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V I A G E
DE ESPAÑA,
EN QUE SE DA NOTICIA
Su AUTOR
D. ANTONIO PONZ , Individuo de la Real
academia de la Historia ,y de las Reales
Sociedades Bascongada ,y déla
Económica de Madrid.
T O M O S E X T O .
MADRID. M D C C L X X V I .
d i o n a l , como en la Septentrional, y en
la Asia , que solo el referirlas sería un
largo asunto: de la misma suerte que
el atender á tantas cosas , era no pe-
queña empresa para ocupar muchos
Reynados.
L a protección á las bellas Artes es
el principio , y origen de muchas feli-
cidades : mediante ellas se establece el
buen g u s t o , y r e d o modo de pensar,
estendiéndose no solamente á aquellas
obras de ostentación, que dan tanta her-
mosura, y reputación á las Ciudades don-
de se hallan, sino á todas las demás cosas
que pide la necesidad , y conveniencia
de los hombres. Determinó, pues, S. M .
al principio de su Reynado en Ñapóles
pasar algunas temporadas en el Sitio
de Pórtici dos leguas distante de aque-
lla Ciudad. O y ó d e c i r , que en sus con-
tornos se habían encontrado en tiem-
pos pasados algunos fragmentos de an-
tigüedad ; y desde luego mandó que se
hiciesen excavaciones con el fin de que
sirviesen de estímulo á sus vasallos , y
de fomento al buen gusto , mediante las
cosas que se encontrasen. Efe&ivamenT
te entre Pórtici , y el lugar de Resina
se
XXVI P R 6 L o a o.
se descubro un T e a t r o , Templos , c a -
sas , infinitos muebles de todas clases,
estatuas , pinturas, monedas , inscrip-
ciones ; de suerte, que se sospechó que
aquel fuese el parage donde quedó se-
pultada la antigua Ciudad de Hercu-
lano , mencionada por los Escritores del
tiempo de Tito.
Tanta abundancia se juzgó mas que
de una Ciudad , y movió á buscar
otra en el parage donde se sospecha
que estuvo la antigua Pompeya muy
cercana de Herculano , cuyo éxito fue
igualmente feliz, y se fueron colocan-
do los infinitos monumentos , hallados
con universal admiración , en algunas
piezas del Palacio,que S. M. fundó en
Pórtici. Este singularísimo hallazgo dio
motivo á que desde luego emplease
S. M . varios artífices de sus Estados, y
asalariase otros, que vinieron de varias
partes con el propósito de dibujar
aquellas preciosidades de las bellas Ar-
tes para la célebre obra del Museo Her-
-culanense , que resolvió dar al público,
y se ha impreso con utilidad universal, y
aplauso de toda Europa.
Con tantos, y tan exquisitos monu-
men-
P R Ó l O G O» XXVII
méritos de la antigüedad, no podia me-
nos de introducirse un modo de pensar
muy otro del que antes habia en materia
de buen gusto ; ni S. M . quiso que pa-
ra las grandes fábricas que tenia idea-
das en su residencia de Ñapóles , y
en el Sitio deCaserta, se empleasen si-
no los Arquitectos mas acreditados de
Italia , como eran el Caballero Fernán»
do Fuga , y D . Luis Vambiteli. ¿Dexa-
ría el Rey , á quien ya reconocían las
Artes en Italia por su Restaurador , y
por su Mecenas los artífices , de pro-
moverlas , y ampararlas en España?
Desde luego que llegó á Madrid , y
vio la lentitud con que se procedía
en la Real fábrica de Palacio , dio sus
órdenes para que brevemente se pu-
siese en estado de habitarlo , como
así sucedió , sin embargo de las mu-
taciones que se hicieron antes , y de
las bóvedas , que debían pintarse á
fresco.
Deseaba S. M . que con este motivo
llegase la nobilísima Arte de la Pintu-
ra á un estado , qual jamás le hubiese
logrado en España , y así tuvo á un
tiempo á su servicio á los tres profe-
so-
xxvrrr p R ó L O G o.
sores mas acreditados de Europa , c o -
mo fueron D . Corrado Giacuinto , D.
Juan Bautista Tiépolo , y D. Antonio
Rafael Mengs , que habían logrado la
mayor reputación en las escuelas que
siguieron. La Real Academia de S. Fer-
nando logró de la generosidad de S. M .
el verse trasladada á la gran Casa , qué
ahora tiene en la calle de A l c a l á , con
comodidad , y capacidad para sus jun-
tas , estudios del natural, modelos , y
lo demás que se requiere. En el quar-
to segundo de la misma Casa se ha
puesto de orden del R e y el Gavinete
de Historia Natural , que destinó para
instrucción , y recreo del Público ; y
al mismo tiempo concedió á la A c a -
demia de la Historia la Real Casa de
la Panadería. Baxo su patrocinio se
fundó la Academia de las bellas Artes
en Valencia , con el título de S. Carlos.
Ha dotado S. M . la de Sevilla , y se
van formando otras en Z a r a g o z a , y Bar-
celona.
Las Sociedades Literarias , y otras
con el nombre de Academias , que hay
en España para promover las Ciencias,
las A r t e s , la industria, y quanto pue-
de
P R Ó L O G O . XXIX
de contribuir á la felicidad pública , al
R e y le deben su establecimiento , su
aumento , ó su esplendor. Con el nom-
bre de Academias se ocupan en benefi-
cio común la de Sevilla, la de Barce-
lona , la de Valladolid , y la de G a l i -
cia. Con el de Sociedades , la Bascon-
gada , la de Baeza , y últimamente la
de Madrid , formándose otras actual-
mente en diferentes Provincias, y Ciu-
dades de* España. Por fin, sería muy
largo el referir las providencias que se
han dado , así en materias literarias,
como en la de Artes , y manifacturas,
durante el presente Reynado.
N o habia cosa que tanto estrañasen
los estrangeros que caminaban por Espa-
ña , como el ver despoblados aquellos
inmensos , y pingües territorios de Sier-
ra-Morena , entre la Mancha , y A n -
dalucía , sin c u l t i v o , ni moradores; y
•por consiguiente de gran riesgo á los
pasageros , por los malhechores que allí
se abrigaban ; y si bien por lo pasado
se habían formado proyectos de pobla-
ción , jamás tuvieron efecto hasta el
1 7 6 7 , habiéndose desde entonces fun-
dado once L u g a r e s , y cinco Aldeas en
XXX P R Ó L O G O
el territorio de dicha Sierra-Morena , y
á mas de esto quatro Lugares , y quin-
c e Aldeas , en el que divide los R e y -
nos de Córdoba , y Sevilla , hallándo-
se actualmente distribuidas en dichas
Aldeas , y Lugares 2446 familias , que
componen 10^490 individuos , de los
quales 8179 son Labradores, y los i2i 17
artesanos , sin contar otros muchos mo-
radores en calidad de jornaleros, & c .
Las Iglesias Parroquiales , y Capillas
que se han fabricado en dichas pobla-
ciones, son 2 4 ; las casas 2 2 0 0 ; los m e -
sones 15 ; se reputan plantados sobre
2oo9 olivos ; mas de medio millón de
moreras , y tantos árboles frutales , v i -
des , y álamos, que pasan de un m i -
llón. Se han establecido fábricas de to-
do género de manifacturas de seda , y
lana , con otras de las que se pueden
desear en las grandes Ciudades. Las prin-
cipales cosechas de estas Poblaciones se
reducen actualmente á t r i g o , centeno,
cebada , garvanzos , lentejas , habas,
& c . reputándose , que un año con otro
se recogen de todo esto quinientas mil
fanegas. Las viñas empiezan á dar su
fruto» que dentro de pocos años se es<-
pe-
P R Ó L O G O . XXXI
c3 CAR-
(xxxvi)
CARTA
Escrita á un "Poeta por un Amigo
suyo residente en Madrid.
T ú , de Madrid , A m i g o , retirado,
Sediento de noticias memorables,
A c a s o con tu agrado
M i zelo premiarás , si te refiero
C o n qué R e g i o esplendor , y sabio esmero
L l e g a n á efecto ideas tan loables.
U n espacioso, y cómodo Edificio
E n la ancha calle de A l c a l á se elige,
E n cuyo frontispicio
U n a portada Dórica se erige.
A l l í dispone el R e y que su A c a d e m i a ,
L a que profesa , y premia
T r e s Nobles A r t e s , su morada fixe.
¿4 Allí
(xxxvm)
Allí, también en la mansión mas alta
E l nuevo Gabinete se coloca;
Y no en vano resalta
E n letras de oro sobre blanca roca
A n t e el umbral una Inscripción L a t i n a ,
Q u e advierte se destina
A l l í á M i n e r v a duplicada estancia.
D e su sentido es ésta la substancia:
„ R e d u x o C A R L O S en común provecho
„ N a t u r a l e z a y A r t e á un mismo techo ( * ) .
D e esta casa magnífica , o D a l m i r o ,
Suspendo la pintura ; que antes quiero
Figurarme que soi un forastero
Q u e hoi por la vez primera
L o s muros llega á ver de B u e n - R e t i r o :
Q u e desde luego admiro
L a estructura grandiosa , y duradera
D e la Puerta oriental que á Alcalá guia:
Q u e á mi siniestra miro
D e una verja de hierro circundado
C o n el mejor adorno y simetría
U n ameno Jardín , que por un lado
Para su entrada ofrece
U n Pórtico de firme cantería:
Q u e en m í el asombro , y el deleite crece
A l paso que de allí desciendo al P r a d o ,
N u e v o p a s e o , llano , y anchuroso,
D o n d e con tren vistoso
El Pueblo Madrileño se recrea:
Que
(*) CAROLVS m. REX NATVRAM E T ARTEM
SVB V N O T E C T O IN PVBLICAM VTILITATJiM
CONSOCIAVIT ANNO M D C C L X X V .
(xxxix)
Q u e á lo lejos campea
Y a la A d u a n a Real , fábrica altiva,
Q u e corona , y remata
L a varia perspectiva
D e aquella inmensa C a l l e , c u y o espacio
E n un suave declivio se dilata;
Y a el contiguo P a l a c i o ,
( O b j e t o á que mi canto se endereza)
D o n d e unidas habitan
C o n la N a t u r a l e z a
L a s ingeniosas Artes que la imitan.
A u n sin entrar en él , y a este conjunto
D e marabillas mi atención prepara,
Y la exterior magnificencia al punto
L o s próvidos influxos me declara
D e l A u t o r á quien tanto bien se debe.
Y a me impaciento por llegar en breve
A aquel recinto en que el saber se hospeda.
Y en que la admiración saciarse pueda.
O h ! si fuera capaz mi tosco acento
D e celebrar en dignas descripciones
O la extensión , ó el gran repartimiento
D e aquellos Académicos Salones,
A diversas tareas consagrados !
E n uno se congregan centenares
D e Jóvenes , y N i ñ o s dedicados
A copiar los primeros exemplares,
Elementos del A r t e del D i s e ñ o .
E n otro los A l u m n o s y a versados,
C o n generoso empeño,
A una estatua rodean,
Y la imitan en barro , ó delinean.
E n otro los mas hábiles de todos
(XL)
Q U A R T O S
Q U A R T O
DEL S*. INFANTE D. GABRIEL.
57 En la habitación del Sr. Infan-
te D . Gabriel se hallan seis quadros de
Jordán con historias de la Vida de N .
Señora: uno del mismo autor, que es
Absalon colgado en el árbol de sus c a -
bellos , y una bambochada , ó comida
casera. D e Corrado hay dos borronci-
llos , que representan virtudes; y del
? 8 V I A G E
Guar-
DE ESPAÑA. ,77
M O D E L O ,
REAL
TOÓ Vi AGE
REAL SITIO
DEL BUEN-RETIRO.
i T A frondosidad de estos Jardines
I y inmediatos á la Puerta de Alca-
lá se debe al cuidado que de veinte años
á esta parte se ha puesto en renovarlos,
y en renovar también muchas calles de
árboles , aumentando otras, y un bos-
que en parages que ahora son los mas
deliciosos , y antes eran imagen de la
aridez , sirviendo para arrojar escom-
bros , ó criar conejos. Todavía falta que
renovar , y algunos ornatos que añadir;
pero como vemos que todos los años
se mejoran, puede esperarse, que den-
tro de pocos lleguen á competir, ó su-
perar á los mas célebres, y divertidos.
Es lástima que para tantos plantíos no
abunde el agua, que viene por cañerías
desde los altos de Chamartin. Dicen
que por lo pasado venia en mayor can-
tidad , y se ignora si la diminución
consiste en que se rezuman los encaña-
dos , ó en otras razones. Esta falta se
suple con muchas norias, que hay re-
par-
DE ESPAÑA. 107
partidas en varios parages. Tienen es-
tos Jardines dos entradas principales,
una por la plaza de Palacio, llamada de
la Pelota , y otra nueva , y magnífica
por medio del enverjado de hierro de
la calle de Alcalá , y están francas á to-
da persona, que en trage decente quie-
ra ir á pasearse en ellos.
1 Así como los Jardines del Reti-
ro forman desde lexos una vista agrada-
ble , los edificios solo presentan la pers-
pectiva de un conjunto de habitaciones
ordinarias , de las quales se han derri-
vado muchas , hacia la parte de Ma-
drid , para formar el Jardín de Prima-
vera , parte del Prado , y otros plan-
tíos , que desde el mismo Prado suben
á las entradas principales de Palacio,
y de la Iglesia de S. Gerónimo. Es el
Palacio un quadro grande regular con
torres en las esquinas, que está confun-
dido con otras obras añadidas después;
pero aunque estuviese del todo descu-
bierto , no habría en su arquitectura
cosa que mereciese descripción particu-
lar , porque es fábrica hecha de prisa,
de madera, y ladrillo, al modo que co-
munmente se construye en Madrid; ni en
I O8 V l A G E
aquel tiempo era fácil emprender mag-
nificencias , según la estrechez en que
se hallaba el Real Erario. Aun los fun-
damentos son de aquella mala piedra,
llamada de S. Isidro ; por cuya razón
ha necesitado, y necesita cada dia de
grandes, y costosos reparos. Entre las
obras agregadas solamente merece con-
siderarse la que llaman el Cason , por
el motivo que se dirá después.
3 Aunque inmediata á la Iglesia
de S. Gerónimo , á la parte de Orien-
te , tenian los Reyes desde el tiempo de
Felipe II una habitación , que llamaban
el Quarto deS. Gerónimo, se debe atri-
buir á Felipe IV la fundación de este
Sitio, á estímulo, según se dice , del
Conde-Duque de Olivares ; para lo qual
compró todo el terreno , que pertene-
cía á diferentes dueños, en donde ha-
bia varias ermitas, que todavía perma-
necen. Sin duda por esta circunstancia
de fundador se colocó después su esta-
tua eqüestre en el principal Jardin de
los que están cerrados : y pues se ha
ofrecido mencionar aquí esta excelente
obra , empezaré por ella la narración
de las cosas notables que hay en el Buen-
- il
Ia li-
12 2 V l A G E
lieos D . F e r n a n d o , y D o ñ a Isabel.;
30 E n la sala a d j u n t a , que llaman d e
C a s t r i l l o , se vén dos quadros d e R i v e T
ra , que representan á T á n t a l o , é I x í o n
en sus suplicios. H a y t a m b i é n en e l l a
a l g u n o s países , marinas , y p e r s p e c t i -
vas : dos de estas son de la C a p i l l a S i x -
tina , en el V a t i c a n o , c o n asistencia
del P a p a , y C a r d e n a l e s ; y u n a , v i s t a
de la Basílica de S. Pedro : otra es p r o s -
p e c t o de S. M a r c o s d e V e n e c i a .
31 E n una p i e z a pequeña , q u e sir-
v e d e a n t e c á m a r a , y en otra i n m e d i a t a
se v é n varios quadros de a v e s , de c a -
z a muerta , de p e c e s , instrumentos m ú -
sicos , y otras c o s a s ; y entre estas obras»
q u e están h e c h a s con e x c e l e n c i a , las h a y
de Juan T i l l e n , y de F r a n c i s c o S n y d e r s ,
c é l e b r e s F l a m e n c o s : a s i m i s m o h a y va-,
rias c a c e r í a s de j a v a l í e s , y venados d e
P e d r o de V o s : se v é un H é r c u l e s l u -
c h a n d o c o n la h i d r a , de R u b e n s ; y otras
cosas de menos c o n s i d e r a c i ó n . O t r a p i e -
z a adjunta está adornada de retratos : d e
C a r r e ñ o es el de la R e y n a M a d r e d e
C a r l o s I I ; y el de un p o b r e c o n un m e -
m o r i a l en la m a n o . D o s retratos de cuer-
p o entero a m b o s de C a r l o s . V , son d e
DE" ESPAÑA. I 3 3
Juan Pantoja de la C r u z : otros dos r e -
tratos d e F e l i p e I V , representados d e
d i v e r s a edad ; el de un bufón d i v e r t i d o
c o n un m o l i n i l l o d e p a p e l , y a l g u n o
m a s , son d e l gusto de V e l a z q u e z . E n
la p i e z a i n m e d i a t a h a y quadros de B a -
san , y de E s t e b a n M a r c , que represen-
tan historias sagradas.
32 S i g u e una espaciosa sala , e n
q u e h a y dos grandes quadros de P e -
d r o d e C o r t o n a : e l uno expresa un
salón d e l V a t i c a n o , y al P a p a U r b a n o
V I H c o n los C a r d e n a l e s , & c ; el o t r o a l
P a p a l l e v a d o en andas , c o n una vista
d e l T e m p l o V a t i c a n o . T a m b i é n se figu-
r a en otro quadro el P a p a l a v a n d o los
p i e s á los p o b r e s , c o m o practica el J u e -
v e s S a n t o . D e T i c i a n o son dos q u a -
dros p e q u e ñ o s , q u e representan a s u n -
tos fabulosos de D i a n a , y p a r e c e n d e
los e x e c u t a d o s en su ú l t i m a edad. H a y
un M e r c u r i o , y A r g o s , del F l a m e n c o
Jordaens. Se v é n algunos quadros de fru-
tas , y c a z a m u e r t a : diferentes asuntos
d e los Basanes , y de M a r c , c o n otras
c o s a s , c o m o paises , & c .
33 L a gran s a l a , q u e llaman de Cor-
t e , d i v i d i d a d e una v i d r i e r a , tiene m u -
I3 chos
i 34 Vi AGE
c h o s quadros d e L u c a s Jordán , que r e -
presentan historias sagradas , asuntos
a l e g ó r i c o s , y otros. Entre estos se v é
el R e y n o de S i c i l i a , que ultrajado d e
sus e n e m i g o s , se a c o g e á la M o n a r -
quía de E s p a ñ a . H a y en esta sala un
B a c a n a l de C o r n e l i o de V o s , y un g r a n
q u a d r o c o n n u e v e figuras, y frutas de
m i l géneros m a r a v i l l o s a m e n t e e x e c u t a -
das , en que p a r e c e quiso representar
su autor al s i g l o de o r o : d i c h a s figuras
son d e la escuela de R u b e n s , y las f r u -
t a s acaso serán de A d r i a n o V a n - U t r e c h ,
d e quien es otro e x c e l e n t e q u a d r o d e
frutas , a v e s , y c a z a m u e r t a en esta
m i s m a p i e z a con firma del referido a u -
tor , y notado el a ñ o de 1642. O r f e o ,
q u e saca á E u r í d i c e del infierno , es d e
R u b e n s , y de su escuela un A r c h i m e -
des que está sobre una puerta. Jordaens
está firmado en un quadro de dos figu-
ras desnudas , al p a r e c e r V e r t u m n o , y
P o m o n a , con un b e l l o pais.
34 En una p i e z a p e q u e ñ a j u n t o á
l a referida , en q u e se hallan a l g u n a s
c o p i a s de J o r d á n , se encuentra a s i m i s -
m o una c a i d a de los G i g a n t e s de R u -
bens , y un Saturno d e v o r a n d o á un n i -
ño,
DE ESPAÑA. I 3 5
ñ o , del m i s m o . H a y t a m b i é n una r e p r e -
sentación d e A n f i t e a t r o , y e n él q u a t r o
elefantes c o n varias figuras, q u e se tienen
p o r d e N i c o l á s P o u s i n . L o s quadros q u e
h a y donde está la m e s a de t r u c o s , se
r e d u c e n á algunos r e t r a t o s , y á v a r i o s
asuntos fabulosos , en q u e no se h a l l a
c o s a notable que referir. En uno se v é
una M i n e r v a c o m o a b a t i e n d o los v i -
c i o s , q u e p a r e c e c o p i a de T i n t o r e t o .
35 H a y tres O r a t o r i o s en este P a -
l a c i o , y todas las pinturas del m a y o r
son de Jordán : representan asuntos
s a g r a d o s : la del a l t a r , es un b e l l o q u a -
dro de A n d r e a V a c á r o , c o n figuras
enteras de J e s ú s , M a r í a , y J o s e f , p i n -
tura de f u e r z a , y m u c h o efecto. L a s
estatuas de Santa B á r b a r a , y S. F e r n a n -
d o las h i z o D . R o b e r t o M i c h e l . En un
O r a t o r i o particular d e l R e y se e n c u e n -
tran o c h o quadros p e q u e ñ o s , c o n asun-
tos de la P a s i ó n , e x e c u t a d o s p o r D . C o r -
r a d o G u i a c u i n t o ; y de su m a n o es t a m -
b i é n el del altar c o n una T r i n i d a d , y
m u c h o s Santos de d e v o c i ó n . E l C r u -
c i f i x o d e m a r m o l , q u e h a y sobre la
m e s a , le r e g a l ó al Sr. F e r n a n d o V I e l
Papa Benedicto X I V .
14 Por
136" Vi A G E
y
144 VlAGE
y aquí i n t r o d u x o un fiero , y h e r m o s o
l e ó n , que los aterra c o n su r u g i d o . E n -
c i m a de la España se v é un coro d e
figuras para s i m b o l i z a r las V i r t u d e s . A l
r e d e d o r de la p i e z a , entre las v e n t a -
nas , están A p o l o , y las M u s a s , y tam-
bién se v é n c o l o c a d o s en p a r a g e c o n -
v e n i e n t e varios Filósofos en fingido m a r -
m o l : h a c i a los á n g u l o s h a y figuras
a l e g ó r i c a s , que e x p r e s a n las edades d e
o r o , de plata , de c o b r e , y de h i e r r o .
D e la cornisa a b a x o se representan en
un g r a n friso las fuerzas de H é r c u l e s .
44 Sería l a r g o el referir las cosas
q u e introduxo Jordán para e n r i q u e c e r
esta g r a n d e o b r a , d e x a n d o á parte l a
p r o p i e d a d c o n q u e supo m e z c l a r los
asuntos a l e g ó r i c o s c o n la M i t o l o g í a , y
la H i s t o r i a . P o r otras obras d e este
autor no se puede h a c e r c o n c e p t o d e
la que h e m o s r e f e r i d o ; y así es d i g n a
de verse c o m o una de las mas s i n g u l a -
res que h a y en M a d r i d . N o se p u e d e
entender c ó m o en t i e m p o de Jordán se
sufriesen aquellas pesadas tallas c o n q u e
se a d o r n ó d i c h a p i e z a . Sería fácil q u i -
tarlas , y h a c e r otros o r n a t o s , que t u v i e -
sen mas c o n f o r m i d a d Gon la pintura.
Tam-
DE ESPAÑA. 14^
T a m b i é n es d e s g r a c i a el daño q u e p a -
d e c e el C a s o n , por la h u m e d a d que r e -
c i b e n las p a r e d e s , mal q u e se podría re-
m e d i a r , h a c i é n d o l e una b ó v e d a d e -
baxo.
45 S i a l g ú n dia se pensase en r e -
edificar este P a l a c i o del B u e n - R e t i r o , es
d e c r e e r , q u e bien l e x o s de que este
p e d a z o de arquitectura , que c o n t i e n e
l a o b r a d e Jordán , fuese c o m p r e h e n -
d i d o en las d e m o l i c i o n e s , se pensase
c u i d a d o s a m e n t e en su c o n s e r v a c i ó n , y
en h a c e r l e parte de qualquier p r o y e c -
t o ; p o r q u e sería gran lástima d e s -
truirla , y difícil de suplir. Sin e m -
b a r g o , por lo q u e los t i e m p o s p u e -
d e n traher c o n s i g o , sería e m p r e s a
p l a u s i b l e el g r a b a r esta , y otras ex^-
c e l e n t e s obras d e tantos autores c l á -
sicos estrangeros , y nacionales c o m o
h a y en E s p a ñ a , i g n o r a d a s de todo e l
m u n d o , y por c o n s i g u i e n t e m u c h o m e -
nos acreditadas de lo q u e m e r e c e n .
S a b e la E u r o p a m u y en c o n f u s o , q u e
en M a d r i d , y s e ñ a l a d a m e n t e en los R e a -
les P a l a c i o s , y en el E s c o r i a l , h a y obras
estupendas ; pero pocos tienen idea d e
l o q u e son , p o r q u e apenas h a n visto
TomVL K una
14¿ V i AGE
u n a miserable e s t a m p a d e a l g u n a d e
e l l a s . Sensible e s , q u e siendo nosotros
puntualísimos imitadores de tantas m o -
das c o m o v i e n e n d e fuera para c o n s u -
m i r caudales , y a c a s o para transfor-
marnos en objetos de risa , no i m i t e -
m o s las a c c i o n e s q u e acreditan el r e -
finado gusto , y el m o d o d e pensar
d e sugetos instruidos en materia d e
-bellas A r t e s . ¿ Q u é h a y en F r a n c i a , e n
I t a l i a , y en otras m i l partes d e b u e -
n o , ó de m e d i a n o , q u e no se h a y a c o -
m u n i c a d o al m u n d o por m e d i o d e e s -
t a m p a s , c o n c r é d i t o de los que poseen
las obras o r i g i n a l e s , y no p o c o l u c r o
d e los que p u b l i c a n las c o p i a s ?
46 S e podrían citar infinitas c o -
l e c c i o n e s de obras e s t a m p a d a s , en prue-
b a de quán atrasados nos h a l l a m o s en
esta l i n e a . L a G a l e r í a de V i e n a , la
d e L u x é m b u r g o , el G a v i n e t e del R e y
d e F r a n c i a , el de C r o z a t , la G a l e r í a
d e D r e s d e , la de M é d i c i s , la F a r n e -
s i a n a , la del C o n d e Bril , la del M a r -
ques Q u e y l u s , el M u s e o V e n e c i a n o ,
las pinturas del V a t i c a n o , las pinturas
d e l H e r c u l a n o , la c o l e c c i ó n de A m i l -
t o n , y otras mil , son una p r u e b a de
lo
DE ESPAÑA. 147
Ib q u e queda d i c h o . ¡ Q u á n t a s , y quán
c é l e b r e s pinturas ha c o n s u m i d o el t i e m -
p o , las llamas , ú otras casualidades,
sin q u e nos h a y a quedado mas que una
confusa noticia d e q u e las h u b o ! D e
a q u í se puede discurrir el r i e s g o en
q u e se hallan las q u e ahora e x i s t e n .
, N o u n a , sino m u c h a s v e c e s , se han
g r a b a d o en otros R e y n o s las obras bue-
nas 5 y entre nosotros ni aun una v e z
han t e n i d o esta d i c h a las mas s i n g u -
lares. Se h a gastado el t i e m p o , el d i -
nero , y el c o b r e en representar . r i d í -
c u l o s altares de talla , i m á g e n e s , q u e
p o r su fealdad d e b í a n apartarse de la
vista de los fieles , y otras tales cosas
m u y c o n d u c e n t e s para radicar el m a l
g u s t o ; y de tantos objetos p e r e g r i n o s ,
de tantos prodigios del A r t e , no se h a
h e c h o c a s o para este e f e é t o .
47 E n lo pasado era menos de e s -
trañar d i c h a falta , por la escasez q u e
aquí h a b i a de G r a b a d o r e s ; bien q u e
p a r a ciertas obras siempre hubiera si-
d o útil haberlos b u s c a d o donde los hu-
biese ; pero a h o r a , que y á tenemos un
n ú m e r o c o m p e t e n t e de tales profeso-
res , que p o d í a n ir d e s e m p e ñ a n d o esta
K 2 em-
148 V I A GE
e m p r e s a , es desgracia no verlos a p l i -
c a d o s á ella. L a s c o l e c c i o n e s de e x c e -
lentes obras e s t a m p a d a s , que c o n t i n u a -
m e n t e v e m o s venir de fuera , solo sirven
para admirarnos ; pero n o para m o -
vernos á h a c e r o t r o tanto. Si se g r a -
basen las pinturas d e l E s c o r i a l , las de
los P a l a c i o s R e a l e s , y otras m u c h a s ,
¡ q u á n t a reputación , y utilidad se l o -
g r a r í a en esta linea ! V a r i a s cosas e n
q u e antes no se p e n s a b a , se h a c e n a h o -
ra : acaso esta también se e f e & u a r á .
48 L a a n t e c á m a r a del C a s o n está
adornada toda ella de obras de Jordán.
R e p r e s e n t ó al fresco diferentes batallas^
particularmente las ocurridas en la c o n -
quista de G r a n a d a . E n las p e c h i n a s se
v e n figuradas las partes del m u n d o ; y
en quadros mas pequeños e x p r e s ó otros
asuntos. D e s d e el C a s o n se sale á los
Jardines por una p i e z a de figura o v a l ,
c u y a s paredes están cubiertas de espe-
j o s ; y en la b ó v e d a pintó Jordán e l
n a c i m i e n t o del S o l , á quien p r e c e d e e l
A l b a , representado en un c a r r o que t i -
ran quatro c a b a l l o s . E x p r e s ó allí varias
naciones en a é t o de adorar al S o l , c o n
multitud de personas de todas edades:,
y
DE ESPAÑA. 1 4 9
y diversos t r a g e s : Sacerdotes o f r e c i e n -
d o s a c r i f i c i o s , & c . al rededor h a y v a -
rios jarros , f e s t o n e s , y n i ñ o s , todo h e -
c h o con bizarría , y m u c h o gusto.
49 E n el quarto b a x o , q u e l l a m a n
de la R e y n a M a d r e , están g u a r d a d a s
en una p i e z a de paso algunas figuras
d e b r o n c e . D o s representan una m i s -
m a cosa ; esto es , á C e r e s , sobre
sierpes enroscadas , y son r e p e t i c i ó n
d e otras dos que h a y en la fuente de
los Jardines de A r a n j u e z , l l a m a d a d e
N e p t u n o : otra de J ú p i t e r , t a m b i é n repe-
tición del q u e h a y en la misma f u e n -
t e . O t r a s dos de H é r c u l e s c o n la h i d r a ,
d e i g u a l t a m a ñ o , se debieron h a c e r
p a r a d i c h a f u e n t e ; pero no se pusieron:
todas son vaciadas por m o d e l o s de A l e -
x a n d r o A l g a r d i , c o m o y á se d i x o en e l
Tom. 1 h a b l a n d o de A r a n j u e z ,/&/. 244.
O t r a s q u a t r o figuras c h i c a s se g u a r d a n
en esta misma p i e z a sobre g l o b o s d e
m e t a l , y p a r e c e representan v i c t o r i a s .
T a m b i é n h a y allí diferentes bustos de
m a r m o l de E m p e r a d o r e s , y otros p e r -
sonages , algunos de pórfido , y d i f e -
rentes urnas cinericias de la m i s m a
m a t e r i a c o n sus tapas. Son d e estimar
K3 un
IfO ViAGE
un D a v i d en acto de disparar la h o n d a ,
acaso v a c i a d o por m o d e l o original d e l
B e r n i n o , alto c i n c o palmos : una V e -
nus , de quatro ; y una estatuita d e H é r -
cules de p i e y m e d i o , todas de b r o n c e ,
y dignas para o r n a t o de una p i e z a .
50 Infinitos son los bustos , y fi-
guras de m a r m o l , mesas de p ó r f i d o , y
otras cosas que están amontonados e n
un sótano , c u y a entrada corresponde
al Jardin del C a b a l l o , b a x o el q u a r t o
del R e y , que es lástima no se r e c o -
n o z c a n ; pues aunque lo mas sea d e p o -
c a consideración por lo tocante al ar-
tificio , sin duda entre tantas cosas h a -
b r á algunas buenas , y desde l u e g o l o
son dos medallas grandes de b r o n c e ,
q u e representan al E m p e r a d o r C a r l o s V ,
y á la E m p e r a t r i z D o ñ a I s a b e l , obras d e
L e o n i , y dignas de estar en otro p a r a g e .
51 E l referido quarto d e l a R e y n a
c o n t i e n e algunas pinturas en sus p a r e -
des : h a y entre ellas diferentes q u a -
dros de frutas , y flores , algunos países
de G a s p a r Pousin : un quadro de Sebas-
tian C o n c a , en que representó un artifi-
c i o dé fuego h e c h o en la Plaza de Espa-
ña en R o m a : una Herodías del estilo de
Mi-
DE ESPAÑA. 151:
M i g u e l Á n g e l C a r a v a g i o : una L u c h a d é
H é r c u l e s , y A n t e o , firmado de C e s a r T r a -
c a r z a n o : algunas vistas de p u e r t o s , c a -
cerías , y otras c o s a s d e v a r i o m é r i t o .
En los quartos i n m e d i a t o s donde h a -
b i t ó el S r . Infante D . L u i s , es i n c r e í -
b l e los quadros q u e allí están a r r i m a -
dos d e todas c l a s e s , y d e m u c h o s a u -
tores ; y bien q u e lo mejor se h a y a
s a c a d o , todavía quedan m u e b l e s d e e s -
ta clase para un g r a n P a l a c i o . H a y u n
borrón grande de la famosa C e n a , d e l
T i n t o r e t o en V e n e c i a : dos insignes t a -
blas d e A l b e r t o D u r e r o , q u e en figu-
ras del natural representan á A d á n , y*
E v a : e n el A d á n h a y escrito : Al~
bertus Durerus Almanus faciebat post.
virginis partum 1507 ;.y á m a s d e e s t o
t i e n e su m o n o g r a m a r e g u l a r . T a m b i é n
h a y una tabla d e u n o q u e está c u r a n -
d o á o t r o , c o n asistencia d e diferentes
m u g e r e s , figuras d e m e d i o c u e r p o :
o b r a d e sumo t r a b a j o , según la e s c u e -
la del m i s m o D u r e r o . S e v e n d i f e r e n -
tes t a b l a s , en q u e representó e l B o s c o
sus c a p r i c h o s : a l g u n a s son r e p e t i c i o -
nes d e las q u e y á se h a n referido e n
esta o b r a . S e h a l l a n los borrones d e
K 4 Jor-
I 5 2* V I AG E
Jordán para la que h i z o de la b a t a l l a
d e S. Q u i n t í n en la escalera del E s c o -
r i a l . H a y a l g u n o s quadros del E s p a ñ o -
l e t o , c o m o Sísifo , P r o m e t e o , & c . L o s
retratos del Sr. F e l i p e V , y la R e y n a
D o ñ a I s a b e l , de M r . R a n g : m u l t i t u d
d e p a í s e s , m a r i n a s , y otras c o s a s , h a -
b l a n d o solo de las que están puestas e n
l a p a r e d ; pues si se hubiera de d e c i r
d e las que allí h a y a m o n t o n a d a s , sería
asunto p r o l i x o , y fastidioso.
52 E l T e a t r o del R e t i r o es f á b r i c a
g r a n d e m e n t e adaptada á las magníficas
O p e r a s que en él se cantaron en t i e m -
p o del Sr. D . F e r n a n d o V I . L o h i z o
D . S a n t i a g o B o n a v í a ; pero le r e d u x e -
ron á la forma que h o y tiene D . San-
tiago Buonavera , y D . Santiago Pavía.
L a scena es espaciosísima. Se c o n s e r v a n
m u c h a s telas de las que en aquel t i e m -
p o se pintaron c o n g r a n p r o p i e d a d .
A u n q u e e l s e m i c í r c u l o del T e a t r o n o
es de los mas g r a n d e s , era suficiente
para c o l o c a r en sus aposentos á todos
los Ministros , G r a n d e s , E m b a x a d o r e s ,
y demás dependientes de la R e a l F a -
m i l i a , siendo t a m b i é n la platea c a p a z
d e m u c h a g e n t e . E l aposento del R e y
- .
; es-
DE ESPAÑA. I y%
está adornado de quatro quadros g r a n -
d e s , en q u e D . S a n t i a g o A m i c o n i r e -
presentó las q u a t r o estaciones del a ñ o ;
y lo d e m á s d e l T e a t r o t i e n e t a m b i é n
a l g u n o s ornatos de escultura.
53 Esto es lo principal q u e o c u r -
re d e c i r del R e a l Sitio del B u e n - R e t i -
r o , en c u y o recinto , j u n t o al Jardín
d e V e r a n o , t i e n e h a b i t a c i ó n el C o n d e
d e A l t a m i r a , c o m o A l c a y d e que es d e
é l . En el quarto b a x o está i n c o r p o r a -
d a la E r m i t a d e S . J u a n . E n las pie-
z a s d e arriba h a y adorno de pinturas
p e r t e n e c i e n t e s á S. M . algunas son d e
F r a n c i s c o B a s a n , q u e representan a s u n -
tos de c a m p a ñ a . Se ven los quatro
e l e m e n t o s en figuras a l e g ó r i c a s con t o -
dos sus distintivos de p e c e s , a v e s , f r u -
tas , p l a n t a s , & c . h e c h o t o d o c o n g r a n
i n t e l i g e n c i a : las figuras son del g u s -
t o d e M a r t i n d e V o s . D e l de R u b e n s
son q u a t r o quadritos , de A t l a n t e , de
V u l c a n o trabajando r a y o s , de un C a -
z a d o r , que saca una flecha á una c i e r -
v a , y de o t r o , q u e dispara á un o s o .
H a y otros quadros de frutas , países,
flores , a n i m a l e s , & c . S e encuentra en
a q u e l m i s m o piso una g r a n sala , q u e
IJ4 V l A G E
sirvió para banquetes , y está ador-
nada de quadros: entre ellos dos figu-
ras de cuerpo entero, que representan
á los Reyes Ataúlfo , y Alarico , este
de Josef Leonardo , y aquel de Vicente
Carducho. Lo demás son asuntos de
batallas, acampamentos, y algunos de
los meses del año: obras de gusto fla-
menco. Hay algo de Juan de la Corte,
y diferentes quadros de frutas , flores,
&c. Volveremos ahora al Puente de
Segovia para entrar en la Casa del
Campo.
CA-
DE ESPAÑA. I 5 J
C A S A
BEL CAMPO.
1 A L P o n i e n t e del R e a l P a l a c i o ,
X J L en la orilla opuesta d e M a n -
z a n a r e s , está situada la R e a l C a s a , q u e
l l a m a n del C a m p o , con J a r d i n e s , y a r -
b o l e d a s amenísimas , aunque n o m u y
g r a n d e s , y un bosque para c a z a m e -
nor de cosa de dos l e g u a s en c i r c u n -
f e r e n c i a , q u e con el t i e m p o será e x - ,
c é l e n t e , y de m u c h o ornato á a q u e l l a
p a r t e de M a d r i d , si se continúan los
plantíos q u e se han e m p e z a d o á h a c e r .
2 L a s a g u a s del M a n z a n a r e s , e n
t i e m p o de c r e c i e n t e s , solian arruinar
las c e r c a s , y entrarse en lo b a x o del
Jardin ; p e r o de orden del R e y se h a
construido estos últimos años un s ó l i d o
p a r a p e t o para contenerlas , y f o r m a r
suelo firme, y s e g u r o en todas e s t a c i o -
nes al t r o z o d e c a m i n o q u e se c o n s t r u -
y e , para ir por el Puente de S e g o v i a á
incorporarse c e r c a de A r a v a c a c o n el c a -
m i n o de C a s t i l l a .
3 La C a s a es d e p e q u e ñ a habita-
ción:
i 56 V r AGE
c i o n : entre algunas pinturas m e n o s
considerables , c o m o son c o p i a s d e
retratos , h a y otras q u e se d e b e n e s -
t i m a r ; v. g . a l g u n o s países de g u s t o
flamenco , floreros, y fruteros. E n una
de las piezas m a y o r e s se ven quadros
g r a n d e s de P a b l o M a t e i , que represen-
t a n el N a c i m i e n t o , la A d o r a c i ó n d e
R e y e s , el B a u t i s m o , la R e s u r r e c c i ó n ,
la A s u n c i ó n , y otros asuntos sagrados; y
d e su m a n o son t a m b i é n dos sobrepuer-
tas , que representan n i ñ o s , y un S. J o s e f
de medio cuerpo.
4 H a y una tabla , en q u e están
pintados varios retratos menores q u e
e l n a t u r a l , y son el E m p e r a d o r M a x i -
m i l i a n o , F e l i p e P r i m e r o , y la R e y n a
D o ñ a Juana su m u g e r , C a r l o s V , y sus
hermanos Ferdinando P r i m e r o y D o -
ña M a r í a . E s o b r a p r o l i x a d e e s c u e l a
a l e m a n a , y los retratos de estos P r í n c i -
pes j ó v e n e s semejantes á los q u e v e m o s
d e su m a y o r edad. Es notable la p i n -
tura en tabla de J a c o b o C a l o t , alta p o -
c o mas de tres quartas , y quatro d e
l a r g a , q u e representa la T e n t a c i ó n d e
S. A n t o n i o , y es la o r i g i n a l de a q u e -
lla e s t a m p a tan c o n o c i d a d e todos , y
tao
DE ESPAÑA. I 5 f
tan d i v e r t i d a p o r los rarísimos capri-
c h o s , y estrañas figuras d e diablos q u e
en ella h a y .
5 H a b l a n d o en e l iTom. d e este
V i a g e de la I g l e s i a vieja del E s c o r i a l ,
se h i z o m e n c i ó n al fol. 152 de una pin-
tura s y m b ó l i c a d e G e r ó n i m o B o s c h , e n
q u e para expresar la l o c u r a , y v a n i -
dad d e los mortales , figuró un c a r r o
de heno tirado de algunas b e s t i a s , al
q u a l aspiran á subir personas de varios
estados , c o n l o demás q u e allí se d i x o .
Esta pintura se halla repetida , y fir-
m a d a del m i s m o B o s c h en una g a l e r í a
d e esta C a s a : e n d o n d e t a m b i é n h a y
o t r a d e l referido autor , y es i g u a l -
m e n t e repetición de la q u e se h a b l ó
en el c i t a d o Totn. 2 , fol. 2 4 0 , tratando
del E s c o r i a l , c o n l a d i f e r e n c i a d e q u e
esta d e la C a s a d e l C a m p o está p e r f e c -
tamente conservada. El asunto, c o m o
se d i x o , es la c r e a c i ó n d e l h o m b r e , y
el estado á q u e sus v i c i o s l e r e d u c e n ,
e x p r e s a n d o las humanas pasiones e n
multitud de figuras tansformadas e n
a v e s , quadrúpedos , y otras monstruo-
sidades ; d e suerte , q u e si fuera p o s i -
ble descifrar las fantasías d e l a u t o r , n e -
ce-
I58 VlÁGE
cesitaría un l i b r o "esta sola o b r a . E n
la C a p i l l a , que está al m i s m o p i s o , no
h a y cosa notable , fuera de un m a r t y -
r i o de S. L o r e n z o , de P e d r o O r r e n t e .
6 L a mejor f a c h a d a de la C a s a es
l a q u e corresponde al J a r d í n , en la qual
se forma un p ó r t i c o de arcos c o n o c h o
c o l u m n a s d ó r i c a s pareadas. E n frente
está sobre un gran pedestal d e m a r m o l ,
a d o r n a d o d e cartelas de b r o n c e , la es-
t a t u a eqüestre del m i s m o m e t a l , q u e
representa á F e l i p e I I í , obra que e m -
p e z ó el c é l e b r e Juan B o l o g n a , E s c u l -
tor , y A r q u i t e c t o , v e c i n o de F l o r e n c i a ,
y natural de D o v a y en Flandes. Q u a n -
d o se le e n c a r g ó la e x e c u c i o n de ella,
y á se h a b i a h e c h o f a m o s o , por las e s -
tatuas eqüestres de los G r a n d e s D u -
q u e s de T o s c a n a C o s m e I , y F e r n a n -
d o l su hijo. Para el a c i e r t o en quanto
á la semejanza , se le e n v i ó un r e -
t r a t o pintado por Juan Pantoja de la
C r u z , a c r e d i t a d o Retratista , y Pintor
d e C á m a r a del R e y . Estando y á la e s -
tatua en r a z o n a b l e . estado , m u r i ó el
a r t í f i c e , y la continuó su e x c e l e n t e dis-
c í p u l o P e d r o T a c a ; á quien también
se dio c o m i s i ó n para que c o n c l u y e s e
la
DE ESPAÑA. I y p
la del R e y d e F r a n c i a E n r i q u e I V , q u e
i g u a l m e n t e e m p e z ó Juan B o l o g n a . L u e -
g o q u e se finalizó esta o b r a , fue c o n -
ducida á Madrid año de 1616 , vinien-
d o c o n ella A n t o n i o G u i d i , c u ñ a d o d e
T a c a , I n g e n i e r o del G r a n D u q u e , pa-
r a c u i d a r d e su c o n d u c c i ó n desde e l
m a r , y c o l o c a r l a sobre el pedestal en
q u e está. P e s ó toda la m á q u i n a de b r o n -
c e 12518 l i b r a s , y las cartelas del pe-
destal 1130. V i n o también á España e n
esta ocasión un h e r m a n o de T a c a , Ha—
m a d o Andrés ; c u y a i n c u m b e n c i a e r a
presentar la o b r a al R e y , y al m i s m o
t i e m p o el C r u c i f i x o de b r o n c e del p r o -
p i o artífice , q u e fue c o l o c a d o en e l
altar d e l Panteón del E s c o r i a l , d e l
q u a l se h a b l ó al fol. 67 en el 2 Tom.
de este V i a g e . R e m u n e r ó el R e y al c i -
tado A n d r é s T a c a c o n una pensión
eclesiástica de q u a t r o c i e n t o s escudos;
y en muestra de su satisfacción e n v i ó
q u a t r o m i l escudos al artífice , q u e s e -
g ú n d i c e n , dio parte de ellos á los q u e
la h a b í a n tenido en sus bellas obras.
7 E s t e c a b a l l o de F e l i p e III es
m u y p a r e c i d o al d e E n r i q u e I V , q u e
está en París en el P u e n t e n u e v o , el
qual
I 60 V I A G E
q u a l e m p e z ó Juan B o l o g n a , c o m o se
HA d i c h o , y a m b o s están en a é l o d e
a n d a r . D . F e l i p e d e C a s t r o VIO al paso
p o r F l o r e n c i a , quando se r e s t i t u y ó d e
R o m a á España , la casa , y oficinas
d o n d e fueron executadas estas o b r a s ,
Y o t r a s , entre ellas la de los E s c l a v o s
d e L i o r n a , á los pies de la estatua d e l
G r a n D u q u e Fernando I , y aún se con-
s e r v a b a n fragmentos de los m o d e l o s , Y
a l g u n o s v a c i a d o s de y e s o por los m i s m o s
moldes.
1
8 A l g u n o s Poetas de aquel t i e m -
p o se esmeraron en h a c e r e l o g i o s d e
este c a b a l l o , y estatua de F e l i p e 111*
Y entre ellos el P. B u y t r o n c o m p u s o
una c a n c i ó n , q u e por ser l a r g a , y n o
c o n d u c i r á la historia de la obra , s e
o m i t e , contentándonos c o n poner e s -
tos pocos versos pertenecientes á l a
a c c i ó n de levantar la m a n o el c a b a l l o .
L 2 BOA-
Vi AGE
B O A D I L L A,
Y V I L L A V I C I O S A,
Casas Reales del Sr. Infante D. Luis.
• i / ^ A m i n a n d o desde M a d r i d al P o -
niente de la C a s a del C a m p o ,
se l l e g a á B o a d i l l a , p u e b l o distante m e -
nos de tres l e g u a s , en d o n d e tiene el
Sr. Infante D . L u i s un b e l l o P a l a c i o c o n
sus J a r d i n e s , y huerta , al qual se ha d e
añadir m u c h a obra por los dos lados,
b a x o la d i r e c c i ó n del A r q u i t e c t o D . V e n -
tura R o d r í g u e z . T i e n e este P a l a c i o tres
puertas en su f a c h a d a p r i n c i p a l : la d e l
m e d i o está adornada c o n quatro c o l u m -
nas d ó r i c a s en su primer c u e r p o , y de
dos j ó n i c a s en el s e g u n d o . E n quasi t o -
das sus s a l a s , y piezas h a y gran n ú m e r o
d e pinturas ; m u c h a s son cacerías de
P e d r o de V o s , algunas copias de las
q u e posee S. M . y otras originales. Se
v é n repartidas por toda la h a b i t a c i ó n
m u c h a s de D a v i d T e n i e r s , que repre-
sentan b a m b o c h a d a s , y otros asuntos
p r o p i o s de su g e n i o . T a m b i é n h a y di-
ferentes asuntos del B r u g h e l , p a r t i c u -
lar-
DE ESPAÑA. i 6 y
fermente flores. H a y o b r a s de R e m -
brand , entre ellas un S. P e d r o : de M u -
rillo h a y un N i ñ o D i o s : algunas cosas
de Jordán : otras de S o l i m e n a : c i e r t a s
ruinas con figurillas, d e V e l a z q u e z : d o s ,
ó tres c a b e z a s c o n f o r m e á la escuela d é
este a u t o r : una de M o s a y c o , q u e r e p r e -
senta C l e m e n t e X I I : un S. P e d r o en la
C á r c e l , de P e t e r s n a y e r , de quien h a y
algunas otras pinturas : se v é n floreros
firmados de G e r ó n i m o K e s e l : un S. S e -
bastian del E s p a ñ o l e t o : varios países d e
D . Pedro R o d r í g u e z de M i r a n d a : un S.
P a b l o de A l b e r t o D u r e r o : en una a l c o b a
está la C e n a del S e ñ o r , pintura c h i c a , d e
T i c i a n o , y últimamente h a y gran p o r -
ción de batallas, fruteros, países, floreros,
c a c e r í a s , y cosas s e m e j a n t e s , e x e c u t a -
das por h á b i l e s profesores. Es m u y g r a -
ciosa la C a p i l l a de este P a l a c i o , a d o r -
nada de pilastras c o r i n t i a s , y de c o -
lumnas j ó n i c a s en las puertas : f o r m a
una c r u z c o n sus estremos s e m i c i r c u l a -
res. L a tribuna c o n ornatos de b r o n c e s ,
y el escudo de armas del m i s m o m e -
tal , e x e c u t a d o todo b a x o la d i r e c c i ó n ,
y dibujos del c i t a d o D . V e n t u r a R o -
d r í g u e z , son obras de m u c h o g u s t o .
La EÍ
i6S VlAtíE
E l quadro que se h a d e c o l o c a r en e l
altar , tiene e n c a r g o de h a c e r l o D . A n -
tonio R a f a e l M e n g s .
2 L a fachada del P a l a c i o , que m i -
r a al jardin , es correspondiente á la r e -
ferida , y el a d o r n o de su puerta c o n -
siste en dos c o l u m n a s d ó r i c a s . E n fren-
t e de esta se ha d e c o l o c a r la magnífica
fuente de m a r m o l , d e que estuvo e n -
c a r g a d o D . F e l i p e de C a s t r o , y h u b i e r a
a c a b a d o b r e v e m e n t e , á no h a b e r f a -
l l e c i d o ( i ) ; p e r o está c o n c l u y e n d o la
o b r a su discípulo D . M a n u e l A l v a -
r e z . C o n s i s t e en tres tazas p r i n c i p a l -
m e n t e : dentro de la m a y o r , q u e es la
d e l s u e l o , h a y tres tritones niños s o b r e
otros tantos pedestales , q u e en unas
con-
(i) D . Felipe de Castro nació en la Villa de Noya,
seis leguas al Poniente de Santiago. Deseoso de estu-
diar, se fue á Lisboa , y á Sevilla, de donde pasó á Ro-
ma , y se dedicó á estudiar con el célebre Escultor
Maini. Logró allí un primer premio en los concursos
que se celebraron de las bellas Artes. Tuvo en la
misma Ciudad pensión por el Rey , que disfrutó al-
gunos años ; y habiendo sido llamado , retrató con
aplauso á los Señores Reyes D. Fernando V I , y D o -
iía María Bárbara su esposa. Trabajó después diferen-
tes obras para el Real Palacio , de que se ha hablado,
y dirigió otras : fue Director General de la Real Aca-
demia de S. Fernando , é individuo de la de S. Lucas
en Roma , y Escultor de la Persona del Rey. Murió
en cs-a Corte de edad de 64 años el dia 25 de Agosto
el año pasado de I77J".
DE ESPAÑA. I 6J
c o n c h a s r e c i b e n el a g u a , q u e arrojan
por la b o c a tres delfines de la s e g u n -
da taza , la qual está sostenida por otros
tres tritones a g r u p a d o s c o n delfines,
que t a m b i é n arrojan a g u a p o r la b o -
ca sobre c o n c h a s , q u e alternan c o n g a -
l á p a g o s en el pedestal. L a tercer t a -
z a se v é sostenida de tres ninfas , y
en el m e d i o h a y un n i ñ o , q u e h a d e
arrojar el a g u a por la b o c a hasta g r a n -
de altura. T o d a s las expresadas tazas
están adornadas de m u y buen g u s t o , y
en el r e v e r s o de la del m e d i o h a y b a -
xos relieves d e c o n c h a s , delfines , y
otras cosas. L a i n v e n c i ó n , y disposi-
c i ó n de la e x p r e s a d a fuente es del c i -
tado D . V e n t u r a R o d r í g u e z , bien q u e
el autor de la escultura fue D . F e l i p e d e
Castro.
3 T a m b i é n h a y dispuesta una m a g -
nífica fuente delante de la f a c h a d a p r i n -
cipal de este P a l a c i o en la parte o p u e s -
ta de la p l a z a q u e allí se f o r m a . E l
m o n t e de varias suertes de á r b o l e s , q u e
e m p i e z a i n m e d i a t a m e n t e , t i e n e m a s de
dos leguas de c i r c u n f e r e n c i a , y en él
h a y g r a n c o p i a de c a z a m a y o r , y m e -
nor. S e v é e m p e z a d o un magnífico c a -
L 4 mi-
168 VlAGE
m i n o h a c i a M a d r i d ; y al rededor de l a
h u e r t a , y jardines se h a n plantado p o r -
c i ó n de o l m o s ; siendo m u c h o s , y de
exquisita fruta los árboles que h a y d e n -
tro de la huerta. Si S. A . continúa e n
p e r f e c c i o n a r esta obra , será de las m a s
magníficas que se h a y a n h e c h o en e s -
tos t i e m p o s , y m e r e c e r á que se h a g a
d e ella una p u n t u a l , y e x a c t a d e s c r i p -
ción.
4 L a I g l e s i a del C o n v e n t o d e C a r -
m e l i t a s D e s c a l z a s , que h a y en esta V i -
lla , es de m u y buena arquitectura. L a s
pinturas de la A n u n c i a c i ó n del altar
m a y o r , y de Sansón en su T a b e r n á c u l o ,
son de D . F r a n c i s c o S o l í s , c o m o t a m -
b i é n el quadro de la V i s i t a c i ó n en su
a l t a r . E l m a r t y r i o de S. L o r e n z o , y d e
S. Babilés p a r e c e n c o p i a s de Juan F e r -
n a n d e z N a v a r r e t e , llamado el M u d o .
5 D e s d e Boadilla á V i l l a v i c i o s a , V i -
lla del C o n d a d o de C h i n c h ó n , que posee
S. A . h a y la distancia de una l e g u a , y
se c a m i n a por una v e g a en partes m u y
frondosa ; pero lo sería en e x t r e m o , si se
quisiesen h a c e r plantíos entre a m b o s L u -
gares , siendo el terreno m u y á p r o p ó -
sito para e l l o . E l P a l a c i o , que consiste
en
DE ESPAÑA. 169
en un quadro c o n c u b o s en las tres e s -
quinas , y un torreón en la otra á m a -
n e r a de castillo , es o b r a del c é l e b r e
Juan de H e r r e r a , y se c o n o c e desde
l u e g o por su e x c e l e n t e c o n s t r u c c i ó n ,
p o r la claridad , y c o m o d i d a d de sus
p i e z a s ; no faltando en é l , sin e m b a r g o
d e ser p e q u e ñ o , quanto se puede desear
p a r a el s e r v i c i o , y c o n v e n i e n c i a de un
g r a n Señor. T i e n e un patio en m e d i o
c i r c u i d o de un p ó r t i c o sobre p i l a r e s , y
a r c o s : una escalera principal magnífica:
un ándito , q u e llaman la r o n d a , c o n
su a n t e p e c h o al rededor de la f á b r i c a ,
c o n s t r u i d o , c o m o los m a r c o s de p u e r t a ,
y v e n t a n a s , y lo interior del p a t i o , d e
g r a n i t o , ó piedra b e r r o q u e ñ a labrada:
l o d e m á s en lo e x t e r i o r es de obra i n -
c i e r t a , q u e llaman mampostería a r r e -
glada.
6 L a s principales pinturas que a d o r -
nan las p i e z a s de este P a l a c i o , son v a r i a s
c a b a n a s tenidas por de R o s a ; floreros
d e A r e l l a n o ; países de M i r a n d a ; vistas
de D . A n t o n i o Y o l i . H a y un retrato d e
uno t o c a n d o la g u i t a r r a , de Juan V a n -
Kesel : el de una m u g e r de m a s de m e -
d i o c u e r p o , q u e por el t r a g e d i c e n
ser
170 ViA GE
ser una Sultana , tiene del gusso de T i -
e i a n o : de Z u r b a r a n es una C o n c e p c i ó n
n i ñ a ; y por de V e l a z q u e z se estima un
quadro en que h a y un b u h o pintado,
y varias c a b e z a s de c a z a m u e r t a .
7 Q u a s i t o d o lo q u e h a y en la sala
g r a n d e d e este P a l a c i o son copias , y
se r e d u c e n á diferentes asuntos d e Ba-r
s a n , á retratos de Papas , Príncipes , y
otras personas i l u s t r e s : un q u a d r o , q u e
representa la C a r i d a d , s é g u n el estilo d e
l a escuela del Sarto : u n o de M a r t i n
SicerKen, q u e representa la C o d i c i a s i m -
b o l i z a d a en un h o m b r e , y una m u g e r
c o n t a n d o d i n e r o . E l q u a d r o del O r a t o -
r i o , que representa á S a n t i a g o , l o h i z o
D . F r a n c i s c o P r e c i a d o , D i r e c t o r d e los
Pensionados del R e y en R o m a .
8 Será m e m o r a b l e este P a l a c i o p o r
h a b e r pasado su l a r g a e n f e r m e d a d , y
f a l l e c i d o en él á 4 de A g o s t o de 1 7 5 9
el Sr. R e y F e r n a n d o V I .
9 E n V i l l a v i c i o s a h a y diferentes
huertas , en q u e se c o g e m u y r e g a l a d a
f r u t a , y las fresas lo son c o n p a r t i c u -
laridad. A d e m a s de la Parroquia , h a y
un C o n v e n t o d e R e l i g i o s o s D e s c a l z o s
d e S. F r a n c i s c o . E l m o n t e q u e S. A .
po-
DE ESPAÑA. 171
p o s e e en las v e c i n d a d e s , y consta d e l
m i s m o g é n e r o de c a z a q u é el de B o a -
d i l l a , es tan g r a n d e c o m o a q u e l , c o n
p o c a d i f e r e n c i a . Si en l u g a r d e ser tan
p e l a d o c o m o es e l c a m i n o , y territorio
e n t r e M a d r i d , y estos pueblos , fuera
a m e n o , y f r o n d o s o , sería sin duda m a s
f r e q ü e n t a d o de l o q u e es al presente.
T o d o se p u e d e e s p e r a r , si l l e g a n á h a c e r
i m p r e s i ó n las v o c e s de t a n t o s , q u e n o
pueden sufrir semejante a r i d e z en los
c o n t o r n o s de la C o r t e . C r e o n o seré e l
último q u e d e c l a m e p ú b l i c a m e n t e c o n -
tra e l l a .
SI-
172 V I AGE
S I T I O R E A L
DE LA ZARZUELA.
nombre,
I j y el Jardin que tiene á M e d i o
d i a , se hallan situados á dos l e g u a s d e
M a d r i d h a c i a el N o r t e , en m e d i o d e
un bosque de e n c i n a s , q u e a h o r a está
c o m p r e h e n d i d o dentro de las c e r c a s
d e l S i t i o del Pardo. S e d i c e la f u n d ó
e l Infante D . F e r n a n d o , G o b e r n a d o r
q u e fue de F l a n d e s , h e r m a n o de F e l i -
p e I V , y que en ella daba al R e y , y
Personas R e a l e s fiestas m a g n í f i c a s , y d e
e x q u i s i t o gusto , e n t r e ellas a l g u n a s
teatrales c o n m u c h a s m á q u i n a s , y d e -
c o r a c i o n e s , m e z c l a n d o el c a n t o c o n la
representación ; de donde tomaron n o m -
b r e los D r a m a s , r e p r e s e n t a d o s , y c a n -
tados , q u e l l a m a m o s Zarzuelas, m u c h o
m a s a g r a d a b l e s al g e n i o E s p a ñ o l , q u e
las óperas e n t e r a m e n t e cantadas.
2 L a casa es un quadro de f á b r i c a
s e n c i l l a bastante b u e n a , con algunos e d i -
ficios p e q u e ñ o s a c c e s o r i o s . Está a d o r n a -
da c o n algunas pinturas; p e r o h a b i e n d o -
se
DE :.: ESPAÑA. I 7 y
s e s a c a d o las mejores q u e h a b í a , h a n
quedado entre muchas copias varios
quadros de c a c e r í a s , y paises de gusto
flamenco, algunos son de P e d r o d e V o s :
t a m b i é n h a y diferentes cosas de la e s -
c u e l a de R u b e n s , c o m o J o s ' q u a t r o e l e -
m e n t o s , y a l g u n o s asuntos fabulosos:
h a y c o p i a s de retratos , floreros, y a l g o
d e G e r ó n i m o B o s c o . El Jardín d e está
casa consta de diferentes planos por e l
d e c l i v e del terreno , y en él se c o g e ex--
q u i s i t a fruta , h o r t a l i z a s , y . flores.
REAL
174 V I A G E
R E A L S I T I O
DEL PARDO.
a n t i g u a m e n t e un
fjy b o s q u e , y casa d e r e c r e a c i ó n
d e los R e y e s de Castilla , adonde solían
i r á c a z a r , durante sus residencias e n
Madrid. Quando Carlos V mandó h a -
c e r en el A l c á z a r de esta V i l l a las re^
r n o d e r n a c i o n e s , y aumentos y a e x p r e *
s a d o s , r e s o l v i ó se d e m o l i e s e la referida
casa a n t i g u a , c o n s t r u y e n d o en su l u g a r
un p a l a c i t o m u y a c o m o d a d o ; y en e f e é l o
se e x e c u t ó durante su última ausencia
d e E s p a ñ a ; bien que no l l e g ó á h a b i t a r
en é l ; pues q u a n d o v o l v i ó á estos R e y -
nos , n o estuvo en M a d r i d , h a b i é n d o s e
i d o en d e r e c h u r a á su retiro de Y u s t e .
S e p e r f e c c i o n ó la o b r a r e y n a n d o y a F e -
l i p e I I ; pero sin e m b a r g o , no puso su
n o m b r e en n i n g u n a parte de e l l a , v i é n -
dose escrito ú n i c a m e n t e en la f a c h a d a ,
y en la puerta de la C a s a de O f i c i o s :
Carolus V. Rom. Imp. Hisp. Rex.
2 S e halla situado este edificio en u n
e s t r e c h o llano , que se f o r m a entre las
fal-
DE ESPAÑA. 175
faldas de las c o l i n a s , y la orilla i z q u i e r -
da de la c o r r i e n t e d e M a n z a n a r e s , c e r -
c a d o por todas partes d e m o n t e de e n -
c i n a s , sin j a r d i n e s ni m a s paseo artifi-
cial q u e el c a m i n o de M a d r i d , y los
naturales q u e c r u z a n por v a r i a s partes
del monte.
3 A n t i g u a m e n t e no h a b i a para ir,
al P a r d o mas c a m i n o q u e el que f o r m ó
la necesidad por la v e g a adelante á p o -
c a distancia del r i o , descendiendo s o -
b r e é l , en t i e m p o de l l u v i a s , las a g u a s
d e las c o l i n a s q u e le a c o m p a ñ a n desde
M a d r i d , de que resultaba ponerse á v e -
c e s i m p r a c t i c a b l e en el i n v i e r n o , q u e e s
q u a n d o reside la C o r t e en aquel S i t i o ;
p e r o ú l t i m a m e n t e se ha h e c h o d e orden
del R e y un c a m i n o s ó l i d o , y q u e se d e b e
l l a m a r paseo a g r a d a b l e por ir casi s i e m -
p r e entre á r b o l e s , y algunas huertas.
4 T a m p o c o tenia a n t i g u a m e n t e e s -
t e P a l a c i o otros edificios a c c e s o r i o s , q u e
una C a s a de Oficios c o n c a b a l l e r i z a ; pe-
r o en este r e y n a d o se l e h a a ñ a d i d o á
d i c h a casa m a s del d o b l e , y se ha c o n s -
truido otra paralela á e l l a , Q u a r t e l d e
G u a r d i a s de C o r p s , C a b a l l e r i z a s R e a -
les , una g r a n casa p a r a a l o j a m i e n t o
de
i7<? V i AGE
d e las familias de los Señores Infantes
D . G a b r i e l , y D . A n t o n i o , otras para
los abastos del Sitio , T e a t r o , y m u -
c h a s casas de particulares , d e r r i b a n d o
todas las barracas , y c h o z a s q u e antes
h a b i a c e r c a del P a l a c i o , y C a s a de Ofi-
c i o s , d e s u e r t e , que h a quedado un p u e -
blecito m u y gracioso , y p o b l a d o , en
el qual se halla t o d o g é n e r o de c o m o -
didades , quando la C o r t e reside e n é l .
5 E l P a l a c i o de C a r l o s V se redu-
c i a á un quadro con quatro torres r e -
saltadas en las esquinas , foso en toda
l a c i r c u n f e r e n c i a , c o n parapeto , y dos
puentes , uno á Poniente , y otro á L e -
v a n t e , para pasar á las puertas a d o r -
nadas de algunas labores de g r a n i t o , d e
c u y a m a t e r i a se h i z o t a m b i é n el z ó c a -
l o de toda la o b r a , y las j a m b a s , y
cornisas de las ventanas : todo lo d e m á s
en lo e x t e r i o r de ladrillo a g r a m i l a d o .
E n lo interior h a b i a un solo patio c o a
dos atrios pequeños , y dos p ó r t i c o s
sobre columnas de orden j ó n i c o , c o n
una escalera en c a d a uno d e m a s i a d o
pendiente.
6 E n este recinto se alojaban el
R e y , las Personas R e a l e s , y a l g u n o s
Se-
DE ESPAÑA. I 7 7
S e ñ o r e s de la C o r t e ; p e r o todos c o n es ; T
C O N V E N T O
CAR-
Vi AGE
CARTA
De D. Antonio Rafael Mengs,
primer Pintor de Cámara de
S. M. al Autor de esta
obra.
i l \ / T U y Señor mió: Quiere Vmd. que
IVA le diga mi parecer sobre el mé\
rito de Jos quadros mas singulares , que
se conservan en ese Real Palacio de
Madrid , para publicarlo en alguna de
sus obras ; pero aunque Vmd. me hon-
ra mucho en esto, y me anima , cre-
yéndome capaz de ello , me parece ser
empresa superior á mis fuerzas , y mas
difícil de lo que Vmd. se figura; mayor-
mente para m í , que no entiendo de le-
tras , ni tengo gracia para tratar mate-
ria tan delicada.
i Sabe Vmd. muy bien , que á mis
ojos no pueden parecer tan bellas todas
las pinturas.,. como lo son para los de-
más ; bien que por otra parte me ad-
miro de las obras de los hombres gran-
des mucho mas que los aficionados vul-
' > ga-
DE ESPAÑA. 187
gares ; pero con la diferencia de que
estos encuentran infinito número de ex-
celentes Pintores , es á saber , todos
aquellos , cuyas obras deleytan su vis-
ta ; y es corto el que yo hallo, redu-
ciéndose á aquellos pocos que merecie-
ron el glorioso título de grandes.
3 No obstante , es cierto que todos
tenemos una razón común para estimar
las obras de las bellas Artes, porque tan-
to el docto , como el ignorante, y cada
qual mas , ó menos tiene idea de que
las bellas Artes deben dar deleyte por
medio de la imitación de sosas cono-
cidas ; y así aprueba las que tienen esta
qualidad , á proporción de su inteligen-
cia. Si las obras son muy inferiores, y
tales , que el que las mira puede con
facilidad descubrir sus defectos , regu-
larmente las desprecia : si por la va-
riedad de objetos agradables , y fáciles
de comprehender deleytan su vista, en-
tonces es quando las aprueba ; pero si
encuentra mayor complicación de ra-
zones , de las quales las fáciles de com-
prehender le guian á la inteligencia de
las difíciles , logra entonces casi el gus-
to de adivinar: levantándose su enten-
di-
:r'SS -Vi A G E '
dimiento , y lisonjeándole con esto su
amor propio , alaba como por gratitud
dicha obra, tanto mas , ó menos, quan-
to los objetos son mas conformes á su
condición natural, ó habitual. Así el de-
voto , el lascivo , el instruido , el pe-
rezoso , y el idiota , ó popular, aprue-
ban objetos diversos con mayor , ó me-
nor entusiasmo ; pero de las cosas de-
masiado superiores , ó que están total-
mente fuera de nuestra inteligencia , re-
cibimos poco , ó ningún deleyte.
4 De lo dicho puede Vmd. colegir
quán varios deben ser los pareceres de
los hombres en orden á las obras de
pintura , y quán peligroso sea decir con
sinceridad lo que siento ; pues cada uno
se apasiona de su opinión en aquellos
objetos que aprueba , y regularmente
lleva á mal que otro desestime lo que
él alaba ; no por afición á la cosa ala-
bada , sino por su amor propio. No pu-
diendo el hombre tolerar que otro le
supere en materia de entendimiento ; y
no hallando fuerzas con que rebatir la
razón , suele recurrir al remedio de des-
acreditar á quien dixo la verdad , con
el nombre de mala lengua, de despre-*
DE ESPAÑA. t 8 p
ciador , ó por lo menos de que nada
puede contentarle ; y así muchas ve-
ces es desgracia conocer los errores age-
nos , y siempre gran imprudencia des?
cubrirlos sin necesidad. Por tanto de-
seo en parte complacer á Vmd. pero lo
haré hablando como Pintor , que cono-
ce las dificultades del Arte , y la impo-
sibilidad de poseerla sin defectos. No
tengo la vanidad de hacerme juez para
criticar á los profesores de mi facultad:
aseguro á Vmd. que hago gran estimar
cion de todos, aun de los mismos que
según las reglas del Arte podría criti-
car mucho; pues quando otra cosa no
encuentro para estimarlos , me admiro
del valor , y facilidad con que han exe-
cutado sus obras, á las quales muchas
veces no falta sino haber sido hechas
por mejor camino. Si condesciendo
en exponer algunas reflexiones críticas^
lo hago solamente con el fin de ser algo
útil, según Vmd. me hace esperar.
S Antes de emprender la descrip-
ción de los quadros , me parece no se-
ría inútil dar una breve idea.de la pin-
tura en general , á fin de que las per-
sonas poco versadas en esta materia.,
to-
i 9o Vi AGE
tomen alguna instrucción para poder
gozar la belleza de las excelentes pro-
ducciones de esta Arte, que iremos des-
cribiendo.
6 No ignora Vmd. que la pintura
fue tan estimada en todos tiempos , que
los antiguos Griegos la llamaron Arte
liberal, ennobleciéndola con este nom-
bre , hasta que últimamente se ha in-
troducido el de bella Arte , que muy
bien le conviene ; pero se debe con-
siderar , que la pintura es Arte noble,
ó liberal, con respeto al estudio men-
tal , que necesita, y á la superioridad
de entendimiento que debe tener el que
la exerce, con las calidades de un áni-
mo noble , y correspondiente á la de-
finición que los sabios hicieron de la no-
bleza. También es Arte noble , por ha-
ber sido su excelencia en todas edades
un camino abierto, y patente para el ho-
nor , y la nobleza , de que se han visto
en diferentes tiempos muchos exempla-
res en España, y se vén en otras partes.
7 El nombre de bella Arte le cor-
responde también á la pintura, en con-
sideración de sus producciones ; pues
toda pintura debe tener belleza , sin
la
DE ESPAÑA. ipi
ia qual será siempre defectuosa.
8 La noble Arte de la pintura , se
parece á la Poesía , mas que á ninguna
otra, teniendo ambas un mismo fin, que
es instruir deleytando.
9 Imita la pintura todas las aparien-
cias de los objetos visibles de la natu-
raleza , no puntualmente como son, sino
como parecen , ó como podrían , ó de-
berían ser. Siendo el fin que se propo-
ne de instruir deleytando , no lo conse-
guiría , si copiase la naturaleza como
es; porque nos quedaría la misma, y aun
mayor dificultad de comprehender las
producciones del Arte , que las de la na-
turaleza ; así el modo (i) del Arte es dar-
nos la idea de las cosas que la naturale-
za ha producido; y las obras serán tanto
mas loables, quanto la idea que nos dan
sea mas perfecta , determinada, y clara.
10 Todo lo que el Arte puede pro-
ducir lo hay yá en la naturaleza , que lo
ha producido por entero , ó por partes;
y aunque el Arte no puede llegar á
imitar con toda perfección , un objeto
de la naturaleza , quando se hallase de
cum-
Esta palabra la explica el Autor de esta Carta
alfinde ella.
19 2 V l A G B
cumplida hermosura , siendo este caso
muy raro , se puede decir que el Arte
de la pintura es en general mas cum-
plido , y hermoso que la misma natu-
raleza ; porque junta las perfecciones
que en ella están separadas , ó en la
imitación depura el objeto de todo lo
que no es esencial al carácter elegido,
para la idea que quiere dar á los que mi-
ran las obras. Además de esto, la natura-
leza es tan complicada en todas sus pro-
ducciones , que no podemos comprehen-
der su modo , ni distinguir con facili-
dad sus partes esenciales; pero la pin-
tura con las sobredichas condiciones nos
dá la idea clara de las cosas que la na-
turaleza ha producido originales , sin
fatigar nuestro entendimiento , lo que
siempre causa deleyte ; pues todo lo que
mueve , yá sea nuestros sentidos , ó
nuestro entendimiento , sin cansarles,
produce sensación agradable ; por cuya
causa la imitación nos dá mas deleyte
que su prototypo. En conseqüencia de.
esto digo , que la pintura no debe ser
imitación servil , sino ideal ; esto es,
debe imitar las partes de los objetos na-
turales , que nos dan la idea del ser de
lá
CE ESPAÑA. I 9 3
H cosa que percibimos : esto se hace
expresando las señales visibles de la di-
ferencia esencial que hay entre un ob-
jeto , y otro , yá sea de naturaleza
muy diversa , ó casi semejante. Cada
vez que se hacen visibles estas esen-
ciales diferencias, dan idea clara de su
ser , y propiedades , y quitan al en-,
tendimiento el trabajo para compre-
henderlos.
11 También los asuntos, ú objetos
que quiera tratar el Pintor, deben ser
elegidos , como los del Poeta, entre las
cosas que ofrece la naturaleza. Exis-
tan estos , ó no existan , siempre de-
ben ser posibles; y aun la misma her-
mosura , y perfección de un grado
imposible no debe emplearse sino en
las personas de supuesta divinidad , en
las quales ya se hace posible lo que
de otro modo no lo fuera. Comun-
mente se suelen llamar estas hermo-
suras , y perfecciones ideales , por
no hallarse tales en la simple naturale-
za ; de donde nace , que muchos creen
que lo ideal no es verdadero , y natu-
ral. La perfecta pintura siempre tie-
ne , y debe tener de lo ideal; bien en-
Tom.VL N ten-
ip4 V i AGE
tendido, que esto no ha de ser sino la
elección de las cosas yá producidas por
la naturaleza, que convienen á una mis-
ma idea, adaptadas de modo , que for-
men unidad en la obra del arte , para
atraher el ánimo del que la mira , y po-
nerle en aquel estado que quiere el ar-
tífice. En esto consiste el artificio del
profesor , con el qual hace pintoresco
qualquier objeto de la naturaleza por
medio de alguna disposición capaz de
dispertar sensación particular en los que
miran la obra del arte.
12 Quando una pintura tuviere la
elección , la imitación , y la execucion
arreglada á una misma idea , siempre
será buena : al contrario , será siempre
defectuosa , si le falta esta calidad ; no
obstante, podrá ser de mejor, ó inferior
estilo, según la elección que el Autor
hizo de los objetos que se propuso imi-
tar en la obra.
Estilos en la Pintura.
13 Todas las partes juntas, que com-
ponen la pintura en quanto al acto prác-
tico , ó execucion , forman lo que yo
llamo estilo , que es directamente el mo-
do
DE ESPAÑA.' i 9 y
4q de ser de las obras de pintura. Estos'
estilos son infinitos; pero los principa-
les (de los quales derivan los otros) se
pueden comprehender en corto número;
y son el sublime , el bello , el gracio-
so , el significante , y el natural , no
haciendo cuenta con los estilos vicio-
sos ; aunque no desprecio los Autores de
ellos ; pues no es raro que los defectos
grandes se hallen acompañados de gran-
des méritos; y aun esto dá motivo á que
muchas veces sigamos con equivocación
á los viciosos , tomando por virtudes
sus defectos.
14 Sobre los citados estilos, me ex-
plicaré lo mejor que pueda, aunque el
asunto es superior á mis fuerzas , por
lo que parecerá atrevimiento en mí el
emprenderlo ; mas lo hago con la es-
peranza de dar, á lo menos , ocasión
con estas pocas palabras, para que otro
mas hábil, y capaz , tome á su cargo
explicarlo mejor de lo que yo alcan-
zo ; y aun miraré con complacencia,
el ser desaprobado , si alguno dixese co-
sas mas útiles sobre un punto tan im-
portante como este para los Pintores , y
aficionados del Arte , á fin de conocer,
N2 y
19$ Vi AGE
y distinguir los estilos , y apreciar los
que mas justamente lo merecen.
Estilo sublime.
i s Por estilo sublime entiendo aquel
modo de tratar el Arte , que conviene
á la execucion de ideas, con las qua-
les se quieren hacer concebir al que
mira una pintura, objetos de calidades
superiores á nuestra naturaleza. El arti-
ficio de este estilo consiste en saber-
formar una unidad de ideas de lo po-
sible , é imposible junto en un mismo
objeto: por lo que conviene que el ar-
tífice emplee , y se sirva de formas , y
apariencias conocidas de una perfec-
ción no posible; y para esto en las par-
tes conocidas, que tomará de la naturale-
za , debe hacer abstracción de todas las
señales de mecanismo de la misma na-
turaleza. El modo en todas las partes
debe ser simple , sencillo , y austero , á
lo menos grande , y grave.
. 1 6 No tenemos exemplares de este
estilo en las obras de pintura , faltán-
donos las de los antiguos Griegos; por
lo que debemos recurrir á las esta-;
tuas que nos quedan de ellos , entre las
qua-
DE-ESPAÑA. ir g y
guales el Apolo Pithio (i) de Belve-*
der (2) en el Vaticano es la que mas se
arrima á este estilo; y lo habrán sido per-
fectamente el Júpiter, y la Minerva de
Fidias (3) en Elis , y Atenas. Rafael
de Urbino en lugar del estilo sublime,
no llegó mas que al grandioso. Miguel
Ángel nos dio el terrible ; y aunque es-
tos dos se arrimaron al sublime en los
conceptos , é invenciones , sus formas
no correspondían; bien que el modo
de la execucion , particularmente la de
Rafael, sería muy propia para el estilo
sublime. Aníbal Caraci por la imita-
ción de las formas de las estatuas an-
tiguas se aproximó algunas veces ¿ co-
mo también Dominico Zampieri; pero
sin unirles la sublimidad de ideas, y
modos.
Estilo de la belleza.
1 7 La belleza es la idea , ó imagen
de la perfección posible : jamás la
perfección se hace visible , sin produ-
N 3 cir
(1) Llamado así por representarse como triunfante
de la serpiente Pithon.
(2) Belveder , parage elevado del Palacio Vaticano,-
en donde se guardan la dicha estatua , y otras.
.(3) Fidias , famosísimo Escultor de Atenas , que flo-
reció hacia la octuagésima Olimpiada.
* 9 8 V Í A S E
cir belleza ; ni hay belleza que no
muestre alguna buena propiedad , ó
perfección del objeto en que se halla.
Levanta á mas de esto la belleza nues-
tro entendimiento á la fácil inteligen-
cia de las buenas calidades de los obje-
tos , que sin esta le quedarían escondi-
dos , y difíciles de comprehender.
18 El estilo propio para expresar
tales objetos debe ser sencillo , y de-
purado de superfluidades , en qualquie-
ra objeto , sin que le falte ninguna
parte esencial; y cada cosa debe estar
señalada conforme á su dignidad , ó ca-
lidad mas útil en la naturaleza. No obs-
tante , la execucion ha de ser mas in-
dividual , y de mas suavidad , que en
el estilo sublime ; de manera , que bas-
té para darnos idea clara de la per-
fección posible.
.-. 19 Este estilo de la belleza tam-
poco se halla perfedo en las obras de
los modernos. Si se hubieran conser-
vado las de Zeuxís, particularmente su
Helena , tal vez podríamos formar idea
justa de él ( 1 ) . Las estatuas griegas,
que
Zeuxis fue discípulo de Apolodoro Ateniense,
yflorecióen la Olimpiada 9/,
DE ESPAÑA. 799
que nos quedan, son generalmente de
este estilo , mas , ó menos , según lo
permite el caraéler de cada una ; y
aunque algunas tengan muchísima ex-
presión de aféelos , como la del Lao-
conte (i) , no obstante se trasluce la
hermosura , y belleza de las formas,
bien que en un estado violento , y al-
terado. La belleza parece mudar de
carácter , según el sugeto en que se
halla; así vemos acercarse al sublime
en el Apolo del Vaticano : en el Me-
leagro (2) se ve la hermosura humana,
ó heroica : en las Nioves la muge-
ril (3) : en el Apolo , y Venus de
Médicis (4) la hermosura de sugetos
graciosos. Bellísimos son el Castor, y
Polux de S. Ildefonso (5): la Lucha de
Florencia: el Gladiator de Borgues, y
N4 el
Estilo gracioso.
10 La gracia es palabra que equi-
vale á beneficencia ; por lo que consi-
dero que los objetos que nos parecen
graciosos ,son aquellos que en su apa-
riencia nos dan idea de esta calidad:
el estilo que le corresponde,debe dar á
la figura movimientos moderados, fá-
ciles , amorosos, y mas presto humildes,
que arrogantes. En la execucion no
de-
(i) El Gladiator de Borgues , famosísima estatua,
que se encuentra en Roma en la Villa de la Casa
Borgues. El Hércules , obra igualmente famosa , que
está en el Palacio Farnés de la misma Ciudad.
CE fisPAÑA. 2OI
debe ser tratado con mucha determi-
nación ; antes bien ha de ser fácil, va-
riado , suave , pero sin menudencias.
ai Esta fue la parte que confesa-
ron los Griegos poseía Apeles en grado
superior ; y aunque este artífice era muy
modesto, él mismo se gloriaba de poseer-
la , diciendo con ingenuidad, que otros
le excedían en algunas partes , pero
que él les vencía en la gracia : mas de-
bemos entender que la idea de la gra-
cia de los antiguos era muy diversa
de la que hoy tenemos de ella, siendo
la nuestra, en orden á la pintura, com-
parada con la de los antiguos, una es-
pecie de afectación, que no podria sub-'J
sistir en la perfeéta hermosura sin cau-
sarle estorvo , consistiendo en ciertos
gestos , acciones , y posturas no natu-
rales , sino difíciles , y casi violentas,
ó semejantes á las de los niños , como
vemos algunas veces en las obras del
mismo gran Antonio Corregió , y mas
en las del Parmegianino , y de otros
que han seguido este rumbo. En los
antiguos no es ésta la gracia, sino un
carader , de que se-puede decir , que
así como la belleza es l a r d e a de laper-
' T í^»í) fec-
"2 O 2 .'VlAGS
feccion , la gracia es la belleza que
tiene por fin dar ideas agradables de
los objetos bellos.
22 Los exemplares mas perfectos
de este estilo de los Griegos son la
Venus de Médicis, el Apolo (i), y el Her-
mafrodita de la Villa Borgues (2), y lo
que queda del antiguo en el bellísimo
Cupido de la misma Villa ; como tam-
bién una Ninfa (3) en la excelente colec-
ción de S. Ildefonso, y otras varias es-
tatuas. Rafael tenia la verdadera gracia
en los movimientos de las figuras;pe-
ro le faltaba algo de elegancia en las
formas , y contornos , y también su
execucion en general es demasiado de-
terminada. El Corregió puede servir
de exemplo en los contornos, claro , y
obscuro , y en todo lo que se compre-
hende baxo el nombre de execucion
por el estilo gracioso. Este autor tenia
en el grado mas alto aquella parte , de
la qual se preciaba Apeles , quando ala-
bando á Protógenes , decia, que este
Je
(1) Estatua célebre, menor que el natural, nombrada
en Italia : el Apolino.
(i) Esta estatua se halla vaciada en bronce en una
pieza baxa del Palacio de S. M.
(3) Estatua medio vestida , apoyada con una man»
sobre un vaso.
DE ESPAÑA. 203
le era igual en todo ; pero que no sa-
bía levantar la mano de la obra , dándo-
nos á entender que el demasiado tra-
bajo quita la gracia á las Artes , y es
contrario á este estilo.
Estilos viciosos.
28 Rezelo mucho que disgustaría de-
masiadamente á un gran número de afi-
cionados , si quisiera hablar de los esti-
los viciosos ; porque estos dan mucho
gusto á los que no tienen el tacto bastan-
te delicado para discernir la verdadera
excelencia de los hombres grandes ; y
así toman una pura apariencia por ver-
dadero mérito. Con esta equivocación
tienen muchos el estilo recargado , co-
mo es el de algunos sequaces de Mi-
guel Ángel , por el verdadero grandio-
so de este maestro : el afectado de al-
gunos Pintores Lombardos les parece
gra-
DE ESPAÑA. 207
gracioso, como el del Corregió. Lo mis-
mo sucede con los estilos amanerados
recibidos por muchos aficionados co-
mo los mejores del mundo; quando no
son otra cosa, por lo regular, que un
aumento de las cosas accidentales de
la naturaleza, con que llega á dar idea
clara á los que no son capaces de co-
nocer los objetos de ella por las partes,
y señas esenciales. Los medios de que
se sirven los artífices de este estilo pa-
ra dar gusto á tales aficionados , son
el aumento de la hermosura de las tin-
tas locales de todos los cuerpos, y su
variedad ; la fuerza , y contraposición
del claro , y obscuro ; y la disposición
quimérica de masas de luces, y som-
bras donde no pueden hallarse ; de mo-
do , que tales obras mas están hechas
para los ojos, que para la razón. Este
estilo han seguido muchos de los que
son reputados por hombres grandes,
particularmente fuera de Italia , cuyos
nombres respeto por los méritos que
han tenido en otras partes del Arte,
como son la fertilidad , y abundancia
de ingenio , y el superior talento con
que han sabido vencer , ó despreciar
las
2o8 . V Í A O S
las mayores dificultades, y contentarse
con alguna excelencia en lo que les
salía fácil, sin cuidar de las censuras
de los inteligentes.
Estilo fácil.
29 Algunos profesores han tenido
un estilo muy bello , y de mucha faci-
lidad , sin ser viciosos , en el qual nin-
guno mayor que Pedro de Cortona, y
los de su escuela , como se ve aquí
en las bellas obras de Jordán. Estos
pueden llamarse Pintores de estilo fácil,
vulgares, y populares: que no han ido
tras de la perfección , y se han conten-
tado con dar en todas las partes del Arte
una idea suficiente para distinguir una
cosa de otra, sin dar la de la perfec-
ción , respecto de ser esta conocida de
pocos , y por lo regular no de aque-
llos que premian con intereses á los pro-
fesores ; de modo , que estos celera-
dísimos artífices han puesto en sus obras
tanto estudio , quanto cabalmente po-
dían entender los mas de los aficionados
sin mucha aplicación.
30 Por lo que toca á la práctica de
la pintura , contiene , ó se compone de
cin-
DE ESPAÑA. 2 o 9
cinco partes principales, que se com-
prehenden baxo los nombres de Dibujo,
Claro, y Obscuro, Colorido, Invención,
y Composición. En qualquier obra de
esta Arte concurren principalmente, y
absolutamente las tres primeras, y todo
lo que se hace en ellas se puede demos-
trar si está bien ó mal hecho. No es así
en las otras dos, que tienen mucho de ar-
bitrario ; y aunque haya su razón por la
qual deben guiarse , siempre en algún
modo queda en opiniones: de aquí nace
la dificultad de hallar reglas tan fixas
que puedan contentar á todos ; y como
estas partes de la Invención, y Compo-
sición gobiernan toda la parte de la
elección en esta Arte , cada qual elige
diversamente, según su genio, y aprue-
ba lo que ha elegido.
Dibujo.
31 El entrar á describir todas las
partes del Arte, sería obra larga , y no
propia de este lugar. Diré solamente
que la perfección del dibujo consiste en
la corrección , que es la puntual imita-
ción de todas las formas , y del modo co-
mo se representaná nuestra vista, y en
Tom.VL O sa-
2 I O VlAGE
saber dar el carácter , que quiere figu-
rarse ; el qual consiste en elegir de la
naturaleza lo que conviene al asunto,
ú objeto.
Claro, y obscuro.
32 La belleza del claro, y obscuro
consiste en que el Pintor sepa imitar
todos los efectos de la luz, y sombra
de la naturaleza : que haya en sus obras
fuerza , dulzura , variedad , degrada-
ción , y descanso para la vista , tanto
en las luces, como en las sombras; y fi-
nalmente que el mismo claro, y obscu-
ro sirva para expresar el carácter de
una obra alegre , ó grave , &c.
Colorido.
33 La belleza del colorido consiste
en la justa imitación de los colores lo-
cales , ó tonos de cada cuerpo; que el
tono sea el mismo, así en las luces, co-
mo en las sombras, y medias tintas; que
cada color, ó tinta vaya degradando, se-
gún la falta de luz, ó interposición del
ayre entre los objetos , y nuestra vista;
y finalmente que un color haga harmo-
nía con el otro, y reciba todos los acce-
den-
DE ESPAÑA. 211
dentes, que se vén en la naturaleza, de
modo que el colorido sea hermoso, lu-
cido , jugoso , fuerte, y suave.
Invención.
34 La invención es la parte mas am-
plia de la Pintura , en la qual se conoce
el ingenio , y talento de cada Artífi-
ce : es la poesía de esta Arte : elige la
primera idea de una obra de Pintura^
que no debe abandonar el Artífice has-
ta la última pincelada. No basta que
el Pintor tenga una buena idea , ni tam-
poco que sepa llenar un gran lienzo
con muchas figuras, si estas no sirven
todas para explicar dicha primer idea.
Quando todo el conjunto de la obra no
expresa , y declara á quien la mira el
género de asunto que se trata , para
disponer, y preparar el entendimiento
de modo que le muevan las expresio-
nes , y acciones de las principales fi-
guras ; de nada servirá dar expresio-
nes violentas , ó movimientos altera-
dos , para parecer espiritoso inventor.
Al contrario qualquier demasía es la co-
sa mas contraria á la buena invención.
Para dar idea de esta parte describiré el
O 2 qua-
2 12 - V i A G E
quadro del Pasmo de Sicilia entre otros
del Real Palacio.
Composición.
35 Por composición en la pintura
se debe entender el arte de juntar con
buen modo los objetos que se hayan
elegido por medio de la invención. Es-
tas dos partes han de ir siempre unidas;
porque los mejores pensamientos, é in-
venciones serían desagradables sin bue-
na composición. La belleza de esta d e -
pende principalmente de la variedad,
Contraposición , contraste , y disposi-
ción de todas las partes que entran en
una obra : con todo eso , la invención
debe gobernar con propiedad las partes
de la composición.
36 La pintura ha estado sujeta á las
mutaciones que padecen casi todas las
cosas h u m a n a s : ha tenido su aumento,
y decadencia : volvió á levantarse has-
ta cierto g r a d o , y v á declinando de
nuevo. Pero no solamente ha experi-
mentado estas variedades, sino que t a m -
bién ha variado en sus razones funda-
mentales ; pues lo que en un tiempo ha
sido su fin p r i n c i p a l , se ha mirado en
otro
T>E ESPAÑA, 2 1 3
otro como parte apenas necesaria : ade-
mas ha habido mutaciones , y diferen-
cia de opiniones en varios tiempos acer-
ca de las partes que componen el Arte.
37 Doy por supuesto que la Pintu-
ra no ha subsistido en forma de Arte en
nación alguna antes que entre los Grie-
gos , ni que ha llegado á mas alto grado
de perfección, que al que ellos la levanta-
ron. Entonces se exercitaba con diver-
sas razones, y estilo que entre los mor
dernos, aunque el fin principal siempre
fue la imitación de la naturaleza.
38 Los antiguos Griegos hicieron
tanto caso de la hermosura , que solo lo
que es hermoso en la naturaleza les pa-
recía digno de imitarse; de modo que se
puede asegurar, haber sido ellos los que
formaron , y mantuvieron el estilo de
la hermosura. La mucha atención que
ponían sus mayores artífices en la per-
fección de esta parte , les estorvaba el
pensar en aquellas grandes composicio-
nes , que dan gloria á los autores mo-
dernos : en efecto, los mas celebrados
quadros que hicieron Polignoto, Zeuxís,
Parrasio , y Apeles, eran de pocas figu-
ras : sus invenciones, aunque ingenio,-
O 3 sas,
4 14 V I A rt E
sas, no abundaban de objetos; y según
conocemos por las esculturas que nos
quedan , sus grandes composiciones no
formaban una perfecta unidad, mas so-
lo un conjunto de muchas figuras, que
tenían su excelencia particular. Que
los antiguos Pintores no usasen de qua-
dros muy numerosos defiguras, puede
consistir también en otra razón; y es,
que un objeto hermoso, y perfecto ne-
cesita espacio suficiente para quedar en
su lucimiento , siendo cierto que los
muchos objetos sirven de estorvo para
gozar la perfección del que es prin-
cipal.
39 Quando los Griegos hubieron
adelantado tanto en el Arte de la Pin-
tura , que pudieron merecer la aten-
ción de aquella nación inclinada á la
Filosofía, naturalmente se propusieron
buscar la perfección de la misma Arte,
imitando la naturaleza ; pero la natu-
raleza perfecta, con cuyo motivo no
se estendieron tanto en la cantidad de
objetos , como en la perfección de ellos:
de este modo adelantaron, grado por
grado, desde la décimaquinta Olympia-
da, poco mas , ó menos, hasta la nona-
g "
é
DE ESPAÑA. 215"
gésima, en cuyo tiempo yá se habían
hallado las mayores sutilezas del Arte,
sin que quedase otra cosa que añadir,
sino aquella gracia , que , como he di-
cho , no es propiamente la perfección,
ni la hermosura , sino la idea de esta
última , representada con aquella faci-
lidad que comunica un estado de quie-
tud al espíritu de quien mira la pro-
ducción del Arte. Esta parte, digo, que-
dó entonces reservada para el grande
Apeles, que floreció en la Olimpia-
da ciento y doce ; y este dio comple-
mento á toda la perfección del Arte por
el camino de los antiguos , que después
fueron cayendo en frioleras , menuden-
cias , y caprichos.
40 Quando la Pintura volvió casi
como á renacer en el decimotercio si-
glo de la Era Cristiana , encontró el
mundo en mucha ignorancia , y con
poca Filosofía; de modo que aquellos
primeros Pintores se emplearon en pin-
tar imágenes , en las quales no se ha-
cia cuenta de hermosura , ni de per-
fección. En Italia , donde principal-
mente renació , se pintaron fachadas
interiores de Iglesias, de Cementerios,
04 y
2I6 V l A G E
y Capillas, para representar misterios
de la Pasión de nuestro Señor, y otros:
así apenas renacida , se le abrió un
espacioso campo , para hacerse mas
presto abundante que perfecta ; de don-
de nace que la Pintura entre los mo-
dernos conserva todavía algo de este
principio; porque no sirviendo entre no-
sotros para contentar á los hombres mas
grandes , y mas dados á la Filosofía, co-
mo entre los Griegos , sino principal-
mente para los poderosos , ó el vulgo;
la idea de nuestros artífices , antes que
pararse en la perfección , debe recurrir
á la abundancia, y facilidad , que son
las partes que pueden ser conocidas
por las personas para quien mas pinta-
mos.
41 Como nada es constante , y
siempre los hombres van adelante en
sus ideas , levantando lo que es baxo,
y baxando de nuevo lo que es alto , no
podia menos que los Pintores buscasen
modos de hacerse superiores los unos á
los otros; y así fueron añadiendo alguna
parte de teórica á aquella práctica bár-
bara , con que habían empezado. La
primer parte que hallaron, fue la pers-
pec-
DE ESPAÑA. 2 17
peftiva , cuya inteligencia contribuyó
tanto á la composición , que pudiendo
yá exprimir los escorzos, se vieron en
estado de adelantar sus invenciones. Do-
mingo Guirlandayo, Florentino , fue el
primero , que, mediante dicha parte,
mejoró el modo de la composición , po-
niendo las figuras en grupos ; y distin-
guiendo los planes donde estaban con
su justa diminución , dio profundidad
á sus composiciones : sin embargo, no
se atrevió al modo de las composicio-
nes mas modernas.
42 Hacia el fin del siglo décimo-
quinto nacieron algunos talentos su-
periores , como fueron Leonardo de
Vinci , Miguel Ángel, Giorgion, Ticia-
no , Fr. Bartolomé de S. Marcos, y Ra-
fael de Urbino. Leonardo halló muchas
sutilezas: Miguel Ángel, con la vista de
los fragmentos de la antigüedad , é inte-
ligencia de la anatomía, engrandeció
el estilo del dibujo con las formas : Gior-
gion de Castel-Franco lo engrandeció
en general, y en particular dio mas vi-
veza al colorido que sus antecesores: Ti-
ciano con imitación mas sutil de la na-
turaleza , halló la perfección en los tonos
del
2l8 Vi AGE
del color: Fr. Bartolomé , haciendo es-
tudio particular en los paños, encontró
el buen modo de vestir las figuras , si-
guiendo el vulto del desnudo por me-
dio delclaro, y obscuro: Rafael Sancio
de Urbino, dotado de un talento el mas
propio , y determinado para la Pintura,
miró á todos sus pasados , y contempo-
ráneos, haciendo un compuesto de sus
excelencias, y sirviéndose de ellas donde
conventa, según la verdad de la naturale-
za , y la razón , formando con esto el es-
tilo mas perfecto, y mas universal entre
quántos Pintores modernos hubo , antes,
y después de él; y si fue excelente Ra-
fael en todas las partes del Arte; en la in-
vención , y composición fue todavía su-
perior; y creo sorprendería á los mismos
Griegos antiguos , si viesen las grandes
obras suyas del Vaticano, donde en tanta
abundancia , se encuentra tanta perfec-
ción , cuidado , sutileza , y facilidad.
43 Como entre los Griegos la Pin-
tura habia adquirido la suma perfec-
ción en Zeuxís, y Parrasio; y el gran-
de Apeles no tuvo que añadirle mas que
gracia , como queda dicho ; así también
entre los modernos nada faltaba á la
Pin*
DE ESPAÑA. i I p
Pintura, vistas las de Rafael, sino aque-
lla gracia que añadió Antonio Alegri,
llamado el Corregió, quien dio com-
plemento á quanto se puede desear en
el estilo de la Pintura moderna , no
contentando solamente á la razón de
los inteligentes, mas aun á la vista de
todos,
44 Después de estos grandes Pinto-
res hubo un intervalo, hasta que los Ca-
racis de Bolonia (i) emprendieron el es-
tudiar las obras de los pasados , princi-
palmente las de Corregió : estos fueron
los mayores , los primeros, y mas feli-
ces de los imitadores. Aníbal fue el mas
correcto dibujante, y mezcló el estilo
de las estatuas antiguas con la grandio-
sidad del de Ludovico ; pero no fue in-
clinado á las sutilezas del Arte , ó con-
sideraciones filosóficas. De estos Cara-
cis se formó una escuela de hombres
muy hábiles, por el mismo rumbo que
ellos, exceptuado Guido Reni, que fue
de un gran talento, y de mucha facili-
dad , é introduxo en la Pintura un estilo
agradable, compuesto de bello, gracio-
so,
(i) Agustín Caraci, Ludovico Caraci, y Aníbal Ca-
raci.
'2 2 o VTAGTT
so , rico , y fácil. Güercinó de Cento
fue inventor de un estilo particular de
claro , y obscuro , de lo que llamamos
mancha , contraposiciones, variedades,
é interrupciones de todo ello.
45 Después de estos grandes hom-
bres , que imitaban con modo fácil la
apariencia de la perfección de los prir
meros , y de la naturaleza, vino Pe-
dro de Cortona , que todavía encon-
tró demasiada dificultad para acertar
con aquellos estilos ; pero habiendo
nacido con mucho talento natural, se
aplicó principalmente á la parte de
la composición , y á lo que se lla-
ma gusto. Hasta entonces todas las
composiciones habían tenido una es-
pecie de simetría , ó llámese disposi-
ción arreglada al equilibrio, ó como
las de Rafael, según pedia la invención
de la Historia; pero Cortona casi sepa-
ró la invención de la composición, aten-
diendo mucho mas á aquellas partes
que deleytan la vista , es á saber, á la
contraposición, y contraste de miem-
bros en las figuras: de suerte que desde
entonces se introduxo la costumbre de
llenar las pinturas con muchedumbre de
DE ESPAÑA. 221
figuras bien puestas , no reparando si
convenían , ó no á la Historia ; que es
casi lo contrario que practicaban los an-
tiguos Griegos, que ponían pocas figu-
ras , áfinde que fuese mas visible la per-
fección de ellas ; y los últimos profe-
sores han puesto muchas para disimular
las imperfecciones. Esta escuela Corto-
nesca se ha derramado , mudando el
carácter del Arte de la pintura.
4 6 En Roma se levantó poco des-
pués Carlos Marati, que deseaba la per ¿
TA-
i6i
T A B L A '
De las cosas n o t a b l e s d e este
Tomo VI.
, hasta y ó .
Q u a r t o del Infante D . G a b r i e l , fol. ¿y.
Q u a r t o del Infante D . A n t o n i o , f o l . j 8 .
Q u a r t o d e l Infante D . L u i s , f o l . <ro.
P i e z a s de paso desde e l Q u a r t o d e l Rey,y
R e y n a á la C a p i l l a , fol. 6 1 . n.6o. y 6 1 .
P i n t u r a s famosas de S . M . e n la casa que l l a -
man de R e v e q u e , fol. 6 3 .
Célebre obra de Rafael de Urbino, f o l . 65-,
No-
2Ó2 TABLA.
Noticia de. varios mármoles de España,
que se han empleado en el Real Palacio,
fol. 6 6 .
Otras noticias acerca de las habitaciones
Reales, fol. 6 7 . y 6 8 .
Capilla de Palacio , y Sacristía , fol. 6 9 .
n. 6 9 . hasta 7 7 .
Custodia grande de la Capilla , fol. 7 4 .
Capilla de la calle del Tesoro, fol. 7J*.
n. 7 8 . y 7 9 .
Guardajoyas, y otras piezas de Palacio,
y varias preciosidades que hay en ellas,
fol. 7 7 . n. 80. hasta 8 y.
Otras piezas con varias obras de Escultura
antiguas, y modernas, fol. 8 1 . n. 8 6 .
hasta 9 0 .
Armería Real, y noticia de varios artífices
de espadas , con otras cosas notables,
fol. 8 8 . n, 9 2 . hasta 1 0 2 .
Modelo para la reedificación del Real Pa-«
lacio , que no se siguió , fol. 100.
Obras exteriores de Palacio , foh 1 0 2 ,
n. 1 0 4 . hasta 1 0 7 .
Real Sitio del Buen-Retiro , y. de sus Jar-
dines , fol. 1 0 6 .
Estatua eqüestre de Felipe IV , fol. 1 0 8 .
n. 3 . hasta 9 .
Estatuas últimamente erigidas á varios Prín-
cipes , fol. 1 1 $.
Jardin de S. Pablo , y de las estatuas famo^
sas
TABLA. 263
sas que hay en él, fol.i 1 7 . n . 1 2 . hast. 1 4 .
Pinturas á fresco en una <~asa de este Jardín,
fol. 1 2 0 .
Fábrica de la China , fol. 1 2 2 .
Parroquia de este Sitio, y célebre obra de
escultura , con otra de pintura , fol. 1 2 2 .
n. 1 8 . hasta 2 2 .
Pinturas al oleo en las Reales habitaciones
del Buen-Retiro, fol.i 2 8 . ^ 2 7 . hasta 4 1 .
Pinturas famosas á fresco , de Jordán , en
el Cason del Retiro , y en las piezas ad-
juntas, fol. 1 4 1 . n. 4 2 . hasta 4 8 .
Otras obras de escultura , y pintura, fol.
1 4 9 . n. 4 9 . hasta 5 2 .
De la habitación del Alcayde del Buen-
Retiro , fol. 1 5 3 .
Casa del Campo, y sus adornos , cercas, y
Jardines, fol. 150. n. 1. basta y.
Famosa estatua eqüestre de Felipe I I I , fol.
6 . hasta 8.
Otros adornos del Jardín donde está dicha
estatua , fol. 1 6 1 . n. 9 . hasta 1 2 .
Casas Reales del Sr. Infante D.Luis en Boa-
diila , y Villaviciosa : noticia de varias
obras apreciables, fol. 1 6 4 . n.i. hasta 9 .
Sitio Real de la Zarzuela, fol T 7 2 .
Real Sitio del Pardo , de su- fundación , y
aumento , fol. 1 7 4 . n. 1 . hasta 7 . De sus
pinturas , n. 8 . hasta 1 1 .
Convento de Capuchinos delPardo,fol. 1 8 1 .
Ca-
aÓ4 TABLA.
Casa de la T o r r e de la P a r a d a , y Real
Quinta , fol. 1 8 3 . y 84.
C a r t a de D . A n t o n i o R a f a e l M e n g s al A u -
t o r d e esta o b r a , f o l . 1 8 6 . n. 1 . Se t o c a n
v a r i o s puntos de i m p o r t a n c i a para cono-
c e r , y e s t i m a r las obras d e P i n t u r a , n . 3 .
hasta 1 2 . E s t i l o s de l a P i n t u r a , n . 1 3 .
basta 3 0 . L a s p a r t e s p r i n c i p a l e s de q u e
consta l a P i n t u r a , n . 3 1 . hasta 3 $. E s t a d o
d e la p e r f e c c i ó n d e l A r t e entre l o s G r i e -
g o s , su d e c a d e n c i a , q u a n d o se v o l v i ó á
l e v a n t a r e n t r e los m o d e r n o s , y d e su e s -
t a d o hasta nuestra e d a d , n.3 6 . hasta 4 7 .
D e s c r i p c i ó n de a l g u n o s d e los m e j o r e s
quadros del R e a l Palacio , fol. 2 2 3 . n.
4 9 . hasta 7 1 . D e s c r i p c i ó n d e l a s i n g u l a -
r í s i m a pintura d e R a f a e l , llamada el
Pasmo de Sicilia , n . 7 2 . h a s t a 8 7 .
N o t i c i a d e otros q u a d r o s , y advertencias
importantes p a r a los P r o f e s o r e s de la
P i n t u r a , n. 8 8 . hasta e l fin.
ERRATAS.
F o l . 1 6 5 . l i n . i . Rembrand,léase Rembrandt.
F o l . 2 4 1 . l i n . 9 . B a s a r i , léase Vasari.
BIBLIOTECA NACIONAL
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1001984152