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¿Tiene por qué todo, no? Don Honorio, allá al lado del mar, también
-Tá bonito recuerda cuando conoció a Domingo:
- Eso es lo que una persona puede decir,
aquí hay una cosa, este autor que hizo esto - Por ejemplo dicen que mi ahijado Pontigo
tenía contenido, todo dice por qué, por qué está sirviendo de maestro, y quizás, porque
mira. yo no le he amaestrado a la manera mía, si
Es tal como ése… ¿cómo dice? se me ol- él tiene de su propio talento, es cosa de él.
vidan, ayer estuve recorriendo un poco, se El mejor poeta que encontré yo, en esos
me ha perdido la memoria un poco, no me tiempos cuando andábamos con don Juan,
acuerdo de los nombres de las personas, no fue mi ahijado. Entonces él estaba prestan-
ve que tantos nombres. do el servicio militar, mi ahijado, y en Loyca
Arriba a un vecino mío también le tocó. Le
Tantos nombres, la tierra llena de nombres, tocó en Iquique, y se acordaba allá de los
de palabras, de lugares, de situaciones. cantos mi ahijado. Y el amigo de acá de
Acabamos de comer una exquisita cazuela Loyca Arriba le dijo, acá hay un poeta que
y don Domingo, sentado en el comedor se llama Honorio Quila. Sí, lo conozco, le
de su casa de Las Pataguas, comienza a re- dijo, él le sacó un verso a la luna. Don Juan
cordar: le dijo a todos que le sacaran un verso a
la luna, porque necesitaba demostrar eso
- Bueno, yo conocí a Honorio por allá por el en la universidad, y me dice la Ignacia que
año 60 más o menos, si no lo conocí antes. usted lo trajo el verso.
Cuando hice el servicio militar había algu- - Traje la grabación
nos pelaítos que eran de Loyca y me em- - ¿y se acuerda como principia? Escuche:
pezaron a conversar de la vida de Honorio
Prosperando el mundo entero En el concurso de Puente Alto, en 1969,
hacer el viaje a la luna cantaron por el viaje a la luna, y don Juan lo
tienen mensurada la altura grabó. Nadie había vuelto a escuchar esas
los rusos irán primero grabaciones en mucho tiempo, estaban en
un satélite ya hicieron una maleta guardadas. Un tesoro. Una joya
que al espacio lo elevaron de ese tesoro son nueve poetas cantando
fue el piloto que mandaron un pie de verso sobre la llegada del hombre
la heroica perra Laica a la luna. Cantan en rueda, a la manera
y al mundo un dolor que espanta tradicional. Cada uno con un instrumento,
que inocente la mataron a la manera nueva.
No ve que yo oí lamentarse a la perrita, por- -Mire, don Honorio, más bien escuche lo
que se le terminó la comida. Le dejaron co- que traigo.
mida pero no se acordaron que se le iba a
terminar la comida y se iba a morir de ham- Aprieto la tecla y comienza ese prodigio de
bre. Y eso me dolió a mí, la perrita se murió la tecnología, de la inteligencia humana.
de hambre. Yo nací con ese don también. Los muertos reviven, las voces emitidas 40
años atrás vuelven a recorrer el aire y llegan
Don Juan Uribe organizó esos increíbles a nuestros oídos.
concursos de Canto a lo Divino y Humano Memorias, recuerdos. Honorio escucha en-
en diferentes ciudades entre 1964 y 1973, simismado
congregando a los mejores poetas de esos
años.
Viaje a la Luna Rodemil Jerez (Los Quillayes)
Pitean: alegan
como lo hizo con don Manuel Gallardo, de muna de San Pedro es mi comuna. Por eso
Aculeo. Ahí estarían sus versos, todos los tengo mi galvano, es lindo lo que hay escri-
que ahora ha olvidado, todos los que se to. Eso está pal recuerdo pa sécula.
han perdido. Pero eso ya no fue, ahora sólo
quedan fragmentos en su mente, pies hua- El hombre estaba adorando
chos, versos incompletos. Cierra los ojos y él dice en nombre de Jesús
comienza a referir la mujer siendo su cruz
ahí lo estaba tentando
Jesús el eterno padre lo seguía perturbando
dueño del cielo y la tierra en la oración que lo vi
y una preciosa doncella de verlo tan convertido
fue su santísima madre de rabia se despedazaba
pobre, humilde y tan amable el rosario en que rezaba
permitió lo imposible se lo cortó a su marido
caminó Marta y Matilde
para hacerle compañía Después que se lo cortó
puesto pa rendir su vida apesarada se vio
nació de lo más humilde a su dichoso marido
después perdón le pidió
Nació de lo más humilde de rodillas se postró
una hermosísima flor pidiéndole al santo eterno
su purísima pasión al tomar el sacramento
que fue un castigo terrible que su cuerpo lo deseaba
y de Dios fue perdonada
Ésa es la cuarteta. Y esta otra al ver su arrepentimiento
Las lágrimas le asoman a los ojos cuando Ése lo oí yo, lo oí en El Durazno cantar. Y un
termina de referir. Es un verso que llega a verso que dice, por Salomón
dar pena, dice. La belleza del verso, el sufri-
miento que soportó el Nazareno. Imaginar, Dice la sagrada historia
sentir como habrá sido ese sufrimiento, qué que no se puede perder
cosas habrá pensado mientras cargaba la porque se formó por él
cruz. Las cosas que inspiran a los poetas al el templo en el monte Moria
momento de hacer sus versos. El sentir, el no hay sabio de más memoria
saber que lo que se relata es la historia sa- que me dé satisfacción
grada. como fue la construcción
del templo quiero saber
Aquel día tan amargo que me den a conocer
Dios nos tiene destinado que fin tuvo Salomón
Ése está en el libro del padre Jordá, y yo lo Eso cantan autorizados los cantores
he escuchado que lo han cantado por ahí
los cantores. Pero es bonito
La Ignacia entra a la pieza, se acerca pre- De los astros más nombrados
ocupada a don Honorio, que se ha ido ca- Mercurio vidreo farol
lentando con los versos, la memoria excita- que anda detrás del sol
da, cientos de versos dando vueltas en su y de los demás rodeado
cabeza. Tose y se estremece, se incorpora y el firmamento poblado
se deja caer en los almohadones. de tanta iluminación
a distancias de un millón
- ¡Ese pecho, papá, ¿te duele, tenís fiebre, qué límites desiguales
estai con fiebre Honorio? y de los más principales
- No, ¿en qué estaba yo? si estoy bien, dieciocho planetas son
como dije
-ah, 18 planetas son
En el mundo no nació
y el padre nunca pecó -18 planetas son
la abuela estuvo doncella de los títulos primarios
hasta que el nieto murió se mueven los secundarios
que hay en la constelación
¡Sáquese ese caldito de la cabeza¡ pero es-
cuche bien Ésa es la cuarteta
- Sí, ya, todas esas palabras, como que son
En el mundo no nació tan difíciles pero no son tan raras.
y el padre nunca pecó - Son antiguas
la abuela estuvo doncella - Y sabias.
hasta que el nieto murió Nicasio Tapia, cantaba bonito, como ese
Pedro Lizama, Ignacio Arce, pero de los
Allá en Lo Marcolí se cantaron tantas cuar- buenos, lo bueno, no vamos a nombrar una
tetas. Mejor dicho era yo el de las cuartetas. media docena, serán muy pocos los buenos
Pero tan distintas. Todos los años llevaba un buenos.
verso o dos, los hacía yo mismo, pero la
gente se quedaba tono, callaíto. Los canto- Fragmentos, la vida está formada por frag-
res, sobre todo. mentos unidos misteriosamente. Este libro
Si esta vena de ser autor viene del papá de es un fragmento más, formado a partir de
uno. Mi papá era muy entendido pa eso fragmentos de conversaciones, recuerdos,
imágenes, grabaciones.
La luna entre las estrellas En la maleta de don Juan Uribe que encon-
alumbra en sus resplandores tramos, además de las grabaciones de los
de diferentes colores concursos hay una cinta que dice Honorio
que todos le dicen bella Quila y Miguel Galleguillos. No tiene fe-
ahí salieron con ella cha, seguramente esta grabado en Loyca,
a donde Dios la destina donde vivían ambos poetas. Veo los cerros
el lucero también brilla loyquinos llenos de pájaros y ovejas, ¿sería
aparte al venir el día primavera, estarían los pastos verdes?
alumbra en más armonía Los dos poetas frente a frente, cada uno
que el oro y la perla fina con su guitarra. Don Juan con la grabadora
- seguramente una Nagra- feliz escuchando
El lucero es muy lindo pue los versos.
-¡Pucha que son bonitos los versos por as- Honorio comienza a cantar por San Fran-
tronomía! Don Chosto me dio éste, que era cisco
de su tío Amador:
San Francisco milagroso “Ahora una no más por pajaritos, un pun-
lo escogió Dios del cielo to por pajaritos, dice la rara en su canto,
y predicó el evangelio una décima nos más”, dice don Juan, inte-
humilde y lleno de gozo rrumpiendo el desarrollo natural del verso.
siendo rico fabuloso Comienza a explicarle a alguien, lejos del
él sacrificó su vida micrófono, sobre el verso de pajaritos. Don
era su segura guía Honorio comienza a cantar
la santa cruz y el rosario
y en un monte solitario Dice la rara en su canto
ayunó cuarenta días bendito sea Dios
dice en la cuna gorjeó
Don Miguel toma su guitarra y comienza el la tortolita en el llanto
primer pie el águila canta en lo alto
con su música sonora
Siendo un serafín querido María a su hijo adora
San Francisco fue el caudillo la hija de Santa Ana
que imitó a los pajarillos y al repique de campana
que fueran .. canta un canario en la gloria
les dijo hermanitos míos
les doy un consejo fino Don Miguel hace una larga introducción
que ordenó el hacedor divino en la guitarra, seguramente recordando el
Dios eterno y poderoso verso. Cuando ya lo tiene en la memoria se
que le cantaran con gozos lanza
los pájaros con sus trinos
También hay otra avecilla
Don Honorio toma su guitarra y comienza de plumaje tornasol
el segundo pie la formó nuestro señor
y se llama golondrina
Siguió los pasos de Cristo también otra chiquitina
todo lleno de humildad el querido ruiseñor
fue obra de caridad entonando una canción
la vida de San Francisco por las selvas placentero
doce apóstoles benditos y el que ha sido muy ligero
le dio pa que predicara el canario ..
fue en un monte en Italia
donde oró cuarenta días Honorio toma su guitarra y sigue cantando
el verdadero Mesías
allá le grabó sus llagas Dios del cielo a mí me ha dado
dice la loica en su anhelo
Le toca a don Miguel su segundo pie un vestido de tres vuelos
y un delantal colorado
San Francisco predicó le dijo el chuncho enojado
a los pájaros del cielo que lindo traje lucís
con cariño verdadero… también salió la perdiz
la dulzura de su.. con un vestido a la moda
..interior se anunció mejor que todas
los pajaritos ligeros demonio la codorniz
sus cabezas inclinaron
y al Mesías lo adoraron ¿Tá bonito, no? dice Don Juan, y la graba-
con cariño y grato anhelo ción acaba.
Fragmentos de fragmentos de vidas. Mo- Y mi compadre me llevó donde una seño-
mentos guardados en una cinta, en ra que se llamaba Ursula Mora, y entonces
este caso algunos minutos de hace 45 años comenzó a santiguarme y cuando principió
atrás en Loyca. Otro tesoro. no más, mi amigo, me dijo, muy prudente
la señora, aguánteme un poquito. Fue a la
Volvemos al presente, que ya es pasado, y cocina, bueno, nunca está de más, pero las
Honorio sigue recordando su vida cosas no son pa todos, eso se lo aseguro
yo. Entonces fui y la vi, tenía ahí fuego de
- Bueno, a propósito de santiguar, yo san- leña, y tenía brasas y ella santiguaba con
tiguo. Pero qué paso conmigo, me veían palqui porque el ojo es bueno santiguarlo
santiguar y cualquiera venía. Me gustaba con palqui, y fue y revolcó en las brasas el
santiguar. palqui. Ya mi amigo, me dijo, así mismo me
También a mí me ojeó una mujer, porque trató, ya mi amigo, usted no es espanto el
yo era muy divertido en mis cosas, tallero que tiene, a usted lo ojearon.
bueno, y la señora se reía tanto, se ten- ¿y cómo va a saber eso ella? Sin que le diga
día riendo, la que me ojeó. Pero yo estaba nadie.
hombre, no era muy niño. Y entonces un Y ella dijo: estuvo muy bueno que lo ojea-
compadre me dijo, compadre, la mujer ésa ran porque llegó. Yo voy a entregar mis tí-
que está riendo, ésa lo ojeó a usted. tulos a otro, este don de santiguar, me dijo.
No ve que después quedé triste, de estar Pa que usté santigue en adelante a los ni-
tan alegre. ños chicos sobre todo.
El ojo es más que el espanto, que lo ojeen a
uno, por eso un niño se muere del espanto La última niña que santigué yo, llegó el
de ojo. papá de ella, don Honorio me dijo, me le
va a morir el niño, ¡llegó llorando! (don Ya estoy cansado de amarte
Honorio se emociona recordando y se le es más lo que he padecido
quiebra la voz) y la señora al lado, como es tanto lo que he sufrido
vendrían, pero la señora no lloraba. Él me que mejor pienso dejarte
dijo me le va a morir el niño. No se aflija le yo no quería olvidarte
dije yo, no se aflija, yo se lo voy a santiguar pero veo tus desprecios
y no se va a morir ná, le dije. mejor me retiro lejos
Pero con qué santiguo yo, con lo más po- a conquistar otro amor
deroso que puede haber en el mundo. Y así siento en mi pecho un dolor
fue, ¿cuál es que se le murió? porque me voy y te dejo
-¿Y con qué santigua usted?
- No, es que esas cosas son un poquito Recuerda prenda querida
secretas también. Y todos no saben tanto de mis primeras palabras
porque hay un niño allá que le gustaba san- cuando te dije con lágrimas
tiguar, yo lo veía santiguar pero no veía con que fuerai la esposa mía
qué oraciones. Pero hay gente tan pode- alegre te sonreíais
rosa pa santiguar. Ella una de ésas, Úrsula escuchándome explicar
Mora se llamaba. Y tenía una hija que se yo te dije que al altar
llama Flora Mora, y era cantora, cantaba muy pronto te llevaría
ella y la buscaban pa cantar en los rodeos. por eso paloma mía
Pero no cantaba muy bien. cuesta mucho pa olvidar
La Ignacia entra a la pieza con una bande- Entonces, a todo el mundo le gusta ese ver-
ja, te voy a servir un tecito, ¿y te gustaría so. Todo el que escuche un verso de este
aprender a cantar? tipo le gusta. Pero uno no saca nada. Hay
un hermano mío que me decía, Honorio,
-Estoy aprendiendo con don Chosto Ulloa, tan bonitos versos que hacís tú, sácales mé-
y Santito a veces me hace algunas clases. rito de alguna manera.
Don Chosto sabe mucho de escrituras y es
medio filósofo entonces está siempre pen- También tuve una novia que no era de Lo-
sando, reflexionando sobre las escrituras y yca, era de un fundo vecino, era hija de un
pucha que sabe y siempre que puedo voy rico, se llamaba Violeta. Y nosotros íbamos
pa allá pa´ allá a cargar papas con mi hermano ma-
- Pero tú todavía no estás componiendo yor. Y ella se enamoró de mí y me decía
- ¿Versos? Sí cuando estábamos cargando, había una
- ¡No vai a hacer lo del cura, po! manchita de espino tupida y allí se metía
-¿Tomar versos y ponerles cualquier autor? ella, siempre mirando que no la vieran los
-No sólo eso, el cura toma la primera pa- de la casa. Y me decía: te quiero tanto, Ho-
labra, la cuarta, por ahí va. Y si no, llega norio.
cara´e palo no más, un verso que es de otra Se llamaba Violeta, yo hice una cueca:
persona como que lo hace él
-No, yo soy más serio Violeta a mí me olvidó
-Toma tecito pero no fue falta de ella
sus padres se la llevaron
Don Honorio abre los ojos y dice a mi querida doncella
-Lo mío, cuando hago versos a lo humano Pero yo la quería, casi me morí cuando la
llevaron. Era linda, ¡pero linda linda! Otra
dama yo no tuve en mi vida, tuve hartas
mujeres, y bonitas, pero nunca como ésa.
Violeta a mí me olvidó supuesto que tenía que llevar pa grabar al
pero no fue falta de ella gusto de él, tanto cantor. Nos juntábamos
sus padres se la llevaron 60 cantores allá.
a mi querida doncella. - ¿Y con un sólo tocador la rueda, o hacían
varias ruedas?
Tenía 12 años - Bueno, habían también otros que toca-
-¿Entonces usté canta desde cuándo? ban, parados unos. Por ejemplo se cantaba
-No, yo canto de chico, de tres, cuatro años. una ruedecilla y seguían otros, con otros
No ve que el papá sabía cantar y tocaba, cantores que llevaban ellos de otros lados,
y ahí aprendía yo. Y había una hermana de Quelentaro, de Loyca mismo, no ve que
también que tocaba muy bien, incluso yo Loyca es grande, Loyca es largo.
le aprendí a ella más, ¡pero tenía unas ma- Hay uno que era de Los Quillayes, Segundo
nos! Esos toquíos que yo toco. Sánchez se llamaba. La casa de él era de
Bueno, y a propósito de guitarrón vamos los mismos Sánchez, la novena se hacía en
tocando un poco, si a mí me gusta mucho la casa de Marcolí Sánchez, pero le decían
la música. Marcolí, Marcos Luis se llamaba.
Y ahí venía Lucho Sánchez. Los patrones
Saco el guitarrón de su estuche y don Ho- de Los Quillayes tenían un sagrado corazón
norio sonríe que celebraban, y daban la vuelta a todo el
fundo. Partían de las casas y volvían a las
-Mire y es guitarrón bonito casas. Tomaban mucho tiempo, pa los seis
-Bonito es meses, daban la vuelta de casa en casa.
Por ejemplo un día sábado, cada ocho
Me mira con los ojos brillosos y refiere días, un inquilino recibía a la virgen, una
estampa tapada con vidrio. Y entonces el
Toco acordeón en el arpa día sábado estaba en esa casa, el otro día
y guitarrón en guitarra sábado la recibía el otro de más allá.
de puro gallo que soy Y gente de Loyca no faltaba nunca. Toda
me gusta el vino en la parra la noche, y al otro día cuando nos servían
desayuno ya nos retirábamos todos. Pero
Yo había prometido de no largar el arte al otro sábado estábamos en otra casa.
mío hasta…, y ahora ya 90 años es har- Yo tenía un compañero que se llamaba
ta edad, pero dije cuando esperaba el año Roberto Tapia, que le gustaba mucho, una
2000: ¿pasaré el 2000? Y lo más bien que vez vino porque esta casa es de él. Y allá
lo pasé, ¡y ahora que llegó al 2000 vamos en Loyca donde estábamos nosotros con
a llegar al 2010! Miguelito, porque le decíamos Miguelito a
Miguel Galleguillos, allá llegaba él y se es-
Al menos cuando llegó ese caballero, Juan taba toda la noche escuchando cantar.
Uribe, que anduvo por todas partes allá Todos los sábados cantábamos.
en Loyca. Supo que yo iba a una novena a
Los Quillayes, una novena muy nombrada Ignacia, sentada al lado de Honorio, co-
en Los Quillayes, la novena del tránsito, la mienza a recordar
Virgen del Tránsito. Allá llegó. Llegó con
Miguelito primero a Loyca, y Miguelito le -Yo estaba pequeña, muy pequeña y mi
dijo no, yo no le he visto a mi compadre. papá se ponía una manta de castilla, tenía
Entonces no le dijo ni una cosa. Se dio la cuello, todo, se ponía un sombrero, una
vuelta pa allá pal camino de la fruta, pal buenas botas y partía con su amigo Fran-
Manzano y llegó allá a Los Quiyalles. Más cisco a cantar a la novena, y llovía a chu-
contento que un grillo, cuando nos encon- zos. Sabes que salía lloviendo de la casa,
tró. Claro que él llevaba grabadora, por pero esas lluvias torrenciales, y ellos sería
tanta la pasión. Y se pegaban el pique y era pero mi abuelo se amanecía ahí con un bra-
como ir de aquí a Leyda, a pie, más, a pie sero grande. Llegaba don Miguel Gallegui-
por los cerros. llos, don Francisco Lizama, iba este otro ca-
- Era lejos pero no era tanto ballero, que no me recuerdo los nombres.
- ¡Cómo llegarían empapados! Mi papi Don Antonio Armijo, él no cantaba.
usaba la manta de castilla pero ese otro Me recuerdo muy bien que se colocaba la
caballero usaba un poncho así no más. Mi virgen, se adornaba todo y en el medio un
papi usaba unas botas de esas, como las brasero grande, el brasero era redondo y
llamaban, de cuero, un cuero especial que se hacía alrededor del brasero la rueda. Es-
había antes, que ahora no se ven esas bo- taba mi tío Manuel, mi tío Demetrio, que
tas, y buen pantalón, grueso. también cantaban. Mi tío Roberto compo-
Mi papá se iba, por ejemplo, salían a esta nía, él era autor, tocaba la guitarra y canta-
hora, y caminaban, caminaban y llegaban ba pero mi tío Demetrio no componía sino
oscuros adonde iban, cantaban toda la no- que él cantaba los versos de mi papá o de
che y mi papá llegaba no al otro día, sino mi abuelo, se los memorizaba y los canta-
que al otro día. Normalmente cuando él ba y cantaba muy lindo. Y mi tío Manuel
llegaba ya no llovía, y de eso yo tengo re- también tocaba guitarra y cantaba pero se
cuerdos no de un año no más, sino que de memorizaba los versos de los otros.
varios años, todos los años iba. Y me acuerdo que yo dormía, despertaba y
- ¿Y si no tocaba novenas tocaban ange- estaban cantando, volvía a dormir y volvía a
litos? despertar y seguían cantando hasta el ama-
- Angelitos, claro, eso nos venían a buscar necer y en la mañana pasaban al comedor
a la casa y se tomaban su buen caldillo. Mi mamá les
- Y también recuerdo una vez que llegaron hacía un caldillo de la misma carne asada
en la noche, no sé qué horas eran, pero yo que quedaba del día anterior, se hacía un
era muy pequeña y a él lo vinieron a buscar tipo ajiaco y les daba de desayuno a todos
para ir a San Vicente. Había muerto un an- los que estaban ahí, y ahí volvían y canta-
gelito, una guagüita, y llegó un caballero a ban el último verso pa la virgen.
caballo a buscarlo. Al otro día en la mañana, no sé qué hora
Y él le dijo ¿cuándo murió? Esta noche, sería pero estaba de día y se iban cada uno
pero los quieren allá. Ya, le dijo mi papá, a su casa. Llegaban al anochecer, ya oscu-
vamos a ir. Aseguró todos sus animales, se ro, muchas veces lloviendo, a caballo. Se
arregló y partió con su guitarra. No llegó rezaba la novena primero, se rezaba toda
hasta el otro día en la tarde. la novena completa y después se comía y
Porque yo lo echaba de menos, yo quería después se empezaba a cantar. Se hacía
andar en todas, estaba chica, no estaba mi gloriado y pasaba la rueda del gloriado,
hermana todavía. Pero era más para las no- era como un mate grande pero tienen un
venas, porque habían novenas ahí en Loyca nombre que no me acuerdo ahora. Y con
y también lo buscaban, acá donde don Emi- aguardiente, tapado con un paño, con una
lio Pinto también lo buscaban pa las nove- bombilla. Y tomaban todos, después toma-
nas. Y otras veces que llegaba y salía con su ban mate entre verso y verso, mate con so-
guitarra, era porque iba a cantar.¿dónde? paipillas. Se mataba un chancho, se comía
no me pregunte porque a mí no me decía carne asada, carne al horno. Y había vino
ná. Él le decía a mi mamá y salía, pero yo que mi mamá hacía, en la misma casa se
tengo esos recuerdos que él salía con su hacía ese vino y se tomaba, como vino añe-
guitarra a cantar. Y en la casa también se jo. Y se amanecían, tomando, comiendo,
hacía novena cantando.
-La del Carmen, la Virgen del Carmen
- Desde que tengo uso de razón mi abuelo Pero papá, ¿allá a Los Quillayes usted iba a
rezaba la novena, o sea, la rezaba mi papá la novena de?
- El Tránsito. El 15 de agosto. Y allá en la cuando la Eduvigis nos tuvo con los pan-
casa donde íbamos había una niñita que se talones abajo. Cantaron toda una noche
llamaba Isabel. Y había que pasar un este- ¡pero les dejó la melga no más! Cantaba
ro. ¡Mire como era Los Quillayes, de tanta bien, esa niña cantaba bien, era pa morirse
abundancia de agua¡ oírla. Y el hermano, Ignacio Arce también,
- Pero si llovía tanto, cómo no iba a haber y me decía a mí, mire Honorio, estoy tan
abundancia cabreado pa cantar, uno no gana ni cobre,
- Pero no, en el verano también me decía, y tiene que estar cantando y a
- ¡Y no se enfermaban! se quedaban toda veces me duele la espalda. Era poco mayor
la noche mojados con así unos braserotes que yo. Cantaba unos versos tan lindos. ¡Yo
- Pero los braseros allá había que estar con no sé de dónde diantre llegaban versos tan
cuidado. Pero la niñita esa, era chica y ve- lindos!
nía a toparnos, al estero. Y allá no faltaba
gente que venía a caballo y me mandaban San Benito jubiló
un caballo pa que pasara el estero. Y había edificó un monumento
más de alguno que se quedaba sin caballo, y en aquel hermoso templo
se arremangaba hasta la rodilla, a la rodilla toda su vida pasó
no más le llegaba el agua. en un gran libro escribió
un gran e importante asunto
Los recuerdos se suceden, se agolpan, lu- esta verdad no la oculto
chan por salir primero según dice la escritura
y en la misma sepultura
- Y había una señora de El Peumo, ahí veci- ayayay dijo un difunto
no con Loyca, se llamaba Eduvigis, ¡pero la
hubieran visto cantar ustedes a esa mujer! La cuarteta:
Cantaba muy lindo.
Y cantaron una vez, vino mi papá con Pedro Ayayay dijo un difunto
Lizama, Pedro Lizama cantaba muy bien, la adentro de un camposanto
voz es la linda. si no me dan aguardiente
Mi papá le decía siempre, te acordai Pedro esta noche los espanto
Ve, entonces cantaba yo estos versos y ahí Y yo le digo a mi hija, si ustedes llegaran a
iba tomando fama donde andaba en tantas hacer el libro, aunque fuera poco lo que yo
partes, por ejemplo en Los Quillayes, San me acuerdo, pero..
Vicente, Santa Inés, Valdebenito. Íbamos
de a caballo, ahora no, ahora lo vienen a El sol cuando a mí me hablaba
buscar, no falta un auto, una camioneta. Y tiró los rayos al mundo
en El Manzano le canté también a muchos por unos cuantos segundos
angelitos. azuleja una luz daba
-Oiga, don Honorio, hábleme de su melo- alegre me convidaba
día del sol, que es tan re bonita me dijo vente conmigo
-Es lo más difícil que tengo yo, que eso y demostraba los niños
también va a tener que ir, si acaso, en el todos vestidos de blanco
libro. Tiene que ser lo primero pero no me entonando un dulce canto
acuerdo bien de algunas cosas. Ese verso con instrumentos muy finos
que dice
en sueños a mí me habló el sol. Y la Ignaci- Con instrumentos muy finos
ta me dice, pero papá eso no es capaz na- largas y delgadas vihuelas
die de hacerlo, otro autor. Ella se da cuenta arpas como astas de espuelas
de eso. con cuerdas y bordoncillos
miles y miles de niños
En sueños a mí me habló el sol en tierra solar cantaban
me dijo yo soy tu amigo yo quietamente observaba
y me mostró tantos niños que alguien llevaba una cruz
en forma de una visión daba una azuleja luz
yo sentí en mi corazón el sol cuando a mí me hablaba
en el momento alegría
yo soy padre me decía Y eso lo vi yo (Honorio se emociona, se
de los seres de la tierra quiebra la voz) y era, ¿quién era? el señor
que alumbro acá en la alta esfera Jesús que iba cargando la cruz. Y yo tuve
y le doy la luz al día esa dicha de verlo, aunque en sueños, pero
harta pena me da. Y la despedida
Y la Ignacia me dice, papá, no es capaz na-
die de hacer versos así. Al fin se fue y me dejó
- ¿Ése lo soñó? con los ángeles cantando
- Lo soñé, pero le digo que me falta muy y al cielo se fue elevando
poco pa adivinar, en mi sabiduría bíblica. Si y en las nubes se internó
yo estudié Biblia. nuevamente apareció
despidiéndose contento
Y le doy la luz al día yo vi que se abrió una puerta
el sol me hablaba en la altura en el cielo a mucha altura
en un tono de dulzura vi la belleza más pura
soy tu amigo me decía que en el mundo se encuentra
donde bajaba y subía (porque hacía
unas levantadas, y bajaba, bajaba y Pasan los días, el mundo da vueltas y vuel-
subía) tas según alguien lo ordenó. Vuelvo a San-
daba un bello resplandor tiago, al Museo, a nuestra casita del cerro,
de uno y otro color a los niños, a mi negra, don Chosto, Santos,
de verde azul y amarillo La Chimuchina, los chinos, los versos ron-
estando durmiendo tranquilo dando continuamente en mi cabeza. Tantas
en sueños a mí me habló el sol cosas. Pero ésas no entran en este libro.
Voy a Llolleo nuevamente. Entro a la pieza y queridos. Piedrín me da un beso y me dice
está Honorio en la cama, en penumbra, los tenís un olor raro en las manos. Sí, le digo,
ojos cerrados. Me acerco, cómo está don y le sonrío. Caliento algo para comer y me
Honorio. Me mira desde una bruma y me voy a lavar las manos pero no puedo meter
reconoce, le comienza a venir una alegría, al agua la mano derecha, algo me lo impi-
una tristeza en la cara, toma mi mano y de, quiero conservar ese calor, esa energía
la aprieta fuerte, acercándome a él, tirán- en mi mano.
dome hacia él. Claudio, me dice, Claudio, Despierto al día siguiente y mi mano sigue
estás aquí. Su mano me aprieta más y me latiendo, es una bola de energía.
acerca a su cuerpo. Me mira fijo a los ojos, Pasan los días y Honorio está presente con-
los rostros a 20 cms uno del otro. De su tinuamente. Sé que me ha sido otorgado
mano a mi mano comienza a pasar algo así un don. ¿Por qué a mí? me pregunto, por-
como una corriente mientras me dice vas a que estaba ahí, me respondo.
ser cantor a lo divino, tienes que ser can- Vas a ser cantor a lo divino, Claudio, tienes
tor a lo divino. Su mano sigue apretando y que ser cantor a lo divino. Escucho aún sus
tirándome hacia él. Un calor extraño, fuer- palabras y sé que algo de su sabiduría y ex-
te, recorre mi mano. Estoy en una posición periencia ha entrado en mí.
incómoda inclinado sobre la cama y casi La verdad es que cada vez compongo y
encima de don Honorio. Nuestros rostros aprendo más versos. Paso buena parte del
casi tocándose, él mirándome a los ojos fi- tiempo repasando y sacando versos. La
jamente, su mano apretando mi mano. Vas cuota de obsesión necesaria para ser cantor
a ser cantor a lo divino, Claudio. Sus ojos está casi completa. Es cíclico, como todo,
me miran acuosos y fijos mientras siento periodos muy intensos y momentos más
este traspaso de energía, de sabiduría, de descansados. El resultado es una buena
experiencia, de vida de un viejo sabio a un cantidad de versos en la cabeza. Mi maes-
aprendiz. tro Chosto, mi maestro Quilama, el maes-
tro Santos. Ahora don Honorio. La flor de
Ignacia entra a la pieza y le dice, ya papá, la canela de los cantores.
deja que se siente, y don Honorio, como Al que le toca le toca. Hay que apechugar.
despertando, dice claro, claro, siéntate y
toca el guitarrón. Voy a Llolleo una vez más. Don Honorio
La mano me queda caliente, siento en ella está bien, desde su cama continúa su his-
una energía que la hace ser una parte di- toria
ferente de mi cuerpo. Es la una de la tarde
y estoy en Llolleo. Paso seis horas con don -Si yo estuve dos veces a punto de.., ven-
Honorio, escuchando las historias y la vida dí todo, iba a vender todo pero no lo hice,
del poeta más afamado de estos campos. no alcancé. Me dijo mi papá, ¿qué estás
Versos, amoríos, recuerdos, mi mano sigue haciendo? Porque las paró que yo vendí el
caliente, cálida, presente mientras escucho. caballo ensillado en primer lugar, con mon-
Hablamos, referimos versos, toco el guita- tura y todo. Tenía un amigo en Santiago
rrón, canto algún pie huacho porque don que trabajaba en un sello. Vente conmigo,
Honorio necesita hablar, me pide que to- si querís estudiar, y a mí me gustó. En el día
que pero luego se larga a hablar. trabajai en el sello y en la noche en la es-
Pasa la tarde, oscurece, es hora de irme, me cuela nocturna. A mí me gustó eso, y le dije
vengo a Pirque. Manejo la roja por la carre- a mi papá, mire, yo voy por esto, me voy
tera del sol, mi mano sigue latiendo, es cla- a Santiago, porque a mí me hace mucha
ro que algo potente me ha sido traspasado. falta, me voy a Santiago.
Llego a la casa y el Cote salta de la cama y Y aquí voy a quedar solo, me dijo, pero tiene
se me sube encima, aquí están mis negritos tantos hijos más, le dije, pero no son como
tú, me dijo. No hay ni uno de mis hijos que
sea como vos. Pero tiene que acostumbrar- El domingo una morena
se también. Y fue tanta la súplica, pobre mi me dio tentación de risa
padre, se afligió él, y me quedé. de verla hasta sin camisa
y pelada de melena
A mí ahora, allá en Loyca, me robaron todo de pulsera una cadena
lo que tenía, pero sin piedad, no aflojaron amarilla y amorosa
nunca. Tenía ganado vacuno, que ése es el sobre su pecho una rosa
que me daba plata. Tuve ganado, no era que llevaba un pensamiento
mucho pero muy bonito, criado con harto y con el fustán mugriento
talaje. Conmigo no están muy conforme que llegaba a tirar prosa
porque dicen que yo soy rico. Yo no, nunca
me he destinado, o se si me pongo alguna -Hay que ver mucho. Me dicen los curas a
vez alguna tirita buena, no se me olvida de mí, cómo sé tanto, porque yo algunas ve-
Lázaro. Yo tuve tías que eran pobres, pero ces me salgo de las casillas, y yo les digo
no dejaba nunca de ayudarles. En mi casa que en la Biblia. Antes se enojaban si uno
mi papá traía en abundancia todas las co- tenía la Biblia.
sas, las papas las ponía en una pieza. Y tan -¿Y usted cuando chico leía la Biblia?
pobre mi tía, por qué no le llevo. Y tomaba - No, yo la Biblia la compré, estaba hombre
ojo que no me vieran y le iba a dejar a mi tía ya, más de 14 años. Yo leía el libro misal.
porque era muy pobre. Y llegaba allá y no - ¿Y de ahí sacaba las historias pa compo-
tenía ni perros porque no tenía cómo criar- ner?
los. Y llegaba allá, tía, le vine a dejar unas - Claro, entonces era muy fácil. Tuve dos Bi-
papitas. Y eran hartas, le alcanzaba pa una blias, tuve una cuando era bien joven y en-
semana o más, pero ella tenía niños. tonces en la casa, usted sabe que cuando
Así es la cosa. hay hermanos, todos querían leerla, hasta
que se perdió y no se supo qué se hizo.
Dios la amó pero no se la llevó, Y después la Biblia buena es la de Jerusa-
otros dicen que la dejó de regalo lén. Y ahora no sé, pero tenía yo en la casa,
al hombre le dejó un palo ahora como quedó el desparramo cuando
y a la mujer la partió me vine pa acá, allá quedó la Biblia. Pero he
tenido tan buena memoria.
¡Qué tal? -¿Le duele la cabeza, papá, los ojitos?
-No, he estado bien, y ahora mucho más
Hay un rodeo en el cielo porque como llegó Claudio
celebrado por los santos - El otro día cuando viniste me dijo “quedé
lucen muy lindos chamantos con salud porque vino Claudio, me va durar
y buenos mancos corraleros harto rato”
está corriendo San Pedro - Pero de alguna manera, eso le estaba con-
con San Juan el capataz versando a Claudio, que de alguna manera
le entregó San Nicolás vamos a hacer venir a Santito porque yo
al ministro con agrado deseo que venga, porque yo de repente me
un novillo ajardinado puedo morir también, y quiero conversarle
del asta caracoleá muchas cosas a Santito. Y muy bonito es
con bombilla pero mejor es a trago ¿será
Don Honorio sigue vagando por su mente, así?
encontrando pies huachos de versos que - Estuvo bueno el otro día cuando vinimos
alguna vez tuvo completos en su memoria. con Santos. ¿se acuerda que vinimos?
Lo perdido, perdido está, quedan los frag- - sí, sí. Yo aprecio mucho a Santito.
mentos
Vuelve a mi mente el recuerdo de hace pa mí. Nosotros le colocamos el manto a la
un mes atrás cuando vinimos con Santos. Virgen en Maipú.
Estábamos en Pirque con Santos un día y - Papi ¿de eso no quedo foto, no quedó ná
me dijo ¿y cuándo vamos a ver a Honorio, grabado?
Claudito? Uno de estos días po Santito. Y - No quedó ninguna cosa de esas, y cuan-
el día se llega como dicen en el campo y do se colocó ni siquiera quedó historia, que
partimos a Llolleo. Un día hermoso en que haya quedado en diarios, no.
dos poetas amigos se encuentran. Un día Nosotros fuimos llamados exclusivamente
de recuerdos que se remontan al año 1964 para colocarle el manto a la Virgen. No me
cuando se conocieron en el concurso de acuerdo de la fecha, y también se selló un
San Fernando. Santos toca y canta y la con- sello ahí, cerrado pa secula seculora. Se le
versa no se detiene por un momento. Tan- puso una tapa de cemento y quedó sellado,
tas anécdotas, tantos versos. y ahí está el nombre de nosotros. Está se-
llado. Y eso es bueno que lo sepa la gente.
-Ay, Santito, me encuentro tan feliz de es- Los nombres están adentro, hay papeles
tar con usté adentro, papeles escritos.
-También yo pues, don Honorio, mire don- Así tenía que ser, tenían que depositar eso,
de nos vinimos a encontrar en un papel muy bueno, llega a ser duro.
Estábamos Atalicio, Arturo Vera y yo. Y yo
Pero el tiempo es el tiempo y no se detiene era el menor de todos.
jamás. Estamos en la misma pieza, pero no - ¿Y usted cuantos años tenía?
está Santos. Honorio está diciendo - Yo tendría 65 años. Atalicio dijo yo tengo
72 años, pero don Arturo depositó los pa-
-Porque yo me quiero ir a mi casa. Yo no peles, el mayor tenía que ser, más que tu-
pierdo la esperanza, lo digo aquí con todas viera más mérito. Era muy noble caballero,
las letras, de irme a mi casa y seguir traba- muy noble, muy buena persona don Arturo
jando de alguna manera, en cosas que yo Vera.
sea capaz Entonces le tocó a él depositar los papeles,
- Pero papá, dime ¿Quién te va a cuidar? Si y esos van escritos ahí, y se sellaron encima,
tú dependes cien por ciento. se le puso una tapa de cemento, eso esta-
- Pero yo tengo allá, ¿Quién está cuidando ba arreglado, muy bien hecho, y el manto
ahora allá? Hay un sobrino lo colocamos a la virgen así más allá, pero
- Pero Juan no te va a ir a cuidar a ti porque muy bonito el manto, lo regaló el Papa Juan
tiene que cuidar a su madre que también XXIII, él regaló el manto, de eso me acuer-
está inválida do muy bien, ¡pero qué manto más lindo,
- Pero no, yo tengo otros amigos. Y por úl- y grande!
timo tengo mi novia. Me caso con mi novia Después seguimos yendo nosotros, nos lla-
y punto! maba don Juan (Uribe) al templo allá a can-
tar, y ahí venía Santito a cantar conmigo.
Honorio se ríe feliz de su ocurrencia mien-
tras yo lo apoyo, claro, se casa y listo. Yo respeto mucho el viejo testamento
- Ah, buenaventura, claro. ¿Qué dice usted Tanta vida, tantos versos, tantos días y no-
del rey Opulón, existió? ches, ¿por qué estaremos aquí, en esta tie-
- No lo conozco rra, que será la vida? me pregunto mientras
- ¿No? A mí me han dicho unos sabios por el silencio nos envuelve en Llolleo. Don Ho-
ahí que jamás existió un rey Opulón. Pero norio ha cerrado sus ojos y descansa sobre
claro, que lo haigan comparado a un rico los almohadones, la Ignacia está en la coci-
por Opulón, eso lo entiendo yo en la Biblia na preparando un tecito más. Las olas del
mar cercano continúan con su tarea. Atrás,
Un San Lázaro ha llegado adelante, atrás, adelante. El sin fin del uni-
a Opulón se presentó verso moviéndose por el universo.
y de por Dios le pidió La Ignacia entra a la pieza, don Honorio
de que era necesitado abre los ojos y comienza a hablar en el pun-
le negó el menor bocado to en que viajaba su mente
el mendigo salió a andar
y le volvió a interrogar - El cura (Miguel Jordá) aquí me dijo yo te
Lázaro sobre el sustento quiero mucho Honorio. Yo también lo apre-
le dijo el rico avariento cio bastante, don Miguel. Bueno, claro que
tengo y no te quiero dar él todavía tiene interés.
- Un día le dije que tenía hartos versos,
Se apareció al otro día como 200 versos de mi papá, ya po, me
a las puertas del palacio dijo, en qué está que no me los entrega, le
y se llegó con despacio hago un libro en dos meses. Se llevó todos
donde aquel rico vivía los versos de mi papá, le entregué dos cua-
el sobrante de comida dernos de 60 hojas cada cuaderno, que yo
no le brindó por merced misma se los escribí, y se los llevó y nunca
los devolvió, de ahí sacó los mejores versos.
Sabe usted que hasta hoy día hay gente El resto..
mezquina. Nosotros éramos nueve herma- - ¿Pero no le has pedido los cuadernos?
nos y mi papá decía de los nueve hermanos - Sí se los pedí, y se puso choro, me dijo
me salieron dos hijos mezquinos. Y era cier- que los había devuelto, que me los había
to. Yo no tengo esa ciencia de ser mezqui- entregado a mí misma, ¡y cuándo, si al cura
no, de negarle a otro sobre todo lo que se yo no lo veía nunca!
trata de comer. - El padre Miguel tiene que venir aquí y le
voy a pedir que me traiga los versos que yo
Don Honorio pierde el hilo del pie que esta- más necesito. Que me traiga los cuadernos.
ba refiriendo y continúa con el siguiente Hay unos versos ahí, son míos
Quila Ballestero Honorio Pero le contestó una poeta, mujer
entra con 22 letras
soy el único poeta Con libra y media de amor
que hay en este territorio cómo querís mantenerla
en composición no ignoro como querís sostenerla
soy rico improvisador si le hay de dar rigor
saquen a otro mejor y si te juega a traición
en todo lo que han andado se va para otro terreno
pa cantar improvisado se va pa países ajenos
yo soy el mejor autor se va con otros amigos
y pegarle sin motivo
Bueno, me mando las partes yo a la mujer nunca es bueno
La Ignacia sonríe y dice y ahora está hacien- Ve po, entonces. Es muy duro el amor, el
do un verso hombre sufre con la mujer, pololeando que
sea, porque no deja nunca de ponerle los
- ¿Y por cuál cuarteta lo está haciendo? gorros. ¿es así o no? Así que no se pue-
- No, si no lleva cuarteta, es que lo estoy ha- de. No se puede tener trato con las casadas
ciendo para los municipales de San Pedro, mujeres, y ésa es la pura verdad
no ve que hay que palabrearlos también
- Uno por ponderación municipal No se puede tener trato
con las casadas mujeres
- Todos me miran a huevo porque tienen el decir
eso a mí poco me importa no se puede, no se puede
ya no vuela la langosta
No ve, todas esas cosas hay que meterlas
¿cómo dijimos denante? en el libro pa que tengan conocimiento los
demás, pa que la juventud, las nuevas ge-
- Porque ya no estoy tan nuevo neraciones
- Porque ya no estoy tan nuevo - Tanta sabiduría que hay ahí, en las cuarte-
- Ayer le dije, siga el verso. Pero me dijo no, tas. Hace como seis años le canté a Santos
no quiero hacer trabajar la cabeza. Segura- un verso que yo había sacado, uno de los
mente se sentía mal con el resfrío. primeros que saqué. Está bonito, me dijo,
- Es que no puedo, sería una vanidad muy pero ¿dónde está la cuarteta? Y no tenía
grande ya que estoy mejor, que yo mismo cuarteta. Ah no, me dijo, sin cuarteta, no
me perjudique, entonces tienen que tener hay verso.
paciencia los oyentes. Es que yo digo versos - bueno pero si eso es lo que vale, la cuar-
huachos ahora porque me está fallando la teta. Yo me acuerdo que mi papá tenía una
memoria cantidad de versos, le gustaba hacer de
esos versos
A la mujer nunca es bueno
muy regalona tenerla El enamorado pobre
porque es muy probable hallarla no se ponga a cobrar celo
enojada hecha un veneno porque le hacen el favor
darle al día por lo menos de quererlo pelo a pelo
un bofetón o un trompón
mostrarse como un Nerón Y es la pura verdad, porque qué va a hacer
mucho más amor le tiene un enamorado con una ricachona
una mujer se mantiene La mujer es como el pan…, sabía dos versos
con libra y media de amor
Su madre, hijo, le decía
en la mesa faltó el vino
qué tengo que ver contigo
mujer, le dijo el mesías
aún no llega todavía
la hora, le contestó
esto lo ejecutó
Jesús con muy buena idea
cuando anduvo en Galilea
primer milagro que obró
-¡Qué lindo es el estudio, Claudio¡ Ve, eso le decía en San Pedro a una señora:
- Es muy re bonito estudiar mire, señora, no es ninguna cosa las cuar-
tetas. Eso lo que quisiera yo, servir como
Quisiera ser estudiado de profesor, pero no pierdo la esperanza,
y tener sabiduría porque de repente uno muere también. En-
pa cantar con alegría señar a la gente cómo es el reglamento del
y también apesarado canto, eso es lo que me interesa a mí, por-
que todos no saben. Por ejemplo me pre-
- Está bueno, pero cuál verso encontré bo- guntaba, no me acuerdo quién pero tengo
nito yo, más bonito que eso. Si llegáramos presente la pregunta, que cuáles versos se
a hacer un libro nosotros. Eso le digo a mi podían cantar en la misa.
hija, porque ella tiene interés, bueno yo no Entonces, no sabe la gente. Puede ser cual-
sé en que forma lo quieren hacer ustedes. quiera, versos de la pasión de Cristo, pero
Yo le dije, yo no estoy más ahora, pero de hay muchos otros
todas maneras, hay que acordarse. Por
ejemplo a mí me gustaría mucho que fuera En la iglesia aniversario
en el libro: hay cuerpos de todas almas
San Pedro funde esta palma
Una mujer enojada siendo de Cristo vicario
se lo cortó a su marido en el mismo calendario
después que se lo cortó el pontificado ve
se lo dio a tomar cocido de Roma también se cree
el sello del cristianismo
¡Que le parece? ha sido y es el bautismo
- Está bueno, ¿y tiene verso hecho por esa el escudo de la fe
cuarteta?
- Por eso, pero pa acordarse. Porque una Es así ¿no? También conviene esos versos,
vez yo me encontré malón. Mijita, le dije, pero se me han olvidado tantos versos con
anote esto, no importa que no lo anote en- esta enfermedad que me llega a dar pena.
tero, y siempre ella se confunde. No ve que Ayer no más que la Ignacia me decía: papá,
también principio un verso yo ¿por qué llora? Lloro, le dije, lloro porque
tengo pena por muchas cosas, en primer
Mira cristiana soberbia lugar por tu salud, y por tantas poesías que
mira al Dios omnipotente se me han olvidado. Y pa más ese padre
mira la luz reluciente Miguel, ya le conversaron eso, vino y me
mira el santo evangelio dijo yo te voy a hacer un libro, Honorio, y
yo, como es sacerdote, le creí. Y no fue ná Tantas veces me lo pregunto y me lo vuelvo
así. Hizo, pero él. El puso versos de Honorio, a preguntar aquí mirando a don Honorio,
pero el libro es de él. ¿por qué tanto alboroto con conservar los
- Ahora vamos a hacer su libro, don Hono- versos, con los versos perdidos, con mante-
rio, no se preocupe, ahora va a existir un ner escrito o grabado aquello que siempre
libro de Honorio Quila. fue pasajero?
Porque son tan bonitos, podría ser una res-
Don Honorio cierra los ojos y persigue sus puesta.
recuerdos. Ignacia también recuerda: El poeta muere y con él mueren sus ver-
sos y se acabó. El ciclo de la vida clarito.
- Don Juan alcanzó a recopilar a algunos y Pero tal vez el poeta moría y alguien le ha-
a otros los dejaba atrás. Dejó como grana- bía aprendido sus versos, a alguien le había
dito lo que más podía conversar él, entablar dado sus versos. El detalle es que ahora el
o hilar una conversación, eso lo dejó. Y lo mecanismo de mantención de la tradición
demás como que lo desechó. Aparte que oral, de todo el conocimiento mantenido y
habían muchos que cantaban bonito, pero transmitido durante cientos de años por la
tenían versos de otras personas, no propios; humanidad, por los distintos grupos huma-
entonces él recopiló, él dejó los mejores: nos, se está perdiendo.
Miguelito, Atalicio. Hay algunos que cantan Pero es tan absurdo querer mantenerlo. El
y cantan maravilloso, pero no son autores, universo es cambio continuo, eterno movi-
y no tocaban miento.
Hace millones de años que el sol se pone
Honorio despierta con un verso en los la- día tras día. El milagro ha vuelto ha ocurrir.
bios Ha llegado la noche. Es hora de irme. Tengo
un viaje de tres horas por delante. Es hora
Me cuentan que San Benito de dejar que don Honorio descanse. Ha es-
en el mundo fue hombre negro tado todo el día hablando, recordando, re-
y ahora se halla en el reino firiendo sus versos, sus queridos versos.
gozando de Jesucristo
dicen los sabios ministros
porque ellos tienen su ciencia Miércoles, las 11 de la mañana y estoy en
a Dios a darle la cuenta la web. Arriba en la Kennedy, piso 16 de
ya me voy a dirigir las torres del hotel Marriot. Aquí paso los
pero me queda el decir miércoles haciendo funcionar el sitio web
que el ser negro no es afrenta del museo. Necesito que me manden infor-
mación para las fichas de la sección icono-
Honorio sonríe y cierra los ojos. ¿cuántos grafía y llamo por teléfono al Museo. Me
versos andarán rondando por su mente? dicen que me llamó Juan Pérez, guitarrone-
¿cuántos fragmentos de versos, cuántos ro de Pirque, que lo llame urgente. Sonrío
pies huachos estarán ahí al aguaite para sa- feliz porque anoche me estuve acordando
lir a la superficie? Evidentemente es tarde. del Juan y quería llamarlo.
Si Honorio hubiera querido que hiciéramos Llamo al Juan. ¿Qiubo Juan, cómo estai?
este libro diez años atrás otro gallo canta- Te tengo una mala noticia, me dice. Pucha,
ría, pero el mundo es lo que es y no lo que pienso pa mis adentros, y el corazón me
queremos que sea. Afortunadamente están comienza a palpitar. Se murió don Honorio
las grabaciones de don Juan Uribe, como el Quila, dice, y siento un sacudón recorriendo
hermoso verso por el templo de Salomón la espalda. En un segundo tengo la imagen
que estoy escuchando mientras escribo, de don Honorio con su larga barba blan-
están algunos versos escritos en libros, en ca refiriéndome versos. Los sentimientos
artículos. Todo lo otro ya se perdió. se arremolinan, la vista fija al frente, más
allá de la pantalla del computador. Se mu- pasado mañana, voy el próximo martes,
rió el viejito, se fue don Honorio. ¡Claudio, pero siempre una urgencia, una pega que
Claudio! me dice Juan, haciéndome volver sacar un cabro chico que ir a buscar, siem-
a este lado del mundo. A las tres es la misa pre algo y no fui y ahora ya es tarde, ya es
en San Pedro, creo que le cantaron ayer demasiado tarde y está en su ataúd, frío,
toda la noche. muerto. Nunca más.
Todavía no creo, no asimilo que don Hono- Llamo a Santos y partimos a San Pedro de
rio murió, pero es evidente que es verdad. Melipilla y ahí en la parroquia está el ataúd
Así es y ha sido siempre la muerte. De pron- de don Honorio. La misa ha empezado re-
to el que estaba vivo ya no lo está. Es todo. cién, el cura Jordá la celebra. En un momen-
De pronto un llamada telefónica y alguien to Jordá pide a los cantores presentes que
a quien quieres ya no existe, simplemente le canten a Honorio y Santos me dice ya,
ya no existe. Claudito, vamos a cantar, pero no lo hago,
Hay que ir a la misa le digo a Juan, no pue- un absurdo de ¿quién soy yo, un aprendiz
do, responde, pero Santos me dijo que si para estar ahí cantándole al maestro? y le
ibai lo llamaras. Ya, lo llamaré, y Juan co- digo a Santos que cante él no más. Llevo a
mienza a hablarme de un salterio y un rabel Santos al altar y cuando le paso la guitarra
pero ya no lo escucho, se murió el viejito, el cura me dice contento ¿tú también vas a
se murió don Honorio y no alcancé a ir a cantar? y me da la mano y le digo que no.
verlo una última vez. ¡Cresta! Ven a verme Santos canta hermosamente un verso que
luego, Claudito, porque me queda poco va improvisando con la vida de Honorio y el
tiempo, me dijo hace dos meses. Pero el cura canta sin preocuparse de la rima.
trabajo, el museo, la web, la película de los Al momento me arrepiento porque le de-
guitarroneros, la familia, los chinos, el festi- biera haber cantado al viejito en su ataúd,
val de videos, todo, todo al mismo tiempo pero ya no lo hice.
y yo siempre con don Honorio en la cabeza, El misterio de la vida y la muerte.
tengo que ir, tengo que ir, voy mañana, voy
La misa acaba, abrazos con las hijas de don Tengo una pena a decir
Honorio y con mi pariente Luis. Vamos al se murió Honorio Quila
cementerio. Se me acerca la Malena, la hija la tierra gira tranquila
que vive en Santiago y me abraza llorando y yo canto mi sentir
y me dice Claudito, mi papá te amaba, gra- me quería despedir
cias por todo lo que hiciste por él. Y luego en la tierra ya no está
la Ignacia me abraza y me dice: te espe- de su bonito cantar
ró hasta el último momento, te llamamos de sus versos y de su voz
no sé cuántas veces y nunca contestaste el le digo el último adiós
teléfono. Dijo que continuáramos lo que mírenlo como se va
habíamos empezado, que siguiéramos ade-
lante e hiciéramos el libro. Te esperó hasta Gran poeta y gran cantor
el último momento. de memoria infatigable
Miro el ataúd entrando al nicho. Nunca de melodías notables
más. tuvo el don del creador
Volvemos a Pirque, ¿y por qué no cantó? también fue santiguador
tendría que haber cantado, me dice San- procurando mejorías
tos. Pucha, Santos, me dio no se qué, la y cuántas noches saldría
embarré, ná que hacerle ya, debiera haber a alegrar los angelitos
cantado. Sí, po. y cantando despacito
Oiga, Santito, deme una cuarteta para ha- él dijo que nos quería
cerle un verso a Honorio. Ya no más, cual
podría ser, ya está La melodía del sol
la soñó Honorio Quila
Mírenlo cómo se va y los versos en una fila
y dijo que nos quería hermosos como arrebol
el amor que nos tenía brillando como un farol
¿se le habrá olvidado ya? Honorio sirvió de guía
los versos los componía
Pucha la cuarteta pa bonita. Llegamos a por la historia más sagrá
Pirque, es de noche, dejo a Santos en su nunca se me olvidará
casa y parto a Peñalolén, a la casa de Ge- el amor que nos tenía
rardo pues estamos editando la película de
los guitarroneros. Estaré ahí seguramente Ya se fue usted de este mundo
hasta las tres de la mañana y volveré a Pir- ya no nos veremos más
que. Mañana hay que levantarse a las seis. la muerte es un gran jamás
El corazón triste, la mente ensimismada, es un quiebre muy profundo
don Honorio ya no está. Me estuvo espe- y tan sólo en un segundo
rando para la despedida y no fui. Nada que saltó hacia el más allá
hacer, sólo continuar la tarea, hacer el libro y en la gloria estará
de Honorio Quila. cantando en coros divinos
Pasan semáforos, luces, autos, cemento, lá- y a su corazón tan fino
grimas. Mientras manejo hacia Peñalolén le ¿se le habrá olvidado ya?
hago el verso de despedida
Al fin toda vida acaba Don Domingo busca en sus carpetas llenas
ta escrito cuando nacimos de versos. En el estante del comedor de
y a esta tierra vinimos esta pequeña casa de campo hay un teso-
con las horas bien contadas ro. Hojas y hojas llenas de versos. Los pape-
y don Honorio cantaba les están escritos por todos lados, no hay
con su voz de mil amores espacios vacíos en las hojas. Versos y más
no me digan que no llore versos. El mundo percibido en versos, en
cuando el corazón porfía octosílabos que forman décimas estructu-
déjenme tener la pena radas por cuartetas.
como tuve la alegría Va dando vueltas las hojas buscando los
versos. Los fundados más variados están
Pasan los meses, los recuerdos son recuer- escritos ahí. Cientos de versos que inventa
dos, los muertos van muriendo un poco mientras cuida sus frutillas.
más cada día. Tristeza y alegría, noche y
día, noche y día. Aparece el concurso de los -Aquí parece que hay uno
Fondos de la Música. Tengo un compromi-
so que cumplir con don Honorio, tengo que Quila Ballestero Honorio
hacer el libro. Armo el proyecto nuevamen- ha dejado de existir
te, el año pasado lo presenté a la línea Pa- yo lo vengo a despedir
trimonio Inmaterial y no ganó. Ahora tiene como el cantor más notorio
que ganar. Un libro con un disco de audio. aquí en su triste velorio
Sería tan bonito. Es tan bonito. Ganó. Está a todos les pido calma
aquí. Don Honorio estará feliz, donde quie- la muerte a todos desarma
ra que esté, al fin con su libro. pero ya vendrá el consuelo
Dios le dirá allá en el cielo
Los muertos en el mundo de los muertos, al cabo llegaste mi alma
los vivos en el mundo de los vivos. En la
casa de Las Pataguas seguimos sentados a Adiós Ignacia querida
la mesa de don Domingo. con Malenita las dos
a mí me ha llamado Dios
-Así no más pos, don Claudio a morar a la otra vida
-Así con don Honorio, se fue el viejito que siempre estén muy unidas
-Fue muy controvertido, no sé como decir- que Dios las quede cuidando
lo por mí ya no estén llorando
-¿Usté lo fue a ver a San Antonio? mi muerte en mí fue un anhelo
-Sí, le hicimos un beneficio también, porque me han de ver allá en el cielo
el hombre estuvo como tres años en cama, pero en otros brazos cuando
se le agotaron sus recursos también, que
los recursos son los primeros que se agotan Honorio padrino mío
con la enfermedad. Le hicimos un beneficio te quise como a mi padre
en San Pedro nosotros, algo le reunimos un cantor de lo más grande
por ahí, estaba muy contento el hombre. Y en este Chile ha nacido
después cuando murió le cantamos toda la jamás te echaré al olvido
noche. Le hice un verso yo por ahí, le tenía te seguiré recordando
uno primero, cuando le hicimos el benefi- y una vez de cuando en cuando
cio lo canté. Y después le hice uno cuando a Dios rogaré por ti
falleció. Los tengo pero en la memoria no, que Dios te dirá feliz
por ahí en algún archivador debe estar. A yo aquí te estaba esperando
ver si lo tuviera por aquí, aquí guardo mis
papeles sueltos.
Tu Loyca hoy queda de luto Quila Ballestero Honorio
y San Pedro tu comuna un monarca sin fronteras
se le acabó la fortuna su fama de tal manera
al poeta más absoluto traspasó mil territorios
tu fama no la discuto en novenas y velorios
todos lo han de reconocer en la paya fue afamado
y tu apreciado valer un homenaje inspirado
por todos tus semejantes yo te ofrezco con gran tono
pero de aquí en adelante porque cayendo tu trono
sepultado me han de ver yo soy el toro plateado
Ése fue el que le hice pal funeral pero le Soy el único poeta
tengo otro más que le hice cuando estaba que quiso hacerte esta ofrenda
vivo todavía, en homenaje. Debe estar aquí es de todos una deuda
a lo mejor. por tus múltiples facetas
-Cantaba muy bonito el hombre en reali- te recuerdo en cada letra
dad porque tu historia valoro
- Sí, y cuando estaba joven cantaba mucho si pudiera en letras de oro
mejor. Yo lo conocí en San Fernando, ahí escribiría tu nombre
tenía una tremenda voz. A ver, aquí está. lo que guardas tú como hombre
Éste es un brindis nadie sabe tus tesoros
Cantando me he de morir
cantando me han de enterrar
cantando me he de ir al cielo
cantando me he de salvar
Al comienzo de cada verso hay un poema de cuatro líneas, es la cuarteta que estructura
el verso. Cada décima o pie del verso termina con una de las líneas de la cuarteta. Se dice
entonces que el verso es encuartetado. Los versos encuartelados son muy apreciados por
los cantores, pero existen muchos versos sin cuarteta, versos mochos.
La rima de la décima
explicar el contrarresto
He normalizado las faltas de ortografía de los versos. Como fueron dictados por don Ho-
norio a Ignacia, mantener la ortografía no venía al caso. No hay cambios de palabras, sólo
hago el traspaso del lenguaje hablado al escrito con las normas de éste, es decir, sin faltas
de ortografía para poder leer sin sobresaltos.
Algunos versos tienen el año en que fueron creados, pero en la mayoría ese dato se ha
perdido. La fecha aproximada aproximadamente entre 1925 y 2004
VERSOS A LO DIVINO
Verso de Noé Verso de Noé
Digo las dos que son dos Ya diciendo dos son tres
las dos tablas de la ley se remiten a la vista
por donde pasó Moisés y las cuatro evangelistas
a adorar al Niño Dios pertenecientes a la fe
un tierno abrazo le dio y mi padre san José
le dejó el pan de sostento suplica con un gran ruego
en el santo sacramento en mi canto me sosiego
en la mesa del altar y lo paso divertido
han hallado en el misal y el gallo sobre dormido
cinco los cuatro elementos abre el pico y canta luego
Digo las tres que son tres Se cuentan las cinco llagas
con los cuatro evangelistas y se cuentan seis candelas
que son palabras benditas la Virgen cuenta sus penas
según dice san José le adora al Señor sus plagas
a la gloria entraré siete gozos encontrara
con tan lindas maravillas solo firmaba en un pliego
si a nuestra madre se humilla cuando a padecer me entrego
cinco galanes acompañan dijo Dios con su poder
sus candelas se le apagan cuando no tengais que hacer
ochos las siete que brillan se levanta y hace fuego
Sostento: sustento
Verso de Nacimiento Verso de Nacimiento
Enemigos y contrarios
Verso de Padecimiento bofetearlo era un gusto
Verso contrarrestado y lo llevaron al punto
hasta el monte del calvario
Macho, martillo y tenazas las tres Marías llegaron
y hacha pa labrar la cruz hasta el lugar sin tardanza
cordel pa atar a Jesús Jesús muy humilde avanza
escala, espada y lanza para ser crucificado
prepararon los tres clavos
El hijo del padre eterno escala, espada y lanza
el Mesías prometido
fue azotado y escupido Al fin el hijo de Dios
por librarnos del infierno murió en el leño sangriento
Herodes en su gobierno y al dar el último aliento
cruel sentencia le amenaza toda la tierra tembló
matarlo era su esperanza el mundo se oscureció
con una cruel rebeldía el sol perdió su luz pura
para enclavarlo tenía dejó de brillar la luna
macho, martillo y tenazas las estrellas palpitaron
los muertos se levantaron
vivos de la sepultura
Contrarresto Vivos de la sepultura
se levantaron los muertos
Macho, martillo y tenazas se rasgó el velo del templo
preparan sus enemigos según dice la escritura
Juan fue el único testigo se movieron las columnas
que de ello dejó constancia del templo de Salomón
no hay en su vida esperanza María se desmayó
las tres Marías diciendo al ver su pálido rostro
se sintió un ruido tremendo murió por todos nosotros
cuando iba a ser su fin Jesús el hijo de Dios
decían ya va a morir
el hijo del padre eterno Verso de Padecimiento
Infuria: furia
Seis mil seiscientos setenta Una tajá de buen porte
los azotes que le dieron tenía al costado izquierdo
al redentor de los cielos se la hizo Longivio el ciego
según la historia nos cuenta porque lo mandó Golgote
las monedas fueron treinta de Jesús recibió el dote
que recibió el Iscariote cuando el lanzazo le acierta
en la cima de aquel monte recobró su vista abierta
del calvario lo prendieron después que le dio el lanzazo
y en el costado le hicieron y fueron los latigazos
una tajá de buen porte seis mil seiscientos setenta
Al fin en la despedida
Verso de Santa Genoveva varillita de sarmiento
Genoveva padeció
Santa Genoveva estuvo siete años en el desierto
siete años en la montaña esto ha sido como ejemplo
con su hijo en unas cabañas lo sufrió aquella reina
una cierva lo mantuvo en una caleta de piedra
la providencia lo sostuvo pedía su mantención
para que esto se escribiera y ahí le mandó el Señor
juzgando si alguien hubiera de leche llena una siembra
una mujer o sea hombre
le habría dado por nombre Verso de amor
cabrita romeralera
Porque me voy y te dejo
Al pequeño le enseñaba cuesta mucho pa olvidar
a que conociera Dios no tuviste compasión
con una serena voz de mí tendrás que acordarte
y la fe le prodigaba
el niño en cuanto aclaraba Ya estoy cansado de amarte
partía a los matorrales es más lo que he padecío
árboles que son frutales es tanto lo que he sufrío
por nuestras necesidades que mejor pienso dejarte
bastemos tanta humildad yo no quería olvidarte
que andais por los romerales pero veo tus desprecios
mejor me retiro lejos
a conquistar otro amor
siento en mi pecho un dolor
porque me voy y te dejo
Recuerda prenda querida Verso de amor fino
de mis primeras palabras
cuando te dije con lágrimas Tiene mi perla preciosa
que fueras la esposa mía de oro reluciente el pelo
alegre te sonreías los labios como un coral
escuchando mi explicar los ojos color del cielo
yo te dije que al altar
muy pronto te llevaría Ella se llamaba Hortensia
por eso paloma mía es la más bella entre mil
cuesta mucho pa olvidar vuela como ave gentil
a la más alta eminencia
Para mí ha sido el fracaso pero ella con obediencia
no fue por falta de empeño vuelve hacia mí presurosa
imagínate que en sueño tan honesta y hacendosa
yo te he tenido en mis brazos que no encontraré otra igual
de tu reflexión no hay caso rostro de ángel celestial
ya eres dueña de otro amor tiene mi perla preciosa
yo tengo en mi corazón
recuerdos de tu amor cruel Es de muy triste mirar
de tu pobre amigo fiel pero de mucha ternura
no tuviste compasión y al ver su gran desventura
triste me pongo a llorar
A mí no me causa enojo con su dicha sin cesar
pero tengo sentimiento me da la paz y el consuelo
porque ya hace tanto tiempo me llena de grato anhelo
que me engañai con tus ojos su hermosura y su belleza
a otro amor yo me acojo tiene por naturaleza
por ver si puedo olvidarte de oro reluciente el pelo
recuerda que supe amarte
con un cariño profundo Es de sonrisa halagüeña
mientras vivai en el mundo que ya no hay comparación
de mí tendrás que acordarte es humilde de corazón
la que se dice mi dueña
Al fin en la despedida es dura como una peña
así lo quiso el destino o mejo dicho un pedernal
perdí el tesoro más fino ni el más fragante rosal
que era toda mi alegría se iguala a ella, se indica
voy a terminar mi vida porque tiene desde chica
de pena y tanto dolor los labios como un coral
casi no tiene perdón
lo que tú hiciste conmigo También tiene el cuerpo fino
una daga de dos filos como un alambre delgado
traspasó mi corazón elegante y adornado
parece un ángel divino
hace feliz mi destino
y con ella me desvelo
no siento ningún recelo
adorando a mi perlita
y tiene a más de bonita
los ojos color de cielo
Al fin parece una estrella Si con grande procosía
del celeste firmamento me miráis indiferente
mi ninfa lo que contento aquí te tengo presente
siento yo al vivir con ella mi sufrir y tu falsía
es la angelical doncella no estará lejano el día
en la época presente que de mí te has de acordar
no hay entre la humana gente porque yo te supe amar
quien le iguale su hermosura con un cariño esmerado
y para más preciosura del haberme despreciado
tiene el lucero en la frente por Dios que te va a pesar
Verso de amor
Verso de amor
Con mi alma intrestecida
de ti me voy a ausentar Mira mujer el amor
ingrata mal pagadora como es en este mundo
por Dios que te va a penar que con cariño profundo
nos nace del corazón
Pa otro país veloz de cuanto fue mi dolor
muy pronto me voy a ir cuando tu amor me negaste
pero antes de partir tú muy tranquila quedaste
te voy a decir adiós pensando no sé qué cosa
ahí me despido de vos y como eres tan hermosa
con una pena crecía yo no he podido olvidarte
y si tu amor homicía
si infiel habéis sido conmigo Ay, querida amiga mía
todo esto yo te lo digo cuando me acuerdo de ti
con mi alma intrestecida cuanto fue lo que sufrí
cuando no me recibías
Si con gran preseverancia tú sabes prenda querida
me hubierais querido a mí cómo este amor principió
yo habría puesto en ti se mantuvo entre los dos
mi amor con grande arrogancia sin que nadie lo supiera
por causa de tu inconstancia se elevó hasta las estrellas
pronto te voy a dejar y todo se terminó
lágrimas habéis de llorar
a cada hora y momento De pena me desmayé
con dolor y sentimiento pensando en mi mala suerte
de ti me voy a ausentar en los brazos de la muerte
largo rato agonicé
Cuando yo te amé dijistes mira mujer otra vez
gustosa y con alegría lo que a mí me sucedió
que nunca me olvidarías cuando mi cuerpo cayó
fue lo que me prometistes desplomado hacia la tierra
por querer no me quisistes pensando en ti, dulce estrella
con cariño halagadora y en mi santísimo Dios
maldita la infeliz hora
cuando vine a conocerte
ni tu sombra quiero verte
ingrata mal pagadora
Procosía: hipocrecía
Intrestecida: entristecida
Preseverancia: perseverancia
Yo nunca me imaginé El hombre estaba adorando
que tal cosa sucedía el dulce nombre de Jesús
dije yo así es la vida la mujer siendo su cruz
y solo me conformé ahí lo estaba tentando
yo no sé si volveré lo seguía perturbando
nuevamente a hablar con ella en la oración que lo vio
sé que de alguna manera de verlo tan convertío
tenemos que hablar los dos de rabia se despedazaba
para explicarle yo el rosario en que rezaba
algo aunque ella no quiera se lo cortó a su marío
Juan Uribe Echevarría. Poetas y cantores populares de Loyca. Revista En Viaje Nº 337, pgs. 30
y 31. Noviembre 1961, Santiago.
Juan Uribe Echevarría. Honorio Quila Ballestero, premio nacional de poesía popular. Boletín
de la Universidad de Chile. Nº 95-96. 1969. Santiago.