Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
I ntroducción
309
310 Günter Wagner
este tipo tampoco tiene nombre común, pero los grupos tribales
que la conforman tienen conciencia de sus similitudes y las expli
can haciendoreferencia a una vaga relación en el pasado distante o
a un largo periodo de relaciones de matrimonio y vecindad. Por lo
regular,las tribus pertenecientes a diferentes unidades de este tipo se
encontraban en un estado de guerra más o menos permanente, inte
rrumpido por periodos estacionales de tregua. No hay registro, sin
embargo, de una guerra de un grupo de tribus contra otro. Las expe
diciones e incursiones bélicas se limitaban a los vecinos inmediatos;
y a las tribus que yacían muy lejos, a más de veinte o treinta millas de
distancia, no se les consideraba amigas ni enemigas.
Las tribus inmediatas a los bantúes kavirondo, de las cuales ningu
na es de origen bantú, vivían en constante estado de guerra o tensión
con los bantúes. Las tribus nilo-camíticas, al este de Kavirondo, predo
minantemente pastores, atacaban a los kavirondo, sobre todo con
el fin de robarles su ganado.3 Los teso y los luo del oeste intentaban
conquistar el territorio y, a juzgar por los nombres de los lugaresy las
tradiciones tribales, paulatinamente empujaron hacia el este a las tri
bus bantúes. Sus sucesivas fronteras, al retirarse, en términos gene
rales corren paralelas a la frontera actual entre Kenia y Uganda. Sin
embargo, parece que la presión ejercida por las tribus circunveci
nas sobre los bantúes kavirondo no ha sido excesiva, ya que no ha
forjado una unidad política y militar, a pesar de la gran similitud de
lengua y cultura. Incluso puede ser que su retroceso hacia el este haya
sido en ocasiones, y en algunas zonas, voluntario, ya que su territorio
actuales por lo menos tan fértil y más saludable que el territorio del
que fueron desplazados.
4 La densidad respectiva, por milla cuadrada, es de 391 entre los logoli –o maragoli
del sur– y de 73 entre los vugusu del Kitosh septentrional –o distrito Kimilili
(Censo realizado en 1932).
312 Günter Wagner
los más aptos para dejar de lado las envidias y los intereses particu
lares y así abogar por la unidad de la tribu.
por parte del clan, así como la responsabilidad al clan por los actos
del malhechor. De esta manera, la actitud hacia un delincuente em
pedernido difiere profundamente de la actitud hacia un delincuente
ocasional. Respecto de este último –no importa cuán grande haya
sido el delito cometido por él–, se considera que ha actuado dentro
de un conjunto de condiciones y circunstancias particulares y sola
mente contra los intereses de las personas directa o indirectamente
afectadas por el delito; mientras que el malhechor habitual se vuelve
causa de peligro para todos en la tribu. Por esa razón, será colocado
fuera de la protección legal del clan y podrá matarlo cualquiera que lo
sorprenda in fraganti, cometiendo otro delito. Así, personas que hayan
llegado a ser consideradas brujos peligrosos o ladrones incorregibles
serán primero expulsadas de su clan y luego, a la s iguiente provoca
ción, linchadas por un grupo lo más numeroso y compuesto posi
ble, para evitar el peligro de una sangrienta v enganza. Este tipo de
acciones en grupo ante una amenaza de peligro inminente, efectua
das espontáneamente, es decir, sin un juicio previo y por lo regular al
calor del momento, es claramente distinta de la jurisdicción institu
cionalizada de la sociedad tribal mediante autoridades judiciales
reconocidas. Antes bien, en tales casos, la persona del acusador se
multiplicará, y el grupo tribal, siendo al mismo tiempo acusador y opi
nión pública, abrevia el procedimiento judicial acostumbrado. Se
verá así que la ocurrencia de una acción colectiva indiscriminada
frente a brujería peligrosa y crimen habitual no invalida el principio
básico de jurisdicción, o sea, que la justicia se lleva a cabo solamente
cuando es solicitada por la víctima o las víctimas y se lleva a cabo so
lam ente dentro y entre los grupos de personas cuyos intereses com
partidos son afectados por el delito.11
11 Una idea similar expresa J. H. Driberg en el ensayo citado. Driberg, sin embargo,
ve una diferencia entre dos distintas categorías de delitos: los cometidos contra
individuos –o individuos que representan una familia, una comunidad o una
338 Günter Wagner
eficacia aumenta con los años de la persona que las eche. Yo mis
mo he presenciado algunos casos en los que las propiedades robadas
fueron secretamente devueltas pocas semanas después de echada la
maldición. Entre los vugusu se dice que las amenazas de emplear
los servicios del hacedor de lluvia para desviar la lluvia del huerto del
ofensor o destruirlo provocando una granizada eran la medida más
común para cobrar una deuda.
Cuando los involucrados no pueden resolver personalmente las
disputas o los conflictos, la persona que se siente perjudicada recurre
a los ancianos de su subclán, y el acusado, si pertenece al mismo sub
clán, será llamado por ellos o se dirige a ellos por su propia v oluntad
para defender su caso. Los ancianos escucharán el caso como lo pre
senten los dos litigantes y cualquier testigo. La decisión puede ser
anunciada por cualquiera de los ancianos presentes porque, una vez
confirmados los hechos del caso, sólo habría una decisión posible y
sería del conocimiento de todos. Tampoco habría una asamblea judi
cial organizada. Los ancianos del subclán se reunirían cada mañana
en un prado donde, sentados alrededor de una hoguera en la oluhia,
discutirían sobre las noticias y los chismes del día anterior. Estas reu
niones informales eran la principal ocasión para impartir justicia
dentro del subclán. Si no fuera posible establecer la evidencia escu
chando a las dos partes y a los testigos, se celebraría una ordalía en
presencia de los ancianos de la oluhia. Después de eso, no se necesi
taba nada, pues se suponía que la ordalía revelaría automáticamente
la verdad.
Como alternativa a una apelación al arbitraje de los ancianos
existe la continuación de mutuas provocaciones entre las partes en
conflicto, hasta llegar a una lucha abierta. Sería entonces obligación
de los ancianos intervenir, separando a las partes opuestas y persua
diéndolas de volver a la razón y resolver su disputa pacíficamente.
La capacidad de ciertos hombres del subclán para llevar a feliz término
este tipo de intervenciones era uno de los principales requisitos para
340 Günter Wagner
ocupar una posición de líder político: “El jefe del clan, el omugasa,
es el que habla suavemente y puede hacer que la gente lo escuche
cuandoestá peleando o disputando”, es la definición acostumbrada
del “jefe” tradicional.
Si la disputa o el delito era de carácter más grave, si incluía un
daño serio o aun la muerte de una persona, la noticia se difundiríará
pidamente entre todos los miembros del clan y los ancianos de los
diferentes subclanes acudirían al lugar del crimen para celebrar una
ekiruazo “reunión” ad hoc, prevenir la lucha y discutir sobrela situa
ción para finalmente dictar su veredicto. En esta clasede asambleas
del consejo del clan –es decir, de los ancianos de todoslos s ubclanes–
tampoco habría un “juez en jefe” hereditario o formalmente nom
brado, o un subclán principal, sino personalidadesfuertesque
hubieran cobrado prestigio como guerreros o que por medio de
fiestasfueran reconocidas como las autoridades cuya opinióntenía
más peso que la de los demás ancianos.
La única sanción que apuntalaría las decisiones legales expedidas
por los ancianos del subclán o por la asamblea ad hoc de todos los an
cianos del clan era la solidaridad de los miembros de los respectivos
grupos en su apoyo a estas decisiones. Muchos nativos aseguran que
siempre que el veredicto fuera el de todos los ancianos del clan o
de la gran mayoría de ellos, el procesado no intentaría oponerse a él.
Si tuviera que cumplirlo sin el apoyo de una sección de los miem
bros de su clan, el veredicto habría sido aplicado por los ancianos
nombrandocierto número de hombres para recuperar por la fuer
za el ganadoo cualquiera que hubiera sido la indemnización. Ade
más, una personaque evadiera la justicia en su propio clan sólo con
dificultad podría migrar y establecerse en otro clan, porque no sería
recibido con hospitalidad si la razón de su secesión fuera conocida, y
lo obligarían a someterse a la decisión de los ancianos.
La situación era diferente cuando una disputa entre dos miembros
del mismo clan provocaba una disensión entre los ancianos del clan,
La organización política de los bantúes de Kavirondo 341
apoyado cada uno por una sección del clan y ninguna de las secciones
estaba dispuesta a ceder. En tales casos, la sección más débilse apar
taría de las tierras del clan y se afiliaría a otro clan o emigraría a otra
parte, creando de esta manera un nuevo clan. El origende muchos
clanes se tiene que buscar en este tipo de c onflictos. Al principio,
el clan principal y el nuevo clan así separado evitarían toda relación
socialentre ellos, y continuarían observando la regla de exogamia.12
Después de unas cuantas generaciones, cuando el pleito se hubie
ra olvidado, un miembro del clan que se había s eparado se casaría
tentativamente con una omwiwana “sobrina” del clan principal, es
decir, una muchacha cuya madre provenía de aquel clan. Si de este
matrimonio resultaran hijos que sobrevivieran, los m iembros de
los dos clanes empezarían a casarse directamente, y de esta m anera
se establecería plenamente la independencia del nuevo clan y se
abandonaríael nombre del clan principal, que al principio se habría
mantenido junto con el nombre del hombre bajo cuya dirección se
había separado el nuevo clan.
Pero las funciones judiciales del clan no se limitaban a la restaura
ción de la ley y del orden dentro de sus propias filas. Abarcaban tam
bién la resolución de las disputas que surgían entre los miembros de
diferentes clanes. En estos casos, la persona dañada y sus parientes
inmediatos se dirigirían a los ancianos del clan del ofensor. Si el caso
era lo bastante grave como para afectar los intereses comunes de todo
el clan, el ofendido recibiría el apoyo de todos los ancianosde su clan y
de un número de guerreros que lo acompañaríanen su búsqueda de
satisfacción legal, para mostrar al acusado y a su clan que lo apoya
ban. Así sería cuando un miembro del clan hubiese sido amenazado
Privilegios de la primogenitura
Dado que la primogenitura lleva consigo una cantidad determinada
de privilegios, en cada familia hay una tendencia a que el hijo mayor
sea reconocido como la persona más importante después del padre.
Su autoridad se basa principalmente en tres factores. El primero
es que se encuentra en posición privilegiada para la adquisición de
riqueza en forma de ganado. Aunque en última instancia todos los
hijos tienen derecho a recibir una parte igual del legado de su padre,
el mayor se encuentra en la posición más propicia para el uso de la
propiedad de la familia, lo que le permite “partir” antes en la vida
respecto de sus hermanos; es el primero en recibir ganado para su
boda y, si su padre no posee mucho ganado, el segundo hijo acaso
tenga que esperar muchos años hasta que el rebaño del padre haya
sido restaurado antes de poder casarse. El mayor tiene también dere
cho privilegiado a la tierra del padre, a la herencia de sus esposas más
jóvenes y a la administración del ganado familiar. Los hijos menores
tienen que esperar hasta que el ganado recibido por el hijo mayor
se haya incrementado lo suficiente como para permitir una división
equitativa, y por lo regular, solamente reciben su parte de la herencia
del padre en plazos lentos y retrasados. Se verá así que la posición
económica privilegiada del hijo mayor tiende a ser de efectoacumu
lativo –hasta cierto punto–, cuando una generación va siguiendo a
otra. Como resultado de esta tendencia, el linaje de los hijos mayores
por lo regular se convierte en el más acaudalado.
El segundo factor es que el hijo mayor, mediante su adminis
tración de la herencia del padre en tierra y ganado, ejerce autoridad
sobresus hermanos menores que dependen de su amistad y su
buenadisposición para recibir su parte de la propiedad del padre que
al fin les pertenece.
Un tercer factor es que la tradición de la familia y el conocimien
to de la ley y la costumbre y, en particular, del derecho a la propiedad,
siempre pasa de padre a hijo mayor, de manera que en el grupo de
La organización política de los bantúes de Kavirondo 353
Riqueza
La cualidad de omugasa
ilitar tendía, más que otros tipos de liderazgo, a ser reconocida más
m
allá del clan individual, estableciendo así la superioridad de un clan
por encima de los demás.
Edad
Finalmente, la vejez era la condición más general para llegar a ser líder
político; socialmente, esta condición estaba marcada por la institu
ción de los grados de edad para la circuncisión. El reconocimiento
de la primogenitura para la regulación de la herencia y la sucesión da
un estatus superior al anciano en todas las relaciones de parentesco.
En términos generales, es siempre la opinión del miembro más viejo
del grupo de parentesco la que tiene el mayor peso en los asuntos
concernientes al grupo. Los hijos adultos muestran una mayor obe
diencia y respeto hacia el hermano mayor de su padre que hacia el
padre mismo, y tras la muerte del padre, la autoridad de éste no se
transmite inmediatamente al hijo mayor, sino al hermano mayor del
difunto, si todavía vive.
La autoridad implícita en la edad avanzada recibe todavía ma
yor peso por ideas relacionadas con el culto a los antepasados. Una
de éstases que la edad madura es condición necesaria para celebrar
sacrificios, ya que debe tener una mente libre de pensamientos sexua
les y poseer otras cualidades, características de la vejez, tales como
sabiduría,caballerosidad y estar libre de avaricia y celos. La otra idea
es que los espíritus recuerdan el trato que recibieron cuando vivíany
que les evitan o causan problemas a sus familiares vivos, segúnel tra
to recibido. Por eso los ancianos, más que otros, son temidos como
espíritus potencialmente hostiles, lo que a umenta considerablemente
358 Günter Wagner
M Millas
A 5 0 1 2 3 4 5
Samburgo N
M
Bolaga M
A
S I
Zuwaru N Pielu M
Duusi Datck
Datck
Kalbeo Gbambibug Kpatia
Saabya Biuk Kapal
Gar
Ba`ari
Ba’ari a z ourGbee Gban
Rí
Bun ay
o
Nkoog M Y Namooraana
Gbeog Zubiu I
S
Vo l
Wakii E
Gorogo L LGbambee Woo Sie
Sii A Tensugu
ta R o j o
M
K
lis
Pusunamoo T Ta Degal
Yinduur
Balu Zandoya
Kumbude
a Biü
g
b a
m
a o
Kurugu
B l anco
Arogo
t
G
n
Río Volta
A M P R U S I p a
e
M
E s c a r m
Esbozo del territorio tale. Los principales asentamientos Namoo o parcialmente Namoo, están subrayados (Tongo).