Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Es la menor o mayor facilidad que tiene el hormigón fresco para deformarse. Varía con
multitud de factores: cantidad de agua de amasado, tamafio máximo, granulometría y forma
de los áridos, etc.; el que más influye es la cantidad de agua de amasado.
Existen varios procedimientos para determinar la consistencia, siendo los más empleados el
cono de Abrams, la mesa de sacudidas y el consistómetro Vebe.
El cono de Abrams es un molde troncocónico de 30 cm de altura (fig. 5.1) que se rellena con el
hormigón objeto de ensayo. La pérdida de altura que experimenta la masa fresca del hormigón
una vez desmoldada, expresada en centímetros, da una medida de su consistencia.
La mesa de sacudidas sirve para someter a una masa de hormigón fresco, de forma
determinada, a una serie de sacudidas normalizadas, midiéndose el escurrimiento
experimentado. Es un método más preciso que el anterior y, por tanto, preferible cuando se
trata de instalaciones fijas.
El consistómetro Vebe es una variante del cono de Abrams que se emplea para hormigones
muy secos (que darían asiento nulo). La consistencia se mide por el número de segundos
necesarios para que el tronco de cono formado por el hormigón con el molde de Abrams
experimente, sometido a vibración en mesa, un asiento determinado.
Los hormigones se clasifican por su consistencia en secos, plásticos, blandos, fluidos y líquidos,
como se indica en la tabla 5.1. La consistencia líquida no es admisible para hormigón armado.
1.2.- TRABAJABILIDAD O DICILIDAD
a) De la cantidad de agua de amasado. Cuanto mayor sea ésta, mayor será la docilidad.
b) De la granulometría de los áridos, siendo más dóciles los hormigones cuyo contenido en
arena es mayor. Pero por otra parte, a más cantidad de árido fino corresponde más agua de
amasado necesaria y, por tanto, menor resistencia. Por ello las relaciones que indicamos no
pueden extrapolarse más allá de ciertos límites.
c) La docilidad es mayor con áridos redondeados que con áridos procedentes de machaqueo.
d) La docilidad aumenta con el contenido en cemento y con la finura de éste.
La docilidad del hormigón se valora determinando su consistencia con el cono de Abrams , Para
el caso de hormigones de edificación, la Instrucción española recomienda que el asiento de
cono no sea inferior a 6 centimetros (en el supuesto de que no se empleen superfluidificantes)
El peso unitario del hormigón (densidad) varía en función de la cantidad y del tamaño del
árido, cantidad de aire retenido y atrapado y del contenido de agua y cemento.
Por ejemplo, para una mezcla típica en la construcción, es decir, la utilizada en arquitectura de
edificios, superficies y demás estructuras, el hormigón tiene una densidad que va desde los
2200 – 2400 kg/m3.
Sin embargo, la densidad del hormigón ligero está entre 800 y 2000 kg por metro cúbico. Pesa
menos porque está hecho con un agregado (piedra pómez) que es más ligero por naturaleza.
La densidad del material es simplemente una relación de masa a volumen. La manera más fácil
y precisa de calcular la densidad del concreto es medir en un contenedor de volumen conocido
y pesarlo.
1.4.-HOMOGENIDAD
Es la cualidad por la cual los diferentes componentes del hormigón aparecen regularmente
distribuidos en toda la masa, de manera tal que dos muestras tomadas de distintos lugares de
la misma resulten prácticamente iguales. La homogeneidad se consigue con un buen amasado
y, para mantenerse, requiere un transporte cuidadoso y una colocación adecuada.
La homogeneidad puede perderse por segregación (separación de los gruesos por una parte y
los finos por otra) O por decantación (los granos gruesos caen al fondo y el mortero queda
en la superficie, cuando la mezcla es muy líquida). Ambos fenómenos aumentan con el
contenido de agua, con el tamaño máximo del árido, con las vibraciones o sacudidas durante
el transporte y con la puesta en obra en caída libre
El contenido de aire del concreto puede ser más alto o bajo del obtenido con este método.
Esto depende tanto del método como del esfuerzo de consolidación aplicado en el concreto del
cual el espécimen fue tomado; uniformidad y estabilidad de las burbujas de aire tanto en el
concreto fresco y endurecido; precisión de la examinación microscópica; tiempo de
comparación; exposición al medio ambiente; transporte; proceso de consolidación con el cual
el contenido de aire del concreto no endurecido es determinado, que es antes o después de
que el concreto atraviese una bomba o surtidor y otros factores
1.6.- EXUDACION
La exudación del hormigón fresco es un el fenómeno que se produce por el ascenso del agua
de amasado de una mezcla de hormigón durante el tiempo que dura su fraguado.
Los componentes del hormigón fresco vertido contienen materiales de distintas densidades y
se produce una tendencia a la decantación de áridos más pesados, y un ascenso del agua,
menos densa.
La pérdida de agua por exudación tiene una parte positiva que es la de reducir la relación
agua/cemento del concreto con una repercusión favorable sobre las resistencias.
Sin embargo, al migrar desde el interior, el agua va creando unos conductos capilares que
disminuyen impermeabilidad al concreto y que lo hacen poco durable, de modo especial frente
a las heladas; esto es especialmente importante en el caso de pavimentos y forjados y en
general, en aquellos elementos en los que predomina la superficie superior sobre el volumen.
Al ascender el agua arrastra consigo al cemento formando una capa delgada de lechada que
cuando se seca crea una película débil que debe eliminarse siempre que se tenga que adherir
este hormigón con otro o con otros materiales empleando adhesivos.
La exudación es función del tipo de cemento empleado en el concreto. Cuanto más fino es el
cemento menor es la exudación que se produce. El empleo de cementos ricos en aluminato
tricálcico o de cenizas volantes también reduce el fenómeno
El concreto con alto contenido en cemento presenta una menor exudación que otros que
tengan escasez de él. Los aditivos aireantes disminuyen la exudación mediante la formación de
pequeñas burbujas que actúan como finos.
1.7.- SEGRAGACION
La segregación del hormigón es la separación de sus componentes una vez amasado lo que
provoca una distribución no uniforme que dificulta los trabajos de colocación y compactación,
pudiendo aparecer defectos como poros y coqueras.
Si un hormigón presenta buena resistencia a segregación, eso significa que los áridos están
uniformemente distribuidos en la mezcla, tanto en dirección vertical como en horizontal.
Los problemas de la segregación del hormigón surgen con los trabajos de colocación y
compactación, con el resultado de estructuras con defectos como poros y coqueras.