VICKI (Entra por la izquierda. Temerosa.

Viste una descolorida malla, sobre la cual lleva una

chaqueta de lana. De un gran y usado bolso saca sus zapatillas de baile. Habla mientras se calza.)
¡Dios! ¡Bailar otra vez! ¡No me lo puedo creer! Sería maravilloso conseguir este trabajo y dejar de la
barra del bar. Podría comprarme un bolso... Pero no es bueno soñar. Hace cuatro años que no
practico. Ya no tengo la misma agilidad, ni la misma figura... (Palpándose) Me sobran kilos. Aún me
acuerdo de Elena, era delgada como un fideo. Tuvo la mala fortuna al pillar una hepatitis y, durante el
reposo, engordó algo. Cuando volvió, el director, nada más verla le soltó sin piedad: "Nena, tienes el
tipo perfecto para ser la estrella de una manada de ballenas". Elena se marchó llorando… meses
después leí que se había suicidado con barbitúricos. Espero que aquí sean un poco más amables
conmigo. Tengo que intentarlo (Abre el bolso buscando un pañuelo, pero saca un juguete) ¡Niños,
nuestra vida va a cambiar! ¡Os lo prometo! No más errores. (Cantando. A lo largo de la canción se va
incorporando el resto del grupo.)

Cuando le besé,
no hice bien lo sé.
Él tenía buena planta
y no paraba de hablar:
Tus bellos ojos son como el azul del mar y
Eres mucho más sexy que Marilyn Monroe.
Me llevo con él.
¡Ay!, a bailar.

Pero sucedió después,

nunca lo pensé,
estaba esperando un niño y
me tuve que casar.
Un viejo juez, un sandwich y
algo de licor.
Todos me dijeron eres como Marilyn Monroe.
Y me fui con él,
a bailar.

Nació el niño y
todo parecía ir bien,
pero pronto descubrí que
habíamos hecho "diana" otra vez.
Vayamos a bailar.
Llévame, por favor.
Me dijo: No. Estás más gorda que Marilyn Monroe
No más bailes.
Nunca más.

Recién hice veintidós él

de casa se marchó.
Sola, con dos hijos,
¿qué podía hacer yo?
Tan sólo sé bailar
y busqué esta ocasión
para brillar más que la "star" Marilyn Monroe.
Voy a bailar,
a bailar.
No te canses
de bailar.