Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
ciology, regarding it as a scienti c discipline. He ción. Sin embargo, los sociólogosestamos habitua-
analyses the definitions of its object, elaborated dos presenciar realizar tipo de esfuerzo
by a o este
Durleheim and Weber; and states that sociology ga- teórico ense
plantean —de manera
el que casi ine-
ins its disciplinary profile as it is introduced into vitable- problemas que se relacionan
dos con lo
the university domain; he also attempts to clarify que podríamos llamar la identidad y la unidad de
the assertion on the existence of a theory of socio- esa
disciplina El primero concierne, pues, a la
logical knowledge, implicit in the works of the especi cidad de la sociología, a la delimitación
classics, and affirmed by Bourdieu, Chamboredon convencional de su objeto y a la relación de proxi-
and Passeron. midad o de distancia de ese objeto con el de otras
El refiere a la
disciplinas (2). segundo se
posibili-
Resumen: El autor se
plantea, en este articulo, dad de a rmar la existencia de una
perspectiva
el doble problema de la identidad y de la unidad común en de los fenómenos
el tratamiento socia-
de la sociología, considerada como
disciplina cien- les, presente en el quehacer y en la obra cientifica
tifica. Analiza la definición de su objeto elaborada de clásicos y contemporáneos que han sido recono-
por Durkheim y por Weber. sostiene que la socio- cidos como sociólogos (3). Todo esto, claro está, a
logía adquiere su perfil disciplinario al insertarse pesar de las diferencias, a veces
profundas, que
claramente en el espacio académico universitario puedan detectarse u observarse en sus diversos
y
discute e intenta
clarificar la tesis de la existencia enfoques teóricos, sobre los aspectos generales o
de una teoria del conocimiento sociológico, impli- particulares del objeto de la disciplina.
cita en la obra de los clásicos, defendida por Bour- En el orden antes indicado, abordaremos ambos
dieu, Chamboredon problemas, el fin de la tesis,
y Passeron. retomar
con
presen-
tada por Bourdieu, jean-Claude Chambore-
Pierre
No puede a rmarse ciertamente que la sociolo- don y Jean-Claude Passeron, en Le métier de socio-
gía sea la única disciplina cientifica que sugiera o logue(4), sobre la posibilidad de afirmar la existen-
cia de una teoría del conocimiento sociológico: bieron al margen de la institución universitaria
sobre su contenido y función en el quehacer socio- Es en el seno de las universidades alemanas y
lógico. francesas donde la sociología va a
adquirir carta de
ciudadanía. Destaquemos, por un lado, la actividad
1. La sociologíay su
objeto. académica de Ferdinand Tónnies en la Universidad
de Kiel, así como, la de Georg Simmel en las Uni-
Con frecuencia se coincide en atribuirle a Com- versidades de Berlín y Estrasburgo y la de Marx
te la paternidad de la sociología. Se destaca el he- Weber en las de Friburgo y Heilderberg. Subraye-
cho, bien conocido, de haberle dado nombre a la mos, por otro lado, la actividad docente e investi-
disciplina, pero subraya, igual
no se de manera, gativa de Emile Durkheim en las Universidades de
que para Comte las dos ramas principales de su Burdeos y París.
recién inaugurada física social las constituían la Es posible que en el caso
específico de la uni-
estática y la dinámica sociales, con lo que, el mis- versidad francesa, las condiciones institucionales
mo Comte, señalaba la importancia fundamental de la misma estructura universitaria y su
proceso
del estudio e
investigación de los fenómenos bási- de modernización en de la instauración
el contexto
cos de la estabilidad y del cambio social: fenó- de la III República, hayan contribuido decisi-
menos
que remiten a
interrogantes persistentes en vamente al reconocimiento y al desarrollo de la
el quehacer sociológico, cuyas formulaciones más sociología como disciplina científica. Los márge-
simples las encontramos en las preguntas ambicio- nes tradicionales que había brindado la institución
sas
y sugestivas: por qué y cómo las sociedades universitaria para responder a las demandas exter-
persisten o sobreviven;
por qué y cómo las socieda- nas, tanto en lo referente a la actividad formadora
des cambian o se
transforman(5). El carácter privi- como en lo referente al sentido y al producto de la
legiado o el énfasis concedido a una u otra de estas investigación, así como la existencia de condicio-
interrogantes ha configurado, a lo largo de la his- nes institucionales de reproducción de ese saber y
toria de la disciplina, paradigmas o matrices teóri- de los mismos agentes encargados a su vez de esa
cas
que han pretendido dar cuenta de esos fenó- reproducción, enmarcado todo ello en un
proceso
menos, al destacar, alternativamente, la importan- de crecimiento y diversificación del aparato univer-
cia del consenso social fundado en los valores com- sitario (1880-1890) que caracteriza este período
partidos por los agentes sociales, o bien, el carácter de la III Repúblicaque sucede al Imperio de Napo-
ineludible de los diversos conflictos y luchas socia- león III, c0nduce no sólo a un florecimiento de la
les que enfrentan a individuos o unidades sociales actividad sociológica, sino que provoca una cierta
y que generan cambios y mutaciones en el campo adhesión de los durkheimnianos a los valores y
histórico y social (6). proyectos democratizantes de la III República (9).
Sin embargo, el esfuerzo teórico precursor de Las reformas educativas realizadas por Jules Fe-
Comte en Francia y de Herbert Spencer en
Inglate- rry en 1880, que hicieron posible la enseñanza lai-
rra,por dotar a la naciente disciplina de un
objeto ca, gratuita obligatoria
y municipios en todos los
propio y claramente delimitado, realizado media- a de Francia; ley que permite la libre asociación
la
dos del pasado siglo, resultó un intento relativa- sindical aprobada en 1884; el proceso de seculari-
mente fallido. Marcados por una concepción evolu- zación acelerado que culmina con la separaciónde-
cionista, universalista y unilineal, confundieron finitiva de la Iglesia y del Estado a
principios de
ambos el estudio de las sociedades concretas con el este siglo. no podían menos que satisfacer a Durk-
supuesto establecimiento de leyes generales de la heim, quien aceptaba gustoso el calificativo de ra-
sociedad humana concebida en su
globalidad (7). cionalista, para caracterizar su
postura teórica
.La instalación del capitalismo fabril en Europa (10). Esto explica la
beligerancia de Durk- activa
y, sobre todo, los conflictos sociales que agitaron a heim, y de su grupo, en favor de la rehabilitación
estas sociedades, hicieron posible una nueva re- de Alfred Dreyfus, en el célebre escándalo políti-
flexión sobre el acontecer histórico y social. No co, que escindió asimismo el campo académico:
obstante, la configuración de la sociología como Durkheim interpretó su rechazo a la
injusta conde-
una
disciplina científicamente reconocible no ten- na
y a la degradaciónde la que fue objeto Dreyfus,
dría lugar sino unas décadas después.Para obtener como un combate contra el irracionalismo y la ar-
este reconocimiento, la sociología debía conquis- bitrariedad.
tar su inserción en el espacio académico universita- Pero, más que la proyección política de la acti-
rio. Tanto Comte como Spencer enseñaron o escri- vidad de Durkheim, nos interesa poner de mani-
TEORIA DEL CONOCIMIENTO SOCIOLOGICO 119
esto la de nición progresiva del o cio del soció- La hipótesis explicativa de Durkheim es bien
el ámbito universitario: el conocida: la práctica religiosa protestante
logo en
disciplinario re- provoca
grado menor de cohesión integración social
y el auto-reconocimiento de un o
conocimiento ese que-
la práctica religiosa católica y el índice de sui-
hacer como una práctica de carácter sociólogico. que
Reiterémoslo: la apertura del espacio institucional cidios variará inversamente de acuerdo con ese gra-
universitario permite el desarrollo de una
práctica
do o nivelintegración social
de .
tingente variable de muertes voluntarias. Más espe- glas del método sociológico, Durkheim reconoce,
cíficamente: las sociedades europeas en las que no sin cierta amargura, que “nos fue casi imposible
predomina la práctica religiosa protestante mues- hacernos oír” (13) y aclara que para él la concien-
tran tasas de suicidio más elevadas que aquellas en cia, tanto individual como social, no
representan
las que predomina la práctica religiosa católica. nada sustancial, sino un
conjunto más o menos
120 OSCAR FERNANDEZ
sistematizado de fenómenos sui generis. Según originalmente en los Archivos de ciencia social y
Durkheim: política social entre los años de 1904 y 1905 (17).
Interesado en
explicarse el desarrollo histórico
“Tratar de los hechos de un cierto orden como de cosas,
no es, por consiguiente, clasi carlos en tal o cual catego-
del capitalismo occidental caracterizado por la em-
ría de lo real, es observar frente a ellos una cierta actitud presa de producción que controla la rentabilidad
mental. Es abordar su estudio tomando por principio el por el cálculo racional, que se hace posible gracias
que se ignora absolutamente lo que ellos son y que sus a la contabilidad moderna y al establecimiento de
propiedades caracteristicas, como las causas desconocidas
balance, Weber el origen histó-
de que dependen, no se pueden descubrir
un se
interroga por
por la introspec-
rico de ese
espiritu del capitalismo, ese con-
ción, ni siquiera por la introspección mas atenta” (14). por
junto de preceptos prácticos que orientan la activi-
dad económica representan, para Weber,un
Aunque pudiésemos conocer las razones indi- y que
constructum que permite entender ese “nuevo esti-
viduales pudiesen haber manifestado
que quienes
lo de vida sujeto ciertas normas”
se han suicidado, la explicación sociológicadel fe- a
que aparece
“sometido ética determinada” (18).
puede asumir de nitiva-
una
nómeno del suicidio no
a
efecto, se puede llamar institución, sin desnaturalizar el más adecuada posible sus acciones con miras a la
sentido de esta palabra, a todas las creencias y a todos los
obtención de la salvación, Weber lo encuentra aho-
modos de conducta instituidos por la colectividad; enton-
ra en los empresarios calvinistas que despliegan su
ces se puede de nir la sociología diciendo que es la cien-
cia de las instituciones, de su génesis y de su funciona- actividad en la esfera intramundana, lo que produ-
miento” (15). ce “esta racionalización de la conducta en el mun-
do con nes ultramundanos” (20).
Y si en la naciente disciplina sociológica, la Mediante el ejercicio efectivo de una imagina-
reflexión teórica de Durkheim investigación ción
y su
rigurosamente sociológica, Weber intenta se-
(16), Max Weber, alimentado por una influencia mentereligiosos. Como lo ha señalado claramente
teórica radicalmente distinta, intentará, a su vez, Raymond Aron, en su investigación Weber ha que-
convertir la investigación tradicionalmente histó- rido:
rica en una
investigación propiamente sociológica.
Así lo pone de mani esto su estudio sobre La ética “Analizar los efectos en la conducta de una cierta creen-
protestante y el espíritu del capitalismo, publicado cia. Weber establece las relaciones signi cativas entre las
TEORIA DEL CONOCIMIENTO SOCIOLOGICO 121
creencias religiosas y una actitud vis-á-vis de la existencia, cultura es el mundo de los valores orientan las
que
que es la consecuencia, de hecho, que ellos han derivado acciones humanas, es necesario comprender la rela-
de esas creencias” (21).
ción de esas acciones con esos valores; la elabora-
ción —por investigador-
parte del
tipos ideales, de
Enfrentado a la tarea de considerar el desarrollo
del moderno las sociedades permite aproximación a la multiplicidad de lo
una
capitalismo en euro-
real, mediante “conceptos y juicios que no son la
peas, entendidas como
con guracionesreales e in- realidad empírica, ni la copian, pero que permitan
dividuales, desde el ángulo de la signi caciónque ordenarla válida”
conceptualmente de manera
ellas presentanpara el estudioso contemporáneo
Weber intenta de mani esto la impor- (25). Si los agentes sociales pueden determinar los
(22), poner
nes de
de ciertos del ascetismo
sus acciones y adecuar sus medios a esos
tancia aspectos puritano
calvinista en lo que se re ere al desarrollo de cier- nes, no puede hablarse en sentido estricto de le-
tos aspectos del capitalismo industrial Sin yes históricas, sino más bien de secuencias proba-
europeo.
bles de acciones en el caso de que repitan deter-
pretender agotar el análisis de esos
procesos y de
se
minadas condiciones:
las conexiones signi cativasque bien podrían esta-
blecerse (23), su
investigación procura desentrañar
las consecuencias que pueden observarse, en el “Estamos de historia
en presencia una que no ignora las
campo económico, de la vigencia práctica de deter- irregularidades y de una sociología que no elimina ni los
minados principios ético-religiosos que estuvieron accidentes, ni las ideas, ni las voluntades humanas” (26).
ausentes en otras sociedades,
presenta- adonde se
captación del sentido o de la conexión de sentido nir y a señalar forma explícita el objeto preciso
en
Weber resulta clara y decisiva. Si el mundo de la ña, acorde con nuestro interés expositivo.
122 OSCAR FERNANDEZ
2. La teoría del conocimiento sociológico: conte- social con la teoría del conocimiento de lo social que
nido y función posibles. abrazaban, por lo menos implícitamente en su práctica
sociológica, el proyecto epistemológico puede permitirse
esta distinción preliminar para vincular autores cuyas opo-
confrontación
La de los puntos de vista de siciones doctrinarias ocultan el acuerdo epistemoló-
Durkheim y de Weber sobre el objeto que ambos gico”(30).
asignan a la sociología y sobre las estrategias meto-
dológicas que derivan de ello, parece sugerir un El razonamiento de Bourdieu es claro: la exis-
panorama encontrado en el que las diferencias o tencia de un acuerdo epistemológico.cuyo conte-
las oposiciones parecen privar sobre los acuerdos o nido se identifica con el de la teoría del conoci-
las coincidencias. miento sociológico y que se distingue del conteni-
“sui generis” de los
La de la facticidad
tesis do especí co de las diversas teorías que sobre lo
hechos sociales en
contraposición a la a rmación social han elaborado fundamentalmente los clási-
del sentido subjetivo del cual es portador toda ac- cos. permite y reconocer
produc- caracterizar la
ción social; la importancia acordada por Durkheim ción propiamente sociológica. Las di cultades que
a la determinación
a la
búsqueday de leyes socia- el razonamiento plantea son asimismo claras: al no
les el énfasis puesto por
generales que contrasta con haber sido explícitamentecomo
formulado tal, el
Weber la comprensión
en
y explicación del desa- contenido preciso de ese acuerdo epistemológico
rrollo individualidades
de históricas el fácil
concretas; no
permite una aproximación. Más aún:
recurso a las variaciones comparativas cuanti ca- Bourdieu señala que con frecuencia los mismos au-
metodológico de los tipos ideales que permiten a ría sobre el sistema social con los principios episte-
Weber abordar explicar la multiplicidad y la di- la teoría
y mológicos que constituirían del conoci-
versidad de los procesos reales, no son sino algunas miento sociológico.
de esas diferencias u
oposiciones posibles que sepa- Bourdieu asume el riesgo de explicitar y preci-
ran
y distancian las teorías sociológicas elaboradas el contenido de teoría. Y
sar esa corre ese riesgo
por Durkheim y por Weber. porque atribuye una
particular importancia a esa
Sin embargo, en estas condiciones, la interro- tarea. En efecto, la función atribuida por Bourdieu
gante que planteábamosinicialmente sobre la po- a la teoría
del conocimiento sociológico es irrem-
sibilidad de a rmar la existencia de una decisiva. La teoría del conocimiento
perspec- plazable y so-
do como sistema de esquemas manejables y trans- indeterminado que ‘sabe’ o tiene clara idea; actúa en la
feribles, en este caso no es sino mayor parte de los casos por instinto o costumbre. Sólo
que
ocasionalmente —y en una masa de acciones análogasúni-
“la interiorización de los de la teoria del camente en algunos individuos- se eleva a conciencia un
principios cono-
sentido (sea racional o irracional) de la acción. Una acción
cimiento sociológico” (33).
con sentido efectivamente tal, es decir, clara y con absolu-
ta conciencia es, en la realidad, un caso limite” (39).
Pero la ruta teórica escogida por Bourdieu lo
conduce más bien a una tentativa de hallazgo y
A partir de los textos de los clásicos, Bourdieu
clarificación del papel de esos principios en los dis-
pretende fundamentar asi e ilustrar su tesis, según
positivos teóricos de Marx, Durkheim y Weber la cual, Marx, Durkheim Weber han asumido,
y
(34). Recurriendo al apoyo de ciertos textos,
Bourdieu procede a una enunciación asistemática
aceptado y desarrollado ese
principio epistem ológi-
y de la no-conciencia, haber
co
que pudo operado
expresamente alejada de lo que él consideraría una como básico orientador en su
quehacer
supuesto
presentación escolar o pedagógicadel sistema que científico.
configuraríanesos principios. No obstante, destaca claramente
Bourdieu no
Como piedra angular de teoria, Bourdieu
esa
en la formulación—citada por Durk- original
que
sitúa y precisa lo que él denomina principio de la
heim- el principio contiene una doble a rmación
no-conciencia, “concebido como condición Sine
de la constitución complementaria y, sin embargo, perfectamente dis-
qua non de la ciencia sociológi- tinguible. El principio, al cual hace referencia
ca”(35).
Durkheim, señala dos cosas distintas:1) que puede
Bourdieu no define él mismo de manera expli- resultar fecundo, para el investigador social, partir
cita el contenido y significado de ese principio fun- de supuesto
un desconocimiento o no-conciencia
damental. Cede la palabra a Durkheim para que, en
por parte de los agentes sociales, de las causas pro-
una cita que revela un acuerdo definido y delimita-
do, quede patente el contenido
fundas de sus acciones; y 2) que puede resultar
y la importancia de el considerar las causas
igualmente fecundo que
ese
principio epistemológico: “Creemos fecunda la
acciones
idea de que la vida social debe explicarse, no por la que esos
agentes atribuyen a sus
propias
no son, en
principio, correctas.
concepción que se hacen los que en ella participan, de
sino por las causas
En otras palabras, a
partir este principio es
profundas que escapan a la con- los sociales sólo
ciencia” posible suponer que actores no
más
principio del determinismo metodológico en la ló-
to creemos
que son
transparentes” (38).
gica de esta ciencia, del cual ninguna ciencia puede
Según Bourdieu, Weber participa asimismo
de
sin negarse tal”
acuerdo al afirmar que el sentido cultural
renegar como (40).
este de la
Sin problematizar el concepto de determinis-
acción social no se identifica necesariamente con el
sentido subjetivo que señalan los agentes individua-
mos
metodológico, que aparentemente se distin-
oscura semiconsciencia o plena inconsciencia de su ‘senti- “Si un fenómeno se presentara en una experiencia con
do mentado'. El agente más bien ‘siente’ de un modo una apariencia tan contradictoria, que no se ligara de una
124 OSCAR FERNANDEZ
supone que los agentes sociales usualmente desco- la práctica cientí ca misma, amenazada sin cesar por el
nocen las causas reales que determinan sus accio- error, las condiciones en las cuales se puede discernir lo
nes
y atribuyen erróneamente otras causas a esas verdadero de lo falso, en el pasaje desde un conocimiento
menos verdadero a un conocimiento más verdadero, o más
acciones, el principio del primado de las relaciones
bien, como lo a rma Bachelard, ‘aproximado es decir ,
En la tarea de definir su
objeto de investigación, dad de la sociología en el contexto de las ciencias
de ordenar las relaciones constitu-
precisar y que sociales no
quedaría por consiguiente resuelta.
centro de interés, el investigador social no El esfuerzo teórico de Bourdieu
yen su
desplegado en
de la teoría
Herbert Spencer ofrece una versión preliminar de su teo-
central sobre el contenido y el alcance ria sociológica, que desarrolló de una manera sistemática
del conocimiento sociológico: ¿no podría acaso y explícita en
Principles of Sociology, que apareció en
de sus subscriptores. Por diversas razones, ni uno ni otro (21) Raymond Aron, La sociologie allemande con-
ligaron su actividad académica a la institución universita- temporaine, op. Cit., p. 115. (La traducción es nuestra).
ria. (22) Cf. con este propósito su articulo sobre “La ‘ob-
( 9) Los procesos mencionados han sido ampliamente jetividad’ cognoscitiva de la ciencia social y de la politica
analizados por artículo
E. A. Tiryakian “L’école
en su social” en: Max Weber, Ensayos sobre metodologia socio-
durkheimienne a la recherche de la société perdue: la so- lógica, Amorrortu editores, Buenos Aires, 1978.
ciologie naissante et son milieu culturel”, en: Cahiers In- (23) En la conclusión de su investigación, Weber seña-
ternationaux de
Sociologie enero-junio 1979, pp. 99-114. la: “Hemos procurado poner de relieve los motivos funda-
(10) “(...) el único (cali cativo) que aceptamos es el mentales del hecho y el modo de su actuación en sólo un
de racionalista. En efecto, nuestro principal objetivo es punto, el más importante ciertamente. Por lo mismo, aho-
extender a la conducta humana cientí co,
el racionalismo ra deberia investigarse la manera cómo el ascetismo pro-
haciendo ver que, considerada puede redu-
en el pasado, testante fue influenciado a su vez en su desenvolvimiento
cirse a relaciones de causa a efecto que una operación no y caracteristicas fundamentales por la totalidad de las con-
menos racional puede transformar, seguidamente, en una diciones culturales y sociales, singularmente económicas,
serie de reglas para el porvenir”. E. Durkheim, Las reglas en cuyo seno nació. Pues reconociendo que, en genral, el
del método sociológico, Ediciones Morata, Madrid, 1974, hombre moderno, aún con su mejor voluntad, no es capaz
p. 15. de representarse toda la efectiva magnitud del in ujo que
(11) Ibid., p.32. las ideas religiosas han tenido sobre la conducta en la vida,
(12) Cf. sobre este asunto, el excelente trabajo de la civilización y el carácter nacional, nuestra intención no
Francoise P. -Levy, “Le suicide chez Durkheim: un pro- es tampoco sustituir una concepción unilateralmente ‘ma-
bléme de de nition”, en Cahiers Internationaux de Socio- terialista’ de la cultura y de la historia por una concepción
logie, enero-junio 1981, pp. 101-110. En el articulo, la contraria de unilateral causalismo espiritualista”. Max We-
autora destaca la importancia de la investigación de Durk- ber, La ética protestante y el espiritu del capitalismo, op.
heim y pone asimismo de mani esto la distancia que sepa- cit., p. 261.
ra la de nición teórica de suicidio elaborada por Durk- (24) Nicholas S. Timasheff, La teoria sociológica, op.
heim y la de nición operativa utilizada de hecho en la Cit., p. 219.
investigación. Los casos de suicidio registrados en los ar- (25) Max Weber, “La ‘objetividad’ cognoscitiva de la
chivos policiales, que son los datos que utiliza Durkheim, ciencia social y dela politica social”, art. Cit., p. 99.
no incluyen todos los casos que se incluirán de acuerdo (26) Raymond Aron, La sociologie allemande
con-
con de nición
la teórica dada por él en los siguien- temporaine, op. Cit., p. 98.
tes términos: “Llamamos suicidio todo caso de muer- (27) Max Weber, Economia y Sociedad, Tomo I, Fon-
te que resulta directa o indirectamente de un acto do de Cultura Económica, México, segunda edición, 1969,
positivo o negativo realizado por la propia victima, al sa- p. 5.
ber ella que el acto debia producirlese resultado”. Cit., (28) Max Weber, “La ‘objetividad’ congnoscitiva de la
por Ibid., p. 107. (La traducción es nuestra). Según la ciencia social y de la politica social", art. Cit., p. 57.
autora, la investigación se realiza a partir de un “material (29) Para efectos expositivos, nos referiremos a Pierre
menos ambicioso que el que incluye su de nición: no Bourdieu como el autor principal de la obra, sin que eso
cuenta los muertos en el campo del honor sino que se signi que que desconozcamos el hecho de que se trata de
contenta con las estadísticas de la policía que se basan en una obra colectiva.
una de nición más bien clásica del suicidio; no correrá el (30) Pierre Bourdieu « t al., El oficio de sociólogo, op.
riesgo politico de integrar en su trabajo cuantitativo los cit., p. 16.
suicidios producto del heroísmo. Conducirá su investiga- (31) Ibidem.
ción como si no hubiese modi cado la de nición del sui- (32) En el de la segunda edición de su obra,
prólogo
cidio, como si no hubiese sido necesario hacerlo en los Bourdieu con esa había pensado originalmente revi-
que
hechos, como si con la hipótesis teórica hubiese bastado”. sar la presentación de los “Presupuestos epistemológicos”
Ibid., p. 109. Ver asimismo la traducción al español de la incluidos en El oficio de sociólogo, con el n de “subordi-
investigación: Emilio Durkheim, El Suicidio: estudio de nar el discurso a una intención pedagógica”. No obstante,
sociología, Schapire, Buenos Aires, tercera edición, 1971. señala, “nos hemos detenido, entre otras razones, por el
(13) E. Durkheim, Las reglas del método sociológico, temor de que este esfuerzo de esclarecimiento pedagógico
op. Cit., p. 17. pueda llevar, debido a los límites de la comunicación es-
tercera edición, 1966, p. 112. visarse su obra: Pierre Bourdieu et Jean-Claude Passeron,
(18) Weber, La ética protestante
Max y el espiritu del La reproduction, élements pour une théorie du systéme
capitalismo. op. Cit., p. 57. d’enseignement, Les editions de minuit, Paris, 1970. Asi-
(19) Julien Freund, Sociologia de Max Weber, Edicio- mismo, en una obra más reciente, Bourdieu analiza ese
nes Peninsula, Barcelona, 1967, p. 183. mismo concepto. Cf. Pierre Bourdieu. Le sens pratique,
del Les editions de minuit, Paris, 1980; especialmente el capi-
(20) Max Weber, La e'tica protestan te y el esp iritu
capitalismo, op. Cit., p. 207. tulo tercero “Structures, habitus, pratiques” pp. 87-109.
TEORIA DEL CONOCIMIENTO SOCIOLOGICO 127