MAESTRÍA EN EDUCACIÓN CON ÁREA TERMINAL EN INNOVACIONES

EDUCATIVAS

PRIMER ENSAYO
¿De qué manera y hasta donde es posible transformar la
cultura organizacional por una cultura de innovación?

31/01/2015
Rodríguez, H. A. & Alvarado, U.H. 2008. Claves para la innovación social en América Latina.
Capítulo I. CEPAL 13pp Hewlett-Packard

MARIA GUADALUPE LUNA MANZANO

Dando voz a las personas que trabajan desde la propia comunidad, la sociedad
civil, la empresa privada y el Estado, a partir de los proyectos de innovación
social, tales como la salud, la educación, la generación de ingresos y la atención
de la juventud en riesgo o las mujeres agredidas, entre otras, las cuales deben de
ser difundidas entre los gestores de políticas sociales, ya sean estos del ámbito
privado o público, que adaptan los diversos conocimientos de una manera creativa
a una problemática perfectamente bien identificada. Cabe destacar que la mayoría
de las innovaciones del campo social son readaptaciones creativas en procesos y
contextos distintos a los originales. (p.22)

En las innovaciones sociales el incentivo va mucho más allá. Además de las

consecuencias materiales que puedan tener sobre la calidad de vida de los
beneficiarios, existe un valor intangible e incalculable, el de una esperanza o una
dignidad recuperada, la certidumbre de que los seres humanos no están tan
abandonados y de que un mundo mejor, fundado en la solidaridad y la
cooperación, siempre es posible. (p.33)

Aunque el propósito de una innovación sea resolver una necesidad particular de

un grupo específico, su origen lo podemos encontrar en las soluciones alcanzadas
por otro grupo en otro contexto, es por ello que se menciona que es una
readaptación de conocimientos y aunque el éxito de una innovación particular no
dependa de su réplica como tal, ésta le proporciona un sentido social. La réplica
no es posible si no se cuenta con una sistematización clara. Una vez identificadas,
las innovaciones deben ser sistematizadas para que sean útiles a los
comunicadores, diseñadores de políticas —especialmente públicas—, y gestores e
innovadores del campo social. (p. 22 y 23)
Se requiere entonces que se considere, más que el invento original, el origen y el
destino de cada nueva aplicación. Es decir, que se conciba la innovación más
como un proceso que como un hecho o un acontecimiento; que se considere
más la praxis que genera el cambio y es capaz de sostenerlo en el tiempo y el
espacio. (p.23)

Para ello es imprescindible constituir una ciudadanía fundada en los derechos, y

en la medida en que se forjen comunidades conscientes de ellos, que sean
capaces de exigirlos, consolidarlos y desarrollarlos con una praxis personal y
socialmente responsable, entonces estaríamos hablando de un verdadero cambio
y en una verdadera innovación cultural, que al parecer en nuestro país,
lamentablemente la brecha se hace más constante, profunda y difícil de acotar.

Por lo tanto, la importancia en todas las sociedades del mundo y principalmente en

nuestro país y América Latina, radica en atender la EDUCACIÓN, porque partimos
de una problemática perfectamente bien identificada (carecemos como sociedad
de todo lo anterior), en la que a través de los aprendizajes podemos sociabilizar y
aprender unos de otros, y educar y formar a los alumnos dotados de nuevas
capacidades, ya que toda innovación supone una nueva competencia. (p.35). Se
afirma así que el conocimiento se genera y regenera en un proceso grupal, es
decir social, y que por ende, no solo se reproducen los resultados del
conocimiento sino también los procesos necesarios para producirlo (p.29),

Para que se pueda propiciar la replicabilidad de las innovaciones sociales, y

tengamos a través del diálogo un acercamiento más profundo con los agentes
internos que padecen de la problemática social. Como en nuestro caso es la
Educación y formamos parte de una sociedad, tendríamos que sistematizar
nuestra intervención para que no quede sesgada nuestra investigación y así
proponer soluciones.