Sunteți pe pagina 1din 6

JURISPRUDENCIA

Roj: STSJ EXT 722/2018 - ECLI: ES:TSJEXT:2018:722


Id Cendoj: 10037340012018100379
Órgano: Tribunal Superior de Justicia. Sala de lo Social
Sede: Cáceres
Sección: 1
Fecha: 12/06/2018
Nº de Recurso: 302/2018
Nº de Resolución: 381/2018
Procedimiento: Social
Ponente: ALICIA CANO MURILLO
Tipo de Resolución: Sentencia

T.S.J.EXTREMADURA SALA SOCIAL


CACERES
SENTENCIA: 00381/2018
C/PEÑA S/Nº (TFNº 927 620 236 FAX 927 620 246)CACERES
Tfno: 927 62 02 36-37-42
Fax: 927 62 02 46
NIG: 06015 44 4 2017 0001806
Equipo/usuario: MAG
Modelo: 402250
RSU RECURSO SUPLICACION 0000302 /2018
Procedimiento origen: DEM DEMANDA 0000433 /2017
Sobre: DESPIDO OBJETIVO
RECURRENTE/S D/ña Remedios
ABOGADO/A: RAFAEL ARENAS MARMEJO
PROCURADOR:
GRADUADO/A SOCIAL:
RECURRIDO/S D/ña: METROPOLIS SALUD 08 SLU
ABOGADO/A: JORGE ANTONIO PALACIOS RODRIGUEZ
PROCURADOR:
GRADUADO/A SOCIAL:
Ilmos. Sres.
D. PEDRO BRAVO GUTIÉRREZ
Dª ALICIA CANO MURILLO
D. RAIMUNDO PRADO BERNABEU
En CÁCERES, a doce de junio de dos mil dieciocho.
Tras haber visto y deliberado las presentes actuaciones, la SALA DE LO SOCIAL DEL T.S.J. DE EXTREMADURA,
de acuerdo con lo prevenido en el artículo 117.1 de la Constitución Española ,

1
JURISPRUDENCIA

EN NOMBRE DE S.M. EL REY


Y POR LA AUTORIDAD QUE LE CONFIERE
EL PUEBLO ESPAÑOL
ha dictado la siguiente
S E N T E N C I A Nº 381/18
En el RECURSO SUPLICACIÓN Nº 302/2018, interpuesto por el Sr. Letrado D. RAFAEL ARENAS MARMEJO,
en nombre y representación de Dª Remedios , contra la Sentencia número 54/2018, dictada por el Juzgado
de lo Social Nº2 de BADAJOZ , en el procedimiento DEMANDA nº 433/2017, seguido a instancia de la parte
Recurrente frente a METROPOLIS SALUD 08 S.L.U., parte representada por el Sr letrado D. JORGE ANTONIO
PALACIOS RODRÍGUEZ, siendo Magistrado-Ponente la ILMA. SRA. Dª ALICIA CANO MURILLO.
De las actuaciones se deducen los siguientes:

ANTECEDENTES DE HECHO
PRIMERO: Dª Remedios presentó demanda contra METROPOLIS SALUD 08 S.L.U., siendo turnada para su
conocimiento y enjuiciamiento al señalado Juzgado de lo Social, el cual dictó la sentencia nº 54/2018, de fecha
5 de febrero de 2018 .
SEGUNDO: En la sentencia recurrida en suplicación se consignaron los siguientes hechos expresamente
declarados probados : "PRIMERO.-La actora Dña Remedios prestó servicios para la empresa Metrópolis
Salud 08, S.L., con una antigüedad del 22/05/2015, categoría de Dependienta/vendedora y salario a efectos
del despido de 34,19€ día, incluido el prorrateo de las pagas extraordinarias.(Reconocimiento demandada,
f.24, 48 a 58).SEGUNDO.-La empresa Metrópolis Salud 08, S.L., tiene como actividad la parafarmacia. (No
controvertido).TERCERO.-Entre las actividades que la empresa Metrópolis Salud 08, S.L., declara en el Impuesto
sobre el Valor Añadido, se recogen: (IAE 6524) comercio menor de plantas y hierbas, herbolario; (IAE 9429), otros
servicios sanitarios; (IAE 9722) salones e institutos de belleza; (IAE 944) Servicio de naturopatía, acupuntura
y otros servicio parasanitarios. (f.103, 110)CUARTO.-Dña Remedios presta sus servicios en el centro de
trabajo sito en Avda. Ricardo Carapeto Zambrano nº 43 en Badajoz. (No controvertido).QUINTO.-La actora el
16/05/2017 recibió carta de despido con fecha de efectos el 31/05/2017, por causas objetivas, económicas y
organizativas, consistentes en la continuada y sostenida disminución de ventas que ha generado pérdidas, lo
que ha determinado el cierre del centro de trabajo sito en Avda. Ricardo Carapeto Zambrano nº 43 en Badajoz,
dando por reproducido el contenido que obra en el f.4 y 5. (f.4 y 5, 99 a 101)SEXTO.-La empresa en la carta de
despido reconoció que a la trabajadora le corresponde en concepto de despido por causas objetivas la cantidad
de 1.255,02€, si bien no se lo ponen a su disposición por falta de liquidez.(F.4,5, 99 a 101)SÉPTIMO.-La empresa
el 31/05/2017 transfiere a la trabajadora 1.145,65€ en concepto de "nómina y liquidación". (f. 98).OCTAVO.-La
empresa tuvo los siguientes resultados: Año 2013: -121.453,22€. Año 2014. -91.527,39€ Año 2015: 4.767,90€.
Año 2016: -92.610,66€. (Informe pericial de Dña Consuelo f.135 a 142, 143 a 225)NOVENO.-La empresa tiene
varios centros abiertos, y se ha procedido al cierre del centro en el que estaba la trabajadora a finales de mayo
o principios de junio de 2017. (Pericial de Dña. Consuelo ) DÉCIMO.-La parte actora, no ostenta ni ha ostentado
cargo sindical alguno, estando afiliada al sindicato CC.OO. (No controvertido)UNDÉCIMO.-El preceptivo acto de
conciliación ante la UMAC se celebró el 12/07/2017, concluyendo el mismo intentado sin efecto. (f.7)
TERCERO: En la sentencia recurrida en suplicación se emitió el siguiente fallo o parte dispositiva: " ESTIMO
la demanda sobre DESPIDO formulada por Remedios contra la empresa METRÓPOLIS SALUD 08,S.L.,y en
consecuencia, declaro la improcedencia del despido efectuado el 31/05/2017 y condeno a dicha demandada
a que, a su opción, readmita a la trabajadora despedido en su puesto de trabajo en las mismas condiciones
que regían antes del despido o le abone una indemnización de 2.350,56€, entendiéndose que si no opta en el
plazo de cinco días procederá la readmisión, y al abono de salarios de tramitación en el supuesto que opte por
la readmisión ".
CUARTO: Frente a dicha sentencia se anunció recurso de suplicación por Dª Remedios interponiéndolo
posteriormente. Tal recurso fue objeto de impugnación por la contraparte.
QUINTO: Elevados por el Juzgado de lo Social de referencia los autos a esta Sala, tuvieron entrada en fecha
14 de mayo de 2018.
SEXTO: Admitido a trámite el recurso se señaló día para los actos de deliberación, votación y fallo.
A la vista de los anteriores antecedentes de hecho, se formulan por esta Sala los siguientes,

2
JURISPRUDENCIA

FUNDAMENTOS DE DERECHO
PRIMERO: La sentencia de instancia, estimando la demanda deducida por la trabajadora, declara
improcedente el despido decidido por la empleadora con fecha de efectos de 31 de mayo de 2017 condenando
a la demandada a optar entre readmitir a la demandante en su puesto de trabajo o indemnizarle con la suma
que se determina en su parte dispositiva y que consta en los antecedentes de hecho de la presente resolución,
y, caso de optar por la readmisión, al pago de los salarios de tramitación devengados desde que el despido se
produjo. A tal efecto declara como salario regulador el de 34,19 euros.
Frente a dicha decisión se alza la trabajadora, interponiendo el presente recurso de suplicación, y en dos
motivos de recurso, que ampara en el apartado b ) y c), respectivamente, del artículo 193 de la Ley 36/2011,
de 10 de octubre, reguladora de la Jurisdicción Social (LRJS ), pretende se considere como salario regulador
del despido el previsto en el Convenio Colectivo Estatal de perfumería y afines (BOE 24/11/2011).
SEGUNDO: En consecuencial en el primer motivo la recurrente pretende dar nueva redacción al primer hecho
probado de la sentencia para que lo que conste en él sea "la empresa Metrópolis Salud 08 S.L. tiene como
actividad la venta de productos de parafarmacia, perfumería, cosmética, higiene y afines", sin que pueda
accederse a ello porque, como se desprende de lo que se razona en el fundamento de derecho segundo de
la sentencia, los documentos en los que la recurrente se apoya han sido examinados por la juzgadora de
instancia que de ellos y de otros elementos de prueba ha extraído lo que considera probado (SSTS de 27 de
julio de 1992 y de 15 de septiembre de 2006 y de esta Sala de 2 de junio de 2003 y de 9 de marzo de 2005)
en ese mismo fundamento sobre la actividad que se desarrolla en el establecimiento en que la demandante
presta servicios y, como señaló esta Sala en sentencia de 25 de septiembre de 2008, rec. 222/2008 , no es
posible admitir la revisión fáctica de la sentencia impugnada con base en las mismas pruebas que la sirvieron
de fundamento, en cuanto no es aceptable sustituir la percepción que de ellas hizo el juzgador, por un juicio
valorativo personal y subjetivo de la parte interesada ( SSTS 16 de diciembre de 1967 , 18 y 27 de marzo de
1968 , 8 y 30 de junio de 1978 , 6 de mayo de 1985 y 5 de junio de 1995 ).
TERCERO: En el segundo motivo de recurso, con el amparo indicado, se citan, para apoyar la pretensión
deducida los artículos 2 del convenio colectivo estatal de perfumería y afines, 83.1 del Estatuto de los
Trabajadores y 1.256 y 1.115 del Código Civil y el Real Decreto Legislativo 1175/1990, de 28 de septiembre,
por el que se aprueban las Tarifas y la Instrucción del Impuesto sobre Actividades Económicas y sentencias
del Tribunal Supremo y de Tribunales Superiores de Justicia.
Sobre dicha cuestión ya se ha pronunciado esta Sala, en sentencia de veinticuatro de mayo de dos mil
dieciocho, Rec. 234/2018 , seguido entre las mismas partes, sobre reclamación de diferencias salarias por
aplicación del citado convenio, a cuyo tenor hemos de remitirnos por evidentes razones de seguridad jurídica,
para desestimar el recurso interpuesto.
Así, razonábamos:
<<El convenio cuya aplicación pretende la recurrente, al determinar su ámbito funcional nos dice que "será
de aplicación en todos los centros de trabajo de aquellas empresas cuya actividad o actividades -sean o
no con carácter exclusivo- consistan en la fabricación, investigación, importación, distribución y/o venta de
productos de perfumería, cosmética, peluquería, de higiene y cuidado personal y/o de productos cubiertos
por la normativa de cosméticos española vigente en cada momento, así como materias primas simples o
compuestas vinculadas al contenido de los mismos, esencias y aromas".
Como se mantiene en la STS de 19 de septiembre de 2017, rec. 178/2016 , "la interpretación de los contratos
y demás negocios jurídicos -y el convenio
participa de tal naturaleza- es en principio facultad privativa de los Tribunales de instancia, cuyo criterio ha de
prevalecer -por más objetivo- sobre el del recurrente, sin embargo excluimos de tal regla general los supuestos
en que su conclusión no sea racional ni lógica o ponga de manifiesto la notoria infracción de alguna de las
normas que regulan la exégesis contractual (así, recientemente, SSTS 11/05/17 -rco 191/16 -; 30/05/17 -rco
155/16 -; y 04/07/17- rco 106/16 -); o, más sucintamente, cuando no supere un «juicio de razonabilidad» ( SSTS
02/03/17- rco 107/16 -; 225/2017, de 16/03/17 - rco 122/16 -; y 25/04/17rco 147/16 -)" y aquí la interpretación
que se hace en la sentencia recurrida ha de prevalecer.
En este caso, es claro que en el centro de trabajo de la empresa demandada donde presta servicios la
trabajadora demandante se realiza una actividad que, en principio, cae dentro de la descripción que se hace
en el convenio sobre cuya aplicación se discute de su ámbito funcional de aplicación pues se trata en ambos
casos de la venta de productos. Lo que sucede es que por la demandada y en la sentencia de instancia se niega
que tales productos sean de los que se contemplan en dicha norma colectiva, manteniendo la demandante
lo contrario.

3
JURISPRUDENCIA

Por lo tanto, habrá que determinar si los productos de parafarmacia son de esos que se enumeran en el art.
2 del convenio
Acudiendo a una herramienta ahora universalmente utilizada, internet, en la página "Portalfarma.com", del
Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, que no podemos sino considerar una fuente
autorizada, se dice que "Por parafarmacia se conoce a los productos que no son medicamentos pero
se consumen, aplican o utilizan por el ser humano, para mejorar o contribuir a cuidar la salud de las
personas sanas" y que "Los productos comprendidos en parafarmacia son muy diversos. La dermofarmacia
o cosméticos, son los más abundantes. También incluye los Productos Sanitarios, como el material de
cura, productos de ortopedia y test de autodiagnóstico. Los productos infantiles como biberones y chupetes
también se incluyen en parafarmacia al igual que los alimentos para situaciones especiales, los desinfectantes
y plaguicidas para la higiene humana".
Por su parte, conteniéndose en el art. 2 del convenio una remisión a "la normativa de cosméticos española
vigente en cada momento", el art. 2.a) del Real Decreto 1599/1997, de 17 de octubre , sobre productos
cosméticos, nos dice "producto cosmético: toda sustancia o mezcla destinada a ser puesta en contacto con
las diversas partes superficiales del cuerpo humano (epidermis, sistema piloso y capilar, uñas, labios y órganos
genitales externos) o con los dientes y las mucosas bucales, con el fin exclusivo o principal de limpiarlos,
perfumarlos, modificar su aspecto y/o corregir los olores corporales y/o protegerlos o mantenerlos en buen
estado", conteniendo en el Anexo I una "Lista indicativa por categorías de los productos cosméticos".
Puede mantenerse, por tanto, que, en ambos casos, el de la perfumería y la cosmética, que es lo que cae
dentro del ámbito del convenio, por un lado y el de la parafarmacia, por otro, que es a lo que se dedica la
empresa demandada en el centro de trabajo en el que presta servicios la demandante, tienen un mismo campo
de aplicación, un mismo destino, el ser puestos en contacto con la superficie del cuerpo humano y tienen en
común, además, que no son medicamentos.
Pero entre ambos se observa una diferencia sustancial, que los de parafarmacia, se utilizan para "mejorar
o contribuir a cuidar la salud de las personas sanas", que es su finalidad fundamental, mientras que los de
perfumería y cosmética no tiene esa finalidad, aunque puedan contribuir indirectamente a ello, por ejemplo,
mediante los efectos beneficiosos que para conservar la salud tiene la utilización de productos de aseo
personal.
A ello hay que añadir que en la parafarmacia se incluyen también "los Productos Sanitarios, como el material de
cura, productos de ortopedia y test de autodiagnóstico. Los productos infantiles como biberones y chupetes
también se incluyen en parafarmacia al igual que los alimentos para situaciones especiales, los desinfectantes
y plaguicidas para la higiene humana".
Es por ello que, como se ha resuelto en la sentencia recurrida, son distintos los productos que se venden en
una y otra actividad, la del campo de aplicación del convenio y el de la parafarmacia y eso se confirma en el
RDLeg. 1.175/1990, que también se cita en el motivo y que dentro del Grupo 652 distingue entre el comercio al
por menor de medicamentos y de productos farmacéuticos y el de perfumería y cosméticos de todas clases
y que en el Epígrafe 652.1 se refiere a las "Farmacias: Comercio al por menor de medicamentos, productos
sanitarios y de higiene personal" y urqe además de comprender la "dispensación de medicamentos tanto de
uso humano como animal, entendiendo por medicamentos todos aquellos que vengan definidos como tales
en la legislación vigente", que, como vimos, no caben dentro de una parafarmacia, "Asimismo, faculta para
dispensar productos sanitarios, materiales de cura (esterilizados, no esterilizados, esparadrapos, algodones,
alcoholes, material de sutura, celulosas, termómetros, jeringuillas y agujas hipodérmicas), productos sanitarios
para incontinencias, productos sanitarios de óptica, bolsas de agua o hielo, artículos higiénicos de goma
o plástico, chupetes, biberones, humidificadores, aparatos de ortopedia con fines curativos, preventivos o
correctores, material de ostomía, pequeño instrumental médico-quirúrgico de venta normal en farmacias,
cosméticos de carácter dermofarmacéutico y productos de higiene personal, plantas medicinales, insecticidas
de aplicación directa en personas o animales, alimentos específicos para la infancia, dietéticos y geriátricos,
así como todos los utensilios para la aplicación de estos productos, aguas minero-medicinales, así como la
toma de medidas físicas (peso, altura y tensión)", que sí se comprenden en dicha actividad.
En cambio, el Epígrafe 652.2 se refiere al "Comercio al por menor de productos de droguería, perfumería
y cosmética, limpieza, pinturas, barnices, disolventes, papeles y otros productos para la decoración y de
productos químicos" que faculta para "la venta al por menor de los productos clasificados en el epígrafe
652.3" que comprende "productos de perfumería y cosmética, y de artículos para la higiene y el aseo personal",
añadiéndose en una Nota 1ª que "Este epígrafe comprende la venta al por menor de productos cosméticos,
químicos para la cosmética, bisutería para el adorno personal que no contenga metales preciosos, artículos
de tocador, aparatos eléctricos para la aplicación de perfumería, máquinas de afeitar, secadores de pelo y

4
JURISPRUDENCIA

aparatos cosméticos de masaje y depilación", que caen bajo el campo de aplicación del convenio de que se
trata.
Por tanto, según se adelantó, hay que mantener la interpretación que del convenio se hace en la sentencia
recurrida que, como se desprende de lo razonado, no es ilógica ni irracional, sino todo lo contrario, y sin que
con ella se infrinja ninguna de las normas que sobre la interpretación de los contratos se establecen en los
arts. 1.281 y ss. del CC .
TERCERO.- Lo mismo sucede respecto a la otra alegación que se hace en el motivo para instar la aplicación
del convenio, que en el contrato de trabajo que suscribieron las partes se hizo constar que la retribución sería
"s/convenio" (hecho probado tercero) pues ya sabemos que, como en el caso de los convenios colectivos "la
facultad de interpretación de los contratos se atribuye [a los Tribunales de instancia, porque ante ellos se ha
desarrollado, en su caso, la actividad probatoria que pueda servir para desentrañar la voluntad de las partes
y los hechos concomitantes" y que el criterio del juzgador "a quo" habrá de prevalecer sobre el del recurrente,
"salvo que aquella interpretación no sea racional ni lógica o ponga de manifiesto la notoria infracción de alguna
de las normas que regulan la exégesis contractual" ( STS de 1 de marzo de 2011, rec. 74/2010 ), sin que aquí
la interpretación que se hace en la sentencia contravenga ninguna de tales normas sobre la interpretación de
los contratos y no nos dice la recurrente cual pueda haberlo sido, por lo que debe mantenerse que la cláusula
controvertida no es sino una alusión a la aplicación del salario del convenio que resultara aplicable no a uno
que no lo es.
Lo que sí se cita en el motivo es, en primer lugar, el art. 6.4 CC , aduciendo que se trata de un fraude de ley
no aplicar el convenio que se pretende en la demanda, pero, por una parte, ya hemos visto que tal convenio,
según su ámbito de aplicación, no es aplicable a la actividad que se desarrolla en la empresa demandada,
por lo que su no aplicación no es un resultado "prohibido por el ordenamiento jurídico, o contrario a él" y, por
otro, como nos recuerda la STS 12 de mayo de 2009 rec. 2.497/2008 , tradicionalmente se ha mantenido que
la facultad para valorar la conducta de las partes corresponde al Juez, al fijar los hechos probados y razonar
en sus fundamentos lo que le ha llevado a tal convicción (art. 97.2) y, aunque su valoración y juicio podrán
ser revisados en el recurso extraordinario de suplicación, se mantiene en las sentencias de esta Sala de 6 de
febrero y 10 de marzo de 2004 , 17 de octubre de 2005 y 3 de junio de 2014 y en la STS de 12 mayo de 2009,
rec. 2.497/2008 , la apreciación del fraude de ley corresponde, de modo primordial, al juzgador de instancia,
dada la inmediatez que caracteriza a la fase procesal en que actúa y, como consecuencia, ser el órgano
jurisdiccional que, además de ostentar la facultad, que a la vez es un deber, de evaluar todos los elementos
de convicción, mejor puede detectar la apariencia de legalidad bajo la cual puede ocultarse la intención de
quien pretende valerse de aquélla con una finalidad contraria a la propia normativa de la que se ha hecho uso,
o excluir la voluntad ilícita al respecto, debiendo, en consecuencia, ser mantenida por la Sala, en trámite de
suplicación, la conclusión sentada por el juzgador "a quo", habida cuenta del carácter extraordinario de dicha
impugnación que, como es sabido, no constituye una segunda instancia, de no resultar contraria al criterio
humano o desvirtuados los hechos que sirven de soporte a dicha convicción, lo cual tampoco sucede aquí
según se desprende de lo antes razonado.
En fin, también se citan en el motivo los arts. 1.256 y 1.115 del CC , ninguno de los cuales ha sido tampoco
infringido. En cuanto al primero, porque la cláusula no deja al arbitrio de la empresa la aplicación o no de un
convenio, sino que, si existiera tal convenio aplicable debería aplicarse, lo cual determina que tampoco se esté
en el caso del otro art., el cual, además, si acaso, supondría la nulidad de la cláusula y en ese caso, a tenor
del art. 9 ET , quedaría subsistente el resto del contrato y completado con los preceptos jurídicos adecuados
conforme al art. 3.1 que, en defecto de convenio remite a la voluntad de las partes manifestada en el contrato
y a las disposiciones legales y reglamentarias del Estado.
Por todo lo expuesto, no cabe sino desestimar el recurso y confirmar la sentencia recurrida. Lo que no cabe
es la condena en costas de la recurrente que se pide en la impugnación porque no alegándose mala fe o
temeridad, que, por otro parte, no se vislumbran, está excluida de tal condena según el art. 235.1 LRJS en
relación con el 2.d) de la Ley 1/1996 al tener reconocido, como trabajadora, el derecho a la asistencia jurídica
gratuita en el orden jurisdiccional social>>.
En consecuencia, por los mismos razonamientos jurídicos expuestos, procede desestimar el recurso
interpuesto, sin que proceda la condena en costas a la recurrente por los propios fundamentos de la resolución
en parte transcrita.
VISTOS los anteriores preceptos y los demás de general aplicación,

FALLAMOS

5
JURISPRUDENCIA

Que debemos DESESTIMAR Y DESESTIMAMOS , el Recurso de Suplicación interpuesto por Dª Remedios ,


contra la Sentencia de fecha 5 de Febrero de 2018, dictada por el Juzgado de lo Social 2 de BADAJOZ, en
sus autos nº433/2017, seguidos por la recurrente frente a METROPOLIS SALUD 08 S.L.U., por despido, y, en
consecuencia, debemos confirmar y confirmamos la Sentencia de instancia.
Incorpórese el original de esta sentencia, por su orden, al Libro de Sentencias de esta sala.
MODO DE IMPUGNACIÓN: Se hace saber a las partes que contra esta sentencia cabe interponer recurso de
casación para la unificación de doctrina que ha de prepararse mediante escrito presentado ante esta Sala de
lo Social dentro del improrrogable plazo de diez días hábiles inmediatos siguientes a la fecha de notificación
de esta sentencia.
Si el recurrente no tuviere la condición de trabajador o beneficiario del régimen público de la Seguridad Social
o beneficio de asistencia jurídica gratuita, deberá consignar la cantidad de 600 euros, en concepto de depósito
para recurrir, en la cuenta expediente de este Tribunal en SANTANDER Nº 1131 0000 66 030218 debiendo
indicar en el campo concepto, la palabra "recurso", seguida del código "35 Social-Casación". Si el ingreso se
hace mediante transferencia bancaria deberá incluir tras la cuenta genérica proporcionada para este fin por la
entidad ES55 0049 3569 9200 0500 1274, en el campo "observaciones o concepto" en bloque los 16 dígitos
de la cuenta expediente, y separado por un espacio "recurso 35 Social-Casación".
La Consignación en metálico del importe de la condena eventualmente impuesta deberá ingresarse en la
misma cuenta. Si efectuare diversos pagos en la misma cuenta deberá especificar un ingreso por cada
concepto, incluso si obedecen a otros recursos de la misma o distinta clase indicando en el campo de
observaciones la fecha de la resolución recurrida utilizando el formato dd/mm/aaaa. Quedan exentos de su
abono en todo caso, el Ministerio Fiscal, el Estado, las Comunidades Autónomas, las Entidades locales y los
Organismos Autónomos dependientes de ellos.
Expídanse certificaciones de esta sentencia para su unión a la pieza separada o rollo de suplicación, que se
archivará en este Tribunal, y a los autos principales.
Notifíquese la presente sentencia a las partes y a la Fiscalía de este Tribunal Superior de Justicia.
Una vez adquiera firmeza la presente sentencia, devuélvanse los autos originales, para su debida ejecución, al
Juzgado de lo Social de su procedencia, dejando de ello debida nota en los Libros de esta Sala.
Así, por esta nuestra sentencia, lo pronunciamos, mandamos y firmamos.
PUBLICACIÓN
En el día de su fecha fue publicada la anterior sentencia. Doy fe.

S-ar putea să vă placă și