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TESIS AISLADA I/2016 (10a.

DERECHO A LA NO AUTOINCRIMINACIÓN. IMPLICACIONES QUE


DERIVAN DE RESPETAR SU EJERCICIO (INTERPRETACIÓN DEL
ARTÍCULO 20, APARTADO A, FRACCIÓN II, DE LA CONSTITUCIÓN
POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, EN SU TEXTO
ANTERIOR A LA REFORMA CONSTITUCIONAL EN MATERIA PENAL
DEL 18 DE JUNIO DE 2008). La literalidad del texto constitucional no
ofrece dificultades interpretativas, pues cuando dispone que la persona
sujeta a un proceso no está obligada a declarar, esto implica que ella no
puede verse obligada a: (i) autoinculparse y/o (ii) defenderse y declarar en
su favor, ya que goza del derecho a hacerlo hasta en tanto lo considere
necesario para el más óptimo ejercicio de su defensa. El concepto “no
declarar” incluye la posibilidad de reservarse cualquier expresión, incluso
no verbal, en relación con la acusación formulada. Lo anterior quiere decir
que este derecho obliga a las autoridades a no forzar a la persona, bajo
ningún medio coactivo, o con la amenaza de su utilización, a emitir una
confesión o declaración encaminada a aceptar responsabilidad. Pero del
mismo modo, implica la prohibición de realizar inferencias negativas a
partir del silencio; es decir, la autoridad debe respetar la estrategia
defensiva de la persona y no exigir que espontáneamente exponga una
versión exculpatoria. Así, la decisión de ejercer el derecho a la no
autoincriminación no sólo debe ser respetada y su posibilidad
garantizada, sino que no puede, por ninguna circunstancia, ser utilizada
en perjuicio de la persona o como un argumento para motivar una
sentencia condenatoria. Los derechos humanos reconocidos en la
Constitución y en los tratados internacionales están ahí para ser ejercidos.
Ponerlos en práctica nunca puede traducirse en un costo o implicar una
consecuencia negativa para la persona. Presuponer, incluso a nivel
intuitivo, que el silencio y/o la pasividad generan suspicacia o que son
actitudes indicativas de culpabilidad, es —de nuevo— un razonamiento
contrario a las exigencias de las garantías del proceso penal.

Amparo directo en revisión 5236/2014. 22 de abril de 2015. Cinco votos


de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretaria: Patricia del Arenal Urueta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA II/2016 (10a.)

DERECHO A LA NO AUTOINCRIMINACIÓN. LA VEROSIMILITUD DE


LOS ALEGATOS DE DEFENSA O DE LA VERSIÓN EXCULPATORIA
DEL INCULPADO NO DEPENDE DE LA ESPONTANEIDAD CON LA
QUE SE RINDE UNA DECLARACIÓN. Permitir al inculpado callar frente
a la acusación, reflexionar y esperar a la elaboración de la estrategia de
defensa que considere más óptima, es parte de lo que implica respetar el
derecho a la no autoincriminación, consagrado por el artículo 20, apartado
A, fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
(en su texto anterior a la reforma del 18 de junio de 2008) y el derecho a
preparar la defensa, consagrado en el artículo 8.2.c de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos. Como consecuencia lógica, la
decisión del inculpado de utilizar tiempo y permanecer en silencio, nunca
puede ser utilizada en su perjuicio, por ejemplo, bajo la injustificada
premisa de que una persona inocente, actuando racionalmente, se
defendería desde el momento mismo en que se le hacen saber los
motivos de la acusación. De este modo, la verosimilitud de un argumento
no está condicionada por el hecho de que la persona haya declarado con
cercanía a los hechos imputados. Entender que la ausencia de
espontaneidad permite al juez formarse un juicio sobre la culpabilidad de
la persona —por ejemplo, con base en una expectativa o una intuición
sobre lo que cualquier persona inocente haría— constituye una falacia
lógica, pues la conclusión simplemente no se sigue de la premisa; pero,
sobre todo, resulta en una clara transgresión de los principios
subyacentes a las garantías de debido proceso penal, en especial el
derecho a la defensa adecuada y a la presunción de inocencia. Por ello,
es incorrecta la idea según la cual el silencio del inculpado durante las
primeras fases del proceso constituye un indicio de responsabilidad. La
verosimilitud de un alegato defensivo siempre debe ser analizada por sus
propios méritos, de acuerdo con el material que obra en la causa y a
través de un ejercicio de valoración razonado.

Amparo directo en revisión 5236/2014. 22 de abril de 2015. Cinco votos


de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretaria: Patricia del Arenal Urueta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA III/2016 (10a.)

DELITO CONTRA LA SEGURIDAD DEL TRÁNSITO DE VEHÍCULO. EL


ARTÍCULO 255 DEL CÓDIGO PENAL PARA EL ESTADO DE BAJA
CALIFORNIA QUE LO PREVÉ, NO VIOLA EL PRINCIPIO DE EXACTA
APLICACIÓN DE LA LEY EN MATERIA PENAL EN SU VERTIENTE DE
TAXATIVIDAD. El referido artículo prevé que cuando se cause daño a
las personas y/o a las cosas por quien maneje un vehículo de motor en
estado de ebriedad, bajo el influjo de estupefacientes, psicotrópicos u
otras sustancias que impidan o perturben su adecuada conducción, se
impondrá prisión de seis meses a tres años, multa de cincuenta a
quinientas veces el salario mínimo y suspensión hasta por un año del
derecho a conducir vehículos de motor. Ahora bien, el hecho de que
dicho numeral sólo refiera al “estado de ebriedad”, sin señalar parámetro
o porcentaje de éste o grado de alcoholemia en la sangre, no implica que
limite las circunstancias específicas del sujeto activo al “estado de
ebriedad”, sino que tal estado le impida o perturbe la adecuada
conducción del vehículo motor; por tal motivo, el juzgador tendrá que
valorar (al margen del grado de alcohol en la sangre) si dicha condición
actualiza esta última circunstancia. Por tanto, no puede estimarse que
dicho artículo, al no precisar lo que debe entenderse por “estado de
ebriedad”, conduzca a la autoridad aplicadora de la norma a confusión o
a demeritar la defensa del procesado y, por tanto, viole el principio de
exacta aplicación de la ley en materia penal en su vertiente de
taxatividad, toda vez que se trata de un elemento normativo del delito, el
cual está sujeto a la valoración de aquélla autoridad.

Amparo directo en revisión 5008/2014. 30 de septiembre de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Secretaria: Ana Carolina Cienfuegos Posada.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA IV/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. LA SUSPENSIÓN DE LA PATRIA POTESTAD NO


SUPRIME EL DERECHO DEL PROGENITOR A OPONERSE A LA
ADOPCIÓN DE SU HIJO. La suspensión de la patria potestad no debe
llevar al extremo de suprimir el derecho del padre a decidir sobre una
cuestión tan trascendental como la adopción de su hijo. Por tanto, cuando
la patria potestad se encuentre suspendida por motivo del estado de
interdicción declarado judicialmente, debe entenderse que el padre
continúa “ejerciéndola” para los efectos del artículo 377 del Código
Familiar para el Estado de Michoacán, vigente hasta el 1o. de julio de
2013; esto es, a efecto de que se requiera su consentimiento para tramitar
la adopción de su menor hijo. De esta manera, el hecho de que se
actualice la suspensión de la patria potestad no hace nugatorio el derecho
del progenitor a oponerse al trámite de la adopción.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA V/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. PRESUNCIÓN EN FAVOR DEL PRINCIPIO DEL


MANTENIMIENTO DE LA FAMILIA BIOLÓGICA. Conforme al principio
del mantenimiento del menor en la familia biológica, existe un interés
fundamental de velar porque el niño no sea separado de sus padres
contra la voluntad de éstos. De esta manera, debe superarse una
presunción en contra de la terminación del vínculo paterno-filial, ya que el
niño y sus padres comparten un interés vital en prevenir la terminación de
su relación natural. En atención a ello, esta Primera Sala estima que
existe una presunción a favor del principio de mantenimiento de las
relaciones familiares, por lo que los hechos que motiven la adopción de
un menor deben evaluarse estrictamente a la luz del interés superior del
niño. No obstante, esta presunción puede ser derrotada en algunos
casos, si se verifica que (i) los padres han consentido la adopción, o (ii) si,
en caso de que éstos se opongan, se muestra que de no otorgarse la
adopción se afectarían los derechos del menor.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA VI/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. DERECHO DE OPOSICIÓN DE QUIENES EJERCEN LA


PATRIA POTESTAD. Esta Primera Sala entiende que existe un derecho
de los padres que no han perdido la patria potestad sobre sus hijos a
participar en los juicios de adopción. Este derecho debe ser respetado a
cabalidad ya que, de lo contrario, se atentaría contra el principio de
mantenimiento de la familia biológica y se afectaría el derecho de los
padres a recibir protección contra injerencias arbitrarias o ilegales en su
familia. A pesar de ello, vista a la luz del interés superior del menor, la
voluntad de quien ejerce la patria potestad no puede ser un obstáculo
infranqueable para la protección integral del niño. De esta manera, el
derecho de oposición de los padres está limitado por el interés superior
del menor. Así, sólo puede otorgarse la adopción de un menor en contra
de la voluntad de sus padres, cuando se pruebe que de otro modo se
generará un daño a la niña o niño en cuestión.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA VII/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. CRITERIOS PARA EVALUAR EL CONSENTIMIENTO DE


LOS PADRES CUANDO ÉSTOS SEAN PERSONAS CON
DISCAPACIDAD. Conforme al modelo social de asistencia en la toma de
decisiones desarrollado por esta Primera Sala en el amparo en revisión
159/2013, la discapacidad no es producto de las diferencias del individuo,
sino de las barreras sociales que limitan su posibilidad de participar e
interactuar en el medio en igualdad de circunstancias. El modelo social de
la discapacidad tiene como punto de partida que se debe proteger y
garantizar la libre elección de la persona, fomentando el ejercicio de su
libre autodeterminación conforme al grado de diversidad funcional que
posea. En este orden de ideas, el modelo social también se refleja en
procedimientos de adopción. Lo anterior indudablemente comporta un
deber para el juzgador de promover y respetar la autonomía de la
voluntad de las personas con discapacidad cuando se requiera su
consentimiento para la adopción. En efecto, cuando quien deba consentir
la adopción es una persona con discapacidad declarada judicialmente, el
juez no puede soslayar la posibilidad de que manifieste su voluntad; por el
contrario, debe evaluar cuidadosamente si ha expresado sus intenciones
por sí misma en algún sentido, partiendo de que esta manifestación es
susceptible de surtir efectos jurídicos.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA VIII/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. EL TUTOR NO PUEDE SUSTITUIR LA VOLUNTAD DEL


PADRE QUE DEBA OTORGAR SU CONSENTIMIENTO. Conforme al
modelo social de la discapacidad desarrollado por esta Primera Sala en el
amparo en revisión 159/2013, el tutor únicamente puede tomar decisiones
por el pupilo en casos excepcionales, debiendo prevalecer la libre
autonomía del pupilo en aquellos casos en los que pueda decidir por sí
mismo. Al respecto, esta Primera Sala considera que existen algunas
decisiones trascendentales que son inherentes a la persona a tal grado,
que no son susceptibles de ser delegadas a un representante. En efecto,
el respeto por la libre autodeterminación implica reconocer que ciertas
decisiones sólo pueden ser expresadas por la persona misma, a través de
cualquier medio posible. Éstas son decisiones que trascienden en los
ámbitos más significativos de la persona, como lo es su núcleo familiar.
De esta forma, si bien el tutor está en aptitud de decidir sobre cuestiones
como la administración de los bienes del pupilo, difícilmente podrá suplir
su voluntad en una valoración tan íntima como lo es dar en adopción a un
hijo biológico. Ante tal panorama, esta Primera Sala estima que el tutor no
puede decidir sobre la adopción de un menor en sustitución de quien
ejerza la patria potestad.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA IX/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. ESTÁNDAR PARA OTORGARLA SIN EL


CONSENTIMIENTO DE LOS PADRES, CUANDO SE TRATE DE
PERSONAS CON DISCAPACIDAD. A partir del modelo social de la
discapacidad y de las obligaciones establecidas en la Convención de las
Naciones Unidas de los Derechos de las Personas con Discapacidad,
esta Primera Sala advierte que las relaciones paterno-filiales gozan de
una protección especial cuando la madre o el padre tengan alguna
discapacidad. En estos casos, se vuelve necesario ponderar de manera
integral el interés superior del menor con los derechos de las personas
con discapacidad. Así, para otorgar la adopción sin el consentimiento de
padres que tengan alguna discapacidad, no basta con probar que de no
otorgarse la adopción el menor podría sufrir un daño. Adicionalmente,
debe corroborarse lo siguiente: a) que la afectación al menor sea
demostrada bajo un estándar de prueba claro y convincente; b) que dicho
daño no derive de prejuicios o especulaciones discriminatorias, sino de
pruebas técnicas o científicas que acrediten la existencia de una
afectación en el desarrollo del menor; y, finalmente, c) que la presunta
afectación al menor no sea producto de barreras contextuales o sociales
que puedan ser superadas por ajustes razonables; esto es, por medidas
alternativas que faciliten que la persona haga frente a sus obligaciones de
padre.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA X/2016 (10a.)

ADOPCIÓN. CRITERIOS PARA PROBAR SI EXISTE UN DAÑO


CONTRA EL MENOR TRATÁNDOSE DE PADRES CON ALGUNA
DISCAPACIDAD. Tratándose de padres con discapacidad, para que
pueda otorgarse la adopción de un menor sin el consentimiento de éstos,
es preciso: a) que se demuestre de forma clara y convincente que el
menor sufrirá alguna afectación de no otorgarse la adopción; b) debe
corroborarse que dicho daño no deriva de prejuicios o especulaciones
discriminatorias sobre los padres con discapacidad; y, c) debe verificarse
que la presunta afectación al menor no es producto de barreras
contextuales o sociales que puedan ser superadas por ajustes
razonables. Ahora bien, en relación con el daño, es preciso que éste sea
un daño probado, de tal forma que la decisión no se tome con base en
consideraciones discriminatorias. Por tanto, el daño debe probarse con
evidencia técnica o científica y no con base en estereotipos, prejuicios, o
especulaciones injustificadas sobre las características de los padres con
discapacidad.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XI/2016 (10a.)

MODELO SOCIAL DE LA DISCAPACIDAD. AJUSTES RAZONABLES


EN PROCEDIMIENTOS DE ADOPCIÓN. Tratándose de padres con
discapacidad, para que pueda otorgarse la adopción de un menor sin el
consentimiento de éstos, debe demostrarse de forma clara y convincente
que, de lo contrario, el menor sufrirá alguna afectación. Además, debe
corroborarse que dicho daño no deriva de prejuicios o especulaciones
discriminatorias. Una vez que se ha probado la afectación en estos
términos, debe acreditarse adicionalmente que dicha situación no deriva
de barreras sociales que puedan ser subsanadas a través de medidas
alternativas. En efecto, conforme al modelo social, la discapacidad debe
ser considerada como una desventaja causada por las barreras que la
organización social genera al no atender de manera adecuada las
necesidades de las personas con diversidades funcionales. Con base en
este paradigma, si de la situación de discapacidad se derivan limitantes
para hacer frente a sus obligaciones de padre, se debe constatar que
éstas no sean producto de las barreras contextuales. Esto es, que no
surjan en razón de las diversidades funcionales per se, sino de la
interacción de éstas con ciertas barreras sociales. En este orden de ideas,
en procedimientos de adopción, el juzgador debe verificar que las
afectaciones a los derechos del menor no sean producto de barreras
contextuales o sociales que puedan ser superadas por ajustes
razonables. En caso de que las limitantes sean sociales, el juzgador debe
tratar de encontrar alternativas que permitan a la persona con
discapacidad disfrutar plenamente de su derecho a la familia y cumplir
cabalmente con sus obligaciones de padre.

Amparo directo en revisión 3859/2014. 23 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto particular, y
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretaria: Ana María Ibarra Olguín.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de dos de diciembre de dos mil
quince. México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XII/2016 (10a.)

PRUEBA PERICIAL EN EL JUICIO CIVIL. EL JUEZ DEBE DAR


OPORTUNIDAD A LAS PARTES QUE LO SOLICITEN, PARA HACER
COMPARECER E INTERROGAR A LOS PERITOS CON RESPECTO A
LOS DICTÁMENES QUE RINDAN (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE
MÉXICO). El principio de contradicción, aplicado a la prueba pericial,
forma parte de las garantías de debido proceso que deben respetarse no
sólo en la materia penal, sino en lo que resulte compatible con otras
materias, como la civil, en la que debe permitirse a las partes que así lo
soliciten, tener la oportunidad de hacer comparecer e interrogar a los
peritos respecto a los dictámenes que rindan en juicio, sin perjuicio del
derecho que, en su caso, pueda también concederse para que durante el
desahogo de la prueba, las partes formulen observaciones que deban
considerarse en los respectivos dictámenes. Lo anterior es así, ya que
una interpretación articulada de lo señalado por los artículos 1º, 14, 17 y
20 constitucionales, que considere a su vez las garantías judiciales
protegidas por los artículos 8º y 25 de la Convención Americana sobre de
Derechos Humanos, permite concluir que si bien, dada su importancia, la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la referida
Convención, sólo detallan las garantías mínimas que deben respetarse en
asuntos del orden penal, ello no descarta que las mismas también puedan
ser consideradas garantías mínimas en procedimientos de otra
naturaleza, en tanto ello resulte compatible, máxime que los juzgadores
deben priorizar el conocimiento de la verdad y que la práctica de hacer
comparecer e interrogar a los peritos, constituye un medio de control y
perfeccionamiento de la prueba pericial, que permite que las partes sean
debidamente oídas en juicio haciendo valer los medios de defensa
necesarios previo a cualquier acto privativo. La Corte Interamericana de
Derechos Humanos, en los casos Ivcher Bronstein vs. Peru, Tribunal
Constitucional vs. Perú y Panel Blanca (Paniagua Morales y Otros) vs.
Guatemala, ha establecido el criterio de que a pesar de que el artículo 8º,
apartado 2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, no
especifica garantías mínimas en materias que conciernen a la
determinación de los derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal
o de cualquier otro carácter, las garantías mínimas establecidas en el
numeral 2 del mismo precepto aplican también a esos órdenes y, por
ende, en éstos el individuo tiene derecho al debido proceso en los
términos reconocidos para la materia penal, en cuanto sea aplicable al
procedimiento respectivo. Dicho criterio también se advierte en la opinión
consultiva emitida el 10 de agosto de 1990, por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos. Luego entonces, el hecho de que el artículo
1.312, del Código de Procedimientos Civiles del Estado de México, no
prevea expresamente el derecho de las partes para hacer comparecer e
interrogar a los peritos sobre los dictámenes que emiten, no impide que el
juez, de conformidad con lo señalado por los artículos 1.250 y 1.251, que
le permiten, para conocer la verdad, valerse de cualquier persona, cosa o
documento, y decretar, en todo tiempo, en cualquier juicio, la práctica,
repetición o ampliación de cualquier diligencia probatoria, puede, a
solicitud de las partes, conceder el derecho de contradicción en la prueba
pericial, debiendo, en caso de negativa al respecto, explicar de manera
fundada y motivada las razones en que dicha determinación se sustente,
sin que baste decir que ello es una facultad reservada al juez.

Amparo directo en revisión 4414/2014. 15 de abril de 2015. Cinco votos


de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretario: Guillermo Pablo López Andrade.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA XIII/2016 (10a.)

REVISIÓN EN AMPARO INDIRECTO. ES IMPROCEDENTE DICHO


RECURSO CUANDO SE RESERVA JURISDICCIÓN A LA SUPREMA
CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN PARA QUE REALICE LA
INTERPRETACIÓN CONSTITUCIONAL DE UN PRECEPTO LEGAL
QUE NO LE FUE APLICADO AL RECURRENTE. De los artículos 107,
fracción VIII, inciso a), de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, y 84, fracción I, inciso a), de la Ley de Amparo abrogada, se
advierte que para que un recurso de revisión interpuesto contra la
sentencia dictada por un Juez de Distrito sea competencia de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación, se requiere que en esa resolución subsista
un problema de constitucionalidad y, para que este presupuesto se
cumpla, es necesario que en la demanda de amparo el quejoso realice un
planteamiento en que cuestione la constitucionalidad de una norma de
carácter general, o bien, que en su resolución, el juez de distrito realice la
interpretación directa de un precepto de la Constitución Federal. En ese
contexto, cuando un tribunal colegiado de circuito reserva jurisdicción a la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, para que determine lo referente a
la interpretación constitucional de un precepto legal que no fue aplicado al
quejoso, luego recurrente, tal aspecto no puede ser materia de análisis
del recurso de revisión a instancia del alto tribunal, porque en esa
hipótesis no se cumple con el requisito constitucional y legal, sobre todo
cuando en la demanda se plantea la inconstitucionalidad del acto
reclamado por la aplicación de un determinado ordenamiento legal, y el
juez de distrito sobresee señalando que éste no fue aplicado; por lo que si
el tribunal colegiado de circuito confirma esa determinación, y luego pide
la interpretación del ordenamiento no aplicado, es improcedente que el
Máximo Tribunal se pronuncie al respecto.

Amparo en revisión 146/2015. 10 de junio de 2015. Cinco votos de los


Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge
Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretario: Alfonso Francisco Trenado Ríos.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XIV/2016 (10a.)

NOTIFICACIONES EN EL JUICIO ORAL MERCANTIL. EL ARTÍCULO


1390 BIS 10 DEL CÓDIGO DE COMERCIO, AL PREVER LAS REGLAS
PARA SU REALIZACIÓN, NO VULNERA EL DERECHO
FUNDAMENTAL AL DEBIDO PROCESO. De la exposición de motivos
de la reforma al Código de Comercio, publicada en el Diario Oficial de la
Federación el 27 de enero de 2011, por la que se introdujo el juicio oral
mercantil, se advierte que los principios rectores de éste son los de:
oralidad, publicidad, igualdad, inmediación, contradicción, continuidad y
concentración; de ahí que, acorde con la naturaleza de dicho juicio, su
finalidad sea contar con un sistema de impartición de justicia cuya
prontitud, celeridad, eficacia y eficiencia sean las adecuadas para evitar
rezagos en el pronunciamiento de las resoluciones que ponen fin a las
controversias. De ese modo, se encuentra justificado que el artículo 1390
bis 10 prevea que en un juicio oral mercantil sólo el emplazamiento tenga
que realizarse personalmente, mientras que las demás determinaciones
deben notificarse de acuerdo con las reglas y los medios previstos para
las notificaciones no personales. Así pues, dicho precepto no vulnera el
derecho fundamental al debido proceso, consistente en proteger que las
partes tengan una posibilidad efectiva e igual de defender sus puntos de
vista y ofrecer pruebas en apoyo de sus pretensiones, pues estas
cuestiones se encuentran previstas para los juicios orales mercantiles;
además, los derechos fundamentales de legalidad y seguridad jurídica
están colmados con el hecho de que el artículo indicado tenga previsto
que en el juicio oral únicamente será notificado personalmente el
emplazamiento, ya que desde que se ordena notificar a la demandada de
manera personal la existencia de un juicio en su contra, se le hace saber
que se encuentra sujeta a las disposiciones procesales previstas en el
Código de Comercio, en las que se le exigirán determinadas conductas y
que, incluso, dichas cargas serán reclamadas a las partes bajo
apercibimiento de ser sancionadas en caso de no cumplir con ellas, pues
sólo así se garantiza la celeridad que exige el procedimiento oral
mercantil.

Amparo en revisión 383/2015. **********. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
concurrente y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: Jorge Mario
Pardo Rebolledo y Olga Sánchez Cordero de García Villegas, quienes
reservaron su derecho para formular voto de minoría. Ponente: Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria: María Dolores Igareda Diez de Sollano.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA XV/2016 (10a.)

NOTIFICACIONES EN EL JUICIO ORAL MERCANTIL. AL ESTAR


EXPRESAMENTE PREVISTA LA FORMA DE REALIZARLAS EN EL
ARTÍCULO 1390 BIS 10 DEL CÓDIGO DE COMERCIO, NO PROCEDE
APLICAR SUPLETORIAMENTE OTRA LEGISLACIÓN. La Primera Sala
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido que la
supresión de las notificaciones personales en el juicio oral mercantil
persigue un fin constitucionalmente válido, por lo que la forma de
notificación de los autos o las resoluciones diferentes al emplazamiento
en ese procedimiento, está expresamente prevista en el artículo 1390 bis
10 del Código de Comercio, sin que proceda aplicar supletoriamente otra
legislación, ya que resulta contrario a la naturaleza de dichos juicios
orales que tienen como finalidad contar con un sistema de impartición de
justicia pronta, eficaz y eficiente, para resolver los conflictos con la
prontitud y celeridad necesarias para evitar rezagos en el
pronunciamiento de las resoluciones.

Amparo en revisión 383/2015. **********. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
concurrente y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: Jorge Mario
Pardo Rebolledo y Olga Sánchez Cordero de García Villegas, quienes
reservaron su derecho para formular voto de minoría. Ponente: Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria: María Dolores Igareda Diez de Sollano.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XVI/2016 (10a.)

PATRIA POTESTAD. AL ANALIZAR LA DEMANDA DE SU PÉRDIDA


POR ACTUALIZARSE LA HIPÓTESIS PREVISTA EN EL ARTÍCULO
628, FRACCIÓN I, DEL CÓDIGO CIVIL PARA EL ESTADO DE
PUEBLA, EL JUEZ DEBE ATENDER AL PRINCIPIO DEL INTERÉS
SUPERIOR DEL MENOR. La patria potestad es una institución creada en
beneficio de los menores y no de los progenitores, pues constituye una
función encomendada a éstos en favor de sus hijos, dirigida a su
protección, educación y formación integral; de ahí que su pérdida no es
una medida que tenga por objeto castigarlos por incumplir los deberes
que conlleva la patria potestad, sino que pretende defender los intereses
del menor en los supuestos en los que su bienestar se garantiza cuando
sus padres estén separados. Ahora bien, el artículo 628, fracción I, del
Código Civil para el Estado de Puebla, prevé que los derechos de la patria
potestad se pierden cuando quien la ejerza cometa algún delito grave o
intencional contra el menor, sin embargo, no todo delito comprueba que el
progenitor incumplió con las obligaciones derivadas del ejercicio de
aquélla y que causa con ello un perjuicio a los intereses y el bienestar del
menor. Lo anterior es así, porque sin un análisis de la naturaleza del delito
y de las circunstancias en las que se comete, la condena a la pérdida de
la patria potestad bajo ese supuesto podría ser desproporcionada y
contraria a los intereses de los menores, ya que existen delitos cuya
naturaleza no denota una afectación evidente y directa a sus intereses, o
bien, no demuestra fehacientemente que el progenitor ha incumplido las
obligaciones inherentes al ejercicio de la patria potestad, como por
ejemplo, en el delito de sustracción de menores, donde dependiendo de
las circunstancias en que se cometa, puede o no demostrarse que fue
dolosamente y, por tanto, faltó a su deber de cuidado.
Consecuentemente, ante la demanda de la pérdida de la patria potestad
por actualizarse el supuesto previsto en el artículo 628 citado, el juez
debe atender al principio del interés superior del menor y analizar la
naturaleza del delito, así como las circunstancias en las que se cometió,
pues de surgir alguna duda razonable respecto a si con su comisión se
comprueba que el progenitor faltó a su obligación de cuidado y búsqueda
del bienestar del menor, entonces, dicha pérdida no debe aplicarse,
porque no asegura la consecución de la finalidad de la norma, que es
evitar un mayor perjuicio al menor.

Amparo directo en revisión 1433/2014. 22 de octubre de 2014. Mayoría


de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Disidente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria: María Dolores Igareda
Diez de Sollano.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA XVII/2016 (10a.)

DEFENSA ADECUADA EN MATERIA PENAL. ANTE LA AUSENCIA


DEL DEFENSOR PARTICULAR, ESTE DERECHO HUMANO DEBE
GARANTIZARSE POR EL JUEZ DE LA CAUSA CON LA
DESIGNACIÓN DE UN DEFENSOR PÚBLICO QUE ASISTA
JURÍDICAMENTE AL PROCESADO. La garantía del derecho humano de
defensa adecuada se satisface siempre que en los actos que constituyen
el proceso penal en que intervenga, el imputado cuente con la asistencia
jurídica de un profesional en derecho; es por eso que el juez que instruye
la causa penal debe designar defensor público en caso de ausencia de
defensor particular que lo había venido representando. En el entendido de
que en la prerrogativa de defensa adecuada, el defensor tiene que cumplir
con las condiciones necesarias para que el imputado sea asistido
jurídicamente; por lo tanto, resulta necesaria tanto la presencia física del
defensor, como que realice actos jurídicos efectivos, en todas las
diligencias en que aquél intervenga directamente.

Amparo directo en revisión 94/2014. 3 de septiembre de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

Amparo directo en revisión 3250/2013. 24 de septiembre de 2014.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas, quien reservó su derecho para formular voto concurrente,
y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretario: Javier Mijangos y González.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XVIII/2016 (10a.)

IMPARCIALIDAD JUDICIAL. NO SE VULNERA ESTE PRINCIPIO POR


LA DESIGNACIÓN QUE REALICE EL JUEZ DE LA CAUSA, PARA
QUE ASISTA JURÍDICAMENTE AL IMPUTADO ANTE LA AUSENCIA
DEL DEFENSOR PARTICULAR QUE LO VENÍA REPRESENTANDO.
De conformidad con lo previsto en la fracción VII del apartado A del
artículo 20 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
en su texto anterior a la reforma publicada en el Diario Oficial de la
Federación el 18 de junio de 2008, el derecho de defensa adecuada se
garantiza en la medida en que el imputado cuenta con un defensor que
tenga el carácter de profesional en derecho. En virtud de lo anterior, en
caso de ausencia del defensor privado a una diligencia en la que tenga
participación el procesado, el juez debe nombrarle a aquél un defensor
público para que le proporcione asistencia jurídica. Ahora bien, la
intervención del juez no afecta la imparcialidad de sus funciones, ya que
únicamente se limita a acatar las directrices establecidas en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, respecto de la
protección y garantía del derecho humano de defensa adecuada.

Amparo directo en revisión 94/2014. 3 de septiembre de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

Amparo directo en revisión 3250/2013. 24 de septiembre de 2014.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas, quien reservó su derecho para formular voto concurrente,
y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretario: Javier Mijangos y González.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XIX/2016 (10a.)

DEFENSA ADECUADA. LOS SUPUESTOS DE VIOLACIÓN DE ESTE


DERECHO HUMANO SE ACTUALIZAN CUANDO EL JUEZ NOMBRA
DEFENSOR PÚBLICO ANTE LA AUSENCIA DEL DEFENSOR
PARTICULAR. Para dar cumplimiento a las obligaciones de promover,
proteger, respetar y garantizar los derechos humanos, el juez penal tiene
que designar oficiosamente un defensor público en caso de ausencia del
defensor particular del imputado a una diligencia en la que éste debe
tener intervención, a fin de que cuente con la asistencia jurídica que
requiera. Sin embargo, la protección del derecho humano de defensa
adecuada exige que se actualice una real asistencia jurídica, de modo
que no basta que se cumpla con la designación de un defensor público en
sustitución del abogado particular que venía representando al procesado.
Incluso cuando se cumple con la designación de defensor de oficio, es
posible que se actualicen violaciones al derecho humano de defensa
adecuada, de modo que dejen al imputado en estado de indefensión. La
violación puede actualizarse en dos supuestos identificados por la
Primera Sala de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, a saber: el
primer supuesto se actualiza si no se requirió previamente al imputado
nombrar libremente a otro defensor de su elección, puesto que en todo
momento debe privilegiarse el derecho que tiene de designar al abogado
que quiera para que le proporcione asistencia jurídica en el juicio; el
segundo supuesto se actualiza si el defensor de oficio designado por el
juez se nombra al inicio de una audiencia de desahogo de pruebas, con la
única finalidad de llevar a cabo dicha diligencia, sin que dicho defensor
cuente con los medios y tiempo necesarios para su preparación
(conocimiento de las constancias que integran el expediente), a fin de
determinar la estrategia a seguir, que permita el ejercicio de una
adecuada defensa del procesado.

Amparo directo en revisión 94/2014. 3 de septiembre de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

Amparo directo en revisión 3250/2013. 24 de septiembre de 2014.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas, quien reservó su derecho para formular voto concurrente
y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretario: Javier Mijangos y González.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XX/2016 (10a.)

DEFENSA ADECUADA EN MATERIA PENAL. PROCEDIMIENTO A


SEGUIR PARA LA DESIGNACIÓN OFICIOSA DEL DEFENSOR
PÚBLICO QUE ASISTA AL IMPUTADO EN LA PRÁCTICA DE UNA
DILIGENCIA JUDICIAL DE DESAHOGO DE PRUEBAS, ANTE LA
AUSENCIA DEL DEFENSOR PARTICULAR PREVIAMENTE
NOMBRADO. Si al iniciarse una audiencia de desahogo de pruebas no se
encuentra el defensor particular previamente designado por el procesado,
el juez del proceso, para garantizar el ejercicio efectivo del derecho de
defensa adecuada del imputado, debe nombrarle un defensor público
para que lo asista jurídicamente observando una serie de directrices. En
principio, después de verificarse la inasistencia del defensor particular
previamente designado para intervenir en la causa penal, el juez deberá
requerir al imputado para que nombre a otro abogado que lo pueda asistir
en la diligencia. Con esto se cuida la prevalencia del derecho del
imputado de designar libremente al abogado que lo defienda en la causa
penal. La respuesta del imputado puede dar lugar a tres supuestos: 1)
designar a otro abogado particular que se encuentre presente en las
instalaciones del juzgado; 2) solicitar que le sea nombrado un defensor
público; 3) informar que no tiene abogado a quien pueda encomendar su
defensa, o el designado se niegue a aceptar el nombramiento realizado
por el imputado. Después de recibir alguna de las respuestas anteriores,
el juzgador deberá dictar un acuerdo de trámite en el que puede: a) tener
por designado al defensor particular nombrado por el procesado o; b)
designar a un defensor público que lo asista jurídicamente. En este mismo
acuerdo, el juez tiene que requerir al profesionista en derecho para que
comparezca de inmediato en la diligencia a aceptar el cargo y asumir la
defensa del inculpado. Realizado lo anterior, la autoridad judicial deberá
implementar las medidas necesarias para que el defensor designado
pueda tener acceso a las constancias que integran la causa penal, con el
fin de que conozca las circunstancias generales del caso y de la diligencia
judicial programada para celebrarse al momento de la intervención, de
manera que pueda tener los conocimientos necesarios para asesorar
adecuadamente al imputado. En caso de que se trate de una audiencia de
desahogo de pruebas, la autoridad judicial deberá diferir la audiencia, ya
que en el momento de la designación eventual del defensor, éste no
conoce las particularidades del caso; el diferimiento permite que el
profesional en derecho se prepare para poder conocer las
particularidades del caso. Este supuesto tiene como excepción que la
designación del defensor público sea únicamente para suplir al defensor
particular que representa a la defensa en la audiencia de desahogo de
pruebas. En este supuesto, la diligencia podrá verificarse después de que
el imputado y su defensor sostengan una entrevista y manifiesten que
conocen las circunstancias del caso y tiene la preparación previa para
ejercer la defensa efectiva. De la manifestación debe dejarse constancia
en la audiencia. La autoridad judicial requerirá al defensor particular que
no asistió a la diligencia, siempre que no haya sido revocado, para que se
presente en la próxima fecha que se programe y también se le apercibirá
con imponerle las medidas de apremio correspondientes a la ley procesal.
En caso de que en la nueva fecha señalada para que tenga verificativo la
audiencia de desahogo de pruebas se repita la inasistencia del defensor
particular designado para representar la defensa adecuada del
procesado, el juzgador tendrá que repetir las anteriores consideraciones y
diferir la audiencia a una próxima fecha. La autoridad deberá imponer al
defensor particular ausente la medida de apremio que haya determinado,
después de que conste que fue debidamente notificado. En este caso, si
el imputado manifiesta que debe mantenerse la designación del defensor
particular, la autoridad debe de informarle que con motivo de la
inasistencia del defensor particular, se le asignará de manera oficiosa un
defensor público que podrá acceder al expediente y se diferirá la fecha de
la audiencia nuevamente, con la finalidad de preparar la defensa del
imputado y garantizar que no se le deje en estado de indefensión. Este
supuesto no se verificará si un defensor particular asume la defensa y
conoce del asunto. Esta última directriz, en primer término, permite
respetar, hasta el límite de lo posible, el derecho del imputado de nombrar
un profesionista en derecho que asuma su defensa y opera como garantía
para no dejar al imputado en estado de indefensión. Las directrices
previamente planteadas son necesarias para evitar una violación al
derecho humano de defensa adecuada porque se refieren a la realización
de acciones de protección, respeto y garantía del citado derecho humano
en un proceso penal.

Amparo directo en revisión 94/2014. 3 de septiembre de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

Amparo directo en revisión 3250/2013. 24 de septiembre de 2014.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas, quien reservó su derecho para formular voto concurrente,
y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretario: Javier Mijangos y González.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de diciembre de dos mil quince.
México, Distrito Federal, tres de diciembre de dos mil quince. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXI/2016 (10a.)

AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN. PARA EFECTOS DE SU


PROCEDENCIA DEBE VERIFICARSE SI LA AUTORIDAD
RESPONSABLE REALIZÓ UN VERDADERO CONTROL DE
CONVENCIONALIDAD. La procedencia del recurso de revisión en
amparo directo, bajo la premisa de un control de convencionalidad ex
officio en materia de derechos humanos, se basa en la existencia de un
genuino ejercicio de esa naturaleza. En este sentido, procede verificar si
efectivamente lo realizado por parte de la autoridad jurisdiccional
señalada como responsable, satisface o no los presupuestos de ese
ejercicio de control de regularidad, pues no basta la simple afirmación de
haberlo realizado.

Amparo directo en revisión 1083/2014. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto concurrente. Disidentes:
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
particular y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Julio César Ramírez
Carreón.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXII/2016 (10a.)

CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO. LAS


AUTORIDADES JUDICIALES, PREVIO A LA INAPLICACIÓN DE LA
NORMA EN ESTUDIO, DEBEN JUSTIFICAR RAZONADAMENTE POR
QUÉ SE DESTRUYÓ SU PRESUNCIÓN DE CONSTITUCIONALIDAD.
Para que las autoridades den cumplimiento a la obligación contenida en el
artículo 1o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
en caso de considerar una norma contraria a los derechos humanos,
deberán actuar en aras de proteger el derecho que se estime vulnerado y,
en todo caso, realizar un control ex officio del que puede resultar, como
última opción, la inaplicación de una norma al estimarla incompatible con
los derechos humanos. No obstante, el nuevo paradigma constitucional a
que se refiere el precepto citado no destruye la presunción de
constitucionalidad de las normas que conforman el sistema jurídico
mexicano, por lo cual, debe agotarse cada uno de los pasos del control ex
officio, con la finalidad de verificar si la norma es acorde con los derechos
humanos, ya sea de los reconocidos por la Constitución Federal o por los
tratados internacionales de los que el Estado Mexicano es parte. Lo
anterior implica que las autoridades judiciales, previo a la inaplicación de
la norma en estudio, deben justificar razonadamente por qué se derrotó la
presunción de su constitucionalidad.

Amparo directo en revisión 1083/2014. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto concurrente. Disidentes:
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
particular y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Julio César Ramírez
Carreón.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXIII/2016 (10a.)

CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO. LA


APLICABILIDAD DE LA NORMA AL CASO CONCRETO ES UN
REQUISITO LÓGICO PARA EL EJERCICIO DE AQUÉL. El control de
convencionalidad exige, como presupuesto lógico para su ejercicio, sobre
todo cuando lo que se busca es declarar la inaplicación de una norma de
derecho interno, que ésta sea aplicable, es decir, que efectivamente
regule el caso concreto. De ahí que para considerar que se realizó un
control de convencionalidad no basta la simple consideración de la
autoridad de que la norma contradice un derecho humano, sino que
previamente debe verificarse la condición de aplicabilidad de ésta. Lo
anterior deriva en dos conclusiones: 1) la autoridad no puede declarar la
inaplicación de una norma cuyo contenido no es aplicable al caso
concreto; y, 2) no cualquier inaplicación de alguna norma que la autoridad
afirme realizar constituye un genuino control de convencionalidad.

Amparo directo en revisión 1083/2014. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto concurrente. Disidentes:
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
particular y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Julio César Ramírez
Carreón.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXIV/2016 (10a.)

CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EX OFFICIO. EN EL ANÁLISIS


DE LA PROCEDENCIA DEL RECURSO DE REVISIÓN EN AMPARO
DIRECTO DEBE CONSTATARSE LA APLICABILIDAD DE LA NORMA,
COMO PRESUPUESTO LÓGICO DE SU EJERCICIO. El control de
convencionalidad exige, como presupuesto lógico para su ejercicio, que la
norma de derecho interno sea “aplicable al caso” y que represente un
obstáculo infranqueable para resolver el asunto, de forma que sólo
desbordando su contenido se lograría la tutela efectiva del derecho
humano de que se trata. Por el contrario, si la norma recoge un supuesto
distinto al que ha de resolverse, o simplemente no impide a la autoridad
tomar una decisión compatible con los derechos humanos involucrados, la
declaración de inaplicabilidad es una mera manifestación subjetiva, pero
no un ejercicio de control de convencionalidad. En este tenor, al decidir
sobre la procedencia del recurso de revisión en amparo directo, debe
constatarse no sólo que el tribunal colegiado de circuito haya verificado
esa condición de aplicabilidad de la norma, sino también debe analizarse
si la autoridad responsable que determinó aplicables las normas, en
realidad le dio el alcance específico a su contenido para individualizarlo al
caso concreto, de manera que efectivamente resulten aplicables, esto
como presupuesto lógico para realizar un control de convencionalidad ex
officio.

Amparo directo en revisión 1083/2014. 9 de septiembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto concurrente. Disidentes:
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
particular y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Julio César Ramírez
Carreón.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXV/2016 (10a.)

DETENCIÓN EN FLAGRANCIA. APRECIACIÓN DE SU VALIDEZ


CONSTITUCIONAL CUANDO LA AUTORIDAD TIENE
CONOCIMIENTO, POR MEDIO DE UNA DENUNCIA INFORMAL, QUE
SE ESTÁ COMETIENDO O SE ACABA DE COMETER UN DELITO. La
Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha
determinado el procedimiento que debe seguirse para efectuar una
detención cuando la autoridad tiene conocimiento por medio de una
denuncia informal sobre un delito cometido en flagrancia; y para que
aquélla pueda ser válida (por guardar correspondencia formal y material
con la normativa que rige el actuar de la policía) tiene que ceñirse al
concepto constitucional estricto de flagrancia, es decir, debe actualizarse
alguno de los supuestos siguientes: 1. La autoridad puede aprehender al
aparente autor del delito si observa directamente que la acción se comete
en ese preciso instante, esto es, en el iter criminis; o, 2. La autoridad
puede iniciar la persecución del aparente autor del delito a fin de
aprehenderlo si, mediante elementos objetivos, le es posible identificarlo y
corroborar que, apenas en el momento inmediato anterior, se encontraba
cometiendo el delito. Ahora bien, tratándose de la detención en flagrancia
en el supuesto de denuncia informal (aquella que no se rinde ante el
Ministerio Público en las condiciones de regularidad formal que deben
operar ordinariamente), al evaluar la validez constitucional, el juez debe
ponderar si la autoridad aprehensora contaba con datos suficientes que le
permitieran identificar con certeza a la persona acusada y evaluar el
margen de error que pudo haberse producido tomando como base la
exactitud y la precisión de los datos aportados en la denuncia.

Amparo directo en revisión 3463/2012. 22 de enero de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXVI/2016 (10a.)

CONTROL PROVISIONAL PREVENTIVO. PARÁMETROS A SEGUIR


POR LOS ELEMENTOS DE LA POLICÍA PARA QUE AQUÉL TENGA
VALIDEZ CON POSTERIORIDAD A LA DETENCIÓN EN FLAGRANCIA.
La finalidad de los controles preventivos provisionales es evitar la
comisión de algún delito, salvaguardar la integridad y la vida de los
agentes policiacos, o corroborar la identidad de alguna persona, con base
en información de delitos previamente denunciados ante la policía o
alguna autoridad. En este sentido, la realización de esos controles
excluye la posibilidad de que la autoridad pueda detener a una persona
sin causa mínima que lo justifique, de lo contrario, bajo una circunstancia
abstracta –como la apariencia física de las personas, su forma de vestir,
hablar o comportarse–, podrían justificar su detención y revisión física
cuando es evidente que no existen circunstancias que permitan explicar la
sospecha de que se está cometiendo un delito. Por tanto, para que se
justifique la constitucionalidad de un control preventivo provisional es
necesario que se actualice la sospecha razonada objetiva de que se está
cometiendo un delito y no sólo una sospecha simple que derive de un
criterio subjetivo del agente de la autoridad. Así, las circunstancias para
acreditar empíricamente la sospecha razonable objetiva son relativas a
los objetos materiales del ilícito, los sujetos, lugares y horarios descritos
por las víctimas y los testigos de algún delito con las denuncias que haya
recibido la policía. En este contexto, las condiciones en las cuales la
policía estará en posibilidad de llevar a cabo un control de detención, se
actualizan cuando la persona tenga un comportamiento inusual, así como
conductas evasivas y/o desafiantes frente a los agentes de la policía. Sin
embargo, en la actualización del supuesto de sospecha razonada, no
existe la condición fáctica descrita, la comisión del delito evidente y
apreciable de forma directa, pero sí las condiciones circunstanciales que
justifican la realización de un control preventivo provisional por parte de
los agentes de la autoridad, ya sea porque haya una denuncia informal o
anónima, o porque el sujeto exteriorice acciones que objetivamente den
lugar a considerar que se pretende ocultar la realización de un delito.
Aunado a lo anterior, las condiciones fácticas son las que van a
determinar el grado de intensidad del control preventivo por parte de la
autoridad. En este sentido, existen dos tipos de controles que pueden
realizarse: 1. Preventivo en grado menor, en el cual, los agentes de la
policía pueden limitar provisionalmente el tránsito de personas y/o
vehículos con la finalidad de solicitar información a la persona controlada,
por ejemplo, su identidad, ruta, motivos de su presencia, etcétera. En este
control preventivo de grado menor, también los agentes de la policía
pueden efectuar una revisión ocular superficial exterior de la persona o
del interior de algún vehículo. 2. Preventivo en grado superior, el cual está
motivado objetivamente por conductas proporcionales y razonablemente
sospechosas, lo que implica que los agentes policiales estén en
posibilidad de realizar sobre la persona y/o vehículos un registro más
profundo, con la finalidad de prevenir algún delito, así como para
salvaguardar la integridad y la vida de los propios agentes. En este
supuesto, éstos podrían, además, registrar las ropas de las personas, sus
pertenencias así como el interior de los vehículos. Este supuesto se
actualiza si las circunstancias objetivas y particulares del delito y el sujeto
corresponden ampliamente con las descritas en una denuncia previa, o
bien si los sujetos controlados muestran un alto nivel de desafío o de
evasión frente a los agentes de la autoridad. En consecuencia, si después
de realizar el control provisional legítimo los agentes de la policía
advierten la comisión flagrante de algún delito, la detención del sujeto
controlado será lícita, y también lo serán las pruebas descubiertas en la
revisión que, a su vez, tendrán pleno valor jurídico para ser ofrecidas en
juicio.

Amparo directo en revisión 3463/2012. 22 de enero de 2014. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Julio Veredín Sena Velázquez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXVII/2016 (10a.)

FACULTAD DE ATRACCIÓN. ES PROCEDENTE SU EJERCICIO SI EL


RECURSO DE QUEJA PLANTEADO ACTUALIZA LA NECESIDAD DE
DEFINIR EL ALCANCE DE UNA DISPOSICIÓN DE LA LEY DE
AMPARO VIGENTE A PARTIR DEL 3 DE ABRIL DE 2013, EN LA QUE
SE INCORPORE UNA LIMITACIÓN A DERECHOS FUNDAMENTALES
QUE NO EXISTÍA EN LA LEY DE AMPARO ABROGADA. La Primera
Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la jurisprudencia
1a./J. 27/2008, de rubro: “FACULTAD DE ATRACCIÓN. REQUISITOS
PARA SU EJERCICIO.”¹, estableció que para ejercer la facultad prevista
en el artículo 107, fracciones V, inciso d), segundo párrafo, y VIII, inciso
b), segundo párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, deben acreditarse, conjuntamente, los siguientes requisitos:
1) que a juicio de este alto tribunal, la naturaleza intrínseca del caso
permita que éste revista un interés superlativo reflejado en la gravedad
del tema, es decir, en la posible afectación o alteración de valores
sociales, políticos o, en general, de convivencia, bienestar o estabilidad
del Estado Mexicano relacionados con la administración o impartición de
justicia; y 2) que el caso revista un carácter trascendente reflejado en lo
excepcional o novedoso que entrañaría la fijación de un criterio jurídico
trascendente para casos futuros o la complejidad sistémica de éstos,
también a juicio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. En ese
contexto, resulta procedente ejercer la facultad de atracción en la que se
solicita que este máximo tribunal conozca de un recurso de queja cuyo
estudio implique la interpretación constitucional y convencional de un
precepto de la Ley de Amparo, en el que se plantea la incorporación de
una limitación a derechos fundamentales no prevista en la abrogada, pues
se estima que la relevancia que plantea esa problemática requiere fijar el
alcance de la norma jurídica cuestionada a la luz del principio de
progresividad de los derechos humanos previsto en el artículo 1o.
constitucional, así como de otros derechos fundamentales, como pueden
ser el de igualdad, de acceso efectivo a la justicia y de pronta impartición
de justicia. Además de que la resolución de tales asuntos constituye una
oportunidad para que el alto tribunal, como supremo intérprete de la
Constitución Federal, establezca los criterios que habrán de servir como
punto referencial en la resolución de casos futuros.

Solicitud de ejercicio de la facultad de atracción 262/2015. 18 de


noviembre de 2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alfonso Francisco
Trenado Ríos.

¹ La tesis de jurisprudencia 1a./J. 27/2008 citada, aparece publicada en el


Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo
XXVII, abril de 2008, página 150.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXVIII/2016 (10a.)

IMPUESTOS GENERALES DE IMPORTACIÓN Y EXPORTACIÓN. EL


ARTÍCULO 1o. DE LA LEY RELATIVA NO CONTRAVIENE EL
PRINCIPIO DE EQUIDAD TRIBUTARIA. De conformidad con el artículo
citado, los impuestos generales de importación y de exportación se
establecen mediante la identificación de un código numérico de ocho
dígitos llamado "fracción arancelaria", el cual se encuentra asociado,
entre otras cuestiones, con la descripción de la mercancía, su unidad de
medida, así como con la alícuota o tasa arancelaria que se causa por su
importación o exportación, según sea el caso. Asimismo, la aplicación del
código numérico se encuentra, en su caso, precedida de notas de
sección, capítulo o subpartida, de forma que cada fracción arancelaria es
diferente, dependiendo del producto de que se trate. Ahora bien, como se
advierte de la exposición de motivos de la Ley de los Impuestos
Generales de Importación y de Exportación, de 29 de marzo de 2007, la
nomenclatura referida no se introdujo de manera discrecional por el
legislador, sino que atiende a un sistema codificado de clasificación de
mercancías utilizado para las operaciones de comercio exterior; es decir,
su estructura está basada en el Sistema Armonizado de Designación y
Codificación de Mercancías, creado por la Organización Mundial de
Aduanas como un lenguaje aduanero común, ante la necesidad de
gestionar coincidencia y armonía para realizar las negociaciones
comerciales mundiales y simplificar las relaciones de comercio exterior,
así como para fines estadísticos. De lo expuesto, se tiene que la
clasificación arancelaria consiste en la ubicación de una determinada
mercancía en la fracción que le corresponde dentro de la tarifa de los
impuestos generales de importación y de exportación, y se realiza
mediante la aplicación de las notas de sección, notas de capítulo, reglas
complementarias y notas explicativas de la tarifa referida, así como de
diversos criterios que existen sobre clasificación. En consecuencia, todas
las mercancías se encuentran clasificadas en orden sistemático,
armonizado y codificado, en el que son identificadas con la serie de
números que se leen de izquierda a derecha por pares y que
corresponden a la estructura internacional del sistema armonizado, y los
últimos dos dígitos, que son propios de la clasificación arancelaria de
nuestro país, responden a situaciones específicas de carácter fiscal,
económico y de producción. Por tanto, el hecho de que un producto se
encuentre en la misma “familia” que otros, no implica que deba sujetarse
a un mismo arancel, porque las fracciones arancelarias son fijadas por el
legislador atendiendo a estándares internacionales de clasificación
arancelaria, con el objeto de identificar la diferencia de las mercancías
que se importan, y no con la finalidad de gravar a todos los integrantes de
un grupo o partida con el mismo porcentaje de impuesto. En
consecuencia, el artículo 1o. de la Ley de los Impuestos Generales de
Importación y de Exportación, no contraviene el principio de equidad
tributaria, contenido en el artículo 31, fracción IV, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, pues lo que se pretende es
favorecer a la economía nacional con la graduación o disminución de las
tarifas arancelarias en la importación de diversos bienes al país, a fin de
regular el comercio exterior y la estabilidad de la producción nacional.

Amparo directo en revisión 1777/2015. **********. 9 de septiembre de


2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXIX/2016 (10a.)

DETERMINACIÓN PRESUNTIVA DE CONTRIBUCIONES. EL


ARTÍCULO 41, FRACCIÓN II, DEL CÓDIGO FISCAL DE LA
FEDERACIÓN QUE LA PREVÉ, NO SE RIGE POR EL DERECHO
FUNDAMENTAL DE AUDIENCIA PREVIA. El precepto citado prevé que,
tratándose de la omisión en la presentación de una declaración periódica
para el pago de contribuciones, una vez impuestas las multas por el
incumplimiento a los requerimientos respectivos y habiéndose requerido
hasta en tres ocasiones la presentación de la declaración omitida, las
autoridades fiscales podrán hacer efectiva al contribuyente o al
responsable solidario que incurra en la omisión, una cantidad igual al
monto mayor que hubiera determinado a su cargo en cualquiera de las
seis últimas declaraciones de la contribución de que se trate. Lo anterior
implica la emisión de un crédito fiscal de carácter provisional (y no
definitivo), cuya finalidad es que el contribuyente presente la declaración
omitida y, en caso de existir diferencias a su favor, podrán compensarse
en declaraciones subsecuentes. Por tanto, el artículo 41, fracción II, del
Código Fiscal de la Federación, no se rige por el derecho fundamental de
audiencia previa, pues constituye un acto de molestia que afecta la esfera
jurídica de los contribuyentes que restringe de forma provisional o
preventiva sus derechos, con la finalidad de verificar el efectivo
cumplimiento de la obligación de contribuir contenida en el artículo 31,
fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
sin que sea necesaria la existencia de un procedimiento previo al ejercicio
de tales facultades en el que se cumplan las formalidades esenciales del
procedimiento.

Amparo directo en revisión 2484/2015. **********. 21 de octubre de


2015. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretario:
Ricardo Manuel Martínez Estrada.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXX/2016 (10a.)

LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y DERECHO DE ACCESO A LA


INFORMACIÓN. TIPOS DE AFECTACIÓN RESENTIBLE A CAUSA DE
NORMAS PENALES. Los artículos 6o., 7o., 39 y 40 constitucionales
guardan una relación sistemática innegable, pues juntos delinean una
estructura jurídica apta para lograr el autogobierno democrático. Por un
lado, los artículos 6o. y 7o. constitucionales reconocen los derechos de
las personas a expresarse y acceder a la información, sin los cuales no
sería posible una ciudadanía política y, por otro lado, los artículos 39 y 40
constitucionales establecen que la forma de gobierno es democrática y
representativa. Así, los referidos derechos no sólo protegen libertades
necesarias para la autonomía personal de los individuos, sino también
garantizan un espacio público de deliberación política. Mientras existan
mejores condiciones para el ejercicio desinhibido de tales libertades,
habrá mejores condiciones de ejercicio de los derechos políticos
indispensables para el funcionamiento de la democracia representativa.
Por tanto, una persona puede resentir afectación en dichos derechos
tanto en la dimensión individual como en la colectiva y los jueces
constitucionales deben ser sensibles a considerar qué tipo de afectación
alegan en un juicio de amparo. Si se trata de una afectación que
trasciende exclusivamente el ámbito de autonomía personal, la pregunta
relevante a responder es: ¿La norma combatida impide de alguna manera
el ejercicio de la autonomía personal del quejoso? En caso de tratarse de
una alegada afectación a la dimensión colectiva, la pregunta relevante a
contestar sería: ¿La norma impugnada obstaculiza, impide o estorba de
alguna manera al quejoso para ingresar o participar en el espacio de la
deliberación pública? En este segundo aspecto, los jueces
constitucionales deben considerar que las personas acuden al juicio de
amparo a exigir la protección contra una amenaza diferenciada, la que
debe obligar a dichos jueces a trascender el ámbito analítico
estrictamente personal de afectación y observar las posibilidades de
afectación del precepto impugnado en las posibilidades de
desenvolvimiento de la persona que acude al juicio de amparo en el
espacio público de deliberación. Ello debe considerarse de una manera
muy cuidadosa y especial tratándose de normas que blinden la crítica de
información de interés público, pues el interés legítimo, en este contexto,
debe servir a las personas –y más aún a quienes desempeñan una
función de informar– para poder acceder al control constitucional cuando
estimen que no les asisten esas posibilidades de acceso y participación
en el escrutinio público.

Amparo en revisión 492/2014. 20 de mayo de 2015. Mayoría de tres


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas, quien formuló voto concurrente, y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien reservó
su derecho para formular voto particular, y Jorge Mario Pardo Rebolledo,
quien formuló voto particular. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretarios: Karla I. Quintana Osuna y David García Sarubbi.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXXI/2016 (10a.)

INTERÉS LEGÍTIMO EN AMPARO CONTRA LEYES PENALES. SE


ACTUALIZA ANTE NORMAS CUYA MERA EXISTENCIA GENERA UN
EFECTO DISUASIVO EN EL EJERCICIO DE LA LIBERTAD DE
EXPRESIÓN Y EL DERECHO FUNDAMENTAL DE ACCESO A LA
INFORMACIÓN. Aunque las normas penales, que tipifican conductas
ilícitas, pueden contener obligaciones de hacer o no hacer condicionadas
a un acto de aplicación y, por tanto, en su estructura normativa resultar
heteroaplicativas, lo relevante, desde la perspectiva del interés legítimo,
es determinar si generan una afectación especial, que corra de manera
paralela, afectando al quejoso de manera individual o colectiva, calificada,
actual y de una forma relevante jurídicamente. Ahora bien, la libertad de
expresión y el derecho de acceso a la información no sólo protegen un
espacio de autonomía personal de los individuos, sino también garantizan
un espacio público de deliberación política. De lo que se sigue que las
normas penales pueden resultar autoaplicativas por su afectación directa,
cuando se alegue que esas normas obstaculicen, impidan o estorben el
acceso a dicho espacio. Ello exige de los jueces apreciar las posibilidades
de afectación del precepto impugnado en las condiciones de
desenvolvimiento de la persona en el espacio público de deliberación,
especialmente cuando el tipo de discurso afectable por la norma es de
naturaleza política y cuando quien acude al juicio es una persona que se
dedica a difundir dicha información a la sociedad. Por tanto, aquí no es
relevante determinar si la norma impugnada trasciende en la esfera
jurídica del quejoso desde la perspectiva de las consecuencias punitivas
exigidas como respuesta de reproche a su conducta, esto es, si el
quejoso ha actualizado la hipótesis normativa que activa el aparato
punitivo del Estado a través de sus facultades persecutorias y judiciales,
lo que implicaría asignar el énfasis al contenido heteroaplicativo de la
norma. Un caso paradigmático es el de un periodista, a quien se debe
reconocer interés legítimo para impugnar normas que alegue impidan,
obstaculicen o impongan requisitos de entrada al espacio público para
participar en el debate público, independientemente si acredita un acto de
aplicación. En suma, si el quejoso se duele de la imposibilidad del
ejercicio desinhibido del ejercicio de deliberación pública, el juez de
amparo debe verificar si, prima facie, se genera un efecto obstaculizador
de participación en la deliberación pública que permita tener por
acreditado el interés legítimo.

Amparo en revisión 492/2014. 20 de mayo de 2015. Mayoría de tres


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas, quien formuló voto concurrente, y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien reservó
su derecho para formular voto particular, y Jorge Mario Pardo Rebolledo,
quien formuló voto particular. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretarios: Karla I. Quintana Osuna y David García Sarubbi.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXXII/2016 (10a.)

INTERÉS LEGÍTIMO EN EL AMPARO CONTRA LEYES. NORMAS


CUYA SOLA EXISTENCIA GENERA UNA AFECTACIÓN
AUTOAPLICATIVA QUE LO ACTUALIZA. Esta Primera Sala ha
determinado que, de manera excepcional, pueden encontrarse en el
ordenamiento jurídico normas generales heteroaplicativas, identificables
así por su estructura normativa interna, que no obstante, generan una
afectación de tal gravedad para nuestra democracia constitucional, que
pueden identificarse como autoaplicativas, por lo que debe tenerse por
acreditado el interés legítimo para impugnarlas. El primero de este tipo de
normas corresponde al de aquellas que son estigmatizadoras, es decir,
aquellas que con independencia de que establezcan contenidos
condicionados a un acto de aplicación, terminan por proyectar un mensaje
discriminatorio contra ciertos sujetos, que resienten una afectación
generada por la parte valorativa de la norma, al incluir criterios vedados
por el artículo 1o. constitucional. Un segundo tipo de normas en este
supuesto, corresponde a aquéllas que se erigen como barreras de acceso
al debate público o que inhiben la propia deliberación pública,
entendiendo que las condiciones normativas para la generación óptima de
esta última se encuentran constitucionalmente protegidas, en tanto que
son condiciones de existencia de un espacio público sin el cual un
gobierno democrático de naturaleza deliberativa no sería posible. La
afectación que producen este segundo tipo de normas no es generada
por su parte valorativa, sino por sus repercusiones sobre la apropiada
preservación de canales de expresión e intercambio de ideas que deben
mantenerse abiertos, por ejemplo, estableciendo impedimentos, requisitos
u obligaciones, aún de abstención, que obstaculicen el desenvolvimiento
de las personas en el debate público, especialmente cuando se refieran al
discurso político o a quienes se dedican a informar. Ante este segundo
tipo de normas, lo relevante para el juzgador no es determinar si la norma
impugnada trasciende en la esfera jurídica del quejoso desde la
perspectiva de los actos de aplicación requeridos para su materialización,
sino la afectación generada a los canales de deliberación pública.

Amparo en revisión 492/2014. 20 de mayo de 2015. Mayoría de tres


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas, quien formuló voto concurrente, y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien reservó
su derecho para formular voto particular, y Jorge Mario Pardo Rebolledo,
quien formuló voto particular. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretarios: Karla I. Quintana Osuna y David García Sarubbi.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXXIII/2016 (10a.)

LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y DERECHO DE ACCESO A LA


INFORMACIÓN. LOS PERIODISTAS CUENTAN CON INTERÉS
LEGÍTIMO PARA IMPUGNAR EN AMPARO, SIN ACTO DE
APLICACIÓN PREVIO, EL ARTÍCULO 398 BIS, DEL CÓDIGO PENAL
PARA EL ESTADO DE CHIAPAS, POR SU POTENCIAL DE
AFECTACIÓN EN LAS CONDICIONES DE ACCESO A LA
DELIBERACIÓN PÚBLICA. El artículo citado impone a las personas en
general una obligación de abstención (no hacer), consistente en no
obtener ni proporcionar información confidencial o reservada de los
cuerpos de seguridad pública o de las fuerzas armadas, con el propósito
de evitar que el sujeto o los sujetos activos del delito sean detenidos o
para que puedan concretar una actividad delictiva en agravio de un
tercero. Ahora bien, cuando un periodista acuda al amparo, debe
considerarse que la obligación que impone la norma constituye una razón
para la acción que resulta protegida jurídicamente, por lo que es
perentoria y, luego, debe ser suficiente para que el sujeto excluya
cualquier otra consideración de oportunidad para actuar en sentido
contrario a la obligación de abstención impuesta por la norma impugnada.
Así, la parte quejosa acredita la afectación suficiente exigida por el
concepto de interés legítimo con el seguimiento de la obligación primaria
impuesta por la norma impugnada, pues se ostenta como periodista, por
lo que forma parte de un gremio cuya actividad principal es justamente la
realización de las actividades que se encuentran excluidas mediante una
obligación de no hacer: obtener y proporcionar información; además, el
seguimiento de la obligación primaria lo lleva a considerarla como una
razón para la acción que, de tenerla como una razón perentoria y
autónoma para guiar su conducta, lo llevaría a ver frustrado un beneficio:
el ejercicio robusto y desinhibido de su actividad como periodista. Esta
afectación debe considerase cualificada por un contexto adicional que
torna su afectación en objetiva, concreta y real, a saber: que la
información respecto de la cual se impone la obligación de abstención,
por sus características propias, la torna de interés público, ya que se trata
de información relacionada, en general, con temas de seguridad pública y
el eficiente funcionamiento de las instituciones encargadas de su cuidado.
Así, el planteamiento del quejoso no es un ejercicio hipotético, sino que
constituye una afectación real en su ámbito profesional. En efecto, esta
Primera Sala considera que la labor realizada por los profesionales de la
información consiste, precisamente, en buscar y difundir información de
interés público. La existencia de una norma que penalice ab initio la
búsqueda de información puede constituir un efecto amedrentador (tener
un chilling effect) en dicho profesional. No obstante, al tenerse por
acreditado el interés legítimo del quejoso para combatir el precepto
impugnado, no implica prejuzgar sobre su validez constitucional, pues
será en el fondo donde se determinará si esa afectación en sentido amplio
resulta ajustada a la Constitución o no.

Amparo en revisión 492/2014. 20 de mayo de 2015. Mayoría de tres


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga Sánchez
Cordero de García Villegas, quien formuló voto concurrente, y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes: José Ramón Cossío Díaz, quien reservó
su derecho para formular voto particular, y Jorge Mario Pardo Rebolledo,
quien formuló voto particular. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretarios: Karla I. Quintana Osuna y David García Sarubbi.
LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE
ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXXIV/2016 (10a.)

DICTÁMENES PERICIALES. LA NO RATIFICACIÓN DEL RENDIDO


POR EL PERITO OFICIAL CONSTITUYE UN VICIO FORMAL
SUBSANABLE, POR LO QUE EN NINGÚN CASO DEBE DAR LUGAR
A CONSIDERAR QUE CONSTITUYE PRUEBA ILÍCITA QUE DEBA
SER EXCLUIDA DEL ANÁLISIS PROBATORIO CORRESPONDIENTE.
Esta Primera Sala ha establecido, en la tesis aislada 1a. LXIV/2015
(10a.)¹, la inconstitucionalidad del artículo 235 del Código Federal de
Procedimientos Penales, por vulnerar el derecho fundamental de igualdad
procesal entre las partes al eximir a los peritos oficiales de ratificar los
dictámenes que ofrezcan, pero obligando a que lo hagan los de las demás
partes, lo que origina un desequilibrio procesal que conduce a considerar
que la opinión pericial que no sea ratificada debe estimarse imperfecta y,
en tanto no cumpla con dicha condición, carente de valor probatorio
alguno; sin embargo, la desigualdad procesal advertida no da lugar a
considerar que los dictámenes emitidos por peritos oficiales que no son
ratificados constituyan prueba ilícita que deba ser excluida del análisis
probatorio correspondiente, sino un vicio formal susceptible de ser
subsanado mediante la ratificación correspondiente. Ello es así, en tanto
que la formalidad en cuestión no trasciende de manera sustantiva al
contenido de la prueba pericial en el proceso penal, es decir, a la
metodología y conclusión del dictamen, sino que se vincula
exclusivamente con la imposibilidad de conferirle valor probatorio, se
insiste, hasta en tanto el mismo no sea ratificado por el perito oficial que lo
haya rendido. En consecuencia, a fin de restaurar la igualdad procesal
entre las partes, basta con que se ordene la ratificación del dictamen,
incluso en vía de reposición del procedimiento, en su caso, para que el
señalado vicio formal desaparezca y pueda estar en condiciones de ser
valorado por el juez.

Amparo Directo en Revisión 2759/2015. 2 de septiembre de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Rosalba Rodríguez
Mireles.

¹ La tesis aislada LXIV/2015 (10a.), señalada, aparece publicada en el


Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Décima Época, Libro
15, Tomo II, febrero de 2015, página 1390, registro 2008490, con el rubro:
“DICTÁMENES PERICIALES. EL ARTÍCULO 235 DEL CÓDIGO
FEDERAL DE PROCEDIMIENTOS PENALES, AL EXIMIR A LOS
PERITOS OFICIALES DE RATIFICARLOS, VULNERA EL DERECHO
FUNDAMENTAL DE IGUALDAD PROCESAL.”.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veintisiete de enero de dos mil
dieciséis. México, Distrito Federal, veintiocho de enero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXXV/2016 (10a.)

DERECHO FUNDAMENTAL A UNA VIVIENDA DIGNA Y DECOROSA.


LA AFECTACIÓN PRODUCIDA POR UNA DECISIÓN
JURISDICCIONAL QUE RESUELVE SOBRE LA PROPIEDAD Y LA
POSESIÓN NO IMPLICA UNA VULNERACIÓN A ESE DERECHO. El
derecho a la vivienda digna y decorosa es un derecho social que se
encuentra vinculado con distintos elementos, dentro de los cuales se
ubica la seguridad de la tenencia, a fin de que se prevenga cualquier acto
de terceros con la intención de perturbarla, tales como actos arbitrarios de
desocupación o la vulneración ilegal por parte de terceros de su título de
propiedad. Sin embargo, esa seguridad de la tenencia, como uno más de
los elementos del derecho a la vivienda, no se viola por virtud de que una
persona pierda la propiedad o posesión sobre el inmueble que destine
para su habitación, al haber resultado adverso a sus intereses un juicio
seguido ante tribunales facultados para ello. Por el contrario, mediante la
intervención de la autoridad, se desarrolla la función jurisdiccional a fin de
evitar, precisamente, la justicia privada que en nuestro régimen
constitucional está expresamente proscrita por el artículo 17
constitucional. Por lo mismo, se otorga seguridad jurídica sobre el bien
inmueble, incluido el destinado a la vivienda, pues se está protegiendo la
propiedad privada al mismo tiempo que el interés público, al procurar el
respeto de los derechos reales de terceros.

Amparo directo en revisión 5456/2014. **********. 9 de septiembre de


2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto aclaratorio, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro
Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha diez de febrero de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXXVI/2016 (10a.)

REVISIÓN EN AMPARO DIRECTO. ESTE RECURSO PROCEDE DE


MANERA EXCEPCIONAL, CUANDO EXISTA INTERPRETACIÓN
DIRECTA DE UNA NORMA CONSTITUCIONAL EN LA QUE SE
SUSTENTE EL SOBRESEIMIENTO DEL JUICIO RELATIVO. Cuando se
sobresea en el juicio de amparo directo, basándose en la interpretación
directa de una disposición constitucional, aun cuando sólo se haga
referencia a la reproducción de un precepto constitucional en una norma
de menor jerarquía, se actualiza el primer requisito de procedencia
previsto en el artículo 107, fracción IX, de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, pues de prevalecer la interpretación del
tribunal colegiado de circuito, se impediría a este alto tribunal llevar a
cabo su función, por el simple hecho de que no se haya invocado el
contenido de la norma referida; lo que además sería contrario a la
finalidad del recurso de revisión, consistente en salvaguardar los
derechos de las partes en el juicio de amparo contra la aplicación
incorrecta de la Constitución General de la República por los tribunales
colegiados de circuito y unificar su interpretación. En ese sentido, debe
considerarse que existe una cuestión de constitucionalidad, pues aun
cuando el tribunal colegiado de circuito que conoció hubiese sobreseído
en el juicio, su decisión derivó de la interpretación directa de un precepto
de la Norma Fundamental, sin perjuicio de que para considerar
procedente el recurso de revisión, debe cumplirse también con el segundo
requisito, consistente en que se fije un criterio de importancia y
trascendencia, según lo disponga la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, en cumplimiento al Acuerdo General Número 9/2015 del Tribunal
Pleno.

Amparo directo en revisión 1646/2015. **********. 30 de septiembre de


2015. Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro
Castañón Ramírez.

Nota: El Acuerdo General Número 9/2015, de ocho de junio de dos mil


quince, del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que
establece las bases generales para la procedencia y tramitación de los
recursos de revisión en amparo directo citado, aparece publicado en la
Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época, Libro 19,
Tomo III, junio de 2015, página 2483.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha diez de febrero de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXXVII/2016 (10a.)

RECURSO DE APELACIÓN. CONTRA LA RESOLUCIÓN QUE LO


DESECHA, ES INNECESARIO AGOTAR EL RECURSO DE
REVOCACIÓN PREVISTO EN EL ARTÍCULO 680 DEL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL ESTADO DE MICHOACÁN,
PREVIAMENTE A PROMOVER EL AMPARO DIRECTO. El artículo 107,
fracción III, inciso a), de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, refiere que el juicio de amparo directo procede contra
sentencias definitivas, laudos y resoluciones que ponen fin al juicio,
entendiéndose estas últimas como las que, sin decidirlo en lo principal, lo
dan por concluido y respecto de las cuales las leyes no conceden recurso
ordinario alguno. En relación con lo anterior, si el artículo 680 del Código
de Procedimientos Civiles para el Estado de Michoacán señala que el
recurso de revocación es un medio de impugnación para combatir todos
los autos de las Salas del Tribunal Superior de Justicia de la entidad, con
excepción de los que se dicten en grado de apelación, sin especificar su
calidad o su sentido, deben considerarse como tales los emitidos en la
segunda instancia procesal, la cual debe tenerse por iniciada al momento
de la presentación del recurso de apelación; de manera que si de
conformidad con la legislación procesal aplicable, en el procedimiento se
establece la participación del juez, no sólo como receptor del escrito de
agravios, sino para proveer su interposición y el grado de la apelación,
hasta que la Sala emite su pronunciamiento, con ello se demuestra una
vinculación directa en las actuaciones del juez con la instancia procesal.
De ahí que esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación determina que cuando el juez tramita el recurso de apelación
interpuesto por el recurrente, provee sobre su interposición y expresa el
efecto con el que lo admite (suspensivo o devolutivo), se dicta en “grado
de apelación”, pues procesalmente se refiere a otra instancia diversa a la
competencia del juzgador, como resolutor de la primera instancia. Por
tanto, si el acto impugnado fue posterior a esas actuaciones, esto es, la
determinación del tribunal de alzada para desechar el recurso, es
evidente que se trata de una resolución dictada en “grado de apelación” y,
por ende, es innecesario agotar el recurso de revocación en su contra,
antes de acudir al juicio de amparo directo, al actualizarse la excepción
prevista en la norma.

Amparo directo en revisión 1646/2015. **********. 30 de septiembre de


2015. Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro
Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha diez de febrero de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA XXXVIII/2016 (10a.)

TRIBUNALES CONSTITUCIONALES LOCALES. CARECEN DE


COMPETENCIA PARA CONOCER DE ASUNTOS RELACIONADOS
CON VIOLACIONES A LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS
ESTADOS UNIDOS MEXICANOS. A pesar de que diversas
Constituciones Locales establecen un contenido propio en materia de
derechos fundamentales –en tanto no contradigan la Constitución
Federal–, así como un medio jurisdiccional local para su protección, esta
circunstancia es insuficiente para que los tribunales locales sean
competentes para conocer de asuntos relacionados con violaciones a la
Ley Suprema, pues el texto fundamental vigente sigue asignando esa
facultad exclusivamente al Poder Judicial de la Federación. Por tanto, si
bien los órganos jurisdiccionales locales, cuando así lo disponga su Poder
Legislativo, pueden vigilar que no existan violaciones a la Constitución de
su respectiva entidad federativa, en todo caso las sentencias respectivas
podrán revisarse mediante el juicio de amparo por los tribunales
federales, para asegurar que, además, cumplan con la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, pues cabe recordar que el
orden jurídico de cada Estado está supeditado al Pacto Federal.

Amparo directo en revisión 3057/2014. **********. 4 de febrero de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Jorge
Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XXXIX/2016 (10a.)

CONTROL DIFUSO DE CONSTITUCIONALIDAD. NO TIENE EL


ALCANCE DE QUE LOS TRIBUNALES CONSTITUCIONALES
LOCALES CONOZCAN DE ASUNTOS RELACIONADOS CON
VIOLACIONES A LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS
UNIDOS MEXICANOS, RESPECTO DE ASUNTOS QUE NO SEAN DE
SU COMPETENCIA. El control difuso de constitucionalidad no implica
que los tribunales constitucionales de las entidades federativas puedan
resolver asuntos donde la materia de la litis consista, esencialmente, en
violaciones a la Constitución Federal. Lo anterior es así, pues si bien los
tribunales constitucionales locales están facultados para aplicar dicho
control, ello sólo indica que al resolver los asuntos que sean de su
competencia puedan, en última instancia, inaplicar normas que
consideren inconstitucionales. Así, el presupuesto necesario para que los
jueces locales puedan aplicar control difuso en un asunto, consiste en que
los asuntos sometidos a su consideración sean de su competencia. En
este orden de ideas, el control difuso de constitucionalidad no se traduce
en la posibilidad de que los tribunales locales, incluso los supremos de
cada entidad federativa, puedan conocer de asuntos donde la litis verse
sobre violaciones a la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, aun cuando se hagan valer a través de un juicio de protección
a derechos fundamentales. Así, el control difuso ni siquiera puede operar
en estos casos, pues el presupuesto básico para su ejercicio no se
actualiza, ya que los tribunales constitucionales locales no son
competentes para conocer de asuntos cuya litis consista esencialmente
en violaciones a la Constitución General de la República, que sólo pueden
ser materia del juicio de amparo, medio de control concentrado que el
Poder Constituyente diseñó para atender temas constitucionales y que
reservó, en exclusiva, para el conocimiento del Poder Judicial de la
Federación.

Amparo directo en revisión 3057/2014. **********. 4 de febrero de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena,
quien reservó su derecho para formular voto particular. Ponente: Jorge
Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XL/2016 (10a.)

IMPUESTOS A LA CONSTRUCCIÓN. LOS ARTÍCULOS 300 A 302 DEL


CÓDIGO FISCAL DEL DISTRITO FEDERAL, VIGENTE EN 2011, NO
VIOLAN EL PRINCIPIO DE PROPORCIONALIDAD TRIBUTARIA. Los
artículos citados, al disponer que las personas físicas y morales deberán
pagar por concepto de aprovechamientos una cuota fija por cada metro
cuadrado de construcción, cuando: a) realicen construcciones (viviendas)
de hasta doscientos metros cuadrados; b) lleven a cabo construcciones
superiores a los doscientos metros cuadrados; y, c) realicen obras o
construyan desarrollos urbanos, edificaciones, amplíen la construcción o
cambien el uso de las construcciones que requieran nuevas conexiones
de agua y drenaje o ampliaciones, deberán cubrir una cuota fija por cada
metro cuadrado de construcción o de ampliación, no violan el principio de
proporcionalidad tributaria contenido en el artículo 31, fracción IV, de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, porque si el acto
o actividad gravada es la construcción o realización de obras de distintas
clases, el hecho de que se consideren los metros cuadrados como
parámetro para determinar la cuantía del impuesto, resulta congruente
con su objeto. Esto es así, en principio, porque la dimensión de las obras
constituye un elemento susceptible de revelar, objetivamente, la
potencialidad real de contribuir a los gastos públicos; máxime si se tiene
en cuenta que la actividad gravada es precisamente la construcción, pues
resulta lógico presumir que quien construye una obra de mayores
dimensiones cuenta con recursos económicos superiores que quien
realiza una obra pequeña. Además, de la interpretación teleológica de los
citados preceptos se advierte que el gravamen tuvo como fines
específicos: mitigar o compensar las alteraciones o afectaciones al
ambiente y los recursos naturales e, incluso, al impacto vial, generadas
por las señaladas construcciones, así como la realización de obras
necesarias para reforzar la infraestructura hidráulica, por lo que se
determinó que ése sería el destino de lo recaudado por dicho concepto, lo
que se corrobora al considerar los metros cuadrados por construcción
como parámetro para determinar su cuantía; es proporcional y está
directamente relacionado con su objeto, así como con la finalidad de su
creación, toda vez que de acuerdo con tal fin, es irrelevante para la
determinación de dicho gravamen el “valor de la construcción”, pues el
impacto o la afectación no se genera por zona ni por el tipo de
construcción o acabados, sino por su tamaño, lo que también determina la
necesidad de ampliar obras de infraestructura hidráulica, según sea el
caso, sin que sea viable declarar la inconstitucionalidad de dichos
preceptos por el simple hecho de que el legislador no seleccionó otros
parámetros que, a criterio de un órgano jurisdiccional, complementan
adecuadamente el que eligió el propio legislador.

Amparo directo en revisión 4904/2014. **********. 8 de abril de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLI/2016 (10a.)

VALOR AGREGADO. EL TRATAMIENTO PREVISTO EN EL


ARTÍCULO 18-A DE LA LEY DEL IMPUESTO RELATIVO, ES
INAPLICABLE A LOS INTERESES DERIVADOS DE LOS PRÉSTAMOS
OTORGADOS POR INSTITUCIONES DE BANCA MÚLTIPLE A SUS
TRABAJADORES, ACORDE CON SUS CONDICIONES GENERALES
DE TRABAJO (LEGISLACIÓN VIGENTE EN 2005). De la interpretación
armónica y sistemática de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, vigente
en 2005, así como del proceso legislativo que dio origen a su artículo 18-
A, se advierte que para alentar la actividad económica, el legislador
estimó necesario, entre otras medidas, gravar los intereses reales de los
créditos al consumo y de las tarjetas de crédito, para apoyar a las
personas con altos niveles de endeudamiento y reducir el costo de
financiamiento. De lo anterior se colige que lo previsto en el primer párrafo
del artículo citado, en el sentido de que se considerará como valor para
los efectos del cálculo del impuesto, el valor real de los intereses
devengados cuando éstos deriven de créditos otorgados por las
instituciones del sistema financiero a que se refiere el artículo 8o. de la
Ley del Impuesto sobre la Renta, abrogada, es inaplicable a los intereses
generados por créditos que dichas instituciones, independientemente de
su naturaleza, otorguen a sus trabajadores, conforme a sus condiciones
generales de trabajo, ya que, por tratarse de una prestación de carácter
laboral, la tasa de interés nominal respectiva es considerablemente menor
que la de los créditos que las instituciones del sistema financiero
conceden al público en general y, por ende, no puede estimarse que
generen un alto nivel de endeudamiento. Sin que sea obstáculo para ello
que del texto de dicho precepto no se advierta una exclusión expresa
respecto de los referidos intereses, pues dicha excepción deriva de la
interpretación teleológica y sistemática de las disposiciones que
componían el sistema legal en que se encuentra inmerso, toda vez que el
artículo 106, fracción VI, de la Ley de Instituciones de Crédito, vigente
hasta el 1o. de febrero de 2008, prohibía expresamente a éstas celebrar
operaciones en las que fueran deudores sus funcionarios y empleados,
salvo el otorgamiento de créditos que correspondieran a prestaciones de
carácter laboral, otorgadas de forma general, en las que la institución de
crédito tuviera el carácter de patrón o empleador; lo que corrobora que
estos créditos no eran a los que estaba dirigido el artículo 18-A de la Ley
del Impuesto al Valor Agregado.

Amparo directo en revisión 2861/2014. **********. 18 de marzo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLII/2016 (10a.)

VALOR AGREGADO. EL ARTÍCULO 18-A DE LA LEY DEL IMPUESTO


RELATIVO, NO VIOLA EL PRINCIPIO DE LEGALIDAD TRIBUTARIA
(LEGISLACIÓN VIGENTE EN 2005). El precepto citado establece un
tratamiento específico para el cálculo del impuesto respectivo, en relación
con los intereses devengados que deriven de créditos otorgados por
instituciones del sistema financiero a que se refiere el artículo 8o. de la
Ley del Impuesto sobre la Renta, abrogada, a través de contratos de
apertura de crédito o cuenta corriente, en los que el acreditado o
cuentacorrentista pueda disponer del crédito mediante el uso de tarjetas
expedidas por el acreedor, así como de operaciones de arrendamiento
financiero; dicho tratamiento consiste en considerar como “valor”, esto es,
la base gravable, el monto del interés real y no el nominal. Ahora bien, del
artículo 18-A de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, vigente en 2005,
no se advierte que se tome en cuenta la calidad de trabajador del
acreditado como un elemento ajeno para determinar la referida base del
cálculo del impuesto, toda vez que el hecho de que las instituciones del
sistema financiero no puedan acceder a dicho tratamiento para calcular el
impuesto sobre intereses derivados de los préstamos que otorguen a sus
empleados, no puede atribuirse al artículo referido, sino a que no reúnen
las características exigidas por ésta, pues respecto de dichos créditos
actúan como “patrón”, al ser otorgados en condiciones preferenciales,
comparadas con las que se otorgan al público en general; de ahí que el
artículo 18-A citado no viola el principio de legalidad tributaria contenido
en el artículo 31, fracción IV, de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos.

Amparo directo en revisión 2861/2014. **********. 18 de marzo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLIII/2016 (10a.)

VALOR AGREGADO. EL ARTÍCULO 18-A DE LA LEY DEL IMPUESTO


RELATIVO, NO TRANSGREDE EL PRINCIPIO DE EQUIDAD
TRIBUTARIA (LEGISLACIÓN VIGENTE EN 2005). El precepto citado, al
establecer un tratamiento para el cálculo del impuesto respectivo,
consistente en considerar como base gravable el monto del interés real y
no el nominal de los devengados que deriven de créditos otorgados por
las instituciones del sistema financiero a que se refiere el artículo 8o. de la
Ley del Impuesto sobre la Renta, abrogada, y excluir de dicho tratamiento
a los intereses derivados de créditos en los que esas instituciones actúen
como “patrón” de una relación laboral, no transgrede el principio de
equidad tributaria contenido en el artículo 31, fracción IV, de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, toda vez que la
base distinta del impuesto atiende al sujeto que lo causa, es decir, la
institución financiera, y al objeto de aquél, el tipo de crédito, ya que no
puede otorgarse un tratamiento igual a los intereses devengados que
derivan de créditos otorgados por dichas instituciones en su carácter de
patrones, con condiciones preferenciales, que a aquellos que derivan de
créditos otorgados por las propias instituciones, pero en ejercicio del
objeto social para el que fueron constituidas, pues se trata de situaciones
disímiles. Es decir, no es posible comparar los créditos concedidos a los
trabajadores, con los otorgados como institución financiera, porque no
cuentan con las mismas condiciones y facilidades, motivo por el cual no
existe inequidad, ya que para pretender idéntico trato, los créditos
debieran ser iguales. Además, el tratamiento que establece el artículo 18-
A de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, vigente en 2005, es aplicable
bajo las mismas condiciones para todas las instituciones que integran el
sistema financiero, es decir, siempre que éstas celebren contratos de
crédito con el público en general les será aplicable esa disposición, y de
igual forma, cuando otorguen créditos a sus trabajadores, ninguna
institución de las referidas podrá acogerse a dicha disposición normativa.

Amparo directo en revisión 2861/2014. **********. 18 de marzo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLIV/2016 (10a.)

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTOS. EL ARTÍCULO 243, PÁRRAFO


SEGUNDO, DEL CÓDIGO PENAL FEDERAL, QUE PREVÉ UNA
AGRAVANTE PARA AQUEL DELITO, NO CONTIENE UNA PENA
INUSITADA NI TRASCENDENTAL. El precepto citado prevé que si quien
realiza la falsificación de documentos públicos o privados es servidor
público, la pena de que se trate se aumentará hasta en una mitad más.
Ahora bien, esta Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido
que por “pena inusitada”, en su acepción constitucional, debe
considerarse aquella que ha sido abolida por inhumana, cruel, infamante y
excesiva o porque no corresponde a los fines que persigue la penalidad.
Asimismo, por “pena trascendental”, se entiende la que pueda afectar a
un tercero o a parientes del sentenciado. De ahí que el artículo 243,
párrafo segundo, del Código Penal Federal que establece una agravante
para el delito de falsificación de documentos, no contiene una pena
inusitada, toda vez que se integra con una pena de prisión que consiste
en el aumento hasta en una mitad más, de la fijada para el delito básico
de falsificación de documentos a que se refiere el párrafo primero del
precepto referido, cuando quien realice la falsificación tiene una calidad
específica: que sea servidor público; por lo que la pena establecida para
esta agravante contiene una sanción distinta de las abolidas por
inhumanas, crueles, infamantes, excesivas, o aquellas que no
corresponden a los fines que persigue la penalidad, pues es una sanción
paradigmática de un régimen democrático e incluso es acorde con un
régimen de derecho penal mínimo. Asimismo, la agravante tampoco tiene
una naturaleza trascendental, porque no afecta la esfera jurídica de
terceros ajenos al delito, o al menos no les afecta en una medida o por un
motivo no justificado constitucionalmente. Así, el sistema de penas
previsto en los códigos penales está dirigido, en términos generales, a la
importancia del bien jurídico protegido, la intensidad del ataque, la calidad
de sujetos involucrados y al grado de responsabilidad subjetiva del
agente, aunque también admite la ponderación de las razones de
oportunidad condicionada por la política criminal del legislador; de ahí que
imponer una sanción agravada cuando aumenta el grado de reproche de
la conducta en cuestión, derivado de factores circunstanciales en la
comisión de la conducta delictiva, no constituye una pena inusitada ni
trascendental de las que refiere el artículo 22 de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos.

Amparo directo en revisión 4770/2014. 30 de septiembre de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretaria: Rosalba Rodríguez Mireles.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha diez de febrero de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XLV/2016 (10a.)

APELACIÓN EN CONTROVERSIAS DEL ORDEN FAMILIAR. EL


ARTÍCULO 950 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA
EL DISTRITO FEDERAL NO TRANSGREDE EL PRINCIPIO DE
SEGURIDAD JURÍDICA. El precepto citado establece que las
apelaciones a que se refiere el Título Decimosexto: “De las controversias
del orden familiar”, en el Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal, serán en el efecto devolutivo de tramitación inmediata, “salvo
disposición expresa en contrario”. Dicha salvedad está comprendida en el
subsecuente artículo 951, de cuya literalidad se desprende que el
legislador previó que en controversias del orden familiar, las apelaciones
sean en el efecto devolutivo de tramitación inmediata, salvo los casos
previstos en el artículo 700 del mismo código civil adjetivo, sin que exista
otra remisión en el título especial al que pertenecen esas disposiciones.
En este contexto normativo, de una interpretación sistemática y el criterio
de especialidad de la materia familiar en el Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, esta Primera Sala advierte que el artículo
950 prevé un parámetro exacto de procedencia del recurso de apelación,
especificando la regla general y la operatividad de su excepción. En
consecuencia, debe concluirse que no hay sintácticamente ambigüedad ni
imprecisión en el enunciado normativo y la norma encuentra armonía y
coherencia en el sistema especial de apelaciones previsto para las
controversias del orden familiar, por lo que se estima que el referido
artículo 950 no es violatorio del principio de seguridad jurídica contenido
en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Amparo directo en revisión 4709/2014. 30 de septiembre de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha diez de febrero de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XLVI/2016 (10a.)

RECURSO DE RECLAMACIÓN. CONSTITUYE EL MEDIO IDÓNEO


PREVISTO EN LA LEY DE AMPARO PARA IMPUGNAR LA
REGULARIDAD CONSTITUCIONAL DE UN ARTÍCULO DE ESE
ORDENAMIENTO APLICADO DURANTE EL TRÁMITE DEL JUICIO EN
LA VÍA DIRECTA. La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, al resolver el amparo directo en revisión 301/2013, determinó que
procede el análisis constitucional de un artículo de la Ley de Amparo
cuando se satisfacen tres requisitos: a) la existencia de un acto de
aplicación de dicha ley al interior del juicio de amparo; b) la impugnación
de ese acto de aplicación cuando trascienda al sentido de la decisión
adoptada; y, c) la existencia de un recurso contra ese acto, en donde
pueda analizarse tanto la regularidad del acto de aplicación, como la
regularidad constitucional de la norma empleada. Lo anterior es así,
porque si bien es cierto que el quejoso no puede impugnar como acto
reclamado destacado en la demanda inicial la Ley de Amparo, también lo
es que el órgano de amparo, en ejercicio de sus facultades rectoras del
procedimiento, puede emitir actos de aplicación de las normas
reguladoras del juicio constitucional que pueden combatirse en los
recursos relativos, pues es hasta ese momento procesal cuando dicho
cuerpo legal puede generar un perjuicio al particular y, por tanto, estar en
aptitud de oponerse a éste, cuya premisa normativa consiste en que si
bien la Ley de Amparo es reglamentaria de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, lo relevante es que no son normas
equivalentes, por lo cual, al tratarse de una norma subordinada a los
criterios de validez de la norma fundante del ordenamiento jurídico, no
debe escapar al control constitucional que efectúan los órganos de
amparo. En ese sentido, si durante el trámite de un juicio de amparo
directo se aplica un precepto de la Ley Reglamentaria de los Artículos 103
y 107 Constitucionales, el recurso de reclamación es el medio de
impugnación idóneo para combatir la regularidad constitucional de ese
artículo, en términos de los preceptos 104 a 106 de la propia ley; de forma
que si el quejoso interpone el referido recurso, deberá hacer valer,
conjuntamente con los reclamos de legalidad, sus consideraciones en el
sentido de que el numeral aplicado es inconstitucional para que el tribunal
colegiado de circuito que conozca del recurso efectúe el análisis
respectivo.

Amparo directo en revisión 1504/2015. 21 de octubre de 2015. Mayoría


de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Saúl Armando
Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLVII/2016 (10a.)

RECURSO DE RECLAMACIÓN. SI AL INTERPONERLO CONTRA UN


ACUERDO DICTADO DURANTE EL TRÁMITE DEL JUICIO DE
AMPARO DIRECTO NO SE RECLAMA LA INCONSTITUCIONALIDAD
DEL ARTÍCULO DE LA LEY DE AMPARO APLICADO EN DICHO
PROVEÍDO, PRECLUYE EL DERECHO DEL RECURRENTE PARA
HACERLO. La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
ha determinado que procede el análisis constitucional de un artículo de la
Ley de Amparo cuando se satisfacen tres requisitos: a) la existencia de un
acto de aplicación de dicha ley al interior del juicio de amparo; b) la
impugnación de ese acto de aplicación cuando trascienda al sentido de la
decisión adoptada; y, c) la existencia de un recurso contra ese acto, en
donde pueda analizarse tanto la regularidad del acto de aplicación, como
la regularidad constitucional de la norma empleada. De esta forma, si se
interpone el recurso de reclamación contra un proveído dictado durante el
trámite del juicio de amparo directo en el que se reclame sólo la legalidad
del acuerdo, pero no la constitucionalidad del precepto de la Ley de
Amparo en que esa determinación se sustentó, precluye el derecho del
quejoso para reclamar la regularidad constitucional de ese artículo, es
decir, el quejoso no tendría una nueva oportunidad para reclamarla, en
virtud de que no es viable proyectar el reclamo de inconstitucionalidad
hasta la resolución del amparo directo en revisión, pues su análisis debió
agotarse al substanciarse el recurso de reclamación ante el tribunal
colegiado de circuito del conocimiento.

Amparo directo en revisión 1504/2015. 21 de octubre de 2015. Mayoría


de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Saúl Armando
Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN,- C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de
la anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión privada de diez de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, once de febrero de dos mil dieciséis.
Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XLVIII/2016 (10a.)

PREDIAL. EL ARTÍCULO 164, INCISO E), DE LA LEY DE HACIENDA


PARA LOS MUNICIPIOS DE GUANAJUATO, NO VIOLA EL PRINCIPIO
DE EQUIDAD TRIBUTARIA. El precepto citado, al prever que tributarán
bajo la cuota mínima del impuesto predial las casas-habitación adquiridas
con financiamiento otorgado por el Instituto de Seguridad Social del
Estado de Guanajuato; el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para
los Trabajadores; el Fondo Nacional de Habitaciones Populares; el Fondo
de Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los
Trabajadores del Estado o por el Fondo de la Vivienda para los miembros
del Ejército, Fuerza Aérea y Armada, así como los otorgados por
organismos similares, durante el tiempo en que esté vigente el
financiamiento, pues una vez concluido éste, tributarán bajo el régimen
general establecido en la Ley de Ingresos para los Municipios del Estado
de Guanajuato, no viola el principio de equidad tributaria contenido en el
artículo 31, fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en virtud de que la determinación legislativa del Congreso del
Estado de Guanajuato de otorgar el beneficio fiscal para tributar a cuota
mínima el impuesto predial, tuvo como finalidad avanzar en la
consecución del objetivo expresamente consagrado en el artículo 4o.,
párrafo séptimo, de la Constitución Federal, consistente en: garantizar a
toda familia el derecho a disfrutar de una vivienda digna y decorosa, en
concreto, para aquellas personas de escasos recursos que adquieran
casas “construidas por los organismos de vivienda del sector público” (fin
legítimo). Así, la introducción de la distinción entre el régimen general y el
de cuota mínima, constituye un medio apto para conducir al fin que el
legislador quiere alcanzar, en tanto que se facilita a las personas de
escasos recursos la adquisición de casas-habitación, a través de las
instituciones oficiales mencionadas, al aminorar la carga tributaria en el
impuesto predial, existiendo, por ende, relación de instrumentalidad entre
esa medida y el fin perseguido. Por lo que la medida es adecuada y
proporcionada en relación con el fin perseguido por el legislador local, ya
que se puede disfrutar de dicho beneficio fiscal sólo durante la vigencia
del financiamiento, pues una vez concluido, debe tributarse bajo el
régimen general previsto en la Ley de Ingresos para los Municipios del
Estado de Guanajuato. Ahora, si bien existen diversos tipos de
financiamiento para adquirir una vivienda, debe ponderarse que los
créditos que otorgan las instituciones referidas en el artículo 164, inciso
E), citado, van dirigidos a los sujetos con menor capacidad económica por
su monto, los plazos de pago y las facilidades para liquidarlos, como se
enfatizó en el proceso legislativo. Así, la distinción legislativa es objetiva y
razonable, porque en los créditos otorgados por instituciones del sistema
financiero, que son más onerosos para el deudor pues su monto es
mayor, se exigen mayores requisitos e ingresos para obtenerlos y pueden
adquirirse viviendas con un valor de mercado que supera, por mucho, el
de las viviendas que pueden adquirirse con los créditos otorgados por las
instituciones oficiales, aunado a que las tasas de interés son más altas.
En ese sentido, es aceptable que el legislador implemente beneficios
fiscales como la reducción del impuesto predial para apoyar a los
contribuyentes que adquirieron sus viviendas a través de los créditos que
otorgan las instituciones oficiales mencionadas.

Amparo directo en revisión 2897/2014. **********. 25 de marzo de 2015.


Unanimidad de cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretario: Ricardo
Manuel Martínez Estrada.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XLIX/2016 (10a.)

TELECOMUNICACIONES Y RADIODIFUSIÓN. LOS ARTÍCULOS


SÉPTIMO Y DÉCIMO SÉPTIMO TRANSITORIOS DE LA LEY FEDERAL
RELATIVA, AL PREVER UN SISTEMA DIFERENCIADO ENTRE
PERMISIONARIOS Y CONCESIONARIOS NO VIOLAN EL PRINCIPIO
DE IGUALDAD. Los numerales aludidos, al establecer una diferencia de
trato, no violan el principio de igualdad, ya que se encuentran en planos
jurídicos diferentes, a saber, por un lado se regulan las concesiones a las
radiodifusoras y permisos a televisoras, otorgadas conforme a la Ley
Federal de Radio y Televisión abrogada (artículo séptimo transitorio) y,
por otro, los permisos de radiodifusión conferidos de acuerdo con lo
previsto en dicha ley (artículo décimo séptimo transitorio). La diferencia
entre concesiones y permisos que se preveía en la ley abrogada, radica
en que las concesiones eran otorgadas a personas morales que tenían
como objeto generar ganancias, es decir, un lucro; mientras que los
permisos eran autorizados para las estaciones culturales, de
experimentación y escuelas radiofónicas, los cuales únicamente se
otorgaban a ciudadanos mexicanos o sociedades mexicanas sin fines de
lucro, y que sólo podían explotar el permiso para el fin otorgado. Es por
ello que el hecho de que se establezca un régimen de transición
específico y diferente para aquellos prestadores que contaban con un
permiso de radiodifusión, no demuestra una afectación a su derecho de
igualdad, en la medida en que se trata de regímenes jurídicos distintos,
con regulaciones específicas de acuerdo con su objeto.

Amparo en revisión 756/2015. **********. 28 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo
Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA L/2016 (10a.)

TELECOMUNICACIONES Y RADIODIFUSIÓN. EL ARTÍCULO DÉCIMO


SÉPTIMO TRANSITORIO DE LA LEY FEDERAL RELATIVA, NO VIOLA
EL PRINCIPIO DE IRRETROACTIVIDAD DE LA LEY. El artículo décimo
séptimo transitorio citado refiere que los permisos de radiodifusión que se
encuentren vigentes a la entrada en vigor del decreto por el que se expide
la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, deberán transitar
al régimen de concesión correspondiente dentro del año siguiente a la
entrada en vigor de la ley indicada. Ahora bien, la concesión y, en el caso
concreto, los permisos, constituyen un acto por medio del cual se concede
a un particular el manejo y la explotación de un servicio público o la
explotación y el aprovechamiento de bienes del dominio del Estado, el
cual no puede concebirse como un simple acto contractual, sino que se
trata de un acto administrativo mixto, en el cual coexisten elementos
reglamentarios y contractuales; los primeros se encuentran sujetos a las
modificaciones del orden jurídico que regulan el ordenamiento de la
concesión y los segundos garantizan los intereses legítimos del
concesionario o permisionario. Asimismo, en el título de permiso se
establecen condiciones regulatorias vinculadas al marco legal que fija las
condiciones generales de las concesiones a las que deberá sujetarse el
concesionario y las cuales sí podrá modificar el Estado, atendiendo a
decisiones que importen intereses de la colectividad, sin que para ello sea
necesario el consentimiento de aquél, es decir, cuando se reforma la
legislación relativa, se modifican igualmente los términos de las
condiciones reglamentarias del título de concesión, aun sin la intervención
del gobernado, ya que no se puede convenir con éste reformas a la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a las leyes o a los
reglamentos respectivos, al ser jurídicamente inadmisible. En esa tesitura,
las cláusulas regulatorias no pueden crear derechos adquiridos por tres
razones fundamentales: la primera, porque éstas se encuentran
vinculadas a la legislación relativa, que simplemente codifica los términos
generales de las concesiones; la segunda, en virtud de que dicha
normatividad se encuentra sujeta a reformas y modificaciones, según lo
exija el interés público; y la tercera, en razón de que precisamente por esa
dinámica legislativa y administrativa, esos derechos no pueden ni deben
entrar o conformar el patrimonio del concesionario. Esto último, porque la
concesión, como acto jurídico emanado de una norma anterior, no puede
estar en conflicto y permanente oposición con el orden jurídico que le dio
origen, máxime si éste es modificable por razones sociales que
válidamente lo justifiquen, porque la concesión, que es de menor jerarquía
que la norma jurídica, debe ceder por razones de supremacía de la norma
ante la misma y por motivos de funcionalidad del sistema. En virtud de lo
anterior, se concluye que el otorgamiento de un título de concesión (en
este caso, de permisos de radiodifusión), en el que se pacten cláusulas
reglamentarias, relacionadas con el cumplimiento de las leyes de la
materia, no crean derechos adquiridos, de ahí que el artículo décimo
séptimo transitorio de la Ley Federal de Telecomunicaciones y
Radiodifusión no viola el principio de irretroactividad de la ley contenido
en el artículo 14, párrafo primero de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos.

Amparo en revisión 756/2015. **********. 28 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo
Rebolledo. Secretario: Alejandro Castañón Ramírez.
LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE
ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LI/2016 (10a.)

FRAUDE ESPECÍFICO. EL ARTÍCULO 306, FRACCIÓN III, DEL


CÓDIGO PENAL DEL ESTADO DE MÉXICO, AL EMPLEAR LOS
TÉRMINOS “PROPIO” Y “LIBRE”, RESPECTO DE UN BIEN
DETERMINADO, NO VULNERA EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA
EXACTA APLICACIÓN DE LA LEY EN MATERIA PENAL, EN SU
VERTIENTE DE TAXATIVIDAD. El precepto citado prevé que comete el
delito de fraude el que disponga de un bien propio, como libre, con el
conocimiento de que está gravado. Ahora bien, el hecho de que los
términos “propio” y “libre”, respecto de un bien determinado, no se
encuentren definidos expresamente en el artículo mencionado o en algún
otro de dicho ordenamiento, no afecta el principio de taxatividad, pues son
claros y comprensibles para la autoridad judicial y para la colectividad a la
que las normas citadas están dirigidas. En ese sentido, es evidente que lo
“propio” hace alusión a lo que pertenece a una persona, y lo “libre”, a que
el bien no esté afectado por algún gravamen o situación jurídica que
ponga en riesgo su transmisión, sin que ello implique, por ejemplo, que
algo no es propio porque forma parte de una sociedad conyugal, pues
quien lo alega forma parte de dicha sociedad a la que sí pertenece el
bien, ni que algo no se encontraba gravado porque faltaba algún elemento
registral del gravamen, pues la intención del legislador fue evitar cualquier
engaño o riesgo en la transmisión de bienes sujetos a cualquier tipo de
gravamen, esté o no registrada dicha afectación y se tenga o no
propiedad total o parcial de un bien determinado. Además, el análisis del
grado de suficiencia en la claridad y precisión de una expresión no debe
efectuarse considerando únicamente el texto de la ley, sino que puede
acudirse tanto a la gramática como a otras expresiones contenidas en la
misma u otra disposición normativa. Incluso, esta Primera Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación ha ido más allá, al considerar
imprescindible atender al contexto en el cual se desenvuelven las normas
y a sus posibles destinatarios. De lo anterior se aprecia un grado
suficiente de claridad y precisión de las expresiones “propio” y “libre”, por
lo que se concluye que el artículo 306, fracción III, del Código Penal del
Estado de México, al emplear dichos términos, no vulnera el derecho
fundamental a la exacta aplicación de la ley penal en su vertiente de
taxatividad, reconocido por el artículo 14 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, pues del contexto en que se desenvuelve la
norma y a quienes está dirigida, se obtiene su significado sin confusión
alguna, ya sea desde un lenguaje natural o, incluso, jurídico.

Amparo directo en revisión 1622/2015. 9 de septiembre de 2015.


Unanimidad de cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Guillermo Pablo
López Andrade.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA LII/2016 (10a.)

INSTITUCIONES DE CRÉDITO. EL ARTÍCULO 68 DE LA LEY


RELATIVA NO TRANSGREDE EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA
IGUALDAD PROCESAL. Del contenido de los artículos 14 y 16
constitucionales, se desprende el derecho a la igualdad procesal, cuya
fórmula se resume en oír a ambas partes, de forma que los litigantes se
encuentren en una relativa paridad de condiciones y que ninguno pueda
encontrarse en una posición de inferioridad jurídica frente al otro, es decir,
no debe concederse a una parte lo que se niega a la otra. Ello implica que
se les debe hacer saber a las partes las pretensiones de su oponente,
además de que no se les debe impedir la oportunidad de alegar, probar o
impugnar lo que a su interés convenga, con el objeto de que ambos estén
en aptitud de demostrar los extremos de su acción y de sus excepciones
o defensas. En estas circunstancias, el artículo 68 de la Ley de
Instituciones de Crédito, en la medida que impone la obligación a una de
las partes de probar que la certificación del estado de cuenta que hace el
contador autorizado por la institución de crédito resulta falsa, o bien, que
son inexactos los datos que en ella se contienen, no resulta violatorio del
principio de equidad procesal, pues en ningún momento limita o restringe
la oportunidad del litigante de impugnar y, en su caso, demostrar que
dicha certificación contable es falsa o inexactos los datos que contiene;
por el contrario, dicho precepto simplemente define a quién le
corresponde la carga de la prueba en relación con la falsedad o
inexactitud del certificado contable, ya que, en términos del referido
precepto, el estado de cuenta certificado por el contador autorizado por la
institución bancaria hará fe, salvo prueba en contrario, en los juicios
respectivos para la fijación de los saldos resultantes a cargo de los
acreditados o de los mutuatarios, en los casos en los que la propia norma
establece, luego, la circunstancia de que el precepto en comento
establezca una presunción legal en relación con la veracidad de la
certificación contable y que, por tanto, le corresponda a una de las partes
demostrar lo contrario, no lo hace violatorio del principio de igualdad
procesal, pues lo que esta garantía exige es que exista una igualdad de
posibilidades para el ejercicio de la acción y de la defensa, lo que se
cumple en la especie, al no contener el precepto impugnado una
prohibición o restricción para impugnar y, en su caso, demostrar que lo
aducido por su oponente en este supuesto resulta falso.

Amparo directo en revisión 4662/2014. **********. 20 de mayo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretaria: Mireya Meléndez Almaraz.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LIII/2016 (10a.)

INSTITUCIONES DE CRÉDITO. EL ARTÍCULO 68 DE LA LEY


RELATIVA NO TRANSGREDE EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA
IGUALDAD SUSTANTIVA. La igualdad jurídica que consagra la
Constitución Federal, se traduce en que aquellas personas que participen
de situaciones sustancialmente similares, tengan la posibilidad y la
capacidad de ser titulares cualitativamente de los mismos derechos y
obligaciones que emanan de la ley, a fin de evitar la existencia de normas
que, llamadas a proyectarse sobre situaciones de igualdad de hecho,
produzcan como efecto de su aplicación la ruptura de esa igualdad al
generar un trato discriminatorio entre situaciones análogas, o bien, al
propiciar efectos semejantes sobre personas que se encuentran en
situaciones dispares; de ello, es que dicha posición de igualdad no puede
concretarse respecto de individuos que se encuentran colocados en
situaciones diversas. Así, la igualdad jurídica no implica que todos los
individuos deban ser iguales en todo, sino que implica un trato igual a los
iguales y desigual a los desiguales. En este orden de ideas, el artículo 68
de la Ley de Instituciones de Crédito, al permitir a las instituciones
crediticias expedir títulos ejecutivos, consistentes en los contratos y
pólizas en vinculación con los estados de cuenta certificados por el
contador del banco, sin conferir a los particulares la facultad para
confeccionar documentos a partir de los cuales puedan justificar sus
defensas y excepciones, no vulnera el derecho a la igualdad previsto en
los artículos 1o. y 13 constitucionales, y 24 de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, ya que dichas instituciones y los particulares
no se encuentran en una situación análoga que permita a los segundos
gozar de las mismas facultades que confiere dicha porción normativa a
las instituciones crediticias, puesto que las facultades que gozan estas
últimas se establecen en virtud de las circunstancias especiales que las
caracterizan, propias de la actividad bancaria y que tienden directamente
al crecimiento y desarrollo de toda la sociedad; y que en el caso del
artículo 68 de la Ley de Instituciones de Crédito, se funda en la necesidad
de alentar el tráfico mercantil, lo que implica establecer condiciones
jurídicas que permitan la celeridad, seguridad y eficacia en la gran
cantidad operaciones de banca y crédito que sirven para propiciar el
crédito y, por ende, la circulación de la riqueza.

Amparo directo en revisión 4662/2014. **********. 20 de mayo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón
Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretaria: Mireya Meléndez Almaraz.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de veinticuatro de febrero de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, veinticinco de febrero de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LIV/2016 (10a.)

FEMINICIDIO. EL ARTÍCULO 153-A DEL CÓDIGO PENAL DEL


ESTADO DE GUANAJUATO, QUE TIPIFICA EL DELITO DE
HOMICIDIO POR CUESTIONES DE GÉNERO, NO TRANSGREDE LOS
DERECHOS FUNDAMENTALES DE IGUALDAD Y NO
DISCRIMINACIÓN ENTRE EL VARÓN Y LA MUJER. Esta Primera Sala
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido que el análisis
de constitucionalidad para establecer si un trato diferenciado es
discriminatorio, requiere lo siguiente: 1) determinar si la finalidad es
objetiva y constitucionalmente válida, en razón de que los medios
escogidos por el legislador no sólo deben guardar relación con los fines
buscados por la norma, sino compartir su carácter de legitimidad; 2)
examinar la racionalidad de la medida, esto es, que exista una relación de
índole instrumental entre los medios utilizados y el fin pretendido; y, 3)
valorar que se cumpla con una relación de proporcionalidad, la cual
propiamente sopesa la relación de medios afines, para determinar si en
aras de un fin constitucionalmente válido no se afectan innecesaria o
excesivamente otros bienes o derechos protegidos por la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, verificando, en su caso, si
pudiera existir alguna vía menos gravosa para el derecho. Ahora bien, el
artículo 153-a del Código Penal del Estado de Guanajuato, que prevé que
habrá feminicidio cuando la víctima del homicidio sea mujer y la privación
de la vida se cometa por razones de género, las cuales están
establecidas en el propio precepto, responde a una finalidad
constitucional, pues busca lograr un mayor alcance y protección de los
derechos de las mujeres, en especial, el derecho a vivir libres de cualquier
tipo de violencia, de forma que las conductas delictivas que atenten contra
su vida, deben estar sustentadas y motivadas en razones de género. Esto
es, el legislador estatal, en aras de crear mecanismos jurídicos para que
no se atente contra la vida de las mujeres, adicionó al código referido la
descripción típica de feminicidio, con lo que reconoció que estas
conductas afectan no sólo la vida, la integridad física, psíquica y la
libertad sexual, sino que también son cometidas con base en la
discriminación y subordinación implícita contra las mujeres, es decir, por
razones de género; de ahí que el citado precepto legal constituye una
medida objetiva y racional, ya que se garantiza la equidad al establecer
mecanismos de protección a la integridad de las mujeres que han sufrido
violencia. Además, aun cuando la tipificación del delito de feminicidio en el
artículo impugnado sólo está dirigida al género “mujer”, la distinción no es
ofensiva, pues tiende a equilibrar el ejercicio de los derechos civiles,
políticos, económicos, sociales y culturales y, por ende, cumple con el
requisito de proporcionalidad, al generar la misma situación jurídica para
todas las mujeres que se ubiquen en dicha hipótesis. Por tanto, el citado
precepto legal, al tipificar el delito de homicidio por razones de género, no
transgrede los principios de igualdad y no discriminación entre el varón y
la mujer, contenidos en los artículos 1o. y 4o. de la Constitución Federal.

Amparo directo en revisión 652/2015. 11 de noviembre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, quienes reservaron su derecho para formular voto concurrente,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García
Villegas. Secretaria: Ana Carolina Cienfuegos Posada.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LV/2016 (10a.)

RENTA. EL ARTÍCULO 107, PÁRRAFO ÚLTIMO, DE LA LEY DEL


IMPUESTO RELATIVO ABROGADA, NO TRANSGREDE EL PRINCIPIO
DE PROPORCIONALIDAD TRIBUTARIA. De los antecedentes
legislativos del artículo citado, se advierte que la hipótesis normativa
consistente en que se considerarán ingresos omitidos los préstamos y los
donativos que no se declaren o se informen a las autoridades fiscales,
surgió de la necesidad de controlar ciertas conductas de los
contribuyentes, como la simulación de préstamos y otras operaciones con
el único fin de evitar el pago del impuesto, y para inhibir esas conductas
evasoras, se estableció la obligación de informar respecto de los
“préstamos” obtenidos, en el caso de personas físicas, a más tardar en la
declaración del ejercicio de que se trate, pues de omitirse dicho informe,
las cantidades obtenidas deben considerarse como ingresos acumulables.
Lo anterior atiende a que si un contribuyente afirma haber recibido
cantidades por concepto de “préstamos”, pero no lo informó en el
momento oportuno, sino hasta que fue descubierto por la autoridad fiscal
en el ejercicio de sus facultades de comprobación, ello es revelador de
que percibió ingresos, objeto del impuesto, que pretendió no declarar. La
presunción en estudio obedece a criterios de razonabilidad, es decir, no
se estableció arbitrariamente, sino que se atendió a la naturaleza del acto
para otorgar una consecuencia, lo que resulta incluso justificable, sobre
todo si se parte del hecho de que la determinación presuntiva de
contribuciones tiene lugar cuando el sujeto obligado del tributo transgrede
el principio de buena fe; sin que dicho artículo provoque que se graven
“los préstamos”, que por definición serían cantidades que no pertenecen
al contribuyente y que, por tanto, está obligado a restituirlas, sino que se
graven las cantidades percibidas en el ejercicio que, por la omisión de
informar que se trataba de “préstamos”, se presumen ingresos
acumulables, pues con ello, se busca evitar la existencia de conductas
evasoras como la de omitir declarar ingresos para disminuir la base
gravable del impuesto, ocultando las cantidades reales que perciba el
contribuyente en el ejercicio, por tanto, el artículo 107, último párrafo, de
la Ley del Impuesto sobre la Renta abrogada, no transgrede el principio
de proporcionalidad tributaria, previsto en el artículo 31, fracción IV, de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Amparo directo en revisión 3722/2014. **********. 4 de marzo de 2015.


Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien reservó
su derecho para formular voto concurrente, José Ramón Cossío Díaz,
quien reservó su derecho para formular voto concurrente, Jorge Mario
Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario:
Alejandro Castañón Ramírez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LVI/2016 (10a.)

CADUCIDAD DE LA INSTANCIA EN MATERIA CIVIL. EL ARTÍCULO


138 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL ESTADO
DE BAJA CALIFORNIA QUE PREVÉ LAS CONDICIONES EN QUE
DEBE OPERAR, NO VULNERA LOS ARTÍCULOS 1o., 14, 16, 17 Y 133
DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS
MEXICANOS. El artículo 138 del Código de Procedimientos Civiles para
el Estado de Baja California, que prevé que la caducidad de la instancia
operará, cualquiera que sea el estado del procedimiento, desde la
presentación de la demanda hasta antes de que se cite a las partes para
oír resolución, si transcurridos seis meses naturales contados a partir de
la notificación de la última determinación judicial, no hubiere promoción,
de cualquiera de las partes, que tienda a llevar adelante el procedimiento,
no vulnera los artículos 1o., 14, 16, 17 y 133 de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos, conclusión a la que se arriba a partir del
hecho de que aquel precepto contiene una norma especial que debe
privilegiarse sobre otras normas generales del propio ordenamiento. En
efecto, el indicado artículo 138 debe interpretarse literalmente, ya que la
palabra “naturales” alude a los meses conforme a los cuales debe
efectuarse el cómputo correspondiente, entendiéndose a los meses del
año regulados sin interrupción, esto es, con inclusión de los días hábiles e
inhábiles. Para ello, debe tenerse en cuenta que la figura de la caducidad
difiere de otros plazos en los que sí rige lo dispuesto por el artículo 131
del propio código, donde necesariamente debe acudirse al tribunal
correspondiente a imponerse del contenido del asunto o realizar alguna
actuación, lo cual sólo acontece durante los días hábiles. Así, de la
interpretación sistemática de los artículos 64, 131, 136 y 138 del Código
de Procedimientos Civiles para el Estado de Baja California, se concluye
que fue intención del legislador dar un tratamiento especial a la caducidad
de la instancia respecto de los términos judiciales en general, y que si
bien en éstos sí opera la regla de que no se contarán los días en que no
puedan tener lugar actuaciones judiciales, ello no es aplicable a la
caducidad de la instancia, existiendo una regla expresa en ese sentido;
incluso, de una interpretación histórica, es evidente que en la reforma al
artículo 138 aludido, publicada en el Periódico Oficial del Estado el 20 de
julio de 1979, el legislador local tuvo la firme intención de que la
caducidad ya no se estimara en días hábiles como previamente se hacía,
sino en días naturales. Además, se trata de una norma especial, que en
atención al principio de especialidad (lex specialis derogat legi generali),
se impone ante cualquier norma general que pudiera contradecir su
contenido, máxime que, en el caso, la norma especial surgió y fue
modificada con posterioridad a la norma general aplicable a otros
supuestos. Por otro lado, debe reconocerse que el citado artículo 138
contiene una diferencia entre los plazos cortos y los largos, de forma que
en los primeros se justifica el que no deban considerarse los días
inhábiles dado que, en efecto, al no poder tener lugar las actuaciones
judiciales, sería perjudicial para las partes imponer, por ejemplo, un plazo
de tres o cinco días para una gestión determinada, y que dentro del plazo
se consideraran los días inhábiles, lo que desde luego afectaría la
oportunidad de defensa de las partes. Sin embargo, en el caso, el
establecimiento de un plazo largo en días naturales, particularmente el de
seis meses previsto para que opere la caducidad de la instancia, no
afecta la defensa de las partes, pues existen suficientes días hábiles en
los que es posible consultar los autos del expediente y promover, de
requerirse, lo necesario.
Amparo directo en revisión 2227/2015. **********. 23 de septiembre de
2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
concurrente, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de
García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretario: Guillermo Pablo López Andrade.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LVII/2016 (10a.)

RECURSO DE APELACIÓN. LA VÍCTIMA U OFENDIDO DEL DELITO


CUENTA CON LEGITIMACIÓN PARA INTERPONERLO EN DEFENSA
DE CUALQUIER DERECHO FUNDAMENTAL CONTEMPLADO EN EL
APARTADO B, DEL ARTÍCULO 20 CONSTITUCIONAL, ASÍ COMO DE
CUALQUIER OTRO DERECHO HUMANO CONTENIDO EN LOS
TRATADOS INTERNACIONALES EN LOS QUE MÉXICO SEA PARTE
(INTERPRETACIÓN DE LOS ARTÍCULOS 417 Y 418 DEL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTOS PENALES PARA EL DISTRITO FEDERAL). El
artículo 417 del Código de Procedimientos Penales para el Distrito
Federal, establece expresamente que tendrán derecho de apelar el
ofendido o sus legítimos representantes, cuando coadyuven en la acción
reparadora y sólo en lo relativo a ésta. Por su parte, el numeral 418 de la
referida ley adjetiva en materia penal, define las determinaciones contra
las que procede el recurso de apelación, siendo estas: las sentencias
definitivas; los autos que se pronuncien sobre cuestiones de jurisdicción o
competencia; los que mandan suspender o continuar la instrucción; el de
ratificación de la detención; el de formal prisión o de sujeción a proceso o
el que los niegue; el que conceda o niegue la libertad; los que resuelvan
las excepciones fundadas en alguna de las causas que extinguen la
acción penal; los que declaran no haber delito que perseguir; los que
concedan o nieguen la acumulación o los que decreten la separación de
los procesos; los asuntos en los que se niegue la orden de aprehensión o
de comparecencia, sólo por el Ministerio Público; y todas aquellas
resoluciones en que el Código de Procedimientos Penales para el Distrito
Federal conceda expresamente el recurso. Ahora bien, de una
interpretación extensiva del artículo 17, en relación con la fracción IV del
apartado B del artículo 20, ambos de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, todos pueden inconformarse en contra de
aquellas determinaciones que afecten sus derechos constitucionales a la
impartición de justicia y reparación del daño. De lo anterior, se entiende
que el recurso de apelación tiene por objeto que el tribunal de segunda
instancia estudie la legalidad de la resolución impugnada, con la finalidad
de que confirme, revoque o modifique la resolución apelada, teniendo
derecho a apelar, entre otros, la víctima o el ofendido o sus legítimos
representantes. En ese tenor, la víctima o el ofendido en el proceso penal
no están legitimados únicamente para promover la apelación en defensa
de aquellas violaciones relacionadas directamente con la reparación del
daño en su favor, sino que es procedente que acudan a ese recurso en
defensa de cualquiera otro de los derechos fundamentales que en su
favor consagre el apartado B del artículo 20 constitucional, así como de
cualquier otro derecho humano consagrado en los tratados
internacionales en los que México sea parte, conforme a lo que establece
el primer párrafo del artículo 1o. de la Constitución Federal.

Amparo directo en revisión 1814/2015. 2 de septiembre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, quien formuló voto concurrente.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Nínive Ileana Penagos
Robles.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LVIII/2016 (10a.)

CONTRATO DE SEGURO. INTERPRETACIÓN CONFORME DEL


ARTÍCULO 25 DE LA LEY RELATIVA CON EL DERECHO
FUNDAMENTAL DE IGUALDAD. El contrato de seguro, al ser
consensual, requiere de dos emisiones de voluntad sucesivas para
perfeccionarse: 1) una oferta que el cliente dirige a la aseguradora con los
elementos esenciales del contrato que se propone celebrar; y, 2) una
aceptación lisa y llana por parte de la aseguradora, ya que, en caso
contrario, la aceptación hace las veces de una contraoferta, en cuyo caso,
el cliente requiere de un plazo para responder si acepta o no. Ahora bien,
el artículo 25 de la Ley sobre el Contrato de Seguro prevé que si el
contenido de la póliza o sus modificaciones no concordaren con la oferta
—esto es en caso de una contraoferta—, el asegurado podrá pedir la
rectificación correspondiente dentro de los treinta días que sigan al día en
que reciba la póliza, y en su defecto, transcurrido dicho plazo se
considerarán aceptadas las estipulaciones de la póliza o de sus
modificaciones. Así, la interpretación conforme de dicho precepto con el
derecho fundamental de igualdad, debe ser en el sentido de que la
finalidad que persigue es proporcionar un plazo al cliente para valorar la
contrapropuesta de la aseguradora, y sólo en caso de no estar de
acuerdo con ésta, oponerse a sus términos pues, en caso contrario, se
considerará aceptada. Sin embargo, la carga que dicho precepto impone
en el cliente debe entenderse limitada a la información que es de su
conocimiento, por ejemplo, la descripción del riesgo que desea amparar, y
no a aspectos que no se desprendan claramente de la póliza, o que
requieran de la interpretación de las condiciones generales del contrato
de seguro, pues a la aseguradora, al ser especialista en la contratación de
seguros y quien determina las características de los seguros que
comercializa, el artículo 200 de la Ley de Instituciones de Seguros y de
Fianzas, le impone la obligación de informar y asesorar en forma clara y
precisa a sus clientes respecto del tipo de seguro que es más adecuado a
sus necesidades, y de celebrar sus contratos conforme a las sanas
prácticas en materia de seguros. Por lo que si los términos del contrato de
seguro reflejados en la póliza no son los adecuados para el cliente, y éste
cumplió con su obligación de proporcionar a la aseguradora la información
que ésta le requirió, dicha inconsistencia no puede recaer en el cliente. De
ahí que el contenido del artículo 25 citado, en el sentido de que se
tendrán por aceptados los términos de la póliza si el cliente no solicita su
rectificación, no puede tener el alcance de imponerle la responsabilidad
en caso de que el seguro contratado no haya sido el adecuado, y mucho
menos de liberar a la aseguradora de sus obligaciones en dicho supuesto,
salvo que ésta acredite que los términos de la póliza son concordantes
con la oferta, en otras palabras, con la información que le proporcionó el
cliente, en cuyo caso, el asegurado tendrá que asumir la consecuencia de
su omisión o falta, y estarse a los términos de la póliza que le fue emitida
con base en la información que proporcionó; pero si la inconsistencia
deriva de una falta de la aseguradora, ya sea porque el riesgo que busca
amparar el cliente, que está establecido en la póliza, no es compatible con
el tipo de seguro que le fue emitido, o porque aquélla no lo asesoró
adecuadamente, la consecuencia de dicha falta no puede recaer en el
cliente, y mucho menos liberar a la aseguradora de sus obligaciones,
puesto que dicha interpretación vulnera no solo el principio de igualdad
entre las partes, sino también el principio de buena fe de los contratos, al
exonerar a las aseguradoras del cumplimiento de las obligaciones que la
ley les impone para compensar la situación de desventaja en que se
encuentra el cliente. El incumplimiento a dichas obligaciones por parte de
la aseguradora debe tener una consecuencia en la aseguradora, en
beneficio del cliente, y no viceversa. De lo contrario, se impone en la parte
que está en desventaja y que además cumplió con sus obligaciones, la
pérdida de su derecho, debido a una falta de su contraparte, que es la
experta en materia de seguros, quien además resulta liberada del
cumplimiento de las obligaciones que contrajo, sin tener que reembolsar a
su contraparte el pago de las primas. Lo anterior, además de ser un
incentivo negativo para las aseguradoras, pues les permite el
incumplimiento de sus obligaciones, resulta evidentemente violatorio de la
garantía de igualdad, puesto que se impone a las partes un tratamiento
diferenciado que no está justificado y que resulta contrario a los principios
que rigen las sanas prácticas en materia de seguros, así como el principio
de buena fe de los contratos.

Amparo directo en revisión 828/2015. **********. 2 de septiembre de


2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien
formuló voto concurrente en relación con la interpretación conforme a que
se refiere la presente tesis; José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena, quien reservó su derecho para formular voto concurrente.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas
Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LIX/2016 (10a.)

CONTRATO DE SEGURO. LA FALTA DE SOLICITUD DE


RECTIFICACIÓN DE LA PÓLIZA NO LIBERA A LA ASEGURADORA
DEL CUMPLIMIENTO DE SUS OBLIGACIONES. Dicha consecuencia es
contraria a los principios que rigen la Ley sobre el Contrato de Seguro,
pues de su artículo 50 se desprende que incluso en aquéllos casos en los
que el asegurado incurra en una omisión o inexacta declaración de los
hechos, la empresa aseguradora no podrá rescindir el contrato si provocó
dicho error, o conocía o debía conocer el hecho que no fue declarado, o
que aún cuando es obligación del asegurado comunicar a la empresa las
agravaciones esenciales que tenga el riesgo durante el curso del seguro,
si el asegurado no cumple con esa obligación, la empresa aseguradora no
podrá hacer uso de la cláusula que la libere de sus obligaciones, cuando
el incumplimiento no tenga influencia sobre el siniestro o sobre la
extensión de sus prestaciones. De ahí que si en esos supuestos en los
que concurre culpa por parte del asegurado, no procede la liberación de la
responsabilidad de la aseguradora, mucho menos cuando el cliente
cumplió con su obligación de proporcionar a la aseguradora la información
que ésta le requirió, y fue la aseguradora quien incumplió con su
obligación de asesorar debidamente al cliente.

Amparo directo en revisión 828/2015. **********. 2 de septiembre de


2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien
formuló voto concurrente, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena, quien reservó su derecho para formular voto concurrente.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas
Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LX/2016 (10a.)

JUICIO ORAL MERCANTIL. EL ARTÍCULO 1390 BIS DEL CÓDIGO DE


COMERCIO QUE NO PREVÉ EL DERECHO A UNA SEGUNDA
INSTANCIA, ES CONSTITUCIONAL. El precepto citado prevé que se
tramitarán en el juicio oral mercantil todas las contiendas cuya suerte
principal sea inferior a la que establece el artículo 1339 del Código de
Comercio para que un juicio sea apelable, sin que sean de tomarse en
consideración intereses y demás accesorios reclamados a la fecha de
interposición de la demanda, y que contra las resoluciones pronunciadas
en dicho juicio no procederá recurso ordinario alguno. Ahora bien, el
artículo 1390 Bis citado, al limitar el derecho a una segunda instancia es
constitucional, pues el legislador, al determinar que el juicio oral mercantil
es uniinstancial, no excluye el derecho a la doble instancia de forma
generalizada, sino que lo hace excepcionalmente, ya que dicha exclusión
sólo es aplicable a los juicios orales mercantiles, además de que persigue
una finalidad constitucionalmente legítima, pues tiene por objeto hacer el
procedimiento mercantil más ágil y eficiente, lo que implica el respeto al
principio de una administración de justicia pronta y expedita, contenido en
el artículo 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, imprimiéndole celeridad al proceso judicial correspondiente, y
encaminada a fomentar la economía procesal y la eficacia de la rama
judicial. Además, es una medida razonable, ya que responde a la mayor
urgencia de obtener una decisión definitiva y evita los costos que implican
juicios prolongados y complejos, ya que tener que agotar necesariamente
varias instancias puede provocar demora y más gastos en perjuicio del
patrimonio de las partes, lo cual generalmente no se justifica cuando el
asunto es de poca cuantía. Asimismo, genera un criterio de selección
para el control de legalidad por órganos jurisdiccionales superiores, para
que éstos se concentren en resolver asuntos que se consideran más
complejos. De ahí que se trate de una medida proporcional, pues aun
limitándose el derecho a la segunda instancia, no se priva al gobernado
del acceso a la justicia ni se le deja en estado de indefensión, ya que en
el procedimiento uniinstancial también deben respetarse las formalidades
esenciales del proceso, y se tiene la posibilidad de impugnar dicha
resolución mediante el juicio de amparo, de manera que, aun cuando no
exista en la jurisdicción ordinaria un recurso disponible para impugnar las
resoluciones adversas, existe un recurso extraordinario. Finalmente, la
exclusión de que se trata obedece a criterios objetivos, pues el factor
cuantía, como elemento para determinar la procedencia del juicio oral
mercantil, constituye un quántum objetivo que no se fundamenta en los
ingresos ni en la condición social de las personas, sino en el monto global
de la pretensión.

Amparo directo en revisión 3233/2014. **********. 4 de febrero de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas, Jorge Mario Pardo Rebolledo y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío Díaz, quien
formuló voto particular. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXI/2016 (10a.)

INSTITUCIONES DE CRÉDITO. LA INFORMACIÓN QUE DEBE


CONTENER EL ESTADO DE CUENTA CERTIFICADO POR EL
CONTADOR FACULTADO POR LA INSTITUCIÓN BANCARIA A QUE
SE REFIERE EL ARTÍCULO 68 DE LA LEY RELATIVA, PUEDE
DESVIRTUARSE CON LOS COMPROBANTES Y ESTADOS DE
CUENTA QUE TENGA EL DEUDOR. El artículo citado refiere, en forma
detallada, la información que debe contener el estado de cuenta
certificado por el contador facultado por la institución bancaria; de ahí que
dicho estado de cuenta debe exponer el historial del crédito de que se
trate, esto es, especificar la fecha y el monto de cada una de las
disposiciones de capital que haya realizado el deudor, y precisar la tasa
de interés aplicada a cada monto de capital durante cada periodo de
intereses, especificando el monto de intereses que les correspondió, así
como cada uno de los pagos que el deudor fue efectuando, precisando la
fecha de éstos y los saldos obtenidos, ya que sólo de esa manera se le
dan elementos al deudor para desvirtuar su contenido. Asimismo, en
aquellos casos en que el deudor haya recibido los recursos directamente
del banco y haya sido documentado en avisos de disposición firmados por
éste o su representante, el estado de cuenta certificado debe
acompañarse de dichos avisos, que deben estar en poder del banco y
que acreditan plenamente la disposición de los recursos. Ahora bien,
cuando la disposición del crédito se realice mediante el pago a terceros
por la prestación de servicios o la adquisición de artículos de consumo, a
través de tarjetas u otros instrumentos, el deudor no necesariamente
suscribe un documento, pues algunas disposiciones pueden hacerse vía
electrónica o, incluso, telefónica; en estos casos, basta que en el estado
de cuenta se precisen la fecha y el monto de cada disposición, sin que
sea necesario que se indiquen “circunstancias de modo, tiempo y lugar”
de cada operación –pues esa información debe constar en los estados de
cuenta que expidió el banco al deudor durante la vigencia del crédito con
base en el contrato–, para que el deudor pueda desvirtuarlos; así, éste
puede ofrecer pruebas para desvirtuar la información que contiene el
estado de cuenta certificado por el contador facultado por el banco, pues
así como el banco tiene obligación de conservar los comprobantes o
registros de todas las disposiciones del crédito, el deudor también tiene la
obligación de conservar la documentación relativa a cada disposición, los
estados de cuenta que emite el banco relacionados con los movimientos
del crédito, y los comprobantes de cada pago efectuado; por lo que
cuenta con sendas pruebas para refutar la información contenida en el
estado aludido, en caso de ser errónea, incluyendo la posibilidad de
ofrecer como prueba la contabilidad llevada por la institución de crédito,
en cuyo caso, ésta tendrá que exhibir en juicio el sustento de las
disposiciones indicadas en el estado de cuenta (sean comprobantes de
disposición, vouchers o registros electrónicos). Por tanto, es incorrecto
que la única prueba que tiene a su favor el deudor para desvirtuar el
estado de cuenta sea la ratificación del contador que lo certificó, porque la
presunción de validez de aquél no deriva del dicho del contador, sino de
la información contenida en el documento, que debe explicarse por sí
misma, estar respaldada y ser exhibida en el juicio.

Amparo directo en revisión 2566/2015. **********. 21 de octubre de


2015. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María
Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXII/2016 (10a.)

INSTITUCIONES DE CRÉDITO. LA CERTIFICACIÓN DEL CONTADOR


FACULTADO POR LA INSTITUCIÓN BANCARIA AL CONTRATO DE
CRÉDITO Y ESTADO DE CUENTA, NO LOS CONVIERTE EN
DOCUMENTOS PÚBLICOS. El hecho de que el artículo 68 de la Ley de
Instituciones de Crédito establezca que los contratos de crédito, junto con
los estados de cuenta certificados por el contador facultado por la
institución bancaria serán títulos ejecutivos, no implica que constituyan
documentos públicos, pues éstos sólo puede emitirlos un funcionario
público en ejercicio de sus funciones, calidad que no se le atribuye al
contador. Por otra parte, los particulares sí pueden emitir títulos
ejecutivos, como lo son los títulos de crédito y el contrato de crédito
acompañado del estado de cuenta certificado por el contador facultado
por la institución de crédito.

Amparo directo en revisión 2566/2015. **********. 21 de octubre de


2015. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María
Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXIII/2016 (10a.)

IGUALDAD ENTRE CÓNYUGES. CONTENIDO Y ALCANCES. A partir


del parámetro de constitucionalidad delimitado por el artículo 1o. de la
Constitución Federal, es posible identificar la obligación del Estado
mexicano de garantizar la igualdad entre cónyuges, no únicamente
respecto de los derechos y responsabilidades durante el matrimonio, sino
también una vez disuelto el mismo. Este imperativo está explícitamente
contenido en los artículos 17 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos y 23 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos. En efecto, además de reconocer el papel central de la familia en
la existencia de una persona y en la sociedad en general, las
disposiciones citadas proclaman la igualdad de derechos y la adecuada
equivalencia de responsabilidades de los cónyuges no solamente durante
el vínculo matrimonial sino también en los arreglos relativos a una
eventual separación legal. En este sentido, está prohibido todo trato
discriminatorio en lo que respecta a los motivos y los procedimientos de
separación o de divorcio, incluidos los gastos de manutención y la
pensión alimenticia, lo que desemboca en el deber del Estado de velar
por que el divorcio no constituya un factor de empobrecimiento ni un
obstáculo para el ejercicio de los derechos humanos, específicamente el
derecho humano a un nivel de vida adecuado en relación con la obtención
de los alimentos.

Amparo directo en revisión 1340/2015. 7 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien formuló voto
concurrente, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco y
Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXIV/2016 (10a.)

DIVORCIO. TIENE DERECHO AL PAGO DE ALIMENTOS AQUEL EX


CÓNYUGE QUE, POR HABER ASUMIDO EN MAYOR MEDIDA QUE EL
OTRO LAS CARGAS DOMÉSTICAS Y DE CUIDADO DURANTE EL
MATRIMONIO, SE ENCUENTRA EN UNA DESVENTAJA ECONÓMICA
QUE INCIDA EN SU CAPACIDAD PARA SUFRAGAR SUS
NECESIDADES BÁSICAS (INTERPRETACIÓN CONFORME DEL
ARTÍCULO 476 TER DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS
FAMILIARES DEL ESTADO DE HIDALGO). Según la literalidad del
artículo 476 Ter del Código de Procedimientos Familiares del Estado de
Hidalgo, en los casos de divorcio, el juez podrá decretar el pago de
alimentos a favor del cónyuge que esté incapacitado para obtener lo
necesario para su subsistencia y carezca de bienes inmuebles. Esta
obligación cesará cuando el acreedor incapacitado contraiga nuevas
nupcias; se una en concubinato o mantenga una relación de pareja;
recupere la capacidad; o sobrevenga el nacimiento de un hijo de persona
distinta al deudor. Ahora bien, a fin de respetar el derecho humano de
igualdad y no discriminación, este precepto debe interpretarse conforme a
los artículos 1o. y 4o. de la Constitución Federal, de forma tal que en la
porción normativa que hace referencia a que el cónyuge solicitante del
pago de alimentos “esté incapacitado para obtener lo necesario para su
subsistencia”, se entienda incluido el supuesto del cónyuge que, por
haber asumido en mayor medida que el otro las cargas domésticas y de
cuidado, se encuentre en una desventaja económica tal que incida en su
capacidad para hacerse de medios suficientes para sufragar sus
necesidades y, consecuentemente, le impida el acceso a un nivel de vida
adecuado. Lo anterior, toda vez que la eventual vulnerabilidad generada
durante el matrimonio a partir de determinada división del trabajo,
constituye una causa objetiva, real y legítima de necesidad alimentaria
que debe ser aliviada, en la medida de lo posible, por quien se benefició
directamente de dicho reparto de responsabilidades en la familia, de
conformidad con el mandato de igualdad de derechos y equivalencia de
responsabilidades de ambos esposos en caso de disolución del vínculo
conyugal.

Amparo directo en revisión 1340/2015. 7 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien formuló voto
concurrente, en el que se aparta de las consideraciones contenidas en la
presente tesis; José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco y
Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXV/2016 (10a.)

NON BIS IN IDEM. LA VIOLACIÓN A ESTE PRINCIPIO SE ACTUALIZA


CON LA CONCURRENCIA DE LA MISMA CONDUCTA TÍPICA
ATRIBUIDA AL INCULPADO EN DISTINTOS PROCESOS, AUN
CUANDO ESTÉ PREVISTA EN NORMAS DE DIFERENTES
ENTIDADES FEDERATIVAS O EN DISTINTOS FUEROS. Conforme a la
doctrina que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha elaborado del
principio non bis in idem derivado del artículo 23 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, que prohíbe el doble
juzgamiento a una persona en sus vertientes sustantiva o adjetiva, se
actualiza la transgresión a dicho principio cuando concurran tres
presupuestos de identidad: a) en el sujeto, b) en el hecho; y, c) en el
fundamento normativo. Respecto del último inciso, el fundamento jurídico
que describe y sanciona la conducta atribuida al inculpado no debe estar
necesariamente previsto en el mismo cuerpo normativo, pues puede
ocurrir que se instruya otro proceso penal a una persona por los mismos
hechos, pero previstos en una legislación diversa, correspondiente a otra
entidad federativa o en distinto fuero, lo que es compatible con la
interpretación que sobre ese principio ha realizado la Corte
Interamericana de Derechos Humanos en el caso Loayza Tamayo vs.
Perú, en relación con el artículo 8, numeral 4, de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos. De esta forma, los hechos
atribuidos a una persona, materia de procesamiento o decisión definitiva
(condena o absolución), no deben referirse exclusivamente a la misma
denominación de delito previsto en un solo ordenamiento o en uno de
distinto fuero, pues basta que se describa el mismo hecho punible para
que exista transgresión al principio non bis in idem.

Amparo directo en revisión 3731/2015. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXVI/2016 (10a.)

NON BIS IN IDEM. REPARACIÓN CONSTITUCIONAL DERIVADA DE


LA TRANSGRESIÓN A ESTE PRINCIPIO. Si bien las vertientes adjetiva-
procesal y sustantiva del principio de prohibición de doble juzgamiento se
refieren a que una persona no puede ser procesada ni sentenciada dos
veces por los mismos hechos que constituyan la misma conducta
tipificada como delito, y que esto puede ocurrir cuando esa conducta se
prevea en ordenamientos legales de distintos fueros, a partir de los cuales
se instruyen dos procesos al inculpado, la consecuencia posible a dicha
afectación como medio de reparación constitucional es la anulación de
uno de los procesos, pero no la absolución en ambos asuntos, ya que
dicho proceder generaría impunidad, lo cual es incompatible con los
propósitos garantistas del artículo 23 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos.

Amparo directo en revisión 3731/2015. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXVII/2016 (10a.)

NON BIS IN IDEM. NO SE ACTUALIZA UNA TRANSGRESIÓN A ESTE


PRINCIPIO CUANDO EN UNO DE LOS PROCESOS NO SE HIZO
PRONUNCIAMIENTO EN DEFINITIVA SOBRE LA EXISTENCIA DE
UNA CONDUCTA DELICTIVA O DE RESPONSABILIDAD PENAL. El
principio de prohibición de doble juzgamiento en su vertiente sustantiva,
se refiere a que una persona no puede ser sentenciada dos veces por los
mismos hechos que constituyen la misma conducta tipificada como delito
y que esto puede ocurrir cuando se prevea esa conducta en
ordenamientos legales de distintas entidades o fueros a partir de los
cuales se instruyen diversos procesos al inculpado. En ese sentido, si un
inculpado es procesado por los mismos hechos en dos procesos de
distinto fuero y la sentencia dictada en el primer asunto es absolutoria al
declarar la inconstitucionalidad de los preceptos que regulan el delito,
pero no se pronuncia en definitiva sobre la existencia de una conducta
delictiva o la responsabilidad penal, o algún otro tema que determinara la
imposibilidad de análisis del hecho, por ejemplo, que declarara la
insuficiencia o inverosimilitud de las pruebas existentes que llevaren a la
absolución del sentenciado y que impediría examinar ese evento,
mientras que la segunda sentencia sí se ocupó de esa situación y
concluyó en la existencia del delito y la intervención del inculpado en su
comisión, dicho proceder no trastoca la figura de la cosa juzgada, ya que
no subsistió otro pronunciamiento que generara un doble juzgamiento, en
la medida en que el inculpado sólo fue sancionado en una ocasión por los
hechos delictivos que se le imputaron, de modo que no se actualiza una
infracción al principio non bis in idem, en su vertiente sustantiva.

Amparo directo en revisión 3731/2015. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXVIII/2016 (10a.)

DIVORCIO. LA ACCIÓN PARA EL PAGO DE LA COMPENSACIÓN DE


HASTA EL 50% DEL VALOR DE LOS BIENES QUE SE ADQUIRIERON
DURANTE EL MATRIMONIO PUEDE EJERCERSE EN LA DEMANDA
DE DIVORCIO O DE FORMA AUTÓNOMA (ARTÍCULO 342-A, DEL
CÓDIGO CIVIL PARA EL ESTADO DE GUANAJUATO). De una
interpretación sistemática de los artículos 323 y 342-A del Código Civil
para el Estado de Guanajuato, así como de los artículos 822 y 852 del
Código de Procedimientos Civiles de la misma entidad federativa, se
desprende que la acción consistente en el pago de la compensación a
favor del cónyuge que durante el matrimonio se dedicó
preponderantemente al desempeño del trabajo del hogar y, en su caso, al
cuidado de los hijos, puede ejercerse desde la demanda de divorcio o de
forma autónoma a través de una demanda posterior. En efecto, el hecho
de que la redacción del artículo 342-A establezca que “en la demanda de
divorcio”, el cónyuge podrá demandar al otro la compensación, no implica
que la presentación de la referida demanda sea el único momento
procesal para ello, tan es así que este mecanismo puede ser reconvenido.
La formulación del precepto atiende, más bien, a que el derecho del
cónyuge que realizó el trabajo doméstico a ser resarcido y compensado
se hace exigible al momento de disolverse el vínculo matrimonial y no
antes. Es decir, no puede haber compensación si no hay divorcio. Sin
embargo, de ello no se sigue que este mecanismo resarcitorio no pueda
exigirse mediante una acción autónoma.

Amparo directo en revisión 5702/2014. 11 de noviembre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco y Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXIX/2016 (10a.)

ALIMENTOS. LA OBLIGACIÓN DE PROPORCIONARLOS NO SE


EXTINGUE, NECESARIAMENTE, CUANDO EL ACREEDOR
ALIMENTARIO ALCANZA LA MAYORÍA DE EDAD Y EXISTE
DISPARIDAD ENTRE ÉSTA Y EL GRADO ESCOLAR QUE CURSA.
Considerando que el sentido de la institución alimentaria consiste en
garantizar a los acreedores la posibilidad de atravesar una etapa
económicamente inactiva en la que se alleguen de los recursos
necesarios que les darán una base para desarrollar sus planes de vida, lo
que les permitirá acceder a un nivel de vida adecuado y digno, y que el
principio de proporcionalidad rige en tal institución, puede concluirse que
la obligación de proporcionar alimentos no se extingue, necesariamente,
cuando el acreedor alcanza la mayoría de edad y hay disparidad entre
ésta y el grado escolar que cursa debido a su falta de aplicación al
estudio, ya que el juez debe valorar las razones que hayan dado motivo a
ésta, porque pueden resultar ajenas a su voluntad (como el estado de
salud y causas materiales, familiares o económicas). En esas
condiciones, si la necesidad del acreedor alimentista atiende a la de
realizar estudios y éste no se aplica a ello, es claro que la obligación
alimentaria resulta desproporcional, pues el estado de necesidad no se
actualiza. Por tanto, a fin de determinar si el estado de necesidad sigue
vigente, se considerarán las razones por las que el acreedor no se aplicó
al estudio, por lo que el juzgador tendrá que valorar cada caso en
particular.

Amparo directo en revisión 2417/2014. 7 de octubre de 2015. Mayoría


de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Olga
Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Disidentes: José Ramón Cossío Díaz y Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Ana
Carolina Cienfuegos Posada.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dos de marzo de dos mil dieciséis.
Ciudad de México, tres de marzo de dos mil dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXX/2016 (10a.)

TRÁNSITO DE VEHÍCULOS. EL ARTÍCULO 73, FRACCIÓN V, DE LA


LEY DE VIALIDAD DEL ESTADO DE AGUASCALIENTES, QUE
CONTIENE LA EXPRESIÓN “LA DISTANCIA QUE GARANTICE LA
DETENCIÓN OPORTUNA EN EL SUPUESTO DE QUE ÉSTE FRENE
INTEMPESTIVAMENTE”, NO VULNERA EL PRINCIPIO DE
SEGURIDAD JURÍDICA. El precepto citado establece que los
conductores deberán conservar, respecto del vehículo que los preceda, la
distancia que garantice la detención oportuna en el supuesto de que éste
frene intempestivamente, para lo cual tomará en cuenta la velocidad y las
condiciones de la vía en que transitan; ahora bien, la expresión “la
distancia que garantice la detención oportuna en el supuesto de que éste
frene intempestivamente” no vulnera el principio de seguridad jurídica
previsto en el artículo 14 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, debido a que el precepto sí establece con claridad la conducta
que debe observar el gobernado cuando conduzca un vehículo automotor,
ya que no sólo dispone que debe conservarse la distancia que garantice
la detención oportuna del vehículo, sino que además precisa que para
determinar esa distancia, se tomará en cuenta: 1) la velocidad a la que se
desplaza; y, 2) las condiciones de la vía en que transita. Así, es evidente
que el legislador señaló claramente la conducta que debe observarse y
los elementos objetivos que deben considerarse para determinarla, pues
resultaría una labor imposible para el legislador precisar todos los
supuestos posibles de acontecer en la práctica, señalando en cada uno la
distancia a la que debe mantenerse un vehículo de otro, ya que esto
depende de la velocidad y las condiciones de la vía; sin embargo, se
advierte que con el establecimiento de dichos elementos objetivos, el
conductor puede determinar con certeza cuál es la distancia que debe
conservar respecto del vehículo que circule delante.

Amparo directo en revisión 5902/2014. 10 de junio de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien reservó su
derecho para formular voto concurrente, José Ramón Cossío Díaz, quien
reservó su derecho para formular voto concurrente, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Nínive
Ileana Penagos Robles.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXI/2016 (10a.)

TRÁNSITO DE VEHÍCULOS. EL ARTÍCULO 73, FRACCIÓN V, DE LA


LEY DE VIALIDAD DEL ESTADO DE AGUASCALIENTES, NO
VULNERA EL PRINCIPIO DE TAXATIVIDAD PREVISTO EN EL
ARTÍCULO 14 DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL. El artículo 73,
fracción V, de la Ley de Vialidad del Estado de Aguascalientes, al
establecer que los conductores deberán observar la disposición relativa a
conservar, respecto del vehículo que los preceda, la distancia que
garantice la detención oportuna en el supuesto de que éste frene
intempestivamente, para lo cual tomará en cuenta la velocidad y las
condiciones de la vía en que transita, no vulnera el principio de
taxatividad, ya que el mandato de taxatividad sólo puede obligar al
legislador a una determinación suficiente y no a la mayor precisión
imaginable. Desde esta perspectiva, la taxatividad tiene un matiz
consistente en que los textos legales que contienen las normas penales
únicamente deben describir con suficiente precisión qué conductas están
prohibidas y qué sanciones se impondrán a quienes incurran en ellas; la
exigencia en cuanto a la claridad y precisión es gradual. En este sentido,
el término “la distancia que garantice la detención oportuna en el supuesto
de que éste frene intempestivamente”, sí cuenta con una definición o
connotación específica, pues se entiende un espacio o intervalo entre dos
vehículos que una persona, por medio de sus sentidos y sin
conocimientos especializados, guarde de manera prudente respecto del
vehículo que le precede, puesto que el legislador se vería imposibilitado a
estipular todas las distancias posibles tomando en cuenta los factores
como tipo de suelo, velocidad y hasta las propias condiciones del vehículo
de que se trate. Por lo que al ser suficientemente clara y precisa dicha
expresión para entender su significado, se puede afirmar que dicha
disposición legal no sólo es compatible con su tenor, sino de igual manera
que su significado se encuentra dentro de su sentido literal posible y, por
tanto, que no es necesaria la utilización de ninguna técnica de integración
de normas como son la analogía y la mayoría de razón; de ahí que no se
transgrede la exacta aplicación de la ley penal (ni en su vertiente de
mandato de taxatividad).

Amparo directo en revisión 5902/2014. 10 de junio de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien reservó su
derecho para formular voto concurrente, José Ramón Cossío Díaz, quien
reservó su derecho para formular voto concurrente, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Nínive
Ileana Penagos Robles.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXII/2016 (10a.)

LEYES PENALES EN BLANCO. PROBLEMÁTICA DE


CONSTITUCIONALIDAD DE AQUÉLLAS. El problema de
constitucionalidad de las denominadas “leyes penales en blanco” no se
plantea cuando la norma penal remite a otra de naturaleza extrapenal en
sentido formal y material (para quedar plenamente integrada), sino
únicamente cuando se reenvía a otra norma que no tiene el carácter de
ley en sentido formal, dando así entrada en la descripción típica a
regulaciones de procedencia reglamentaria o hasta meramente
administrativa y, en consecuencia, a una participación del Poder Ejecutivo
en la configuración de los tipos penales.

Amparo directo en revisión 5902/2014. 10 de junio de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien reservó su
derecho para formular voto concurrente, José Ramón Cossío Díaz, quien
reservó su derecho para formular voto concurrente, Jorge Mario Pardo
Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Nínive
Ileana Penagos Robles.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXIII/2016 (10a.)

REVISIÓN ADHESIVA. LA OMISIÓN EN EL AUTO DE ADMISIÓN DEL


AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN DE HACER SABER A LA TERCERO
INTERESADA, SU DERECHO PARA INTERPONER AQUEL RECURSO,
NO AFECTA SU VALIDEZ. Si bien es conveniente que en el auto de
admisión del amparo directo en revisión, se señale expresamente a la
parte tercero interesada que tiene cinco días para interponer el recurso de
revisión adhesiva, ello no es indispensable, pues la precisión de dicho
derecho está expresamente prevista en el artículo 82 de la Ley de
Amparo. Por tanto, la omisión en el auto de admisión de hacer un
señalamiento como el referido, no puede afectar su validez, ya que
aunque dicha mención es recomendable, no existe precepto legal alguno
que ordene su inclusión en el acuerdo de admisión, ni menos aún que
sancione la falta de esa precisión, por lo que basta que el referido
acuerdo sea notificado a las partes para que estén en condiciones de
ejercer los derechos relativos.

Recurso de reclamación 460/2015. **********. 19 de agosto de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Guillermo Pablo
López Andrade.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXIV/2016 (10a.)

PÉRDIDA DE LA PATRIA POTESTAD. LA CAUSAL SE ACTUALIZA SI


EL OBLIGADO SE ABSTIENE INJUSTIFICADAMENTE DE CUBRIR
SUS DEBERES ALIMENTARIOS POR MÁS DE DOS MESES, AUNQUE
POSTERIORMENTE CUMPLA CON EL PAGO DE ALIMENTOS O
MUESTRE VOLUNTAD PARA HACERLO (ARTÍCULO 4.224,
FRACCIÓN II, DEL CÓDIGO CIVIL DEL ESTADO DE MÉXICO). La
pérdida de la patria potestad por el abandono de los deberes alimentarios
prevista en el precepto citado, se actualiza cuando el obligado alimentario
se abstiene injustificadamente de cubrir las necesidades alimenticias del
acreedor durante más de dos meses, aun cuando posteriormente cumpla
con el pago de alimentos o muestre voluntad para hacerlo. Sostener lo
contrario equivaldría a permitir que quede al arbitrio del deudor
proporcionar alimentos por las cantidades y en los tiempos que estime
necesarios, y a que baste un atisbo de voluntad o muestra de disposición
ulterior para eximirlo de las consecuencias de su omisión. Dicha posición
vulneraría la finalidad de prevención y conservación de la integridad física
y moral de los descendientes que orienta la existencia de la disposición,
además de poner en entredicho el mandato de garantía reforzada de los
derechos de los menores, derivado del principio constitucional de velar
siempre por su interés superior.

Amparo directo en revisión 1236/2015. 28 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco y Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXV/2016 (10a.)

PÉRDIDA DE LA PATRIA POTESTAD POR INCUMPLIMIENTO DE LA


OBLIGACIÓN ALIMENTARIA POR MÁS DE DOS MESES. LA
GRAVEDAD DE ESA MEDIDA ESTÁ JUSTIFICADA POR EL
MANDATO DE GARANTÍA DE LOS DERECHOS DE LOS MENORES Y
SU INTERÉS SUPERIOR (ARTÍCULO 4.224, FRACCIÓN II, DEL
CÓDIGO CIVIL DEL ESTADO DE MÉXICO). La pérdida de la patria
potestad por el abandono de los deberes alimentarios prevista en el
artículo 4.224, fracción II, del Código Civil del Estado de México, se
actualiza cuando el obligado alimentario se abstiene injustificadamente de
cubrir las necesidades alimenticias del acreedor durante más de dos
meses. Ahora, si bien esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación reconoce que la pérdida de la patria potestad constituye una
medida grave, esa gravedad es directamente proporcional a la
importancia de la satisfacción de las necesidades de subsistencia y
desarrollo de los niños, cuyos derechos alimentarios constituyen el pilar
de su protección. Por tanto, la justificación de la medida descansa en el
mandato de garantía de los derechos de los menores derivada del artículo
4o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (interés
superior del menor), que se ve reforzada cuando la misma legislación
prevé que quien haya perdido la patria potestad por el abandono de sus
deberes alimentarios podrá recuperarla cuando compruebe que ha
cumplido con éstos por más de un año y, en su caso, otorgue garantía
anual para ello. En este sentido, la propia disposición aminora la gravedad
de la medida al permitir su reversión, pero sin dejar expuesto al menor
involucrado.

Amparo directo en revisión 1236/2015. 28 de octubre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretaria: Luz Helena Orozco y Villa.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXVI/2016 (10a.)

AGRAVIOS EN LA APELACIÓN. EL PLAZO DE 15 DÍAS PARA


FORMULARLOS QUE ESTABLECE EL ARTÍCULO 319 DEL CÓDIGO
DE PROCEDIMIENTOS PENALES PARA EL ESTADO DE SONORA,
NO VULNERA EL DERECHO FUNDAMENTAL A UNA DEFENSA
ADECUADA. El precepto citado prevé el trámite que debe observarse al
sustanciarse el recurso de apelación ante el tribunal de segunda instancia
en el Estado de Sonora, que fija un primer término al apelante para
ofrecer y otro para desahogar pruebas, y señala, que si no se ofrecen
pruebas, o una vez desahogadas las que se hubiesen admitido, se abrirá
un periodo de quince días para que el recurrente exprese agravios;
asimismo, brinda un tratamiento diferenciador frente al hecho de no
exponer agravios atendiendo al sujeto de la relación procesal que
interpone el recurso, de modo que si los recurrentes fueran el inculpado,
su defensor, los ofendidos o sus representantes, se citará para oír
sentencia, pero si el apelante es exclusivamente el Ministerio Público, el
medio de impugnación será declarado desierto, y esta consecuencia
conlleva aparejada la confirmación de la sentencia apelada. Ahora bien, el
artículo 319 del Código de Procedimientos Penales para el Estado de
Sonora, no viola el derecho fundamental a una defensa adecuada, por el
contrario, al prever la posibilidad de que el inculpado o su defensa formule
agravios para ser analizados en el recurso interpuesto una vez que ha
vencido el plazo para promover pruebas o se han desahogado éstas,
maximiza el ejercicio de ese derecho fundamental, especialmente, a
contar con una asistencia efectiva, pues el defensor que ha sido evaluado
por la autoridad judicial para representar los intereses del inculpado en
esa instancia, puede exponer sus motivos de inconformidad en el plazo
establecido legalmente, lo que incide además en la garantía de contar con
un debido proceso.

Amparo directo en revisión 5816/2014. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXVII/2016 (10a.)

AGRAVIOS EN LA APELACIÓN. EL PLAZO DE QUINCE DÍAS PARA


FORMULARLOS PREVISTO EN EL ARTÍCULO 319 DEL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTOS PENALES PARA EL ESTADO DE SONORA,
OBEDECE A UN PRINCIPIO DE RAZONABILIDAD JURÍDICA. El Pleno
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al resolver la solicitud de
modificación de jurisprudencia 11/2013, de la que derivó la jurisprudencia
P./J.49/2014 (10a.)¹, determinó que el derecho fundamental de acceso a
la justicia conlleva el deber de los órganos jurisdiccionales de garantizar la
efectividad de los recursos o medios de defensa previstos en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la ley, por lo
que no basta que los medios de impugnación –como ocurre en el
recurso de apelación– estén previstos legalmente, sino que se requiere
que se eliminen para su admisión y tramitación cualquier cúmulo de
requisitos o formalismos técnicos excesivos o carentes de razonabilidad
respecto del fin legítimo que persiguen. Bajo esa lógica, el término de
quince días para formular agravios en la apelación, previsto en el artículo
319 del Código de Procedimientos Penales para el Estado de Sonora,
obedece a un principio de razonabilidad jurídica, pues tiene como
propósito que el apelante esgrima sus motivos de inconformidad con la
sentencia recurrida en un tiempo razonable, tomando en cuenta que el o
los recurrentes conocen el proceso instruido y el contenido de la
sentencia, aunado a que previamente se ha agotado un periodo de
ofrecimiento y desahogo de pruebas en segunda instancia, lo que permite
afirmar que se trata de un plazo computado en días hábiles como deriva
de los artículos 75 y 76 del propio ordenamiento, el cual es suficiente para
desglosar las consideraciones jurídicas que los inconformes estimen
pertinentes y que puedan considerarse al resolverse el recurso de
apelación; todo ello, en un ámbito de igualdad procesal, pues dicho plazo
opera sin distinción de quién sea la parte recurrente de la relación
procesal.

Amparo directo en revisión 5816/2014. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

Nota: La ejecutoria relativa a la solicitud de modificación de jurisprudencia


11/2013 citada, aparece publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de
la Federación, Décima Época, Libro 14, Tomo I, enero de 2015, página
167.
¹La jurisprudencia P./J. 49/2014 (10a.) citada, aparece publicada en el
Semanario Judicial de la Federación del viernes 3 de octubre de 2014 a
las 9:30 horas y en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación,
Décima Época, Libro 11, Tomo I, octubre de 2014, página 35, con el título
y subtítulo: “RECURSO DE REVISIÓN. ES IMPROCEDENTE CONTRA
SENTENCIAS DECLARADAS EJECUTORIADAS, SALVO QUE LA
DECLARACIÓN RELATIVA SE REALICE CON POSTERIORIDAD A LA
INTERPOSICIÓN OPORTUNA DE AQUÉL O ANTES DE QUE FENEZCA
EL PLAZO PARA ELLO.”

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXVIII/2016 (10a.)

REGULARIDAD CONSTITUCIONAL DE UNA NORMA ORDINARIA. NO


ES VÁLIDO REALIZAR EL EXAMEN RESPECTIVO A PARTIR DE SU
ADECUACIÓN A ALGUNA LEGISLACIÓN SECUNDARIA. El análisis
sobre la regularidad constitucional de una norma se efectúa atendiendo al
contenido legal impugnado y su compulsa con los preceptos de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como con los
derechos fundamentales que ésta y los tratados internacionales de los
que México es parte tutelan. De ahí que no es válido evaluar la
constitucionalidad de una norma ordinaria a partir de su adecuación a
alguna legislación secundaria, porque ello condicionaría la
constitucionalidad de un ordenamiento legal a la calificación de los
factores asumidos por el legislador ordinario para emitir sus leyes
secundarias en detrimento del principio de supremacía constitucional, lo
que es inaceptable en nuestro sistema jurídico.

Amparo directo en revisión 5816/2014. 2 de diciembre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario:
Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha nueve de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diez de marzo de dos mil dieciséis. Doy
fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXIX/2016 (10a.)

EXTINCIÓN DE DOMINIO. PARA EL EJERCICIO DE LA ACCIÓN CON


BASE EN QUE EL BIEN ES “PRODUCTO” DEL DELITO, NO SE
REQUIERE QUE EL PROPIETARIO AFECTADO HAYA ESTADO
INVOLUCRADO EN LA COMISIÓN DE LOS HECHOS ILÍCITOS.
Respecto de la fracción II del artículo 22 constitucional, esta Primera Sala
ha sostenido que contiene cuatro incisos, a saber: el inciso a) que regula
la premisa general, esto es, establece que procede la acción de extinción
de dominio respecto de bienes que hayan sido instrumento, objeto o
producto del delito; el inciso b) se refiere a casos en los que los bienes
son utilizados o destinados a ocultar o mezclar bienes producto del delito;
el inciso c) corresponde al caso en que los bienes estén siendo utilizados
para la comisión de delitos por un tercero, si su dueño tuvo conocimiento
de ello y, finalmente, el inciso d) regula el caso de los bienes que estando
intitulados a nombre de terceros, existan elementos suficientes para
determinar que son producto de delitos patrimoniales o de delincuencia
organizada y el acusado por esos delitos se comporte como dueño. De
manera que los elementos para la procedencia de la acción son diferentes
en cada caso, según la causa que origine la pretensión de extinción del
dominio. En ese entendido, no es correcto que si el Ministerio Público
ejerce la acción con base en que el bien es “producto” del delito, sólo
puede ser ejercida en contra del procesado por la comisión del delito, ya
que se pueden presentar adicionalmente las hipótesis previstas en los
incisos c) o d), las cuales tienen lugar cuando el propietario del bien
objeto de la acción es una persona distinta a quien usaba el bien y está
siendo procesado por la participación en los hechos ilícitos que determina
el artículo 22 constitucional. Esto es, en todas las hipótesis a que se
refiere el inciso a) de dicho artículo –bien producto, objeto o instrumento
del delito-, puede presentarse adicionalmente alguna de las hipótesis
referidas en los incisos c) o d), es decir, que quien aparezca como
propietario del bien sea una persona distinta de la que participó en la
comisión del hecho ilícito; en cuyo caso, el Ministerio Público tendrá una
carga de la prueba adicional, puesto que tendrá que aportar indicios que
razonablemente prueben que el propietario del bien tuvo conocimiento o
debió haber tenido conocimiento de la vinculación de su bien con el hecho
ilícito. La interpretación contraria haría nugatoria la figura de extinción de
dominio, puesto que bastaría que los miembros de la delincuencia
organizada pusieran a nombre de terceros los bienes que adquieren con
los recursos de sus actividades ilícitas para evitar la procedencia de la
acción, lo cual es justamente lo que la extinción de dominio pretende
evitar.

Amparo directo 68/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

Amparo directo 69/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.
LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE
ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXX/2016 (10a.)

EXTINCIÓN DE DOMINIO. LA PRESUNCIÓN DERIVADA DE LA


INSCRIPCIÓN EN EL REGISTRO PÚBLICO DE LA PROPIEDAD QUE
VERSA SOBRE LA TITULARIDAD DEL INMUEBLE ES IURIS TANTUM,
POR LO QUE PUEDE DESVIRTUARSE SI SE DEMUESTRA QUE LA
ADQUISICIÓN SE REALIZÓ CON RECURSOS DE PROCEDENCIA
ILÍCITA DE UN TERCERO. El artículo 3010 del Código Civil Federal
prevé una presunción de que todo derecho debidamente inscrito en el
Registro Público de la Propiedad existe y que pertenece a su titular
registral, la cual da certeza al ordenamiento jurídico respecto de la
propiedad de los bienes inmuebles, en especial para que los terceros de
buena fe puedan estar ciertos del derecho del titular registral; sin
embargo, dicha presunción versa exclusivamente sobre la titularidad del
inmueble, por lo que no impide que el acto jurídico que dio lugar a esa
transmisión de propiedad pueda impugnarse o demostrarse que la
adquisición se realizó con recursos de procedencia ilícita de un tercero.
De ahí que tanto la presunción que brinda el Registro Público de la
Propiedad, como la que deriva del derecho de accesión son iuris tantum,
por lo cual el artículo 22 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, autoriza desvirtuarlas cuando existan elementos suficientes
para acreditar que el verdadero dueño del inmueble registrado es una
tercera persona y sea producto de los hechos ilícitos constitutivos de los
delitos especificados en dicho precepto constitucional, pues el
Constituyente pretende sancionar el caso de los prestanombres o
testaferros.

Amparo directo 68/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

Amparo directo 69/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXXI/2016 (10a.)

EXTINCIÓN DE DOMINIO. NO EXISTE APLICACIÓN RETROACTIVA


DE LA LEY DE LA MATERIA, SI LOS HECHOS ILÍCITOS QUE
ORIGINAN LA ACCIÓN RELATIVA SE COMETIERON DURANTE SU
VIGENCIA. Lo que debe tomarse en cuenta para determinar si hay o no
aplicación retroactiva de la ley, es la fecha en la que se realizan los
hechos ilícitos que originan la acción de extinción de dominio, y no en la
que se adquiere la propiedad del bien objeto de dicha acción,
precisamente porque la adquisición de la propiedad de un bien no está
prohibida por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ni
por la normatividad aplicable, es decir, dicha acción no busca sancionar o
impedir la adquisición de bienes; lo que persigue es privar a la
delincuencia organizada de su patrimonio, siempre y cuando se acredite
alguno de los delitos previstos en la normativa aplicable. Esto es, la
extinción de dominio es una consecuencia de dichos hechos ilícitos, que
son constitutivos de delitos y que están sancionados por la ley penal con
la finalidad de debilitar a la delincuencia organizada en su patrimonio, y
privarla de los beneficios económicos que obtiene mediante las conductas
ilícitas mencionadas. De ahí que lo relevante no es que la Ley Federal de
Extinción de Dominio haya estado vigente en la fecha en que se adquirió
el bien, sino en la fecha en que los hechos ilícitos se cometieron, siempre
y cuando ya hubieran estado tipificados como delitos.

Amparo directo 68/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

Amparo directo 69/2014. 26 de agosto de 2015. Unanimidad de cuatro


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Jorge Mario
Pardo Rebolledo. Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXXII/2016 (10a.)

DETERMINACIÓN PRESUNTIVA DE CONTRIBUCIONES. LOS


ARTÍCULOS 55, FRACCIONES I Y II, Y 59, FRACCIÓN III, DEL
CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN, NO VULNERAN EL PRINCIPIO
DE PRESUNCIÓN DE INOCENCIA. De la redacción de las normas
aludidas se desprende que sus destinatarios primigenios son las
autoridades fiscales y los contribuyentes, pues dadas las hipótesis
previstas en el artículo 55, fracciones I y II –como por ejemplo, que el
contribuyente omita presentar una declaración y no cuente con libros y
registros de contabilidad–, será menester que la autoridad tributaria
aplique una serie de presunciones para determinar el monto de la
contribución omitida, teniendo el contribuyente el derecho reconocido en
ley de demostrar lo contrario. Toda vez que la fracción III del artículo 59
contiene una presunción, el legislador estableció el siguiente mecanismo
para su operatividad: si el contribuyente tiene depósitos en una cuenta
bancaria que no correspondan con los registros de contabilidad que está
obligado a llevar, éstos deben calificarse como ingresos y el valor de
actos o actividades por los que se deben pagar contribuciones. Ahora
bien, si dicho mecanismo de cálculo fue ideado esencialmente para
efectos fiscales, entonces no puede violar un principio propio del derecho
penal, como lo es el de presunción de inocencia; en todo caso, a quien
corresponde respetar el derecho fundamental a la presunción de
inocencia es al juez penal, con independencia de que el órgano acusador
se prevalga o no de las leyes tributarias para tener por acreditados los
elementos del tipo.

Amparo directo en revisión 2814/2015. 21 de octubre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés
Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXXIII/2016 (10a.)

DETERMINACIÓN PRESUNTIVA DE CONTRIBUCIONES. CUANDO


SON APLICADOS EN EL PROCESO PENAL, LOS ARTÍCULOS 55,
FRACCIONES I Y II, Y 59, FRACCIÓN III, DEL CÓDIGO FISCAL DE LA
FEDERACIÓN, NO VIOLAN EL PRINCIPIO DE PRESUNCIÓN DE
INOCENCIA, EN SU VERTIENTE DE REGLA DE TRATAMIENTO. Esta
Primera Sala ha sostenido en jurisprudencia que una de las vertientes del
principio de presunción de inocencia se manifiesta como "regla de trato
procesal" o "regla de tratamiento" del imputado, en la medida en que
comporta el derecho de toda persona a ser tratado como inocente en
tanto no se declare su culpabilidad por virtud de una sentencia
condenatoria. Dicha manifestación de la presunción de inocencia ordena
a los jueces impedir en la mayor medida posible la aplicación de medidas
que impliquen una equiparación de hecho entre imputado y culpable, es
decir, conlleva la prohibición de cualquier tipo de resolución judicial que
suponga la anticipación de la pena. Ahora bien, la aplicación de los
artículos 55, fracciones I y II, y 59, fracción III, del Código Fiscal de la
Federación, en el proceso penal, no violan el mencionado derecho,
porque el órgano acusador no se limita a considerar culpable de un delito
fiscal a una persona que no cumple con las obligaciones formales
previstas en tales numerales, pues es menester que rompa el estatus de
inocente que tiene el contribuyente y demostrar que en adición a ese
incumplimiento ha causado un perjuicio patrimonial al erario público, con
apoyo en una presunción cuyas premisas también debe probar,
consistentes en: i) la existencia de depósitos bancarios a favor del
contribuyente; y, ii) que estos no están registrados en la contabilidad que
está obligado a llevar. A su vez, este sistema autoriza al contribuyente a
demostrar lo contrario, para desestimar, desde la existencia de los
depósitos hechos a su favor, hasta la falta de su registro, pasando por el
deber de llevar determinados registros de contabilidad.

Amparo directo en revisión 2814/2015. 21 de octubre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés
Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXXIV/2016 (10a.)

DETERMINACIÓN PRESUNTIVA DE CONTRIBUCIONES. CUANDO


SON APLICADOS EN EL PROCESO PENAL, LOS ARTÍCULOS 55,
FRACCIONES I Y II, Y 59, FRACCIÓN III, DEL CÓDIGO FISCAL DE LA
FEDERACIÓN, NO VIOLAN EL PRINCIPIO DE PRESUNCIÓN DE
INOCENCIA, EN SU VERTIENTE DE REGLA PROBATORIA. La
presunción de inocencia, como regla probatoria, establece los requisitos
que debe cumplir la actividad probatoria y las características que debe
reunir cada uno de los medios de prueba aportados por el Ministerio
Público para poder considerar que existe prueba de cargo válida y destruir
así el estatus de inocente que tiene todo procesado. Desde este punto de
vista, la presunción de inocencia contiene implícita una regla que impone
la carga de la prueba, entendida en este contexto como la norma que
determina a qué parte le corresponde aportar las pruebas de cargo. En
este sentido, el hecho de que las pruebas de cargo sean suministradas al
proceso por la parte que tiene esa carga procesal, también constituye un
requisito de validez de éstas. Por su parte, el artículo 59, fracción III, del
Código Fiscal de la Federación, relacionado con el artículo 55, fracciones
I y II del mismo ordenamiento legal, contiene un medio probatorio
indirecto de la omisión de pago de contribuciones, el cual se estima que
es razonable y lógico, pues si se parte de la noción de que en términos
del artículo 31, fracción IV, de la Constitución General, es obligación de
los mexicanos contribuir al gasto público de forma equitativa y
proporcional en los términos que establezca la ley, se tiene que si el
gobernado tiene a su favor un ingreso que no ha sido registrado en la
contabilidad que está obligado a llevar, entonces debe pagar una
contribución, salvo prueba en contrario. Por tanto, este modo de probar,
previsto esencialmente para el derecho fiscal, bien puede ser invocado en
el proceso penal, sin que por ello viole el derecho fundamental a la
presunción de inocencia, en su vertiente de regla probatoria, porque no
exime al órgano de representación social de su obligación de realizar las
indagatorias correspondientes y de adminicular los elementos de prueba
que permitan demostrar la existencia de la responsabilidad; ni tampoco
releva al juzgador de su deber de analizar todas las pruebas aportadas al
proceso, tanto las que permitan acreditar la tipicidad de la conducta, como
las que desvirtúen tal extremo. Esto, en atención a que la presunción que
establece el artículo 59, fracción III, admite prueba en contrario.

Amparo directo en revisión 2814/2015. 21 de octubre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés
Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.
“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXXV/2016 (10a.)

DETERMINACIÓN PRESUNTIVA DE CONTRIBUCIONES. LOS


ARTÍCULOS 55, FRACCIONES I Y II, Y 59, FRACCIÓN III, DEL
CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN, QUE LA PREVÉN,
APLICADOS EN UN PROCESO PENAL, NO VIOLAN EL DERECHO
FUNDAMENTAL A LA PRESUNCIÓN DE INOCENCIA, EN SU
VERTIENTE DE ESTÁNDAR DE PRUEBA. La presunción de inocencia
como estándar probatorio puede entenderse como una regla que ordena
a los jueces absolver a los inculpados cuando durante el proceso no se
aporten pruebas de cargo suficientes para acreditar la existencia del delito
y la responsabilidad. Por su parte, los artículos 55, fracciones I y II, y 59,
fracción III, del Código Fiscal de la Federación, que prevén supuestos y
mecanismos para el cálculo presuntivo de una contribución, bien pueden
aplicarse en el proceso penal sin que por ello se viole el derecho
fundamental a la presunción de inocencia en su vertiente de estándar de
prueba, porque no relevan al juzgador de la obligación de cerciorarse, al
valorar el material probatorio disponible, de que estén acreditados los
elementos típicos y desvirtuadas las hipótesis de inocencia efectivamente
alegadas por la defensa en el juicio. Incluso, la presunción, no se erige
como el único medio de prueba para demostrar la acreditación de los
elementos típicos del delito fiscal, pues por una parte, no tiene como
propósito esencial regular una cuestión penal y, por otra, tampoco lo
prescribe así, de modo que, atendiendo al caso concreto, cabe la
posibilidad de que el juez de la causa que se sirva de ese sistema jurídico
pueda estimar que esa sola presunción no es suficiente para tener por
demostrado el elemento típico correspondiente.

Amparo directo en revisión 2814/2015. 21 de octubre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés
Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXXVI/2016 (10a.)

PRUEBA PERICIAL EN MATERIA PENAL. EL ARTÍCULO 234 DEL


CÓDIGO FEDERAL DE PROCEDIMIENTOS PENALES NO VIOLA EL
DERECHO DEL INCULPADO A OFRECER PRUEBAS, EN TÉRMINOS
DEL NUMERAL 20, APARTADO A, FRACCIÓN V, DE LA
CONSTITUCIÓN FEDERAL (EN SU TEXTO ANTERIOR A LA
REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN
DE 18 DE JUNIO DE 2008). El precepto constitucional citado prevé que
en todo proceso de orden penal, el inculpado tendrá derecho a que se le
reciban los testigos y demás pruebas que ofrezca, concediéndosele el
tiempo que la ley estime necesario al efecto y auxiliándosele para obtener
la comparecencia de las personas cuyo testimonio solicite, siempre que
se encuentren en el lugar del proceso. Por su parte, el artículo 234 del
Código Federal de Procedimientos Penales, dispone que los peritos
practicarán todas las operaciones y experimentos que su ciencia o arte
les sugiera y expresarán los hechos y circunstancias que sirvan de
fundamento a su opinión. Ahora bien, dicho precepto legal no viola el
derecho fundamental del inculpado a ofrecer pruebas, pese a que no
prevé su derecho a obtener la reposición del procedimiento cuando al
juzgador no le genere convicción un dictamen pericial por no expresar los
hechos y las circunstancias que sirvan de fundamento a la opinión, para el
efecto de que el perito señalado libremente por el inculpado subsane,
mejore o corrija el sustento del dictamen. Lo anterior, porque el juez de la
causa garantiza el derecho a la defensa al permitir que se den todas las
condiciones necesarias para que el inculpado ofrezca sus pruebas y éstas
se desahoguen, sin que pueda convertirse en un auxiliar de la defensa y
ordenar la reposición del procedimiento para que el perito subsane su
falta de experiencia o habilidad al elaborar su dictamen. Asimismo, no es
factible, desde un punto de vista constitucional, brindar una nueva
oportunidad al perito del inculpado para que subsane sus errores o
imprecisiones, o bien, para que se reponga el proceso con la finalidad de
que satisfaga los requisitos que exige la ley para el desahogo de su
dictamen, pues la justicia debe impartirse de forma pronta y expedita, en
términos del artículo 17 de la Constitución Federal; además, brindar esa
oportunidad al perito del inculpado rompería con el equilibrio procesal
entre las partes y la imparcialidad del juez penal.

Amparo directo en revisión 2814/2015. 21 de octubre de 2015.


Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés
Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA LXXXVII/2016 (10a.)

SOCIEDADES MERCANTILES. EL ARTÍCULO 129 DE LA LEY


GENERAL RELATIVA NO CONTIENE UNA RESTRICCIÓN AL
DERECHO HUMANO A LA PROPIEDAD PRIVADA. El derecho a la
propiedad privada es un derecho humano reconocido en los artículos 27
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 21 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos. Este último precepto
señala que toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes; que
la ley puede subordinarlos, pero ninguna persona puede ser privada de
ellos excepto mediante el pago de indemnización justa, por razones de
utilidad pública o de interés social y en los casos y según las formas
establecidas por la ley. Ahora bien, el artículo 129 de la Ley General de
Sociedades Mercantiles, al prever que la sociedad considerará dueño de
las acciones a quien aparezca inscrito como tal en el registro relativo, y
que aquélla deberá inscribir en éste, a petición de cualquier titular, las
transmisiones que se efectúen, no contiene una restricción al derecho
humano a la propiedad privada, pues la condición de inscripción se refiere
a una cuestión de eficacia entre la sociedad y el accionista. Esto es, la
relación jurídica surgida con la transmisión de acciones del anterior al
nuevo tenedor, se produce sólo entre estos dos últimos en el momento en
que llegan a un acuerdo de voluntades, pues se transfiere la propiedad y,
a su vez, el adquirente paga por la adquisición; además, la sociedad no
es parte del negocio de transferencia de la acción, por lo que es necesario
notificarle que registre la transmisión en el libro respectivo para que así le
sea oponible.

Amparo directo en revisión 2336/2014. **********. 2 de diciembre de


2015. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria:
María Dolores Igareda Diez de Sollano.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXXVIII/2016 (10a.)

SOCIEDADES MERCANTILES. PARA QUE EXISTA EFICACIA


LEGITIMADORA ENTRE EL TITULAR DE LAS ACCIONES Y LA
SOCIEDAD, DEBEN INSCRIBIRSE LAS TRANSMISIONES
REALIZADAS EN EL LIBRO DE REGISTRO RESPECTIVO. El artículo
129 de la Ley General de Sociedades Mercantiles prevé que la sociedad
considerará dueño de las acciones a quien aparezca inscrito como tal en
el registro relativo, y que aquélla deberá inscribir en éste, a petición de
cualquier titular, las transmisiones que se efectúen. Ahora bien, los
efectos creados con las transmisiones referidas no se surten con el simple
tránsito de las acciones de una persona a otra, sino que deben inscribirse
en el libro de registro de acciones para que se otorgue al adquirente la
legitimación para ejercitar frente a la sociedad sus derechos como
accionista y, a la vez, que aquélla también pueda exigir el cumplimiento
de las obligaciones derivadas de su calidad de socio; de ese modo, la
adquisición de acciones no otorga al adquirente la legitimación aludida,
sino que es sólo un requisito previo para inscribirse en el registro de
acciones. Lo anterior es así, en virtud de que la inscripción de las
transmisiones en el registro de acciones es la forma legalmente prevista
de legitimación social del titular de las acciones nominativas y despliega la
eficacia legitimadora a favor de la sociedad frente al inscrito.

Amparo directo en revisión 2336/2014. **********. 2 de diciembre de


2015. Unanimidad de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria:
María Dolores Igareda Diez de Sollano.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha dieciséis de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, diecisiete de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA LXXXIX/2016 (10a.)

NOTIFICACIONES EN LOS JUICIOS MERCANTILES. LOS


ARTÍCULOS 76 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES DEL
ESTADO DE NUEVO LEÓN Y 78 DEL SEGUNDO TÍTULO ESPECIAL
DENOMINADO “DEL TRIBUNAL VIRTUAL” DEL PROPIO
ORDENAMIENTO, NO VULNERAN EL PRINCIPIO DE SEGURIDAD
JURÍDICA. Conforme al artículo 1054 del Código de Comercio, los juicios
mercantiles se regirán por las disposiciones de dicho código; en su
defecto, se aplicará supletoriamente el Código Federal de Procedimientos
Civiles y, en caso de que no regule la institución cuya supletoriedad se
requiera, la ley de procedimientos local respectiva. Ahora bien, el Código
de Comercio contiene un capítulo que regula los “términos judiciales”, así
como la forma en que deben surtir efectos las notificaciones llevadas a
cabo en los juicios mercantiles, pero no regula las notificaciones virtuales;
de ahí que, al no estar prevista la institución del Tribunal Virtual en el
Código de Comercio ni en el Código Federal de Procedimientos Civiles,
se concluye que el Código de Procedimientos Civiles del Estado de
Nuevo León es supletorio de esta figura. Con base en lo anterior, resulta
optativo para las partes que las notificaciones que se les realicen durante
un juicio ordinario mercantil se rijan por el artículo 1075 del Código de
Comercio, o por los artículos 76 del Código de Procedimientos Civiles del
Estado de Nuevo León y 78 del segundo título especial denominado “Del
Tribunal Virtual” del propio ordenamiento; en el entendido de que sólo en
casos en que las partes opten por regirse por el sistema que regula el
código procesal local, por así convenir a sus intereses, éste será
aplicable, en caso contrario, regirá lo previsto en el Código de Comercio.
Por tanto, los artículos 76 y 78 aludidos, no vulneran el principio de
seguridad jurídica por el solo hecho de dar una opción a las partes para
someterse al Tribunal Virtual, el cual no está regulado en el Código de
Comercio. Por el contrario, la inaplicación de los preceptos del Código de
Procedimientos Civiles del Estado de Nuevo León, habiéndose las partes
sujetado a los mismos en ejercicio de su autonomía de voluntad, sería lo
que podría contravenir el principio de seguridad jurídica.

Amparo directo en revisión 254/2015. **********. 1o. de julio de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío Díaz, quien
formuló voto particular. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XC/2016 (10a.)

NOTIFICACIONES EN LOS JUICIOS MERCANTILES. LOS


ARTÍCULOS 76 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES DEL
ESTADO DE NUEVO LEÓN Y 78 DEL SEGUNDO TÍTULO ESPECIAL
DENOMINADO “DEL TRIBUNAL VIRTUAL” DEL PROPIO
ORDENAMIENTO, NO VULNERAN LA ESFERA DE COMPETENCIAS
DEL CONGRESO DE LA UNIÓN. Los artículos citados, que regulan el
Tribunal Virtual, específicamente por lo que hace a las notificaciones
personales, no vulneran la esfera de competencias del Congreso de la
Unión, porque es el propio legislador federal quien estableció en el Código
de Comercio la supletoriedad del código procesal local en caso de que la
institución de que se trate no se regule suficientemente en aquél; y es el
caso de que el Código de Comercio contiene un capítulo que regula los
“términos judiciales”, así como la forma en que deben surtir efectos las
notificaciones que se lleven a cabo en los juicios mercantiles (artículo
1075), pero no regula las notificaciones virtuales, ni la forma en que
surten efectos, por lo que es válido acudir al Código de Procedimientos
Civiles del Estado de Nuevo León para determinar el momento en que
surten efectos las notificaciones que se realizan a través de dicho
sistema, máxime cuando las partes voluntariamente decidieron acogerse
a éste.

Amparo directo en revisión 254/2015. **********. 1o. de julio de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío Díaz, quien
formuló voto particular. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretaria: Rosa María Rojas Vértiz Contreras.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XCI/2016 (10a.)

DERECHO A LA REPARACIÓN DEL DAÑO. EL ARTÍCULO 20


CONSTITUCIONAL, APARTADO B, FRACCIÓN IV, DE LA
CONSTITUCIÓN GENERAL, ANTERIOR A SU REFORMA EN JUNIO
DE 2008, NO PREVÉ LA FACULTAD DEL TRIBUNAL DE APELACIÓN
PARA CONDENAR AL SENTENCIADO QUE PROMOVIÓ EL
RECURSO, QUIEN EN PRIMERA INSTANCIA FUE ABSUELTO DE
DICHA REPARACIÓN. La reparación del daño tiene como propósito
resarcir a la víctima u ofendido de los daños y perjuicios ocasionados con
motivo de la comisión del ilícito penal. De la lectura del artículo 20,
apartado B, fracción IV, de la Constitución General, antes de su reforma
en junio de 2008, se advierte, en primer lugar, que la víctima u ofendido
del delito tiene el derecho humano a que le sea reparado el daño
producido por la comisión del delito, por lo que bajo ese contexto se
comprende que la disposición constitucional establezca que la fiscalía
está obligada a solicitar dicha reparación. El precepto fundamental
dispone a continuación que, al dictarse una condena, el juez no podrá
absolver al sentenciado del pago de esa reparación, cuando ésta
proceda. Sin embargo, esta disposición constitucional no prevé que el
tribunal de apelación podrá pronunciarse de manera oficiosa sobre esa
reparación en favor de la víctima u ofendido, cuando el recurso de
apelación lo interpuso el sentenciado, quien fue absuelto en primera
instancia de dicha reparación. Lo anterior porque el Constituyente
adminiculó la obligación del juez del proceso para condenar a la misma
con la del Ministerio Público para solicitarla cuando ello proceda,
empleando la conjunción “y”; lo que indica que la obligación constitucional
del juez a proceder a la condena está estrechamente relacionada con la
de la representación social de solicitarla; ello sin perjuicio de que también
puede exigirla de manera directa la víctima u ofendido, quien es el titular
del referido derecho fundamental. Sostener que la disposición
constitucional faculta al tribunal de alzada a condenar de manera oficiosa
a la reparación del daño, cuando no lo hizo el juez de la causa, es
contrario al derecho que tienen las partes de que el proceso penal se
decida en una sentencia dictada por un juez imparcial, en atención a lo
dispuesto por el artículo 17 constitucional, así como al derecho
fundamental del sentenciado a contar con una tutela judicial efectiva y un
recurso eficaz, en términos de los artículos 8 y 25 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, pues la eventual posibilidad de una
modificación de la ejecutoria de primera instancia, pero en su perjuicio, le
restaría seguridad y certeza de la eficacia de ese medio de defensa, ya
que el recurso de apelación promovido por el reo contra la sentencia que
lo condena por el delito y la responsabilidad penal, pero absuelve de la
reparación del daño, no produciría el resultado para el cual fue concebido
y promovido por la parte legitimada, que es la revisión de la legalidad de
la condena, mas no de la absolución.

Amparo directo en revisión 4442/2014. 11 de noviembre de 2015.


Mayoría de tres votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidentes:
José Ramón Cossío Díaz, quien reservó su derecho para formular voto
particular, y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina Cortés Rodríguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XCII/2016 (10a.)

APELACIÓN. EL ARTÍCULO 691 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS


CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL, QUE ESTABLECE LA
CUANTÍA COMO REQUISITO PARA LA PROCEDENCIA DE ESE
RECURSO, NO TRANSGREDE EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA
TUTELA JUDICIAL EFECTIVA, NI EL ARTÍCULO 8 DE LA
CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS. Esta
Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido
que si bien a toda persona le asiste el derecho de acudir a los tribunales a
dirimir sus controversias y litigios, éste debe ejercerse dentro de los
plazos y términos y con los requisitos fijados por el legislador ordinario por
medio de las leyes secundarias, los cuales son constitucionales en tanto
revistan una racionalidad y proporcionalidad como medida restrictiva de
acceso a la jurisdicción. En esa lógica, el artículo 691 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, al establecer la cuantía
como requisito para la procedencia del recurso de apelación, es
compatible con el derecho fundamental a la tutela judicial efectiva
reconocido en el artículo 17 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, pues la limitante es racional y proporcional, al guardar
coherencia con el contenido de ese derecho en el sentido que pretende
que el acceso a la justicia culmine con una sentencia firme de forma
expedita y sin dilaciones en asuntos de cuantía menor, aunado a que
dicha limitante no obstaculiza dicho derecho, pues los justiciables ya
obtuvieron una respuesta por un tribunal imparcial con la sentencia de
primera instancia. Tampoco transgrede las garantías judiciales
reconocidas en el artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, el cual contiene cuatro apartados: el primero en el que se
reconocen las garantías judiciales mínimas que deben satisfacerse en
cualquier tipo de procedimiento judicial; y en los tres restantes se
reconocen las garantías mínimas que los Estados se obligan a respetar
en los procedimientos de índole penal, de donde deriva que en los
asuntos y procedimientos de naturaleza civil no se exige el derecho a
recurrir como una garantía judicial; de ahí que el artículo 691 de
referencia resulta constitucional y convencional, pues no existe obligación
alguna por la cual al legislador doméstico no le sea posible limitar la
procedencia del recurso de apelación en juicios de naturaleza civil.

Amparo directo en revisión 1871/2015. 30 de septiembre de 2015.


Mayoría de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea,
Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Disidente: José Ramón Cossío Díaz.
Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria: Cecilia Armengol
Alonso.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/lgm.
TESIS AISLADA XCIII/2016 (10a.)

DEPOSITARIO JUDICIAL. EL ARTÍCULO 444 DEL CÓDIGO FEDERAL


DE PROCEDIMIENTOS CIVILES, QUE PREVÉ LA FACULTAD
EXCLUSIVA DEL ACTOR EJECUTANTE DENTRO DE UN JUICIO
EJECUTIVO MERCANTIL PARA NOMBRARLO, NO VULNERA EL
DERECHO DE PROPIEDAD DEL DEMANDADO. El artículo 444 del
Código Federal de Procedimientos Civiles, aplicado dentro del
procedimiento ejecutivo mercantil, de forma supletoria al Código de
Comercio, de conformidad con su artículo 1393, establece que de todo
secuestro se tendrá como depositario o interventor, según la naturaleza
de los bienes que sean objeto de él a la persona o institución de crédito
que, bajo su responsabilidad, nombre el ejecutante –salvo en los casos de
excepción contemplados en los artículos 445, 448 y 449, párrafos primero
y último, de la legislación adjetiva referida–, esto es, permite que el
depósito judicial recaiga en una persona distinta al demandado; cuestión
que no vulnera su derecho de propiedad, pues la facultad del actor
ejecutante para nombrar al depositario de los bienes embargados
consiste en una medida temporal justificada para garantizar el derecho de
crédito del acreedor ejecutante. Por tanto, no existe una afectación
irrestricta al derecho de propiedad del demandado en razón de que los
bienes embargados únicamente se reservan en calidad de garantía de un
crédito, sin que la designación de depositario implique la privación total
del bien.

Amparo en revisión 367/2015. **********. 8 de julio de 2015. Cinco votos


de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz,
quien formuló voto concurrente, Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien
formuló voto concurrente, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Secretaria: Cecilia Armengol Alonso.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XCIV/2016 (10a.)

COSA JUZGADA. EL ARTÍCULO 61, FRACCIÓN XI, DE LA LEY DE


AMPARO VIGENTE NO VULNERA LOS ARTÍCULOS 1o. Y 133
CONSTITUCIONALES, NI EL DERECHO FUNDAMENTAL DE ACCESO
A LA JUSTICIA. El precepto y porción normativa citados, en los que
descansa la causa de improcedencia relativa a la cosa juzgada en el juicio
de amparo, no es violatorio de los artículos 1o. y 133 constitucionales,
pues constituye un requisito para la procedencia del juicio constitucional,
que es el recurso nacional más efectivo impuesto por el parlamentario
federal que debe ser observado como presupuesto para el derecho
fundamental de acceso a la justicia por razones de seguridad jurídica,
para dotar de certeza lo resuelto en otros juicios de amparo en beneficio
de la correcta y funcional administración de justicia, así como para la
efectiva protección de los derechos de las personas, cuya previsión se
encuentra en armonía con lo que establece al respecto el artículo 25 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, y la amplia
jurisprudencia en el tema de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, aun cuando en el segundo juicio de amparo se reclame la
violación de derechos humanos que no se hicieron valer en el primero.
Ello obedece a la reforma del artículo 1o. de la Constitución Federal y la
incorporación a nuestro sistema jurídico, con rango constitucional, de los
derechos humanos consagrados en los tratados internacionales de los
que México forma parte, de conformidad con el diverso 133 del mismo
ordenamiento, lo cual implica que aún ante este nuevo paradigma, la
Suprema Corte de Justicia de la Nación no se encuentra facultada para
revisar las decisiones emitidas por los tribunales colegiados de circuito al
resolver un juicio de amparo anterior en el que se advirtió que la sentencia
impugnada no es violatoria de derechos fundamentales, pues tales
determinaciones son inmutables por virtud de la autoridad de la cosa
juzgada, lo que atiende a una necesidad operativa que permite que el
sistema cumpla con la función de salvaguardar los derechos de quienes
acuden ante los tribunales para solucionar sus disputas mediante un trato
imparcial, igualitario y dotado de certeza jurídica, lo que abona al orden y
a la paz social.

Amparo directo en revisión 2562/2015. 25 de noviembre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea. Secretario: Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/rfr.
TESIS AISLADA XCV/2016 (10a.)

COSA JUZGADA. EL ARTÍCULO 61, FRACCIÓN XI, DE LA LEY DE


AMPARO QUE LA PREVÉ COMO CAUSA DE IMPROCEDENCIA DEL
JUICIO RELATIVO, ES COMPATIBLE CON EL DERECHO A LA
SEGURIDAD JURÍDICA. Conforme al precepto y porción normativa
señalados, el principio de cosa juzgada opera en el juicio de amparo para
actualizar una causa de improcedencia cuando existiendo una ejecutoria
dictada en un juicio constitucional previo, se promueva uno nuevo en el
que exista identidad de quejosos, autoridades responsables y actos
reclamados, aunque las violaciones reclamadas sean diversas; figura que
no sólo se actualiza cuando en la sentencia se haya resuelto sobre la
constitucionalidad o inconstitucionalidad de los actos reclamados, sino
también cuando se ha determinado su inatacabilidad a través de un
diverso juicio constitucional, siempre que tal determinación se haya
realizado en atención a razones o circunstancias que hagan inejercitable
la acción de amparo de modo absoluto, con independencia del juicio en
que se haya efectuado, pues esta situación no puede desconocerse en un
nuevo juicio constitucional; lo que es compatible con la garantía de
seguridad jurídica, pues el propósito de la figura de la cosa juzgada es
revelar las condiciones terminantes en que habrá de concluir un asunto
jurisdiccional, con lo que se dotará de certeza jurídica a la decisión
definitiva asumida y a los intervinientes en el juicio respecto de las
consecuencias derivadas del caso, toda vez que el respeto a la decisión
judicial constituye un pilar del estado de derecho como fin último de la
impartición de justicia.

Amparo directo en revisión 2562/2015. 25 de noviembre de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de
Larrea. Secretario: Saúl Armando Patiño Lara.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”
MSN/rfr.
TESIS AISLADA XCVI/2016 (10a.)

MENORES DE EDAD VÍCTIMA DEL DELITO. LEGITIMACIÓN DE LA


REPRESENTACIÓN SOCIAL PARA PROMOVER JUICIO DE AMPARO
A SU FAVOR. Por regla general, el juicio de amparo en favor de los
menores de edad debe promoverse por quien ostente su legítima
representación. No obstante, la especial situación de vulnerabilidad en la
que se encuentran los niños, niñas y adolescentes, justifica que en
ciertos casos el juicio de amparo pueda ser promovido por otras
personas en su nombre y representación –incluyendo al Ministerio
Público–. Esta legitimación amplia en favor de los menores para
promover el juicio de amparo, encuentra sustento en el artículo 8 de la
Ley de Amparo, así como en los principios de interés superior del menor
y de protección integral de la infancia, y es especialmente relevante en
aquellos casos en los cuales los intereses del niño o la niña puedan no
ser exactamente coincidentes con los de sus representantes legales. Si
se dejara enteramente en manos de éstos últimos la posibilidad de
accionar ante la justicia la protección de sus derechos, se correría el
riesgo de dejar en estado de indefensión al menor, ante la posibilidad de
que éstos se nieguen o abstengan de defender dichos intereses. La
conclusión anterior no implica de ninguna manera suponer que los
derechos y obligaciones derivados de la patria potestad o la tutela sean
sustituidos, suprimidos o suspendidos; simplemente le otorga
legitimación al representante social para plantear su preocupación frente
al órgano jurisdiccional, quien estará en mejor aptitud de resolver si
existe una afectación a los derechos del niño.

Amparo directo en revisión 4416/2013. 28 de octubre de 2015. Mayoría


de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra
Olguín y Arturo Bárcena Zubieta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XCVII/2016 (10a.)

MENOR DE EDAD VÍCTIMA DEL DELITO. MEDIDAS ESPECIALES


QUE EL JUZGADOR DEBE ADOPTAR PARA PROTEGERLO. La
condición de vulnerabilidad de la víctima del delito es evidente en el caso
de los menores de edad, debido a su situación especial de desarrollo e
inmadurez física y psicológica. Ante ello, los juzgadores deben adoptar
medidas especiales para protegerlos en los casos en que sean víctimas
de un delito, las cuales consisten en: (i) el reconocimiento de su dignidad
humana, lo cual conlleva el deber de respetarlos y considerarlos como
personas con necesidades, deseos e intereses propios, y exige alejarse
de la concepción del menor como un simple receptor pasivo de protección
y cuidado, o bien, como un medio para determinar la responsabilidad del
inculpado en el proceso penal; (ii) su no revictimización, que consiste en
protegerlos contra todo sufrimiento, situación de riesgo o tensión
innecesaria o discriminación; y, (iii) su participación en el proceso penal,
que se conforma por el deber de las autoridades de informarles su
situación legal y sus derechos correlativos, e implica el deber de
brindarles la oportunidad de que sus sentimientos y opiniones sean
escuchados y tomados en cuenta por el juzgador, en función de su
madurez, edad y capacidad de discernimiento.

Amparo directo en revisión 4416/2013. 28 de octubre de 2015. Mayoría


de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra
Olguín y Arturo Bárcena Zubieta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XCVIII/2016 (10a.)

MENORES DE EDAD VÍCTIMA DEL DELITO. EXCEPCIONES A LA


FIGURA DEL PERDÓN DEL OFENDIDO. Generalmente, el perdón del
ofendido en los delitos perseguibles por querella implica la extinción de la
acción penal. No obstante, en los delitos en que la víctima sea un menor
de edad no es posible interpretar esta regla como absoluta, pues subsiste
un interés especial más allá del que corresponde al representante del
menor de otorgar el perdón, el cual consiste en proteger los derechos de
la infancia a la luz de su interés superior. En ese sentido, en los casos en
que un menor sea víctima de un delito y su representante otorgue el
perdón, el juzgador debe evaluar si extinguir la causa penal es lo mejor
para el menor. Para llegar a dicha determinación, el juez debe analizar la
naturaleza del delito, esto es, ponderar qué bien jurídico protege; evaluar
cuidadosamente los hechos particulares del caso, así como resguardar
las garantías del niño en el proceso penal, es decir, la protección a su
dignidad, su no revictimización y la oportunidad de que participe en el
proceso penal en la medida de lo posible.

Amparo directo en revisión 4416/2013. 28 de octubre de 2015. Mayoría


de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra
Olguín y Arturo Bárcena Zubieta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA XCIX/2016 (10a.)

MENOR DE EDAD VÍCTIMA DEL DELITO. EL PERDÓN DEL


OFENDIDO NO ES PROCEDENTE CUANDO LA EXTINCIÓN DE LA
CAUSA PENAL AFECTE LA DIGNIDAD DE LA VÍCTIMA MENOR DE
EDAD. Proteger la dignidad del menor en el proceso penal implica evitar
que sea humillado, degradado o envilecido. Así, para determinar la
procedencia del perdón del ofendido, el juez debe asegurar que la
extinción de la acción penal, el sobreseimiento de la causa o la
eliminación de las medidas de seguridad impuestas al agresor, no
provoquen algún tipo de sufrimiento, intimidación, situación de riesgo o
amenaza para la dignidad personal del menor. Para ello, el juez debe
analizar la naturaleza del delito, esto es, ponderar qué bien jurídico
protege, y si éste incide en los valores resguardados por el derecho a la
dignidad humana, así como evaluar si la forma y lugar en que se cometió
el delito, constituyen, en sí, una forma de humillación o trato degradante.

Amparo directo en revisión 4416/2013. 28 de octubre de 2015. Mayoría


de cuatro votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José
Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra
Olguín y Arturo Bárcena Zubieta.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

MSN/lgm.
TESIS AISLADA C/2016 (10a.)

INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. EN ATENCIÓN A ESTE


PRINCIPIO, CUANDO LOS PROGENITORES EJERZAN ACTOS DE
VIOLENCIA SOBRE LOS HIJOS, PUEDE RESTRINGIRSE SU
CONVIVENCIA. Un derecho primordial de los menores radica en no ser
separado de sus padres, a menos de que sea necesario en aras de
proteger su interés superior. Este derecho se encuentra directamente
relacionado con la patria potestad, ya que si bien ésta se encomienda a
los padres, ello es en beneficio de los hijos, ya que se dirige a
protegerlos, educarlos y formarlos integralmente; así, aunque para dar
cumplimiento a la función que se les encomienda a través de la patria
potestad, tienen el derecho de corregir a sus hijos, esa corrección debe
ser en un ámbito de respeto a su dignidad; de ahí que la patria potestad
no puede utilizarse como estandarte para ejercer actos de violencia sobre
los hijos, pues ésta, en cualquiera de sus clases, no se justifica como una
forma de educación o formación. Al respecto, el Comité de los Derechos
del Niño de la Organización de las Naciones Unidas, desde la
Observación General No. 1, relativa al tema “Propósitos de la educación”,
señaló que el castigo corporal es incompatible con la educación, pues
ésta debe impartirse de tal forma que se respete la dignidad intrínseca
del niño y se permita expresar su opinión libremente, insistiendo en la
necesidad de prohibir todas las formas de violencia por leves que sean;
además, definió en la Observación General No. 8 el castigo corporal o
físico como todo castigo en el que se utilice la fuerza física y que tenga
por objeto causar cierto grado de dolor o malestar, por leve que sea,
indicando que hay otras formas de castigo que no son físicas, pero
igualmente crueles o degradantes, e incompatibles con la Convención
sobre los Derechos del Niño –como los castigos en los que se
menosprecia, humilla, denigra, convierte en chivo expiatorio, amenaza,
asusta o ridiculiza al niño–. En atención a lo anterior, cualquier maltrato
físico, por leve que sea y que tenga por objeto causar cierto grado de
dolor o malestar, así como que busque menospreciar, humillar, denigrar,
amenazar, asustar o ridiculizar al menor, es incompatible con su dignidad
y respeto; no obstante, es importante destacar que cuando el Comité
rechazó toda justificación de violencia y humillación como formas de
castigos a los niños, no rechazó el concepto positivo de disciplina, pues
incluso reconoció que la crianza y el cuidado de los menores,
especialmente de los lactantes y niños pequeños, exigen acciones e
intervenciones físicas para protegerlos, pero aclaró que ello es totalmente
distinto al uso deliberado y punitivo de la fuerza para provocarles cierto
grado de dolor, molestia y humillación. Además, destacó que no incumbe
a dicha Convención prescribir detalladamente de qué manera los padres
deben relacionarse u orientar a sus hijos; sin embargo, sí ofrece un
marco de principios que sirve de guía para las relaciones dentro de la
familia, porque los niños aprenden lo que hacen los adultos, no sólo de lo
que dicen, por ejemplo, cuando los adultos con los que están
estrechamente relacionados utilizan violencia y humillación en sus
relaciones con los menores, no sólo demuestran una falta de respeto por
los derechos humanos, sino que además transmiten un mensaje
poderoso y peligroso en el sentido de que son medios legítimos para
procurar resolver conflictos o cambiar comportamientos. De lo anterior se
concluye que el interés superior del menor autoriza a restringir la
convivencia entre el menor y sus progenitores, cuando es objeto de
violencia por alguno de éstos. Ahora bien, dicho interés también dicta que
tienen derecho a ser cuidados y educados por sus padres; por tal motivo,
el principio de protección de los niños contra la agresión, incluida la que
tiene lugar en la familia, no implica que en todos los casos cuando salga
a la luz el castigo corporal de los niños por sus padres, deban ser
juzgados, pues la situación de dependencia de los niños y la intimidad
característica de las relaciones familiares, exigen que las decisiones de
enjuiciar a los padres o de intervenir oficialmente de otra manera en la
familia, deban tomarse con extremo cuidado, pues en la mayoría de los
casos no es probable que el enjuiciamiento de los padres redunde en el
interés superior de los hijos.

Amparo directo en revisión 3799/2014. 25 de febrero de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas, quien formuló voto concurrente y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretaria: Mercedes Verónica
Sánchez Miguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.
TESIS AISLADA CI/2016 (10a.)

INTERÉS SUPERIOR DEL MENOR. LA CONVIVENCIA PATERNO-


FILIAL SUPERVISADA EN UN CENTRO DE CONVIVENCIA FAMILIAR,
CONSTITUYE UNA MEDIDA ACORDE CON ESTE PRINCIPIO
(LEGISLACIÓN DEL DISTRITO FEDERAL). El Estado tiene el deber
ineludible de dictar las medidas tendentes a proteger a los menores
contra toda forma de perjuicio o maltrato, aun cuando sólo se manifieste
como una posibilidad; así, en atención al interés superior del menor, es
inadmisible esperar a que un menor sufra un perjuicio o un maltrato para
aplicar esas medidas, no obstante, cuando deba hacerse a la luz de una
controversia, éstas han de establecerse en función de cada caso
concreto, según lo que resulte acorde con dicho interés. Una de estas
medidas consiste en ordenar que la convivencia del menor con el
progenitor ─que no tiene la guarda y custodia─ se realice en un Centro
de Convivencia Familiar Supervisada, pues de esta forma se preserva su
derecho a ser cuidado y educado por ambos progenitores, así como a
mantener contacto directo con ellos, preservando las relaciones
familiares; además, se satisface la obligación de protegerlo de manera
preventiva contra toda forma de perjuicio o maltrato, pues de los artículos
1, 2, fracciones VI y XVII;14, fracciones IV y VI; 22, 24, 25, 26, 27 y 29 del
Reglamento que fija las bases de organización y funcionamiento del
Centro de Convivencia Familiar Supervisada del Distrito Federal, deriva
que entre las actividades sustantivas del Centro se encuentra la relativa a
facilitar las convivencias paterno-filiales dentro de sus instalaciones,
debiendo minimizar los riesgos de daños físicos o psicológicos de los
miembros involucrados en las controversias familiares, coadyuvando al
sano desarrollo emocional de los integrantes de la familia. Asimismo, se
advierte que la convivencia familiar debe desarrollarse ante la presencia
de una tercera persona independiente y neutra, así como realizar
reportes de manera fidedigna e imparcial, además de que existe un
sistema de circuito cerrado de televisión y se respeta la voluntad del
menor.

Amparo directo en revisión 3799/2014. 25 de febrero de 2015. Cinco


votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío
Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas, quien reservó su derecho para formular voto concurrente y
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretaria: Mercedes Verónica Sánchez Miguez.

LICENCIADO JUAN JOSÉ RUIZ CARREÓN, SECRETARIO DE


ACUERDOS DE LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN, C E R T I F I C A: Que el rubro y texto de la
anterior tesis aislada fueron aprobados por la Primera Sala de este
alto tribunal, en sesión de fecha treinta de marzo de dos mil
dieciséis. Ciudad de México, treinta y uno de marzo de dos mil
dieciséis. Doy fe.

“En términos de lo previsto en los artículos 3, fracción II y 20, fracción VI de la Ley Federal de
Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en esta versión Pública se
suprimen los datos personales.”

MSN/lgm.

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