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PRUEBA DE LA POSESIÓN

Para determinar la prueba de la posesión, es preciso distinguir conforme el tipo de bien que
se posea, esto es, si son muebles o inmuebles.

Prueba de la posesión de bienes muebles

La prueba de la posesión de los muebles, se reduce a la demostración de sus elementos


copulativos: corpus et animus.

En cuanto al corpus, su prueba implica la prueba de la detentación, en otras palabras, que


al objeto se lo tiene aprehendido físicamente o, al menos, se le gobierna, controla, o se le
tiene a su disposición. En cuanto al animus, por su naturaleza sicológica, su prueba directa
es muy difícil, pero ello no es óbice para acreditar hechos externos que permitan concluir
que el sujeto tiene ese animus, y que son generalmente aquellos hechos que denotan un
comportamiento que sólo el dueño haría, v. gr., se le usa, se le mantiene, mejora,
transforma, destruye, etc., todo lo anterior: sin pedirle permiso a nadie.

El que alega posesión debe probarla, y como se trata de probar un hecho, puede ser
acreditada por cualquier medio probatorio, incluidos los testigos (arts. 1.698, 341 C.P.C.).

En cuanto a los vehículos motorizados, la presunción simple- mente legal del artículo 38 de
la Ley de Tránsito No 18.290, es sólo una presunción de dominio, y no de posesión, por
ello no basta sólo la prueba documental.

Prueba de la posesión de los bienes inmuebles

Este tema, se vuelve a tocar en el estudio de las acciones posesorias.

La prueba de la posesión de los bienes raíces, está contenida en los artículos 924 y 925.

Art. 924: “La posesión de los derechos inscritos se prueba por la inscripción y mientras
ésta subsista, y con tal que haya durado un año completo, no es admisible ninguna prueba
de posesión con que se pretenda impugnarla”.
Art. 925: “Se deberá probar la posesión del suelo por hechos positivos, de aquellos a que
sólo da derecho el dominio, como el corte de maderas, la construcción de edificios, la de
cerramientos, las plantaciones o sementeras, y otros de igual significación, ejecutados sin
el consentimiento del que disputa la posesión”.

RECUPERACIÓN DE LA POSESIÓN PERDIDA Art. 731: “El que recupera


legalmente la posesión perdida, se entenderá haberla tenido durante todo el tiempo
intermedio”.

Art. 2.502 inc. 2o: “(...) a menos que se haya recobrado legalmente la posesión, conforme
a lo dispuesto en el título De las acciones posesorias, pues en tal caso no se entenderá
haber habido interrupción para el desposeído”.

PRESUNCIONES PARA FACILITAR LA PRUEBA DE LA POSESIÓN

Art. 719: “Si se ha empezado a poseer a nombre propio, se presume que esta posesión ha
continuado hasta el momento en que se alega.

Si se ha empezado a poseer a nombre ajeno, se presume igualmente la continuación del


mismo orden de cosas.

Si alguien prueba haber poseído anteriormente, y posee actualmente, se presume la


posesión en el tiempo intermedio”.

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