“¿A DONDE IREMOS?

Introducción:

Texto: Juan 6:60-69.

I- ¿A qué palabras se refería el verso 60?

1) Debemos leer capítulo 6 para entender. Leeremos solo algunos versos:
a. Jesús había alimentado a 5000 personas con 5 panes y 2 peces.
b. Luego de esto grandes multitudes le seguían. (LEER Juan 6:24)
c. Jesús les reprocha que le buscaban por comida. (LEER Juan 6:26-30)
- Los judíos creían que se iban a ganar el cielo por hacer buenas obras.
- No comprendían que creer en Jesús era la primera condición y la primera
“obra.”
- Su corazón estaba endurecido y pedían más señales.
- Explicarla creencia rabina sobre el Mesías. (Señales al menos como la que
hizo Moisés= MANA)
- Este pan que Jesús dio era terrenal, el que Moisés dio era del cielo.
- Jesús entonces les explica cuál es el verdadero pan. EL MISMO.
d. Jesús corrige dos cosas:
1. Moisés no era el que dio el pan sino Dios.
2. Ese pan aunque descendió del cielo no podía dar vida eterna.

APLICACIONES DEL PASAJE:

II- La palabra de Dios confronta a los que la oyen. (Leer versos 60-66)
1) La palabra de Dios es dura, confronta el pecado y al pecador. Leer Heb. 4:12
a. Penetra en lo profundo del corazón.
b. Nos llega a la conciencia.
c. ¿Quién pude oírla? Entendamos oírla=obedecerla.
d. LA RESPUESTA: PUDEN OÍRLA AQUELLOS QUE TENGAN UN
CORAZÓN HUMILDE Y RECEPTIVO AL MENSAJE DE DIOS.
2) Los que oyen la palabra tienen dos opciones: OBEDECERLA O IGNORARLA
(DESISTIR).
a. Desistir es la opción más fácil y esta eligieron muchos de lo que seguían a
Jesús.
b. ¿Por qué lo hicieron? Por varias razones.
1. Quizás para ellos Jesús no era el Mesías y conquistador que esperaban.
2. Quizás esperaban un mensaje menos rudo. (Muchos a veces queremos
escuchar ese tipo de mensaje en la iglesia)
3. La razón principal: ERAN ORGULLOSOS Y NO QUERÍAN SOMETERSE
A DIOS.
4. Me llama la atención del verso 66. “volvieron a su vida anterior”.
5. ¿Cuántos de esos conocemos nosotros que han venido a la iglesia
y conocido la verdad y han preferido la mentira?
6. Pero hay de ellos: LEER Hebreos 10: 26-31.

III- Sin Cristo no hay a donde ir (Leer 6:67-69)

1) Jesús no obliga a nadie a seguirle.
a. Aun los discípulos tenían la opción de irse si deseaban.
b. Aquellos que siguen al Señor con un corazón humilde y deseoso de EL no
lo abandonan nunca.
c. ¿Viene usted al Señor con ese corazón? AMEN!!!!!!
2) Analicemos la respuesta de Pedro en tres aspectos:
1. ¿A quién iremos? Se pregunta pedro.
- No hay a donde ir, no hay otro camino para la salvación.
- Leer Hechos 4:11-12.
- Solo Jesús puede darle consuelo, paz y salvación a nuestras almas.
- El placer del mundo es temporal, todo lo material es corruptible.
- La gloria de este mundo es fugaz.
- Jesús el Camino, la verdad y la vida. (Juan 14:6)
2. Solo Jesús tiene palabras de vida eterna.
- En esta vida tenemos que decidir dónde queremos pasar la eternidad.
- Debemos elegir: ¿Vida eterna en la presencia de Dios o castigo eterno
con el diablo y sus ángeles caídos?
- Estoy seguro que ninguno quiere la perdición eterna.
- Pues entonces cree y obedezca las palabras de Jesús porque en ellas está
la el camino a la vida eterna.
3. Hemos creído y conocemos. (interesante lo que dice Pedro aquí)
- Hay una diferencia entre creer y conocer.
- Muchos dicen creer en Dios, pero nunca llegan a conocerle.
- Se cree en un solo instante, pero para conocer a Dios se necesita toda una
vida de consagración a Él.
- ¿Todos los que estamos en este lugar creemos que Jesús es el hijo de
Dios? Amen!!!
- Pero ¿Cuántos realmente le conocemos? ¿Cuántos tenemos realmente
una relación íntima con nuestro Dios?

Conclusiones:

1) Usted y yo en ocasiones seremos confrontados por la palabra de Dios.

2) Cumplir lo que pide Dios no es una tarea fácil.

3) Pero es más fácil cuando nos humillamos ante él y reconocemos nuestra

debilidad y dependencia de EL.

4) El mundo no puede ofrecernos nada comparado con lo que Dios le está

ofreciendo.
5) ¿De qué le vale al hombre ganar el mundo entero si perderá su alma en
el infierno?
6) Sin Jesús no tenemos donde ir. Andamos sin esperanza en este mundo.
7) Los animo en esta mañana hermanos a no ser de aquellos que HAN
CREIDO sino de aquellos que HAN CREIDO Y CONOCEN AL SEÑOR.
8) A ser de los valientes que se esfuerzan por agradar a Dios y no a ellos
mismos.
9) A ser de los que mantienen un paso firme hacia la meta, a pesar de los
tropiezos y las caídas.
10) A ser de aquellos que se levantan, se sacuden y siguen adelante
sostenidos de la mano del Señor.
11) A ser de los que se responde a sí mismos cada mañana al despertar:

“Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.

Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el
Hijo del Dios viviente.”

¡Dios los fortalezca y continúe bendiciendo!