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Radical libre
Los radicales libres (especies reactivas de oxigeno), son átomos, por lo general de oxígeno, de una gran inestabilidad,
reactividad y actividad biológica que actúan como oxidantes.
La inestabilidad de los radicales libres se debe a que han perdido uno de sus electrones e intentan reponerlo tomándolo de
otros átomos, buscando estabilizarse robándole un electrón a moléculas estables cercanas.
La molécula agredida se oxida (nombre químico de la pérdida de un electrón), deja de cumplir su función y se transforma en un
nuevo radical libre. Se desata una reacción en cadena donde cada nuevo radical libre roba un electrón a otra molécula,
pudiendo dañar las células.
Los radicales se liberan cuando el alimento es metabolizado en nuestras células para producir energía, y también se producen
por influencias externas cuando nuestro organismo recibe el impacto de diversos contaminantes o radiaciones.
Antioxidante
Los antioxidantes son moléculas que inhiben la acción destructiva de los radicales libres, siendo capaces de retrasar o
inhibir de forma significativa la oxidación.
Los antioxidantes tiene capacidad de ceder fácilmente electrones, cuando se encuentran con un radical libre le ceden un
electrón, los estabilizan y detiene la reacción en cadena, se oxidan y se convierten en sustancias inocuas.
Los antioxidantes pueden actuar por distintos mecanismos y a distintos niveles de la cadena de oxidación:
Disminuyendo la cantidad de oxigeno.
Previniendo el inicio de reacciones en cadena mediante la inactivación de radicales libres (OH*).
Por unión de iones metálicos.
Por descomposición de peróxidos a productos no–radicales.
Interfiriendo en las reacciones en cadena (ej. fenoles).
Reparación del daño (ej. reparación del ADN).
Por varios mecanismos de acción.
Estrés oxidativo
El estrés oxidativo se produce cuando hay un desequilibrio persistente entre moléculas antioxidantes y prooxidantes
(radicales libres) en los tejidos, y las moléculas prooxidantes están en exceso: exceso de oxidación.
El estrés oxidativo daña las células (membranas, proteínas, ADN...) y los tejidos, altera la expresión de genes responsables de
patologías crónicas, y contribuye al envejecimiento y a gran número de enfermedades.
Factores de riesgo de estrés oxidativo
Son los factores que incrementan las moléculas prooxidantes (radicales libres) y/o disminuyen las antioxidantes:
Fumar.
Estrés.
Fármacos. Determinados fármacos como el paracetamol, con la administración prolongada.
Contaminantes ambientales: humo de tabaco, humo de los coches, polución industrial, contaminación interior, radiaciones,
productos de higiene, de belleza y de limpieza...
Alimentación inadecuada: exceso de calorías, contaminantes, algunos aditivos, exceso de azúcares y grasas saturadas,
grasas trans "malas", aporte insuficiente de nutrientes antioxidantes y fitoquímicos antioxidantes...