico-
es más social que biológica._ " logía social, desarrolló un sistema teórico que se
Cratdualmente, esas incipientes doctrinas cultura- desviaba de manera notable del de Freud. Por su
fïs y sociales comenzaron a infiltrarse en la psicolo- parte, tanto Homey como Fromm mantuvieron sus
ay en 61 psicoanálisis y a oorroer los fundamentos ideas dentro de los límites del psicoanálisis y Adler,
“aluraliStas y físicos de esas ciencias; muchos se- aun separado de la escuela freudiana, siguió durante
guuiores de Freud,[disconforrnes
con su miopía toda su vida bajo el influjo de su temprana asocia-
rcsPecto de los condicionamientos sociales de la ción con Freud. Por lo general, Homey y Fromm]
112 CALVIN s. HALL Y GARDNER LINDZEY
son estudiados como revisionistas o neo-freudianos. dores de la vieja teoría. Mucho más innoVader ‘

fue
annque Freud se opuso seriamente a esas denomina- Sullivan, pensador sumamente original que atrajo
CIOHBS; ninguno de ellos procuró desarrollar una a muchos y devotos discípulos y desarrolló lo
u
www?

nueva teoría de la personalidad: más bien, se con-


.,

a veces se califica como una nueva escuela (1d:


SIderaron a sí mismos como renovadores y reelabora- psiquiatría!

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'he'rn—
CAPÍTULO 1

ALFRED ADLER

Alfred Adler, perteneciente a una familia de clase blicado y comentado dos volúmenes que contienen
media, nació en Viena en 1870 y murió en Aber- una amplia selección de las obras de Adler. Ellos
l deen, Escocia, durante una gira de conferencias en constituyen la mejor fuente de información sobre
1937. Obtuvo su título de médico en 1895 en la la teoría del individuo. Además, se han publicado
universidad de Viena; tras especializarse en oftal- dos extensas biografías sobre Adler ( Bottome, 1939;
mología, se dedicó, al cabo de un período de prác- Orgler, 1963). Por otra parte, sus ideas se difun-
tica en medicina general, a la psiquiatría. Fue den en los E.U.A. por la Sociedad Norteamericana
miembro fundador de la Sociedad Psicoanalitica, de de Psicología de Adler, con filiales en Nueva York,
Viena y más tarde su presidente; pronto, sin embar- Chicago y Los Angeles, y por medio de su revista
go, comenzó a desarrollar ideas diferentes de las de
The American Journal of Individual Psychology.
Freud y otros miembros de la sociedad, discrepan-
cias que llegaron a ser particularmente agudas y En agudo contraste con el más importante su-
a causa de las cuales se le solicitó que expusiera sus puesto de Freud, según el cual la conducta del
puntos de vista ante la Sociedad, lo que hizo en hombre es motivada por instintos congénitos, y con
1911. Como consecuencia de las vehementes críticas el principal axioma de Jung, según el cual la con-
y acusaciones de los demás miembros, Adler renun- ducta es gobernada por arquetipos innatos, Adler
ció a la presidencia de la Sociedad; pocos meses considera que el hombre es motivado, fundamen-
después concluía su vinculación con el psicoanálisis talmente, por las exigencias sociales; de acuerdo con 9’!

freudiano (Colby, 1951; Jones, 1955; H- L- Y R- B- él, el hombre es, en esencia, un ser social: se rela-
Ansbacher, 1956, 1964). ciona con otra gente, se compromete en actividades
Formó entonces su propio grupo, muy pronto co,- sociales cooperativas, mha el bienestar social más
nocido como el de la “Psicología del individuo , que el interés personal y adquiere un modo de vi-
que atrajo numerOsos simpatizantes de todas partes da de orientación predominantemente social. Adler
del mundo. Durante la Primera Guerra Mundial, Ad-
]er sirvió
no afirmó que el hombre llega a la socialización só-
lo porque está expuesto a los procesos sociales; el
como médico en el ejército austríacmfi-
nalizada la contienda, se interesó en la orientación interés social es innato, si bien el desarrollo de tipos
del niño y fundó las primeras clinicas de orientación específicos de relación con la gente y con las insti-
Yïnculadas con el sistema escolar vienés; asimismo, tuciones sociales está determinado por la naturale-
msPÍI'Ó el establecimiento de una escuela expenmen- za de la sociedad en la que el individuo nace. En
tal en Viena destinada a aplicar sus teorías respecto cierto sentido, pues, Adler sustenta un punto de
de la educación (Furtmüller, 1964). vista tan biológico como el de Freud y Jung: am-
En 1935, se radicó en los Estados Unidos donde
bos suponen que una naturaleza que es inherente
continuó su práctica psiquiátrica y se desempeñó al hombre conforma su personalidad. En tanto
como Pl'Ofesor de psicología médica en la facultad Freud pone el énfasis sobre el sexo, lung destaca
de medÍCÍna de Long Island. Escritor prolífico, en los patrones primordiales del pensamiento y Adler
6.1 curso de su vida publicó cientos de artículos y acentúa los intereses sociales: tal insistencia en los
“3’05 de los cuales The practice and theory of in- factores determinantes sociales de la conducta, inad-
vertidos o minimizados por Freud y Jung, constituye
]wid'fd paychology (1927) [Práctica y teoría de
a probablemente la nïayor contribución de Adler a la
PS‘COIOSÍa del individuo] es, probablemente, la
me” intl'oducción a su teoría de la personalidad; teoría micológicü‘efíasgo‘que atraío la atención de
e“ P’yChOlogíes of 1930 (1930) [En la edición los psicólogos sobre la importancia de las variables
Castellana: La psicología profunda] y en Inter- sociales, el que fomentó el desarrollo del campo de
nationd Journal of Individual Psychology (1935) la psicología social en el momento en que esta dis-
ap‘írecen reSúmenes mas breves de sus conceptos. cipllna necesitaba apoyo y estimulo, especialmente
emz Y Rowena Anabacber (1956, 1964) han pu- los provenientes de las filas del psicoanálisis.
114 CALVIN S. HALL Y GARDNER LINDZEY

La. .Spgunfieqontribuciónimmm de Adler a de si mismo, capaz de planear orientar sus


¿Ode
la. teoría de la personalidad es su concepto del si 115-9011 -pleuo.'_ecbgoc'_1m"iénto e lo que Significa
mism_o__cre_a_dor_gpe,__a diferencia de yo eu ¡ano Para
que
MQLÓB. Esta es la antítesis (Oianl .
consiste en un grupo de procesos psicológicos e la teoría de Freud, quien generalmente
al servicio de los fines instintivos, constituye un baby
reducido la conciencia a la condición de algo cal:
sistema subjetivo, altamente personahW._ no existente, a pura espuma flotando en el 8m:
terpreta las eXperiencias del organismo y‘les con- mar del inconsciente.
fiere significado; más aún, lírísca expert fis que
contribuyan a'la realización delestilo dé Éida ro-m
pio del individuo y, cuando no lash‘allï'én e mun-
do, procura crearlas. 'Estícó’nc‘epfcïdmsi—mismo/ l. CONCEPTOS PRINCIPALES
creador; nuevo'píra la teoría psicoanalítica, ayudó
compensar el extremo “objetivismo” del psicoaná-
a_hsrs
clásico, que se basaba casi por entero en las
Alfred Adler, al igual que otros teóricos de la per-
necesrdades biológicas y los estímulos externos pa-
ra explicar la dinámica de la personalidad. Como sonalidad inicialmente dedicados a la práctica de la
veremos en otros volúmenes, el concepto del sí mis- clínica médica y de la psiquiatría, dio comienzo a
ha desempeñado un importante papel en las re- sus teorizaciones en el campo de la psicología amp,
rno
crentes mal: formuló una teoría de la neurosis antes de
formulaciones acerca de la personalidad, y
la contribución de Adler a la nueva tendencia de que la extensión de su campo teórico incluyera, en
reconocimiento del sí mismo como una de las cau- 1920, la personalidad normal. (H. L. y R. R. Am.
sas principales de la conducta se considera suma- bacher, 1956). La teoria de la personalidad de Ad.
mente significativa. ler es extremadamente económica: unos pocos con.
ceptos básicos sostienen toda la estructura teórica.
Latercera característica de la psicología de Adler En consecuencia, el punto de vista adleriano puede
que la separa del psicoanálisis clásicoJL?! énfasis
ser rápidamente esquematizado mediante unos cuan- Jam

gue pone en la unicidad de la personalidadm tos trazos generales: 1) el finalismo ficciomlista,


el, cada persona 951191 configuración única de mo- 2) la lucha por la superioridad, 3) el sentinn'ento
«um»
.a

tivos, mgoíinteresm y valores; ¿aida a'ctoú’ejec‘uñdí


{arm-

de inferioridad y la compensación, 4) el interés so- . _.‘.

por una persona lleva el Sello de su propio y distin- cial, 5) el estilo de vida y 6) el si mismo creador.
-:-'

tivo estilo de vida. En este aspecto, Adler adhiere


a la posición de William Iames y Wilhelm Stern
quienes, se afirma, han sentado las bases dela psico- FINALISMO FICCIONALISTA
logía personalista.
La teoría de la personalidad de Adler minimiza Poco después de separarse del círculo que rodea-
el instinto sexual que, según las primeras teoriza- ba a Freud, Adler fue influido por la filosofía de
ciones de Freud, desempeñaba un papel casi exclu- Hans Vaihinger, cuyo libro The psychology Of “a:
sivo en la dinámica de la conductagl-Adler agregó if” (versión inglesa, 1925) [La psicologia del “como
,-

otras interpretaciones al monólogo freudiano sobre si”] data de 1911. Vaihinger presentaba la cum
i

el sexofel hombre es, fundamentalmente, un ser _so-_ e interesante opinión de que el hombre vive maoed ¿a
cial, no "sexual, motivado por los intereses sociales, a numerosas ideas puramente ficticias que DO 59'
no por los sexuales; sus inferioridades no se limitan nen contraparte en la realidad; tales ficcionür P“
al dóminio de lo sexual sino que se extienden a to- ejemplo, “todos los seres humanos son creados ¡80"
das las facetas de su ser, tanto físicas como psico- les", “la honestidad es la mejor politica” y '61 fin
lógicas; se esfuerza por desarrollar un estilo único justifica los medios", permiten al hombre encarar
de vida en el que el impulso sexual desempeña un más eficazmente la realidad: son construccim °
papel secundario; de hecho, la forma en que el in- supuestos auxiliares, no hipótesis pasibles de ¡Weba
dividuo satisface sus necesidades sexuales no deter- y confirmación, y se puede prescindir de ella! 0'13”
mina su estilo de vida sino al revés. Tal destrona- do su utilidad ha desaparecido. .
miento del sexo, luego del monótono pansexualis- Adler asumió esta doctrina filosófica del P05“
mo de Freud, fue bienvenido por muchos. vismo idealista y la empleó según su propio mb
'
Por último, Adler hace de la conciencia el cen- que. Se recordará que Freud subrayó mmm“-
tro de la personalidad, lo cual lo convierte en un mi
te los factores constitucionales y las MW
pionero en el desarrollo de una psicología onenta- fantiles como determinantes de la personafidat'li.“
da en el yo} El hombre es un ser conscienterhabb Vaihinger, Adler halló la refutación de tan ng‘d", .
tualmente tiene conciencia de lasrazones de supon- determinismo histórico: la idea de que el hombre
todo]
ducta, de s'us’inferioridades y de "los fines porlos está más motivado por sus expectativas r
cuales lucha; mas aún, es un individuo consciente futuro que por sus experiencias del pasa 0' Tales
LAS GRANDES rnoniAs DE LA PERSONALIDAD 115

' . ivos no existen en el futuro como parte de al- Adler aclara perfectamente que superioridad no
teleológlco —ni Vaihinger ni Adler significa, en este caso, distinción social, liderazgo
Omitdesígniopredestmacrón o en la fatalidad—; más o posición preeminente en la sociedad, sino algo
en la
“a,“ existen subjetiva o mentalmente aquí y ahora semejante al concepto del si mismo de Jung o al
bien o ideales que afectan la "conducta principio de autorrealización de Goldstein: es un
como esfuerzos.
por ejemplo, sr una persona cree que hay esfuerzo en pos de la perfecta consumación,
‘ el “gran
resenteï impulso ascendente”.
para la gente Virtuosa y un infierno para
un paraíso
dores, esa freelón ejercerá'una considerable
los Entonces comencé a ver claramente en cada fe-
¡"fluencia sobre su conducta. Segun Adler, tales fi- nómeno psíquico la intervención del afán de su-
"es ficticios son la causa SUbletB. de los hechos psi- ' . Este esfuerzo acompaña al crecimien-
(‘OlÓgÍC05- _
Al igual que Jung, Adler identificó la teoría de to fisico; es una necesidad inherente a la misma
Freud con el princrpio de causalidad, y la suya con vida. Está en la raíz de todo intento de dar so-
el principio del finalismo.
lución a sus problemas y se manifiesta en la ma-
nera de enfrentarlos. Todas nuestras funciones
ina-
La psicología del individuo insiste en la ab- psíquicas siguen su dirección y, adecuada o
soluta necesidad del finalismo para comprender .4 decuadamente, pugnan por el logro, la seguridad.
cualquier fenómeno psicológico. Ello entrañó el Este impulso del minus (negativo) al plus (po-
abandono de principios explicativos del tipo de sitivo) es incesante. El impulso de “abajo" hacia
las causas, fuerzas innatas, instintos, impulsos y “arriba” jamás cesa. Todas las premisas que fan-
de otros conceptos semejantes. Las experiencias, tasean nuestros filósofos y psicólogos —-—“autopre-
los traumatismos, los mecanismos de desarrollo servación”, “principio del placer”, “igualación"——
¡servimos de explicación. Lo que no son sino vagas aproximaciones, tentativas de
' sexual no pueden expresar ese gran impulso hacía arriba (1930,
cuenta es la perspectiva desde la cual ellos han -
sido vividos, la particular manera individual de pág. 398; versión castellana, pág. 63).
percibirlos, que pone toda la vida psíquica al ser-
¿De dónde proviene el esfuerzo por la superiori-
vicio del objetivo final de vida (1930, pág. 400;
dad o perfección? Según Adler es innato, constitu-
versión castellana, pág. 66).
ye una parte de la vida; de hecho, es la vida misma.
Este fin último puede ser una ficción, es decir, Desde el nacimiento hasta la muerte la lucha por la
un ideal irrealizable que sin embargo constituye el superioridad conduce al individuo desde un estado
más legítimo acicate del esfuerzo del hombre y la de desarrollo al estado inmediato superior: se trata
explicación final de su conducta; Adler creía, asi- de un principio dinámico “prepotente”; no existen
mismo, que la persona normal está en condiciones, impulsos separados sino que cada uno recibe su
cuando es necesario, de liberarse de la influencia d poder del esfuerzo por la consumación. Adler regg-
tales ficciones y enfrentar la realidad, cosa que e nggegue la“lucha porlaúsuperioridad puede Ïniani:
en ríiilÏfiïrmas diferentes g y que cada per-
_ sujeto neurótico es incapaz de hacer. ’ festarse
sona tiene" 's‘u propio modo Concreto de alcanzar o
‘íñientfas el neurótíco, por
LA LUCHA POR LA SUPERIORIDAD
eiemp o, se esfuerza por lograr la autoestima, el po-
W:
der y la autoexaltación -—es decir, por fines egois-
lucha tas—, el individuo normal lucha por fines de ’ carác-
i
¿Cuál es el fin último por el que el hombre
personali- ter principalmente social.
‘ K _ ' . _ Í 2
Y que otorga coherencia y unidad a la ¿Cómo aparecen en el individuo las formas par-
dad? Hacia 1908, Adler llegó a la conclusión de que ticulares del esfuerzo por la superioridad? Antes de
la agreitsfifi—M
or responder a esta pregunta, se ha de discutir el con-
glad deSpu s, a cepto adleriano de sentimientos de inferioridad.
la ed l,
"volunta reemplïió-
W".
¡mp o a esivo r
mupsoco
18‘ identificará; ¿ocon mïsc—uliñïdad y debilidad
su pensa-
C0.“ femineidad: llegado a esta etapa de SENTIMIENTOS DE INFERIOBIDAD
Fuento expuso la idea de la “protesta masculina”,
tan- Y COMPENSACION
0m“ de sobrecgnpensación en la que caen
t° 105 hombres gemelas mu' eres cuando ¿sienten
Muy al comienzo de su carrera, cuando todavia se
Ïpcompetentes ¿inferiores 1.515s" FEdEÏs'ustituyó la
interesaba en la medicina general, Adler expuso la
film?“ de poder” poTlï “lucha por la superiori-°
’ de entonces sostuvo firme-
idea de inferioridad orgánica y sobrecompensación
ma ‘dea que a partir ' del (1917); rocuraba hallar una respuesta a la eterna
mente, ASÍ. sus ideas reSpecto del fin cuestión e por qué, cuando la gente sufre una en-
mbïe consideran tres estadios: ser agresivosjgï,
“05° Y ser superior. fermedad o una dolencia, éstas se localizan en una
llfi CALVIN S. HALL Y GAHDNEB LIN'DZEY

determinada región del : en tanto una per- INTERES SOCIAL


sona desarrolla una enferm ad cardiaca, otra pa-
dece una pulmonar y una tercera, Durante los primeros años de su actividad
t
.
lumbago. J¿agrtm'bación
1er sugirió que la razón del asiento rica, cuando proclamaba la naturaleza agresivam
de una dolencia partimlar en tal o cual región es hambrienta de poder del hombre y la idea de IY
tmainferioridadbúsieadeósta,seaporcausade protesta masculina como sobrecompensación de ¡a
la herencia o de alguna anormalidad de índole evo- debilidad femenina, Adler fue severamente Critia
lutiva, y señaló que a menudo la sona con un cado por acentuar los impulsos egoístas del 1,0t
órgano defectuoso compensar su e men; j e ignorar sus motivaciones sociales. La lucha por la
«267m0 superioridad evocaba, en crerto modo, el grito d e
di mediante eli;6Jgtícura
entrenamiento: el más ¡“mamaéüñïfiñz" guerra del superhombre nietzscbeano, °°mpañia
sació'ñ de'la'infe'rioridad orgánica es Demóstenes, apropiada para la fórmula darwiniana de la Super.
que tartamudeaba en su niñez y llegó a ser luego vivencia del más apto.
uno de los mejores oradores del mundo; otro ejem- Adler, que fue un defensor de la justicia y de la
PÏO. este contemwráneo, es el de Theodore Roo- democracia sociales, amplió su concepción del hom-
sevelt que, débil y enfermizo en su juventud, logró, bre hasta incluir el factor del interés social (1939)
mediante el ejercicio sistemático, convertirse en un que, si bien comprende asuntos tales como la coo-
hombre fisicamente robusto. peración, las relaciones interpersonales y sociales,
Poco después de haber publicado su monografía la identificación con el grupo, la empatía, etcétera,
sobre la inferioridad orgánica, Adler amplió el con- es mucho más amplio que todo esto: en esencia, el
cepto incluyendo en él a todo sentimiento de in- '
interés social consiste en la colaboración del indi-
ferioridad: _ta__nt_o_el que resulta ¿21111.3 incapacidad viduo con la sociedad, destinada a lograr la socie.
psicológica o social subjetiíríïtïente experimentada dad perfecta. "El interés social es la auténtica e
como el "que ¡e desprende 'dé'hha'aeténneaïaéfifliï’ ineludible compensación de todas las debilidades
dad o un" impedimento ral, Por entonces, 7G: naturales del individuo humano" (Adler, 192gb, pá-
ler equiparabaïnferiorida con falta de masculini- gina 31).
dad o femineidad y denominaba “protesta mascu- El hombre está, desde el comienzo mismo de su
-_

lina” a la compensación de esa inferioridad. Sin vida, inserto en un contexto social; la cooperación
. ._

embargo, luego subordinó sus Opiniones al concepto se manifiesta ya en las relaciones entre el lactante
más general de que los sentimientos de inferioridad y la madre; a partir de ese momento, el individuo
mcen de los de imperfección en cualquier esfera se ve continuamente envuelto en una red de rela-
"
de la vida: por ejemplo, son sus sentimientOs asin- ciones interpersonales que configuran su persona-
ferioridad los que motivan el esfuerzo del niño por
-¡_.-n _— .—n-

lidad y proveen salidas concretas para su lucha por


-i—

alcanzar un más alto nivel de desarrollo; una vez la superiodidad. A su vez, la lucha por la superio-
alcanzado, comienza nuevamente a sentirse infe- ridad llega a ser socializada: el ideal de una socie-
rior y reinicia el movimiento ascendente. Según afir- dad perfecta toma el lugar de la ambición pura-
ma Adler, los sentimientos de inferioridad no son mente personal del beneficio egoista; trabajando por
un signo de anormalidad sino la causa de todom: el bien común, el hombre compensa su debilidad
greso en el destino del hombre}. Naturalmente, los individual. .
sentimientos de inferioridad pueden ser exagerados A criterio de Adler, el interés social es innato: .»
por condiciones especiales tales como la sobrepre- cl hombre es una criatura social, no por hábito, sino
tección o el rechazo del niño, en cuyo caso existe la por naturaleza; esta predisposición, sin embargol
posibilidad de que sobrevengan ciertas manifesta- como otras aptitudes naturales, no surge espontá-
ciones anormales, por ejemplo, el desarrollo de un ncamente sino que alcanza su madurez mediante
complejo de inferioridad o el de un complejo de la orientación y el entrenamiento. Adler creia en
superioridad compensatorio. En circunstancias nor- los beneficios de la educación, razón por la 009] . .
males, sin embargo, el sentimientoje inferioridad, consagró gran parto de su tiempo a establecer cli-
o de im neslagíín fuerza impulsan de la nicas de orientación infantil, a mejorar las escuelns
bum ad: el hombre es orlíneccsi- Y} educar al público res ecto de los métodos 81W”
emcpujado
dad de superar su inferiorids yatra do por olde- prados para la crianza e los niños.
seo de ser superior. Resulta interesante seguir, en los escrlti)s ‘dk'
Adler no fue un defensor del hedonismo; aun rianos,
el cambio decisivo, aunque gradual. ue e!-
cuando creia que los sentimientos de inferioridad perimenta su concepción del hombre, desde 03 P '
son dolorosos, no pensaba que el alivio dc tales sen- meros años dc su vida profesional, en el transcurso
timientos deba ser necesariamente lacentero; para (lo su asociación con Freud, hasta los últimos! 9““"í
él la finalidad de_la_,vida.nc es c] placer sino
’ la 56?: (lo alcanzó una reputación internacional. 508m °_
fección. joven Adler, cl hombre es impulsado por una v0
a“--- ’_—..--m"

i
LAS GRANDES TEORÍAS on LA PERSONALIDAD
117

luntad insaciable de der y dominación destinada no han de ser sino instancias concretas y particu-
a compensar un agu o y rotundamente arraigado lares del mismo estilo básico hallado en la niñez.
sentimiento de inferiorida . Según cl Adler madu- ¿Qué es lo que determina el estilo de vida del
ro, ol hombre es motivado por un interés social in- :1 individuo? En gran medida,
nato que lo induce a subordinar el beneficio ri- bajos de Adler, las inferioridadessegún los primeros tra-
especificas, reales o
vado al bienestar público. La imagen del hom re imaginarias que ese individuo padece: el estilo de
perfecto que vive en una sociedad perfecta anula la vida constituye la compensación por una inferiori-
del hombre fuerte y agresivo que domina y explota dad particular; si el niño es físicamente débil, por
a la sociedad: el interés social reemplaza al interés ejemplo, su estilo de vida ha de tender a la reali-
egoísta. zación de cuanto pueda preporcionarle vigor fisi—
co; si es torpe, se empeñará en lograr la superiori-
dad intelectual. Asi el estilo de vida de Napoleón,
ESTILO DE VIDA de conquistador, fue determinado por su pequeña
estatura física, el voraz deseo de Hitler de dominar
He aqui el lema de la teoría de la personalidad el mundo lo fue por su impotencia sexual. Esta ex-
de Adler, el tema recurrente de todas sus publica- plicación de la conducta humana, que atrajo la aten-
ciones (por ejemplo, 1929a, 1931) y el rasgo par-
ción de la mayor parte de sus lectores y que fue
ticularmente distintivo de su psicología. El estilo de
vida es el principio sistemático según el cual fun- intensamente aplicada al análisis del carácter du-
ciona la personalidad individual, el todo que dirige rante las décadas de 1920 y 1930, no satisfizo al
las partes, y constituye el principio ideográfico rector mismo Adler por ser demasiado simple y mecani-
de Adler; el que explica la unicidad de la persona: cista y, en busca de un principio más dinámico, ha-
cada individuo tiene su pr0pio estilo de vida; nunca . lló el del sí mismo creador.
dos individuos desarrollan el mismo.
¿Qué significa exactamente este concepto? Es di-
ficil responder a este interrogante ya que Adler ha EL SI MISMO CREADOR
dicho muchas cosas al respecto, a veces diferentes
e incluso opuestas, según se observa en sus nume- Este concepto constituye el logro capital de Ad-
rosos trabajos. En consecuencia, resulta igualmente ler como teórico de la personalidad: todos sus otros
difícil distinguirlo de otro de sus conceptos: el del conceptos fueron subordinados al del si mismo crea-
si mismo creador. Aun cuando el objetivo de todo dor en el momento de su descubrimiento: aquí es-
individuo es uno, el de la superioridad, existen mu- taba, por fin, el tan buscado móvil primero, la pie-
chos modos de luchar por alcanzarlo: en tanto uno dra filosofal, el elixir de la vida, la causa primera
procura llegar a ser superior a través de su desa- de todo lo humano. El si mismo creador, unitario
rrollo intelectual, otro consagra todos sus esfuerzos y estable, es el soberano en la estructura de la per-
a lograr la perfección muscular; el intelectual tiene sonalidad.
un estilo de'vida, el atleta otro. El intelectual lee, Como todas las causas primcras, el si mismo crea-
estudia, piensa; su vida es más sedentaria y solita- dor es difícilmente descriptible: no podemos verlo,
Ij'a que la del hombre activo; dispone los detalles de aun cuando observamos sus efectos; es algo que in-
su existencia, sus hábitos domésticos, sus recreacio- terviene entre los estímulos que actúan sobre el
neS, su rutina cotidiana, las relaciones con su fami- individuo y las respuestas de ese individuo a tales
Ía, sus amigos y conocidos, sus actividades socrales, estímulos. En esencia, la doctrina del si mismo crea-
de acuerdo con su meta de superioridad intelectual dor sostiene que el hombre constru e su Eopia _.r-
y cuanto haga lo hará con la mirada puesta en ese sonalidad apartir ._materia en ,Ïuflto de la Ee-
in último. La conducta del individuo deriva de su ‘ rencia"?! ,13. erperien
33510 de vida; percibe, aprende y retiene aquello
que Se ajusta a su estilo de vida e ignora lo demás. [a herencia sólo le confiere
ciertas aptitudes;
El estilo de vida se constituye durante la infan- j ‘ el ambiente sólo le brinda ciertas impresiones.
cia, ha cia los
cuatro o cinco años de edad y a par- ' Tales aptitud es e impresiones y la forms en que
{11' de entonces las experiencias son asimiladas y uti- él las “experimenta” —-es decir, su interpretación
lzadas de acuerdo con ese único estilo de vida; las de esas experiencias— son los ladrillos que em-
actitudes, los sentimientos y' las percepciones Pm“ plea, según su propio modo “creador', en la es.
D19S de éste llegan a fijarse y mecanizarse en esa tructuración de su actitud ante la vida. Y es pre-
Prlmera etapa y, en consecuencia, resulta práctica— cisamente su modo individual de usar esos la-
mente imposible que el estilo de vida cambie más drillos, es decir, su actitud hacia la vida, lo que
de: aun cuando el individuo puede adquirir nue- determina su relación con el mundo exterior ( Ada
vas formas de expremr su estilo único de vida, ellas ler, 1935, pág. 5).
118 CALVIN S. HALL Y CARDNER LINDZEY

El si mismo creador es la levadura que actúa so- que él constituía el centro de la atención S .
bre los hechos del mundo y los transforma en per- observó Adler, a menudo los neuróticos, los 6.3“?
sonalidad subjetiva, dinámica, unificada, individual nales, los alcohólicos y los pervertidos son “31""
y_s1ngularmente modelada; confiere significado a la génitos. Si los padres encaran inteligentemente o.
Vida: crea tanto el fin como los medios para con- situación, preparando al niño para la
seguir; es, en suma, el principio activo de la vida aparición
un rival, el primogénito estará en mejores oo d-e
no muy distinto del antiguo concepto del '
ciones para llegar a ser una persona responsable
ablumana,
ma. protectora. y
Podemos afirmar, en síntesis, que Adler elaboró El segundo hijo o intermedio se caracteriza
una teoría humanista de la personalidad, antítesis
' de su ambición: constantemente trata de SUperar a s“
la concepción freudiana del hombre. Al atribuir hermano mayor y, aun cuando tiende a ser "¿balde
al hombre altruismo, humanitarismo, c00peratividad, y envídioso, en general está mejor adaptado que
creatiwdad y unicidad, restauró el sentido de su sus hermanos, tanto mayor como menor.
dignidad y su valor, que el psicoanálisis, en buena El último hijo es el mimado; deSpués del primo.
medlda,.había destruido; en lugar del triste cuadro génito, es el más predispuesto a convertirse en un
materialista que horrorizaba y repugnaba a muchos niño “problema” y en un adulto neurótico e ina
de los lectores de Freud, Adler ofreció un retrato daptado.
del hombre más satisfactorio, más promisorio y mu- ¡
cho más halagador. Su concepción de la naturaleza Si bien las primeras pruebas de Adler sobre la
de la personalidad coincidió con la popular idea teoría acerca del orden de nacimiento no fueron
suficientes para su confirmación (Jones, 1931), el
según la cual el hombre puede ser el dueño y no la
trabajo más elaborado de Schachter (1959) ha otor.
víctima de su destino. '
gado a las hipótesis adleríanas una impresionante
confirmación y ha abierto así el campo para una
abundante cantidad de investigaciones.
"2‘; ¿1.: 'w'? " L
2. CLASE Y METODOS DE INVESTIGACION
LOS PRIMEROS RECUERDOS
Las observaciones empíricas de Adler tuvieron lu- Adler consideró que la relación de los primeros
gar, en gran medida, dentro del ámbito terapéutico recuerdos que una persona es capaz de eyocar cons-
y, en su mayoría, constituyeron reconstrucciones del tituyen una de las claves fundamentales para la
pasado según los recuerdos del paciente y aprecia- comprensión de su estilo básico de vida (1931)-
ciones de la conducta presente basadas en su in- Por ejemplo, una niña comenzó ‘a relatar sus prime-
formación verbal. El espacio de que disponemos no ros recuerdos diciendo: “Yo tenía tres años. Y mi
permite sino la mención de unos pocos ejemplos de padre. . ." lo que indica que está más interesada en
las actividades investigadoras de Adler. su padre que en su madre. Continúa contando ¡1‘16
su padre llevó al hogar un par de caballitos para
3113 Y su hermana mayor, quien, sujetando las rien-
ORDEN DE NACIMIENTO Y das, condujo sin tropiezos al que se le destinóa
PERSONALIDAD en tanto que ella, arrojada de la montura 13°" m
PÏOPÏO “DOW", cayó sobre el barro. Tal es el de"
tino del hijo menor: ocupar el segundo pueSto en
Fiel a su interés en los determinantes sociales de
la es“
la personalidad, Adler observó que existe, en gene- "competencia con el hermano mayor que, en
ral, no poca diferencia entre las personalidades del nmaa motiva el deseo de superar a la otra. Su ¿“no
mayor, del intermedio y el menor de los hijos de
e Vlda muestra el impulso ambicioso, la “T88“.
toda familia (1931, págs. 144-154) que atribuyó al
de ser la primera, un profundo sentimiento de 'á‘
carácter distintivo de las experiencias de cada niño seguridad y disgusto y una intensa sensación e
como miembro del grupo social. fracaso.
El primer hijo es objeto de considerable atención Durante el tratamiento de su problema ’Sriwï
hasta el nacimiento del segundo; en ese momento es ataques de ansiedad— un joven recordó 18 sigui“
repentinamente destronado de su favorecida posi- te escena: “Cuando tenía aproximadamente cua
ción y se ve obligado a compartir con el recién 3503, me sentaba junto a la ventana y observa de
llegado el afecto de sus padres. Esa experiencia los obreros que edificaban una casa en la Vereda re-
puede condicionarlo de diversos modos: odiará a enfrente, mientras mi madre tejia medias"- FíSted :
la gente, se protegerá de súbitos reveses, se sentirá cuerdo indica que el joven fue un niño mw
inseguro, etc. El hijo mayor está, en general, pre- sus memorias incluyen una madre solicita. El
dispuesto a interesarse por el pasado, tiempo en de que mira a quienes trabajan sugiere que
LAS GRANDES Taoaias DE LA PERSONALIDAD 119

es más el de un espectador que el de tales soportan una pesada carga y son propensos a
“¡o de vida
Esto se confirma con la ansiedad sentirse incapacitados para encarar las tareas que
un participante.
experimenta cada vez que procura definir su la vida les depara; se consideran fracasados y, en
que efecto, a menudo lo son. No obstante, si sus padres
¿,Ocación. Adler le sugmó que optara por una ocu-
que le permltlera aplicar su preferencia por son comprensivos y los estimulan, pueden compen-
pacióll sar sus inferioridades y transformar su debilidad en
'13 contemplación y la observación. El paciente si-
guió su consejo y llegó a ser, con verdadero éxito, fortaleza: muchos hombres eminentes iniciaron sus
negociante de objetos de arte. vidas con alguna deficiencia orgánica que luego
compensaron. Reiterada y vehementemente, Adler
. Adler aplicó este método tanto con individuos se pronunció contra el riesgo de los mimos exce-
como con grupos Y: según comprobó, constituía
una manera fácil y económica de estudiar la per- sivos, asu criterio el más grave daño que puede
aquejar a un niño: el niño mimado no desarrolla
sonalidad. Los recuerdos infantiles están siendo
sentimientos sociales; se convierte en déspota a la
ahora usados como técnica proyectíva (Mosak, 1958).
espera de que la sociedad satisfaga sus deseos ego-
céntricos. Según Adler, esos niños conSrtítuyen la
clase potencialmente más peligrosa de la sociedad.
EXPERIENCIAS INFANTILES También las consecuencias del descuido son infor-
tunadas: el individuo maltratado durante su infan-
Adler se interesó muy particularmente en los ti- cia llega a ser, una vez adulto, un enemigo de la
pos de influencias tempranas que predisponen al sociedad; su estilo de vida está dominado por la
niño para adoptar un estilo de vida errado y des- necesidad de venganza. Estas tres condiciones —en-
cubrió tres importantes factores: 1) niños con in- fermedad orgánica, mimos y rechazo— producen
ferioridades, 2)‘ niños mimados y 3) niños descui- erróneas concepciones del mundo y derivan en un
dados. Los niños con enfermedades físicas o men- estilo patológico de vida.
CAPÍTULO 2

ERICH FROMM
en el 1900 en Francfort, lado y desamparado; eventualmente, el esclavo
E ric
Niegaromm estuar‘áoó ía en as
i sicolo ía socioloAlemanlia, —que como tal pertenecía a alguien y, aunque m
universidades de Heidelberg,g Frzncfort yg Munich. era libre, experimentaba la sensación de esta: re-
Tras haber obtenido, en 1922, su título de doctor lacionado con el mundo y con sus semejantes.
en filosofía en Heidelberg, recibió preparación s'- conquista su libertad tan sólo para verse a la de-
analíticg. en Munich y en el hmoñïfihtcïggï riva en un mundo predominantemente ajeno.
eoanalitíco de Berlín. En 1933 viajó a E.U.A. para Tal es la tesis que Fromm desarrolla en Escape
desempeñarse como profesor del Instituto Psicoana- from freedom (1941) [El miedo a la libertad]: en
lítíco de Chicago, donde se hizo cargo de numero- la medida en que el hombre ha conquistado cada
sas cátedras en diferentes universidades e institu- vez mayor libertad, a través de los siglos, se ha
tos; por entonces inició también la práctica privada sentido más solo, y la libertad, en consecuencia, ha
en la ciudad de Nueva York. Sus obras han sido llegado a transformarse en una condición negatiw '
objeto de profunda atención no sólo por parte de de la cual procura huir.
eSpecialistas en los campos de la psicología, la so-
¿Cuál es la solución de este dilema? El hombre
ciología, la filosofía y la religión, sino también del puede unirse a otros mediante el amor y el trabajo e
público en general. compartido, emplear su libertad para construir una í
Fromm ha sido profundamente influido por los sociedad mejor o hallar su seguridad sometiendose
trabajoslde Karl Marx, en especialpor una de sus a la autoridad y adaptándose a la sociedad, es de-
priñ‘r‘íeras obras, ”The economic and phílosotvhical
manuscripts [Manuscritos económicos y filosóficos], Oil“, estructurar un nuevo cautiverio. Escrito a la
sombra de la dictadura nazi, Escape from freedom
escrita ¡en 1844. Este trabajo (en la traducción in- revela el tipo de atracción que esta forma de tota-
glesa de T. B. Bottomore) fue incluido por Fromm lítarismo ejerce sobre ciertos individuos en virtud
en Marx’s concept of man [Marx y su concepto del del nuevo tipo de seguridad que les ofrece. No obs- _
hombre]. Fromm compara las ideas de Freud y tante, según señala en obras posteriores (1947, 1955*
Marx en Beyond'the Chains of illusion (1962) [Más
allá de las cadenas de la ilusión], señalando las 1964), sea cual fuere la forma de la sociedad que
el hombre mod ela -—feudalismo, capitalismo, fas-
contradicciones e intentando una síntesis; juzga a
Marx un pensador más profundo que Freud, y em- ta una cismo, socialismo, comunísmo—, siempre repïüen'
tentativa de resolver la contradicción furl-
plea el psicoanálisis para rellenar las lagunas mar- damental
humana, es decir, el hecho de que Si 0'
xistas. Fromm escribió (1959) un importante análisis
muy crítico, y aun polémico, de la personalidad e 00m0 es, parte de la naturaleza, está separado .8
olla: su simultánea cualidad de ser humano Y “m."
influencia de Freud y, a manera de contraste, un mal. En
tanto animal, experimenta HÉIHS ”69°C:
elogio incondicional de Marx (1961). ¡Pese a que ,_dades
Fromm puede ser considerado personalmente como
fisiológicas que ha "¿e ' satisfacer (pero,
mo ser humano posee conciencia de si mismo, a:
un teórico marxista, él prefiere el título de huma- zón e imaginación). Entre las experiencias (111,9
niytd’diáléctícoi Sus escritos están inspirados en sus
amplios conocimientos de historia, sociología, ' ' lite- típicamente humanas se cuentan los seflümlenws
‘ de ternura, de amor y de com asión: las “¿Si?
ratura y filosofía.
Én esencia, el tema de la obra de Fromm es el de Interés, responsabilidad, i entidad, ' “13;; va:
sentimiento de soledad y aislamiento que el hombre vulnerabilidad, traScendencia y libertad; y
as'
experimenta a causa de la separación que ha lle- lores y las normas (1968). La unión de
gado a vivir re8pecto de la naturaleza y de los otros pectos, animal y humano, config“?a las aml-w'sne5
condlCI‘Lm,
básicas de su existencia. “Necesaf‘dme’ la
hombres, condición ésta que no se observa en es- cbfl’
pecie animal alguna; por el contrario, constituye el previsión de la psique del hombre ha de ”"WM'
aspecto distintivo de la situación humana. El niño, soda en el análLv de aquellas MC . pá
por ejemplo, a medida que se libera de los vincu- gen de las condiciones de su existencia" (1955,
los primarios re8pecto de sus padres, se siente ais- gina 25).
rr
LAs GRANDES TEORÍAS. DE LA PERSONALIDAD 121
l
.Cuáles son, entre las Estas necesidades, esencialmente humanas y ob-
e las condiciones de su
hQÏnbre las que surgen Weasdel jetivas a juicio de Fromm, no existen en el animal
t“¿malicia? Fromm señala la existencia de cinco ne- ni derivan de la observación de cuanto el hombre
C'gsidades de este “PQ: dmlmïón, detrascenden- manifiesta desear; tampoco son, ni ellas ni los es-
de identidad de un marco de
C33, de arraigo, fuerzos en pos de su satisfacción, creados por la
orientación. La necesndad dare ación (también lla-
de la daicacion
l, sociedad; antes bien, han sido incorporados, a tra-
m‘a'da el marco en Revolution of vés de la evolución, a la naturaleza humana. ¿Cuál
hope (1968) [Revolución de esperanza] surge del es, entonces, la relación que existe entre la sociedad
hecho de que el hombre, al llegar a ser tal, se ha y la existencia del hombre? Según Fromm, “el orden
visto excluido de la primitiva unión del animal con social en el que el hombre vive” determina las ma-
la naturaleza: “El animal
' naturaleza para enfrentar lasestá equipado por la nifestaciones específicas de estas necesidades, los
condiciones que real- medios efectivos de que él se vale para concretar
' Ï mente ha de hallar” (1955, pág. 23), en tanto que el
sus potencialidades internas; su personalidad se de-
Í hombre, merced a su facultad de razonar e ima- sarrolla en concordancia con las oportunidades que
í ginar, ha perdido tan intima interdependencia con le ofrece tal o cual sociedad particular. En una so-
la naturaleza. En lugar de los lazos instintivos que ciedad capitalista, por ejemplo, el hombre puede
unen al animal con la naturaleza, el hombre ha lograr la sensación de identidad personal por via
creado sus propias relaciones, las más satisfactorias del enriquecimiento material o desarrollar un sen-
de las cuales son, sin duda, las fundadas sobre el timiento de arraigo mediante la conquista de una
amor constructivo, que invariablemente implica so: sólida posición en una importante compañía como
licitud, responsabilidad, respeto y entendimiento empleado necesario y digno de confianu. En sín—
mutuos. tesis, la adaptación del individuo ala sociedad cons-
La necesidad de trascendencia del hombre está tituye Íma transacción entre sus necesidades inter-
directamente relacionada con la de elevarse por so- nas y las erigencias externas; el hombre desarrolla
bre su naturaleza animal, la de transformarse en un ¿carácter social /en armonía con los requerimien-
una persona capaz de crear en lugar de subsistir tos ‘dïa‘ls‘ sociedad.
sólo como simple criatura; si se contraria su anhelo Fromm ha identificado y descripto cjp_c_o tipos. ca-_
creador, el hombre llega a ser un destructor. Según racterístic‘os d¿5;_la__sociedad-_ actual: _el receptivo, el
señala Fromm, ello no implica que odio y amor explotador,”el acumulador, el comerciante y el pro-
constituyan impulsos antitéticos: ambos son res- duc‘tiñÏÜonsidera que sólo el último“ de ellos está
puestas a la necesidad del hombre de trascender su sano y expresa lo que Marx denomina “actividad
naturaleza anna]; el animal no puede amar ni odiar libre y consciente”. Posteriormente, Fromm (1964)
_v el hombre si. ba descripto unmsertojardgvtipgs camwtefisfioos:
el negófllo, que es atraído por la muerte, y_ el bió-
El hombre necesita raices naturales, desea for- irfo',"amante de la vida. Fromm indica que lo que
mar parte del mundo, s‘é'ñlirfique pertenece a 318° puede parecer como un paralelo entre su formula-
0 alguien: de niño, su vida depende totalmente de ción y la de Freud sobre los instintos de la vida y
Su madre —relación cuya persistencia más allá de de la muerte, en realidad no lo es. Para Freud,
la infancia será considerada una morbosa fijación—; tanto los instintos de vida como los de muerte son
.Va adulto, halla sus más satisfactorias y sanas raíces inherentes a la biología humana, mientras que para
en El sentimiento de hermandad hacía los demás Fromm, la vida es la única principal. La muerte es
hombres y mujeres. Sin embargo, el hombre desea secundaria y sólo entra en escena cuando las fuer-
eWifrimentaar la sensación de su ,glglficjgjfiqnfi, zas de la vida están frustradas.
ser un individuo singular y, cuando no lo logra
Desde el punto de vista del adecuado funciona-
mediante su propio esfuerzo creador, puede al me- miento de una sociedad determinada, es absoluta-
no? obtener cierto sello distintivo mediante su iden- mente indispensable que el carácter del niño sen
Ï’hcación con otro individuo o grupo: el esclavo se modelado en coincidencia con las necesidades de
ldE-ntiiica con su amo, el ciudadano con su país, el
ésta. Los padres y la escuela son los encargados de
”.br'fïo con su gremio; en todos estos casos, el sen- lograr que el niño desee actuar tal como debe ha-
timiento de identidad surge del hecho de pertenecer
‘*3180 o alguien, no del de ser alguien. cerlo si un determinado sistema económico, politi-
co y social debe ser preservado. Dentro de un sis-
último, el hombre necesita —y desarrolla— tema capitalista, por ejemplo, es preciso infundir
“für
“ manera estable
y coherente de percibir y com- en la gente el deseo de ahorrar a fin de crear la dis-
Prender El mundo, un margg__ de referencia, que ponibilidad de capital necesaria para una economia
Sade 5€" fundamentalmente racional, o fundamen- en expansión; de igual modo, la sociedad que ha
¡r meme irracional, o bien poseer elementos de
"b“ aSpecies.
desarrollado un sistema basado en el crédito debe
ocuparse de que sus miembros sientan lo compul-
122 CALVIN S. HALL Y CARDNER LINDZEY

sión interna de pagar sin demora sus deudas. Fromm con el propósito de alcanzar la plena realización
ofrece varios ejemplos de los tipos de carácter que de esa naturaleza esencial; 3) ninguna de las socia-
se desarrollan en el ámbito de una sociedad capita- dades hasta ahora creadas encara las necesidades
lista democrática (1947). fundamentales de la existencia humana; 4) es po.
Cuando la sociedad impone al hombre exigencias sible crear tal sociedad.
contrarias a su naturaleza, lo doblega y lo frustra, ¿Qué tipo de sociedad propugna Fromm? Una
lo aliena respecto de su “situación humana” y le sociedad
niega la posibilidad de satisfacer plenamente las
condiciones básicas de su existencia. Así, tanto el
capitalismo como el comunismo, tienden a hacer de ...en cuyo ámbito el hombre se una amistosa-
él un autómata, un esclavo asalariado, una no-enti— mente al hombre; en la que consolide su arraigo
dad, y con frecuencia logran conducirlo a la locura, mediante vínculos fratemos y solidarios. .. una
a una conducta antisocial, a la autodestrucción; sociedad que le ofrezca la posibilidad de trascen-
cuando una sociedad ha fracasado en su misión de der su naturaleza a través de la creación, no de
satisfacer las necesidades esenciales del hombre, la destrucción; en cuya esfera cada individuo ad-
Fromm no vacila en estigmatizarla y desahuciarla quiera la noción de sí mismo sintiéndose regido
(1955). por sus propios poderes antes de por conformidad
alguna; en la cual, sin necesidad de que el hom-
Asimismo, Fromm señala la probabilidad de que
bre distorsíone la realidad ni rinda culto a ídolos,
el cambio operado en uno de los aspectos importan-
tes de determinada sociedad —lo cual ocurre cuan-
exista un sistema de orientación y devoción
do el feudalismo se transforma en capitalismo, por
(1955, pág. 362).
ejemplo, o cuando el artesano individual es despla- Fromm aventura, incluso, un hombre para esta
zado por el sistema gremial— desarticule el carác- sociedad perfecta: socialismo humanista comunita-
ter social de sus miembros. La antigua estructura rio. En ella, todos los individuos dispondrán de
no se amolda a la nueva sociedad, lo que se suma iguales oportunidades para llegar a ser cabalmente
a la alienación y la desesperanza que el hombre, humanos y no existirá soledad, ni aislamiento, ni
de5poiado de sus lazos tradicionales, experimenta: desesperación; el hombre encontraría un nuevo ho-
en tanto no esté en condiciones de echar nuevas gar, apto para la “situación humana”.
raíces y de desarrollar nuevas relaciones, se sentirá Esta sociedad realizaría el prOpósito de Marx de
perdido; en el transcurso de tales períodos de tran— transformar la alienación humana bajo un sistema
sición, creerá ciegamente en cuantas panaceas le de pr0piedad privada en la oportunidad de auto-
ofrezcan protección contra la soledad. rrealización de si mismo como ser humano, social
El problema de las relaciones del hombre con la y activo en la producción, bajo un régimen socia-
sociedad es tratado a menudo por Fromm, a quien lista. Fromm ha difundido el esquema de la socie-
interesa profundamente este tema. Al respecto está dad ideal, al detallar cómo puede ser humanizada
totalmente convencido de la validez de las siguien- nuestra sociedad tecnológica actual (1968 . Sus
tes proposiciones: 1) el hombre posee una natura- puntos de vista han sido agudamente critica os por
leza esencial e innata; 2) el hombre crea la sociedad Schaar (1961).
CAPÍTULO 3

KAREN HORNEY

Karen Horney nació en Hamburgo, Alemania, el con la anatomía de los órganos sexuales. En cuanto
16 de septiembre de 1885 y murió en Nueva York al complejo de Edipo, considera que no se trata,
el 4 de diciembre de 1952. Tras haber estudiado en modo alguno, de un conflicto sexual-agresivo en-
medicina en la Universidad de Berlín, trabajó en el tre el niño y sus padres sino de una ansiedad
Instituto Psicoanalítico de esa misma ciudad, desde emanada de perturbaciones básicas —por ejemplo,
1918 hasta 1932. Fue psicoanalizada por Karl Abra- el rechazo, la sobreprotección y el castigo— de la
ham y Hans Sachs, dos de los más eminentes ana- relación entre uno y otros. La agresividad no es,
listas didácticos europeos de esa época. Invitada como sostiene Freud, innata, sino un medio por el
por Franz Alexander, viajó en 1932 a los Estados cual el hombre intenta salvaguardar su segtIrídad;
Unidos y, designada directora asociada del Institu- el narcisismo no es, en realidad, el amor a si mismo,
to Psicoanalítico de Chicago, permaneció allí du- sino el envanecimiento y la sobreestimación de si
rante dos años, al cabo de los cuales se trasladó a
mismo debido a sentimientos de inseguridad. Hor-
Nueva York en 1934, donde se dedicó a la práctica ney díscrepa igualmente con otros conceptos fren-
del psicoanálisis y, en el Instituto Psicoanalítico de dianos: la compulsión de repetición, el ello, el yo,
Nueva York, a la enseñanza. Disconforme con el el superyó, la ansiedad y el masoquismo (1939). No
psicoanálisis ortodoxo, se unió a otros estudiosos ignora, sin embargo, el aspecto positivo de la con-
que sustentaban convicciones semejantes, con quie- tribución de Freud, cuyos conceptos teóricos fun-
nes fundó la Asociación para el Progreso del Psicoa- damentales son, a su juicio, las doctrinas del deter-
nálisis y el Instituto Norteamericano de Psicoaná- minismo psíquico, de la motivación inconsciente y
lisis del que fue directora hasta su muerte. de los motivos emocionales, no racionales.
Según Horney, sus ideas, lejos de constituir una El concepto clave de Horney es el de la ansiedad
nueva via de acceso hacia la comprensión de la básica, que define como
personalidad, coinciden con la estructura de la psi-
cologia freudiana, de la cual pretende, sin embar- .. .la sensación de aislamiento y desamparo que
go, eliminar las falacias manifiestas del pensamiento el niño experimenta en un mundo potencialmmte
de Freud —falacias cuyo origen se halla, a su jui- hostil. Es muy amplia la gama de factores am-
cio, en una orientación biológica y mecanicista—, bientales adversos que pueden producir tal inse-
para que el psicoanálisis esté en condiciones de guridad en el niño: ser directa o indirectamente
concretar todas sus potencialidades como ciencia dominado, la indiferencia, una conducta ambigua,
del hombre: “Mi convicción, en pocas palabras, 83 la falta de respeto por sus necesidades indivi-
que el psicoanálisis debe superar las limitaciones, duales, la carencia de una verdadera orientación,
propias de una psicologia instintivista y genética las arbitrariedades, la excesiva admiración o su
(1939, pág. 8). total ausencia, la carencia de un afecto digno de
Horney objeta, especialmente, el concepto freu- confianza, la necesidad de tomar partido en los '
diano de envidia 'del pene y su presunta calidad de conflictos de sus padres, la exigencia de excesiva
factor determinante de la psicología femenina. Se- responsabilidad o la virtual ausencia de requeri-
gún se recordará, Freud afirmó que las actitudes y mientos en ese sentido, la sobreprotección, el ais-
los sentimientos peculiares de las mujeres y la ma- lamiento respecto de otros niños, la injusticia. la
YOI’ profundidad de sus conflictos derivan del senti- discriminación, promesas incumplidas, una atmós-
miento de inferioridad genital y de sus celos respecto fera hostil, y así de seguido (1945, pág. 41).
del hombre. A criterio de Horney, sin embargo, la
psicologia femenina está basada en la falta de con- En general, todo lo que perturba la seguridad del
f¡amm y en el excesivo énfasis puesto en la relación niño en relación con sus padres, produce ansiedad
amorosa, y no se relaciona sino en minimo grado básica.
124 CALVIN S. HALL Y GARDNER LINDZEY

El niño inseguro y ansioso despliega diversas es- 4. La necesidad neurótica de poder


trategias destinadas a encarar sus sentimientos de
soledad y desamparo (1937): puede tomarse hostil Se manifiesta en el esfuerzo por conseguir el
y procurar vengarse de quienes lo han rechazado o der por el poder mismo, en una falta enencial po- de
maltratado o volverse manifiestamente sumiso para respeto por los demás, en una indiscriminada glo-
reconquistar el amor que siente perdido; puede, rificación de la fuerza y un profundo desprecio per
la debilidad. Quienes temen ejercer abiertamente
asimismo, para compensar sus sentimientos de in-
ferioridad, concebir una imagen de sí mismo irreal el poder pueden tratar de controlar a los demás me-
diante la utilización de la superioridad en el orden
o idealizado (1950) o, en busca de amor, puede intelectual. La necesidad de creer en la omnipo-
intentar sobornos o amenazas o tener compasión de tencia de la voluntad constituye otra variedad del
si mismo para obtener la simpatía de los demás. ansia de poder; los individuos que la experimcntan
Si no logra conquistar el amor de los otros inten- consideran que pueden conseguir cualquier cosa
tará, tal vez, adquirir poder sobre ellos: compensa- mediante el simple ejercicio de su voluntad.
rá así su sensación de desamparo, hallará una salida
para su hostilidad y estará facultado para explotar 5. La necesidad neurótica de explotar a los demás
a los demás; o llegará a ser resueltamente compe-
6. La necesidad neurótica de prestigio
titivo y atribuírá la máMa importancia al triunfo
sobre otros, no al logro en si; o bien volverá La autoevaluación está determinada por el grado
hacia de reconocimiento público de que el individuo es
dentro- su agresividad y llegará a menospreciarse.
Existe la posibilidad de que cualquiera de estos objeto.
recursos se transforme en un mecanismo más.
o
menos permanente de su personalidad; es 7. La necesidad neurótica de admiración personal
decir,
que una estrategia particular puede asumir, dentro
de la dinámica de la personalidad, el carácter de El individuo que padece esta necesidad tiene una
un impulso o una necesidad. Horney enumera diez imagen agigantada de si mismo, y pretende ser ad-
necesidades adquiribles como consecuencia de la mirado de acuerdo con ella y no con lo que real-
mente es.
búsqueda de soluciones para el problema de las re-
laciones humanas perturbadas (1942) y, dado el
carácter no racional de tales soluciones, denomina 8. La ambición neurótica de logro personal
"neuróticas” a las necesidades en cuestión. En este caso el individuo aspira a ser el mejor y
se impulsa a sí mismo, como resultado de su básica
1. La necesidad neurótica de afecto y aprobación inseguridad, a logros cada vez mayores.

Se caracteriza por un indiscriminado deseo de 9. La necesidad neumática de autosuficiencia


complacer a los otros y de cumplimentar sus espec- e independencia
tativas; el individuo que la padece vive en pos de
la favorable opinión de los demás y es extremada- Frustrado en sus intentos de establecer relaciones
mente sensible al menor signo de rechazo y hosti- afectuosas y satisfactorias con los otros, el individuo
lidad. se aísla de ellos y rehúsa vincularse con nadie ni a
nada; se convierte en un lobo solitario.
2. In necesidad neurótica de un compañero que se
10. La necesidad neurótica de perfección
haga cargo de la propia vida
y de inexpugnabilidad
El individuo que la padece es un parásito;
so- Temeroso de cometer errores o de ser criticado,
brwsha el amor y teme exageradamente ser
aban- el individuo que padece esta necesidad procura lle-
donado y vivir en soledad.
gar a ser invulnerable e infalible; asi, costantemente
busca sus propias imperfecciones, con el propósito
fl. La necesidad neurótica de restringir de encubrirlas antes de que se hagan evidentes pa-
la propia
vida dentro de límites estrechos ra los demás.
En este caso, el sujeto jamás exige Estas diez necesidades constituyen las fuentes de
nada, los conflictos internos: la necesidad neurótica de
contenta con poco, prefiere pasar inadvertido se amor, por ejemplo, es insaciable: cuanto más tiene
atribuye valor, por sobre todo, a la y
modestia. el individuo, más quiere y, en consecuencia, jamás
LAS GRANDES TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD 125

se sentirá satisfecho; tampoco la necesidad de in- les y artificiales: a causa de su gran ansiedad básica,
dependencia podrá ser plenamente satisfecha ya conscientemente reconoce sólo una de esas ten-
que otra parte de la personalidad desea, al mismo dencias y niega o reprime las otras dos, o bien, crea
tiempo, amor y admiración. La búsqueda de la per- una idealizada imagen de si misma de la que, apa-
fección es una causa perdida desde el principio; rentemente, han sido eliminadas las tendencias con-
ninguna de las necesidades mencionadas se adecua tradictorias, lo que en realidad no ocurre. Poste-
a la realidad. riormente, en uno de sus libros, Horney eXpuso
En una publicación posterior (1945), Horney cla- mucho más extensa y detalladamente las infortuna-
sificó las diez necesidades en tres grupos: 1) el im- das consecuencias del desarrollo de una concepción
pulso hacia la gente, por ejemplo, la necesidad de irreal del sí mismo y del intento de vivir según esa
amor; 2) el alejamiento respecto de la gente, por imagen idealizada: la búsqueda de gloria, los sen-
ejemplo, la necesidad de independencia, y 3) el im- timientos de autodesprecio, la mórbida dependencia
pulso en contra de la gente, por ejemplo, la nece- re5pecto de los demás y la autodegradación son
sidad de poder. Cada uno de éstos representa una sólo algunos de los malsanos y destructivos resulta-
orientación básica del individuo ante los otros y an- dos de la idealización del sí mismo. Existe aún una
te sí mismo; según Horney, las diversas orientacio- tercera solución que el neurótico utiliza para aliviar
nes constituyen las bases de los conflictos internos. sus conflictos internos: su externalización. En efecto,
La diferencia esencial entre un conflicto normal y el neurótico afirma “no quiero explotar a los otros,
uno neurótico es simple cuestión de grado “. ._.la ellos quieren explotarme a mi”. Tal solución crea
disparidad entre los términos conflictivos es mu- conflictos entre el individuo y el mundo exterior.
cho menor para el individuo normal que para el Todos estos conflictos pueden ser evitados o re-
neurótico” (1945, pág. 31); es decir que, si bien sueltos cuando el niño crece en un hogar en el que
hay seguridad, confianza, amor, reSpeto, tolerancia
todos los individuos padecen esos conflictos, algu-
nos fundamentalmente a causa de experiencias in- y calidez. Es decir que Horney, a diferencia de
Freud y de Jung, no cree que el conflicto sea cons-
fantiles de rechazo, negligencia, sobreprotección y titutivo de la naturaleza humana, ni, por ende, que
otros tipos no menos lamentables de trato parental, sea inevitable. A su juicio, el conflicto surge de las
revisten formas más graves. condiciones sociales: “La persona más propensa a
Mientras que la persona normal puede resolver volverse neurótica es aquella que ha experimentado
tales conflictos integrando las tres orientaciones, intensamente las dificultades determinadas por la
puesto que no son mutuamente excluyentes, la per- cultura, en especial a través de sus vivencias infan-
sona neurótíca debe valerse de soluciones irraciona- tiles” (1937, pág. 290).
CAPÍTULO 4

HARRY STACK SULLIVAN

A Harry Stack Sullivan se debe el nuevo enfoque del campo. Desde tal punto de vista, la persona.
conocido como la teoria interpersonal de la psiquia- lidad es considerada hipotética, y sólo existe la
tría, cuyo principio fundamental, respecto de la posibilidad de estudiar la pauta de los procesos
teoría de la personalidad sostiene que la persona- que caracterizan la interacción de las personali-
lidad es “la pauta relativamentqpersistente de si- dades en situaciones particulares o campos recu-
tuaciones “interpersonale—spíéíurrentes que 3359239: rrentes que “incluyen” al observador (1950 pág.
_
rizan a una vida humana” (1—935, pág."T11).
personalidad es una‘entida'd hipotética que no La 92). .
de ser pue- '
aislada de las situaciones interpersonal“, Harry Stack Sullivan nació el 21 de febrero de
la conducta que tiene lugar en estas situaciones Y
cons- 1892 en una granja próxima a Norwich, Nueva York,
tituye, precisamente, cuanto es posible observar y murió el 14 de enero de 1
calidad de personalidad. En consecuencia, hablar en en París en el
viaje de regreso a su país tras haber asistido, en
del individuo como objeto de estudio carece, según
Amsterdam, a un encuentro de la Junta Ejecutiva
Sullivan, de fundamento ya que no existe, ni puede de la Federación Mundial de la Salud. Había ob-
existir,‘al margen de sus relaciones con otros
indi- tenido su título de médico en la Facultad de Medi-
viduos ï‘desde su nacimiento, el ser humano
es par-
te de una situación interpersonal y durante toda CÍna y Cirugía de Chicago en 1917 y prestado servi-
su cios en las fuerzas armadas durante la Primera
vida sigue siendo integrante de un campo social;
aun el ermitaño que ha renunciado a la sociedad Guerra Mundial, al cabo de la cual fue médico
de
la
llevaconsigo, en la soledad, el recuerdo de antiguas Junta Federal para la Educación Vocacional
y del
relaciones interpersonales que continúan influyendo Servicio de Salud Pública. En .1922 ingresó
en el
Hospital de Saint Elizabeth, en Washington,
sobre sus actos y su pensamiento. D.C.,
Si bien Sullivan no niega la importancia de donde recibió la influencia de William
la he- White,
Alanson
rencia y la maduración en la formación una de las personalidades más destacadas
y adapta-
ción del organismo, considera que las característi- de la neuropsiquiatría norteamericana. Desde
hasta 1930, fue miembro de la Escuela 1923
cas e5pecíficamente humanas son producto de Medicina
de la
interacción social y señala, además, que la__s__gtpenien-_, de la Universidad de Maryland y del
Sheppard y Enoch Pratt, en Towson, en Hospital
cias interpersonales del el
Estado, y condujo, precisamente durante ese mismo
en efecto"ltfïliiïck=3rí;"w sundindeapsséenskeser —y
funcionamiento puramente perío-
fisiológico, de modo tal que aun el organismo do de su vida, las investigaciones sobre esquizofre-
pier- nia que consolidaron su reputación como cientifico
di‘sií'con'clicióñ‘deüfidíd"biológïz'a'pagá:@aiïsfcïfl; en el campo de la medicina. Salió de Maryland
marse .en organismo mciafioïgsjromas para
formas abrir un consultorio en Park Avenue en Nueva
socializadas de respiración, digestión, eliminación, York
circulación, etcétera, ' con el propósito de estudiar los procesos obsesivos
- ' ' ‘ en los pacientes de consultorio. Al mismo tiempo
A criterio dé’Súllivan, la psiquiatría
mente vinculada con la psicología está intima- comenzó su formación analítica con Clara Thomp-
pr0pia social, y su son, discípula de Sandor Ferenczi. Esta experiencia
teoría de la personalidad
da preferencia por los conceptos revela una defini- psicoanalítica no fue la primera de Sullivan, ya
que
cológico-sociales; y las variables psí- había tenido 75 horas de análisis cuando era estu-
al respecto, escribe: diante de medicina. En 1933 fue electo presi-
En mi opinión, la ciencia dente de la Fundación William Alanson White,
tna cubre, en gran medida,general de la psiquia- cargo que desempeñó hasta 1943. En 1936 contri-
el mismo campo que buyó a la creación de la Escuela de Psiquiatria de
la psicología social porque la psiquiatría
ca ha de ser definida como científi— Washington —instituto educativo de la Funda-
relaciones el estudio de las ción— de la cual, además, llegó a ser director. En
interpersonales y ello requiere, en úl- 1938 apareció la revista Psychiatry para promover
tima instancia, la aplicación
conceptual
del tipo de marco la teoría de las relaciones interpersonales, de la
denominado, en la actualidad,
teoría que Sullivan fue director hasta su muerte. SU-
LAS GRANDES TEDRÍAS DE LA PERSONALIDAD 127

Mix-an actuó también como consultor del Selec- ha aparecido es The fusion of psychiatry and
social science (1964) [La fusión de la psiquiatría
tire Service System [Sistema Selectivo de Ser- y de las ciencias sociales]. El primero y el último
vicio]. Intervíno, en 1948, en el Proyecto de Ten- volumen de esta serie de cinco obras de Sullivan
siones de la UNESCX), creado por las Naciones Uni- son los más adecuados para lograr una compren-
das con el objeto de estudiar las tensiones que
afectan la posibilidad de entendimiento en el plano de su teoría sociopsicológica de la persona-
1 a .
lignd -
internacional y, también durante ese año, fue desig-
nado miembro de la comisión internacional prepara- Por su parte, el filósofo Patrick Mullahy, discípu-
toria para el Congreso Internacional de la Salud lo de Sullivan, ha publicado varios libros que tratan
Mental. Sullivan fue tanto un cientifico dedicado a de la teoría de las relaciones interpersonales, uno
la organización y dirección en su área, como un de los cuales, A study of interpersonal relations
(1949) [Estudio de las relaciones interpersonales],
eminente defensor de la psiquiatría, director de una
importante escuela para la capacitación de psiquia- contiene una serie de artículos redactados por
tras, notable terapeuta, teórico audaz e investigador miembros de la Washington School y el Instituto
médico productivo. La brillante personalidad y la William Alanson White de Nueva York; todos ellos,
originalidad del pensamiento de Sullivan atrajeron incluidos tres del prepio Sullivan, fueron publica-
a sus contemporáneos, muchos de los cuales llegaron dos originalmente en Psychiatry. En otro de sus
a ser sus discípulos, expositores, colegas y amigos. libros, The contributions of Harry Stack Sullivan
Además de William Alanson White, las mayores (1952) [Los aportes de H. S. Sullivan], Mullaby
influencias sobre el desarrollo intelectual de Sulli- reúne los trabajos de representantes de diversas
van provienen de Freud, Adolph Meyer, el filósofo disciplinas, entre ellas psiquiatría, psicología y so-
social George Herbert Mead, los antropólogos cul- ciología, que fueron presentados en el simposio rea-
turales Edward Sapir y Ruth Benedict y el sociólo- lizado en memoria de Sullivan, y expone sucinta-
go Leonard Cottrell. Sullivan se sintió particular- mente su teoría interpersonal [de Mullahy], inclu-
mente cerca de Edward Sapir, uno de los primeros yendo además una completa bibliografía de los
que abogaron por una más estrecha relación de tra- escritos del extinto hasta 1951. También en Oedipus
bajo entre la antropología, la sociología y el -myth and complex (1948) [Edipo. Mito y comple—
psicoanálisis. Sullivan inició en 1929 la formulación jo] de Mullahy, hay un resumen similar de las con-
de su teoría de las relaciones interpersonales, que cepciones de Sullivan. La teoría interpersonal de
consolidó hacia la mitad de la década de 1930. éste fue, asimismo, extensamente tratada por Do-
En el transcurso de toda su vida publicó sólo un rothy Blitsten (1953).
libro que daba a conocer su teoría (1947); sin em-
bargo, llevaba minuciosas anotaciones y, por otra
parte, muchas de sus conferencias destinadas a los
estudiantes de la Escuela de Psiquiatria de Was- l. ESTRUCTURA DE LA PERSONALIDAD
hington fueron grabadas.
Tanto esas notas y grabaciones como diversos Sullivan insiste permanentemente en que la perso-
materiales inéditos fueron remitidos a la Fundación nalidad es una entidad puramente hipotética, que
PSÏQUÍátrica William Alanson White. Se han publi- no puede ser observada ni estudiada al margen de
cado cinco libros basados en el material de Sulli- las situaciones interpersonales: la unidad de estu-
van, los tres primeros con introducciones y comen- dio es la situación interpersonal, no la persona. La
tarios de Helen Swick Perry y Mary Cavell y los organización de la personalidad consiste en aconte-
0'0'05 sólo con notas de Helen S. Perry. The in- cimientos interpersonales antes que intrapsíquicos
Ée"Personal theory of psychiatry (1953) [La teoria y, por lo tanto, la personalidad sólo se manifiesta" 7
Interpersonal de la psiquiatría] fundamentalmente cuando la persona actula en relación comuna—6 'nïás
c0‘18_Íste en una serie de conferencias dadas por iqdigdumge, sin embargo, no necesariameñt‘é'liaï
Sullivan durante el invierno de 1946-1947 y repre- de estar
presentes; de hecho, pueden ser figuras
senta la exposición más completa de su teoría acer- __i_lt_ls_orias o inexistentes:
una persona puede mante—
de. las relaciones personales. The psychiatric ner relacïoïïéí ¿sana héroe p0pular como Paul
fat
ígtermew (1954) [La entrevista psiquiátrica] está Bunyan, con un personaje ficticio como Anna Ka-
mirada POr conferencias ofrecidas en 1943. Los renina, o con sus antepasados o sus descendientes
105 de Sullivan sobre la esquizofrenia, muchos aún no nacidos. El carácter de los procesos psicoló-
e cuales se remontan
(1m con
raaa al tiempo en que cola- gicos de percibir, recordar, pensar, imaginar, al.
el hospital Sheppard
Se ¡“reunieron bl'Icaron con el y Enoch Pratt ’ igual que el de; todos los restantes, es interpersonal;
nin as a h umanY pu título Schizophre- aun los sueños noctumos; 'puesto que habitualmente
¿bmo un Process (1962) [La esquizofrenia reflejan las relaciones del que sueña con los demás:
,1 proceso humano]. El último volumen que son interpersonales.
f
/
l
128 CALVIN S. HALL Y CARDNEB LINDZEY

Aun cuando Sullivan no asigna a la personalidad aparato efector que ejecuta la acción y un aparato
sino un status hipotético, afirma que ella constituye conectador, ubicado en el sistema nervioso central,
el procesoiguetie denominado eductor, que conecta el mecanismo re-
nen usar en una. serie,.,eÏ.iÏC‘=ïñïíï>ï—ïíï€ïpersonalsí
Wdiversos ceptor con el efector. Así, la proximidad del pezón
”Porbtra parte, concede un status sustancial a algu- a la boca del bebé estimula la membrana sensitiva
nos de esos procesos mediante su identificación y de sus labios, la cual descarga impulsos nerviosos
denominación y la conceptualización de varias de que, a su vez, actúan sobre los órganos motores de
sus propiedades; de ellos, los principales son: los la boca y provocan movimientos de succión.
dinamismos, las personificaciones y los procesos La mayoría de los dinamismos sirven al pr0pósito
cognitivos. de satisfacer las necesidades básicas del organismo;
hay uno, sin embargo, sumamente importante,.que
DINAMISMOS se desarrolla como resultado de la ansiedad: es el
llamado dinamismo o sistema del sí mismo.
Un dinamismo es la menor de las unidades con-
ceptuales aplicables al estudio del individuo. Se lo
define como ‘Ïla pauta relativamente duradgra..de—— El sistema del si mismo
EailfformíiQíogsáfle la'_.ener.g_ía¿_qúe
l 'Se repite] Ca- La ansiedad es el producto de las relaciones in-
racteriza" al organismo viviente en“ tanto subsiste terpersonales y es originariamente transmitida por
¡como tal” (1953, pág. 103). Cualquier forma de la madre al niño; más tarde es provocada por las
conducta, sea manifiesta y pública, como hablar, o amenazas a la propia seguridad. Para evitar o re-
encubierta y privada, como pensar y fantasear, ducir al minimo la ansiedad real o potencial, el
constituye una transformación de la energía y, pues- individuo adopta diversos tipos de medidas protecto-
to que el dinamismo es una pauta de conducta que ras y controles supervisores de su conducta: apren-
persiste y se repite, es aproximadamente lo mismo de, por ejemplo, que puede evitar el castigo satis-
que un hábito. Según la sutil definición de Sullivan, faciendo los deseos de sus padres. Estas medidas de
la pauta es “la envoltura de insignificantes diferen- seguridad constituyen el sistema del si mismo, que
cias particulares” (1953, pág. 104); es decir, que la sanciona ciertos tipos de conducta (sí mismo buc-
pauta admite, sin sufrir modificación, el agregado no) y prohíbe otras (si mismo malo).
de un nuevo rasgo mientras éste no sea significati- En su carácter de guardián
vamente diferente de los otros contenidos de la dad, el sistema del si mismo de la propia seguri-
tiende a aí-slarse del
envoltura, pues en tal caso transformará la pauta en resto de la personalidad;
una nueva. Por ejemplo, dos manzanas de muy dis- que no coincide con su excluyetoda información
organización presente y
tinto aspecto han de ser, sin embargo, identificadas frustra, en consecuencia, la
como tales porque sus diferencias no son importan- neficio procedente de la experiencia.posibilidad de un be-
tes; una manzana y una banana, en cambio, difieren si mismo protege al sujeto
Puesto que el
de la ansiedad, es muy
en aSpectos significativos y configuran, por lo tan- estimado y defendido de toda critica;
to, dos pautas diferentes. a medida que
el sistema del sí mismo desarrolla su complejidad y
_¡Los dinamismos específicamente humanos son. su independencia, impide al individuo
la formula-
aquellos qu‘é'cara‘cterizan‘las relaciones interperso- ción de juicios objetivos sobre
su propia conducta
nales: por ejemplo, un individuo puede comportarse y al tiempo disimula las evidentes
de manera habitualmente hostil respecto de otra entre lo que contradicciones
es en realidad el individuo y lo que
persona o grupo, lo que constituye la expresión de su
un dinamismo de malevolencia; el hombre que tien- sistema del si mismo manifiesta que es: en ge-
neral, cuanto más ansiedad experimenta una perso-
de a establecer relaciones lascivas con las mujeres
despliega un dinamismo de sensualidad; el niño que na, más se infatúa su sistema del si mismo y más
teme a los extraños presenta un dinamismo de mie- se disocia del resto de la personalidad. Por consi-
do.‘ Cualquier reacción habitual ante una o más guiente, aun cuando sirve al útil pr0pósito de redu-
personas, sea 'én'forma'de‘sentimiento, ‘de'act‘itpd, cir la ansiedad, el sistema del si mismo interfiere
_o de acción manifiesta,—- constituye"url—dinamismo. - con la capacidad del individuo para la convivencul
Aun cuando‘en todo ser humano se hallan los mis- constructiva.
mos dinamismos básicos, su modo de expresión va- Según Sullivan, el sistema del si mismo es el pro-
ría según la situación y la experiencia del individuo. a ducto de los aspectos irracionales de la socredad.
Por lo general, todo dinamismo se vale de una En otras palabras, el niño pequeño llega a fent"
determinada zona corporal —por ejemplo, la nuca, ansiedad por causas que en una sociedad mas ra-
las manos, el ano, los genitales— por medio de la cional no existirian y, para manejar esa ansiedadnsc
cual interactúa con el ambiente. Cada zona posee ve forzado a adOptar medidas que no son
un aparato receptor sensible a los estímulos, un ni realistas. Si bien Sullivan reconoce que naltuïalt‘
e ( Lsü-
LAS GRANDES TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD 129
rrollo del sistema del si mismo es absolutamente ne- Las personificaciones compartidas por grupos nu-
(-esarío para evitar la ansiedad moderna y, tal vez, merosos de personas reciben la denominación de
en cualquier clase de sociedad que el hombre sea estereotipos, que son concepciones validadas con-
que este sistema tal sensualmente, es decir, ideas ampliamente acepta-
capaz de construir, cree.
.

como
obstacu; das y transmitidas de generación en generación por
hO)' lo conocemos constituye el pnncrpal
‘-.-.'.

¡o para los cambios favorables de la personalidad . los miembros de una determinada sociedad: el
{1953, pág. 169). Quizá de un modo humorístico del profesor distraído, el del artista informal y el del
escribió: “El si mismo es el contenido de la con- obtuso hombre de negocios, constituyen ejemplos
“Fv=.fiw_-,t.w

ciencia siempre que se esté completamente cómo- de estereotipos comunes en nuestra cultura.
do acerca del respeto de sí mismo, el prestigio dc
los conciudadanos, y el respeto
que se goza entre
v dciercncia que lc prestan” (1964, pág. 217). PROCESOS COGNITIVOS
' La contribución de Sullivan a la determinación
PEBSONIFICACIONES del lugar que la cognición ocupa en la personalidad
—- _—. — _— _—
es su clasificación de la experiencia, la cual, a su
La ¡xtrsoniiícación es la imagen que un individuo criterio, ocurre según tres modalidades: prototáxica,
-—

tiene dc si mismo o de otro. «Es un complejo de paratáxica y síntáxica. La experiencia prototáxica,


sentimientos, actitudes y concepciones desarrolla- que “puede considerarse como la serie discreta dc
dos a partir de las experiencias de satisfacción de estados momentáneos del organismo sensible”,
las necesidades y de la ansiedad.,El bebé, por cjcm- (1953, pág. 29) se asemeja a lo que James deno-
pio, desarrolla la personificación de la madre bue-
na al ser amamantado y acariciado por ella. Cual- minó la “corriente de la conciencia”: las sensacio-
quier relación interpersonal que implique satisfac- ncs, las imágenes y los sentimientos que fluyen por
t’lóli tenderá a estructurar una imagen favorable del la mente y que no necesariamente se vinculan entre
agente satisfactorio. La personificación dc la madre si. ni poseen significado para quien los experimen-
mala, en cambio, resulta de las experiencias del ta. El modo prototáxico de experiencia, que se halla
iii-bt”: con ella que provocan ansiedad. Finalmente, en su forma más pura durante los primeros meses
tales personificaciones de la madre, sumadas a cua- de vida, es la precondición necesaria para la apari-
lesquícra otras que se formen, la de una madre ción dc los otros dos modos.
seductora o sobreprotectora, por ejemplo, sc. fusio- El modo paratáxico del pensar consiste en la pcr-
nan para constituir una personificación compleja. ccpción (lo relaciones causales entre acontecimien-
listas imágenes no son descripciones rigurosas tos quc, aun. cuando ocurren con relativa simulta-
cie los sujetos a quienes se refieren; aun cuando ini- neidad, no están lógicamente relacionados. En uno
rialmente se iorman para enfrentarse con la gente
de sus cuentos cortos, el eminente escritor checo
rn situaciones interpersonales bastante excepciona- Franz Kafka pinta un interesante caso de pensar
ir-s, una vez formadas suelen persistir e influir cn
mwstras actitudes hacia otras personas. Por ejem- paratáxico: cierto dia, cuando uno de los animales
do una perrera estaba orinando, alguien tiró un hue-
iilo, es posible que un individuo que personifica a so por encima del alto cerco que rodeaba el esta-
au padre como un hombre mezquino y dictatorial
blecimiento; el perro pensó: “mi orina hizo apare-
¡"Uyecte esa misma personificación sobre otros
hombres mayores, por ejemplo, maestros, policias, cer el hueso” y, desde entonces, cada vez que
i’iiirones. En consecuencia, algo que en los primeros queria comer levantaba la pata. Sullivan cree que
años de vida actúa como función reductoru ¡lo ten- gran parte de nuestro pensar no va más allá del
siones puede, posteriormente, interferir con las rela- nivel paratáxico, razón por la cual vemos conexio-
‘firmes interpersonales. Esas imagenes cargada" de nes causales entre experiencias totalmente desvia-
ansiedad distorsionan las concepciones del indivi- culadas las unas de las otras. Todas las supersticio-
duo nunca de gente por lo común significativa/Las nes, por ejemplo, constituyen ejemplos de pensa-
nc-rsoniiieaciones del si mismo, tales como el yn miento paratt‘txico.
¡""1"! y el yo malo, siguen idéntico principio (¡me El tercer y mas alto modo del pensamiento es el
las de los otros: la personificación del yo bueno rc-j sintaxico. Consiste en una actividad simbólica con-
”vita
de las experiencias interpersonales ue tienen; sensualmonto validada, de indole sobre todo verbal.
de recompensas, mientras que lu flel yo mu- i Un simbolo consensualmente validado es aquel al
lilirïlï-“ír las situaciones productoras de ansic-, que un grupo (le personas ha acordado otorgar un
¡ind i‘m dr; as de los otros, tales personificaciones significado estándar: las palabras y los números son
“4 t“ ¿Jr'tto Mnu tienden a interponerse en el camino: los mejores ejemplos de este tipo de simbolos. El
(e la al"Itoevaluación objetiva. modo sintaxico establece el orden lógico de las cx-
130 CALVIN S. HALL Y GARDNEB LINDZEY

periencias y. capacita a las personas para comuni- cia, al cual es aplicable el término general de satis-
carse entre sí. facción” (1950, pág. 85). La consecuencia tipica
Además de formular así los modos de la experien- de la prolongada insatisfacción de las necesidades es
cia Sullivan acentúa la importancia de la previsión un sentimiento de apatía que a su vez produce una
en el funcionamiento cognitivo: “El hombre, la disminución general de las tensiones.
persona, vive con su pasado, su presente y su futuro La ansiedad es la experiencia de tensión resultan-
inmediato, todos ellos, claramente pertinentes para te de amenazas reales o imaginarias a la
' pr0pia
la explicación de su pensamiento y su acción” (1950, seguridad. Su intensidad varía de acuerdo
con la
pág. 84). La previsión depende de la propia me- gravedad de la amenaza y la eficacia de los
dÍSpo-
moria del pasado y de la interpretación del pre- sitivos de seguridad al alcance del sujeto:
sente.
una gran
ansiedad reduce la eficiencia del individuo en lo
Los dinamiSmos, las personificaciones y los pro- que atañe a la satisfacción de sus necesidades,
cesos cognitivos, aun cuando no agotan la lista de turba sus relaciones interpersonales per-
los componentes de la personalidad, son los rasgos en su pensamiento. y crea confusión
La ansiedad intensa es como
estructurales fundamentales distintivos del sistema
un golpe en la cabeza; en lugar de proporcionar in-
de Sullivan.
formación al individuo provoca su total confusión y
su amnesia; las formas menos graves de ansiedad
en cambio, pueden ser informativas. En efecto, Su-
2. DINAMICA DE LA PERSONALIDAD llivan cree que, en la vida del hombre, la ansiedad
es la primera influencia altamente educativa. La an-
siedad es transmitida al lactante por la “figura ma-
Coincidente con muchos otros teóricos de la per- terna”, que la expresa en sus miradas, en el tono
sonalidad, Sullivan la concibe como un sistema de de su voz, en toda su conducta. Si bien Sullivan
energía cuya tarea esencial es la realización de ac- admite ignorar cómo se efectúa dicha transmisión, '
tividades reductoras de tensión. A su criterio, puesto es muy probable que tenga lugar por mediación de
que ambos términos, energía y tensión, son emplea- algún proceso de empatía cuya naturaleza es aún
dos aquí exactamente en el mismo sentido que se desconocida. Como consecuencia de la ansiedad
les atribuye en fisica, ninguno de ellos requiere el transmitida por la madre, otros objetos del ámbito
agregado del adjetivo “mental”. inmediato llegan a estar cargados de ansiedad por
obra del modo paratáxico de asociación de las ex-
periencias contiguas: el pezón materno, por ejem-
Tensión plo, se convierte en un pezón malo que produce
reacciones de evitación en el bebé. Éste aprende a
Sullivan parte de la concepción ya familiar del apartarse de las actividades y los objetos que au-
organismo como un sistema de tensiones que, teóri- mentan la ansiedad y tiende a dormirse cuando no
camente, puede fluctuar entre dos límites: la relaja- logra eludirla. Este dinamismo de desapego somno-
ción absoluta o euforia, según la denominación de liento —-según la denominación de Sullivan— cons-
Sullivan, y la tensión absoluta, por ejemplo, el terror tituye la contraparte de la apatía, que es el dina-
extremo. Las fuentes principales de tensión son dos: mismo provocado por las necesidades insatisfechas;
1) las necesidades del organismo, 2) la ansiedad. de hecho, la diferenciación objetiva de estos dos
Las necesidades están conectadas con las necesida- dinamismos resulta imposible.
des fisioquímicas de la vida -—-ciertas condiciones, Según afirma Sullivan, una de las principales ta-
tales como la falta de alimento, de agua o de oxi- reas de la psicología es descubrir los aspectos de
geno, producen un desequilibrio en la economía del las relaciones interpersonales, básicamente vulnera-
01'g<'=\I'IÍSmo—, pued en tener carácter general -—co- bles a la ansiedad antes que tratar los sintomas
mo el hambre— o estar más especificamente rela- provocados por ella.
cionados con una región del cuerpo —como la ne-
cesidad de succión—; se ajustan por si mismas a un
orden jerárquico: las ubicadas más abajoen la es- THANSFORMACIONES DE LA ENERGIA
cala deben ser satisfechas previamente para que
puedan serlo las que ocupan los lugares más altos. La energía se transforma mediante la ejecución
Uno de los resultados de la reducción de la necesi- de trabajo: toda acción explicita que incluya los
dad es una experiencia de satisfacción: “Toda músculos estriados del cuerpo y, asimismo, toda ac'
tensión puede ser considerada como una necesidad tividad mental .upercibir, recordar, pensar—n
de transformaciones energéticas particulares que constituye un trabajo. El alivio de la tensión es la
han de disiparla, fenómeno a menudo acompañado finalidad de estas actividades que, explícitas 0 en-
por un cambio del estado ‘mental’, de la concien- cubiertas, están en gran medida condicionadas por
LAS GRANDES TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD 13]

la sociedad en cuyo ámbito crece la personall‘Ïn- El período de la infancia se extiende desde el


Vestigando en su pasado, cualquiera puede descu- nacimiento hasta la aparición del habla articulada;
brir que las pautas de tensión y las transformacio- en su transcurso, la zona oral es la zona primaria
nes energéticas que constituyen su existencia son, de interacción del bebé y su ambiente. Por una
en una medida verdaderamente asombrosa, el parte, la lactancia le prOporciona su primera expe-
resultado de su educación para vivir en una so- riencia interpersonal; por la otra, el rasgo dominan-
ciedad particular” (1950, pág. 83). te del ambiente, durante la infancia, es el objeto
que le suministra el alimento, sea el pezón materno
Sullivan no cree que los instintos sean fuentes O la tetina del biberón. El bebé desarrolla diversas
importantes de motivación humana ni acepta la
concepciones del pezón, según la naturaleza de sus
teoria freudiana de la libido. Un individuo aprende experiencias con éste: 1) el pezón bueno, la señal
a comportarse de determinada manera como resul- del amamantamiento y de la proximidad de la sa-
tado de sus interacciones con los otros y no porque tisfacción, 2) el pezón buenO aunque no grato
posea imperativos innatos para ciertos tipos de porque el bebé no tiene hambre, 3) el pezón malo
acción. porque no da leche, la señal para el rechazo y la
siguiente búsqueda de otro pezón y 4) el pezón
malo de una madre ansiosa, señal para la evitación.
Otros aSpectos característicos de los estadios in-
3. DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD fantiles son: 1) la aparición de los dinamismos de
apatía y de desapego somnoliento, 2) la transición
del modo prototáxico de cognición al paratáxico, 3)
Sullivan estableció minuciosamente la secuencia la organización de las personificaciones, como la de
la
de situaciones interpersonales a las que, al pasar de madre mala, ansiosa, rechazadora, frustradora, y
la infancia a la edad adulta, está expuesta la persona, demadre'buena, sosegada, aceptadora, satisfacien—
y los, modos en que aquéllas contribuyen a la forma- te, 4) la organización de Ia experiencia mediante el
ción de la personalidad. Más que cualquier otro teó- aprendizaje y la aparición de los rudimentos del
rico, con la posible excepción de Freud, Sullivan sistema del sí mismo, 5)’ la diferenciación de su pro-
estudió la personalidad desde la perspectiva de de- pio cuerpo por el bebé, que aprende así a aliviar
finidos estadios de desarrollo. Sin embargo, mientras sus ten—siones independientemente de la figura ma-
Freud señala que el desarrollo es, en gran medida, terna, por ejemplo, succionándose el pulgar y 6)
el aprendizaje de los movimientos coordinados dc
el despliegue del instinto sexual, Sullivan sostiene los ojos y mano, mano y boca, Oído y voz.
un enfoque más psicosocial del crecimiento de la
La transición de la infancia a la niñez es posibili-
personalidad que reconozca en su verdadera dimen- tada por el aprendizaje del habla y la organización
sión la singular contribución de las relaciones bu- de la experiencia según el modo Sintáxico. La niñez
manas y si bien no descarta los factores biológicos se extiende desde la aparición del lenguaje articu-
como condicionantes de tal desarrollo, los subordi- lado hasta la de la necesidad de compañeros de jue-
na a los determinantes sociales del desarrollo go; el desarrollo del habla permite, entre otras co-
psicológico. Considera, sin embargo, que ocasional- sas, la fusión de diferentes personificaciones, la de
mente tales influencias sociales contrarían las nece- 1a madre buena con la de la mala, por ejemplo, y la
sidades biológicas del individuo, con consecuencias integración del sistema del' si mismo en una estruc-
perjudiciales para su personalidad; sin titubeos, tura más coherente. El sistema del si mismo co-
admite los efectos deletéreos de ciertas influencias mienza a desarrollar la noción de sexo: el varoncito
de la sociedad. Al igual que otros teóricos de la se identifica con el rol masculino y la niña con el
psicologia social, Sullivan fue un severo e incisivo rol femenino, según los prescribe la sociedad. Por
crítico de la sociedad contemporánea. otra parte, el desarrollo de la capacidad simbólica
permite al niño jugar a ser adulto ——Sullivan lla-
ma dramatizaciones a estos modos de actuar “co-
ETAPAS DEL DESARROLLO mo si”-— e interesarse en diversas actividades, tan-
to explícitas como implícitas, útiles para evitar el
personalidad, Sullivan dis— castigo y la ansiedad: Sullivan las llama preocupa-
_ En el desarrollo de la ciones.
tingue seis estadios anteriores al período final de
madurez que, tipicos de las culturas de Europa oc- Uno de los acontecimientos dramáticos de la ni-
mdental, pueden ser, sin embargo, diferentes en ñez es la transformación mdévola, la sensación de
otras sociedades: 1) infancia, 2) niñez, 3) época vivir entre enemigos que, si llega a adquirir sufi-
juvenil, 4) preadolescencia, 5) adolescencia tempra— ciente intensidad, impide al niño responder posi-
na y 6) adolescencia tardía. tivamente a las manifestaciones de afecto de los
132 C-ALVIN S. HALL Y GARDNER LINDZEY

demás. La transformación male'vola distorsiona las teriza por la dependencia del niño respecto de los'
relaciones interpersonales del niño y lo conduce a mayores, durante la preadolescencia sc inicia el es-
aislarse. Por ejemplo, el niño puede decir: "hubo tablecimiento de relaciones entre pares, en función
una época en que todo era encantador, pero eso fue de igualdad, solidaridad y reciprocidad; sin un
antes de que yo tratara con la gente”. La transfor- amigo intimo, el preadolescente llega a ser victima
mación malévola puede también provocar una re- de una desesperada soledad.
gresión al periodo de la infancia.
El problema central del período de la adoles—
La sublimación, que aparece durante la niñez, es cencia temprana es el desarrollo de una pauta de
definida por Sullivan como “la sustitución involun- actividad heterosexual. Los cambios fisiológicos de
taria de una pauta de conducta que trepieza con la pubertad son experimentados por el joven como
la ansiedad o choca con el sistema del sí mismo,
por una pauta de actividad que, más aceptable sentimientos de concupiscencia; sobre la base de
des- tales sentimientos surge el dinamismo de concupis-
de el punto de vista de la sociedad, satisface
par- cencia. que comienza a afirmme en la personali-
cialmente al sistema motivacional causante
de la dad. Este dinamismo, que fundamentalmente 1m-
perturbación" (1953, pág. 193). El exceso
de ten- plica la zona genital incluye, sin embargo, la par-
sión no descargado por la sublimación es empleado
en realizaciones simbólicas, por ejemplo, en ticipación de otras zonas de interaccrón, como la
sueños boca y las manos. Entre la necesidad erótica y
nocturnos.
la de intimidad hay una separación: mientras que la
El estadio juvenil abarca la mayor parte primera tiene como objeto a un miembro del sexo
años escolares; es el período de socializaciónde los
el que el individuo adquiere experiencias en opuesto, la segunda permanece fijada sobre ,un in-
de subor- dividuo del prepio sexo; en los casos en que no
dinación social a las figuras de autoridad ajenas se produce tal divorcio de sus necesidades, el joven
la familia, se torna competitivo y cooperativo, a
des- tiende hacia una orientación homosexual antes que
cubre el significado del ostracismo, el. desprecio
y heterosexual. Muchos conflictos de la adolescencia
el sentimiento de pertenencia a un grupo, aprende
se originan, según señala Sullivan, en necesidades
a soslayar las circunstancias externas que carecen
opuestas, tales como la de gratificación sexual, la
de interés para él, a supervisar su pr0pia conducta
de seguridad y la intimidad. La adolescencia tem-
por medio de controles internos, a elaborar actitu- prana persiste hasta que el individuo halla una pau-
des estereotipadas, a desarrollar nuevas y más efec-
tivas formas de sublimación, y a discernir con ma- ta de realización estable capaz de satisfacer sus im-
yor precisión entre fantasía y realidad. pulsos genitales.
La aparición de la noción de orientación en la “La adolescencia tardía. se extiende desde la insti-
vida constituye uno de los acontecimientos impor- tución de una pauta preferencial de actividad geni-
tantes de este periodo. tal hasta el establecimiento, por medio de innume-
rables pasos tanto educativos como eductivos, dc
El individuo se orienta en la vida en la medida un repertorio de relaciones interpersonales totalmen-
en que ha formulado, o puede ser fácilmente in- te humano o maduro, según lo permitan las opor-
ducido a formular (o posee comprensión como tunidades personales y culturales disponibles” (1953,
para hacerlo) datos de diversos tipos, a saber: las pág. 297). En otras palabras, la adolescencia tardía
tendencias integradoras (necesidades) que ha- constituye un período de iniciación más bien pro-
bitualmente caracterizan las prepias relaciones longado en cuanto atañe a los privilegios, los de-
interpersonales; las circunstancias apr0piadas pa- beres, las satisfacciones y las responsabilidades de
ra su satisfacción y la descarga relativamente li- la vida social y de la vida cívica; poco a poco se es-
bre de ansiedad, y los fines más o menos remo- tablecen plenamente las relaciones interpersonales
tos por cuya aproximación se renunciará a las y, al mismo tiempo, se ópera un incremento de la
Oportunidades intercurrentes de la satisfacción o experiencia en su forma sintáxica, que permite
de aumento del propio prestigio (1953, pág. 243). la ampliación de los horizontes simbólicos; el sis-
tema del sí mismo adquiere estabilidad, el indivi-
El período relativamente breve de la preadoles- duo aprende a sublimar las tensiones con mayor
cencia se caracteriza por la necesidad de una re- eficacia e instituye más poderosas medidas de se-
lación intima con un par del mismo sexo, un cama- guridad contra la ansiedad.
rada en el que se puede confiar y con el que es Una vez ascendidos todos estos peldaños y al-
posible encarar y resolver, en colaboración, canzado el estadio final de la edad adulta, el in-
las ta-
reas y los problemas de la vida. Extremadamente dividuo ha sido transformado, especialmente por
importante, este período señala el comienzo de au-
medio de sus relaciones interpersonales, de 01'83“
ténticas relaciones humanas: mientras en los esta-
dios anteriores la situación interpersonal se carac-
nismo animal en persona humana; no se trata de.un
animal revestido de civilización y humanidad. 5a
LAS GRANDES 'moníAs nn LA 'r'unsoNALInAn 133

Ft de un animal que ha sufrido modilimu‘ioncs hasta


ml punto drásticas que ha dejado de serlo para con- 4. CLASE Y METODOS DE INVESTIGACION
u‘rtirse cn ser humano o si sc prefiere, cn animal
humano.
Al igual que otros psiquiatras, Ilarry Stack Su-
llivan adquirió su conocimiento empírico acerca dc
FACTORES DETERMINANTES DEL la personalidad trabajando con pacientes que su-
DESARROLLO l'rían desórdenes de diversos tipos, en especial, ca-
sos de esquizofrenia y obsesión. (Un relato breve
Aun cuando rechaza firmemente toda doctrina _v acertado del empleo de Sullivan del material de
casos para formular ideas sobre la personalidad se
rígida o precipitada del instinto, Sullivan reconoce
puede hallar en su articulo The data of psychiatry,
la importancia de la herencia en la provisión de 1964, págs. 32-55 [Los datos de la psiquiatría]).
ciertas capacidades, en primer término, la de reci— En los comienzos de su carrera, descubrió que el
bir y la de elaborar experiencias. Asimismo, acepta método de libre asociación no resultaba convenien-
el principio según el cual el entrenamiento no pue- te para el tratamiento de esquizofrénicos, en quie-
de ser eficaz antes de que la maduración haya nes suscitaba excesiva ansiedad; intentó entonces
afianzado la base estructural; así, el niño no estará otros métodos que, según comprobó, también ori-
en condiciones de aprender a caminar hasta que ginaban ansiedad. Puesto que la ansiedad interfe-
sus músculos y su estructura ósea, alcanzado cierto ría el proceso de comunicación entre el pacrente
nivel de crecimiento, lo sostengan en la posición y el terapeuta, Sullivan se dedicó al estudio de las
vertical. La herencia y la maduración proporcionan fuerzas que entorpecen o allanan tal comunicación.
el sustrato biológico para el desarrollo de la per— Llegó así a la conclusión de que el psiquiatra no _
sonalidad, es decir, las capacidades, las predisposi— es sólo un observador sino un participante suma—
ciones y las inclinaciones, pero es la cultura la que, mente importante en la situación interpersonal; el
terapeuta debe enfrentar sus propias aprenSIones
actuando a través del sistema de relaciones inter-
respecto de su competencia profesional, por elem-
personales, hace que se manifiesten las aptitudes y
plo, y sus propios problemas de orden personal. De
los rendimientos reales (transformaciones de ener- resultas de este hallazgo, Sullivan desarrolló su con-
gia) mediante los cuales la persona logra reducir cepto del terapeuta como observador participante.
la tensión y satisfacer sus necesidades.
La primera fuerza educativa es la de la ansie- La teoría de las relaciones interpersonales subra-
dad, que obliga al joven organismo a discriminar ya eSpecialmente el método de la observación
entre tensión creciente y decreciente y a orientar participante y relega a un plano secundario los
su actividad hacia esta última; la segunda, muy po- datos obtenidos mediante el empleo de otros mé-
todos. A su vez, ello implica que la habilidad
derosa, es la de la tentativa exitosa. Existe una ten-
es, en la entrevista psiquiátrica frente a frente,
dencia, señalada por numerosos psicólogos, a fijar de per-sona a persona, de capital importancia
el éxito en la actividad que ha conducido a la gra- (1950, pág. 122).
tificación; el éxito es equiparable con la obtención
de recompensas —la sonrisa de la madre o el elo- En otro lugar escribió: “La necesidad de llorar
gio del padre— y el fracaso, con los castigos, la existe para los observadores que son cada vez más
mirada prohibitiva de la madre o las palabras desa- observantes de sus observaciones” (1964, pág. 27).
Pl'Obadoras del padre. A criterio de Sullivan, tam-
bién la imitación y la inferencia -—para la que adOp-
. ta 1a denominación pr0puesta por Charles Spear- LA ENTREVISTA
man: educción de las relaciones— constituyen tipos
de aprendizaje. Sullivan denomina entrevista psiquiátrica cl tipo
particular de situación interpersonal, frente a fren-
Sullivan no cree, sin embargo, que la persona-
te, que existe entre el paciente y el terapeuta, se
lidad quede precozmente establecida: en cualquier trate de una entrevista única o de una serie de en-
momento, si aparecen nuevas situaciones interper- trevistas a lo largo de un período prolongado. Sulli-
‘0‘13195, puede cambiar: el organismo humano es van la define como “el sistema o la serie de sistemas
extremadamente plástico y maleable; la regresión de procesos interpersonales que surgen de la ob—
es POSÍble y, en efecto, se produce, aun en pleno servación participante y de los cuales el entrevis-
avance del aprendizaje y el desarrollo, cuando el tador deriva ciertas conclusiones acerca del entre-
dolor, la ansiedad y el fracaso se vuelven intole- vistado” (1954, pág. 128). El modo de conducir la
rables. entrevista y los medios por los que el terapeuta lle-
13-1 CALVIN S. HALL Y CABDNER LINDZEY

ga a'conclusiones respecto del paciente constitu- triviales o no pertinentes: es necesario hacerle com-
yen el tema del libro de Sullivan, The mychiatric prender que la entrevista es un asunto serio y no
interview (1954). admite frivolidades. El terapeuta no ha de tomar
Sullivan divide la entrevista en cuatro etapas: notas en el transcurso de las entrevistas ya que esta
ll la introducción formal, 2) el reconocimiento, 3) práctica no sólo distrae al paciente sino que, ade-
el interrogatorio detallado y 4) la terminación. más, tiende a inhibir el proceso de comunicación.
Fundamentalmente, la entrevista es una comuni - Según Sullivan, no es conveniente que las entre-
cación verbal entre dos personas; no sólo lo que el vistas se inicien con prescripciones formales del
sujeto dice, sino cómo lo dice -—la entonación, la tipo “diga todo cuanto se le ocurra”; durante el in-
mayor o menor rapidez con que habla, _v toda otra terrogatorio, el terapeuta debe aprovechar los lap-
conducta expresiva— interesa al terapeuta, que en sos mnemónicos del paciente para enseñarle a aso-
ello halla la principal fuente de información: en ciar libremente, de modo que no sólo podrá hacerlo
consecuencia, ha de estar atento a los más sutiles sin el desasosiego natural ante este modo poco fa-
cambios —disminución o aumento del volumen, por miliar de discurrir, sino que experimentará también
ejemplo— ya que generalmente revelan datos esen- la utilidad de la técnica de libre asociación antes
ciales acerca de los problemas centrales del pacien- de recibir explicación expresa alguna acerca del pro-
te; por otra parte, el terapeuta ha de mantenerse pósito de ésta.
igualmente alerta a la mínima modificación en la Hacía el fin del período que incluye las dos pri-
actJtud del paciente hacia él. ' meras etapas de la entrevista, el psiquiatra debe-
Durante la introducción el psiquiatra debe adop- ría haber concebido ya diver-sas hipótesis respecto
tar una actitud de observación pasiva y, evitando de los problemas del paciente y de sus origenes.
formular demasiadas preguntas, intentar la determi- Luego, en el transcurso del interrogatorio detalla-
nación de. las razones por las que el paciente ha do, intentará determinar, escuchando y preguntan-
acudido a él y al menos parcialmente, la natura- do, cuál de sus hipótesis es la correcta. Si bien Su-
leza de. sus problemas. llivan sugiere cierto número de áreas que deberian
En lo referente al rol del terapeuta en la entre- ser investigadas —asuntos tales como el control de
vista, Sullivan es muy erplícito: el profesional no esfínteres, la actitud hacia el cuerpo, los hábitos
debe olvidar que está ganando su sustento como alimentarios, la ambición, las actividades sexuales,
experto en el campo de las relaciones interperso- etcétera, tampoco aquí propone ningún inventario
nales, y que el paciente eSpera —con derecho— formal que deba ser seguido estrictamente.
aprender algo que ha de beneficiarlo; tal actitud, En tanto la situación transcurra plácidamente, no
que el paciente ha de sentir desde la primera entre- será fácil que el profesional adquiera una clara no-
vista, debe ser continuamente reforzada en el curso ción de las vicisitudes del entrevistado, de las cua-
del tratamiento. Unicamente así se obtendrá del les, la principal, es el impacto que sus propias
paciente la información a partir de la cual el te- actitudes producen sobre la capacidad de comunica-
rapeuta puede llegar a conclusiones correctas sobre ción del paciente; cuando el proceso de comunica-
las pautas de vida que provocan el problema. Es ción sufre deterioro, en cambio, el examinador está
obvio que el profesional no debe utilizar su cono- obligado a preguntarse: “¿Qué dije o hice que ha
cimiento para obtener satisfacciones personales ni provocado la ansiedad de este enfermo?” Entre
para acrecentar su prepio prestigio a expensas del ambas partes existe, siempre, una considerable do-
paciente. El psiquiatra no es, por otra parte, un sis de. reciprocidad —Sullivan la denomina emo-
amigo o un enemigo, un padre o un amante, un ción reciproca—; cada una refleja continuamente
patrón o un empleado, aun cuando el paciente, co- los sentimientos de la otra. Al terapeuta incumbe el
mo resultado de un distorsionada pensamiento pa- reconocimiento y el control de sus prepias actitudes,
ratáxico le atribuya uno o más de esos roles: el si pretende obtener el máximo de comunicación;
psiquiatra es un experto en relaciones interperso- es decir que jamás debería olvidar su rol de ob-
nales. servador participante experto.
El propósito fundamental del período de recono- La serie de entrevistas concluye con un informe
cimiento consiste en descubrir quién es el paciente, final del terapeuta acerca de cuanto ha logrado eS-
lo que el terapeuta logra mediante un interroga- tablecer su prescripción del curso que el paciente
torio acerca de su pasado, su presente y su futuro; deberá seguir y una completa explicación de .105
la información así obtenida es incluida en el rubro probables efectos de tal prescripción sobre su ‘Ïlda'
de datos personales o información biográfica. Su- Si se leen los inteligentes comentarios de Sulliva!1
llivan no sustenta un tipo de interrogatorio rígida- acerca de la entrevista resulta evidente que. a 5“
mente estructurado y sujeto a una lista estándar de juicio, ésta representa un enorme desafío 9.8!?
preguntas: insiste, en cambio, en que el psiquiatra la capacidad de exactitud del observador Part‘c"
no ha de permitir que el paciente hable de temas pante.
ï' LAS GRANDES TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD 135

El ¡tipo de entrevista sustentado por Sullivan pue- cionar, asimismo, tres libros recientemente publica-
de ser comparado por el lector con la gran variedad dos que, en gran medida, deben su existencia a esas
de procedimientos examinados por los Maccoby ideas: en Communication, the social matrix of psy-
(1954) y por Carmel] y Kahn (1968) y con las chiatry (1951) [Comunicación, el fundamento so-
técnicas de entrevista clínica presentadas en The cial de la psiquiatría], Buesch y Bateson aplican los
clinical interview (1955), compilado por Félix conceptos de Sullivan a los problemas de las rela-
Deutsch y William Murphy. ciones humanas y a las interrelaciones entre cultura
La más importante de las contribuciones de Su- y personalidad; en Principles of intensive psychothe-
llívan a la investigación en psicopatología se halla rapy (1950) [Principios de psicoterapia intensiva],
en una serie de articulos sobre la etiología, la di- obra cuya influencia es considerable, Frieda Fromm-
námica y el tratamiento de la esquizofrenia que, Reichmann elabora muchas de las ideas de Sulli-
en su mayor parte son estudios realizados durante van acerca del proceso terapéutico; en cuanto al
su estadía en el hospital Sheppard y Enoch Pratt estudio de un hospital psiquiátrico, realizado por
de Maryland y publicados en revistas psiquiátri- Stanton y Schwartz (1954), describe muy clara-
cas entre los años 1924 y 1931 y revelan el gran mente los tipos de situaciones interpersonales que
talento de Sullivan para tomar contacto con el psi- existen en instituciones de esta índole y el efecto
cótico y comprender su mentalidad. Precisamente, que ellas producen tanto sobre los pacientes como
la empatía, que se cuenta entre los rasgos desco- sobre el personal.
llantes de Sullivan, contribuyó no poco a su obten- El papel de Sullivan como psiquiatra politico se
ción de excelentes resultados tanto en el estudio puso también de manifiesto en algunas de sus ac-
como en el tratamiento de las víctimas de la es- tividades de investigación. Creía que se tiene que
quizofrenia que, a su criterio, no constituyen casos “servir para poder estudiar”. Realizó investigacio-
desesperados condenados a la reclusión en las más nes con los negros del Sur de Estados Unidos jun-
aisladas dependencias de las instituciones psiquiá- tamente con Charles S, Johnson y con los negros
tricas: por el contrario, pueden ser tratados con de Washington con E. Franklin Frazier (Sullivan,
éxito si el psiquiatra está dispuesto a encararlos pa- 1964). Su labor durante la guerra consistió en es-
ciente, comprensiva y atentamente. tablecer: procedimientos para seleccionar reclutas,
Mientras Sullivan estuvo en el hOSpital Shep- técnicas para levantar la moral y métodos para de-
pard y Enoch Pratt se fundó una sala especial para sarrollar un liderazgo eficiente. Como ya se ha in-
pacientes. Consistia en una suite de dos habitacio- dicado, su preocupación mayor fue trabajar para
nes y una sala de estar capaz para seis esquizofre- construir un mundo sin tensiones ni conflictos.
nicos varones. Esta sala fue aislada del resto del De la obra de los cuatro teóricos presentados en
hospital; estaban a su cuidado seis auxiliares varo- este volumen, la teoria interpersonal de Sullivan ha
nes que eran elegidos y entrenados por el mismo sido, probablemente, la que en mayor medida esti-
Sullivan, quien convirtió en rutina tener a un ayu. muló la investigación, entre otras razones porque
dante consigo en la habitación mientras realizaba él empleó, para la exposición de su teoría, un len-
sus entrevistas, porque halló que esto daba con- guaje más objetivo que contribuyó a salvar el
fianza al paciente. No se permitía la entrada en la abismo entre la teoria y la observación. Sullivan
sala a ninguna enfermera y, de hecho, a ninguna procuró que sus construcciones conceptuales man-
mujer. Sullivan creía en la eficacia de mantener ca- tuvieran estrecha vinculación con la observación
da unidad del hospital homogénea, es decir,_com- empírica, de modo tal que cada una de ellas parece
puesta por enfermos del mismo sexo,
' grupo de edad describir desde muy cerca la conducta de personas
Y problema psiquiátrico. reales. Pese a su carácter abstracto, el pensamiento
Con el estimulo de Sullivan, otros psiquiatras y de Sullivan no llegó en ningún momento a serlo
científicos sociales prosiguieron la investigación vin- tanto como para perder contacto con la conducta
Culada con la teoria interpersonal; muchos de sus concreta, casi podria decirse cotidiana, del indivi-
estudios han sido publicados en la Revista Psychia- duo. La teoría interpersonal es un manantial de pro-
try, fundada, en primm- término, para la promoción posiciones que invitan y estimulan la comprobación
Y difusión de las ideas de Sullivan. Hemos de men- empírica.
CAPÍTULO 5

ESTADO ACTUAL Y EVALUACION

Las cuatro teorías presentadas en este volumen se el bebé lleva en sí al nacer, mucho más en forma
asemejan entre sí en tanto subrayan la influencia de predisposiciones o potencialidades bastante ge-
de las variables sociales sobre la conformación de nerales que de necesidades y rasgos específicos.
la personalidad; de uno u otro modo, todas ellas Tales potencialidades generalizadas, “el interés so-
constituyen la reacción adversa a la posición ins- cial”de Adler y la “necesidad de trascendencia” de
tintivista del psicoanálisis freudiano, aun cuando Fromm, por ejemplo, son concretamente realizadas
sus autores, sin excepción, reconocen la deuda con- por intermedio de los agentes educativos tanto for-
traída con el pensamiento generador de Freud; to- males como informales de la sociedad. Según estas
dos ellos buscaron apoyo en su grandeza, a la que teorías, el individuo y la sociedad son, en condi-
sumaron la calidad de sus pr0pios aportes: confi- ciones ideales, interdependientes: el individuo sirve
rieron a la personalidad dimensiones sociales equi— a la realización de los fines de la sociedad, que, a
valentes —si no superiores— en importancia a las su vez, lo ayuda a alcanzar sus propios objetivos. En
dimensiones biológicas asignadas por Freud y por resumen, la posición adoptada por estos cuatro teó-
Jung y, aun más, sus teorias contribuyeron a la ricos no es exclusivamente social o sociocéntrica, ni
introducción de la psicología en la esfera de las exclusivamente psicológica o psicocéntrica, sino de
ciencias sociales. auténtico carácter psicológico-social.
Pese a ocupar un terreno común, cada teoría des- Más aún, estas teorias no sólo sostienen que la
taca conjuntos de variables sociales en cierto modo naturaleza humana es plástica y maleable sino que
b distintosrich Fromm concentra su atención en también lo es la sociedad: si una determinada so-
la descripción de las formas en que la estructura y ciedad no satisface las necesidades de la naturaleza
la dinámica de una determinada sociedad moldean ' humana, puede ser modificada por el hombre; es
a sus miembros de modo tal que el carácter social decir, que el hombre crea el tipo de sociedad que
de cada uno de ellos se adapta a los valores y las considera más beneficioso para él. Por cierto, el de-
necesidades comunes de esa sociedad. Por su par- sarrollo de una sociedad implica la realización de
te, Karen Horney, aunque reconoce la influencia del errores que, cristalizados en forma de costumbres e
contexto social, se detiene particularmente en los instituciones sociales, pueden ser difícilmente sub-
factores internos del grupo familiar que conforman sanables. Todos estos-teóricos, sin embargo, se mos-
la personalidad. En este aspecto, la teoría interper- traron Optimistas en cuanto a la posibilidad de cam-
sonal de Sullivan se asemeja más a la de Horney bio: cada uno de ellos trató, a su manera, de in-
que a la de Fromm; la importancia de las relacio- ducir cambios fundamentales en la estructura de la
nes humanas de la infancia, la niñez y la adoles- sociedadCAdler abogó por la democracia social, lu-
cencia es decisiva, según criterio de Sullivan, quien chó por la obtención de mejores escuelas, creó los
expone con singular y persuasiva elocuencia el ne- primeros centros de orientación infantil, señaló in-
xo entre la figura materna y el bebé. Por otro lado, sistentemente la necesidad de modificar el trato de
Alfred Adler analiza la sociedad en todos sus as- los criminales y se pronunció, en muchas confe-
pectos, en busca de los factores, que encuentra por rencias, sobre los problemas sociales y sus solumo-
doquier, relevantes respecto de la personalidad. nes. Fromm y Horney trazaron, a través de sus
Aun cuando las cuatro teorías son definidame te obras, el camino hacia una sociedad mejor; Fromm,
contrarias a la doctrina freudiana de los instintos en particular, ha indicado algunas de las reformfls
y a la inmutabilidad de la naturaleza humana, nin- fundamentales necesarias para alcanzar una socie-
guna de ellas asume la radical posición ambienta- dad sana. En el momento de su muerte, Sullivan
lista según la cual la creación de la personalidad contribuía activamente al esfuerzo por mejorar la
del individuo es obra exclusiva de las condiciones sociedad mediante la cooperación internacronal- LOS
- de la sociedad en cuyo ámbito ha nacido; las cua- cuatro adquirieron, en el ejercicio de la pSlcptera'
tro, cada una a su modo, coinciden en creer que pia, gran experiencia acerca de las contmgenfïlas Su:
- existe algo así como una naturaleza humana que un orden social imperfecto; en consecuencra,
LAS GRANDES TEORÍAS nn LA PERSONALIDAD 137

0 iniones surgen tanto del conocimiento directo como especie; al magnificar el carácter social de la
práctica obtenidos en su ca- personalidad humana, han separado al hombre de
como de la experiencia
rácter de críticos y reformadores. su rica herencia biológica
Los cuatro teóricos sostienen, además, que la an- A veces se afirma, acerca de la concepción del .
. giedad constituye un producto social: el hombre no hombre desarrollada por Adler, Fromm, y Karen
¿.5 un “animal ansioso” por naturaleza; llega a ser Horney (Sullivan es excluido de esta crítica), que
ansioso en virtud de las condiciones en que vive es demasiado color de rosa e idealista: en un mun-
.-——el fantasma de la desocupación, la intolerancia do desgarrado por dos guerras y amenazado por
y la injusticia, la amenaza de la guerra, la hosti- una tercera, para no mencionar las múltiples for-
' si eliminamos esas condiciones, mas de violencia e irracionalidad de que hace gala
' lidad parental—;
se agotarán las fuentes de las cuales ema- el ser humano, el retrato de un hombre racional,
I afirman,
na la ansiedad. Tampoco admiten que el hombre autoconsciente y socializado impresiona como sin-
sea destructivo por naturaleza como creía Freud: gularmente impmpio y falso. Se puede, por supues-
consideran que puede tomarse destructivo cuando to, culpar a la sociedad y no al hombre por tan
sus necesidades elementales son frustradas y aun en deplorable estado de cosas y, aunque tal es la acti-
tales circunstancias es posible que tome otros ca- tud de estos teóricos, luego sostienen, al menos táci-
minos, el de la sumisión, por ejemplo, o el del re- tamente, que ese hombre racional crea la clase de
traimiento. órdenes sociales responsables de su irracionalidad
Excepto la de Sullivan, todas estas teorias sub- y su infelicídad. He aquí la gran paradoja de tales
rayan la idea de la singularidad del individuo así teorias: si el hombre es de tal modo autoconscien-
como la del si mismo creador. No obstante los es- te, racional, y social, ¿por qué ha desarrollado tan-
fuerzos de la sociedad por regir la vida de las per- tos sistemas sociales imperfectos?
sonas, cada una de ellas procura conservar cierto El filósofo Isaac Franck (1966) ha señalado que
grado de individualidad creadora. En efecto, en la idea de hombre presentada por Fromm y 'otros
virtud de su intrínseco poder creador, el hombre psicólogos sociales y humanistas es el resultado de
está en condiciones de introducir cambios en la sus preconcepciones normativas más que el produc-
sociedad. En parte porque son diferentes entre si, to de la investigación: son moralistas y no cientifi-
los hombres crean diferentes clases de sociedades cos. Franck insiste en que las inclinaciones y rasgos
en distintos puntos del globo, y en distintos mo- humanos son neutrales desde el punto de vista ético
mentos de la historia. El hombre es no sólo creador y, por lo tanto, no se pueden deducir prescripcio-
sino autoconsciente: sabe qué quiere y consciente- nes éticas de afirmaciones fácticas sobre la realidad
mente lucba por conseguirlo. Sin duda, la idea de misma del hombre. No obstante, resultaría muy di-
« la motivación inconsciente no es muy apreciada por ficil encontrar un teórico de la personalidad, desde
los teóricos de la psicología social. Freud hasta Fromm, que no emita, abierta o encu-
En general, las teorías desarrolladas por Adler, biertamente, juicios morales y éticos acerca de los
Fromm, Horney y Sullivan, ampliaron la perSpec- efectos dañinos del ambiente social sobre el hombre.
tiva de la psicologia freudiana al dar cabida a los Y, en consecuencia, muchos de ellos exponen solu-
determinantes sociales de la apersonalidad. No obs- ciones. No es fácil que los observadores-participan-
tante, algunos críticos han menosprecíado la origi- tes permanezcan neutrales por más científicos que
nalidad de dichas teorías psicosociales sosteniendo puedan ser.
que no ban hecho sino elaborar un aspecto del psico- Otra crítica que, si bien menos devastadora, in-
análisis clásico, el correspondiente al yo y sus de- fluye más en los psicólogos que en los psicoanalistas,
fensas: Freud vio con claridad que los rasgos de la señala el fracaso de tales teorías psicosociales en
personalidad suelen representar las habituales de- cuanto se refiere a la eSpecificación de los medios
fensas o estrategias de la persona ante las amena- precisos mediante los cuales la sociedad moldea
zas intemas y externas a las que se ve expuesto el a sus miembros. ¿Cómo adquiere una persona su
YO; las necesidades, las tendencias, los estilos, las carácter social? ¿Cómo aprende a ser un miembro
orientaciones, las personificaciones, los dinamismos de la soc1edad? Esta evidente indiferencia por el
3' demás conceptos de las teorías eXpuestas en este proceso de aprendizaje en teorías que tanto depen-
volumen integran la teoria freudiana con la deno- den de dlChO concepto para la explicación de los
minación de defensas del yo. En consecuencia, según modos de formación de la personalidad es juzgada
tales críticos, nada nuevo se ha agregado a la teoría por sus cntlcos como una gravísima omisión. ¿Es
de Freud y mucho se ha tomado, en cambio, de ella. suficiente la eXposición a um circunstancia social
Al, reducir la personalidad al sistema del yo, el para que ella afecte a la personalidad? ¿Existe acaso
tefIJrico de la psicología social la ha separado de los un modelo mecánico preestablecido del control de
Ongi-mes vitales de la conducta humana, cuyas fuen- la conducta socialmente aprobada, y otro í en-
tes últimas se hallan en la evolución del hombre te mecánico, del socialmente reprobado? ¿0 tal vez
138 CALVIN s. HALL Y emm LINDZEY

la persona reacciona con comprensión y prudencia otras, han contribuido a crear un clima intelectual
ante el medio social, seleccionando los aspectos que apto para el florecimiento que, en efecto, ocurrió,
supone producirán una mejor organización de la de la investigación psicológico-social: la 'cología
personalidad, y rechazando los que siente incom- social ya no es la hija adoptiva de la psico ogía sino
patibles con su propia organización? Estas teorías una importante y muy activa parte integrante de
guardan absoluto silencio re5pecto de la mayor esta ciencia. Adler, Fromm, Karen Horney y Sulli-
parte de la naturaleza del proceso de aprendizaje, van no son responsables únicamente del auge de la
no obstante el hecho de que el aprendizaje cons- psicologia social sino que han ejercido, además,
tituyó el tema central de la psicología norteameri- una considerable influencia: cada uno de ellos ha
cana durante muchos años. contribuido en no pequeña medida a la pintura del
Si bien estas teorías psicológico-sociales no han hombre como ser social; tal es su gran valor en el
estimulado la investigación en tan alto grado como ámbito contemporáneo.
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