PATLAN JUEZ SEGUNDO CIVIL DE PARTIDO LEON, GUANAJUATO
AGOSTO DEL AÑO 2008
LA NECESIDAD DE REGULAR LA PENSION COMPENSATORIA EN EL ESTADO DE GUANAJUATO
1.- INTRODUCCION
El alto índice de demandas de divorcios, con los
consecuentes efectos que en la vida de las personas producen las sentencias que al respecto se dictan por parte de los juzgadores, en cuanto a los hijos, los cónyuges entre sí y en relación con sus bienes, así como la falta de cultura en nuestra sociedad para celebrar acuerdos previos en relación a los bienes adquiridos durante del matrimonio, nos han llevado a considerar la importancia y la necesidad de que se regule la figura de la pensión compensatoria en el Código Civil de nuestro Estado.
Es cierto que nuestra legislación sustantiva contiene las
normas básicas para regular las situaciones que han de prevalecer después de la disolución del vínculo matrimonial rigiendo en las mismas principios de igualdad aunque en algunos casos de protección, sin embargo, resulta insuficiente para solucionar aquellos supuestos en que a uno de los cónyuges le provoca además una grave afectación en tanto que esa ruptura le puede llegar a provocar su empobrecimiento económico. En esta tesitura, la existencia de esas realidades sociales ha dado origen a su regulación jurídica en otras legislaciones como en Cataluña, España mediante la Ley 9/1998, de 15 de julio, del Código de Familia y en el Código Civil del Distrito Federal, a través del artículo 289 BIS, que entró en vigor el 1º primero de junio del año 2001.
2.- CONDICIONES OBJETIVAS
Recurriendo al Derecho Comparado, dos son las condiciones
objetivas que ha tomando en consideración el legislador para regular la figura que nos ocupa:
A) La existencia del matrimonio.
B) La concurrencia a la fecha de la ruptura matrimonial de una
situación de desequilibrio, que debe ser apreciada en dos vertientes:
a) En un plano subjetivo apreciando la posición de un cónyuge
respecto de la del otro.
b) En un plano temporal, que implica hacer una comparación
de la situación existente en el momento mismo de la ruptura con la que se presume va a ser la futura.
Ahora bien, esa situación de desigualdad que a su vez
provoca un desequilibrio económico debe dar lugar a un perjuicio o daño cuya causa es la disolución del matrimonio, sin tomar en consideración la culpabilidad y que además no pueda ser resarcible por otra vía. De aquí es que debe reflexionarse si la pensión compensatoria tiene un carácter indemnizatorio o bien alimenticio.
3. FORMA DE REGULACION
En el artículo 289 BIS del Código Civil para el Distrito Federal,
en relación a esta materia se legisló de la siguiente manera:
“En la demanda de divorcio los cónyuges podrán demandar
del otro, una indemnización de hasta el 50% del valor de los bienes que hubiere adquirido, durante el matrimonio, siempre que:
I. Hubieran estado casados bajo el régimen de separación de
bienes;
II. El demandante se haya dedicado en el lapso en que duró el
matrimonio, preponderantemente al desempeño del trabajo del hogar y, en su caso, al cuidado de los hijos; y
III. Durante el matrimonio el demandante no haya adquirido bienes
propios o habiéndolos adquirido, sean notoriamente menores a los de la contraparte.
El juez de lo familiar en la sentencia de divorcio, habrá de resolver
atendiendo las circunstancias especiales de cada caso.”
En cambio, en la Ley 9/1998, de 15 de julio, del Código de
Familia de Cataluña, España, se reguló así: “Artículo 84. Pensión compensatoria.
1. El cónyuge que, como consecuencia del divorcio o la separación
judicial, vea más perjudicada su situación económica y, en caso de nulidad, sólo en cuanto al cónyuge de buena fe, tiene derecho a recibir del otro una pensión compensatoria que no exceda el nivel de vida del que disfrutaba durante el matrimonio, ni el que pueda mantener el cónyuge obligado al pago.
2. Para fijar la pensión compensatoria, la autoridad judicial debe
tener en cuenta:
a. La situación económica resultante para los cónyuges como
consecuencia de la nulidad, el divorcio o la separación judicial y las perspectivas económicas previsibles para uno y otro. b. La duración de la convivencia conyugal. c. La edad y la salud de ambos cónyuges. d. En su caso, la compensación económica regulada en el artículo 41.3. e. Cualquier otra circunstancia relevante.
3. La pensión compensatoria debe ser disminuida si quien la
percibe pasa a mejor fortuna o quien la paga pasa a peor fortuna.
4. A petición de parte, la sentencia puede establecer las medidas
pertinentes para garantizar el pago de la pensión y puede fijar los criterios objetivos y automáticos de actualización dineraria.
Artículo 85. Pago de la pensión compensatoria.
1. La pensión compensatoria debe pagarse en dinero y por
mensualidades avanzadas. 2. En cualquier momento, por acuerdo de los cónyuges o, en defecto de éste, por resolución judicial, el cónyuge obligado al pago de la pensión compensatoria puede sustituirla por la entrega de bienes en dominio o usufructo.
Artículo 86. Extinción del derecho.
1. El derecho a la pensión compensatoria se extingue:
a. Por mejora de la situación económica del cónyuge acreedor,
que deje de justificarla o por empeoramiento de la situación económica del cónyuge obligado al pago que justifique la extinción. b. Por matrimonio del cónyuge acreedor o por convivencia marital con otra persona. c. Por la defunción o declaración de fallecimiento del cónyuge acreedor. d. Por el transcurso del plazo por el que se estableció.
2. El derecho a la pensión compensatoria no se extingue por
fallecimiento del cónyuge obligado a su prestación, si bien sus herederos pueden solicitar su reducción o exoneración si la rentabilidad de los bienes de la herencia no resulta suficiente para realizar su pago.”
4.- ASPECTOS DE COMPARACION
Como puede apreciarse, en el Código Civil del Distrito Federal
observamos que se regula como forma de indemnización única y al respecto no establece causa de extinción de ese derecho, por lo que su naturaleza jurídica es puramente indemnizatoria. En tanto que en el Código Familiar se legisló para ser entregada en mensualidades avanzadas y de ahí que sí previno causas de extinción. De aquí que podríamos considerar su naturaleza jurídica muy similar a una pensión alimenticia por su forma de ser satisfecha.
En el primer ordenamiento es procedente sólo en los casos de
divorcios, en el segundo también lo es para los casos de separación de los cónyuges y nulidad del matrimonio.
En el Distrito Federal se establecen como requisitos para su
procedencia el que los cónyuges estén casados bajo el régimen de separación de bienes, que se hubiese dedicado al trabajo del hogar y que no se hayan adquirido bienes o en el caso de menor valor a los de la contraria. En Cataluña no se establecieron requisitos específicos, sólo que la consecuencia del divorcio, separación o nulidad (buena fe) perjudique a un cónyuge en su situación económica, estableciendo parámetros que la autoridad judicial debe observar para fijarla, con la posibilidad de su disminución y extinción. No siendo en requisito el que el cónyuge se haya dedicado al trabajo del hogar porque la legislación española de referencia contiene normas que fijan una compensación económica para el cónyuge que haya realizado esa tarea, por lo que no obstante que se pueda tener derecho a esta, ello es compatible con la pensión compensatoria.
5.- CONSIDERACIONES GENERALES
En lo relativo a la naturaleza jurídica de la pensión compensatoria, hemos visto que la legislación civil del Distrito Federal la establece como indemnizatoria, en tanto que en Cataluña se asimila a una pensión alimenticia, sin embargo la doctrina establece aspectos diferenciadores entre la pensión compensatoria y la pensión alimenticia, por lo que tendremos definitivamente que concluir que tiene también aquélla naturaleza y para ilustración de tales aspectos se señalan entre ellos:
A) La primera tiene como fin la compensación de un
desequilibrio y la segunda satisfacer necesidades.
B) La primera sólo puede establecerse en beneficio del
cónyuge perjudicado, la segunda beneficia a las personas ligadas por el parentesco, por ello es más amplia su extensión.
C) La compensatoria está sujeta al principio dispositivo en
tanto que los alimentos no son disponibles.
D) El nacimiento de la primera nace con una sentencia y la
segunda desde que existe la situación de necesidad.
E) Los criterios de cuantificación son diferentes.
F) Si la primera no se reclama en la demanda, prescribe la
acción en tanto la segunda es imprescriptible. G) Para la pensión alimenticia existe la posibilidad de cumplirse en el propio domicilio no así en la compensatoria.
H) No es finalidad ni objetivo de la compensatoria cubrir
necesidades.
Hay quienes consideran que la pensión compensatoria tenga
naturaleza asistencial, que agrupa las obligaciones derivadas del matrimonio de mutua ayuda y socorro, siendo en realidad semejante a la pensión alimenticia, pero de llegar a sostenerse lo anterior se traduciría en el deber de alimentos pero no de una pensión compensatoria que va más allá de la ayuda mutua.
Lo anterior resulta interesante, porque a partir del
conocimiento de la naturaleza con que puede ser concebida la pensión compensatoria, podremos definir en qué forma es más conveniente proponer su regulación.
En relación con los objetivos que persigue la pensión
compensatoria, la doctrina nos indica que:
A) Mantener al beneficiario de la pensión en el nivel de vida
que llevaba antes de la ruptura matrimonial. (Han sido consideradas en diversas resoluciones las posibles pérdidas que se ocasionan al cónyuge que abandona sus estudios, ejercer su profesión o un puesto de trabajo por dedicarse a las labores del hogar, cuidado y atención tanto de sus hijos como de su cónyuge). B) La sustitución de los deberes de asistencia y de socorro mutuos. (Cuando en las resoluciones se ha tomado en consideración en colocar al cónyuge en una situación potencial de igualdad de oportunidades a las que habría tenido de no haber contraído matrimonio).
C) Hay quienes consideran la equidad como finalidad, aunque
en alguna sentencia se ha indicado que no se persigue igualar los patrimonios de los cónyuges.
En cuanto al fundamento o razón de ser de la pensión
compensatoria se han indicado los siguientes:
A) Por solidaridad postconyugal.
B) Enriquecimiento injusto, que algunos prefieren llamar
empobrecimiento injusto.
C) Responsabilidad por daños, sin embargo, la crítica a ello es
que no existe obligación conyugal alguna relativa al equilibramiento de patrimonios durante el matrimonio.
Ha sido nuestra intención abordar estos aspectos relativos a la
naturaleza, finalidad y fundamento de la pensión compensatoria, así como presentar dos formas de regulación jurídica y hacer alusión a la necesidad social que resulta establecerla legalmente, para elegir la que nos parezca más adecuada a nuestra cultura y sociedad y aunque pudiera pensarse que la mujeres son las que van a resultar beneficiadas con ello, resulta incierto porque ya son más las que trabajan y obtienen una remuneración incluso mayor a las de su cónyuges, por tanto, existe la necesidad de proteger al que con motivo de la ruptura del matrimonio puede caer en un empobrecimiento económico en relación con el otro. CONCLUSIONES
1. El Código Civil del Estado de Guanajuato contiene las
normas básicas para regular las situaciones que han de prevalecer después de la disolución del vínculo matrimonial pero omite dar solución a aquellos casos en que además a uno de los cónyuges se le provoca su empobrecimiento económico con relación al otro.
2. Son dos las condiciones objetivas que han tomando en
consideración para regular la pensión compensatoria: La existencia del matrimonio y la concurrencia a la fecha de la ruptura matrimonial de una situación de desequilibrio, apreciando la posición de un cónyuge respecto de la del otro, existente en el momento mismo de la ruptura con la que se presume va a ser la futura, que causa un perjuicio o daño, sin considerar culpabilidad y que no pueda ser resarcible por otra vía.
3. Comparando dos legislaciones que regulan la pensión
compensatoria advertimos que en el Código Civil del Distrito Federal su naturaleza jurídica es de indemnización, en tanto que en el Código Familiar de Cataluña su naturaleza jurídica se asemeja a la de la pensión alimenticia por su forma de ser satisfecha, sin embargo como doctrinalmente se establecen diversas diferencias entre ellas, habrá que concluir que también tiene aquélla naturaleza. En ambos ordenamientos procede solicitarla en los casos de divorcios, pero en Cataluña, también en los casos de separación de los cónyuges y nulidad del matrimonio de buena fe.
En el Distrito Federal se exigen como requisitos de
procedencia el régimen de separación de bienes, que el cónyuge se hubiese dedicado al trabajo del hogar y que no se hayan adquirido bienes o en el caso de menor valor a los de la contraria. En Cataluña no se establecieron requisitos específicos, sólo que perjudique a un cónyuge en su situación económica, estableciendo parámetros que la autoridad judicial debe observar para fijarla, en dinero y por mensualidades avanzadas, con la posibilidad de su disminución y extinción.
4. El principal objetivo que persigue la pensión compensatoria
es mantener al beneficiario de la pensión en el nivel de vida que llevaba antes de la ruptura matrimonial.
5. Su fundamento se basa en evitar un enriquecimiento
injusto, que algunos prefieren llamar empobrecimiento injusto.
6. Ante la necesidad social de proteger al que con motivo de
la ruptura del matrimonio puede caer en un empobrecimiento económico en relación con el otro, se justifica la necesidad de pedir su regulación en el Código Civil de nuestro Estado. BIBLIOGRAFIA
CAÑETE Quesada Agustín, La Pensión Compensatoria: Una Visión
al Futuro http://www.porticolegal.com/pa_articulo.php?ref=180
ZARRALUQUI Sánchez-Eznarriaga, La pensión compensatoria en
la nueva Ley del Divorcio: su temporalización y su sustitución. http://www.agapea.com/libros/Comentarios-a-la-reforma-de-la- separacion-y-el-divorcio-isbn-8484066703-i.htm
Código Civil del Distrito Federal
Ley 9/1998, de 15 de julio, del Código de Familia de Cataluña,
España. RESUMEN
LA NECESIDAD DE REGULAR LA PENSION COMPENSATORIA
EN EL ESTADO DE GUANAJUATO
Nuestra legislación sustantiva contiene las normas básicas
para regular las situaciones que han de prevalecer después de la disolución del vínculo matrimonial, sin embargo, resulta insuficiente para solucionar aquellos supuestos en que a uno de los cónyuges le provoca además una grave afectación en tanto que esa ruptura le puede llegar a provocar su empobrecimiento económico.
En esta tesitura, la existencia de esas realidades sociales ha
dado origen a su regulación jurídica en otras legislaciones como en Cataluña, España mediante la Ley 9/1998, de 15 de julio, del Código de Familia y en el Código Civil del Distrito Federal, a través del artículo 289 BIS, que entró en vigor el 1º primero de junio del año 2001.
Recurriendo al Derecho Comparado, dos son las condiciones
objetivas que ha tomando en consideración el legislador para regular la figura que nos ocupa: A) La existencia del matrimonio y B) La concurrencia a la fecha de la ruptura matrimonial de una situación de desequilibrio. Como puede apreciarse, en el Código Civil del Distrito Federal observamos que se regula como forma de indemnización única y al respecto no establece causa de extinción de ese derecho, por lo que su naturaleza jurídica es puramente indemnizatoria. En tanto que en el Código Familiar de Cataluña, España; se legisló para ser entregada en mensualidades avanzadas y de ahí que sí previno causas de extinción. De aquí que podríamos considerar su naturaleza jurídica muy similar a una pensión alimenticia por su forma de ser satisfecha.
En el primer ordenamiento es procedente sólo en los casos de
divorcios, en el segundo también lo es para los casos de separación de los cónyuges y nulidad del matrimonio.
En el Distrito Federal se establecen como requisitos para su
procedencia el que los cónyuges estén casados bajo el régimen de separación de bienes, que se hubiese dedicado al trabajo del hogar y que no se hayan adquirido bienes o en el caso de menor valor a los de la contraria. En Cataluña no se establecieron requisitos específicos, sólo que la consecuencia del divorcio, separación o nulidad (buena fe) perjudique a un cónyuge en su situación económica, estableciendo parámetros que la autoridad judicial debe observar para fijarla, con la posibilidad de su disminución y extinción. No siendo en requisito el que el cónyuge se haya dedicado al trabajo del hogar porque la legislación española de referencia contiene normas que fijan una compensación económica para el cónyuge que haya realizado esa tarea, por lo que no obstante que se pueda tener derecho a esta, ello es compatible con la pensión compensatoria. Ha sido nuestra intención abordar estos aspectos relativos a la naturaleza, finalidad y fundamento de la pensión compensatoria, así como presentar dos formas de regulación jurídica y hacer alusión a la necesidad social que resulta establecerla legalmente, para elegir la que nos parezca más adecuada a nuestra cultura y sociedad y aunque pudiera pensarse que la mujeres son las que van a resultar beneficiadas con ello, resulta incierto porque ya son más las que trabajan y obtienen una remuneración incluso mayor a las de su cónyuges, por tanto, existe la necesidad de proteger al que con motivo de la ruptura del matrimonio puede caer en un empobrecimiento económico en relación con el otro.
El principal objetivo que persigue la pensión compensatoria es
mantener al beneficiario de la pensión en el nivel de vida que llevaba antes de la ruptura matrimonial.
Su fundamento se basa en evitar un enriquecimiento injusto,
que algunos prefieren llamar empobrecimiento injusto.
Ante la necesidad social de proteger al que con motivo de la
ruptura del matrimonio puede caer en un empobrecimiento económico en relación con el otro, se justifica la necesidad de pedir su regulación en el Código Civil de nuestro Estado.