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¿Tienes dudas sobre la temperatura de color

de la luz?

Seguramente te
preguntas que es eso de la “Temperatura de Color”cuando ves una de nuestras
fichas de producto, pues bien, mediante este artículo trataremos de explicar las
diferencias entre las distintas temperaturas de color disponibles en las bombillas
que ofrecemos.

La temperatura de color se mide en grados Kelvin y se refiere a las distintas


tonalidades que puede tener una luz. Las más comunes son estas tres:

 Luz cálida. Se trata de luces amarillentas y su temperatura de color está por debajo
de los 3300K, aunque las más cálidas y habituales están entre 2700 – 2800K. Están
asociados a la luz del Sol y al fuego, por eso se le denomina luz cálida.

 Luz día o neutra. Está en un rango entre los 3300K y los 5000K.

 Luz fría. Desde 5000 a 6500K, siendo 6500K la temperatura de la mayoría de los
tubos fluorescentes convencionales. Se trata de una luz más blanca.
¿Qué temperatura es la más adecuada para cada
estancia?
La luz cálida tiende a relajarnos y hacernos sentir a gusto, por lo que
recomendamos esta luz en los dormitorios, salas de estar y en definitiva, en
cualquier espacio que queramos hacer más confortable. Es muy adecuada también
para halls y exposiciones de joyas.

La luz fría nos estimula y nos mantiene alerta y despiertos, por ello es
recomendada en oficinas, despachos y salas de estudio como iluminación
general.

Por último, la luz neutra la usaremos en ambientes relajados pero con un toque
más activo y actual.

Por ejemplo, con una luz cálida, resaltamos los tonos marrones del mobiliario y lo
intensificamos destancando un color amarillento sobre la estancia. Si iluminamos
con luz blanca, obtendremos un tono más frío y resaltaremos los verdes y azules de
la sala.

Como recomendación final, la luz siempre debe ser suave, evitando


deslumbramientos o falta de luz en puntos de trabajo. Si necesitamos un área
de trabajo iluminada en una gran sala, lo preferible es usar puntos individuales de
luz, que nos permitirán ahorrar energía y no renunciar al confort.

Recuerda que las diferentes temperaturas de color están disponibles en todos los
tipos de iluminación de bajo consumo que están a tú disposición en nuestra
tienda, si bien algunos modelos los tenemos sólo disponibles en aquellas
temperaturas de color de aplicación más común.
¿Qué es la temperatura de color?

La temperatura de color de una fuente de luz se define comparando su color dentro


del espectro luminoso con el de la luz que emitiría un cuerpo negro calentado a
una temperatura determinada. Por este motivo esta temperatura de color se expresa
en kelvin, a pesar de no reflejar expresamente una medida de temperatura, por ser la misma
solo una medida relativa.

Existe una explicación un poco más “seria”: Un cuerpo teórico llamado cuerpo negro, el cual
no absorbería ni refleja ninguna frecuencia lumínica, es capaz de irradiar luz según aumenta de
temperatura. A cada temperatura a la que se caliente dicho cuerpo emitirá una determinada
longitud de onda (color) que tendrá una energía máxima. Esa sería la temperatura de color.
Lo más parecido a dicho cuerpo son las estrellas, aunque éstas absorben una cierta cantidad
de luz de diversos colores según sea su composición. De hecho, analizando el espectro de
colores de la luz emitida por una estrella, se puede averiguar su temperatura y su composición
en base a las líneas ausentes en el mismo.

Aunque aparentemente todas las fuentes de luz son blancas, esto no es mas que una
adaptación que hace nuestro cerebro, que en este sentido se comporta de manera parecida al
modo de "balance de blancos automático" de algunas cámaras digitales y de vídeo. A veces
pueden verse los diferentes colores de las fuentes de luz si ponemos distintos tipos de
bombillas, fluorescentes o halógenos juntos. Entonces si que notamos claramente que, aunque
todos iluminan, cada una de las fuentes de luz aparece como de un color distinto. Una
consecuencia práctica en la vida diaria de todo esto la tenemos en las tiendas de ropa, donde
una misma prenda puede aparecer de color distinto dentro de la tienda (iluminación artificial,
con una determinada temperatura de color) y fuera de ella (luz solar, con otra temperatura
distinta). Y precisamente es en la fotografía para catálogos de moda e industriales donde mas
se mide la exactitud de reproducción de color, ajustando exactamente la temperatura de color
de la toma, para evitar colores "falsos".

La unidad de medida es el Kelvin (K), a veces llamado grados Kelvin, y viene derivada de la
teoría antes explicada sobre que los colores aparecen al calentar un cuerpo ideal, y que según
la temperatura que alcance irradia unos u otros colores. Mientras que el cerebro humano
equilibra la luz, los sensores de las cámaras digitales y la película fotográfica registran con
diferencias palpables lo que realmente está ocurriendo con la iluminación.
Luces cálidas, neutras y frías

Se denominan fuentes lumínicas cálidas a aquellas que, debido a su temperatura de color,


tienen tonos cercanos al rojo, y frías las que tienen tonos próximos al azul. Las fuentes
lumínicas situadas en el medio de ambas se consideran neutras.

Un caso interesante es la luz que percibimos del sol, que varía su temperatura de color
dependiendo de la hora del día o la presencia o ausencia de nubes. Esto es debido a que la luz
solar tiene que atravesar mas o menos cantidad de gases en la atmósfera según la hora del día
y su posición en el cielo, o según haya o no nubes, con lo que se absorben antes las frecuencias
altas de la luz, esto es, la gama azul/ultravioleta (salvo para los que tengáis el agujero de ozono
encima), quedando una luz mas rojiza (cálida), sobre todo al amanecer y atardecer.

En determinados tipos de luces, como los fluorescentes y algunas de las que alumbran
carreteras y sitios públicos, la temperatura de color es una media, ya que la luz que emiten no
es del mismo tipo que una bombilla normal. En las bombillas tradicionales la luz se produce por
incandescencia, mientras que en los fluorescentes se genera por descarga eléctrica en un gas.
En los casos de descarga de gas faltan colores en la luz que irradian, que para más desgracia
varían entre fabricantes y tipos de focos, y hacen muy complicado ver los objetos con colores
reales.

Para hacernos una idea de cómo afecta la luz al color, consideremos una habitación de paredes
blancas con muebles de madera clara. Si la iluminamos con luces cálidas, se acentuarán los
tonos marrones de los muebles y las paredes absorben el color y se destaca un tono amarillento.
El conjunto tendrá un aspecto cálido muy agradable. Ahora bien, si iluminamos el mismo cuarto
con luces frías, se acentuarán los tonos verdes y azules de muebles y paredes dándole un
aspecto frío a la sala.
Led y la temperatura de color

Una de las principales ventajas del led es que en su proceso de fabricación de determina la
temperatura de color que se desa obtener. (Depende del compuesto químico que se combina
como puede ser el Galio, Indio, aluminio, etc) Mas info: Wikipedia
Gracias a esta tecnología los productos de iluminación led emiten luz solo en el espectro
lumínico para el que han sido fabricados, y no emiten radiación en frecuencias como la
ultravioleta o infrarroja como ocurre con otras tecnologías como los fluorescentes (tubos o
bombillas de bajo consumo) e incandescentes que pueden perjudicar a los objetos que iluminan.

Habitualmente, en leds, se hablan de 3 grupos de temperatura de color:

Luz Cálida: (Temperaturas de color entre 2800ºK y 3500ºK). Equivale a la luz que producían
las bombillas incandescentes y los focos halógenos. Es recomendable en tiendas de ropa,
fruterías, panaderías, charcuterias y carnicerías (estas 2 últimas es más habitual incluso una
iluminación de tono rosa). En el caso de viviendas, se recomiendo su instalación en estancias
como el salón y los dormitorios.


 Luz Neutra: (Temperaturas de color entre 3800ºK y 4500ºK) dicen los expertos que es la luz
más natural. Se puede instalar en cualquier entorno que no requiera del matiz específico que
puedan aportar las otras 2 categorías.


 Luz Fría: (Temperaturas de color de mas de 5000ºK). Equivale a la luz de un día muy soleado
o nublado. Una de las ventajas de la luz fría es que a la misma intensidad aporta una mayor
cantidad de lumens lo que genera una percepción mayor de luminosidad. Es una luz muy
recomendada para pescaderías y joyerías. Respecto a viviendas, es habitual encontrarlo en
cocinas y baños. Aunque los/las expertos/as en maquillaje recomiendan siempre lúces cálidas
ya que tienen la ventaja de aportar una mejor gama cromática.
La temperatura de color en
las lámparas
Publicada en 07/09/2015 por Angel Antonio Romero
Cuando llega el momento de elegir iluminación, una de las principales cosas que nos debemos
de plantear es el tipo de luz que queremos, luz mas cálida o luz mas fría. La temperatura de
color es una cuestión de gustos, no obstante existen varias razones que nos pueden ayudar a
elegir una luz cálida o una luz fría.
La temperatura de color podría definirse como la sensación que percibe el ojo humano ante la
tonalidad de la luz que puede lograrse en un ambiente. La temperatura de color se mide
en grados Kelvin que es la unidad utilizada para medir el color de la luz. Cuanto mas alto sea
el valor de grados Kelvin mas fría será la tonalidad de la luz.
El concepto, teóricamente es sencillo, vamos a pensar en un hierro incandescente al que vamos
aplicando calor, es decir, lo vamos calentando. Cuando la temperatura del hierro se situa a unos
1000 grados Kelvin, la tonalidad que tiene es rojiza. Si seguimos calentando el hierro, cuando
llegamos a una temperatura de 2500 a 3000 grados Kelvin, el color del hierro es amarillento. Si
continuamos calentando este hierro, a una temperatura de 4000 – 4500 grados Kelvin el color
es un blanco neutro. Si todavía lo calentamos mas, cuando llegamos a 6000 – 6500 grados
Kelvin, el tono que ha adquirido el hierro es un blanco frio que se aproxima a azulado. Debemos
de tener claro que, cuando hablamos de la temperatura de la luz, hablamos de la sensación que
produce en el ojo humano, no tiene que ver con el calor físico.
En la siguiente imagen se puede ver lo que acabamos de comentar

* antes de continuar adelante, dejar claro que el grado Kelvin (K) es igual al grado
centígrado, pero en la escala de temperatura absoluta, el “0” está fijado en -273.16ºC (cero
absoluto)
Las diferentes temperaturas de color nos ayudan a crear diferentes atmósferas en el espacio.
Estas diferentes temperaturas de color nos garantizan el poder adaptar la iluminación a cada
ambiente en función de los requisitos que nos pidan. Las tres temperaturas de color mas
comunes son Blanco Cálido, Blanco Neutro y Blanco Frío.
La luz cálida (alrededor de los 3000K), que es una luz amarillenta, se recomienda para generar
ambientes tranquilos, de descanso, relajación, la sensación es que es mas acogedora. Los
tonos cálidos se suelen utilizar en las salas de estar, en los dormitorios, recibidores…
La luz neutra (alrededor de 4000K), que es una luz blanca neutra, se suele utilizar
generalmente para iluminación básica. Normalmente se suele usar en entornos que no
requieran los matices específicos de las luces cálidas o frías.
La luz fría (alrededor de los 6000K), que es una luz blanca azulada, se recomienda para
ambientes dinámicos y de mucha actividad puesto que esta tonalidad colabora a estimular y
generar actividad. Se suele utilizar en cocinas, baños, pasillos, zonas de estudio, locales
comerciales, oficinas…
En la siguiente imagen podemos ver distintos ejemplos de temperatura de color en grados Kelvin

A modo de curiosidad, comentar que con una misma lámpara, las tonos fríos dan una sensación
de mayor luminosidad que los tonos cálidos. Esta sensación de mayor luminosidad se puede
incluso medir con el luxómetro, de ahí que se suele decir que las luces frías tienen mas
rendimiento que las luces cálidas. Dicho de otro modo, una luz fría aporta mas lúmenes para la
misma intensidad, de ahí el percibir mayor luminosidad.
Que una luz sea fría o cálida puede incidir tanto en nuestro rendimiento como en nuestro
descanso. Por eso es necesario elegir correctamente la iluminación para cada situación, tanto
para nuestra zona de trabajo como para nuestra zona de descanso.
Una gran ventaja de la iluminación led es que se determina su temperatura de color en el
proceso de fabricación, esto quiere decir que solo emiten luz en la temperatura de color para la
que han sido fabricados
Temperatura de color de la luz. Qué son los
grados Kelvin
Julio 3, 2015 Eficiencia Energética No Comments

TEMPERATURAS DE COLOR EN ILUMINACIÓN LED. LUZ CÁLIDA, NEUTRA Y


FRÍA.
¿Por qué un determinado tono de color se expresa en grados kelvin a la hora de
habar de bombillas?, pues bien la explicación es la siguiente:

El color de una fuente de luz se define comparando su color dentro del espectro
luminoso con la luz que emitiría un cuerpo negro calentado a una temperatura
determinada; a pesar de no reflejar una medida de temperatura expresamente.

La siguiente tabla ya nos da una visión clara de los grados que equivalen, a lo que
coloquialmente llamamos en iluminación luz cálida, luz neutra y luz fría.

Temperatura de colo de la luz. Grados Kelvin

¿QUÉ USO SE LE SUELE DARA A CADA TEMPERATURA DE COLOR?


La iluminación LED con temperaturas de color cálidas (2200K-3500K) se suele usar
en habitaciones, dormitorios, salas de estar o salones por ejemplo, también en
salones de masaje o centros de fisioterapia, es decir, en lugares donde se busca un
ambiente distendido, de relajación y de descanso.

La luz neutra (3500k-5000k) en iluminación LED suele aplicarse para zonas donde se
recibe luz natural como en cafeterías, o bajos comerciales, donde la combinación de
la luz natural y la iluminación LED se suman para dar la luminosidad necesaria.

Por último la luz fría (5000K-6500k), quizás sea la que más usos o aplicaciones tiene
en iluminación LED. En uso doméstico este tipo de iluminación es la adecuada para
baños, servicios, aseos y también en cocinas, es decir, zonas que requieren una
buena visibilidad para las diferentes tareas que se puedan realizar en ellas. También
es la más utilizada en oficinas, zonas comerciales, almacenes, tiendas,
supermercados, farmacias, ambulatorios, hospitales etc; resumiendo, en zonas de
actividad laboral.

Por último decir que según nuestra experiencia, estas son las pautas más comunes,
pero que luego depende también mucho el gusto de cada uno, la decoración, la
sensibilidad a la luminosidad de cada persona, entre otros factores a la hora de
seleccionar que tipo o que temperatura de color escogeremos para nuestra
iluminación LED.
Por poca idea de iluminación y componente lumínicos que tengas, es muy posible que te hayas
preguntando en alguna ocasión el porqué de los distintos tonos de color que ofrecen las bombillas
dependiendo de su tipología. Esto no es debido a otra cosa que a la temperatura de color de una
fuente de luz.
¿Qué es la temperatura de color?
Si nos remitimos a la todopoderosa Wikipedia y la definición que nos ofrece de la temperatura de
color, leeremos que que la temperatura de color “se define comparando su imagen i semejanza, para
una puesta en escena luminosa y con sus rojos el color dentro del espectro luminoso con el de la luz que
emitiría un cuerpo negro calentado a una temperatura determinada”.
¿Y qué quiere decir esto?
Pues si dejamos a un lado el componente más técnico y nos centramos en una explicación más
campechana,la temperatura de color no es otra cosa que las distintas tonalidades que una luz puede
tener. Es decir, si una luz ofrece unos tonos más amarillos, más blancos o más azulados. Esta
temperatura se mide en grados Kelvin (K).

¿Qué tipos de temperatura de color puedo encontrar?


Aunque en un principio no te suene demasiado, la temperatura de color la podríamos clasificar en
tres grandes grupos de manera que poniéndote un simple ejemplo de cada uno de ellos tendrás
claro qué tipo de luz es:

 Luz fría: Que iría de los 6500K hasta aproximadamente los 5300K. Esta temperatura ofrece
tonos azulados y podemos encontrarla en nuestro día a día en tubos fluorescentes, por ejemplo.
 Luz día: Que va desde los 5200K hasta los 3200K. Esta temperatura es la que solemos
encontrar en la luz natural oscilando entre la luz del Sol a mediodía (5200K) y la luz de un
atardecer (3200K).
 Luz cálida: El rango más habitual en el que la podemos encontrar es de los 3200K hasta
aproximadamente unos 2500K. Es una luz claramente amarillenta, propia de bombillas
tradicionales, o la luz que podría desprender una vela.
¿Qué es la Temperatura de Color?
Podríamos definir temperatura de color como la dominancia de alguno
de los colores del espectro lumínico sobre los demás, de modo que
altera el color blanco hacia el rojo o hacia el azul en dicho espectro.
¿Qué quiere decir eso? Pues que la luz, ya sea natural o artificial, tiene
una dominante de color que tiende hacia el rojo (pasando por el amarillo
y el naranja), o hacia el azul (pasando por el blanco). Esto hará que los
tonos de nuestra fotografía se alteren, y que el blanco no aparezca
como un blanco puro, sino que tenderá a ser rojizo o azulado.

El color de la luz, o la temperatura de color, se mide en Kelvin, donde el


color blanco o neutro se sitúa en los 5.500 K, que equivaldría a la luz del
mediodía. La luz con temperatura menor de 5.500K se irá haciendo
más amarillenta gradualmente, hasta alcanzar tonos anaranjados y
finalmente rojizos. Por otra parte, la luz con temperatura mayor de
5.500K se irá haciendo más azulada gradualmente, desde un tono
cian hasta un tono azul marino.

Así pues, un día nublado podría llegar a los 12.000K, es decir, tendría
una luz muy azulada, mientras que un atardecer bajaría hasta los
2.000K, es decir, tendría una luz muy anaranjada. A continuación
encontrarás una tabla donde están situados varios ejemplos en su
correspondiente temperatura de color.
Temperatura de Color: Qué Es y Cómo
Sacarle Jugo en tus Fotos
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NOEMÍ LEÓN
CONCEPTOS BÁSICOS
Es posible que hayas oído hablar alguna vez de la "temperatura de
color", pero que no tengas claro lo que es. Está muy relacionada con el
"balance de blancos", otro concepto que probablemente te suene.

¿Quieres entender completamente estos conceptos y saber cómo


influyen en tus fotografías? Has llegado al lugar adecuado.

Antes de empezar a explicarte qué es la temperatura de color, me gustaría que hagas


memoria y pienses en alguna situación en la que hayas tomado una foto, y el color que te
ha salido era muy diferente al que había en realidad. Te ha salido mucho más rojiza o
anaranjada (cálida), o mucho más azulada (fría). Es decir, te ha salido con una
"temperatura de color" diferente. Esto lo podemos corregir con el balance de blancos, que
te explicaré más adelante. Vamos primero con la temperatura de color.

A la izquierda, una fotografía con temperatura de color fría, tomada a 3230K. A la


derecha, la misma fotografía con una temperatura de color cálida, a 7690K.

¿Qué es la Temperatura de Color?


Podríamos definir temperatura de color como la dominancia de alguno
de los colores del espectro lumínico sobre los demás, de modo que
altera el color blanco hacia el rojo o hacia el azul en dicho espectro.
¿Qué quiere decir eso? Pues que la luz, ya sea natural o artificial, tiene
una dominante de color que tiende hacia el rojo (pasando por el amarillo
y el naranja), o hacia el azul (pasando por el blanco). Esto hará que los
tonos de nuestra fotografía se alteren, y que el blanco no aparezca
como un blanco puro, sino que tenderá a ser rojizo o azulado.
El color de la luz, o la temperatura de color, se mide en Kelvin, donde el
color blanco o neutro se sitúa en los 5.500 K, que equivaldría a la luz del
mediodía. La luz con temperatura menor de 5.500K se irá haciendo
más amarillenta gradualmente, hasta alcanzar tonos anaranjados y
finalmente rojizos. Por otra parte, la luz con temperatura mayor de
5.500K se irá haciendo más azulada gradualmente, desde un tono
cian hasta un tono azul marino.

Así pues, un día nublado podría llegar a los 12.000K, es decir, tendría
una luz muy azulada, mientras que un atardecer bajaría hasta los
2.000K, es decir, tendría una luz muy anaranjada. A continuación
encontrarás una tabla donde están situados varios ejemplos en su
correspondiente temperatura de color.
¿Cómo Influye el Balance de Blancos en la
Temperatura de Color?
Así como nuestros ojos son capaces de compensar la temperatura de
color que hay, nuestra cámara no será capaz de hacerlo correctamente
por sí sola. Por eso será importante decirle a nuestra cámara qué
temperatura de color hay en el ambiente en el que estamos,
mediante el balance de blancos. Hoy en día la mayoría de las cámaras
digitales tienen un apartado de balance de blancos en su menú.
Podremos encontrar 4 maneras diferentes de decirle a nuestra cámara
qué temperatura de color tiene la luz en donde estamos haciendo la
fotografía.

1. Modo automático: El modo automático es el menos preciso de


todos, ya que la cámara interpreta mediante su sensor qué tipo de
luz hay. Normalmente funciona bien con luces neutras, pero si nos
encontramos en un atardecer, o una habitación con luz artificial, es
posible que no nos de un buen resultado.
2. Modos semiautomáticos: La mayoría de cámaras tienen unos
presets de balance de blancos en los que le podemos indicar a la
cámara situaciones específicas, como luz artificial, día soleado, día
nublado, atardecer, etc. Estos modos suelen funcionar bastante bien
en situaciones estandard, ya que podremos indicarle a la cámara en
qué situación nos encontramos. Sin embargo, no nos servirán si nos
encontramos en un ambiente diferente, o si queremos conseguir un
balance de blancos que no sea neutro.

3. Personalizado: Aunque no todas, muchas cámaras te darán la


opción de personalizar el balance de blancos haciéndole una
fotografía a una superficie blanca o con un gris neutro, para que la
cámara determine cuál es el blanco en ese ambiente y adecúe los
demás tonos a ese que le hemos indicado. Pese a que existen unas
tarjetas llamadas "carta de grises" que te permiten llevar siempre
encima blanco, gris y negro neutros, también puedes usar un folio, o
incluso una pared blanca que haya en el lugar.

4. En Kelvin: Muchas cámaras también te ofrecen la opción de


especificar tú mismo en qué número Kelvin queremos tomar la
fotografía. Sin embargo, esto tenemos que entenderlo bien porque
puede llevarnos a confusiones. Si por ejemplo ponemos 2000K en
este menú pensando en la tabla que hemos visto anteriormente,
podríamos pensar que la fotografía nos saldrá con una temperatura
de color anaranjada. Sin embargo nos saldrá una foto muy
azulada.¿Por qué ocurre esto? No, no nos hemos equivocado. Lo
que ocurre es que la cámara no está disparando a 2000K, sino que
está intentando compensar los 2000K que "le hemos dicho que hay
en el ambiente" con ese tono azulado, para que el blanco sea blanco
puro. Eso es lo que hace este modo: nosotros le indicamos qué
Kelvin tenemos en el ambiente, para que ella lo compense y deje el
blanco de color blanco. Sin embargo, este modo normalmente no lo
usaremos así, sino que lo usaremos para "engañar" a nuestra
cámara, para conseguir exactamente la temperatura de color que
más nos interese.
Finalmente, recuerda que un balance de blancos que no sea neutro
no siempre será incorrecto. Muchas veces no buscaremos que el
blanco sea blanco, sino que querremos darle a nuestra fotografía una
temperatura de color más atractiva. Por ejemplo, en una atardecer será
más interesante tener una dominante anaranjada o cálida, mientras que
en una fotografía nocturna quizás nos interese más tener una dominante
azulada o fría.

Por eso es importante conocer también los modos manuales del balance
de blancos, y no depender únicamente de los modos automáticos.
Así podremos determinar exactamente qué temperatura de color
queremos que tenga nuestra fotografía.

La Temperatura de Color en la Edición


Digital
Pese a que siempre recomiendo intentar sacar tu fotografía lo mejor
posible directamente en tu cámara, para tener que procesar lo menos
posible, también podemos ajustar la temperatura de color en
programas de edición como Photoshop o Lightroom. Podremos
editar imágenes tanto en formato RAW como en formatos comprimidos
como JPG, PNG o TIFF.
En ambos programas encontraremos un deslizador principal, donde
podremos virar nuestra foto a una temperatura más azulada o más
amarillenta. Además, debajo de este primer deslizador encontraremos
otro secundario que nos permitirá dotar a nuestra fotografía de un matiz
verde o magenta. Así, podremos ajustar el color de nuestra fotografía
completamente a nuestro gusto, de manera rápida y sencilla.

 En Photoshop deberemos entrar en el menú Filtros/Filtro de Camera


RAW y lo encontraremos al principio de la primera pestaña llamada
"Básicos".
 En Lightroom deberemos ir a la pestaña Revelar, y lo encontraremos
al principio del primer submenú llamado "Básicos".
Controla el Color de tus Fotografías
Ahora que ya conoces qué es la temperatura de color y cómo controlarla
usando el balance de blancos, tan sólo te queda ponerlo en práctica.
Intenta realizar la misma fotografía usando temperaturas de color
diferentes para ver el resultado, y comprobar cómo cambian y qué
sensaciones tan diferentes nos transmiten, pese a ser la misma imagen.

¿Quieres enseñarnos alguna foto que hayas realizado donde la


temperatura de color marque la diferencia? ¿Has hecho alguna
prueba con diferentes temperaturas de color? ¡Nos encantaría verlas!

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