Sunteți pe pagina 1din 14

1

RESUMEN SOCIEDAD Y ESTADO


Marcelo Cabarozzi
‘’Autoritarismo y democracia'’
CAPITULO I – EL FRACASO DE LA ‘’SEMIDEMOCRACIA’’ Y SUS LEGADOS
En 1955 se dio el golpe cívico-militar que le dio fin al peronismo. Puso fin al modelo
Peronista que se basaba en la relación entre el líder y las masas.
Los líderes del golpe caracterizaron al régimen peronismo como una dictadura totalitaria y en
consecuencia levantaron el golpe como un llamado de libertad.
El peronismo sobrevivió a la caída de su gobierno y se constituyó en el eje de un movimiento
opositor lo que llevo a que los antiperonistas proclamaran la proscripción del peronismo. Esta
proscripción hizo que se introduzca una profunda disyunción entre la sociedad, se crearon dos
bloques: por un lado, los peronistas y por otro los antiperonistas.
La clase obrera perdió toda representación tanto en los sectores semidemocráticos como
como en la maquinaria institucional del Estado. Mientras tanto la clase media y alta tuvieron
un efecto contrario, ya que durante el peronismo perdieron protagonismo, tuvieron
posibilidad de acceder tanto a mecanismos parlamentarios como extra instituciones, acceso al
estado y a ejercer políticas e impactos de acciones estatales. Esto logro de que los sindicatos
se convirtieran en la expresión organizada más poderosa de aquel momento.
Se dio una disyunción dentro de la disyunción que afecto al anti peronismo y a los militares,
esto se dio por dos circunstancias: 1) los militares “democráticos” fueron perdiendo
progresivamente su vocación democrática para ejercer autoridad lo cual llevo a
enfrentamientos con los partidos políticos. 2) los partidos antiperonistas se transformaron en
el principal canal de expresión de una compleja interacción entre dos controversias que
dominaron la escena política argentina luego de la caída de Perón. Es decir, ambos sectores
querían perpetrarse en el poder y ser la rama representativa del anti peronismo en un régimen
semidemocrático.
La clase burguesa y la clase media eran los gorilas quienes consideraban al peronismo como
un cáncer que tenían que extirpar de la sociedad.
Los partidos políticos desarrollaban posturas diferentes con respecto al peronismo que iban al
integrar al gorilismo. En el aspecto economismo al peronismo se le adjudicaba realizar un
conjunto de medidas poco efectivas y una alta corrupción.
Surgieron tres tipos de alternativas acerca del curso a seguir en materia de política económica
dentro del anti peronismo
 Populismo reformista: eran los radicales del pueblo, gorilas en lo político, pero
mercado internista en lo económico.
 Desarrollista: Integración en lo político, pero afecto a la apertura de la economía hacia
los capitales externos, y un profundo cambio en el modelo, dirigido a la industria
pesada.
 Liberal: Era pendular, carecía de base popular, coincidía con los desarrollistas en
algunos aspectos económicos, pero discrepaba abiertamente en su integración.
2

La presencia de la proscripción del movimiento peronista fue uno de los factores


determinantes de los modos en que las organizaciones políticas. El desarrollismo y el
liberalismo entraron en numerosas alianzas y conflictos.
Debido a las condiciones descriptas, Argentina entra en un periodo de inestabilidad,
institucional e impotencia para desarrollar un proyecto que supere a crisis generada por la
dicotomía manifiesta dentro de la sociedad.
Los liberales, al no poder coincidir sus objetivos de largo paz con ninguna de las fuerzas
políticas dominantes, optaron lentamente por armar una estrategia vinculada a un sistema
antidemocrática, que es permitiese llevar adelante sus proyectos económicos.
Entre 1944-1966 llegaron a la conclusión de que, solo rompiendo con los acuerdos
políticos, podrían implementar sus programas económicos.
El movimiento sindical
Los sindicatos peronistas que habían controlado los sindicatos hasta 1955 se vieron
desplazados de la escena sindical, y nunca recuperaron su lugar.
El proyecto de los militares creo las condiciones para el surgimiento de un movimiento
sindical peronista enteramente diferente que gano cierta independencia frente a Perón y
fue capaz de desarrollar su propia estrategia política. Sin embargo, Perón no desapareció
de a escena política argentina ni del peronismo, pero su rol sufrió cambios significativos,
la relación con las masas ya no era la misma porque ya no tenía el poder de satisfacer sus
necesidades. Al mismo tiempo Perón emergió como el principal símbolo de retorno lo
cual genero una imagen de esperanza en los peronistas. Perón perdió su poder para
controlar a los líderes peronistas sobre todo en áreas metropolitas de la región pampeana
y muchos líderes sindicales crearon bases propias de poder.
La proscribió del peronismo fue levantada. El movimiento sindical al no tener
responsabilidad gubernamental, tampoco tuvo temor a las consecuencias de sus
conductas, y principalmente sus demandas.
En síntesis, la estrategia de los sindicatos fue en principio de resistencia, pero ante la
implementación, por parte de los antiperonistas de políticas de estabilización, a partir de
1959 iniciaron también una tácita de contraataque, con el objetivo de que n siguiese
deteriorándose el salario percibido.
Los militares
Las fuerzas armadas se habían constituido en guardianes de los gobiernos
constitucionales, derrocando tres administraciones civiles. En sus primeras intervenciones
1930 y 1943 su intervención no tuvo como propuesta institucionalizar regímenes no
democráticos, controlados permanentemente por las fuerzas armadas.
A partir de 1955 desarrollaron un estilo de intervención tutelar.
1. exclusión del peronismo del proceso electoral y las instituciones representativas del
Estado
2. Tenían poder sobre la institución del gobierno de 1958 por lo tanto querían imponer
sus propias preferencias en los asuntos públicos.
3

3. Cambia l patrón de conducta de las fuerzas armadas, deslizándose hacia una


intervención tutelar, que les va a permitir controlar al poder ejecutivo desempeñado
por civiles.
Todo lo que hacían decían que era bajo un régimen democrático. El peronismo y el
comunismo fueron nombrados como antidemocrático, porque fueron considerados como
fuerzas que pretendían subvertir el orden constitucional.
En 1960 se dieron cuenta que los beneficios obtenidos mediante la intervención tutelar
eran inferiores a los costos ocasionados por esta.
Entre 1959 y 1963 se dio la fragmentación militar a raíz de confrontaciones entre
fracciones opuestas. Azules y colorados diferencian en muchos aspectos políticos,
especialmente sobre a conservación del sistema constitucional, la actitud hacia el
peronismo, y el trato de los partidos políticos y sindicales. Ambas confrontaciones, en dos
ocasiones terminaron en enfrentamientos armados, donde ganaron los azules, y a su vez
surgió un nuevo general, Onganía.
A partir de 1963 con la llegada de los radicales del pueblo al poder, se dieron cuenta que
debían adoptar una nueva estrategia. La integración ‘’profesionalita’’ de 1963-1966
presidió e hizo posible la articulación definitiva de la doctrina de la ‘’seguridad nacional’',
el gobierno iba a asumir la responsabilidad única en el manejo de los asuntos públicos.
Los grupos liberales recibieron la noticia como un gran alivio, ya que tales grupos había
lado a la conclusión de que, en el juego planteado por las políticas parlamentaria, les
tocaba invariablemente elegir entre alternativas igualmente insatisfactorias. A su vez esto
le proveería los medios para dar un golpe final, a los sindicatos peronistas que se habían
convertido en uno de los actores políticos más importantes.
El sindicalismo peronista y la corriente hegemonía dentro de él, o sea el sector apoyado
por Augusto Vandor, es decir el vandorismo que parecían apoyar el golpe militar de 1966
reflejo dos cosas:
1. La ambigüedad inicial de las propuestas de Onganía de política económica
2. Posibilidad de convertirse en el único intermediario entre el poder y las masa, para
este dirigente obrero pretendía reemplazar a Perón.
El vadorismo, asociaba a su movimiento con la verticalidad por Perón, y ejemplificada en
el funcionamiento de las fuerzas armadas la iglesia y la familia.
De acuerdo con este análisis, el Estado debería ser un padre protector, de la industria de
comercio y del agro.
Los trabajadores, liberados por Vandor, aparecían en este esquema de poder como
vinculados al estado y participantes de las decisiones de un gobierno que al menos en las
declaraciones se proclamaba así mismo como nacionalista y estatista.
4

CAPITULO II ‘’EL PREDOMINIO MILITAR Y LA


PROFUNDIZACION DEL AUTORITARISMO’’
La ‘’Revolución Argentina’’ tuvo dos objetivos por un lado suspender las actividades de los
partidos políticos y las instituciones parlamentarias. Por otro lado, consagrar expresamente la
desvinculación de las Fuerzas Armadas del gobierno disponiéndose que estas ‘’ no gobernaran ni
cogobernaran’’.
La política dejaría el lugar a la administración con el resultante predominio de técnicos situados
por encima de los intereses sectoriales y capaces de proponer e implementar las soluciones más
ópticas.
Onganía consideraba que el problema de la Argentina era político por lo tanto propuso una
renovación de la misma.
En cuanto a la economía, el programa consistió en renovar las políticas desarrollistas llevadas a
cabo por el gobierno de Frondizi hasta 1966. El propósito del desarrollismo era volver comunicar
el dinamismo de la economía mediante la integración del sector industrial, desarrollando y
modernizando su infraestructura para restaurar el predominio de las unidades oligopólicas dentro
de los sectores mencionados.
Este modelo durante dos años tuvo sus triunfos políticos: aumento la inversión de capitales,
descenso de la inflación, mejora en la situación de la balanza de pagos, y un costo social menor al
esperado inicialmente.
Las consecuencias fueron: los partidos cayeron en un pozo de irrelevancia e inactividad, los
sindicatos fueron forzados a negociar y hasta aceptar algunos de sus derechos más preciados
como el derecho a huelga.
Perón se fue convirtiendo en una especie de muerto político aparentemente sin el poder
que había tenido anteriormente para desestabilizar tanto gobiernos militares como civiles.
Sin embargo, hubo algunos aspectos que escaparon al control del gobierno y que
generarían los mayores inconvenientes: la situación externa, absueltamente inversa a la
que se vivía en el país sobre todo en los países centrales, donde comenzaban a vivirse
expresiones rebeldía a los gobiernos anquilosados y una reacción elocuente a todo tipo de
autoridad desde el seno de la familia donde se cuestionaban a los padres, hasta la
autoridad de los gobiernos.
Siendo en ese campo la manifestación más elocuente ‘’EL MAYO FRANCES’’ y la
‘’PRIMAVERA DE PRAGA’’
El otro aspecto donde se conversaba una grave dificultad del gobierno era su aislamiento
con respecto a todos los otros grupos de poder, comenzando por las propias fuerzas
armadas que habían sido excluidas de su participación en las decisiones del gobierno.
SINDICATOS
Los dirigentes sindicales tendieron a utilizar la movilización como arma para el chantaje
frente a otros sectores y el Estado, valorando no solo la capacidad de generar
movilizaciones sino también conducir y hasta incluso frenarlas.
Las medidas antisindicalistas tomadas a partir de 1966 no liquidaron ni a los gremios ni a
sus dirigentes, sino que fueron forzados a aceptar dócilmente las políticas
gubernamentales. El movimiento sindical no desapareció, pero soporto medidas
indiciadas por los radicales del pueblo y luego ampliadas por Onganía tendientes a
atomizarlos, lo cual lo obligo a mantenerse alerta disciplinado y conducido hábilmente
5

por Vandor, por ese liderazgo se vio hacia 1968/69 acosado por la derecha y desbordado
por Izquierda.
Los participacioncitas y colaboracionistas, perjudicaron la tradicional capacidad de
negociadora de Vandor, y por otro de los intransigentes, apareciese un conjunto de
trabajadores con ideologías de izquierda, que le quitaran la conducción de la CGT al
vandorismo y se dispusiesen a luchar contra el gobierno dirigido por Ongaro, pero los
primeros no reconocieron el resultado y como consecuencia se fracturó la CGT.
El aislamiento e ignorancia del gobierno frente a la sociedad, se sumó la renuncia de las
Fuerzas Armadas a desencadenar una represión más intensa que la aplicada
anteriormente, Onganía había perdido noción de todo lo que estaba haciendo. Se dio la
imagen de un Estado aislado, quedando su discurso sin autoridad ni legitimidad, a su vez
también perdió legitimidad su gobierno.
En 1969 se dio el CORDOBAZO que fue un levantamiento espontaneo en contra del
gobierno de Onganía, donde estudiantes, obreros, pobres urbanos se manifestaron en
contra del régimen autoritario del gobierno militar.
El Cordobazo dio a luz la incapacidad para mantener el orden y puso en evidencia dos
crisis: la del gobierno militar y por otro la de dominación.
Llegaba tardíamente a la Argentina el movimiento liberador que un año atrás se había
expandido por Europa y los Estados Unidos, donde se cuestionaban, no solo las
decisiones gubernamentales, sino también, todo tipo de autoridad, desde la de los padres
de familia, los profesores y por supuesto los gerentes de empresas.
El intento de Livingston de profundizar la ‘'Revolución Argentina’’ dándole un carácter
más nacionalista.
La dictadura enfrentaba cuestionamientos puntuales:
1. Las políticas económicas ‘’liberales’’, que habían conducido a la pauperización de
empleados estatales, pequeños y medios empresarios, inquilinos y cooperativistas.
2. La necesidad por parte de la población de recuperar el régimen democrático en toda
su expresión.
3. Los jóvenes que, desilusionados con los distintos sistemas de representación y
autoritarismo extremo, buscaron en la subversión su forma de expresión, evitando
mecanismos institucionales, y tratando de imponer su ‘’socialismo tradicional’’.
La pérdida de tiempo producida con el autismo de Onganía y el interregno de Livingston,
llevo a la sociedad argentina a un punto de quiebre, que solo podía ser recompuesto a
través de un llamado a la participación de todas las fuerzas representativas, incluido el
peronismo, ya que al desquicio acaecido por la crisis de dominación, hechos como el
secuestro y muerte de Aramburu por parte de Montoneros o el segundo Cordobazo, más
violento y clasista que el anterior, espantaron a la burguesía que comprendido finalmente
que la crisis de representación significaba un grave peligro para la cohesión de la
sociedad.
A partir de 1971, las oposiciones capturan la escena política y los diferentes actores
interpretaron que era un buen momento para imponer sus diferentes proyectos.
6

De esa forma se abrió un canal de expresión que permitió ‘’recuperar’’ cierta


cotidianeidad y reorientación de las secciones dirigidas a reabsorber la crisis surgida en
1969.
En 1973, consolidado el triunfo del frente peronista, tras su regreso triunfal, en el periodo
señalado y puesto en evidencia el fracaso de los militares, quedarían expuestos los
salvajes enfrentamientos, entre los distintos grupos que conformaban el sector, que habían
alcanzado la victoria por las urnas ese mismo año.
La espectacular reparación de Perón, como líder, leyenda y mito viviente y su
reconciliación con B entronizado como jefe de la oposición, apagaron en aquel entonces
cualquier tipo de voz discordante.

Retorno de Perón, fracaso de sus proyectos de industrialización política.

Perón coincidía con Onganía que el problema de la Argentina era político.


Perón apuntó a crear un doble arco de articulaciones de los actores políticos y sociales. El
primero consistió en el intento de reedición entre las asociaciones gremiales de
trabajadores y empresarios, se convocó a los dirigentes de la CGT y la CGE a
acordar niveles generales de aumentos salariales comprometiéndose a respetarlos durante
su vigencia y someterse el estado en caso de eventuales desacuerdos.

El sindicalismo, salvo en los meses que gobernó Perón, nunca se apartó de su estrategia
defensiva y opositora.
Su proyecto siempre fue sectorial, pero alcanzo para bloquear los proyectos más globales
que intentaron llevar a cabo la guerrilla, Perón y los sectores fascistas.
Hacia 1975 ya habían sido excluidos los la guerrilla y los empresarios nucleados en la
CGE. José López intento deshacerse de la oposición sindical opositora al peronismo por
medio del accionar de las Fuerzas Armadas ya que querían involucrarlas en el gobierno.
El intento desestabilizador, paso previo a la eliminación también de las instituciones y de
las garantías constitucionales, tropezó en su proyecto cuando el RODRIGAZO, (Plan
económico de fuertes ajuste tarifario, y reducción del poder adquisitivo de los
trabajadores) finalizó en un estruendoso fracaso, generando como consecuencias más
salientes:
 Deterioro de la figura de Isabel Perón.
 La salida apresurada y desprolija del gobierno del súper poderoso López
Reja.
Entre el periodo de la caída de Isabel de Perón y el Rodrigazo se vio un síndrome de
la sociedad desgobernada. Por una parte, consistió en la completa desarticulación del
frente de fuerzas que se había expresado a través del FREJULI. La burguesía y los
militares recuperaron el rol protagónico y comenzaron a desarrollar un plan que inicio
en Tucumán, con ‘’operativo independencia’’ para finiquitar la guerrilla rural.
Ante la desarticulación del peronismo como garantía de la legitimidad y dominio, a
sociedad argentina quedo expuesta a un estado represor como nunca se había visto en el
país.
7

En ese marco, los trabajadores tendieron a defender solo su salario, realizado demandas
que un estado debilitado como el que describimos solo podía conformar a medidas y sin
autoridad ninguna.
Los empresarios por su parte desafiaban todo tipo de regulación económica remarcaban
precios irresponsables, favoreciendo el caos económico.
La violencia se transformó en el recurso cotidiano. En medio de ese desorden, dos áreas
importantes de la historia reciente, retoman sus roles protagónicos.
 Las fuerzas armadas
 Los grandes grupos empresarios de ideología liberal
El proyecto en ciernes de estos dos acores, era apropiarse definitivamente del poder, y
crear una nueva sociedad, efectuada de todos los vicios de la vieja.
El golpe de 1976: Revolución burguesa en contra del proletariado y de los
burgueses.
En 1976 la idea del golpe fue más revolucionaria que en las oportunidades anteriores.
La idea fue forjar un gobierno de las fuerzas armadas, con carácter global, y la idea de
generar una nueva sociedad.
Para los militares victorioso de 1976 el desarrollismo se transformó en el correlato del
populismo. Ambos eran considerados la cara de la misma moneda, la que les permitió, a los
sindicatos cobrar la fortaleza que en 1976 podrían detentar, el primero dándole identidad el
segundo favoreciendo con su plan industrializador su organización y participación en las
decisiones de gobierno.
Descartadas esas dos posturas de ideologías. Solo quedaba allanado el camino para la
implementación de una ideología extremadamente liberal, el neoliberalismo.
Con la llegada del ministro de economía Martínez de Oz al ministerio, se dio una
convergencia infrecuente en la historia argentina, la ideología liberal, que comenzaba a
recuperar audiencia a nivel mundial, debido al desgaste del estado de bienestar y el
agotamiento de las políticas keynesianas por la Crisis del Petróleo, coincidía en el nuevo
propósito de los militares, ahora, a diferencia del pasado, desindustrializado.
Los liberales pudieron articular un discurso en el que se integraron tres núcleos temáticos:
1. Subversión: Querían eliminar todo que pueda cuestionar a la autoridad.
2. La sociedad política populista: el peronismo, los sindicatos, radicales y de izquierda.
3. Debilitar la economía del sector industrial y sus soportes sociales básicos, una clase
obrera ‘’indisciplinada’’ y un empresariado ‘’ineficiente’’.
Necesitaban un ESTADO FUERTE, para poder aplicar las políticas que la nueva
globalización les demandaba, Dogmatismo monetarista y activismo estatista era la
combinación perfecta.
Caracterizaban a la sociedad argentina como una sociedad en guerra, donde las tareas
militares eran una forma de extirpar el cáncer de la subversión en todas sus ramificaciones.
Las fuerzas armadas fueron ramificadas para reprimir, es decir la sociedad estaba bajo el
control de la Junta de comandantes.
8

La revolución en serie que proponían los liberales exigía que el Estado se disciplinase a sí
mismo, eliminando empresas públicas y empleos, desmantelando sistemas de subsidio y
absteniéndose de fiar precios sociales para sus servicios. Sin embargo, esta medida avanzo
muy lentamente, y no como se esperaba.
Por el contrario, se encararon proyectos que resultaron contraproduntes en ese aspecto,
aumentaron en forma acelerada el gasto público, como el mundial de futbol de 1978 y todo lo
que conllevaba: la creación de obras públicas como estadios, autopistas, satélites y la
televisión a color.
Donde el ministro de economía tuvo cierto éxito fue en modificar algunos de los hábitos de
trabajadores y empresarios, debilitando la fuerza de choque de los trabajadores, quintándoles
representación gremial, atomizándolos.
Los años de Videla marcaron el periodo más extenso de inactividad sindical desde 1943.
En cuanto a la implementación de los cambios, la medida más importante tomada por el
gobierno fue la REFORMA FINANCIERA DE 1977, que estableció diferentes valores para
el dólar, (originando la tablita), con la idea de controlar la inflación, anclándolo en un valor
oficia, muy por debajo de su verdadera cotización.
El fin del autoritarismo: viejos y nuevos dilemas:
La década del 80 se fueron reve
lando las barbaries de la represión y el gansterismo que domino la gestión pública a partir de
1976.
Las internas dentro de las fuerzas armadas aumentaron sumaron las pugnas entre esta arma y
la marina comandad por Masera,
El reemplazante de Videla fue el General Roberto Viola, intento reformas que respondían a
demandas de los sectores empresarios afectados por las políticas de Martínez de Hoz, su
colega Galtieri comenzó a conspirar para desplazarlo calificando a Viola de débil y
claudicante
Durante la presidencia de Viola, los militares fracasaron en su intento de orientar en su favor
la liberación política de un régimen autoritario. Tomaron medidas en favor del empresario
exportador que generaron una brutal aparición del dólar y licuar la deuda privada con la
pública a través de su económico. Al no poder, los altos mandos comenzaron a conspirar
contra el presidente que ellos mismos habían designado, a quien demoraron nueve meses en
echar, reemplázalo por Galtieri.
Galtieri fracaso en sus primeros pasos, en los cuales decidió aspirara retomar la ortodoxia
economía liberal con el nombramiento de Roberto Alemán como ministro de economía
Intentando una política de revolución, pero por el gran caos económico que llevaron a cabo
sus antecesores por una impredecible devaluación lo obligaron a tomar decisiones alocadas
como la de ocupar las islas Malvinas. Dándose la guerra de Malvinas.

Consecuencias de la guerra:
 Multiplicación d jóvenes argentinos
9

 Agravamiento de la crisis económica, aumentando la deuda.


 Dilapidación del ultimo crédito que quedaba a la casta militar.
Consumió a última esperanza de la cúpula miliar de redefinir las bases del poder del régimen
y la forzó a convocar a los partidos políticos para convertir la entrega del gobierno a plazo
corto y cierto. El fracaso de las juntas militares fue tan grande que solo aspiraron a evitar el
futuro gobierno producto de la democracia no investigará los excesos ocurridos durante la
‘’guerra sucia’’
No pudieron negociar ninguna rescisión consensuada, se decretaron en auto amnistía.
En cuanto a los problemas que luego de entregarle el poder a los civiles sobre vendrían, es
necesario remarcar que en 1975:
1. Se quebró el periodo de crecimiento ininterrumpido desde 1964
2. La inflación se descontrolo
3. La balanza de pagos arroyo un déficit similar a los peores periodos de la historia
4. Hubo una pronunciada recesión de los sectores industriales y de la construcción
Durante 1981-1982 se produjo una crisis, la cual afecto principalmente al Gobierno de Viola,
hubo factores externos e internos.
Factores externos:
 Incremento de la deuda externa
 Suba de las tasas de interés a nivel internacional
 Brusco descenso del ingreso de capitales de la región, que afecto a los grandes
deudores de la región especialmente México, Brasil y Argentina
Factores internos:
 Aceleración de desligitaminacion que sufrió el gobierno militar desde 1981.
 Violentos cambios políticos (reemplazado de Viola por Videla, devaluación muy
significativa del peso, reemplazado de Galtieri por Viola, guerra de Malvinas,
reemplazo de Bignone por Galtieri.
 Fuga masiva de capitales, en algunos casos de los mismos argentinos que buscaban
poner a resguardo sus ganancias fuera del país.
 Licuación de la deuda privada con la pública.
10

CAPITULO III: EL REARMADO DE LA POLITICA ARGENTINA:


1983-2006
En 1983 Bignone no tuvo más remedio que entregarle el gobierno al candidato menos
deseado por las Fuerzas Armadas e inesperado ganador de las elecciones, Raúl Alfonsín.
En 1893 ninguno de los partidos políticos en pugna notaron la magnitud de la destrucción del
Estado argentino, ni tampoco los importantes cambios producto de la globalización a nivel
mundial.
1. El aumento del capital financiero
2. El fortalecimiento del dogma neoliberal tras la llegada al poder de Margaret Thatcher
(UK), Ronald Reagan(USA)
3. La revolución informática.
4. En consecuencia, a la revolución informática aumentan las desregulaciones e
independencia de las empresas privadas del control estatal.
5. La hiperinflación de 1989 termino por pulverizar la soberanía del Estado argentino.
En la brecha abierta por un Estado carente de una moneda y que prestaba de forma
carente los servicios básicos se instalaron los sucesores del alfonsinismo, Carlos Menem.
Menem, condicionado por los mercados Menem se dio cuenta que había que hacer un
proceso de achicamiento del estado, el cual fue presentado como una forma para salir de
la crisis, este proceso ya había empezado en 1975 pero debido a la resistencia de los
actores políticos (sindicatos, partidos políticos y parte de las fuerzas armadas) no se pudo
concretar. Esta tarea fue llevada a cabo con ayuda de intérpretes del neoliberalismo a
nivel mundial, es decir el ingeniero Álvaro Alsogaray y Mariano Grondona.
En este caso, a diferencia de aquellos tiempos, la idea que trato de generarse fue la de
presentar la privatización y las medidas de desregulación, no como un proyecto
despóticamente impuesto a sangre y fuego, tal como se intentó entre 1976-1983, sino
como el desenlace lógico y democrático de la respuesta gubernamental al clamor
ciudadano.
Frente a la precipitada de Alfonsín al poder, Carlos Menem, luego de varias
negociaciones, tuvo que hacerse cargo del poder seis meses antes de los previsto.

Dos hechos cambiaron la imagen del poder ejecutivo y lo fortalecieron:


1. La indisciplina militar: Control del Menem sobre las fuerzas armadas,
reprimiéndolos exitosamente.
2. La desaparición forzada de la moneda, basada en la convertivertibilidad,
reemplazando el austral por el peso y anulando al dólar.
En 1991 se firmó el tratado de Asunción, que dio origen a la creación del
Mercosur.
11

La destrucción del Estado se profundizó durante la década menemista con la


implementación de un recetario neoliberal en la administración del mismo.
El estado argentino noto su incapacidad para postularse como un Estado que implementa
las mismas reglas para los que tienen y no tienen, por lo tanto, entre 1980 y 1990 se dio
un proceso que alimento significativamente la de desigualdad económica y social,
generando la perdida efectiva de la ciudadanía para muchos argentinos.
El estado concebido de esta forma pierde centralidad es incapaz de establecer medidas de
equidad, de cumplir sus roles primarios de brindar educación y salud de calidad.
La colonización de áreas estatales por algunos grupos empresariales, tanto de origen
extranjero como nacional. La experiencia menemista por lo tanto construyo una suerte de
neopopulismo para ticos, financiando, por los fondos generados por la nueva envión de
endeudamiento externo producido entre 1991 y 1994 y reiniciado entre 1996 y1998
desde la crisis del tequila.
La revolución informática y la globalización favorecieron el proceso de modernización y
reforma del estado, dando como resultado el ya mencionado agrandamiento de la brecha
social.
La apertura económica que perjudico abiertamente a las industrias, pequeñas con capital
nacional, y especialmente las afincadas del NOA, y en la Patagonia lo cual género en la
década del 90 incremento el número de desocupados alcanzado el porcentaje inédito en
la argentina del siglo XX.
Otro pilar que fue perdiendo su rol protagónico fue la educación pública, Desatendida
deliberadamente a partir de la destrucción del Estado. El autor Romero afirma que la
educación fue un gran instrumento para la incorporación: el niño escolarizado va a poder
acceder a un buen empleo y la plenitud de sus derechos. La degradación de la educación
pública fue un fenómeno de carácter cualitativo.
La precarización y contratación del empleó y le empobrecimiento material y simbólico
de la enseñanza pública constituyeron dos de los mecanismos fundamentales, si bien no
fueron los únicos, del despojo al que fueron sometidos los sectores populares,
especialmente y también los sectores medios que habían florecido en la Argentina vital.
Transformándose en un proceso de des ciudadanización de importantes franjas de los
sectores bajos y medios bajo dela población, que perdieron su sentido de identificación y
permanencia.
E final de esta tragedia se relocalizo en cámara lenta, al punto de que, fueron los
dirigentes de la alianza de la UCR y el repaso quienes heredaron la bomba que les
estallaría en las manos, interrumpiendo su mandato a solo dos años de haber asumido de
la Rúa.
Siendo el principal error de estos últimos haber mantenido vigente el esquema de
convertibilidad que venía arrojando altísimos costos sociales económicos culturales y
laborales.
12

La primavera democrática y su ocaso.


Durante esta década Alfonsín primero como candidato presidencial, luego como
Presidente de la Nación y finalmente como la figura central de su partido, coloco a la
idea de pacto, primero denostándola y luego ensalzándola en el centro de la política
argentina. Se dieron dos pactos:
1. El pacto Militar- Sindical que como candidato radical denuncio en abril de 1983
en la instancia crucial de la campaña presidencial que golpeó fuerte al peronismo
de aquel entonces (1983)
2. El pacto de Olivos que firmo con el presidente Menem e noviembre de 1993
acordando la convocatoria a una modificación de la constitución nacional y la
posibilidad de reelección.
3. El pacto Democrático que Alfonsín lanzo en octubre de 1986, pretendía
establecer para sacar a la republica de sus dificultades económicas con la
colaboración del peronismo y la fundación del tener movimiento histórico.
La campaña electoral de 1983 desplegada por Alfonsín en representación de la UCR
fue impecable, apelado a los costados débiles del peronismo, y las graves violaciones
a los derechos humanos llevados a cabo por los militares, con cierta complicidad de
los propios peronistas. Esa situación lo llevo a denunciar el primero de esos pactos, el
pacto militar sindical, que tantos réditos le daría en votos, porque aun sin pruebas
fehacientes, la gente lo creyó.
Una vez en el poder, y a a distancia es observable por parte de aquel gobierno, una
engañosa simplificación en adjurarle todos los males que afeaban a nuestra sociedad
a la dictadura, y una notable exageración de confianza en la eficacia de la democracia
para subsanar la crisis, o solo política sino también económica.
El mundo había cambiado vertiginosamente, pero no fue advertido correctamente por
los partidos políticos, ni siquiera el radicalismo gobernante.
Tres elementos generaron una grave dificultad para lograr el éxito, fundamentalmente
en el aspecto económico.
Un régimen democrático se encuentra obligado a establecer consenso de
compromiso, teniendo que:
 Hacer crecer la economía
 Redistribuir progresivamente el ingreso
 Evitar que la inflación desborde
 Sin ejercer un desciplinamiento autoritario
Teniendo en cuenta la herencia del proceso esa solución era inviable.
Además de todo eso descansa en la creencia de que los países capitalistas poderosos
induran a los bancos acreedores a condenar la deuda externa.
La ‘’mano’’ que le extendió los estados unidos a Alfonsín no solo constituyo en un
elemento imprescindible para el efímero Plan Austral, elaborado por técnicos
13

profesionales liderados por Juan Sorroullie. La decisión de apoyar la refinanciación


de la deuda argentina se vinculó con el lanzamiento del Plan Becker, Se emitieron
bonos garantizados para canjear las deudas, pero con estos canjes venían las
consecuencias, los deudores estaban obligados a implementar programas de reforma
estructural que redujeran drásticamente el papel del Estado en la economía, a través
de medidas desregulatorias, la privatización de empresas y servicios públicos y la
apertura comercial.
Como el gobierno de Alfonsín no consiguió respetar los acuerdos de refinanciación y
sus programas de reforma estructural fueron calificados como insuficientes, un par de
años más tardes, y coincidiendo con el cambio de gobierno en Estados Unidos, la
mano tendida atrás fue retirada lo cual genero un congelamiento general de los
precios y salarios, Una verdadera catástrofe, al prácticamente desaparecer la moneda.
El intento de realizar en 1986, con algunos dirigentes gremiales con la ambiciosa idea
de fundar el tercer movimiento histórico, desarticulado al peronismo, al quitarle uno
de sus pilares, Carlos Alderete fue nombrado como ministro de Trabajo, este
nombramiento materializo, un Pacto Sindical-Radical con el que el gobierno
alfonsinista aspiraba a alcanzar dos objetivos:
1. La neutralización por parte de la dura oposición encarnada por la CGT y su
secretario general Saul Ubaldini quien seguía organizando paro tras paro
2. Los salarios reales, el cual apunto a la formación de un tercer movimiento
histórico que le permitiera a la UCR convertirse en el eje de una fuerza
política con una posición prácticamente hegemónica en el plano electoral.
La operación rápidamente fracaso, el impacto mediático y sobre la opinión pública fue
opacado por un hecho más espectacular y amenazante: La crisis militar en semana
santa, que se dio después del cambio de ministro de trabajo y puso al desnudo la
debilidad de las instituciones civiles, donde la resolución final del conflicto quebró la
credibilidad y autoridad del presidente, al pactar con los sublevados, tratarlos de
héroes y otorgarles la ley de obediencia debida que dejaba afuera de todo juzgamiento
de miles de opresores. lo cual le genero el debilitamiento de la confianza en el
gobierno.
A demás el pacto aparecía como contradictorio con el anterior, que había sido
denunciado por la UCR como expurgo, y teniendo en cuenta que muchos de los que
ahora eran elegidos por el gobierno para establecer el pacto, eran los mismos que
habían realizado el anterior y hasta estaban involucrados con los militares.
La importancia de este pacto radica principalmente en busca neutralizar, la hostilidad,
que desde un primer momento experimento el movimiento obrero hacia Alfonsín,
evidenciado en 13 paros generales a lo largo de5 años y medio de mandato.
Los fracasos en establecer exitosamente este pacto con los sindicalistas y l perdida de
credibilidad tras los acontecimientos de sublevación militar, determinaron las derrotas
electorales en casi todos los distritos en septiembre de ese año 1987.
Tras la declinación en la consideración popular del radicalismo inicio un proceso de
declinación que lo regreso paulatinamente, en sus participaciones electorales, sus
márgenes históricos del 25%.
(RESUMEN PROFESOR)
14

S-ar putea să vă placă și