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En los comentarios que siguen nos referimos a la calzadura hecha con este
último propósito.
Cabe diferenciar algunas formas de protección en función a la ubicación de la
calzadura y a su exigencia estructural.
Aquella que se ejecuta dentro de los linderos del terreno por excavar.
Aquella que se realiza en propiedad vecina, es decir fuera de los linderos del
terreno por excavar.
En el Perú, sobre todo en Lima gracias al buen suelo con que se cuenta
se suele realizar calzaduras de 10-15 mts de profundidad, sin embargo lo
recomendable es no exceder de los 6mts.
Calzadura desencofrada
Al pie del muro se deben excavar piques de ancho variable que puede ser
de 1m a 1.5 metro de ancho, esto dependerá de la consistencia del
terreno.
Los piques (huecos) se deberán de excavar alternadamente, de forma que
quede 2 piques sin excavar (2.5 m aprox.) entre pique y pique sin excavar
Respecto al procedimiento les puedo comentar que se comienza a calzar
por los extremos del muro o cimiento vecino.
c) APUNTALAMIENTO.
La calzadura, en particular en los frentes bajo o cercano a edificaciones
existentes, debe apuntalarse. Considerar que la capacidad de la
calzadura-pantalla de concreto simple-como muro de contención es
limitada.
f) VIBRACIONES.
Las vibraciones pueden destruir la cohesión permanente que tiene el
suelo de Lima y que es la que permite taludes casi verticales en el
conglomerado. La pérdida de cohesión además de incrementar los
empujes, dificulta el trabajo de calzadura y puede llevar a la necesidad
de entibamiento de suelo.
Las dimensiones de los paneles que conforman los muros pantalla son
entre 1,5 y 5 m de longitud, y 26 a 150 cm de espesor.
a) CUCHARA BIVALVA.
Se emplea en terrenos que lo
permitan (no demasiado duros).
Dependiendo del fabricante,
pueden llegarse a excavar terrenos
que tengan una resistencia a
compresión en torno a los 60
kg/cm2. Existe dos tipos: las
pantalladoras al cable (son grúas
de cadenas) Usadas generalmente
en obra Civil y las pantalladoras por
batilón (que son excavadoras de
cadenas modificadas) usadas
generalmente en edificación, por
ser de menores dimensiones.
b) TRÉPANO.
Se emplea en terrenos
excesivamente duros o en roca,
que no pueden ser arrancados
por la cuchara bivalva. El trépano
es un elemento metálico,
generalmente cilíndrico, de entre
2 y 3 m de altura, que pesa entre
3 y 10 t, y que se deja caer desde
una altura de 1 a 3 m. Al caer,
rompe el terreno del fondo de la
zanja, que se extrae con la
cuchara bivalva. Tiene como
inconveniente que produce
vibraciones elevadas. Esto
convierte al trépano en un
sistema de excavación
prácticamente inviable en
ciudades.
c) HIDROFRESA.
es un elemento excavador con ruedas dentadas que giran en
sentidos contrarios, arrancando el terreno. La elevada fricción que
se produce en las ruedas dentadas, hace necesaria la
refrigeración de las mismas, así como de la roca. Para ello se
suele emplear como
líquido refrigerante lodo
bentonítico, que se
inyecta mediante un
dispositivo de la propia
máquina. Los propios
lodos se mezclan con
los detritus de la
excavación, gracias a lo
cual se extraen del fondo
de la zanja. Dado que los
lodos bentoníticos se
recirculan para permitir esta extracción, han de ser "reciclados", o
limpiados, mediante la eliminación de los restos de terreno
extraídos del fondo de la zanja. La hidrofresa, a pesar de ser el
mejor sistema —pues apenas produce vibraciones y es el más
rápido—, presenta el inconveniente de ser una máquina cara, por
lo que suele elevar el coste de la construcción de la pantalla.
d) FRESADORA DE SUBSUELO.
En primer lugar hay que tener en cuenta que las barras de armado deben
estar perfectamente unidas por medio de soldadura, pues al tener tanta
altura la jaula, el peso de la misma y los movimientos que sufre podrían
hacer que alguna de las barras se soltara o perdiera su posición.
Moldes metálicos
para fabricar
separadores in situ
con restos de
vertido de
hormigón.
Las jaulas ya preparadas se enganchan a la grúa y se levantan, preferiblemente
por medio de un balancín, hasta llevarlas a la pantalla excavada. Una vez allí,
se deslizan dentro de la excavación pero sin apoyar en el fondo, pues se perdería
el recubrimiento en esa zona.
Para evitar que se apoye el armado en el fondo se colocan unas barras que
sujetan el armado apoyándolo en los muretes guía (en el vídeo que viene lo verás
mejor).
El tubo Tremie sirve para poder hormigonar a gran profundidad sin que
el hormigón sufra disgregación, ya que permite el llenado por flujo
inverso, es decir, desde el fondo hacia arriba. El tubo Tremie se coloca
en el interior de la excavación en casi toda su profundidad, de manera
que el hormigón se vierte sobre la tolva superior y discurre hasta el fondo
guiado por el tubo, llenándose la excavación desde el fondo y haciendo
subir las impurezas y los lodos bentoníticos hacia la superficie.
Lodo bentonítico.
Al estar en contacto la parte superior del hormigón con los lodos que se
van extrayendo, esta parte de hormigón queda contaminada, por lo que
una vez finalizado el hormigonado y con el hormigón endurecido, es
necesario picar y eliminar esta zona contaminada hasta alcanzar el
hormigón en buen estado.
IMPERMEABILIZACIÓN.
Para una correcta impermeabilización de los muros pantalla: es
recomendable el fresado de la cara interna expuesta al terreno.
Los tipos de anclaje al terreno más frecuentes están constituidos por tirantes de
cables o barras de acero cuyos esfuerzos de tracción son transmitidos al terreno
por medio de inyecciones de lechada de cemento.
Un anclaje es pasivo cuando es sometido a una carga inicial baja, normalmente
comprendida entre el 10 y el 25% de la máxima prevista en proyecto. Por su
parte, un anclaje es activo cuando es sometido a una carga de tesado, después
de su ejecución, no inferior al 50% de la máxima carga prevista en proyecto.
Muros pantalla.
Estabilización de taludes.
Estabilización de presas de hormigón.
TIPOS DE ANCLAJE.
a) ANCLAJE DE TORÓN.
Esta tipología trabaja contra los empujes del terreno entre dos planos
horizontales excavados en distintos niveles, y sirven de soporte por debajo
del fondo excavado.
1. Prediseño.
2. Verificaciones geotécnicas.
3. Cálculo estructural del elemento.
4. Verificaciones interacción muro-entorno.
5. Transmisión de información a obra.
DETERMINAR EL EMPOTRAMIENTO.
3 metros.
1/3 de la altura de excavación total.
2 veces la altura de excavación en muros autoportantes.
3/2 veces la diferencia entre el nivel piezométrico en el trasdós del
muro, previa a la excavación y la máxima cota de excavación.
2 metros más tantos metros de muro como el resultado de dividir la
sobrecarga representativa (*) en el trasdós del muro por 4Tn/m2.
EJEMPLO 2.
Dado que los elementos se colocan mediante hinca, han de tener unas
dimensiones (entre ellas el espesor) lo suficientemente pequeñas para
que se facilite la hinca. Pero también ha de tener una resistencia mínima.
Es por esto por lo que se emplea el acero, salvo raras excepciones.
Los pequeños espesores pueden dar lugar a que los paneles o planchas
metálicas que conforman las tablestacas pandeen o flecten. Para evitarlo,
se alabea la sección, dotándoles de una mayor inercia.
Secciones típicas son 'en Z' o 'en U'.
En esta última línea, se debe indicar que los vibradores modernos trabajan
generando una vibración de alta frecuencia, en el intervalo de los 25-55 Hz,
muy lejos de las frecuencias naturales de vibración de las edificaciones
(aproximadamente en el entorno de los 1-5 Hz). Ahora bien, la puesta en
marcha y la parada de las masas excéntricas que en rotación generan la
vibración en este tipo de equipos provocan momentos en los cuales se pasa
por bajas frecuencias que sí pueden ser dañinas.
Depósitos de tormentas.
Pasos inferiores.
Contención de taludes.
Emisarios subacuáticos.