Sunteți pe pagina 1din 15

Qué es el humor gráfico?

He tenido la obligación y a la vez el placer de lanzarme en


una aventura investigativa sobre el humor gráfico. Debo
confesar que aunque soy parte del dúo de humor
gráfico “Pelayos”, con mi hijo Alex, y tener ya cierto
curriculum en esta manifestación artística (yo no dibujo
absolutamente nada, solo colaboro en la creación
del chiste, lo que se conoce como guionista gráfico); y de
ser un fanático consumidor del género desde niño y
dedicarme además a entrevistar a decenas de colegas y
verme en la necesidad de reflexionar sobre este tema, a
Jiri Sliva pesar de eso, repito, debo confesar también que estoy
lejos de ser un teórico, y mucho menos un especialista, o
un gran estudioso del tema. Con esto dejo claro que este estudio no tiene el objetivo de
imponer ningún criterio, al contrario, se debe tomar como una motivación para debatir y
profundizar para que personas como yo, interesados en los conceptos, en el análisis teórico de
todo lo relacionado con el humor, quedemos complacidos.

Para comenzar lo primero que hice fue hacer una breve encuesta a casi todos los que me
rodean en mi trabajo y en mi vida social (nivel clase media profesional la mayoría y algunas
personas de clases bajas y otras de clases altas) y comprobé lo que me temía: la mayoría de
ellos no sabían qué es el humor gráfico cuando les pregunté, incluso ni saben que existen
concursos, exposiciones, etcétera, sobre esta manifestación artística. Cuando más, ven el
dibujo satírico de actualidad que publican en los diarios y revistas. Y solo unos pocos han
consumido algún que otro libro de “chistes dibujados”. Por lo que los humoristas gráficos para
ellos son solo dibujantes.

Otra cosa: se sorprenden de que existan dibujos sin textos (son casi totalmente inclinados a los
dibujos con “globitos”). Ya sé que antes era peor, porque apenas se publicaba un "dibujito"
insignificante en algún periódico y nadie consideraba el humor gráfico como algo importante. Y
sé que se ha avanzado, pero aún estamos mal, pienso yo. Porque aún falta muchísimo y,
lamentablemente, la mayoría del público, e incluso muchos otros artistas y supuestos
especialistas, no consideran el humor gráfico como una manifestación artística con “reglas
propias” y con peso propio dentro de las artes visuales.

Yo quedé profundamente asombrado de la magnitud de esa ignorancia, ya que como dije


anteriormente, desde niño mi relación con la caricatura ha sido muy cercana. Por tal motivo me
lancé entonces a hurgar, leer y reflexionar sobre el asunto.

Pero antes de continuar, confieso que encontré cierto caos teórico, reflejadas en abundantes
contradicciones entre las opiniones de los pocos colegas y pensadores que se dedican a esto.
En fin, no hay un ordenamiento en lo teórico que aclare los conceptos que se manejan.

Por ejemplo, me he encontrado con varias definiciones, pero solo citaré tres, las cuales copio
textualmente:

1. “Humor gráfico es un neologismo con el que se designa a una gama diversa de obras gráficas
realizadas para la prensa, desde chistes de una sola viñeta y caricatura hasta verdaderas
historietas, tiras cómicas e incluso planchas enteras. Muchas abundan en la sátira de la
actualidad política y social”.

2. “El humor gráfico es un género periodístico que es capaz de expresar un compromiso cívico a
través del ingenio y la creatividad, pretendiendo contribuir a la reflexión y a la acción en torno a
un tema o personaje de interés público”.
3. “El Humor gráfico es un conjunto de imágenes con un segundo sentido, divertir. Comúnmente
son cómics o menes (personaje con significado)".
Así que resumiendo estas acepciones, tenemos:

1
 Son diversas obras gráficas realizadas para la prensa, abundantes de sátira y actualidad.
 Es un género periodístico de interés público.
 Son imágenes con doble sentido.

Pues a mí no me satisfacen completamente esas definiciones. Creo que lo que expresan es


insuficiente. Sin embargo, me encontré entre las definiciones de la RAE, con conceptos más
lógicos. Ahí dice:

"Un chiste gráfico es una propuesta humorística consistente en una pequeña ilustración,
acompañada o no de un texto breve. También se denomina viñeta".

Lo siento. No me convence del todo. Me explico: no me satisface que se diga "una pequeña
ilustración". Primero, porque no sé bien qué significa "pequeña" en este caso para la RAE.
Segundo, no estoy de acuerdo en que sea "una" viñeta, "un" dibujo. Para mí pueden ser más
de "uno". Y tercero, estoy convencido de que existen obras de humor gráfico que no
son chistesilustrados, sino que esos dibujos son chistes en sí mismos.

Partiendo de lo anterior, he llegado a organizar y procesar algunas ideas en mi mente, con las
cuales he redondeado “un orden teórico”, que me gustaríacompartir aquí. Pero, por favor, esto
solo es un intento de “ordenar”, sobre todo en mi mismo beneficio y así lograr entender mejor
este mundo tan fascinante del humor gráfico.

Por supuesto, como es una propuesta mía, puede pecar de elemental, quizás hasta de
arbitraria, antojadiza o demasiado obvia, ya que la formulo en un nivel de aprendiz, de novato,
porque mi interés también es que esté en un lenguaje accesible al consumidor común y
silvestre. Todo esto puede provocar entonces que más de un profesional de este arte rechace la
propuesta y estará en su derecho, por supuesto. Incluso lo prefiero si argumenta en mi contra,
para armar un debate donde ganemos todos.

Pues bien, para entrar en las clasificaciones, es imprescindible dejar dos puntos cimentados
como base, o si no se hace imposible cualquier reflexión.

I- El humor gráfico es un arte. Perdón, el Humor Gráfico es un Arte, así, con mayúsculas y
resaltado, como son las demás Artes. No es un “arte menor” como lo califican algunos. Y da
igual las definiciones de Arte –la clásica o tradicional o la moderna-, que se aplique. Porque de
ambas se llega a que, sin la menor duda, es Arte. Y el que no lo considere así, muy bien, está
en su derecho de disentir, pero le aconsejo que lea este texto con paciencia y ganas de
entender nuestro punto de vista, o que no siga leyendo, porque aquí en esta reflexión y
en HumorSapiens.com el Humor Gráfico, repito, es un Arte y está justamente valorado.
II- Para que algo sea catalogado como “Humor Gráfico”, debe cumplir los significados de cada
una de las dos palabras:

"Humor”: que la obra tenga intención de provocar risa o sonrisa (y hasta sonrisa interior, por
supuesto); y…
"Gráfico”: dicho de forma sencilla y básica: que sea una imagen en un plano creada con
cualquier técnica adecuada, para que esté dentro de las artes gráficas.
Ojo: cuando digo dibujo, lo hago generalizando, porque existen otras técnicas como pintura,
grabado, fotografía, etc., que cumplen igual con las características del convencional dibujo,
para que se enmarquen también como humor gráfico.

Con lo anterior definido y bien asegurado con pernos (la única manera que veo de introducirnos
en una teorización tan poco ordenada), pasaremos al análisis. Y como es un Arte, entonces
vamos a clasificar el humor gráficosegún su forma y contenido “como dios manda”.
Comenzaremos por encasillar las obras a partir de la forma, primeramente. Veamos:

No. 1- Chiste creado a partir de un dibujo de un solo cuadro o viñeta.

Claro que es una clasificación puramente formal. Aquí el contenido puede ser cualquiera. Se
trata de un dibujo chistoso sobre una situación, acción, expresión o lo que sea, con o sin

2
personajes, que necesita de un solo cuadro o viñeta para comunicar el humor y el mensaje de
su contenido.

Yo la definiría como caricatura a secas (o viñeta, o mono, como le dicen en México). Y le diría
así, porque el dibujo de personas, animales, objetos, paisajes –reales o no-,
están caricaturizados. Sin embargo, es más conocida simplemente como “humor gráfico”, algo
que no me agrada porque yo reservaría la expresión “humor gráfico” para nombrar al
“paraguas” -como explicaba antes-, bajo el cual se aglutinan todas las demás modalidades o
clasificaciones que nos convoca.

Pero insisto, no es sencillo imponer nuevas subdivisiones y nominaciones cuando algo está tan
enraizado en la mente de creadores y gente del medio.

Pongamos entonces un ejemplo de este primer punto. Sería un dibujo chistoso, caricatura,
viñeta, mono, o como le llamemos a esta clasificación, que fue creado con la intención de
hacer reír o sonreír, puede no tener texto y eso casi siempre conlleva una síntesis conceptual.
En otras palabras, el creador usa el ingenio, la inteligencia y la elaboración artística para
expresar una idea a través del humor de su dibujo, casi siempre, reitero, con el objetivo
también de hacer pensar. Eso lo podemos observar en esta obra del maestro Boligán.

Boligán

Pero esta ordenación de un solo cuadro dibujado puede tener un "globito" como recurso formal,
conteniendo un texto o una imagen, y como indicando que el personaje está hablando o
pensando. Ejemplo: esta obra del maestro Kosobukin.

3
Yuri Kosobukin

O el texto podría estar directamente escrito en algún espacio del dibujo, en vez de estar dentro
de un "globito" e incluso aparecer fuera del cuadro. Ejemplo, en esta obra del maestro Hervi.

Hervi
Estos textos en marcados en forma rectangular o cuadrada, que pueden aparecer encima o
debajo de la imagen, se les conoce como "cartela" por algunos y "didascalia" por otros. El
término "cartela" lo paso, pero no así el de "didascalia", porque significa de alguna manera
"enseñanza" y huele a didactismo, moraleja, etc. y eso es terrible para mí. Me inclino por
llamarle "pie de imagen" si aparece debajo y "cartela" si es está encima.

4
Estos chistes gráficos que sean con textos pueden a su vez subdividirse en textos
imprescindibles o no del dibujo; es decir, la obra puede ser un chistegráfico donde si se elimina
el texto (esté dentro de un globito o no) no se entiende el chiste observando el dibujo solo, y si
se cambia el dibujo tampoco es comprensible el chiste con el texto solo. Lo antereior sucede en
esta obra del maestro Chumy Chúmez.

Chumy Chúmez

Y el otro caso es el más simple, donde al creador se le ocurre un chiste oral y se lo aplica a los
personajes que dibujó, pero que si hubiera dibujado otros completamente distintos, no
importaría, porque el chiste se apoya en el texto y el dibujo sirve solo de ilustración.
Observemos esta ejemplo, donde el dibujo del personaje puede ser ese uniforme militar que
muestra, pero también daría gracia con alguien con una banda presidencial, o la imagen de
cualquier dictador o totalitarista. El ejemplo es de una obra del maestro Zapata.

5
Pedro León Zapata

Un detalle: esta clasificación No. 1, es la más utilizada en los concursos de humor gráfico –
mayormente los internacionales- y sobre todo las obras sin textos, por las dificultades del
idioma, lo que obliga a una creación más conceptual, universal y el nivel artístico, logrando que
tanto en forma como en contenido la calidad sea mayor.

No. 1a.- Chiste creado a partir de más de un dibujo.


Esta podría ser una submodalidad formal de la anterior No. 1, pero quise señalarla aparte en
esta lista, para conseguir una mejor comprensión.

Aquí se trata de un chiste gráfico (ojo: de un chiste solo) que para que se entienda, el creador
se ve en la necesidad de dibujar más de un cuadro o viñeta. Y sigue siendo un chiste, porque
cumple con las características de éste; es decir, realizado con la mayor economía de recursos
(brevedad), ser indivisible y unitario. Como esta obra del maestro Quino, el cual necesitó dos
cuadros para crear el magnífico chiste.

6
Quino

Lo dicho hasta aquí también sirve para los concursos, porque exigen un chistegráfico, y solo en
raras ocasiones especifican que sea de un solo cuadro o viñeta. Por lo tanto, también en esta
secuencia de dos, tres, o más cuadros o viñetas, nos encontramos con las subdivisiones de “sin
texto” y “con texto dependiente o no” del dibujo, ya explicadas.

Para mí gusto, también la llamaría “caricatura”, por supuesto.

No. 2- Secuencias de dibujos, que cuentan una historia breve.


Con esta clasificación pueden aparecer dudas, a pesar de ser de índole formal también, porque
en lo que leí al respecto sobre este tema, no me quedó claro nada y en la práctica, en el
lenguje popular, tampoco está muy evidente la clasificación.

Para mi, las obras de este punto deberían nombrarse tiras cómicas. Aunque me encantaría
que los especialistas se esforzaran por definir bien ¿qué es una tira cómica?
 ¿La tira cómica es un chiste gráfico de uno o más cuadros o viñetas como las clasificaciones No.
1 y No. 1a?
 ¿La tira cómica es un chiste gráfico de uno o varios cuadros o viñetas, pero que tienen
personajes o elementos que se repiten para caracterizarla y que se publican con periodicidad?
 ¿La tira cómica es un chiste gráfico que se publica con periodicidad, tengan o no personajes o
elementos fijos?

7
 ¿La tira cómica no es un chiste, sino una historia breve con un argumento cómico y puede
tener en su desarrollo un chiste, o más de uno?
 ¿Lo que define la tira cómica es que sean varios cuadros visto solo de forma horizontal o
vertical, como indica la palabra "tira"?
 ¿La definición de tira cómica la conforman varias o todas las definiciones anteriores?
Según la RAE, "una tira es un conjunto de unas pocas viñetas, tres o cuatro, unidas por un
argumento". Una vez más, no me convence. No me sirve completamente, porque dice "tira" y
no "tira cómica", de lo contrario podría tener un argumento "serio" y no podríamos situarla
entonces ,dentro del humor gráfico.
He visto también que para algunos la tira cómica tiene más relación con la periodicidad. Puede
ser. Es eso, entre otras cosas, lo que me gustaría que se aclarara y para ello hago las
preguntas anteriores.

"Enriqueta y Fellini" por Liniers

Si lo dejaran a mi criterio, denominaría a la tira cómica como la obra gráfica, creada con la
intención de hacer reír o sonreír, que cuenta un chiste, o que cuenta una breve
historia graciosa, pero con más de un cuadro o viñeta y en una secuencia horizontal o vertical,
como sugiere la palabra “tira”. Y me daría igual si fuera con personajes o elementos fijos, o que
se publique con periodicidad, etc.. Creo que así se aclararía mejor esta modalidad formal. Pero
si los especialistas dijeran otra cosa y me convencieran, no tendría problemas en dejar de
defender mi propuesta, porque estamos en un campo subjetivo y de convenciones. El ejemplo
anterior de una obra del maestro Liniers representa mi propuesta.

No. 2a- Lo mismo que lo anterior pero con una historia más extensa.
Esta es una derivación, o más bien una extensión de la anterior No. 2. Pero no podría ser una
historia con un solo chiste, ya que si se hace una secuencia muy larga, porque la historia a
contar así lo exige, violaría la definición de chiste (por no ser breve y no tener unicidad, como
dije anteriormente). Lo que sí, perfectamente, puede ser una combinación de
varios chistes dentro de un argumento cómico a desarrollar.

Veamos un ejemplo con un pre-guión "bien grueso": El argumento de la historia consiste en


que el personaje principal va a ver a su abuela y se encuentra en el bosque con un lobo (en ese
encuentro pueden existir chistestextuales y/o visuales). El personaje sigue, llega a la casa de la
abuela y se la encuentra en cama, pero no sabe que es el lobo disfrazado (en la escena de
descubrir al lobo pueden existir chistes textuales y/o visuales). La historia se termina con
el chiste del lobo sacando de su interior a su abuelita y huyendo con el personaje detrás
amenazándolo.

Como se ve, es una historia (parodia) de argumento cómico (obvio, si es parodia) con
varios chistes en su desarrollo. A estos cuadros o viñetas que cuentan una historia más extensa
que una “tira cómica”, yo lo llamaría historieta (como lo hacen muchos), aunque sé que es
muy probable que otros colegas no coincidan exactamente conmigo en el concepto.

8
Por ejemplo, la RAE nos da esta definición: "La suma de distintas tiras con el mismo argumento
da lugar a una pequeña historieta". Y también agrega: "cuando la historieta se prolonga a lo
largo de diferentes páginas, entonces la llamamos cómic (o tebeo). El cómic o tebeo, a
diferencia del chiste gráfico y de la mayoría de las tiras, ya no se caracteriza forzosamente por
su contenido humorístico".

Aquí daré mi opinión, pero al revés de cómo veníamos haciéndolo; es decir, comienzo ahora por
el ejemplo gráfico. Veamos una típica historieta del maestro Pepo.

"Condorito" por Pepo

Como vimos en la definición de la RAE, en ella aparece la palabra "comic". A mí no


me gusta utilizar la palabra “cómic”, porque defiendo mucho el castellano, pero sin dudas me
veo en la obligación de soportarlo como sinónimo de historieta por su popular uso. Mil veces
prefiero el uso de "tebeo", como se dice en España, aunque haya o no que modificar su
significado un poco. También en esa misma dfinición de la RAE se utilizó el término "historieta".
Yo propongo el uso de historieta cómica, porque tanto la palabra “historieta” como el
anglicismo “cómic” son más abarcadores y alcanzan más allá del género humorístico, ya que
también se utilizan para contar gráficamente historias de acción, superhéroes, aventuras,

9
terror, amor, infantil, etcétera. Pero una obra realizada sin intención de hacer reír, no entraría,
obviamente, en el campo del humor gráfico. Además, el apellido "cómico" ya se utilizó en "tira
cómica" también, lo que le daría unidad a esta propuesta.
Aclaración: al nuestro campo del humor le robaron la palabra "comic", porque se le llamó así en
los inicios de este arte, ya que casi todas las obras eran graciosas. De ahí que escogieran el
término comic, que viene del griego "kömikos", que significa: "de o perteneciente a
la comedia". Por lo tanto, así debió denominarse a la historieta y no "historieta cómica", como
me es forzoso decir ahora, debido a que comic la usaron para todo tipo de géneros.

Las historietas cómicas pueden publicarse con periodicidad y por lo tanto es fácil encontrarlas
con personajes o elementos fijos, como lo mencionado en las “tiras cómicas”. Yo no estoy de
acuerdo con la RAE en que la longitud o el número de páginas defina si es o no una historieta o
comic. Creo, como ya señalé, que una obra que sea mayor que una tira cómica, ya se convierte
en una historieta cómica.

Tampoco estoy de acuerdo en que una de las condiciones de la historieta cómica sea que use
globitos. Creo que desde un punto de vista estético, hay obras que van mejor con textos
encima o debajo de las imágenes; es decir, con cartelas o pie de imagen, como ya vimos. En
este caso de historietas cómicas, dejaría los textos del narrador para las cartelas y los bocadillos
de los personajes para los pie de imágenes. Pienso que esto debe regir para todo tipo de
historietas, pero como no es mi campo, no me atrevo a proponer nada en esa materia.

No. 3- La fotografía humorística.

Luc Descheemaeker

Esta modalidad entra “oficialmente” por cumplir con los requisitos que estamos definiendo,
como ya señalé. Por lo tanto, veo imprescindible que aparezca en una clasificación en cuanto a
lo formal, como ésta.

Nos referimos, obviamente a cualquier manifestación de la fotografía, como el montaje, el


collage, etc. (Ver ejemplo anterior, una obra del maestro Descheemaeker).

10
No es un concepto difícil de entender, así que no es necesario extendernos, excepto para decir,
una vez más, que si está aquí es por su intención de hacer reír o sonreír y de pertenecer a “lo
gráfico”. Y por supuesto, para mí puede aparecer con globitos dentro de un montaje, o con
texto encima o debajo de la foto si lo desea el creador.

Ahora dejamos la clasificación por su forma y llegamos a clasificarla por su contenido.


En realidad no me interesa hacer una lista de contenidos ordenados por temas como: obras
de humor general, costumbrista, político, infantil, sexual, y peor: de médicos, de loros,
náufragos, o qué sé yo qué. También evité calificarlas en chiste blanco, negro, verde, absurdo,
etcétera. Es que todo ello es tan elemental y está tan claro que no va por ahí nuestro análisis.
Pero si hay dudas, vean varias de esas definiciones en el Diccionario Humor Sapiens.

Lo que de verdad nos debería importar, según mi criterio, son dos puntos esenciales dentro de
esta clasificación basada en los contenidos de las obras. Veamos:

No. 1- La caricatura personal.

"Pavarotti" por Turcios

El nombre de caricatura personal me convence y me satisface mucho. Se trata, en palabras


también sencillas y básicas, del dibujo de una persona más o menos conocida,
pero caricaturizada.

Aquí se cumple el concepto de las dos palabras también. Una, se dibuja a una persona,
mientras más conocida mejor, para que cuando sea publicada cumpla un rol y los consumidores
sepan de quién se trata. La otra es que el dibujo no es realista, naturalista, porque es
precisamente una caricatura, que no es más que una modalidad extrema de parodia. Por algo
la palabra caricatura proviene del italiano “caricare” que significa “cargar”, “exagerar”. Es un
término inventado por Leonardo da Vinci, que fue el primero en nombrar así a algunos de sus

11
dibujos. En resumen, se toma el modelo y se le exageran o deforman sus rasgos externos o los
internos, o ambos.
En este caso, es una caricatura como la clasificación No. 1 de forma, que ya vimos, pero
especializada en la figura humana solamente. (Ver ejemplo anterior, con una obra del maestro
Turcios caricaturizando a Pavarotti).

Toda parodia, y más aún toda caricatura, tiene la intención de hacer reír o sonreír, de lo
contrario no se usarían esos términos y no los estuviéramos estudiando aquí. Solo que en la
misma intención se va desde un guiño cómplice al modelo; es decir, una exageración o
deformación de la imagen, donde la víctima no se siente agredida y ríe o sonríe sanamente al
verla, al igual que su creador y los terceros consumidores, hasta la sátira, el sarcasmo, donde
se dibujan esa exageraciones y esas deformaciones con intenciones de criticar y corregir, en el
caso de la sátira, o para agredir en el caso del sarcasmo y quizás llegar a algo peor: para
humillar en el caso del escarnio. Éstas dos últimas son las burlas más agresivas y están en las
fronteras del humor debido a que producen risas, sí, pero no sanas).

Por lo tanto, todo creador de caricaturas personales, es –lo quiera o no, lo acepte o no-,
un humorista gráfico. Repito, porque por definición, la imitación (parodia y dentro de
la parodia la caricatura), provoca risa per se, sin contar las otras intenciones de contenido que
desea transmitir el creador. Por supuesto, si el artista no desea ser clasificado así se le respeta
ese derecho, pero, insisto, en teoría es un humorista gráfico de todas maneras.
Esta clasificación es con la que más me siento seguro, debido a mis estudios de la teoría
del humor, donde están las definiciones de burla, sátira, parodia, caricatura, ironía, sarcasmo,
etcétera., que pueden verse también en el “Menú” de HumorSapiens.com. Pero eso no significa
jamás que tenga la verdd absoluta ni mucho menos.

No.s e 2- La caricatura editorial.


No sé si ese nombre es el más indicado, pero me agrada, ya que expresa bien su característica
basada en el contenido, en este caso periodístico. Ee el dibujo que aparece en una publicación
periódica –en cualquier medio de comunicación- y que sí pertenece al género periodístico, sí
abunda en sátira y la intención de hacer reír conlleva una crítica de interés político, ideológico,
social.

Es una modalidad demasiado difícil para un craedor, ya que su producción es diaria casi
siempre, por lo que el artsita tiene que estar totalmente entregado a la actualización noticiaria.
Y en tan poco tiempo debe detectar una falla, un defecto, que incida en la sociedad, crear
un chiste resumido, sintetizado, que haga pensar, que le abra los ojos al lector y que con
la risa o sonrisa lo haga pensar para mejorar esa falla, ese defecto. Y encima debe hacerlo lo
mejor posible desde el punto de vista formal. No es para nada fácil. Por ello son pocos los
profesionales que logran mantener un gran nivel de forma y contenido en esta clasificación.

Y para colmo es muy desagradecida en cierto aspecto, ya que como son contenidos de
actualidad, en relativamente breve tiempo caducan y ya ni dan gracia después, ni se entiende
efecto de crítica constructiva. Por lo mismo no participan mucho en convocatorias de concursos,
excepto los grandes y universales temas a criticar del Hombre y la Sociedad que no vencen casi
nunca.

Es curioso como humoristas gráficos de caricaturas editoriales, se desdoblan y hacen esa dura
labor diaria y al mismo tiempo buscan hasta otro estilo para obtener una obra de más alto
vuelo artístico y participar así en concursos, exposiciones, etc. Son dos vertientes que existen
con sus ventajas y desventajas, pero que cada una por sí misma tiene una importancia vital.

Esta clasificación de caricatura editorialista también tiene una connotación especial: es un


elemento esencial de la libertad de expresión por sus características satíricas.

Dentro del humor, la sátira es una burla que tiene como objetivo el criticar, repito, pero
provocando una risa o sonrisa que lleve al consumidor a descubrir el motivo de la crítica y/o a
pensar en el asunto para entenderlo primero y quizás después mejorarlo, o quizás saberlo para

12
no caer de nuevo en el error, etc.. Ejemplo de caricatura editorial es esta obra del maestro
Ares:

Ares
Ahora, hago un aparte en este punto, a propósito de la caricatura editorial y lo sucedido con el
asesinato de colegas de la Revista Charlie Hebdó. Pero advierto que es una opinión muy
personal.

Comienzo con las siguientes preguntas:

 ¿Los contenidos de la caricatura editorial son limitados? Mi respuesta es no. De lo contrario no


habría libertad de expresión.
 ¿Todo en esta vida es posible satirizar? Mi respuesta es sí. De lo contrario no habría libertad de
expresión.
 ¿Entonces la libertad de expresión no tiene límites? Mi respuesta es no.
 ¿Eso significa que a mí me gusta o apruebe y defienda el sarcasmo, la blasfemia, la falta de
respeto, la ofensa o el mal gusto que puede tener una caricatura editorial? Mi respuesta es no.
Al contrario. Ni como consumidor ni como creador me agrada o lo acapto y avalo. Pero si a
alguien no le agrada o aprueba algún tema, argumento, concepto, porque le falta el respeto a
él u a otro, lo ofende, etcétera, tiene derecho a hacer algo, pero dentro de lo legal, sin violentar
la democracia. Parece una perogrullada, pero algunos no se dan cuenta y asumen una actitud
de enfrentamiento hacia el "mal" mensaje, según ellos, que hasta pueden abrir una puerta, sin
querer, al fanatismo.

13
En otras palabras, si a una persona o institución cualquiera no le gusta una caricatura editorial
donde se burlen, ataquen o blasfeman sobre algún tema de su fe, tiene el derecho a censurarla
y no publicarla en un medio que le pertenezca o tenga influencia, tiene derecho a expresar lo
que piensa sobre esa obra y sus creadores, tiene el derecho de instar u obligar a los que
piensen como él o ellos a hacer una campaña para que ninguno de los suyos vea la obra, y, por
supuesto, tiene derecho incluso a ir a tribunales y demandar a los caricaturistas.

Lo que no puede hacer es matar o mandar a matar a los creadores. Ni tampoco un gobierno
tiene derecho a prohibir la publicación ni a cerrar el medio donde se publica, ni a despedir de su
trabajo a los caricaturistas ni menos encarcelarlos sin un veredicto salido de un juicio justo y
civilizado. Claro, si una ley del país dice que está prohibido incitar a la violencia o está prohibido
cualquier cosa que vaya a dañar o peligrar la paz o la existencia misma de la sociedad en
general y un humorista publica una caricaturaeditorial que viole esa ley, es obvio que hay que
sancionar –justa y civilizadamente- a ese creador. Pero tampoco puede haber una ley que
prohíba o sancione a priori, cuando un caricaturista publique una ofensa, una blasfemia,
etcétera. Como ya dije, debe haber un proceso de demanda, juicio y lo que sabemos que se
hace dentro de una democracia

Pero cuando un gobierno atenta contra la libertad de expresión, sin dudas dejó la democracia y
cayó en el populismo, en el totalitarismo, o en una dictadura.

Si permitimos que fanáticos o poderosos callen el humor, censuren o eliminen


la caricatura editorial, perdemos todos. Porque después vendrán otros con razón o sin ella a
exigir callar y a eliminar también lo que no les convenga. Y luego otros y otros. Llegará
entonces un punto en que se acabará lo logrado en nuestra civilización y no es una simple frase
exagerada.

Por favor, repito, todos tenemos derecho a indignarnos cuando vemos un chiste gráfico (o de la
manifestación que sea) y es lógico que protesten y hagan gestiones legales, etcétera. Eso es lo
correcto. Pero nadie se merece la muerte por hacer un dibujo.

En las sociedades laicas el individuo está primero que los dioses, y uno de sus derechos es la
libertad de expresión. En sociedades verdaderamente democráticas uno de los derechos
fundamentales es la libertad de expresión. Todos sabemos que lo primero que hacen los
regímenes totalitaristas es suprimir la caricatura personal a sus líderes. Y también
la sátira dirigida a ellos. Ejemplos sobran de dictaduras de derecha y de izquierdas, antiguas y
actuales. Sabemos las razones. Hemos sido testigos de eso. Y varios colegas latinoamericanos
están sufriendo por tal motivo actualmente.

Pero, ojo, pensar así sobre la libertad ilimitada de expresión no significa que yo haga
un chiste en cualquiera de las manifestaciones artísticas que trabajo, que ofenda, falte el
respeto y menos que humille. Jamás. Claro, hay seres humanos que le hacen daño a sus
semejantes o a una parte, o a toda la sociedad y a esos dan ganas de darles un latigazo con
cascabeles en la punta, como decía José Martí, porque se lo merecen y dentro del arte y el
buen gusto, dependiendo de mi talento, sí haría (y hago) sátira contra ellos.

Conclusión, por la importancia que tiene, he definido estas dos clasificaciones referidas solo
al contenido de este Arte llamado Humor Gráfico.
Pero me faltó aclarar otro punto. varios colegas, que hacen humor gráfico, literario, escénico,
etc., califican el humor desde la calidad y no desde una perspectiva teórica. Es decir, afirman
que un chiste cualquiera no lo hace un humorista gráfico, por ejemplo, porque el humor
gráfico debe ser solo el conceptual, el que haga pensar, el inteligente, etcétera. Para explicarme
mejor: si yo pregunto "¿qué es humor, teóricamente hablando?", supongamos que
los humoristas musicales me respondan que el humor es el que se hace con la música clásica,
la música docta y que lo demás no es humor. Como es evidente, esa no es una clasificación
correcta, ni con eso podemos hacer análisis teóricos, ni llegar a definiciones. Pues
lamentablemente eso sucede a menudo y con mayor frecuencia lo he notado en
los humoristas gráficos. Pero aclaro: el que piense así que siga creando así, tiene todo el

14
derecho del mundo, solo digo que no es un argumento teórico para clasificar por calidad, o por
una supuesta calidad, porque eso también es subjetivo.

Añado aquí otro conflicto: me refiero a otras enormes diferencias de opiniones, como los que
plantean que la sátira, la ironía, etcétera, no es humor. Solo puedo responder -para no
extender más este texto-, que los invito a todos a leer y profundizar en el tema en "Teoría
del Humor(Sapiens)", en el Menú de este mismo sitio, específicamente nuestra Conjetura.

Bueno, entonces con mi opinión sobre la libertad de expresión y con estas últimas
puntualizaciones, finalizo el análisis de la caricatura editorial y más aún con la clasificación por
contenido.

Vuelvo a recordar que toda esta reflexión tiene como único fin darle un ordenamiento a todos
estos conceptos. Quizás para muchos colegas esto no es necesario, ya que es un asunto muy
claro y se asombren de mi ignorancia o de mi “osadía” por tratar de dar un orden a algo que
siempre lo ha tenido. Pero también recuerdo que al inicio dije que en mi encuesta, la mayoría
de la gente era más ignorante que yo en este campo.

Pero voy a ser más insidioso: en HumorSapiens.com está publicado un artículo del colega Raúl
Fernando Zurita, humorista gráfico colombiano, que dice lo siguiente (y cito textual):

“… Es paradójico cómo se nota la poca disposición demostrada por colegas caricaturistas para
la participación en espacios de reflexión académica, con lo que menosprecian el componente
teórico que rodea las manifestaciones artísticas, y, en este caso, a la misma caricatura. Este es
quizás el vacío más grande con que cuenta la caricatura actual, y mientras los caricaturistas, en
este sentido, tengan pocos argumentos y exista una carencia de teóricos que reflexionen sobre
este tema, o galeristas y curadores que no apuesten por exposiciones en espacios de
relevancia, la caricatura seguirá teniendo un papel muy secundario. Es en este punto que se
pone en evidencia la necesidad urgente de la reflexión”.

Por lo tanto, es evidente que no estoy solo en esto de ver una necesidad de teorizar y aclarar
conceptos. Incluso no dudo que la fama de arte menor que tiene el humor gráfico sea también
por la falta de respaldo teórico y solidez conceptual.

Y lo afirmo, repito, porque lo que vi leyendo e investigando no me llenó. Y voy a señalar un


ejemplo para demostrar “que hice la tarea”.

Se trata de la Tesis Doctoral del colega español Marrugat, que defendió en la Universidad de
Sevilla. En ella él afirma que es en primer lugar un caricaturista, aunque también se considera
un humorista gráfico, porque asegura que ambas carreras corren paralelas. Y el Jurado le dio el
máximo de puntaje.

En lo personal felicito a Sr. Marrugat por ser una gran caricaturista y por su interés por teorizar.
Son pocos los profesionales que lo hacen. Pero como ya he explicado aquí, a lo largo de este
artículo, a pesar de su argumentación y de la aprobación del Jurado, aún con el alto riesgo de
parecer soberbio, debo confesar que pienso diferente. No puedo estar de acuerdo en que la
carrera de un caricaturista sea paralela a la de humorista gráfico, porque estoy convencido de
que todos los que caricaturistas son humoristas gráficos. Sin embargo, es tal el nivel de caos en
este campo teórico, que hasta es posible que en apariencias discordemos en significados y
conceptos y sin embargo, quizás estemos diciendo lo mismo en el fondo.

¿Quién tiene razón entonces? No sé. Realmente reflexioné sobre el asunto y acabo de expresar
mi punto de vista en este texto, solo por mis deseos de entender, de valorizar más y finalmente
de promover el humor gráfico. Pero de ahí a que yo tenga razón…

Sin dudas, esto merece más tiempo, energía, estudio y dedicación. Espero entonces por los

Humor Sapiens

"Crear, pensar y vivir con humor".

15

S-ar putea să vă placă și