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Diciembre / 2014

Año 1 Volumen 6

DERECHO
PROCESAL PENAL
Actualidad
Área
Penal Derecho
Derecho procesal
procesal penal penal
Contenido
MARINO GABRIEL CUSIMAYTA BARRETO: Los presupuestos procesales de la prisión
DOCTRINA PRÁCTICA 166
preventiva como problema jurisdiccional
ELDER J. MIRANDA ABURTO: Las comunidades campesinas y nativas: La jurisdicción penal
DOCTRINA PRÁCTICA 176
desde la perspectiva constitucional del Acuerdo Plenario 1-2009/CJ-116
análisis CARLOS JORGE CABRERA CARCOVICH: Un enfoque jurisprudencial comparado sobre la
192
jurisprudencial legalidad de los audios grabados por un interlocutor en el proceso penal
CONSULTA N° 1: ¿Un investigado puede acogerse al proceso de colaboración eficaz si
201
NOS PREGUNTAN Y es sindicado por el Ministerio Público como cabecilla de una organización criminal?
CONTESTAMOS CONSULTA N° 2: ¿Cuál es el procedimiento previo a la suscripción del acta de
202
acuerdo de colaboración eficaz?
RESEÑA DE
Fines del proceso penal (R. N. N.° 1876-2014 LIMA) 203
JURISPRUDENCIA
RESEÑA DE
Causales de nulidad y realización de un nuevo juicio (R. N. N.° 1002-2014 Callao) 209
JURISPRUDENCIA
RESEÑA DE
El principio acusatorio dentro del debido proceso penal (R. N. N° 1104-2014 Lima) 215
JURISPRUDENCIA

DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica

Los presupuestos procesales de la prisión


preventiva como problema jurisdiccional
Marino Gabriel Cusimayta Barreto*
Juez Superior (T) de la Corte Superior de Justicia de Madre de Dios

1. Introducción
2. El fumus boni iuris y el periculum in mora como presupuestos procesales de la prisión preventiva
SUMARIO

en la doctrina
3. El fumus commissi delicti y el periculum libertatis como presupuestos procesales de la prisión
preventiva en la doctrina
4. El fumus boni iuris y el periculum in mora como presupuestos procesales de toda medida
cautelar extrapenal
5. La razonabilidad vs. la proporcionalidad en la prisión preventiva
6. Conclusiones
7. Bibliografía

1. Introducción que corresponden por su propia naturaleza a


En la práctica, los jueces han traslado al ámbi- las medidas cautelares del derecho procesal
to procesal penal, los presupuestos procesales civil, pues se ha considerado como presu-
puestos procesales de la prisión preventiva al
fumus boni juris (humo de buen derecho), y al
* El autor también se desempeña como jefe de la Oficina periculum in mora (peligro en la demora), en
Desconcentrada de la Magistratura de la Corte Superior
de Justicia de Madre de Dios. Ha cumplido el cargo lugar del fumus commissi delicti (humo de la
de presidente de la citada Corte Superior de Justicia. comisión del delito) y del periculum libertatis
Abogado por la Universidad Nacional Federico Villa- (riesgo de la libertad). Estos dos últimos por su
rreal y cuenta con estudios de Maestría en la misma
propia naturaleza y origen corresponden ne-
Universidad.

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Doctrina práctica
tamente al campo del proceso penal, pues en
estricto tienen relación con las medidas cau- RESUMEN
telares de restricción de la libertad personal.
Por otro lado, los presupuestos procesales de En el presente artículo, se aborda la prisión
preventiva, enfocándose en los presupues-
la prisión preventiva constituidos por el fumus tos procesales que deben presentarse para
commissi delicti y por el periculum libertatis que se dicte contra los imputados previo
deben ser necesariamente vinculados –como requerimiento del Ministerio Público. Es así
condición sine qua non– con la razonabilidad que el autor afirma que actualmente se sufre
del mandato judicial de prisión preventiva, una confusión al momento de ordenarse la
citada medida de coerción personal, puesto
mas no así con el principio de proporcio- que no se ha logrado diferenciar entre los
nalidad de la medida cautelar de prisión prepuestos procesales que requieren las
preventiva. medidas cautelares en el proceso civil y en
el proceso penal, alcanzando tal confusión
La confusión en la aplicación de los presupues- incluso al Tribunal Constitucional. El autor
tos procesales antes mencionados, podría ser expone la confusión, cita a autores nacio-
consecuencia de la falta de diferenciación de nales y comenta la jurisprudencia nacional,
los presupuestos procesales que se requiere en especial la Casación N.° 01-2007-La
Libertad y la Resolución Administrativa
para el dictado de la medida cautelar en el N.° 325-2011-P-PJ- Circular sobre Prisión
proceso civil, con aquellos que se requiere Preventiva. Luego, se procede a sostener que
para las medidas coercitivas de carácter pro- los presupuestos procesales deberían ser el
cesal penal. fumus commissi delicti y el periculum libertatis.
Este último –a su entender– debería sustituir
Es más, la confusión en la aplicación de los el denominado periculum in mora, puesto
presupuestos procesales antes mencionados, que hace referencia en estricto al peligro
también alcanza al Tribunal Constitucional y a que puede representar el posible autor
varios estudiosos que analizaron el mandato del hecho delictuoso al estar en libertad.
Concluyendo que la falta de diferenciación
de detención con el Código de Procedimientos de los presupuestos procesales ponen en
Penales y el mandato de prisión preventiva riesgo los objetivos que se buscan con la
con el Código Procesal Penal. prisión preventiva.
Abonando a tal cadena de confusiones, la
Sala Penal Permanente de la Corte Suprema CONTEXTO NORMATIVO
de la República en la Casación N.°01-2007-
Huaura, de fecha 26 de julio de 2007, con • Constitución Política: Artículos 2.10 y 3.
la ponencia del doctor San Martín Castro,
en el cuarto fundamento de derecho de tal PALABRAS CLAVE
sentencia, luego de establecer que la prisión
preventiva solo puede prosperar cuando se Prisión preventiva / Presupuestos procesales /
Periculum in mora / Periculum libertatis /
haya emitido por el fiscal la Disposición de
Formalización y Continuación de la Inves-
tigación Preparatoria a que hace referencia configurarse pretoriana o judicialmente,
el artículo 336 del Código Procesal Penal, presupuesto adicional, al que dicha norma
sostiene que para la obtención por parte del prevé”1.
fiscal de “una decisión favorable del juez de la
investigación preparatoria, se debe probar la Tales hechos son los que me motivan a investi-
concurrencia de los presupuestos establecidos gar, para poder finalmente determinar cuáles
en el apartado uno, y en su caso el dos, del
artículo doscientos sesenta y ocho del Nuevo 1 Casación N.° 01-2007-Huaura, Sala Penal Permanen-
Código Procesal Penal. No existe, ni puede te de la Corte Suprema de la República, 26 de julio
de 2007.

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Actualidad

Penal Derecho procesal penal


serían en realidad los presupuestos procesales tos propios de tales medidas, como lo son el
pertinentes e idóneos para la validez de la ‘fumus boni iuris’ y el ‘periculum in mora’”2.
prisión preventiva.
De igual forma, Peña Cabrera Freyre y Ur-
quizo Videla sostienen: “En líneas generales,
¿SABÍA USTED QUE? la adopción de una medida cautelar exige la
concurrencia del fumus boni iuris (apariencia
de derecho) y el periculum in mora (peligro
La apariencia del buen derecho y
el peligro en la demora del proce- procesal), los que evaluará el juez al momento
so, no tendrían relación alguna con de imponerla”3.
los que serían los verdaderos pre- En ambos casos se refieren a la apariencia del
supuestos procesales de la prisión buen derecho y al peligro en la demora del
preventiva, dado que el primero no proceso, los cuales no tendrían relación alguna
significa la existencia de la fuerte con los que serían los verdaderos presupues-
posibilidad de la comisión de un de- tos procesales de la prisión preventiva, dado
lito por parte del agente activo, y que el primero no significa la existencia de la
el segundo no tiene relación con el fuerte posibilidad de la comisión de un delito
peligro que representa el procesado por parte del agente activo, y el segundo no
en goce de su libertad. tiene relación con el peligro que representa el
procesado en goce de su libertad.
La situación problemática descrita –confusión En la misma línea del pensamiento de los
en la aplicación de los presupuestos procesales autores antes referidos, Cáceres Julca afirma:
de la prisión preventiva– podría ser una de “Las medidas de coerción en general están
las razones fundamentales por las cuales la supeditadas a la observancia de dos presu-
prisión preventiva no esté cumpliendo con los puestos básicos: fumus boni iuris (apariencia
objetivos de ser un mecanismo extraordinario del derecho) y periculum in mora (peligro
y de última ratio para asegurar el juzgamiento procesal) y a ello se agrega la prognosis de
de una persona. pena”4. La diferencia está en que este autor
La solución a la problemática planteada es ne- agrega la prognosis de la pena como presu-
cesaria para evitar también que, con el nuevo puesto de la prisión preventiva, lo que podría
modelo procesal penal, la prisión preventiva ser objeto de mayor investigación.
se convierta en un instrumento de coacción en Por su parte, el Tribunal Constitucional en el
manos del fiscal, o un mecanismo de condena tercer fundamento de la sentencia N° 0808-
anticipada estando en manos del juez, tanto 2002-HC, caso Tello Díaz, dice: “El artículo
más si la independencia de los jueces puede 135 del Código Procesal Penal señala los
ser bloqueada por la presión mediática, o por requisitos que deben concurrir a efectos de
intereses de órganos de mayor poder. que el mandato de detención no sea conside-
rado arbitrario. Estos requisitos son que exista
2. El fumus boni iuris y el periculum prueba suficiente (fumus boni iuris), peligro
in mora como presupuestos pro-
cesales de la prisión preventiva 2 GIMENO SENDRA, Vicente, Cándido CONDE–PUMPI-
en la doctrina DO y José GARBERÍ, Los procesos penales. Comentarios
Según Gimeno Sendra, Conde-Pumpido y Gar- a la Ley de Enjuiciamiento Criminal con formularios y
jurisprudencia, Bosch, Barcelona, 2000, p. 137.
beri Llobregat, los presupuestos procesales de
3 PEÑA CABRERA, Alonso y Gustavo URQUIZO VIDELA,
la prisión preventiva son el fumus boni iuris y el Las medidas coercitivas personales y reales en la jurispru-
periculum in mora, pues así se advierte cuando dencia 2009 – 2010, Gaceta Jurídica, Lima, 2011, p. 25.
afirman “(…) en primer lugar los presupues- 4 CÁCERES JULCA, Roberto, Los medios impugnatorios en
el proceso penal, Jurista Editores, Lima, 2011, p. 222.

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Doctrina práctica
procesal y que la pena probable a imponerse En el primer párrafo del artículo segundo de la
sea superior a los 4 años (periculum in more)”5. mencionada Resolución-Circular, se prescribe:
“Que el primer presupuesto material a tener
El Tribunal Constitucional tampoco alude al
en cuenta –que tiene un carácter genérico– es
fumus commissi delicti, ni al periculum libertatis,
a existencia de fundados y graves elementos
pese a que con el nuevo modelo procesal
de convicción –juicio de imputación judicial–
penal, la demora procesal ya no estaría en
para estimar un alto grado de probabilidad de
manos del juez, sino en poder del Ministerio
que el imputado pueda ser autor o partícipe
Publico como órgano requirente de toda
del delito que es objeto del proceso penal [ar-
actividad procesal.
tículo 268, apartado 1, literal a)], del Código
Procesal Penal: fumus delicti comissi”7.
3. El fumus commissi delicti y el
periculum libertatis como presu- En el tercer artículo de la Resolución-Circular
puestos procesales de la prisión acotada, se hace referencia al peligrosismo
preventiva en la doctrina procesal8, como otro presupuesto procesal de
la prisión preventiva, vinculado con el riesgo
San Martín, quien recoge lo expresado por de fuga y con el peligro de obstaculización
Barona Villar, sostiene que uno de los presu- probatoria.
puestos procesales de la prisión preventiva
es el fumus commissi delicti, pues al respecto Otro dato importante que amerita resaltar
señala: “El fumus delicti comissi, como ya se de la Resolución-Circular antes mencionada,
dijo, opera como conditio sine qua non, y está es la preocupación de la máxima autoridad
constituido por dos reglas, una objetiva y otra del poder judicial respecto a este tema, pues
subjetiva. La primera, referida a la existencia categóricamente afirma: “En la actualidad se
del delito imputado, de mayor exigencia de vienen generando muchas confusiones que de-
constitución, y la segunda, consistente en un ben ser esclarecidas con el propósito de aplicar
juicio de verosimilitud que permita entender en forma eficiente la prisión preventiva”9.
que el imputado ha cometido el hecho delic- El problema de no haberse uniformizado so-
tivo como autor o partícipe, con grandes dosis bre cuáles serían los presupuestos procesales
de probabilidad; no basta una mera sospecha, de la prisión preventiva, es vivo y vigente,
sino prognosis de una condena con grandes tanto es así que en la resolución de vista de
posibilidades”6. fecha 01 de agosto de 2014, en el Expedien-
Este autor, se aparta de la corriente mayorita- te N.° 0085-2014, los procesados Alfredo
ria, y al parecer tendría mayor certeza, pues Crespo Bragayrac y otros, por Terrorismo, en
el fumus commissi delicti, sería realmente uno agravio del Estado, la Sala Penal Nacional
de los presupuestos procesales de la prisión Colegiado “F”, en el fundamento 3.2, señala:
preventiva. Además, en su condición de “Que, la prisión preventiva es una medida de
presidente del Poder Judicial, con fecha 13 coerción procesal de naturaleza personal que
de setiembre de 2011, emitió la Resolución restringe la libertad individual de la persona,
Administrativa N.° 325-2011-P-PJ - Circular en su manifestación de libertad ambulatoria,
sobre Prisión Preventiva, instándose a los y que se encuentra regida, tal como enseña
jueces penales a asumir las pautas metodo- la doctrina, por los principios de legalidad,
lógicas y criterios jurídicos fijados en dicha variabilidad, instrumentalidad, proporciona-
Resolución-Circular.

7 Resolución Administrativa N.° 325-2011-P-PJ, Circu-


5 Sentencia del Tribunal Constitucional Exp. N.° 0808- lar Sobre Prisión Preventiva, Lima, 13 de setiembre
2002-HC, Tercer fundamento jurídico. de 2011.
6 SAN MARTÍN, César, Derecho procesal penal, Grijley, 8 Resolución Administrativa N.° 325-2011-P-PJ.
Lima, 2014, p. 991. 9 Resolución Administrativa N.° 325-2011-P-PJ.

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Penal Derecho procesal penal


lidad y excepcionalidad. Es en esa línea de realmente le asiste el derecho que reclama en
ideas, tal como destaca ARBULÚ MARTINEZ, el ámbito extrapenal; además, la comisión de
que tal naturaleza de excepcional es lo que un delito no genera derechos para el posible
distingue a las medidas limitativas y se tienen autor del delito, muy por el contrario, genera
que regir por el fummus comissi delicti y el responsabilidad penal y extrapenal para este,
periculum in mora”10. siendo en todo caso, obligación del Estado por
intermedio del Ministerio Público hacer que
En el fundamento 3.5.c) de la resolución
se materialice esa responsabilidad del posible
judicial antes mencionada, se desarrolla el pe-
autor del hecho delictuoso.
riculum in mora para el ámbito procesal penal,
y se refiere: “El requisito del peligro procesal En cuanto al segundo presupuesto procesal
o periculum in mora para la configuración de de la prisión preventiva, debería considerarse
la medida de prisión preventiva se presenta al periculum libertatis en lugar del periculum in
cuando existen suficientes elementos proba- mora, toda vez que el primero tiene relación
torios para concluir que el imputado intenta con el peligro que puede representar el po-
eludir la acción de la justicia o perturbar la sible autor del hecho delictuoso estando en
acción probatoria”11. libertad, mientras que el segundo está relacio-
nado con el peligro de devenir en ineficaz una
Con relación al fumus boni iuris, dicha Sala
sentencia, como consecuencia de la demora
Penal recurre a la sentencia del Tribunal
del proceso por razones propias de su trámite
Constitucional dictada en el Exp. N.° 2434-
en el ámbito judicial.
2004-HC/TC, caso Óscar Emilio Fernando, y
en la última parte del fundamento 3.5.a), Además, con el Código Procesal Penal vigente,
señala: “En tal sentido, conforme lo ha se- la posible existencia del peligro en la demo-
ñalado nuestro Tribunal Constitucional “(…) ra para por el desarrollo del proceso penal
el desvanecimiento de uno de los presupuestos escaparía de la responsabilidad del Poder
necesarios para dicar el mandato de detención, Judicial, por cuanto la investigación que antes
como lo es el fummus boni iuris permite variar estuvo en manos del juez instructor, ahora
la detención impuesta”12. está en manos del Ministerio Público, quien
no solo interviene en el proceso en igualdad
Tal como se advierte de lo antes desarrollado,
de condiciones con la parte procesada, sino
aún no se ha llegado a un consenso académi-
que además recae en él la carga de impulsar
co, ni doctrinario, ni jurisdiccional respecto a
el proceso penal toda vez que el juez –sea
cuáles serían en realidad los dos principales
de investigación preparatoria, unipersonal o
presupuestos de la prisión preventiva. Sin
sala penal– no puede impulsar de oficio, sino
embargo, coincidiendo con San Martín Castro,
esperar el requerimiento del fiscal.
al parecer el primer presupuesto procesal de
la prisión preventiva sería el fumus commissi Ahora, si estamos bajo un modelo procesal
delicti, por cuanto tiene relación directa con penal donde la demora ya no depende del
la fuerte posibilidad de la comisión de un poder judicial – como sí ocurre con todos los
delito por parte del agente activo objeto procesos extrapenales– sino de la propia ac-
del requerimiento de prisión preventiva, tividad de una de las partes procesales como
mientras que el fumus boni iuris hace alusión es el Ministerio Público, entonces ha perdido
a la fuerte posibilidad de que al demandante sentido tomar en cuenta al periculum in mora,
y recupera sentido considerar al periculum
libertatis, pues estando el sujeto procesal en
10 Auto de Vista, Expediente N.° 0085-2014, procesa- libertad, no solo puede ponerse en fuga, sino
dos Alfredo Crespo Bragayrac y otros, Terrorismo en también puede obstaculizar la actuación de las
agravio del Estado, Lima, 01 de agosto de 2014.
pruebas o simplemente puede existir el riesgo
11 Auto de Vista, Expediente N.° 0085-2014.
12 Auto de Vista, Expediente N.° 0085-2014.
de que cometa un nuevo delito.

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Doctrina práctica
“En este aspecto hoy se ha alcanzado cierto
IMPORTANTE consenso como para considerar que los pre-
supuestos para la concesión de una medida
Con el Código Procesal Penal vigen- cautelar son dos: el peligro en la demora (de
te, la posible existencia del peligro la conclusión del proceso mientras se actúa y
en la demora para el desarrollo se reconoce y se reconoce el derecho recla-
del proceso penal escaparía de la mado); y la verosimilitud o probabilidad (de
responsabilidad del Poder Judicial, que el derecho reclamado en la demanda se
por cuanto la investigación que an- reconozca en la sentencia final)”15.
tes estuvo en manos del juez ins-
tructor, ahora está en manos del Es evidente que dicho autor se refiere al
Ministerio Público. periculum in mora y al fumus boni iuris como
presupuestos procesales de toda medida cau-
telar extrapenal. Al respecto, el artículo 611
Asimismo, el peligrosismo procesal que el del Código Procesal Civil, es absolutamente
magistrado San Martín Castro incorpora claro cuando precisa que:
como uno de los presupuestos procesales de
la prisión preventiva en la Resolución-Circular “El Juez atendiendo a la naturaleza de la pre-
N.° 325-2011-P-PJ antes mencionada, no tensión principal y a fin de lograr la eficacia
es sinónimo del periculum libertatis, sino del de la decisión definitiva, dicta medida cautelar
periculum in mora tal como sugiere Ramiro en la forma solicitada o en la que se consi-
Salinas Siccha13. Es más, respecto al peligro- dere adecuada. Siempre que de lo expuesto
sismo procesal o perculum in mora, San Martin y la prueba presentada por el demandante,
puntualiza: “El peligrosismo procesal tiene un aprecie:
carácter esencialmente subjetivo y reconoce 1. La verosimilitud del derecho invocado.
un amplio margen de discrecionalidad al juez.
2. La necesidad de la emisión de una deci-
Es la regla que, en todo caso, fundamenta la
sión preventiva por constituir peligro la
legitimidad de la prisión preventiva”14.
demora del proceso o por cualquier otra
Por todo ello, se refuerza la idea de que el pe- razón justificable.
riculum libertatis sería el segundo presupuesto 3. La razonabilidad de la medida para ga-
procesal de la prisión preventiva, y no así el rantizar la eficacia de la pretensión (…)”.
periculm in mora, lo que debe aclararse para
Con relación a los presupuestos procesales de
que la judicatura nacional no siga confun-
toda medida cautelar en el ámbito procesal
diendo instituciones de la prisión preventiva.
civil, Marianella Ledesma puntualiza: “La me-
dida cautelar es otorgada sin contradictorio y
4. El fumus boni iuris y el periculum en forma inmediata. Frente a ello, y a fin de
in mora como presupuestos pro- que no sea arbitraria la decisión que tome el
cesales de toda medida cautelar juez, se exige la presencia de ciertos elementos
extrapenal para concederla, como la verosimilitud del
Con respecto a los presupuestos procesales de derecho y el peligro en la demora”16.
toda medida cautelar dentro del ámbito pro- Asimismo, respecto al periculum in mora,
cesal civil, Omar Sumaria Benavente señala: Marianella Ledesma, remitiéndose a Lieb-

13 SALINAS SICCHA, Ramiro, “La prisión preventiva y la 15 SUMARIA BENAVENTE, Omar, Introducción al sistema
primera casación en el nuevo modelo procesal penal”, de la tutela jurisdiccional, Ara Editores, Lima, 2013, p.
en Revista jus jurisprudencia, N.°6, Grijley, Lima, 2007, 214.
pp. 233-234. 16 LEDESMA NARVAEZ, Marianella, Comentarios al Có-
14 SAN MARTIN CASTRO, Derecho Procesal Penal, cit., p. digo Procesal Civil – Análisis artículo por artículo, Gaceta
993. Jurídica, Lima, 2011, T. II, p. 42.

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Actualidad

Penal Derecho procesal penal


man, sostiene: “Para invocar el peligro, basta crasia, la cosmovisión de quienes son objeto
señalar – dice Liebman – un fundado temor de su autoridad, por lo que debe recurrir a
que mientras se espera aquella tutela, lleguen la razonabilidad de su decisión, vinculándola
a faltar o alterar las circunstancias de hecho necesariamente con el fumus commissi delicti
favorables a la tutela misma, esto implica que y con el periculum libertatis.
el peligro en la demora (periculum in mora)
habrá de ser apreciado con relación a la ur-
gencia en obtener protección especial, dados LEDESMA NARVAEZ dice:
los hechos indicativos de la irreparabilidad o
el grave daño que puede significar esperar al
dictado de sentencia; de ahí que la medida
“telar
La medida cau-
es otorgada
cautelar no solo busque garantizar sino antici- sin contradictorio
par los efectos de dicho fallo”.17 En este caso, y en forma inme-
se agrega como objetivo “anticipar los efectos diata. Frente a
del fallo”, lo cual nunca podría corresponder ello, y a fin de que
al ámbito penal. no sea arbitraria la
decisión que tome
5. La razonabilidad vs. la proporcio- el juez, se exige la presencia de cier-
nalidad en la prisión preventiva tos elementos para concederla, como
la verosimilitud del derecho y el peli-
Con relación a la razonabilidad, Roberto
Gonzales señala: “Razonabilidad (cualidad
gro en la demora . ”
razonable) remite a los términos razón (del
latín rat- o, - onis) y razonable. El primero Respecto a la razonabilidad, Marianella
significa “facultad de discurrir”, “acto de dis- Ledesma apoyándose en MacCormick,
currir el entendimiento”, “motivo o causa”, Aarnio, y Atienza, dice: “Algunos autores
además el termino ratio significa “facultad han tratado de mostrar que se entiende
de calcular, razón, inteligencia, juicio, buen por razonable. MacCormick enfatiza en la
sentido”; el segundo significa “arreglado, ‘necesidad de buscar un equilibrio entre
justo, conforme a razón”18, “la razonabilidad exigencias contrapuestas’. Aarnio se centra
varía con el transcurso del tiempo y la posi- sobre todo en la necesidad de que la deci-
ción geográfica, por que envuelve la noción sión logre aceptabilidad o consenso. Para
de sentido común y este es igual en uno u Atienza ambas exigencias están ligadas entre
otro tiempo o lugar, porque los valores y las sí y constituyen uno de los puntos centrales
valoraciones comprendidas son cambiantes y del adecuado concepto de razonable. Según
distintas en las personas y sociedades y, por Atienza, una resolución jurídica es razonable
tanto en la historia. Lo objetivo es estable, lo si y solo si: 1) se toma en condiciones en que
subjetivo no”19. no sería aceptable, o no se podría adoptar
una decisión estrictamente racional; 2) logra
Cuando el juez actúa en determinado tiempo un equilibrio entre exigencias contrapuestas,
y espacio, debe conocer no solo el mandato pero que necesariamente hay que conside-
frío de la disposición procesal penal, sino tam- rar en la decisión; y 3) es aceptable por la
bién debe entender las costumbres, la idiosin- comunidad” 20.
Lo antes trascrito coadyuva a determinar
17 LEDESMA NARVAEZ, Comentarios al Código Procesal que la prisión preventiva –en tanto afecta
Civil – Análisis artículo por artículo, cit., p. 42.
gravemente el derecho a la libertad de las
18 GONZÁLEZ, Roberto, Neoprocesalismo. Teoría del
proceso civil eficaz, Ara Editores, Lima, 2013, p. 524.
19 GONZÁLEZ, Roberto, Neoprocesalismo. Teoría del 20 LEDESMA NARVAEZ, Comentarios al Código Procesal
proceso civil eficaz, cit., p. 524. Civil – Análisis artículo por artículo, cit., p. 425.

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Doctrina práctica
personas– debe ser aceptada por la comu- de forma negativa: no se busca la decisión
nidad y debe resolver equilibradamente la proporcionada, sino evitar la claramente
contraposición del principio de presunción de desproporcionada”22.
inocencia, y la prisión adelantada; por tanto,
De dicha conceptuación se puede advertir –
la prisión preventiva debe ser consecuencia
como es lógico– que la proporcionalidad sería
de la razonabilidad del juzgador.
el punto medio entre la afectación del derecho
Sin embargo, la aplicación de este principio a la libertad mediante la prisión preventiva,
no es pasiva, tanto es así que al respecto, y el interés del Estado en la persecución del
Roberto Gonzáles Álvarez, dice: “Por su parte, delito; sin embargo, ello sería por sí mismo
el Tribunal Constitucional peruano, si bien insuficiente puesto que no está considerando
ha asignado más espacio en sus sentencias al el impacto social de la decisión, la persona-
principio de proporcionalidad, se ocupa de lidad del agente o el peligro que representa
este principio confundiéndolo o revolviéndolo para la sociedad el procesado en goce de su
con el “principio de razonabilidad, la igualdad libertad, lo que sí se puede conseguir con la
y el debido proceso sustantivo, y siempre razonabilidad como sustento del mandato de
en una “lógica” colisionista de derechos prisión preventiva.
fundamentales, con el consecuente pesaje y
Miguel Polaino-Orts, alude a la razonabilidad
jerarquización de los mismos, situación que
y no así a la proporcionalidad cuando afirma:
el alto Tribunal debe enmendar”21.
“Que las normas que entrañan algún conteni-
Por lo antes expuesto, es conveniente aclarar do sancionador o restrictivo de los derechos o
si para el dictado de la prisión preventiva garantías de las personas deben interpretarse
debe recurrirse a la razonabilidad o a la pro- siempre –de acuerdo con criterios de equidad,
porcionalidad, pues no existirá otro momento prudencia, humanidad e, incluso, justicia– en
histórico para ello, dado que a la fecha, con su lado menos lesivo, más favorable para el
el pretexto de denuncias periodísticas sobre sujeto, es una obviedad que no requiere ser
posibles flaquezas o debilidades de los man- acogida en un texto legal para adquirir y
datos de prisión preventiva o la revocación de desplegar su vigencia”23.
estos, se está ingresando a quebrar la inde-
Lo expresado por tal autor, conlleva pensar
pendencia de los jueces y a afectar la propia
que la razonabilidad está vinculada nece-
institucionalidad del Poder Judicial.
sariamente con la interpretación restrictiva
La proporcionalidad por su parte, tal como de las disposiciones procesales que regulan
sostiene Roberto E. Cáceres Julca: “Sirve para la prisión preventiva, para evitar llegar a la
ponderar hasta qué punto es compatible la arbitrariedad o ilegalidad por diferente in-
intervención en los derechos fundamentales terpretación. Al respecto, Castillo Alva, Luján
con el interés en la persecución del delito. Túpez y Zavaleta Rodríguez remitiéndose
Busca determinar si existe una relación de a Engisch, con relación a la interpretación
equilibrio o de adecuada correspondencia restrictiva e interpretación extensiva, men-
entre la afectación que llega a sufrir un cionan: “La diferencia entre interpretación
derecho constitucional, y la conservación
de un bien o interés público que aparece
precisamente como causa de esa afectación. 22 CÁCERES JULCA, Los medios impugnatorios en el pro-
Se aplica en el proceso penal para acomo- ceso penal, cit., p. 237.
23 POLAINO–ORTS, Miguel, “¿Odiosa sunt restringenda,
dar la ley al caso concreto, atendiéndose a favorabilia sunt amplianda? Sobre los límites de la
los intereses en conflicto y en su fórmula interpretación de derechos procesales: acotaciones al
art. VII.3 del Código Procesal del Perú”, en HURTADO
POZO, José (Dir.). Anuario de Derecho Penal. Interpreta-
21 GONZÁLES ÁLVAREZ, Roberto, Neoprocesalismo. Teoría ción y aplicación de la ley penal, Fondo Editorial PUCP
del proceso civil eficaz, cit., p. 451. y Universidad de Friburgo-Suiza, Lima, 2006, p. 267.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 173


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


restrictiva e interpretación extensiva adquiere más que en el de su superficie. Éste es el
algún significado cuando sirve para precisar punto central”27 .
la relación de las normas jurídicas con la
libertad civil o los derechos fundamentales 6. Conclusiones
de los ciudadanos”; seguidamente refiere
• El fumus boni iuris y el periculum in mora
“Muchas veces una interpretación restrictiva
no serían los presupuestos procesales
o de limitación del alcance de un precepto
pertinentes para la validez del mandato
favorecerá la expansión de las cuotas de
de prisión preventiva, por cuanto co-
libertad, mientras que su interpretación am-
rresponden estrictamente a las medidas
plia (extensiva) determinará una reducción
cautelares de carácter extrapenal, dado
de las cuotas de libertad. En el caso del de-
que solo tienen relación con el buen de-
recho penal la interpretación restrictiva por
recho invocado por la parte demandante
lo general determinará una limitación a la
y con el peligro que entraña para ella la
potestad punitiva del Estado y la consiguien-
demora del proceso, que haría ineficaz
te ampliación de los márgenes de libertad.
la sentencia a dictarse.
En cambio, la interpretación extensiva, al
ampliar el ejercicio de ius puniendi, terminará • El fumus comissi delicti y el periculum
afectando los derechos y la libertad de los libertatis serían los presupuestos procesa-
ciudadanos”24. les pertinentes de la prisión preventiva,
porque tienen relación con la fuerte
Siguiendo la misma línea de pensamiento, posibilidad de la comisión del delito por
el profesor Alberto Trabucchi afirma: “La parte del imputado, y con el peligro que
interpretación debe ser, en definitiva, viva, podría constituir el procesado estando en
funcional y honesta”25, “la interpretación libertad.
restrictiva se dará cuando la interpretación
• Para la validez del mandato de prisión
lógica restrinja el significado propio de la
preventiva, sería condición sine qua non,
expresión usada por la ley”26.
la razonabilidad, y no así la proporcionali-
Tampoco podemos soslayar – para coadyuvar dad, porque el juez tiene la obligación de
el uso de la razonabilidad en lugar de la pro- analizar en ejercicio de su independencia
porcionalidad– que el Perú es pluricultural. jurisdiccional, los efectos de su decisión,
Es un espacio geográfico compartido por ya sea considerando el entorno social,
diferentes naciones originarias desde antes el momento histórico o las cualidades
de la invasión y conquista española, que positivas, o negativas del imputado, sin
pese al transcurso de los siglos permanecen limitarse a la formulación cuasimatemá-
vigentes, viven con nosotros, recobrando y tica de la proporcionalidad.
buscando su propia historia, hecho social • La falta de diferenciación de los presu-
que Saúl Peña K. lo califica como “(…) el puestos procesales de la prisión preven-
problema es de la raza del espíritu, es decir tiva, pondría en riesgo los verdaderos
de una incapacidad de muchos de aceptar a objetivos de dicha medida cautelar, por lo
las personas a las que se considera diferentes que la solución de dicha problemática en
en su profundidad y en su color de fondo, el ámbito jurisdiccional, sería sumamente
útil y además brindaría importante aporte
para el trabajo intelectual vinculado con
24 CASTILLO ALVA, José, Manuel LUJÁN y Roger ZAVA-
LETA, Razonamiento Judicial: Interpretación, argumen-
tación y motivación de las resoluciones judiciales, Ara
Editores, Lima, 2006, p. 57.
25 TRABUCCHI, Alberto, Instituciones del derecho civil, 27 PEÑA KOLENKAUTSKY, Saúl, Psicoanálisis de la co-
Revista de derecho privado, Madrid, 1967, p. 49. rrupción – política y ética en el Perú contemporáneo,
26 TRABUCCHI, Instituciones del derecho civil, cit., p. 49. Ediciones PEISA, Lima, 2003, cit., p. 159.

174 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
la institución procesal de la prisión pre- LEDESMA NARVAEZ, Marianella, Comentarios
ventiva. al Código Procesal Civil – Análisis artículo
por artículo, Gaceta Jurídica, Lima, 2011.
CONCLUSIÓN MÁS IMPORTANTE SAN MARTÍN CASTRO, César, Derecho procesal
penal, Grijley, Lima, 2014.
El fumus comissi delicti y el pericu- SUMARIA BENAVENTE, Omar, Introducción
lum libertatis serían los presupues- al sistema de la tutela jurisdiccional, Ara
tos procesales pertinentes de la Editores, Lima, 2013.
prisión preventiva, porque tienen PEÑA CABRERA, Alonso y Gustavo URQUIZO
relación con la fuerte posibilidad VIDELA, Las medidas coercitivas personales
de la comisión del delito por par- y reales en la jurisprudencia 2009-2010,
te del imputado, y con el peligro Gaceta Jurídica, Lima, 2011.
que podría constituir el procesado
estando en libertad. POLAINO–ORTS, Miguel, “¿Odiosa sunt
restringenda, favorabilia sunt amplianda?
Sobre los límites de la interpretación de
derechos procesales: acotaciones al art.
7. Bibliografía VII.3 del Código Procesal del Perú”, en
CÁCERES JULCA, Roberto, Los medios im- HURTADO POZO, José (Dir.) Anuario de
pugnatorios en el proceso penal, Jurista Derecho Penal. Interpretación y aplicación
Editores, Lima, 2011. de la ley penal, Fondo Editorial PUCP y
CASTILLO ALVA, José, Manuel LUJÁN y Roger Universidad de Friburgo-Suiza, Lima,
ZAVALETA, Razonamiento judicial: Inter- 2006.
pretación, argumentación y motivación de PEÑA KOLENKAUTSKY, Saúl, Psicoanálisis de
las resoluciones judiciales, Ara Editores, la Corrupción – Política y ética en el Perú
Lima, 2006. Contemporáneo, Ediciones PEISA, Lima,
GIMENO SENDRA, Vicente, Cándido CON- 2003.
DE–PUMPIDO y José GARBERÍ, Los SALINAS SICCHA, Ramiro, “La prisión pre-
procesos penales - Comentarios a la Ley de ventiva y la primera casación en el nuevo
Enjuiciamiento Criminal con formularios y modelo procesal penal”, en Revista jus
jurisprudencia, Bosch, Barcelona, 2000. jurisprudencia, N.°6, Grijley, Lima, 2007.
GONZÁLEZ ÁLVAREZ, Roberto, Neoprocesa- TRABUCCHI, Alberto, Instituciones del derecho
lismo. Teoría del proceso civil eficaz, Ara civil, Revista de derecho privado, Madrid,
Editores, Lima, 2013. 1967.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 175


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica

Las comunidades campesinas y nativas:


La jurisdicción penal desde la perspectiva
constitucional del Acuerdo Plenario 1-2009/CJ-116
Elder J. Miranda Aburto*
Miembro del Instituto Panamericano de Derecho Procesal

1. Introducción
SUMARIO

2. Las comunidades campesinas y nativas dentro del marco supranacional


3. ¿Tienen la misma naturaleza criminal la imputación de autor y/o partícipe cuando integran
una comunidad campesina, nativa, y/o pueblos indígenas?
4. La jurisdicción penal en las comunidades campesinas y nativas
5. Posición asumida por la Corte Suprema de Justicia en los diferentes delitos efectuados por
las comunidades campesinas y nativas
6. Conclusiones

1. Introducción América algunas de las mencionadas familias.


En el año 2007, se llevó a cabo el II Censo Según estudios antropológicos, estas familias
de Comunidades Indígenas, en el cual se lingüísticas agrupan a sesenta (60) etnias.
identificó geográfica y cartográficamente a Los resultados del II Censo de Comunidades
1786 comunidades indígenas, ubicadas en 11 Indígenas de la Amazonía peruana, permiten
departamentos, además de conocer las carac- contar con información de las trece familias
terísticas de su población y viviendas. En la lingüísticas y de cincuenta y un (51) etnias de
Amazonía peruana, ancestralmente se asienta las sesenta existentes.
la población indígena perteneciente a trece El Acuerdo Plenario 1-2009/CJ-116 establece
(13) familias lingüísticas, lo cual convierte al parámetros al juzgador al momento de emi-
Perú en el país más heterogéneo de América, tir una sentencia en contra de los presuntos
pues no existe otro país en este Continente autores del ilícito penal, cuando estos son
con más familias lingüísticas que el nuestro: integrantes de una comunidad campesina
no obstante, compartimos con otros países de y/o nativas siendo la primera: “Cuando no
sea posible determinar la atipicidad de la
conducta, será del caso recurrir al análisis de
* El autor también es doctor en Derecho. Magíster en
Derecho Penal. Estudiante de la Maestría de Derecho la procedencia de la causa de justificación
Constitucional de la Pontificia Universidad Católica centrada, con mayor relevancia, en el ejer-
del Perú. Docente de la Escuela de Postgrado de la cicio legítimo de un derecho (artículo 20.8
Universidad Nacional Federico Villareral, Universidad
Nacional Santiago Antúnez de Mayolo y de la Uni-
CP), tomándose en cuenta el presupuesto de
versidad Peruana Los Andes. Docente de pregrado situación de amenaza a los bienes jurídicos
de las Universidades Inca Garcilaso de la Vega y de antes citados y los límites o condiciones para
la Universidad Nacional Federico Villareal. Integran- el correcto ejercicio de la función jurisdiccional
te de la Comisión Consultiva del Ilustre Colegio de
Abogados de Lima comunal-rondera ya analizados”.

176 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
La segunda es, cuando no resulta la aplicación
de lo anteriormente señalado, será del caso RESUMEN
considerar el conjunto de factores culturales
en la escala individual del sujeto procesado El presente trabajo aborda el tema de
señalando el plenario: “Cabe acotar que el la jurisdicción etnocultural, presentando
análisis en mención requiere, como presu- inicialmente datos censales sobre las comu-
nidades campesinas e indígenas, así como
puesto, tener muy claro la existencia jurídica la variedad de familias lingüísticas, luego se
de la ronda campesina, la autoridad rondera describe el marco supranacional, a partir del
que actuó –la condición de tal del rondero reconocimiento del Convenio 169 de la OIT,
incriminado-, su nivel de representación y con el cual nuestro Estado peruano se obliga
funciones, y las características y alcances internacionalmente a adoptar las medidas
necesarias para la implementación de la juris-
de la norma consuetudinaria aplicada, as- dicción etnocultural, analizando el contenido
pectos que en varias de sus facetas puede del Acuerdo Plenario N.° 01-2009, pasando
determinarse mediante pericias culturales o por las sentencias emitidas por el Tribunal
antropológicas”. Constitucional sobre la materia, todo ello con
la lectura del artículo 149 del texto consti-
El tercero es: “Cuando no sea posible declarar tucional, respecto del cual la Corte Suprema
la exención de pena por diversidad cultural, ha acogido una interpretación extensiva a fin
esta última sin embargo puede tener entidad de incluir las rondas campesinas, significando
ello para el autor, una descriminalización de
para atenuarla en diversos planos según la los actos que realicen los ronderos en materia
situación concreta en que se produzca. En los de impartición de justicia. Concluye, que en
niveles referidos a la causa de justificación el ejercicio de la jurisdicción etonocultural se
(artículo 20.8 CP), al error de tipo o de pro- debe respetar el debido proceso, puesto que
hibición (artículo 14 CP) o a la capacidad para las afectaciones a los derechos fundamentales
están al margen de la protección del derecho
comprender el carácter delictivo del hecho consuetudinario.
perpetrado o de determinarse de acuerdo a
esa comprensión (artículo 15 CP) y si el grado
CONTEXTO NORMATIVO
de afectación no es lo suficientemente intenso
o no se cumplen todos los requisitos necesa-
• Constitución Política: Artículo 149.
rios para su configuración, será de aplicación,
• Código Penal: Artículos 14, 15, 20, 21,
según el caso: 45.5 y 46.8.
A. La atenuación de la pena por exención
incompleta conforme al artículo 21 CP, o PALABRAS CLAVE
por la vencibilidad del error prohibición
según el artículo 14 in fine última frase Comunidades / Justicia comunitaria / Excen-
CP, o por los defectos de la comprensión ción de pena / Tipicidad / Identidad
o de determinarse según esa compren-
sión como lo previene la última frase del
artículo 15 CP. lado, los artículos 45.2 y 46.8 y 11 CP –com-
B. La sanción por delito culposo si tal figura patibles con el artículo 9.2 de la Convención,
penal se hallare prevista en la ley por la que exige a los tribunales penales tener en
vencibilidad del error de tipo, atento a cuenta las costumbres de los pueblos indíge-
lo dispuesto por el artículo 14 primer nas, el contexto socio cultural del imputado–;
párrafo última frase CP”. y, de otro lado, directivamente, el artículo 10
Y por último el citado Acuerdo señala: “Com- de la Convención, que estipula tanto que se
probada la existencia del hecho punible y la tenga en cuenta las características económi-
responsabilidad del acusado, el juez penal cas, sociales y culturales del individuo y dar
para medir la pena tendrá en cuenta, de un preferencia a tipos de sanción distintos del

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 177


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


encarcelamiento –principio de adecuación de las amenazas contra su seguridad; y promover
las medidas de reacción social–”. el bienestar general que se fundamenta en la
justicia, y en el desarrollo integral y equilibra-
Es por ello que las comunidades campesinas,
do de la Nación.
hoy en día tienen el reconocimiento de su
jurisdiccional especial a través de la Cons-
titución y Convenios Internacionales, pero ¿SABÍA USTED QUE?
con vacíos legales que ha originado nuestra
justicia penal.
Las comunidades campesinas hoy
en día tienen el reconocimiento
2. Las comunidades campesinas y de su jurisdiccional especial a tra-
nativas dentro del marco supra- vés de la Constitución y Convenios
nacional Internacionales, pero con vacíos
El Convenio 169 de la Organización Interna- legales que ha originado nuestra
cional del Trabajo, enfatiza el reto de poder justicia penal.
adoptar una perspectiva intercultural en
la administración de justicia, generándose Es decir, el Estado a pesar de haber ratificado
opiniones encontradas por parte del Poder el Convenio podrá excusarse a nivel interna-
Judicial, porque supuestamente se estaba cional en alusión a la flexibilidad y teniendo
aplicando la ley de manera incorrecta. La en cuenta las condiciones de cada país que
naturaleza de los preceptos contenidos en el refiere el artículo 34 del Convenio en cuestión.
Convenio 169, corresponden a una naturaleza Consideramos que si ha sido reconocido por el
autoaplicativa1 o programática2. No debemos Estado, y conforme al artículo 55 de la Cons-
olvidar que dentro de los deberes del Estado titución Política del Perú3, se puede calificar a
previstos en el artículo 44 de la Constitución, tales normas como AUTOAPLICATIVAS.
no solo se encuentra el garantizar la plena
Es más, el Tribunal Constitucional ha señalado:
vigencia de los derechos fundamentales, sino
“Los derechos fundamentales reconocidos por
también garantizar la plena vigencia de los
nuestra Constitución, deben ser obligatoria-
derechos humanos; proteger a la población de
mente interpretados de conformidad con los
tratados y los convenios internacionales sobre
derechos humanos ratificados por el Perú y en
1 Posición asumida en la sentencia. N.° 01893-2009-
PA/TC- Minera Yanacocha S.R.LTDA. señaló: “Las concordancia con las decisiones adoptadas
normas autoaplicativas pueden ser definidas como por los tribunales internacionales sobre dere-
aquellas que llevan incorporadas en sí mismas un acto chos humanos constituidos según tratados de
de ejecución, de modo tal que la posible afectación al
derecho se produce con la sola entrada en vigencia de
los que el Perú es parte (Cuarta Disposición
la norma, pues ésta produce efectos jurídicos inme- Final y Transitoria de la Constitución y artículo
diatos en la esfera jurídica de los sujetos de derechos. V del Título Preliminar del Código Procesal
Es decir, que este tipo de normas con su sola entrada Constitucional). En tal sentido, el ejercicio
en vigencia crean situaciones jurídicas concretas, no
siendo necesario actos posteriores y concretos de interpretativo que realice todo órgano jurisdic-
aplicación para que genere efectos”. cional del Estado (o que desempeñe funciones
2 Posición asumida en la sentencia N.° 1417--2005-PA/ materialmente jurisdiccionales), para deter-
TC- Manuel Anicama Hernández: “De esta manera, minar el contenido constitucionalmente pro-
la distinta eficacia que presentan los derechos funda-
mentales entre sí, no sólo reposa en cuestiones teó-
tegido de los derechos fundamentales, debe
ricas de carácter histórico, sino que estas diferencias estar obligatoriamente informado por las
revisten significativas repercusiones prácticas. En tal
sentido, cabe distinguir los derechos de preceptividad
inmediata o autoaplicativas, de aquellos otros deno- 3 Art. 55 de la Constitución: Los tratados celebrados
minados prestacionales, de preceptividad diferida, por el Estado y en vigor forman parte del derecho
progresivos o programáticos”. nacional.

178 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
disposiciones de los tratados internacionales establece que “[E]l que realiza por sí o por
de derechos humanos y por la interpretación medio de otro el hecho punible y los que lo
de las mismas realizada por los tribunales cometan conjuntamente serán reprimidos con
internacionales sobre derechos humanos a la pena establecida para tal infracción”. A su
través de sus decisiones”4. vez, distingue tres formas en que una persona
puede cometer un delito (realizarlo) en cali-
Asimismo, ha determinado cómo se vinculan
dad de autor: a) cuando realiza por sí misma
los órganos de jurisdicción interna: “En con-
el hecho punible; b) cuando realiza por medio
secuencia, al Tribunal Constitucional, en el
de otro el hecho punible; c) cuando realiza el
presente caso no le queda más que ratificar
hecho punible juntamente con otro u otros.
su reiterada doctrina, imprescindible para
garantizar los derechos fundamentales, bien La doctrina precisa que solamente puede
se trate de procesos jurisdiccionales, adminis- hacerse tal delimitación en los tipos dolosos.
trativos o políticos: que las sentencias de la Así, define como autor de delito doloso a “[a]
Corte Interamericana de Derechos Humanos aquel que mediante una conducción conscien-
son vinculantes para todos los poderes públi- te de fin, del acontecer causal en dirección del
cos y que esta vinculatoriedad no se agota en resultado típico, es señor sobre la realización
su parte resolutiva, sino que se extiende a la del tipo”. Es decir, el autor puede manipular
ratio decidendi, incluso en aquellos casos en sobre el resultado del hecho e inclusive pue-
los que el Estado peruano no haya sido parte de desistirse. En tanto que el partícipe está
en el proceso”5. supeditado a la actuación del autor, pues su
intervención solamente se produce siempre
De esta manera, el Estado se obliga interna-
que el autor, por lo menos, arriba al grado
cionalmente no solo a adoptar las medidas
de tentativa, sin el cual no hay complicidad
necesarias para dar cumplimiento a lo pac-
ni instigación. Consecuentemente, el partícipe
tado y lograr la concreción de los derechos
no tiene dominio del hecho.
reconocidos, sino también acatar las decisio-
nes de los órganos a los cuales ha decidido Así, es autor quien tiene el poder para mani-
a someterse. pular el resultado del hecho, cuya contribu-
ción, aún siendo distinta, es considerada como
3. ¿Tienen la misma naturaleza un todo, y el resultado total le es atribuible
criminal, la imputación de autor independientemente de la entidad material
y/o partícipe cuando integran una de su intervención; y es partícipe aquel cuya
comunidad campesina, nativa, intervención está condicionada al resultado
obtenido por el autor o aquel cuyo accionar
y/o pueblos indígenas?
no contribuye decididamente a la ejecución
El Tribunal Constitucional en la sentencia del delito, sino que su intervención se limita
expedida en el caso Máximo Humberto Ca- a coadyudar en su ejecución.
ceda Pedemonte, señaló lo siguiente sobre la
definición de autoría y participación: Ahora bien, cuando el ilícito penal es come-
tido por una persona que, cual instrumento,
“El Código Penal reconoce dos formas de actúa dentro de un aparato de poder orga-
intervención delictiva; la autoría y la partici- nizado, que, como parte de su estrategia
pación: el artículo 23 del Código Sustantivo general, comete delitos o representa solo un
ejemplo de un conjunto de conductas ilícitas
4 Posición asumida por el Tribunal Constitucional en la similares, estamos frente a la existencia de un
sentencia Nº 5854-2005-AA/TC- Pedro Andrés Lizana patrón de violaciones, lo que convierte a tal
Puelles agrupación en una organización destinada a
5 Posición asumida por el Tribunal Constitucional en la cometer delitos. Estamos, entonces, frente
sentencia Nº 0007-2007-AI/TC-Colegio de Abogados
del Callao
a un ilícito contra la paz pública previsto y

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 179


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


sancionado en el artículo 317 de la ley penal de Pueblos Andinos señala en su artículo 2
material. A mayor abundamiento, dicho tipo las definiciones que abarcarían a los pueblos
penal está referido a una agrupación de per- andinos, pueblos amazónicos y pueblos afro
sonas organizadas con el objeto de cometer peruanos. La comisión toma nota que según
varios delitos, y que han hecho del delito un el gobierno las comunidades campesinas y
modo de vida. las comunidades nativas están incluidas en
el reconocimiento de sus derechos étnicos y
En consecuencia, es en virtud del principio de
culturales como colectividades similares a los
reparto funcional de roles y de las contribu-
pueblos indígenas, enfatizando los aspectos
ciones de los intervinientes en el ilícito penal
sociales, políticos y culturales”8.
que se establecerá su intervención delictiva”6.
Ha traído mucha confusión estas distintas Estas diferentes denominaciones no podemos
denominaciones: el concepto de pueblos interpretarlas como un numerus clausus, sino
indígenas en el Perú, que comprende funda- como un número apertus, como se puede
mentalmente la población que habita en las apreciar de la sentencia emitida por el Tribunal
comunidades campesinas y nativas, así como Constitucional: “El enfoque social de la perso-
aquellos pueblos amazónicos en situación de na humana se condice con el hecho que, en
aislamiento voluntario o contacto inicial. el Estado peruano, los ciudadanos pertenecen
a una sociedad que es heterogénea tanto en
La comisión Interamericana de Derechos Hu-
sus costumbres como en sus manifestaciones
manos ha señalado: “No existe una definición
culturales. Por ello, la Constitución de 1993
precisa de ‘pueblos indígenas’ en el derecho
ha reconocido a la persona humana como
internacional, y la posición prevaleciente in-
miembro de un Estado multicultural y poliét-
dica que dicha definición no es necesaria para
nico; de ahí que no desconozca la existencia
efectos de proteger sus derechos humanos.
de pueblos y culturas originarias y ancestrales
Dada la inmensa diversidad de los pueblos
del Perú. En esa medida, la Constitución re-
indígenas de las Américas y del resto del mun-
conoce la existencia legal de las comunidades
do, una definición estricta y cerrada siempre
campesinas y nativas, así como su personería
correrá el riesgo de ser demasiado amplia o
jurídica (artículo 88 de la Constitución);
demasiado restrictiva. El derecho internacio-
además, impone al Estado la obligación de
nal sí proporciona algunos criterios útiles para
respetar su identidad cultural (artículo 89 de
determinar cuándo un determinado grupo
la Constitución). Pero también debe reconocer
humano se puede considerar como ‘pueblo
la existencia de poblaciones afroperuanas y de
indígena’. Esta determinación es de impor-
otras tradicionalmente arraigadas en el Perú”9.
tancia crítica para el derecho internacional”.7
Estos últimos carecen de un reconocimiento
El Estado peruano ha reconocido de forma ofi-
de sus culturas, es por ello que la Defensoría
cial que las comunidades campesinas y nativas
del Pueblo ha emitido recomendaciones a
constituyen pueblos indígenas. Así lo informo
través del Informe de Adjuntía Nº 003-2011-
el Estado a la Comisión de Expertos en Apli-
DP/ADHPD, a favor de la población afrope-
cación de Convenios y Recomendaciones de
ruana. Siendo las principales: a) Incorporar la
la OIT (CEACR): “La comisión toma nota que
variable étnica (afro) en los censos nacionales
el gobierno informa que el reglamento de la
ley número 28945. Ley del Instituto Nacional
8 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos y Luis ROEL ALVA, Manual
6 STC Expediente N.° 1805-2005-PHC/TC. de herramientas legales para operadores del sistema
7 Comisión Interamericana de Derechos Humanos. de justicia para defender los derechos de los pueblos
Derechos de los Pueblos Indígenas y Tribales sobre indígenas, Justicia Viva, Lima, 2011, p. 22
sus tierras ancestrales y recursos naturales, Normas y 9 Posición asumida por el Tribunal Constitucional en
Jurisprudencias del Sistema Interamericano de Derechos la sentencia. N.° 0042-2004-AI/TC- Luis Alejandro
Humanos, CIDH, Washington D.C., 2010, p. 15. Lobatón Donayre y más de cinco mil ciudadanos.

180 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
y en las políticas públicas; b) Contar con una personas a su identidad étnica y cultural, así
institucionalidad estatal fortalecida (técnica, como la pluralidad de las mismas, supone que
orgánica, representativa y estable). el estado social y democrático de derecho está
en la obligación de respetar, reafirmar y pro-
mover aquellas costumbres y manifestaciones
¿SABÍA USTED QUE? culturales que forman parte de esa diversidad
y pluralismo cultural, pero siempre que ellas
En la medida que la propia Consti- se realicen dentro del marco de respeto a
tución afirma el derecho a la iden- los derechos fundamentales, los principios
tidad étnica y cultural de las perso- constitucionales y los valores superiores que la
nas, y el Estado reconoce y protege constitución incorpora, tales como la dignidad
la pluralidad étnica y cultural de la de la persona humana (artículo 1 de la cons-
Nación, así como que el Convenio titución), la forma democrática de gobierno
ratifica el derecho de los pueblos (artículo 43) y la economía social de mercado
históricos a conservar sus propias (artículo 58)”11.
instituciones sociales, económicas,
culturales y políticas, o parte de El Convenio 169 de la OIT señala en su ar-
ellas. tículo l: El presente convenio se aplica: a) a
los pueblos en países independientes, cuyas
condiciones sociales culturales y económicas
El Tribunal Constitucional ha señalado: “La
les distingue de otros sectores de la colecti-
Constitución reconoce, entonces, el derecho
vidad nacional, y que estén regidos total o
tanto a la identidad cultural como a la identidad
parcialmente por sus propias costumbres o
étnica. Si bien se trata de conceptos jurídicos
tradiciones o por una legislación especial. La
indeterminados, este Tribunal considera que
Guía de Aplicación del Convenio Nº 169 de la
se trata de dos ámbitos de protección de la
OIT explica que los elementos que definen a
identidad cultural, entendidos como iden-
un pueblo indígena son tanto objetivos como
tidad de un grupo social y también como
subjetivos. Los elementos objetivos incluyen:
expresión cultural general. Por un lado se
(i) La continuidad histórica: Se exige ser
trata de la identidad de los grupos étnicos,
descendientes de pueblos originarios, es decir,
es decir, de “(...) aquellas características, cua-
deben ser sociedades anteriores a la conquista
lesquiera que puedan ser que, al prevalecer
o a la colonización; (ii) la conexión terri-
dentro del grupo y distinguirlo de los demás,
torial: Se exige vivir en el mismo territorio
nos inclinan a considerarlo un pueblo aparte.
que vivieron sus ancestros. Se podría admitir
Para el hombre de la calle un pueblo es el
si estos han sido expulsados violentamente,
equivalente de lo que el informado llama un
por ejemplo, en casos de terrorismo. (iii) ins-
grupo étnico”; y, por otro, de la identidad
tituciones sociales, económicas, culturales
cultural general, esto es, de la identidad de
y políticas distintivas, y específicas, que son
todo grupo social que se genera en el proceso
propias y se retienen en todo o en parte. El
histórico de compartir experiencias y luchas
elemento subjetivo corresponde a la auto-
sociales comunes para autodefinirse como
identificación colectiva en tanto pueblo in-
pueblo. Por ello, puede afirmarse que entre
dígena, es decir, es un criterio fundamental si
identidad cultural e identidad étnica existe
un pueblo determinado se considera indígena
una relación de género a especie”10.
o tribal bajo el Convenio y así una persona se
Asimismo, indicó: “La constitución de 1993 identifica como perteneciente a ese pueblo.
reconozca el derecho fundamental de las

11 Posición asumida por el Tribunal Constitucional en la


10 Posición asumida por el Tribunal Constitucional en la sentencia N.° 0042-2004-AI/TC- Lobatón Donayre y
sentencia. N.° 006-2008-PI/TC-PCM más de cinco mil firmas.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 181


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


El Convenio 169 fue el primer instrumento fica el derecho de los pueblos históricos a
internacional en reconocer la importancia de conservar sus propias instituciones sociales,
la autoidentificación. económicas, culturales y políticas, o parte
de ellas, siendo el criterio fundamental la
conciencia de su identidad (artículo 1°),
IMPORTANTE entonces, atendiendo a que las Rondas
Campesinas según se tiene expuesto son la
Dentro de los deberes del Estado expresión de una autoridad comunal y de sus
previstos en el artículo 44 de la valores culturales de las poblaciones donde
Constitución, no solo se encuen- actúan, será del caso entender –en vía de
tra el garantizar la plena vigencia integración– que pueden ejercer funciones
de los derechos fundamentales, jurisdiccionales, cuyo reconocimiento efec-
sino también garantizar la plena tivo, desde luego, estará condicionado al
vigencia de los derechos huma-
cumplimiento de un conjunto de elementos
nos; proteger a la población de las
que luego se precisarán. No hacerlo impor-
amenazas contra su seguridad; y
promover el bienestar general que taría un trato discriminatorio incompatible
se fundamenta en la justicia y en el con el derecho constitucional a la igualdad
desarrollo integral, y equilibrado y a la no discriminación12.
de la Nación. Asimismo, el artículo 149 de nuestra Consti-
tución nos indica que las autoridades de las
Existen normas infraconstitucionales que lo Comunidades Campesinas y Nativas, con el
definen: Ley Nº 27811, llamada también ley apoyo de las Rondas Campesinas, pueden
que establece el Régimen de Protección de ejercer las funciones jurisdiccionales dentro
los Conocimientos Colectivos de los Pueblos de su ámbito territorial de conformidad con
Indígenas, que en su artículo 2 señala: Los el derecho consuetudinario, siempre que
pueblos indígenas, como pueblos originarios no violen los derechos fundamentales de
que tienen derechos anteriores a la formación la persona.
del Estado peruano, mantienen una cultura
propia, un espacio territorial y se autorre- 4. La jurisdicción penal en las comu-
conocen como tales. En estos se incluyen a nidades campesinas y nativas
los pueblos en aislamiento voluntario o no Hasta fines del siglo XX, la jurisdicción de
contactados, así como a las comunidades los pueblos indígenas no fue valorada ade-
campesinas y nativas. La denominación “indí- cuadamente en el Perú y Latinoamérica, las
genas” comprende y puede emplearse como constituciones que han precedido a la del
sinónimos de “originarios”, “tradicionales”, 93 establecieron al Congreso como el único
“étnicos”, “ancestrales”, “nativos” u otros poder facultado para la creación de normas
“vocablos”. legales, asignándole al Poder Judicial la fun-
La ley Nº 28611, llamada Ley General del ción exclusiva de administrar justicia.
Medio Ambiente, en su artículo 70 menciona La jurisdicción según Devis Echandía: “La juris-
como sinónimos a los pueblos indígenas, dicción es el poder-deber del Estado de reali-
comunidades campesinas y nativas. zar esa tarea, la de imponer la norma jurídica
resolviendo los casos concretos con el fin de
En la medida que la propia Constitución
lograr la paz social mediante la imposición del
afirma el derecho a la identidad étnica y
cultural de las personas, y el Estado reconoce
12 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos, ¿Por qué deben recono-
y protege la pluralidad étnica y cultural de cerse facultades jurisdiccionales a las rondas campesinas?,
la Nación, así como que el Convenio rati- IDL, Lima, 2008, p. 24.

182 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
derecho.13 El Tribunal Constitucional ha seña- 2. Conciencia legal: Es el conocimiento por
lado: “El concepto ‘jurisdicción’ se encuentra parte de los individuos de la posibilidad
regulado por dos clases de facultades: las de obtener una reparación jurídica me-
primeras relativas a la decisión y ejecución que diante los sistemas de justicia formales o
se refieren al acto mismo; y las segundas con- tradicionales.
cernientes a la coerción y documentación que, 3. Asistencia y asesoramiento legal: Es el
de un lado, tienden a remover los obstáculos acceso a profesionales capacitados para
que se oponen a su cabal ejercicio, y de otro, iniciar y llevar adelante procedimientos
a acreditar de manera fehaciente la realización jurídicos.
de los actos jurisdiccionales, otorgándoles per-
4. Adjudicación: Es el proceso de determi-
manencia, así como una fijación indubitable
nación del tipo de reparación jurídica
en el tiempo, es decir, el modo y forma en
o compensación más adecuada, ya sea
que se desarrollan. El ejercicio de la potestad
regulado por la legislación formal, como
jurisdiccional o la potestad de administrar
ocurre en los tribunales, o por los sistemas
justicia comprende, en lo esencial, lo siguien-
jurídicos tradicionales.
te: la tutela de los derechos fundamentales,
los derechos ordinarios e intereses legítimos; 5. Ejecución: Es la implementación de órde-
la sanción de los actos delictivos; el control nes, resoluciones y acuerdos que surjan
difuso de la constitucionalidad; y el control de la adjudicación formal o tradicional.
de la legalidad de los actos administrativos”14. 6. Supervisión de la sociedad civil y del parla-
mento: Consiste en establecer las funcio-
El PNUD define el “acceso a la justicia” como:
nes de vigilancia y control con respecto
“La capacidad de los individuos de buscar y
a los sistemas de justicia.
obtener una respuesta satisfactoria a sus ne-
cesidades jurídicas a través de las instituciones Hoy en día, podemos ver de manera pragmá-
formales o informales de justicia, de conformi- tica que la discriminación racial, las barreras
dad con las normas de derechos humanos”. Es lingüísticas y culturales dificultan gravemente
por ello que el acceso a la justicia se entiende el acceso a la justicia de las poblaciones indí-
como un proceso que debe adaptarse a un genas. Según CEPAL, en América Latina y el
contexto específico y que requiere la capaci- Caribe, vivirían entre los 30 y 50 millones.
tación de todos los actores. En este sentido, Perú es el país que más indígenas tendría, con
el PNUD15 identifica los siguientes elementos aproximadamente 8.5 millones16.
esenciales: A fin de solucionar lo anteriormente descrito,
1. Protección legal: Que viene a ser el reco- la tratadista Tamayo Flores sugiere algunos cri-
nocimiento de los derechos dentro de terios para orientar el proceso de coordinación
los sistemas de justicia que otorgue la entre la jurisdicción ordinaria y comunal: “a)
posibilidad de obtener una respuesta a El mayor grado de autonomía jurisdiccional
sus necesidades jurídicas ya sea mediante indígena posible con la menor intervención
mecanismos formales o tradicionales. estatal; b) La intervención estatal en el ámbito
jurisdiccional en principio se restringiría a ga-
rantizar la vigencia de los Derechos Humanos
13 DEVIS HECHANDÍA, Hernando, Teoría general del
constitucionalmente reconocidos, a partir
proceso: Aplicable a toda clase de procesos, Universidad, de la lectura del contexto cultural que sobre
Buenos Aires, 1984, p.117.
14 Sentencia emitida por el Tribunal Constitucional en 16 LOVATÓN PALACIOS David, Acceso a la justicia: Llave
el expediente N.º 0023-2003-AI/TC- Defensoría del para la gobernabilidad democrática. (Informe final del
Pueblo. Proyecto Lineamento y Buenas Prácticas para un Adecua-
15 Los Derechos de los Pueblos Indígenas y Tribales en la do Acceso a la Justicia en las Américas), Organización de
práctica. Una guía sobre el Convenio 169 de la OIT, los Estados americanos, Washington D. C., 2006, p.
2009, p. 86. 30.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 183


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


dichos derechos se manejan en el ámbito los términos del artículo 8 de la Convención
comunal, a fin de contrapesar el alcance y Americana”.
sentido de las sanciones comunitarias como
violatorios o no de los Derechos Humanos. C)
El respeto de la institucionalidad y jurisdicción DATO
indígena a partir de los principios como la
autonomía, autenticidad, sentido y eficacia En el año 2007 se llevó a cabo el II
de la misma, lo cual implica no condicionar a Censo de Comunidades Indígenas,
las autoridades tradicionales que administren en donde se permitió identificar
justicia su transformación en autoridades ofi- geográfica y cartográficamente a
ciales del Estado, como pueden ser los Jueces 1786 comunidades indígenas, ubi-
de Paz; d) Las formas de coordinación deben cadas en 11 Departamentos, ade-
ser concebidas a partir del menor grado de más de conocer las características
formalidades sustantivas y procesal a fin de de su población y viviendas. En la
que las normas devengan e mecanismos ope-
Amazonía peruana ancestralmente
se asienta la población indígena
raciones y aceptables por los usuarios y no se
perteneciente a trece (13) fami-
convierten en fuentes de mayor colectividad
lias lingüísticas, lo cual convierte
institucional”17.
al Perú en el país más heterogéneo
Debemos reconocer el artículo 8 de la Con- de América, pues no existe otro
vención Americana de Derechos Humanos, el país en este Continente con más
cual regula las garantías del debido proceso. familias lingüísticas que el nues-
La Corte Interamericana de Derechos Hu- tro; no obstante, compartimos con
manos en el caso del Tribunal Constitucional otros países de América algunas de
vs. Perú señaló: “De conformidad con la se- las mencionadas familias.
paración de los poderes públicos que existe
en el Estado de Derecho, si bien la función Bajo esta interpretación en la jurisdicción es-
jurisdiccional compete eminentemente al pecial de las comunidades nativas y campesi-
Poder Judicial, otros órganos o autoridades nas, se admite la garantía del debido proceso.
públicas pueden ejercer funciones del mismo Según la categorización de Fix-Zamudio18 se
tipo. Es decir, que cuando la Convención se ha determinado que las denominadas garan-
refiere al derecho de toda persona a ser oída tías de la Administración de Justicia –que en
por un ‘juez o tribunal competente’ para la nuestra Carta Constitucional reciben el nom-
‘determinación de sus derechos’, esta expre- bre de “Principios y Derechos de la Función
sión se refiere a cualquier autoridad pública, Jurisdiccional”–pertenecen al Derecho Consti-
sea administrativa, legislativa o judicial, que a tucional Procesal, esto es, que son normas de
través de sus resoluciones determine derechos naturaleza procesal cotidiana, no solamente
y obligaciones de las personas. Por la razón restringidas a la actividad del proceso judicial
mencionada, esta Corte considera que cual- jurisdiccional, sino a todo proceso, sea este
quier órgano del Estado que ejerza funciones administrativo, municipal, militar, civil, pri-
de carácter materialmente jurisdiccional, tiene vado, universitario; etc. Tales garantías al ser
la obligación de adoptar resoluciones apega- elevadas a rango constitucional son aplicables
das a las garantías del debido proceso legal en no solo a los procesos jurisdiccionales, sino a
todos los procesos que se desarrollen dentro

17 TAMAYO FLORES Ana María, Balance y perspectivas de


la jurisdicción indígena y el derecho consuetudinario a 18 FIX-ZAMUDIO, Héctor, La jurisdicción como función
partir del contexto de vulnerabilidad que enfrentan los esencial del Estado moderno, citado por QUIROGA
pueblos indígenas amazónicos, 1997, Informe N.º 12, LEÓN, Aníbal, La Constitución 10 años después, Fun-
Defensoría del Pueblo, Lima, agosto 1998, p. 193 dación Friedrich Nauman, Lima 1989, p. 291.

184 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
de la sociedad, sea para la determinación o excepción en la Norma Fundamental, su
generación de un derecho subjetivo de los interpretación debe realizarse siempre
ciudadanos, sea para la determinación de tal de modo restrictivo y no extensivo; y,
derecho en conflicto entre el ciudadano y la en segundo lugar, que el Legislador,
autoridad. al organizar la jurisdicción militar, no
puede desconocer aquellos principios
Aragoneses señala que el derecho al debido
constitucionales propios de los órganos
proceso legal no solo tiene aplicación a los
que administran justicia”20.
asuntos judiciales, sino también a todos los
que se desarrollen en el seno de una sociedad b) Arbitral, señalada en el inc. 1 del artículo
y que supongan la aplicación del derecho a 139: “El reconocimiento de la jurisdicción
un caso concreto por parte de la autoridad y arbitral comporta la aplicación a los
del que se deriven consecuencias intersub- tribunales arbitrales de las normas consti-
jetivas, los que deben llevarse a cabo con tucionales y, en particular, de las prescrip-
el cumplimiento de requisitos esenciales de ciones del artículo 139 de la Constitución,
equidad y razonabilidad, que se encuentran relacionadas con los principios y derechos
comprendidos entre la mayor parte de las ga- de la función jurisdiccional. Por ello, el
rantías constitucionales de la Administración Tribunal considera y reitera la protección
de Justicia. Un debido proceso supone, ante de la jurisdicción arbitral, en el ámbito
todo y sobre todo, que el justiciable haya de sus competencias, por el principio de
tenido y podido acceder a un proceso justo “no interferencia” referido en el inciso 2)
y razonable, en donde haya también tenido del artículo constitucional antes citado,
posibilidad cierta de ejercer un derecho de que prevé que ninguna autoridad pue-
defensa razonable19. de avocarse a causas pendientes ante el
órgano jurisdiccional, ni interferir en el
Nuestra Constitución reconoce constitucio- ejercicio de sus funciones. Los tribunales
nalmente los fueros especiales. Entre ellos arbitrales, por consiguiente, dentro del
tenemos: ámbito de su competencia, se encuentran
a) Militar, para ello el Tribunal Constitucio- facultados para desestimar cualquier
nal ha señalado: “[e]l artículo 138 de la intervención y/o injerencia de terceros
Constitución establece que la potestad de –incluida autoridades administrativas
administrar justicia se ejerce por el Poder y/o judiciales– destinadas a avocarse a
Judicial, la excepción hecha a favor de la materias sometidas a arbitraje, en mérito
jurisdicción especializada en lo militar a la existencia de un acuerdo arbitral y la
puede ser entendida como una excepción decisión voluntaria de las partes”21.
al ejercicio de la función jurisdiccional por c) Constitucional, que se encuentra
el Poder Judicial, lo que no implica, como consagrada en el artículo 202 de la
ya se ha visto en los parágrafos prece- Constitución: “Atribuciones del Tribunal
dentes, que la jurisdicción especializada Constitucional.- Corresponde al Tribunal
en lo penal militar pierda su naturaleza Constitucional: 1. Conocer, en instancia
“jurisdiccional” y, como tal, se encuentre única, la acción de inconstitucionalidad.
desvinculada de todos aquellos principios 2. Conocer, en última y definitiva ins-
que rigen la función jurisdiccional. Al tancia, las resoluciones denegatorias de
respecto, deben tenerse en cuenta dos
aspectos de trascendental importancia. 20 Sentencia emitida por el Tribunal Constitucional en el
En primer lugar, por tratarse de una expediente N.º 0004-2006-PI/TC- Fiscal de la Nación
contra el Congreso de la República.
21 Sentencia emitida por el Tribunal Constitucional en
19 ARAGONESES, Pedro, Proceso y derecho procesal, el expediente N.º 6167-2005-PHC/TC-Fernando
Aguilar, Madrid, 1960, p. 34 Cantuarias Salaverry.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 185


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


hábeas corpus, amparo, hábeas data, nes aseguren al justiciable todas las garantías
y acción de cumplimiento. 3. Conocer vinculadas al debido proceso y a la tutela
los conflictos de competencia, o de atri- judicial efectiva, es por ello que el artículo
buciones asignadas por la Constitución, 149 de la Constitución exige una lectura in-
conforme a ley”. tegradora y en armonía con los principios de
unidad de la Constitución: Si realizamos una
primera interpretación sería que las rondas
DEVIS ECHANDIA decía:
campesinas, en primer lugar, para ser tales,
deben surgir y ser parte de las comunidades

La jurisdicción es campesinas y nativas. En consecuencia y vistas
el poder-deber del desde una perspectiva general, forman parte
Estado de realizar de un sistema comunal propio y, en rigor,
esa tarea, la de im- constituyen una forma de autoridad comunal
poner la norma ju- en los lugares o espacios rurales del país en
rídica resolviendo que existen estén o no integradas a comuni-
los casos concretos dades campesinas y nativas preexistentes.23
con el fin de lograr
la paz social mediante la imposición También debemos reconocer que hoy en
del derecho . ” día existe una falta de regulación con res-
pecto a la jurisdiccional de las comunidades
campesinas y nativas que han generado dos
d) De las comunidades campesinas y na- posiciones muy marcadas, la primera: la
tivas, establecida en el artículo 149 de la jurisdicción especial indígena tiene compe-
Constitución que será materia de análisis tencia para conocer todas las materias que
en el presente trabajo de investigación. juzguen conveniente, dentro del ámbito
Esta alternatividad anteriormente descrita no territorial propio (del pueblo indígena/
vulnera el principio de igualdad ante la ley, comunidad) e incluso extraterritorialmen-
previsto en el inciso 2 del artículo 2 de la te, respecto de sus miembros bajo ciertas
Constitución,22 siempre que dichas jurisdiccio- circunstancias. Ni los textos constitucionales
de los países andinos, ni el Convenio 169
22 El Tribunal Constitucional en la sentencia N.º 0606- establecen un límite en cuanto a materias o
2004-AA/TC –Víctor Manuel Otoya Petit, señaló: “El la gravedad de hechos que puede conocer
derecho de igualdad, a su vez, tiene dos dimensiones:
el derecho indígena. La segunda: para la
formal y material. En su dimensión formal, impone
una exigencia al legislador para que este no realice Comisión Andina de Juristas, la actuación
diferencias injustificadas; pero también a la adminis- de la jurisdicción indígena tiene como límite
tración pública y aun a los órganos de la jurisdicción, el respeto de los derechos humanos y los
en el sentido de que la ley no puede aplicarse en
forma desigual frente a supuestos semejantes (igual-
principios mínimos de la ley nacional. Para
dad en la aplicación de la ley). II. En su dimensión ello es necesario una vinculación efectiva
material, el derecho de igualdad supone no solo entre la jurisdicción indígena y el Poder
una exigencia negativa, es decir la abstención de Judicial, lo que obliga a que se especifiquen
tratos discriminatorios; sino, además, una exigencia
positiva por parte del Estado, que se inicia con el sus respectivas competencias materiales, sus
reconocimiento de la insuficiencia de los mandatos ámbitos de aplicación territorial y personal,
prohibitivos de discriminación y la necesidad de
equiparar situaciones, per se, desiguales. Tratar igual
a los iguales y desigual a los desiguales, pues, no se son constitucionalmente admisibles, lo que deberá
traduce en el derecho a ser objeto del mismo trato, de analizarse en cada caso concreto conforme al test
con independencia del contexto o las circunstancias de razonabilidad y proporcionalidad”.
en las que un sujeto se encuentre, sino a que se realice 23 YRIGOYEN FAJARDO, Raquel, “Rondas campesinas
un tratamiento diferenciado si es que dos sujetos y pluralismo legal: Necesidad de reconocimiento
no se encuentran en una situación igual. Por tanto, constitucional y desarrollo legislativo”. Versión digital
el problema es determinar qué tratos diferenciados disponible en: <bit.ly/1sgHhBQ>.

186 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
así como la estrecha coordinación entre neros durante la noche, mientras estos
ambas24. descansan. El autor resalta que la ayuda
mutua no es el único factor que conforma
Las Rondas Campesinas han asumido diversos
y mantiene a las rondas27.
roles en el quehacer de esos pueblos tales
como seguridad y desarrollo y, entre ellos, c) Cohesión interna: Las rondas se caracte-
también se encuentra, sin duda alguna, los vin- rizan por una fuerte cohesión basada en
culados al control penal en tanto –presupuesto la existencia de necesidades comunes y a
necesario para su relevancia jurídica– aplican la disciplina férrea. La identidad local de
las normas del derecho consuetudinario que grupo es un mecanismo de autocontrol
les corresponda y expresen su identidad cul- interno. Además, las reglas o normas
tural. Son una respuesta comunal, entre otras incumplidas se sancionan con bastante
expresiones socioculturales, ante el problema drasticidad.
de la falta de acceso a la justicia, que es un d) Identidad rondera: Para Yrigoyen, las
derecho fundamental procesal que integra el rondas han logrado redefinir las iden-
núcleo duro de los derechos fundamentales. tidades de sus miembros a partir del
Según algunos científicos sociales, la justicia fomento de la participación universal, su
que aplican puede definirse como “reconci- eficacia en la administración de justicia y
liadora” y ejercen mecanismos tradicionales la recreación de valores locales comunes.
de resolución de conflictos25. Esta recreación o reinvención de la identi-
Veamos algunas características de las Rondas dad se basa en elementos andinos típicos
Campesinas: como la reciprocidad y la importancia de
los lazos familiares y comunitarios28.
a) La democracia: Algunos trabajos de in-
El término justicia comunitaria debe ser
vestigación han señalado que las rondas
entendido, como el más utilizado en el estu-
campesinas son un ejemplo de democra-
dio de espacios campesinos rurales. Molina
cia de base, porque la participación de la
señala que este término tiene la ventaja de
población es universal. Gitlitz afirma que
remitir no solo a las instituciones y prácticas
en un Estado centralista como el Perú,
de resoluciones de conflictos, sino también a
han conseguido un espacio para la acción
los contextos socioculturales que los definen,
autónoma, motivando una pequeña y
haciendo referencia fundamentalmente a la
efectiva descentralización del poder26.
especificidad de la organización sociopolítica
b) Ayuda mutua: La necesidad de mejorar comunitaria29.
la situación originada en la ausencia
del Estado, llevó a los campesinos de la En el Acuerdo Plenario 01-2009, se recoge la
sierra norte a relacionarse sobre la base posición de la Corte Constitucional de Colom-
de la ayuda mutua. El principal ejemplo, bia (Sentencia T-552/03, del 10 de julio de
lo constituye la actividad de rondar. En 2003), que señala los elementos para identi-
ella, un grupo de ronderos cuida y vigila ficar la jurisdicción especial comunal-ronderil:
los bienes de la tierra de los otros comu- a) Elemento humano. Existencia de un gru-
po diferenciable por su origen étnico o
24 FRANCO VALDIVIA, Rocío y María Alejandra GON-
ZALES LUNA, Las mujeres en la justicia comunitaria: 27 GITLITZ, “Rondas campesinas y violencia”, cit., p. 63
Víctimas, sujetos y actores, IDL, Lima, 2009, pp. 28-29 28 HAN-JÜRGEN, Branndt y Rocío FRANCO VALDIVIA,
25 GITLITZ, John, “Rondas campesinas y violencia”, en El tratamiento de conflictos. Un estudio de actas en 133
Justicia y violencia en las zonas rurales, IDL, Lima, 2003, comunidades, 2.ª ed., IDL, Lima, 2008, p. 93.
p. 146. 29 MOLINA RIVERO, Ramiro, El derecho consuetudinario
26 GITLITZ, John, “Decadencia y supervivencia de las en Bolivia. Justicia comunitaria N.º 9, una propuesta de
rondas campesinas del norte del Perú”, en Debate ley reconocimiento de la justicia comunitaria, Ministerio
Agrario, N.° 28, 1998, p. 29. de Justicia y Desarrollo, La Paz, 1999, p. 36.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 187


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


cultural y por la persistencia diferenciada de la función jurisdiccional especial comunal-
de su identidad cultural. Como ha queda- ronderil”.
do expuesto en los párrafos anteriores, las En este nivel del examen del caso es de tener
Rondas Campesinas tienen este atributo en cuenta que los patrones o elementos cul-
sociocultural. turales presentes en la conducta del rondero
b) Elemento orgánico. Existencia de auto- tienen entidad para afectar el lado subjetivo
ridades tradicionales que ejerzan una del delito, vale decir, la configuración del in-
función de control social en sus comu- justo penal y/o su atribución o culpabilidad,
nidades. Las rondas campesinas, preci- al punto que pueden determinar –si corres-
samente, es esa organización comunal pondiere- (i) la impunidad del rondero, (ii) la
que, entre otras múltiples funciones, atenuación de la pena, o (iii) ser irrelevantes.
asume funciones jurisdiccionales para la
El agente, entonces, como consecuencia de
solución de los conflictos. Ellas cuentan
su patrón cultural rondero puede actuar (i)
con la necesaria organización, con el
sin dolo –error de tipo- al no serle exigible
reconocimiento comunitario y con la
el conocimiento sobre el riesgo para el bien
capacidad de control social.
jurídico; (ii) por error de prohibición porque
c) Elemento normativo. Existencia de un desconoce la ilicitud de su comportamiento,
sistema jurídico propio, de un derecho esto es, la existencia o el alcance de la norma
consuetudinario que comprenda normas permisiva o prohibitiva; o (iii) sin comprender
tradicionales tanto materiales como pro- la ilicitud del comportamiento ejecutado o sin
cesales, y que serán aplicadas por las au- tener la capacidad de comportarse de acuerdo
toridades de las rondas campesinas. Esas a aquella comprensión.30
normas, en todo caso y como perspectiva
central de su aceptabilidad jurídica, han 5. Posición asumida por la Corte
de tener como fundamento y límite la Suprema de Justicia en los di-
protección de la cultura comunitaria, ferentes delitos efectuados por
asegurar su mantenimiento y prevenir
las comunidades campesinas y
las amenazas a su supervivencia.
nativas
d) Elemento geográfico. Las funciones
La soberanía jurisdiccional no significa mono-
jurisdiccionales, que determinan la
polio o exclusividad del Poder Judicial en la
aplicación de la norma tradicional, se
impartición de justicia en nombre del pueblo;
ejercen dentro del ámbito territorial de
sino más bien pluralidad de administracio-
la respectiva ronda campesina. El lugar
nes de justicia autónomas en función de su
de comisión del hecho, determinante especialidad, pero subordinadas en última
de la aplicación de la norma tradicio- instancia al principio de unidad y supremacía
nal, es esencial para el reconocimiento constitucional, en un Estado de Derecho.
constitucional de la respectiva función
jurisdiccional de la ronda campesina: las Es por ello que conforme lo estipula el ar-
conductas juzgadas han de ocurrir en el tículo 1 de la Ley N.º 27908, como en su
territorio de esta. reglamentación a través del Decreto Supremo
N.º 25-2003-JUS, del 30.12.2003, se ratifica
Además, el Acuerdo Plenario indica: “A estos
las funciones de seguridad de las rondas
elementos se une el denominado factor de
campesinas dentro de su ámbito territorial y
congruencia. El derecho consuetudinario
precisa que estas últimas apoyan el ejercicio
que debe aplicar las Rondas Campesinas no
puede vulnerar los derechos fundamentales
30 MEINI Iván, “Inimputabilidad penal por diversidad
de la persona. Se trata de una condición de cultural” en Imputación y responsabilidad penal, Ara
legitimidad y límite material para el ejercicio Editores, Lima, 2009, pp. 69-70.

188 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
de funciones jurisdiccionales de las comuni- no antijurídica por concurrir una causa de
dades campesinas y nativas, y colaboran con exclusión de la antijuricidad, que convierte
la solución de conflictos. el hecho típico, en un acto totalmente licito
y aprobado por el ordenamiento jurídico”32.

GITLITZ dice: En el Recurso de Nulidad 975-2004-San


Martín, se resolvió de la siguiente manera:
“La conducta de los procesados o reviste el
“tralista
Un Estado cen- carácter doloso que requiere el tipo penal de
como el secuestro, dado que su actuar se encuentra
Perú, han conse- normado y regulado por el artículo 149 de
guido un espacio la Constitución”33.
para la acción au-
tónoma, motivan- En el año de 1996, la Corte Superior de Piura
do una pequeña y absolvió a 10 ronderos acusados de secuestro
efectiva descentra- y a 1 de extorsión, por considerar que las
lización del poder . ” conductas imputadas se habían realizado
en el ejercicio de sus funciones de seguridad
comunal. Ante el recurso de nulidad que se
Al respecto, Luis Pasara señala: “Todavía es
presentó, el fiscal supremo en lo penal opinó
posible reformar verdaderamente la justicia,
(Dictamen N.º 4416-97-MP-FN-2ºFSP, en la
siempre y cuando se cumplan cuatro condicio-
instrucción N.º 910-66) que debía “tenerse
nes: (i) Una definición clara acerca del papel
en cuenta que la captura efectuada por los
del Estado en materia de justicia, (ii) una
ronderos acusados se encuentra amparada
solución de fondo para escasez de recursos
en la Constitución en su artículo 149 (...)”,
humanos, (iii) un encaramiento realista del
por lo que concluyó que no había nulidad
asunto que permita ofrecer metas y resultados
en la sentencia absolutoria. El 11 de mayo
alcanzables, y (iv) una estrategia del proceso
de 1998, la Corte Suprema, de conformidad
que construya consensos y alianzas”31.
con lo dictaminado por el fiscal, declaró no
Veamos algunas sentencias de la Corte haber nulidad de la resolución impugnada
Suprema para tener una idea de cuál es su (Expediente N.º 5622-97).
posición asumida. En el Recurso de Nulidad
Poco antes, en la resolución del 9 de marzo
847-2004-Lima, se resolvió lo siguiente:
de 1998, al resolver el Recurso de Nulidad
“Los encausados miembros de la comunidad
4382-97, la Corte Suprema concordó la ley
campesina de ‘autodefensa’ la posibilidad de
con el mencionado artículo 149 de la Cons-
detener personas, conforme se advierte del
titución, en cuanto indicaba que las rondas
acápite q) del artículo 19 del reglamento de
campesinas “tienen facultades de defensa
organizaciones y funciones de los comités de
y cooperación frente al delito común”, y
autodefensa, apreciándose que los agraviados
confirmó la sentencia recurrida en cuanto
fueron puestos a disposición de la autoridad
absolvía a 4 ronderos de los delitos de se-
policial, puestos que estos habían efectuado
cuestro y lesiones, así como la nulidad de la
disparos y construidos una choza en Tunga-
misma sentencia en cuanto los condenaba
suca distrito de Túpac Amaru, lo que motivo
por coacción, disponiendo su reforma y la
su detención, pues lo comuneros creyeron
consiguiente absolución.
que iban ha tomar posesión de sus tierras,
por tanto la conducta resulta ser típica, pero
32 CARO JOHN, José Antonio, Diccionario de jurispruden-
31 PASARA Luis, “Lecciones ¿aprendidas o por apren- cia penal, Grijley, Lima, 2007, p. 108.
der?”, Del mismo autor (Comp.) En busca de una 33 CARO JOHN, Diccionario de jurisprudencia penal, cit.,
justicia distinta, Consorcio Justicia Viva, Lima, 2004. p. 612.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 189


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


Pero es la sentencia del 9 de junio de 2004 de sexual y asesinato que se habrían cometido
la Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema en sus territorios, decidieron sancionarlos de
de Justicia, que resuelve el Recurso de Nulidad acuerdo a sus costumbres, condenándolos a
N.° 975-2004, la que abre el camino al reco- ‘cadena ronderil’, esto es, pasarlos de una
nocimiento definitivo de la justicia comunal ronda a otra a efectos de que sean reconocidos
por la institucionalidad estatal. Esta sentencia por sus habitantes y además presten trabajo
había sido precedida por un dictamen de la gratuito a favor de las respectivas comuni-
Primera Fiscalía Suprema en lo Penal que con- dades.” Por ende, “su actuar se encuentra
cluía en la nulidad de la sentencia condenato- normado y regulado por el artículo ciento
ria de 11 miembros de las rondas campesinas cuarenta y nueve de la Constitución Política
de los caseríos de Pueblo Libre y Santa Rosa, del Perú...”. En consecuencia, la Sala aplica
en Moyobamba. El fiscal había considerado al caso el inciso 8) del artículo 20 del Código
que en la sentencia de la Corte Superior no Penal, que señala la exención de responsabili-
se encontraba un juicio razonado de los me- dad penal de quienes actúen “por disposición
dios probatorios y de responsabilidad de los de la ley, en cumplimiento de un deber o en
inculpados, violándose el deber prescrito en el ejercicio legítimo de un derecho, oficio o
el inciso 5) del artículo 139 de la Constitución, cargo”. Y, por lo tanto, absuelve a todos los
desarrollado en el artículo 285 del Código de encausados por los delitos de secuestro, usur-
Procedimientos Penales. pación de funciones y violencia, y resistencia
a la autoridad.
Las diversas Salas Penales de este Supremo
Tribunal en numerosas ocasiones se han De este modo, la Corte Suprema ha acogido
pronunciado sobre los puntos objeto de con- una interpretación extensiva del artículo 149
troversia, pero han utilizado diversos niveles de la Constitución, para incluir a las rondas
de razonamiento y sustentado sus decisiones campesinas en su supuesto de hecho, lo que
en variadas perspectivas jurídicas, y funda- en la práctica implica, de un lado, la descri-
mentos dogmáticos, a veces con resultados minalización de los ronderos por los actos que
contradictorios. Constituyen una muestra realicen en cuanto responsables de la justicia
de lo expuesto, entre otras, las Ejecutorias en sus comunidades, y de otro, la exigencia a
Supremas N.º 1722-2009/La Libertad, del los operadores policiales, fiscales y judiciales
7 de julio de 2009; 5124-2008/Lambaye- de coordinar con las autoridades comunales
que, del 31 de marzo de 2009; 5184-2008/ para la realización de los fines comunes de jus-
Lambayeque, del 31 de marzo de 2009; ticia al que apuntan tanto la justicia comunal
625-2008/Amazonas, del 21 de abril de como la justicia común35.
2008; 4000-2007/Huara, del 14 de marzo de
2008; 1836-2006/Amazonas, del 4 de julio 6. Conclusiones
de 2006; 752-2006/Puno, del 17 de mayo
- La interpretación del artículo 149 de la
de 2006; 2164-2005/Cajamarca, del 26 de
Constitución exige una lectura integra-
abril de 2006; 975-2004/San Martín, del 9
dora y en armonía con los principios de
de junio de 2004; 975-2004/San Martín, del
unidad de la Constitución, es decir, las
9 de junio de 2004; y 4160-96/Ancash, del
rondas campesinas, en primer lugar, para
7 de noviembre de 199734.
ser tales, deben surgir y ser parte de las
Asimismo, la Corte Suprema consideró que los comunidades campesinas y nativas. En
ronderos procesados, “teniendo conocimiento consecuencia y vistas desde una perspec-
que los presuntos agraviados admitieron ser tiva general, forman parte de un sistema
los autores de los delitos de robo, violación
35 Defensoría del Pueblo, El reconocimiento estatal de las
34 Casos tomados del Acuerdo Plenario Nº 01-2009-CJ rondas campesinas. Normas y jurisprudencias, 2.ª ed.,
–116-Rondas Campesinas y el Derecho Penal. Defensoría del Pueblo, Lima, 2006, p. 17.

190 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Doctrina práctica
comunal propio y, en rigor, constituyen 9.2 de la Convención, que exige a los
una forma de autoridad comunal en los tribunales penales tener en cuenta las
lugares o espacios rurales del país en que costumbres de los pueblos indígenas y
existen, estén o no integradas a comuni- el contexto sociocultural del imputado.
dades campesinas y nativas preexistentes. - No existe una definición precisa de
“pueblos indígenas” en el derecho
CONCLUSIÓN MÁS IMPORTANTE internacional, y la posición prevale-
ciente indica que dicha definición no es
Comprobada la existencia del he- necesaria para efectos de proteger sus
cho punible y la responsabilidad derechos humanos, dada la inmensa
del acusado, el juez penal para me- diversidad de los pueblos indígenas de
dir la pena tendrá en cuenta, de un las Américas y del resto del mundo. Estas
lado, los artículos 45.2 y 46.8 y 11 diferentes denominaciones no podemos
CP compatibles con el artículo 9.2 interpretarlas como un numerus clausus,
de la Convención, que exige a los sino como un número apertus, ya que la
tribunales penales tener en cuenta Constitución reconoce la existencia legal
las costumbres de los pueblos indí- de las comunidades campesinas y nativas,
genas, el contexto sociocultural del exigiendo también el reconocimiento de
imputado. la existencia de poblaciones afroperuanas
y de otras tradicionalmente arraigadas en
- Cuando no sea posible determinar la el Perú.
atipicidad de la conducta del presunto - Se considerara como conductas que
autor del delito, será del caso recurrir al atentan contra el contenido esencial de
análisis de la procedencia de la causa de los derechos fundamentales y están al
justificación centrada, con mayor relevan- margen de la protección del derecho con-
cia, en el ejercicio legítimo de un derecho suetudinario: las privaciones de libertad
(artículo 20.8 CP), tomándose en cuenta sin causa y motivo razonable plenamen-
el presupuesto de situación de amenaza te arbitrarias, y al margen del control
a los bienes jurídicos antes citados y los típicamente ronderil; las agresiones irra-
límites o condiciones para el correcto zonables o injustificadas a las personas
ejercicio de la función jurisdiccional cuando son intervenidas o detenidas por
comunal-rondera ya analizados. los ronderos; la violencia, amenazas o
- Comprobada la existencia del hecho pu- humillaciones para que declaren en uno
nible y la responsabilidad del acusado, el u otro sentido; los juzgamientos sin un
juez penal para medir la pena tendrá en mínimo de posibilidades para ejercer la
cuenta, de un lado, los artículos 45.2 y defensa, lo que equivale, prácticamente,
46.8 y 11 CP compatibles con el artículo a un linchamiento.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 191


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

ANÁLISIS JURISPRUDENCIAL
Análisis jurisprudencial

Un enfoque jurisprudencial comparado sobre


la legalidad de los audios grabados por un
interlocutor en el proceso penal
Carlos Jorge Cabrera Carcovich*
Fiscal Adjunto Superior Anticorrupción de Lima Sur

1. Introducción
SUMARIO

2. Doctrina comparada
3. Prueba ilícita
4. Jurisprudencia comparada
5. Jurisprudencia nacional
6. Conclusiones

1. Introducción Derecho Procesal de la Universidad de Va-


En el presente artículo nos avocaremos a lencia y magistrado del Tribunal Superior de
desarrollar la situación legal de los audios Justicia de la Comunidad Valenciana, señala al
grabados por un interlocutor en el proceso respecto: “Que el supuesto de que uno de los
penal, teniendo como base los criterios que intervinientes en una comunicación telefónica
sobre esta materia han señalado las diferentes proceda a grabar la conversación mantenida y
judicaturas a nivel nacional como comparada, que del soporte físico de la misma lo presente
precisando en cada una de ellas sus funda- después en un proceso laboral, fue el estudia-
mentos. Y es que, a nuestro entender, poco do en la STC 114/1984 del 29 de noviembre,
se ha dicho sobre la validez de los audios que en la que concluyó que esta grabación no es
contienen conductas ilícitas grabadas por un contraria al derecho (...). La grabación por
interlocutor, pues algunos con total desconoci- uno de los comunicantes no afecta el secreto
miento, señalan desde ya su invalidez procesal de las comunicaciones y, desde luego no
por considerarla prueba prohibida, aduciendo guarda relación con la intervención realizada
que esta debe realizarse con autorización del por resolución judicial en el proceso penal
juez penal. en marcha”1.
En esa línea, el profesor José María Asencio
2. Doctrina comparada Mellado, catedrático de Derecho Procesal de
Así, en la doctrina comparada española, el la Universidad de Alicante - España, advierte
profesor Juan Montero Aroca, catedrático de además que el derecho al secreto de las comu-
nicaciones es aquel que contiene un concepto
* El autor también es abogado por la Universidad Parti- eminentemente formal u objetivo que viene
cular San Martín de Porres, egresado de la Maestría en
Derecho Penal y doctorado de la Universidad Nacional
Federico Villarreal. Contando con estudios concluidos 1 MONTERO AROCA, Juan, La intervención de las comu-
de posgrado en la Pontificia Universidad Católica del nicaciones en el proceso penal. Un estudio jurisprudencial,
Perú en “Formación Magisterial”. Tirant lo blanch, Valencia, 1999, pp. 23-24.

192 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Análisis jurisprudencial
a tutelar a los comunicantes frente a cual-
quier injerencia de terceros en su ámbito de RESUMEN
libertad. Es aquí donde reside precisamente
el núcleo esencial de este derecho, en la no El autor realiza un análisis de la prueba
intromisión de terceros2. ilícita, desde una perspectiva jurispruden-
cial comparada, para lo cual se sirve de los
Para el profesor Carlos Climent Durán, en estos pronunciamientos emitidos por los órganos
casos no es preciso una previa autorización jurisdiccionales europeos y latinoamericanos,
judicial, como sin duda es preceptivo en el incluyendo las recientes resoluciones del
caso que se trate de interceptar la conversa- subsistema anticorrupción nacional. Dicho
análisis toma como arista central la validez de
ción telefónica mantenida entre dos personas las grabaciones de conversaciones realizada
ajenas a quien realiza tal interceptación, ya por uno de los interlocutores, asumiendo el
que, cuando se graba la conversación en la autor que no se está ante un supuesto de ilici-
que interviene personalmente quien realiza tud probatoria, dado que no existe un deber
tal interceptación, no resulta vulnerando el de secreto para las personas que recepcionan
una comunicación, cuyo destinatario es ella
derecho fundamental al secreto de las comu- misma, puesto que el contenido formal del
nicaciones3. secreto de las comunicaciones se hace valer
respecto de terceros. En el análisis, también se
También, el profesor de la Universidad Nacio- menciona que el uso de las grabaciones reali-
nal de Rosario-Argentina, Carlos Alberto Car- zada por uno de los interlocutores no afecta
bone señala: “El requisito de la orden judicial el derecho a la no autoincriminación, dado
podría penar las grabaciones obtenidas por que esta garantía es oponible a los funciones
particulares fueran ilícitas. Nada más alejado públicos bajo un conducto causal dentro
de una investigación. Así, concluye que la
de la verdad. Como ya lo puntualizamos prohibición de grabar conversaciones cuando
en nuestra anterior obra donde analizamos la persona que graba forma parte, pondría
la jurisprudencia (...) apoyamos la doctrina en riesgo la imposibilidad de perennizar el
mayoritaria que rescataba la eficacia de estas hecho ilícito del cual se toma conocimiento
grabaciones obtenidas por particulares por no dentro de la comunicación.
violar en absoluto las previsiones comentadas
del artículo 18 de la Constitución Nacional, CONTEXTO NORMATIVO
sobre todo porque en nuestras leyes no hay
secreto alguno de lo divulgado entre los • Constitución Política: Artículos 2.10 y 3.
contertulios, ni considerarse que el imputado
futuro pueda estar confesando en términos PALABRAS CLAVE
judiciales al ser grabado sin consentimiento
por su interlocutor”4. Prueba ilícita / Prueba irregular / Teoría del
riesgo / Secreto de las comunicaciones
En tal sentido, no hay un deber de secreto
para aquel a quien la comunicación se dirige,
y que es quien graba o permite la escucha; la retención por cualquier medio del conte-
tampoco implica contravención de lo dis- nido del mensaje. El contenido formal del
puesto en el artículo 2.10 de la Constitución secreto de las comunicaciones implica que
solo puede hacerse valer respecto de terceros
2 MARÍA ASENCIO MELLADO, José, La prueba prohibida en la comunicación, esto es, que los terceros
y prueba preconstituida en el proceso penal, Fondo ajenos a la comunicación, están prohibidos
Editorial INPECCP, 2008, p. 157. de escucharla, almacenarla o difundirla, sin
3 CLIMENT DURANT, Carlos, La prueba penal, Tirant lo consentimiento de alguno de los interlocuto-
blanch, Valencia, 2005, T. II, pp. 1946-1947.
4 CARBONE, Carlos Alberto, Requisitos constitucionales de
res. La norma constitucional no prohíbe que
las intervenciones telefónicas, Rubinzal-Culzoni, Buenos el participante de la comunicación capte,
Aires, 2008, p. 103. divulgue su contenido o permita la escucha,

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 193


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


porque él es el destinatario de la conversación, de límites constitucionales que sólo restringen
salvo que el contenido de esta revele informa- las facultades persecutorias de los órganos
ción sobre la vida íntima de los interlocutores públicos. Como veremos, son otros derechos
que no sabían que estaban siendo grabados5. fundamentales los que podrían ser invocados
para impugnar la validez de los medios de
prueba obtenidos por los particulares con
¿SABÍA USTED QUE? anterioridad al inicio de la persecución”7.
En nuestra apreciación se colige entonces con
No hay un deber de secreto para
aquel a quien la comunicación se absoluta claridad que la captación de conver-
dirige, y que es quien graba o per- saciones por uno de los interlocutores es válida
mite la escucha; tampoco implica en el proceso penal, si de lo que se trata es
contravención de lo dispuesto en el grabar de un acto ilícito, pues en suma lo que
artículo 2.10 de la Constitución la se está haciendo es perennizar este hecho a
retención por cualquier medio del través de un medio técnico de audio o fílmico
contenido del mensaje. por el propio interlocutor, que más tarde ren-
dirá su propio testimonio ante la judicatura,
precisando que no encontramos argumentos
Quien mantiene un diálogo con otra persona,
razonables y lógicos que quien está siendo
por cualquier medio de comunicación que
objeto y víctima de un hecho ilícito o presen-
fuere, confesando sus actividades delictivas,
ciando este, tenga que recurrir previamente a
se expone libre y voluntariamente a que su
la judicatura a solicitar autorización a efectos de
interlocutor pueda luego delatarlo, de esta
poder perennizar el hecho ilegal a través de un
manera asume el riesgo, renunciando de este
medio técnico, perdiendo además, la oportu-
modo a una “razonable expectativa de pri-
nidad de grabarlo en el momento mismo que
vacidad. Lo anterior no cambia por el hecho
ocurre el hecho delictivo, más allá del debido
que el interlocutor además de escucharlo,
y correcto respeto al ámbito privado e íntimo
personalmente esté grabando o filmando el
de las personas, que no es el caso cuando
diálogo; la resignación a la que se expone el
dichas conductas son ilegales o contrarias a
delincuente, legitima esta subrepticia forma
la ley. Que en concreto, el derecho al secreto
de adquisición probatoria”6.
de las comunicaciones tiende a tutelar a los
Por otro lado, es necesario precisar que dichas comunicantes frente a cualquier injerencia de
grabaciones realizadas por un interlocutor terceros, mas no de uno de los interlocutores
tampoco afectarían el derecho a la no incrimi- que graba hechos o conductas punibles.
nación, pues esta no opera entre particulares,
sino ante funcionarios públicos que tengan 3. Prueba ilícita
un nexo de causalidad con la investigación.
La teoría de la prueba ilícita es quizás una
De esta opinión son también Bovino y Pinto,
de las materias más arduas en el campo de
quienes consideran que: “Las reglas de ga-
la dogmática penal, pero también una de las
rantía de rango constitucional, tales como el
más interesantes, pues implica claros alcances
derecho de defensa, la prohibición de obligar
constitucionales, dado que “todo deriva de la
al imputado a declarar contra sí mismo, no
son oponibles a los particulares, pues se trata
7 BOVINO, Alberto y Federico PINTO, “La prueba
5 VILLEGAS PAIVA, Elky Alexander, “La regla de ex- preconstituida por particulares. Su incorporación y
clusión de la prueba ilícita: fundamento, efectos y valoración en el procedimiento penal”, en PLAZAS,
excepciones”, en Revista Gaceta Penal & Procesal Penal, Florencia y Luciano HAZAN (Comps.), Garantías cons-
Gaceta Jurídica, Lima, T. 26, p. 191. titucionales en la investigación penal. Un estudio crítico
6 JAUCHEN, Eduardo, Tratado de la prueba en materia de la jurisprudencia, Editores del Puerto, Buenos Aires,
penal, Rubinzal –Culzoni, Buenos Aires, 2004, p. 217. 2006, pp. 280-281.

194 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Análisis jurisprudencial
Constitución y todo ha de legitimarse por su literalmente como tales en el Capítulo antes
concordancia directa o indirecta”8. referido, desde que la propia Constitución, en
su artículo 3, establece que la enumeración
El Tribunal Constitucional peruano definió el
de los derechos del Capítulo I, no excluye los
concepto de prueba ilícita de este modo “una
demás que la Constitución garantiza, ni otros
prueba será considerada prohibida cuando se
de naturaleza análoga o que se deriven de
obtenga con violación directa o indirectamen-
la dignidad humana, del Estado de Derecho,
te de algún derecho fundamental mas no de
entre otros11.
los de rango legal o infralegal”9.
En resumen, por prueba ilícita ha de entender-
Como se puede advertir, nuestro máximo in-
se a la obtenida por violación a los derechos
térprete de la Constitución, asume un criterio
fundamentales, no siendo este concepto
sincrético o restringido de prueba prohibida
extensible a otro tipo de infracciones que
al señalar que una prueba será considerada
pudieran cometerse tanto de derechos no
prohibida cuando se obtenga por violación
fundamentales, como de otras normas de
directa o indirecta de algún derecho funda-
procedimiento12. Por el contrario, prueba
mental, a la diferencia de la llamada prueba
irregular sería aquella obtenida, propuesta o
irregular, que es aquella obtenida o practicada
practicada con infracción de la normativa pro-
con infracción de la normativa legal ordinaria
cesal que regula el procedimiento probatorio,
sin afectación de los derechos fundamentales.
pero sin afectación nuclear de los derechos
En ese sentido, también el maestro de Dere- fundamentales13.
cho Procesal de la Universidad de Barcelona
Manuel Miranda Estrampes señaló: “Por 4. Jurisprudencia comparada
prueba ilícita debe entenderse aquella prueba
obtenida y/o practicada con vulneración a En la jurisprudencia comparada encontramos
los derechos fundamentales. Por el contrario claros ejemplos sobre la validez de audios
prueba irregular sería aquella obtenida, pro- grabados por un interlocutor en el proceso
puesta o practicada con infracción a la nor- penal. La Corte Suprema colombiana en la
mativa procesal que regula el procedimiento sentencia de fecha 22 de octubre de 1996,
probatorio pero sin afectación nuclear de los señaló: “Mal podría esgrimirse impedimento
derechos fundamentales”10. alguno o exigir autorización judicial para
que las personas graben su propia voz o su
En consecuencia, puede afirmarse que, en imagen, o intercepten sus líneas telefónicas,
principio, los derechos fundamentales que son si estas actividades no se hallan expresamente
susceptibles de ser lesionados por la prueba prohibidas. Este acervo resulta avalado si se
ilícita son aquellos que bajo el epígrafe “De- tiene en cuenta que quien así actúa es pre-
rechos fundamentales de la persona”, están cisamente el afectado con la conducta ilícita,
consagrados en el Capítulo I del Título I de la y por ende, eventualmente vulneradora de
Constitución Política del Estado. Es necesario sus derechos fundamentales, por lo que su
precisar, sin embargo, que no sería correcto
circunscribir estrictamente el concepto de de-
rechos fundamentales a los que están previstos
11 CASTRO TRIGOSO, Hamilton, Criterios para la deter-
minación de la prueba ilícita en la jurisprudencia penal
8 Tomado de RUBIO CORREA, Marcial, La interpretación peruana, Tesis para optar el título de magíster, p. 66.
de la Constitución según el Tribunal Constitucional, Fondo 12 ASENCIO MELLADO, José María, Dictamen acerca de
Editorial PUCP, Lima, 2005, p. 37. la eficacia y valor probatorio de las grabaciones en
9 STC Exp N.° 00655-2010-PH/TC (Caso Quimper audio y video halladas en el domicilio de Vladimiro
Herrera). Montesinos en el mes de noviembre de 2000, de
10 MIRANDA ESTRAMPES, Manuel, “La prueba ilícita: fecha 23 de agosto de 2001, p. 7.
La regla de exclusión” en Revista catalana de seguretat 13 MIRANDA ESTRAMPES, “La prueba ilícita: La regla
pública, Barcelona, mayo 2010, p. 133. de exclusión”, cit., p. 133.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 195


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


proceder se constituye en un natural reflejo pertinentes. Esto por cuanto quien graba es
defensivo”14. el destinatario de la llamada”16.
De igual modo la sentencia de la Corte Supre- Ahora bien, en la jurisprudencia comparada
ma de Justicia Colombiana, sentencia del 16 española encontramos la Sentencia del Tribu-
de marzo de 1988, sobre grabaciones magne- nal Supremo español 730/1995, del 30 de
tofónicas señala: “Lo mismo ocurre respecto mayo de 1995 (RJ 1995,4506), referida a la
de las grabaciones magnetofónicas, es decir, grabación de la conversación de un particular
que nadie puede sustraer, ocultar, extraviar, o con un funcionario, sostiene al respecto que:
destruir una cinta magnetofónica o intercep- “no puede admitirse la equiparación entre la
tar o impedir una comunicación telefónica, grabación, que fue obtenida por una persona
sin autorización de autoridad competente. cuando conversaba con otra por medio de
Pero, cuando una persona, como en el caso una grabadora que llevaba oculta, y aquellas
concreto, es víctima de un hecho punible y va- otras que se consignen tras una autorización
liéndose de los adelantos científicos, procede judicial de intervención telefónica. Estas
a preconstituir la prueba del delito, para ello últimas tienen un carácter oficial y público
de modo alguno necesita de autorización de por la intervención de una autoridad y unos
autoridad competente, precisamente porque funcionarios en el ejercicio de sus respectivos
con base en ese documento puede promover cargos para obtener lo que luego puede con-
las acciones pertinentes. Esto por cuanto quien vertirse en un medio de investigación o en
graba es el destinatario de la llamada”15. una auténtica prueba para el acto del juicio
oral. Sin embargo, la primera grabación tiene
La Corte Suprema colombiana considera que
carácter privado, tanto la cinta original como
no es ilícita la grabación por uno de los interlo-
las posteriores copias que pudieran existir,
cutores con base a los siguientes puntos: “Hay
de modo que el problema queda reducido
que distinguir cuando esa aparente violación
(...). Para esta grabación no es necesaria la
proviene de los que intervinieron en la con-
autorización judicial”17.
versación o en la comunicación, o si proviene
de un tercero. Censurable esta última, mas no De igual modo, la Segunda Sala del Tribu-
cuando proviene del emitente y destinatario. nal Constitucional español en la Sentencia
En el caso que nos ocupa la grabación fue 114/1984 del 29 de noviembre de 1984.
entregada por el oficial emitente y a la vez Sea cual sea el ámbito objetivo del concepto
destinatario”. Y que cuando una persona es de “comunicación” la norma constitucional
víctima de un delito, puede hacer las graba- se dirige inequívocamente a garantizar su
ciones; en efecto señala: “Pero, cuando una impenetrabilidad por terceros (públicos o
persona, como en el caso concreto, es víctima privados: el derecho posee eficacia erga
de un hecho punible y valiéndose de los ade- onmes) ajenos a la comunicación misma. La
lantos científicos, procede a preconstituir la presencia de un elemento ajeno a aquellos
prueba del delito, para ello de modo alguno en los que media el proceso de comunica-
necesita de autorización de autoridad com- ción, es indispensable para configurar el
petente, precisamente porque con base en ilícito constitucional aquí perfilado. No hay
ese documento puede promover las acciones secreto para aquel a quien la comunicación
se dirige. (...) “Como conclusión, pues, debe
afirmarse que no constituye contravención

14 PARRA QUIJANO, Jairo, Manual de derecho probatorio,


13.ª ed., Ediciones librería del profesional, Medellín, 16 PARRA QUIJANO, Jairo, Manual de derecho probatorio,
2002, p. 47. cit., p. 36.
15 Sentencia de la Corte Suprema de Justicia de Co- 17 DE URBANO CASTRILLO, Eduardo y Miguel Ángel
lombia, sentencia del 16 de marzo de 1988, sobre TORRES MORATO, La prueba ilícita penal, Aranzadi,
grabaciones magnetofónicas. Navarra, 2012, p. 247.

196 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Análisis jurisprudencial
alguna del secreto de las comunicaciones la de noviembre de 1994 y lo reiteró el Tribunal
conducta del interlocutor en la conversación Supremo en las suyas del 11 de mayo de 1994
que graba ésta (que graba también, por lo y 30 de mayo de 1995”.
tanto, sus propias manifestaciones perso-
nales, como advierte el Ministerio Fiscal en
su escrito de alegaciones)”. Así también lo IMPORTANTE
sostiene la sentencia del Tribunal Supremo
español 1215/1994, del 29 de septiembre: Quien mantiene un diálogo con
“Esta Sala admite la legitimidad de la graba- otra persona, por cualquier medio
ción subrepticia de una conversación entre de comunicación que fuere, con-
personas realizada por una de ellas sin ad- fesando sus actividades delictivas,
vertírselo a la otra, ya que no ataca a la inti- se expone libre y voluntariamente
midad ni al derecho de las comunicaciones: a que su interlocutor pueda luego
cuando una persona emite voluntariamente delatarlo, de esta manera asume el
sus opiniones o secretos a un contertulio
riesgo, renunciando de este modo
a una razonable expectativa de pri-
sabe de antemano que se despoja de sus
vacidad.
intimidades y se las transmite, más o menos
confiadamente a los que escuchan, quienes
podrán usar su contenido sin incurrir en En la misma línea tenemos la sentencia
ningún tipo de reproche jurídico (Sentencia del Tribunal Supremo núm. 375, del 7 de
de 1º de marzo de 1996). Pretender que el Febrero de 1992: “La grabación de una
derecho a la intimidad alcance inclusive al conversación que tiene lugar entre dos per-
interés de que ciertos actos, que el sujeto sonas y que uno de los intervinientes desea
ha comunicado a otros, sean mantenidos conservar para tener constancia fidedigna
en secreto por quien ha sido destinatario de lo tratado entre ambos, no supone una
de la comunicación, importa una exagerada invasión de la intimidad o espacio reservado
extensión del efecto horizontal que pudiera de la persona, ya que el que resulta grabado
otorgar al derecho a la intimidad. En otras ha accedido voluntariamente a tener ese
palabras: el artículo 18 de la Constitución contacto y es tributario y responsable de
no garantiza el mantenimiento del secreto las expresiones utilizadas y del contenido de
de los pensamientos que un ciudadano co- la conversación, que bien se puede grabar
munica a otro (sentencia de 11 de mayo de magnetofónicamente o dejar constancia de
1994)”. En análogo sentido, las sentencias su contenido por cualquier otro método
del 30 de mayo de 1995, 5 de febrero y 27 escrito”.
de noviembre de 1998. Por su parte, el Tribunal Supremo Español (en
Con el mismo criterio, tenemos la sentencia de adelante TS) en su sentencia de fecha 30 de
la Audiencia Provincial de Barcelona (sección mayo de 1995, citada por Moreno Cantera en
16.ª de lo Civil) núm. 236 del 4 de mayo su informe en el que manifiesta que las cintas
de 2009: “La obtención de la prueba no fue grabadas por uno de los participantes en los
ilícita ni vulneró el derecho a la intimidad hechos y la conversación, sin conocimiento del
ni al secreto de las comunicaciones de los otro constituyen un acto privado, no sujeto a
demandados, pues fue grabación de una los requisitos de los actos procesales, similar a
conversación mantenida por quien efectuó el una prueba documental y cuyo único proble-
registro y otras personas. No fue grabación de ma será el de autenticidad, el cual habrá de
conversación mantenida por terceros ajenos ventilarse una vez incorporado el documento
a quien grabó. Que en esos casos no hay ili- videográfico al proceso por medio de prueba
citud en el obtención de la prueba lo dijo el oportuna a través bien de su cotejo (de voces)
Tribunal Constitucional ya en sentencia de 29 o de una pericia.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 197


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


En la jurisprudencia comparada mexicana, te- Grupo Colina realizadas el 22 de marzo de
nemos que “(...) conforme al citado precepto 1994, mientras estos permanecían detenidos
constitucional, el derecho público subjetivo y en el Cuartel Simón Bolívar; diálogos en los
por tanto, fundamental al derecho a la inviola- que se refieren a la ley de amnistía ofrecida
bilidad de las comunicaciones privadas es rela- y hacen gala de los pagos y la protección
tivo, en tanto que la autoridad judicial federal que les dispensaba el ejército y el gobierno,
puede autorizar su intervención, mediante el fueron cuestionados por la defensa bajo el
cumplimiento de determinados requisitos. argumento de la vulneración del derecho a
Ahora bien, la intervención que alude dicha la intimidad y no incriminación” (es preciso
norma se dirige a los sujetos que no llevan a señalar que, en este caso, quien grabó las
cabo la comunicación respectiva, es decir a conversaciones fue uno de los interlocutores
quienes no son comunicantes o interlocutores, de los diálogos, el agente de inteligencia
pues una vez colmados los requisitos legales operativa Sosa Saavedra).
para efectuar la intervención relativa, solo la
autoridad judicial federal puede autorizarla,
ASENCIO MELLADO dice:
a petición de la autoridad federal facultada
por la ley o del titular del Ministerio Público
de la entidad federativa correspondiente. De “creto
El derecho al se-
manera que si el indicado derecho fundamen- de las comu-
tal es oponible tanto a las autoridades como nicaciones es un
a los individuos, resulta evidente que no se derecho que con-
vulnera cuando los propios interlocutores tiene un concepto
revelan el contenido de una comunicación de eminentemente
la que puede desprenderse el despliegue de formal u objetivo
una conducta delictiva. (...) Por lo que en estos que viene a tutelar
casos los resultados de tales informaciones a los comunicantes frente a cualquier
injerencia de terceros de su ámbito
pueden tener valor probatorio en juicio”18.
de libertad. Es aquí donde reside
precisamente, el núcleo esencial de
5. Jurisprudencia nacional este derecho, en la no intromisión de
En la jurisprudencia nacional también tene- ”
terceros .
mos algunos ejemplos sobre la validez de
audios que contienen conductas ilícitas graba- La Sala Penal Especial de la Corte Suprema
dos por un interlocutor: la Sala Especial de la rechazó esta argumentación con las siguientes
Corte Suprema de Justicia de la República, en precisiones: “Todo lo dicho en las conversacio-
la sentencia del 7 de abril de 2009 (Exp. N° nes, incluso las menciones a las necesidades
10 – 2001- Acumulado N° 45 – 2003-A-V), económicas y problemas de salud –expuestos
contra Alberto Fujimori Fujimori, ha hecho de modo genérico, sin mayores precisiones
uso de este criterio: que pudieran denotar la transmisión de un
“En los audios entregados por el periodista dato comprometedor o que quisiera ocultarse
Uceda Pérez conteniendo conversaciones más allá del círculo de personas allí presentes–
entre el Jefe del Servicio de Inteligencia del no entra en el ámbito muy restringido de la
Ejército, Coronel EP Oliveros Pérez, el General personalidad. Los comentarios y expresiones
EP Rivero Lazo, y algunos agentes de inteli- que formula una persona a otra en una charla
gencia operativo integrantes del denominado voluntaria y sin coacción alguna no atenta el
derecho a la intimidad ni su grabación puede
18 Amparo en revisión 481/2008 de fecha 10 de setiem- ser tildada de fraudulenta. No hay incluso, un
bre del 2008. recíproco deber de secreto o deber horizontal

198 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Análisis jurisprudencial
que implique que la persona a quien le es tras- Ramírez Tueros en el cual señalaba que se
mitida una comunicación tenga la obligación habría vulnerado su derecho constitucional
de discreción o silencio. El derecho a la no al secreto de las comunicaciones así como a
incriminación, que es un derecho instrumental su intimidad personal al señalar que la gra-
que integra la garantía de defensa procesal, bación efectuada sin su consentimiento por
funciona respecto de agentes públicos y evita Herald Andrés Gamarra Chura a su persona,
que los imputados – o quienes puedan serlo – sería ilegal y por tanto no puede ser actuada
sean forzados o engañados a declarar y admitir dentro del proceso, y acogiendose a la tesis de
responsabilidades penales. Esto no es el caso de la teoría del riesgo, señaló que en el caso de
conversaciones sostenida entre personas natu- autos, la resolución impugnada que deniega
rales en las que voluntariamente se transmiten el pedido de nulidad y exclusión del CD que
ideas e intercambian datos o expresiones”. contiene la comunicación entre los investiga-
dos Ana Luisa Ramírez Tueros y Herald Andrés
Así también la Sala de Apelaciones de Lima
Gamarra Chura, se encuentra arreglada a la
Sur, acogiendo los fundamentos de la Fiscalía
Constitución y a la Ley, la jurisprudencia y la
Anticorrupción del referido distrito fiscal, en
doctrina antes mencionada , pues conforme
la audiencia de tutela de derechos en que
se ha expuesto, es de aplicación al caso la
la defensa técnica, pretendía se excluya el
teoría del riesgo antes explicitada, por lo que
material probatorio consistente en el audio y
la conversación habida entre el imputado
video grabado por un interlocutor, en el caso
Herald Andrés Gamarra con la imputada Ana
Coral Macedo, señaló: “Que por aplicación
Luisa Ramírez Tueros, presuntamente grabada
de la Teoría del Riesgo, admitida por la juris-
por Gamarra Churra y entregada al Ministerio
prudencia nacional, las pruebas obtenidas con
Público por él mismo, no puede considerarse
intromisiones domiciliarias a través de gra-
prueba prohibida o ilícita, por ende, no pue-
baciones de conversaciones sin autorización
de ser amparado el pedido de exclusión del
judicial y efectuados por infiltrados y delatores
referido material probatorio20.
entre otros, tiene validez cuando uno de los
interlocutores consiente la grabación, en base Es preciso señalar que la teoría del riesgo
a que la justicia va a cuidar los derechos de como tal se incorpora al derecho norteame-
los ciudadanos siempre y cuando estos estén ricano en el famoso caso “James Hoffa vs.
interesados en su preservación, es decir que si EEUU” (12-diciembre-1966), 385 EEUU.293,
el sujeto no cuida sus garantías, no puede pre- en el cual se usó en el juicio a un informante
tender que lo haga el Juez. En ese sentido, al secreto remunerado del Gobierno de Estados
advertir que la grabación no está relacionada Unidos, que reportaba frecuentemente al
a ningún tema relacionado a la intimidad de agente federal llamado Sheridan, dicho in-
los protagonistas conforme señala el maestro formante llamado Edwar Partin actuó luego
alemán Claus Roxin, la valoración es inobje- como testigo. Su justificación reside en el
table allí donde la esfera privada ni siquiera riesgo que voluntariamente asume toda per-
ha sido afectada. Que siendo así el medio de sona que ante otra hace revelaciones sobre
prueba en cuestión mantiene validez y eficacia un delito o realiza actividades relacionadas
al no haberse señalado lo contrario”19. con este. Si el propio individuo no cuida sus
garantías, no pretenda que lo haga un juez,
De igual modo, la Sala Penal de Apelaciones
según esta teoría la validez de la cámara oculta
de la Corte Superior de Lima especializada
se admite, cuando uno de los interlocutores
en delitos de corrupción de funcionarios,
ante la apelación de la imputada Ana Luisa
20 Incidente 00182-2011-5-1826-JR-PE-02, caso Ana
Luisa Ramírez Tueros, Delito Negociación Incompati-
19 Expediente 00037- 2012-7-3001-JR-PE-01, Caso ble, del 18 de julio del 2012. Sala Penal de Apelacio-
Coral Macedo, fecha 09 de noviembre del 2012. nes de Lima, Especializada en Delitos de Corrupción
Corte Superior de Justicia de Lima Sur. de Funcionarios.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 199


Actualidad

Penal Derecho procesal penal


la consiente, pues su posterior testimonio es hecho a través de un medio técnico de
válido, igual trato se le da a las grabaciones audio por el propio interlocutor, que más
de llamadas telefónicas efectuadas por uno tarde rendirá su propio testimonio ante
de ellos. la judicatura, precisando que no encon-
tramos argumentos razonables y lógicos
que quien está siendo objeto y víctima
JURISPRUDENCIA ANTERIOR de un hecho ilícito o presenciando este
RELEVANTE tenga que recurrir previamente a la judi-
catura a solicitar autorización a efectos de
“Los comentarios y expresiones que poder perennizar el hecho ilegal a través
formula una persona a otra en una de un medio técnico, perdiendo además
charla voluntaria y sin coacción al- la oportunidad de grabar el hecho ilícito
guna no atenta el derecho a la in- en el momento que ocurre, más allá del
timidad ni su grabación puede ser debido respeto al ámbito privado de las
tildada de fraudulenta. No hay in- personas, que no es el caso cuando dichas
cluso, un recíproco deber de secre- conductas son ilegales o contrarias a la ley.
to o deber horizontal que implique
que la persona a quien le es tras- - No hay incluso, un recíproco deber de
mitida una comunicación tenga la secreto que implique que la persona a
obligación de discreción o silencio”. quien le es trasmitida una comunicación
[Sala Especial de la Corte Suprema de Jus- tenga la obligación de discreción o silen-
ticia de la República, en la sentencia del cio, que en concreto el derecho al secreto
7 de abril del 2009 (Exp. N° 10 – 2001- de las comunicaciones tiende a tutelar
Acumulado N.° 45 – 2003-A-V)]. a los comunicantes frente a cualquier
injerencia de terceros, mas no de uno
de los interlocutores que graba hechos o
6. Conclusiones conductas punibles.
- En conclusión, podemos afirmar con · Por otro lado, es necesario recalcar que
absoluta claridad que no hace falta de dichas grabaciones realizadas por un in-
ningún modo autorización judicial en los terlocutor tampoco afectaría el derecho
casos de grabaciones de audios obtenidas a la no incriminación del que hace su
por uno de los interlocutores que acredi- propia delación referente al delito, pues
tan conductas ilícitas, pues en suma lo esta no opera entre particulares sino ante
que se está haciendo es perennizar este funcionarios públicos.

200 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Nos preguntan y contestamos

NOS PREGUNTAN Y CONTESTAMOS

Nos preguntan y contestamos


Contenido
CONSULTA n° 1
¿Un investigado puede acogerse al proceso de colaboración eficaz si es sindicado por el
Ministerio Público como cabecilla de una organización criminal?
CONSULTA n° 2 ¿Cuál es el procedimiento previo a la suscripción del acta de acuerdo de colaboración eficaz?

CONSULTA N° 1
José Cáceres Prado es incorporado en calidad de imputado en la inves-
tigación preparatoria que se sigue por un proceso de corrupción, impu-
tándosele ser líder de una organización criminal, la cual tenía dentro de
sus objetivos la adjudicación de la buena pro en los procesos de selección
de todos los Gobiernos Regionales.

El Código Procesal Penal regula la colabo- se decida en el proceso penal correspon-


ración eficaz como un proceso especial. En diente; y
tal sentido, el artículo 472 del mencionado c) Presentarse al fiscal mostrando su disposi-
cuerpo normativo establece que el Ministerio ción de proporcionar información eficaz.
Público podrá celebrar un acuerdo de bene-
Sin embargo, ha de tenerse en cuenta que la
ficios y colaboración con quien se encuentre
colaboración eficaz no es accesible a los líderes
o no sometido a un proceso penal, así como
de organizaciones criminales, de acuerdo a lo
con quien ha sido sentenciado en virtud de
dispuesto por el artículo 474 en su numeral 5,
la colaboración que preste a las autoridades
el cual establece expresamente que:
para la eficacia de la justicia penal. Así pues
el colaborador debe1: «No podrán acogerse a ningún beneficio premial
los jefes, cabecillas o dirigentes principales de
a) Haber abandonado voluntariamente sus organizaciones delictivas. El que ha intervenido
actividades delictivas; en delitos que han causado consecuencias espe-
cialmente graves únicamente podrá acogerse al
b) Admitir o no contradecir, libre y expresa- beneficio de disminución de pena, que en este caso
mente, los hechos en que ha intervenido solo podrá reducirse hasta un tercio por debajo del
o se le imputen. Aquellos hechos que no mínimo legal, sin que corresponda suspensión de la
acepte no formarán parte del proceso por ejecución de la pena, salvo la liberación condicional
y siempre que haya cumplido como mínimo la
colaboración eficaz, y se estará a lo que mitad de la pena impuesta».

Fundamento legal:
1 CUBAS VILLANUEVA, Víctor, El nuevo proceso penal
peruano. Teoría y práctica de su aplicación, Palestra Código Procesal Penal: Artículos 472 y 474
editores, Lima, 2009, p. 587. inc. 5.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 201


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

CONSULTA N° 2
Luis Ventura Centurion es imputado por delito de lavado de activos, me-
diante su abogado solicita acogerse a la colaboración eficaz, estableciendo
como condición que con tan solo su primera declaración se suscriba el
acta de acuerdo a fin de que se le varíe la medida de prisión preventiva
por comparecencia con restricciones.

De acuerdo a lo establecido por el artículo 475 3. Medidas de coerción y de protección.


de Código Procesal Penal, con la finalidad de El colaborador, mientras dure el proceso,
arribar a la colaboración eficaz es necesario de ser el caso, será sometido a las medi-
que se verifique la realización de lo siguiente: das de aseguramiento personal necesarias
1. Etapa de corroboración de la infor- para garantizar el éxito de las investiga-
mación del colaborador. El fiscal, como ciones, la conclusión exitosa del proceso y
consecuencia de las entrevistas realiza- su seguridad personal. En caso necesario,
das y de la voluntad de colaboración y siempre que no esté en el ámbito de sus
del solicitante, dará curso a la etapa de potestades, el fiscal acudirá al juez de la
corroboración disponiendo los actos de investigación preparatoria requiriéndole
investigación necesarios para establecer la dicte las medidas de coerción y de protec-
eficacia de la información proporcionada. ción que correspondan. Estas se dictarán
En estos casos requerirá la intervención de reservadamente y en coordinación con el
la Policía para que, bajo su conducción, fiscal.
realice las indagaciones previas y eleve un 4. Citación del agraviado. El agraviado,
informe policial. Los procesos, incluyendo como tal, deberá ser citado en la etapa
las investigaciones preparatorias que se de verificación. Informará sobre los
siguen contra el solicitante, continuarán hechos, se le interrogará acerca de sus
con su tramitación correspondiente. pretensiones y se le hará saber que pue-
2. Celebración de un Convenio Prepa- de intervenir en el proceso –proporcio-
ratorio.- En él, el fiscal precisará –sobre nando la información y documentación
la base de la calidad de información que considere pertinente– y, en su mo-
ofrecida y la naturaleza de los cargos o mento, firmar el Acuerdo de Beneficios
hechos delictuosos objeto de imputación y Colaboración.
o no contradicción– los beneficios, las
obligaciones y el mecanismo de aporte Fundamento legal:
de información, y de su corroboración. Código Procesal Penal: Artículo 475.

202 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

RESEÑA DE JURISPRUDENCIA

Reseña de jurisprudencia
R. N. N.° 1876-2014
LIMA
Fines del proceso penal

R. N. N.° 1876-2014 LIMA


TEMA Fines del proceso penal
FECHA DE EMISIÓN / 09-10-2014 / 16-10-2014
PUBLICACIÓN

NORMAS APLICADAS Constitución Política: Art. 2 num. 24 lit. e.


Código de Ejecución Penal (Ley N.° 9024): Art. 283.
CONTEXTO FÁCTICO Que, según la acusación fiscal obrante a fojas doscientos ochenta y ocho, se tiene
que con fecha 17-12-12, siendo las 16:30 horas, el procesado, fue intervenido en el
interior de la oficina postal de Lince, Serpost, cuando pretendía hacer el envío de una
encomienda con destino a la ciudad de Québec-Canadá, encomienda que consistía
en un paquete conteniendo unas cortinas con argollas, y al realizarse la apertura de
dicho paquete, se encontró al interior de las argollas acondicionadas clorhidrato de
cocaína por una cantidad de 1.55 kg.
EXTREMOS DE LA PRE- La defensa fundamentó su R.N. indicando que la Sala Superior no ha merituado
TENSIÓN la manifestación de su coprocesado, quien indica reiterativamente en forma clara,
uniforme y coherente que solo se le pidió un favor para que envíe la encomienda,
pero que este desconocía que contenía droga; tampoco ha merituado la declaración
de su patrocinado, quien en su entrevista personal, policial y judicial, sostuvo que
desconocía el contenido y solo entregó la encomienda por Serpost, porque su amigo
se lo pidió. Tampoco se ha merituado el acta de registro personal.
CRITERIOS DEL ÓRGA- El proceso penal se instaura con el propósito de establecer la existencia de un hecho
NO JURISDICCIONAL punible y la responsabilidad de un imputado, por ello, la finalidad de la labor pro-
batoria es establecer si un determinado hecho se ha producido realmente o en su
caso si se ha realizado en una forma determinada; en virtud de ello, está la prueba
que busca la verdad, que persigue tener un conocimiento completo de los hechos
sobre los cuales deberá aplicarse una norma jurídica; con la cual también se busca
enervar la presunción de inocencia que ampara al justiciable, evaluándose los medios
probatorios acopiados en el desarrollo del proceso llevado a cabo con las garantías
inherentes a este.

texto deL RECURSO DE NULIDAD

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA


SALA PENAL PERMANENTE
R. N. N° 1876-2014
LIMA

Lima, nueve de octubre de dos mil catorce.-

VISTOS; los recursos de nulidad interpuestos por la representante del Ministerio Público y
el abogado adscrito a la Procuraduría Pública a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 203


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

del Interior, relativos al tráfico ilícito de drogas, contra la sentencia conformada del catorce
de marzo de dos mil catorce, de fojas trescientos cincuenta y cinco, que condenó a Alejandro
Torres Montesinos, como autor del delito contra la Salud Pública -tráfico ilícito de drogas
-promoción o favorecimiento al tráfico ilícito de drogas en su modalidad agravada, en agravio
del Estado, imponiéndole ocho años de pena privativa de libertad; y los recursos de nulidad
interpuestos por la representante del Ministerio Público, el abogado adscrito a la Procuraduría
Pública a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio del Interior, relativos al tráfico ilícito
de drogas y la defensa técnica del procesado Elar Llonto Santamaría, contra la sentencia del
veinte de junio del dos mil catorce, de fojas cuatrocientos treinta y siete, que condenó a Elar
Llonto Santamaría, como autor del delito contra la Salud Pública -tráfico ilícito pe drogas -pro-
moción o favorecimiento al tráfico ilícito de drogas en su modalidad agravada, en agravio del
Estado, imponiéndole siete años de pena privativa de libertad; con lo expuesto en el dictamen
del señor Fiscal Supremo en lo Penal; interviniendo como ponente el señor Juez Supremo Villa
Stein; y CONSIDERANDO:

PRIMERO: FUNDAMENTOS DE LOS RECURSOS DE NULIDAD


A) Respecto de la sentencia de fojas trescientos cincuenta y cinco, del catorce de marzo
del dos mil catorce:
A.1. Representante del Ministerio Público, fundamentó su recurso de nulidad a fojas trescientos
noventa y siete, en el extremo que se le impuso al procesado Alejandro Torres Montesinos,
ocho años de pena privativa de libertad, toda vez que si bien el encausado se acogió a la
conclusión anticipada, pudiendo disminuirse la pena solicitada por la Fiscalía; sin embargo,
debe realizarlo teniendo en consideración lo estipulado en los artículos 45, 45-A y 46 del
Código Penal, que prevén los intereses de la víctima, la responsabilidad y gravedad del hecho
punible cometido y la concurrencia de las circunstancias agravantes o atenuantes en la comi-
sión del delito, que en el presente caso es la de pluralidad de agentes; por lo que, la pena
impuesta no es acorde al daño causado al Estado, debiendo imponérsele una pena superior
con carácter de efectiva.
A.2. El abogado adscrito a la Procuraduría Pública a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio
del Interior, relativos al tráfico ilícito de drogas, fundamentó su recurso de nulidad a fojas
cuatrocientos, en el extremo que se le impuso al procesado Alejandro Torres Montesinos, tres
mil nuevos soles por concepto de reparación civil, ya que no se ha tenido en cuenta el gasto
causado al aparato estatal, puesto que le corresponde la prevención, tratamiento y erradi-
cación del delito de tráfico ilícito de drogas, siendo dicha suma irrisoria y no se ajusta a la
magnitud de los hechos ni al grave e irreversible daño causado a la parte agraviada, toda vez
que los hechos materia de juzgamiento se encuentran tipificados dentro de la circunstancia
gravante del artículo doscientos noventa y siete, inciso seis del Código Penal, además de la
cantidad significativa de droga que se pretendía enviar al mercado internacional (Canadá),
donde el costo de la misma es ampliamente más alto, por lo que solicita se incremente en
cincuenta mil nuevos soles el monto que por concepto de reparación civil deberá pagar el
sentenciado, tal como lo solicitó el representante del Ministerio Público y que la parte civil
expresó su conformidad.
B) Respecto a la sentencia de fojas cuatrocientos treinta y siete, del veinte de junio del
dos mil catorce:
B.1. Que, la defensa técnica del procesado Elar Llonto Santamaría, fundamentó su recurso de
nulidad a fojas cuatrocientos cincuenta y uno, indicando que la Sala Superior no ha merituado
la manifestación de su coprocesado Alejandro Torres Montesinos, quien durante el proceso,
ha indicado reiterativamente en forma clara, uniforme y coherente que solo le pidió un favor
a Elar Llonto para que envíe la encomienda, pero que este desconocía que contenía droga;
tampoco ha merituado la declaración de su patrocinado, quien en su entrevista personal,
policial y judicial, sostuvo que desconocía del contenido y solo entregó la encomienda por
Serpost, porque su amigo se lo pidió. Ni se ha merituado el acta de registro personal, en el
cual solo se le encontró seiscientos ocho nuevos soles, de los cuales seiscientos se los había
dado su coprocesado, el formulario de Serpost anaranjado con verde con la letra dibujada de
Elar, el acta de registro domiciliario que no le encuentran algún elemento que lo vincule con

204 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

el ilícito, las testimoniales de los cuatro policías quienes indican que en el acta de entrevista
su coprocesado manifestaba que el recurrente desconocía del contenido de la encomienda y
respecto a la declaración de Rosa Elena Llontop, supervisora de Serpost, quien precisa que el
recurrente se demoraba y estaba nervioso, era que estaba avergonzado porque no sabía leer
y escribir, por eso le pidió que ella escriba en el formulario. Sostiene que se le ha juzgado con
la agravante prevista en el inciso seis del artículo doscientos noventa y siete del Código Penal,
la cual no se configura, pues exige la existencia de tres personas que tengan conocimiento y
concertación en los actos anteriores al ilícito, conforme a lo estipulado en el Acuerdo Plenario
número tres guión dos mil cinco oblicua CJ guión ciento dieciséis. Finalmente, indica que el
representante del Ministerio Público no ha desvirtuado la presunción de inocencia del recu-
rrente; por lo que solicita se le absuelva de los cargos que pesan en su contra.
B.2. La representante del Ministerio Público, fundamentó su recurso de nulidad a fojas cuatro-
cientos cincuenta y cuatro, en el extremo que se le impuso al cesado Elar Llonto Santamaría
siete años de pena privativa de libertad, toda vez que la pena impuesta no es acorde al daño
causado, pues su responsabilidad penal se encuentra acreditada, con la manifestación policial
su coprocesado Alejandro Torres Montesinos, el acta de entrevista personal realizado a la
persona de Rosa Elena Llontop Gallo y la declaración testimonial del efectivo policial Santos
Olegario Silva Fernández, desvirtuándose que el procesado Llonto Santamaría desconocía del
contenido de la droga, máxime si de autos se advierte la intención de perturbar la actividad
probatoria, ya que éste le manifestó a la Supervisora de Serpost que la encomienda con droga
se la entregó una señorita y no el sentenciado Torres Montesinos, debiendo imponérsele una
pena superior con carácter de efectiva, conforme lo solicitó el representante del Ministerio
Público en su oportunidad.
B.3. El abogado adscrito a la Procuraduría Pública a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio
del Interior, relativos al tráfico ilícito de drogas, fundamentó su recurso de nulidad a fojas
cuatrocientos cuarenta y siete, en el extremo que se le impuso al procesado Elar Llonto San-
tamaría, tres mil nuevos soles por concepto de reparación civil, siendo dicha suma irrisoria,
ya que no se ha tenido en cuenta el gasto causado al aparato estatal, puesto que le corres-
ponde la prevención, tratamiento y erradicación del delito de tráfico ilícito de drogas, siendo
dicha suma irrisoria y no se ajusta a la magnitud de los hechos ni al grave e irreversible daño
causado a la parte agraviada, toda vez que los hechos materia de juzgamiento se encuentran
tipificados dentro de la circunstancia agravante del artículo doscientos noventa y siete, inciso
seis del Código Penal, además de la cantidad significativa de droga que se pretendía enviar
al mercado internacional (Canadá), donde el costo de la misma es ampliamente más alto,
por lo que solicita se incremente en cincuenta mil nuevos soles el monto que por concepto
de reparación civil deberá pagar el sentenciado, tal como lo solicitó el representante del
Ministerio Público y que la parte civil expresó su conformidad.

SEGUNDO: IMPUTACIÓN FÁCTICA


Que, según la acusación fiscal obrante a fojas doscientos ochenta y ocho, se tiene que con
fecha diecisiete de diciembre de dos mil doce, siendo aproximadamente las dieciséis horas
con treinta minutos, el procesado Elar Llonto Santamaría, fue intervenido en el interior de
la oficina postal de Lince, Serpost, ubicado en la calle Teodoro Cárdenas número doscientos
sesenta y cinco -Lince, cuando pretendía hacer el envío de una encomienda con destino a la
ciudad de Québec- Canadá, dirigida a Rogeq (Roger) Napon, encomienda que consistía en un
paquete conteniendo unas cortinas con argollas y al realizarse la apertura de dicho paquete,
se encontró al interior de las argollas acondicionadas un líquido y al hacerse una incisión y
someterse a la prueba de campo arrojó una coloración turquesa, indicativo presuntivo para
alcaloide de cocaína y al realizarse el análisis preliminar correspondiente arrojó que corres-
pondía a Clorhidrato de cocaína por una cantidad de 1.55 kilogramos.
Que se le imputa a Alejandro Torres Montesinos, el haber entregado a Llanto Santamaría el
mencionado paquete conteniendo clorhidrato de cocaína, para que este último entregue la
encomienda para lo cual le iba a dar la suma de doscientos nuevos soles.

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 205


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

TERCERO: FUNDAMENTOS DEL TRIBUNAL SUPREMO


A) Respecto de la sentencia conformada de fojas trescientos cincuenta y cinco, del catorce
de marzo del dos mil catorce:
3.1. Que, se infiere del acta de sesión de audiencia de juicio oral de fojas trescientos cincuenta
y nueve, del catorce de marzo del dos mil catorce, que el encausado Alejandro Torres Mon-
tesinos, se acogió a la conclusión anticipada del proceso (modalidad especial de finalizar el
proceso, en la cual no existe contradicción de cargos, ni actividad probatoria realizada para
verificar las afirmaciones de las partes), conforme lo preceptuado en el artículo quinto de la
Ley número veintiocho mil ciento veintidós, aceptando los cargos imputados y la reparación
civil, con la conformidad de su abogada defensora, dictándose la sentencia conformada de
fojas trescientos cincuenta y cinco.
3.2. Asimismo, la aceptación de los cargos realizada por el encausado y el consentimiento de su
abogada defensora, cumple con lo preceptuado por el Acuerdo Plenario número cinco - dos
mil ocho / CJ - ciento dieciséis, de fecha dieciocho de julio de dos mil ocho, que señala “...
El aspecto sustancial de la institución de la conformidad, tal como está regulado en la Ley, estriba
en el reconocimiento, aunque con características singulares, del principio de adhesión en el proceso
penal. La conformidad tiene por objeto lo pronta culminación del proceso –en concreto del juicio
oral– a través de un acto unilateral del imputado y su defensa...”. En tal sentido, la aceptación
efectuada respecto a los cargos se hizo libremente y en virtud al conocimiento de la imputación
concreta que recaía contra el procesado; por lo que, resulta arreglado a ley la declaración de
condena expedida por el Colegiado Superior, más aún si en autos existe material de prueba
de cargo idóneo al respecto; por tanto, como indica el citado Acuerdo Plenario: “...Los hechos
vienen definidos, sin injerencia de la Sala sentenciadora, por la acusación con la plena aceptación
del imputado y su defensa...”.
3.3. En ese sentido, se tiene que se emitirá pronunciamiento respecto del quantum de la pena
impuesta y el monto de la reparación civil impuesta, conforme a los agravios expresados por
la representante del Ministerio Público y el abogado adscrito a la Procuraduría Pública a cargo
de los asuntos judiciales del Ministerio del Interior, relativos al tráfico ilícito de drogas; siendo
así, para la determinación judicial de la pena concreta, debe tenerse en consideración la pena
fijada por el legislador, así como los criterios necesarios para que se le pueda individualizar
la pena; que dentro de este contexto debe observarse el principio de proporcionalidad que
nos conduce a valorar el perjuicio y la trascendencia de la acción desarrollada por el agente
culpable bajo el criterio de la individualización, cuantificando la gravedad del delito y su modo
de ejecución, el peligro ocasionado y la personalidad o capacidad de la presunta delincuente
-conforme al artículo cuarenta y seis del Código Penal.
3.4. En el presente caso, se advierte que la pena básica a partir de la cual el Juzgador determinó
la pena concreta es no menor de quince ni mayor de veinticinco años de pena privativa de
libertad, toda vez que el hecho materia de imputación se encuentra tipificado bajo los alcances
del inciso sexto del artículo doscientos noventa y siete del Código Penal, concordante con el
artículo doscientos noventa y seis del mismo cuerpo legal; aunado a ello, cabe precisar que
el Tribunal Superior para efectuar la determinación de la pena, también tomó en cuenta las
condiciones personales del acusado –es considerado agente primario, ya que no cuenta con
antecedentes penales, conforme se aprecia a fojas trescientos cuarenta–, las circunstancias en
que se perpetró el evento delictivo (no se llegó a enviar la encomienda que contenía 1.55
Kilogramos de clorhidrato de cocaína), sus condiciones sociales, culturales y económicas del
agente; asimismo, tuvo en consideración que el procesado admitió su participación en el
evento delictivo, refiriendo que está arrepentido de su accionar ilícito y que se le otorgue
una oportunidad para que en el seno de su comunidad se desenvuelva como un hombre de
bien; además, se tomó en cuenta el acogimiento a la conclusión anticipada para disminuir
prudencialmente la pena impuesta a imponer hasta por debajo del mínimo legal, así como el
principio de proporcionalidad y razonabilidad de la pena; en consecuencia, la pena impuesta
se encuentra arreglada a Ley.
3.5. En cuanto a la reparación civil debemos señalar que se aprecia de autos que el monto fija-
do por este rubro se encuentra prudencialmente graduado acorde con lo establecido por el

206 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

artículo noventa y tres del Código Penal, pues ésta se rige por el principio del daño causado,
cuya unidad procesal civil y penal, protege el bien jurídico en su totalidad, comprendiendo
la restitución del bien o, si no es posible, el pago de su valor, y la indemnización de daños y
perjuicios; por tanto la pretensión económica se circunscribió a los daños ocasionados por esta
acción, no comprendiendo los gastos que asume el Estado para la prevención del delito de
tráfico ilícito de drogas; en consecuencia, el monto fijado en la sentencia materia de grado por
concepto de reparación civil se encuentra arreglado a derecho, por lo que debe mantenerse.
B. Respecto a la sentencia condenatoria de fojas cuatrocientos treinta y siete, del veinte
de junio del dos mil catorce:
3.6. El proceso penal se instaura con el propósito de establecer la existencia de un hecho punible
y la responsabilidad de un imputado, por ello la finalidad de la labor probatoria es establecer
si un determinado hecho se ha producido realmente o en su caso si se ha realizado en una
forma determinada; en virtud de ello, está la prueba que busca la verdad, que persigue tener
un conocimiento completo de los hechos sobre las cuales deberá aplicarse una norma jurídica;
con la cual también se busca enervar la presunción de inocencia que ampara al justiciable,
a tenor del artículo segundo, numeral veinticuatro, literal e) de la Constitución Política del
Perú, evaluándose los medios probatorios acopiados en el desarrollo del proceso llevado a
cabo con las garantías inherentes al debido proceso, a fin de probar la comisión o no del
delito instruido y la responsabilidad penal del procesado. Motivo por el cual, la sentencia
condenatoria solo podrá darse si de lo actuado en el proceso penal se determina con certeza
que el sujeto realizó los hechos que se le imputan. De no probarse que lo hizo o existiese
duda al respecto, entrará tallar el conocido principio indubio pro reo (GUEVARA PARICANA,
Julio Antonio, Principios Constitucionales del Proceso Penal, Grijley, dos mil siete, página ciento
cincuenta y tres) principio reconocido en la Constitución Política del Estado, en su artículo
ciento treinta y nueve, inciso once, el cual establece: “la aplicación de lo más favorable al reo
en caso de duda (...)”.
3.7. En el presente caso, la sentencia recurrida del veinte de junio del dos mil catorce, obrante a
fojas cuatrocientos treinta y siete, sustentó la condena del procesado Elar Llonto Santamaría,
en el Parte Policial S/N-VII-REGIÓN POLICIAL, así como con la declaración de Rosa Elena
Llontop Gallo, al expresar que resultó suspicaz que el encausado antes referido no pudo
llenar rápido el formulario que le habían entregado, que se encontraba nervioso, además,
que viviendo en el distrito de Comas acuda a una oficina postal distante a su domicilio, y
que el policía interviniente se dio cuenta que el acusado Llonto Santamaría, sí sabía escribir,
pues el mismo llenó el formulario en la oficina de Serpost y que no quiso dar inicialmente el
nombre de su coprocesado, quien le había entregado la encomienda que contenía la droga,
lo cual concuerda lo declarado por los efectivos policiales que participaron en su detención.
3.8. Al respecto, cabe precisar que ello no es suficiente para expedir una sentencia condenatoria,
la misma que debe fundarse en elementos de prueba que acrediten de manera suficiente e
indubitable la responsabilidad del procesado, lo cual no ha sucedido en el presente caso, toda
vez que, si bien el encausado Llonto Santamaría fue intervenido cuando pretendía enviar una
encomienda que contenía droga a la ciudad de Québec - Canadá; no obstante, se debe tener
en cuenta que el encausado Elar Llanto Santamaría durante todo el proceso -véase su mani-
festación policial de fojas dieciséis, en presencia de su representante del Ministerio Público, su
declaración instructiva de fojas ciento cuarenta y tres, y en juicio oral a fojas trescientos sesenta
y tres - vuelta-, ha negado su responsabilidad penal, indicando que envío la encomienda a
solicitud de su coprocesado Alejandro Torres Montesinos, pero que desconocía que contenía
drogas, que no sospechó que contenga alguna sustancia ilegal, y que si estaba nervioso, era
porque es analfabeto y no sabía llenar el formulario, copiando lo consignado en uno de los
dos papeles cuadriculados que estaban pegado en la caja de cartón, añade que le reclamó
a su coprocesado Torres Montesinos por haberle entregado la caja con drogas, y que éste
le respondió que no se lo dijo, porque si se lo decía no le iba a hacer el favor de enviar la
encomienda. Lo cual concuerda con la declaración instructiva de su coprocesado Alejandro
Torres Montesinos, obrante a fojas ciento veintinueve, el cual relató que fue “Chaso” uno de
sus clientes de su taller de planchado el que le ofreció dos mil nuevos soles por enviar una
enmienda con droga, que llamó a su amigo Elar Llonto Santamaría para lo acompañe, pero

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 207


Actualidad

Penal Derecho procesal penal

que éste desconocía de su contenido, que no le dijo que había droga camuflada y que le
pensaba dar su propina de cien o doscientos nuevos soles, y que se encuentra arrepentido
del delito que ha cometido y por haber involucrado a su coprocesado Elar Llonto Santamaría,
quien es analfabeto.
3.9. Aunado a ello, los efectivos policiales intervinientes Julio Lorenzo Torres Malaspina, Santos
Olegario Silva Fernández, Emerson Calle Aguilar y Víctor Hugo Sánchez Narváez, en sus de-
claraciones testimoniales de fojas doscientos once, doscientos catorce, doscientos diecisiete
y doscientos veintiuno, respectivamente, indicaron que el procesado Elar Llonto Santamaría
informó que un amigo le había entregado el paquete para que lo envíe y que le estaba es-
perando afuera de la agencia, dando las características físicas de su coprocesado Alejandro
Torres Montesinos, logrando ubicarlo y detenerlo, que Llonto Santamaría no opuso resistencia
durante la intervención; asimismo, Santos Olegario Silva Fernández, señaló que no sabe si
el procesado Llonto i Santamaría conocía o no lo que estaba enviando (droga) y los policías
Emerson Calle Aguilar y Víctor Hugo Sánchez Narváez, relataron que Torres Montesinos indicó
que él era el encargado de depositar la encomienda, pero le pidió de favor al procesado Llonto
Santamaría que lo enviase por él, por la amistad que se tenían.
3.10. Finalmente, se debe precisar que la declaración de Rosa Elena Llontop Gallo –véase el
acta de entrevista personal, de fojas treinta y seis y su declaración testimonial de fojas ciento
cuarenta y uno–, de que el procesado Elar Llonto Santamaría fue atendido por la expendedora
Gloria Salguero, ante la cual reconoció que la encomienda contenía droga, no genera certeza
en el Colegiado para emitir un pronunciamiento de condena, toda vez que es un testimonio
referencial, el mismo que no se condice con los demás medios probatorios antes glosados.
Siendo así, resulta de aplicación el principio del in dubio pro reo, pues este Supremo Tribunal
considera que existe duda razonable respecto a la responsabilidad penal del referido procesado.
Por estos fundamentos; declararon: I. NO HABER NULIDAD en la sentencia conformada del
catorce de marzo de dos mil catorce, de fojas trescientos cincuenta y cinco, en el extremo que
le impuso a Alejandro Torres Montesinos, ocho años de pena privativa de libertad y fijó en tres
mil nuevos soles el monto que por concepto de reparación civil deberá abonar el encausado,
por la concisión del delito contra la Salud Pública –tráfico ilícito de drogas– promoción o fa-
vorecimiento al Tráfico ilícito de drogas en su modalidad agravada, en agravio del Estado; II.
HABER NULIDAD en la sentencia del veinte junio del dos mil catorce, de fojas cuatrocientos
treinta y siete, que condenó a Elar Llonto Santamaría, como autor del delito contra la Salud
Pública -tráfico ilícito de drogas-, promoción o favorecimiento al tráfico ilícito de drogas en
su modalidad agravada, en agravio del Estado, imponiéndole siete años de pena privativa de
libertad; reformándola: ABSOLVIERON a Elar Llonto Santamaría, de la acusación fiscal por el
delito agraviado antes mencionado; en consecuencia, MANDARON se archive definitivamen-
te lo actuado en cuanto a este extremo, y se anulen los antecedentes policiales y judiciales
que dieron lugar al presente proceso en este extremo; y, DISPUSIERON la inmediata libertad
del referido encausado, siempre y cuando no exista otro mandato de detención emanado de
autoridad competente, oficiándose VÍA FAX para tal efecto, y los devolvieron.
S.S.
VILLA STEIN / PARIONA PASTRANA / BARRIOS ALARADO / NEYRA FLORES / CEVALLOS VE-
GAS / VS / mcay

208 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

RESEÑA DE JURISPRUDENCIA

Reseña de jurisprudencia
R. N. N.° 1002-2014
Callao
Causales de nulidad y realización
de un nuevo juicio

R. N. N.° 1002-2014 CALLAO

TEMA Causales de nulidad y realización de un nuevo juicio

FECHA DE EMISIÓN / 14-11-2014 / 19-10-2014


PUBLICACIÓN

NORMAS APLICADAS Código de Procedimientos Penales (Ley N.° 9024): Art. 298.

CONTEXTO FÁCTICO El 18-12-2010 a las 16:00 horas, aproximadamente, personal policial fue alertado
por pobladores del asentamiento humano “Puerto Nuevo” del Callao, que un camión
y un remolque (tráiler), estaban siendo asaltados por cinco sujetos que viajaban a
bordo de un mototaxi, color azul, en la calle Mariátegui del mencionado asentamiento
humano, es así que uno de los sujetos amenazó con un arma de fuego al agraviado
despojándolo de su teléfono celular, sustrayendo veinte paquetes de tapas de con-
servas del tráiler; por lo que al transitar por la intersección del pasaje El Boquerón y
Boulevard, intervinieron a los procesados José Martín Villarreyes Arroyo y Evis Steve
Rueda Arca, entre otras personas no identificadas, las mismas que se desplazaban
a bordo un vehículo, conducido por el primero de los nombrados, vehículo que al
ser registrado se halló tres paquetes recubiertos con papel grueso de cincuenta y dos
centímetros de largo, por doce centímetros de ancho, aproximadamente, contenien-
do en su interior tapas metálicas plateadas para envases de conservas de pescado.

EXTREMOS DE LA PRE- La defensa técnica del encausado Evis Steve Rueda Arca, al formalizar su recurso de
TENSIÓN nulidad, alega lo siguiente: existe error por parte del Colegiado al sostener que en
el presente caso la intervención de su patrocinado fue en flagrancia, dado que fue
desvirtuada por diversos medios probatorios.

CRITERIOS DEL ÓRGA- Este Supremo Tribunal considera que en el presente caso no se realizaron las diligencias
NO JURISDICCIONAL necesarias para el debido esclarecimiento del hecho imputado; por tanto, de confor-
midad con el inciso 1 del artículo 298 del Código de Procedimientos Penales, debe
realizarse un nuevo juicio oral por parte de otro Colegiado Penal Superior donde se
llevará a cabo las siguientes diligencias: i) Se realicen las diligencias necesarias para
la conducción de grado o fuerza del agraviado José Manuel Llanos Farromeque, ii)
Se recaben las declaraciones testimoniales de los efectivos policiales intervinientes,
Sub Oficial Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, el Mayor Miguel Talla Quispe y el Sub
Oficial José Robles Bernabé y iii) Se realicen las diligencias de confrontación entre los
encausados Villarreyes Arroyo y Rueda Arca, y entre estos y el efectivo policial Aldo
Alfredo Mejía Rodríguez; y las demás diligencias que resulten necesarias para el mejor
esclarecimiento de los hechos materia de investigación.

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Penal Derecho procesal penal

texto del recurso de nulidad

SALA PENAL PERMANENTE


R. N. N.° 1002-2014
CALLAO

Lima, catorce de noviembre de dos mil catorce.-

VISTOS: El recurso de nulidad interpuesto por las defensas técnicas de los encausados José
Martín Villarreyes Arroyo y Evis Steve Rueda Arca, contra la sentencia de fojas trescientos die-
cinueve, del veintisiete de enero de dos mil catorce. Interviene como ponente el señor Juez
Supremo Neyra Flores.

CONSIDERANDO
Primero. La defensa técnica del encausado Evis Steve Rueda Arca al formalizar su recurso
de nulidad de fojas trescientos cuarenta y uno, alega lo siguiente: i) Existe error por parte
del Colegiado al sostener que en el presente caso la intervención de su patrocinado fue en
flagrancia, dado que fue desvirtuada por el mérito de lo siguiente: a) El parte policial con-
signa la intervención policial de la móvil de placa de rodaje KL-seis mil trescientos cincuenta,
al mando del Mayor Talla, y los efectivos policiales Aldo Mejía Rodríguez y Pecho Romero,
donde se sostiene que al transitar por la intersección del pasaje Boquerón y Boulevard, se
intervino una mototaxi, color azul, esto es, en ningún momento se consignó que se haya
intervenido a los acusados en flagrante delito o que hayan sido testigos del hecho delictivo, y
que por o hayan procedido a sus detenciones, b) No es creíble la manifestación del efectivo
policial Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, cuando refiere que se conminó a los detenidos a que
concurran a la delegación policial en la mototaxi donde supuestamente habían sido interve-
nidos, siendo seguidos de cerca por la unidad policial; dado que, no es lógico que los tres
efectivos policiales intervinientes en un supuesto caso de flagrancia dejen sin custodia a los
intervenidos, lo que conlleva a concluir que los acusados fueron detenidos en lugar distinto
al indicado en la denuncia, y que no es cierto que el conductor de la mototaxi haya realizado
una maniobra para eludir la intervención policial, c) Existe contradicción entre la ocurrencia
policial y el acta de hallazgo y recojo, debido a que en la primera se consignó como número
de placa de rodaje de la mototaxi MG-noventa y nueve sesenta y seis uno, mientras que en
el segundo documento se sostiene que la mototaxi intervenida se encuentra sin placa de ro-
daje. ii) No se valoró correctamente las declaraciones ofrecidas por la defensa de los testigos
Merelyn Johana Sánchez Balcazar, Rosa Isabel Salas Campos y Julia Corsino Obando viuda de
Quispe, al sostener solo que estos no presenciaron los hechos denunciados o no vieron cuan-
do el agraviado fue víctima de robo; puesto que no se apreció que las declaraciones de estos
coinciden con la de su patrocinado respecto al lugar donde fue intervenido; asimismo, no se
tuvo en cuenta que la testigo Corsino Obando sostuvo que ella apareció cuando en la moto-
taxi del procesado subieron dos personas jóvenes de apariencia de pescadores en la puerta de
ingreso al muelle, y que ella abordó la mototaxi que venía detrás y siguieron la misma ruta, y
que a la altura del pasaje Virgen Del Carmen y la avenida Grau, intervinieron policialmente la
mototaxi del procesado, siendo falso que haya sido intervenido por la puerta de ingreso a los
almacenes de la Empresa Andesa. iii) No existe la manifestación del supuesto agraviado, sino
solo obra la ocurrencia de parte y/o intervención policial, lo que hace inferir que el agraviado
o el  representante de la empresa para la cual trabajaba nunca acudieron a la comisaría a
presentar una denuncia.
Segundo. La defensa técnica del encausado José Martín Villarreyes Arroyo al formalizar su
recurso de fojas trescientos ochenta y siete, alega lo siguiente: i) La sentencia impugnada no
refleja los hechos probados, cual le causa perjuicio moral, familiar y económico. Precisa que
no se analizó debidamente la forma y circunstancias en que injustamente fue involucrado en
los hechos, privilegiándose únicamente las declaraciones testimoniales de los efectivos poli-
ciales y soslayando arbitrariamente las declaraciones testimoniales ofrecidas por su defensa
técnica. ii) No se probó la responsabilidad penal de su patrocinado, más aún, si no existe
agraviado; de igual forma, se corroboró con la carta cursada por el administrador de planta

210 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

de la Empresa Andesa, de fojas ciento noventa y nueve, que el agraviado José Manuel Llanos
Farromeque no es trabajador de dicha empresa, y que los bienes sustraídos no son de su
propiedad, desconociéndose de los hechos imputados, iii) No se merituó las declaraciones
testimoniales de Merelyn Sánchez Balcazar, Rosa Salas Campos y Julia Corcino Obando, quie-
nes indicaron haber estado presentes al momento de la intervención policial, no habiendo
observado a su patrocinado ni fuera ni dentro de la mototaxi color azul, de placa de rodaje
número MG - noventa y nueve sesenta y seis uno; que su patrocinado ha manifestado que
a la hora y día de los hechos se encontraba en su domicilio con su conviviente Aitsa Landa
Reyme, luego de haber laborado en la carga y descarga de pescado en el muelle artesanal,
conforme lo acreditó con certificados de trabajo que obran en autos, iv) No está probado la
preexistencia de las especies sustraídas, por cuanto conforme a la carta enviada por la empre-
sa Andesa, de fojas ciento noventa y nueve, se precisa que el agraviado no ha sido trabajador
de la misma y niega ser la propietaria de dichas especies.
Tercero. Según el sustento fáctico de la acusación fiscal, de fojas doscientos veinticinco, el
dieciocho de diciembre de dos mil diez, a las dieciséis horas, aproximadamente, el Sub Oficial
Técnico de Tercera Aldo Alfredo Mejía Rodríguez fue alertado por pobladores del asentamien-
to Humano “Puerto Nuevo” del Callao, que un camión de placa de rodaje número Yl-nueve
mil doscientos catorce y semi remolque número ZD-cinco mil setecientos ochenta y cuatro
(tráiler), estaban siendo asaltados por cinco sujetos que viajaban a bordo de un mototaxi,
color azul, a la altura de la puerta de ingreso a la empresa Andesa, sito en la calle Mariátegui
del mencionado asentamiento humano, es así que uno de los sujetos amenazó con un arma
de fuego al agraviado despojándolo de su teléfono celular, sustrayendo veinte paquetes de
tapas de conservas del tráiler; por lo que al transitar por la intersección de Pasaje El Boque-
rón y Boulevard, intervinieron a los procesados José Martín Villarreyes Arroyo y Evis Steve
Rueda Arca, entre otras personas no identificadas, las mismas que se desplazaban a bordo
del vehículo de placa de rodaje número MG - noventa y nueve sesenta seis uno, conducido
por el primero de los nombrados, vehículo que al ser registrado se halló tres paquetes recu-
biertos con papel grueso de cincuenta y dos centímetros de largo, por doce centímetros de
ancho, aproximadamente, conteniendo en su interior tapas metálicas plateadas para envases
de conservas de pescado, posteriormente al  ser trasladados los intervenidos por el personal
policial, el conductor de la mototaxi, el encausado Evis Steve Rueda Arca hizo una maniobra
temeraria ingresando al Asentamiento Humano “Puerto Nuevo”, donde un grupo de cin-
cuenta personas, aproximadamente, liderado por Ivone Arca Rodríguez mediante el uso de la
violencia, permitieron que los detenidos fugaran llevándose las marrocas que tenían puestas,
las mismas que aquella devolvió al puesto de auxilio rápido del lugar.
Cuarto. De autos se advierte lo siguiente: i) A fojas quince, obra la Ocurrencia policial núme-
ro cincuenta y cinco noventa y tres veinticinco, donde se precisa que el Sub Oficial Técnico de
Tercera de la Policía Nacional del Perú, Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, da cuenta que el die-
ciocho de diciembre de dos mil diez, a las dieciséis horas, aproximadamente, el suscrito ope-
rador de la unidad móvil KL sesenta y cinco treinta, en circunstancias que realizaba patrullaje
motorizado por la avenida Boulevard del Asentamiento Humano “Puerto Nuevo” en el Ca-
llao, fue alertado por moradores del lugar (pasaje Los Pescadores) respecto a que en la calle
Mariátegui estaban asaltando a un camión (tráiler) procediendo a dirigirse al lugar, pero es el
caso que en la intersección del pasaje el Boquerón y Boulevard, se intervino una mototaxi
color azul, conducida por un sujeto con dos pasajeros en la parte posterior, pudiendo observar
que en dicho vehículo habían tres paquetes de tapas de conservas, posteriormente se enma-
rrocó a los tenidos, y en circunstancias que se dirigían a la comisaría con el vehículo menor, el
conductor de este último, Evis Steve Rueda Arca realizó una maniobra y a gran velocidad in-
gresó al Asentamiento Humano “Puerto Nuevo”, deteniéndose en la avenida Grau con el
pasaje Los Pescadores, significando que en dicho lugar se encontraba la madre del referido
conductor, la señora Ivonne Arca, quien lideraba un grupo de cincuenta pobladores, aproxi-
madamente, los cuales lograron rescatar a los intervenidos, llevándose consigo los grilletes de
seguridad del suscrito. Precisa que uno de los intervenidos era José Martín Villarreyes Arroyo
y el otro era un sujeto de tez morena. Hace mención que el suscrito fue apoyado por el per-
sonal policial del puesto de auxilio rápido del Asentamiento Humano “Puerto Nuevo”, al
mando del Sub Oficial de la Policía Nacional del Perú Humberto Ávalos Peñafiel, pero la
cantidad de pobladores era muy superior y arrojaban palos y piedras, quienes lograron resca-
tar a los intervenidos; que luego de treinta minutos, aproximadamente, la señora Ivonne Arca
Rodríguez hizo entrega de los grilletes de seguridad, el cual había sido cortado con sierra, al

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 211


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Sub Oficial Técnico de Primera de la Policía Nacional del Perú Eduardo Saavedra Gonzáles,
luego al retornar a la calle Mariátegui se entrevistó al agraviado José Manuel Llanos Farrome-
que, quien manifestó que en circunstancias que se encontraba en la puerta de ingreso de la
Empresa Andesa, sito en la calle Mariátegui Asentamiento Humano “Puerto Nuevo”, se per-
cató que una mototaxi color azul se acercó al vehículo donde se encontraba de placa de ro-
daje número YI-nueve mil doscientos catorce y semi remolque de placa de rodaje número
ZD-cinco mil setecientos ochenta y cuatro, de Transportes Contreras, el cual se encontraba
cargado con cajas, las cuales contenían tapas para conservas de anchoveta, para luego ver que
cinco sujetos de aproximadamente veinte a veintidós años se treparon en el vehículo, y uno
de ellos amenazó al conductor con un arma de fuego(pistola), despojándolo de un teléfono
de un teléfono celular y veinte paquetes de tapas de conserva, similares a los encontrados en
el vehículo menor, y luego tres abordaron el referido vehículo y los otros dos huyeron en
distintas direcciones, ii) El Acta de Hallazgo y Recojo, de fojas diecinueve (realizada sin fiscal),
donde se deja constancia que en el piso de la mototaxi color azul y sin placas de rodaje inter-
venida, conducida por Evis Steve Rueda Arca, y como pasajeros a José Martín Villarreyes
Arroyo y otro sujeto, se encontró tres paquetes recubiertos con papel grueso (de despacho) de
aproximadamente cincuenta y dos centímetros de largo por doce centímetros de ancho, en
cuyo interior contenía tapas metálicas plateadas para envases de conserva de pescado. iii) La
manifestación policial del Sub Oficial Técnico de Tercera de la Policía Nacional del Perú, Aldo
Alfredo Mejía Rodríguez, de fojas veintinueve (sin presencia del Fiscal), quien refiere que el
día de los hechos se encontraba realizando patrullaje como operador de la móvil de placa de
rodaje número KL sesenta y cinco treinta, por inmediaciones del Asentamiento Humano
“Puerto Nuevo” en el Callao, siendo que a la altura de la avenida Boulevard fue alertado por
moradores de la zona que le manifestaron que un camión estaba siendo asaltado a la altura
de la avenida Mariátegui, por lo que se dirigieron a dicho lugar, y en la intersección del Pasa-
je Boulevard y El Boquerón del Asentamiento Humano “Puerto Nuevo” en el Callao se inter-
vino una moto taxi, color azul, la cual era conducida por un sujeto y llevaba como pasajeros
a otras dos personas, observándose que en el asiento de pasajeros habían tres paquetes de
tapas para latas de conserva, procediéndose a enmarrocar a las personas que estaban de pa-
sajeros, asegurándolos contra la estructura del mototaxi e indicarle al conductor que siguiera
hasta la Comisaría, mientras que la unidad policial los venía siguiendo de cerca, siendo el caso
que el conductor de la mototaxi realizó una maniobra temeraria y luego aceleró a gran velo-
cidad ingresando al Asentamiento Humano “Puerto Nuevo” en el Callao, deteniéndose en la
avenida Miguel Grau con el pasaje Los Pescadores, donde había un grupo de cincuenta per-
sonas, aproximadamente, liderados por una fémina que impidieron que se continué con el
traslado de los intervenidos a la comisaría, quienes arrojaron palos y piedras contra el perso-
nal policial, logrando rescatar a estos, incluyéndose al conductor de la mototaxi, llevándose
los grilletes propiedad del declarante, luego al cabo de unos treinta minutos la aludida mujer
que lideraba el grupo de personas, devolvió los grilletes seguridad al personal policial de
apoyo que presta servicios en el Puesto de Auxilio Rápido del Asentamiento Humano “Puerto
Nuevo” en el Callao, pero estos habían sido cortados al parecer con sierra, los cuales queda-
ron inservibles. Agrega, que realizadas las investigaciones se llegó a determinar que el agra-
viado José Manuel Ramos Farromeque quien conducía el vehículo remolcador de placa de
rodaje número Yl-nueve mil doscientos catorce, con semi remolque de placa de rodaje núme-
ro ZD-cinco mil setecientos ochenta y cuatro, indicó que cuando se encontraba en la puerta
de ingreso de la Empresa Andesa, ubicada en la avenida Mariátegui - Callao, fue abordado
por un grupo de cinco personas quienes lograron subir por ambas puertas a la cabina del
conductor e inclusive uno de ellos se encontraba provisto de arma de fuego, siendo despojado
de un teléfono celular y veinte paquetes de tapas para conservas de pescado que transporta-
ba y que tenían como destino la mencionada empresa, luego de lo cual tres sujetos abordaron
un moto taxi de color azul y otros dos huyeron corriendo en distintas direcciones. Agrega, que
reconoce al encausado Evis Steve Flores Rueda como la persona que conducía el mototaxi y a
José Martín Villarreyes Arroyo como uno de los pasajeros, iv) La declaración testimonial del
Sub Oficial Técnico de Tercera de la Policía Nacional del Perú, Aldo Alfredo Mejía Rodríguez,
de fojas ciento trece, quien se ratificó en su manifestación policial y agregó que cuando tomó
conocimiento que estaban asaltando un tráiler, solicitó apoyo a su comisaría, constituyéndose
el Mayor Talla y el efectivo policial José Robles Bernabé, siendo los que realizaron la interven-
ción; asimismo agrega que fue la señora Ivonne Arca Rodríguez, madre del encausado Rueda
Arca, quien devolvió las marrocas cortadas, v) La declaración testimonial del Sub Oficial Téc-
nico de Primera de la Policía Nacional del Perú, Eduardo Saavedra Gonzáles, de fojas cien,

212 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

quien refiere que al momento de los hechos se encontraba de servicio en el Puesto de Apoyo
Rápido del Asentamiento Humano “Puerto Nuevo” en el Callao, observándose a una distan-
cia de dos cuadras un tumulto de gente y una patrullero de la Comisaría de Ciudadela Chala-
co, recibiendo la orden superior de dirigirse al lugar para el apoyo respectivo, al llegar encon-
traron al mando del patrullero al Mayor Talla, quienes habían intervenido una motokar, color
azul, en cuyo interior ya no se encontraba nadie, queriéndose conducir dicha motokar a la
comisaría, lo que fue impedido por la turba de personas, lográndose retirar el vehículo poli-
cial sin poder trasladar la motokar, que según el Mayor aludido había sido utilizado para un
robo; que al cabo de una hora, una señora que no se identificó se acercó al puesto de auxilio
rápido para entregar unas marrocas que estaban cortadas que refirió las encontró en el suelo,
vi) La declaración testimonial del Sub Oficial de la Policía Nacional del Perú, Humberto Fran-
cisco Ávalos Peñafiel, de fojas ciento uno, quien refiere que se desempeñaba como Jefe del
Puesto de Auxilio Rápido del Asentamiento Humano “Puerto Nuevo” en el Callao, indica que
al percatarse de un gran tumulto de gente a dos cuadras de distancia que se encontraban
cerca de un vehículo policial en donde habían dos colegas, dispuso que tres efectivos policia-
les se dirigieran a apoyar a dicho lugar, quienes al retornar le informaron que la intervención
había sido por un mototaxi que quisieron llevar a la comisaría, pero los moradores lo impi-
dieron, que posteriormente se hizo presente al puesto de auxilio una persona de sexo feme-
nino llevando unas marrocas que estaban cortadas. vii) La declaración en acto oral de José
Martín Villarreyes Arroyo, de fojas doscientos sesenta y cuatro, quien refiere que nunca lo
intervinieron policialmente, y que tiene problemas con el efectivo policial Aldo Mejía Rodrí-
guez quien lo ha implicado en un caso de homicidio, y en otra oportunidad le “sembró” un
arma de fuego por lo cual tiene antecedentes, precisa que conoce a su coencausado Evis Steve
Rueda Arca, debido a que conduce una mototaxi y lo lleva a su centro de trabajo, además por
vivir a la vuelta de su casa. viii) La declaración en acto oral del encausado Evis Steve Rueda
Arca, de fojas doscientos setenta y siete, quien refiere que al momento de los hechos se en-
contraba realizando un servicio de transporte en mototaxi a dos personas que le pidieron que
los lleve a la intersección de las avenidas Virgen Del Carmen y Grau, pero cuando estaba por
llegar al lugar se dio cuenta que detrás venía un patrullero que le hizo un juego de luces para
que detenga la moto, bajándose el Mayor Talla y el Sub Oficial Mejía y le piden sus papeles y
le dicen contigo no es, luego a sus pasajeros les piden documentos y como no  tenían los
enmarrocan, luego le pidieron que conduzca a sus pasajeros intervenidos a la Comisaría, indi-
cando que la intervención fue en el Asentamiento Humano “Puerto Nuevo”, agrega que las
tapas de lata de conserva las tenían sus pasajeros en una bolsa y las encontraron en la parte
de atrás de la mototaxi, precisando que la población intervino cuando se produce la deten-
ción policial, siendo falso que su madre haya liderado el rescate, sino que solo le dijo al Ma-
yor que él la conocía y que yo era su hijo, siendo falso que su madre haya sido la persona que
devolvió las marrocas, agregando no conocer a su coprocesado Villarreyes Arroyo.
Quinto. Siendo esto así, se advierte de autos en concreto lo siguiente: i) El agraviado José
Manuel Llanos Farromeque no prestó su declaración en ninguna de las etapas del proceso res-
pecto a la forma y circunstancias en que habría acontecido el hecho imputado, sino tan solo
existe lo consignado en la ocurrencia policial realizada por el Sub Oficial Técnico de Tercera
de la Policía Nacional del Perú, Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, que da cuenta en concreto que
el dieciocho de setiembre de dos mil diez, a las dieciséis horas, aproximadamente, se habría
suscitado un asalto en perjuicio de la mencionada persona por parte de cinco sujetos, uno de
los cuales se encontraba premunido de arma de fuego, en circunstancias que se encontraba a
bordo de un tráiler en la puerta de ingreso de la Empresa Andesa, despojándosele de un telé-
fono celular y veinte paquetes de tapas de conserva, similares a los encontrados en el vehículo
menor donde habrían sido intervenidos los encausados José Martín Villarreyes Arroyo y Evis
Steve Rueda Arca, ii) Existe contradicciones entre lo manifestado por el efectivo policial inter-
viniente Aldo Alfredo Mejía Rodríguez y lo indicado por los encausados Villarreyes Arroyo y
Rueda Arca, respecto al lugar, forma y circunstancias en que estos últimos fueron intervenidos,
incluso el acusado Villarreyes Arroyo refiere que no fue intervenido el día de los hechos sino
que tiene un problema personal con el mencionado efectivo policial, iii) No concurrieron a
declarar a juicio oral el efectivo policial interviniente Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, así como
tampoco el Mayor Miguel Talla Quispe y el Sub Oficial José Robles Bernabé, quienes según
versión del primero, concurrieron a apoyarlo en la intervención policial.
Sexto. Por tanto, este Supremo Tribunal considera que en el presente caso no se realizaron las
diligencias necesarias para el debido esclarecimiento del hecho imputado; por tanto, de con-

Volumen 6 | Diciembre 2014 Actualidad Penal 213


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formidad con el inciso uno del artículo doscientos noventa y ocho del Código de Procedimien-
tos Penales, debe realizarse un nuevo juicio oral por parte de otro Colegiado Penal Superior,
donde se llevará a cabo las siguientes diligencias: i) Se realicen las diligencias necesarias para
la conducción de grado o fuerza del agraviado José Manuel Llanos Farromeque. ii) Se Oficie al
Registro de Propiedad vehicular a efectos de que se informe a quien pertenece el vehículo de
placa de rodaje número Yl-nueve mil doscientos catorce y semi remolque de placa de rodaje
número ZD- cinco mil setecientos ochenta y cuatro. iii) Se oficie a la Empresa de Transportes
Contreras, a efectos de que informe si el agraviado José Manuel Llanos Farromeque es em-
pleado de la misma, y si tienen conocimiento respecto a los hechos imputados con relación
a la sustracción de tapas de conserva, iv) Se recaben las declaraciones  testimoniales de los
efectivos policiales intervinientes, Sub Oficial Aldo Alfredo Mejía Rodríguez, el Mayor Miguel
Talla Quispe y el Sub Oficial José Robles Bernabé, v) Se realicen las diligencias de confronta-
ción entre los encausados Villarreyes Arroyo y Rueda Arca, y entre estos y el afectivo policial
Aldo Alfredo Mejía Rodríguez; y las demás diligencias que resulten necesarias para el mejor
esclarecimiento de los hechos materia de investigación.
Séptimo. Advirtiéndose que los encausados José Martín Villarreyes Arroyo y Evis Steve Rueda
Arca se encuentran recluidos en un establecimiento penal producto de la condena impuesta
en la sentencia que es declarada nula por la presente Ejecutoria, corresponde que subsista la
medida coercitiva personal impuesta en el auto apertorio de instrucción, esto es, la compa-
recencia restringida.

DECISIÓN
De conformidad con el dictamen del señor Fiscal Supremo en lo Penal, declararon: NULA
la sentencia de fojas trescientos diecinueve, del veintisiete de enero de dos mil catorce, que
condenó a José Martín Villarreyes Arroyo como autor y Evis Steve Rueda Arca como cómplice
primario del delito contra el Patrimonio, en la modalidad de robo agravado, en perjuicio de
José Manuel Llanos Farromeque, a doce años e pena privativa de libertad, y fijaron en mil
nuevos soles el monto que por concepto de reparación civil deberá abonar a favor del agra-
viado, con lo demás que contiene. DISPUSIERON: la realización de un nuevo juicio oral por
parte de otro Colegiado Penal Superior, quienes deberán llevar a cabo las diligencias anotadas
en la parte considerativa de la presente Ejecutoria. ORDENARON: la inmediata libertad de
los encausados José Martín Villarreyes Arroyo y Evis Steve Rueda Arca, siempre y cuando no
exista mandato de detención dictado por otra autoridad competente, notificándose y los
devolvieron. Interviene el señor Juez Supremo Morales Parraguez, por vacaciones del señor
Juez Supremo Villa Stein.
S. S.
PARIONA PASTRANA / BARRIOS ALVARADO / NEYRA FLORES / MORALES PARRAGUEZ /
CEVALLOS VEGAS / NF/rjmr

214 Instituto Pacífico Volumen 6 | Diciembre 2014


Reseña de jurisprudencia

RESEÑA DE JURISPRUDENCIA

Reseña de jurisprudencia
R. N. N° 1104-2014
Lima
El principio acusatorio dentro del
debido proceso penal
R. N. N° 1104-2014 LIMA
TEMA El principio acusatorio dentro del debido proceso penal
FECHA DE EMISIÓN / 14-11-2014 / 19-11-2014
PUBLICACIÓN

NORMAS APLICADAS Constitución Política: Art. 2° num. 24 lit. e.


Código de Ejecución Penal (Ley N.° 9024): Art. 283.
CONTEXTO FÁCTICO Los encausados, Juan Andrés Valenzuela Babilón y Royer Etduard Oxa Huaytalla,
son sentenciados el 15-01-2014, condenándoseles como autores del delito contra
la Libertad-ofensas al pudor público-posesión, promoción, distribución y exhibición
de pornografía infantil, en agravio de la sociedad y menores de edad en vía de
identificación. Asimismo, se les impuso 5 años de pena privativa de libertad y fijó la
suma de S/. 2000 por concepto de reparación civil.
EXTREMOS DE LA PRE- La defensa técnica del encausado Juan Andrés Valenzuela Babilón alega que la sen-
TENSIÓN tencia de vista vulnera la garantía procesal constitucional del debido proceso, espe-
cíficamente el derecho a la motivación de resoluciones judiciales, en tanto se limita
a transcribir el atestado policial y los exámenes realizados en el juicio oral. De otro
lado, señala que se habría quebrantado el artículo 280 del Código de Procedimientos
Penales –referido a la apreciación de la confesión y demás pruebas– al no haber tenido
en cuenta que su coprocesado, desde el inicio de la investigación, ha declarado que no
lo conocía y que el material pornográfico incautado era de propiedad de este último
CRITERIOS DEL ÓRGA- En base al principio acusatorio dentro de un debido proceso penal, corresponde
NO JURISDICCIONAL al Estado –mediante el Ministerio Público–, en calidad de órgano constitucional
autónomo, acreditar de manera fehaciente, la comisión del hecho delictivo que este
imputa a todo acusado. La actividad probatoria desplegada necesariamente ante un
juez imparcial, en un juicio oral y público, desarrollado con las garantías del debate
contradictorio, debe llevar al convencimiento del juzgador, en grado de certeza, para
arribar a una sentencia condenatoria, caso contrario, de no darse este presupuesto,
debe absolverse al imputado, al mantenerse incólume la presunción de inocencia
con la que ingresa a proceso penal y, en base al principio jurídico procesal, que la
culpabilidad se demuestra y la inocencia se presume. Es decir, es responsabilidad
funcional y procesal del Ministerio Público, en su rol de acusador, actuar esta prueba
para conseguir una condena. Este principio acusatorio constituye la columna verte-
bral del juicio oral y, por ende, del debido proceso. En esta tarea no le corresponde
al juez sentenciador destruir la presunción de inocencia, toda vez que, su rol es la
de ser imparcial entre el acusador y la defensa. Otra expresión del debido proceso,
contemplada como garantía constitucional es la debida motivación de las decisiones
judiciales, principio que los jueces debemos observar, al momento de resolver una
causa sometida a nuestro conocimiento. La exigencia adquiere mayor relevancia
cuando estamos frente a un proceso penal, en el cual de por medio está la decisión
sobre la inocencia o culpabilidad de un procesado, y con ello, su encarcelamiento
o su libertad.

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Actualidad

Penal Derecho procesal penal

texto del recurso de nulidad

SALA PENAL PERMANENTE


R. N. N° 1104-2014
LIMA

Lima, catorce de noviembre de dos mil catorce.-

VISTOS; el recurso de nulidad interpuesto por los encausados Juan Andrés Valenzuela Babilón
y Royer Etduard Oxa Huaytalla contra la sentencia de fojas mil doscientos ochenta y seis y
siguientes, de fecha quince de enero del dos mil catorce, que los condenó como autores
del delito contra la Libertad-ofensas al pudor público-posesión, promoción, distribución y
exhibición de pornografía infantil, en agravio de la sociedad y menores de edad en vía de
identificación, les impuso 5 años de pena privativa de libertad y fijó la suma de dos mil nue-
vos soles el monto que por concepto de reparación civil deberán abonar en forma solidaria a
favor las agraviadas. Intervine como ponente la señora Jueza Suprema Elvia Barrios Alvarado.

CONSIDERANDO
RESPECTO A LOS AGRAVIOS INVOCADOS POR LOS RECURRENTES
PRIMERO: La defensa técnica del encausado Juan Andrés Valenzuela Babilón mediante escri-
to de folios 1310 y siguientes, cumple con fundamentar su recurso impugnatorio solicitando
la nulidad de la sentencia, y la absolución de los cargos formulados en su contra, alegando
que la sentencia de vista vulnera la garantía procesal constitucional del debido proceso, espe-
cíficamente el derecho a la motivación de resoluciones judiciales, en tanto se limita a trans-
cribir el atestado policial y los exámenes realizados en el juicio oral, de otro lado señala que
se habría quebrantado el artículo 280° del Código de procedimientos Penales -referido a la
apreciación de la confesión y demás pruebas- al no haber tenido en cuenta que su coprocesa-
do desde el inicio de la investigación ha declarado que no lo conocía y que el material porno-
gráfico incautado era de propiedad de este último; asimismo, indica que se habría vulnerado
el artículo 285° del acotado Código -referido al contenido de la sentencia condenatoria- al
no haberse indicado la prueba en la que se sustenta su responsabilidad, incidiendo de manera
concreta en que no se habría mencionado la prueba que lo vincula con su coprocesado, por lo
que solicita su absolución. Por su parte, la defensa técnica del encausado Royer Etduard Oxa
Huaytalla en el recurso fundamentado a fojas 1316 y siguientes, alega que no se ha desvirtua-
do el derecho a la presunción de inocencia, que del material pornográfico incautado, sólo dos
CDs contienen pornografía infantil y no todos los CDs y DVDs como erróneamente señalaría la
sentencia de vista; por último, señala que existiría un error en el punto IV de la sentencia - que
se refiere a la valoración integral de la prueba aportada-, la cual inferiría de manera insólita
que como su coprocesado, según el testimonio de Edgar Huamán Monzón, acudía a la cabina
de internet de Sr. Huamán Pipa ubicadas en el segundo piso de su inmueble, hasta tres veces
por semana, ambos se conocían y que se estarían dedicando a la distribución de pornografía
infantil a través de internet; por lo que solicita su absolución.
RESPECTO A LOS HECHOS CONTENIDOS EN LA ACUSACIÓN FISCAL
SEGUNDO: Conforme fluye de la acusación fiscal de fojas 953 y siguientes, se incrimina a los
encausados Juan Andrés Valenzuela Babilón y Royer Etduard Oxa Huaytalla, dedicarse a la po-
sesión, promoción, distribución y exhibición de pornografía infantil; dicha imputación estriba
que con fecha 04 de diciembre de 2008, como consecuencia de una pregunta denuncia falsa
remitida a la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (DIVIDAT) de la Policía
Nacional del Perú, proveniente de la cuenta de correo electrónico sacerdote2008@hotmail.
com, motivó el levantamiento del secreto de las comunicaciones; por lo que, la Policía creó
y agregó a su cuenta, el correo electrónico azucena210@hotmail.com, para iniciar una con-
versación con el titular del correo sacerdote2008@hotmail.com. Al iniciar una conversación
con el titular de la mencionada cuenta proporcionó dos números telefónicos, el 994201081
y 3879686, con la finalidad de mantenerse comunicados, llegándose a determinar que el
último número estaba registrado a nombre de Blanca Piedad Babilón de Valenzuela; que, los

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efectivos policiales luego enviaron un mensaje al número telefónico 994201081 invitándolo a


ingresar al chat, llegando a determinar que el usuario de la cuenta de correo sacerdote2008@
hotmail.com, se había cambiado a una cuenta de Yahoo utilizando el correo juanalbertova-
lencia@yahoo.com, donde mencionó que se llamaba Andrés Valenzuela Babilón; debido al
levantamiento de las comunicaciones del número 994201081, los investigadores determina-
ron que dicho número correspondía a la empresa agrícola “Las Llamosas”, quienes informaron
que la línea y el equipo móvil fue asignado a su ex empleado Juan Andrés Valenzuela Babilón,
habiéndose establecido a través de las investigaciones que de dicho número se efectuaron
llamadas entrantes y salientes a los números 3879686 y 3871562, y que éste último corres-
pondía a Filomeno Serapio Oxa Galarza, padre del encausado Royer Etduard Oxa Huaytalla;
se resalta que en la vivienda e éstos últimos se halló gran cantidad de material pornográfico.
RESPECTO A LA RESPONSABILIDAD PENAL DE ROYER ETDUARD OXA HUAYTALLA
TERCERO: De la revisión de los autos se advierte que el Tribunal de Instancia, evaluó con
objetividad y ponderación tanto los hechos objeto del proceso como las pruebas de cargo
y de descargo, los que en virtud a un acertado juicio de verosimilitud han producido sufi-
ciente convicción sobre la credibilidad de los hechos imputados al encausado Royer Etduard
Oxa Huaytalla; como principales elementos de cargos que sustentan el fallo condenatorio, se
tiene las Actas de Registro Domiciliario e Incautación de folios 48 y 50, aclarado mediante
parte de folios 107, ambas elaboradas en el inmueble del referido encausado Oxa Huaytalla,
ubicado en la Avenida San Martín de Porres N° 232, Canto Grande, distrito de San Juan de
Lurigancho, con la participación del representante del Ministerio Público, siendo que tanto en
los ambientes del tercer y cuarto piso, se consignó el hallazgo de gran cantidad de videos en
CDs, revistas y otras especies, todos con contenido sexual, además de varios CDs en blanco;
asimismo, se halló material de pornografía infantil en la habitación del referido encausado
[01 estuche conteniendo un DVD con inscripciones “Chivolts” y un CD con inscripción “Chili
27], si bien en la misma diligencia se dejó constancia de la existencia del contenido ilegal
de ambos archivos magnéticos, fue en el Acta de Visualización de Contenido de DVD, CD,
de folios 87, que describió que en ambos dispositivos, se apreciaban imágenes de menores
de edad totalmente desnudas mostrando sus genitales con personas al parecer mayores de
edad, en esta última diligencia también participó el representante del Ministerio Público, e
incluso fue suscrito por el referido encausado Oxa Huaytalla; sobre la propiedad de estos CDs
con contenido ilegal, en la manifestación policial de Filomeno Serapio Oxa Galarza, padre del
recurrente, obrante a folios 40, refiere que los videos y películas de contenido sexual infantil
le pertenecen a su hijo Royer Etduard Oxa Huaytalla, versión ratificada a nivel judicial como
es de verse de folios 192; asimismo, el recurrente Oxa Huaytalla, tanto en su manifestación
policial de folios 36 y su declaración instructiva de folios 253 reconoció que dichos CDs son
de su propiedad.
CUARTO: Como elementos de descargo el recurrente Royer Etduard Oxa Huaytalla a lo largo
del proceso ha negado que adquiera o se dedica a distribución de videos de contenido sexual
de menores de edad, si bien refiere que durante la diligencia de inspección en su domicilio
se hallaron dos CDs con contenido sexual prohibido, alega que los mismos los obtuvo de
manera accidental, y que sólo los vio una vez y que no los devolvió por falta de tiempo y por
vergüenza -véase declaración a fs. 1014/1016-; sin embargo, la justificación brindada por el
recurrente constituye un mero argumento de defensa orientado a desvirtuar la incriminación
que se le efectúa; no obstante, lo establecido en autos está afincado en que se le hallaron,
entre muchos, dos videos con pornografía infantil lo que acredita la hipótesis normativa es-
tablecida en artículo 183°-A del Código Penal, que recoge diversas conductas que pueden
materializarse de forma independiente o en forma conjunta, pero todas ellas reciben el nomen
iuris de pornografía infantil1 , tipo penal del que se desprende que será irrelevante que el
agente sólo haya cumplido con una sola de las conductas descritas en el citado tipo penal o
la cantidad de material pornográfico que se haya encontrado en su posesión, dado que en
cualquier caso el delito se habría perfeccionado; es así, que si bien no ha podido acreditarse
que los mismos tendrían como destino su comercialización; sin embargo, con el caudal pro-
batorio glosado en el considerando anterior queda acreditado la posesión de dicho material
pornográfico prohibido, pues los argumentos de defensa, distan mucho de la realidad, cabe
recordar que la venta de este material dado su carácter ilícito se realiza en forma clandesti-
na, siendo su acceso limitado, resultando poco probable que su proveedor por error le haya

1 SALINAS SICCHA, Ramiro. Derecho Penal Parle Especial. Grijley, Lima, 2012, p. 893.

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vendido dicho material; por lo que, la versión exculpatoria carece de validez y consistencia,
siendo así que con los elementos de cargo glosados en el considerando anterior queda esta-
blecida la responsabilidad del recurrente en los hechos imputados.
RESPECTO A LA RESPONSABILIDAD PENAL DE JUAN ANDRÉS VALENZUELA BABILÓN
QUINTO: En base al principio acusatorio dentro de un debido proceso penaI, correspon-
de al Estado -mediante el Ministerio Público-, en calidad de órgano constitucional autóno-
mo, acreditar de manera fehaciente, la comisión del hecho delictivo que éste imputa a todo
acusado. La actividad probatoria desplegada necesariamente ante un Juez imparcial, en un
juicio oral y público, desarrollado con las garantías del debate contradictorio, debe llevar al
convencimiento del juzgador, en grado de certeza, para arribar a una sentencia condenatoria,
caso contrario, de no darse este presupuesto, debe absolverse al imputado, al mantenerse
incólume la presunción de inocencia con la que ingresa a proceso penal y, en base al principio
jurídico procesal, que la culpabilidad se demuestra y la inocencia se presume. Es decir, es
responsabilidad funcional y procesal del Ministerio Público, en su rol de acusador, actuar esta
prueba para conseguir una condena. Este principio acusatorio constituye la columna vertebral
del juicio oral y por ende del debido proceso. En esta tarea no le corresponde al juez senten-
ciador destruir la presunción de inocencia, toda vez que, su rol es la de ser imparcial entre
el acusador y la defensa. Otra expresión del debido proceso, contemplada como garantía
constitucional es la debida motivación de las decisiones judiciales, principio que los jueces
debemos observar, al momento de resolver una causa sometida a nuestro conocimiento. La
exigencia que adquiere mayor relevancia cuando estamos frente a un proceso penal, en el
cual de por medio, está la decisión sobre la inocencia o culpabilidad de un procesado, y con
ello su encarcelamiento o su libertad.
SEXTO: Sobre la aplicación de la prueba indiciaria tenemos el Acuerdo Plenario en el Acuerdo
Plenario N° 1-2006/ESV-22, de fecha 13 de octubre de 2006, la que a su vez establece como
precedente vinculante el R.N. 1912-2005 de fecha 06 de setiembre de 20052 , que fijó en
su fundamento cuarto los presupuestos materiales de la prueba indiciaria; que, al respecto,
se ha pronunciado el Tribunal Constitucional3, el cual ha señalado que cuando el juez utiliza
la prueba indirecta para sustentar una sentencia condenatoria, y si ésta, a su vez, significa la
privación de la libertad, entonces, con mayor razón, se estará en la obligación de darle el
tratamiento que corresponde; solo así se podrá enervar válidamente el derecho a la presun-
ción de inocencia, así como se justificará la intervención al derecho a la libertad personal,
y por  consiguiente, se cumplirán las exigencias del derecho a la debida motivación de las
resoluciones judiciales, conforme a las exigencias previstas por el artículo 139°, inciso 5, de
la Constitución.
SÉPTIMO: Que, de la revisión de la sentencia de vista, se puede verificar que el Colegiado
sustentó el fallo condenatorio contra Juan Andrés Valenzuela Babilón en prueba indiciaría,
en este sentido, la sentencia recurrida en su fundamento cuarto toma en consideración los
siguientes indicios: i) las diversas cuentas de correo electrónico4 del encausado en que se
encontró material pornográfico, éstas a su vez servían para difundir las imágenes donde se
apreciaban a menores de edad sosteniendo sexo o simplemente en posiciones sugerentes,
material que sería -señalan- seguramente distribuido para su comercialización en el mercado;
ii) que estos videos de contenido pornográfico se han encontrado en el inmueble del acusado
Oxa Huaytalla; iii) la testimonial de Edgar Huamán Poma, el cual señala que el encausado
acudía a las cabinas de internet de su padre Huamán Pipa -ubicado en el segundo piso del
inmueble que habitaba Oxa Huaytalla- hasta tres veces por semanas, lo que evidencia -según
indicó el Tribunal- que ambos procesados se conocían y se estarían dedicando a la distribución

2 R.N.N° 1912-2005-PIURA de fecha 06 de Setiembre 2005. Fundamentos cuarto: “(...) respecto al indicio, (a)
este –hecho base– ha de estar plenamente probado por los diversos medios de prueba que autoriza la ley, pues de
lo contrario sería una mera sospecha sin sustento real alguno; (b) deben ser plurales, o excepcionalmente único,
pero de una singular fuerza acreditativa; (c) también deben ser concomitantes al hecho que se trata de probar –los
indicios deben ser periféricos respecto al dato fáctico a probar y desde luego no todos lo son–; (d) deben estar
interrelacionados, cuando sean varios, de modo que se refuercen entre sí y no excluyan el hecho consecuencia –no
solo se trata de suministrar los indicios, sino que estén imbricados entre sí (...)”.
3 STC Exp. N.° 728-2014, del 13 de octubre de 2008, caso Llamoja Hilares.
4 sacerdote2008@hotmail.com , babilonia_1979@hotmail.com, sdm_agustin@hotmail.com, jkl201001@hotmail.
com, leopardo.100@hotmail.com, juanalbertovalencia@yahoo.com.

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de pornografía infantil a través de internet, para luego distribuirlos en CDs, fomentando con
ello pornografía de menores de edad; y iv) la mala justificación, en tanto, considera que no
resulta creíble que el acusado tenga diversas cuentas para guardar información de cultura
general dado que a la fecha de los hechos era fácil el acceso a los buscadores de internet,
por ello la justificación brindada por el recurrente únicamente tiene por finalidad evadir su
responsabilidad.
OCTAVO: Del proceso, advertimos que revisada el Acta de Búsqueda y Visualización de Ar-
chivos contenidos en la Dirección de Correos Electrónicos y Página Web -obrante a fs. 700-
724-, se tiene que se encontró material pornográfico sólo en las cuentas de correo electrónico
sdm_aaustin@hotmail.com y sacerdote2008@hotmail.com. Evaluado el contenido de cada
correo electrónico, se verifica que el material pornográfico al que alude la Fiscalía en su tesis
incriminatoria, si bien corresponde a pornografía, esta no se relaciona con material de porno-
grafía infantil. En efecto, respecto al primer correo sdm_aaustin@hotmail.com, en la carpeta
de enviados se halló un correo remitido por esta cuenta al correo lobitoserkings@hotmail.
com, con el asunto “chicas lindas y desnudas”, en el cual consigna la página web www.horn-
ypharaoh.com, verificándose que el citado sitio web es de acceso público, es decir, cualquiera
puede acceder a ella ya que no es propiedad exclusiva del recurrente -hecho verificado por
personal de la DIVIDAT de la PNP, diligencia en que se contó con la presencia del representan-
te del Ministerio Público, como se puede verificar a fs. 718-. Asimismo, es preciso señalar que
de los iconos que se visualizan en la citada página web -a fs. 718-, y a los que hace referencia
la sentencia, no se advierte contenido pornográfico infantil, tampoco la mencionada acta
detalla que se hayan visualizado los videos y verificado el contenido de los mismos, como
se hizo en el Acta de Visualización de Contenido de DVD y CD -a fs. 87/90- incautados a su
coprocesado. Respecto a la cuenta de correo electrónico sacerdote2008@hotmail.com, utili-
zada para remitir una presunta conversación entre los sacerdotes Alejandro Nicolás Guerrero
Caña y Augusto Martín Sánchez Terán (después se estableció la falsedad de la conversación),
en las que se incluían imágenes de pornografía infantil - conforme es de verse a fs. 413/427-,
visualizada en presencia del representante del Ministerio Público, se verificó que dicha cuenta
no contenía material relacionado con pornografía infantil, y que respecto al e-mail corres-
pondiente a la referida conversación fue eliminado por el recurrente, sin reenviarse a otros
usuarios. Asimismo, ha podido acreditarse conforme al Acta de Búsqueda y Visualización de
folios 58 y el Acta de Visualización de Contenido de DVD y CD de folios de 725, que el mate-
rial pornográfico encontrado en el inmueble del encausado Oxa Huaytalla no es el mismo que
obra en las cuenta de correo electrónico de Valenzuela Babilón, pues como se ha señalado en
dicho correo solo se pudo encontrar el link de acceso público que remitía a la página web con
contenido pornográfico. Finalmente, sobre la vinculación entre los encausados Royer Etduard
Oxa Huaytalla y Juan Andrés Valenzuela Babilón es de apreciar que el testigo Edgar Huamán
Monzón, en su declaración de folios 34, con participación del Fiscal, señaló haber visto al
encausado hasta tres veces por semana, cuando daba mantenimiento a las computadoras,
en las cabinas de internet de propiedad de su padre, la cual funcionaba en el segundo piso
del inmueble que habitaba Oxa Huaytalla; agregando que nunca ha visto juntos a Valenzuela
Babilón y Oxa Huaytalla, y que éste último no hacía uso de las cabinas de internet, versión
que se ha mantenido a lo largo del proceso; en ese mismo, sentido Nicanor Huamán Pipa, pa-
dre de Edgar Huamán Monzón, en el contradictorio ha reiterado que era Valenzuela Babilón
quien frecuenta las cabinas de internet, y que por el contrario Oxa Huaytalla solo concurrió en
una oportunidad; de lo que se deriva que no es posible afirmar con certeza que entre ambos
existía una relación comunicacional vinculada a la pornografía. Según la tesis incriminatoria
del Ministerio Público otro elemento que corroboraría la vinculación entre ambos encausados
seria el reporte telefónico del número 994201081, que pertenecía al encausado Valenzuela
Babilón, y que por informe de la empresa de telefonía “Nextel” tendría entre sus registros
de llamadas entrantes y salientes el número telefónico 3871562, cuyo titular resulta ser Filo-
meno Serapio Oxa Galarza, padre del otro encausado; sin embargo, de la revisión de autos,
se advierte que no obra el informe del levantamiento de secreto de las comunicaciones del
referido número telefónico, ni de la empresa “Las Llamosas”, la cual certificaría que dicho
número fue asignado al referido encausado por haber laborado en dicho empresa; asimis-
mo, que revisado las actas del contradictorio, en el estadio procesal correspondiente, no se
advierte que dichas instrumentales hayan sido glosadas por el representante del Ministerio
Público, como es de verse de las sesiones de fecha 11 y 18 de diciembre de 2013; por lo que,

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no existe elemento directo o periférico que pueda corroborar de manera certera algún tipo de
vinculación entre ambos encausados.
NOVENO: En este sentido, en el presente caso no se ha desvirtuado fehacientemente la pre-
sunción de inocencia, y por ende no podemos pronunciarnos por la responsabilidad penal
del acusado Valenzuela Babilón por el delito de pornografía infantil, ya que del análisis de
las pruebas aportadas en el proceso sólo se tiene la mera sospecha de que el acusado pudo
haber poseído y/o realizado acciones de intercambio de material pornográfico infantil; que a
partir de esas referencias, débiles en sí mismas, sin mayores datos periféricos adicionales -y
debidamente enlazados- en orden a su presencia u oportunidad física para la comisión del
delito, a la oportunidad material para hacerlo, a una actitud sospechosa o conducta posterior,
y a una mala justificación -que no han sido acreditadas- son evidentemente insuficientes
para concluir que el encausado efectuó algunas de las conductas descritas en el tipo penal
imputado; que, en tal virtud ante la insuficiencia probatoria, es de aplicación el artículo 284°
del Código de Procedimientos Penales, toda vez que lo actuado, no nos permite superar el
estándar probatorio capaz de enervar la presunción de inocencia del imputado, prevista en
el apartado e) del inciso 24) del artículo 2° de la Constitución Política del Estado, deviniendo
por tanto su absolución.

DECISIÓN
Por estos fundamentos; declararon I. NO HABER NULIDAD en la sentencia de fojas mil
doscientos ochenta y seis y siguientes, de fecha quince de enero del dos mil catorce, en el
extremo que condenó a Royer Etduard Oxa Huaytalla como autor del delito contra la Liber-
tad-ofensas al pudor público-posesión, promoción, distribución y exhibición de pornografía
infantil, en agravio de la sociedad y menores de edad en vía de identificación, a cinco años
de pena privativa de libertad, y que fijó la suma de dos mil nuevos soles el monto que por
concepto de reparación civil deberá abonar a favor los agraviados. II. HABER NULIDAD en
la sentencia de fojas mil doscientos ochenta y seis y siguientes, de fecha quince de enero del
dos mil catorce, en el extremo que condenó a Juan Andrés Valenzuela Babilón como autor
del delito contra la Libertad- ofensas al pudor público-posesión, promoción, distribución y
exhibición de pornografía infantil, en agravio de la sociedad y menores de edad en vía de
identificación, a cinco años de pena privativa de libertad; y reformándola: ABSOLVIERON
al encausado Juan Andrés Valenzuela Babilón del citado delito y agraviadas; en consecuen-
cia: ORDENARON se anulen los antecedentes policiales y judiciales del precitado encausado
generados por estos hechos; DISPUSIERON la inmediata libertad del imputado Juan Andrés
Valenzuela Babilón, siempre y cuando, no exista en su contra mandato de detención emanado
de autoridad competente oficiándose vía fax para tal efecto a la Cuarta Sala Penal para Proce-
sos con Reos en Cárcel de la Corte Superior de Justicia de Lima; y los devolvieron. Interviene
el señor Juez Supremo Morales Parraguez por licencia del señor Juez Supremo Villa Stein.
S. S.
PARIONA PASTRANA / BARRIOS ALVARADO / NEYRA FLORES / MORALES PARRAGUEZ /
CEVALLOS VEGAS

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