Sunteți pe pagina 1din 10

Guías de inducción a la crítica

MICHEL FOUCAULT
(1926-1984)

BIOGRAFÍA
Michel Foucault nació en 1926, en el seno de una familia de médicos de Poitiers Página | 1

(Francia). Después de la Segunda Guerra Mundial, entró en la École Nórmale


Supérieure, donde fue alumno del reconocido filósofo Maurice Merleau-Ponty. En
1954, Foucault pasó un tiempo en Uppsala (Suecia) y más tarde vivió en Polonia y
Alemania, antes de volver a Francia en 1960.

Consiguió el doctorado en 1961 gracias a su estudio Historia de la locura en la época


clásica, donde Foucault expone que la distinción entre locura y cordura no es más que
un constructo social. Tras las huelgas estudiantiles ocurridas en el año 1968 en París,
inició su activismo político, que, junto a su labor docente, continuó el resto de su vida.

FRASES Y DATOS

El hombre no es el problema más antiguo ni el más constante que se haya planteado el


saber humano.
Michel Foucault

El siglo xix vio una revolución en la anatomía, como muestra esta ilustración de un
libro de texto médico. Foucault cree que nuestro concepto actual de «hombre» procede
de esa época.

El poder no es una institución ni una estructura; tampoco es una fuerza que se nos ha
dado.
Michel Foucault

El aula escolar es, según Foucault, una «microestructura» de poder político. Los
«micropoderes» ejercen el poder dentro de la sociedad, al margen de las estructuras
tradicionales de gobierno.

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

El siglo XIX vio una revolución en la anatomía, como muestra esta ilustración de un
libro de texto médico. Foucault cree que nuestro concepto actual de «hombre» procede
de esa época.

Página | 2
EL CONCEPTO DE HOMBRE

El concepto de que el hombre es una invención de fecha reciente aparece en Las


palabras y las cosas. Una arqueología de las ciencias humanas, obra del filósofo francés
Michel Foucault. Para entender lo que el autor quiere decir con esto, tenemos que
comprender lo que para él significa «arqueología» y por qué cree que deberíamos
aplicarla a la historia del pensamiento.

A Foucault le interesa la manera en la que nuestro discurso, nuestra forma de hablar


y de razonar sobre las cosas, se ve configurado por una serie de reglas, en gran medida
inconscientes, que surgen de las condiciones históricas en las que nos encontramos;
unas reglas y condiciones que, de hecho, configuran el fondo de «sentido común» que
enmarca nuestra manera de pensar y hablar sobre el mundo. Dado que las reglas y con-
diciones cambian con el tiempo, también se modifica nuestro discurso, por lo que se
necesita una «arqueología» para desenterrar tanto los límites como las condiciones de la
manera en que la gente pensaba y hablaba del mundo en épocas anteriores. No se
pueden tomar los conceptos que utilizamos en el contexto actual (por ejemplo, el de
«naturaleza humana») y dar por sentado que valen eternamente, y que todo lo que se
precisa es una «historia de las ideas» para trazar su genealogía. Para Foucault, creer que
nuestras ideas actuales se pueden aplicar de forma fructífera a un período histórico
anterior, es una noción equivocada: las maneras en las que usamos los términos
«hombre», «género humano» o «naturaleza humana» son ejemplos de esto.

Dicha idea tiene sus raíces en el pensamiento de Immanuel Kant, que dio un giro a la
filosofía cuando cambio la antigua pregunta «¿por qué es el mundo cómo es?» por
«¿por qué vemos el mundo como lo vemos?». A pesar de que creemos que nuestra idea
de lo que es ser humano es absoluta e inmutable, en realidad es una invención reciente.
Foucault la sitúa a inicios del siglo XIX, época del nacimiento de las ciencias naturales,
y la considera paradójica, pues nos vemos, por un lado, como objetos en el mundo (y,

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

por lo tanto, objetos de estudio) y, por otro, como sujetos que experimentan y estudian
el mundo... criaturas extrañas que miran en dos direcciones al mismo tiempo.

LA IMAGEN HUMANA DE UNO MISMO Página | 3

Foucault no sólo considera que esta idea del «hombre» es una invención reciente,
sino también que se trata de una invención que está acercándose a su fin y que no
tardará en verse borrada «como un rostro de arena al borde del mar».

¿Está en lo cierto? En una época de grandes avances en informática y en las


interfaces hombre-máquina, y en la que filósofos especialistas en las ciencias
cognitivas, como Daniel Dennett o Dan Wagner, están cuestionando la naturaleza de
la subjetividad, es difícil no pensar que, aunque el rostro de arena no esté a punto de
borrarse, la marea está subiendo alarmantemente a su alrededor.

DEBEMOS «CORTARLE LA CABEZA AL REY»


Desde sus inicios, la filosofía política ha intentado definir y localizar la fuente del
poder en la sociedad. Muchas de las obras políticas más importantes han imaginado un
Estado poderoso como centro de la autoridad política legítima. En El príncipe,
Maquiavelo defiende que los intereses del gobierno justifican la cruda expresión del
poder. Posteriormente, Hobbes afirmó en Leviatán que el antídoto del espíritu corrupto
de la humanidad es un monarca poderoso. Estos y otros pensadores prepararon el
terreno para gran parte de la erudición política moderna, y el análisis del poder del
Estado sigue siendo hoy la forma predominante de análisis político.
Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

Según el filósofo francés Michel Foucault, el poder no está centrado en el Estado,


sino disperso por una gran cantidad de espacios de «micropoder» que se reparten por
toda la sociedad. Criticó la filosofía política corriente por creerla basada en la noción de
autoridad formal y por su insistencia en analizar una entidad llamada «Estado». Para
Página | 4
Foucault, el Estado no es más que la expresión de las estructuras y la configuración del
poder en la sociedad, y no una entidad única que ejerce su dominio sobre las personas.
Esta visión del Estado como una «práctica», y no como una «cosa en sí misma»,
significa que únicamente se puede alcanzar la verdadera comprensión de la estructura y
la distribución del poder en la sociedad a través de un análisis más amplio.
El análisis de Foucault se ocupaba de la naturaleza de la soberanía. Quería apartarse
de lo que consideraba un planteamiento erróneo: que la teoría política debe centrarse en
comprender el poder que esgrime un soberano individual, que aprueba leyes y castiga a
quienes las violan. Foucault pensaba que la naturaleza del gobierno había cambiado
entre el siglo XVI -cuando los problemas de la política se limitaban a cómo podía
obtener y mantener el poder un soberano- y la época actual, en la que resulta imposible
separar el poder del Estado de otras formas de poder en la sociedad. Indicó que los
teóricos políticos necesitan «cortarle la cabeza al rey» y crear un método de
comprensión del poder que refleje dicho cambio.
Gobernabilidad
Foucault elaboró estos pensamientos en conferencias en el Collége de France, en
París, donde propuso el concepto de «gobernabilidad». Según este criterio, el gobierno
es un arte que comprende toda una gama de técnicas de control y disciplina. Puede darse
en una enorme diversidad de entornos, por ejemplo, dentro de la familia, en el colegio o
en el lugar de trabajo. Al ampliar su comprensión del poder alejado de las estructuras
jerárquicas de la soberanía, Foucault nombró diferentes tipos de poder en la sociedad,
como el conocimiento y las estadísticas. En muchas de sus obras profundizó en este
análisis del poder, centrando su atención en áreas tan dispares como el lenguaje, los
castigos y la sexualidad.

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

Página | 5

DONDE HAY PODER, HAY RESISTENCIA

DATOS Y FRASES
La Historia de la sexualidad de Foucault [...] nos previene de la ilusión de una
liberación total del poder. Jamás será posible liberarse totalmente del poder.
Judith Butler
Un pastor guiando su rebaño es la analogía que emplea Foucault para explicar el
poder «pastoral», que conduce a las personas a actuar de determinadas maneras y
dejarse gobernar.

El discurso transmite y produce el poder; lo refuerza, pero también lo mina y expone.


Michel Foucault

CUERPO DEL DOCUMENTO

La cuestión del poder, ya sea con el objetivo de mantener el orden social o bien de
provocar cambios sociales, se ha tratado desde el punto de vista político y económico.
Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

Hasta la década de 1960, las teorías sobre el poder se centraban en el poder del
Gobierno o del Estado sobre los ciudadanos, o desde una perspectiva marxista, en la
lucha de clases entre la burguesía y el proletariado.
Todas estas teorías tendían a centrarse en el poder a escala macroscópica, ignorando
Página | 6
por completo, o en el mejor caso, concediendo una importancia secundaria a las
relaciones de poder en el seno de las capas inferiores de la sociedad, por considerarlas
una prolongación del ejercicio primario del poder.
Para Michel Foucault, estos enfoques son demasiado simplistas. En las sociedades
liberales occidentales de hoy, el poder no lo ejercen solamente el estado o los
capitalistas, sino también los individuos y el conjunto de la sociedad, pasando por
grupos y organizaciones. En palabras de Foucault, «el poder está en todas partes y
viene de todas partes». También rechazaba la concepción tradicional del poder como
algo que se puede poseer y blandir como un arma o una herramienta. Según Foucault,
esto no es poder, sino la capacidad de ejercerlo, y no se convierte en poder hasta que se
actúa. El poder no es algo que alguien tiene, sino algo que se hace a otros, una acción
que afecta a las acciones de otros.

RELACIONES DE PODER

En vez de pensar en el poder como una «cosa», Foucault lo ve como una «relación».
Para explicar la naturaleza del poder examina las diferentes relaciones de poder que
existen en todos los niveles de la sociedad moderna, por ejemplo, entre un individuo y
el estado en el que vive, pero también entre empleados y jefes, entre padres e hijos,
entre los miembros de organizaciones y grupos, etc. Foucault reconoce que el poder ha
sido y sigue siendo la fuerza principal que estructura el orden social y describe también
las profundas transformaciones que ha experimentado la naturaleza de las relaciones de
poder desde la Edad Media hasta hoy. En la sociedad feudal, el ejercicio del que
denomina «poder soberano», como la tortura y las ejecuciones públicas, era el método
al que recurrían las autoridades para asegurarse la obediencia de sus súbditos. Con la
difusión de las ideas de la Ilustración en Europa, la violencia y la fuerza empezaron a
considerarse inhumanas y, sobre todo, ineficaces como medios de ejercer el poder.

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

VIGILANCIA Y CONTROL

Los castigos físicos fueron sustituidos por un medio de controlar el comportamiento


más invasivo: la disciplina. El establecimiento de instituciones tales como cárceles,
Página | 7
asilos, hospitales y escuelas caracterizó el paso del concepto meramente punitivo del
poder al ejercicio de un poder disciplinario específicamente destinado a impedir
determinados comportamientos. Estas instituciones no solo eliminaban la oportunidad
de transgresión, sino que constituían un entorno en el que la conducta de los individuos
podía ser corregida y regulada, y sobre todo, permitía mantenerlos vigilados y
controlados.
Esta noción de vigilancia tiene una especial importancia en la evolución de la manera
en que se ejerce el poder en la sociedad moderna. Foucault analiza con detenimiento el
funcionamiento del Panóptico, el eficiente diseño de prisión ideado por el filósofo
británico Jeremy Bentham, con una torre central desde la que el vigilante puede ver
continuamente a los presos, cuyas celdas están iluminadas desde la parte posterior para
impedir que sus ocupantes se oculten en rincones sombríos. Al no poder estar nunca
seguros de sí están siendo observados o no, los reclusos se comportan como si lo
estuvieran siempre. El poder ya no se ejerce obligando a las personas por coerción
física, sino estableciendo mecanismos que garantizan un comportamiento conforme al
deseado.

REGULAR LA CONDUCTA

Los mecanismos mediante los que se ejerce el poder, la «tecnología del poder», se
han convertido en una parte integrante de la sociedad. En el mundo moderno occidental,
las normas sociales no se imponen a la fuerza, ni mediante una autoridad que obliga a
actuar de una manera determinada o prohíbe comportarse de un modo diferente, sino
mediante el poder que Foucault llama «pastoral», que orienta el comportamiento de los
individuos. Cada uno es parte interesada de un complejo sistema de relaciones de poder,
operativo a todos los niveles, que regula la conducta de los miembros de una sociedad.

Este tipo de poder omnipresente se ejerce mediante el control de las actitudes,


creencias y prácticas de las personas a través del sistema de ideas que Foucault llama
Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

«discurso». El sistema de creencias de cualquier sociedad, el conjunto de ideas y


conceptos a las que las personas se adhieren, evoluciona a medida que se van aceptando
ciertas actitudes hasta que estas se integran en la sociedad y define lo que está bien y lo
que está mal, lo que es normal o lo que es desviado. Las personas regulan su
Página | 8
comportamiento en función de estas normas, generalmente sin ser conscientes de que es
el discurso el que guía su conducta haciendo inconcebibles los pensamientos y las
acciones contrarios.

REGÍMENES DISCURSIVOS

El discurso se refuerza constantemente, ya que es a la vez un instrumento y un efecto


del poder: controla los pensamientos y las conductas. que a su vez modelan el sistema
de creencias. Además, al determinar lo que es verdadero y lo que es falso, crea un
«régimen de la verdad», un corpus de conocimientos comunes considerados innegables.

Frente a la idea de que «el saber es el poder», Foucault afirmó que ambos están
vinculados de una manera más sutil y acuñó la expresión «saber-poder» para designar
dicha lalación: el saber crea el poder, pero también es producido por este. Hoy en día, el
poder se ejerce controlando qué formas de saber son aceptables, presentándolas como
verdaderas y excluyendo otras formas de saber. Al mismo tiempo, el saber aceptado, el
discurso, se produce de hecho durante el proceso del ejercicio del poder.
A diferencia del poder tradicional, que mueve o fuerza a las personas a comportarse
de determinada manera, el saber-poder no tiene un agente o una estructura
inmediatamente identificables. Además, al ser omnipresente, parece que nada pueda
oponérsele. Foucault señala que, de hecho, la resistencia política y la revolución pueden
no ser efectivas para lograr el cambio social porque solamente atacan el poder del
estado, no la manera ubicua y cotidiana en que se ejerce el poder hoy.
No obstante, sostiene Foucault, existe una posibilidad de resistencia: la oposición al
discurso mismo, que puede ser desafiado por discursos contrarios. El poder que depende
del consentimiento deja algún grado de libertad a los sometidos a él. Para que el
discurso sea un instrumento del poder, estos deben mantener con él una relación de
poder. Si existe esta relación, existe también la posibilidad de resistencia. Sin
resistencia, no hay necesidad de ejercer el poder.
Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

EL DESPLIEGUE DEL PODER

Los conceptos de saber-poder y de discurso de Foucault son muy sutiles y fueron


Página | 9
rechazados por muchos de sus contemporáneos que los consideraron vagas
especulaciones. Sin embargo, sus conferencias y sus escritos suscitaron un gran interés,
a pesar de la dificultad conceptual de su pensamiento y de la complejidad de su estilo, a
veces enrevesado. Las ideas sobre el poder que expone en Vigilar y castigar e Historia
de la sexualidad fueron ganando aceptación entre algunos sociólogos (más que entre
historiadores y filósofos) y acabaron influyendo en el análisis de la utilización del
discurso en la sociedad como instrumento de poder en ámbitos muy diversos.
El feminismo moderno, la teoría queer y los estudios culturales deben mucho a
Foucault, en particular a su explicación de cómo se imponen las normas de
comportamiento. Hoy persiste la división de opiniones respecto a sus teorías: para
algunos únicamente son vagas conclusiones de un trabajo de investigación falto de
rigor; para otros, hacen de Foucault uno de los pensadores más importantes y originales
del siglo xx dentro del campo de las ciencias sociales.

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer
Guías de inducción a la crítica

Página | 10

Esta guía es el resultado de una compilación de información y tiene como fin introducir y fomentar el interés en la temática tratada,
por lo cual, se recomienda asistir a la literatura original para conocer a cabalidad la o las teoría elaboradas por el autor.
Profesor compilador. Javier Ignacio Barros Ketterer

S-ar putea să vă placă și