Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
ESCUELA DE DERECHO
CURSO
DERECHOS HUMANOS
TEMA
CASO LA CANTUTA
PROFESOR
ALUMNA
CICLO
DÉCIMO
PIURA – 2018
I. CASO LA CANTUTA
La matanza de “La Cantuta” es uno de los crímenes por los cuales el Gobierno peruano
solicitó en 2003 la extradición del ex-presidente Alberto Fujimori Fujimori al gobierno
del Japón y posteriormente en enero de 2006 al gobierno de Chile. El caso había sido
presentado a la Comisión Interamericana en 1992 por petición de la APRODEH,
denunciado que los autores intelectuales de la matanza nunca fueron investigados y
que los autores materiales, condenados en 1994, fueron liberados en 1995, después
que fueron aprobadas las leyes de amnistía, las cuales conceden amnistía al personal
militar, policial o civil involucrado en violaciones de los derechos humanos cometidas
desde 1980 hasta el 14 de junio de 1995.
De esta forma la Corte decide que el Estado debe hacer lo necesario para "llevar a
término, en un plazo razonable, las investigaciones abiertas y los procesos penales
incoados en la jurisdicción penal común, así como activar, en su caso, los que sean
necesarios, para determinar las correspondientes responsabilidades penales de todos
los autores de los hechos cometidos". La Corte consideró que la ausencia de Fujimori
en el proceso, uno de los principales imputados, determinan en gran parte la
impunidad, por esta razón la Corte considera que "el Estado debe continuar adoptando
todas las medidas necesarias, de carácter judicial y diplomático, y proseguir
impulsando las solicitudes de extradición que correspondan, bajo las normas internas
o de derecho internacional pertinentes".
La Corte, en primer lugar, aclaró que la no inclusión del nombre de la hermana de una
de las víctimas en el capítulo de reparaciones es “un error material que no afecta las
determinaciones” (párrafo 18) establecidas, respecto de ella, en la sentencia de fondo,
reparaciones y costas, a saber: identificación como hermana de una de las víctimas,
determinación de su condición de víctima, de parte lesionada y de acreedora de una
indemnización por daño material.
En segundo lugar, la Corte solicitó al Estado peruano que tenga en cuenta el nombre
completo -incluido su apellido de casada de una familiar de una de las víctimas, para
efectos del cumplimiento de la sentencia. En tercer lugar, la Corte explicó que la
hermana de una de las víctimas y el hermano de otra no fueron declarados víctimas ni
beneficiarios de reparaciones, porque “no fue aportada prueba suficiente que
permitiera al Tribunal establecer que (dichos hermana y hermano) fueran víctimas” de
la violación de su derecho a la integridad personal.
El criterio de la Corte respecto de la prueba del perjuicio sufrido por las hermanas y/o
hermanos de las víctimas dio lugar a que el juez Antonio Augusto Cançado Trindade
agregara a la sentencia su voto razonado, en el que explica las razones –que comparto
en su integridad por las cuales se aparta, en este tema, de la mayoría de la Corte. El
Juez afirma que el sufrimiento de los hermanos o hermanas de las víctimas no requiere
prueba; exigirla, en casos de graves violaciones de derechos humanos como las
masacres, se aproximaría a una “verdadera probatio diabólica”.
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA:
https://campus.uladech.edu.pe/pluginfile.php/944082/mod_resource/content/2/1
4/SESION_04.pdf
https://www.fidh.org/es/region/americas/peru/La-Corte-Interamericana-de