La estrella Argéada

Esta es un símbolo que corresponde a una estrella de 16 rayos que fue adoptado como emblema
del reino de Macedonia por la dinastía Argéada, los que impulsaron la cultura helénica alrededor
del mundo conocido.
Los cuatro rayos principales de la estrella simbolizan los cuatro elementos por los que el mundo
está formado, mientras que los doce restantes representan a los dioses olímpicos de la mitología
griega.

El Helenismo: La expansión de la cultura helénica

La semilla de la expansión de la cultura helénica fue sembrada por el rey Filipo II de Macedonia, el
cual luego de pasar tres años como rehén en la ciudad de Tebas, aplicó los conocimientos
aprendidos durante su cautiverio de Epaminondas (Beotarca creador de la falange oblicua,
estrategia que demostró su eficacia al terminar con la hegemonía espartana, aun con desventaja
numérica y en preparación militar del ejército tebano), para mejorar la falange griega aumentando
la profundidad de la misma basado en la estrategia antes mencionada y aumentando el largo de
sus lanzas transformándolas en picas de más de 6 metros (Sarissas), a la vez proveyó a sus hombres
con armas y armaduras (evitando que estos costeen el equipo) y los preparó con un exhaustivo
entrenamiento (soldados profesionales en contraste al soldado-ciudadano de la mayoría de las
polis), gracias a lo cual su hijo megas Alexandros, pudo conquistar gran parte del mundo conocido.

¿Qué representa para mí la estrella Argéada?

Es el símbolo de los valores de la cultura Helénica, valores que se expandieron por el mundo
gracias a la conquista y la difusión por parte de los reinos helenísticos creados posteriormente,
aquí presentaré algunos de los más significativos:

La libertad: Una de las batallas más conocidas de la antigüedad es la batalla de las Termópilas, en
la cual 300 espartanos comandados por el rey Leónidas I, junto a algunos aliados de otras polis
griegas, resistieron hasta la muerte a alrededor de 200.000 hombres del ejército persa durante tres
días de combate en defensa de su libertad. En
Grecia la libertad llegó a ser uno de los valores culturales más importantes, por ejemplo dentro del
ámbito religioso no existía un dios/diosa de la libertad, sino que estaba presente en todos ellos,
dentro de la política estaba la posibilidad de participación ciudadana en las polis democráticas
como Atenas, o incluso en polis como Esparta gobernadas por una diarquía (dos reyes) se
encontraba una asamblea donde los ciudadanos espartanos tenían cierto poder de decisión
política.
Las polis griegas no renunciaban a su libertad fácilmente, incluso al quedar sometidas en alguna
guerra, eran indómitas e intentaban recuperar su autonomía aun a costa de su destrucción.

El pensamiento crítico, la curiosidad y amor al conocimiento: La filosofía surgió en Grecia, hubo

variedad de formas de pensamiento como el pirronismo, en la cual se cuestionaba todo lo que era
aceptado normalmente como verdad, el Platonismo el cual postulaba que había un mundo de las
ideas más allá del mundo sensible (mundo de los sentidos), siendo el primero el que da origen al
segundo o la escuela aristotélica en la cual se desarrolló diversidad de temas en tratados, estos
están perdidos en su mayoría.
La curiosidad estuvo presente en toda la cultura griega, se investigó en matemáticas, medicina,
astronomía, química, etc. con el fin de entender mejor el mundo, conocer su funcionamiento.
Entre sus descubrimientos y aportes encontramos los números irracionales, geometría euclidiana,
el funcionamiento de las matemáticas actuales con los axiomas, teoremas y demostraciones, el
estudio de enfermedades por Hipócrates junto al juramento hipocrático, el heliocentrismo de
Aristarco o las ideas de átomo de Demócrito.
El amor al conocimiento es observado en la creación de la biblioteca de Alejandría en el reino
helenístico de Egipto bajo el reinado de uno de los generales de Alexandros, Ptolomeo I. Esta llegó
a tener 900.000 manuscritos de diversos temas.

La trascendencia: En la Ilíada de Homero, vemos que el héroe griego Aquiles acepta pelear en la
guerra de Troya a pesar de que sabe que encontrara ahí su muerte, todo para trascender, que su
nombre quede inmortalizado en la historia gracias a sus hazañas.
Este sueño de inmortalidad, de dejar una marca en el mundo, una que perdure mucho más allá de
la muerte es común en el mundo griego, ya sea en el arte con obras arquitectónicas
impresionantes como la estatua de Zeus en Olimpia, el coloso de Rodas, la escultura buscando la
belleza en el equilibrio, con descubrimientos sin precedentes en las diferentes áreas del saber de la
época o lo más común una gesta heroica y gloriosa como las conquistas del invicto megas
Alexandros.

Más que un símbolo del reino de Macedonia

Bajo el símbolo de la estrella Argéada, en ciudades de los nuevos reinos helenísticos como
Alejandría en Egipto o Antioquia en el imperio Seléucida, se enseñó y propagó la cultura helénica,
incluso cuando Roma derrotó y anexó estos reinos, estos conocimientos, valores, forma de pensar
se extendieron aún más allá de lo que los Helenos jamás imaginaron.
Para mí, la estrella Argéada es el comienzo de compartir con el mundo siglos de evolución, de
descubrimientos, de los valores que permitieron que todo este saber floreciera y pudiese iluminar
a todo aquel que pueda tocar con sus rayos.