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Morphy
Pablo
El
HARVARD COLLEGE LIBRARY
SILAS W. HOWLAND
EL PULO MORPHY
REVISTA MENSUAL DE AJEDREZ
POf^
BLANCAS
Salen QttM y dan mato en dM (ií) jugada.-*.
Dirección y Administración: C:,lle del Tejadillo mira. 43, Habana
(Cuba), ó apartado núm 139 en la Administracion General de Correos.
Condiciones de i.a suscRircióv. —El Pablo Morphy aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones por semestres adelantados: en la
Habana, $1-50 plata, y en el interior dela Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. piala, y fuera de ella 35 cts.
Opinión de la Prensa Extranjera de Ajedrez,
ACERCA DE LAS OBRAS DEL SEÑOR VAZQUEZ.
Et PABLO MOKPHV
REVISTA ^EnSTSUAXj DE AJBDBEZ
DIRIGIDA POR
Dirección y Administración: calle del Tejadillo núm. 43, ó apartado núm. 139, en la Admón. Eral, de Correos. -Habana.-Cuba.
Explicaciones Preliminares.
amor por el ajedrez de los pasados tiempos. No por ello desdeñaremos tomar nota
de los progresos indiscutibles del juego contemporáneo, bajo la egida de los Proceres
ilustres de la Escuela Moderna, como Steinitz, Weiss, Tarrash y otras celebridades; por
que las conquistas y las reformas buenas, aunque sean hechas por adversarios, siempre
redundan en beneficio de la universal cultura.
El Pablo Morphy tendrá de seguro dos atractivos esenciales: para los extranjeros,
la publicación que haremos de partidas inéditas, jugadas en Cuba y Méjico por
profesores eximios, y de cuyas partidas solamente existen en poder nuestro los origi
nales; para los suscriptores de esta Isla y de las Repúblicas Hispano-Americanas, la
inserción oportuna de lo más selecto que en materia de juegos, problemas, finales, etc.,
apareciere en las publicaciones de Europa y de los Estados Unidos.
Nos dedicaremos también á estimular á nuestros aficionados, dando á la estampa
sus producciones mejores; y siguiendo la costumbre que ya se nos conoce de censurar
con ejemplos y demostraciones, todo aquello que nos pareciere incorrecto, iniciaremos
desde el presente número una segunda sección de nuestro favorecido y bastante bus
cado Ajedrez Crítico; libro que apareció con fortuna, y que ciertamente ha sido
celebrado mucho más de lo que merece, gracias á la genial benevolencia de grandes
tratadistas.
Llega El Pablo Morphy al estadio de la prensa de ajedrez, en momentos bien
solemnes. P^stán casi arreglados ya los preliminares de la gigantesca lucha que en
Diciembre y Enero próximos habrá de celebrarse en esta ciudad, entre el Campeón del
Mundo, Sr. W. Steinitz, y el Campeón de Rusia, Sr. M. Tchigorin. El Club de la
Habana ha apostado en favor del primero la cantidad de 2,00o pesos en oro; pagará
á ambos el viaje; á cada uno le entregará 600 pesos, en calidad de retribución para sus
gastos, y el Club de San Petersburgo sostiene á su Primer Espada—según moderna
denominación alemana—con la referida suma de 2.0o0 pesos. Dícese que vendrán de
los Estados Unidos y de Europa varios periodistas y profesores de ajedrez, á pre
senciar la celebérrima contienda, entre ellos el muy conocido Schiffers, maestro de
Tchigorin, y esclarecido combatiente en los Torneos Universales de Francfort y de
Breslau. Puede asegurarse, que la mencionada lucha equivaldrá al verdadero
Championship del Mundo, porque siendo Steinitz el Campeón universal y habiéndole
vencido Thigorin en el reciente Cable-Match, se necesita saber ahora si el intrépido
ruso podrá también derrotar al portentoso austríaco frente á frente, así como logró do
minarle á miles de leguas, desde San Petersburgo á New-York, valiéndose del admi
rable invento de Morse y de Cyrus Field.
Nosotros, en la fácil tarea de narradores y vulgarizadores, aspiraremos á se
guir desarrollando ante el inmenso público de entrambos hemisferios, que habla el
hermoso lenguage de Cervantes, el gusto por el estudio técnico y práctico del ajedrez.
Los escritores ajedrecistas en los idiomas aleman, ingles, frances, italiano etc. abundan
sin duda alguna; en español hemos sido casi los únicos en mucho tiempo. Por lo tan
to, si incurrimos en faltas, en juicios equivocados, en olvidos más ó menos sensibles,
cúlpese á nuestra escasa inteligencia, pero jamás á poca voluntad. Respecto del por
venir del ajedrez, de sus sólidos adelantos, somos sinceros creyentes, y bien sabido es
que la fé salva, y que el fanatismo hace milagros. Ya lo hemos dicho en alguna otra
ocasión: dejad á los discípulos de Morphy y de Philidor que prosigan tranquilos en el
culto de sus ideales; dejadlos que se fortalezcan con las revelaciones y las harmonías del
cálculo infinitesimal, porque ellos esperimentan profunda felicidad, cuando valiéndose
del símbolo exterior de unas figuras de madera, se abisman ante los horizontes del ta
blero de ajedrez y pasan algunas horas hablando —en la sole lad de la meditación—con
su propio pensamiento, lo cual equivale al análisis silencioso de las diversas impresio
nes de su misma alma !
ANDRÉS CLEMENTE VÁZQUEZ.
EL PABLO MORPHY. 3
Casi sentimos que la elegante Pipa de ¿Qué opinarán acerca de esto los en
Stamma haya quedado convertida en un tendidos directores de El Tablero de Ca
desencanto más para los que tienen, como racas? Las más bellas ilusiones, los me
á veces tenemos nosotros, el prurito de jores propósitos del hombre se disipan
componer enigmas y complicados proble lo mismo que se deshacen las flores: One
mas de ajedrez. by one the roses fade
(Traducción hecha por los Sres. Antonio Fiol (*) y Andrés C. Vá2quez, del Prefacio dela obra publicada
en Londres por J. Ldwenthal, en 1860, bajo el titulo de: "Morphy's Games of Chest."
íipwA presentación al público ajedrecista, de 150 juegos, sostenidos por Pablo Mor-
phy, contra los mejores jugadores de Europa y América, apenas sería completa,
^yí® s¡ no estuviese acompañada de una Memoria, aunque sea breve, relativa al joven
genio que tan rápidamente se ha levantado entre nosotros, abriéndose un brillante ca
mino por en medio de una hueste formidable de competidores, hasta sentarse en el
trono del ajedrez. Si para la composición de esa Memoria, nos viésemos reducidos á
referir simplemente la vida é historia de ajedrez de P. Morphy, la relación seria breve;
casi tan breve como las célebres palabras del conquistador romano : veni, vidi, vici.
Con el mismo, si no superior efecto, podríamos decir: "Pablo Morphy tiene 22 años
de edad, ha jugado ajedrez desde su infancia, y ha batido á todo aquel que se ha aven
turado á entrar en lucha con él", pudiendo en seguida detener nuestra pluma. Pero
en todos los séres hay más de un elemento de vida, que prevalece sobre los otros. El
principio de toda existencia humana, puede compararse á un edificio pintado, ó deco
rado, en el cual predomina una sola tinta en lo ancho y largo de su extensión; pero
en el que, trazándose líneas simétricas ó fantásticas de otro color que embellezcan el di
bujo uniforme del fondo, se dé variedad y belleza á todo el aspecto general.
La curiosidad es un elemento constante en la acción del espíritu humano. El
público escudriña al hombre que aparece ante él como célebre, así como el comercian
te ó comprador lo hace con las mercancías. Cuando un individuo descuella en cual
quier ramo de la vida, los que andan por el mismo camino pretenden saber pormeno
res de existencias que se relacionen con el objeto común, cuyo conocimiento poseen
en general. Así es que desean conocer qué es lo que ha llamado su atención y esti
mulado sus incertidümbres, aspirando á avanzar más lejos en las investigaciones. Pre
guntan y desean saber del hombre en general, como del hombre en particular. Inquie
ren á qué raza pertenece; cual es su cuna; cual ha sido su educación (prescindiendo de
la clase de conocimientos en que aparezca eminente); é indagan las particularidades del
caracter personal, en el concepto que ha sido definido por un compatriota de Pablo Mor
phy (Emerson), quien nos dice que dicho carácter es aquella fuerza sutil que nos im
presiona con la idea de lo que un hombre es capaz de hacer, mas bien que lo que nos
induce á pensar en lo que ha hecho. La parte pública de la vida, que describen los
biógrafos se funda en las acciones. Las conjeturas sobre la existencia futura deben
estar en relación con la base de los hechos, que en nuestro caso es muy limitada, su
puesto que aun es muy joven el Sr. Morphy, para haber desempeñado su papel en la
grande escena de la existencia. Tiene todavía que marcar su paso en el mundo de los
hombres, en cuyo mapa el país del ajedrez no es sino una mínima parte, un rincón de
una isla intelectual, situada entre oceanos y continentes. Si muriese mañana, pasaría
á la posteridad en compañía de los más notables maestros del ajedrez de otros tiem-
(*) El Sr D. Antonio Fiol, distinguido ajedrecista mexicano y actualmente radicado en esta Isla,
en la jurisdicción de Jaruco, fué amigo y condiscípulo de Morphy (y una de sus primeras víctimas al
ajedrez), en el Instituto de Mobila: Spring-hill College. •
EL PABLO MORPHY.
pos. Y si aun viviese muchos años, las cualidades que en tan temprana edad lo han
hecho distinguirse entre los ajedrecistas, señalarían su grandeza en uno ó más campos
de las multiples esferas en las cuales se libra de continuo la muy dura batalla de la vida.
Por lo que respecta á la individualidad ó parte física de nuestro héroe, los objetos
de la presente Memoria quedaran colmados con solo decir concisamente que el señor
Morphy tiene una presencia elegante y digna, aunque sin pretensiones; pelo castaño,
negros y brillantes ojos, pequeñas y delicadas facciones y un aire tal de benevolencia
y franqueza en la fisonomía, que esparce en todo su sér corrientes de atracción. An
te el tablero es frío, reconcentrado y modesto, y con tanta facilidad hace sus profun
dos y prolongados cálculos, que rara vez, ó nunca, da señales de estar fatigado. En
su trato social es sumamente cortés y de un carácter igual, mostrando un tacto supe
rior en tan joven edad y aquella exacta apreciación de motivos que generalmente ejer
citan los que son grandes en cualquiera carrera ó profesión.
De Pablo Morphy poco sabemos, á no ser de su vida de ajedrecista. Desciende
por línea paterna de una fami'ia española , establecida antiguamente en la Loui-
siiana Es cierto que el nombre de Morphy no suena como .patronímico español;
más bien recuerda un nombre inglés, bastante conocido en la Isla hermana (Irlan
da) , y no nos .sorprondendería que algún entusiasta ajedrecista irlandés presen
tara la teoría de que Pablo Morphy desciende de personas que vivieron en el
el suelo de aquel'a Isla. Esto sin embargo, es una mera suposición, pero es un hecho
que muchos irlandeses han enaltecido su nombre en las páginas de la historia del Con
tinente, levantándola á grande altura en el servicio militar de España y fundando fa
milias poderosas. Apesar de ello, al padre de Morphy se le reputa como descendiente
de español, y en cuanto á la patria de l.i madre, no hay cuestión: pertenecía á Francia
y por mucho tiempo residió en una de las islas del Oeste.
El padre del Sr. Morphy, durante los últimos años de su vida, ejercía el cargo de
Juez Supremo del Estado de la Louissiana. Pablo nació en la ciudad de NewOrleans,
el 22 de Junio de 1837; de manera que á esta fecha (1860) tiene 23 años. No hay in
formes para creer que en sus primeros años fuese diferente de los demás niños, excep
tuando la circunstancia de que, desde muy joven, jugaba al ajedrez. Era su padre un
ajedrecista de considerable fueiza, y á su tío, ISrnesto Morphy, se le estimaba como al
Rey de los jugadores de New-Orleans.
En una Memoria que recientemente se ha publicado, se dice, que en 1847, cuando
este joven apenas había cumplido diez años, su padre le enseñó el movimiento delas
piezas y su tío le dió una lección en el arte de este juego. Pablo Morphy resultó el
discípulo más aprovechado. En pocos meses era capaz de luchar con cualquiera de
sus parientes, y pronto entró en lid con los más fuertes antagonistas que pudo
encontrar.
En 1849, 1850 y 1851 alcanzó Pal lo una serie de triunfos sobre los mejores ju
gadores de la Unión, entre los cuales se encontraban E. Morphy, Stanley y Rousseau.
Se dice que de 50 partidas que tuvieron lugar durante estos años con el último, es decir,
con Eugen:o Rousseau, su joven competidor ganó la décima parte. Asegúrasenos que
aún entonces, el niño dió pruebas de ingenio y originalidad. No se apoyaba en pre
cedente alguno, ni atendía á las formas establecidas de aperturas, sino que acostumbra
ba deshacerse de los peones tan pronto como le era posible, considerándolos como un es
torbo que impedían la libre acción de sus piezas. Una breve experiencia combinada
con un rápido golpe de vista en los principios del juego, le indujeron pronto á corregir
dicha costumbre, sin dejarla intrepidez y decisión de que procedía aquel'a. A los 13
años debió haber sido un buen jugador, cuando en tan tierna edad salió victorioso en
dos ó tres partidas, con el autor de esta Memoria, qu:en hacía una corta visita á New
Orleans, aunque en aquella época el que habla se hallaba moralmente abatido y ade
más enfermo, postrado por el clima. Sin embargo, el triunfo comprobó un grado espe
cial de habilidad, que es admirable pudiese poseer un muchacho de su edad.
Esta circunstancia no era conocida en Europa, donde el nombre de Pablo Mor
phy no había resonado aun, sino poco antes de la reunion del Congreso americano de
10 EL PABLO MORPHY.
ajedrez, que se celebró en Nueva York el 5 de Octubre de 1857, cuan lo como para
realzar su futura grandeza se publicó este hecho en un periódico de Londres. La ju
ventud de Pablo Morphy fué bastante aprovechada. Tenía la inca'culable ventaja de
una educación bien sistemada: de muy certa edad entró en la Academia de Jefferson,
en su ciudad natal, donde recibió la enseñanza elemental correspondiente al hijo de un
caballero; y en 1850 pasó á un colegio cerca de Mobila, Alabama (Spring—hill College)
donde se disting o en varios ramos de 1 teratura; en 1854 se graduó en este colegio,
donde permaneció un año más, en cuyo tiempo, íe dice que las matemáticas y las leyes
absorbieron casi por comp'eto su atención. En fin, habiendo escogido la profesión de
Barrister, ó sea defensor de causas criminales, concentró sus vastas y poderosas fuer
zas intelectuales sobre un ramo de estudio necesario para sobresalir en su carrera.
Apenas necesitamos entrar en detalles del Primer Congreso Americano, con el cual
nuestros lectores estan ya fam liarizados; pero como aqual acontecimiento está tan
unido con la fama de ajedrecista de nuestro Campeón, m.mifestaremos rlgunos de
sus gran les resultados. La fuerza de los jugadores americanos en el ajedrez no se ha
bía considerado sino muy ligeramente en el Viejo Mundo. Los mejores de ellos eran
mirados como inferiores en fuerza á los del primer rango europeo, y si cualquiera hu
biera vaticinado un adalid de ajedrez educado y foimado en America, se habrían reí
do de él grandemente. El Congreso demostró, no obstante, que los nombres tradi
cionales no eran los superiores : que lo desconocido aventajaba á lo conocido ; que
allí existía, en estado latente, un joven modestísimo, que eia un genio en el juego del
ajedrez, y el cual ni siquiera estaba sospechado en el progreso de los Estados Unidos.
Las canas de los maestros quedaron arrancadas de su pedestal y "esparcidas por el aire
del menosprecio''. Juventud y talento resultaron con mayor solidez para un partido —
match—que la provecta edad y la experiencia Casi sin disputa fueron vencidos todos
los miembros del Congreso por el conquistador de Nueva Orleans, siendo su segundo
en el triunfo Mr. L. Paúlsen (de Yowa) hasta entonces sin renombre fuera de su loca
lidad, y que apenas eia unos cuantos años ma\or que Morphy.
La victoria del joven profesor no causó ningunos celos. Lra tan evidente su supe-
rioiidad, que fácilmente se juzgaba toda rivalidad corno un absurdo. No se consideraba
solamente que había ginado á cuantos se le habian puesto enfrente de él, sino que
hubo de batirlos de un modo tan decidido y completo, que nunca tuvieron un.i opor
tunidad, ni una esperanza de alcanzar el desquite. Cualquiera (pie fuese el que se
sentara al otro lado del tablero, era seguro el resultado en favor de Morpluy, y la pro
porción de los juegos que éste ganaba sobre los que percha, era enorme. En más de
100 partidas sostenidas contra los más famosos jugadores de los Estados Unidos, uni
camente tuvo tres en contra. Los ameiicanos estaban exlasiados ante la deslumbrante
estrella que se había levantado en el horizonte de su patria. Colocaban de un golpe
al vencedor del Torneo, á la misma altura de los maestros legendarios. Conceptuá
banlo invencible. Desafiaban al mundo que pre.-entare su igual, y apo) aban su de
safio con la suficiente apuesta de dinero, contra todo el que pretendiese que se le
trasfiriera el cetro del ajedrez
Ya era tiempo suficiente para que la Europa revisase sus adelantos sobre el Juego
Real en América, pero la Europa lo hizo demasiado despacio. El Viejo Mundo se
adhería á su tradicional prestigio, y en lo general, la idea de que el solio sería arranca
do á sus veteranos por una mano tan joven, era francamente ridiculizada. Que Pablo
Morphy era un gran jugador , no hnbia quien lo negase. Los juegos publicados y que
se abrieron camino al traves del Atlántico, impedían emitir idea tan absurda, pero que
fuese un competidor de la talla de Deschapeiles, Labour.ionnais ó Philidor, nadie
quería admitirlo. Que su triunfo fué fácil para él, se concedía; pero hasta entonces
él 11o había tenido que luchar más que con ajedrecistas de segundo orden, y no es di
ficil maniobrar con arrojo en presencia de enemigos débiles. Además, algunos de sus
comentadores ó críticos decía.i que sus conbinaciones no emn sólidas, y que Pablo
Morphy se hallaría en muy difeiente posición cuando se pusiese en contacto con las
lumbreras del otro hemisferio. El entusiasmo de los americanos era natural, caracte
EL PABLO MORPHY. 11
ríslico y excusable, pero sencillamente un arrebato fascinador que tendría que ser mo
dificado por los hechos. Una gran voz contestó al desafio de Jos Estados Unidos,
diciendo que si Morphy hacía un viaje á Inglaterra, encontraría dignos antagonistas
que recogiesen su guante, entrando en pelea con él. En breve se estipuló que Mr.
Staunton defendería la reputación ajedrecista de la rubia Albión contra el campeón
americano del Oeste.
[Continuará.]
BLANCAS. P x P P x P
S-CR3A s- -C R 3 A
Pocos partidarios tiene ya la cautelo a
jugada de las negras, i — P 3 R, qu" es lo A 3 1> A 3 D
que constituye la llamada DefenSa Fran ó—A 3 D 6- - A 3 D
cesa, porque deja sin movimiento por mu
cho tiempo al alfil de la dama de las mis -o"7>~ C D 3 A (6)
mas negras, y permite el desembarazado 7—0 0 7--OO
avance de los peores blancos del centro.
Los tratadistas opinan y las estadístic m 1' 3 A 0 0
revelan que con ella, lo más que puede 8—C D 2 R 8-- A s C R
pretenderse (si el contrario procede correc A S C R (3)
tamente) es una partida remise, es decir, A 5 C R
9-C I) 3 C . 9-- R 1 T
tablas. Tiene, sin embargo una ventaja:
evita que el primer jugador lleve al com D 2 A A 2 R
I2 EL PABLO MORPHY.
(2) Con el intento de hacer cambio de jugadas inesperadas, que 110 son las que
damas, cc.n pérdida de una pieza, pero resultan de los análisis á la simple vista.
neutralizando el ataque de las blancas y El Sr. Carvajal ataca como león, pero el
quedando con otra pieza de más. Sr. Baquero avanza ó retrocede con las
(3) Es claro que si D x A, D x D, astucias del tigre. Saludemos, pues, al
C x D., T x C 1 1 nuevo y eximio ajedrecista Sr. Baquero; co
(4) También había mate con P 4 T R. locado ya, después de victoriosos encuen
tros con un distinguido adalid, en la cate
goría de los ajedrecistas de primera fuerza.
Un eminente ajedrecista en Cataluña, Derrotado el Vicc-Prcsidente del Club
de ajedrez de la Habana, y ei que estaba
De La Stratégie de París, correspon conceptuado como segundo campeón de
diente al 15 de Septiembre último, tradu la Península española, impónese por la
cimos las líneas que siguen: misma fuerza natural de las cosas, la ne
"El ilustre jugador español, Sr. Carvajal, cesidad de un match entre los Sres. Ba
Vice Presidente del célebre Club de Aje quero y Golmayo. ¡Ojalá que esto pudie
drez de la Habana, acaba de pasar una ra verificarse pronto, en la ciudad de la
quincena de días en Barcelona, en donde Habana!
ha jugado una serie de partidas contra el En carta fechada en Gjón el 18 de Fe
mejor ajedrecista de la localidad, el Se brero de 1889—á la cual nos referiremos de
ñor Baquero. Sea que el Sr. Carvajal nuevo en otro número de este periódico —
estuviese en malas condiciones, sea que nuestro muy estimado amigo el Sr. D. A.
no esperara hallarse alli con tan valiente Fernandez Pozo nos decía:
luchador, el resultado final le fué desven "El Sr. D. José Baquero, del colegio
tajoso, pues el Sr. Baquero ganó 9 juegos de la Inmaculada Concepción, en Valls
por 5 que perdió. En el presente número (Tarragona) renunció á tomar parte en el
reproducimos tres de esas partidas, las Torneo inter-provincial por corresponden
cuales nos han sido comunicadas por nues cia, en toda España, desde antes de prin
tro eminente colaborador el Sr. Dr. Tolo- cipiar, á consecuencia de hallarse ocu
sa Carreras " pado en los exámenes del propio colegio,
También nosotros tendremos el placer cuando comenzó el Torneo (Mayo de
de publicar dichas tres interesantísimas 1888); y en su lugar entró D. Félix Es-
partidas en nuestro próximo número, con cuté, de Gracia (Barcelona) el cual hace
las not is correspondientes. De aquéllas, un mes nos anunció que igualmente nos
dos fueron ganadas por el Sr. Baquero y dejaba, porque se marcharía en Febrero
la otra por el Sr. Carvajal. á Puerto Rico, su país natal."
Aunque el Sr. Baquero, sin duda muy Estos son todos los datos personales
modesto, no había procurado hacer sonar que tenemos acerca del Sr. Baquero. Ya
su nombre en ninguna de las Revistas co hemos pedido otros más amplios y com
nocidas del ajedrez moderno, el hecho es pletos, para darles publicidad en El Pablo
que ha batido á un gran aficionado como Morphy; y aunque en descargo del Se
el Sr. Carvajal, vencedor en partidas aisla ñor Carvajal debe decirse que hace tres
das, de eminentes profesores como Mac- ó cuatro años que apenas practicaba, á
kenzie y Steinitz, y que con justicia goza causa de haber estado desempeñando di
de reputación univeisal por sus ataques versa empleos oficiales en la carrera de
violentos, originales y vigorosos, en don Hacienda, en Cientuegos, Habana, Ma
de más que rd estudiante empapado en tanzas, etc., justo es añadir también como
las enseñanzas de los libros, se vé al cere resumen, que: si el Sr. D. José Baquero
bro robusto de los verdaderos genios. es joven, forzosamense llegará día en que
Por lo que revelan las partidas que ya la España de Ruy López y de Lucena
nos ha dado á conocer La Stratcgic, el Sr. le salude con júb.lo y orgullo como al
Dr. Baquero posee profundo conocimiento ilustre Campeón que recoja y guarde los
de las aperturas clásicas, extraordinaria laureles de aquellos preclaros ingenios.
calma, mucha seguridad y firmeza en sus Mientras tanto ponemos nuestras co
evoluciones, y un don especial para hacer lumnas á disposición del Sr. Baquero, de
EL PABLO MORPHY. '5
seando que cuanto antes se digne honrar esa manera juega tres ó ciatro partidas
las con algún trabajo inédito suyo; lo cada domingo (único día en que se le per
mismo que las ofrecemos á los gran les mite ocuparse del aje Irez) sin que después
ajedrecistas españoles D. J. Tolosa Ca se sienta fatigado en lo más mínimo."
rreras, D. Joaquín Aguilera, D. Miguel Recibid, etc.
Bosch y Más, D. Knrique Dodero y don (Firmado) Ernesto Morphy.
Juan Carbó y Batlle, de Barcelona: don
Manuel Herrero, de Lérida; D. César A. He aquí la partida noíabilísima de que
Sánchez, de Guadalajara, y D. Andrés se trata:
Fernández Pozo, de (.ijón.
Demasiado sabido es que nuestro prin Apertura del Caballo (Irregular)
cipal propósito es desarrollar el Rusto por BLANCAS. N'LGKAS.
el ajedrez en los pueblos de estríe espa
ñola, y demostrar que la raza latina ha pro Pabli Morphy Ernesto Rousseau.
ducido y seguirá produciendo ajedrecistas
notables, como jugadores y problemistas,
como críticos y literatos. 1- -P4 R 1 — P4 R
2 - -C R 3 A 2—C D 3 A
3" -A 4 A 3- P4 AR(i)
4- -P3 D 4—C R 3 A
La primera partida que se publicó, -O O 5-P 3 D
de Pablo Morphy. 6—C • 6—P 4 D
7- -P x P D 7— C Rx P
En la página 23 de La Regence de Pa 8- -C D 3 A 8—C D 2 R
rís, correspondiente al mes de Enero de 9" -D3 A 9— P 3 A D
185 1, cuando tan eslimado periódico es 10- -CD4R(3) 10— P x C (4)
taba dirigido por el célebre Kieseritzki, 11- -U 7 A t 1 I— R 2 D
encontramos la siguiente carta, descono 1 2- -D 6 R t 12— R 2 A (s)
cida sin duda por muchos de los amateurs l3" -D x P R t 13— D3»
contemporáneos: 14- -D x D t 14— R x D
"Nueva Orleans, 31 deOctubrede 1849. I5" -C 7 A t 15— R 3 R
A M. L. Kieseritzki. 16- -C x T 16— P x P
i7- -F x P 17—R3A
Mi querido señor: 18- -P 4 C D 18— A3K
Adjunto os remito una partida de aje 19- -T R 1 R 19—A 1 C
drez, jugada el 28 del corriente por M. 2o- -A 2 Ct 20— R 4 C
R. . (*) y el joven P¿ul Morphy, mi sobri 2i- -T R s R t 21 — R 3 T
no, el cual solo tiene 12 años de edad. 2 2- -A 1 A t !2—P 4 C R
Este niño jamás ha abierto un libro de 23" -T R x P (6)
ajedrez. Ha aprendido el juego por sí
mismo, siguiendo las partidas que vé jugar Gaiiando las blancas.
á los miembros de su familia. En las
aperturas ejecuta los golpes justos, como NOTAS POR KIESERITZKI.
por inspiración, y es de admirarse la pre
cisión de sus cálculos en el medio y en (1) El movimiento justo habría sido
el fin de los juegos. Al hallarse en frente A 4 A. Este gambito en segunda es de
del tablero no revela en su fisonomía nin fectuoso, porque las negras abren al alfil
guna agitación, aun en las posiciones más blanco una linea de ataque que les impi
críticas; posiciones en las que ordinaria de enrocar.
mente tararea como entre dientes algún (2) Buena jugada de ataque. Las blan
aire popular y busca con paciencia la com cas entran por completo en la apertura del
binación que deba sacarle del apuro. De caballo, acerca de la cual nos ha dejado
el difunto M. Bilguer su memorable obra.
Kl Si*. Ernesto Rousseau, de quien habla Lr -
wenlhalen el Prtfacio de ios juegos dc Pablo Mor (3) Evolución magnífica, profunda
phy, publicados por él en Londres, en 1S60. mente calculada. Demostración:
i6 EL PABLO MORPHY.
EL PABLO MORPHY
CUBA.
REPÚBLICA MEXICANA.
PENÍNSULA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
EL FULO MOVOT
REVISTA MENSUAL DE AJEDREZ
POF^
W3
wm
BLANCAS
Salen estas y dan mato en ocho (8) jugadas.
Dirección y Administración: Calle del Tejadillo núm. 43, Habana
(Cuba), ó apartado núm. 139 en la Administración General de Correos.
Condiciones de la suscripción. —El Pablo Morphy aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones i'or semestres adelantados: en la
Habana, $t-50plata, y en el interior dela Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. plata, y fuera de ella 35 cts.
HABANA
La Propaganda Literaria
A ZUl. UETA. 28.
189I.
m
NÜH. 2, Habana, 15 de Noviembre de 1891, VOL. I
ti pablo
DIRIGIDA POR
Dirección y Administración! calle del Tejad i t I o núm. 43, ó apartado núm. 139, en la Admón. Gral. de Correos. -Habana.-Cufaa
RETRATOS Y BIOGRAFIAS
IDIE "EL PABLO MOBPHT-"
Sr. Ledo. D. Celso Golmavo, Campeón de España, Presidente del Club de ajedrez de la Habana
7 Fiscal del Tribunal de lo Contencioso en la Isla de Cuba.
¿Le veis? Las canas para con sus projimos.
comienzán ya á blan Lo mismo emplea las
quear la imponente ca agudezas n ás finas y
beza, encubriendo uno punzantes, aunque
de los cerebros más ro discretas siempre, que
bustos y mejor organi las sentencias serias.
zados que ha produci Generalmenie prefie
do la encantadora Rio- re callar, pero cuando
ja. Las facciones del habla sus palabras son
busto son correctas. claras, persuasivas,
La mirada es fría, aun justas. Opina como
que suave y casi lán Quintiliano que hay
guida. El semblante momentos para el si
resulta bondadoso. El lencio y oportunida
aspecto seduce, atrae, des para la discusión:
sin duda inspira con Tempus iacendi-- Telu
fianza. Ese es el hom pus loquendi. Desde
bre, así es el Sr. Don ña los aplausos de las
Celso Golmayo, atento multitudes y tiene pro
en sociedad, cariñoso fundo amor al propio
en el hogar, epigramá criterio, a los consejos
tico en las fugitivas de su experiencia y á
horas de la causerie. las luces de su misma
Pero ah! no le irriteis razon, in odium auc-
delante del tablero. toris.
Entonces se torna, de benévolo en impla En el ajedrez ha ganado juegos notabi
cable. Su blanca mano os coloca las piezas lísimos á Steinitz, á Mackenzie, á Kolisch,
vengadoras en lugares de muerte y de de á Neumann, á Arnous de Riviere, á Mau-
solación. ¿No es acaso el primer jugador rian, á Dionisio M. Martínez y á otros
de finales de partida que se conoce en to profesores célebres. El gran Morphy no
do el mundo? ¿No ha superado inmen pudo darle un caballo de ventaja.—En
samente á sus antiguos compatriotas Ruy 1867, cuando casi nadie le conocía en
Lopez y Lucena? ¿No es cierto que está Europa, se apareció en el Torneo Univer
reconocido, sin disputa, como el más gran sal de París, disputando el premio del Em
de ajedrecista de la heróica España? Atle perador, y quedó en lugar snperior á Czar-
ta en lo físico, alto y ágil, apenas deja nowski y á F.osenthal de Polonia, á Sa
recordar que ha traspuesto los 50 años; muel Loyd de Philadelphia, á Severino
edad en la cual, segun el pensamiento de From, de Copenhague, á Eugenio Rou
Vico, se reverdecen las ideas y el espíritu sseau, de St. Denis y al Baron Emilio d'
penetra en nuevos y desconocidos hori André, de la capital de Francia.
zontes, infranqueables para las almas jó Pertenece por completo á la brillante y
venes. Cuando os derrota, sus azules ojos enérgica Escuela Antigua. Estima á Stei
adquieren los tintes negros y pavorosos nitz y á Weiss, pero venera á La-Bourdon-
de la tempestad. Distante de los peones, nais, á Cochrane y en primer término á
de los alfiles, de los caballos y las torres, Morphy.
el Campeon se olvida de que lo es, y en Son sus autores favoritos el Handbuch
tonces nadie le aventaja en generosidad, de Bilguery Von Der I asa; Chess Openings
en prudencia, en compasión y tolerancia ancient andvwdem por Freeborough y Ran-
20 EL PABLO MORPHY.
ken, y la magistral Theoric Und Praxis der Endspielc de J . Berger, el sabio tratadista de
Leipzig.
En Política—aunque en realidad no tiene otra que la de los hombres de bien —figu
ra como conservador progresista, y en religión es católico, apostólico, romano. Des
pués de una victoria de ajedrez, y si fuese un Tarrasch, un Lasker ó un Schallopp, no
tendría reparo en decir muy alto, y con purísimo orgullo: Gott mit uns\
Cuando se acuerda que es padre, y padre nada menos que del inteligente Celsilo,
siente el deseo de dejarle el cetro valiosísimo del ajedrez ibérico, y sin embargo alienta,
ilustra y dirige, á Guillermo Lopez y á Enrique Ostolaza, los futuros emulos en Cuba
del hgo del Maestro, como llamamos al noble Sr. Golmayo sus amigos y admiradores.
Refiere D. Miguel Moya en sus delicados Perfiles sobre los Oradores Políticos de
la Península, que segun frase de Alcalá Gaüano, los hombres de hoy vivimos hocia
dentro; que en el espíritu riñen batallas terribles los deseos y los temores; que hay au
dacias del pensamiento con el pensamiento mismo; que con la sonrisa en los labios se
siente un amargo horror ante la descarnada realidad. Esto no puede decirse del señor
Golmayo, corazon sencillo, carácter sin dobleces, personalidad sin antifaces, que care
ce de pasiones, esos corceles indómitos que galopan por la llanura, como decía Gauthier,
y que en su loca carrera iluminan á veces el camino al chocar con los guirrajos.
La Historia de nuestro bello arte, habrá de recordar en todo tiempo con gratitud
los méritos eminentes del hijo de Logroño, y nosotros nos contentaremos con haber
sido uno de los más modestos, pero al propio tiempo de los más entusiastas biógrafos
del invencible Aquiles del ajedrez español.
A. C. VÁZQUEZ.
Variante XIII Variante XIV Variante XV. Variante XVI. Variante XVII Varnte. XVIII
P4R P4R P4R P4 R P4 R P4 R
1 P3 R P3 R P3 R P3R P3 K P 3 R
P4D P4D P4 D P4 D f P4 D P4D
2 P4 L) P4 D P4 D P 4 D ' P4 D P4 D
C D3 A C D3 A C D 3 A C D3 A CD 3A C D3 A
3 CR3A C R3 A CR3 A C R3 A C R3A C R 3 A
A5 CR AS C R P s R ? (29) P 5 R? Ps R P5R
4 A2 R A2 R c R 2 n C R 2 D CR2D CR2D
A x C (25) Ax C CD2R(3o) P4 A P4 A P4 A
S A xA A x A P4 A D P4A D P4 A D P4 AR (41)
,CR3A(26) C R 3A P3 A D PxP PxP A3 D(42)
6 0 0 0 0 C D 3 A AxP CRxPA(37, 1 P 4 A D
A3D A 3 D P4 A R D4C!!(32) C R3 A PxP
7 P3CD C D 3 A D 3 C 0 0 CD3 A CR x PA
O 0 P5R C R3 A C R 3A A 2R A 3 R
8 A2 C A2 R A 2 R i D 2 R (33) D3 C C D3A
PxP P4TR!(87) CD3C(3i)| A3D T D 1 C A x C?
9 P xP c5 C Px P 1 P 4 A (34) C R 2 D Ax A
C D 2 R AxPt PxP j D3T A 2 D D5Tt?
10 P 4 A R 1 T A 5 C t P3T D P3A(38) P3 C R
P3A A 3D R 2 A P 4 C R PxP D6T
11 C3 A P4A D 1'3 A(M) P3 C R C R x P A 1 A
(Igual) CR s C PxP C D 4T D3T
12 C x At P R x P? D 2 A ! I)4TD!(43)
D xC CD x P 0 0 1
13 P3C R D 2 C A 3D
P4 A A 2 D (3s) C R s C
»4 R2 C P4 C D 0 0
OOO (28) A3 A P4 A D
'5 A 2C P3TR(39)
P 6 R Ps A D
16 C R 3 A PxC
C x Ct Px A
Tx C D x P
0 0 0 PxP
18 a 6 x t C R5 R
R 1 C TxTt
19 AxP D xT
A\PA!!(36) A 3 R
20 Dj AR(4o)
EL PABLO MORPHY. *3
(19) Crespi contra D'Aumiller—Torneo
(12) Al comentar el Sr. Steinitz esta ju de Milan— 1881 .
gada nuestra, que por primera vez le hici (20) Anderssen contra Blackburne.
mos en la segunda partida del match que
con él jugamos en la Habana en Febre (21) Steinitz dijo en la página 121, tomo
ro de 1888 ( Véase The International III, de The International Chess Magazine
Chess Magasith! Vol. IV, página 95), dijo: que esa era en este caso la mejor réplica
uThis new move is, we believe, better than de las negras, pero después cambió de
the usual B-K2 at this juncture". En la opinión, y en la página 55 tomo VII de\
página 94, vol. VII. del propio periódico, mismo periodico afirmó que debía prefe
se publicó un interesante juego entre Mr. rirse C 1 A para no quitarle movimiento
J. W. Baird y nuestro amigo el Sr. Dr. G. al peon del caballo de la dama.
Simonson; el último adoptó la jugada
PxP y el Sr. Steinitz le puso como nota (22) Si 11 —AxP«J» — 11 —P3AD — 12—
á dicho movimiento: "Nbl commendabte" DxT— 12— D5C%|»i2— P3AD— 13-DxA
¿A que debemos pues atenernos en este — 14— D8T— 14— DxP (7C) etc. Debien
punto? ¿Cual será en definitiva la verda do ganar las negras.
dera opinión del Sr. Steinitz?
(23) Ryan contra Lipschütz en el "Man
(13)— Débil. Las negras habían tomado hattan Chess Club" de New York.
rápidamente la ventaja, y podían haberla
asegurado, haciendo cambio de alfiles y (24) Ryan contra Hanham.
de damas, ó doblando un peon á las (25) Movimiento favorecido por Ander
blancas. ssen, segun The Chess Player's Chronicle.
(14) Las blancas (el Sr. Steinitz) ganaron (26) En el torneo de Londres, de 1883,
al movimiento 30— Esta fué la apertura Bird v Mason jugaron como sigue: 6--P5R
de la segunda partida del match Steinitz- —6 -A2R- 7-A3D--7 -P4AD—8 -PxP-8
Vázquez, jugado en la Habana en Febre —AxP. 9-D5T-9--P3CR-10-D6T--10
ro de 1888. --AiA etc Mr. Bird (las blancas) se rin
(15/ Introducido por Winawer en el Tor dió á la jugada 47.
neo de Paris de 1878, con el objeto de (27) Ataque Crespi.
seguir C 3 R, cuya casilla, segun dijo el
mismo Winawer en el Westminster Papers, (28) Y las blancas (Crespi) ganaron en
es un lugar expléndido para el caballo. 40 jugadas, en el Torneo de Milan de
1881, conduciendo las negras Della Rosa.
(16) Winawer contra Blackburne.
(29) Ataque ensayado por Steinitz con
(17) Ataque Englisch. Rosenthal, En- tra Meitner en el Torneo de Viena.
glisch y otros competentes teóricos sostie
nen que esta es la mejor manera de con (30) Retirada ngcesaria para defender el
ducir el juego blanco en la presente aper peon de la dama, con P3AD.
tura. ^31) Mr. Potter recomienda aquí P3TD
(18) El distinguido jugador americano ó P3CR.
Mr. J. S. Ryan y el entusiasta amateur
Pi inope Dadian de Mingrelia, prefieren ^32) Steinitz presenta esta innovacion,
sustituir el 7? movimiento de las blancas hecha por él, al especial estudio de los
con C D 5 C, á fin de jugar después P 3 maestros. En esa situación, el sabio pro
A I) y darle seguridad al peon de la da fesor opina que el juego es imperdible
ma. Dicha jugada, ó sea la de C D 5 C, para las blancas.
la ensayó por vez primera el jugador aus (3^) A juicio de Steinitz la mejor defen
tríaco Englisch en el último Torneo Uni sa de las negras habria sido: P4AR, se
versal de Viena, pero Steinitz dice que es guido de C3C, en réplica á D3T, pero
mucho más sólida la de Winawer, es de entonces las blancas hubieran tomado muy
cir, 7— D 2 D. fuerte ataque con P4CR.
^4 EL PABLO MORPHY.
Rofieicté generafe.é.
\1ÍL/ m Un especial saludo, casi fraternal, tenemos que dirigir á El Tablero de Ca-
'S racas, único periódico de ajedrez que se publica en lengua española, ade
más de El Pablo Morphy. Los inteligentes y entusiastas directores de El Tablero, los
Sres. C. Perret y Dr. R. Rui/, estan reproduciendo en dicha publicación los primeros
capítulos de nuestras obras Analisis del Juego de Ajedrez (tercera edición) y El Aje
drez contemporaneo, ó sea: "Mr. Blackburne en la Habana y el cable match Steinitz-
Tchigorin." Hé aquí como se expresa el colega venezolano:
"Del único análisis extenso que sobre el ajedrez existe en lenguaje castellano
(Análisis del Juego de Ajedrez por Andres Clemente Vazquez) tomamos los párrafos
que juzgamos dignos de comenzar la série de adopciones y traducciones ofrecidas en
el prospecto. Recomendamos su lectura." {El Tablero, Mayo i? de 1891-;
"Recomendamos á nuestros abonados la lectura del artículo El Ajedrez en Cuba, y el
exámen de una de las partidas del reciente match Blackburne—Golmayo, ámbas pro
ducciones del eminente ajedrecista Sr. D. Andres Clemente Vazquez, y que copiamos
de la obra á que hicimos referencia en nuestro número anterior. Continuaremos es
tos estrados, con la seguridad de que proporcionaremos mucho deleite á nuestros
lectores."
No necesitamos añadir, por via de comentario, ó de respuesta, que agradecemos
con toda el alma el alto honor que El Tablero nos dispensa.
á^n¿. En la primera página de una obra de mucho mérito que hemos tenido el
«i? placer de regalar al Sr. Dr. D. Antonio Jover, distinguido Médico, hijo
de Cataluña, actual catedrático, por oposición, de la Universidad de la Habana, aven
tajado ajedrecista y correctísimo caballero, nos decidimos á escribir la siguiente dedi
catoria; la cual publicamos como nuevo testimonio de la sincera amistad que al señor
Dr. Jover profesamos.
"Habana, 2 de Mayo J¿ 1891. — Mi querido Dr.: El día de hoy, fecha gloriosa
(más que del patriotismo español, del heroísmo humano,) es intencionalmente escogi
do por mi, para dedicarle este recuerdo de ajedrez.
"La Regence de Jtieseritzh—al inmortal derrotado de Anderssen —es hoy un libro
rayano en lo incunable; rara avis, orno mi cariño y admiración hácia Vd. Y yo no
dudo que Vd. conservará y estudiará durante muchos años esos trabajos de Kieseritzki,
por que Horacio mandó vivir larga vida á los que como Vd. son hombres ilustres:
Dignum laude virum Musa vetat morí."—A. C. Vazquez.
Ía ¿Serán tan amables los Sres. redactores de El Tablero de Caracas, que nos
JbU digan de cual obra ó periódico copiaron el controvertido problema de
Lichtenstein, denominado La Pipa de Slammát Lo agradeceremos.
EL PABLO MORPHY. *9
w Las gracias más expresivas tenemos que dar al notable ajedrecista y há-
S bil escritor mexicano, Sr. Dr. D. J. L. Vallejo, por el bello problema que ha
tenido la bondad de dedicarnos desde las acreditadas columnas de La Stratégie de Pa
rís. Lo reproducimos hoy, con legítima complacencia, en nuestro periódico.
3« EL PABLO MORPHY
II III
Habana, Marzo 4 de 1888. Partida jugada en la Habana el 2 de
APERTURA DEL ALFIL DEL REY. Enero de 1889, en la sesión de juegos si
(Quítese el caballo de la Dama de las multáneos, por el ilustre Capitán Mac
blancas.) Kenzie.
BLANCAS. NEGRAS. (Gambito del Peon del Alfil del Rey,
W. Steinitz. Guillermo López- rehusado.)
1—P4 R 1— P 4 R BLANCAS. NEGRAS.
2—A 4 A 2—A 4 A
3—P 4 C D 3—A 3 C
4—D 2 R 4—C R3 A Mr. Mackenzie Sr. León Paredes.
5—P4 A 5— P3 D 1— P4R 1— P4R
6—C3A 6—A 5 C 2—P 4 A R 2—P4D
7—P x P 7—A x C 3—C R 3 A 3—C R 3 A
8—P x A 8— P x P 4—P A x P 4—C R x P
9—A 2 C 9—C D 3 A 5— P 3 D 5—C R 4 A D
0— O O O 10—P 4 T D 6—P4 D 6—C R 5 R
1—P 5 C 11—C D 5 D 7—A3 D 7—A D 5 C
2— D 2 C 12—C R 4T 8—O O 8—A 2 R
3—D4 C 13— P 3 C 9— D 1 R 9— A D 4 A
4—P 3 A 14—C D 3 R 10— A 3 R 10—OO
5—AxC(i) 15—P x A 1 1 —A x C 1 1—A x A
6—D x P R t 16—D 2 R 12—C D 2 D 1 2—A x P
7— D5 D 17—C 5 A 13— D3C 13—A 3 c
8— D x P C 18— OO 14— C R 5 C 14— A x C
9-P4 D 19— P x P 15—A x A 15—D 1 R
o—P x P 20—C 7 Rt 16—T D 1 R 16— D 3 R
21—R 2 A (2) 21—T D 1 D (3) 17— C 3 C 1 7—C 2 D
22— r> 6 a 22—D 2 A 18— D 4T !8—T D 1 A
23 ^ 5 23-D 2 R 19—T D 3 R 19— P3 c
24—R 1 C 24—T R x P A 20—TR6A (1) 20—P x T (2)
25—D 4 A 25—T R 6 R 21—P x P 21—D 3 D
26—P 6 D t d. 26- D 2 A 22—T 3 A R 22—T R 1 R
27—T D 5 D 27— T D x P D 23— D 6 T 23—D 1 A
28—T R 1 D " 28—C 5 A R 24— D3 T 24—T R 3 R
29—T R 1 A R 29—T x T 25—C 2 D 25—T D 1 R
30—P x T 30— D 4 A t! 26- C 1 A 26— D 3 D
31—R iT 31— D5 R !!(4) 27— D 4 T 27—T R 5 R
Se rindió. 28—D 3 T 28—T D 3 R
NOTAS, POR A. C. VAZQUEZ. 29—C 3 C 29—T R x P D
(1) Un Caballo en la 3a casilla del 30—T 1 A 30—C x P
Rey, se coloca en la terrible Posición Wi- 31—TxC 31—TxT
nawer. En consecuencia, si se puede, lo 32—D 8 A t 32—R 2 C
mejor es aprehenderlo. 33—A x T t 33—DxA (3)
(2) Se nos oculta el propósito que Se rindió.
aquí tuviera el maestro Steinitz. Lo na NOTAS, POR A. C. VAZQUEZ.
tural parecía: R 1 C.
( 1 ) A Grand hurrah move Com
(3) Era cía o que las negras no po binación muy brillante y digna del estilo
dían haberse apoderado del Peón de la del bravo Capitán; pero nuestro amigo
Dama, sin perder una pieza. Paredes ni se asusta, ni se atolondra, ni
(4) Si 32—T x C—32—T 8 R t—33 se precipita. En Puerto Rico, su tierra,
—A 1 A—33—T x A t—34— D x T—34 se suelen dar lecciones de calma y de cir
A 5 D t-35-D 2 C-3S- D 8 R tt. cunspección, aún á los mismos ingleses.
EL PABLO MORPHY. 33
(2) ¿V porqué no comer, se pregun (3) Imitando el estilo del eminente
taba el san ártico Sr. Paredes? Estoes follelinista de La Republique Fiancaiss de
lo que el ocurrente socio del Club de aje París, M. Rosenthal. terminaremos estos
drez de la Habana, D Francisco Carn lijeros comentarios, diciendo que: "JVbus
earte, denomina el sistema antiflojistico, faisons ious ucs compliments á M. de Pare
ó sea el de quitarle fuerzas al contrario des, de la maniere correete et brillante dont il
para que muera más bien de consunción, i terminé ccitcJ,,¿rtie.
lentamente, que de rápida apoplegía.
( Continúa)
La gran contienda que debió decidir la cuestión de supremacía entre el Viejo y el
Nuevo Mundo, ?e convino que tuviese lugar en Inglaterra. Este país fué el lugar
destinado para el palenque. Era natural que el joven y aspirante paladín debiese concu-
nir á este punto como antiguo y establecido centro de reunión. La edad de la caba
llería aún no había pasado. El ajedrez tiene f us caballeros andantes, y Pablo Morphy
decidió dejar su trasatlántica mansión para emprender un viaje á Europa, á fin de en
centrar sus nuevos antagonistas sobre el campo ajedrecista, en el cual no pudo halla-
competidor en el Gran Continente del Oeste. El tiempo era propicio. El Birmingham
Meeting debía tener lugar poco después de su llegada: el prospecto permitía una
oportunidad de luí har con jugadores de alta fama, pero ante todo él ansiaba medirse
con el representante del ajedrez en Inglaterra, cuyo nombre le era conocido y cuya
reputación estaba bien sentada donde quiera que hubiese partidarios de Caissa.
Pablo Morphy llegó á Lóndres en junio de 1858, y su recepción Yué tal como la me-
re' ía, dándosele la acogida más cordial y afectuosa. En los grandes clubs de San
Jorge y de Londres, encontró aquella cortés hospitalidad que los caballeros ingleses
han sabido dispensar siempre; pero por el momento reinaba la opinión general de que
no repetiría en Europa hjs triunfos ele América. Las fatigas del viaje indudablemente
influyeron en él. El desconocimiento de la nueva escena en la cual se presentaba para
reprentar tan prominente pape', sin duda produjo un efecto desfavorable, y sus prime
ros juegos no alteraron la disposición de los jugadores ingleses, creyendo que, dentro
de los cuatro mares: de la Gran Bretaña habría de encontrar algo más que su com
petidor.
Sin embargo, pronto se desvaneció esa ilus'ón. Contra cua'quiera que jugó salió
victorioso, y un partido (macht) se entabló en seguida, cuyo resultado probó que los
americanos no habían aventurado en una empresa imposible á su joven campeon. El
arieglo para la contienda con Mr. Staunton, no progresaba sino lentamente; pero
mientras, y pendiente de su conclusión, el editor le envió un cartel de desafío, que él
aceptó inmediatamente. El resultado fué que Pablo Morphy añadió un nuevo laurel
á su corona. A la conclusión de la justa, Morphy había ginado 9 partidas, Lowen-
thal 3, y dos se empataron
Era frase de Napoleón que '-'el mejor general es aquel que comete menor número
de errores en la guerra/' y Pablo Morphy en sus juegos es mas admirable aún por su
corrección que por su fuerza y brillantez. Es tan cuidadoso como profundo. En
sus juegos de memoria, ó á la ciega, sin ver piezas ni tableros, rara vez incurre en al
guna equivocación. Durante la excitación de este partido (match) la complacencia y
cortesía del Sr. Morphy produjo tanto asombro como su capacidad. La m.iyor armo
nía reinó entre los combatientes y todos sus amigos.
Esta decisiva victoria asentó la reputación de P. Morphy positivamente en la más
alta categoría de los ajedrecistas, y justificó la conducta de "Alfcr" (Mr. Owen) al
aceptar la ventaja de peón y salida, del joven triunfador. El resultado de dicho com
bate fué aún más notable. Se jugaron por todo siete juegos, de los cí ales ni uno solo
ganó Alter. Pablo Morphy ganó 5 y dos fueron tablas.
34 EL PABLO MORPHY
coi^i^ESFOisriDEi^rci^-
Sr. Dr. D. Joaquín L. Vallcjo: — Sr. Isaac Ai. Brtnun.—Leeds (Inglate
rra).—Acusamos á Vd. recibo de sus gra-
México.— Mucho agradecerá á Vd. el tas líneas de 12 de Octubre. —Gracias por
Director de El Pablo Morphy, se sirva sus elogios y propósitos en favor del Club
remitirle un retrato y algunos apuntes bio- de la Habana. — El Sr. Vazquez se ocupa-
gráficos acerca del gran jugador mexicano rá pronto de complacer á Vd. en la sú-
D. Mariano Eguiluz, á fin de honrar con plica que le hace, remitiéndole los retratos
ellos las columnas del periódico. — H ge- y artículos biográficos que Vd. le pide.—
nio del Sr. F.guiluz es verdaderamente Se recibió y se agradece el n? 127 de The
singular, y no sin razon llamaron sus jue- British Chess Magazine, correspondiente
gos la atención del ilustre Zukertort. á Julio de este año.
EL PABLO MORPHY. 35
J
LTJGARES DE VENTA
EL PABLO MORPHY
CUBA.
REPÚBLICA MEXICANA.
PENÍNSULA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
.•i .\
i
Volumen I. Habana, 15 de Diciembre de 1891. Cuaderno 1H.
EL PABLO MORPHY
REVISTA MENSUAL DE AJEDREZ
POf^
BLANC AS
Salen oitm y clan mate en cinco (5) jugada».
Dirección y Administración: Calle del Tejadillo núm. 43, Habana
(Cuba), ó apartado núm. 139 en la Administración General de Correos.
Condicione'; de i.a sUsCRIPCIÓN.-El Pablo Morpby aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones por semestres adelantados: en la
Hnlnna, $I-50plata, y en el interior dela Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. plata, y fuera de ella 35 cts.
•A"
HABANA
La Propaganda Literaria
ZUI.UBTA. 28.
1891.
OBRAS BE AJEDREZ POR 1. C. VAZQUEZ.
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El Ajedrez Ciclónico.—Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de los gran
des maestros, sin otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?)
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XIX.— Dos partidas de cada uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (la más elegante é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
escogidas y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vazquez.
NUM. 3. HaLsaa, 15 Je Dici -robre da 1831. VOL. f.
DIRIGIDA POR
Dirección y Administración: calle del Tejadillo núm. 43, S apartado núm. 139. en la Admón. G ra I , de Correos. -Habana.-Cuba
1
Del "Diario de la Marina", de la Habana.— 16 de Abril de 1891.
EL CAPITAN MACKENZIE.
L cable acaba de comunicarnos la noticia del fallecimiento de este famoso
campeón ajedrecista, vencedor en Torneos universales de maestros, y que
durante varios años ha visitado este país. Cuando nos proponíamos ocu
parnos en la biografía del señor Maekenzie, llega á nuestras manos el nú
mero de El Sport de esta capital, de marzo de 1887, en el que el no menos renombra
do ajedrecista, nuestro querido colaborador el Sr .D. Andrés Clcnente Vázquez, traza
su biografía, y por consiguiente, reproducimos en las columnas del Diakio ese trabajo.
Es como sigue:
UN CHAMPION.
Cábenos hoy la honra de presentar ante la selecta sociedad habanera, al ilustre
George H. Maekenzie, champion de los Kstados Unidos en'el ajedrez. Su retrato figura
en el presente número de El Sport. Ks nuestro vencedor, pero nos merece todo respeto
porque es también nuestro huésped. Perfecto caballero, pensador profundo, reune en
sí la mirada espiritual y melancólica de Pablo Morphy—á quien veneramos desde ni
ños—y la aquilina cabeza del invencib'e Steinitz. Al batirnos con él, nuestro sistema
nervioso se ha exc itado mucho, muchísimo más, que lo que se agitan las olas del Can
tábrico. Habíamos deseado toda la vida tener en frente del tablero á uno de los colo
sales proceres del arte, y el acicate de la gloria nos hizo olvidar que los colosos anonadan.
El capitan Mackenzie, como se le dice con cariñosa familiaridad en los Estados
Unidos, ha hecho besar el polvo, no pocas veces, áesos Welington, á esos Napoleones,
que se llaman Zukertort, Rosenthd, Bird, Blackburne, Winawer y Tchigorin. En to
dos los Congresos americanos en que ha tomado parte, el primer premio ha sido para
él En el de 1871 venció á Hosmer—el champion de Chicago, á Eider—el adalid de
Detroit—a Max Judd—el heroe de Cleveland—á Ware—el original y conspicuo bata
?4 EL PABLO MORPHY.
II
LUIS PAULSEN.
Ctisa de Ud.—25 de Agosto de 1891
Sr. Director del Diario de la Marina.
Presente.
Mi muy estimado amigo:
No sin razón se ha ocupado el telégrafo de anunciar al mundo el fallecimiento
del gran ajedrecista alemán Louis Paulsen, y no sin motivo también se sirve Ud. pedir
me algunos ditos biográficos acerca del maestro por excelencia '(como le llamaba The
Chess Monthly de Londres) pues h ly muchos admiradores en esta Isla de aquel genio
singular.
Luis Paulsen nació en Junio de 1833, en el Principado de Lippe Detmold (Ale
mania). Aprendió el ajedrez con su padre, el célebre Dr. Paulsen, Champion de dicho
Principado, y en 1854 pasó á los Estados Unidos, estableciéndose en Dubuque (lo-
wa). Fueron sus primeras víctimas los más grandes jugadores que entonces tenía Chi
cago, es decir, Morgan, Kennicot y Nicholson. En 1857 obtuvo Paulsen el segundo
premio en el Primer Congreso internacional de Nueva York, congreso en el cual alcan
zó el premio 1'.' el inmortal Pablo Morphy. Regresó á Europa en 1860, y comenzó
una série de campañas y profundos estudios que le dieron justamente muy sólida nom
bradla.
Los principales de esos combates fueron:
I. — Haber sostenido con Kolisch un reñidísimo match, que dio el resultado siguien
te: Partidas- g.i nadas por Paulsen 7, idem por Kolisch 6, idem tablas 18.
II.—Conseguir el segundo lugar en el Torneo de Hamburgo de 1867, y el 1? en
el de Crefeld — 1871 —ex cequo con Anderssen y Minckwitz.
III.—Vencer á Anders>en en 1876, en un match interesantísimo con el scote
de 5 á 4.
IV.— Obtener el primer premio en el Congreso de Leipzig, de 1877, venciendo á
competidores de la talla de A nderssen, Eng) sch, Schallopp, Winawer y Zukertort, y
volver á conquistar el puesto prominente en el Torneo de maestros celebrado en Franck-
fort, en 1878 ( West German Chess Congress) y en el de Brunswick de 1880.
Sin embargo, las dos glorias culminantes de Luis Paulsen, consistieron en haber
sido el principal profesor técnico de su tiempo, y el propagador más eficaz del sistema
de jugar á la ciega ó sin ver piezas ni tábleros (btindJoU pUiy). En los últimos años
Blackburne ha jugado y concluido hasta 1 5 partidas á la ciega, y Zukertort llegó á ju
gar 17 del mismo modo, en ti ¡test End Chess Club de Londres, pero desde que Fili-
dor había ahombrado á la elegante corle de Luis XV, jugando tres partidas sin ver los
tableros, nadie había vuelto á hacer esfuerzos en ese sentido, hasta que Paulsen estudió,
profundizó y puso de moda el método, con seis, ocho y diez juegos S'multáneos. La
sensación fué tan grande en el Niw York Chess Club, que sale condecoró con una
medalla de oro, y fué entonces cuando por primera vez dio Paulsen su famosa séanse
de 15 juegos simultáneos á la ciega, desde las tres de la tarde á las diez de la noche;
hora en que los médicos mandaron suspender la exhibición, porque el leader se sentía
con fiebre. A pesar de ello, Paulsen no incurrió en una sola equivocación, y al levan
tarse los combatientes en medio de una verdadera tempestad de aplausos y de hurras,
el maestro alemán había ejecutado 285 movimientos irreprochables, en siete horas y te
nía conquistada palmo á palmo, la posición de ganar, en 13 de los juegos. En esfuer
zos tales se fué educando poco á poco el sistema nervioso de Paulsen, y en el memo
rable y jamás repetido espectáculo (por sus especia es circunstancias) de Elberfeld,
en 1865, el piofesor insigne jugó á la ciega contra diez adalides de primera fuerza; les
autorizó á ccnsultarse con todos los pre entes; á mover las piezas y á deshacer jugadas.
Duró la lucha, con una corta suspensión para comer y descan-ar, veinte horas, y en
tonces Paulsen, sin sufrir fiebre, sin perder un solo juego, ganó 6 y entabló 4.
44 EL PABLO MORPHY.
A beauliful game—exclama 11 The Chess Monthlf played with nine others blindfold
at a time when bindfoldplay was almost in its infancy
Terminaré estos ligeros apuntes, mi apreciable amigo, reproduciendo un párrafo
del folleto que publiqué en esta ciudad durante el próximo pasado mes de julio, bajo
el título de: Mr. Blackburne en la Habana y cuyo párrafo dice así:
" Un contraste interesante,—Acaba de verse cuán admirablemente jugó Mr. Black
burne en esta capital, en marzo de 1891, seis partidas á la ciega, sin perder ninguna.
Estudíese ahora, como recuerdo de lejanos tiempos, el juego que el mismo ajedrecista
inglés perdió en Manchester, cuando sólo tenía poco más de veinte años de edad,
Pero entonces su contrario, el profundo L. Paulsen, el veterano émulo de Morphy.
dirigió diez partidas simultáneas sin ver, y en aquella ocasión Mr. Blackburne, viendo
piezas y tablero, fué una de las víctimas del gran profesor alemán. Al publicar esa par
tida, que tomamos de La Nouvelle Rcgence de París, correspondiente á diciembre de
1861, no sólo establecemos un oportuno paralelo entre el Blackburne de ahora y el de
hace 30 años, sino rendimos un tributo de respeto y cariño al ilustre anciano Herr
Paulsen, uno de los probables candidatos del Club de ajedrez de la Habana para sus
próximas luchas de invierno"
La fatalidad, pues, nos ha arrebatado al admirado maestro, antes de poder tener
la s ti:-facción de conocerle de cerca, pero mientras haya libros dedicados á los aje
drecistas, el nombre del ilustre profesor de Lippe Detmold brillará con destello inex
tinguible al lado de los de Filidor y Labourdonnais, de Staunton y von Der Lasa,
de Bilguer y Steinitz, que han sido los verdaderos maestros, tanto técnicos como
prácticos, del ajedrez contemporáneo. Luis Paulsen Non É piú !
Creyendo haber complacido sus deseos, siquiera en parte, quedo á las órdenes
de usted cerno atento S. S. y amigo, q. b. s. m.
ANDRÉS CLEMENTE VÁZQUEZ.
EL PABLO MORPHY. 45
que la jugada del texto es más débil y to, que respecto á mi persona han vertido
más expuesta todavía para el segundo ju los diferentes bandos. . . Por una conse
gador que la que hemos indicado. cuencia de estas falsas alarmas se ha he
(8) Fina y brillantemente jugado. cho correr (estando próxima la época del
nombramiento del Obispo de París) el ru
(9) Si 16-C x A— 17— D x P— 17 mor de que yo había ganado 600 ó 700
—C 5 R ó P 4 A— 18—T x C ó D x A t mil francos en las casas de juego. Ahora
excétera. que está desvanecido el temor de verme
(10) Si 18—D 2 D— 19— P 3 A R, elevado á la dignidad de Obispo de París,
sin duda se me creerá. He aquí la ver
seguido de A x P C; y si 18— P 4 A R— dad pura: en dos meses he ganado unos
19 — P x P al p—t - 19—C x P— :o— A x 30,000 francos, no en casas de juego, sino
P C ó 20 —A 4 i J y ganan. en la sociedad ó Club del ajedrez, mirado
(11) C 2 T hubiera sido preferible. casi en todos tiempos, por la naturaleza
misma de su institución, como una casa
(12) Si 27—T3C —28— R 2 A— particular. Establezco la exactitud de los
seguido de D 3 D &c. Es evidente que hechos, sin que por esto sea mi intención
con el plan efectuado, las negras buscan el justificarlos."
un contra-ataque que resulta ineficaz. Aunque no fuesen 700,00o francos los
(13) Muy bien jugado. Las blancas ganados por M. de Talleyrand, sino 30,000
ganarían igualmente, jugando: 30 — D 6 según confesión oficial del acusado, el he
A t, pero el Sr. Ba quero ha querido ob cho demuestra queáfines del siglo XVIII
tener la victoria de una manera elegante. se apostaban al juego del ajedrez en la cul
ta ciudad de París y en la epoca del puri
(14) Si 34— R x T—35— D 2 A t— tanismo revolucionario, cantidades mucho
35- R 4 R-36—T4 Rt-36—R 3 D- mayores que las que se apuestan hoy.
37 _x 6 Rt-37-R 4 D—38-T 5 R t &. ¿No seria probable que algunos amigos ó
cortesanos del gran diplomático se deja
(15) Esta bella partida duró 4 horas. sen sacrificar pecuniariamente por él con
El Campeón catalán, Sr. Baquero, ha el pretexto del ajedrez, para halagarle?
conducido su juego con una grande habi De todos modos, el biógrafo de M. de
lidad, y el ataque de un modo verdadera Talleyrand, M. Luis Bastide, exclamaba
mente noiablisimo. fNota por .¿f. C. Váz lleno de indignación y de coraje, en el
quez ) año de 1838:
Point de repos aux morís lorsque durant
leur ine.
Tallevrand y el ajedrez. lis ont déracinc les droits de la patrie!
Point de paix ni de tréve á qtiiconque se
En Marzo de 1791, el célebre ex-Obis- vend.
po de Autun, M. de Talleyrand, era acu Quand de la trahison on ho11ore 1c temple,
sado de jugador profesional por aquellos Q'uu scvére méprís sen'e du moins d'exemple.
enemigos suyos que creían ver en él un It est encore des Talleyrand!1
oculto aspirante al Obispado de París, á a. c. VAZQUEZ.
cuyo alto puesto aspiraba el abate Sieyes.
Tan generales y persistentes fueron las SOLUCION DE PROBLEMAS.
acusaciones, que M. de Talleyrand se creyó
obligado á insertar una carta, con su fir (DEi. NÚM. 2.—PÁG. l8.)
ma, en Le Moniteur, de la cual copiamos BLANCAS. NFGRAS.
los siguientes párrafos:
"Acabo de leer en el Journal de París I—C 6 D I — RxC
que se me designaba para el Obispado de 2—A 4 C t t
esta misma capital. No aceptaré el ho
nor que tal vez se dignasen conferirme (DEL NÚM. 3. -l'ÁG. 25.)
mis conciudadanos. Desde la existencia 1—C 6 R 1—C 4 D
de la Asamblea Nacional, he podido mos 2—D 5 R t 2—C x D
trarme insensible á las calumnias sin cuen 3—C 6 D +t
EL PABLO MORPHY. 47
(Finaliza.')
Solamente quedaban dos jugadores europeos, capaces de poder medirse con el
joven americano: Heydebrand von Der I.asa, el distinguido tratadista de ajedrez, y
Anderssen, el qu" sa'ió vencedor en el Gran Torneo Internacional de 185 r. El pri
mero fué desgraciadamente llamado al extranjero, por sus deberes diplomáticos, á una
remota región del mundo (el Brasil); pero el último consintió en desprenderse de su
estudioso reti'o en el colegio de Breslau, donde desempeñaba la Cátedra de Materna
ticas, para visitar á París, y al caballero que tenía preparado el guante para quien
quisiera recojerlo. Sencillos fueron los preliminares para el partido, y por lo mismo
se arreglaron con la mayor facilidad. Siete juegos debía ganar cualquiera delos com
batientes. Sentáronse 'os dos maestros para dt-cidir la batalla. Al concluirse, el resul
tado era este: Morphy, 7—Anderssen 2. — Partidas empatadas, 2.
Habiendo, pue«, batídose y de rrotado á cada uno de los jugadores célebres, con
la única excepción de aquel con quien no pudo obtener una entrevista, Mr. Morphy
comprendió que su misión en Europa había terminado, hasta donde era posible. Sus
pensamientos se dirigieron entonces hicia el hogar de su familia, y en breve se preparó
para volver á atravesar el Atlántico, con esra'a en la capital de Inglaterra. Su salida
de París fué motivo de sentimiento para sus amigos en el Continente. Esta segunda
y breve visita á Londres, causó gran placer, con especialidad entre los jugadores de la
Cran Bretaña. Su viaje posterior se describe de esta suerte en un bosquejo de su vida,
que acompañaba á su retrato sobre acero, publicado en el Illustrated News ofthe World:
"Desde este momento la marcha del Sr Motphy era al traves de una serie de ovacio
nes, en las cuales el ajedrez venía á ser un mero accesorio, en comparación con los
personales y bien merecidos cumplimientos que se hacían al joven adalid. Los Clubs
de San Jorge y de Londres le invitaron á un banquete público, y todos los partidos de
ajedrecistas (porque los jugadores de ajedrez, lo mismo que los jugadores de política,
están divididos en bandos diferentes) dejaron á un lado sus rencillas y se unieron ex-
pontáneamente para honrarle." Esos partidos se hallaban representados por notabili
dades de la aristocracia, de la nobleza y del talento: y sus compatriotas no dejarán de
reconocer el espíritu cosmopolita con que se recibió á su héroe. A Mr Morphy deben
haber sido muy gratas estas manifestaciones, pero con su fino tacto, que merece llamar
la atención, rehusó otras numerosas invitaciones de la misma clase. Durante su segun
da y breve visita á Londres, empleó el tiempo con nosotros (el Sr. Lowenthal) en pre
parar una importante obra li'eraria—el presente volumen—y en hacer algunas visitas
privadas á los clubs Muchos y muv fuertes eran los atractivos que le hacían regresar
á los Estados-Unidos. Sus compatriotas le habían destinado un magnífico testimonio
de honor, y se preparaban á celebrar su bienvenida de una manera que indicaba el
altísimo concepto en que le terían. Creemos que razones de caracter reservado, apre
suraban además, su salida de Europa.
El Sr. Morphy, segun lo hemos demostrado, no mira al ajedrez como ocupación
profesional, sino como una distracción, y desea emplear sus facultades intelectuales en
la carrera de abogado, que fué la que adoptó. Esperamos que en esa esfera llegará á
ser tan conocido y estimado como lo es ya respecto á su actual celebridad en lo que se
llama el mundo ajedrecista. Su triunfo en esa línea no tiene paralelo en la Historia.
Hace poco más de doce meses que se embarcó en Nueva York para Inglaterra. Nun
ca se levantó una reputación tan rápida y sólidamente como la suya. Llegó aquí con
una fama local y regresa con otra universal. Sus juegos en América se recuerdan en
en repetidos párrafos y sus maravillosas hazañas serán materia para el historiador. Si
al renombre que ha adquirido como jugador de ajedrez pudiere agregar la futura repu
tación de gran abogado, presentará una de las más curiosas y persuasivas pruebas de
la excepcional fecundidad de ese genio que la Humanidad ha producido. Tenemos
fé en que á Mr. Morphy le queda abierta una carrera útil para algo más que á su
propia nación.
48 EL PABLO MORPHY.
PROBLEMA NUMERO 4
POR PABI.0 MORPHY.
NEGRAS
BLANCAS
Salen eslas y ítan mate en ocho (8) jugadas.
EL PABLO MORPHY. 49
RETRATOS Y BIOGRAFIAS
IDIE "EL PABLO MORPHT.'
II.
Sr. D. Blas Du-Bouchet, primer protector del ajedrez en Cuba.
de las más recien
^Jtros parece tes obras de Pato
J jT que fué a- logía ó Medicina
7 yer ' y sin Legal, y á nos
embargo han pa otros, con el análi
sado tantos años...! sis de las doctrinas
En 1860, cuan de Triboniano, ó
do solo nos ocupá con los dubitati
bamos en la mora vos preceptos de
da de nuestro res las Doce Tablas.
petado tio D. An De esa manera fué
ton i o Zambrana como penetramos,
( Rector que fué sin hilo salvador
de la Universidad de Ariadnaquenos
de la Habana) de guiase, en el infi
estudiar con ahin nito laberinto de
co las páginas del los gambitos y de
Digesto y las sen los jaques.
tencias de Ulpia- Nuestro padre,
no, llegó nuestro asediado por las
inolvidable padre, naturales atencio
D. Francisco, pro nes de su numero
cedente del Beju sa clientela , fué
cal, en donde ejer dejando poco á
cía la profesión de poco el estudio
Médico, y llamándonos á una sesión reser de las Aperturas y de las Variantes, y
vada nos dijo con el afectuoso acento y nosotros quedamos obligados—cual nuevo
la viva locuacidad que le caracterizaron: Cid Campeador—á sostener en el día terri
"Necesito que aprendamos á jugar al aje ble de la justa, la causa paternal y el ho
drez, porque he hecho la apuesta con nor de la familia. Desgraciadamente mu
un asiduo concurrente á la Botica f'e D. rió antes de cumplirse el fatal plazo, el ani
José M" Espinosa, de que dentro de seis moso contrincante (*) que el destino nos
meses cualquiera de nosotros le habrá de reservaba. Pero ¿para qué negarlo? Nues
ganar á dicho juego, en el que se cree in tros adelantos habían sido muy pequeños,
vencible." Y en seguida, uniendo la ac y por lo tanto hubimos de conformarnos
ción á las palabras, puso un pequeño ta con no haber hecho uso de las armas, to
blero que traía, encima de una mesa, abrió madas de otín y llenas de moho, como las
las. páginas de un Compendio de Filidor, del héroe cervantesco.
traducido por Algara (que entonces era la Probadas las primeras gotas de la miel
única y general panacea con que comul hiblea del ajedrez, ya nos quedó el vani
gaban los principiantes) y nos pusimos á doso escozor de continuar haciendo pro
darnos mutuamente la primera lección de gresos en el juego de los Reyes. Mas ¿en
aquel imbroglio que nos asustaba y que á dónde encontrarla Escuela apetecida y los
ambos nos era totalmente desconocido. maestros? La legendaria Caissa, Diosa
La simple marcha de las piezas nos costó del arte sublime, se encargó más pronto de
un tremendo dolor de cabeza; lo que no lo que creíamos, de conducirnos al tem
nos sucedía, á él con sus profundos es plo. Caminábamos una noche por la calle
ludios en las altas horas de la noche, de San José, de esta ciudad, esquina á la
(*) El Sr. D. Félix del Rey, notario del Bejucal.
EL PABLO MORPHY.
de Manrique, cuando de súbito nos llamó la atención una casa alumbrada á giorno,
decorada con gran lujo, en cuyo salon princip?.) se veíaif varias mesas de ajedrez, y en
lomo de ellas á muchas personas jugando, conversando y no pocas veces riendo ó dis
putando, sin traspasar los estrechos limites de la buena educación. Al lado de una
de las ventanas estaba reclinado en rico sillón, un hombre grueso, de mirada pene
trante, bondadosa fisonomía y poblada barba, apuran lo un tabaco y mirando con
cierta vaguedad de pensamiento, las veleidades del humo, reflejo exacto y desconsola
dor de las inconstanc'as humanas. Aquel hombre era el Sr. D. Blas Du-Bouchet,
insigne patriarca del ajedrez cubano; socio de las principales corporaciones científicas
y literarias de la Habana, y miembro de la Real y la ireada sociedad de "Amigos del
País" en la Isla de Cuba. A la noche siguiente, un tío nuestro, muy aficionado á la
música, se va'ía de la gentil caballerosidad del eximio artista D. Serafín Ramirez (el
cual es casi seguro que lo habrá olvidado ya), y así como en las épocas del Feudalis
mo se apartaban muy presto los puentes levadizos de un Castillo ante la voz augusta
de los Soberanos y Embajadores, nosotros penetramos sin dificultad, al ampiro del
Sr. Ramirez, en lo que se nos figuraba que era el Alcázar del ajedrez, con el cora
zon agitado y sintiendo en todo el espíritu las palpit iciones de una juvenil alegría.
¡Que tertulias aquellas! El Sr. Du-B uichet, hacendado muy rico, hijo de la Ha
bana, abogado, ex-Juez de Pinar del Rio, de Güines (nuestro pueblo natal) y de Cár
denas, tenía todo cuanto necesitaba para su felicidad, y por lo mismo según diría un
conocido estilista español, solía seguir entonces por los aires, con los ojos de la imagi
nación, á la mariposa azul de los ensueños. Ante él no hubiera podido exclamar el
malogrado Sellés:
¡Cuanta hermosura al mirar,
Cuanto amargor al beber . . !
Las horas transcurrían en aquella casa, como en perenne festín. El Sr. Du-Bouchet,
era un bourgeois y un gourmet á la última moda, pero sin vicios, sin ridiculeces, ni ex
travagancias. Allí los concurrentes éramos los verdaderos dominadores. El acauda
lado propietario vivía solo, con los sirvientes; por temporadas se iba al campo á visitar
á su distinguida é ilustrada hija única (la Sra. D" Cecilia, casada con su primo D. Ni
colás Du-Bouchet, y viuda en la actualidad); pero tanto en las ausencias del dueño,
como cuando él estaba presente, la mesa, los criados, los caballos, los coches, la biblio
teca, todo quedaba absolutamente á nuestra disposición. Aquél no solo era el cen
tro del ajedrez, en donde se hacían torneos y se concertaban matches con premios
que ofrecía expontáneamente el Sr. Du-I'ouchet, sino el punto de cita indispensable
para los periodistas, los literatos, los músicos, y los políticos de grande altura. ¡Cuan
tas veces, mientras se batían al ajedrez D. Celso Colmayo, D. Félix Sicre, D. Aure-
liano Medina, D, Gabriel Toscano, el Dr. D. Cárlos Finlay ó L). Francisco Fésser,
sonaba el arco diamantino de White, ó gemía el inmenso Erard, de marfil y ébano,
flajelado por los dedos de acero de Aristi, de Saumell, de Desvernine, de Espadero ó
de Gottschalk! ¡Cuántas veces, el sabio Dr. D. Juan Bruno de Zayas, preocupado
con la guerra de seseción de los Estados Unidos, extendiendo á nuestra vista los ma
pas que publicaban los diarios americanos, disertaba magistralmente sobre las even
tualidades de aquel'a lucha titánica ! ¡Cuántas veces entre un gambito y algún
contra-gambito nos deleitaba Andrés Díaz con un magnifico soneto improvisado, ó
nos llenaba de asombro con sus rotundos endecasílabos el Olmedo habanero, D. Joa
quín Lorenzo Luaces!
No hemos podido olvidarlo. Conocimos allí al insigne jurisconsulto D. Ramon
de Armas, á D. Antonio Franchi Alfaro, á D. Pedro López Trigo, á D. Antonio Ra
mírez, al notable problemistu D. Pedro Palmer, al célebre crítico D. Juan Marünez
Villergas, á D. Plácido Domínguez, á D. Arístides Martínez, á D. J. J. Machad'), á
D. J. Antonio Pichardo, al dis ingui.lo gimnasta D. Amadeo Chauinont, (y á su her
mano D. Próspero), á D. F. Cerecio, al ya eminente pianista D. Ignacio Cervantes, á
D. Ramon y á D. Onofre Morejón, y á muchas otras personas prominentes; lo mismo
que á un jóven de color, esclavo en aquella época de D. Felix Sicre, verdadero por
EL PABLO MORPHY. St
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54 EL PABLO MORPHY
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BLANCAS. BLANCAS.
Juegan éstas y en 4 jugadas obligan á Salen éstas y dan mate en 3 juga
las negras á darle mate al rey blanco. das.
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BLANCAS. BLANCAS.
Las blancas salen y dan mate en 3 ju Salen las blancas y dan mate en 3 ju
gadas. gadas.
L
5« EL PABLO MORPHY.
que no vendrá hasta fines de este mes, pendio que en 1888 publicó en Zaragoza
no solo por el arreglo de varias publica l). Gerónimo Borao, bajo el título de El
ciones sobre ajedrez que tiene á su cargo, Ajedrez- Tratado de susprincipiosfundamen
sino por hallarse enferma de gravedad su tales, pues allí se dice que del tratado de
señora esposa (por cuya completa salud Cessoles hay tres códices en la Biblioteca
hacemos votos) ¡Funesta coincidencia! nacional de Madrid, cada uno dividido
Cuando el Sr. Steinitz vino á la capital de en 8 capítulos; uno de ellos traducido al
la Isla de Cuba, en 188 .. para efectuar el lemosin y copiado al parecer en 1385 y los
primer match con el Sr. Tchigorin, acaba otros dos escritos en latín, el uno hacia fi
ba de perder á su inteligente hija única, nes del siglo XV y el otro en Roma el
la Srta. Flora, muerta en edad muy tem año 1425.
prana. Al verifirarse el 2". match S:einit/.
Tchigorin ¿el gran maestro austríaco habrá Sr. D. José Jimenez—Sagua la Grande.
perdido tal vez á la virtuosa compañera — La solución del problema' en 8 jugadas,
que tanto le alentaba? ¿Tendrá que ba por Pablo Morphy, encontrada por la ni
tirse siempre el Sr. Steinitz, con el vigoro ña de 1 2 años, Amelia Collazo, es muy co
so Champion Ruso, abrurrado por el pesar? rrecta. Se publicará en el número próxi
De todo modos el Match ha de princi mo de este periódico. Mientras tanto, sír
piar antes del 2 de Enero de 1892, por vase felicitar en nuestro nombre á la Gil-
estar -así terminante convenido; á menos bert cubana, y remitirnos algunas de sus
de estipularse una próroga con motivo de producciones (juegos ó problemas) pues
fuerza mayor. para acertar finales tan profundos como
Anhelamos, en consecuencia, que la el de que se trata, se necesita conocer bas
distinguida Sra. Steinitz recobre pronto tante el sublime Juego Real.
y totalmente la salud, no solo por ella y ¿Es nativa de Sagua la Grande, la niña
por su familia—que es lo esencial - sino Collazo?
para que la formidable contienda entre
los dos titanes no pierda ninguno de sus
naturales encantos. Morphy dando una enorme ventaja.
Por ahora nos concretamos á dar al
Sr. Tchigorin la más expresiva y exponta- Quítese del tablero la Torre y el Caba
nea bienvenida, por su feliz y tercera vi llo de la Dama de las blancas.
sita á la ciudad de la Habana. Partida publicada en la página 147. —
Volumen I — (18s7)de la revista de New-
CORRESPONDENCIA. York, denominada. The Chess Monthly.
Sr. Baron Heydebrand Von Der Lasa. BLANCAS. NEGRAS.
— Wiesbaden. — Han llegado á nuestro
poder las gratas líneas de V. de 19 del pa P. Morphy, Amateur.
sado- Gracias muchas por su autorizada y I P4R 1 P 4R
siempre respetabilísima opinión, acerca de 2 P4 A R 2 PxP
El Pablo Morphy y del Club de ajedrez 3 CR3A 3 P4CR
de la Habana. Cuidaremos de que V. re 4 A4 A 4 D2 R
ciba lo mas oportunairi- ute que fuere po 5 P4 D S P4D
sible, las partidas del famoso match Stei- 6 AxP D 6 P3AD
nitz-Tchigorin.— Le felicitamos sincera 7 ARx PARtÜ 7 DxA
mente por haber aumentado su célebre Bi 8 CS R 8 D3 A
blioteca con el raro ejemplar del Dechado 9 D 5Tt 9 R2 R
de la vida humana, que publicó en Valla 10 P4T R 10 Px P
dolid el laborioso Reina, en 1549; libro 11 00 11 A3T
que como V. dice con su habitual acierto, 12 P3CD 12 C D 2 D
es una traducción castellana de la obra de 13 A 3Tt '3 P4 A
Fr. Jacobo de Cessoles (Año de 1300). Y 14 T 1 D! 14 CxC
á propósito de ese libro singular, nos per 15 Ax Pt iS R3R
mitimos llamar la atención de V. hácia la 16 D 8 R t 16 C 2R -
página 16, de la Introducción del Com 17 I'S Dt+
EL PABLO MORPHY. S9
Los comentarios huelgan. El genio no UNA PERLA DE STEINITZ.
necesita ser glosado, ni discutido; alumbrar
como todo astro, con su propia luz ( A.
C. V). DEFENSA DE FILIDOR.
BLANCAS. NEGRAS.
UN SOBRINO REBELDE.
Steinitz. E*iner.
(Partida jugada en Nueva Orleans en I P4R 1 P4 R
Noviembre de 1856, entre Pablo Morphy 2 C R3 A 2 P3D
y su tío y maestro D. Ernesto Morphy.— 3 P 4 D 3 P4AR
Se publicó en la página 340, vol. I (1857) 4 P D xP 4 PAx P
de The Chess Monthly, (de New York) 5 C R SC 5 P4D
6 P6 R 6 C R3T
7 C D3A 7 P3 A
GAMBITO EVANS, 8 C Rx P R 8 P xC
9 D STt 9 P3C
BLANCAS. NEGRAS. 10 D5R 10 T R 1 C
11 A D5 C R 1 1 D 3 0 (0
12 T D 1 D (2) 12 D x P
Pablo Morphy. E- Morphy. '3 A 4 AD! (3) 13 C R 2 A
14 A x D ! Se rinde. (4)
1 P4 R r P4R
3 CR3A 2 cr>3 A NOTAS POR A. C. VAZQUEZ.
3 A4 A 3 A 4A
4 P4CD 4 AxPC
(1) Si 11—C R 5 C— 12- D 4 A (G).
5 P3A 5 A4T
6 P4 D 6 P xP
7 OO 7 Ax P (») Por supuesto que las negras no
8 C DxA 8 Px C podrán tomar ahora la Dama, por la ré
9 A3T 9 P3D plica T 8 D tt.
10 D3C 1 0 C R3T Las blancas podían haber recuperado
11 D xPA ti DjA
12 P5 R 12 P x P la pieza perdida, jugando D x D, y des
*3 TRiR '3 A 2 D pués A x C, pero sin duda hallaron mayor
14 TD 1 C '4 O O O ventaja en continuar el ataque.
15 A 6T ü '5 C D 4 T (*)
16 T R 1 AD 16 A3 A (3) Otra entrega—con toda impuni
*7 D xC 17 P x A dad — de la Dama blanca.—En el caso de
18 D x PT t 18 R 2 D que las negras intentaran aprehenderla
*9 T R x A ! '9 Lf4 A recibirían mate en el acto.
20 T R x P At ! 20 R 1 R
21 D 6 AD t 21 D 2 D
22 T I) 8 C ! ! 22 D xD (4) Si 14— C x D— 15—T 8 D tt.
23 T R 7 Rt 23 R 1 A Esta bellísima y fina partida-un artís
24 TxTt 24 D 1 R tico bijou—demuestra que el Sr. Steinitz
*S TxD tt se dejó seducir en otra época por los hala
gos de la Escuela Antigua. ¡Cuán deplo
(*) Es claro que si 15—P x A— 16— rable es que no hubiese continuado mili
I ) 3 C con muy fuerte posición de ata tando en ella. ... !
que en favor de las blancas
6o EL PABLO MORPHY.
RofieictíÉ) generaPe.é.
vL/LL' $¡¡ Nuestro distinguido amigo D. Francisco Reyes Guzmán, capitalista protector
• «s^de nUestro Club, acaba de llegar á la Habana, después de haber hecho nue
vo acopio de salud en algunos centros balnearios de Europa, según lo verifica anual
mente. Sea bien venido.
1891, pero que acaba de ser publicado ahora) hace elogios de nosotros y de El Pablo
Morphy, que le agradecemos debidamente. Ha sido el Sr. Steinitz el primero en
habernos aplicado el calificaiivo, que nos envanece, de "The indefatigable spanish
Chess author."
Ífef Dice La Stratégie de París que Mr. Blackburne dió una sesión el 5 de Oc-
™ tubre último, de i.cho partidas sn ver, en el Club de ajedrez de la ciu
dad de Londres, con el éxito habitual. El célebre campeón ganó tres paitidas,
perdió una, dos fueron tablas y las otras dos no se terminaron, por falta de tiempo,
aunque en ellas el maestro había adquirido ya una superioridad muy notable.
Pocos días después Mr. Blackburne jugó en el mismo Club 20 partidas simultá
neas, en cuatro horas, con el siguiente resultado: ganadas 16, perdida 1, tablas 3.
S$2> Con satisfacción vemos que el gusto por el ajedrez continúa desarrollándo-
** se en la América latina.—Al entusiasmo despertado en Venezuela por El
Tablero de Caracas, ha seguido el establecimiento de un Club en la capital de la Repú
blica Argentina, con la siguiente Junta Directiva:
Presidente.— Dr. Julian Balbin.
Tesorero.—Sr. M. E. Zamudio.
Secretarios —Sres. C. Macorra y C. Zavelli.
Adjuntos. —Sres. D. Santos Lafuente, Hector Soto, Arturo Massey y
Alberto Gelly.
Ultimamente se jugaba en aquel Club un Torneo Handicap, entre once concu
rrentes. A su terminación tendrá lugar un match entre los Sres. Gelly y P. Tagliafero
los cuales se disputan el puesto de Campeon de Buenos Aires.
W Por la Nuova Rivista degli scacchi de Liorna sabemos que acaba de aparecer
* en Brurswick, editado por Oscar Lóbbecke, un interesante libro de Alberto
Heyde, el ilustre compilador del Deutschen Wochenschach, intitulado Die Franzosische
Partie. Dice el simpático colega italiano que en dicha obra se examina con profundi
dad todo lo concerniente á la sólida Apertura francesa, en relación á los últimos ade
lantos, teniendo por apendice un buen conjunto de selectas partidas con el planteo de
que se trata. No hemos disfrutado aún del placer de recibir dicho libro, pero como
precisamente estamos dando en este periódico otro estudio nuestro acerca de la misma
62 EL PABLO MORPHY.
Después de una reñida lucha entre Mr. Hodges y el Mayor Hanham, este
*-k último ha sido declarado Campeón del Manhattan Chess Club de Nueva
York.—Reciba nuestros cordiales parabienes el Sr. Hanham, cor. quien tuvimos la sa
tisfacción de quedar empatados—4 juegos por 4 —en una serie de partidas eventuales
que en aquella ciudad jugamos nosotros con él en Enero de 1884.
¿-S¡¡/ The Times Democrat (de Nueva Orleand) hace observar que, al mismo tiem-
■* po que Gustavo Alberto Vázquez, hijo del Director de El É'ablo Morphv, ha
debutado como problemista el joven Pen y Healey, hijo del gran compositor inglés de
problemas, autor del famoso '.Bristol." Un nuevo Healey y otro Vázquez más
en el mundo del ajedrez.
EL PABLO MORPHY.
ÍA Mr. Bird ha ganado el primer premio en el ultimo torneo del Simpson's Di-
^ van, con un score de 6y¿ partidas. Los demás premios fueron conquistados
por Tinslcy (5^), Muller (5) y Loman y Jasnogrodsky (4^2). Por lo mismo, los dos
últimos se dividieron entre sí el importe del 4? premio. Sumando el total de los jue
gos ganados en los dos últimos torneos del Divan, el resultado ha sido este: Bird,
i2l/4; Loman, 12; Van Vliet, 10^; Mortirher y Muller, 9; Tinsley, 8)4; y Gossip 8.
JÉ^ & En un match privado entre los Sres. Showalter y Pollock, jugado en una
" finca, residencia del primero, para ponerse ambos en buena práctica, Showal
ter obtuvo la victoria por la pequeña ventaja de 6]/, contra 51^.
á M. Tchigorín hizo su viaje del Havre (de donde salió el 21 del pasado) á
Nueva York, en el vapor Champagne, llegando á la populosa ciudad norte
americana, el 28 del propio mes.
\AlL> íjv El distinguido maestro y literato Sr. \V. H. K. Pollock (á quien estimamos
83 tanto como le admiramos) premiado en variou Torneos Universales con el
presente especial que siempre se destina al autor de la más brillante de las partidas
que en ellos se verifiquen, se ha dignado dedicarnos el párrafo siguiente, que no sin
rubor reproducimos:
" The Baltimore Sunday News. —Noviembre 1? de 1891.
"El primer número de la Revista mensual de ajedrez, del Sr. A. C. Vazquez, an
siosamente deseada, apareció el 15 de Octubre último. Se titula V.l Pablo Morfhy
y está bajo todos conceptos á la altura de los periódicos de ajedrez, de primera clase,
en Europa y América. Kl número 1" de dicha revista es propiamente un número
Morphy, y contienen un retrato del maestro de todas las edades, igua! al publicado
en el libro de Lowenthal.
"Entre otras joyas del juego, el Sr. Vazquez ha elegido la partida que más ade
lante copiaremos, y primeramente publicada en The Times Democrat de New Orleans,
correspondiente al 3 de Febrero de 1889. Dicha partida demuestra muy bien las po
derosas fuerzas de Morphy para dar ventajas.
"Los jugadores españoles estan naturalmente orgullosos de él, por razon de su
linaje en la raza latina.
"Estamos agradablemente impresionados con la elevación y originalidad de los
diferentes artículos de esa Revista, aun convencidos como nos hallamos de la erudición
y versación del Sr. Vazquez y de sus colaboradores. Por lo mismo todavía tendremos
que ocuparnos en la próxima semana de los trabajos de El Pablo Morfhv."
¿4 ÉL PABLO MORPHY
#*1 Mr. F. Catlin, de Nueva York (P. O. Box 3650) ofrece á 1. 50 y 2 pesos
* oro, colecciones de piezas de ajedrez—de celuloide—con sus correspondientes
tableros de bolsa ó de cartera—( Improved Pocket chess Board). Dice que son muy
duraderos y que pueden conservarse muy limpios constantemente, con grande facilidad
La serie de piezas aisladas vale 25 cts. plata.
san
EL PABLO MORPHY
HABANA.
REPÚBLICA MEXICANA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
EL PABLO MORPHY
REVISTA MENSUAL DE AJEDREZ
POI\
BLANCAS
Siii.'ii esta* y dan mate en tres {3) jiua'üiH.
Dirección y Adminisi ración: Calle del Tejadillo mím. 43, Habana
(Coba), ó apartado mím. 139 en la Administrnción General de Correos.
CoNiuciosEs de i.a SUsCRIPCIÓN.-El Pablo Morphy aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones i«'r semestres adelantados: en la
Habana, $1-50 plata, y en el infrior déla Isla ó en el extranjero ¡f2 El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. piala, y fuera de ella 35 cts.
HABANA
La Propaganda Literaria
ÉL IVIUITA. 28.
1892.
i
OBRAS BE AJEDREZ POR A. C. VAZQUEZ.
EDICIONES AGOTADAS.
INÉDITA-
El Ajedrez Ciclónico.—Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de ios gran
des maestros, s n otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?(
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XZX. — Dos partidas de cada' uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (!a más cleg 'nte é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
cscogid .s y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vaquez.
NUM. 4. Habana, 15 de Emro de 1892. VOL. I.
El PABLO Wm
REVISTA MENSUAL DE AIEDE.EZ
DIRIGIDA POR
Dirección y Administración: calle del Tejadillo núm. 43, ó apartado núm, 133, en la Admón, Gral. de Correas, -Habana.-Cuba
RETRATOS Y BIOGRAFIAS
IDE "EL PABLO MORPHY."
III.
WILHELM STEIISTITZ,
la Confederación
JLí Ay una her- "Champion del Mundo." Germánica que se
J*y mosa ciu- estableció desde
f dad en el 1815; el centro de
corazón del in aquel famoso Con
menso Imperio de greso de 18 13, que
Austria, ennoble decidió la caida
cida por la Cien de Napoleón I; la
cia, premiada por ciudad, por últi
la Naturaleza y mo, que más ha
distinguida por el sufrido ante la
Arte. Es la ciudad Historia, por la
que riega el bulli horrible Defenes
cioso Moldau, y tración de 1618,
que decora el gen preludio de la gue
til Domo; la ciu rra que se juzgó
dad de los 70 Pa inacabable de los
lacios, con el cé 30 años. Esa ciu
lebre Carolina y dades Praga, capi
el ilustre Clemen- tal de la Bohemia,
tino; el Boviastr.um en cuyo Palacio
de Estrabon y el Real deHradschin
Marobodum de aún cree escuchar
Tolomeo; la po el viajero el vagi
blación mercantil do fascinador del
de los judios; la alma heróica de
tumba en 1866 de María Teresa.
Allí nació en 1836 (un año antes que Morphy) el soberano actual del ajedrez mo
derno, Herr Wilhelm Steinitz, viendo caer gota á gota en su juvenil espíritu, el amargo
ro' io de las desgracias de su pueblo (pueblo implacable y fanático durante muchos lus
tros), pero recreando á la vez la inteligencia con la vista asombrosa de las catedrales gó
ticas, las harmonías esculturales y arquitectónicas del Renacimiento y la magestad de los
66 EL PABLO MORPHY.
infinitos arcos que sirven d¿ broquel al caudaloso río que en dos mitades divide á la
Praga rica de la Praga pobre, recordando de un lado las inmo'aciones de los sufridos
Eslavos y del otro los homenages exigidos, con su horizonte de bayonetas, por Fede
rico el Grande.
Nosotros conocimos al Sr. Steinitz, en la Habana, en 1889. Vimos en él á un
hombre de pequeña estatura; más bien grueso que delgado, que cojeaba algo y camina
ba despacio. Nos impresionaron su cabeza grande, con abundoso pelo rubio, casi rojo;
sus ojos chicos, pero sumamente vivaces; su barba bastante poblada, con algunas ca
nas, y las manos pequeñísimas, muy blancas, suaves y mórbidas como si fuesen de mu
jer. Escribía y hablaba muy pausadamente con la calma preconcebida de su raza. De
cortísima vista, para leer y escribir necesitaba ponerse el papel enteramente junto de
los ojos. Su letra casi microscópica, y desigual, indicaba un sistema nervioso bastante
trabajado. La frente espaciosa; la voz persuasiva y la fisonomía altiva y dominante,
que completaban su personalidad, decían bien á las claras que aquel hombre estaba
muy distante de ser un carácter vulgar. Por el contraiio, bastaba tratarle un poco, para
comprender en el acto, que el Sr. Steinitz se había ejercitado bastante en la lectura de
obras científicas y li t* rarias, y en las polémicas brillantes del moderno periodismo.
Desde 1873 en que obtuvo el Primer Premio en el Congreso Ecuménico de Viena,
ha sido el Campeón indiscutible del ajedrez universal. Hace pocos años, un periódi
co de Londres abrió una votación en todo el Mundo, sobre quienes eran los diez ó
doce mejores ajedrecistas contemporáneos. Hubo mucha discrepancia sobre quienes
debían merecer los puestos 2?, 3?, 4? &c. En cuanto al 1", fué discernido unánime
mente, sin exclusión de ningún sufragio, al Sr. W. Steinitz.
Ha jugado 23 matches, y jamás ha sido vencido en ninguno, como lo demuestra
la siguiente lista:
,37 38 4'
ÉL PABLO MORPHY. ¿7
He aquí ahora la estadística de los Torneos en que el Sr. Steinitz ha tomado parte:
Años, Lugar del combata. Premios obtenidos. Jugadores. Clase.
1865 Dublin. i" 5 Handicap.
1866 Londres. i" 16 Handicap.
1867 París. 3? »3 Universal.
1867 Dundee. 2? 10 Universal.
1867 Dundee. 1? 16 Handicap.
1868 Londres. 1? 24 Handicap.
1870 Baden. 2". 10 Universal.
1871 Londres. l" 48 Handicap.
1872 Londres. Fuera de premio 16 Handicap.
1872- Londres. 1? 8 Maestros.
1873 Viena. 1? 12 Universal.
I»82 Viena. 1" 18 Universal.
1883 Londres. 2? 14 Universal.
A consecuencia de haber alcanzado Zukertort el primer puesto en el último de
los referidos Torneos, ó sea el de Londres de 1883, Steinitz desafió á su afortunado
rival á singular combate, y el resultado bien conocido, del celebérrimo match de 1886,
dejó en manos del eximio bohemio el cetro universal del ajedrez en esta última parte
del siglo XIX.
El renombrado crítico de Hereford, Mr. Edwyn Anthony ha publicado la siguien
te nota:
— Partidas jugadas por el Sr. Steinitz en los Torneos de maestros 196.
Partidas ganadas en dichos torneos por el expresado Champion 136.
— Idem, perdidas por él 26.
Idem, tablas 34.
Total. 196.
La única derrota sufrida en sus numerosas y fuertes contiendas, por el Sr.Steinitz,
ha sido la del Cable-match en contra del Sr. Tchigorin; pero no debe olvidarse que
ésta no fué una lucha frente á frente del tablero, por ambos adversarios; y que tanto
en el Gambito Evans como en la Defensa de los dos Caballos se partió de situaciones
especiales, discutidas y analizadas con proligidad por los jugadores y los periódicos
de América y de Europa, sin que ninguno de los dos contrincantes hubiese tenido liber
tad de escoger los procedimientos que les convinieran. Entonces prefirió el Sr.
Steinitz poner en peligro su justa y antigua fama de jugador práctico, á dejar sin de
mostración las premisas técnicas que había consignado en su tratado The Modern
Chess Instructor, sobre que la mejor defensa en el Gambito Evans era D 3 A, y el plan
más sólido de ataque en la Defensa de los Dos Caballos, retirar el caballo del Rey á la
2" casilla de la Torre, al acabar de jugar las negras P 3 T R. Y fenómeno curioso,
después de derrotado el Campeón del Mundo en el notable cable-match que los aje
drecistas de todas las naciones han estudiado y aplaudido, el vencedor, Sr. Tchigorin,
nos ha dicho á varios miembros del Club de ajedrez de la Habana que el Sr. Steinitz
tenia razón: que él está ya convencido de que en el Evans no hay respuesta más exac
ta por parte de las negras que D 3 A, y que en cuanto á la otra apertura de que se
trata, el movimiento de C R 3 T, que él considera ya como muy fuerte, merece ser estu
diado todavía con mucha seriedad, pues en los dos casos el contrario se vé obligado
á jugar con extraordinaria precisión para salvarse. ¡Triunfo moral, ó de Escuela, que
llenará de seguro, al sabio profesor austríaco, de puro regocijo!
La nacionalidad política del Sr. Steinitz es actualmente la de los Estado; Unidos.
Bastante tiempo hace que se acogió por medio de la naturalización á la respetada
68 EL PABLO MORPHY.
bandera de las estrellas republicanas. Viviendo en Nueva York, en Brooklyn ó en-
Montclair; abatido por la vejez, por las enfermedades, por la muerte de seres muy
queridos de su familia, no por eso ha dejado de trabajar incansable y doctamente, ora
dirigiendo el magnifico periódico de ajedrez The International Chess Magazine (desde
1885 á la fecha); ora redactando artículos críticos para las columnas de ese ramo en
The Tribune y otros importantes diarios; ya dando á luz el primer volumen de la ma
gistral obra The Modern Chess Intructor, ya comentando con espíritu imparcial y crite
rio profundo las partidas todas del 6o Congreso Americano de ajedrez, celebrado en
Nueva York. El Field de Londres engalanó durante mucho tiempo sus acreditadas pá
ginas, con los artículos críticos del Sr. Steinitz, artículos siempre huevos, siempre admi
rables. Los trabajos de este maestro (parto de su genio demoledor y reformista) han
promovido por lo común discusiones tempestuosas. Gladiador sombrío, pertinaz, per
severante, el Sr. Steinitz ha escrito muchas veces con hiel, agotando los vocablos de
la polémica sangrienta. Nunca ha buscado compañeros, ni cola!, oradores, ni consuetas,
ni sicofantas. Caracter de hierro, no ha sabido doblegarse ante sus enemigos, sino
atacarles con truenos, como Isaias. Ha sido afable, cortés y hasta bondadoso, en el te
rreno de la caballerosidad, pero ante la critica mordaz y despiadada se ha subido á las
últimas gradas del hemiciclo de guerra, como se aislaba Marat en la penumbra de la
Convención francesa, sin otras armas que los latidos de su corazón y las reverberacio
nes de su cerebro, y sin más norte que el aplauso de su propia conciencia.
De las numerosas semillas que deja esparcidas en el campo, por él trillado, del aje
drez racionalista ó matemático, unas se secarán, otras darán quizas débiles frutos; pero
muchas, muchísimas arribarán á la posteridad, con abundantes flores. Treinta años de
luchas, de investigaciones, de estudios y de enseñanzas, no pueden desvanecerse cual
relámpagos, con la brevedad de una esperanza, ó producir unicamente un ruido sordo,
y extraño, como dicen que sucede en las detonaciones de los aludes polares. Lo
mismo que San Isidoro en los famosos Concilios de Toledo, él ha llenando un siglo
entero con el prestigio de su nombre y la grandeza de sus hechos.
"Con frecuencia, dice en uno de sus últimos números el periódico de Brooklyn, Tfie
Daily Standard Union, se ha discutido acerca de la fuerza relativa de Pablo Morphy y
el Sr. Steinitz. Es dificil un paralelo entre ambos: Morphy era un génio, Steinitz un
hombre estudioso. Si Morphy hubiera vivido, en condiciones de poder continuar des
arrollando las facultades que en grado tan alto poseía para el ajedrez, hubiera llegado
sin duda al límite de la perfección; pero esto no parecía practicable, porque á causa de
su débil constitución físira, pronto habría tíaqueado ante la rudeza del trabajo intelec
tual. Morphy abandonó el ajedrez en los momentos que asombraba al mundo con su
extremada habilidad. Los triunfos suyos fueron tan rápidos y completos, que nadie
pudo dudar que era invencible. Mr. Hoffer hace la siguiente comparación: "Morphy
tenía el talento de Napaleón I. y Steinitz, á fuerzas de árduos trabajos y de incesantes,
elucubraciones, ha llegado á ser el Moltke del ajedrez " Buscando una compa
ración análoga en el mundo musical, podría encontrarse la siguiente entre ambos maes
tros, con mayor poesía y exactitud: Morphy era como Beethoven, un genio incon
mensurable, que sin violar las leyes de la harmonía, se sentía capaz de crear las melo
días mas esquisitas; Steinitz, como Bach, excéntrico y duro en la forma, sólo llega á
producir encantos á los oídos clásicamente educados por el arte "
Después de todo esto ¿qué podremos añadir nosotros? Muy pocas palabras mas.
Dirigir á nuestro apreciable y respetado amigo, el Sr. Steinitz, un expresivo saludo de
cordial bienvenida, por su feliz llegada á la Habana, y decirle que si quiere conservar
con brillo y alta fama el envidiado título del Campeón de ajedrez del Mundo, es necesa
rio no solo que procure vencer á su insigne competidor, sino que aspire á dominarlo en
profundidad, elegancia y corrección de combinaciones; pues como se decretaba en los
caballerescos tiempos del portentoso Código español El Fuero Juzgo:
"Rey serás sifecieres derecho, et si nonfecieres derecho non serás Rey. Rex eris si
RKCTE FACIS; SI AUTEM NoN FACIS, N.>N t.RIS.
AndrÉs Clemente Vázquez.
EL PABLO MORPHY. 69
1—C 7 R 1— R 2 A
2— D 6 C R t 2—R 1 A PROBLEMA NUM. IO.
3—D 8 C 1 1
por D. Fernando Rivera Fuentes, (de México),
(Del número 7—Página 55). NEGRAS.
1- A 4 D 1— R x A
2—C 6 C 2- R 5 R
3 -T x P A 1 1 mu
1—A 4 D 1—P 6 A 1 Ü ■
2—T 5 R t 2—R x A
3—C x P 1 1 1 #
EL CEUTEO ASTURIANO.
Faltaría El Pablo Morphy í uno de sus deberes más inexcusables, si á nombre del
Club de Ajedrez de la Habana, no consignara un sincero y expresivo voto de gracias
por la expontaneidad y delicadeza con que el distinguido Centro Asturiano de esta ca
pital ha contribuido con 500 pesos oro, y ha cedido sus expléndidos salones (antiguo
Casino Español) para la celebración del famoso match Steinitz—Tchigorin; haciendo
además otros gastos menores en la impresión de lujosas tarjetas y elegantísimos dia
gramas litografiados, que habrán de servir para las incitaciones que se hagan á las
personas que hubieren de presenciar la lucha, así como para la copia de los juegos y
posiciones curiosas de las diversas partidas. Los Sres. Presidente D. Manuel Valle,
Vice- Presidente D. Saturnino Martínez y D. Benito Celorio, y Tesorero D. Prudencio
Noriega, merecen en especial todo género de congratulaciones, supuesto que esos Tor
neos llaman poderosamente la atención del mundo entero; y contribuyen al mayor
prestigio de la cultura de Cuba, y de la civilización española en América.
NTJEVAS PXJBLICAGIOITES.
Kste periódico de San Petersburgo, uno de los más populares de aquella gran ca
pital, publica semanariamente una columna de ajedrez, de cuya importancia se puede
formar un juicio exacto con solo decir que la dirige el Sr. Tchigorin. De dichos tra
bajos se hace cada quince días, ó cada mes, una edición especial, bajo el sencillo titulo
de Ajedrez ( Chachmaty). Nosotros damos las gracias al distinguido Campeon ruso, por
habernos regalado los primeros 26 cuadernos de esa magnifica colección. El Sr. Ñu-
ma Preti, de París, puede servir suscriciones del Chachmaty, á precios mó iicos.
Dijimos en nuestro número anterior que el sabio profesor austríaco Herr J. Ber-
ger, el feliz autor de la gian obra "Theorie und Praxis der endspiele", estaba prepa
rando un Directorio General de ajedrez para 1892. El Sr. Berger acaba de honrarnos
con una atenta carta fechada en Graz, el 19 de Noviembre último, en la cual nos pide
que le remitamos biografías de los principales ajedrecistas de México y de Cuba, así
como una noticia de los clubs y de los periódicos de ajedrez en ambos países; á fin de
cumplir el encargo de formar el mencionado Directorio bajo los auspicios de la gran
casa editorial "Veit y C*," de la ciudad de Leipzig' Las personas que quieran pro
porcionamos cualesquiera clase de datos, con tal objeto, pueden creer que agradecere
mos su cooperación; pero las que deseen dirigirse directamente al Sr. Berger, deben
EL PABLO MORPHY.
recordar que la residencia del maestro está en Graz (Estyria), Imperio de Austria, 14
Brockmanngasse.
A propósito del acreditadísi no profesor hemos sabido con placer que en el Tor
neo Internacional por correspondencia, promovido por l,Le Monde /Ilustre" de París,
Herr J. Berger lleva ganadas 35 partidas, sin perder ninguna y 2 tablas, teniendo ex
celente posición en los 11 juegos no terminados aun.
CORBESPONDEIJCIA.
Nueva York, The Chess Monthly (de 1857 á 1861). Haremos por nuestra parte un
cuidadoso cotejo, pues nos proponemos reproducir en las columnas tle esta publicación
las espresadas 71 partidas. Vd. sabe bien que The Chess Monthly estuvo durante no
poco tiempo bajo la dirección del mismo Morphy.
Oportunamente llegaron á nuestro po 1er las atentas cartas de V. de 6 y 18 de
Noviembre. Ya remitimos todos los números publicados de El Pablo Morphy al
Sr. Amado Bustillo, de Madrid Sírvase mandarnos por el correo, un ejemplar de la
Colección de Partidas publicada por Vd.
Sr. D Fernando Rivera Fuentes—México.—Muchas gracias por su interesan
tísima correspondencia, del 1? de Diciembre próximo pasado. Le daremos publicidad
en este periódico, tan luego como termine la memorable contienda Steinitz Tchigorin,
cuyas partidas, de notoria actualidad, son ansiosamente esperadas pjr el público.
Sr. D V. M. Carvajal —Matanzas—'"El Tablero" de Caracas lo dirigen los
señores D. C. Perret y D. R. Ruiz. La Administración del periódico se halla en ''La
Empresa Guttemberg—Caracas. — Este 4, número 2 —Sociedad á Traposos". En la Ha-
Lana se entiende con las suscriciones el Sr. D. Clemente Sala, calle dela Habana n?98.
Sr. D. José García Director de Las Novedades de New York. Quedamos á
V. muy obligados por haberse servido establecer el cange de su importante publicación
con el modesto Pablo Morphy. Tambien le agradecemos debidamente la reproduc
ción en Las Novedades ne la semblanza publicada por nosotros acerca del eminente
ajedrecista español Sr. D. Celso Golmayo. Gracias por todo.
Sr. O. A. Brownson—lowa—(Estados Unidos). Acusamos á V. recibí de los
números 152 y 153 del muy apreciado periódico, por V. dirigido, "Chess Journal".
¿No podía enviarnos los números anteriores de 1891, para tener completo el volumen
del año? ¿Hay alguna colección entera de esa publicación, desde que comenzó á cir
cular? Quisiéramos adquirirla por dinero, ó en cambio de algunas de nuestras obras.
Haga el favor de contestarnos por el correo, al apartado 139— Habana (Cuba).
Sr Director de las columnas de ajedrez del "Manchester Evening News"—Man-
chester—Con agrado aceptamos e! cange. Por este correo remitimos á V. los cuatro
primeros números de El Pabro Morphy. Informaremos al célebre Campeon ruso,
del ruidoso incidente sobre el Tchigorin 's Mistake, con motivo del hermoso problema
de Mr. G. Heathcote; y si el Sr. Tchigorin lo desea, en nuestro próximo número apa
recerá la correspondiente respuesta.
EL SR. STEINITZ.
RETRATOS Y BIOGRAFIAS
IV.
1ÍICHAEL IVANOWITOH TCHIGOBIN.
imposible sin noto
Conocido lo es ria injusticia, negar
crito por mu su inmenso mérito
chos hombres á la ciencia de Pa
ilustres en elogio del blo Morphy.
ajedrez, entre ellos
uno de los más no Por tanto, el hom
bles y de carácter bre que llega á ser
más reflexivo y ló una eminencia en el
gico, Benjamín Fran ajedrez, que produ
klin; conocidos los ce ardiente admira
pensamientos de ción con sus com
Cervantes y Larra, binaciones y deduc
sobre el juego-cien ciones asombrosas
cia, (*) pensamien entre las infinitas
tos aunque aislados, que se presentan en
de grande enseñan el tablero; combina
za moral; observán ciones y deduccio
dose la importancia nes que son objeto
que personas nota de estudio por afi
bles conceden á es cionados y maestros
te juego más y más de casi todos los
cada día, de tal mo países civilizados,
do que ya son nu ¿no merece que de
merosos los perió él se ocupe toda la
dicos y clubs exclu prensa, como de
sivamente de aje cualquiera notabili
drez que existen en dad en otra materia?
países cultísimos; es ¿Porqué no?
Miguel Tchigorin, como William Steinitz, como el célebre hijo de Nueva Orleans,
tiene un cerebro privilegiado, es un hombre ilustre, y sabido es que todo hombre ilus
tre es digno de admiración, de respecto, de general aplauso
Muchos son los ajedrecistas de mériio que hoy viven, y á la cabeza de esa pléya
de de maestros en el noble arte se encuentran Tchigorin y Steinitz.
Nosotros consagramos este trabajo al Champion Ruso; otra pluma muy superior á
la nuestra traza en distinto lugar de esta Revista, y de mano maestra, la biografía de
su formidable competidor, en la ardorosa lucha que se está efectuando en nuestra Ha
bana por el título de Champion del mundo.
Tchigorin es el Jefe de la escuela de Morphy, la de juego abierto, atrevido, bri
llante; la escuela romántica según la acertadísima frase del Sr. Vázquez y que usa últi
mamente hablando de nuestro biografiado "The Daily Standard Union" de Brooklyn.
En la ciudad de San Petersburgo y el treinta y uno de Octubre de 1850 nació Mi-
chael Ivanowitch Tchigorin. Edúcose en un colegio de las cercanías de esa ciudad, y
del colegio salió á ocupar un destino del Gobierno en la misma capital del Imperio
Abandonó el destino pronto para dedicarse al juego-ciencia que le seducía. Su primer
(i) Cervantes ha dicho: "La vida humana es una partida de ajedrez." Larra escribió: "Es
preciso acostumbrarse d considerar la vida como una partida de ajedrez', ni los hombres tienen rnds valor
que los muñecos de palo, ni una desgracia es más i/ue una mala jugada."
EL PABLO MORPHY. 75
triunfo en público fué en un torneo handicap del club de Ajedrez de San Petersburgo,
el año 1883, y obtuvo el tercer premio como jugador de segundo órden.
En 1880 ya era considerado como el mis fueite ajedrecista ruso, pues venció en
varios torneos locales al célebre Schiffers (su antiguo maestro, junto con Schuman) á
Ascharin, Clemens, Schmidt, Chardin y otros.
El año 1881 asistió como delegado ruso ni Congreso de Berlín, alcanzando tam
bién el tercer premio en unión de Winawer, con solo medio juego de diferencia res
pecto de Zukertort , que obtuvo el segundo premio. Entonces dijo The Chess
Monthly de Londres. " El representante de Rusia, Tchigorin, se señala como el
" destinado á ocupar un día el primer puesto: desde sus primeros pasos se ha colocado
" ya entre las filas de los maestros. Vaticinamos que el mencionado jugador ruso será
" un campeón formidable en futuras lides."
Véase la lista de los torneos principales en qüe ha tomado parte el hoy Champion
ruso, con el número de sus competidores y de las partidas verificadas:
TORNEO DE BERLIN DE 1881.
1? Blackburne 14 juegos ganados
2? Zukertort 11 „ „ 1 Diez y siete competidores.
„ > Tchigorin io.¿ „ „
ó i Winawer io*4 „ ,, j
Bien es verdad que estos dos juegos habían de ser forzosamente un Gambito
Evans, y una Defensa de los dos caballos, tratándose de dilucidar en el primero el va
lor de la jugada de defensa de Steinitz, D 3 A, y en el segundo la de ataque del mis
mo Sr. Steinitz, C R 3 T.
De todas maneras el triunfo de Tchigorin fué completo, y presta más interés al
actual match que ya está verificándose en esta capital.
Tchigorin es un jugador valiente. Lo mismo juega por el cable, que en Nueva
York, en Viena ó en la Habana.—Doquiera que se le rete allí se dirige, sin ser exi
gente en las condiciones propuestas para la lid, como en su presente match con Stei
nitz, en que las ha aceptado todas, casi sin examinarlas. A su talento une la simpa
tía general. En el Congreso de New York, de! año 1889, era considerado como !a
figura aristocrática de esa asamblea, según The Dayly Standard Union de Brooklyn.
Tchigorin en efecto pertenece á una noble familia rusa. Su mirada es viva y agra
dable.
El azul de sus ojos y el negror de sus cabellos llaman verdaderamente la atención.
Es de mediana estatura y de fisonomía atractiva.
La memoria de Miguel Tchigorin es extraordinaria. En la Habana ha jugado
ocho partidas sin ver el lablero, con jugadores de alguna fuerza y sólo perdió una. Fn
el "Manhattan Chess Club", el año de 1891 admiró por la facilidad con que
conducía ocho y diez partidas también sin ver los tableros. Como escritor y crítico
de ajedrez es muy notable, habiendo dirigido la sección correspondiente del
"Schachmatny Wjestnik" y editado además el Schachmatny-Listok (Revista de
Ajedrez. Ha contribuido eficazmente á la fundación del Club de Ajedrez de la ca
pital de Rusia; país que de p.lgún tiempo á esta parte viene atrayendo todas las mira
das, no sólo porsu situación política, sino también por sus muchos hombres ilustres,
entre los que se encuentn, indiscutiblemente, Miguel Tchigorin.
susini DE ARMAS.
III. NOTAS.
Gambito del Rey, rehusado. (1) Ks claro que las negras no podían
apoderarse del peón de la dama, por la
Habana. Diciembre 17 de 1891. réplica natural de las blancas A x C t
BLANCAS. NEGRAS. (2) F^l Sr. Tchigorin nos ha dicho que
Sr- Tchigorin. Sr. Solmayo- él tuvo en este momento dos jugadas al
1—P 4 R 1—P 4 R parecer mejores: D 4 D ó P 6 D. En el
2—P 4 A R 2—P 4 D último caso si D xC— P x A!
3— C R 3 A 3— P D x P (3) Opina el mismo Sr. Tchigorin que
4 -C R x P 4—A 3 R su movimiento mas correcto en este caso
5—P4D 5—C R 3 A era: TRi R.
6—A 2 R 6— P 4 A
7—A S C t 7—C D 2 D IV.
8—P s D 8—A 4 A (1)
9—O O 9—P 3 T D Gambito Escoces.
0—A 2 R 10—P 4 T R
1—P4 A 11—D 2 A Habana, Diciembre 17 de 1891.
2—C x C 12—D x C
3—A 3 R 13— C 5 C BLANCAS NEGRAS
4—D 2 I) 14— A 2 R (Sr- GclmayO)
5—C3 A 15— D 2 A (Sr- Tchigorin)
6—A x C 16—P x A 1—P4 R 1—P 4 R
7—T D 1 I7_0 O O 2—C R 3 A 2—C D 3 A
8— P 4 C 18—P x P 3—P4 D 3— Px P
9—C 4 T 19—T R 3 T 4—C R x P 4—A4A (1)
20—P 5 A 20—D 4 T 5- A3R 5— D3 A
21 —C 6 C t 21 R 1 C 6—P 3 A D 6—r: r 2 r
22—c 4 A 22— D 4 C 7—A Re C 7—P3 D
23—c S R (2) 23— A x P 8—0 O 8—0 O
24—c P A 24— D 3 C 9—P 4 A R 9—A 2 D
25—A A (3) 25— D x A t 10—R 1 T 0—C x C
26—R T 26— P 6 R 1 1—A x C 1—A R x A D
27—D C 27—T D 1 R 1 2—A x A 2—A 3 C
28—C T 28—P x C 13—C 2 D 3—T D 1 D
29—T R 29—D 7 A 14—A 4 T 4—P4D
30— D x D 30— A x D 15—P 5 R 5—D 3 T
31—T D 4 D 31—P 7 R »6—D 2 R 6—C4 A
32—T D x PC 32— A 8 D 17—TR3 A 7—C s T
33—T D 4 D 33—R 2 A 18—T R 3 T 8— D x P
34—R 1 C 34—R 3 D 19—P 3 C R 9—D x A
35—R 2 A 35—T 1 A D 20—T R x C 20—D 7 A
36 RjC 36— P 4 T R 21—T D 1 A R 21—T D 1 R
37—T D 2 D 37—T 4 A 22—TR 4 A R 22—T D 2 R
38—R 4 T 38—T x P 23— P6R 23—P 3 A R
39—TxTt 39— R * T 24—P 4 T R 24—T R 1 R
40— P 5 A 40— R 3 D 25—P 5 T 25—T D x P
41—R x P 41—R 2 R 26— D 4C R 26— D x C
42—R x P 42 - P 4 C 27—P 6 T 27—P 3 C
43—R 4 A 43-P 5 C 28—D 3 A 28—T D 8 R
44—R 3 R 44—R 3 A Abandonan (*>•
45— P4C 45- P4T NOTAS.
46—T x P 46—A x T
47— R x A 47-P 5 T (1) Movimiento predilecto, en esta
48— R 2 D 48— P 6 C apertura, del malogrado capitán Macken-
49— P x P Abandonan. zie.
EL PABLO MORPHY. 79
(2) Nada hubieran logrado las blancas aquella república de generales simpatías,
con seguir 28—T x P, por que las negras por las apreciables dotes que les recomien
habrían respondido: D x P T t. dan. El Sr. Vicario, uno de los más
fueites amateurs mexicanos, es un brillan
EESUMEN. te partidario de la Escuela Antigua, ó sea
Partidas ganadas. la de Tchigorin.—Al dar á ambos caba
Tchigorin 3 lleros, la natural bienvenida, nos creemos
Golmayo 1 en el deber de hacerla extensiva á sus dis
tinguidas señoras esposas, que les acom
Total de partidas jugadas.... 4 pañan en el viaje. Todos están hospeda
dos en el magnifico "Hotel Pasaje".
LA PRIMERA BATALLA
entre los Sres. Tchigorin y Steinitz.
No podía haber comenzado el año de 1892 con mayor entusiasmo. Los explén-
didos salones del Centro Asturiano, cuajados de centenares de personas notables, y
adornados con elegancia y lujo, eran el núcleo de la general ansiedad. Por las am
plias escaleras subían y bajaban militares de alta graduación, abogados, médicos, perio
distas y banqueros. ¿Quién ganaría la primera batalla: ¿el maestro de Bohemia, hoy
ciudadano americano, ó el fascinador enviado de San Petersburgo? Esto se lo pre
guntaban todos. Surgían dudas sobre cual de los dos obtendría en definitiva la corona
del Championship del ajedrez universal, y los reporters de los más célebres periódicos ex
tranjeros, con el carnet preparado y haciendo uso de claves especiales, comunicaban
de hora en hora al mundo entero, por medio de los alambres telegráficas, los más sa
lientes detalles de aquellos preparativos. Algunas damas aristocráticas obligaban á la
circunspección, con la suavidad de sus perfumes y el crujido de las sedas En lo alto,
los escudos de armas de la Nación Española y de la heroica Provincia de Pelayo, lucian
brillantemente sus enérgicos colores de grana y oro, mezclados con los tintes blancos
y celestes de la altiva enseña tremolada en Covadonga. Aquello parecía un sueño
de las Mily una noches, digno solo del pincel de Salvator Rosa ó de la paleta de Rem-
brandt. En larga y muy rica mesa, cubierta de flores y de transparente cristalería,
los dulces, los vinos y los sandwich, ofrecidos al Club de Ajedrez de la Habana,
por la caballerosa Junta Directiva del Centro Asturiano, aumentaban la encan
tadora alegría de la fiesta. Preciosa música sonaba en el inmediato Parque de
Isabel II. ¿Para que narrar los oportunos y expresivos brindis pronunciados en el
fraternal festín, por el Sr. D. Celso Golmayo, como Presidente del Club de ajedrecistas,
y por el eximio poeta D. Saturnino Martínez, en representación del Centro? Cual in
menso Minotauro, dispuesto á devorar las armas de los gladiadores, erguíase en me
dio del salon, un colosal tablero en donde habían de reproducirse con grandes figuras
rojas y negras, los movimientos que en su mesa especial ejecutasen los dos eminentes
adversarios. Para ello se veía preparada elegante escalinata; y enteramente al fondo
de la anchurosa sala, bajo un dosel de banderas, de cuadros y de gasas, destacábase el
So EL PABLO MORPHY.
tenga efecto el match, durante el progreso de cada juego, y arreglarán todas las cues
tiones que puedan surgir entre ambos jugadores. En caso de que los padrinos discor
daren y que cualquier jugador sostenga que la decisión es contraria á las condiciones
del match, apelará de ella al Juez del campo, cuyo fallo será decisivo.
17? Los juegos tendrán lugar en un deparlamento cerrado, que será accesible
solo para los jugadores, los padrinos ó sustitutos y el representante del Club, bajo cuyos
auspicios se celebra el match.
18o Se ruega á los espectadores guarden el más estricto silencio y se abstengan
de todo aplauso ó señal de desaprobación.
19? Los movimientos de cada juego se repetirán en un tablero grande á cierta
altura y los espectadores podrán usar tablero de bolsillo con el fin de seguir los juegos,
pero no analizarán ni discutirán las jugadas durante el progreso del juego.
20? Ningún jugador podrá ausentarse del salón durante las horas del juego, sino
por un tiempo razonable. El jugador que haya hecho su jugada podrá pasearse den
tro del departamento, de manera que no distraiga la atención de su contrario. El ju
gador que por cualquier motivo se exceda en el tiempo límite, perderá el juego, que será
anotado en favor de su contrario. El reloj del jugador que no se presente á la hora
señalada para comenzar el juego ó para continuar el aplazado ó que se ausente durante
el juego, se echará á andar tan pronto como llegue su turno de jugar, del mismo modo
que si estuviese presente en el salón, y el tiempo de su ausencia será considerado co
mo si lo hubiese consumido delante del tablero.
21V El jugador á quien le toque jugar á la hora que se deba aplazar el juego,
pondrá su jugada dentro de un sobre que se sellará y entregará en manos del padrino
de su contrario. La jugada hecha así deberá escribirse con claridad en un lugar
saliente del score y se transcribirá después de la manera usual al reanudar el juego,
cuando la cubierta que contiene la jugada sea abierta por el Representante del Club,
á la hora señalada para continuarlo.
22? Cualquiera jugador que analize una partida pendiente moviendo las piezas
sobre el tablero, ó mentalmente en consulta con otro, perderá el juego é incurrirá ade
más en una multa que será determinada por el Juez del Campo, según la regla 25. La
simple inspección del tablero ó de algún diagrama que presente la posición aplazada,
no constituirá falta y á ambos jugadores les será permitido colocar de nuevo las posi
ciones para ejecutar trabajos editoriales ó simplemente para observar.
23 Habrá por lo menos dos juegos de relojes para regular el tiempo límite, que
serf'n corregidos y observados por los dos padrinos antes de empezar el match, y si se
encontrase algún reloj defectuoso durante un juego, después de marcar un tiempo con
sumido ya por cualquiera de los jugadores, deberá reemplazarse por otro que se halle
en buenas condiciones.
24 Los juegos del match se regirán por el Código de Leyes, publicado en la úl
tima edición de Handbuch alemán, con la sola excepción de que si ambos jugadores
repiten la misma serie de jugadas seis veces consecutivas, cualquiera de las partes po
drá pedir se declare el juego tablas.
25 Cualquier acto de un jugador que injustificadamente ofenda á su contrario,
se castigará con una multa que impondrá el Juez del Campo, ni menor de diez pesos
ni mayor de cien.
26. Por toda violación de las condiciones estipuladas, que pueda demorar el
principio ó progreso de la lucha ó que de cualquier otro modo perjudique los intereses
6 que tienda indebidamente á aumentar los gastos de cualquiera de los jugadores, da
rá lugar á la imposición de una multa por el Juez del Campo de 10 á 100 pesos, si así
lo exije el contrario.
27. Por cualquiera violación de las reglas ó condiciones, podrá el Juez del Cam
po imponer una multa de 5 á 50 pesos. Todas las multas se pagarán desde luego
al Juez del Campo y pertenecerán al jugador contrario.
28. Los padrinos sólo tomarán parte y resolverán las cuestiones, cuando lo pi
dan los jugadores y el Juez del Campo resolverá á instancias de cualquiera de los ju
gadores ó de sus padrinos; pero deberá darse una copia exacta de la reclamación ó
ÉL PABLO MORPHY 83
queja hecha al Juez, al contrario respectivo, quien tendrá tres días para contestar y
al recibo de la contestación decidirá el Juez del Campo. Cualquier cargo frivolo ó
sin fundamento puede sin embnrgo, á instancia de la parte acusada, ser resuelto por el
Juez, según la regla 25.
29. Toda correspondencia oficial entre ambos jugadores y el Club de Ajedrez
de la Habana, será tomada en consideración por el Juez del Campo, al objeto de in
terpretar las condiciones del match.
30. En cumplimiento de la re^la 7* se acuerda que las apuestas de ambas partes,
se depositen en manos de la Directiva del club de Ajedrez de la Habana, debiéndose
hacer la entrega de ellas únicamente por orden del Juez del Campo. —De conformidad.
IViliiam Steinitz. —M. Tchigorin.— Celso Golmayo.
Es una fiel traducción del original inglés.
j. j. MACHADO.
sus profundas investignciones acerca del 135, tomo l, de nuestro Análisis del Juego
golpe D 3 A. de Ajedrez, tercera edición. El plan adop
¿Es esto una abdicación práctica y téc tado por el Sr. Steinitz, de A 5 C, no pue
nica del Sr. Steinitz, respecto de un par de ser presentado como bueno, en nuestra
ticular que él había preconizado tanto en humilde opinión.
su magistral obra The Modern Chess Ins Nota n" 3. Habríamos preferido 12 —
tructor? CR 3 A, ó 12—CD 3 C. con ánimo de
El Sr. Tchigorin cree que si bien para continuar CR 2 R, enrocando después.
jugar por telégrafo, no es buena la defen Nota fl" 4. Pal vez lo menos malo
sa deD 3 A en el Gambito Evans, encam hubiera sido P x P. No era conveniente
bró es excelente en una contienda frente para las negras A 2 A. Ejemplo. 15—
á frente del tablero, cuando solo se puede A 2 A— 16—P x P— 16—A x P— 17—
disponer de poco tiempo para pensar las P 5 D !.
jugadas, por que entonces es sumamente
difícil para el primer jugador, ó sea el que Nota n" 5. ¿P°r qué no P 3 CR?
dirija el ataque, ejecutar los movimientos Nota ti" 6-—Bien jugado, pero también
más precisos y exactos que correspondan. parecía ser muy fuerte: 18 — P6 R, por que
En cuanto á la contestación aceptada si 18—P x P, 19—C 5 R, y si 18—D x P
en la presente partida por el Sr. Steinitz, 19—T 1 R.
no nos atrevemos á censurarla, porque si
se prefiere la de CR 3 A (muy del agrado Nota n" 7- — Lo natural era 18—
de Morphy) se corre grave peligro de caer T D 1 C ! Si las negras, en lugar del
en el terrible Ataque Richardson, ventajoso movimiento del texto hubiesen jugado
en todas las variantes esenciales para las 18— P 3 C, podía haberse presentado la
piezas blancas. Dicho AtaqueRichardson siguiente bonita variante: 18 — P 3 C —
puede ser consultado en nuestro Análisis 19-C R 5 C-19-R 2 C-20-C D x P A R
del Juego de Ajedrez (tercera edición), to —20—C x C—21— P 6 R &.
mo I, página 136.
Nota n" 8. —El distinguido miem
Nota n" 2. El Reverendo T. C. San- bro del Club de ajedrez de la Habana, se
ders recomendaba 7 A 2 D !, cuyo movi ñor Dr. D. Carlos Finlay, cree que el se
miento, analizado por los Sres. W. T. Pier- ñor Steinitz podía haberse defendido mas,
ce y C. E. Ranken, se puede estudiar en con esperanza de tablas, ejecutando el cu
The Chess Player's Chronicíc, de 1877 y rioso procedimiento que sigue:
1878. Véanse las siguiente variantes:
7—A 2 D ! Posición al verificar las negras el movimiento 19-
8—PxP 8— PxP NEGRAS. (Sr. SI E1NITZ).
9— D s D 9—D 2 R
10—A3T 10— D3A
1 1 —A 5 C 1 1 —A 3 C 1
12 — AxC la —Ax A
13— DxPRt 13— DxD ü i ■u
14- C x D 14—A 4 C
15—TiR 15—P3AR rs
16—C 3 A 16—OOO(M)
í
7—A 2 D !
8-P xP 8— P x P H I!
9- D 5 D 9—A3 R
10— D x D t 10—T x D .1., é
1 1 —A x A 11— P x A :P
12 —A 2 C 12— CR 3 A ■ i
13—CD 2 D 13—O O (M)
es
.a 1
Para mayor y más detenido examen del
Evans Sanders, recórrase á la página 1SLANCAS. (Sr. TCHIGORIN).
EL PABLO MORPHY.
19— C R x? D PARTIDA. II.
'o- -C x C 20—A x C
21- -Dx A 21 —C 4 A ! CENTRO ASTURIANO. -HABANA.
22- -D 4 A R 22 —D xC Enero 3 de 1892.
23- -P 6 R 23— D x P
24- -T D x P 24— P 4T R (M).
APERTURA RUY LOPEZ,
19—C R x P D
20- -C xT 2o— C D 4 A BLANCAS. NEGRAS.
21- -P 6 R 21— D x P
22- -C R 5 C 22— D 7 R Sr. Steinitz- Sr. Tchigorin.
23" -C R 7 A(») 23— Dx D
24- -T Rx D 24—C R 7 R t 1— P4 R 1— P 4 R
25- -R 1 A 25—C R6AD& 2—CR 3 A 2—CD 3 A
3—A 5 C 3—CR3 A
(*) Si 23-C D 7 A-23-P 3 T R. 4— P3 D (1) 4—P 3 D (2)
5— P3A (3) 5—P 3 CR
19—C R x P D 6- CD 2 D (4) 6—A 2 C
20—C x T 20—C D 4 A 7—CD 1 A 7—O O
21—P 6 R 21—D.x P 8—CD3R(5) 8— P 4 D (6)
22—C R 5 C 22—D 7 R ! 9— D 2 A 9-P3TD
23—C R 7 A 23—D x D 10—A4T 10—PxP(7)
24—T I) x D 24— C R 7 R t 11—P x P 11—CR2 D
25— R 1 T 25—C D 3 T 12—OO 12—CR 4 AD
26—C x C 26— P x C 13—A x C 13— P xA
27—A 2 C 27—P 5 D etc. 14—TR 1 D 14— D 2 R
15—P 3 CD 15—C 3 R
Nota fl" 9-— Igualmente habiían per 16—CD 4 AD 16—C 5 AR
dido las negras con C D 3 C. Es facil de 17—A x C (8) 17—Px A
mostrarlo: 23—C D 3 C —24— P 4 C— 18—CR 4 D (9) 18—P 4 AD
24—C R x P D—25— P 5 C t etc 19— CR 2 R 19- P 4 CR!
20—TR 1 R 20 -A 2 C
Nota n" 10.— Verdaderamente funes 21- P 3 A 21— TD 1 R
ta resultó esta jugada para el Sr. Steinitz, 22—TD 1 D 22— P 5 C (10)
pero tampoco tenía ya nada bueno que 23—CR x P 23— D 4 C (11)
hacer. Si 24—R 2 C— 25 — D 5 C ! y si 24—CR 5 D (12) 24—P x P
24 —C x A —25 —C 5 C t—25— R 2 A— 25—TR3R(i3) 25— P4 AR(i4)
26— D 5 R etc. 26—P 5 R 26—P 5 A
27—TRx P 27—A x P
Notan" 11- — El público llegó á creer 28—TR 2 A 28—P 6 A!
que las negras hubieran prolongado aquí 29—CD x A 29—TD x C
la resistencia, con D 2 D. 30— P4A(IS) 30—A x C
31—PxA 31—TR 1 R
Nota n" 12-— Movimiento precipitado
por falta de tiempo, en razón de estar ago Y la partida fué abandonada como ta
tándose las dos horas señaladas para las blas con el consentimiento de los dos ad
primeras 30 jugadas. La defensa, aunque versarios, por indicación del Sr. Steinitz.
ya estéril probablemente, podía haberse
alargado de este modo: 30—R 2 A—31 NOTAS POR A. C VAZQUEZ.
— D x P T t-31—T 2 C—32—T x c t
32—A 3 A etc. (1) Ataque favorito de Anderssen.
El Sr. Tchigorin jugó toda esta partida (2) Respuesta ideada por Paulsen, pa
con admirable corrección y con su brillan ra desarrollarla en combinación con un
te estilo de siempre. Fianchetto del Rey.
(3) The International Chess Magazine
86 EL PABLO MORPHY.
dice que en esta situación, Anderssen acos No podría afirmarse que este juego
tumbraba jugar inmediatamente A x C. sea un buen spccimen de bellezas impre
El movimiento del texto se hizo por pri vistas y de estrategias deslumbradoras.
mera vez en el match Steinitz—Blackbur- Sin embargo, los amateurs obstendrán mu
ne, de 1876. cho provecho en estudiarlo con deleni
(4) Steinitz contra Zukertort, en la dé miento, por que casi todos los movimien
cima-sexta partida de su match, de 1886, tos de la partida fueron correctos y difíci
prefirió 6 — P 4 D, según lo ensayado les, habiendo estado ambos jugadores en
por Rosenthal contra el propio Zukertort, peligro de perderlo, si no hubieran proce
en el match de 1880. dido con exactitud y consumada previsión.
(5) He ahí la excelente posición (ó PARTIDA III
sea C 3 R¡ conocida con el nombre de
El caballo de Winawer. CENTRO ASTURIANO.
(6) Un enérgico movimiento de con Habana Enero 5 de 1892.
tra-ataque.
También parecía bueno para las negras GAMBITO EHNS,
CR 4 T, á fin de avanzar dos pasos, en
seguida, el peón del Alfil del Rey, ó to BLANCAS. NEGRAS.
mar la posición de C 5 AR.
(Sr. Tchigorin.') (Sr. StefaüU.)
(7) P 5 D, en lugar de la jugada del
texto, se prestaba á mucho ataque. 1— P4R 1—P 4 R
(8) A primera vista parecía que la me 2—CR 3 A 2—CD 3 A
jor continuación para las blancas era A. 3 3—A 4 A 3—A 4 A
T, pero bien analizado el punto se ve que 4— P 4 CD 4—A x PC
las negras replicarían entonces P 4 A, te 5—P3 A 5—A4T
niendo después al Rey blanco., con la 6—OO 6—P 3 D
constante amenaza del caballo, en inmi 7— P 4 D 7— AS CR(i)
nente peligro de perecer. Obró, pués, 8—A 5 CD 8—P x P
prudentemente, el Sr. Steinitz, al apode 9— Px P 9-A 2 D
rarse desde luego del caballo invasor. 10— A 2 C 10—CR 3 A
(9) Inexplicable pérdida de tiempo. 11 - CD 3 T 11—OO
12-P5 D 12—CD 2 R
(10) Elegante y enérgico golpe, pero - 13—A x C 13—P x A
prematuro en nuestro concepto. Creemos 14—A x A 14— D x A
que el Sr. Tchigorin, teniendo notoria 15— CD 4 A •5-A 3 C
ventaja de posición pudo haber preparado 16—CR 4 T 16—R 1 T
reposadamente las piezas, y perfeccionado 17—D 3 A (2) 17— P4 AR
su plan de victoria, antes de lanzarse al 18—C x A (3) 18—PT xC
asalto. Por ejemplo, haber jugado con 19—P x P 19—TD ST!
anterioridad R 1 T. 20— P 3 C 20—P 3 AD ! (4)
(11) Si 23—P x P—24— P x P—24— 21— P x P 21— P x P
D 3 A—25— D 2 D—25 — A 3 T—26 - 22—TR 1 R 22—C 4 D
D2CRt 23— D S T 23—TR 1 CR
(12) No alcanzamos á comprender los 24— R 1 T 24—C 3 A
motivos que pudo haber tenido el señor 25—D 3 A 25—P 4 D
Steinitz, para no preferir 24—P 3 CR. 26—TR 2 R 26—P 5 D!
27—TD 1 R 27— D4 D?(S)
(13) El movimiento exacto. 28 TR 7 R 28— R 2 C ? (6)
(14) Quizás habría convenido á las 29 R 1 C 29— D x D
negras haber jugado en este momento: 30 C x D 30—C4 D(7)
25—A 5 D, por que si 26 — P x A— 26— 31—TR 7 D 31 - P 6D
AxC. 32—TD 1 D 32—TR 1 R
(15) Forzado. Si 29—C x P— 29— A propuesta del Sr. Steinitz fué decía
T 2 R. da tablas la partida.
EL PABLO MORPHY.
asas
EL PABLO MORPHY
í DE US DEMAS OBRAS DE AJEDREZ DEL Sr, VAZQUEZ.
HABANA.
Casa del autor, calle del Tejadillo, número 43.
Librería del Sr. D. Manuel Ricoy, Obispo 86. '
y Librería del Sr. E. W. Wilson, Obispo 43.
REPÚBLICA MEXICANA.
Mc'xico.—Sr. D. José Benavides, San José el Real, número 8.
Veracruz.—Sra. Viuda de Carredano.
FRANCIA.
París— Sr. D. Numa Preti. Rue Saint Sauveur, 72.
ESTADOS UNIDOS.
Neivport (Kenhuky) — Mr. Will. H. Lyons.
AVISO IMPORTANTE.
Con verdadera sorpresa hemos sido informados por un amigo nuestro residente en
la Península, de que un librero de Madrid se ha pjrmitido anunciar nuestra tercera
edición, de la referida obra, con el caracter de cuarta edición. Como esto pudiera dar
lugar á que personas que ya posean la edición anterior , vol vieren á comprar la obra,
creyendo que contrnga mejoras de trascendencia, cumple á nuestra buena fé declarar
—a reserva de poner muy pronto en claro lo ocurrido v ejerciiar legalmente los dere
chos que nos correspondan —que á nadie hemos autorizado para publicar ó vender esa
supuesta cuarta edición del Análisis del Juego de Ajedrez, escrito por nosotros; pues aun
que ya tenemos preparados los materiales para imprimir una nueva, voluminosa v muy
completa edición del mencionado libro, esto no podremos efectuarlo hasta 1893, á
cjusa de compromisos que contrajimos con un comerciante al cual vendimos en esta
capital una cantidad bastante considerable de la misma obra. Se nos dice que el men
cionado libiero de Madrid es persona de reconocida moralidad y que seguramente ha
brá procedido por equivocación. Nos place admitir la exactitud de esa circunstancia,
pero esto no obstante veremos con agradecimiento que los periódicos de ajedrez, y aun
los que no lo sean, se sirvan reproducir la presente aclaración, para general conocimien- (
to del público, tanto en Europa como en América.
ANDRÉS CLEMENTE VAZQUEZ.
REDACCION Y ADMINISTRACION DE "EL PABLO MORPHY"
Retrato del Sr. W. Steinitz, Champion del Mundo.—Su biografía, por A. C. Vázquez.
—Solución de los problemas del número anterior. — Problema núm. 9, por el Dr. Vallejo
(de México).—Id. núm. 10, por D. F. Rivera Fuentes (de la misma ciudad) —El
Centro Asturiano.— Nuevas publicaciones.—El "Novoye Uremya". —Her J. Berger —
Noticias generales.—Correspondencia - Opinión de la prensa extranjera de ajedrez,
acerca de las obras del Sr. Vázquez.—El Club de Ajedrez de México. — El señor
Steinitz.—Retrato del Sr. M. Tchigorin, Campeón de Rusia. — Biografía del m¡srno
por el Sr. Susini de Armas. — Primeros combates del Sr. Tchigorin.—Cuatro partidas
sueltas ó casuales entre el Campeón Ruso, y el Campeón español, Sr. Golmayo.—
Distinguidos comisionados del Club de Ajedrez de México.— Lugar de recibo del Sr.
Tchigorin.—La primera batalla entre los Sres. Tchigorin y Steinitz.—Supuesta ruara
edición del Análisis del juego de Ajedrez, por A. C. Vázquez —Match Steinitz
Tchigorin. — Las primeras cuatro partidas, con diagramas y notas por el Director de
El Pablo Mohphy.— Bases de la gran contienda Steinitz Tchigorin, firmadas en la
Habana como Código para la lucha, el 31 de Diciembre de 1891, y traducidas del
original ingles, por D. J. J. Machado
Volumen I. Habana, 15 de Febrero de 1892. Guaderuo V.
EL PABLO MQRPHY
4m.
w§Tm
p
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ér:
m
BLANCAS
Salen esta* y dan mato en ti-VB (3) jugadas.
Dirección y Administración: Calle del Tejadillo mím. 43, Habana
(Cuba), ó apartado núm. 139 en la Administración General de Correos.
Condiciones de la suscripción.-El Pablo Morphy aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones por semestres adelantados: en la
Habana, $1-50 plata, y en el interior dela Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. plata, y fuera de ella 35 cts.
ni HABANA
La Propaganda Literaria
1 ZULUETA. 28.
5& 1892.
I
OBRAS DE AJEDREZ POR 1. 6. VAZQUEZ.
EDICIONES AGOTADAS.
INÉDITA.
El Ajedrez Ciclónico.—Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de ¡os gran
des maestros, sin otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?(
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XIX.— Dos partidas de cada uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (la más elegante é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
escogidas y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vazquez.
NÜM. .5 Habana, 15 de Febrjro de 1892. VOL. I.
EL PABLO
Dirección y Administración: calle del Tejadillo núm. 43, ó apartado núm. 139, en la Admón, Gral de Correos. -Habana.-Cuba
Hemos tenido la honra de recibir una carta del célebre problemista de New Jersey
(Estados Unidos), Mr. Eugene B. Cook; la cual, traducida por nosotros, dice así:
"Hoboken, Enero 12 de 1892.
"Sr. Director de El Pablo Morphy.
Estimado señor:
.'En la página 48, nú.ñero III, de vuestra revista mensual de ajedrez, se incluye un
problema en 8 jugadas, que se atribuye á Mr. Morphy. El error ha sido en Vd. natural,
por que varios escritores le han dado motivo para tal suposición. En la cubierta del libro de
Dufresne:"/!z«/ Morphy 's Schachspíel kunst.-Berlín— 1864", apareció dicha posición, ofre
ciendo el editor de la obra, Mr. S. Mode, tres premios, por las primeras soluciones del
problema, con tal de que le fuesen remitidas antes de cierto tiempo fijado para ello; pre
mios que consistieron, el primero en libros de ajedrez, á elección del premiado, por valor
de diez thalers, y los otros dos en libros que valiesen cinco thalers, para cada uno. Fué
también reproducida la mencionada posición en el libro de Zukertort:" Sammhtng des
Auserlesensten Schach-auf^aben—Berlín— 1869."
"Ignoro en cuantas otras publicaciones puede haber aparecido el problema en
cuestión. Hace algunos años escribí á un periódico con el objeto de aclarar el punto.
La primera aparición en la prensa, de ese problema, fué con el número 200, en el New
York Allñon, a principios de 1853, figurando el nombre de su compositor (E. B. C), al
pié del mismo problema! Parece curioso que se le hubiese atribuido á Morphy. Las
columnas de ajedrez del Albion, en 1853, estaban redactadas por Mr. Charles H. Stanley,
Champion de ajedrez, americano, en aquella época, cuando P. Morphy solo contaba 16
años de edad.
" En la versión original no había Peón negro en la sexta casilla del Caballo de la Dama,
cuyo Peón afea el conjunto de la composición.
Una vez oí decir á Morphy que él solo había compuesto un problema, auneme sin
intención de publicarlo, porque lo hizo conversando con algunos amigos, bajo la base de
una idea cuya estructura era poco problemática (a little problematic titea I. Aquel ensa
yo fué recordado después por alguno de los testigos presenciales, y es como sigue:
NEGRAS.
& ¿20
í m
mm i sf H:
5.
BLANCAS.
Las blancas salen y dan mate en 2 jugadas.
De Vd. atento servidor.
Eugene b. COOK.
Agradeciendo debidamente al ilustre Mr. Cook las anteriores explicaciones, solo
tenemos que añadir que el problema en 8 jugadas, de que se trata, lo copiamos
exactamente como apareció en esta revista, de la página 318 [año de 1864] de la
ÉL PABLO MORPHY. 93
conocida y muy acreditada publicación que dirigieron en Berlín los profesores A. Ander-
ssen [contemporáneo, amigo y admirador de Morphy] y G. R. Neumann, bajo el título
de Neue Berliner Schachzeitung; en cuyo volúmen apareció marcado dicho problema
con el número 114. En esa publicación se dice que la referida composición era de Von
Paul Morphy. Nos parecen, sin embargo, de mucho peso, las razones aducidas en su
favor por Mr. Cook, y solo nos permitiremos agregar que si el maestro de Hoboken te
nía la conciencia de que el mencionado problema era completamente suyo, debió no solo
hacerlo publicar con sus iniciales, sino decirlo y sostenerlo claramente, y hasta haberlo
incluido como de su propiedad en la famosa colección de problemas americanos que se
editó en New York, en 1868, con la denominación de Amrriain Chess Nuts, por el mis
mo Mr. Cook y los problemistas, igualmente, muy distinguidos, Sres. W. R. Henry y C.
A. Gilberg.
En cuanto al problema en dos jugadas que queda copiado arriba, nos parece tan
débil y de tan escaso mérito, que con sobrada razón afirma Mr. Cook que el gran
Morphy jamás abrigó la intención de hacerlo conocer del público, á causa de que ese
problema [un pasatiempo entre amigos] tenía en realidad el caracter de un proyecto ó
ensayo para cualquiera otra combinacion de mayor profundidad.
Ni por un momento podemos dudar de todo lo que afirma en la precedente carta,
una persona tan respetable y distinguida como Mr. Cook, pero no deja de ser raro que
Mr. Morphy, habiendo estado en Europa en los primeros meses de 1864,—todavía en
el pleno uso de sus facultades mentales—no hubiese dicho por la prensa que el problema
controvertido no era suyo, al ver que lo reproducían con su nombre las publicaciones diri
gidas por Dufresne y Anderssen. Pablo Morphy llegó á la Habana, de paso para los
Estados Unidos, y de regreso de Erancia, en Febrero de 1864, y aunque ya se hubiese
hallado en Nueva Orleans cuando, en el mismo año, se insertó dicho problema en las re
vistas expresadas, debe suponerse que él recibiría y leería esas revistas ó que las conocieren
sus amigos, y que por lo tanto se hubiese podido efectuar la rectificación ó aclaración á
que hacemos referencia, por orden del mismo Morphy. No obstante todo lo dicho, los
argumentos de Mr. Cook parecen irrefutables, y queda por nuestra parte admitido que el
bello problema con que engalanamos la portada del núm. II, y que reprodujimos en la
página 48, núm. III de El. Pablo Morphy, es original del justamente afamado oampo-
sitor de Hoboken.
MATCH STEINITZ--TCHIGORIN.
43—P4 A 43—TR 4 C
44—R 2 C 44—TD 3 D
Jugada en los salones del Centro Asturiano. 45—R 3 A 45—TR 5 C (14)
46—P 5 A ! 46—P x P
Habana, Enero 10 de 1892. 47—TR 6 AR 47—TD s AR t
48—R 2 C 48—TR 7 C (15)
GAMBITO EVIU. 49—C 1 D 49_TR 7 D ?
50—TR x C 50—TR x C
BLANCAS. NEGRAS. 51—TR 6TD S.-TR7 D
52—TD 3 AR 5 2—T x T
Sr.Tchigorin Sr Steinitz 53—R x T 53—T 6 Dt (16)
54—R 4 A 54—P6T
1— P 4 R 1—P 4 R 55—R x P
2—CR 3 A 2—CD 3 A Y á propuesta del Sr. Tchigorin la parti
3—A 4 A 3—A 4 A da fué abandonada como tablas.
4—P 4 CD 4—A x PC NOTAS POR A. C. VAZQUEZ.
5—P 3 A 5—A 4 T Nota fl" 1 . — Mr- Seguin, el notable re
6—( ) O 6—P 3 D (1) dactor de las columnas de ajedrez en The
7—P 4 D 7—AD 5 C (2) Times Democrat de New Orleans, hace ob
8—A 5 CD (3) 8— P x P servar que habiendo desistido el Sr. Steinitz
9— P x P 9—A 2 D de su defensa favorita D 3 A, ha recurrido
10—A 2 C 10— CR 3 A á laantiquísima jugada de P 3 D, propuesta
11—CD 3 T 11—0O en la primera edición del Handbuch (1843)
12—P 5 I) 12--CD 1 C y adoptada en sus combates por el gran
13—TD 1 A (4) 13—A x A Labourdonnais y el mismo Capitán Evans.
14—CD x A 14—CD 2 D Nosotros creemos que la idea del señor
15—D 2 A 15—P 3 TD Steinitz fué sorprender á su adversario,
16—CD 4 D 16— P3CR (5) apartándole precisamente de los procedi
17—CD 2 R 17—TR 1 R mientos y análisis modernos, conocidos á
18—CD 3 C ,8—TD 1 A la perfección por el admirable Champion
19—D 3 D 19—D 2 R ruso.
20—D 3 T(6) 20—A 3 C Nota n" 2. —El ilustre maestro Mr. Po-
21 —D 3 A 2 1—P 3 A llock, Director de la sección de ajedrez en
22—CR 4 D 22—A x C The Baltimore Sunday News, dice que éste
23— D x A 23—P x P débil movimiento fuéjugadoporMacdonnell
24—P x P 24— D 4 R contra el Capitán Evans, en la infancia de
25—D 4CD 25—D x P ese gambito. Nosotros en la página 64 del
26—TD 1 D 26—D x PT (7) folleto intitulado: "Ajedrez contemporáneo.
27—TD x P 27—TR 3 R —Mr. Blackburne en la Habana y el
28—A x C 28—C x A Cable-Match Steinitz- Tchigorin, -hicimos
29— D x P 29—TD 1 R (8) mención de que cuatro ó cinco años des
30—TD 1 D 30—P 4 TR pués de haber sido inventado el Gambito
31—TD 1 T 31—Ds A (9) Evans, se publicó en París (en 1837), la
32—TR 1 AD 32—D 5 AR(io) Encyclopédie des Echées en francés, inglés,
3 T 33—P 5 TR alemán é italiano, por M. A Alexandre, y
34—C 1 A 34—TR 7 R que en ella apareció el siguiente modus ope-
35—D 3 AR! 35—D x D randi para la continuación de la apertura de
36—P x D 36—C 4 D (11) que se trata, recomendado por Mr. Walker:
37—TR 4 A ! 37—TR 7 C (12) 7—CR 3 A
38—TD 1 D 38—C3 C 8- D 4 T 8—CR x P
39—TR 6 AD 39—P 4 T 9-A 5 D 9—A x P
40—C 3 R 40—P 5 T 10—A x CDt 10—P x A
41—TD 3 D (13) 41—TD 1 T 1 1 —C x A 1 1 —C x C
42—TD 3 T 42—TD 1 D 12—D x PA t &c.
EL PABLO MORPHY. 95
O de otro modo: Nota n" 11— Muy débil—C 4 T ! era
7—P x P el movimienjo de ganar. Nada les impor
8— P x P 8— D 2 R taba á las negras perder el peón de la to
9- P5D 9—CD 4 R rre de la dama, supuesto que doblando las
10- -C x C 10— D x C torres en la séptima hilera; situando el Rey
1 1—D 4 T t 11—A 2 D en la segunda casilla del caballo y esperan
12—D x AR 12— D x T do la oportunidad de dar el golpe: C 5 A,
13—C 3 A 13— P 3 CD á las blancas no les quedaba salvación po
14-D3T (Mejor.) sible.
Nota n" 12 —Casi forzado, por que si
Nota n" 3 —La siguiente variación 37-P4 C-38-T S A.
ocurrió recientemente en Baltimore: 8—
D4T—8— Px P—9— Px P— 9—A 2 D— Nota n" 13. — Las tablas son hábilmen
10— P 5 D— 10—CD 4 R— 11— D x AR te buscadas por el Sr. Tchigorin. Su larga
— 11—CD xA— 12—D 3 A- 12—D 3 A y obstinada defensa en este difícil final de
13—D x C—13—D x T-14-CD 3 A— partida, es una verdadera chef d' auvre.
14 — P 4 CD— 15 — D 3 C &c., con posi Nota n" 14. — I*al vez hubiera sido
ción de ganar. más fuerte 45—TD 5 C, con ánimo de se
Nota n" 4. - Habríamos preferido, en guir: TD 6 C.
lugar del movimiento del texto, A 3 D, por Nota n" 15. —C 5 A no era mejor?
que de ese modo el Caballo de la dama de
las negras hubiera estado algún tiempo sin Nota n" 16. —Las blancas habían ase
salir de su casilla. gurado ya las tablas, por que si las negras
hubieran jugado: 53—T 5 D, la natural
Nota n" 5. — Este avance del peón del respuesta del Sr. Tchigorin habría sido: 54
caballo del rey, dejando un hueco ó vacio, —T 5 T, y si 54 (las negras) P 5 A, 55
es contrario á las ideas del Sr. Steinitz, (las blancas) R 4 C.
pues él sostiene que el Rey es invulnerable Pocas veces se habrá logrado salvar un
cuando después de enrocado conserva á juego, antes perdido, con mayor talento é
su lado alguna pieza, aunque sea de las me imperturbable serenidad. Reciba el señor
nores, y se deja en sus puestos á los tres Tchgorin la más cumplida enhorabuena de
peones de la torre, del caballo y del alfil. la redacción de El Pablo Morhhy.
Sin embargo, el referido adelanto parecía
ahora indispensable, con el objeto de im
pedir que las blancas replicasen C 5 A.
Nota n" 6. — Buen movimiento, para
conseguir la retirada del alfil enemigo, y
poder contestar TR 1 R. CENTRO ASTURIANO.
Nota n" 7. — Habría sido mejor-cree Habana, Enero 12 de 189
mos nosotros—26 — D 4 A D, por que si
27— D x D, 27—P x D y si las blancas DEFENSA DE LOS DOS CABALLOS. .
jugaban 27 — D x P—27 —TD 1 C. Nos
parece que entonces se habría asegurado BLANCAS.
la victoria de las negras. NEGRAS.
Nota ll" 8. — ¿Ño habría sido mejor Sr. Steinitz Sr Tchigorin
T x T?
Nota n" 9. —Supuesta la ventaja posi 1— P 4 R 1—P 4 R
tiva del peón de la torre de la dama, nos 2—CR 3 R 2—CD 3 A
otros en lugar del Sr. Steinitz, habríamos 3—A 4 A 3—CR 3 A
replicado: 31 — D 4 D ! 4—CR 5 C 4—P 4 D
5—P x P 5—CD 4 T
Nota n" 10. Siguiendo el plan indi 6—A 5 C + 6— P 3 A
cado, á nuestro juicio era mejor: 32 — 7— P x P 7—P x P
D 4CD ! 8—A 2 R 8—P 3 TR
96 ÉL PABLO MORPHY.
■ mm %
Nota n" 1-—El Sr. Steinitz, con la te
nacidad de caráefer que se le reconoce, in
siste en ensayar otra vez su nuevo y raro im'
movimiento de A 1 A. :
mu ■ "
Notan" 2.— Desde este momento se BLANCAS (SR. STEINITZ.)
ve que las blancas preparan el camino pa
ra hacer el gran enroque, ó sea por el la Analizada con calma dicha posición, no
do de la Dama. debe dudarse sin embargo que—cuando
EL PABLO MORPHY
34- 34— A x C
35-R x A (*) 35-TR 8 T t
36—R 2 R 36—T xTt
37- R x T 37-PxC (**) CENTROASTU RIAN O.
Habana, 26 de Enero de 1892
(*) Forzado, por que si T x A, C 6 T t
y después P x C. DEFENSA DE US DOS CABALLOS.
(**) Y las blancas no podrían jugar
P x C, por la réplica natural de P x PC,
para hacer Dama en seguida. BLANCAS. NEGRAS.
34—A x C 1—P 4 R 1— P 4 R
35- P x C 35—TR 8 T 2—CR 3 A 2— CD 3 A
36—T x A 36—T 1 AR t & 3—A4A 3—CR 3 A
4—CR 5 C 4—P4D
VARIANTE. 5—P x P 5—CD 4T
6—A 5 C t 6—P3 A
34—A x C 7—P x P 7—P x P
35- PxC 35—TR8T 8—A 2 R 8—P 3 TR
36 - TR 3 A 36—C x A 9—CR 3T 9—A 4 AR
37- PT x C 37— P x C &c. io—O O 10—O O
Nota n" 11 — Innecesaria precaución, íi— P 3 AD 11—CD 2 C (1)
por ser más obvio TR 3 T, de un vez. 12— D 4 T 12— A x C
Kjemplo: 13—P x A i3—D 3 D
14—P 3 D 14—CR 4 D
37-TR 3 T 1 5—A 3 A 15— A3C !(2)
38—P x P t 38- R 2 D 16— D4 TR 16—A 2 A
39- R x A 39- C jDt 17—TR 1 D 17— P 4 AR :
i o6 KL PABLO MORPHY.
El Club de Ajedrez de la Habana tiene hoy la honra de contar entre sus huéspedes
más distinguidos, al Sr. Charles A. Gilberg, acaudalado comerciante de los Estados
Unidos, Presidente del Club de Ajedrez de Brooklyn y distinguidísimo caballero. Ha ve
io8 EL PABLO MORPHY.
nido á esta capital para realizar algunos negocios mercantiles, y presenciar además las
magistrales partidas del match Steinitz-Tchigorin. Como problemista, el Sr. Gilberg dis
fruta de antigua y sólida fama. En 1890 nos hizo el señalado favor de obsequiarnos—
acompañado de un afectuoso preambulo, escrito de su mano—con el . lujoso libro suyo,
denominado: "Crumbsfrom lhe Chess-BoarJ. A Selection from the problems,composed by
Charles A. Gilberg—New York" Puede creer el aventajado ajedrecista de Brooklyn, que
de todas veras deseamos que su permanencia en la capital de la isla de Cuba, le sea su
mamente grata.
genei
Vázquez sobre aperturas, noticias referentes á los sucesos de ajedrez, y también artículos
biográficos con los retratos de ajedrecistas célebres, habiéndose publicado ya el de Paul
Morphy y el de D. Celso Golmayo, campeón de España. Sinceramente felicitamos al
Sr. Vázquez por haber intentado tan simpática empresa y confiamos en que ella será calu
rosamente apoyada por los jugadores de ajedrez de todas partes. No necesitamos ha
cer notar cuán valiosa será esta publicación durante el próximo y gran encuentro en la
Habana, entre los Sres. Steinitz yTchigorin."
De algunas líneas, demasiado halagüeñas para nosotros, que el ilustrado
. Mr. Hoffer se ha servido dedícanos en The Chess Morthfy, de Londres, (nú
mero correspondiente á Diciembre de 1891), nos complacemos en reproducir, con gra
titud, lo que sigue: "El Pablo Morphy está ya artísticamente establecido. y en las hábi
les manos de su entendido editor, lleva camino de rivalizar con las mejores publicaciones
de su clase." El Tablero de Caracas, más que amable, cariñoso, añade, también en su
número de Diciembre, lo que sigue: "El Pablo Morphy.—Hemos tenido el gusto de
recibir el primer número de la interesante publicación mensual de ajedrez, que con el tí
tulo que encabeza estas líneas, acaba de ver la luz en la Habana, bajo la dirección del
eminente ajedrecista Sr. D. Andrés C. Vázquez. Este nuevo periódico que trae en la
portada un magnífico retrato del inmortal Morphy, es de lo más bello que hemos visto en
su clase, y añadiendo á esto los vastos elementos de que disfruta su fundador, á la par
que su cautivador estilo, es positivo que será acojido calurosamente por todo aficionado.
Nosotros desde estas humildes columas, pero con el más vivo entusiasmo, saludamos
al nuevo y respetabilísimo colega, y hacemos votos por su larga vida."
,MA, x Según la regla 1 1 " del convenio de 3 1 de Diciembre último, entre los
» 3 Steinitz y Tchigorin, cada uno de dichos jugadores podrá abstenerse de jugar
tres veces durante el match. Ya han hecho uso de dicho derecho, por dos veces, lo mismo
el Sr. Tchigorin que el Sr. Steinitz, á causa de lijeras indisposiciones de salud.
Por moción del Sr. Steinitz, (que se halla abrumado de trabajos editoriales),
con aceptación de su amable contrario, y aprobación del Juez del Campo,
Sr. Golmayo, para lo sucesivo ha quedado modificada la regla 9" del indicado convenio,
yenel notable match Steinitz —Tchigorin solo se jugará los martes, jueves y domingos de
cada semana, quedando excluidos los sábados.
cios podrían adquirirse. ¿Habrá cuadernos de los que publicó hace muchos años el se
ñor Carbó sobre Aberturas y Finales!
Quedamos á V. muy reconocidos por las afectuosas y benévolas frases que se dig
na dirigirnos en su grata carta del 14 de Diciembre;—frases que valen muchísimo por ve
nir de V., tan querido en toda España. El Sr. Golmayo ha recibido con gratitud el
ejemplar que V. ha enviado por mi conducto, para el Club de ajedrez de la Habana, de
la magnífica obra por V. escrita acerca del Arte de componer problemas de Ajedrez.—Di
cho Club está hoy accidentalmente situado en el conocido edificio del Centro Asturiano
(Calle del Prado").
Distinguidos viajeros.
En unión del honorable Mr. Gilberg han visitado nuestro Club, presenciando las
partidas del match Tchigorin —Steinitz, dos distinguidos ajedrecistas del Estado de Nue
va York, en los Estados Unidos: el Sr. D. J. Densmore, de Brooklyn y el Sr. J. H. Thom-
ton, de Búfialo. Son caballeros muy bien educados, y sumamente amables, que bien
pronto se han captado en la Habana generales simpatías.
Oq libro interesantísimo.
EL PABLO MORPHY
Y DE US DEMAS OBRAS DE AJEDREZ DEL Sr, VAZDOEZ.
HABANA.
Casa del autor, calle del Tejadillo, número 43.
Librería del Sr. D. Manuel Ricoy, Obispo 86.
y Librería del Sr. E. W. Wilson, Obispo 43.
REPÚBLICA MEXICANA.
México.—Sr. D. José Benavides, San José el Real, número 8.
Veracruz.—Sra. Viuda de Carredano.
FRANCIA.
Parts—Sr. D. Numa Preti, Rue Saint Sauveur, 72.
ESTADOS UNIDOS.
| Newport (Kentucky). — Mr. Will. H. Lyons.
AVISO IMPORTANTE.
Con verdadera sorpresa hemos si'lo informados por un amigo nuestro residente en
la Península, de que un librero de Madrid se ha permitido anunciar nuestra tercera
edición, de la referida obra, con e1 caracter de cuarta edición. Como estu pudiera dar
lugar á que personas que ya posean la edición anterior , volvieren á comprar la obra,
creyendo que contenga mejoras de trascendencia, cumple á nuestra buena fé declarar
—á reserva de poner muy pronto en claro lo ocurrido y ejercitar legalmente los dere
chos que nos correspondan —que á nadie hemos autorizado para publicar ó vender esa
supuesta cuarta edición del Análisis del Juego de Ajedrez, escrito por nosotros; pues aun
que ya tenemos preparados los materiales para imprimir una nueva, voluminosa y muy
completa edición del mencionado libro, esto no .podremos efectuarlo hasta 1893, á
causa de compromisos que contrajimos con un comerciante al cual vendimos en esta
capital una cantidad bastante considerable de la misma obra. Se nos dice que el men
cionado librero de Madrid es persona de reconocida moralidad y que seguramente ha
brá procedido por equivocación. Nos place admitir la exactitud de esa circunstancia,
pero esto no obstante veremos con agradecimiento que los periódicos de ajedrez, y aun
los que no lo sean, se sirvan reproducir la presente aclaración, para general conocimien
to del público, tanto en Europa como en América.
ANDRÉS CLEMENTE VAZQUEZ.
REDACCION Y ADMINISTRACION DE "EL PABLO MORPHY"
EL PABLO MQRFHY
PERIODICO MENSUAL DE AJEDREZ
BU AMC AS
Sal. n e*taa y flan muta* eu tres (3) jurada*.
DiRKcnús y Aomimsi RACIÓN: Culi* del Tejadillo mím. 43, llabana
(Cu'ia). ó apartado núm 139 en la Administración General de Correos.
Condiciones DK i.a suscripción —El Pablo Morphy apu.ecrrá el 15
de cada mes Se admiten suscripciones por semestres adelantados: en la
Hallan», $1 -50 plata, y en el int rior déla Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. plata, y fuera de ella 35 cts.
m
HABANA
La Propaganda Literaria
zui-uETA.28.
1892.
OBRAS DE AJEDREZ POR A. C. VAZQUEZ
EDICIONES AGOTADAS.
INÉDITA.
El Ajedrez Ciclónico. — Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de ¡os gran
des maestros, sin otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?(
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XIX.— Dos partidas de cada uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (¡a más elegante é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
escogidas y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vazquez.
NÜM. 6. Habana, 15 de Marzo de 1892. VOL. 1.
el nm mouphv
¡¡lección | Administración: calle del Tejadillo núm. 43, ó apartado r.úm. 129, en la Admk Gra!, de Correos. -Habana.-Cuba
piezas, haber hecho cambio de alfiles, antes Nota n" 11-—Si en este caso las blan
de enrocar. cas se hubiesen decidido á jugar en vez de
C R 3 A—C D 1 R, la partida hubiera po
Nota n" 6. — Despues se verá que ese dido continuar quizás del modo que sigue:
movimiento equivalió á la pérdida de dos
ticmpos.—Mejor habría sido de una vez: 34—CD 2 R 34—T x PC t
15—C D3 C. 35— R x T 35—A x Pt
36— R 1 C 36—A x T &c-
Ñota fl" 7. — No hemos podido com Nota n" 12 — Parecía mejor CD 1 D.
prender bien los motivos de este retroceso,
á no ser que, en vista de tener dos peones Nota n" 13- - Toda salvación era ya im
menos, el Sr. Tchigorin hubiese querido con- posible para el juego blanco. Si 38— R 1 A
trarestar los posibles golpes de las negras: —38—A 6 Tt y si 38— R 1 T—38—
C 5 R y C 6 A D. C 5C.
Ñota Fl" 8- — He ahí las dos pérdidas Este ha sido el primer Gambito Evans
de tiempo á que antes nos habíamos refe que pierde el S. Tchigorin en la presente
rido. temporada.
Morphy y Anderssen, se dice en la página Posición al ejecutar las blancas la jujaia 30-
9, tomo I, de The Modern Chess Instructor, NEGRAS (Sr. TCHIGORIM.)
que en principio es desventajosa: t'On prin
cipie this ought lo be disadvanta^eous, as it
drives the B. where he wants to go." i
Nota n" 2. — I .a continuación recomen :■
dada en la obra del Sr. Steinitz, es la si ÉÉÉÉ m
guiente: • \s: . ü
8— P x P 8—CRx \ SI k f§l *\
9— O O 9—Ó O
10 - CR x P 10 —C x C á
11— P 4 I) 11—A 3 D
12— P x C 12— A x P
13-AxPt (Mejor). «¡11 Ü
Nota n" 15-—El juego está ya perdido (Sr- Tchigorin). (Sr. Steinitz)-
en lo absoluto por las negras, pero el señor
Steinitz dejó escapar aquí un bonito mate 1- 1' 4 R 1—P 4 R
en 6 jugadas, que nosotros tuvimos la honra 2-CR 3 A 2—CD3 A
de comunicarle, tan luego como se conclu 3-P 4 D 3—P x P
yó la partida. He aquí el respectivo dia 4-CRx P (1) 4—D 5 T (2)
grama: 5-CR 5 C (3) 5— D x PR t (4)
6—A3R 6—R 1 D (5)
NEGRAS (Sr. TCHIGORIN.) 7-CD 3 A (6) 7— D4 R(7)
8- Cl) 5 D ! 8—CR 3 A (8)
9-CR x PA 9—A 3 D
10— P 4 AR 10— D 5 R
I * 1.-A3 D!(9) 11—D x PC
12—TR 1 C 12—D x PT (10)
• \ 'M 'Ó- 13— D 3 A 13—C x C
i 1 ü i 14 — C x C (n) 14—D3T (12)
15—O O O! 15—P 4 A (13)
16—A x PA 16—P 3 CR
i 17—C 6 A ! (14; 17—D 1 A
. 18—A x PD ! 18— D x C
B su 19—A x C 19—R 2 A (15)
20—A 4 R 20—TR 1 A ? '
n 21—TR 1 A 21—A 2 D (16)
BLANCAS (Sr. STEINITZ). 22—TD 3 D ! 22—A 3 A
23—A x A 23—P x A
35— D 8R ! t 35-R2T(lo mejor) 24—A 2 D ! 24— A 4 A (1.7)
36—A 4 R t 36—P 3 C 25 —A 3 A 25 — D 2 A
37—A x P C t 37-Rx A 26—A 5 R t 26— R 2 C
38—D S C t 38- R 2 T 27—TR 1 D 27— D 5 AD
39_D x P TR t 39-R 1 C 28—TD 3 A (18) 28—D 4 C
40-D 8 Ttt 29—TD 3 C 29—A 5 C
ÉL PABLO MORPHY.
20—TR 7 D t 30— R ? C VARIANTE.
31-A7M 31-R3T
32—TD x A ! (19) Se rindió. 6- CR 5 C 6— R 1 D
7- D 5 D 7—D 2 R
8-P 3 TD 8—C3 A
NOTAS POR A. C. VAZQUEZ- 9-D 5 C (M)
La mencionada jugada de D 5 T, cono
Nota n" 1. — Réplica considerada como cida con el nombrj de contra-a'aoue Pu-
la mas fuerte en este caso, y que puso de Iling, y defendida con calor en las primeras
moda en el Torneo Universal de París, de ediciones del Handbuch, fué tambien cita
1867, el Campeón Español D. Celso Gol- da por nosotros como la mejor defensa pa
mayo. ra el Gambito Escocés en la página 21, to
mo II, de nuestro Análisis del Juego de
Nota n" 2. — Esta jugada, que durante Ajedrez, 3" edición. Pensamos aún que di
mucho tiempo se conceptuó por los maes cho movimiento es bueno, pero no deja
tros alemanes como el mejor contra-ataque mos de comprender eme estando expuesto á
en el Gambito Escocés, dió excelente resul numerosas respuestr. sumamente difíles to
tado al Sr. Steinitz, en 1876, en su tercer das ellas, no parece discreto emplearla en un
match contra Mr. Blackburne, verificado en match trascendental,en contra de un gran aje
Londres; pues con ella ganó las partidas II, drecista, cuando es preciso jugar en determi
IV y VI del referido match. Pero más tar nado espacio de tiempo. En casos como ese,
de, parece eme el ilustre profesor bohemio lo mas prudente sería á nuestro juicio, usar
halló que dicho movimiento no era entera del plan común y sencillo que el mismo señor
mente sólido, supuesto que en las diversas Steinitz indica en la columa 3", pag. 60, to
variantes por él presentadas en las páginas mo I de la mencionada obra, y que es el
60 y 61, tomo I, de The Motlern Chess Ins siguiente:
tructor, la ventaja resulta para el juego
blanco. He aquí algunas de esas variantes: 1—P 4 R 1— P4 R
2-CR3 A í— CD 3 A
BLANCAS. NEGRAS. 3 -P 4 D 3—PxP
4—CR x P 4—A 4 A !
5—A 3 R 5— D 2 R
1— P 4 R I—P 4 R 6— CD 3 A 6—A x C
2—CR 3 A 2—CD 3 A 7—A x A 7—C3A
3—P 4 D 3—P x 1' 8—A x C 8- D x A
4— CR x P 4—D s T 9—C s D 9— D 1 D
5—CD3 A! 5—A5 C 10- A 3 D 10—C 2 R
6—CR 5 C 6—D x PR t 11—O O 11- P 3 D
7—A 2 R 7—A x C t Juego igual.
8—Cx A 8—D s D
9—A3D 9—CR 2 R Nota n" 3. —Ataque Horwitz, que es el
10—OO 10-P3 TD más correcto para Gossip y otros célebres
11— D 5 T (Mejor) tratadistas.
Mr. Blackburne ha solido jugar aquí: 5-
VARIANTE. A 3 R!
6—CR s C 6—D x P t Nota n" 4. —En el tercer match contra
7—A 2 R 7—A x C t Mr. Blackburne, el Sr. Steinitz jugó previa
8—C x A 8— D x PC mente: 5 —A 5 C t; pero para contrares-
9—A 3 A . 9—D 6 T tar ese movimiento, nosotros hemos pro
10—C 5 D 10—R 1 D puesto el siguiente sistema, en la columna
íi—A 4 A 11—P3 D I, pag. 21, tomo II de nuestro Análisis:
12—CxP 12—Rx C
I3_D x l't 13—R 3 C 5-A 5 C t
14—A 3 R t 14— R 4 T 6_p 3 a : 6- D x PR +
i5_D3TKV-c. 7-A 3 R ! 7- A4T
124 KL PABLO MüRPHY.
Nola n" 15 — ^s evidente que si había otro recurso aceptable para las ne
19— P x A—20— D x P : gras, que, 24—P 4 T D !
Nota fl" 18 —También hubieran gana
Nota n" 16 — Abandonando el peón del do las blancas fácilmente con T D j D t
caballo de la Dama, con ánimo de seguir Nota ti" 19. —Verdadero broche de
T D 1 C si las blancas se apoderasen de oro, para cerrar el estuche de piedras pre
dicho peón. ciosas, depositadas con profusión en esta
singular partida, por el portentoso genio
Nola 11" 17-—Suponemos que aquí no del Sr. Tchigorin.
-
1-R5A 1
2 —C 3 Dt 2— Cualquiera.
3— I) 2 R ó C 4 D tt * 1 i
¿Tendrá doble solución el expresado pro
blema n" 1 1, del estimable Sr. Dr. D. J. To
losa Carreras?
Tan alta idea tenemos de la pericia ex
traordinaria, del sabio compositor de Ca ■ i i
taluña, tlue debemos suponer que al re
mitirnos el grabado respectivo de dicho m \
problema, suprimió en él por descuido ó
precipitación alguna pieza; aunque por otra á 11
parte es bastante común que hasta en los . /s',
problemas premiados, de los profesores más #
célebres, se descubran dos ó más solucio
nes, supuesto que, preocupados los autores BLANCAS.
con los proyectos fundamentales de sus Salen éstas y dan mate en tres (3) ju
composiciones, desatiendan muchas veces gadas.
otras soluciones fáciles y sencillas, por per *
seguir los planes raros ó difíciles que desde * *
el principio se propusieran. I )e ello se en Nota.—Al ser publicado este problema
contraran hartas pruebas en nuestro libro en la carátula ó cubierta de nuestro núme
El Ajedrez Ctítico. A nosotros mismos ro 5, se suprimió por equivocación del ca
nos ha sucedido esto varias veces, en nues jista, el peón que se halla en la tercera ca
tras composiciones originales. silla del Caballo del Rey. Ténganlo pre
He aquí la doble solución que en el sente así nuestros estimables abonados.
mencionado problema del Sr. Dr. Tolosa
Carreras ha creído encontrar el estudioso
suscritor de El Pablo Morphy, D. Ma
riano Salazar, y que dicho señor nos remi PENSAMIENTO DE STEIN.
te con el objeto de someterla al examen
del ilustrado autor del propio problema:
En el "Nuevo Ensayo sobre el juego
i—V 7 D 1 -R 5 A del ajedrez" publicado en 1789 por este
2—C 3 A 2 —R juega. célebre campeón holandés, encontramos,
3-D4Rtt entre otras reflexiones militares, el siguiente
pensamiento: "Las tentativas de una tro
VARIANTE. pa, que prefiere dejarse arrastrar por el
1—P 7 D 1—P 4 A ardor de combatir, en vez de considerar
'> p 8 n /ivv - " - * las posibilidades de vencer; que sigue más
bien los impulsos de su valor que la obser
vancia del orden y de la disciplina, rara
Al parecer tiene razón el Sr. Salazar. vez se ven coronadas por el éxito."
Esperamos la respuessa del Sr. Tolosa. n. DOMINGUEZ COWAN.
EL PABLO M0RPHY. 129
RETRATOS í BIOGRAFIAS
IDIE "lEL, PABLO MORPHT'
Los juegos del expresado match fueron después reproducidos en el cuaderno prime
ro del folleto intitulado: "Algunas Partidas de ajedrez jugadas en México por Andrés Cle
mente Vázquez.—México—1879." Aquel combate no logró, sin embargo, disipar las
dudas acerca de nuestras respectivas fuerzas, no sólo por ser muy corto, sino á causa de
que habiéndose jugado en la casa del Sr. Domínguez, que estaba bastante lejos del estable
cimiento del Sr. Eguiluz, éste se hallaba intranquilo, teniendo varias veces que suspender
los juegos para concurrir al llamamiento de sus parroquianos. Pactose, en consecuencia,
un segundo match, bastante largo, pues se convino que fuese una serie de 50 partidas,
las cuales se jugaron en la residencia de un íntimo amigo de nuestro noble adversario (el
Sr. Malabhear), cuya casa se encontraba muy cercana á la de aquel. La tremenda serie
se efectuó por fin, en Febrero y Marzo de 1876, siendo abandonada por el Sr. Eguiluz
después dela partida XLIII, pues para ello alegó que aún en el caso de ganar él
las siete restantes, no por eso habríamos dejado nosotros de obtener la victoria. El score
de ambos arrojó lo que sigue:
Partidas ganadas por el Sr. Eguiluz 16
Id. por A. C Vázquez 24
Id. tablas 3
Total .... 43
Los juegos de aquel segundo match ó serie, aparecieron en el segundo volumen de
nuestras Revistas Mexicanas de Ajedrez (páginas 97 y sigts.) y en el cuaderno primero,
ya citado, de las Partidas jugadas en Mexico por A C. Vazquez" (páginas 39 á 51).
Por último, en Junio y Julio del mismo año de 1876 jugamos otra serie, en un salón
reservado del establecimiento del Sr. Eguiluz, y en las páginas 52 á 66 de las Partidas
jugadas en Mexico, primer cuaderno, se puede ver que el resultado fué como sigue:
Sr. Eguiluz.—Juegos ganados 14
Sr. Vázquez.— id. id 20
Tablas 1
Total 35
El éxito material fué en los tres expresados combates para nosotros, pero faltaríamos
á la verdad si no confesásemos que siempre admiramos en nuestro digno y caballeroso
contrincante la rapidez de sus ataques y la elegancia, belleza y finura de las combinacio
nes que lograba realizar, sin el menor esfuerzo; siempre de buen humor, riendo y plati
cando; sin vanagloriarse por los triunfos, ni tratar de disculpar los desaciertos.
El génio del Sr. Eguiluz llegó á llamar la atención del eminente Zukertort, y en la
página 200, volumen I de Tlie Chess Monthly de Londres se puede ver que el gran maes
tro y crítico prusiano, hablando de nosotros y de nuestra colección de juegos mexicanos,
dijo: "Among his oppoiunts Sr. M. Eguiluz wethink highly talented. ..."
Nuestro distinguido corresponsal en la ciudad de México, el inteligente ajedrecista
y habil compositor de problemas, Dr. D. Joaquín L. Vallejo, nos dice en carta reciente:
^México, 8 de Diciembre de 1891.
"Sr. Ledo. D. Andrés C. Vázquez.
Habana.
"Muy querido amigo: Cumplo gustoso los deseos que manifiesta Ud. en la carta
abierta eme tuvo la bondad de dirigirme y vió la luz en el número 2 de El Pablo
Morphy, remitiéndole los siguientes apuntes relativos á D. Mariano Eguiluz, vuestro
digno competidor no ha mucho tiempo. Harto sé que pecan por insuficientes, pero
Ud. que conoce tanto como yo al Sr. Eguiluz, comprenderá 'as dificultades que habré
tenido para sacar algun partido de la proverbial modestia suya.
ÉL PABLO MORPHY. »3*
"D. Mariano Eguiluz tiene un aspecto enteramente agradable, como todos podrán
juzgar por la fotografía que le adjunto, y que le atrae la simpatía general; simpatía que
crece cuando se pasa con él un rato de conversación, pues su caracter (como el de todos
los hombres que algo valen) sus aspecto y maneras, no solo son respetuosas y amables, sino
hasta humildes. Tiene fisonomía pensadora, mirada franca é inteligente. Es de pocas
palabras y no se impacienta nunca.
"Como ajedrecista, pertenece don Mariano á esa pléyade de jugadores brillantes,
enérgicos y atrevidos que contó en su seno á los Morphy, los Cochrane y los Labourdon-
nais; su ataque vigoroso y rápido, impresiona al contrario, lo aturde y casi siempre es
irresistible. En el Sr. Eguiluz admira más la elegancia de su juego, por el contraste que
hace con su caracter y su modestia. Es de los jugadores que por la rapidez de com
prensión y de combinaciones, medita poco y esto mientras piensa su contrario, de tal
manera que sus respuestas son siempre inmediatas. Tiene verdadero genio estratégico y
una vez formado su plan de ataque, no vacila, ni pierde [el tiempo, ni hace una jugada
inútil, sino que en el momento dado, todas. las piezas cumplen su cometido, ya señalado
de antemano por la clara imaginación del que las mueve. Podrá ser que como ajedrecis
ta científico deje algo que desear, pero no como calculista, debido á las dotes excepciona
les de que está dotado.
"Debo añadir que en mi concepto, no es un ilusionado por el ajedrez y que si esto
le perjudica como maestro, le presta en cambio cierto caracter especial, digno de llamar
la atención.
"Pasemos á sus apuntes briográficos: Nació don Mariano Eguiluz, el año de 1833
cuando una terrible epidemia de colera asiático diezmaba los habitantes de la República,
en el pintoresco Pueblo de Xochimilco, perteneciente al Distrito Federal, famoso por sus
jardines flotantes (chinampas) que se mecen en el lago inmediato, y que dieron su nom
bre á la población (*). Su niñez, la pasó viviendo esa vida tranquila del hogar, sin penas
ni cuidados, dividiendo su tiempo entre las labores escolares y los paseos por las hortalizas
y canales que circundan el pueblo.
"Nadie se figuraba entonces, que con el tiempo había de llegar á ocupar puesto tan
distinguido y envidiable entre los ajedrecistas mexicanos.
"En el espíritu del joven germinaron ideas de adelanto y progreso; quiso abarcar mas
amplios horizontes, y abandonando aquella vida sin zozobras; aquel pueblo de ambiente
perfumado y tranquilo donde pasó sus primeros años y las dulzuras del hogar paterno, vi
no á establecerse en esta capital.
"A los diez y ocho años perdió Eguiluz al autor de sus dias y vióse reducido á t:aba-
jar rudamente para subvenir á las necesidades de su familia. Cuando hubo alcanzado
la edad de 24 años, trabó amistad con el inteligente aficionado don Luis de la Torre,
quien fué su iniciador en el noble juego del ajedrez. El fué quien le enseñó el movimiento
de las piezas, las leyes rudimentarias del juego y cuanto tiene relación con él. La cla
ra inteligencia del joven don Mariano, acogió con agrado todos aquellos conocimientos y
progresó tan rapidamente que á los seis meses de estudio, tenía que dár á su maestro una
Torre de partido, para igualar sus fuerzas.
"Muy poco tiempo después de la época á que nos hemos referido en el parrafo prece
dente, recibió Eguiluz de D. Antonio Herrera, notable jugador mexicano, la Dama de ven
taja, pero sus rápidos progresos en la práctica del juego, borraron muy pronto toda dife
rencia entre Eguiluz y su competidor, haciendolo después superior á él. En un matoh
concertado entre ambos y que se verificó en el "Café del Progreso" centro entonces de
los ajedrecistas mexicanos, venció Eguiluz á Herrera, dándole una pieza de ventaja, en
once partidas seguidas y ganando la cantidad comprometida (20 onzas).
"Establecida su superioridad de una manera tan manifiesta, lo buscaban á porfía los
principales ajedrecistas para medir sus fuerzas con él, y en contiendas amistosas y leales
venció sin gran esfuerzo á jugadores de la talla de W. Carrington, Magnus, Volt, el Ba
rón de Ch (notable jugador francés) Worral, etc., etc.
"Asuntos privados, pues siempre ha vivido alejado de la cosa pública, lo obligaron á
emprender un viaje acompañando al Sr. General Alatorre por todos los Estados de la
República. Su camino fué un continuo triunfo, pues venció á cuanto jugador de ajedrez
notable, encontró á su paso. La principal de todas estas victorias la obtuvo en Puebla,
población en donde residía el campeón del Estado, Sr. Francisco Fernández Pellicer, aje
drecista español muy fuerte y de excepcionales poderes de combinación; jugó con él un
match de 14 partidas, y lo venció en todas sin que el Sr. Fernandez hubiera podido si
quiera entablar uno.
"De regreso á México, sostuvo contiendas con los Sres. Márquez Galindo, Luzuria-
ga, Reyna, Macin, Valdés, Thim y otros ajedrecistas, (todos de primera fuerza) saliendo
siempre vencedor.
"En este envidiable puesto, estaba don Mariano Eguiluz, cuando se organizaronlas
memorables luchas para determinar quién debía llevar el cetro del ajedrez en México,
luchas en que Ud. tomó parte, y que dieron por resultado que don Mariano ocupara
el 2? lugar, quedando Ud. vencedor absoluto, pues de las 35 partidas que formaron el
último match, entre ambos, Eguiluz ganó 14, hizo una tablas y perdió 20. Conserva Ud.
el envidiable puesto de Campeón mexicano y" á mí entender lo conservará todavía por
mucho tiempo, pues es en extremo difícil encontrar un jugador de ajedrez que reuna, co
mo Ud., las dotes de talen , j, rapidéz de concepción y profundidad de conocimientos que
se requieren para ello.
"Termino ésta mi deficiente tarea, prometiendole tenerlo al tanto de todos los inte
resantes acontecimientos que se verifiquen en México (relativos al ajedrez).
"Reciba mis cordiales felicitaciones por su hermosa publicación y hágalas extensivas
á esa brillante asociación que se llama "Club de la Habana".
Agradeciendo debidamente al Sr. Vallejo sus finezas, y deseando que nuestro dis
tinguido y querido amigo el Sr. Eguiluz, conserve la vida y la salud por mucho tiempo, no
sólo en bien de él y de su virtuosa familia, sino para gloria inmarcesible del ajedrez mexi
cano, terminaremos estos abantes con la reproducción de algunos pocos juegos de tan
eximio amateur.
a. c. VÁZQUEZ.
1. 15—R 1 T 15—Px P
16—P x P 16—P4 AR
(México— 1876.—Del tercer match Egui 17—P x P 17—TR x P
luz- Vázquez). 18— P s D 18—D 1 C
19—D3 C ! 19— D x P
DEFENSA BERLINESA, 20—TD 1 D ! 20—D 3 A
21—CR s Rü 21—TxT t
BLANCAS. NEGRAS. 22—Tx T 22—P x C
23—C x PR ! 23— D 1 R
(Sr. II. Eguiluz). (Sr, A. C Vázquez). 24—T 7 A t Se rindió.
encuentra ya, y usted ha hecho el sacrificio de desprenderse del único ejemplar del mis
mo, que figuraba en su biblioteca, en favor nuestro. Procuraremos corresponder pronto
á su fineza, con otro obsequio análogo, en libros ó periódicos equivalentes.
Sr. B. Otto—San Petersburgo— Hemos tenido el placer de recibir los cuadernos del
7 al 10 del Schakmatni—(Año de 1891)—¿Quisiera usted hacernos el favor de enviarnos
los cuadernos del 1 al 6, del expresado periódico, á fin de tener completo el tomo corres
pondiente al año próximo pasado?
EJkk El gran periódico de Londres The Chess Afonthly, editado por el ilustre
^™ profesor Mr. L. Hoffer, nos ha concedido la insigne honra de publicar nuestro
retrato y algunos apuntes biográficos respecto de nosotros, en su número correspondiente
á Enero de este año; junto con varios juegos, problemas y finales de partida, debidos á
nuestra iniciativa particular. Jamás pudimos haber aspirado á que la modestísima repu
tación de nosotros se hallase al lado de la de los más notables maestros del ajedrez con
temporáneo; y sólo admitimos esa señalada distinción, como una prueba de la cortesía
esmeradísima de Mr. Hoffer, ó cuando más como un estímulo ó premio por la perseve
rancia con que procuramos, desde hace 25 años, propagar el estudio del nobilísimo jue
go, entre los millones de seres que hablan el hermoso idioma de Cervantes y de Jovellanos.
No necesitamos añadir que damos al honorable Mr. Hoffer y á todos sus dignos compa
ñeros de redacción, las gracias más expresivas y sinceras por su extraordinaria amabilidad.
•-Vi(^ ^ El Sr. Steinitz renunció á jugar, por indisposición de salud, la décima octa-
¡Sí «HU va partida de su match con el Sr. Tchigorin, el jueves 1 1 de Febrero último;
con lo cual hizo uso ya, por tres veces, del derecho de excusarse, que es el máximum de
lo convenido para estos casos. El Sr. Tchigorin se excusó por tereera vez, de jugar la
partida XXI, el día señalado para el efecto, es decir, el Domingo 21 de Febrero; tam
bién por lijeros quebrantos en su salud. Por lo tanto, si en cualquiera de los otros días
designados para el combate, alguno de ellos hubiera d;jado de concurrir al salón res
pectivo, asistiendo su adversario, habría tenido que sufrir la pérdida de un juego, ano
tándosele en pro de su competidor, como ganado por él. — Un periódico de la Habana
divulgó la especie, aunque sin exactitud, de que al Sr. Tchigorin no le gustaba jugar los
domingos, á causa de que hasta ahora, en el presente match, siempre había sido derrotado
en dichos días. Esa noticia fué después terminantemente rectificada, porque el caba
lleroso Campeón ruso es demasiado ilustrado para incurrir en semejantes preocupaciones.
ais) Hemos oido asegurar que la generosa y entusiasta Junta Directiva del Cen-
«S» ¿" tro Asturiano se propone patrocinar un gran torneo de ajedrez entre los juga
dores de la Habana, tan luego como termine el célebre match Steinitz-Tchigorin. Parece
que los combatientes serán clasificados en cuatro clase ó secciones, según su fuerza rela
tiva, y que los cuatro vencedores, es decir, el que obtenga el primer puesto en la categoría
primera; el que lo alcance en la segunda &c., se batirán entre sí, con las ventajas que co
rrespondan, para la adquisición de los cuatro magníficos premios que ofrecerá la misma
Junta Directiva. Seguirá pues tomando creces, la noble afición al ajedrez, en esta culta
capital.
I^U Con mucho sentimiento hemos visto en L.t Stratógic, la noticia de que el
27 de Diciembre último falleció en Lyon, M. Henry Frau, á la edad de 65
años. M. Frau era un notable compositor de problemas, insigne resolvedor repentista de
posiciones difíciles y un fuerte jugador de damas y de billar. Los ajedrecistas franceses
están de pésame, y nosotros nos unimos á ellos por esa desgracia, ofreciéndoles el testi
monio de nuestra condolencia.
STEINITZ, VENCEDOR.
El domingo 28 del mes próximo pasado, poco antes de las seis de la tarde, conclu
yó el notable match Steinitz-Tchigorin, que tanto y tan justamente ha llamado la aten
ción de todos los paises civilizados.
He aquí el resultado final de la contienda:
Partidas ganadas por el Sr. Steinitz 10
Id. por el Sr. Tchigorin 8
Id. tablas 5
Total 23
El Sr. Tchigorin tuvo la desgracia de perder la última partida (en momentos en que
ya la tenía completamente ganada) por un descuido trivial é inesperado. Nos reserva
mos los comentarios para el próximo número de El Pablo Morphy, dirigiendo mientras
tanto nuestros más cordiales plácemes, no sólo al egregio vencedor, por haber conserva
do incólume su antiguo y brillantísimo puesto de Campeón Universal, sino también al
ilustre y simpático vencido, con fundamento de su jamás superado, ni igualado seore, en
contra del formidable hijo de la ciudad de Praga.—Steinitz for ever, and evet
LUGARES DE VENTA
EL PABLO MORPHY
i DE US DEMAS OBRAS DE AJEDREZ DEL Sr, VAZDOEZ.
HABANA.
Casa del autor, calle del Tejadillo, número 43.
Librería del Sr. D. Manuel Ricoy, Obispo 86.
y Librería del Sr. E. W, W'ilson, Obispo 43.
REPÚBLICA MEXICANA.
México.—Sr. D. José Benavides, San José el Real, número 8.
Verao'uz.—Sra. Viuda de Carredano.
FRANCIA.
París—Sr. D. Numa Preti, Rue Saint Sauveur, 72.
ESTAI)OS UNIDOS.
Newport (Kentucky) — Mr. Will. H. Lyons.
AVISO IMPORTANTE.
Con verdadera sorpresa hemos sido informados por un amigo nuestro residente en
la Península, de que un librero de Madrid se lia permitido anunciar nuestra tercera
edición, de la referida obra, con el caracter de cuarta edición. Como esto pudiera dar
lugar á que personas que ya posean la edición anterior , volvieren á comprar la obra,
creyendo que contenga mejoras de trascendencia, cumple á nuestra buena fé declarar
—á reserva de poner muy pronto en claro lo ocurrido y ejercitar legalmente los dere
chos que nos correspondan—que á nadie hemos autorizado para publicar ó vender esa
supuesta cuarta edición del Análisis del Juego de Ajedrez, escrito por nosotros; pues aun
que ya tenemos preparados los materiales para imprimir una nueva, voluminosa y muy
completa edición del mencionado libro, esto no podremos efectuarlo hasta 1893,4
causa de compromisos que contrajimos con un comerciante al cual vendimos en esta
capital una cantidad bastante considerable de la misma obra. Se nos dice que él men
cionado librero de Madrid es persona de reconocida moralidad y que seguramente ha
brá procedido por equivocación. Nos place admitir la exactitud cíe esa circunstancia,
pero esto no obstante veremos con agradecimiento que los periódicos de ajedrez, y aun
Vtt que no lo sean, se sirvan reproducir la presente aclaración, para general ce nocimien-
to del público, tanto en Europa como en América.
AnDRÉS CLEMENTE VAZQUEZ.
REDACCION Y ADMINISTRACION DE "EL PABLO MORPHY
EL PABLO MORPHY
BLANCAS
Salen attAA y dan mate t-n tres (3) juzadaa.
Dirección y Administración: Calle de O'Reilly n? 34, (de 12 á 4 de
la tarde), Habana (Cuba), ó apartado núm. 139 en la Administración
General de Correos.
Condiciones de la suscripción.—El Pablo Morphy aparecerá el 15
de cada mes. Se admiten suscripciones por semestres adelantados: en la
Habana, $l-SOplata, y en el interior dela Isla ó en el extranjero $2. El
número suelto valdrá en esta Capital 30 cts. plata, y fuera de ella 35 cts.
*f.5
HABANA
La Propaganda Literaria
ZULUETA. 28.
1892.
OBRAS DE AJEDREZ POR 1. C. VAZQUEZ
EDICIONES AGOTADAS.
INÉDITA.
El Ajedrez Ciclónico.—Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de los gran
des maestros, sin otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?)
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XIX.— Dos partidas de cada uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (la más elegante é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
escogidas y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vazquez.
NOM. 7. Habana, 15 de Abril de 1892. VOL. I
Dirección y Administración; calle del Tejadillo nám. 43, í apartado núm. 139, en la Admfin. Gral, de Correas. -Kabana.-Cuba
Correspondencia de México.
Con mucho placer reproducimos en seguida una interesante carta de nuestro ilus
trado colaborador el Sr. D. Nicolás Domínguez Cowan, por la cual le damos las más
expresivas gracias. Dice así:
APUNTES PARA LA HISTORIA DEL AJEDR"Z EN MÉJICO.
"M'Donnell and a race of the lineage of Lopez. But whosesoever the fault may have
"been, the match was indefinitely postponed and still remains unfought. Who can say
"what would have been the result, had it taken place? Would the americans have re-
"peated upon the chess—board the bloody victories of a few months'previous at Palo alto
"and Cerro Gordo? Or would los Mejicanos have avenged upon the checkered field á
"score of defeats upon the plains and in the passes of their country?"
¿Tendrá todo lo copiado alguna relación—aunque equivocada, con el pretendido
desafio entre el club de Méjico y el derrotado por Staunton? Lo ignoro y aquí queda la
pregunta para que algún aficionado mejicano se sirva contestarla, cuando y como lo esti
me conveniente.
Siga V. recojiendo merecidos elogios con la publicación de su interesante é instruc
tivo Pablo Morphy y crea que mucho gusto tiene en figurar en la cola de la larga lista
de su admiradores.—Su afectísimo amigo,
Nicolás DOMÍNGUEZ COWAN.
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BLANCAS. BLANCAS.
Salen éstas y dan mate en dos (2) jugadas. Salen éstas y dan mate en dos (2) jugadas.
nas—2n 4? —as muy difícil encontrarla, y axedrez, con CL juegos diferentes." Pero el
encierra sobre aperturas, teorías mucho más volúm;n visto por nosotros tiene escrito
extensas que la del tratado de Damiano; con letra de pluma, que revela ser antiquí
algunas son sumamente ingeniosas, y entre sima, esto: 141 5. — El principe á quien se de
otras figura el célebre Gambito que lleva dicó esta obra murió en el año de 1460. —
el nombre de Ruy López. Multitud de au El título de ella es el que copiamos á con
tores eminentes han bebido en esa fuente." tinuación: "Arte heve é introducción muy
Al consignar este hecho en las columnas necesaria para jugar al ajedrez con ciento y
de la Estrategia, felicitamos á México, que cincuenta juegos de partido. Intitulada, al
desde tan lejos viene ocupándose del aje serenísimo y muy esclarecido D. Juan el ter
drez, y al Sr. Domínguez cuya buena suer cero, príncipe de las Españas. por Lucena,
te lo puso en el camino de adquirir una hijo del muy sapientísimo doctor revetendo
obra que hace época en la historia de la li l)rotonotario D. Juan Ramírez de Lucena,
teratura de tan noble juego. Embajadory del consejo de los reyes nues
tros señores; estudiado en el preclarísimo es
II. tudio de la muy noble ciudad de Salamanca."
Y abajo con letra de pluma, se lee: Don
de no hay precio, ni se compra ni se verule.
UN LIBRO MUY CURIOSO El libro se compone de doce reglas, (que
no son otra cosa que doce variantes muy
(De "La Estrategia Mexicana."—México, poco analizadas del Giuoco Piano) y 150
Noviembre 4 de 1876). juegos de partido (ó sean problemas y fina
les en dos, tres, cuatro y cinco movi
En nuestro número 4? hablamos del li mientos).
bro que escrito por el celebérrimo Ruy Ló Dichos problemas se dividen en dos cla
pez, é impreso en Alcalá en 1561, había ses: del juego viejo y del juego vicio. Del
hallado y adquirido el Sr. D. N. Domínguez examen que tenemos hecho de la mencio
Cowan, en Las Cadenas de la Catedral, di nada obra, no hemos podido deducir exac
ciendo entonces entre otras cosas, lo que tamente, lo que significaba cada una de
sigue: "Para comprender la importancia esas denominaciones; parece sin embargo,
de la adquisición hecha por nuestro amigo, que el juego viejo era el corriente ó usual,
bastará recordar que ese volumen pertenece y el vicio aquel que estaba adulterado por
á la famosa obra de Ruy López de Segura, prácticas anormales.
y eme este sacerdote fué después de Lucelia, Más ¿cómo es que estando impreso el
el primero que en España se ocupó séria- libro en cuestión, con perfectos caracteres
mente del juego que tanta celebridad le tipográficos, su primer dueño lo anotó di
proporcionó en toda Europa." ciendo que había aparecido en 1415? Cosa
Pues bien, acabamos de ver en México es esta que no entendemos; pues la prime
un ejemplar de la obra de Lucena, perfec ra obra que Guttenberg imprimió en Ma
tamente conservado y con pasta de perga guncia, fué la famosa . Biblia de las cuarenta y
mino, que pertenece al Sr. D. José María dos líneas (año de 1450); y el único Rey que
Agreda, hijo del Conde Agreda. hubo en España, bajo la denominación de
Dice Amous de Riviére que son rarísi Juan III, (á quien el libro de Lucena está
mos los ejemplares que quedan en el mun dedicado) fué el de Navarra, coronado en
do de la obra de Lucena, la primera en en 1494.
donde—salvas pequeñas diferencias de de Por todo esto nos atenemos en el par
talles—se ve jugar el ajedrez en la forma ticular, á la opinión ya manifestada, de la
conocida hoy. El maestro francés fija la Riviéie y de Von der Lasa.
aparición de dicho libro en 1495 (año en En tiempo de Lucena, tomar un peón
que también salió á luz el de Francesh Vin- al paso se llamaba tomar en batalla; los
cent); y el eminente Von der Lasa, refiere peones que se coronaban reina, (por llegar
que siendo Embajador de Dinamarca en á la última casilla),, la primera vez que se
el Brasil, vió en la biblioteca imperial de movían podían saltar como caballo, dándo
Río Janeiro, un ejemplar de la expresada se para esto la razón de lo mucho que á las
publicación, con la fecha de 1495 y el título damas se les debe; decíase que los alfiles
siguiente: "Repetición de amores é arte de caminaban por esquinas y las torres por ba
'42 KL PABLO
AJEDREZ EN ESPAÑA
UN JUICIO HALAGADOR. por este juego, entre los chinos, llegó á ser
tan violenta, que un historiador, no parti
Nuestra modesta revista se honra hoy cipe de este entusiasmo, escribía en 1368:
con reproducir un bello trabajo de la dis —"Ah. En nuestro siglo algunos, pospo
tinguida señorita América Du--Bouchet: niendo el estudio de los King, se entregan
escritora tan notable por su amor á las con talpasión al juego del ajedrez, que todo
ciencias, como por la diafanidad del talen lo descuidan, hasta el comer y el beber. Si
to que la enaltece. La correcta y sensata se acaba el día, encienden luces y continúan,
pensadora cubana, siguiendo en su ac y algunas veces ¿es sorprende el alba antes
tual primavera de la vida, las huellas bri que hayan concluido eljuego. Con este pa
llantísimas de D" Concepción Arenal (ra satiempo debilitan su cuerpo y su espíritu,
diante gloria española), escribe siempre sin pensar en otra cosa. Si tienen negocios,
con profundidad de miras y grandeza de los descuidan: si tienen huéspedes, los despi
sentimientos. ¿No se nos dispensará, por den. No se puede conseguir que tales juga
lo mismo, que tengamos justo orgullo, en dores interrumpan sus combates, ni por la
trasladar aquí las benévolas y alentadoras música más solemne, ni por el mayor ban
frases que ella se ha servido dedicar, ex- quete de ceremonia.
pontánea y desinteresadamente, á El Pa "Y muchos siglos después, aquel rey
blo Morphy? "que, como los lobos, no podía vivir sino
He aquí el articulo á que nos referimos, en la obscuridad tenebrosa y fria del Es
publicado en La Discusión de esta ciudad: corial; aquel Rey, hijo del mayor empera
dor que ha existido, detenía ante el tablero
"EL PABLO MORPHY. de ajedrez el curso de sus sombríos pensa
mientos y dejaba transcurrir las horas, re
Entre el montón de diarios, folletos y solviendo problemas y olvidado por com
revistas que me rodea, ninguna más sim pleto del mundo y de sus pasiones.
pática que El Pablo Morphy, interesan "El ajedrez, como la literatura y la mú
te publicación que dirige Andrés Clemen sica, ha tenido su época romántica y hoy
te Vázquez, escritor elegante y correcto y tiene su época racionalista—moderna.
notable ajedrecista. "Tchigorin es un apasionado de la es
"Yo, cjue amo sobre todas las cosas á la cuela antigua; Steinitz, el jefe de la moder
cultura, creo que un país como el nuestro, na. El primero es brillante, arrebatador,
formado de sociedad tan heterogenea, tie soberbio en sus arranques: el segundo es
ne una deuda de gratitud con todo et que matemático, profundo y sublime.
se esfuerce en elevarle al nivel de las po "Yo me declaro partidaria de la escuela
blaciones europeas, donde el progreso al moderna, como en música soy apasionada
canza el mayor grado de esplendor. de Wagner y Mascagni y en literatura de
"Y hacer propagandas por medio de un Zola y del conde Tolstoi.
periódico del ajedrez, del juego ciencia, amÉrica DU-BOUCHET.
favorito de los grandes hombres y amado
de los reyes, es demostrar que se posee un
talento superior, es contribuir poderosa UNA PARTIDA DE AJEDREZ
mente á la cultura y adelanto de un pue GANADA POR NAPOLEON.
blo.
"El ajedrez ha encontrado intérpretes (Artículo traducido por la Srta. Esther
y apasionados en todos los países del Lucila Vázquez, de la página 328, año
mundo. 1845, de Le Palademe de París.)
"Ha dominado las inteligencias de los
compatriotas de Byron, tétricos y sombríos Nos hallamos en el 20 de Marzo de 1804,
como las brumas que les rodean; ha sedu en La Malmaison. El Duque de En-
cido á los hijos de la vieja Germania, se ghien acaba de llegar á Vincennes, don
rios y adustos; y ha arrebatado á las ima de una comisión militar ha de juzgarlo, ha
ginaciones del mediodía, alegres y vivas ciéndolo ejecutar.
como los rayos del sol que saltan en las He aquí como describe esa escena M.
corolas de las flores. Thiers en su Historia del Consulado y del
"En la más remota antigüedad la pasión Imperio, volumen IV, págs. 603 y 604:
EL PABLO MORPHY.
ü i i GAMBITO STEINITZ.
n BLANCAS. NEGRAS.
J í (Sr: Tchigorin- i (Sr. Steinitz.)
fa
1 -P 4 R 1-P 4 R
BLANCAS. (Sr. SIEINII'Z-. 2—CD 3 A 2- CD 3 A
EL PABLO MORPHY. 149
Leonardo de Cutri (el Puttino) deseoso de medir sus fuerzas con Ruy López, emi
nente ajedrecista de su época, determinó pasar á Madrid, capital de la Monarquía espa
ñola. Llegado á Madrid, se dirigió al lugar donde se reunían los jugadores de ajedrez,
y encontró á Ruy López jugando con un aficionado, al cual daba peon y salida. AI
proponerle uno de los concurrentes que jugase con López, replicó que lo haría á razón
de 50 escudos cada partida. Los tertulianos se sorprendieron al oir la audacia de seme
jante reto. Jugaron una partida, y fué tablas. Leonardo no quiso ganar en la primera
sesión; en el segundo encuentro Leonardo le aventajó un juego. Corrió la noticia por
toda la ciudad, y al tercer día concurrieron numerosos espectadores. El Puttino no
quiso, sin embargo, hacer alarde de toda su fuerza, y se contentó con ganar, ese día, una
partida más que López. Informado Felipe II de lo que había ocurrido, no quiso creer
la derrota de López, y en su consecuencia señaló día para verlos jugar en su presencia;
prometiendo mil escudos al vencedor.
Leonardo perdió, exprofeso las dos primeras partidas, y esto hizo que el Rey deter
minase ausentarse del lugar, convencido de su inferioridad; pero Leonardo rogó á S. M.
que se quedase, diciéndole que de propósito había perdido aquel'os juegos para ganarle los
tres siguientes sin mucha dificultad y hacer que resplandeciese su superioridad. Así lo hizo
efectivamente, y el Rey quedó tan satisfecho, que no sólo le dió los mil escudos, sino que
le regaló prendas y pieles preciosas. Después de haber conquistado esa poderosa pro
tección, el dichoso Leonardo continuó su vida errante, recogiendo laureles en todas par
tes, hasta un dia en que visitando el palacio del príncipe Bisignano, en Calabria, fué
asesinado por la mano de un envidioso rival; tenía cuarenta y seis años.
(Traducido del Nouveau Manuel Musttré du jeu desechees, par J. Arnous de Riviére).
ÉL PABLO MORPÜY.
FlG. I? FlG. 2?
34 i 17 42 7 j 58 23 , 38 11 18 35 84 13 H0 37 22 «
-I.
43 6 55 26 39 10 59 22 63 14 17 36 81 12 59 38
¡¡8 53 8 41 24 57 12 37 !« 19 84 61 40 57 10 i 23
5 44 25 . 56 B 40 ¿1 60 33 6-2 15 20 9 24 39 | 58
52 39 4 ; 4.1 SO 61 38 13 50 3 32 45 56 41 26 7
47 a " 49 32 15 34 17 64 31 46 49 4 25 8 | 55 ! 42
30 51 i *8 | 3 « 19 14 35 48 51 2 3) 44 53 | 8 ! 27
1 48 i 31 \ 50 33 16 *3 lg 1 30 ; 47 62 5 28 i 43 1 U
Tomando por punto de partida una cualquiera de las cuatro casillas correspondien
tes á los cuatro ángulos del tablero, por ejemplo, la inferior de la izquierda, y marcando
con los números naturales las casillas que iría sucesivamente ocupando el caballo, al
moverse según las leyes del juego de ajedrez, hasta cubrir todo el tablero, William Bever-
ley descubrió una curiosísima combinación de la serie de dichos números, del i al 64,
dispuestos del modo que se vé en la figura 1 a
Desde luego se comprende que, pues la calle diagonal que empieza en la casilla 1
y acaba en la 1 1, divide el tablero en dos partes iguales y simétricas con relación á
dicha calle, hubiérase podido empezar llevando el caballo de la casilla 1 á la 46, que
ahora pasaría á ser la 2, do ésta á la que antes era la 29, que ahora sería la 3, y así su
cesivamente hasta llegar al número 64, que vendría á ocupar la casilla que en la figura
i" ocupa el 42; obteniendose por este procedimiento una nueva disposición de los 64 nú
meros, tal como se vé en la figura 2% simétrica de la 1" Puede pasarse de una á otra
más prontamente, presentando los números respectivos de cada dos casillas simétricas.
Así, para pasar de la figura 2a á la 1% no hay más que cambiar reciprocamente de lu
gar el número 30 con el 48, el 31 con el 47, etc.
Pero las dos posiciones que preceden, pudieran obtenerse, empezando por una cual
quiera de las cuatro casillas de los ángulos, con la cual resultarían ocho; y si en cada
una de ellas se invierte el orden de los números, de modo que el 1 ocupe la casilla del
64, y recíprocamente, resultan en fin, dieciseis posiciones distintas de la misma combi
nación.
Descúbranse en ella varias propiedades notables: 1"—Los números impares ocupan
las casillas de un color, y los pares las del otro—2" —Todas las columnas, tanto las ho
rizontales como las verticales, suman la cantidad de 260—3a—Dividiendo el tablero en
dos rectángulos iguales, en sentido horizontal ó vertical, las columnas de á cuatro casi
llas que en cada uno de ellos resultan, dan también una suma constante: 130—4"—Mar
cando con líneas rectas la huella que dejaría el caballo á su paso por todas las casillas,
resulta una figura notablemente simétrica.
Otras muchas propiedades no menos curiosas pudieran advertirse, como conse
cuencia de las que se acaban de enumerar.
pedro MI RALLES.
ÉL PABLO MORPHY.
noticiad generafe^.
aIa &< El sábado 5 del mes próximo pasado se embarcó en este puerto, de re-
*3* greso para Nueva York, el insigne Sr. Steinitz, dirigiendo antes al Excmo. se
ñor Presidente del Centro Asturiano, la siguiente expresiva carta que copiamos de El
Heraldo de Asturias, de esta capital, fecha 6 de dicho mes:
"Habana, Marzo 4 de 1892.
"Sr. D. Manuel del Valle,
"Presidente del Centro Asturiano:
"Querido señor: al expresar á V., á la Junta Directiva y á todos los miembros de
vuestra noble institución, mis más ardientes gracias, por la cordial acogida y la generosa
hospitalidad que he recibido, que como un beneficioso patronato ha hecho extensivo al
ajedréz en general, tengo la seguridad de que mis sentimientos de gratitud encontrarán
un eco entusiasta entre todos los aficionados del Mundo Ajedrecista.
"Permítame pues, señor, asegurar á V. que la presente no es una mera fórmula con
vencional pasajera de cumplidos; y el informe final que del Match daré á la Prensa de
New York, del cual tendré el gusto de enviarle una copia, le convencerá á V. de la sin
ceridad de mis expresiones.
..Créame, querido señor, que queda muy respetuosamente suyo
William Steinitz"
A El Sr. Tchigorin salió para Nueva Orleans, por la vía deTampa, el jue-
JSL. ■* ves 10 del expresado mes de Marzo, á consecuencia de haber sido invitado
por el notable Club de ajedréz de aquella ciudad, para jugar en él durante una semana,
con los mejores aficionados, de la localidad. Después seguirá el gran profesor ruso para
su lejana pátria, pasando por Nueva York.
\J¿Js ríh Los Sres. Steinitz y Tchigorin quisieron, como rasgo de galantería con
. los miembros del Centro Asturiano y del Club de Ajedréz, dar sesiones de
juegos simultáneos. En la noche del viernes 4 de Marzo, ei Sr. Steinitz jugó en contra de
los Sres. Carlos Echeverría,, Gabino Fernandez, Francisco Muñiz y Plá, Juan Machó,
Francisco García Maymó, Eduardo Semprem, Claudio Soto, Francisco García Pérez,
Joseph W'yhan, Clemente Sala, Mariano Salazar, Antonio Serrano, Guillermo Serrano,
Arturo Gavilan, Alvaro Martín Aróstegui, Florentino Tábano, Arturo De-Beón, Francis
co Carnearte, Eduardo Herrera y León Bartolomé. Total 20.—El Sr. Steinitz ganó 19
juegos y entabló el jugado en contra del Sr. De-Beón, amigo íntimo del Sr. Tchigorin. Y
en descargo de los remordimientos de la conciencia, tenemos que declarar que por cues
tión de broma, y casi á la vista del Sr. Steinitz (el cual se reía de la estratagema) el
Champion ruso y el Director de El Pablo Morphy hicimos algunas apuntaciones—sin
malicia—al muy estimable Sr. De-Beón, ¿Mereceremos reproches por ello?
En la tarde del inmediato domingo (6 de Marzo) el Sr. Tchigorin jugó 23 partidas
simultáneas, ganándolas todas, en contra de los Sres. Ernesto Suárez, Antonio Serrano,
Francisco Muñiz y Plá, Isidro López, Faustino Bermúdez, Joseph YVyhan, Domingo
Pérez, Martin Moraleda, Casimiro Fernández, Casimiro Valle, Faustino Menéndez,
Claudio Soto, Mariano Salazar, José Fernández, Rogelio Mata, José Rodríguez, Eduar
do Herrera, Alvaro Martín Aróstegui, Francisco Castillo, Juan Machó, Guillermo Se
rrano, Gabino Fernandez y Francisco García Maymó.
Los aficionados más fuertes del Club de Ajedrez de la Habana, no tomaron parte
ni en las partidas simultáneas dtl Sr. Steinitz, ni en las del Sr. Tchigorin.
CORRBSPOITDBITOIA
—Según The Globe Democrat, Mr. Shinkman, el gran problemista americano, había
compuesto hasta el año de 1878, la enorme cantidad de 1200 problemas de ajedrez.
¡Admirable cerebro!
— Hace algunos años que el Philadelphia Intelligencer, periódico de la ciudad de su
nombre, dijo que según se había calculado por un insigne matemático, las posiciones
posibles en el juego del ajedrez son:
659,34o,oi 2,399,956,789,413,215,891,61 1,1 29,995,578,832,013,569,254,897,577,671
¡Qué paciencia la del calculista! ¿Y habrá quién le desmienta?
Traslado al sabio aritmético español y distinguido amigo nuestro, D. Pedro Miralles.
—Vivía, no hace mucho tiempo, en Frederic-City (Mariland— Estados- Unidos), un
hombre de la raza negra, llamado Theophilus A. Thompson, y de 23 años de edad enton
ces, el cual, á los 19, publicó cien problemas de Ajedrez de un extraordinario mérito,
según declaración de la "City of London Chess Magazine." Refería, entre otras cosas,
la afamada revista, que Thompson era un verdadero genio para la composición de pro
blemas; que fué sirviente en 1870 y que hasta 1872 no conocía el Ajedrez.
El Sr. VV. A. l'otter, al examinar la colección de problemas del distinguido compo
sitor africano, aseguró que el problema número 84 era uno de los más hermosos que él
conocía.
A vivir en estos tiempos, el célebre abate Gregoire, de fijo habría incluido el apelli
do de este notable problemista, en las afamadas páginas de Im littératnre des neg^es."
LUGARES SE VENTA
EL PABLO MORPHY
HABANA.
DE 12 A 4 DE LA TARDE.
REPÚBLICA MEXICANA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
EL PABLO MQRPHY
% «¡
P ■ IB
Pili
i¡¡
JB1.
BLANCAS
¡Muy curioso! En esta posición, colocando la Dama Manca en cada ura
de las casillas en donde puede situarse, sin dar jaque al Rey negro, resultan
85 mates , á saber : catorce en una jugada, treinta y dos en dos y treinta y
nueve en tres ¿Cuales son ellos?
HABANA
La Propaganda Literaria
1 /. U L U E T A . 28.
1892.
OBRAS DE AJEDREZ POR 1. 6. VAZQUEZ.
EDICIONES AGOTADAS.
- INÉDITA.
El Ajedrez Ciclónico. —Colección de Juegos brillantes y muy cortos, de los gran
des maestros, sin otros comentarios que simples admiraciones (! !) é interrogaciones (? ?)
EN PREPARACION.
El Ajedrez excelso del Siglo XIX. — Dos partidas de cada uno de los ajedrecistas
distinguidos de nuestro tiempo (la más elegante é ingeniosa y la más clásica ó correcta),
escogidas y anotadas por los respectivos autores; con los retratos y las biografías de
ellos mismos, escritas por A. C. Vazquez.
NOM. 8. Habana, 15 de Majo de 1892. VOL. I.
ei fíelo mm
PERIÓDICO MENSUAL DE AJEDREZ
DIRIGIDO POR
ANDRES CLEMENTE VAZQUEZ
Antiguo Presidente del Club de Ajedrecistas de Mélico y Miembro Honorario del de la Habana.
Dirección y Administración: calle de O'Refly n Qm. 34, ó apartado i? 139, en la Minio. General de Correos.-Habana.-Cuba
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BLANCAS. BLANCAS.
Salen éstas y dan mate en tres (3) ju Salen éstas y dan mate en tres (3) ju
gadas. gadas.
se el Club, se repartirán todas sus pertenen tre jugadores. Mas como quiera que los
cias entre los socios propietarios que lo fue combatientes no están ligados por las reglas
ren con seis irises de antelación, en la for establecidas en un libro de ajedrez, como
ma que ellos determinaren. si fuesen leyes públicas, aconsejamos que
antes de comenzar una partida con un es-
Modificaciones reglamen larias. traño se pongan las partes de acuerdo
Art. XX. Para modificar este Regla acerca de los puntos más ó menos contro
mento, será necesario reunir Junta General vertibles, tales como el pasar battaglia (to
extraordinaria, convocada con ocho dias mar al paso) y la transformación del peón
de anticipación, para ese solo objeto, y que al llegar á la última casilla.
el acuerdo se tome por las dos terceras EEGLAS DEL JUEGO.
partes de los socios presentes. SEGÚN EL "HANDBUCH DES SCHACHPIELS"
Aprobado en Junta General de 12 de POR V. BlLGUER (7'! EDICIóN) 1891.
Marzo de 1892.
El Presidente, 1" Se acostumbra colocar el tablero de
celso GOLMAYO. ajedrez de manera que cada jugador tenga
á su derecha una esquina con casilla blan
ca. Si antes de verificarse por ambas par
ADICIÓN AL ART. 18 DEL REGLAMENTO tes la 4* jugada, uno de los jugadores ad
DEL CLUB DE AJEDREZ DE LA HABANA. vierte alguna irregularidad en la coloca
ción del tablero ó de las piezas, él podrá
REGLAS Y LEYES exigir que la partida comience de nuevo:
DEL pero después de la 4" jugada necesitará el
CTXJEGrO IDE AJEDREZ. consentimiento de su contrario.
(Tomado de La Discusión.) 2o La salida, que en los juegos sin ven-
tanja siempre se verifica con una sola pieza,
Las reglas del Juego de Ajedrez, que se sortea antes de la primera partida y tam
publicamos á continuación, constituyen bién el color si uno de los jugadores lo
el código de leyes al cual se han sometido exige.
los dos maestros que en la actualidad se La distribución de las piezas (en cuanto
disputan el Championship del mundo; se al color) continuará la misma durante toda
gún contrato celebrado en 31 de Diciembre la sesión, más la salida alternará entre ios
último, que vió la luz en nuestro número jugadores después de cada partida, así ha
del 2 de Enero inmediato: ya resultado ganada ó indecisa por tablas,
"A continuación (dice el Handbuch) es decir, por empate.
reunimos las leyes esenciales del juego, es Nota. Entre los jugadores ilustrados se
tablecidas por la tradición y observadas adopta hoy generalmente una práctica dis
por nosotros. En Francia, Inglaterra y tinta y no menos aceptable, que es la si
Norte América han sido generalmente acep guiente: Antes de comenzar la primera
tadas esas reglas, de cuyo conjunto desde partida se sortea el color de las piezas, de
la primera publicación del "Handbuch" jándose siempre la salida al que tenga las
sólo el párrafo 6V ha sufrido alguna modi blancas. En cada partida sucesiva la sa
ficación. En Alemania están las mismas lida alternará entre los jugadores, y al pro
aceptadas ahora y también en casi toda la pio tiempo el color de las piezas que cada
Italia. A muchos lectores podrán parecer cual ha de manejar.
demasiado severas algunas de las prescrip 3? Cuando un jugador toca una pieza,
ciones: debemos sin embargo advertir que está obligado á jugarla ó si fuese del contrario
para llegar á ser buen jugador jamás pue á tomarla: pieee tonchée, piecejouée; á menos
de uno ser demasiado severo consigo mismo, que antes haya dicho espresamente que so
y que cada cual tiene libertad para no de lo componía las piezas (en francés: "j' adou-
jar sentir todo el rigor de la ley á su con be.") Si la pieza tocada no puede jugar
trario, cuando este lo desee, si bien la le se, deberá por castigo moverse el rey, no
nidad observada no dá derecho para exigir permitiéndosele el enroque. Si tampoco
lu?go igual indulgencia para sí. el rey puede moverse, sin colocarse en ja
El rigor de las reglas es necesario para que, no tendrá consecuencia el haberse to
evitar cuestiones que podrían suscitarse en cado la pieza. El contrario sólo podrá
EL PABLO MORPHY.
tomar parte en el torneo, después de cerra 20 jugadas dentro del tiempo que falte pa
das las listas, hará su correspondiente soli ra completar dicha hora, cualquiera que
citud al Consejo de dirección del torneo y fuere la diferencia, perdiendo el juego en
éste lo clasificará é incluirá en la sección caso contrario.
que crea debe ingresar. 21" Si no compareciese ninguno de los
14" La cuota de entrada para tomar dos jugadores, el Director del torneo pre
parte en el torneo, será de dos pesos plata, sente anotará perdido el juego para ambos.
destinándose el producto de ellas á la com 22" A la hora de suspenderse los jue
pra de los premios que se hayan de repar gos, los jugadores á quienes tocase hacer
tir. Además, todo jugador dejará en depó sus jugadas, la escribirán y sellarán bajo
sito otros dos pesos para el caso en que no sobre que será entregado al Director pre
cumpliere las condiciones del torneo, ó lo sente, y éste, á la hora de reanudarse la
abandonase antes de terminar, cuyo depó partida abrirá el sobre á presencia de am
sito le será devuelto al que cumpliese su bos competidores y hará la jugada sobre el
compromiso. tablero, que estuviese escrita en el sobre.
15" El torneo se jugará en dos rounds 23" Queda severamente prohibido con
ó entradas y la salida se sorteará con cada sultar ó analizar jugadas durante el aplaza
jugador en el primer round, teniéndola en miento de un juego, y el jugador que fal
el 2? el que la hubiese perdido en el 1? tare á esta regla será separado del torneo
16" El tiempo límite será de 20 jugadas y perderá su cuota de entrada y el depósito.
por hora, calculándose por los relojes des 24" Ningún jugador podrá separarse
tinados al efecto. del torneo sin el consentimiento del Con
17" Durante las horas del juego, mien sejo de Dirección, y el que lo hiciere per
tras dure el torneo deberá estar presente derá su depósito y la cuota de entrada.
uno de los directores á quienes podrán 25" Si apesar de lo prescrito en la regla
acudir los jugadores en caso de disputa. anterior, se separase algún jugador del tor
'Todas las cuestiones de hecho las decidirá neo, será válido su score si hubiese ya pa
dicho Director y su fallo será decisivo, sin sado el primer rourd, y los juegos que le
ulterior recurso. faltaren por jugar se le computarán como
18" Los juegos que no se concluyan el perdidos por él. Si no hubiese concluido
día que se principiaren, se suspenderán para el primer round, no se contarán sus juegos
terminarlos al siguiente, pero esta decisión en el torneo y en compesación á los que le
no impedirá que los mismos jugadores jue hubiesen ganado se repartirá entre estos el
guen la partida que tuviesen señalada en depósito del que lo abandone.
dicho día. 26a Todos :os juegos son de la propie
1 9" El jugador quese esceda en el tiem dad del ''Club de Ajedrez de la Habana".
po límite, perderá el juego, que se anotará El vencedor en cada juego tiene la obliga
como ganado á su oponente. Es deber no ción de entregar al Director presente den
sólo de su antagonista, sino también de cual tro de las 24 lloras siguientes, un score del
quier otro competidor que tenga conoci mismo y en caso de tablas la obligación
miento del hecho, poner la infracción del será del que llevó la salida. El que deje
tiempo límite, en conocimiento del Direc de cumplir esta condición pagará 50 cen
tor que estuviese presente, quien resolverá tavos plata por la infracción, cuya multa
el caso y su decisión será final. Ningún ingresará en el fondo para premios.
otro tendrá derecho á intervenir en el tor 27" Las leyes que regirán en el torneo
neo ni en las infracciones de las reglas, pe serán las que se publicaron en el Hambuch
ro sí podrá ser llamado como testigo para alemán del año 1891, que se traducirán y
en su caso decir lo que hubiese presenciado. estarán á la vista de todos los jugadores.
20" El reloj del jugador c^ue no concu 28a El Consejo de Dirección del tor
rriere á la hora señalada para comenzar neo podrá modificar estas reglas si fuese
una partida ó de reanudarla si hubiese sido necesario, así como aclarar los puntos que
aplazada, se echará andar por el Director fueran dudosos, si ofreciesen alguna dificul
presente, y transcurrida una hora sin que tad en su aplicación.
compareciese, perderá el juego el ausente. Habana 1? de Abril de 1892.
Si llegan antes de terminarla hora, podrán El Presidente
comenzar su juego, pero deberá hacer sus Celso Golmayo.
EL PABLO MORPHY. '73
Nota: por acuerdo del Consejo de Di Aún cuando reconozco que el problema
rección del torneo, se prorroga el plazo pa en cuestión, reune pobrísimas condiciones
ra la incripción, hasta el próximo sábado 9 estéticas y merece relegarlo al polvo del
del corriente, debiendo celebrarse en la olvido, sin embargo, espero se servirá V.
noche del mismo, las juntas de clasifica publicar estas líneas en El Pablo Morphy,
ción, para comenzar el torneo al siguiente dado caso que no roben espacio á otras
día, domingo 10. Lo que se avisa por que tenga V. en cartera, y merezcan prefe
este medio á los señores socios. rentemente llamar la atención de los lecto
Habana, Abril 5 de 1892. res de la interesante Revista de la que es V.
perspicuo é inteligente Director.
Se repite de V. atto. y S. S. Q. S. M. B.
josÉ TOLOSA Y CARRERAS.
Una carta admirable.
EL PABLO MORPHY
HABANA.
33 K 12 A 4 DE LA TAEDE.
REPÚBLICA MEXICANA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
Dos problemas muy notables, por los Sres. D. J. Tolosa Carreras y D. Valentín
Marín (de Barcelona)—Solución de los problemas núms. 14 y 15— EI nuevo reglamento
del Club de ajedrez de la Habana—Reglas y leyes que para jugar se observarán en el
propio Club—Ajedrez contemporáneo—Tchigorin contra Vazquez—Cuatro partidas en
tre los mismos: dos Defensas de los dos caballos y dos Gambitos Greco-Filidor—Triunfos
del Club de la Habana—Mr. J. Morgan, de Philadelfia, derrotado por el joven cubano
D. Enrique Ostolaza - Precioso ejemplo de apertura Ruy Lopez—Bases para el actual
Torneo Handuap del Club de la Habana— Una Carta Admirable del ilustre problemista
español, Sr. Tolosas Carreras.—El primer Gambito Evans,, jugado por su inventor, con
tra el profesor Mc-Donnell, en 1833—Correspondencia de Brooklyn, por el Sr. E. M.
Muñoz— Gambito Escoces entre los maestros americanos Mr. Blackmar y Mr. Kemeny
Defensa de los dos caballos entre el célebre ajedrecista Mr. Pollock y el no menos distin
guido Mr. Blackmar—Ajedrez en México—Selectos juegos entre los Sres. Vicario, Es-
contría, Vigueras y Marqués Galindo— Un brillante final de partida, por el Sr. Escontría
— Nombres de las piezas del ajedrez en 19 idiomas.
AVISO IMPORTANTE.
Por enfermedad del Director de "El Pablo Morphy," el n? IX de este periódico
aparecerá el 15 de Julio próximo. El Sr. Vazquez se halla convaleciendo de pertinaz
dispepsia, á causa de una atonía hepática, y necesita algún descanso.
Se procurará que los números sucesivos de esta publicación, contengan el mayor in
terés posible, para que de ese modo se compense la relerida demora, en beneficio de los
señores suscriptores.
Hataca, 15 de Judío de 1892. Cuaderno IX,
EL PULO MORPHY
BLANCAS
HABANA
La Propaganda Literaria
ZULUETA. 28.
1892.
N{JH. 9. Habana, 15 de Junio de 1892. VOL. I
EL PABLO MOKPHV
Dirección y Administración: calle de O'Reilly núm. 34, i apartado nV 139, en la Admón, General de Correos. -Habana.-Cuba
"no se exhibiese en las conocidas Colecciones de los llamados libros de Morphy, publica
dos por Lowenthal y demás.—Después del fallecimiento de Lowenthal, esta reserva no
"está ya en vigor; y si por acaso Morphy muriese, no habría inconveniente personal en
•'que yo recogiese también esta partida en una nueva y tercera edición de mi libro."
"Respecto á las restantes partidas fugitivas de Morphy, que V. menciona en el
.' Cuadro sinóptico que me envía, no me es posible en este momento determinar cuales
"son las que conozco, y cuales las que me son desconocidas. Sin embargo, Ud. me obli
garía muchísimo, y adquiriría un derecho á obsequios de mi prrte, si me enviase copia
"de esas partidas, para que yo, estudiando los juegos separadamente, viera los que he
"guardado en mi cartera (que fueron omitidos por cualesquiera motivos en la edición
"actual- de mi libro), y los que han quedado reservados para una edición futura."
"Claro es, pues, que debo proceder con mucha precaución, porque en nuestros tiern-
"pos se han atribuido al maestro americano partidas que nunca jugó."
"Celebraría mucho que de esta primera comunicación resultase una corresponden
cia seguida, tocante á este objeto."
"Mientras tanto, ruego á Ud. se digne aceptar mi agradecimiento, confirmándole
"que sus cartas serán siempre para mí un motivo de regocijo."
"Quedo con la mayor considerac ión de Ud. atento y
"S. S. Q. B. S. M."
dr. max LANGK
Como se vé, la opinión del ilustre ajedrecista de Leipzig no puede ser más clara ni
más terminante, respecto á la autenticidad de la partida con ventaja.
Un hecho me importa hacer constar, y es que el Dr. Lange conocía de antemano la
partida, cuando le envié copia de ella. Esto prueba, por lo menos, que cuando la tras
cribí primeramente, en mil ochocientos sesenta y tantos, á mi cuaderno de ajedrez, no
cometí error alguno de pluma, respecto á los nombres de los dos exclarecidos maestros
que figuraban como adversarios en aquella partida.
Reasumiendo: tenemos, por una parte, la autorizadísima opinión del Sr. Maurian,
el cual niega la autenticidad del juego, fundándose en el testimonio de los que presen
ciaron aquella lucha, y en los textos de Fiske y Lowenthal que ninguna referencia hacen
respecto á partida alguna con ventaja entre los dos maestros. Por otra parte, en pró de
la autenticidad, tenemos: la factura misma de la partida, que revela las facultades prodi
giosas de aquel genio del ajedrez; la irrecusable opinión del Dr. Lange, categóricamente
expresada en su carta; y el hecho de haberla visto publicada, hace ventitantos años, el
que esto escribe. Nos encontramos, pues, con dos opiniones opuestas y contrarias, acerca
de este particular; si respetable la una, digna también la otra de respeto.
Para mí, es indudable que el Dr. Max Lange debe tener poderosas y concluyentes
razones que prueben la autenticidad de la partida en cuestión; y es de esperar que las
haga públicas, para que sepamos á que atenernos los aficionados que miramos con espe
cial interés todo aquello que se relaciona con el inmortal Pablo Morphy.
De Ud. affmo. amigo
andres FERNÁNDEZ POZO.
Correspondencia extranjera.
Brooklyn—Junio 9 de 1892.
Sr. D. Andrés C. Vázquez.
Consul General de Méjico
Habana.
Muy estimado amigo:
He recibido el número de Mayo del famoso Paiu.o Morphy—¡qué interesante está!
y cuánto gusto me dá ver lo bien que salió LUI en su encuentro con el ingenioso maestro
Tchigorine— Bravo!
j8o EL PABLO MüRPHY.
El Torneo del "Brooklyn Chess Club" marcha á paso lento; parece que por ser los
competidores personas ocupadas, el comité les guarda algunas consideraciones, no lle
vando tan á "punta de lanza" los reglamentos sobre multas etc. etc, —como se acostum
bra en Torneo de esta clase.
Los competidores más fuertes, se encuentran hoy así:
Blackmar con 1 1 ganados contra 4 perdidos.
Delmar 11 5
Hanham 10 5
Hodges 9 4
Kemeny 11 4
Pollock 15 3
Ya ve V. cuán bien luchan estos señores; y si es verdad que el amigo Pollock lleva
una buena delantera, también lo es que algunos de los otros amigos se le vienen encima
á "quema ropa."—Se encuentra ahora el Torneo en un punto muy interesante; y los
espectadores estamos como en el teatro, ante uno de esos dramas complicados, deseando
ver su desenlace! "Time will te'e."
No envío á Vd. en esta ocasión algunos juegos, por no haber tenido tiempo para
estudiar los muchos que tengo copiados, de los que quiero escojer los mejores para su
famoso periódico.
Acompaño un problema en 2 jugadas que á petición mía ha compuesto para El
Pablo Morphy el magnífico problemista Dr. O. F. Jentz.
Muy de prisa, sov su affmo. amigo v S. S. Q. B. S. M.
e. m. MUÑOZ.
■ ■ ■
E plúribus unum.
■ ■
A. Andrés C. Vázquez .
s mny'ms'
Si como Cónsul te miro
Y como amigo te quiero,
Como letrado te admiro,
Pues no sé en que eres primero.
Hay en tu ser un empate ; m.
Que aprendiste en el tablero; Wmm
Cuando, ufano, dices: "mate"
Entonces sí te prefiero.
n. DOMINGUEZ COWAN. BLANCAS.
Méjico, Mayo 30, l -'.i.' ¡Muy curioso! En esta posición, colo
cando la Dama blanca en cada una de las
casillas en donde puede situarse, sin dar
jaque al Rey negro, resultan 85 mates, á
PROBLEMA N" 18. saber: catorce en una jugada, treinta y dos
POR EL Dr. O. F. JF.NTZ. en dos y treinta y nueve en tres .... ¿Cua
(de New-York). les son ellos?
COMPUESTO PARA "EL PABLO MORPHY".
NEGRAS. Una preciosa partida
llero del tablero" se sintió verdaderamente que había jaque mate en cuatro movimien
desgraciado. La idea de que tenía un ri tos. A medida que las jugadas sucesivas
val, quizás un superior, amargaba todos iban desarrollando el mate, el caballero-
sus triunfos y los laureles del Milciades se- 1 dominado por la vergüenza y la mortifica
villano ahuyentaron el sueño de los parpa- i ción—no pudo reprimirse, y pegando al
dos de este nuevo Temístocles. Este estado ' pobre animal un fuerte golpe, lo envió, ro
de incertidumbre llegó á serle tan insopor- ; dando, al centro de la habitación. El es
table, que resolvió terminarlo, y concluidos ' pañol disgustado en extremo, tomó cartas
los preparativos se puso en marcha hacia en el asunto, dirigiendo agudas reconven
Sevilla. Tan pronto como llegó á la men ciones á nuestro héroe por su conducta
cionada ciudad, se dirigió sin pérdida de brutal, éste presentó sus disculpas, pero
tiempo á la morada de D. Gabriel de Ro lastimado en su amor propio solicitó— tar
jas. Encontró al grande hombre ocupado, tamudeando—el correspondiente desquite.
jugando una partida de ajedrez, y en la Monito. repuso D. Gabriel, es casi segu
silla opuesta á un mono que, en medio de ro que no se prestará á jugar otra partida
los más grandes visajes, afectaba toda la con vd., después de haber sido tratado tan
apariencia de un adversario. Señor, dijo rudamente. Veré, sin embargo, si logro
el campeon francés, atraído hasta aquí por catequizarlo. Las caricias del español y,
el renombre de la destreza de vd. en el no sobre todo, las promesas de mejor trato,
ble juego del ajedrez, me atrevo á presen volvieron á Monito al tablero, no sin que
tarme como un aspirante que anhela com revelase evidentes muestras de temor y des
petir con vd. en el tablero, en el caso de confianza.
merecer honor tan señalado. En Burdeos Correspondiendo al caballero la salida,
disfruto de alguna celebridad, y me atreve determinó—á pesar de su reciente derro
ría á decir que ninguno de los jugadores ta —devolver á Monito la apertura emplea
de aquella ciudad me disputa la suprema da en el juego anterior, variante de la del
cía. Venga vd., señor, replicó el español, alfil del rey. La batalla continuó de la si
sonriéndose; tome vd. asiento, que yo tra guiente manera:
taré de merecer el favor que se me dispensa.
Frente á frente ya los dos campeones, BLANCAS. XEORAS.
empezóse la partida, pero apenas se habían
hecho doce jugadas, cuando levantándose (El Caballero)- (Monito).
repentinamente D. Gabriel, le dijo al sor
prendido francés: caballero, es inútil que
continuemos; vd. no puede jugar conmi 1—P4 R 1—P 4 R
go. . . . vd., cuando más, estará á la altura 2—A 4 A 2—A 4 A
de mi mono. ¡Cómo! replicó el caballero. 3—D 2 R 3—CD 3 A
¿Pretende vd. insultarme? En modo al 4—Ax PAR! 4—R x A
guno, repuso el español; sepa vd. que Mo- 5—U 4 At 5_P4D
nito es un jugador acabado, y de consi 6— D x A 6—P x P
guiente no debe sentirse humillado al verse 7— D4 At 7-AD 3 R
colocado en su nivel. Hasta me atrevería 8— D x P 8—CR 3 A
á apostar en contra de vd. 9— D4 TR 9- CD 5 D
Desde el momento que vd. insiste, agre 10—CD 3T 10— P- 5 R
gó el asombrado francés, acepto la propo 11— P 3 AD 11 — P 4 CR
sición, aunque no sea más que por la singu 12— D x PCR 12—TR 1 CR
laridad de la circunstancia. Veremos si 13— D3 R 13— CD 4 AR
este bruto puede disputarme la victoria. 14— D 2 R 14—T x PCR
Monito ocupó prontamente el asiento 15—CD 2 A 15— D3 u
de D. Gabriel, y continuando el juego de 16—CD 3 R 16—C x C
su amo con la mayor gravedad imaginable, 17— PD x C 17— TD i CR
hizo jugada tras jugada, hasta cierta posi 18 D 1 AR 18—TD 1 D
ción en que tocándole la iniciativ a, lanzó 19 —D 2 R 19—C 5 C
el más indescribible chirrido, ostentando 20—C 3 T ;o—C 4 R
al mismo tiempo la pata izquierda con los 21 —C 4 AR 21— C 6 AR t
dedos extendidos, como queriendo indicar 22 — R 1 A
184 EL PABLO MORPHY
pues cada uno de dichos libros vale algo Noventa J'n'bli rnat de ajediez.— (La mis
más que los cuadernos de El Pablo Mor- ma obra anterior, en español.)— Mexico.
phy que han dejado de publicarse. 1876.
Escusado es agregar que los señores La Estrategia Mexicana.— Periódico.
suscriptores que deseen recibir en dinero México. — 1876 y 1877.
el" valor de los expresados tres números, La Crónica de Ajedrez.— Periódico.
podrán mandar con tal objeto el corres México. — 1878 y 1879.
pondiente recibo de su suscripción á la ca Algunas Partidas de Ajedrez jugadas
lle de O'Reilly núm. 34, altos, en donde en México.—(de 1869 á 1878.)—Parte
se recojeran esos mismos recibos y se de Primera.— México.— 1879.
volverá la cantidad pecuniaria que corres Algunas Partidas de Ajedrez jugadas
ponda. en México.— (de 1869 á 1880.)— Parte
Preferimos suspender por un poco de Segunda.— México.— 1880.
tiempo nuestro querido y umversalmente
conocido periódico El Pablo Morphy, á
dejar de atenderlo con la eficacia y el en
tusiasmo de siempre: recordando lo que un INÉDITA.
general de los Jesuítas, el célebre Ricci,
contestó al Papa Clemente XIV' con mo El Ajedrez Ciclónico.—Colección de
tivo de la supresión de la orden que estaba Juegos brillantes y muy cortos, de los gran
bajo su cuidado: Que sean como son ó que des maestros, sin otros comentarios que
no sean, "sint ut sunt aut nox sint." simples admiraciones ( ! ! ) é interrogacio
a. c. VAZQUEZ. nes (??) .
EL PABLO MORPHY
HABANA.
DK 12 A 4 DE LA TARDE.
REPÚBLICA MEXICANA.
FRANCIA.
ESTADOS UNIDOS.
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