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A.S.K. Associates for Scriptural Knowledge

(Asociación para el Conocimiento Escritural)
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FUNDAMENTOS DE LA DOCTRINA
DEL NUEVO TESTAMENTO
CAPÍTULO 5

GENTILES DEBEN VOLVERSE ISRAELITAS

Si una persona desea saber qué Evangelio de Cristo pertenece a maduros

Cristianos hoy en día, ningún capítulo es más importante de comprender que al que
ahora entran. Ciertos términos se han de cumplir. Es imprescindible que nos demos
cuenta de que los términos de salvación fueron cuando el apóstol Pedro comenzó a
predicar el Evangelio de Cristo en ese primer día de Pentecostés después de la
resurrección de Cristo de entre los muertos. El mensaje de Pedro fue
fundamentalmente diferente de la enseñanza que Cristo dio a los israelitas mientras
estuvo en la carne.
Pedro afirmó que creyendo en Cristo y en su misión (de morir por los seres
humanos en su lugar) se ganaría una salvación para todos. Sí, ahora es para todos los
que se arrepienten de sus pecados y creen en el nombre y la autoridad de Jesucristo
para perdonar los pecados. Cristo entonces daría la salvación a esos creyentes. Pedro
dijo:
"Entonces Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el
nombre de Jesucristo para perdón de los pecados, y recibiréis el don del Espíritu
Santo" Hechos 2:38
Poco tiempo después, dijo,
"Y no hay salvación en ningún otro: porque no hay ningún otro nombre bajo el cielo
dado a los hombres, en que podamos ser salvos." Hechos 4:12
Lo importante es darse cuenta de que Pedro dirigió las palabras de su predicación a
los israelitas que le escuchaban enseñar. Él dijo:
"Ustedes los hombres de Israel, oíd estas palabras: ... Así que, toda la casa de
Israel conozca con certeza, que Dios ha hecho a este Jesús a quien vosotros habéis
crucificado, Señor y Cristo". Hechos 2:22, 36
En un principio, esta enseñanza del Evangelio fue a Israel solamente (justo como
Cristo mismo dirigió su enseñanza, mientras estaba en la carne, a la Casa de Israel).
En este primer período, no había el pensamiento por los apóstoles, que los Gentiles
serían incluidos en la salvación que ahora estaba disponible en Cristo. De hecho, los
mensajes del Evangelio tanto por Cristo, mientras estaba en la carne, y por Pedro y los
demás apóstoles en los primeros años de su ministerio, se dan únicamente a los de la
Casa de Israel, que fueron conocidos por el mundo como "Judíos".
Ahora mi siguiente declaración puede ser una sorpresa para algunas personas.
Pero todos debemos tomar en serio la afirmación pues es absolutamente cierta. Es
esta. En los primeros 33 años enseñando el Evangelio de Cristo Jesús sobre su
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muerte y su resurrección, ahora pudiendo llevar a la gente a la salvación, esa

salvación en Cristo, se dio SOLO a personas que eran de la Casa de Israel.
Los Judíos en los Imperios Romano y Parto, que vivían en esa época, eran sin
duda de la tribu de Judá, que fueron parte de la Casa de Israel. Eso significaba que la
salvación se podría dar a ellos, pero no se podía dar a los Gentiles ¡SI
PERMANECIAN GENTILES! En los 33 años de tiempo transcurrido desde la
crucifixión de Cristo en el 30 al 63 EC, fue necesario que todos los Gentiles que fueron
salvados en Cristo se convirtieran en Israelitas espirituales. La relación del Nuevo
Pacto con Dios fue dada solamente a aquellos que eran miembros de la Casa de
Israel y la casa de Judá (Jeremías 31:31-34).
Tenga en cuenta lo que la palabra de Dios dice claramente:
"He aquí que vienen días, dice Jehová, en que haré un nuevo pacto con la casa de
Israel y con la casa de Judá: No como el pacto que hice con sus padres el día que los
tomé de la mano para sacarlos de la tierra de Egipto, mi pacto que ellos rompieron,
aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová: Mas éste es el pacto que haré con la
casa de Israel; Después de aquellos días, dice el Señor, Yo pondré mi ley en su
mente, y la escribiré en su corazón; y seré su Dios, y ellos me serán por pueblo, y no
enseñará más ninguno a su prójimo, ni nadie a su hermano , diciendo: Conoce al
Señor: porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más
grande de ellos, dice Jehová: porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré
más de su pecado ". Jeremías 31:31-34.
Tan claro como Dios lo podía hacer, el Nuevo Pacto debía ser hecho sólo con la
Casa de Israel y la Casa de Judá. No hay una sola mención en esta relación del
Nuevo Pacto sobre la participación de los Gentiles quienes no eran Israelitas. ¿Y qué
significó esta falta de mención respecto a los Gentiles para el apóstol Pablo? Él dejó
claro que esa salvación en Cristo sólo podía ser dada a los hijos de Israel y no a
ninguna otra nación. Note lo que Pablo dijo en Efesios capítulo 2:
"Por tanto, acordaos [ustedes Gentiles], que ustedes, siendo en tiempo pasado
Gentiles en la carne, que erais llamados Incircuncisión por la que es llamada
Circuncisión en la carne hecha por mano; Que en aquel tiempo estabais sin Cristo,
alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa [ambos
Antiguo y Nuevo Testamento], sin esperanza y sin Dios en el mundo". Efesios 2:11-12
Pablo dejó claro en la declaración anterior, que era absolutamente cierto y exacto,
que en tanto los Gentiles permanecieran Gentiles, no habría una esperanza en el
mundo para ellos para obtener la salvación en Cristo. Ellos fueron los "sin esperanza”.
Recuerde, el Antiguo y el Nuevo Pacto sólo se hicieron con la Casa de Israel, y si uno
no era un Israelita entonces tales personas eran "ajenos a los pactos de la promesa...
y sin Dios en el mundo". Esta era una situación terrible de estar para los Gentiles, pero
este era su destino. En pocas palabras, los Gentiles no podían ser salvados.
Sin embargo, vino a ser esperanza, y de hecho, incluso una victoria para los
Gentiles. Una razón jurídica se encontró que podría conseguir salvación a los Gentiles,
junto con los Israelitas. Esto fue por injertar a los Gentiles en el linaje de Israel a fin de
que ya no fueran reconocidos como Gentiles. Esta fue la manera en que los Gentiles
podían ser llamados hijos de Abraham y del Dios de Israel, y ser aceptados para
salvación como los otros israelitas. Y Pablo, en las cuatro epístolas a las tres primeras
ekklesias (las congregaciones en Romanos, Corintios y Gálatas) enseñó que todos los
Gentiles que aceptaron a Cristo como su Salvador personal fueron contados ahora
para estar "en Cristo" (Romanos 12:5, 16: 7, 9-10; 1 Corintios 3.1, 15:22; 2 Corintios
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1:21, 3:14, 5:17; Gálatas 3:27). Poniendo a los Gentiles, "en Cristo" les dio una ventaja
que ellos no se habían dado cuenta antes. Puesto que Cristo fue contado claramente
en un sentido legal a ser de Abraham, Isaac y Jacob (el nombre de Jacob fue
cambiado a Israel), entonces los Gentiles, ahora unidos a Cristo ya no eran
reconocidos como "Gentiles" en un sentido espiritual. Se habían convertido ahora en
"el Israel de Dios" (Gálatas 6:16).
"Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. Porque todos los que
habéis sido bautizados en Cristo os habéis revestido de Cristo. No hay ni Judío ni
Griego, no hay esclavo ni libre, no hay varón ni hembra: porque todos vosotros sois
uno en Cristo Jesús y si vosotros sois de Cristo, ciertamente sois descendencia de
Abraham, y herederos [junto con Israelitas] según la promesa." Gálatas 3:26-29
Del mismo modo, Pablo dijo en Romanos 11:13-36 que los Gentiles que están "en
Cristo" (y Cristo era un Israelita en quien no hay engaño y un hijo legítimo de
Abraham) los hizo también ser hijos de Abraham e Israel, al igual que Cristo o
cualquier natural nacido Israelita. Y puesto que se entendía claramente por Pablo que
"todo Israel será salvo" (Romanos 11:26), esto incluye necesariamente a los Gentiles
que aceptaron a Cristo y fueron injertados en Israel. Por lo tanto, estos conversos
Gentiles ya no eran reconocidos como Gentiles. Ellos fueron ahora "el Israel de Dios"
(Gálatas 6:16).
Así fue como los Gentiles pudieron ser participantes de todas las promesas y los
pactos que pertenecieron a los Israelitas. Este injerto en el linaje de Israel los hizo
capaces de ser herederos de la relación del Nuevo Pacto que Dios estaba haciendo
sólo con Israel.
Un Problema Importante Desarrollado con este Concepto
Si bien esta enseñanza espiritual de que los gentiles eran ahora "en Cristo" siendo
ellos denominados como de Israel junto con los demás israelitas, una pregunta surgió
rápidamente sobre la conducta requerida de estos nuevos Israelitas. ¿Deben ser
circuncidados como lo eran los Israelitas comunes? ¿Deben guardar los días, horas,
las estaciones y los años que todos los Judíos observaron y se regocijaron? A estos
nuevos "hijos de Israel" ¿se les requerirá comer los alimentos limpios que se
encuentran en Levítico capítulo 11?
Algunas autoridades Cristianas, especialmente en Jerusalén, consideraron que si
los Gentiles estaban siendo ahora reconocidos como "Israelitas", entonces era de
sentido común que debían adoptar las mismas costumbres como los Judíos. Esto
incluía la circuncisión, el sábado, y guardar las fiestas, las leyes alimentarias limpias,
etc. Este asunto debía ser resuelto y nos encontramos con muchos argumentos al
respecto en los Libros de los Hechos y Gálatas (junto con la Segunda de Corintios
capítulos 11 y 12). En otras palabras, ¿deben los Gentiles (ahora "Israelitas") guardar
la Ley de Dios revelada en el Antiguo Testamento y sostenida por Cristo mientras
enseñaba en la carne, o podrían los Gentiles tener algún tipo de relación especial
diferente a los Judíos ordinarios? Este fue el dilema. ¿Qué leyes y costumbres deben
ahora los gentiles ("Israelitas") observar?
Antes de examinar este problema en detalle, vamos a observar un hecho que
muchos Cristianos no son conscientes y esto incluye algunos teólogos Cristianos.
Los Judíos No Necesitaban Guardar Partes de la Ley en Áreas Gentiles
Tampoco se entiende normalmente (incluso por los teólogos Cristianos que desean
mantener y observar la Ley de Dios ordenada en el Antiguo Testamento) que los
Judíos mismos sabían que estaban exentos de mantener ciertas leyes de Dios que se
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referían únicamente a los israelitas que residen en el país de Israel (la Tierra de
Canaán). ¿Sabe usted que la Ley del DIEZMO se aplicaba sólo a Judíos que vivieron
en la Tierra de Israel, o en áreas densamente pobladas de Judíos en todo Palestina?
Sólo los productos de Israel eran diezmables! Así es. Sólo los productos de la tierra de
“Israel” podían ser diezmados.
"Y todo el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los
árboles, de Jehová es; este es santo a Jehová." Levítico 27:30

Observe el punto principal de esta instrucción del diezmo. Dijo "Y el diezmo de la
tierra es del Señor". La palabra hebrea traducida como "tierra" es aretz. A veces, la
palabra puede significar la tierra (Génesis 1:1). En otras ocasiones se utiliza en lo que
se refiere a una tierra específica o país (Éxodo 3:8, 17). Muchas veces el término, tal
como se utiliza en Levítico 27:30, se refiere específicamente a la tierra de Israel en
Palestina. Véase Levítico 19: 23, 20:2, 25:10, 18, 26:32. Como a las naciones Gentiles
no se les dio leyes del diezmo, y los Levitas no recibieron instrucciones de ir a los
Gentiles y tomar diezmo de ellos, el término "tierra" en Levítico 27:30 se refiere
realmente a la Tierra de Israel. Incluso para los Judíos, el diezmo se limita sólo a la
Tierra de Israel y las zonas adyacentes. El pueblo Judío mismo no DIEZMABA en
tierras extranjeras
George Foot Moore, en su obra Judaísmo (una de las autoridades reconocidas en
la religión Judía en la época de Cristo) dijo lo siguiente acerca de las leyes del diezmo
en Levítico capítulo 27:
"Todo esto se aplicó en la letra de la ley, sólo en la tierra de Israel, sin embargo, en
cualquier momento sus límites podían ser definidos." [More George Foot, Judaism in
the First Centuries of the Christian Era, vol. II, p. 71].
El profesor Moore pasó a señalar que la tierra de Babilonia fue finalmente aceptada
como parte de la tierra de Israel - una "diezmable" tierra porque muchos Judíos eran
residentes en la zona. Egipto fue finalmente aceptado como tierra diezmable. En el
tiempo anterior de José, sin embargo, Egipto no pagó el diezmo como lo demuestra la
producción de una quinta parte que se pagó a Faraón, y las cuatro quintas partes que
fueron a la gente. El este de las tierras de Jordania llegó a ser reconocida como
diezmable: Amón, Moab y Siria - al menos las partes de esas tierras que David
conquistó y donde muchos Judíos vinieron a vivir.
Otras tierras gentiles, por otra parte, como las zonas de Asia Menor, Grecia o Italia
no se permitían como tierras que podrían producir diezmo. El producto de esas tierras
fue considerado como impuro y no lo suficientemente santo para apoyar el sacerdocio
Levítico en su función en el Templo. Como Alfred Edersheim registró, incluso el polvo
de tierras paganas fue contado como profano y contaminado. [Alfred Edersheim, Life
and Times of Jesus the Messiah, vol. 1 p. 9]. Por ello, el diezmo no era aceptable de
ellos, aunque muchos Judíos vivieron en esas áreas.
En cualquier caso, la lectura estricta de la ley exigió el diezmo proveniente sólo de
la tierra de Israel - que fue interpretado posteriormente para incluir los ámbitos del este
y el norte de Palestina y Egipto, donde las poblaciones fueron principalmente Judías.
Todas las demás áreas fueron proscritas.
Este hecho acerca del diezmo puede sorprender a muchos Cristianos, pero es
revelado en la Ley de Dios. Muchos predicadores y evangelistas conocen esta verdad,
pero no dicen a los laicos respecto a ello simplemente porque creen que las personas
no financiarían sus iglesias si están al tanto de estos hechos. Guiados estrictamente
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por los pronunciamientos de la ley bíblica, no es adecuado incluso para los Judíos
pagar diezmo de los productos procedentes de Italia, Grecia, Asia Menor (Galacia), o
en los tiempos modernos los Estados Unidos, Gran Bretaña, o de otras tierras
Gentiles.
Así, en los Libros de Romanos, Corintios, y Gálatas nunca las preguntas del
diezmo de los Gentiles surgió porque incluso los Judíos que vivían en esas zonas no
diezmaban. Además, el mantenimiento de los Años Sabáticos cada siete años, cuando
todas las tierras agrícolas tenían que estar en espera y no ser trabajadas, no se aplicó
ni siquiera por los mismos Judíos fuera de la Tierra de Israel. Tenga en cuenta que
Moisés dijo a los israelitas mantener Años sabáticos "cuando entréis en la tierra que yo
os doy" (Levítico 25:2) Uno puede imaginarse cuan alarmado estaba el apóstol Pablo
cuando se enteró que los Gentiles de Galacia estaban observando incluso los "años"
de la Ley en el Antiguo Testamento (Gálatas 4:10). Pablo estaba, sin duda,
refiriéndose a los Años Sabáticos.
Algunas Leyes Universalmente Aplicadas a Todos los Judíos
Si bien muchas leyes en el Antiguo Testamento no eran aplicables fuera de
Palestina (incluso para los Judíos), la ley del día de reposo en sí, las leyes de la
alimentación y la circuncisión especialmente ¡aplicaba a Judíos en todas partes!
Fueron estas leyes universales las que los primeros apóstoles tuvieron que enfrentar
en cuanto a los Gentiles que se habían convertido en "hijos de Israel" por su unión
espiritual con Cristo. ¿Tienen que hacerse la circuncisión como todos los israelitas?
¿Deben guardar el Sábado y los días Santos como los Judíos? ¿Deben seguir las
leyes de la alimentación, al igual que los Judíos?
No pasó mucho tiempo para resolver el problema, pero no sin luchas importantes
dentro de la comunidad judía de los Cristianos. Las autoridades en Jerusalén
finalmente decidieron (con los apóstoles más importantes en quórum), con la
intervención del Espíritu Santo, que sólo cuatro cosas principales se requieren de
estos nuevos y adoptados "hijos de Israel". Podrían ser liberados de la carga onerosa
que Judíos ordinarios (Israelitas) estaban acostumbrados a observar. Las cuatro
restricciones se encuentran en Hechos 15:28-29. [Estas restricciones, llamadas los
"acuerdos" fueron escritas por las manos de los apóstoles y técnicamente llamada
"decretos en escritura a mano"]. Más tarde Pablo se refirió a este mismo documento
(ver original griego en Colosenses 2:14). Notemos qué decretó esta "escritura a
mano".
"Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, imponeros [Gentiles que
ahora eran" hijos de Israel"] ninguna carga más que estas cosas necesarias: que os
abstengáis de lo sacrificado a ídolos, y de sangre, y de cosas estranguladas y de
fornicación [promiscuidad]: de las cuales si os guardareis, bien haréis, que os vaya
bien". Hechos 15:28-29
Tenga en cuenta que guardar los Sábados semanales o anuales no fue reconocido
por el Espíritu Santo o los apóstoles reunidos en Jerusalén como necesario para
Gentiles que fueron reconocidos como "Israelitas" espirituales. Y también, la
circuncisión en la carne no se exigía de los hombres (adultos o niños). A pesar de que
las carnes ofrecidas a los ídolos directamente y animales estrangulados fueron
prohibidas, otras carnes que los gentiles estaban acostumbrados a comer no fueron
proscritas y que ellos podían comer de las carnicerías. [Esto incluye no ‘kosher’ de
carnes preparadas - 1 Corintios 10:25].
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De hecho, Dios significó la prohibición de ciertas carnes en la Ley de Moisés como

estrictamente para fines rituales, no por razones de salud, ya que incluso un cuchillo o
un tenedor tocando un cuerpo "sucio" tenía que ser destruido, incluso si los utensilios
se lavaran con jabón lejía (Levítico 11:35). No hay ni un indicio en la Biblia que las
carnes "inmundas" estaban destinadas por Dios para ser evitadas por motivos de
salud y los Judíos siempre han sabido esto. [M. Friedlander, Jewish Religion:
Describiendo y Explicando la Filosofía y Rituales de la Fe Judía (P. Shalom
Publicaciones, 1953), pp 455-6].
Sin embargo, algunos recalcitrantes ".cumplidores de la ley" entre los Cristianos
Judíos sentían que estos nuevos "hijos de Israel" debían vivir casi exactamente igual
que los Judíos. Algunos Cristianos en Roma comenzaron a guardar ciertos días de los
Judíos (sin duda incluyendo el Sábado y los días santos junto con algunos días de
ayuno) y Pablo tuvo que decir a los Cristianos de Roma que no era necesario
mantener esos días, o para el caso, cualquier día (Romanos 14:5-6). Pablo estaba
molesto francamente con los Gálatas, cuando no sólo retrocedieron a guardar la Ley
de Dios significada para los menores, como guardando los días, los meses, y los
tiempos, sino que también estaban empezando a guardar los años Sabáticos. Por que,
incluso ni los Judíos en Galacia estaban obligados a guardar las enseñanzas de la ley
(Gálatas 4:10).
Estos asuntos fueron constantes problemas encontrados cuando los Cristianos
Gentiles entraron en contacto con los Cristianos Judíos. Pablo tuvo que informar a los
Colosenses,
"Por tanto, nadie os juzgue en comida [comer], o en bebida [bebiendo] o con
respecto a días de fiesta, o de nueva luna, o de días sábados". Colosenses 2:16
Lo que muestran estos hechos bíblicos es que Dios reconoció dos tipos de hijos de
Israel en la tierra. Los primeros fueron Israelitas de la carne que aceptaron a Cristo y
los otros fueron adoptados nuevos "Israelitas" que eran Gentiles en la carne pero
ahora llamados el "Israel de Dios" por estar "en Cristo". A los Gentiles contados como
Israelitas se les dio deberes mucho menos estrictos que a los ordinarios Israelitas
(Judíos).
Sin embargo, no importa en qué segmento de "Israel" la gente se encuentre, todos
fueron reconocidos por Dios el Padre como "Israelitas". Todos podían ahora ser parte
de las promesas del Nuevo Pacto. [Recuerde que el Nuevo Pacto debía ser dado sólo
a las Casas de Israel y Judá (Jeremías 31-31-34)]. Los Gentiles ahora podían
participar de los emblemas del pan y el vino cuando Cristo estableció el Nuevo Pacto
puesto en acción en la víspera de su crucifixión. Este fue el final de la enseñanza
básica del "Nuevo Pacto" tipo de Cristianismo que se encuentra en todos los libros
tempranos escritos por los apóstoles.
La Revelación del Misterio
Pero en el año 63 d. C, ocurrió algo muy diferente. Una revelación completamente
nueva vino a Pablo y a otros apóstoles que cambió drásticamente incluso este tipo de
"Nuevo Pacto" del Cristianismo en el que todos los Cristianos eran reconocidos como
"hijos de Israel". En el próximo capítulo discutiré este aspecto tan importante de la
doctrina Cristiana. El apóstol Pablo lo llamó,
"El misterio de Cristo, que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de
los hombres, como [el Espíritu] ahora lo revela a sus santos apóstoles y profetas... que
desde el principio del mundo ha estado oculto en Dios." Efesios 3:4-5, 9,
parafraseando.
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"El misterio que había estado oculto desde los siglos y generaciones, mas ahora ha
sido manifestado a sus santos". Colosenses 1:26

Los apóstoles sólo aprendieron esta nueva revelación en el año 63 EC. Este
misterio nunca fue revelado públicamente antes de ese año - unos 33 años después
de la crucifixión y resurrección de Cristo. Esta enseñanza gloriosa representa la
enseñanza madura y definitiva de Dios y Cristo a este mundo. Y, lo crea o no, "el
Misterio" no tiene nada que ver con el Antiguo Pacto o incluso el Nuevo Pacto. ¡Es
algo totalmente diferente y glorioso!
El Misterio es Una Enseñanza Muy Diferente
Puede ser una sorpresa que nadie pudiese afirmar que "el Misterio" era muy
diferente de las enseñanzas de la Nueva Alianza, pero esto es precisamente lo que la
verdad del Evangelio establece. La etapa final o Revelación Progresiva fue la
introducción de las doctrinas más maduras de Cristo Jesús, en lo que Pablo llamó "el
Misterio".
Voy a mostrar con la mayor claridad del lenguaje (y es lo más importante para
nosotros entender), justo lo que "el Misterio" implica y lo que sus promesas grandes y
gloriosas son. Por el momento, es esencial que conozcamos el tiempo en la historia
cuando esta nueva revelación fue dada por primera vez a la humanidad. La doctrina
madura del "Misterio" fue una revelación al apóstol Pablo (y a otros) hacia el año 63
E.C. cuando se encontraba en España, probablemente en la ciudad de Cádiz. Todos
los apóstoles que la recibieron se sorprendieron por lo que estas enseñanzas
realmente contienen. Cuando uno analiza las diferencias entre la enseñanza antigua
del Nuevo Pacto con la de "el Misterio", es sorprendente cuán avanzadas y profundas
son las mejoras. El tema más importante de este libro es acerca de la enseñanza
grandiosa y gloriosa de Cristo conocida como "el Misterio".
Esta enseñanza madura es "la Filosofía del Cristianismo", y se resume en lo que el
apóstol Pablo llamó "el Misterio" (o, en español llano "El Secreto"). Denota un secreto
maravilloso y elegante que se dispensó a la humanidad finalmente por Pablo y los
demás en la última parte de su ministerio. Y a pesar de lo que algunos teólogos dicen,
que la filosofía no tiene NADA que ver con el Nuevo Pacto. El "Viejo" y el "Nuevo
Pacto", fueron sólo las fases intermedias del desarrollo espiritual. Eran excelentes para
sus períodos de tiempo previstos, pero que no representan la enseñanza última
madura de Dios. Uno debe mirar la enseñanza del Nuevo Testamento simple y
llanamente llamada "el Misterio". Dios nos enseña este hecho principalmente en los
libros a los Efesios y Colosenses. Estos libros son cartas compañeras. Ellas hablan
acerca de asuntos idénticos con diferente énfasis.
Sus temas principales son el "Misterio" (Efesios 3:3), o "El Secreto". El principio
legal que revela se define como:
● "el Misterio de Cristo" (versículo 4);
●"el Misterio de Su Voluntad" (1:9);
● "el Gran Misterio" (5:32 como está en griego), o
●"el Misterio de Dios, Cristo" (Colosenses 2:2)
Antes de 63 E.C., Pablo dijo que el Misterio "ha estado oculto en Dios" (Efesios
3:9). Dios lo había mantenido en secreto del conocimiento de alguien (humano o
ángel), incluso desde la fundación del mundo - mucho antes de la creación de Adán.
Pablo dijo, "desde el principio del mundo [el Misterio] ha estado oculto en Dios"
(versículo 9). Pablo habló de él como:
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"El misterio de Cristo, misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los
hijos de los hombres, como AHORA es revelado a sus santos apóstoles y profetas por
el Espíritu". Efesios 3:4-5
Pablo además dice en el Libro de Colosenses que esta enseñanza fue llamada
"... el misterio que había estado oculto desde los siglos [anterior] y de [anterior]
generaciones, pero que AHORA [63 CE] ha sido manifestada a sus santos."
Colosenses 1:26
Este misterio explica claramente cuál es la Verdadera Filosofía de la Cristiandad.
Es una enseñanza que es impresionante en su alcance. □

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Capítulo 5 del libro ‘Essentials of New Testament Doctrine’ por Ernest L. Martin, Ph.D. (†)
Publicado por Associates for Scriptural Knowledge (ASK)
Traducción y edición EONG -01/13.