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CURSO: PEDAGOGÍA
2018
INTRODUCCION
Hoy en día se exige que los sistemas educativos trabajen de acuerdo a la exigencia del
desarrollo económico y social, eh ahí que es importante para las poblaciones más pobres.
Respondiendo a las exigencias culturales, éticas y asumiendo el reto tecnológico. Todo esto
para afrontar el siglo XXI.
Se espera algo de la educación y quienes la esperan: los padres, los trabajadores, los
desempleados, la sociedad, el gobierno, los jóvenes y niños.
El presente ensayo tiene como propósito entender desde diversos criterios (social, político y
económico) la toma de decisiones que asumen los gobiernos frente al ámbito educativo y su
repercusión directamente en los agentes educativos y sociedad.
1. DECISIONES EDUCATIVAS, DECISIONES DE SOCIEDAD
En países con problemas económicos las decisiones son difíciles y conduce a callejones sin
salida en algunos tipos de enseñanza, en países más desarrollados estas decisiones de
carácter político no son tan complicadas, se dosifica los presupuestos de la manera más
adecuada.
Pero en ambos casos las demandas convergen en la mayoría al colectivo público lo cual hace
tomar decisiones de carácter sociopolítico. El mundo económico reclama competencias y
calificaciones, el mundo científico reclama crédito para la investigación y para la enseñanza
de alto nivel productora de jóvenes investigadores y el mundo de la cultura y de la enseñanza
requiere medios para el desarrollo de la escolaridad y la formación general. Mientras los
padres de los alumnos piden mayor calidad educativa por lo tanto un numero de mejores
docentes.
Los dilemas son graves ya que no se puede satisfacer todas las demandas, no es cuestión
de interés particular, sino que esas demandas son legítimas para la educación.
Su objeto no es solo la oferta educativa y los métodos de enseñanza sino también la gestión,
la orientación, la realización de objetivos.
Se relaciona con los derechos de la educación, la equidad, eficiencia, calidad, de la atribución
de recursos y depende de los poderes públicos.
El debate público, por ejemplo en el Parlamento o incluso en los medios de información, puede
así convertirse en un auténtico debate de sociedad apoyándose en evaluaciones objetivas y
pertinentes.
Se pone en duda las modalidades de la ejecución de las reformas en la mayoría son decididas
por el ministerio de educación sin la consulta a los agentes y sin evaluación de los resultado.
Debería abrirse las instituciones educativas a la necesidad de la sociedad e introducir factores
de dinamismo en los mecanismos de la gestión educativa.
Nos dice que asociar los agentes sociales es perfeccionar los principales objetivos del sistema
educativo.
Para los grupos minoritarios la descentralización es mejor vista por la consideración a las
aspiraciones culturales o lingüística, y mejorar la enseñanza.
Se debe dar las condiciones de cooperación en el plano local entre docente, los padres y el
público en general.
Las primeras de esas condiciones es la voluntad del gobierno en abrir un espacio de adopción
de decisiones democráticas que pueda colmar las expectativas de comunidad, de los
docentes y de los padres de familia o asociaciones no gubernamentales.
La gestión de la educación y organización son instrumentos cuyo valor y eficacia depende del
contexto político, económico, social y cultural.
El estado debe asumir responsabilidades para con la sociedad para cualquier sistema
educativo sea centralizada o descentralizada.
Se debe crear un consenso nacional sobre la educación, establecer una coherencia general
y proponer una visión a largo plazo
La política educativa debe de ser a largo plazo con la continuidad de las decisiones y
continuidad de las reformas. De ahí que se debe de dejar las políticas de corto plazo o de las
reformas en cascadas.
Se justifica que el papel del estado como representante de la sociedad con carácter plural y
cooperativo en que la educación se desarrolla para toda la vida. Pero ese papel concierne a
las decisiones de la sociedad que trazan la educación, pero también regulan el sistema y el
valor de la educación. En la lógica de la equidad y el respeto al derecho a la educación no se
debe negar el acceso a la educación a ningún individuo o grupos sociales el estado debe
ejercer el papel de redistribuir la educación en favor de los grupos minoritarios o
desfavorecidos.
Las políticas públicas deben garantizar el desarrollo de forma concertada y con una visión a
largo plazo de las organizaciones educativas.
Para evitar la disfunción entre los distintos niveles de enseñanza (inicial, primaria, secundaria
y superior) se deben coordinar.
Por lo que se confirma la primicia política: hay que guiar a todos los agentes de la
educación hacia objetivos colectivos respetando los valores comunes.
Para los países desarrollados, que enfrentan una demanda de escolarización creciente no
tienen limitaciones financieras, además porque el 5,3 % del PNB se destina al sector
educativo.
Como consecuencia a nivel global la evolución demográfica trae consigo la poca acogida de
los sistemas educativos, por la escolarización e incrementos de la matrícula superiores a
éstas.
En algunos países los recursos disminuyen en la misma proporción en que lo hacen las
actividades económicas, también por la deuda externa, y en el ámbito educativo porque el
presupuesto destinado compite con otras esferas del estado, quien tiene las decisiones
políticas para una distribución del presupuesto público
Cabe indicar que los gastos públicos de enseñanza que destinan los países desarrollados son
mayor en comparación a los países en desarrollo
Destinar al sector educación un incremento de los recursos públicos, sobre todo a los países
en desarrollo, ya que la educación permite luchar contra: la desocupación, exclusión,
desigualdades sociales, conflictos étnicos o religiosos.
Además la educación no es un gasto social, sino una inversión económica, social y política a
largo plazo, en donde los sistemas educativos forman a los individuos en la ciudadanía,
cúmulo de conocimientos y desarrollar aptitudes personales.
Datos estadísticos del banco mundial indican que los países desarrollados la financiación
pública son mayor en comparación a la privada. Sucede en forma inversa en los países en
desarrollo, pues la financiación pública está por debajo de la privada.
Por otro lado, como instrumentos de educación de los niños y de los adolescentes, las
nuevas tecnologías brindan una posibilidad sin precedentes de poder satisfacer con toda la
calidad necesaria una demanda cada vez más amplia y cada vez más diversificada.
El papel del político: tomar decisiones objetivas sobre el PNB del presupuesto público
destinado al ámbito educativo, sobre todo en países con más necesidades económicas y
financieras.
Las decisiones políticas en la inversión en el sector educativo permiten el desarrollo
social-económico y político de los países con una visión a largo plazo.
El debate centralización o descentralización, es esencial para el éxito de las estrategias
de mejoramiento y reforma de los sistemas educativos.
El estado debe asumir una serie de responsabilidades para con la sociedad civil.
La distribución de la inversión pública a la educación debe ser la prioridad de los
gobiernos, a fin de incorporar también contribuciones de la financiación privada en sus
diversas modalidades.
Entre los países desarrollados y en desarrollo existe una gran brecha entre los gastos
públicos por fuentes de financiación (pública y privada) y los gastos públicos de
enseñanza.
La descentralización de la administración y una autonomía mayor de los establecimientos
permiten mejorar la eficacia de los gastos de educación gracias a una mejor adaptación
a las necesidades locales.
Las nuevas tecnologías en la sociedad y la educación lleva al ciudadano a tener mayor
responsabilidad en su educación individual, no faltando a la igualdad de oportunidades
con los demás individuos.
Las decisiones que se tomen no deberán ser técnicas sino políticas, es así entonces que
la aceptación de las nuevas tecnologías de la comunicación y de la información tiene
como resultado un dominio creciente de los saberes, dando una dimensión social a la
educación.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS: